UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA DE PEREIRA

FALCULTAD DE BELLAS ARTES Y HUMANIDADES

ESCUELA DE FILOSOFÍA

NOMBRE DEL PROFESOR: LUIS GUILLERMO QUIJANO RESTREPO

NOMBRE DE LA ASIGNATURA: FISE3 SEMINARIO ESPECIALIZADO GR. 1

NOMBRE DEL ALUMNO: JUAN GUILLERMO RAMÌREZ GIRALDO

FECHA: 5 DE MARZO DE 2.020

Niños… copien la tarea

El paso del conocimiento en el aula del parte del docente a su grupo de
estudiantes se hace complejo, debido a que el conocimiento es captado por los
sentidos, algunos estudiantes son visual, auditivo o kinestésico. La programación
neurolingüística sostiene que “el mundo como lo vemos no existe, somos nosotros
quienes lo “reinterpretamos” y le damos forma en base a nuestra personalidad y
según la predominancia de unos sentidos sobre otros. Asimismo, de toda la
información que nos rodea en el día a día, hay mucha que la desechamos o no le
prestamos atención por las mismas razones”.

Lectura y escritura con sentido y conocimiento, como habilidad pedagógica, debe

tener la finalidad de ordenar la lectura y la escritura con sentido y representación,
como estrategia pedagógica en maestros. Para realizar esta labor los docentes
emplean diferentes estrategias metodológicas, pero es indispensable que se haga
con más intensidad los procesos de lecto-escritura que ayuda al mejoramiento de
la calidad de la educación en todos los niveles educativos, mas aun en la etapa
inicial como la primaria, ya que el lenguaje es el medio natural de comunicación
entre las personas, siendo las actividades básicas: el hablar, escuchar, leer y
escribir, motivo por el cual fortalecer esta labor es necesaria para el desarrollo del
estudiante y el maestro.

Cuando un niño no entiende algo que le dice un maestro, por ejemplo, no

forzosamente se debe a que los niños sean poco claros, sino a que, tal vez, no
tiene adecuados bosquejos anteriores acerca del tema del que le hablan, por lo
tanto, no puede asociar y digerir la información nueva que esta oyendo,
quedándose sin poder incrementar y enmendar su saber.

La educación de hoy exige un ritmo acelerado, pero no por eso se puede perder
de vista en el recorrido, el deber de la lectura, leer como desarrollo progresivo de
conocer e ir cambiando el pasado, presente y futuro, destacando en nuevas
prácticas, que terminan en ese talento creativo para volverlo real en la escritura.
Es importante respetar las diferentes etapas de escritura que se encuentra el niño,
el crea sus propias suposiciones y así encuentra el significado a lo que escribe,
comenzó utilizando seudo letras y, poco a poco, las fue relacionando con el
abecedario, descubriendo razones efectivas de su uso.

Es necesario destacar que la motivación juega un papel importante en este

desarrollo. Las labores académicas tienen un sentido diferente, sirven para
aprender a ser responsables. De esta manera la enseñanza de la lectura y la
escritura es un proceso emprendedor donde la creatividad es muy importante. Se
realizan ejercicios que estimulan el desarrollo del pensamiento, para que el niño
busque diferentes elecciones ante una situación dada. Al estimular el
pensamiento, se le da la oportunidad de crecer siendo un ser autónomo, seguro
de sí mismos, capaz de tomar decisiones y, de esa forma, se educa para la vida.

El proceso de aprendizaje en los primeros años, deja en el niño una huella que
durara toda su vida. Por lo tanto, este proceso debe ser una experiencia
agradable, llena de sentido y significado, donde no se genera malestar frente a las
equivocaciones, sino que ésta sirve para fortalecer el aprendizaje.

La lectura y la escritura son actividades que marcan la vida del niño, de ahí la
importancia de que pueda adueñarse de ellas de una forma innata. Leer y escribir
se convierten en actividades divertidas y agradables, en las que el niño puede
disfrutar de sus resultados y aprender de sus equivocaciones.

Los maestros que enseñan a leer y a escribir muy dicen que los niños aprenden
manipulando objetos, haciendo planas, repitiendo. La distinción empirista
Piagetiana, nos conduce a especular sobre estas afirmaciones: ¿Qué aprende el
niño manipulando objetos? ¿Qué aprende el niño repitiendo planas?

La pedagogía de la lectura y la escritura se deben realizar al mismo tiempo, la

lectura aumenta el estilo de lo escrito y éste, a su vez, facilita la aprehensión de la
lectura que es una de las finalidades de la educación básica y va a la par con la
escritura, ambas competencias se perfeccionan, porque sin un escrito no puede
haber lectura. Leer es una técnica mental, este proceso incluye ver un código
escrito, generalmente letras y números, identificarlas reconociendo las letras y
palabras y saberlas pronunciar, descifrarlas, entenderlas y captar las ideas,
comprenderlas e interpretarlas y se necesita de práctica, para lograr obtener los
resultados deseados.

El acto de leer es un proceso de construcción de significados a partir del texto.

Esto es probable por la interacción entre los ingredientes textuales y los
conocimientos del lector. Cuando mayor es la correspondencia entre ellos, más
probabilidades de entendimiento hay en la lectura.

La relación que se establece entre el texto escrito y el lector es distinta de aquella

entre dos personas cuando conversan. En esta última etapa están presentes las
palabras y la presencia de gesticulaciones, expresiones faciales, entonación de
voz y sus repeticiones, preguntas que dan significación al habla.

Los procesos de leer y escribir ocupan un lugar fundamental dentro del proceso
del currículo, ya que es el elemento básico para el desarrollo de los procesos
mentales y demás procesos cognitivos que realiza el maestro dentro de la
enseñanza. Estos procesos son continuos ya que no solo se da en los grados
primeros sino que se inicia antes y continúa en el bachillerato y el resto de la vida.

A través de la lectura y la escritura se adquieren muchos de los conocimientos

necesarios para la formación integral del estudiante, por ello la enseñanza de
estos siempre es una actividad central en el ámbito escolar, para fortalecer
habilidades y capacidades que generen el desarrollo de procesos de investigación,
critica e imaginación, a través de la motivación al proceso lecto-escritor.

El trabajo de leer y escribir a partir de la aceptación de textos narrativos forman

una aleación que permite el contacto directo entre sus grupos sociales,
transmitiendo valores, creencias y formas de ver el mundo y mirar la vida, así
como la explicación de los fenómenos que constituyen a un pensamiento colectivo
en los sitios donde vive el niño.

La aplicación de las habilidades pedagógicas busca cifrar y fortalecer la forma

cómo piensa, siente, cree y se comporta el niño, un intento de conocer e
interpretar la realidad natural y social, planteando una explicación de sus causas y
efectos.

Las teorías del idioma y los vínculos que se dan entre ellas, más las teorías del
aprendizaje, son las que determinan las formas de cómo se enseña a leer y
escribir en la escuela. El maestro para facilitar el aprendizaje y para que este no
se disminuya a simples técnicas y composiciones se apoya en una formación
teórica y en la creatividad y en el acompañamiento del proceso de la lecto-
escritura.