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A.

KOTOV

HEl1ENCIA AJEDRECISTICA

DE A. A. ALEKHINE
Leyes del iuego de posición

SEGUNDA EDICION

Versión directa del ruso:

VICTOR ANDRESCO Y YOLONDA PERALTA

Revisión técnica:

JULIO GANZO

RICARDO AGUILERA
EDITOR

Apartado 9.138
MADRID-6
© R I C A R D O A G U I L E R A, EDITOR
PADILLA, 54 - APARTADO 9.138 - MADRID-6

Título: HERENCIA AJEDRECISTICA DE


A. A. ALEKHINE

Segunda edición de 3.000 ejemplares

Traducción del ruso, de Víctor Andresco


y Yolanda Peralta.

Dibujo de Enrique de la Hoz.

Revisión técnica de Julio Ganzo


Madrid, diciembre 1970

Depósito legal: M. 28.998-1970

Gráficas Breogán - Juan Tornero, 28 - Madrid-11


P RO LO GO

Aparece este libro -ofreciéndose a la atención de los


lectores- como un detenido análisis de la obra del
grandioso ajedrecista ruso A. A. Alekhine.
En un trabajo anterior se publicó su biografía, su
característica creadora y deportiva, la aportación del
campeón ruso en la teoría de la etapa inicial de la
partida de ajedrez. Además, se habían estudiado muchas
partidas combinadas de Alekhine, sus ataques al rey
enemigo, así como sus golpes tácticos y el sacrificio del
peón por la iniciativa.
Esta nueva obra está consagrada a tres cuestiones
fundamentales: la maestría de Alekhine en el juego de
posición, su técnica de final de partida y también la
obra de unión entre el jugador y los ajedrecistas
soviéticos.
El motivo esencial de este libro es ayudar al lector
a desentrañar y asimilar la maestría de Alekhine en
el juego de posición, mostrar su arte para preparar
-con la ayuda de profundas maniobras estratégi­
cas- la base para sucesivas combinaciones de efec­
to. En el libro se resuelven varias cuestiones impor­
tantes de estrategia -a juicio del autor- la más ne­
tamente apreciada en la obra del ajedrecista. Lo pri­
mero es la cuestión sobre el ataque del flanco de
dama y en el centro. Este capítulo aparece como
complemento al V1 del primer tomo sobre el ataque
al rey. La importancia del ataque sobre los dos flan­
cos, lo resuelve el segundo capítulo de la presente
obra.
He querido dedicar especial atención a cuanto se
refiere a los sistemas de defensa. Alekhine interpre­
taba la defensa a su manera, conforme a su visión
particular. La maesrtía de la defensa le permitía
salvar posiciones difíciles y lo facultaba, en gran me-
6 A. Kotov

dida, para destacarse con salidas prácticas en torneos


y matchs.
Asimismo, se resuelven en el libro los problemas de
la lucha de maniobras y rodeos, los procedimientos
para aprovechar la supremacía material y, también,
el juego de posiciones corrientes. El autor trata de
resolver plenamente todo lo relacionado con estas im­
portantes divisiones de la teoría ajedrecística, tanto más
cuanto que todavía están poco desarrolladas en la teoría
del ajedrez.
Un capítulo especial está dedicado a definir la teoría
de las piezas pesadas. Alekhine hizo una gran apor­
tación a la teoría y práctica de estas definiciones.
En el libro están detalladamente descifrados los más
importantes métodos interpretativos de tales posiciones.
Los capítulos sucesivos se destinan a la técnica de'
final de partida de Alekhine; técnica, adornada por
pequeñas combinaciones, que unen entre sí la cla­
ridad de las maniobras con el amplio vuelo de la fan­
tasía. En esa técnica está recogido todo lo nuevo
descubierto por Alekhine en el dominio del final de
partida.
Un tomo aparte estará consagrado a la alianza entre
Alekhine y los ajedrecistas soviéticos, que tomaron de
su compatriota muchas opiniones sobre la obra ajedre­
cística, y el honor de la difundida bandera de la escuela
ajedrecística nacional en el transcurso de los últimos
años.
El libro contiene 191 partidas de Alekhine, muchas
de ellas no han aparecido nunca en la prensa sovié­
tica. Todas las partidas están comentadas nuevamente
por el autor, en correspondencia con los problemas
de- tal o cual capítulo. Además, se conservan impor­
tantes comentarios de Alekhine que ayudan a asimi­
lar una u otra idea estratégica. En el volumen figuran
muchas partidas recibidas por el autor de los admi­
radores de la obra de Alekhine en distintas partes del
mundo. Eu autor expresa su profunda gratitud por tan
valiosa colaboración.
Confía el autor que este trabajo sobre la herencia
de la obra de Alekhine ayudará a los lectores en su
trabajo de asimilación de las leyes de la lucha
ajedrecística y les ofrecerá la posibilidad de esclarecer
la poli/acética mentalidad del genial ajedrecista ruso
A. A. Alekhine.
CAPITULO

El ataque en el centro y en el flanco de dama

Lograda la supremacía, el jugador está en su dere­


cho y debe atacar. A tal conclusión hemos llegado
después de examinar el asunto sobre el ataque al rey.
La finalidad del ataque, los objetivos y métodos de
llevarlo a cabo, pueden ser los más distintos en
cuanto a la situación concreta en el tablero de ajedrez.
Primero fue examinado el ataque al rey, pero en la
práctica del aj edrez, ocurre con no menos frecuencia, tan
pronto como es posible la realización de la contrapar­
tida, el ataque en el centro del tablero o en el flanco
da dama. En este caso el juego tiene un carácter par­
ticular y los métodos tomados ante el ataque del
flanco de dama poseen sus particularidades destacadas
(vamos a contar con que los dos enemigos han
realizado el enroque corto, en caso contrario el papel
de los flancos cambia). En el presente capítulo trata­
remos de descifrar las particularidades características y
los procedimientos de tal ataque.
No vamos a establecer demasiada diferencia entre
el ataque en el centro y en el flanco de dama. Natu­
ralmente, las partidas que se deciden por el ataque
en el centro y en el flanco de dama se diferencian
unas de otras. Sin embargo, en una aplastante mayo­
ría de casos el ataque del centro está tan estrecha­
mente ligado con la ofensiva en el flanco de dama y,
al contrario, la disposición del ataque al flanco de
dama generalmente se relaciona de tal forma con el
ataque en el centro, que es más cómodo examinar estas
dos formas de ataque conjuntamente.
¿En qué se diferencian el ataque al flanco de dama
y en el centro del mismo el ataque al rey enemigo?
En primer lugar, en el objetivo del ataque. Si la fi­
nalidad principal ante el ataque al rey es la perse­
cución de una pieza enemiga, precisamente el rey, en
el ataque al flanco de dama, no existe tal concre­
cwn. Además, atacando el flanco de rey podemos
realizar mayores sacrificios materiales para inutilizar
8 A. Kotov

solamente una figura enemiga, el rey atacando el


flanco de dama no podemos permitirnos tal despilfa­
rro. Aquí el ataque tiene que ser económico, es preciso
tener en cuenta cada unidad guerrera y cuidarla con
precaución.
La finalidad del ataque al rey es dar mate. El ob­
jetivo del ataque en el flanco de dama y en el cen­
tro según la regla, es la consecución de la suprema­
cía material. Otros aspectos del buen resultado son
la presión a distancia, la conversión del peón en da­
ma, y, únicamente, se convierten con su transforma­
ción particular en la supremacía material. Realmente,
cuando la pieza del enemigo está presionada contra
un extremo del tablero y casi no tiene libertad de
movimiento, ¿acaso no se convierte esto en un par­
ticular logro material del atacante? Se encuentran
partidas en las cuales el atacante sobre el flanco de
dama y, particularmente, en el centro, traslada la
acción de sus piezas atacantes sobre el rey enemigo
y concluye el ataque con un mate. Tales partidas ofre­
cen una particular mezcla de ataque al fey y al flan­
co de dama.
La profunda diferencia de los objetivos de los ata­
ques a los flancos de rey -y dama impone sus par­
ticularidades a los métodos de llevarlos a cabo. Así,
si ante el ataque al rey los refuerzos defensivos del
enemigo se destruyen frecuentemente con la ayuda de
violentos sacrificios, ante el ataque al flanco - d.e dama
las piezas que juegan se organizan con la realiza­
ción de un lento cerco, logrando una gradual debili­
tación en la distribución del enemigo y aprovechan­
do esta debilidad en el futuro. El ataque en el cen­
tro y en el flanco de dama, según la norma, es más
lento y pocas veces encuentra sacrificios efectivos y
variantes forzadas.
En todo lo demás, existe una forma muy común
en los métodos de juego tanto ante el ataque al rey,
como ante el ataque al flanco de dama y en el cen­
tro. Lo mismo que ante el ataque al rey se puede
atacar sobre el flanco de dama, aproximando los peo­
nes o bien organizando la presión sobre las piezas,
el papel decisivo lo juega aquí el dominio de las lí­
neas abiertas (cierto que en menor medida que ante
el ataque al rey) , y también de las diagonales.
Vamos a examinar las siguientes variedades fun­
damentales del ataque al flanco de dama y en el
centro: l.-El ataque de las piezas. 2.-Aprovecha-
Herencia ajedrecística de Alekhine 9

miento de las fuerzas de los peones pasados. 3.-Apro­


vechamiento de los líneas abiertas. Cada uno de es­
tos métodos de ataque al flanco de dama y en el
centro, que surgen con mucha frecuencia, tienen sus
destacadas particularidades y vamos a tratar de re­
velarlas.

El ataque de las piezas

Ante la supremacía en el flanco de dama o en el


centro del tablero, el atacante empieza a desarrollar
las operaciones de ofensiva. El procedimiento más
natural de este ataque es el esfuerzo cada vez ma­
yor de presionar las piezas de la posición enemiga.
Buscando las debilidades o bien obligando al enemigo
a conformarse con la formación de éstas, el atacante,
poco a poco, aumenta la presión de sus piezas sobre
la posición del que se defiende y aumenta el ataque
hasta el momento de recibir una real y continua
supremacía. En una aplastante mayoría de casos un
ataque así termina con adquisiciones materiales ; a
veces, esta forma de ataque, conduce a la rotura de
la defensa del enemigo y a una maniobra de desvío
de las piezas atacantes, que se abren paso hacia el
rey enemigo.
En la ofensiva se asigna un gran papel a los peo­
nes del atacante. A menudo rompen el frente de de­
fensa, facilitando la llegada de las piezas atacantes a
los puntos débiles del campo enemigo. El asalto de
los peones en el flanco de dama ocurre con más fre­
cuencia que el asalto de los peones en el flanco de
rey, ya que, moviendo sus peones, los atacantes no
corren el riesgo en este caso de dejar al descubierto
a su propio rey, toda vez que se encuentra en el
otro extremo del tablero. La ayuda de los peones
en el ataque del flanco de dama es muy importante
para mantener el ataque de las piezas, sin hablar del
caso de la formación del peón de paso o de la aper­
tura de línea.
Alekhine era un gran maestro en el ataque al rey
enemigo, con resultados creadores cuando el cam­
peón del mundo tenía que llevar el ataque al centro
o al flanco de dama. Vamos a examinar unos cuantos
ej emplos de estos ataques, realizados con la ayuda
del aumento metódico de la actividad de las propias
piezas.
10 A. Kotov

N .o l. D E FENSA ORTODOXA
Capablanca Alekhine
21 partida del match, 1927

1. P4D, P4D 5. P3R, A2R


2. P4AD, P3R 6. C3A, 0-0
3. C3AD, C3AR 7. T1A, P3TD
4. A5C, CD2D 8. P3TD,
Como ha mostrado la práctica, .sobre todo el match
Alekhine-Capablanca, 1927, esta jugada no trae a las
negras ninguna dificultad y les permite conseguir un
juego superior. Muchas más dificultades se les hu­
biera creado a las negras si las blancas hubieran he­
cho el cambio en 5D. No en vano en los últimos
años, en todos los torneos el maestro, escoge, preci­
samente, esta continuación, fijando la posición de los
peones en el centro y asignando una auténtica, aun­
que no grande, supremacía de las blancas. Esta conti­
nuación la aplicó el mismo Capablanca en las últi­
mas partidas del match.

P3T 10. Áx P, P4CD


�: A4T, Px P
Este llamado "fianchetto", ensanchado, ofrece a las
negras la posibilidad de desarrollar cómodamente el
alfil de las casillas blancas y movilizar con ventaja
sus fuerzas para la lucha en el centro.

11. A2R,
·
Capablanca juega esta parte de la partida muy pa­
sivamente. Le hubiera traído más cuenta retirarse
con el alfil a 2T y, seguidamente, después de 12. D2R y
13. A1C y procurar llevar la amenaza al flanco de rey
enemigo.

11. ..., A2C 12. 0-0,

La práctica ha demostrado que no es bueno impe­


dir la jugada . . . , P4A porque el procedimiento 12.
P4CD conduce a dificultades para las blancas después
de 12 . . . . , P4TD !

12. P4A 13. Px P,


Herencia ajedrecística de Alekhine 11

Lleva hacia una completa igualdad d e juego; sin


embargo, ya no se vislumbran caminos más activos
para las blancas. Es posible que la variante escogida
por Capablanca se explique por su deseo de alejarse
de continuaciones arriesgadas y pasar el juego a un
tranquilo final de partida.

13. Cx P 14. C4D,

Esto ya no resulta lógico. Habiendo mejorado no­


tablemente la posición de las piezas negras y empeo­
rando la disposición de las suyas (el alfil en 2R): Ca­
pablanca, de pronto, renuncia a la simplificación 14.
D X D y organiza un complicado juego de piezas en
el centro. Sin embargo, es fácil darse cuenta de que
las negras están mejor preparadas que el enemigo
para las escaramuzas en el centro y pronto demues­
tran de un modo convincente, su supremacía. Con­
forme indica Alekhine, en lugar de la jugada hecha
por las blancas hubiera sido una equivocación 14.
A X C, AxA; 15. C X P, D x D; 16. TR x D, C6C ; 17. T7A,
Axc; 18. A X A, Pxc; 19. A x T, T x A, con ventaja
de las negras.

14. ... ; T1A -15. P4CD,

15. CD2D
12 A. Kotov

Resulta característico para el concreto razonamien­


to aj edrecista de Alekhine. En lugar del ataque que
surge en 5R, Alekhine escoge esta, al parecer, mo­
desta retirada, considerando justamente que el lu­
gar del caballo está en 5A y dirigiéndolo rápidamente
hacia allí a través de 3C. En este momento se organiza
una curiosa lucha de piezas por los puntos centrales
de apoyo, terminando en favor de Alekhine ; no sola­
mente porque sus piezas estaban mejor preparadas
para el combate, sino también porque el campeón ruso
ve más concretamente las posibilidades, ahonda más
profundamente en el secreto de la situación dada.

16. A3C,

Capablanca hace evidentes jugadas de sentido lógico,


pero con tal procedimiento es dudoso que pueda llevarse
una ventaja sobre la genial idea creadora de Alekhine.
A las blancas les correspondía calcular, lo que en la
actual situación era el punto clave de la posición, la
casilla 4AD y partiendo de esto preparar el plan de
maniobras de sus piezas. Merecía atención, por ejemplo,
16. C3C con tal de que a 16 . . . . , C3C_ respondiera 17. C5T
guardando esperanzadoramente la casilla 4A. Sin embar­
go, como siempre, en la mentalidad del cubano señorean
principios generales dogmáticos y en el caso de ambas
situaciones no es necesario llevarse al caballo 4D de
la buena disposición de la posición.

16. C3C 17. D3C, CR4D

¡Todos a luchar por el punto 4AD! Después del


cambio del caballo 3A, el alfil negro 2C adquiere la
posibilidad de atacar otra vez el punto 4AD. Además
de eso, el ataque en 4D crea una seria amenaza de
posición por el procedimiento 18 . . . . , C X C ; 19. T X C,
A4D ; 20. D2C, TxT; 21. D X T, D1T y T1A, toma la
importante vertical abierta "AD" y la diagonal "TD­
TR".

18. AJA, TSA!

<Ver diagrama siguiente.)


Poco a poco, las piezas de las negras se concentran
en el flanco de dama.

19. C4R, OlA 20. T x T ?,


Herencia ajedrecística de Alekhine 13

Eso ya es una equivocación, que conduce a las blancas


a serias dificultades. Estaba bien 20. D1C continuando
la lucha por el punto 4A y la línea "AD". Después
de la retirada de la dama a 1C se creaban, simplifi­
cando el juego, amenazas 21. C6D ó 21. A6D y,
asimismo, 21. C2D sacando las piezas negras de la
línea "AD". Al mismo tiempo se hacía posible el traslado
del caballo 4D de la "bonita", pero inútil permanencia
en 4D a través de 3C a la más ventajosa casilla 5T
ó 5A. El motivo del asombro de Capablanca ante esta
partida consiste en que se organizaba con jugadas "natu­
rales", cuando la posición, a pesar de su aparente sen­
cillez, exigía profundizar con ardor en su secreto.

20. . .., CxT 21 . Tl A, D l T!

Amenaza 22. C X PR ; ó 22 . . .. , C x PC.

22. CJA,

Mal 22. C5A, A X C ; 23. P X A, T1A ; 24. A2R, T X P ;


25. A X C, D1AD, ganando un peón.

Tl A 24. A x A, DxA
AxC
14 A. Kotov

A pesar de la aparente prosperidad, las cosas de las


blancas no marchan bien. Las negras señorean total­
mente en el centro del tablero y amenazan con el mo­
vimiento del peón 3R lanzar todavía más lejos y aislar
las piezas del enemigo. Por eso Capablanca hace todo
lo posible por cambiar un peón del flanco de dama para
debilitar a las negras en 4C y facilitarse la defensa.

25. P4TD, A3A 26. C3A,

26. . . . , A7C !

Nuevamente, una profunda maniobra.

Alekhine se propone realizar el avanee del peón 3R


y, previamente, se lleva el alfil de 3A para que el
peón en 4R no tape la línea de su movimíento. A
todo esto, la posición del alfil en 7C ofrece muchas
posibilidades tácticas, una de las cuales se realiza en
la partida.

27. Tl R,

La finura de la jugada realizada con el alfil, muestra


las siguientes variantes, traídas por Alekhine a las
obseravciones de esta partida:
Herencia ajedrecística de Alekhine 15

I. 27. TlD, P X P! ; 28. D X P, C3C; 29. T X D, C x D ;


30.TlD, C6A; 31. TlR, T5A; 32. A6D, C5R; 33. A7R,
P3A; 34. TlC, R2A; 35. RlA, A6A, con fácil ganancia
en el final de partida.

II. 27. TlC, C6T!; 28. D X A, C X T ; 29. DXC, D6C ;


30. DlAR, PxP; 31. P3T, P6T, ganando sin dificultad.

27. . .., Tl D

Ahora, la línea ··AD" ya no representa un gran valor


para las negras, en este momento les importa la
línea "D".

28. P x P, PxP 29. P3T,

Las blancas han sufrido mucho en esta partida por


la ausencia de un "ventanuco" para su rey ; por fin,
ha llegado el momento de hacer esta importante ju­
gada.

29. . .., P4R 30. Tl CD,

La situación de las blancas no es fácil, pero Capa..;


blanca capitula demasiado sumiso. Habiendo jugado 30.
P4R hubiera podido todavía mostrar una larga resisten­
cia. De la combinación de cambio tramada por las
blancas surge un rebatimiento efectivo.

30. ... , PSR 31. C4D,

"Otras posibilidades son: 31. ClR, D7D ; 32. D2A (32.


RlA, TlT ; 33. TlD, T6T) ; 32 . . . . , D X D ; 33. C X D, T7D;
34. ClR, C6T, y las negras ganan, ó 31. C2T, D6D.; 32.
T X A, D X D ; 33. T X D , TBD+ ; 34. ClA, C7D ; 35. T3T,
cxc, y las blancas están indefensas".-Alekhine. La
variante entre paréntesis es equívoca en vista de 34.
D X C!, D X T ; 35. DBA+, R2T; 36. D5A+, P3C ; 37.
D X PA+, A2C; 38. A5R. Está bien 32. RlA, D6A!.

31 . ... , AxC 32. Tl D,

Sin fijarse en el próximo bonito golpe, que decide


en seguida el destino de la partida. Además, después
de 32. PxA, D xP, la situación de las blancas hubiera
sido desesperada.

32. . .. , CxP
16 A. Kotov

Las blancas se han rendido, ya que se han quedado


sin piezas. La victoria en la siguiente partida fue, asi­
mismo, obtenida por Alekhine con el resultado de la
combinación de las figuras atacande en el centro y en
el :flanco de dama.

N .o 2. D EFENSA ESLAVA

Alekhine Euwe

1.a partida del match, 1935.

1. P4D, P4D 7. C x P4A, D2A


2. P4AD, PlAD 8. PJCR, P4R
l. ClAR, CJA 9. P x P, CxP
4. CJA, PxP 1 0. A4A, CJA-20
5. P4TD, A4A 11. A2C, AlR
6. C5R, CD2D

Conocida variante teórica, que en tiempos estuvo muy


de moda. Euwe escoge una defensa no muy buena y
se mete en un terreno de dificultades. El camino bueno
11. . . . , T1D, 12. D1A, P3A; 13. 0-0 A3R, fue hallado
más tarde.

1 2. C x C, CxC 13. 0-0, A2R


Herencia ajedrecística de Alekhine 17

"Por raro que parezca, precisamente después de esta


jugada, las negras se encuentran en una situación
difícil. En cualquier caso era mucho mejor 13. . .. , P3A,
para: 1) dejar todavía al alfil negro la elección entre
las casillas 5C y 2R, y 2) con la aumentada defensa del
caballo ofrecer a la dama de las negras una gran liber­
tad de acción".-Alekhine.

1 4. D2A!,

Da comienzo a toda una serie de ataques de las pie­


zas blancas, que llevan a las negras a la catástrofe en
el centro y en el flanco de dama. Ahora amenaza tanto
15. C5C con el siguiente C4D como 15. C5D.

1 4. . . ., T1 D

Previniendo en seguida las dos amenazas. Pero las


tribulaciones de las negras no han hecho más que
empezar.

1 5. TR 1 D, 0-0 1 6. ese, TxT+

Para jugar 1 7. . . . , D4T, l o cual no acontecería en


seguida en vista del cambio en lD, por ej emplo, 16 .
. . . , D4T; 17. T X T, T X T ; 18. A X C, P x C ; 19. A x P.
Alekhine cuenta que a pesar de este cambio, ofrecía
más posibilidades para la defensa 16. . . ., D1C.
2
18 A. Kotov

1 7. T x T, D4T 1 9. P4CD !,
1 8. C4D, Al A

Ataque elegante, que conduce a la debilitación de la


oposición de los peones negros en el flanco de dama
y en el punto 4D. No se puede tomar el peón 4C,
porque después 19 . . . . , AxP ; 20. C3C, D2A; 21. D4R,
A6A (21. . . . , A3D ; 22. D4D, y ganan) ; 22. T1AD, A7C
(la inclusión de la jugada 22 . . . . , P4AR no cambia nada
en vista de la respuesta 23. D2A), 23. T2A, P4AR;
24. D4C y las blancas ganan.

1 9. . . ., D2A 20. P5C, P4AD

Logro importante. Las piezas de las blancas reciben


un fuerte punto de apoyo en el centro 5D.

21. C5A, P3A

Debilitación vital de la posición. Unicamente se podía


defender después de 21. . . . , A3A; 22. C6D, T1D ; sin
embargo, también entonces 23. C4A! colocaba ante las
negras problemas de difícil solución.

22. C3R !,

Lanzándose rápidamente. a la conquistada posición


central.

22.... , A3R 24. T x A, D4T


23. A5D !, AxA

Contraataque temerario. No salvaría tampoco otra


cosa, ya que el irrefutable triunfo de la dama de las
blancas en la casilla 5AR y 6R decide rápidamente el
resultado de la lucha.

25. C5A, D8R + 27. A x C, PxA


26. R2C, Al D
(Ver diagrama siguiente.)

27. T7D !,

La decisión más sencilla. La amenaza 28. C6T+ es


más importante que las conquistas materiales.

27. ... , AJA 29. D x A,


28. C6T + !, Rl T
Herencia ajedrecística ele Alekhine 19

Las negras se rinden.


En caso de 29. . .. , T1R decide rápidamente 30. D5D,
PxC; 31. D7A, ó 30. C7A+, R1C ; 31. D5D, R1A ; 32. C6T.
Y en la partida siguiente, la victoria de Alekhine
aparecía como consecuencia del ·enérgico ataque llevado
al centro y al flanco de dama.

N.o 3. VARIANT E M E RANO

Alekhine Bogoljubov
2.8 partida del match, 1934.

1. P40, CJAR 6. CJA, PxP


2. P4AO, PJA 7. A x P, P4CO
3. CJAO, P40 8. AJO, PJTO
4. PJR, PJR 9. 0-0,
5. AJO, C020

Renunciando a embrollos que producen quebraderos


de cabeza en la variante "pura de Meran", con la
jugada 9. P4R. Sin embargo, ya está demostrado, con
tan modesta jugada las blancas no pueden recibir supre­
macía de apertura.
20 A. Kotov

9. , P4AD 11. C4R, A2C


10. P4TD, PSC 12. C4R-2D,

Esto mantiene todavía la tensión de la lucha, ya que


ofrece a las blancas la posibilidad de pasar con el
caballo a la casilla 3C. El cambio en 5A les despojaría
de toda posibilidad activa.

12. . .. , A2R

13. PST,
Comenzó el juego bilateral en el flanco de dama.
Las blancas conquistan el punto 6C y antes de esto
debilitan visiblemente el peón 5T y, al mismo tiempo,
dan a las negras la posibilidad de contraatacar en el
flanco de rey.

13. ..., 0--0 15. D2R, ese


14. C4A, D2A
Entusiasmándose con la ganancia del peón y dejando
escapar una buena posibilidad de posición para refor­
zarse en el centro por el camino 15 . . . ., PxP ; 16. PxP,
CID con amenaza 17 . ..., C5A.

16. P4R, Px P 19. A4A, A3D


17. P3T, CSC-4R 20. Ax C, Ax A
18. C3xC, ex e 21. C6C, T2T
Herencia ajedrecística de Alekhine 21

Era forzoso, ya que después de 21. .. . , TDlD ; 22.


TRlD y la toma en 6T el peón 5T, hubiera sido en
extremo peligroso. La posición de la torre en 2T es
pasiva y, de un momento a otro, de hecho, estará
excluida del juego, y aprovechándose de esto las blancas,
atacan enérgicamente en el centro.

22. TOlA, 030 23. T4A, P4A?


Fuera de lugar aparece la actividad en el momento
en que las piezas blancas están mejor movilizadas para
el encuentro en el centro. Correspondía limitarse a ope­
raciones defensivas y jugar 23 . ... , A3A, amenazando en
caso de ser posible trasladarlo a lD y, asimismo, reci­
biendo la posibilidad de jugar P4R.

24. Px P, Px P 25. TlR,


Ocupando otra línea abierta. Ahora en caso de retro­
ceso del alfil 4R, haciendo caso omiso de las posibili­
dades materiales adquiridas, las blancas pueden cambiar
sencillamente las damas en 6R irrumpiendo con un
decisivo efecto con las torres en la séptima horizontal o,
a la opción, ganando el peón 5D y 5C.

25. ... , D3C


Aprovechando la ocasión de realizar unas cuantas
jugadas de contraataque.

26. P3A, TlR

No deseando llegar al cambio de las damas, Bogol­


bujov va a una combinación forzada, sin percatarse de
su entretenido rebatimiento. Además, las negras ya no
tienen una defensa satisfactoria.

27. P4A, D6C 28. Px A, Tx P


(Ver diagrama siguiente.)

29. TBA+ !,
Rechazar es la preocupación de las negras. Si to­
man la torre, entonces 30. D X T concluye rápidamente
la lucha, pero tampoco salvan otras continuaciones.

29. . , R2A 32. TSAR+, R4C


30. DST+, P3C 33. P4T+,
31. Dx PT+, R3A
22 A. Kotov

Todo esto es forzado y no resulta tan difícil de


encontrar.

33. .. . , RSA 36.- 060+, RSC


34. 06T+, P4C 37. AxT+,
35. Tx P+, Tx T
Las negras se han rendido.

En las siguientes dos partidas Alekhine consiguió lo­


grar la victoria con procedimientos totalmente distintos.
En el primer caso, creó un fuerte centro de peones
y decidió el combate con una oportuna rotura en el
centro, unido al sacrificio temporal del peón. Por el
contrario, en el segundo caso, venció a su enemigo
aprovechando la debilidad de sus peones pasados en
el centro y en el :flanco de dama. Vamos a ver estas
partidas.

N .o 4. APERT URA ZUKERTORT


Fazekas Alekhine
Podebrad, 1936

1. C3AR, P40 3. P4A, P3R


2. P3R, P4AO 4. C3A,
Herencia ajedrecística de Alekhine 23

Las blancas incitan al enemigo a realizar el movi­


miento P5D. Alekhine se apodera gustoso del centro,
recibiendo un juego activo. Correspondía renunciar a la
arriesgada jugada del caballo y pasar a las vías nor­
males de la teoría por el camino 4. P4D.

P5D 7. P3TD, P4R


�:6. Px P, Px P 8. P3D, P4A
C2R, C3AD 9. P4CD, P3TD
Las negras han ocupado esperanzadoramente el cen­
tro con los peones y permanecen significativamente me­
jor. Con las siguientes jugadas Alekhine refuerza todavía
más su base de peones en el centro.

10. P3C, A2R 12. O-O , C3T


11. A2CR,- A3A
Experimento innecesario. Ahora tomando en 6T las
blancas aliviaban de un modo significativo el problema
del desarrollo de las piezas. Después .de 13. A x C, P x A ;
14. T1R, con la subsiguiente C1A-3C las blancas con­
servaban buenas posibilidades.

13. C2D, O-O 15. D2A, P4CR


14. P5A, A3R
Preparándose para el movimiento P5R, las negras
arrebatan al caballo blanco la casilla 4AR.

16. TlC, TlA 18. Tx P, D2R


17. P5C, Px P 19. P4TD, C2A

Los últimos preparativos para el asalto decisivo.

20. A3TD, T2A 21. TRlC,


(Ver diagrama siguiente.)

21. ... , P5R!


La rotura del centro. Alekhine desaloja para sus
caballos la casilla 4R, desde donde realizarán amenazas
irresistibles al campo enemigo. Para recuperar esta
casilla a Fazekas le correspondía decidirse a hacer la
jugada 22. P4A.

22. Px P,
24 A. Kotov

Pereciendo resignadamente, porque ahora todas las


piezas negras, con un efecto decisivo, entran en juego.

22. ... , C2A-4R 23. -Px P,


Cediendo una pieza. La pasiva 23. ClAD perdía rápi­
damente en vista de 23 . . . . , P6D y 24 . . . . , C5D.

23. ... , P6 0 24. 01 0,

Tampoco era mejor 24. DlA, PxC; 25. PxA, C6D.

24. ... , Px C 26. C4R, eso


2S. Ox P, Ax P

Con algunas jugadas las piezas negras de combate han


barrido todos los refuerzos del enemigo hacia el centro.
La futura resistencia de las blancas tiene un carácter
condicional. Aún correspondía:

27. Cx A+, Ox C 32. 04R, CSA


28. D2T+, A3R 33. P4A, Cx T
29. ASO, Ax A 34. Ax C, 04A
30. Ox A+, T2A-2AR 3S. Ox O, Tx O
31. TSC-2C, TlO 36. A3T, C7A

Las blancas se han rendido.


Herencia ajedrecística de Alekhine 25

N .o 5. DI!FENSA HOLAN D ESA

Landau Alekhine
Kemeri, 1937.

1. P4D, P3R 3. C3A, P4AR


2. P4AD, ASC+

Las negras escogieron una de las distintas formas de


la Defensa Holandesa, llevada por primera vez a la
práctica de los torneos por el gran maestro Keres.

4. D3C, D2R 7. C3A, C3A


5. P3TD, Ax C+ 8. P4CD,
6. Dx A, C3AR
Contento de haber logrado un frente de peones ame­
nazadores en el flanco de dama, Landau no se percata
que ante la separación en el desarrollo, sus peones pue­
den resultar débiles y eso puede conducir rápidamente
a la catástrofe. Resultaba más cuidadoso 8. P3CR ó 8.
P3R, terminando el desarrollo de sus piezas.

8. ..., P3CD 10. P3C?,


9. A2C, A2C
Y ahora, cuando el alfil de las negras ya ha ocu­
pado la diagonal 1 TD-8TR, esta jugada conduce a des­
agradables complicaciones para las blancas. Era más
esperanzador 10. P3R (véase diagrama).

10. .. ., CSR 11. D3C,


Pierde 11. D2A?, CD X PC; 12. P X C, D X P+; 13. C2D,
D x C+; 14. D X D, C x D con el ataque a la torre lTR.

11. . ,
.. P4TD 13. D2A, C4T
12. PSC, PST! 14. A2C?,

Conduce hacia el fracaso. Las circunstancias ex1g1an


de las blancas que aceptasen el sacrificio del peón.
Después de 14. D X P, C3D; 15. P5A, C3-5A; 16. D4C
aunque las negras rápidamente recuperan el peón con
mejor juego, así y todo, las blancas, ante esto, conser­
vaban grandes posibilidades de defensa.
26 A. Kotov

14. ..., C30!

Forzando la apertura de la línea "AD", a cuya ocu­


pación las negras ya están dispuestas ahora, cuando a
las blancas les corresponde todavía terminar el desarrollo
de sus piezas.

15. P5A, C30-5A 17. 0-0, TOlA


16. Px P, Px P
Amenaza el rebote del caballo 5A. Landau toma me­
didas más enérgicas para salvar su extremadamente du­
dosa posición; sin embargo, ya es tarde.

18. A3A, C6C 20. TOlA, 0-0


19. A4C, P30
Las negras no se apresuran a apoderarse de la cali­
dad, de todas formas no se les marchará a ningún sitio.
La situación de las blancas es desesperada. La partida
concluye con las siguientes jugadas:

21. 02T, Cx T 28. Ox O, Px O


22. Tx C, C4R 29. Ax P, T8CO
23. Tx T, Cx C+ 30. R2A, Tx P
24. Ax C, Tx T 31. R3R, T7C
25. Ax A, T8A+ 32. R30, R2A
26. R2C, Ox A+ 33. P4T, P3C
27. P3A, 040
Herencia ajedrecística de Alekhine 27

Las blancas se rinden.


En la siguiente partida, la fortísima presión de las
piezas blancas condujo por último a un final entre­
tenido.

N .o 6. DEFENSA ESLAVA

Alekhine Helling
Dresden, 1936

1. P40, P40 4. C3A, PxP


2. P4AO, P3AO 5. P4TO, P3R
3. C3AR, C3AR

Actualmente se juega 5. AD4A.

6. P4R, A5C 7. P5R, C5R

En otras partidas de Alekhine las negras jugaban


7 . . . . , CID, pero se encontraban asimismo con un juego
malo.

8. 02A, 040 11. P x C, A2R


9. A2R, 0-0 1 2. C20,
1 0. 0-0, CxC

Recuperando el peón y quedando con una señalada


posición de supremacía.

1 2� .. . , P4AO 1 4. 04R,
1 3. A x P, 01 0

Enérgica jugada, cuya finalidad por medio de 15. A3D


es provocar la debilidad de los campos del flanco de
rey de las negras.

1 4. .. . , PxP 1 6. AJO, P3CR


1 5. P x P, A20
(Ver diagrama siguiente.)

1 7. A3T!,

Plan correcto. A pesar del atractivo exterior del


ataque directo a la posición de enroque del rey de las
28 A. Kotov

negras, Alekhine supo valorar justamente la posición


dada y encontrar un buen plan para el desarrollo de
futuros acontecimientos. Las negras tienen visiblemente
debilitada la casilla 3D, hacia eHa, pues, tienden las
piezas blancas y en particular el caballo 2D. Previa­
mente, Alekhine suprime el alfil 2R, importante defensor
del campo de las negras.

AD3A 1 9. C4A,
��: o4c, T1 R

Conformándose a soportar una sucesiOn de fuertes


ataques sobre la dama de las blancas, solamente para
no permitir que llegara el sacrificio de la calidad, des­
pués de 19 . . AxA, T X A; 20. C4A, T2D; 21. C6D, T X C.

P4TR 21 . D3C, AST


AR4C

"Si 21. . . . , DxP, entonces 22. A X P!, por ejemplo:

I. 22. . .. , A5A (5T); 23. A X PA+, R X A; 24. C6D+,


RlA; 25. CxT+, R X C; 26. D6C+ y 27. TlD.

II. 22. . .. , P X A; 23. D X A, D X C; 24. D x P+ , RlT;


25. D X P+, R2C; 26. D5C+, R2T; 27. AlA, con la
amenaza decisiva T3T".-Alekhine.
Herencia ajedrecística de Alekhine 29

22. D3R, D4D ?

Pierde rápidamente. Se podía demostrar la defensa


cambiando la dama mediante 22 . . . . , D4C ; 23. P3C ! ,
D X D ; 24. P X D, AR4C, aunque también entonces des­
pués de 25. R2A ! , las blancas, en el final de partida,
conservaban una enorme supremacía.

23. P3A, Al D

Todavía había posibilidad de huir con la dama de


la trampa en lD, pero esto tampoco salvaba a las
negras.

24. C6D, T2R 25. ASAD,

Las negras se rinden.

La situación de su dama, que cayó en la trampa y


perecía después de 26. A4A ó 26. A4R, es insólita.

En la siguiente partida, Alekhine desarrolló una


fortísima presión en los campos centrales y en las
líneas.
30 A. Ko to v

N .o 7. APERT URA ESPAt\JOLA

Alekhine Consultantes
Amberes, 1923.

1. P4R, P4R 4. A4T, C3A


2. C3AR, C3AO 5. C3A,
3. ASC, P3TO

Antigua continuación. Las blancas, por ahora, no


determinan la posición de los peones en el centro y
primero desarrollan el caballo de dama.

5. ... , A2R 7. A3C, P30


6. �' P4CO 8. P4TO,

No es lo mejor. Alekhine considera muy fuerte 8.


C2R, A5C ; 9. P3A.

PSC 1 3. Tl R, C3A
�: eso, 0-0 1 4. P3T, A4T
1 0. P40, ASC lS. CxC+, AxC
1 1. P3A, PC x P 1 6. ASO, 020
1 2. PC:: x P, C x PR 1 7. PST,

Por el peón sacrificado, las blancas han logrado una


fuerte presión en el centro y en el flanco de dama.
Ahora, por ejemplo, amenaza 18. D4T.

1 7. . . . , TOl O 1 8. 030, Cl C
Al caballo le será preciso permanecer, a todo lo largo
de la partida, en este alejado destierro.
Adqui'fida esta posición, ya es suficiente recompensa
por el peón entregado.

1 9. A3T, TRl R 21. A x A, PT x A


20. A4R, A3C 22. P50 !,

Interesante sacrificio del segundo peón, que da a


Alekhine una fortísima presión de piezas en el centro.
Aceptando el sacrificio, las negras se disponen a uná
larga defensa del fortísimo ataque de todas las piezas
blancas ; por eso les correspondía abstenerse de la toma
de otro peón y esforzarse rápidamente para dar el con­
traataque en el flanco de rey, por el procedimiento
22 . ..., A2R, con el consiguiente: P4AR y A3A.
Herencia ajedrecística de Alekhine 31

22. , PSR 24. D x T, AxP


23. r x P, TxT 25. Tl AD, AxP

26. A2C!,

El comienzo de las maniobras contundentes, durante


las cuales se aprovecha la actividad de todas las figuras
blancas con el máximo de energía. Ahora amenaza
27. C5C, a lo que ya es imposible la respuesta 27 . . . . ,
A7D, en vista de 28. D4D.

26. .. ., Tl R 28. C4D !,


27. D4TR, P3AR

Ocupando el importante punto 6R. Consolidado en


6R, el caballo contribuirá al ataque sobre el rey de
las negras, cuya protección de peones le hace correr
el- riesgo de ser capturado como pieza de sacrificio.
Ahora, a las blancas les es necesario solamente pre­
venir la posibilidad de dar por el caballo 6R la torre
negra.

28. ..., R2A

Precisamente preparándose a contestar a"l 29. C6R,


sacrificando la calidad y a liquidar las más peligrosas
amenazas. Alekhine encuentra una fina maniobra que
nuevamente refuerza las amenazas de la invasión en 6R.
32 A. Kotov

29. T4A !,

Amenazando de nuevo marchar con el caballo a 6R,


ya que ahora a 30 . . . . , TxC; 31. PxT+, D X P corres­
ponde 32. T4R, D4A; 33. A X P!, ganando.

29. T4R 30. C6R, T4T

Como se dice más arriba, no se puede atacar en 6R,


y también está mal la toma en 5D, en vista de 37 . . . . ,
TxP; 38. exPC ! , con una ganancia sin complicaciones.

31 . 04R, 02R

Si las negras tomaran ahora en 5D, entonces corres­


pondería 32. C8D + , con la ganancia de una torre. Las
negras tratan de poner rápidamente en juego su des­
orientado caballo lC, pero no logran hacerlo.

32. 030, A3C

Resulta claro que es imposible-la jugada 32 . . . . , C2D,


en vista de 33. T4R, C4R; 34. D X PT, A3C; 35. D8A,
con peligrosas amenazas.

33. T4R, 020 35. T4AR!,


34. P4C, Tl T

La presión de las piezas blancas en el centro se


refuerza con cada jugada, y el rey de las negras se
ve obligado a acercarse al centro del tablero y aguanta,
una y otra vez, el desagradable ataque.

35. . . ., Tl R

No hay ninguna posibilidad de prevenir en seguida


1
unas cuantas amenazas: 36. A X P, 36. CxPC y 36. P5C.
(Ver diagrama siguiente.)

36. A x P !, PxA

Conduce hacia el mate, pero tampoco 36. . . . , TxC;


37. P X T + , D X P; 38. A4D + , RlC; 39. A X A, P x A;
40.T4D, no ofrecía esperanzas para una larga resis­
tencia.
Herencia ajedrecística de Alekhine 33

37. TxP + !, RxT

No era mejor 37 . . . . , R2R; 38. DXPC, con el inevitable


mate.

38. D3AD + ,

Las negras s e rinden, e n vista del mate en dos


jugadas.
Con el activo ataque de las piezas blancas en el centro
del tablero, se decidió la solución de la siguiente par­
tida de Alekhine.

N.o 8. GAMBITO D E DAMA


- Alekhine Thomas
Hastings, 1936-37.

1. P4D, C3AR 4. C3A, CD2D


2. P4AD, P3R 5. PxP, PxP
3. C3AD, P4D 6. A4A,

Esta jugada no es menos fuerte en esta posición,


que la conexión del caballo por el camino 6. A5C.
Ante esto, a las negras no les resulta tan fácil llevar
un juego simplificado de cambio de figuras ligeras.
3
34 A. Kotov

6. . . ., PJA 8. AJO, C1A


7. PJR, A2R

Actualmente, en este caso se juega con más frecuencia


8 . . . . , C4T con el fin de que después de 9. A3C cambiar el
alfil 6C y luego no apresurarse con el enroque, sino
esconder al rey en la misma dirección a la que se dirija
el rey de las blancas.

9. C5R, CJC 1 1. P x C, C5C ?


1 0. AJC, e xe

Conduce a una difícil posición para las negras. Era


más natural 11. . . . , C2D sin temer 12. P6R, P x P ; · 13.
D5T + , a lo que puede seguir un sencillo 13. . . . , R1A!
y las negras permanecen muy bien.

1 2. PJTR, CJT 14. 0-0, 020


13. D5T, AJR

A simple vista parece que la situación de las negras


no es mala, sin embargo, la siguiente enérgica juga_:.:a
del campeón del mundo demuestra la desafortunada
distribución de las piezas negras. El problema de las
blancas es abrir las líneas centrales, después de lo cual
aparecerá en seguida, clara y destacada, la desesperada
disposición de la dama negra, y la alejada permanencia
del caballo negro 3T.
Herencia ajedrecística de Alekhine 35

1 5. P4R,

Destruyendo el punto negro de apoyo 4D, porque las


negras están obligadas a tomar en 5R. Si 15 . . . . , P5D,
entonces después 16. C2R y la siguiente P4A, las
negras no pueden resistir el empuje de los peones ene­
migos. Permitir el cambio en 4D tampoco les conviene.

PxP 1 8. A4A, A3e


��: A·xP, A4AR 1 9. 02R, AXA
1 7. TRl R, 03R 20. exA, O-O

Las negras han concluido su desarrollo con dificul­


tades ; sin embargo, en este tiempo Alekhine se ha
apoderado completamente de la línea abierta en el
centro y del importante punto de apoyo 6D. A cada
jugada, la iniciativa de las blancas se hace más
peligrosa.

21. TOl O, P3e O


Es difícil enfrentar la acción de la torre blanca a
la torre negra en 8D, ya que después de 21 . . .. , TD1D ;
22. D3R, el doble golpe en 7TD y en 6TR es molesto.
En caso de 21. . . . , TR1D; 22. C6D, Axc ; 23. TxA ! ,
T X T ; 24. P X T , D X D , el final de partida está clara­
mente perdido para las negras, ya que el peón 6D no se
puede detener.
La mala posición del caballo negro se ve en muchas
posibles variantes. Por ej emplo, después de 21 . . . . , TR1D;
22. C6D, las negras no pueden defender el peón 2CD
por el procedimiento 22. . . . , T2D, ya que a esto corres­
ponde: 23. A X C, D X A; 24. C5A ! , D3R; 25. T X T,
DxT ; 26. D4C y las blancas ganan. Asimismo, está mal
continuar 22 . . . . , P3CD en vista de 23. D3A ! , P4AD ;
24. A X C.

22. e60, P4AO 23. ese,

Mientras el caballo blanco se pasea por la retaguardia


del enemigo, su colega negro sufre inactivo en el lejano
destierro de la orilla del tablero.

23. ... , TRl A

No era conveniente todo el tiempo tomar el- peón 2TD,


ya que entonces la debilitación del :flanco de rey des-
36 A. Kotov

pués de A X C, P X A surge en seguida, sobre todo, en


vista de la irrupción de la torre blanca en la séptima
horizontal.

24. A x C, D xA

25. T7D,

Y ahora la torre, introducida en el campo enemigo,


le obliga a someterse con inevitables sacrificios mate­
riales.

P3T 1 28. T x P, PSA·


��: c6o, A xC \ ��· P6R,
27. T x A, OSA

Un peón de más y la disposición más activa de las


piezas, hacen que el problema de las blancas no sea
complicado, tanto más cuanto que su última j ugada
arrastra todavía tras sí la apertura de la posición del
rey de las negras o el cambio de damas, conven; �mte
para las blancas. Todavía correspondía:

29• . .. ,
Tl R 31 . T x D, PxP
30. D4R, DxD 32. T x PA, TRl C
Era preciso confromarse con el cambio de torres, ya
que amenazaba 33. T4-6A ó 33. T4TD con la ganancia
de un peón.
Herencia ajedrecística de Alekhine 37

33. TA4CD, TxT 39. R2R, T2T


34. T x T, R2A 40. P4T, P4T
35. P4TD, P4TD 41 . P3C, T1 T
36. T5C, R3A 42. P4A, T2T
37. P3CD, P3C 43. R3D, T1 T
38. . R1 A, P3T

Las negras están perdidas y se ven obligadas a esperar


con resignación el acercamiento del desastre.

44. R4A, T1 A + 47. R x P, T1 C +


45. T5A, TlTD 48. T5C,
46. P4CD, PxP

Las negras se han rendido.

En la partida examinada, la presión de las figuras


blancas en el centro se convirtió en ataque directo al
rey enemigo. Estos casos pueden verse con frecuencia
en el proceso del ataque en el centro: el centro no está
lejos de los flancos, por eso la acción en el centro de
las figuras activas atacantes, a menudo se extiende hasta
el :flanco y, en este caso, a la posición del rey. Así, en
la siguiente partida, vamos a examinar un caso análogo
al recientemente examinado.

N.o 9. DEFENSA ORTODOXA

Alekhine Selesnev
Pistyan, 1922.

1. P4D, P4D S. A5C, CD2D


2. C3AR, C3AR 6. P3R, 0-0
3. P4AD, P3R 7. T1 A, P3A
4. C3A, A2R 8. A3D,

"Considero esta vieja jugada tan buena como la


nueva 8. D2A, porque la dama de las blancas, en este
último caso, pierde un tiempo para pasar a 2R, su
casilla natural en el Gambito de Dama". Alekhine.

8. .. ., PxP 1 0. A4A,
9. A x P, C4D
38 A. Kotov

Jugada arriesgada, con lo cual en la presente partida,


las negras consiguen sin dificultad una posición activa.

CxA 1 3. 020, 030


��: Pxc, C3C 1 4. CSR,
1 2. A3C, C40

En caso de 14. P3C, las negras hubieran continuado


14 . . . . , cxc; 15. Pxc, P4AD ! , con un excelente juego.

CxC 1 6. �' P4C O !


��: Pxc, P4AO

Asegurando el desarrollo del alfil e n 2C y recibiendo


una posición de perspectiva en el centro y en ambos
:flancos. Alekhine procura tomar urgentes medidas para
no dar posibilidades al enemigo .de apoderarse de la
iniciativa.

17. A2A,

"Fuerte jugada con doble amenaza 18. A4R (en unión


de C6A) y 18. D3D, (en uñión de D X PC), lo que
entorpece a las negras el desarrollo del alfil 2C".-Ale­
khine. Esta afirmación está basada en el error, porque
contestando ahora 17. . .. , A2C las negras recibían una
excelente posición, ya que no da nada 18. D3D, P3C y
no se puede tomar el peón 4C a causa de la contesta­
ción 19 . . . . , A3T.

17. . . ., A3T

Jugada no común que brinda en el futuro a Alekhine


la posibilidad de desenvolver un fortísimo ataque sobre
el centro.

1 8. TRl R, TOl O 19. TOl O, P x P?

Otra equivocación más, que resulta una reL:d:ctación


de efecto. Jugando 19. . . . , P3C, las negras hubieran con­
servado una buena posición.

20. P x P, P3C
Herencia ajedrecística de Alekhine 39

21. A3C !,

"Amenazando 22. C X PA y, al mismo tiempo, entor­


peciendo la maniobra 21. . . . , A2C-4D, a causa de la
siguiente variante: 21. . . . , A2C ; 22. D3D, P3TD (ó 22.
. .. , P5C); 23. C X PC!!, PT X C ; 24. TxP!. P x T ; 25.
DxPC + , RlT ; 26. A2A, y mate en unas cuantas juga­
das".-Alekhine.

21 . .. . , AlA

Defendiendo e l punto 3R en caso de cualesquiera


sacrificios.

22. D2R !, P3TD 23. PSD !,

Rotura típica en el centro para tales posiciones. A


las negras no les conviene tomar este peón, ya que
después de 23. . . ., P X P ; 24. A X P, en relación con
25. exPA, su situación se hace crítica.

23. ... , D3C 25. C xA + , TxC


24. C6A, TDl R 26. P SA !,

De nuevo una elegante continuación de ataque. A las


negras no les conviene tomar el sacrificio de este peón,
como lo demuestra la siguiente variante, ofrecida por
Alekhine. 26. . . . , PCxP; 27. P6DI, T2C; 28. D5R, P3T;
29. D6A, R2T; 30. A X P ó 27 . . . . , T2D ; 28. D2D, TRlD ;
40 A. Kotov

29. D5C + , RlA; 30. D6T+ , RlR (30. . . . , RlC ; 31. T3D);
31. TxP + , con mate en dos j ugadas.
26. .. . , T2C
Tal voluntaria cesión del peón central, naturalmente,
no puede salvar la posición de las negras.
27.
28.
PA x PR,
P x P,
PxP 1 29. T7D !,
T2R

•x• �'�*•�
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if�1 -�-!-

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!r.ln!n
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.... �� �
Elegante conclusión de ataque. Si 29 . . . . , A X T, entonces
30. P X T + , RlT ; 31. PSD(D)!

29. ..., TAl R 32. D6A + , Rl C


30. D3A, D4A 33. P4TR, Rinden
31 . D7A + , Rl T
Las negras están indefensas contra P5T y también
contra el camino de la torre de las blancas lR en 3AR.
El intento de lanzarse al contraataque no trae nada,
ya que después de 33 . ... , TlA; 34. D X TR, D X P + ;
35. R2T, D5A+; 36. RlT, el rey blanco se oculta de
la persecución. Análogamente a la partida recién exa­
minada, en el siguiente ejemplo, Alekhine logró, asi­
mismo, una fortísima presión en el centro con las piezas,
y a continuación con el mismo movimiento de peones,
descubrir el centro. Esto trajo como consecuencia, que
las piezas blancas recibieran libertad de movimientos y
terminaran la batalla con un ataque directo al rey
enemigo.
Herencia ajedrecistica de Alekhine 41

N .o 10. DEFENSA T ARRASCH

Alekhine Mujjang
París, 1923.

1. P40, P40 5. PlCR, ClAO


2. P4AO, PlR 6. A2C, ClA
3. ClAR, P4AO 7. G--0, Al R
4. PA x P, PR x P

No es la mejor jugada. La teoría considera muy


fuerte 7. ... , A2R; 8. C3A, 0-0.

8. ClA, A2R 9. P x P, AxP

En la indicada variante con 7. ... , A2R, en posiCIOnes


análogas, se juega 9 . . . . , P5D, con el sacrificio de un
peón por una mejo:r distribución de las piezas. Ante la
situación del alfil en 3R, este sacrificio no es tan
efectivo.

1 0. C4TO,

Maniobra típica parn. tales posiciones, aue permite a


las blancas arrebatar las casillas negras en el centro y,
reforzándose en ellas, conservar una situación sefiorial.

1 0. . .., A2R 11. A3R, G--0

Tampoco es mejor 11 . ... , P3TD; 12. C4D, CXC; 13.


AXC, D2D; 14. C3A, TD1D; 15. D3C, con destacada
sobrepujanza de las blancas.

1 2. CSA, CSR !

Lo mejor, ya que, al menos, estabilizará algo el centro


de las negras.

1 3. C x A,

No se puede tomar en 7C, ya que 13. D2A gana


una pieza.

P xC 1 6. 03C, AlA
��: c4o, C xC 1 7. TOl O,
1 5. A x C O, C30
42 A. Kotov

Es más fuerte 17. P3R, porque ahora la posición se


simplifica demasiado.

1 7. . . ., AxA 1 9. P3R !,
1 8. T x A, D3A

Las blancas están mejor situadas. Sus piezas están


más activas, amenazan continuamente por el procedi­
miento P4R con destruir la base de los peones enemigos
en el centro y dar plena libertad de movimientos al
alfil 2C. Con todo, las negras podían haberse defendido
provechosamente si hubieran vigilado cuidadosamente las
amenazas del enemigo y no le hubieran permitido rea­
lizar combinaciones de ataque sobre los peones del
fianco de dama y sobre los peones centrales 4D y 3R.
Ahora, Alekhine prepara la jugada 20. T4AR, la cual no
tenia a continuación el necesario rendimiento, a causa
de la respuesta 19 . . . . , D4R del enemigo.

1 9. . . ., TOl A 20. T4AR, D2R

Ahora 20. . . . , D4R hubiera sido peligrosa, en vista de


la invasión de la dama de las blancas por el procedi­
miento 21. D4T, P3TD ; 22. D7D.

21 . T x T+, RxT

Lo mejor. En el caso de 21. . . . , D X T corresponde 22.


P4R! y después de 21. . . . , T X T, podía corresponder
22. TlA, y si 22 . . . . , T1A; 23. T X T + , C X T ; 24. P4R
activando a su alfil. Ciertamente, en este caso, después
de 24. . . . , P x P ; 25. A X P, C3D de la actividad a la
ganancia hay todavía mucho espacio.

22. Tl D, Rl C

Una equivocación seria, que permite a las blancas


realizar con provecho la mucho tiempo esperada P4R.
Después de la correcta respuesta 22 . . . . , P3TD, la pequeña
supremacía de las blancas no sería fácil de realizar.
(Ver diagrama siguiente.)

23. D3T!, T7A 24. P4R !,

El ataque de las blancas se mezcla provechosamente


con la defensa, ya que después de 24 . . . . , D1A; 25. D x P
y el punto 2A está defendido por la dama.
Herencia ajedrecística ele Alekhine 43

24. . . ., Ol A 25. O x P, C4C

No eran mucho mejores las restantes defensas, por


ejemplo ; 25 . . . . , C x P ; 26. A X C, P X A ; 27. D6C 6 25
. . . , P X P ; 26. D6C, T3A; 27. D4C.

26. 06C, PSO 27. Tl AR, 04AO

No era una solución para las negras 27. . . . , DlR;


28.P4TD, C2A ; 29. D X PD, con dos filas de peones en
campo enemigo.

28. O xP+, Rl A 29. PSR !,

El alfil 2C, inmóvil mucho tiempo en su encerrona,


sale en libertad y empieza a vengarse por su reclusión.

29. . . ., Ol A 31 . ASO,
30. 0 6CO, T x PC

La rápida j ugada 31. P4TD, se rechazaba con la


31. . . . , D2A ; ahora, pues, amenaza 32. P4TD. Las negras
no tienen defensa, la partida, para ellas, es desespe­
rada.
Todavía corresponde.
44 A. Kotov

31 . . , 020 34. OSA + , 01 R


32. A4A, T4C 3S. OSAR + , R2R
33. OSA + , 02R 36. 06R + , R1A

El retroceso a lD, después de dos j aques, perdía la


torre.

37. OBC + , R2R 39. O x PC, OxP


38. O x PC + , R1 0 40. T1 A,

Las negras se rinden.

El aprovechamiento de las fuerzas


de los peones pasados
Si en el ataque al rey un solo peón pasado juega
un papel relativamente poco importante, cumpliendo a
veces la tarea de espolón en el ataque al centro y al
flanco de dama, el significado del peón pasado es, con
frecuencia muy importante. En el centro del tablero
introduce habitualmente el desconcierto en las filas de
las piezas del adversario ; en el flanco de dama, con la
amenaza de pasar adelante, inmoviliza las piezas del
enemigo y permite, aprovechando la superioridad de las
fuerzas libres, organizar un decisivo ataque en otra parte
del tablero. Esta doble fuerza del peón pasado, precisa­
mente en el acto de ataque y desvío, permite al maestro,
que tiene la iniciativa en muchos casos, con la ayuda del
peón pasado, lograr un decisivo contrapeso.
Vamos a examinar unos cuantos ejemplos de la prác­
tica de Alekhine, en los cuales su ataque al centro y al
flanco de dama se convertía en muy efectivo, gracias
a la presencia del peón pasado, cuya marcha estaba
apoyada por las piezas.

N .o 1 1 . DEFENSA ESLAVA
Alekhine Tarrasch
Hastings, 1922.
1. P40, P40 7. C2T, P3R
2. P4AO, P3AO 8. A x P, A2R
3. CJAR, CJAR 9. 0---0, O-O
4. CJA, PxP 1 0. 02R, A2C
S. P3R, P4C O 11. T1 0, C 020
6. P4TO, P5C
Herencia ajedrecfstica de Alekhine 45

Actualmente, con esta jugada se espera, conservando


la posibilidad en caso necesario, sacar el caballo a 4A.
Se considera ahora una continuación muy fuerte 11 . . . . ,
P4TD.

1 2. P4R, P4TD

Ahora hubiera sido mejor abstenerse de esta jurRüa


y realizar el movimiento del peón 3A. Esto podía hace:rse
rápidamente, o después de la preliminar 12. . . . , D2A.

13. A DSC, T1 R

Defendiendo el alfil 2R y recibiendo la posibilidad de


sacar la dama, no temiendo la amenaza P5R.

1 4. C1A,

Es típico para tales posiciones el traslado del caballo


a la fuerte posición 3C, desde donde presiona el Cfntrn
y los puntos 5T y 5A.

1 4. . .., D3C 1 6. A3R, A3T


1 5. C3C, P3T

Maniobra de molde y poco pensada, que acarreó


grandes complicaciones para las negras. Era hora de
que las negras pensaran en la imprescindible necesidad
de liberarse en el centro y, en todo caso, determinar
una estructura de peones. Desde este punto de vista,
merecía atención 16. . . . , C5C ; 17. A4A, P4AD ! , después
de lo cual no ofrece a las blancas significativas ventajas
ni 18. P5D, PR X P ; 19. P X P, A3D, ni 18. A5CD, A3T.

1 7. CR2D !,

Jugada natural, el caballo se traslada a 4AD, desde


donde desarrollará una fortísima presión.

· 1 7. ..., A xA 1 9. D3A, P4A


1 8. C x A, D2A

A las negras les resulta ya muy difícil encontrar un


plan decente de defensa. Están muy apretadas en la
distancia, en su campo hay muchas debilidades, las prin­
cipales de ellas P4T y P4A, que el enemigo está dispuesto
46 A. Kotov

a atacar por todos los medios posibles. El intento de


cambiar el peón 5D no se logra, porque las blancas lan­
zan al centro un fuerte peón pasado que el enemigo se
ve imposibilitado de bloquear.

20. A4A !,

Unicamente así. Después de la rápida 20. P5D, P X P ;


21. P x P, A3D e l peón 5 D hubiera sido menos peligroso.

D2C 22. P x P,
��: Ps'o, PxP

La situación de negras es crítica. A todas las demás


posibilidades de posición, a las blancas, se les añade
todavía otra, el fuerte peón pasado en el centro. Este
les permite ampliar las posibilidades del ataque, porque
apoyándose en su influencia, las piezas blancas adquieren
todavía mayor actividad. La desgracia de las negras está
en que no se les ocurrió a tiempo bloquear a este peón
pasado. No en vano decía siempre Nimzowitsch que
Tarrasch no aprecia suficientemente el significado del
bloqueo.

22. . . . , D3T
Herencia ajedrecística de Alekhine 47

Practicando algunas minucias técnicas que no merece


la pena descürar. Ahora no se puede capturar con nin­
guno de los caballos el peón 4T, ya que entonces las
negras atacan al otro caballo con el peón o con el
alfil desde lD. Sin embargo, la jugada de la torre con­
firma la desesperada posición de las negras.

23. TOl A !,

Después de esto, no hay defensa. En caso de 23 . . . . ,


AlD se puede jugar tanto 24. C6D, como 24. A3R, C5R;
25. P6D, con amenaza 26. A X PT, P x A; 27. D4C + .

23 . . . ., Al A 25. C6A !,
24. C3 x PT, C5R

Lo más sencillo. A 25. . .. , D x P corresponde la indicada


más arriba 26. A X PT, P X A ; 27. D4C + .

25. ..., P4C

Desesperación, porque la posición ya no tiene remedio.

26. A5R, CxA 28. D x C, PxC


27. C6A x C, P3A
48 A. Kotov

29. P60 !,

Este peón, que jugó un importante papel en la con­


secución de la decisiva supremacía, aporta ahora un
golpe final.

29. . . ., A2C 31. O x PA,


30. 050 + , R1 T

Las negras se rinden.

No menos importante es el papel que desempefió en


la siguiente partida el peón pasado de las blancas,
ahora ya en la linea "AD".

N .o 12. DEFENSA I N DIA DE REY

Alekhine Thomas
Karlsbad, 1923.

1. P40, C3AR 4. P3CR, A2C


2. P4AO, P3 0 5. A2C, 0-0
3. C3AR, P3CR 6. 0-0, C3A

Los conocedores de la Defensa Indía, actualmente


hacen también esta jugada, sin embargo, no la unen
con la idea del movimiento . . . , P4R, sino con la jugada
. . . , P4AD. Si las negras han decidído, a pesar de todo,
jugar en el futuro P4R, entonces hay que llevar al
caballo no a 3AD, sino a 2D.

7. P50, C1 C

Era mejor ir a 4T, para después 8. D4T, continuar


8 . . . . , P4A; 9. A2D, P3C.

8. C3A, P4R

Movimiento prematuro, que dío a las blancas la posi­


bilidad de crear una fortísima presión en el centro y
en el flanco de dama. Mejor es jugar 8. CD2D y
después 9 . . . . , P4TD y 10 . . . . , C4A.

9. P x P a.p. !, PxP 1 0. . A5C, C3A


Herencia ajedrecística de Alekhine 49

Las negras no pueden impedir el cambio de los alfiles


del campo negro, ya que 10. . . ., P3TR, hubiera debili­
tado el flanco de rey.

11. 020, D1 R 1 2. TD1 D,

Previniendo la salida del alfil de dama de las negras,


porque a 12. A2D corresponde 13. P5A.

T1 e 1 4. A X A, D xA
D2A 1 S. eseR !,

Después de una cuidadosa y precavida preparacwn,


Alekhine se lanza al ataque del centro enemigo. Cierta­
mente, en este momento nada urgente, de importancia,
amenaza a las negras, pero tienen que terminar el
desarrollo de las piezas y esto permite a Alekhine
buscar objetivos concretos de ataque.

1 S. . . ., P4R

. La jugada 15 . . . . , P3TR, debilitaba el flanco de rey, y


el desarrollo del alfil en 2D permitía a las blancas efec­
tuar la incursión de la caballería en el otro flanco:
16. C5C, TD1A; 17. C4D, con perceptible contrapeso.

1 6. eso, eso 1 7. P3R, e3A


50 A. Kotov

Y, en caso de retirada a 3R, el avance del peón AR


era fuerte. Por ejemplo, 17 . . . . , C3R; 18. P4A ! , C X CR ;
1 9 . P X C, C X C ; 20. A X C + , R1T ; 2 1 . T x T + , D x T ;
22. T1AR, y las blancas ganan.

1 8. P4A!, ASC 1 9. TDl R, TDl R

En el resultado de la operación de posición, comen­


zada por la jugada 15. C5CR, las blancas han conseguido
el dominio del importante punto 5D y han distribuido
sus piezas y peones en el centro, con lo que controlan
o dominan todos los puntos importantes. Esta situación
permite a Alekhine empezar el asalto con los peones
en el :flanco de dama, cohibiendo, más todavía, a las
piezas negras.

20. P4CD !,

Incluyendo en el ataque el peón del :flanco de dama.


La amenaza P5C no puede ser rechazada, tal es la forma
con que las blancas echan al caballo de la casilla buena
3A y abren camino al alfil 2C hacia la debilitación
en 7CD.

20. . . ., P3TR

Las negras no han resistido y no quieren sufrir más


Herencia ajedrecística de Alekhine 51

al caballo 5C, colocado en las mismas puertas de su


campo.

21 . CxC+, TxC 23. PSC, Cl O


22. C4R, TRl A 24. PSAO !,

Más fuerte que la rápida toma del peón 24. D5T, a


lo que las negras responden 24. . . . , P X P; 25. PC x P,
A4A; 26. C2A, A3R, con contrapartida.

PO x P 26. P4TO, P3A?


Al A

Las blancas tienen una posicwn significativamente


mejor, pero hasta la victoria falta mucho todavía. Refor­
zando metódicamente su posición con las jugadas 26. . . . ,
R2T; 27. . . . , T2R y 28. . . . , T AlR, las negras podían contar
con la realización de la contrapartida por la línea "R"
o, en último caso, provocar la simplificada defensa del
cambio de torres. El descuidado movimiento del peón per­
mite a las blancas aprovechar el punto débil 6D para la
invasión y, al mismo tiempo, les ofrece la posibilidad de
crear el peligroso peón pasado.

27. 060 !, P3C

Amenazaba 28. D8C.

28. C4R, PR x P

Era obligado, ya que a la natural 28. . . . , PA X P


correspondería 29. PA X P, con l a enorme amenaza 30.
C6A + .

29. PCO x P,

¡ Lejos y bien calculado ! Las blancas crean un fuerte


peón pasado y, basándose en su enorme fuerza, cons­
truyen los planes para un asalto definitivo.

29. . . ., T3R 30. 050, R2T

Es preciso evitar la ligazón, ya que amenaza 31. A3T.


52 A. Kotov

31. C6D!,

"Jugada ganancial, cuyas variantes hubimos de ver


en 12-13 futuras jugadas".-Alekhine.

31. ... , A3T!

Fortísima defensa. En caso de 31. . . . , D2AD, la


jugada 32. T1D! conservaba un peón de más y daba una
ganancia sin complicaciones.

32. TxP, TxT 33. PCxT, D2R

Thomas no encuentra mejor defensa. Después de la


correcta 33 . . .., D6A el camino hacia la victoria hubiera
sido muy tortuoso. Alekhine dice que había examinado
las siguientes posibles variantes: 33. . .. , D6A!; 34. T1D!,
TXP (Si 34. . .. , DxP+,entonces 35. R1T, y las blancas
ganan) ; 35. D2D!, DxD (ó 35. . . . , D4A; 36. D2AR); 361
TXD, T6AD; 37. C4R!, TBA+; 38. R2A, CxP; 39. T7D+,
R1C!; 40. C6A+, R1A; 41. A5D, C2R; 42. TBD+, R2C;
43. C8R+, R2T; 44. T7D, T7A+; 45. R3A, T7R; 46. A4R
y ganan.

34. TlD, TxP 36. DSR!,


35. C4R!, C3R
Herencia ajedrecística de Alekhine 53

Las negras no tienen defensa contra la amenaza 37.


T7D y 37. C6A+.

36. ... , T6D 39. C5D+ , D2CR


37. TxT, AxT 40. DxC,
38. C6A+ , Rl T

Las negras se rinden.


La solución de la partida siguiente fue decidida por
un peón pasado en el flanco de dama, secundado por
dos alfiles de Alekhine.

N.o 13. GAMBITO DE DAMA ACEPTADO

Tinner Alekhine
Podebrad, 1936.

l. P4D, P4D 3. C3AR, P3TD


2. P4AD, PxP 4. P3R, A5C

Esta variante es un invento de Alekhine.

5. AxP, P3R 7. D3C, T2T


6. P3TR, A4T
54 A. Kotov

Aquí la torre, naturalmente, permanece pasiva. Sin


embargo, las negras en el futuro la hacen activa, ade­
lantando los peones del flanco de dama.

8. P4TD, CJAD 10. AJA,


9. A2D, CJA

Maniobra lenta y sin finalidad. Correspondía o deci­


dirse a la debilitación del flanco de rey después de
10. 0-0, AXC; 11. PXA, o retroceder 10. A2R.

C4D 12. PxC,


W: CD2D, CxA

Las blancas se conforman con cambiar su segundo


alfil, ya que, después de 12. DxC, A5CD, retrocederían
más todavía en el desarrollo.

12. ..., C4T 14. DxC, AJO


1J. D2T, CxA

En nuestra publicación, en tiempos, figuraba la afir­


mación de que los fundadores de la escuela ajedrecista
rusa M. I. Chigorin y A. A. Alekhin, no ·reconocían la
supremacía de la pareja de alfiles, que incluso preferían
tener dos caballos en la lucha contra los alfiles. Ya de­
cíamos también que tal afirmación no estaba funda­
mentada. Tanto Chigorin como Alekhine, ajedrecistas
de gran clase, comprendían la fuerza de los dos al.files,
en la mayoría de los casos apareciendo como más
fuertes que dos caballos. Sin embargo, afirmaban y
demostraban en la práctica que la fuerza de los alfiles
depende de la posición, que en la situación concreta
actual puede suceder así, que los caballos aparecen como
piezas más peligrosas, convincentemente por encima de
un par de alfiles amenazadores en otra situación. En
esta partida, Alekhine aprovecha muy artísticamente la ·

fuerza de sus dos alfiles.

15. T1CD, O-O 17. T2C, PJAD


16. O-O, AJC 18. DJC,

Más fuerte 18. T1T, entorpeciendo por ahora el mo­


vimiento del PCD.
Herencia ajedrecística de Alekhine 55

P4C 21. T1-2T, A2A


�=: P4A, T2C 22. 010,
20. TlT, T1C

Es una equivocación deshacer las apretadas filas en


el flanco de dama y facilitar el futuro movimiento de
un peón pasado. Era mejor 22. PTxP, PTxP; 23. D3A,
con tal de que si se presenta el momento saltar con el
caballo 2D a través de 3C a 5A.

22. .. . , A6D! 23. PAxP,

De todos modos no correspondía someterse con tanta


sumisión a la voluntad del enemigo. 23. DlAD mantenía
aún la tirantez.

PAxP 25. 02R, 030


A3CR 26. C20-3A, PSC!

El peón pasado de las negras se lanza hacia adelante.


Con la amenaza del futuro movimiento, inmoviliza las
piezas del enemigo y permite a las negras reforzar más
la efectividad del movimiento de sus piezas.

27. C30, ASR 29. C3C,


28. CSAO, A4D
56 A. Kotov

No se puede retroceder con la torre a lT, ya que


entonces 29. AXC y 30. ... , D7T+, se gana la torre.

29. , TR1A 32. TC2A, TxT


30. Tl T, P4TD 33. OxT, 020!
31. T1AO, A3C

Una fina maniobra. Las negras obligan al enemigo a


desblocar el peón 5C, después de 34. C5A, AXC; 35.
PXA, P6C o ceder la línea abierta "AD".

34. P4R, AxC

Uno de los viejos maestros, señaló de forma muy


aguda que lo "principal" de la supremacía de los
dos alfiles, consiste en que uno de ellos siempre puede
ser cambiado. (Es preciso comprenderlo así: que ante
el cambio se conquista la supremacía, desde otro punto
dE vista).

35. OxA, T1AO 37. OxT, P3T


36. T4A, TxT 38.- P50,

No se puede contener al mismo tiempo el peón 4T,


el peón 4D y la línea abierta.

38. ..., OxPT 39. OSA + ,

Completamente mal: 39. PxP, DBD+; 40. R2T, D3D+.

39. . , R2T 41. OxPA, OST +


40. o7c, A10 42. R2T, D3A
(Ver diagrama siguiente.)

Los unidos peones pasados de las negras, les traen


fácilmente la victoria.

43. 070, P6C 45. ose, PxP


44. P4T, P7C

Las blancas se rinden.


En las dos siguientes partidas, la vida de los peones
pasados era corta, sin embargo, durante el tiempo que
Herencia ajedrecística de Alekhine 57

existieron, Alekhine logró aprovechar s u papel en el


ataque y conseguir un decisivo contrapeso.

N.o 14. DEFENSA INDIA DE DAMA

Alekhine Keres
Munich, 1942.

l. C3AR, C3AR 5. A2C, A2R


2. P4AD, P3CD 6. 0--0, O-O
3. P4D, A2C 7. P3C,
4. P3CR, P3R

Modesta continuación, después de la cual la jugada


7. . . . , P4A daba a las negras una completa igualdad.
El gran maestro Keres escoge una continuación más
complicada.

7. ... , P4D 10. C2D, TlA


8. CSR, P3A 11. TlA, P4A
9. A2C, CD2D 12. P3R,

.Allte tan modesta realización, a las blancas les resulta


difícil contar con la supremacía en el centro, antes era
preciso ocuparse del enérgico paso P4R. Nada amenaza
58 A. Kotov

ahora a las negras, sólo tienen que estudiar ordenada­


mente las posibles variantes, unidas al cambio de peones
en el centro.

12. . . ., T2A

Maniobra típica para tales posiciones, que presiona la


linea "AD" y la diagonal TR-TD .

13. D2R, D1T 14. PxPD, CxP

Las dos últimas jugadas de las negras no merecen


aprobación. Si no querían estar con el peón en 4D,
entonces les correspondía retroceder con la dama no
a lT, sino antes a lC (para defender la torre 2A)
y solamente después de TlA-lAD jugar DlT. La pér­
dida de un tiempo no hacía un gran papel. En seguida
las negras se vieron obligadas a atacar con el peón
en 4D, ya que después de la toma por el caballo, la
iniciativa de las blancas en el :flanco de dama se hace
desagradable.

15. P4R, C4-3A

16. P4CD!,

Aprovechándose de la indefensa torre 2A, Alekhine


realiza un peligroso movimiento de lejano avance con
el peón 5C.
Herencia ajedrecística de Alekhine 59

16. ., TRlAD 18. PSC, P3TD


17. PDxP, PxP

Es un camino arriesgado. Las negras, esperando apro­


vechar la debilidad del peón, están conformes con
hacerlo pasado, pero cuentan con una concreta Vúriante.
Ciertamente que ya no existe un camino satisfactorio
para ellas, porque amenazaba el rápido y desagradable
movimiento del peón 2TD.

19. P4TD, PxP 20. PxP, D7T?

Es un error que conduce a la pérdida de la calidad,


sin embargo, ya sin eso la posición de las negras,
uniendo a sus desgracias la cesión de la línea "TD",
permanecía difícil.

21. C5R-4A!,

Amenazando tomar la dama y obligándola a retroceder


rápidamente.

21. ..., DlT 22. AxC!,

La persecución del derrotado enemigo de Alekhine se


lleva con una energía y continuación habituales en él.
Atacar en 6A solamente se puede con el peón, en evita­
ción del decisivo golpe del caballo 4A en 6C o 60.

22. .. . , PxA 23. P6C,


(Ver diagrama siguiente.)

Ahora, sacrificándose, el peón 6C ofrece a su campo


la posibilidad de lograr la supremacía material.

T3A 27. PxP, AxP


��: '
¡;sR, TxP 28. C4R, A2R
25. CxT, CxC 29. D4C + , RlT
26. AxA, DxA 30. D4A,

La calidad de más es una ventaja para el ataque a


la debilitada posición del rey de las negras y ofrece a
Alekhine la posibilidad de terminar la partida en el
transcurso de las próximas jugadas.

30. ..., AlA 31. CxP, D2A


60 A. Kotov

Claro está que no conviene tomar el caballo 5A a


causa de la toma de la torre en 5A y el siguiente jaque
en 4D 6 5R.

32. CxP, DxD 33. CxD,

Las negras se rinden.

N.o 15. DEFENSA INDIA DE DAMA

Alekhine Colle
Scarborough, 1926.

l. CJAR, CJAR 5. P4D, A5C +


2. P4A, PJR 6. CD2D, 0-0
3. PJCR, P3CD 7. PJTD, A2R
4. A2C, A2C 8. 0-0, P4D

Más sencillo 8. . .., P4A con cambios en el centro y


completa igualdad de fuerzas.

9. P4CD, P4TD

Aquí .. . , P4A hubiera sido mucho más fuerte. Negán­


dose a cambiar los peones blancos del flanco de dama,
Herencia ajedrecística de Alekhine 61

en el futuro Colle aguanta de ellos muchas cosas des­


agradables.

10. PSC, P4AD

Esta jugada aquí está fuera de lugar. Una continua­


ción correcta era 10 . . . . , P3AD!; 11. C5R, D2A con los
subsiguientes cambios de peones y liberación.

11. A2C, CD2D 13. P3R, T2A


12. CSR, TlA 14. PAxP, AxP

Como en la partida precedente, el enemigo de Alekhine


permite a las piezas blancas que irrumpan en su campo.
Indudablemente más posibilidades de defensa dejaba 1 4.
.. ., PRXP.

15. C6A!, AxC 16. PxA, C1C

El peón 5C ha irrumpido en el campo del enemigo y,


sacrificándose, ayuda a sus piezas a llevar a cabo un
ataque decisivo.

17. PxP, AxP 19. AxC, PxA


18. ASR, A3D

Forzoso, ya que a 19 . . . . , DXA? corresponde 19. C4R.


62 A. Kotov

20. D4C + ,

Para alejar al rey de las negras del centro, l a medida


-como se verá después- no es mala.

20. . . . , R1T 21. D4TD!, D2R

El peón 6A ha limitado en tal extremo el movimiento


de las piezas negras, que ni una de éstas puede salir
del estrecho círculo orgánico de las tres últimas hori­
zontales.

22. C4A, A4A 25. DxA, CxP


23. DSC, TR1A 26. AxC, TxA
24. CxPC, AxC 27. DxP,

Este es el resultado de la operación comenzando por


la jugada 15. C6A! Las blancas reciben un peón de
más y pese a algunas dificultades técnicas, llegan a la
victoria. Detalles sobre parecidos finales, los conocerá
el lector en el capítulo relativo a las piezas pesadas del
final de partida.

T4A 32. D7D!, DxD


��: o4c, D2A 33. TxD, R2C
29. P4TD, T1T 34. PST, T1-5C
30. TR1D, TSA 35. P6T, TSTD
31. DSC, T1CD 36. T7-1D,
Herencia ajedrecística de Alekhine 63

Las negras se rinden.

Desde el punto de vista de los temas examinados por


nosotros, ofrece un gran interés la próxima partida, en
la que Alekhine combinó el ataque en el centro basado
en la fuerza del peón pasado y los golpes tácticos en el
flanco de rey.

N.o 16. APERTURA RETI

Sajtar Alekhine
Praga, 1943.

1. C3AR, C3AR 4. A2C, C3A


2. P4A, P3R 5. P3R, P4D
3. P3CD, P4A 6. P4D,

Variante conocida que no aporta ninguna ventaja para


las blancas. Su última jugada es casi obligada, ya que
de otra forma las negras llevarían el peón a 5D y se
hubieran apoderado de la iniciativa en el centro.

6. PxPD 7. CxP,

A la toma con peón hubiera correspondido un des­


agradable jaque con el alfil en 5C.

7. ..., A5C +

Y ahora esta jugada resulta peligrosa. Las blancas


tienen que conformarse con el cambio del importante
alfil 2C, ya que a 8. C3 A es desagradable 8. . . . , C5R.

·
8. A3A, AxA + 11. PxP, PxP
9. CxA, P4R 12. A5C + , A2D
10. cxc, PxC 13. AXA + , DxA

"En la situación resultante de la presente partida, las


posibilidades de las blancas están en el contrapeso de
sus peones en el flanco de dama que, en el final de
partida pueden resultar peligrosas para las negras. Las
posibilidades de las negras consisten en pasar en el
momento oportuno su peón central "D" que puede re­
sultar una seria presión en la posición del enemigo en
64 A. Kotov

medio del juego. Consecuentemente, mientras tanto, las


blancas deben procurar la simplificación del juego y la
táctica de las negras debe consistir en desviar los futuros
cambios" .-Alekhine.

14. 0-0, O-O 17. TOl A, T3A


15. 030, TRl D 18. P3TR, P3TR
16. TR1D, TOl A 19. C2R, T3D!

Las maniobras de ambos enemigos en las últimas


jugadas eran naturales y no precisaban explicaciones. Con
su última jugada, en correspondencia con el plan gene­
ral de juego, Alekhine declina el cambio de torres y se
prepara a mover el peón central.

20. T2A, C5R 21. P3A,

Es preciso tomar ya medidas urgentes. La situación de


las negras en el centro es hasta tal punto fuerte que
sin ningún riesgo pueden permitirse salidas en el flanco
de rey. Amenazaba 21. . .., T3CR con ataque en el punto
7C y 6TR.

21. . . .
, C4C 22. R2T,

Nuevamente defendiéndose de la amenaza 22.


CxPT+; 23. PxC, DxP; 24. R2A, P5R con un ataque
decisivo.
Herencia ajedrecística de Alekhine 65

22. D2R 23. ClC,

Defendiendo el punto 3A y preparándose a 23 . . .., P5R


para contestar 24. D4D. Al mismo tiempo, las blancas
para caso de futuros acontecimientos refuerzan el
punto 3T.

23. PSD

Confiando en caso de 24. P4R recibir un peón pasado


defendiendo en el centro, Sajtar se mantiene a la defen­
siva de la mejor manera. No realiza una estructura de
la mejor manera. No realiza una estructura de peones
en el centro y espera el momento conveniente de romper
filas en la formación. Con la siguiente bonita maniobra
el campeón del mundo consigue resolver el problema de
la posición claramente en favor suyo.

24. TlR,

Parecía que todo estaba en orden, ya que a 24. ... ,


P5R corresponde 25. PXP, D4R+; 26. RlT, CXPR; 27.
C3A, D3A; 28. RlC!. y las blancas se defenderían con
éxito. Pero la siguiente jugada de Alekhine cambia inme­
diatamente todo el aspecto de la lucha.

24. . .. , TJCR!
5
66 A. Kotov

Jugada difícilmente encontrada, cuya finalidad obli­


gará a la toma en 4D. Alekhine ofrece la siguiente
posible continuación: 25. RlT, P5R; 26. PAXP, CxPR;
27. C3A, T3AD! y si 28. CxP?, entonces 28.
TXT; 29. DXT, TXC; 30. PxT, C6C+; 31. R2T, DxT
y ganan. Sin embargo, esta variante es una equivoca­
ción. Las blancas pueden jugar 28. PxP con un peón
de más. Correcto 27. ... , PxP; 28. DxP. T3R!

25. PxP, 030! 26. RlT,

Naturalmente, no 26. TXP?, DXT.

26. . ' PxP 23. TRlAD,


21. c2R, C3R

Preparándose para cambiar una torre y con esto faci­


litar el problema de la defensa. Ahora el intento de las
negras consistirá en adelantar el peón 5D en tanto que
el enemigo va a procurar bloquear este peón.

28. D4R 31. TlA, C4A


TOA,
. ' -

29. TxT 32. 020, T3D


30. TxT + , R2T

Antes de adelantar el peón pasado, Alekhine lo de­


fiende confiadamente. Sería prematura la rápida 32. . .. ,
P6D en vista de 33. C4A. T3D; 34. P4CD.

33. P4CD, C3R 35. P4TD, R2C


34. 030 + , P3C

Defendiendo con antelación el peón 2A, la medida es


completamente imprescindible en el mundo de los futu­
ros acontecimientos.

36. P5T, P3T 37. TlO,

Cambiando sus piezas pesadas para el empuje decisivo.


El intento de las blancas de trasladar ahora el caballo
a 4R después de 38. C3A sufriría el fracaso a causa de
38. ... , PxC; 39. DXT, DXD; 40. TxD. P7A y la aparición
de una nueva dama de las negras es inevitable.

38. D4R, 030! 39. P4A,


Herencia ajedrecística de Alekhine 67

Es imposible prevenir en seguida dos amenazas 39.


... , P6D y 39. ..., T4R ya que 39. elA, T4R; 40. Dle
sería demasiado pasivo .

39. ... , P6D 41. DSR + , DxD


40. C3A, TSD 42. PxD, CSA

Dejando escapar la oportunidad de decidir la partida


en su favor, por el procedimiento 42. ..., TxP; 43.
TxP, T6e y seguidamente T6T, TXPTD. Alekhine dice
que escogió precisamente este punto para la victoria por
su elegancia.

43. PSC!,

La única esperanza . de las blancas es el contrajuego


en el flanco de dama. ¡Pero también eso está previsto
por el campeón del mundo!

43. C7R! 44. ClC,

Resultaba un bonito final después de 44. PXP, eXe;


45. P7T, exT!; 46. P8T(D), P7D, y las negras vencen.

44. ..., PxP 45. P6T, TSTD

Hubiera sido más flojo 46. ..., esA en vista de 47.


68 A. Kotov

C3A! Ahora resulta un final de partida con un peón


de más para las negras y, por otro lado, el peón 5R
del enemigo es débil. Alekhine juega con exactitud el
final de la partida.

46. TxP, TxP 50. R2A, CSA


47. T2D, C6C + 51. T4D, T7T +
48. Rl C, P5C 52. R3A, CxPC
49. T3D, C7R + 53. TxP, C8R + !

Gana otro peón más, lo cual obliga al enemigo a


reducir su resistencia. Si ahora 54. R4C, entonces 54.
... , T7C+; 55. R4A, C6D+; 56. R3A, T7A+; 57. R3R,
CxT; 58. RXT, C6D+; 59. . .., CXP.

54. R4R, T7R + 55. R5D, TxP +

Las blancas se rinden.

Aunque en la siguiente partida Alekhine no consiguió


la victoria, de todos modos en el transcurso de la larga
lucha su peón pasado central producía al enemigo muchas
preocupaciones y nerviosismos.
Herencia ajedrecística de Alekhine 69

N.o 17. DEFENSA ESLAVA


Alekhine Bogoljubov
25 partida del match, 1929.

l. P4D, C3AR S. A3D, CD2D


2. P4AD, P3A 6. CD2D, A2R
3. C3AR, P4D 7. 0--0, 0-0
4. P3R, P3R 8. P3CD,

Uno de los más tensos sistemas de la defensa eslava.


Las blancas desarrollan sus alfiles de tal forma que se
dirijan al flanco de rey del enemigo y luego realizan una
cruel lucha por apoderarse del campo central.

8. . . ., P3CD 10. D2R, P4A


9. A2C, A2C 11. TRlD, PxPD

Creando en campo enemigo los llamados peones ''col­


gantes" 4A y 4D. Esta estrategia se convierte en un
arma de dos filos: tiene la posibilidad de presionar con
las piezas sobre estos debilitados peones. Y las negras
al mismo tiempo corren el gran riesgo en vista de su
posibilidad de movimiento hacia adelante, lo que con el
apoyo de los alfiles y las torres distribuidas en el centro,
puede conducir a un fortísimo ataque.

12. PRxP, PxP 14. CSR,


13. PxP, TlR

La esperanza de las negras de lograr una auténtica


supremac1a por la abierta línea "D", no se realiza en
el futuro. Por eso ofrecía mayores perspectivas 14. TD1A
con la consiguiente 15. A1C.

CxC 16. C4R, D2A


��: Pxc, C2D 17. C6D,

Jugada de doble filo y muy arriesgada. Las blancas


reciben un peón pasado muy adelantado, sin embargo
las negras consiguen localizarlo. En lugar de la siguiente
jugada, no daba nada 17. C6A+, exe!; 18. Pxc, AxP;
19. AXA, PxA; 20. D5T, D3A! y la contrapartida de las
negras puede convertirse en peligrosa, por ejemplo: 21.
DXPT+, R1A; 22. P3A, R2R; 23. A6C, T1AR con ame-
70 A. Kotov

naza 24. . . ., D4A+ y 25. . . ., D4CR. Sin embargo, la más


tranquila 17. C3C, dejaba a las blancas buenas posibi­
lidades.

17. AxC 13. PxA, D3A

Las piezas blancas están agresivamente distribuidas,


pero también las negras se encuentran con un buen
contraataque, compensando plenamente el significado del
peón 6D. Comienza una complicada lucha en la que al
peón 6D le corresponde un importante papel: cohibe las
piezas del enemigo, las aísla, les impide actuar conjun­
tamente. Es curioso observar cómo en esta nada fácil
posición suya, el campeón del mundo aprovecha las
partes positivas de la situación del peón 6D.

19. D4C, P4R 21. A2R, T3R


20. D3C, TD1D 22. AJAR,

Eliminando la amenaza del punto 2C consigue la posi­


bilidad de reforzarse con la torre en la casilla 5D. Así
y todo, no obstante el esfuerzo heroico de Alekhine, su
posición sigue debilitándose de un modo sospechoso.

22. . .., OlA 24. TSD,


23. AxA, DxA
Herencia ajedrecística de Alekhine 71

Tapando la línea de acción de la dama negra en el


punto 2C.

1 24 • ... , T3C 26. TlAD, TlR?


'25. D3TR, D3A
1
i
Un error de cálculo. Las negras no se dan cuenta de
que pueden tomar sin peligro el peón 6D ya que después
de 26. . .. , TxPD; 27. TAlD y tienen la jugada 27. ...,
ClA! y a 28. D3D, T3C!; 29. AXP (29. DxT?, TXT!)
29.: . . . , TlAD y las negras, libres del peligroso peón 6D,
se encuentran mejor. Ahora, cuando en el tablero se
co� serva el peón 6D, Alekhine desarrolla un juego inge­
Ó
ni so en el centro cuya principal misión es el desvío del
peón 6D, al que inútilmente las negras evitaron trabajos.

27. TAlD, P3TR 28. P3C, Tl-3R

Parece que el peón 6D está indefenso, sin embargo


la próxima jugada de Alekhine demuestra lo con­
trario.

29. D4T!,

Ingeniosa defensa. A 29. . .., TXPD corresponde 30.


DSD+, R2T; 31. TXT, TXT; 32. TXT, DxT; 33. AxP,
DxA; 34. DXC y si las negras toman el peón 2TD,
72 A. Kotov

34... . , D8T+; 35. R2C, DXP entonces las blancas darán


un jaque continuo en las casillas 5A y 8A.

29. ... , R2T 30. D4R,

Y ahora a 30. ..., TXPD corresponde 31. AXP, TD3R;


32. P4A, CXA; 33. P5AR, C6A+; 34. DXC con un juego
equilibrado.

30. ... , DST 31. TSD-20, C4A

Mal 31. . .. , DXPT; 32. D6A, C4A; 33 D7A con la


amenaza del futuro avance del peón. La jugada con el
caballo, suprimiendo el bloqueo del peón 6D, da a Ale­
khine la posibilidad de cambiar el peón AR por el de
4A. Este cambio empeora la posición del rey de las negras
y ofrece a las blancas grandes posibilidades.

32. OSA,

Con tres amenazas: tomar el peón 2A, avanzar su


peón en 7D, y tomar el peón 4R.

32. .. ., C2D 33. _DxPA,

Las tablas en esta partida daba a Alekhine la ga­


nancia del match. Como no era para menos, realizó
una serie de interesantes complicaciones siguiendo su
regla de ·subordinación del resultado deportivo a un
principio creador.

33. . .., TC3A 35. TlAD,


34. DST, DxPA

La eliminación del peón 4A abrió para las torres


blancas el camino a la séptima horizontal.

35. ... , DxP 36. DlD!,

(Ver diagrama siguiente.)

Jugada típica de Alekhine. El inesperado retroceso


produce en seguida tres amenazas: 37. T7A, 37. AxP
y 38. TlT.

36. D4T

Mal 36. ... , D3T; 37. T7A, T2A; 38. D2A+ y 39. D6A.
Herencia ajedrecística de Alekhine 73

37. T l T, 04A 38. TxP, T2A

No pasa 38 . ..., TXPD; 39. DlC+ y 40. A3T, ganando


la calidad.

39. 04C?,

Llevando perfectamente la última parte de la batalla,


Alekhine en la falta de tiempo, ante el control, comete
una tosca equivocación. Continuando 39. D3C, TR3A; 40.
D3D+ las blancas conservan todas las posibilidades de
triunfo como en el caso 40. . . ., RlC; 41. A3T, D3A; 42.
T2A y después de 40. ... , P3C; 41. A3T, D3A; 42. T2A,
D6AR; 43. DXD, TxD; 44. TA7A.

39. . . ., T3C 40. 010, PSR!

Las negras registraron una notable actividad después


de perder el enemigo dos tiempos. Amenaza P6R descu­
briendo la posición del rey blanco.

41. 03C, T6A! 42. 050,

Se hace preciso cambiar las damas, ya que de otro


modo, después de 42. DlD, P6R; 43. A4D, TXPA; 44.
AXD, TxT; 45. DlR, CXA se pierde el peón 6D lo
que rápidamente lleva la partida a tablas.
74 A. Kotov

42. ..., DxD 44. A4D,


43. TxD, T6D

Sin darse cuenta de la muy astuta trampa del ene­


migo. Correspondía conformarse con el resultado de ta­
blas, jugando 44. T5AR, TXPD; 45. T7A, C3A; 46. AXC,
TDXA; 47. TXT, TXT; 48. T7R.

44. C3A!

Muy elegante. A la "elegante" 45. P7D corresponde


45. . .., CXT; 46. PBD(D) , TBD+; 47. R2C, C5A mate.
Ahora ya Alekhine tiene que luchar por conseguir
tablas.

45. AxC, TxT 46. A7R, TDxP

Si 46. ..., P6R; 47. PXP, T7D entonces 48. RlA!,


TxP; 49. T4T! y el peón 6D es muy peligroso.

Por eso Bogoljubov prefiere quedarse con un peón de


más, evitando con esto cualquier riesgo.

47. AxT, TxA 48. T7R, TSD

La supremacía de las negras no es suficiente para la


victoria, ya que la torre blanca está activa y su rey se
acerca al punto 3R.
Herencia ajedrecística de Alekhine 75

49. R l A, T5C 53. P4T, R2R


50. T6R, Rl C 54. RJR, P4CD
51. R2R, R2A 55. T6CD, R2A
52. T6AD, P4T

Se conforman con tablas. Las negras no pueden ir


peligrosamente con el rey al flanco de dama, ya que
entonces perecen los peones 2C y 4T. Y no tienen otro
camino para reforzar la posición.

En el contenido del párrafo estudiaremos la siguiente


partida del campeón del mundo, en la que su peón pasado
en el centro jugaba un importantísimo papel en el des­
arrollado ataque de las piezas blancas.

N.o 18. CONTRAGAMBITO BLUMENFELD

Alekhine Consultores
Santiago, 1927.

1. P4D, ClAR 3. P4A, PlR


2. CJAR, P4A

Ofrece mayores esperanzas 3. PxP.

4. P5D, P4CD 5. A5C!,

Contestación muy fuerte que deja a las blancas una


notable supremacía de posición. La toma del sacrificio
del peón es muy peligrosa para las blancas.

PRxP 9. P4R, PJT


�: Px Po, PJTR 10. P4TD!, P5C
7. AxC, DxA 11. CD2D, P4C
8. D2A, PJD

Con la esperanza de recibir el control sobre el punto


4R en calidad de compensación por la desarrollada pre­
sión de las blancas en el centro y en el flanco de
dama.

12. AJO, C2D


76 A. Kotov

Si 12. . .., P5C entonces 13. P5R!, PXP; 14. C4R y


15. CA2D con la subsiguiente 16. C4A.

13. 0-0, A2R

Y a 13 . . .., A2CR correspondería la misma ruptura en


el centro.

14. PSR!,

Sacrificando el peón las blancas consiguen una fortí­


sima presión en el centro y en el flanco de dama, cuyo
significado se refuerza con la situación de que el rey
negro "no tiene donde reclinar su cabeza", ya que
ambos flancos de las negras están bastantes deterio­
rados.

14 . . .., PxP

No se aliviaba en mucho el problema de la defensa


después de 14. . . . , cxP; 15. cxc, Pxc; 16. C4R,
D3CD; 17. P5T, D2C; 18. TR1D con peligrosísima presión
sobre las lineas centrales.

15. C4R!,

Acercándose a la realización de su gran contrapeso


de posición, cuyo significado aumenta visiblemente por
la presencia en las blancas del peón pasado 5D. Basán-
Herencia ajedrecística de Alekhine 77

dose en la fuerza de este espolón central, Alekhine des­


arrolla una incontenible iniciativa y sin esfuerzo man­
tiene la superioridad sobre las descabaladas y desunidas
fuerzas de las negras.

15. .. . , 03CO 17. TRlO, AJO


16. PST, 02A

Es imprescindible, esencialmente, entorpecer la amenaza


del futuro paso del peón a 6D; no obstante, pronto se
verá que el bloqueo del peón no es suficiente y las
blancas, con gran efecto, la hacen avanzar más lejos.

18. CA20, A2C 20. A2R,


19. C4A, AlAR

Pasando el alfil a la diagonal 3T-8A, quieren seño­


rear totalmente sobre la casilla 5A y atar definitiva­
mente las piezas del enemigo. Para debilitar de alguna
forma la presión de las piezas blancas las negras deci­
den restituir el peón sacrificado.

20. ... , P4A

Después de 20. . . . , O-O-O; 21. A4C, RlC las blancas


tenían much�s continuaciones buenas. Así, la sencilla
22. A5A colocaba al enemigo en una posición de casi
completo "zugzwang":

21. C3C, 0-0-0 23. P60, OlA


22.-0xP, RlC 24. A3A,

Las blancas tienen una posición absolutamente para


ganar aunque realizan su supremacía no del mejor modo.
Era más fuerte 24. C5T no dejando salir el alfil lA en
conformidad con la torre lT.

(Ver diagrama siguiente.)

24. ... , A2C 26. 06C, TRlC


25. AxA, OxA 27. TOlA, PSR!

Sacrificio completamente correcto, que libera a las


piezas negras. Alekhine tiene que esforzarse ahora un
poco por aquella torpeza que cometió en la jugada 24.

28. OxPR, OxO 30. RlA,


29. CxO, ASO
78 A. Kotov

También ahora el fuerte y bien defendido peón pasado


de las blancas en 6D deja a Alekhine suficiente contra­
peso para la victoria. Ciertamente para realizar la supre­
macía es necesario todavía jugar con exactitud y
orden.

30. ., TClR 33. TA2A, TSA


31. TlR, T3R 34. P3A, PSC
32. T2R, TlAR
Herencia ajedrecística de Alekhine 79

Parece que la iniciativa de las negras ha tomado


aspectos peligrosos, sin embargo, la siguiente enérgica
maniobra de Alekhine demuestra de nuevo la enorme
supremacía de las blancas, basada en el fuerte peón
pasado 6D (¡y para mayor abundancia peón de más!).

35. CR2D!, T3C 37. P3CR!, TlA


36. T7R!, RlA 38. P4A,

Un peón de más, caballos activos, mejor posición de


peones, estas supremacías son suficientes para la
victoria.

38. RlD 43. PxP, A.SD


T2R,
. 1

39. P4T 44. CxA, PxC


40. C3C, PST 45. TxP, C3A
41. TA2D, A3A 46. T4A,
42. C6C!, PxP

Las negras se rinden.

El aprovechamiento de las líneas abiertas

La importancia del dominio de la línea abierta no


necesita confirmación. Los predecesores y los contempo­
ráneos de Alekhine comprendían muy bien esto. En las
partidas de Chigorin, Steinitz, Lasker, Capablanca y
otros se tienen muchos ejemplos del artístico aprovecha­
miento de la línea abierta.
Cuando se tiene en el tablero una línea abierta y
la domina plenamente cualquiera de los contrincantes,
la supremacía de éste no ofrece la menor duda. Las
piezas pesadas del atacante tienen la posibilidad de ope­
rar por esta línea fundamental estratégica, pueden irrum­
pir a través de ella en la disposición del enemigo y
realizar allí la destrucción.
En la práctica de Alekhine aparecen muchos ejem­
plos, cuando al dominar la línea abierta pudo percibir
un contrapeso decisivo en tal o cual parte de la lucha.
Así, hemos visto en el capítulo del ataque al rey ene­
migo cómo el dominio de la línea abierta facilitaba el
desarrollo del ataque decisivo al flanco de dama. Ahora
vamos a examinar partidas en las cuales desempeñaba
un papel importante la circunstancia de que Alekhine
80 A. Kotov

logró indistintamente señorear en una de las líneas


abiertas del centro o en el ftanco de dama.
Cuando el campeón del mundo se reafirmaba sólida­
mente en una importante línea abierta, su juego futuro
transcurría en las distintas partidas por diferentes
caminos.
Veremos que algunas veces conseguía la victoria gra­
cias a la decisiva unión de las piezas del enemigo a
tiempo de ganar el peón que se encontraba en esta
vertical. En una serie de casos de presión de sus
piezas se cambiaba al rey enemigo y terminaba con
un ataque de mate. No pocas veces servían otras finali­
dades como objetivo del ataque, pero siempre el camino
de la victoria se encontraba a través del indivisible
dominio de la línea abierta y de tomarla con sus piezas
pesadas. Al examinar las partidas trataremos de descu­
brir los métodos de lucha y las sucesivas etapas de
posesión y refuerzo de las piezas activas del lado de las
líneas abiertas.
En la brillante partida que asombró al mundo en su
tiempo contra Nimzowitsch, el campeón del mundo
aprovechó artísticamente las inexactitudes en el juego de
su peligroso enemigo, se apropió. de la línea abierta en
el ftanco de dama, unió las piezas del enemigo y las
colocó en un completo "zugzwang". Esto sucedió tan
rápidamente que en la jugada 30 Nimzowitsch tuvo que
reconocerse vencido.
He aquí cómo se desarrolla esta partida.

N.o 19. DEFENSA FRANCESA

Alekhine Nimzowitsch
San Remo, 1930.

l. P4R, P3R 4. PSR, P4AD


2. P4D, P4D S. A2D,
3. C3AD, ASC

Ofrece a las negras, sin dificultad, igualar el juego.


La invasión del caballo blanco en 6D se previene fácil­
mente por las negras. A un juego más complicado con­
duce 5. P3TD ó 5. D4C.

C2R 7. DxA, 0-0


�: ese, AxA+ 8. P3AD, P3CD
Herencia ajedrecística de Alekhine 81

Una seria equivocación. Las negras estaban obligadas


a no dejar llegar el caballo blanco a 60, lo que se con­
seguía con la jugada 8 . . .., C4A. Después de esto las
negras tienen todos los derechos del juego, en tanto que
ahora Alekhine consigue hacerse con una seria posición
de contrapartida.

9. P4AR, A3T

Esperando después de P4TD, llevar a cabo la maniobra


... , CD3A-4T. Sin embargo, Nimzowitsch no consigue rea­
lizarlo por el fino y estratégico ataque de las blancas
en la jugada 12.

10. C3A, 020 12. P4CD,


11. P4TD, COJA

Excelente estrategia, que conduce al bloqueo del flanco


de dama. Interesante la reseña de Alekhine a esta
jugada, caracterizada no sólamente desde su punto de
vista de las ideas estratégicas de esta partida, sino como
muestra de rigor en la apreciación de sus propias
partidas.
"Resulta bastante extraño -escribe Alekhine- que
esta jugada más o menos dictada por las circunstancias
(a las cuales las blancas entorpecen con la maniobra
C3AD-4T y al mismo tiempo forzando la aclaración de
la posición en el centro) aparecía como una sensación
original. Tarrasch, por ejemplo, lo llamaba en sus anota-
'
82 A. Kotov

ciones a esta partida "altamente original". Personal­


mente me parece extraordinaria no la jugada en sí, sino
que un ajedrecista de la clase de los grandes maestros
del juego ni siquiera examinara la seria posibilidad de
tal contestación, cuando pensaba en el plan que comen­
zaba con la jugada 8. . .. , P3CD".

12. . . ., PxPC 14. C6D, P4AR?


13. PxP, A2C

Nimzowitsch recela del ataque en el :flanco de rey y


por eso previene el desarrollo en esta parte del tablero.
Entre tanto, le correspondía preocuparse en conseguir
más libertad de movimiento para sus dos piezas. Esto,
en cierta medida, se lograba por el procedimiento 14.
. . ., P4TD 15. P5C, C5C ó 15. A5C, PXP y en ambos casos
las negras encuentran puntos de apoyo para el caballo
en el :flanco de dama. Ahora, sus piezas aparecerán rápi­
damente relegadas a una posición pasiva en las dos
últimas horizontales.

15. P5T!,

Aprovechándose de que el enemigo no puede atacar


este peón a causa de 15 . ... , PxP; 16. P5C!, Alekhine
inmoviliza plenamente las piezas del enemigo.

15. ..., C1A

Esperando conseguir, por lo menos, un resultado estra­


tégico positivo, suprimir el caballo 6D. Sin embargo,
este consuelo se retrasa y rápidamente se cambia por
mayores amarguras.

16. CxA, DxC 18. A5C,


17. P6T, D2AR

(Ver diagrama siguiente.)

El comienzo del ataque decisivo por la única línea


abierta "AD". Las negras no pueden oponer nada al
plan premeditado de la esforzada presión de las piezas
blancas.

18. ... , C1A-2R


Herencia ajedrecística de Alekhine 83

El retroceso del caballo 3A no era una salvación en


vista de la irrupción de las piezas blancas pesadas en
los puntos 6A ó 7A.

·19. 0-0, P3T

Tarde o temprano hay que prevenir el salto del


caballo blanco a 5C. Si las blancas en seguida hubieran
tomado medidas para resistir hasta el fin en la línea
"AD", de todas formas hubieran perdido allí la batalla,
en vista de la poca distancia para las maniobras de
sus piezas.

20. TR1AD, TR1A 21. T2A, D1R

Moviéndose voluntariamente hacia la mortal unión


en la que las negras perecerán pronto; por otro lado,
ya no había defensa. En �aso de 21. ..., ClD corres­
pondería 22. TDlAD, TXT; 23. TXT, TlA; 24. TXT,
ex T; 25. D3A y las negras se ven obligadas a dejar
pasar a la dama blanca a 7A, que era igualmente
funesto.

22. TD1AD, TD1C 24. T3A!,


23. D3R, T2A

Es de Justicia. decir que las blancas podían haber


organizado sus piezas una jugada antes. Además, no
84 A. Kotov

tienen por qué darse prisa, el enemigo de todas for­


mas no puede eludir la completa ligazón de sus
piezas.

24. ... , 020

Desesperante intento de reforzar su situación, lla­


mando al rey en su ayuda. Pero ni esta medida extrema
sirve de ayuda.

25. Tl-2A, RlA 24. A4T!,


26. OlA, TOlA

Conduce a una ganancia material. Cabe defenderse de


P5C únicamente cediendo el peón.

27. ..., P4CO 29. A4T, RlO


28. AxP, RlR

El movimiento del peón "CD" no da nada ahora, pero


Alekhine, con una sencilla maniobra, confirma la abso­
lutamente desesperada situación del enemigo.

30. P4T!,

Las negras no pueden mover ni una pieza para no


perder inmediatamente el caballo 3A después de la
jugada P5C, de las blancas. Las blancas esperan tran­
quilamente mientras terminan las jugadas de los peones
Herencia ajedrecística de Alekhine 85

del enemigo, que a causa del "zugzwang" se verá obli­


gado a ir a futuras pérdidas materiales. Sin esperar
este desagradable momento, Nimzowtsch se rinde en
seguida. Posición clave, que se muestra en el diagrama
y ensefia el triunfo completo de la estrategia de las
blancas, la lógica conclusión de su ataque al flanco de
dama con aprovechamiento de la única línea abierta.

De un modo preciso y convincente, Alekhine realizaba


su supremacía en la siguiente partida. Consiguió refor­
zarse en bloque sobre la única línea abierta en el centro
del tablero, lo que le valió la victoria.

N.o 20. DEFENSA FRANCESA

Winter Alekhine

Nottingham, 1936.

1. P4D, P3R 4. A3D, C3AD


2. P4R, P4D 5. C2R, A3D
3. PxP, PxP 6. P3AD, DST!

Las piezas negras ya están más activamente destri­


buidas, como consecuencia de la apertura de las blancas,
floja y sin iniciativa. Con la salida de la dama, las negras
entorpecen al enemigo el cambio del activo alfil 3D
por el procedimiento 7. A4AR.

7. C2D, ASCR!

Sacrificando el peón después de 8. D3C, 0--0--0; 9.


DXPD, C3A, con tal de recibir a cambio de esto el dar
un fuerte ataque, que será muy difícil de rechazar a
causa del atraso y desarrollo de las piezas blancas.

8. D2A,

Winter actúa sensatamente, rechazando admitir el


ofrecido presente.

8. . . ., 0-0-0 10. A3R, CR2R


9. C1A, P3CR
86 A . Kotov

Preparándose a cambiar la única figura activamente


dispuesta de las blancas, el alfil 3D.

11. �' A4AR 13. OxA, P3TR


12. C1A-3C, AxA

Asegurándose de antemano de la amenaza 14. D2D.

14. P4AR?,

Una seria equivocación de posición. Winter, sin nece­


sidad, debilita la casilla 3R en la única vertical abierta,
y se priva de las posibilidades de organizar la resis­
tencia en la lucha por el dominio de esta vertical.

14. . . ., OSC!

El comienzo de la lucha por la casilla 4AR, punto


clave en las futuras maniobras de las negras por el
dominio de la línea abierta.

15. P3TR, 020 16. TR1A,

Esperando todavía realizar 17. P5A y a continuación


despejar un poco la distancia para la maniobra de sus
piezas. Alekhine demuestra claramente lo infundado de
estas esperanzas.
Herencia ajedrecística de Alekhine 87

16. ..., P4TR!

Ahora a 17. P5A corresponde 17. . .., P5T; 18. P6A,


C1C; 19. C1T, T1R, después de lo cual perece el peón
blanco 6A.

17. C1C, P5T 19. C3A, P3A


18. C3C-2R, C4A

Alekhine con un juego consecuente rechaza las piezas


del enemigo a una posición pasiva y, al mismo tiempo,
despoja a las blancas de la posibilidad de reforzarse con
el caballo en la casilla 5R. Ahora comienza una conclu­
yente tanda de maniobras de presión de todas las piezas
pesadas en la línea abierta.

20. C2T, TD1R 22. C4C, TlT-lR


21. A2D, T3R

Las blancas maniobraron sin éxito (en parte, no


merece alabanzas su maniobra con el caballo desde 3A
a 4C) y no les dio tiempo de oponer nada al enemigo
en la línea "R.,. Además, ante otras jugadas, se con­
servaba también el contrapeso de las negras.

23. TD1R, TlR-2R

La maniobra de Alekhine en la partida precedente,


en aquella y en ésta la dama se convierte en la unión
de ambas torres. Tales realizaciones dan a las negras
una fuerza máxima de lucha y permite en futuras juga­
das realizar una decisiva incursión en las distribuciones
del enemigo.

24. R1D, D1R 25. D3A,

Defendiendo el peón 4A y esperando al retroceder con


el caballo 2R realizar cambios con las piezas pesadas
que aliviarían la situación. ¡Pero las negras ya están
en las puertas de la fortaleza del enemigo!.

25. .. ., C4T!

Sin hacer caso de que el peón 4D está bajo amenaza.


Además, esta expresión no es correcta, ya que Alekhine
estaba todo el tiempo pendiente de esto y como si cal­
culara que la jugada 26. DX P, no es posible a causa de
88 A. Kotov

26. . . . , TXC; 27. TXT, TXT; 28. DxC, C6C; 29. T3A,
D5R! y el ataque de las negras es irrechazable.

26. P3CD,

26. ..., CSA!

¡Sencillo, pero elegante sacrificio! En caso de 27.


Pxc, las negras dan mate al rey enemigo por el pro­
cedimiento 27. . .. , D5T+; 28. RlA, A6T+; 29. RlC,
T3C+ ;30. RlT, D7A con el inevitable mate en dos juga­
das. El rechazar el sacrificio tampoco salva a las negras,
porque ahora la invasión de las piezas negras se hace
decisiva.

27. AlA, CD6R+ 29. CxC, TxC


28. AxC, CXA+ 30. D2A, D4C

Todas las respuestas de las blancas eran forzadas. La


amenaza del mate en dos jugadas (31. ... , D6D+ y
32. ..., A6T) obligan a Winter a entregar el peón.

31. ClA, TxPA 33. DlR, R2D


32. TxT, AxT

No se puede tomar la torre en vista de 34. ..., D x T+


y 35. ..., DXPA. La situación de las blancas es deses­
perada.
Herencia ajedrecística de Alekhine 89

34. PSA, T6R 36. TlR, TSR


35. D2A, P4C 37. TxT,

Se apresura el fracaso. Pero en la futura maniobra


pasiva, por lo visto, las blancas no tuvieron paciencia.

37. . . ., PxT 38. R2D, A3D

Amenaza la elegante 39. P6R+!

39. R2A, ASA

Las blancas se rinden.

La partida examinada aparece como típico ejemplo


de la lucha por el dominio de la única línea abierta
en el tablero y de las siguientes buenas medidas de su
aprovechamiento. Hemos visto cómo Alekhine, con ma­
niobras preliminares, aseguró su indivisible señorío en la
línea abierta y a continuación la dominaba enteramente
levantando a través de ella sus piezas pesadas. En este
tiempo, el enemigo, no teniendo posibilidades de cambiar
las piezas pesadas, procuraba entorpecer a Alekhine el
aprovechamiento de la ganada línea abierta, reforzado
en las casillas donde podrían irrumpir las piezas pesa­
das de las negras. Entonces Alekhine _procedió a realizar
la siguiente parte de su plan de ataque. Maniobrando
con las piezas ligeras se aseguró el dominio sobre el
punto de ataque por la línea abierta , en el presente
caso la casilla 6R. Encadenadas por la defensa, las
piezas blancas no podían oponer nada en esta operación
del enemigo, ya que sus propias fuerzas estaban divi­
didas en dos campos separados por las mortales piezas
pesadas de las negras organizadas en la única línea
abierta .

. Duefio de los campos de invasión, Alekhine procedió


a la realización de la parte esencial de su plan de ataque.
Al irrumpir, las piezas negras empezaron a perseguir al
rey enemigo en su propia huida hasta el momento en
que las blancas se vieron obligadas a ceder el peón, que
no las libraba enteramente del fuerte ataque de las
piezas del enemigo. Unas cuantas jugadas más y Winter
se vio obligado a capitular. Vemos de esta forma que
el plan de la lucha por el dominio y el aprovechamiento
de la única linea abierta se compone de tres etapas:
90 A. Kotov

l. La conquista de la línea abierta. 2. La lucha por la


conquista de los puntos de invasión por esta línea abierta.
3. La persecución del enemigo que retrocede y la reali­
zación de alcanzar la supremacía.
La partida examinada resulta típica para semejantes
casos de juego por la única línea abierta. Ahora exami­
naremos otros ejemplos, cuando la presión de las piezas
por la linea abierta daba posibilidades a Alekhine de
transformar su ataque al rey enemigo o en otra parte
de la lucha ajedrecística.

N.o 21. DEFENSA PHILIDOR

Evenson Alekhine

Kiev, 1916.

1. P4R, P4R 4. CJA, CD2D


2. C3AR, PJD S. A4AD, A2R
3. P4D, CJAR

Jugadas teóricas conocidas en la defensa Philidor. La


práctica ha demostrado que el sacrificio del alfil en 7 A
en la posición dada no aporta nada a las blanca::;.

6. G--0, 7. PxP,

Libra a las negras de cualesquiera dificultades de aper­


tura. Más fuerte 7. D2R, P3A y la situación de las
negras queda para mucho tiempo incómoda. Ahora Ale­
khine consigue rápidamente apoderarse del punto 5D
lo cual, análogamente a muchas posiciones de la defensa
Nimzoindia, da en seguida a las negras un excelente
juego.

PxP 10. D2R, C4A


�: ASCR, PJA 11. C1R,
9. P4TD, D2A

"Las blancas, sin ser imprescindible, pasan a la


defensa. Por el procedimiento 11. TlD con el consi­
guiente conjunto de las torres por la vertical "D", pro­
bablemente hubieran igualado el juego. En general,
llevar al caballo a la primera horizontal donde perturba
Herencia ajedrecística de Alekhine 91

la correlación de las torres, puede permitirse únicamente


en casos excepcionales".-AZekhine.

11. .. . , CJR 13. 010,


12. A3R, C50!

Si 13. AXC, PXA; 14. C1C, entonces 14. ..., A3D; 15.
P3CR, A6TR; 16. C2C, TD1R y las negras tienen una
importante supremacía de posición.

13. .. . , TlO 15. AxA, CxA


14. C30, A3R

El desarrollo de piezas de ambas partes está termi­


nado. Como resultado de la apertura, las negras han
recibido una destacada supremacía: señorean en la única
linea abierta, sus piezas están distribuidas más activa­
mente, las negras controlan plenamente el importante
punto central 50, mientras las piezas blancas no tienen

posiciones de apoyo en el centro del tablero. La siguiente


parte de la partida, la pasa Alekhine de acuerdo con
los sencillos y claros problemas, que surgen de las fun­
damentales exigencias de la posición, se reafirma con sus
piezas en la única línea abierta "D" y con cada jugada
refuerza la precisión por la línea abierta. Las blancas no
tienen nada que oponer a un plan tan bueno y estra-
92 A. Kotov

tégico, y se rodean con maniobras pasivas de defensa.

16. DIR, T2D!

Es el comienzo del absoluto dominio de la línea "D".


Las blancas no pueden realizar ahora la actividad en
el centro por el camino 17. P4A ya que a esto corres­
ponde 17. . . ., C5C y les resulta imposible jugar 18. P5A
a causa de 18. . . ., TXC; 19. PXT, CXA! 20. DxC, A4A.

17. P3A, TD1D 19. C2R, P4AD


18. A2A, C4T 20. P3CD,

No daba nada el intento de conquistar el punto 5D


porque después de 20. C3A, P5A; 21. C5D, D3D; 22. ClA
correspondía 22. . .. , CT5A y el caballo blanco huía de la
importante casilla central o era cambiado.

20. ... , CTSA

Maniobra típica, análoga a la jugada del caballo


negro en 5AD en la partida anterior. Alekhine, después
de conquistar enteramente la linea abierta en el centro,
empieza la futura limpieza de la línea de piezas blancas,
que estorban para llegar a los puntos de invasión.
Herencia ajedrecística de Alekhine 93

21. CRxC, ex e 22. CxC, PxC

Posición ejemplar. Las negras han recibido la casilla


de invasión 7D y amenazan ahora por el procedimiento
23. ..., P5A; 24. P4CD, P6A, reforzar su mando en este
importante punto de apoyo. El cambio en 5AR era pro­
vechoso a las negras también porque como resultado
habían sido suprimidos los caballos blancos que eran
bastante activos. A las blancas les quedaba únicamente
el pasivo alfil en 2A, el cual no puede oponer nada a la
actividad de su colega negro.
Ahora las blancas previenen el paso P5A, pero ante
esto debilitan otro punto en la linea 3D.

23. PlA, 04R 25. T2A, PlCO


24. T2T, T60 26. OlA, DlR!

Dominando por completo la única linea abierta, Ale­


khine comienza a llevar un plan estratégico, típico en
semejantes posiciones. Amenaza altlernativamente el
:flanco de dama y el de rey, obligando a las piezas del
enemigo a rechazarlo. Cortado en dos el campo por la
poderosa actividad de las torres negras en la linea "D",
las piezas blancas no pueden restringir la necesaria
defensa y finalmente tienen que conformarse con las
pérdidas.

27. OlC, AlA!

Activando su última pieza que todavía no ha entrado


en acción.

28. P4CO, P5A

Naturalmente, las negras no tienen necesidad de abrir


a las piezas del enemigo la linea "AD".

29. OlA, P4CR

Reforzando el punto 5AR y preparando el ataque final


en el flanco de rey.

30. PlT, A4R 31. OlT,

Inofensivo Intento de abrir la linea "TD " para sus


piezas, a la que Alekhine sencillamente no hace ni
caso.
94 A. Kotov

31 . .. . , P4TR!

¡ Victoria completa de las negras Í Su primitivo domi­


nio en la línea abierta se ha extendido a continuación
sobre ambos flancos, y la victoria de los peones frente
a la posición del rey enemigo amenaza con decidir la
partida en algunas jugadas.

32. P5T, P5C! 34. A4T,


33. PTDxP, PTxP

"Si 34. PT X P, P x P ; 35. P X P, D x PC ; 36. A x P,


entonces 36 . . . ., T7D ; 37. T X T, T x T ; 38. A2A, P6A, las
negras ganan".-AZekhine.

34. . .., P3A 35. AlR,

De otro modo, con la jugada 35. . . . , P6C las negras


hubieran excluido este alñl del juego.

35. . . ., P6C

Jugada característica. Las negras renuncian a cual­


quier tentativa de ganar el peón tomado en 6T, para
no abrir la línea a las torres enemigas. La consigna
del juego de las negras es : " ¡Nada de aperturas en
la posición! ¡ Ninguna contrapartida!". Tal estrategia
Herencia ajedrecística de Alekhine 95

es muy expresiva para la posición donde sólo hay una


linea abierta, y los estudiosos del ajedrez tienen que
dedicar a esto gran atención.

36. D6T,

La lucha se desarrolla ahora en torno a la diagonal


1CR-7T. Las negras quieren jugar P4C y seguidamente
por el camino D3C-6R irrumpir en el campo del ene­
migo. El intento de las blancas de entorpecer esta deci­
siva maniobra es fácilmente neutralizada por las activas
piezas negras.

36. . . ., D3A!

Amenazando 37. ..., TlT y obligando a alejarse a la


dama blanca.

37. D3T, P4C 39. RlT, TSD


38. D2C, D3C+ 40. TlA, D6R!

Ahora el plan de la victoria es fácil : Se precisa


cambiar la torre y colocar en la primera horizontal la
segunda torre. Después de lo cual las negras se verán
obligadas a abandonar rápidamente la partida, ya que
no están en condiciones de defender la posición en vista
de la extremadamente mala situación de su rey y, asi­
mismo, por la completa inutilidad de todas sus piezas.

41. TlT, TxT 43. TlC, TSD!


42. DxT, D7R

<Ver diagrama siguiente.)

La posición de las blancas es lamentable. Habiendo


perdido a su tiempo la posibilidad de neutralizar la
acción de las torres de las negras en la línea ""D",
sufren ahora las efectos del destructor asalto de las
piezas pesadas del enemigo, con un efecto decisivo de
irrumpir en su campo.

44. DBT+ , R2C 47. DBR+ , R4C


45. D7T+ , R3C 48. DBC+ , RST
46. D7R, DxA

Las blancas se rinden.


96 A. Kotov

De un modo análogo a los ejemplos arriba sefialados


transcurre la lucha en la siguiente partida, donde las
negras, habiéndose apoderado de la única línea abierta,
llevan la lucha de modo sistemático por la conquista de
las casillas de invasión. Seguidamente se reafirman con
solidez en la abierta vertical, y deciden el resultado de
la lucha con un enérgico ataque al flanco de rey.

N.o 22. DEFENSA PHILIDOR

BlumenjeUl Alel,hine
Moscú, 1908.

1. P4R, P4R 3. P4D, C2D


2. C3AR, P3D

Aquí era correcto 3. . .. , C3AR.

4. P3CD,

Naturalmente con tales jugadas no se puede desmentir


la apertura de las negras. Una continuación correcta
era 4 . A4AD que conservaba la iniciativa para las
blancas, ahora ya las negras terminan sin dificultad su
desarrollo.
Herencia ajedrecfstica de Alekhine 97

4. , P3AD 6. CD2D, C2R


s. Á2c, D2A 7. A2R,

La jugada 7. C4A no aporta nada. Blumenfeld pasa


por completo a una actividad pasiva. Como es sabido,
esta táctica trae pocas veces éxitos.

C3CR 9. P4TD,
�: �, A2R

Nuevamente una jugada desafortunada, las negras no


se disponían a jugar P4C, así que no hacía ninguna falta
entorpecer esto, tanto más cuanto que el caballo blanco
de todos modos no se mantiene mucho tiempo en 4A.

9. ..., 10. C4A, TlD

E n seguida con dos objetivos : Desalojar a l caballo


la casilla para la maniobra CR1A-3R y también para
estar preparados en caso de apertura de la línea '·D"
después del cambio en 4R.

11. OlA,

Conformándose inútilmente con el cambio del alfil 2R,


el cual podía prepararse tanto para la defensa como
para el ataque. Tenía que haber jugado 11 . TlR, y pre­
parar el retroceso de este alfil a lA.

CSA 14. C4T, Cl A


U: iiR, CxA+ 15. C3R, C3R
13. TxC, P3A 16. PxP?,

Decisión errónea que trae dificultades a la posición de


las blancas. Cualquier contestación, que conservara la
tensión en el centro o incluso el taponamiento del cen­
tro por el camino 16. P5D, hubiera sido mucho mejor que
la realizada por Blumenfeld, porque ahora las negras se
apoderan de la abierta línea del centro, cuando las
blancas no pueden oponer nada.

16. ... , PDxP 17. CTSA,


7
98 A. Kotov

17. . . ., ASC!

Ataque típico cuya :finalidad es debilitar el punto 3D


y hacer sitio donde se colocaran las torres negras. Las
blancas no pueden soportar al alfil en 5C.

18. P3AD,

Era forzoso, ya que de la amenaza 18. . . . , C5A defendía


únicamente 18. P3C, C4C ó 18. P3AR, lo cual estaba
ligado a una seria debilitación de la posición de enroque.
Alekhine trae la siguiente variante: 18. P3C, C4C ó 18.
P3AR, C5A; 19. T2A, A x C; 20. P X A (ó 20. C X A, A4A;
21. C3R, D3C; 22. P5T ! , A X C; 23. P X D, A X D , con un
peón de más para las negras ) ; 20 . . .. , A4A y las negras
amenazan con la desagradable jugada 21. . . ., D3C.

18. . .., CSA 20. CxA, A4A


19. T2D, AxC 21. P4CD,

Las blancas aprovechando la ocasión , arrojan este alfil


de la importantísima diagonal 1CR-7TD.

21. ..., AlA 22. TxT,

Y en caso de 22. D2A, T x T; 23. D X T, T1D y 24. . . . ,


Herencia ajedrecística de Alekhine 99

D2D, las negras hubieran sefioreado enteramente en la


línea "D".

22. .. . , TxT 24. TlAR,


23. 020, D2D

La jugada, probablemente explicable por el deseo de


conseguir libertad para la dama, encadenada ahora con
la defensa de la primera horizontal en vista de la ame­
naza de mate después de

24. ..., D6D!

De nuevo una típica invasión por la línea abierta.


A las blancas les viene mal el cambio de damas, porque
entonces surgirá la falta de defensa para la segunda
horizontal.

25. 03C + , RlT 26. CJC, P4TR

Alekhine considera que sería más exacto 26.


C7R+; 27. CXC, DXC; 28. AlA, D X PR; 29. D7A,
P4AD; 30. PXP, AXP; 31. D7A, A3C, con una fácil
ganancia .

27. AlA,

Blumerueld no se aprovecha del error de las negras.


Jugando 27. P4T! entorpecía la llegada de la ganancia
a las negras, ya que era peligroso contestar 27.
P4CR a causa de la abierta posición del rey de las
negras. Alekhine considera que a 27. P4T!, C7R+; 28.
CXC, D x C; 29. AlA, DXPR; 30. D7A, P4AD!; 31.
D x PT+, RlC, conservando todavía una posición
ganadora.

27. . . ., PST! 29. CSA,


28. AxC, PxA

(Ver diagrama siguiente.)

29. .. . , P6T!

Golpe enérgico, que destruye la posición de enroque


de las blancas y se constituye en una lógica conclusión
del plan estratégico de las negras para el dominio de la
línea abierta y el traslado del ataque al fianco de rey.
Hubiera sido más débil 29. . . ., DXPR; 30. CXPT.
100 A. Kotov

30. D6R, PxP 31. RxP,

"Si 31. TlR, entonces 31. . . ., DXPA ; 32. TlC, D7A;


33. TlR, TBD (lo más sencillo de todo) ; 34. T x T,
DXT+ ; 35. RXP, D5C+ ; 36. Rl A, AXP ; 37. DBA+,
R2T; 38. DXPC, P4T ; 39. DXPA, P6A! y las negras
ganan".-Alekhine.

31. . . ., P6A + 32. R1C, DxT +

Las blancas se rinden .

Naturalmente, no es imprescindible que el objeto final


del ataque sea el rey enemigo. Suele ocurrir que después
de irrumpir las piezas atacantes se limitan a objetivos
más modestos.

En la siguiente partida corta, la solución de la lucha


se decid� también después de que las piezas de Alekhine
con decisivo efecto se apoderan de la única vertical
abierta en el tablero. El dominio del centro permitió a
Alekhine llevar el ataque de los peones del flanco logran­
do rápidamente pérdidas materiales para el enemigo.
Herencia ajedrecística de Alekhine 101

N.o 23. DEFENSA BOGOUUBOV

Alekhine Bogoljubov
Budapest , 1921.

1. P4D, C3AR 3. C3AR, ASC +


2. P4AD, P3R 4. A2D, AXA +

"Este cambio facilita el desarrollo de las blancas. El


alfil-rey en el gambito de dama es una pieza demasiado
valiosa para cambiarla desde el principio , y encima con
pérdida de un tiempo".-Alekhine.

5. DxA, O-O 8. A3D, P3A


6. C3A, P4D 9. 0-0,
7. P3R, CD2D

Es un descuido ya que permite a las negras realizar


una importante maniobra libertadora. Era más exacto
9. T1D ! , previniendo las futuras operaciones de las
negars en el centro.

9. .. . , PxP 10. AxP, P4R!

Defensa táctica. En caso de 11 . P X P corresponde 11 .


. .. , C x P ! , con una completa igualdad en el juego.

11. A3C!,

¡Unicamente asi! Ahora las negras no pueden jugar


11 . . . . , P5R, parque entonces, después de 12. C5CR y 13.
A2A, perecerá este peón. Aquí las blancas tenían una
interesante ocasión de tomar en 7AR.
Alekhine escribe que después de 11 . A x P + , T x A;
12. P X P, C5C; 13. P6R, T X C; 14. P X C, A x P ; 1 5 .
P X T , C x PT ! (pero n o 15. . . . , D5T ?; 1 6 . D6D); 16.
R X C , las negras alcanzaban tablas con un continuo
jaque.

11. . . ., D2R

A un juego recto y ejemplar 11 . . . . , P x P; 12.


D x P, D3C, al tiempo que las blancas reciben la supre­
macía en el centro.

12. P4R!, PxP 13. CxP, C4A


102 A. Kotov

También es un error ahora y en la siguiente jugada,


tomar el peón 4R ya que, después de la jugada de la
dama en 3R, las blancas ganan una pieza.

14. A2A, TlO 15. TOlO,


Momento culminante de la primera atapa, la lucha
por la línea ahora amenaza 16. C x P.

ASC TxC, AJR


��: PJA, CJR
18.
19. TRlO,
17. 02A, exe
Aprovechando que el enemigo tenia que perder un
tiempo en sacar el alfil-dama, las blancas salieron ven­
cedoras de la lucha, por la vertical del centro. Las
negras no pueden ahora reconquistar la línea o debi­
litar la presión de las piezas blancas, ya que precisan
todavía preocuparse de la defensa del peón 2TD. He
aquí lo que escribe Alekhine sobre esta etapa del juego:

"Las negras se vieron obligadas a ceder la única línea


abierta, para desarrollar su alfil de dama. Además de
esto, los peones centrales, gracias a su movilidad, podrán
ahora atacar ventajosamente las piezas ligeras del ene­
migo.
Herencia ajedrectstica de Alekhine 103

Teniendo, pues, las negras una conocida superioridad


de peones en el flanco de dama, no juega aquí ningún
papel ya que el movimiento de peones implica la apari­
ción de nuevas debilidades que el enemigo aprovecha
para su ventaja. De hecho la partida ya está decidida."

Llamamos la atención del lector sobre cómo en lo


expresado por Alekhine se combinan armónicamente
las leyes generales de la posición y de los principios y
también lo concreto de los razonamientos. Así, en esta
partida a la jugada 4, la sostiene la importante ley
general de posición e inmediatamente insiste al acerca­
miento concreto hacia la valoración del factor posi­
cional.

19. .. ., P3CO 20. P3TR!,

Preparando el movimiento de masas de peones del


ftanco de rey.

22.
��: T4'020,
P4A
TxT
OxT, PSA?

Descabellada y absurda jugada, que no tiene ninguna


supremacía y únicamente un conjunto de defectos. las
negras ceden la casilla 5D, debilitan el peón AD y,
sobre todo, no toman ninguna medida contra el movi­
miento amenazador de los peones blancos. Era preciso
llevarse urgentemente sus piezas ligeras del camino de
los peones enemigos, jugando 22. . . . , ClR con la subsi­
guiente 23. . .. , P3A. Entonces las negras hubieran podido
presentar resistencia, mientras que ahora perecen rápi­
damente.

23. P4A, P3C

De todos modos hubiera sido mejor 23. ... , D4A + ,


aunque entonces por e l procedimiento 24. D4D 1 las
blancas cambiaban las damas, conservando un gran
contrapeso.

24. 040, TlAO


104 A. Kotov

Las negras maniobran de tal forma como si no les


amenazara nada. Y, sin embargo, la "muerte" ya está
a las espaldas. Aunque sus posibilidades ya no tienen
importancia, así y todo, continuando 24. . . . , ClR todavía
podían oponer resistencia.

25. P4CR!,
Obliga a las negras a ir a un sacrificio desesperado.
De la amenaza 26. P5A 6 26. P5R, con la consiguiente
P5A ya no hay defensa.

AxP 2s. eso, DST


��:
27.
PxA,
R2C!,
CxPC
P4TR
29. TlTR,
30. AlD,
DlD

Las negras se rinden.

En el siguiente ejemplo, Alekhine obtuvo una con­


vincente victoria, gracias a maniobras precisas por la
única vertical abierta en el flanco de dama. Sus piezas
aprovecharon· con éxito el punto de apoyo en esta vertical
por cuyo resultado el enemigo se vio obligado a permitir
la realización del peón pasado, decidiendo el resultado
de la lucha.
Herencia ajedrecistica de Alekhine 105

N.o 24. APERTURA ESPAI\IOLA

Alekhine Aficionados
Jugada en América del Sur, 1939.

1. P4R, P4R 4. A4T, C3A


2. C3AR, C3AD 5. �, A2R
3. ASC, P3TD 6. C3A,

Antigua continuación, no pocas veces empleada por


Alekhine.

6. ..., P4CD 9. P3A, C4TD


7. A3C, P3D 10. CxA+, DxC
8. eso, � 1. A2A, P4A

El cambio del caballo de dama por el alfil 2R no


aporta a las blancas ventajas especiales. La continuación
hay que considerarla ejemplarmente igualada. Sin em­
bargo, el campeón del mundo consigue pronto secar ven­
taja a sus enemigos.

12. P3D, C3A 13. P3TR, C1D

Concentrando el anhelo en 3R y 5AR contra lo que es


dificil oponerse.

14. P4TD, PSC

Y esto era mejor no hacerlo, toda vez que las negras


tenían una buena oposición 14. . . . , TlC. Por la abierta
linea "AD", Alekhine desarrolla pronto una fortísima
presión adelantando, en la toma de la vertical, a sus
lentos competidores.

15. . PxP, PxP 18. C4T, P3C


16. P4D, P4TD 19. A6T, TlR
17. T1R, A2C 20. C3A, C4T

Las negras no se dan cuenta dónde les amenaza el


peligro. En vez de maniobrar en el flanco de rey, les
correspondía ocuparse, en su tiempo, de la conquista de
la vertical abierta ••AD".

21. A3C, RlT 22. TlAD!,


106 A. Kotov

Desde este momento, las blancas señorean totalmente


en la única vertical abierta. Esto les trae en seguida
resultados auténticos. No les da tiempo de anteponer
algo al enemigo en la línea "AD", ya que a 22 . . . . , TlAD,
corresponde 23. T x T, A x T ; 24. D2A y 25. TlAD.

22• . . ., P3A 24. AxC!,


23. A3R, C3R

Cuenta concreta de los factores de posición. Gracias


al dominio de la linea abierta, Alekhine cambia su fuerte
alfil blanco.

24. . . ., OxA 26. C20!,


25. PSO, 020

Todas las fuerzas al ataque del flanco de dama, todos


los guerreros a mantener el fuego de artillería, pero "¡la
principal arteria" es "AD"!

26. ..., A3T 28. TxA, TRlA


27. C4A, AxC 29. 02A, P4A

Esperando distraer las fuerzas del enemigo con ope­


raciones frente al punto central SR. El método dtrecto
29 . . .. , T X T; 30. D X T, TlAD ; 31. D6T 6 31. D5C, no era
una ayuda.
Herencia ajedrectstica de Alekhine 107

30. T6A, C3A 32. PxP, TxT


31. P3A, PxP

De otro ·modo, después de 33. TlAD, será imposible


contener el empuje de las piezas pesadas de las blancas.
Sin embargo, ahora aparece en el tablero un peón pasado,
que pronto decide el resultado de la contienda en el
flanco de dama.

33. PxT!,

Las negras no podrán contener este peón, ya que en


su ayuda se dirigen todas las piezas blancas.

33. ..., D2AD 34. D4A!,

Ahora las negras tienen que ocuparse todavía de la


defensa del :flanco de rey, donde se ha colocado la dama
blanca, combinando provechosamente los movünientos en
el flanco de dama con la amenaza de �parecer en el
otro extremo del tablero.

34. ... , R2C 36. RlT,


35. TlAD, TlAD

Para guardarse en caso de jaque por la diagonal.


108 A. Kotov

36. ' ClC 38. D7T!,


37. D6T, TlC
Era lo más sencillo. En el final de partida, el peón
6AD va a encadenar a todas las piezas del enemigo,
y no estarán en condiciones de defender sus peones
4T y 5C.

DxD P7A, R3R


��:
43.
jixo, TlAD 44. T4C, R2D
40. A6C, C3A 45. RlC, R3A
41. T4A, R2A 46. R2A,
42. AxP, P6C
Las negras se rinden.

Los trofeos del ataque en la siguiente partida, los


constituían únicamente un peón de más, pero resultó
totalmente suficiente para que Alekhine pudiera lograr
en el final de partida la victoria.

N.o 25
APERTURA COLLE

Alekhine Kostich
Bled, 1931.

1. P4D, P4D 3. P3R, A4A


2. C3AR, C3AR
El más fácil y cómodo sistema de desarrollo.

4. A3D, P3R
A nuestro juicio es más sencillo realizar el cambio
en 3D, no creándose la preocupación de la defensa de
la debilidad de los peones doblados.

5. AxA, PxA 6. 030, OlA


Defendiendo en seguida los peones 4A y 2CD.

7. 0-0, A3D 8. P3CD,


Para tomar después de 9. P4A, P x P con el peón.
Herencia ajedredstica de Alekhine 109

::
10.
P4A,
CJA,
0-0
PJA
12.
13.
CxC,
A2C,
PxC
PJC
PJCD 14. TR1AD, DJT!
11. PxP, CxP

Ofreciendo el cambio de dama y ganando un tiempo


para el desarrollo.

15. DJA,

Las blancas prefieren conservar la dama, porque en


el final de partida sería muy difícil de realizar su pequefia
supremacía.

15. ..., T1D

Para jugar 16 . . . . , C2D, que no pasa en seguida en


vista de 16. D6A, con ganancia de una pieza.

16. C5R,

Las blancas están algo mejor. Dominan la linea abierta


"AD", pero después de la inevitable 16. . . . , C2D y 17.
. . . , TD1A su hegemonía en esta vertical será impugnada
por las torres negras. Se ha creado una de esas posi­
ciones en las cuales, desde el punto de vista estático
del momento actual, las blancas tienen la supremacía;
sin embargo, si se estudia la situación desde el punto de
110 A. Kotov

vista dinámico, desde el punto de vista del futuro,


entonces puede convencerse de la inevitable igualdad en
el j uego. En el futuro, las negras en un importante mo­
mento disminuyen el significado de la supremacía de
las blancas y si no fuera por una falta cometida hubieran
tenido todo el fundamento para contar con una com­
pleta igualdad.

16. . . . , C2D 17. P4CD,

Preparando la retirada de la dama, y teniendo en


cuenta si se presenta el caso juegar P5CD.

17. . . ., C3A?

El gran maestro Kostich no discernió la finura de


la posición. Era necesario ceder en seguida el punto
de apoyo en la línea "AD" por el camino 17 . . . . , P4CD!
y seguidamente llevando el caballo a través de 3C a
5A neutralizar totalmente la actividad de las blancas.
Después del equivocado cambio del caballo la crsis en
la partida surge muy rápida.

18. D3C!, P4CD

De otra forma, j ugando 19. P5C, las blancas conse­


guirán una sólida base en 6A.

19. T6A, D2C 20. TDlAD, P4TD!

Aprovechándose de la equivocación del enemigo, las


blancas se han instalado sólidamente en la línea "AD".
Ante la difícil situación, el gran maestro yugoeslavo
no pierde la cabeza, y se defiende ingeniosamente.

21. A3T, TOlA?

No obstante, en seguida después de una buena jugada


las negras hacen otra mala. Jugando 21. . . . , P5T ; 22.
D2A, D1C; 23. P4A, C2D con la amenaza de caer final­
mente en 3C y 5A, las negras en vista del "mal" alfil
de las blancas 3T podían contar con la salvación. Ahora,
su posición se derrumba a toda marcha.

22. PxP, PSC 23. P6T!,


Herencia ajedrecística de Alekhine 111

Evidentemente esta jugada fue observada por las


negras. Sigue una serie de enérgicos golpes de Ale­
khine.

23.
24.
...,
D2A!,
DlT
TxT
1 25. CxT, T2D

Naturalmente que no pasa ni 25 . . . . , TlAD; 26. C7R+,


ni 25 . . . . , P X A; 26, C X T, D X C ; 27. D8A.

26. AxP, DxP 1

27. CSC!, ... 1 ...

Golpe elegante con resultado de cambio masivo y final


de partida.

27.
28.
... ,
DBA+,
AXC 1 29.
30.
TxD+,
ABA+,
R2C
RlT
DxD

Unico punto para evitar el mate 31. A6T.

31. TxA, . •• 1 . . •

El activo alfil y el peón de más ofrecen a las blancas


toda la base para la victoria. Alekhine lleva el final de
partida con energía y exactitud.
112 A. Kotov

31. . , P4T 34. P4TR, P3A


32. Á6D+, R2T 35. A4A, T2T
33. ASR, C1C 36. TSC, CJT

Facilitando el problema del enemigo. Era absoluta­


mente necesario eliminar el peón 2T porque ahora, ines­
peradamente adquiere una gran movilidad.

37. P4T!,

Aprovechándose de que no se puede tomar en 4T en


vista de 38. T7C+.

��:
C2A 42. TxC, R3T
PsÍ', C1D 43. T7C, T30
39. ASC, T20 44. P7T, T3T
40. P6T, C3A 45. P4A,
41. T6C, CxA

Ya están realizadas todas las operaciones preparato­


rias. Ahora solamente hace falta pasar con el rey de
lC a BCD, a lo que las negras no pueden oponer ninguna
resistencia.

45• . . ., T7T 47. PJC,


46. R1A, P4C

Las negras se rinden.


Un ejemplo más de aprovechamiento de la vertical
abierta en la lucha nos ofrece la siguiente partida,
jugada por el campeón del mundo en los últimos años
de su vida.

N.o 26. APERTURA CATALANA

Junge Alekhine
Munich, 1942.

1. P40, C3AR 6. DxP, A3A


2. P4AO, P3R 7. C3AR, C020
3. P3CR, P40 8. C3A, C3C
4. A2C, PxP 9. 030, ASC
5. 04T+, A20 10. 0-0, O-O
Conocida posición teórica, de una de las importantes
variantes de la Apertura Catalana.
Herencí.a ajedrecística de Alekhine 113

11. A5C,

Conformándose en cambiar el alfil por el caballo 3A


con el fin de recibir la posibilidad de ocupar el centro
con los peones.

11. . . ., P3TR 13. P4R, TRlO


12. AxC, OxA 14. TOlO, AlR!

Principio de la lucha por y en contra del movimiento


P4AD del destrozado centro de las blancas y ofreciendo
a los alfiles negros la posibilidad de hacerse activos.
Naturalmente que las negras entorpecen como pueden
la realización de este ataque de peones.

15. P3TO, AlA 17. A3T,


16. 03R, TOlA

Proyectando a 17. . . ., P4A contestar 18. P5D.

��:
19.
TRlR,
P5R,
TlC
C5T
20.
21.
cxc,
TOlA,
AxC
P3CO
02R

El maestro Junge hasta ahora paraba con exactitud


todos los intentos de Alekhine de realizar la jugada
P4AD, pero siempre con la ayuda de este refuerzo de
peones del punto 4AD el campeón del mundo consigue
hacer lo que deseaba : la caída y destrucción del centro
de peones del enemigo. Alekhine renuncia incluso al pro­
vechoso salto del alfil 5T a través de 3A a la fortisima
casilla 4D. Alekhine, en sus reseñas sobre esta partida,
pone un signo de exclamación a su última jugada. Es
difícil estar de acuerdo con esta apreciación, ya que
jugando ahora 22. P4CD, P4TD ;23. PxP, P x P ; 24. T3A,
las blancas recibían un juego absolutamente satisfactorio.
Por eso, a nuestro juicio, el cambio del alfil 5T a 4D
era mucho más fuerte.

22. AlA, P4AO 26. T3A, T20


23. P3C, AlA 27. TRlAO, TlC-10
24. PxP, PxP 28. ClR,
25. A4A, 02C
8
114 A. Kotov

28. .. . , TSD

Las negras se han apoderado rápidamente de la ver­


tical "D", además de eso, mandan én la importantísima
diagonal TD-TR. Estas dos supremacías ante la pre­
sencia, además, de dos activos alfiles, es plenamente sufi­
ciente para una prolongada iniciativa.

29. P3A, A2R 30. T3D,

El joven maestro alemán defiende obstinadamente


cada elemento de la posición. Ahora trata de debilitar
la acción de las piezas enemigas por la línea abierta y
lograr cambios. Esta firme resistencia hace que Alekhine
decline su recto y bien pensado plan de posición.

30. . .. , D3C

Demasiado pasivo y, sobre todo, falto de originalidad.


Correspondía en conformidad con el plan general estra­
tégico asegurarse el control sobre el punto 5R y asimismo
la diagonal TD-TR, jugando preliminarmente 30 . . . . ,
A4CR; 31. P4A, A2R. Entonces la amenaza estratégica
por el camino A5R de echar la torre 3D desde el punto
de "freno" en la línea abierta, y, asimismo, la amenaza
táctica A8T en caso de retirarse el caballo lR asegura-
Herencia ajedrecística de Alekhine 1 15

ban a Alekhine una prolongada supremacía. Ahora las


blancas consiguen neutralizar la presión del enemigo.

31. T1A-10, 041 33. 02R,


32. C2A, A4CR

Se podía jugar 33. P4A, TxT; 34. TxT, y las posi­


bilidades de las negras para el triunfo son poco signi­
ficativas.

33. ... , TxT 34. TxT, ASA

Alekhine trata en el final de partida de llevar. la


amenaza a los peones del flanco de dama de las blancas,
pero este intento puede acarrear disgustos.

35. 010, TxT 36. OxT, A7C!

No se puede tomar en seguida el peón 3T a causa del


jaque continuo despuóés de 37. C X A, D X C; 38. DBD + ,
R2T; 39. A3D + , P3C; 40. A X P + !

37 . P4A, AxPT?

Negligencia, que podía haber tenido penosas conse­


cuencias. Como bien indicó el maestro V. Panov, en esta
posición por el camino 38. P5AI. Juge recibía un fuerte
116 A. Kotov

ataque al mismo tiempo que la dama y el alfil negros


se enredaron en sospechosas adquisiciones en el flanco
de dama. Alekhine se vio precisado previamente a cam­
biar las damas y buscar posibilidades para la victoria
en el final de partida con dos alfiles.

38. CxA?,

Equivocaciones mutuas, explicables, por lo visto, por


la falta de tiempo.

38. ... , OBR+!

Alekhine toma el caballo 3T que había empeorado


previamente la posición de la dama de las blancas.

39. OlA, 06R+ 41. OlA, OxC


40. 02A, OSA+ 42. P5A,

Y aquí este movimiento del peón trae al enemigo mu­


chos disgustos.

42. . .., A40

Es el único camino. De otro modo las piezas blancas


se hacen demasiado amenazadoras.

43. AxA, PxA 45. OlR?,


44. P6R, OxP

Equivocación que facilita la victoria. La correcta 45.


D2R!, obligaba a Alekhine a esforzarse no poco para
realizar su contrapeso material. Después de 45. . .., RlA;
46. D6T!, las negras tendrían que proseguir la lucha por
el siguiente camino, indicado por Alekhine : 46. D6R+ ;
47. R2C, PxP; 48. P X P, R2R; 49. D6A, R3A; 50.
D X PD, D7R+; 51. RlC, D X P ; 52. D X P, D3C y las
negras ganan. Claro que las blancas no están obligadas
a meterse en el cambio de damas, podían escoger otras
jugadas con la dama, inquietando a las negras con la
amenaza del continuo jaque y atacando sus peones.

45. .. ., RlA 46. PxP, OlC!


·'ferencia ajedrecística de Alekhine 117

¡Elegante! Alekhine abandona el peón 7A y conserva


por ello dos peones pasados en el centro, que le aseguran
nna victoria sin complicaciones. Las blancas no pueden
aprovechar de ninguna manera el peón 7AR y se ven
obligados a cederlo en lo sucesivo.

47. R2C, P5D 50. D4T, D4D+


48. D6R, DlD 51. RlC, DxP7A
49. D4A, D3D

Con dos peones centrales de más la victoria de Ale­


khine ya no está lejos. Todavía continuó:

52. D6A, DxP 56. R2C, D7A+


53. DST+, R2A 57. R3A, P6D
54. DxP+, R3C 58. DlT, P7D
55. P3T, ·ose+

Las blancas se rinden.

A ·veces sucede que en la línea abierta se tiene un


peón del enemigo. En tales casos se dice que la línea
está semi-abierta Si este peón no está suficientemente
defendido, se convierte en el objeto del ataque. Dupli­
cándose y a veces triplicándose con las piezas pesadas por
la línea semi-abierta, el atacante lleva el planeado ataque
118 A. Kotov

hacia la debilidad del campo enemigo, hasta el momento


en que le trae ventajas materiales o de otra clase.
Como ejemplo clásico de esta estrategia aparece la
siguiente partida de Alekhine.

N.o 27. APERTURA ESPAr'IOLA

Tarrasch Alekhine
Karlsbad, 1923.

1. P4R, P4R 3. A5C, P3CR


2. C3AR, C3AO

"Defensa escogida de Pillsbery, con la que debutó


ventajosamente en Hastings (año 1895) . No obstante, la
teoría la considera, no sin fundamento, insuflciente".­
Alekhine.

4. P40!, CxP

"Si 4 . . . . , P X P, entonces 5. A5C, P3AR ; 6. A4AR, y


las blancas recuperan en seguida el peón con posición
fuertemente atacante".-Alekhine.

5. CxC, PxC 7. 030,


6. OxP, 03A

Ofrece a las negras la posibilidad de igualar el juego


sin dificultades. Más fuerte 7. P5R.

�:
A2C 9. A4AO, C2R
ClA, P3A 10. A3R,

Otra inexactitud. Una jugada correcta era 10. O-O.

10. ..., P4CO! 12. P4TO,


11. A3C, P4TO

Tarrasch jugó la primera parte de la partida con muy


poca seguridad. La jugada hecha por él conduce a un
completo bloqueo del flanco de dama y la aparición de
debilidades desesperadas en el campo de las blancas.
Mejor era 12. P3TD.

12. . . ., P5C 13. C10,


Herencia ajedrecística de Alekhine 119

Ahora surge la equivocación de la jugada 10 de las


blancas; para defender el peón 2CD tienen necesidad
de retroceder con el caballo a la desafortunada ca­
silla 1D.

13. . . ., 0--0 14. 0--0, P4D!

Forzadamente, lleva a la apertura de la línea "AD".


En vista de la amenaza 15. . . . , A3TD las blancas se
ven obligadas a cambiar en 5D.

15. PxP, A3TD 17. DxA, PxP


16. A4AD, AxA 18. 030,

18. ..., PSD!

Cumpliendo en seguida unas cuantas misiones de com­


bate de importancia estratégica, y precisamente retro­
cediendo el alfil a una posición pasiva, arrebatando la
casilla 6R y el caballo 1D y forzando la debilidad del
peón 2AD en la línea semi-abierta.

19. A2D, TOlA 21. P3CD,


20. TlR, T2A

Con la esperanza de saltar con el caballo a través


de 2C a 4A, sin embargo, no llega a realizarse.
120 A. Kotov

�: t1Ao,
TRlA
D4A!
23. T4R,

Se hace preciso, ya que cambiar significa la confor­


midad con la inevitable pérdida del peón 2AD.

23. ..., C4D

Este caballo se prepara a un estacionamiento muy


cómodo, 6A.

24. C2C, C6A 26. D2R, A3T!


25. AxC, TxA

Ataque decisivo, las blancas tienen que conformarse


con la pérdida del peón 2AD.

27. P4C,

Temerario contraataque que conduce a interesantes


simplificaciones.

27. ..., OlA 29. -DxT+, R2C


28. TSR+, TxT 30. TlAR, TxPA

Las maniobras de las negras condujeron a la ganancia


del peón 2AD. No obstante, la realización de esta supre­
macía material está todavía ligada a dificultades ya que
el alfil negro tiene limitados los movimientos por los
propios peones y las blancas, basándose en esto, cuentan
con hacer el contrajuego.

(Ver diagrama siguiente.)

31. C3D, D6A

"Esta j ugada (sin duda la más difícil de la partida)


está fundada en las siguientes consideraciones: Las
blancas amenazan reforzar su posición por el procedi­
miento 32. D4R, y 33. P4A, después de lo cual a las
negras, por inconveniente situación de su alfil, les sería
muy difícil conseguir la victoria. Por otro lado, el final que
resulta después de 31. . . . , D3R; 32. DXD, P x D; 33. TlD!
estaría lejos de ser desesperante para las blancas, por
ejemplo: 33 . . . . , R3A; 34. P4A, P4C; 35. P4T!; por consi­
guiente, las negras tienen que oponer resistencia a la
maniobra 32. D4R, y 33. P4A".-Alekhine.
Herencia ajedrecística ele Alekhine 121

32. C5R,

Aparentemente, el comienzo de un contrajuego muy


fuerte. Sería desesperante 32. D5R + , RlC; 33. D x P,
T7D.

32. .. ., D4D 33. C7D,

Amenaza mate en una jugada. Las amenazas de las


blancas parecen desagradables, sin embargo Alekhine ha
calculado exactamente las variantes y demuestra convin­
centemente la supremacía de su situación.

33. . . ., D3D 34. TlD, A6R

Golpe estudiado hace tiempo, que obliga en seguida


a las blancas a conformarse con el cambio de damas y
pasar al final de partida.

35. TlAR, A4C 36. D5R+,

Amenazaba 36. . . ., A2R con la consiguiente 37 . . . . ,


P6D. El cambio de damas, es relativamente la mejor
posibilidad de defensa.

36. .. ., DxD 38. C4A, P6D


37. CxD, ASA 39. TlD, T6A!
122 A. Kotov

Alekhine realiza con exactitud su contrapeso. No se


afianza al peón de más, ante todo se preocupa de la
actividad de sus piezas. _
Más débil era 39. . . . , P7D ; 40. RlA y el peón 7D tiene
que perecer.

40. CxP, R3A!

Lo principal del final de partida ¡ la centralización


del reyl

41. P4T, R4R 43. R3A, A2A


42. R2C, RSD

Ahora, cuando el rey de las negras se encuentra en


el centro, ya se puede ocupar del peón 3CD. La partida
de las blancas es desesperada. Todavía continuó:

44. C4A, TxP 49. PSC, T6T


45. C3R, T6A so. TlCR, P6C
46. TlCD, A4T 51. T4C+, R4A
47. ClD, T6T 52. T4AD+, R4C
48. C3R, TxP 53. TSA, TST

No cayó en la trampa: 53. . .. , P7C ; 54. TSC+, A3C;


55. T X A + , y 56. C4A+.

54. TSC+, A3C


Herencia ajedrecística de Alekhine 123

Las blancas se rinden.


Un cuadro análogo le observamos en la siguiente par­
Uda. Aquí también Alekhine se apoderó de la linea
semi-abierta, y ejerció una fuerte presión sobre el
débil peón del enemigo, que se encontraba en esta
linea. Al fin y al cabo, el que se defendía se vió
obligado a permitir la decisiva rotura de las piezas
atacantes.

N.o 28. APERTURA RETI

Kebitz y Pinkus Alekhine


Nueva York, 1929.

1. ClAR, C3AR 3. P3CR, A2C


2. P4A, P3CO 4. A2C, P4R

Aprovechando la ocasión, las negras llevan un impor­


tante ataque de peones al centro. El método de juego
de apertura de las blancas no se justificaba clara­
mente.

5. C3A, ASC 6. 0--0,

Alekhine considera ya esta jugada como inexacta. A


su jui9io, había de haber prevenido la duplicidad de
peones con la jugada 6. D3C.

6. . .., AxCO 7. PCxA, P30

"Por cuanto el esquema de los peones negros está


distribuido en casillas negras, no tienen necesidad de
conservar su alfil de rey".-Alekhine.

8. P40, PSR 10. P3A,


9. C4T, 0--0

Las blancas están obligadas a conseguir la liberación


de sus · piezas, pero se les presenta un peón retrasado
en la linea "R".

10. ..., PxP 12. 030, T1R


11. AxP, CSR 13. P50?,

Indiscutiblemente, es una tosca equivocación. Gracias


a su· actividad temporal, las blancas crean en su posi-
124 A. Kotov

ción una abierta debilidad, el peón 2R. Correspondía


jugar 13. C5A, con objeto de procurar pasar el caballo
a 5D y expulsar al caballo negro de 5R.

��: o4o,
C4A
C020
17.
18.
C3A,
C20,
C3C
06T
15. AST, C4R 19. AxC,
16. A4A, 020

Curiosa trampa 19. A6T, P x A; 20. A4C, que se evitaba


fácilmente con la jugada 19 . . . . , T4R.

19. .. . , PTxA 20. P4R, P3AR

La posiCIOn se determina por completo. En tanto


que las piezas blancas no tienen objetivos para su acti­
vidad, el problema de cada pieza negra es totalmente
concreto, claro y determinado. Las negras se preparan
para un inmediato futuro a duplicar sus torres por la
línea "R", seguidamente pasar el alfil a través de lA
a la diagonal 1AD-6TR. Después de esto estarán com­
pletamente movilizadas para una actividad decisiva.

21. TOlR, P4CR 23. RlT, TOlR


22. A3R, T2R 24. AlC, AlA
Herencia ajedrecfstica de Alekhine 125

Naturalmente, Alekhine no se precipita a tomar el


peón 4R por el camino 24. . . . , CxP ; 25. cxc, TxC ;
26. T X T, TxT; 27. D X T, DxT ; 28. DBR + , con un jaque
continuo.

25. T3A, ASC 26. TA3R, D4T

Alekhine podía concentrar ahora el golpe de sus cinco


piezas sobre el peón 4R y tomarlo sin provecho. Pero
tal logro no satisface al campeón del mundo: elige
otro camino largo pero que, en cambio, aporta una
supremacía decisiva.

27. R2C, A6T+ 29. A2A, P4T


28. R1T, ose 30. A1C, PST

Queda totalmente claro el deseo de desviar la posi­


bilidad del cambio de caballo 4A después de C3C.

31. A2A, T4R 33. A2A, R2A


32. A1C, T1R-2R
·
Aprovechándose de que las blancas no tienen jugadas,
salvo el obligado movimiento del alfil. Alekhine pasa
su rey al :flanco de dama, para que en el momento de la
rotura en el centro no se encuentre bajo amenaza de
las piezas enemigas.

34. A1C, R1R 37. A2A, R2C


35. A2A, R1D 38. A1C, R3T
36. A1C, R1A

Aquí el rey puede descansar después de una fatigosa


marcha y ayudar tranquilamente desde lejos la decisiva
toma en el centro.

39. A2A, D4T

El último cambio de lugar de las piezas antes de la


señal para el ataque.

40. A1C,

Pesada ocupación la de cambiar doce veces al alfil


de un sitio a otro.

40. . . ., ASC 42. R1T, P3C


41. R2C, D6T+ 43. A2A,
126 A. Kotov

43. ... , P4A!

Preparada durante mucho tiempo, pero en cambio


decisiva ruptura inmediata.

44. PxP, PxP 45. TxT,

Las blancas no pueden esperar más. 45. AlC decide


45. . . . , C5R; 46. c x c, T X C, con inevitable j aque en 6A.

45. ... , PxT 46. D3R,

Y ahora no se puede atacar en 5R en vista de 46.


T X P, T X T ; 47. D X T, A6A + ! ; 48. CxA, D8A+ ; 49.
ClC, C6D.

46. ... , P5R 47. P6D,

Preparando la última trampa.

47. ... , PxP 48. AlC, P5A!

(Ver diagrama siguiente. )

N o cayó e n l a red. En caso d e 4 8. . . . , A6A + ? ; 49.


C X A, P X C ; 50. D X P, TxT, las negras recibían· el
mate en 8TD. Ahora las blancas se han rendido, ya
que después de 49. P X P, decide en seguida el jaque
con el al:fi.l en 6A.
Herencia ajedrecística de Alekhine 127

Hemos examinado ej emplos de lucha por la línea


abierta en el centro y en el flanco de dama, y hemos
esclarecido los métodos con cuya ayuda la parte activa
aprovecha la conquista de la línea abierta. En todas las
partidas examinadas, Alekhine jugaba en la parte activa,
se apoderaba de la líena y desarrollaba en ella las ope­
raciones. En el siguiente ejemplo, el campeón ruso apa­
rece a la defensiva, demuestra los métodos de defensa
contra las torres enemigas por la única vertical abierta,
busca caminos para debilitar la presión de las piezas
enemigas. Como resultado del avivamiento de la lucha,
la partida concluye de modo inesperado y curioso.

N.o 29. DEFENSA ORTODOXA

Al�khine Capablanca

1 2 partida del match, 1927.

1. P4D, C3AR 7. T1A, P3A


2. P4AD, P3R 8. D2A, P3TD
3. C3AD, P4D 9. P3TD, P3T
4. A5C, CD2D 10. A4T, T1R
5. P3R, A2R 11. T1D,
6. C3A, �
128 A. Kotov

Es una conocida variante teórica, en la que las negras


se ven obligadas con la toma en 5A, y las blancas se
contienen de sacar el alfil-rey. La jugada hecha por
Alekhine es innecesaria ya que las torres en la línea
"D" no tienen nada que hacer. Correspondía conformarse
y jugar 11. A3D.

11 . . .., P4CD 12. PxPD,

No pasaba 12. P5A a causa de 12 . . . . , P4R; 13. P X P,


C5C ; 14. A3C, A X P, con buen juego para las negras.

12. .. ., PAXP 14. 0--(), TOlA


13. A3D, A2C 15. DlC, D4T

No daba nada 15 . . . . , A x P ; 16. P X A, T X C ; 17. P4T,


abriendo el peón con una buena posición.

16. C2R, C3C?

Es equivocación, porque ante la jugada 17. A X C!,


las blancas podían colocar al enemigo en una situación
difícil. En caso de 17. . . . , A X A; 18. P4CD!, D5T (18 .
. . . , D X PT ; 19. A7T + , R1T ; 20. T3D, D5T ; 21. C3A) ;
19. T2D, C5A; 20. T2T, A2R; 21. D1T, C3C ; 22. T1C,
con la consiguiente 23. C3A, las blancas tienen que
ganar. Era mejor tomar con el peón 17 . . . . , P x A, pero
entonces 18. C4A con amenaza 19. C x PR, daba a las
blancas un peligroso ataque sobre la debilitada posición
del rey enemigo (variante de Alekhine) .

17. CSR?, CSA 18. AxCR,

No da nada el cambio, porque el pensado cambio del


caballo a 5AD únicamente empeora la posición de las
blancas. Correspondía retroceder con el caballo a 3A.

18. . .. , AxA 20. C7D+, R2R


19. A7T+, RlA 21. CSA, D3C?

Retraimiento. El sacrificio de la calidad 21. . . . , T x e! ;


22. P X T, C X P (ó 22. P4CD, C X PT ; 23. D3C, D5T;
24. D X D, P x D ; 25. P x P a. p., P3C) , daba a las negras
un contrapeso efectivo.

22. CxA, DxC 23. A3D,


Herencia ajedrecística de Alekhine 129

23• . . . , T2A?

Habiendo recibido una supremacía importante en la


única línea abierta, Capablanca empieza a jugar de un
modo vulgar y ofrece la posibilidad al enemigo, en el
transcurso de futuras jugadas, de neutralizar esta supre­
macía. La ventaja de las negras consiste principalmente
en la disposición del caballo en 5A, por eso hubiera sido
necesario por todos los medios, contener esta saliente
posición. Esto se conseguía por el procedimiento 23. . . .,
RlA y 24. . . ., A2R o por el camino 23. ... , D3C y 24 .
. . . , D4T. En ambos casos, el ataque al peón 3T no ofre­
cía a lBB blancas la posibilidad de jugar P3CD.

24. 02T!,

Después de esto, las negras ya no pueden hacer nada


para prevesnir P3CD.

24. ... , TRlAO 26. 020,


25. P3CO, C30

A las piezas blancas les resulta ahora mucho más


fácil respirar. Empiezan incluso a demostrar inclinaciones
atacantes con desagradable amenaza para las negras 27.
D4C ó 27. D5T.
9
130 A. Kotov

26. . .. , D3C 27. TlA,


Como resultados de una buena defe ' nsa, las blancas
consiguen el cambio de las torres y debilitan la pre­
sión de las piezas negras por la línea abierta.

R2D 29. AlC!,


TxT

De nuevo, una brillante solución del problema estra­


tégico. Alekhine ganó el match a Capablanca, porque
en cada jugada se acercaba concreta y hondamente a
la resolución de los problemas de posición, contando no
solamente con los elementos ajedrecísticos, sino también
con los psicológicos. Así Capablanca se prepara ahora
a los cambios después de 29. TlAD, que por la posición
del rey le brindaba mejor final de partida. En vez del
pedido y poco provechoso movimiento de simplificación,
Alekhine lleva a cabo un profundo plan, está dispuesto
a cerrar para siempre la línea "AD", llevando su caballo
a través de 3D a 5A.

A2R 31. D2R,


�: c4A, RlA
Herencia ajedrecística de Alekhine 131

Se prepara para el caso de saltar al fianco de rey y


ocuparse de los mal defendidos peones 2A y 2C.

31. . .., P3C 33. P4CD,


32. C3D, C5R

Inesperadamente, el caballo aparece en 5AD acortando


todos los intentos del enemigo de aprovechar la impor­
tante vertical "AD" para activas realizaciones. No
deseando conformarse con lo inevitable, Capablanca
intenta conservar la saliente posición de sus piezas en
el campo enemigo, y no se da cuenta de que quedan
aisladas del resto del ejército.

33. . . ., T6A 34. D2C, D2A?

Es un error de cálculo en las variantes. Estaba a


tiempo para volver con la torre a casa y reconocer
que en la lucha por la línea abierta la defensa del
enemigo triunfaba sobrE. el plan agresivo de las
negras.

35. C5A!,

La torre queda separada del resto de las fuerzas


de las negras, obligadas a mirar su
·
perecimiento sin
poder darle ayuda.
132 A. Kotov

��: PDxP,
AxC
D4R
37. P4A!,

Capablanca no contaba, en sus cálculos, con esta


jugada. La dama de las negras en la diagonal 1TR-8TD,
no tienen ni una casilla de defensa.

37. . . ., D2C 39. R2A,


38. AxC, PxA
Más sencillo era otro camino 39. T2A, y 40. T2AD.

39. ... , D3A 41. T1A,


40. P3C, P4C
Las negras se rinden.
Después de 41. . . . , P x P ; 42. T X T, P X PC + ; 43. R1C!,
no resulta un j aque continuo : 43 . . . . , P x P + ; 44. R X P,
D5T + ; 45. R2C, D5C + ; 46. RlA!, y el rey de las blancas
se oculta en el :flanco de dama.
Vamos a analizar dos ej emplos más del primer match
de Alekhine con Euwe en 1927, en los que la lucha se
desarrolla en las líneas abiertas deL :flanco de dama y en
el centro.

N.o 30. APERTURA ESPA�OLA

Alekhine Euwe
Primera partida del match 1927.

1. P4R, P4R 6. D2R, P4CD


2. C3AR, C3AD 7. A3C, P3D
3. ASC, P3TD 8. P4TD, TD1C
4. A4T, C3A 9. PxP, PxP
S. O-O , A2R

Se ha abierto la primera líena en el tablero.

10. P3A, ASC 12. P4D,


11. 110, O-O
Todo esto ya ha surgido con frecuencia y está bien
estudiado desde el punto de vista teórico.

12. . . ., Tll?
Herencia ajedrecística de Alekhine 133

La elección de Euwe es dudosa, porque se podía haber


tomado tranquilamente el peón.

13. TxT, DxT 14. P5D?,


Correspondía jugar 14. D X P, C2T (14. . .. , T1C ; 15.
D4T!) ; 15. D5T, D X P ; 16. D X C, D X CD (16 . . . . , AxCR? ;
17. C2D) ; 17. P X P y el contrapeso de las blancas es
indiscutible.

C4TD 17. P4C, C5A


��: A2A,
C3T!,
P3A! 18. CxC, PxC
16. T1C 19. P3T!,

Ambos enemigos llevan bien el complicado juego de


maniobras. Tomar el peón 5A a las blancas no les con­
venía a causa de 19. . .. , P x P ; 20. P x P, T1AD.

19. .. ., A2D 20. A5C,


A la toma del peón 5A correspondería ahora 20. . . . ,
P X P ; 21. P X P, A4C ; 22. D3C, D3T, con desagradables
amenazas A5A y A2R.

20. ..., D3T 1 24. C20, A3R


21. PxP, DxP 1 25. C1A, TlT
22. T1T, P3T 1 26. 010, TxT?
23. AxC, AxA 1

Resulta una equivocación imperdonable. Las reglas


más elementales del ajedrez exigen no entregar la linea
abierta al enemigo. Continuando en vez de esto 26. . . . ,
P4D ; 27. P X P, A x P ; 28. C3R, A3R y las negras con­
servaban; por lo menos, un juego igualado.

21. DxT, A4C


Jugado otra vez con pasividad. De nuevo ofrecía más
posibilidades P4D.

�8. D7T,
Las blancas, gracias a los abandonos del enemigo han
recibido un notable contrapeso.
134 A. Kotov

Sefiorean en la única linea abierta y tienen un fuerte


peón pasado 4C. Estos dos factores son suficientes para
alcanzar la victoria.

28. ..., P3C

Mejor era 28 . . . . , A2D, entorpeciendo el refuerzo de


las piezas blancas.

29. DSC+, R2C 31. P6C, AlD


30. PSC!, 020 32. D7T?,

Se logra la victoria conseguida después de 32. A4T!.


D X A ; 33. D X A, D3A ; 34. C3R, y 35. D7A.'

32. ..., D4C! 34. C3R, D7C!


33. P7C, A2A

Oportuno contraataque. Euwe se fija solamente en la


falta de disposición· de las figuras blancas ligeras y salva
la partida con el sacrificio de la pieza.

35. DST, A2D 37. PxA (D), A3C!


36. OSAD, AxD

¡En eso consiste el sentido de la defensaf Por la pieza,


las negras reciben fuertes peones pasados.
Herencia ajedrecf.stica de Alekhine 135

38. oseo, OSA+ 41. Rle, OxPA


39. elA, AxP+ 42. OxP, 050+
40. RxA, OxA+

Aceptan tablas. Dos peones ante el rey negro en 4R,


eliminan en las blancas toda esperanza de victoria.

N.o 31. DEFENSA FRANCESA

Euwe Alekhine

Cuarta partida del mismo match.

1. P4R, P3R 7. AxA, OxA


2. P40, P4D 8. e3A, O-O
3. e3AO, e3AR 9. A30, P4A
4. ASeR, PxP 10. 0--0, PxP
S. exP, A2R 11. exP, TlO!
6. exe+, Axe

Buena jugada, que da a las negras un juego superior.


Las blancas no pueden reforzar su caballo en 4D, en
vista de la amenaza P4R-5R. Esto era preciso hacerlo
antes, por el1 camino P3AD .

12. ese, e3A lS. e3A, A3A


13. OlA, e4R 16. AxA, exA
14. A4R, A20

La situación se ha hecho visiblemente más sencilla.


Ocupando en un inmediato futuro las dos lineas abiertas
en el centro "D" y "AD", Alekhine tendrá un juego
mucho mejor.

17. 03R, eso 19. TOlO, TOlO


18. 04R, T20 20. T30,
136 A. Kotov

20. ... , D2R!

Cambiando la dama a 4A y 5C, desde donde va a


atacar los peones blancos del flanco de dama. La presión
de las piezas negras crece a cada jugada.

21. T1A-1D, D4A 23. 0201,


22. D3R, P4R

¡ La táctica de Euwe está alerta! Agrupándose con las


piezas pesadas en la línea "D" amenaza C2R, que supri­
me la presión de las piezas enemigas en la. línea abierta.
Con una escogida defensa, las blancas consiguen liquidar
la posición de supremacía del enemigo.

23. ..., ose 25. P3A, D4A


24. P3CD, P4A 26. R1T, T1AD

Ahora las negras tienen que emprender ya algo para


rechazar la amenaza C2R. Alekhine decide el problema
por un camino táctico.

27. C2R, DxPA 28. T1AD!,


Herencia ajedrecfstica de Alekhine 137

¿Qué hacer? ¿Cómo salvar la dama? Alekhine lo tiene


todo ya examinado y con la próxima, imprescindible
j ugada, lleva la lucha al cauce de las tablas.

28. ..., T20-2AO! 30. TxC!,


29. TxO, TxT

Unicamente así. De otro modo, las activas torres


negras, en la segunda horizontal, pueden procurar a las
blancas muchas cosas desagradables.

30. ... , PxT 32. P4TR, T8A+


31.- OxP, TxC 33. R2T, T8A-7A

Suprimiendo a las blancas toda clase de posibilidades.


Los desorganizados peones blancos no pueden ir lejos
de la destructora persecución de las torres negras.

34. 050+, R1A 38. R3C, TxP+


35. OxP+, R2R 39. R4A, TxP
36. 05C+, R2A 40. OxP, T7C-7AO
37. 050+, R3A 41. 08T,

Tablas.
CAPITULO 11

El ataque en ambos flancos

Hemos examinado primero partidas en que la solu­


ción de la batalla sefialaba el ataque al flanco de rey,
e inmediatamente nos hemos detenido en aquellos casos
donde decide el ataque al flanco de dama o en el
centro. Cada aspecto de tal ataque tiene sus particu­
laridades específicas, el juego de los enemigos -de
cualquiera de ellos- depende de determinadas condi­
ciones y leyes.
En la práctica ajedrecística se dan casos en que el
enemigo se hace con la iniciativa y no solamente en
una mitad del tablero. A veces, la influencia de sus
piezas activas se extiende al mismo tiempo al centro
y a ambos flancos; ante estos casos, el ataque del
jugador puede desenvolverse prácticamente en todos los
terrenos del frente ajedrecístico, en los extremos y
centro del tablero. Esto ocurre cuando la parte activa
goza de gran supremacía de posición y no permite al
que se defiende organizar la iniciativa en ninguna parte
del campo de batalla.
Examinaremos algunas partidas de Alekhine en las
que su ataque se desarrolla en ambos flancos. Vamos a
distinguir dos puntos de vista de tales ataques:
l. Partidas con enormes distancias de perfección.
2. Partidas en las que decide el ataque la combinación
de piezas en ambos flancos.
Esta división es, en cierto modo, condicional, ya que
ante la enorme distancia de perfección también se
puede realizar combinaciones de ataque y, al contrario,
el ataque con la combinación de las piezas inevitable­
mente presupone la presencia de un gran contrapeso ;
sin embargo, desde el punto de vista metódico, tal división
es cómoda y tiene base.
140 A. Kotov

El contrapeso espacial

A veces se logra conquistar con las piezas pesadas


y con los alejados peones pasados gran parte del tablero
y hacer retroceder las piezas del enemigo a las últimas
horizontales. En este caso, el atacante tiene un enorme
contrapeso espacial, que le ofrece las bases para buscar
un camino decisivo hacia la destrucción del contenido
ej ército enemigo. ¿Cómo realizar esta evidente supre­
macía? La respuesta no es complicada: el futuro j uego
para la realización del contrapeso espacial puede, por
ej emplo, consistir en un sucesivo "ahogamiento" de las
piezas del enemigo, en la futura contención de sus movi­
mientos, hasta el momento en que las últimas fuerzas
oprimidas del enemigo no sean obligadas a tener pér­
didas materiales. Otro procedimiento de realizar esta
supremacía, puede consistir en encontrar el camino de
incursión al campo enemigo, la mayor parte de las
veces por la linea abierta. Las piezas atacantes irrum­
pen en la formación del enemigo por las despejadas
verticales.

Naturalmente, la elección de tal o cual método de


juego depende de las particularidades de posición. Así,
en determinada posición, con un esquema rígido de
peones, no se puede llevar un futuro movimiento de
piezas y peones, aquí en el j uego tiene carácter lento
y consiste en encontrar la posibilidad de irrumpir. Al
contrario, en la fila de la posición no es preciso buscar
la rotura, aquí decide un sencillo avance de piezas y
peones. Un papel importante en el ataque de este y
otro tipo, juega la presencia en la posición del que se
defiende de la existencia de debilidades. Cuan.do tales
debilidades existen, el ataque marcha con ventaja ; de
lo contrario, incluso ante la presencia de un contrapeso
espacial, a veces resulta difícil romper la defensa del
enemigo.
En la práctica de Alekhine pueden encontrarse unos
y otros casos realizadores de la enorme supremacía.
Casi siempre estos dos sistemas de j uego se combinan
enlazándose uno con otro. En primer lugar, examinare­
mos su partida con Chajes, en la que el gran contrapeso
en la distancia lo realizó Alekhine abriendo la linea del
flanco de rey para entrar al campo enemigo.
Herencia ajedrecística de Alekhine 141

N.o 32. DEFENSA ORTODOXA

Alekhine Chajes
Karlsbad, 1923.

1. P4D, C3AR 6. P3R, 0--0


2. P4AD, P3R 7. T1A, P3A
3. C3AR, P4D 8. D2A, P3TD
4. C3A, CD2D 9. P3TD, T1R
5. ASC, A2R 10. P3T,

Se sucedía la conocida para nosotros lucha por el


tiempo, en la famosa clásica variante de Gambito de
Dama.

10. ..., P4C

Uno de los sistemas de mayor consistencia de des­


arrollo de las negras en el Gambito de Dama. Si ahora
las blancas hacen el cambio en 5D, entonces las negras
desarrollarán el alfil en 2C, tomando con la torre la
linea " AD " y comenzarán un activo juego por el pro­
cedimiento C3C-5A y, asimismo, C5R. Este sistema de
desarrollo apareció en la partida número 29. donde Ale­
khine cambiaba en 5D. En este caso, prefiere cerrar el
flanco de dama para trasladar la fuerza de la lucha al
centro y al flanco de rey.

11. PSA, C4T

Resulta claro que las negras han llevado el P4C


bastante mal. Si todavía no estuviera hecha la j ugada
P3TR, entonces ahora tendrían la posibilidad con el
contragolpe en el centro 11 . ..., P4R! ; 12. P x P, C5C ;
de recibir perspectivas en el centro, pero ya se ven obli­
gadas a conformarse con una gran pérdida en la
distancia.

12. A4AR!,

Naturalmente, las blancas no quieren facilitar al ene­


migo la posibilidad de realizar, después del cambio de
alfiles, el liberador juego P4R.

CxA
��:
14. A3D, P3C!
Pxc, P4TD
142 A. Kotov

15. P4TR!,

Si las blancas se hubieran entretenido un poco más


con esta jugada, entonces el enemigo podría jugar 15 .
. . . , R2C y 16 . ... , P4TR y levantar tal fortaleza con los
peones en el flanco de rey, que hubiera resultado extre­
madamente düícil destruirlo. Por eso, Alekhine se ase­
gura la posibilidad en un momento dado, de abrir la
línea "TR", aprovechándose de que la jugada P4TR no
es posible ahora ,a causa del sacrificio del alfil en 6C.

��: Psr,
AJA
C1A
17.
18.
PJCR,
C1D!,
T2T

Tales posiciones cerradas carcterizan el extremada­


mente lento movimiento de la parte activa (del que se
defiende no hay ni que hablar, deberá permanecer
quieto y esperar a ver qué emprende el enemigo). Y he
aquí que ahora Alekhine emprende el traslado del
caballo 3AD a 4CR, desde donde puede llegar a 5R y
también dar un desagradable j aque en 6AR 6 6TR.
Chajes entorpece este traslado.

18. ..., A2C 19. CJR, P4A


Herencia ajedrecística de Alekhine 143

La posición se hace todavía más cerrada, ahora las


blancas tienen una sola esperanza: abrir la línea "TR",
a cuya preparación se acerca Alekhine.

20. D2R, P5T?

Una equivocación de posición, que de un modo notable


facilita a las blancas el logro de sus fines.

Estas posiciones cerradas se caracterizan porque los


atacantes, para conseguir la victoria, tienen que tener
forzosamente la posibilidad de realizar en seguida una
activa acción en ambos flancos.
El caso es que si el atacante consigue abrir la línea
solamente en un flanco, sin un completo logro de obje­
tivos de ataque, en el otro extremo del tablero no ten­
drá todavía asegurada la victoria. El contrario sabrá
prevenir el ataque de piezas pesadas de la parte activa,
defendiendo con suficiencia el campo de batalla.
Es otra cosa cuando, j unto con la apertura de la
línea en un flanco, se logra realizar también un j uego
activo en el otro extremo del tablero. Entonces el ata­
cante puede, por turno, desencadenar desagradables
ataques ya en uno u otro flanco. Para ello dispone de
gran distancia, que le permite maniobrar bien y cambiar
fácilmente sus piezas de un extremo a otro del tablero.
Nada parecido puede realizar el que se defiende, tiene
144 A. Kotov

poca distancia para las maniobras, las piezas están cohi­


bidas, por eso no resulta tan fácil llevarlas de un flanco
a otro. Si ante una líena abierta en el tablero el que
se defiende puede con relativa facilidad controlar el
punto de la batalla, entonces se crean nuevas amenazas,
la defensa en ambos extremos del tablero se hace muy
dificil. Combinando por turno las amenazas en un flanco
u otro, el atacante, por último, vence la resistencia del
enemigo e irrumpe en su campo con las piezas. Esto lleva
consigo el principio del fin.
Si Chajes no hubiera hecho la jugada P5T, Alekhine
hubiera tenido que luchar todavía no poco para lograr
este movimiento, y realizarlo no era sencillo. Puede
decirse sin miedo que, si las negras hubieran contenido
este arriesgado movimiento, la victoria de Alekhine, en
esta partida, hubiera sido extremadamente complicada y
hubiera dependido de sus operaciones auxiliares en el
flanco de rey, más amplias que una apertura en la
linea "TR". Por lo visto, particularmente, hubiera tenido
que abrir la linea "CR". Ahora, cuando para las piezas
blancas ha surgido un nuevo y buen camino para la
lucha a través de la casilla 4CD, el camino hacia la vic­
toria de las blancas, aunque largor ya tiene clara visión
de un carácter determinado.

21. C2A,

Aprovechando inmediatamente la casilla 4CD, por


ahora solamente para el cambio del caballo a 5R.

��: RÍA,
T2T-2R
AJA
23. CSR,

·
Desviándose del plan previsto. La respuesta correcta de
las negras ahora es 23 . . . . , D2A!, Alekhine tendría que
volver ahora atrás con el caballo y de nuevo realizar
la maniobra del caballo 2A en 5R, ya que las blancas
no tienen derecho a permitir el cierre de la linea "R"
después de . . . , A X C.

23. . .. , AxC

y ahora las blancas pueden tomar en 5R con la dama.


Cambio equivocado que debilita seriamente las casillas
Herencia ajedrecística de Alekhine 145

en el campo de las negras y facilitará a Alekhine el


logro de la victoria.

24. D x A, D2A 25. D6A!,

Primer resultado de una equivocación, la dama de las


blancas se pasea tranquilamente por el campo del ene­
migo.

25. . .., T2A 26. D4T, D2R

Las negars se defienden mal, pero incluso ante esta


mala forma de jugar del enemigo Alekhine tarda en
lograr la victoria, y con grandes dificultades. Esto es lo
que significa una posición cerrada y la aparición de una
línea de combate ! De haber jugado las negras 26. . . . ,
T2C se hubieran asegurado la posibilidad de tomar con
el peón en 3C, después de lo cual el camino hacia la
victoria de las blancas no hubiera sido tan fácil.

27. P x P!, CxP

Como ahora no se puede atacar con el peón, las


negras se ven obligadas a ceder al enemigo muchas
casillas en el :flanco de rey.
10
146 A. Kotov

28. 05T, OlA ll. OlR, Tl-2R


29. A2R, T2CR l2. C4C, A20
lO. OlA, Cl A ll. AST!,

"Esta jugada conduce a una pintoresca posición en


que la dama, las dos torres y el alfil de las negras no
tienen jugadas.

"Sin embargo, el problema no está todavía resuelto,


ya que no solamente no están las dos torres blancas
en la vertical "TR", sino que ni siquiera al agregarse
a ellas la dama logra nada.

"Bastante complicado el plan, que se preparan a


seguir las blancas (naturalmente con cambios condi­
cionados por el enemigo), puede ser simplificado así:

"l.a parte. Llevar el rey al centro, donde, después


del cambio de torres y de la dama en la vertical "TR",
va a amenazar con una rápida acción al campo ene­
migo a través de la casilla 5TD. Naturalmente, esto
exigirá el inevitable cambio del rey negro, tanto más
cuanto que será necesario para la defensa de los puntos
3R y 3AD.

"2.a parte. Obligar a las piezas del enemigo, una tras


otra, a abandonar el flanco de rey realizando tácticas
Herencia ajedrecística de Alekhine 147

amenazas ya al rey, ya a los peones del enemigo (juga­


das 39 y 41).

"La amenaza de las blancas de ocupar con el caballo


el punto 5R, permite preparar al caballo negro hacia la
casilla 2D, lo que dificultará todavía más el juego con­
dicionado de las piezas negras, sin eso ya difícil, en la
limitación de sus posiciones de distancia.

"3.u. parte. Finalmente, en un buen momento -preci­


samente cuando las piezas del enemigo estén al máximo
alejadas del flanco de rey-, llevar las torres por la
vertical "TR", para que tras el forzado cambio de
damas y alfiles puedan pasar al fondo de la posición del
enemigo.

"Como se verá, las blancas, para realizar este plan


estratégico, necesitaron no menos de ¡ 28 jugadas ! ".­
AZekhine.

33. . . ., C3C 34. C30,

Pero no en seguida 34. R2R ,en vista de 34. . . . , P4R!

34. . . ., AlR 36. R20, T2CO


35. R2R, RlA

Dejando pasar al rey al flanco de dama.

37. A3A, R2R 39. C4C,


38. TRlR, ClA

¿No cae el enemigo en 40. A X P ?

39. . . ., RlO 41. 020 !,


40. R30, T2CR-2R

Primera demostración en el flanco de dama, amenaza


42. C6T, y 43. D5T.

41. . . ., T2T 42. TRlT, T2R-2AO

Preparándose de la siguiente manera a distribuir las


obligaciones entre sus piezas : el caballo va a defender
la casilla 4R, y el alfil al peón 2T. El papel de defensor
del peón 3A corresponde a la torre o al rey.
148 A. Kotov

43. T2T, A3C 44. D3R, RlA

Llevando a l rey a 2 C para librar a l a torre d e la


defensa del peón 3A. No obstante, en el flanco de rey
ya empieza a crearse la crisis.

45. TDl TR, R2C 47. C3D, C2D


46. R2D, T2R

48. AST!,

Observen la posición del diagrama. Las negras, inquie­


tas por la amenaza del enemigo en el flanco de dama,
se vieron obligadas a lanzar allí unas cuantas pieazs.
Alekhine lleva el ataque en el otro extremo del tablero.
Cohibidas en su movimiento, las negras no tienen tiempo
de llegar allí con la velocidad que lo hacen las piezas
libres blancas. El resultado en el momento del recuento,
en el flanco de rey, el contrapeso está a favor de las
blancas, y de un modo decisivo irrumpen en el campo
del enemigo.

48. ... , Tl T 49. AxA, PxA

En caso de 49 . . . . , D X A, el peón negro 2T hubiera


perecido antes.
Herencia ajedrecística de Alekhine 149

50. T7T, Tl T-l R 51 . e5R !, el A

Se hace preciso retroceder un puesto más, el punto


4R. No se podía tomar en 4R, ya que, en este caso,
después de 52. PA X C!, D1A; 53. D5C se pierde el
peón 3C.

52. TST !,

"Ahora la posición exige el cambio de damas y no de


torres".-Alekhine.

��:
54.
CJA,
ese,
T2e
TRl eD
T2R
55.
56.
D5R !,
PA x D,
DxD
Rl T
57. TSe, P5e

Al percatarse que después de la inevitable duplicidad


de las torres por la octava horizontal las cosas marchan
mal, las negras deciden lanzarse al contraataque en
el otro flanco. No obstante, esto conduce a un inespe­
rado final de mate.

58. Tl T-ST, T2R-1 R 60. R3A, R3T


59. P x P, R2T 61 . e7A !,

Organizando una red de mate. Esto gana más rápida­


mente que 61. C x P.

61 . Tl T 62. e6D, TRl e

(Ver diagrama siguiente.)

63. Tl T !, e20 64. TRl TD !,

Las negras se rinden.

De esta misma forma, por sucesivos ataques en los


flancos, ante el amplio contrapeso, resolvió Alekhine la
siguiente histórica partida con Capablanca en el torneo
AVRO de 1938.
150 A. Kotov

N.o 33. DEFENSA FRANCESA

Alekhine Capablanca
AVRO, torneo 1938.

l. P4R, P3R 3. C2D, C3AR


2. P4D, P4D 1
La continuación más empleada en la presente posición
es la jugada 3 . . . . , P4A, que conduce al aislamiento del
peón 4D. Por lo visto, Capablanca no quería colocarse
a la defensiva en la partida con Alekhine ya desde el
principio, y decidió recibir un juego más complicado sin
debilidades claramente expresadas.

4. PSR, CR2D 1 6. P3AD, C3AD


5. A3D, P4AD 1 7. C2R,

Mejor distancia entre los caballos, uno va a 2R y


otro a 3AR.

7. . . . , D3C 9. P x P,
1
A5C+
8. C3A, PxP 1 0. RlA,
Herencia ajedrecística de Alekhine 151

Todo esto era conocido hace mucho en teoría. En


lugar de la pérdida del enroque, las blancas podían
continuar provechosamente 10. A2D, con mejor posición.
Sin embargo, se ve que Alekhine tiende hacia una
lucha aguda.

10. . . . , A2R

Capablanca apareció claramente inmovilizado ante la


presente variante. La teoría recomiendo jugar aquí 10.
. . . , P3A o incluso 9 . . . . , P3A, sin jaque en 5C con una
lucha complicada.

11. PJTD, ClA

Continúa la misma política de no querer dejar llegar


las debilidades a la distribución de sus pieazs. Aquí
había que j ugar 11. . . . , P4A, ó 11. . . . , P3A.

12. P4CD, A2D 13. AJR, ClD?

Con la ingenua esperanza de que el enemigo dejara


llegar la simplificación de la posición, con el cambio
de alfiles blancos. No es de extrañar que, perdiendo
tantos importantes tiempos, y organizándose únicamente
con pasivos movimientos de las piezas ya desarrolladas,
Capablanca se encuentre pronto en una situación deses­
perada.

14. CJA, P4TD

La primera j ugada activa, pero que ya trae poca ayu­


da. Las negras han desarrollado tan mal sus piezas
que ya les resulta difícil reorganizarlas. Así a 14. . . . ,
C3C, correspondería la enérgica 15. P4TR y, seguida­
mente, 16. P5T, provocando la defensa en el flanco de
rey.

15. C4TD, D2T


Otra vez un retroceso desafortunado. Dejaba más
posibilidades para la defensa 15 . . . . , A x C ; 16. D X A + ,
C3AD ; 17. R2R, TlA, con l a consiguiente 18. . . . , C2D
y 19 . . . . , 0--0.

16. PSC, PJCD


152 A. Kotov

De otro modo, con la jugada 17. P6C, las blancas


hubieran encerrado en seguida la dama y las torres
del enemigo.

1 7. P3C,

"Compartiendo" con las piezas del enemigo, el flanco


de dama y casi completamente suprimiéndoles la posi­
bilidad de cambiar de sitio, Alekhine comienza las ope­
raciones en el flanco de rey. Ante todo mejora la situa­
ción de su propio rey y organiza la unión con las torres,
para caso de lucha por la vertical "AD".

17. . .. , P4A

Capablanca ha esperado mucho para esta jugada,


ahora la realiza en el momento en que el asunto· está
extremadamente mal, por eso, prácticamente, ese movi­
miento ya no puede ayudar. Pero las otras continuacio­
nes no eran mejores.

1 8. R2C, C2A 1 9. 020 !,

Alekhine previene un pequeño intento de actividad del


enemigo. Ahora entorpece radicalmente . . . , P4C con la
consiguiente ... , C3C.
Herencia ajedrectstica de Alekhine 153

1 9. .. ., P3T 20. P4T, C2T

En caso de 20. . . . , P3C, las negras ya no podrían


realizar esta jugada con el caballo, que les permite,
por fin, enrocar. Ahora, en las blancas aparece la posi­
bilidad de hacerse con el control sobre la importante
casilla 6CR. Así sucede siempre: una posición mala es
como desnudar un santo para vestir a otro.

21 . PST!,

Dejando llegar los caballos negros a 4C y 5R, pero


recibiendo, en cambio, la posibilidad de reafirmar su
caballo en 6C y, asimismo, de peresentarse el caso, apro­
vechar la libre diagonal 1CD-7TR.

21 . . . . , CA4C

Resulta precipitado. Correspondía primero enrocar,


para en caso de 22. C4T, cambiar en seguida este caballo,
no dejándolo llegar a 6C. Entonces todavía se podía
luchar por el punto 6C, mientras que ahora las blancas
se han hecho duefias absolutas.

22. C4T, CSR 23. D2C, R2A

Resulta claro que ahora no se puede tomar el caballo


4TR, porque en este caso 24. P x A arrebata al caballo
negro 5R todas las casillas de retroceso y se le gana
con la jugada P3A. Pero en vez de la jugada hecha era
mejor enrocar, ya que en 2A el rey negro se siente mucho
peor que en el rincón del tablero.

24. P3A,

(Ver diagrama siguiente.)

Ha comenzado un decisivo ataque en el flanco de


rey. El caballo es alejado de 5R y, al mismo tiempo, se
abre la diagonal 1CD-7TR.

24. ..., C5R-4C 26. A6C + !,


25. P4C !, PxP

Todas las contestaciones de las negras eran obligadas.


Con un importante jaque sucesivo, Alekhine despoja al
154 A. Kotov

enemigo de la posibilidad de sacar la torre 1TR y lo


castiga por el hecho de que no ha enrocado a tiempo.

26• . . . , Rl C

Desagradable, pero obligado retroceso. Naturalmente


que la situación del rey en lA ofrecía muchos motivos
combinados y en este caso 26 . . . . , RlA; 27. TRlAR! con­
ducía a una fácil victoria. Por ejemplo : 27. . . . , P x P + ;
28. C X P, RlC ; 29. C X C, C x C ; 30. AxC, AxA; 31.
C X PI, D X C ; 32. D2AR. En caso de 27 . . . . , P6C ; 28.
P4A, C5R; 29. P5A, A X C, 30. P X P + , el triunfo de las
blancas tampoco admite dudas.

27. P4A, C6A?

Equivocación inadvertida, elegantemente rechazada por


Alekhine. Llegado a 6A, el caballo perdió la posibilidad
del retroceso y se ve obligado a sucumbir rápidamente.
Sin embargo, es dudoso que después de 27 . . . . , C2A ;
28. A3D, las negras pudieran contar con salvar su difi­
cil posición.

28. A x C + !,

Ganando un tiempo para llevarse el caballo de 4TR.


Si ahora 28 . . . . , R X A, entonces 28. DlC + , RlC ; 29. C6C.
Herencia ajedrecística de Alekhine 155

28. . . ., TxA 30. TD1 AD,


29. C6C, A1 D

Sin darse prisa con la realización de la maniobra deci­


siva, Alekhine se asegura primero el control sobre la
abierta línea.

30. . . ., A1 R 31 . R3C !,

El rey blanco ha decidido entendérselas él mismo con


el agresivo caballo, introducido sin ceremonias en sus
dominios. El enemigo está sin fuerzas para emprender
algo y está obligado a contemplar únicamente su jinete,
valiente pero sin juicio.

31 . . . ., D2AR 32. R x P, CST

No era mejor 32. . . . , C4C ; 33. P X C, D4A+ ; 34. R3C,


con amenaza 35. TlAR.

33. C x C, D x PT + 35. C3AR, P4T


34. R3C, D2A

Al hacer esta jugada, Capablanca ha dejado pasar el


tiempo. De todas formas, su situación era ya comple­
tamente desesperada.
Lo mismo que en las dos partidas precedentes, en
156 A. Kotov

el siguiente encuentro de Alekhine con el maestro Kmoch,


el ataque del campeón ruso se desarrolla en ambos
flancos, lo que en gran parte facilita el enorme contra­
peso del atacante en la distancia.

N.o 34. DEFENSA HOLANDESA

Kmoch Alekhine
Semmering, 1926.

1. P40, P4AR 2. 030,


Estupenda y poco frecuente jugada yendo a abrir con
los mejores principios el desarrollo de apertura. La dama
en 3D , no tiene nada que hacer. Las negras están sola­
mente obligadas a prevenir el rápido P4R.

P40 4. C3AR,
�: A4A, P3R
Alekhine considera más consecuente 4. D3CR, C3TD ;
5. P3R, P3A, y si 6. A X C, entonces 6 . . . . , D4T + .

C3AR 6. A2R,
�: P3il, A30
Despreciado el normal desarrollo de las piezas, las
blancas inician antes de tiempo las operaciones en el
centro. Más natural era el desarrollo por el camino 6.
P4A, y 7. C3A.

6. .. . , 0-0 7. CSR, P4A!


Las negras hacen jugadas fuertes y sencillas. El pen­
samiento de las siguientes maniobras de Alekhine es
echar al caballo de 5R y, de este modo, arrebatar a las
blancas las piezas activamente distribuidas en el centro.

8. P3AO, C3A 1 0. C20-3A, C20!


9. C20, 02A
Sencillo y lógico. Ahora se cambia no solamente el
caballo 5R, sino también el alfil. En total, las blancas
pierden dos piezas avanzadas en el límite de su cons-
Herencia ajedrecística de Alekhine 157

trucción de peones, y, en seguida, quedan en una posi­


ción muy pasiva.

11. CxC20, AxC 13. �'


12. AxA, OxA

13. . . .
, P5AO!
Comienzan las operaciones activas en el flanco de
dama. Las negras juegan en la presión del enemigo, lo
que es mucho más fuerte que las operaciones como 13 .
. . . , P4R.

14. 020, P4CO 15. ClR, P4C!


No solamente la jugada de ataque, sino también la
previsión del posible ataque del caballo en 5R, después
de 16. P4AR.

16. P4A, P5CR 17. P3CO,


Si las blancas hubieran permitido las jugadas P4TD
y P5CD, pronto no tendrían la posibilidad de respirar.
Pero también ahora, en vista de la enorme distancia de
la supremacía de las negras, la lucha por la línea "CD",
que se está abriendo, termina en su favor.
158 A. Kotov

17. , TR1CO 19. PxP,


18. c2A, P4TO
Cambio prematuro, que simplifica el problema de las
negras. Es sabido que se debe abrir la línea únicamente
cuando se han realizado antes maniobras que preparan
la posibilidad de realizarlo provechosamente. A la luz
de esto, a las blancas les hubiera sido mejor duplicar
antes las torres en 2CD y lCD.

19. . . ., PCxP 21. OlR, AST


20. TR1C, C2T 22. AlO,
No daba continuo jaque 22. D4T, A X C ; 23. D5C + ,
R2A; 24. D5T + , RlA; 25. D6T + , RlR y e l rey s e marcha
de la persecución.

22• . . . , 02R
Marca el camino del caballo a través de 4C(1A)-3D
a 5R.

23. 020, C4C 26;- A2R, P4T


24. T2C, T2C 27. P3C,
25. T1T-1C, T1T-1C
Ofrece una absoluta respuesta al ataque en el fianco
de rey y permite a Alekhine hacerse con el resultado
de la partida, por el ataque directo al rey. En caso de
juego pasivo por parte de las blancas, Alekhine se dis­
pone a trasladar a su rey a lAD y, seguidamente, jugar
A X C y D6T.

27. ..., PST! 28. P4R�


(Ver diagrama siguiente.)

El intento de liberarse encuentra una resistencia abso­


luta. Ante otras jugadas de las blancas hubiera decidido
la suerte de la línea abierta "TR" y la lucha de las
piezas pesadas negras por la línea "TR", apoyada por
el caballo desde 5R.

28. ... , C30!


Este saltito del caballo negro les va a costar dos
peones a las blancas.
Herencia ajedrecfstica de Alekhine 159

29. TxT, TxT 31. OlA,


30. TxT, DxT
"O 31. PXPD, D7C; 32. A1D, C5R; :,l3. D2R, PXP;
34. C3R, DSA, y las negras ganan".-Alekhine.

31. . ,
. . CxP 33. PxP, CxPC
32. C3R, PxP 34. R2A, C5R+
Las. blancas se rinden.

La notable distancia de contrapeso recibida por Ale­


khine ya en la apertura de la partida siguiente, hace
posible la realización del ataque en el flanco de dama,
con enérgicas medidas al otro lado del tablero.

N.o 35. DEFENSA UFIMSEV

Alekhine Mikenas
Folkestone, 1933.

1. P4R, P3CR 4. C3A, C2D


2. P4D, A2C 5. A4AD, P3R
3. C3AD, P3D
160 A. Kotov

Posible apertura que se encuentra a veces en los


torneos de partidas. No contando con las pérdidas de
tiempos, las negras se reservan la posibilidad de pasar
en el futuro tanto a la realización desde P4R como al
esquema desde P4D.

6. 0-0, C2R 7. P4TO!,


"Jugada muy importante en posiciones de esta clase,
merecedora de atención por parte del estudioso. Su fina­
lidad consiste en entorpecer el "fianchetto" del alfll­
dama (P3CD, P5T, en beneficio de las blancas) e incitar
a las negras con la jugada P4TD a la debilitada casilla
4CD".-Alekhine.

7. . . ., 0-0 10. P3T, P3AO


8. AlR, PlTR 11. A4A, P40
9. 020, R2T
Por fin, las negras determinan su estructura de peones
en el centro.

12. AJO, P3T?


Deja llegar al alfil blanco a 6D, lo que conduce a
cohibir la posición de las negras. Hacía falta prevenir
atentamente tales posibilidades y jugando 12 . . . . , C3AR
quedarse con la posición cohibida, pero, así y todo, con
una completa preparación para pasar en el futuro a
la libertad de irrumpir con los peones. Ahora, la dis­
tancia para las maniobras de las negras se convierte
en mínima.

13. A60, P4AR 14. PSR, T1CR


(Ver diagrama siguiente.)

15. P4T,
Tiene en cuenta la jugada atacante, sin embargo, en
el pensamiento de Alekhine está únicamente el deseo
de prevenir el desarrollo de la iniciativa del enemigo en
el flanco de rey. El verdadero ataque está dispuesto a
llevarlo en el otro extremo del tablero. Aquí las blancas
tienen una curiosa jugada 15. D5C que, no obstante, no
da nada en vista de la respuesta 15 . . . . , AlA.

15. ... , P3C!


Herencia ajedrecística de Alekhine 161

Procurando desenredar algo sus piezas por el procedi­


miento 16 . . . . , C1A, lo que no podía hacerse en seguida,
en vista del efectivo rebatimiento 16. D5C ! .

16. C2R, C1A 17. P5TD,


Debilita definitivamente los campos del enemigo.

17. . . ., P4CD 18. P3CR!,


Está jugando con doble intención :

l.-Prevenir por el procedimiento del traslado de las


torres a 1 TR cualquier posible iniciativa de las negras
en el :flanco de rey. 2.-Distribuir las piezas en posición
de combate para caso de que surjan medidas de contra­
ataque de las negras.

T1T 20. T1T, R2A


��: R2'c, R1C 21. C4A,
Por ahora es únicamente una demostración, pero es
preciso decirlo claro, una demostración bastante amena­
zadora. Concluyendo unas medidas profilácticas en el
:flanco de rey, Alekhine se lanza a un decisivo ataque
al :flanco de dama.
11
162 A. Kotov

21. TlCR 22. P3C!,


Muy simpática jugada. Las negras comprenden que
el inevitable P4A abrirá la línea en el flanco de dama
y entonces no podrán defender su rey, que ocupa ya
demasiado la posición abierta. Esto se complicará toda­
vía ya que la extrema limitación en la distancia no
dará a las negras la posibilidad de maniobrar con
prontitud y preparar sus piezas para la defensa de la
brecha abierta en sus construcciones defensivas.

22. ... , C2T 24. TDlAD, AlAR


23. P4A, A2D 25. A2R!,
El alfil cede su camino al caballo 4A en su ·c.rayec.toria
hacia el posible punto 5AD. Al mismo tiempo, las blancas
entorpecen la jugada 25. . . . , P4C a lo que corresponde
26. PTR X P, C X P ; 27. C X C + , PxC (27 . .
. . , TxC ; 28.
C3T, y 29. A5T + ) ; 28. A5T + , R2C ; 29. C X PR + , A X C ;
30. D x C + , con mate en unas cuantas jugadas. (Variante
de Alekhine).

25. ... , ClA 27. AxA, CxA


26. PxPD, PAxP 28. T5A,
Solemnidad en las ideas estratégicas de las blancas.
Sus torres señorean sin entorpecimiento en la línea
Herencia ajedrecística de Alekhine 163

abierta, al tiempo que las negras no pueden oponer


nada a la distanciada presión de las blancas.

28. ... , C2TD 29. C3D, R2C


Las negras tienen que cuidar, asimismo, del flanco de
rey ¡ cuánto bueno ! , las blancas pueden organizar tam­
bién una irrupción.

30. TRlAD, TlA 32. D3A,


31. TxT, AxT
"Todos los cuadros negros de la posición de las negras
están abiertos para las piezas del enemigo. No es de
extrañar que las negras se decidan a un arriesgado
intento de· contraataque en el flanco de rey".-Alekhine.

32. ..., R2T 34. D6C, D2R


33. OSA, T2C 35. CSA,
Las pérdidas materiales son inevitables para las negras.
A Alekhine le queda rechazar únicamente la lastimosa
salida del enemigo en el flanco de rey.

35. , P4C 37. ClR!,


36. ii x P, PxP
Sin olvidar la imprescindible escrupulosa defensa. En
caso de 37 . . . . , P5CR el caballo, a través de 3D, llega
a 4AR, y a 37 . . . . , P5A corresponde 38. A4C.

37. . .., C3C 39. TlTR+, RlC


38. CR3D, PSA 40. A4C,
Liquida totalmente los intentos de ataque del enemigo.
Mikenas, comprende lo desesperado de su situación y va
a un sacrificio temerario.

40. ... , PxP 43. C2A, T2A


41. PxP, CST+ 44. CxPR, R2T
42. PxC, PxP 45. 060,
Las negras se rinden.

El ataque, desarrollado igualmente en todo el tablero,


trajo a Alekhine la victoria en la siguiente partida.
164 A. Kotov

N.o 36. DEFENSA INDIA DE DAMA

Roselli Alekhine
Praga, 1931.

1 . P40, C3AR 4. A2C, P4A


2. C3AR, P3CO 5. PxP,
3. P3CR, A2C
Un cambio que justifica solamente al peón negro 3C
para completar el ataque en el centro. Más lógico,
5. 0-0, conformándose con la simplificación de la posi­
ción después de 5 . . . . , P X P ; 6. C X P, A X A ; 7. RxA.

PxP 8. A2C, O-O


�: P4Ao, P3C 9. 0-0, P30
7. P3C, A2C 1 0. C3A, C3A
El desarrollo de las piezas de ambos bandos está ter­
minado ; el juego, ejemplarmente igualado. Las futuras
operaciones se desarrollan en torno _a los campos cen­
trales.

020,
11. C5CO 1 4. RxA, 020
TR1O,
1 2. TlC 1 5. P3A, TRlO
13. C4TR, AxA 1 6. P4R,
Permite a Alekhine recibir el contrapeso en el centro
y determinar con esto ambas supremacías de sus posi­
ciones. Era más prudente maniobrar no determinando,
por ahora, la configuración de los peones en el centro.
Desde este' punto de vista surgía la jugada 16. RlT, con
tal de trasladar al caballo 4T a través de 2C a 4A
y 5D.

1 6. . . .
, P4R!
En un cercano futuro, el caballo de las blancas ocu­
pará la casilla 5D y su oponente negro se reafirmará en
5D. Parecía que no cambiaba nada si, en uno y otro lado
surgía el caballo central. Sin embargo, no era así; en
esta doble operación las negras ganan notablemente.
Mientras las negras pueden trasladar sin oposición el
caballo 4D, a las blancas no les resulta tan sencillo
hacerlo con el caballo 4D porque, a resultas de este
cambio, surge un fuerte peón pasado 5D. Se comprende
Herencia ajedrecística de Alekhine 165

por qué Roselli, en el futuro, no se atreve a cambiar el


caballo de las negras.

1 7. AlA,
Decisión justificada, el alfil en la diagonal TD-TR no
tiene ya nada que hacer.

1 7. C3A 19. A3R,


18. D2AR,
. . .,

eso

19. . . ., TlAR!
Comienza el plan del amplio ataque. Sólidamente rea­
firmado en el centro y teniendo en la semi-abierta línea
la torre lC dispuesta, en caso necesario, a realizar un
vivo juego en el flanco de dama, y también rechazar
cualquier intento de actividad de las blancas, Alekhine
se decide al asalto de peones en el flanco de rey. En
unas jugadas su ataque se desenvuelve por todo el
frente.

20. 020, ClR 21 . A6T,


Operación carente de finalidad, ya que el alfil 2C
no les hace falta . a las negras. Correspondía, de todos
modos, pensar en la posibilidad de realizar la irrupción
P3TD y P4CD.
166 A. Kotov

21. , C2A 24. R1T, P4A


22. llAR, P3A 25. C2C, P5A
23. AxA, DxA 26. P4CR ,
Tomar en 4A dos veces no se puede lógicamente en
vista de D3T y la ganancia de una pieza.

26. ... , P4C 27. R1C,


Roselli reconoce su impotencia y espera acometer al
enemigo. A las blancas les conviene jugar 27. P4TR,
claro está, porque cuando el caballo 5D cohiba la
maniobra de sus piezas, las negras podrán aprove­
char más rápidamente la línea abierta en el flanco
de rey.

27. ... , P4TR 29. C1R, R2A


28. P3TR, D3T 30. T2A, PxP
Por fin aparece en el tablero la línea abierta y las
negras, señoreando en esta importante arteria, irrumpen
con sus piezas en el campo del enemigo.

31. PTxP, T1TR 34. OxT, T1TR


32. T2T, D2C 35. D2C,
33. T1D, TxT

35. ... , T5T


Herencia ajedrecística de Alekhine 167

Domina el final. De la amenaza D3T, con el consi­


guiente T6T y T6C, no hay defensa. En su desespera­
ción, las blancas deciden sacrificar la calidad.

36. TxC, PRxT 37. C2R, P6D!


No permitiendo bloquear la posición con la jugada
C3D.

38. CxPD, DST+ 39. CRlA, C3R


Con la llegada al centro del terror de este caballo,
la resistencia de las blancas disminuye notablemente.

40. D2C, DxD 41. CxD, T6T


Las blancas se rinden, en vista de la inevitable pérdida
del peón 3A.

El ataque de las piezas en ambos flancos

Hemos examinado ejemplos donde el ataque a los dos


flancos transcurrió ante una enorme distancia de supre­
macía. No obstante, esto no es una condición obligatoria
en el ataque de dos flancos ; se dan casos, con frecuencia,
en que el atacante lleva la batalla en condiciones en
que el enemigo tiene todavía bastante distancia de liber­
tad. Aprovechando la supremacía en el desarrollo o en
mejores disposiciones de las piezas (porque para atacar
siempre hay que tener algún contrapeso), la parte ata­
cante sistemáticamente ataca con sus piezas las debi­
lidades del enemigo, ya en uno u otro extremo del tablero.
Combinando los golpes en ambos flancos, los atacantes
consiguen por fin su objetivo, creando tales amenazas
que el contrario no está en condiciones de rechazar, y
que traen el contrapeso suficiente para las blancas. Tal
combinación de juego en ambos flancos exige una gran
penetrabilidad en las menudencias de la posición, sabien­
do maniobrar y encontrar ocultas posibilidades de ataque.
Precisamente en tales partidas aparecía con todo su
brillo la amplitud de los pensamientos estratégicos de
Alekhine, la profundidad de sus pensamientos, lo escogido
de su idea combinada.
168 A. Kotov

En calidad de primer ejemplo de tal juego, vamos a


examinar el siguiente encuentro de Alekhine con el
maestro Freyman.

N.o 37. APERTURA ESPAI\IOLA

Alekhine Freyman
Colonia, 1911.

1. P4R, P4R 4. 0-0 P3D


2. C3AR, C3AD S. C3A,, A2D
3. ASC, C3A 6. P4D, PxP
Correcto 6. A2R y solamente en caso de 7. T1R,
tomar el peón 40. Esta pequeña inexactitud permite a
Alekhine recibir una notable supremacía.

7. CxP, A2R 8. CxC, AxC


o 8. . . . , P x c ; 9 . A4T !

9. D2R, 0-0 11. TR1R,


10. ASC, T1R
Si ahora 11. C x P, entonces 12. A X AD.

11. . .. , P3TR 13. AXA, PxA


12. A4AR, C2D 14. D4A!,
<Ver diagrama siguiente.)

Comienza el enérgico asalto en el centro del tablero.


Con la primera jugada, las blancas garantizan a su
caballo la casilla 5D.

14. . ..
,
A4C
Defensa táctica. No se puede jugar 15. A X A, D x A ;
16. D X PAD a causa de 16 . . . . , C4R y después de 17 . . . .,
C6A + .

15. A3C, P4AD?


Las negras se conforman inútilmente con debilitar el
punto 40. Jugando 15 . . . . , A7D; 16. T2R, A X C ; 17
Herencia ajedrecística de Alekhine 169

D X A, T1C; 18. P3C, T3C, Freyman podía haber recibido


una posición completamente defendible.

1 6. TOlO,
Dos torres blancas en el centro crean una situación
tirante. Ya amenaza al rápido P5R..

1 6. . ' A3A 1 9. eso, A2C


1 1. pjc, C4R 20. 06T!,
1 8. 02R, P3C
Después de asegurar a sus piezas la posición central,
Alekhine emprende las operaciones hacia los :flancos. Las
blancas amenazan con ganar el peón por el procedi­
miento 21. A x C, y 22. D7C. Esta amenaza trae como
consecuencia que las negras tienen que conformarse con
la debilitación de su frente de peones en el centro del
tablero.

OlA 22. C3R, TlO


��: DST, P3AO 23. A4T!,
¡ Una fina maniobra 1 Ya que la torre no puede retro­
ceder a 2D en vista de 24. P4AR, con esta jugada surge
una mayor debilidad de los peones del :flanco de rey.
170 A. Kotov

Destrozando de esta forma todo el frente de peones


del enemigo, Alekhine empieza pronto a "recoger el
fruto".

23. . . ., P4C?
Si las negras se veían obligadas a mover sus peones
en el flanco de rey, entonces correspondía preferir 23 .
.. . , P3AR, no permitiendo la realización del hendido
"agujero" en 4AR.

24. A3C, D3R 25. C5A,


Habiendo jugado un papel importante en el ataque
en el centro y en el flanco de dama del enemigo, este
caballo tuvo tiempo de llegar al flanco de rey donde
tenía que llevar un golpe definitivo.

25. . . ., AlA 26. D3A,


Y otras piezas blancas se dan prisa por integrarse al
ataque del flanco de rey enemigo. Amenaza 27. P4A
con el descubrimiento de la línea del flanco de rey,
porque entonces 27 . . . . , C3C no es provechoso, en vista
de 28. P x P, P x P ; 29. A x PD ! , y ganan. Por eso el
maestro Freyman va a la futura debilitación del flanco
de rey.

26. . . ., P3A 27. P4A, C3C


Si 27 . . . . , C2A, entonces decide el ataque de la dama
a través de 3AR a 5TR.

28. CxPT+ !, AxC 30. PxC, AlA


29. P5A, D2R 31. D4A+ , R2C
O 31. . . ., RlT; 32. TlAR ! , con el siguiente traslado de
la dama a través de 2R a 5T.

32. AxP,
Las negras se rinden.

Como tema de estudio de las maniobras en ambos


flancos, aparece la partida 34 del match Alekhine-
Herencia ajedrecística de Alekhine 171

Capablanca, habiendo ganado la cual, el campeón ruso


conquista el derecho de llevar el título del más fuerte
ajedrecista del mundo.

N.o 38. DEFENSA ORTODOXA

Alekhine Capablanca
Ultima partida del match 1927.

1. P4D, P4D 4. ASC, CD2D


2. P4AD, P3R 5. P3R, P3A
3. C3AD, C3AR 6. P3TD,

Esta tranquila jugada fue encontrada en tiempo del


match y reconocida como el mejor método para prevenir
la defensa de dos filos de Cambridge. Las negras, de
todos modos, no están obligadas a continuar 6 . . . . , D4T,
se tienen bastantes esperanzas de camino hacia la igual­
dad del juego.

6. ..., A2R 9. AxP, C4D


7. C3A, 0-0 10. AxA, DxA
8. A3D, PxP
Las negras dejan escapar en vano la posibilidad del
cambio de caballos por el procedimiento 10. . . . , C x C.
172 A. Kotov

Esto estaría en el estilo de todo sistema de descargar


de Capablanca. Las blancas aprovechan ahora la ven­
taja de la jugada 6. P3TD y retroceden con el caballo
a 4R al tiempo en que el enemigo no tiene un juego
simplificado con la jugada 11 . . . . , D5C + .

11. C4R, C4D-3A 1 2. C3C, P4A


Contiene el desarrollo del alfil 1AD. Deja más posi­
bilidades 12. . . ., P3CD.

1 3. 0-0, C3C 1 5. CxP, P3C


14. A2T, PxP
Disponiéndose a jugar . . . , P4R y, por eso, arrebata al
caballo blanco la casilla 5AR.

1 6. TlA,
Ocupa lalínea "AD " que aparece como la primera
señal del ataque gradual al flanco de dama. Las negras
toman en seguida medidas urgentes para debilitar la
influencia de la torre AD en la jugada de la futura
lucha.

A2D 1 8. P4R, P4R


TOlA 1 9. C3A, R2C
Herencia ajedrecística de Alekhine 173

En el futuro pernúte a las blancas combinar un peli­


groso ataque al núsmo tiempo en los dos flancos. Corres­
pondería continuar las empezadas operaciones de sim­
plificación y, ante todo, cambiar las cuatro torres después
de 19 . . . . , T x T ; 20. T X T, T1AD.

20. P3T, P3TR

De nuevo la misma calma. Capablanca no se percata


de la fina intención del enenúgo.

21 . 020 !,

¡ Elegante maniobra ! La primera y la más comprensible


finalidad de esta jugada: salir con la dama a 5TD y
atacar en seguida los dos peones 2T y 4R. Al mismo
tiempo la modesta aproximación de la torre a una
casilla encierra en sí la inesperada combinación de un
asalto en el otro flanco. En caso de que las negras se
defendieran en el flanco de dama, por ejemplo, 21. . . . ,
A3A, correspondería 22. C4T ! , y a las negras les resulta
difícil prevenir sin detrimento el salto del caballo a 5A.
Por ejemplo : 22 . . . . , C x P (22 . . . . , A x P ; 23. D3R ! ó 22.
A2D; 23. D5T); 23 . CT5A + , P X C ; 24. C X P + , R3A ;
25. D X P + , R X C ; 26. P4CR, mate.

Sin embargo, las negras tenían defensa. La jugada


21. . . . , C5T, indicada por Em. Lasker, daba a las negras
la posibilidad del contraataque en el peón 2C y retener
la supremacía material. El que Capablanca, en la partida
decisiva de su carrera ajedrecística, no encontrara una
continuación relativamente fácil, demuestra que el cuba­
no, al final del match, estaba completamente deshecho
y aplastado moralmente por la fuerza de voluntad y
la irrebatible inventiva del enemigo.

A3R? 23. 05T,


OxA

Gana un peón. Las siguientes ingeniosas tentativas de


Capablanca de establecer un contrapeso material, encuen­
tran respuestas de las blancas no menos escogidas, que
de todos modos conservan tm importante peón de más.
174 A. Kotov

23. CSA 26. OxP, CSA


24. D·xPT,
r

CxPC 27. 04C, TlTD


25. TxT, TxT 28. TlTD, OJA!

Fina defensa. Por un lado, las negras atacan el peón


4R ; por el otro, amenazan por el procedimiento T5T y
DlT arrebatar el peón 3TD.
De todos modos, Alekhine consigue retener la supre­
macía.

29. P4TO!,
La táctica al servicio de la decisión de los problemas
estratégicos. Llevando el peón a 4TD, Alekhine, al mismo
tiempo defiende el peón 4R con la ayuda de la astucia
táctica.

29. ..., CxP 30. CxP!,


Arrebata el peón recientemente perdido y, al mismo
tiempo, esquiva una astuta trampa. A la parecida for­
tísima 30. cxc, DxC ; 3 1 . TlAD, hubiera correspondido
3 1 . . . . , TlAD ; 32. C X P ? , C6R ! ; 33. D X D, T X T + ; 34.
R2T, C8A + ; 35. RlC, C6C + y 36 . . . . , C X D, variante
de Alekhine.

30. .. . , OJO!
Herencia ajedrecística de Alekhine 175

Capablanca juega esta parte muy obstinadamente. De


todas las posibles simplificaciones de la posición, escoge
aquella que dejaría en el tablero sólo las piezas pesadas.
Y ante éstas, como se sabe, lo más difícil es conseguir
un peón de más.

31. DxC, DxC 34. C4R, exe


32. T1R, C3D 35. TxC,
33. D1AD!, D3A
La situación se ha simplificado en extremo. Como
resultado del ataque combinado en ambos flancos, las
blancas han quedado con un peón de más. Naturalmente,
no era tan fácil conseguirlo, pero Alekhine ha resuelto
brillantemente el problema. La última parte de esta inte­
resante partida fue así: 35 . . . . , T1CD ; 36. T2R, T1TD;
37. T2T, T4T; 38. D7A ! , D3T ; 39. D3A + , R2T; 40. T2D ! ,
D3C ; 41. T7D, D8C + ; 42. R2T, D1C + ; 43. P3C, T4AR ;
44. D4D, D1R ; 45. T5D ! , T6A ; 46. P4T, D1TR; 47. D6C ! ,
D8T; 48. R2C, T3A ; 49. D4D ! , D X D ; 50. T X D, R2C ! ;
51. P5TD, T3T; 52. T5D, T3AR; 53. T4D, T3T; 54. T4T,
R3A ; 55. R3A, R4R; 56. R3R, P4T ; 57. R3D, R4D; 58. R3A,
R4A; 59. T2T, R4C; 60. R3C, R4A; 61. R3A, R4C; 62.
R4D ! , T3D + ; 63. R5R, T3R + ; 64. R4A, R3T; 65. R5C,
T4R + ; 66. R6T, T4AR ; 67. P4A, T4AD ; 68. T3T, T2A ;
69. R7C, T2D; 70. P5A, P X P ; 71. R6T, P5A ; 72. P x P,
T4D ; 73. R7C, T4AR ; 74. T4T, R4C; 75. T4R ! , R3T; 76.
R6T, T X PT ; 77. T5R, T8T; 78. R X P, T8CR; 79. T5CR,
T8TR; 80. T5AR, R3C ; 81. T x P, R3A ; 82. T7R. Rinden.
En los siguientes dos ejemplos, Alekhine ha unido el
ataque de piezas en un flanco con operaciones por la
línea abierta, que se encontraba en el otro extremo del
tablero.

N.o 39.. DEFENSA ORTODOXA


Alekhine Bogoljubov
Bad Naugheim, 1937.

1. P4D, P4D 5. C3A, P3TR


2. P4AD, P3R 6. A4T, O-O
3. C3AD, C3AR 7. P3R, P3CD
4. A5C, A2R
"Este sistema de apertura era empleado con frecuencia
y provecho por Tartakover. Ante éste las blancas cam­
bian algunos procedimientos de la lucha, pero ninguno
resulta convincente para rechazar.
176 A. Kotov

En la presente partida decidí permitir a las negras


que realizaran su plan de desarrollo, más exactamente,
la primera parte de este plan, consistente en las jugadas
A2CD, CD2D, P4A y, seguidaménte, procurar obtener
ventaja solamente de un detalle de la posición, de que
la dama de las negras no dispone de la diagonal 1D-4T
y, por eso, no le sería fácil encontrar una casilla pro­
picia. El desenvolvimiento de la partida demostrará
hasta qué punto la realización de esta idea resultó ven­
tajosa. Por sí misma, la partida carece de finuras técnicas
y de momentos emocionantes, sin embargo, no es en
absoluto aburrida, y traerá provecho a los estudiosos de
la teoría".-Alekhine.

8. T1A,
Actualmente, se hace el cambio con más frecuencia
en 5D.

8. ... , A2C 11. 0-0, CD2D


A2R,
9. PxP 12. D2R, CSR
10. AxP, P4A 13. CxC,
Había aquí, a disposición de las blancas, una curiosa
posibilidad de jugar 13. A3CR, con tal de que a 13 . ... ,
ex A tomar este caballo con el peón 2A. Por este cam­
bio se abriría la línea "AR " para el ataque al rey de las
negras, y su propio rey se escondería confiado después
de P3TR en la "covacha", tapada por todas partes,
2TR.
Herencia ajedrecfstica de Alekhine 177

13. ···1 AXA


O 13 . . . . , A X C ; 14. A3CR.

14. C3A!1 AlAR 16. A6T1


15. TR1D1 D2R
He aquí el motivo del retroceso del caballo blanco
con la jugada 14 : se cambiarían los alfiles blancos y
aparecerá una peligrosa presión sobre el debilitado campo
de las casillas blancas del flanco de dama.

16. ."1 TD1C 18. C4R!1


17. AxA1 TxA
Prescindiendo del aislamiento del peon 4D, Alekhine se
adueña de la única línea abierta, lo que otorga a las
blancas una prolongada iniciativa.

18. ···1 PxP 19. PxPI T1D


Permite a Alekhine debilitar la posición de peones del
enemigo en el flanco de rey. Esta debilitación podía
haberse prevenido retrocediendo con el rey a 1 T o con
el caballo a 1CD y únicamente después de empezar la
reagrupación de sus piezas. La falta de cuidado de Bogol­
jubov pone en manos de las blancas varias ventajas,
porque les permite, además de la operación por la
línea "AD", comenzar el ataque en la abierta posición
del rey de las negras.

20. D6T!1 C1C 22. D2R1


21. CxA+I PxC
(Ver diagrama siguiente.)

"Las blancas tienen ahora dos importantes suprema­


cías: la vertical abierta "AD" y el debilitado flanco de
rey de las negras. Con un juego correcto, esto tiene que
resultar suficiente para la victoria".-AZekhine.

22. ···1 T2C-2D 24. T3D-3A1


23. TlD 1 T4D
¡ Excelente posición para la torre ! Desde aquí, está
preparada para irrumpir en campo enemigo y, al mismo
12
178 A. Kotov

tiempo, puede apoyar las medidas de ataque de su ejér­


cito en el flanco de rey.

24. ... , R2T 25.- P3TR, P4TO


Es necesario recordar una vieja y buena ley : "No
mováis los peones en lugar donde estéis débiles". Natu­
ralmente, había que contenerse de este movimiento que
sólo debilitaba el peón 3C.

26. P3T, TlC 28. TlA-6A, OlA


27. T7A, C20 29. 02A+ , P4A
¡ Otra brecha abierta en la posición del enemigo ! Las
blancas reciben ahora la posibilidad de barloventear con
sus piezas por el debilitado campo central de las negras
y del :flanco de rey.

30. TSA, 02R 32. OlA,


31. TxT, RxT
Es el comienzo del aprovechamiento metódico de las
debilidades de las negras en el campo enemigo. Alekhine
pasa la dama a 4AR, desde donde ataca el flanco de
rey y, al mismo tiempo, no desatiende la otra mitad
del tablero.

32. ... , R2C 33. 04AR , 010


Herencia ajedrecística de Alekhine 179

Ya amenazaba 34. D3C + y 35. TBA.

34. P4TD!,
Previniendo la salida de la torre a 4CD y, al mismo
tiempo, cediendo el turno a la jugada del enemigo.

34. ... , P4C


Crece el asombro. La mejor defensa consistía en la
espera de los acontecimientos, ya que la mínima activi­
dad en una posición tan mala, da a las blancas sola­
mente objetivos para el ataque. En caso, por ejemplo,
de 34. . . . , R2T, Alekhine tendría que volver de nuevo
con la dama a través de lAD a 4AD, para desde aquí
apoyar la acción de su torre por la toma de la octava
horizontal. Después de esto, las blancas podían conti­
nuar otra vez el ataque combinado a las debilidades de
las negras en los flancos de rey y de dama.

35. D3C+ , Rl A 36. T6D!,


Ganan un peón. La contestación de las negras es
única, ya que, naturalmente, no pueden permitir la com-
180 A. Kotov

pleta destrucción de su configuración de peones después


de 37. T X T, P x P.

36. . , DlT 41. PxD, C3C


37. P x P, D2C 42. C5R, R2R
38. TxT, DxT 43. C4A, ClA
39. P6C!, D3A 44. CxP, R2D
40. D7A, DxD 45. R2T, RxP

Todo esto era forzado. Al llegar el final, la partida


se gana sin dificultad por las blancas, porque el peón
de más 2CD, distrae la atención de las piezas negras y,
mientras, el rey de las blancas y el caballo organizan el
ataque a los peones del flanco de rey.

46. R3C, R3D 1 49. RxP, P4R


47. R4T, R4D 50. R5C, P5A
48. R5T, RxP 51. P4T, P3A+
Con la esperanza de pasar cor- el peón 4.P.... No obs­
tante, las blancas, sin grandes esfuer7:os, liquidan este
peón.

52. RxP3A, P5R 1 53. C3C+, R4D


Ante otros retrocesos del rey, las blancas dan .1aque,
toman el peón 5R y llevan su peón 4T a dama.
Herencia ajedrecística de Alekhine 181

54. P5T, P6R 56. ClA,


55. PxP, PxP
Las negras se rinden.

En la siguiente bien conocida partula. Alekhine llevó


el ataque en un frente amplio, combinando tl'!s amena­
zas al flanco de rey con o;l asalto de la torre por las
verticales abiertas.

N.o 40. DEFENSA ESLAVA

Alekhine Euwe
Amsterdam, 1938.

1. P4D, P4D 3. C3AR, C3A


2. P4AD, P3AD 4. PxP,

Generalmente este cambio suprime la agudeza de la


lucha en la primera parte de la partida. Sin embargo,
en manos de Alekhine esta tranquila posición se con­
vierte pronto en crueles reyertas.

4. ... , PxP 6. A4A, A4A


5. C3A, C3A
De menos cuidado 6 . . .., P3R, con la consiguiente 7 .
.. . , A3D. La posición del alfil 4A permite a Alekhine
llevar, ya en la apertura, un enérgico ataque al flanco
de rey.

7. P3R, P3TD
Inútil pérdida de tiempo. En lugar de esto merecía
la atención 7. D3C.

8. C5R!, TlA 9. P4CR!,


Realmente, valiente ataque que ha aparecido ya más
de una vez en semejantes posiciones antes de esta par­
tida. Al retroceso del alfil a 3C corresponde 10. P4TR,
creando una seria debilidad en el flanco de rey, 10.
.. . , P3T; 11. C X A. Euwe prefiere retroceder con el alfil
a 2D, contando con que la toma en 4R sería la peor
jugada, por ejemplo : 9 . .. . , C x C ; 10. P X A, C5A ; 11. D3C
y las blancas están mucho mejor.
182 A. Kotov

9. , A2D 11. 0-0,


10. J.\2c, P3R
Las blancas han obtenido un notable contrapeso en
la distancia. Algunas debilidades en el frente de peo­
nes del flanco de rey, no desempeñan un papel de­
masiado importante, ya que el alfil blanco, colocado en
3C, cimenta fuertemente el frente para el refuerzo del
rey.

11. P3T 12. A3C, P4TR?


No deseando permanecer con la posición cohibida,
Euwe sacrifica un peón, esperando recuperarlo pronto
y con ventaj a. Sin embargo, esto no sucede. Al contrario,
aprovechándose de la temporal supremacía material,
Alekhine refuerza la presión de las piezas en todos los
sectores del frente y volviendo a tiempo el peón de más,
abre la posición para el asalto decisivo.

13. CxA!, CxC


O 13 . . . . , DXC 14. P5C, . . . , obliga al enemigo a retro­
ceder con el caballo a 1CR o a ceder el peón después
de 14 . . . . , P5T; 15. PXC, PXA; 16. PAXP.

14. PxP, C3A 16. T1A, R1A


15. AJA, A5C
Otra consecuencia de un sacrificio mal hecho, al rey
de las negras no se le puede encontrar albergue des­
pués del enroque corto, ya que entonces el peón 5T se
convierte en un activo factor atacante en el ataque al
flanco de rey.

17. P3TD, AxC 20. PxT, 020


13. TxA, C2R 21. D6C!,
19. D3C, TxT
Han comenzado las operaciones concretas para apro­
vechar la debilidad del enemigo en el flanco de rey.
Amenaza 22. T1C con ganancia del peón 2CD y, segui­
damente, también P3T. Las negras no tienen tiempo de
recuperar el peón 4T y se ven obligadas a taponar rápi­
damente la breclha en su posición del flanco de dama.
Herencia ajedrecística de Alekhine 183

21. . ,. . ClA 23. TlC, P4CD


22. D4A+, RlC
A primera vista parece que las negras se defienden
afortunadamente. No obstante, las siguientes energiCas
irrupciones están destinadas a colocar en seguida a las
negras en una situación sin esperanzas. Ante todo, se
hace el ataque en el flanco de rey, teniendo por objeto
descubrir al rey de los enemigos.

24. P6T!,
Destinado a sucumbir, el peón se comporta heroica­
mente. Las negras no pueden tomar con la torre en 3T,
ya que entonces 25. P4TD ! les obligará a responder
25 . . . . , C2TD, lo cual, después de 26. D6C, lleva a la
perdición de los peones del flanco de dama.

24. . .. , PxP
Ahora las piezas negras sufren el enlace del que
Euwe no puede librarse hasta el final de la partida.

25. ASR, R2C 27. P4A!,


26. P4TD!, PxP
184 A. Kotov

Abriendo completamente el centro, Alekhine lanza allí


sus alfiles y su torre. Libres las piezas blancas, se las
entienden rápidamente con las piezas ligadas del ene­
migo, cohibidas en la acción.

27. ..., C2R


No se puede tomar en 5A a causa de la pérdida de
la torre : 28. A X C + , R x A ; 29. D5R + .

28. PxP, C2RxP


No se puede tomar con el peón en 4D en vista de
29. T6C.

29. R1T,
Amenazando ganar en seguida la partida, tomando en
5D y dos jaques en lCR, o a elegir, dando dos jaques
30. TlC + .

29. ... , T1AD 31. D3T,


39. T1C+ , R2T
Este modesto retroceso confirma la desesperada posi­
ción de las negras. No pueden rechazar de ningún modo
todas las amenazas: a 31. . . . , T6A, decide 32. D8A ; de
otro lado, amenaza lo mismo que 32. P4R y, así, 32.
D3D + , RlT ; 33. P4R, T6A ; 34. P x C ! , T x D ; 35. A X C + ,
R2T ; 36. A4R, mate.

31. ..., T1CR


(Ver diagrama siguiente.)

32. P4R,
Ganando una pieza. El futuro problema de las blancas
consiste solamente en alejar su rey de los jaques de la
dama del enemigo.

TxT+ 37. R2C, D3C+


��: iixr, D4C 38. A3C, CxP
34. PxC, DBC+ 39. AxC, PxA
35. R2C, D3CR+ 40. DxP, P4TR
36. R1A, DBCD+ 41. P4T,
Herencia ajedrecística de Alekhine 185

Las negras se rinden.

Alekhine combinó a su modo el ataque a los dos


:flancos en la siguiente partida.

N.o 41. DEFENSA CARO-KANN

Alekhine Tartakower
Bled, 1931.

1. P4R, P3AD 1 2. P4D, C3A


Esta extravagante jugada lleva el juego a una de las
variantes del principio l. P4D, P3D. Las negras se con­
denan voluntariamente a la cohibición de su posición.

3. A3D, P3D 1 4. C3AR, P4R


El juego se encamina ahora hacia una de las variantes
posibles de la Defensa Philidor. No pueden, naturalmente,
atacar dos veces en 5R las blancas, a causa del jaque
de dama en 4T.

S. C3A, D2A 1 6. P3TR,


186 A. Kotov

En tales posiCiones corresponde ponerse en guardia


contra el cambio del caballo 3AR después de A5CR (de
las negras) .

6. . . ., PJTR
Y esta jugada es completamente inútil para las
negras.

7. AJR, A2R 9. 020, PJTO


8. P4TO, C020
Completamente inútil debilitación del flanco de dama.
Es mejor continuar el juego corriente en tales posicio­
nes 0-0, TlD y C1A-3C. Es dudoso que ante esto hiciera
falta prevenirse contra el asalto de peones, ya que en
este caso, la situación del rey blanco se haCía también
desesperante.

10. P5T, PxP 12. 0--0, CxA


11. CxP, C4A 13. PxC, O-O

14. C4T,
El comienzo de las acciones de ataque en el :flanco
de dama.

14. . . ., P4A
Herencia ajedrecística de Alekhine 187

Echando antes al caballo de las blancas de 4D para


que no pudiera después del cambio del alfil 1AD diri­
girse a 4A amenazando A X P3T. No obstante, el movi­
miento del peón 3A debilita todavía más la posición de
las negras en el flanco de dama.

15. TOlA,
Naturalmente, no 15. C6C ? , PxC ; 16. C X T, PxA.

15. . , DlD 17. C6C, TlC


16. c2R, A2D 18. C3C,
Conseguido el dominio en el flanco de dama, Alekhine
prepara las operaciones de asalto también frente al rey
enemigo.

18. ..., R2T


"No 18 . . . . , T1R, a fin de conservar esta casilla para
el caballo, quien va a defender desde allí el punto 3D.
Las negras luchan con increible tenacidad con las difi­
cultades que las rodean".-Alekhine.

19. P4D,
Las operaciones en los flancos se juntan al mismo
tiempo con el ataque al centro.

19. . . . , PxP 21. TRlR, P3C


20. AxP, A3A 22. A3A,
La rotura en el centro ha traído como consecuencia
que las blancas señorean ahora en la importante dia­
gonal 1TD-8TR. La debilitada posición de las negras
en el centro y en el flanco de rey se hace cada vez
más difícil de defender.

2. ..., ClR 24. A4C, TlC


23. TDlD, A3A
En la difícil posición, el gran maestro Tartakower
encuentra la posibilidad de una increible y obstinada
defensa.

25. C4A, ASTO 27. C6C, A3A


26. TlT, A4CD
188 A. Kotov

28. TJT!,
Después del corto "baile" de las piezas, provocado,
sin duda, con el deso de experimentar los distintos
caminos del ataque, Alekhine encuentra un buen sis­
tema para llevar la torre por la tercera horizontal
al centro y al flanco de rey. Ahora el ataque de las
blancas, por todo el frente, se desarrolla con notable
energía.

D2A 32. AJA, AxA


��: TJAR, TlD 33. TxA, DlD
Jo. eso, AxC 34. TJA, D2R?
31. DxA, T2D
Tarrasch dijo bien en cierta ocasión: "En las posi­
ciones difíciles vienen en ayuda del atacante las faltas
del enemigo". Esta inexactitud en la defensa permite
a Alekhine reforzar todavía más la presión sobre la
posición de las negras. Correspondía defender el peón
2A por el procedimiento 34. . . . , TlA.

35. PSR!,
E irrumpe en el centro. No es satisfactorio ahora 35 .
. . . , C2C ; 36. C4R 6 35 . . . . , TlA ; 36. P6R! Mejor posibi­
lidad encierra la cesión del peón 35 . .. . , P x P ; 36. T x PR,
T x D ; 37. T X D, T x PT ; 38. TRxP + , T2C ; 39. TxPC,
Hetencia ajedrecística de Alekhine 189

lo cual conducía al final de partida, en el que la supre­


macía material de las bl�ncas no sería fácil de lograr.

C2A 37. D6A, P4A


��: iixPC, PxP 38. T3C!,

Esta torre en la presente partida realiza grandes cosas.


Ocupando una importante posición en 6CD va a atacar
el peón 3T y, al mismo tiempo, amenazará el centro y
el flanco de rey del enemigo.

TRlD 41 . DxD+ , TxD


��: r6c, T3D 42. TlAD,
40. D5A, T3R
El cambio de damas no aliviará la difícil situación de
las negras. Les es imposible defender la sexta horizontal,
duplicándose en la cual las blancas ofrecen peligrosas
amenazas a los peones del rey enemigo.

TR2D 44. C2R,


:�: RiT, P5R
Aprovechando rápidamente la jugada del enemigo para
acercar otra pieza más con el fin de atacar el peón 3C.
190 A. Kotov

44. C4D
Se hace necesario ceder el peón 3T porque no existe
una defensa satisfactoria contra 45. T A6A. Por ejem­
plo: 44 . . . . , TlR ; 45. TA6A, T2CR; 46. C4A, T2C-1C ;
47. C5T!

45. T X PT, P6R


Depositando las esperanzas en el contraataque al rey
blanco.

46. PxP, CxP 49. T6T, TlCD


47. T6R, C4D 50. C4A,
48. TA6A, C2R
Es imposible defender el peón del flanco de rey, ya
que a 50. . . . , TlCR corresponde 51. P4CD, ganando fácil­
mente.

· TxP 53. TxP+ , RlC


��: e: x P, CxC 54. TD6C+ ,
_ T2CR
52. TxC, P5A 55. RlC,
Alekhine realiza ordenadamente su contrapeso. Pre­
viniendo la jugada P6A se queda con dos filas de
peones, lo que garantiza una ganancia sin complica­
ciones.

Todavía respondía :

T7T 58. T4C, P6A


��: P6r, TxT 59. T4A+ ,
57. TxT+ , R2A
Naturalmente, no 59. P x P ? , T X PT.

59. ..., R3C 61. R2T,


60. TxP, TxPT
Las negras se rinden.

Una complicada lucha, cuyos acontecimientos más de


una vez saltaron de los flancos al centro del tablero, se
desarrolló en la siguiente partida.
Herencia ajedrecística de Alekhine 191

N.o 42. DEFENSA ESLAVA

Bogoljubov Alekhine
25 partida del match 1934.

1. P4D, P4D 3. C3AR, PxP


2. P4AD, P3AD 4. P3R, ASC
Particular sistema de desarrollo que recuerda algunas
variantes del Gambito de Dama aceptado.

5. AxP, P3R 6. C3A,


Tampoco trae nada 6. D3C, D3C ; 7. C5R, A4AR; 8.
C3A, C3AR ; 9. P3A, CD2D ! , indicado por Alekhine.

6. . .. , CD2D 8. P3T,
7. P3TR, A4T
Con jugadas tan lentas no se puede lograr ni siquiera
una dudosa continuación, el sistema de desarrollo esco­
gido por Alkhine tiene una indudable posición argu­
mentada. A las negras les hubiera sido mejor enrocar
y, sin perder en vano el tiempo, concluir más de prisa
el desarrollo de sus piezas.

8. . . . , C3A 10. O-O , O-O


9. P4R, A2R 11. A4A, P4T
Concluida satisfactoriamente la distribución de sus
piezas, Alekhine se pone en seguida a realizar el ataque
de los peones en el flanco de dama, que le da seguida­
mente el contrapeso en el flanco y en el centro del
tablero.

12. A2TD, D3C 14. D2R, D3T!


13. P4CR, A3C 15. D3R,
Después del cambio de dama, las debilidades de las
blancas en flanco de rey, ofrecían a las negras mejores
posibilidades en el final de partida.

P4C 18. AxC, AxA


��: CSR, ex e 19. C2R,
17. AxC, PSC
192 A. Kotov

Ahora, las negras se apoderan de la iniciativa. Más


esperanzas dejaba 19. C4T, P X P ; 20. P x P, P4R; 21.
P x P, A X P5R; 22. TDlD, con la amenaza P4A-5A.

1 9. . , PxP 21. TOlA, PxP


20. P x P, P4A 22. CxP, AxC

Concreto y exacto recuento de los factores de posi­


ción: Alekhine no corre tras la supremacía de los dos
alfiles y cambia uno de ellos por un caballo, que ocupaba
una fuerte posición en el centro. Después de este cambio,
las torres negras desarrollan activas operaciones, toman­
do las líneas centrales y metiéndose en el campo del
enemigo.

23. DxA, TRlD 24. D4A!, D2C


"Interesante variante 24 . . . . , D x D; 25. T x D, T6D ;
26. P4A, T X PTD ; 27. T2AR, T X P; 28. P5A, T6C + ;
29. R2T, T X P ; 30. P X A, T X PC, hubiera dado a las
negras cuatro peones por pieza, pero sin posibilidades
reales de ganar".-Alekhine.

25. P3A, P4T


Abriendo el "ventanuco" para el rey, y preparando la
liberación del alfil 3C.
Herencia ajedrecística de Alekhine 193

26. D2R, TSD 27. D3R, T2D

No deseando permitir el original cambio de la dama


después de 27 . . . . , TD1D ; 28. A5D, D7C ; 29. T1C, D7D .

28. PxP,

Equivocado, sin duda, porque debilita la posición del


:flanco de rey. Correspondía detenerse en 28 . TR1D,
TD1D ; 29. T X T, T X T ; 30. A4A, conservando la posi­
bilidad de defensa de la situación. Ahora las blancas
empezarán a experimentar dificultades en todos los sec­
tores del frente.

AxPT 30. TRlA, TDlD


��: rs'A, A3C 31. A4A,

Por lo visto el peón 4T no se puede tomar en vista


de 31 . . . . , D7C con ataque al alfil y la amenaza 32. . . . ,
T8D + . En este caso a 32. A4A, corresponde 33 . . . . , T7D ! ,
con un efecto decisivo.

TBD+ 34. T4A, TSD


��: 'j,JA, TxT 35. T4C, D2A
33. TxT, PST

Se demuestra que el intento de las blancas de apo­


derarse del peón 5T ha traído únicamente como conse­
cuencia, que han perdido el control sobre la primera
horizontal. El peón· 5T no se puede tomar ahora a causa
de 36 . . . . , D6C + , como tampoco se podía hacer en la
jugada precedente, a causa de 34. . . . , T X A + y 35 . . . . ,
D4C + .

36. P4A,

Crece el miedo de las blancas, porque se debilita


notablemente el frente de peones de rey de las
blancas. Se podía resistir más tiempo después de 36.
R2C.
1J
194 A. Kotov

36. DlD!
Reforzándose la línea "D" y de ñuevo previniendo la
toma del peón 5T, a lo que ahora corresponde 37.
T X A+ y 38. . .. , DSD + y preparaban también el
siguiente fuerte ataque.

37. D2A, P4A!


Aprovechando la equivocación de las blancas en la
jugada 36. Alekhine descubre la diagonal 1TD-8TR y,
al mismo tiempo, prepara el traslado del alfil a esta
diagonal. Como resultado de esta enérgica maniobra las
negras reciben un fortísimo ataque en el flanco de rey.
Así, el ataque de las negras, empezando en el flanco de
dama, pasó rápidamente al centro del tablero y con­
cluyó por un efectivo ataque en el flanco de rey.

38. PSR, AlR! 40. T6D, TSA


39. T6C, OlA 41. 040,
Conformándose con lo inevitable. La situación de las
blancas mejoraba un pocc con 41. R2T a lo que corres­
pondería 41. . . . , T7A ; 42. T2D, T x T ; 43. D X T, D4A ! ,
con ganancia del peón 3TD.
Herencia ajedrecística de Alekhine 195

41. ..., R2T 42. R2A,


Naturalmente, no 42. TSD, D3T.

42. ..., 07A+ 43. 020,


O 43. A2R, A4C; 44. D2D, A X A ! ; 45. D X A, D4A + .

43. ... , 04A+ 44. 03R,


Un error, pero tampoco salvaba 44. D4D, D X PT.

44. ..., TxA+


Las blancas se rinden.

Análogamente al ejemplo precedente en la siguiente


partida, las operaciones de las blancas se sucedían en
el centro y luego en los ft.ancos de dama y de rey.

N.o 43. DEFENSA INDIA ANTIGUA

Alekhine Golmayo
Madrid, 1922.

l. P40, C3AR 4. C3A, P4R


2. P4AO, P30 5. P3CR, A2R
3. C3AR, C020
Pesado sistema de desarrollo para las negras, que se
encuentra, sin embargo, actualmente cuando los maes­
tros quieren evitar las trabajadas variantes de la defensa
Nimzoindia con el desarrollo del alfil en 2CR.

6. A2C, � 9. 02A, Al A
7. � . TlR 10. P4R, PxP
8. P3C, P3A
Este cambio es muy débil. Era más lógico haber vuelto
a las realizaciones de la defensa Nimzoindia, trasladando
el alfil a 2CR, después de 10 . . . . , P3CR. La pérdida de
unos cuantos tiempos no podrá ser rápidamente aprove­
chada, ya que la lucha tiene un carácter cerrado.
196 A. Kotov

11. CxP, D2A 14. TD1R, A2D


12. A2C, P4TD 15. P4A, C3R
13. P3TR, C4A 16. CSA!,
Acercándose a acciones decisivas en el tlanco de rey.
La supremacía de las blancas en la distancia le da
toda la razón para realizar el más enérgico asalto a la
posición del rey enemigo.

16. . . ., C4A 17. C3R,


Aunque era preciso jugar 17. P4CR, preparando un
ataque amenazador, Alekhine rectifica a tiempo.

1 7. . . ., T2R!
La lentitud de las blancas permite al enemigo realizar
un contraataque por la línea abierta.

18. P4CR, TD1R 1 9. CSA,


Con la pérdida de dos tiempos, volviendo a la reali­
zación de un juego correcto.

19. . . . , AxC 20. PCxA, P4CD!


Viendo que las blancas amenazan con rodearse de
todas sus piezas en su tlanco de rey, las negras pasan
muy bien al contraataque en el otro extremo del tablero.
Entonces Alekhine, reteniendo temporalmente la irrup­
ción con las piezas en el tlanco de rey, dirige su aten­
ción al flanco de dama. Alli se realiza una curiosa
simplificación.

21. P x P, PxP
<Ver diagrama siguiente.)

22. PSR!,
Un ataque en el centro, que sirve de señal para
el comienzo de las operaciones frente a las debilidades
del enemigo en el tlanco de dama. Los cambios de
peones repetidos en 5R supondrán la captura ulterior
del peón 4CD.
Herencia ajedrecística de Alekhine 197

22. ... , C4A-2D! 23. D2A,

La respuesta del enemigo es obligada en vista de dos


amenazas : tomar el caballo 3A o el peón 4C.

23. ..., PxP 25. C7T!,


24. CxP, DlC
¡ Consistente jugada de la maniobra, empezada con
la jugada 22. P5R! Las negras tienen una penosa elec­
ción : ceder la calidad o ceder la dama. Prefieren lo
último, ya que de esta forma obtienen la posibilidad de
realizar unas cuantas amenazas tácticas.

PxP 27. CxD, T8R-7R


TxT 28. CxC!

Para después de 28. . . . , T x D ; 29. C x C + , P x C ; 30.


T X T, A4A; 31. RlA, A X T ; 32. R X A, recibir un final
de partida ganancioso. Es equívoco tomar en la jugada
30. en 2A con el rey a continuación de 30. . . . , A4A+ ;
31. R3A, T6R + ; 32. R X P, T7R.

28. ... , CxC 29. DxP, TxAD


198 A. Kotov

30. A6A!,
Permite lograr un triunfo forzado.

30. ... , A4A+


Este jaque es imprescindible, porque en caso de 30.
. . . , T2R; 31. D4D ó 30. TlD ; 31. TlD , la victoria es
completamente fácil.

31. RlT, T2R 32. P6A!,


Unicamente así. Sería equivocado jugar 32. A X C,
T x A ; 33. D5R, TD7D y no se puede tomar el alfil en
vista del mate en dos jugadas.

32 .., . . PxP 34. D4C+ ,


33. AxC, TxA
Las negras se rinden.
En la siguiente partida, muy complicada y enredada,
la lucha se desarrolló al principio en el flanco de dama.
Seguidamente pasó al flanco de rey, donde las piezas
de Alekhine organizaron una cruel lucha con las piezas
defensivas del enemigo. El final de la partida consistió
en la persecución del rey blanco, al que las piezas de
Alekhine dieron un golpe decisivo, alcanzándolo en el
otro extremo del tablero.
Herencia ajedrecística de Alekhine 199

N.o 44. DEF-ENSA I NDIA DE DAMA

S elesnev Alekhine
Triberg, 1921.

l. P4D, C3AR 3. P3CR, A2C


2. C3AR, P3CD 4. A2C, P3D

Desafortunado sistema de desarrollo, que proporcionó


notables debilidades en las casillas blancas del flanco de
dama. A las negras les aporta grandes complicaciones,
más que la corriente 4. . . . , P3R.

S. 0-0, CD2D 7. C3A,


6. . A4A, P3TR

Infracción de las buenas normas, que aparece en casi


todas las variantes de apertura cerrada: el peón 2AD
es inconveniente dejarlo en su sitio, en todo caso, no
corresponde colocar el caballo en 3AD antes de llevar
el peón a 4AD. Las negras, después de esta jugada,
realizan una curiosa diversidad en el flanco de dama .

7. P4A 8. PSD, P4CD !

Una sola jugada desafortunada les ha sido suficiente


a las blancas para que recibieran ya peor juego. Ahora
las operaciones de las negras en el flanco de dama, trans­
curren sin dificultades.

9. Cl R, P3T 11. C4R, CxC


1 0. P4TD, PSCD 1 2. A x C, P3C

La posición resultante recuerda la variante de la


Defensa India Antigua . . . . P4AD, que aparece frecuente­
mente en las partidas de los torneos en los últimos
años. La posición es claramente favorable a las ne­
gras, que tienen la presión por la diagonal 1 TR-BTD
y una notable distancia de supremacía en el flanco de
dama.

1 3. P4A, P x P a.p.

De lo contrario, las blancas hubieran cerrado el flanco


de dama y todos los esfuerzos de las negras resutarían
inútiles.
200 A. Kotov

14. PxP, A2C 16. P4A, 0--0


15. T1C, T1CD 17. D2A, P4TD
Preparando el último interesante sacrificio de la
calidad.

18. C3A, D2A 20. A3D,


19. A2D, A3T

20. . .., TSC!


"Totalmente correcto. Apareciendo en las negras como
resultado del sacrificio un fuerte peón pasado, apoyado
por el alfil 2C y la posibilidad del ataque al peón
4AD, todo esto compensa plenamente la cesión de la
calidad".-Alekhine.

21. AxT, PAxA 22. C2D, C4A


Saliéndose del buen camino. Después de 22. . . . , TlAD
y, seguidamente, 23. . . . , C3C 6 23. C4R, las
negras ganarían antes el peón 4AD y con el amenaza­
dor peón 5C estarían para ganar. Ahora es comple­
tamente distinto.

23. C3C!,
¡ Muy ingenioso ! Si 23 . . . . , C X P, entonces 24. TlT,
A X T ; 25. T x A, C4A; 26. C X P, y las blancas ante
Herencia ajedrecística de Alekhine 201

la igualdad material, tienen una notable posición de


supremacía (el peón 5C está débil, el caballo blanco
se refuerza en 6A) .

23. .. ., e20

Se hace precisa la retirada "sin haber comido sufi­


ciente". Aprovechándose de la pérdida de tiempo con­
sentida por el enemigo, las blancas, sacrificando el peón,
se deshacen de la amenaza y refuerzan su situación
en el centro.

24. PSA !, AxA 28. Tl AO, 020


25. P x A !, PxP 29. P40, ese
26. TRl R, e4R 30. T4R,
27. T3R, TlA

Las blancas siguen estando mejor y no les hace


falta devolver su contrapeso material, tanto más que a
30. P x P, C X T ; 31. P X C, hubiera correspondido 3 1 . . . . ,
D x PT ! , después de lo cual, los peones negros 4T y 5C,
serían muy peligrosos.

30. . . ., PSA

Se entabla una cruel lucha en torno a los peones


pasados 5C y 5A. Rápidamente se ve que Alekhine parece
haber contado con todos los resultados de movimiento
de peones, y vio la posibilidad de cambiar la esfera
de la acción de sus piezas sobre otro flanco.

31 . eSA, 04A 32. 02R !,

(Ver diagrama siguiente.)

32. . . ., P6e ! !

"Antes de decidirse a realizar esta jugada, las negras


tuvieron la necesidad, además de la continuación en el
texto, de examinar las siguientes variantes :
I. 33. T4A, D4T ; 34. T X C, P7C ; 35. TlC (ó 35.
D X PC, D X T, como en la partida) ; 35 . . . . , A X P, y los
peones negros deciden la partida.
II. 33. D X C, P7C ; 34. TlC, D X D ; 35. T X D, P6A ;
36. C3D, T5A ; 37. C X P, T5C ! ; 38. T4R, RlA, con ven­
taja para las negras, ya que si 39. TlAD, entonces 39.
202 A. Kotov

. . . , P4A ! ; 40. C3D, P X T ; 41. C X T, P x C ; 42. P5T,


A X P ; 43. P6T, R2A! y las negras ganan".-Alekhine.

33. T x C, P7C 35. T X P,


34. O x PC, OxT

Devuelta la calidad y liberadas de todas las amenazas


de los peones pasados del enemigo, las blancas, al pare­
cer, se han librado de todos los peligros y, teniendo un
peón de más y una activa disposición de las piezas,
están bien. Sin embargo, por lo visto, la jugada pensada
de antemano por Alekhine coloca ante las blancas nue­
vos problemas difícilmente solucionables.

35. . . ., P4T !

"Todo lo más", amenazando adelantar el peón a 6TR


y dar una amenaza de mate en 7C.

36. 02A,

Es difícil decir si esto resulta mejor que 36. P4T,


P4C ; 37. P X P, P5T ; 38. R2C, TlD, y el rey de las
blancas se encuentra absolutamente sin esperanzas.

36. . . ., P5T 37. 030, Tl O !


Herencia ajedrecística de Alekhine 203

Con la amenaza de tomar el peón 50 obligando a


las blancas a adelantar sus peones del :flanco de rey.

38. P3A, 04T 40. P x P, 04C !


39. 04R, PxP 41 . R2C, 070 +

Mal 41. . . . , T x P ; 42. P4A, D4T ; 43 . D3A, con el cambio


de damas, después de lo cual las posibilidades de ganan­
cia de las negras son insignificantes.

42. R3T, A3A !

¡ Se espesan las nubes ! Amenaza 43 . . . . , R2C, con un


ataque de mate.

43. T2A, 03T + 45. P4C,


44. R2C, R2C

Para no ceder este peón, después del inevitable jaque


en 7T (ó 2T) .

45. . . ., Tl TR 46. R2A !,

Preparándose con el rey a otro :flanco, con la espe­


ranza de reforzarse ante los perseguidores. Sin embargo,
allí también al rey sin hogar le espera una emboscada.

46. . . ., Tl C O !
204 A. Kotov

Habiendo trabajado bastante en principio en el flanco


de dama, esta torre pasó seguidamente a la línea "TR ..,
donde garantizó la dama la irrupción en el campo
enemigo.Ahora se dirige de nuevo al flanco de dama
para tomar parte en la exterminación de la base de
defensa de las piezas blancas del peón 4D.

47. R2R, T5C 49. R3R,


48. T20, 07T +

Y a 49. R3D, las negras de todos modos juegan 49 .


. . . , DBC.

49. . . ., OSC + 50. R2R, AxP

La situación de las blancas es desesperada. Sus piezas


ya no tienen más puntos de apoyo, y lo más importante
es que su rey está bajo las amenazas de todas las
piezas negras.

51 . C30, TSC

Ganaba más rápidamente 51. A6A; 52. C X T,


D7C + .

52. C l A !, A6A

Se podía volver a la posición estudiada en la jugada


precedente, pero Alekhine escoge otro camino hacia la
victoria.

53. O x T, 07C + 55. R4A, 050 +


54. R30, O xT+ 56. R3C,

(Ver diagrama siguiente. )

56. . . ., AST!

Conduce a la pérdida de los peones blancos, ya que


no se puede continuar 57. R2T? a causa de 57. . . . ,
D X P, mate.

57. R3T,

"Las blancas no pueden defender sus peones. Por


ejemplo : 57. C3D, D x P + ; 58. R3T, A3A ; 59. DlD.
P4C ; 60. D2R. D5A ; 61. DlD, D6A + ; 62. R2T. P3R I y
las negras ganan".-Alekhine.
Herencia ajedrecística de Alekhine 205

04A + 59. P5C,


fa: RlT, A3A

Las blancas han pensado retener algunos peones,


únicamente para conseguir un peón pasado en la línea
"TD". Pero tampoco este triste intento las salva.

59. .. ., OxP+ 61 . O l R, 07C +


60. C3C, OxP 62. 020, OxP

La situación de las negras es hasta tal punto buena


que pueden permitirse declinar el cambio de dama.
Corresponde todavia:

63. O x P, P4C EIJ. C20, R3C


64. Ol R, 06AO 70. R2C, R4A
65. O x O, AxO 71 . C3A, R5A
66. P5T, AxP . 72. Cl C, R6R
67. C x A, P5C 73. R2A, R7A
68. C4A, P6C 74. C3T + , RSA

Las blancas se rinden.


I N D I C E

Prólogo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 5
Cap. l. El ata q u e e n e l centro y e n e l fla nco
de d a m a . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7
El ata q u e de las piezas . . . . . . . . . . . . . . . 9
N.o l . Ga m b i to d e Dama . . . . . . . . � · . . . . . . . . . . . . • . • 10
N.o 2. Defensa Eslava . . . . . . . . . • . . . . . . . . . . . . . . 16
N.o 3. Variante d e Mera n . . . . . . . . . . . . ... 19
N .o 4. Apertura Reti . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 22
N . o 5. Defensa H o l a n d esa . . . 25
N .o 6. Defensn Esl ava . . . . . . 27
N .o 7. Apertura Espa ñ o l a . . . 30
N.o 8. G a m b i to de Dama .. . 37
N.o 9. Gambito de Dama . . . . . . 37
N.o 1 0. Defensa Tarrasch . . . . . . . . . . . . . . . . . . 41
El a provec h a m i ento de l a s fuerzas d e
l o s peones pasados . . . . . . . . . . . . . . . . . . 44
N .o 11. Defensa Esl ava . . . . . . . . . . . . . . . . . . 44
N.o 1 2. Defensa I n d i a Anti g u a . . . . . . ... ... ... 48
N .o 13. Ga m b i to de Dama aceptado ... ... ... 53
N.o 14. Defensa I nd i a de Dama . . . ... ... ... 57
N.o 15. Defensa I n d i a de Dama . . . ... ... ... 60
N.o 16. Apertura Re ti . .. . . . . . . . . . . . . ... ... ... 63
N.o 17. Defensa Es lava . . . . . . . . . . . . ... . .. . .. 69
N.o 1 8. Contra g a m b i to B l u m enfeld 75
El a provech a m i e nto de las l íneas
a b i ertas . . . . . . . . . . . . 79
N.o 1 9. Defensa Francesa . . . . . . . . . . . . . . . ... ... 80
N .o 20. Defensa Francesa . . . . . . . . . . . . . . . ... . .. 85
N.o 21 . Defensa Phi 1 idor . . . . . . . . . . . . 90
N.o 22. Defensa Phil idor . . . . . . . . . . . . . . . . . . ... 96
N.o 23. Defensa Bog o l j u bov . . . . . . . . . . . . . . . ... 101
N.o 24. Apertura Espa ñ o l a . . . . . . . . . 105
N.o 25. Apertura de l o s Peones de D a m a ... 108
N .o 26. Apertura Cata l a n a . . . . . . . . . . . . . . . ... 112
N .o 27. Apertura Espa ñ o l a . . . . . . . . . . .. . . . ... 1 18
N.o 28. Apertura Re ti . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ... 123
N.o 29. G a m b ito de Dama . . . . . . . . . . . . . . . ... 127
N.o 30. Apertu ra Espa ñ o l a . . . . . . . . . . . . . . . ... ... 132
N.o 31 . Defensa Fra ncesa . . . . . . . . . . . . . . . ... . .. 135
Ca p. 11. E l ata q u e en a m bos fl a ncos . . . . . . . . . . . . 1 39
El contra peso espac i a l . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1 40
N.o 32. G a m b ito de Dama .. . . . . . . . . . . . . . . . . 1 41
N.o 33. Defensa Francesa . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1 50
N.o 34. Defensa H o l a n desa . . . . . . . . . . . . . . . . . . 156
N.o 35. Defensa Ufi msev . . . .. . . . . . . . . . . . . . . . . 1 59
N .o 36. Defensa I n d i a de Dama . . . . . . . . . . . . 164
El ata q u e de l a s piezas en a m bos
fl a ncos . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1 67
N.o 37. Apertu ra Espa ñ o l a .. . 168
N.o 38. G a m b ito de D a m a .. . 1 71
N.o 39. G a m b i to de D a m a .. . 175
N.o 40. Defensa Esl ava . . . . . . 1 81
N.o 41 . Defensa Caro-Ka n n . . . 1 85
N.o 42. Defensa Es lava . . . . . . . . . . . . . . . 191
N.o 43. Defensa I n d i a Antigua . . . . . . . . . . . . . . . 193
N.o 44. Defensa I nd i a de Dama . . . . . . . . . . . . 199

RYJ el i n morta l

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