Hoy en día, los productores deben pensar la finca como una empresa, una razón
por la que se deben tener claros los principales aspectos para que su actividad
sea exitosa. Teniendo en cuenta lo anterior, CONtexto Ganadero se dio a la
tarea de hablar con un experto en el tema, quien reveló los pasos que se
deberían seguir para consolidar la construcción de un plan estratégico.
Según Rafael Buenahora, ganadero y miembro del círculo de excelencia del
Fondo Nacional del Ganado, FNG, administrado por la Federación Colombiana de
Ganaderos, Fedegán, en Aguachica, el eje principal de su finca es la
planeación estratégica como fundamento esencial en el desarrollo de una
empresa ganadera. (Lea: Entender, crear y aplicar conocimiento en la finca)
“Hay ganaderos que viven con la finca y otro que vivimos de la finca. Yo
necesariamente vivo de ella. Mi formación se basa en la economía y en la
administración de empresas. Son 2 carreras que estudié porque me apasionan y
las puedo poner en práctica en mi labor. Me apoyo en la planeación porque es
un muy método muy efectivo y me gustaría que los demás ganaderos, e
incluso los mismos miembros del Círculo de Excelencia, la pongan en
práctica”, reseñó el ganadero.
Buenahora explicó con una analogía la situación de algunas personas dedicadas a
esta actividad. “Los productores deben saber para dónde van, para
escoger qué ropa echar en la maleta, el problema surge cuando se desconocen
estos 2 aspectos: no saben hacia dónde se dirigen, por lo que no tienen idea
de cómo alistarla”.
Los pasos que se recomiendan seguir a la hora de formular un documento
en el que se plasmará el plan estratégico de la empresa ganadera son:
Objetivos y metas
Cuando se tienen metas trazadas es más fácil obtener resultados efectivos, por lo
cual es necesario realizar un listado con los procesos que se deben seguir
para poder llegar a cumplir con un fin o fines determinados.
(Lea: Planificación forrajera, herramienta al servicio del ganadero)
La idea no es simplemente colocar lo que se quiere hacer con los animales, sino
tratar de plantear si se busca posicionar el negocio ya sea cárnico o lechero en un
tiempo específico o si se quiere lograr comercializar productos y abastecer a
ciertos sectores. Entre más claros se tengan los objetivos y las metas, más
fácil será encaminar la compañía.
Análisis DOFA
La matriz DOFA (conocida como FODA o análisis SWOT pos sus siglas en
inglés) es una herramienta que se utiliza para analizar y evaluar una
estrategia, en ella se colocan las Debilidades, Amenazas, Fortalezas y
Oportunidades.
Las debilidades y las fortalezas constituyen las características internas o
controlables de un negocio, en el caso de la ganadería por ejemplo se podría
colocar la raza que se va a tener en la finca, el tipo de ganadería y el tipo de
producción que se va a llevar a cabo, etc. (Lea: Ganaderos colombianos
tendrán software para planear partos del hato)
Las amenazas y oportunidades son las características externas que no
dependen de ti o de tu negocio, como por ejemplo el clima, el tipo de suelo del
predio ganadero, los precios de la carne o de leche, la demanda y la oferta, las
dificultades de la industria, local, nacional e internacional, entro otras.
Definir el tipo de negocio
En este punto se debe precisar la mayor cantidad de aspectos del negocio.
Es necesario especificar en cual industria se va a incursionar si en la bovina,
equina, caprina u ovina. Que raza se va a tener en la finca, si se va a realizar una
ganadería intensiva o extensiva, cómo se va a alimentar el ganado, qué actividad
productiva se va a ejecutar, cría, levante o engorde, etc.
También es importante tener claro si la empresa ganadera será propia o se
realizará de manera colectiva o conjunta con algunos colegas.
Plan de acción
En este parte se plasmarán y agendarán las actividades diarias, mensuales y
anuales que se van a desarrollar en un tiempo determinado. ¿Qué productos se
van a desarrollar o vender?, ¿Cómo se van a producir?, ¿Dónde o cómo se
van a comercializar? son preguntas que se deben hacer y responder lo más
pronto posible.
Otros procesos que se deben realizar son llevar un registro de costos,
gastos y presupuestos. En temas de personal, se debe tener conocimiento de la
cantidad de empleados con los que se va a contar, remuneraciones y demás.
Ejecución
Una vez se hayan realizado los pasos anteriores se deben poner en práctica cada
uno de ellos. Es válido evaluar y analizar si el plan fue exitoso o no.
También es preciso realizar cambios y modificaciones en caso de que
ciertos aspectos o actividades no estén funcionando, hasta llegar
a desarrollar un plan o estrategia efectiva para su modelo de negocio. (Lea: 5
predios ganaderos representativos del país)
Árboles de productividad
Adicional a las herramientas creadas anteriormente por la Oficina de
Investigaciones Económicas, como Emprendegán y Meceg, se utilizó la
metodología DOFA y los árboles de productividad, como herramienta cuantitativa,
que, de acuerdo a su orientación productiva —cría, ceba, doble propósito
—, permite concebir la finca como un sistema sensible a parámetros
poblacionales, reproductivos y productivos.
La jerarquización de los resultados, junto con la identificación de las principales
carencias detectadas a través de los árboles de productividad, permitió establecer
metas de mejoramiento acordes con las posibilidades -técnicas y económicas- de
los ganaderos involucrados en el proyecto.
Análisis de recursos
En algunas fincas, el esquema se reforzó con el análisis de suelos, bromatológicos
y de perfiles metabólicos, para intentar crear una radiografía en el ámbito regional
de los impactos de los principales elementos que apuntalan la productividad:
producción de alimento, y calidad y cantidad de alimento consumido por el bovino.
(Lea: Ideas sobre la ganadería ecológica alimentada con pastos)
Con estas herramientas, y afianzado con el conocimiento del grupo, el
ganadero puede visualizar el panorama en el cual se desenvuelve su
finca. La metodología exige que, junto con las experiencias narradas e
interiorizadas por los asistentes, se adquieran compromisos para mejorar el
desempeño de los predios, en unos plazos determinados.
Documento en la web
Finalmente cabe señalar que en la investigación participaron 90 personas de
Fedegán y un número igual de ganaderos, en cinco regiones del país; el período
de desarrollo del proyecto fue de 16 meses, incluyendo la fase de formulación,
preparación logística de la transferencia de conocimiento, ejecución, control y
revisión necesaria para el cumplimiento de los objetivos propuestos.
Fedegán invita a los interesados en profundizar en dicha metodología, a consultar
el documento “Modelo de gestión y transferencia de conocimiento en ganadería
bovina colombiana –propuesta metodológica-“, que se encuentra
en www.fedegan.org.co. También se encuentra a disposición de los interesados
videos de capacitación de esta metodología en la Oficina de Investigaciones
Económicas de Fedegán - FNG.