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Tribuna: EL LABORATORIO | Eurocopa 2004

La biomecánica deportiva y las botas de fútbol


Mikel Izquierdo 18 JUN 2004
Dos millones y medio de pasos en una temporada y 3.000 kilómetros en los que
aproximadamente se salta unas 3.900 veces, se realizan 3.700 regates y fuertes cambios de
dirección y se realizan unos 24.000 pases de balón nos dan sólo una idea de la gran importancia
que tiene en el fútbol la superficie de juego y muy especialmente el diseño de las botas de los
jugadores. En la actualidad, la gran cantidad e intensidad de los partidos en la liga profesional
de fútbol, ha provocado un aumento considerable en el número de lesiones y un gran interés en
el ámbito de la biomecánica deportiva a la hora del diseño de la bota ideal que más prestaciones
técnicas aporte sin menospreciar el riesgo de lesión. Entre las lesiones más frecuentes del
futbolista observamos una clara predominancia en la lesión clasificada como esguince de
tobillo, lesión que junto con las lesiones de rodilla puede estar estrechamente relacionada con el
calzado utilizado y con las superficies de juego.
La adquisición de un buen par de botas es una de las primeras inquietudes que todos los
jugadores manifiestan al inicio de la temporada. Ciertamente no resulta sencillo seleccionar el
modelo adecuado a nuestro pie, a nuestras características de juego y al terreno donde
entrenaremos y jugaremos. Los estudios realizados en este ámbito por el Instituto de
Biomecánica de Valencia (IBV) durante más de 15 años han permitido el desarrollo de criterios
de diseño y fabricación siempre orientados a la prevención de las lesiones y a la mejora del
confort y del rendimiento deportivo. Los principales requisitos que debe satisfacer todo calzado
son básicamente dos: Proteger al pie y complementarlo en sus funciones. Según el IBV, una de
las máximas autoridades nacionales e internacionales en el diseño de calzado deportivo, a la
hora de elegir unas botas adecuadas, es muy importante tener en cuenta el uso que se les va a
dar (tipo de superficie sobre la que se va a jugar, si éstas se van a utilizar para entrenar o para
los partidos,...), así como las características del deportista. Existe una gran variedad de
jugadores, con muy diversas y variadas características. Una de las diferencias más importantes a
considerar es el peso del jugador. Un mayor o menor peso nos orientará sobre las prestaciones
de amortiguación que ha de ofrecer el calzado. El nivel deportivo es otra de las principales
características a tener en consideración. En el fútbol, se suele dar el caso de que jugadores de
mayor nivel prefieran sacrificar elementos de protección para que el calzado sea más ligero, y
busquen un ajuste extremo que les permita mejorar el toque del balón. También suele ocurrir
que prefieren suelas con un mayor agarre para ganar velocidad en los desplazamientos. El
jugador debe saber que cuanto más extremo sea el ajuste y el agarre, habrá más posibilidades de
sufrir lesiones. Por tanto, si el nivel deportivo es bajo y la exigencia del juego no es muy alta, o
si las botas van a utilizarse para entrenar, deberá prevalecer el criterio de prevención de lesiones
sobre el rendimiento. Buscaremos no tanto unas zapatillas técnicas, sino más bien unas botas
más acordes con nuestras características, que respeten nuestra anatomía, y nos proporcionen
cierto nivel de confort.
En el ámbito de la Biomecánica deportiva se vienen utilizado los últimos sistemas de análisis,
como Biofoot/IBV para registrar presiones en los distintos modelos, o como "la bota de tacos
instrumentados/IBV" para analizar cómo se producen las fuerzas en los campos fútbol. Con toda
esta tecnología el Instituto de Biomecánica de Valencia ha sido capaz de realizar un nuevo
diseño de calzado especial para jugar en los campos de tierra, calzado que incluye conceptos tan
novedosos como el Taco Twister, desarrollado a partir de técnicas de Diseño Asistido por
Ordenador, y que aporta mayor resistencia y eficacia a la suela en este tipo de terrenos. La
biomecánica deportiva en este ámbito ha servido para generar, además de criterios novedosos de
diseño de calzado para los campos de tierra y césped, nuevas herramientas y metodologías que
permitirán continuar desarrollando conceptos ligados a la mejora del calzado de fútbol. Además,
este tipo de tecnologías hacen realidad que hoy en día se pueda llegar a la individualización de
las botas de fútbol a las características de cada jugador. Práctica cada vez más habitual entre los
equipos de fútbol profesional.
Mikel Izquierdo es profesor de Biomecánica de la Actividad Física y el Deporte.

http://elpais.com/diario/2004/06/18/deportes/1087509616_850215.html 

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