Está en la página 1de 360

Capítulo I

INTRODUCCION
Sección 1

GENERALIDADES
1.1 FINALIDAD

Este manual, está destinado a establecer la doctrina de Operaciones Tácticas para


las Fuerzas Terrestres (FF.TT.), constituyendo la base de la Instrucción de
Operaciones de las Fuerzas de Combate, Apoyo de Combate y de Servicios de
Apoyo, del Ejército Nacional.
Desarrolla la doctrina de conducción operacional ateniéndose esencialmente a
conceptos, no fundamentándose en los medios, evitando que los conceptos deban
modificarse en cortos períodos ante la aparición de novedades tecnológicas.
Los principios contenidos en este manual, son producto de la experiencia recogida
por distintos Ejércitos en conflictos mundiales, regionales o locales, del estudio de
las características de nuestro país y de su potencial, constituyéndose en una guía
para Comandantes y Estados Mayores, sin ánimo de restringir la iniciativa que
éstos puedan llevar a la práctica.

1.2 NECESIDADES QUE ATIENDE

Necesidad de los Comandos dependientes del Comando de las FF.TT. , de


disponer de las bases para la planificación, ejecución y conducción de las
operaciones.
Necesidad de contar con las bases necesarias para la planificación, ejecución y
conducción de operaciones conjuntas y combinadas.
Necesidad de ubicar la planificación y ejecución de operaciones de las FF.TT. en
el marco de las Fuerzas Armadas (FF.AA.) en Campaña.

1.3 FUERZAS TERRESTRES

La evolución técnica y la necesidad de máximo aprovechamiento de todos los


medios del Poder Militar, han llevado a superar el concepto de una guerra
exclusivamente terrestre, aérea o naval. Por esta causa, normalmente las
operaciones tendrán características de Conjuntas. Sin embargo, solamente el Poder
Terrestre tendrá la capacidad de transformar en permanentes las ventajas que en
forma transitoria puedan obtener las Fuerzas Aéreas o Navales. Es por ello, que la
participación del Ejército será definitoria para poder asegurar la imposición de la
propia voluntad al enemigo.

Página 1 de 360
Las FF.TT son aquellas fuerzas militares que conforman el Componente de
Ejército de las Fuerzas Armadas en Campaña. Están específicamente desarrolladas
para el control y el empleo de la Fuerza Armada organizada, en el espacio
terrestre.
Las FF.TT. aplican el Poder Militar terrestre en la guerra, para imponer y mantener
su voluntad sobre el enemigo, actuando dentro de los marcos jurídicos nacionales
e internacionales. Esto se logra mediante: la desorganización o destrucción de las
FF.AA. enemigas, el dominio de áreas estratégicas vitales o la anulación de su
voluntad de luchar.

ORGANIZACION DEL ESTADO PARA LA DEFENSA NACIONAL

Página 2 de 360
Capítulo II

FUNDAMENTOS DE LAS OPERACIONES DEL EJERCITO


Sección 1

EL ESPACIO

2.1 GENERALIDADES

Además de los ambientes geográficos en donde deberán operar los elementos del
Ejército, existe en nuestra realidad un factor que obrará como condicionante
fundamental, tanto para los niveles de conducción estratégicos como tácticos.
Tal factor es el espacio, cuya característica esencial estará dada por su gran
amplitud en relación a la magnitud de fuerzas que, normalmente, se dispondrán.
La guerra moderna privilegia particularmente la capacidad de comando y control
en todos los niveles, y la amplitud del espacio afecta, no solamente el ejercicio de
tal función, sino también la posibilidad del Comandante de:

- Asegurar el apoyo mutuo entre las organizaciones que de él dependen.


- Incidir sobre el desarrollo de las operaciones mediante el empleo de sus
reservas.
Lo expresado precedentemente impondrá las siguientes exigencias básicas:

2.1.1 A los niveles de conducción estratégicos:

- Establecer una organización territorial adecuada a los medios disponibles.


- Desarrollar medios adecuados a la propia realidad geográfica.

2.1.2 A los niveles de conducción táctica:

- Emplear el espacio para maniobrar, asegurando la necesaria reunión para


combatir (privilegiar los principios de maniobra y masa).
- Accionar preponderantemente en forma ofensiva.
- Establecer organizaciones aptas para maniobrar en los espacios resultantes
(maximización de la movilidad y la rapidez con autonomía compatible).

2.2. ESPACIO TERRESTRE.

El espacio terrestre comprende la superficie terrestre, incluidas las áreas fluviales


y lacustres interiores y el espacio aéreo necesario para los medios orgánicos del
Ejército.

Página 3 de 360
En lo referente al espacio terrestre de nuestro país adquiere particular relevancia
lo establecido en actualización de la Doctrina de Ejército (Set/1995) Parágrafo I-
B-6 (El Factor Geográfico), del cual extractamos de las "conclusiones" lo
siguiente - "La ausencia de obstáculos naturales de consideración, dificulta la
maniobra defensiva, y hace imprescindible contar con un plan de preparación
territorial, que permita adecuar nuestro espacio geográfico a las necesidades
derivadas de nuestra concepción estratégica y los planes de campaña
consecuentes".

2.3 ORGANIZACION TERRITORIAL.

2.3.1 Teatro de Guerra.

El Teatro de Guerra es todo espacio geográfico de tierra, mar y aire que está o
puede estar involucrado directamente en las operaciones militares de una guerra.

2.3.2 Teatro de Operaciones.

Es la parte de Teatro de Guerra necesario a la conducción de operaciones


militares para el cumplimiento de una determinada misión,incluyendo su apoyo
administrativo.
Dentro del Teatro de Operaciones toda la autoridad militar y civil será ejercida
por el Comandante del mismo.
A los efectos de la mejor conducción de las operaciones, podrá ser dividido en
Zona de Combate y Zona de Comunicaciones.

2.3.3 Zona de Combate.

Es la zona anterior de un Teatro de Operaciones en la que actúan las Grandes


Unidades. Incluye el área necesaria para las operaciones de las fuerzas de
combate y se extiende hacia retaguardia hasta el límite anterior de la Zona de
Comunicaciones. Su profundidad depende de la naturaleza y volumen de las
fuerzas asignadas, la naturaleza de las operaciones consideradas, los
requerimientos para el apoyo administrativo, el terreno y las posibilidades del
enemigo.
Puede estar dividida para fines de control táctico en áreas de Ejército en
Campaña, de División de Ejército y de Brigadas, cada una de las cuales es
controlada por su Comandante. El límite posterior de la Zona de Combate será
establecido y modificado por el Comandante del T.O. para que concuerde con el
movimiento de las fuerzas.

2.3.4 Zona de Comunicaciones.

Página 4 de 360
Es la parte del T.O. inmediatamente detrás de la Zona de Combate; contiene las
líneas de comunicaciones, instalaciones para el abastecimiento y la evacuación y
otros órganos requeridos para el apoyo y mantenimiento inmediatos de las
fuerzas en campaña. Su límite anterior debe coincidir con el límite posterior de la
Zona de Combate, y su límite posterior coincidirá con el límite posterior del T.O..
Debe disponer de espacio suficiente para la localización sin congestionamiento
de las Unidades necesarias al apoyo administrativo.
Conecta la Zona de Combate con la Zona del Interior.

Página 5 de 360
2.3.5 Zona del Interior.

La zona del interior normalmente comprende todo el territorio Nacional excepto


los Teatros de Operaciones, pudiendo incluir territorios extranjeros.

2.4 AMBIENTE OPERACIONAL

Esta dado por un conjunto de condiciones y características que existen en forma


permanente o semipermanente en toda o parte de un área estratégica. Afectan el
empleo de las fuerzas militares, su efectivo, composición y organización, y son
consideradas en la Apreciación de Situación que realiza un Comando para
adoptar una decisión.
La guerra obligará a toda organización y a sus soldados a confrontar ambientes
rigurosos. El soldado estará sujeto a los efectos de temperaturas extremas, terreno
escabroso, temor, incertidumbre, fatiga y confusión. Cualquier unidad mal
entrenada sucumbirá ante los rigores del ambiente, sus soldados tratarán de
aislarse sicológicamente y perderán la iniciativa. Por otra parte, las tropas y
unidades capaces de encarar estas dificultades, tienen la mitad de la batalla
ganada.
El ambiente en que el soldado combate combina dimensiones humanas y físicas.
Las tropas, que representan la primera dimensión, aportan la doctrina y la
habilidad combativa. Su entrenamiento, iniciativa; tenacidad y habilidad para
darse cuenta de las demandas que confronta son los factores claves de la victoria.

2.4.1 La dimensión humana

Las tropas son el factor fundamental de la doctrina. En ellas estriba la capacidad


de lucha y voluntad de triunfo, de todo Ejército. Su espíritu de lucha, inteligencia,
iniciativa, disciplina, valentía y capacidad constituyen los ingredientes más
importantes de cualquier organismo militar. La combinación de tropas y jefes
competentes, preparados y de gran capacidad profesional, produce unidades
capaces, coherentes e incontenibles en el campo de batalla.
El jefe tiene responsabilidades especiales en relación con sus soldados; debe ser
hábil para dirigirlos en el fragor del combate, moldear y proteger su espíritu y
encaminar sus acciones hacia el cumplimiento de la misión, comprender el reto
físico y sicológico que confronta el soldado, adiestrarlo e imprimirle un vigoroso
espíritu de lucha.

2.4.2 La perspectiva fisiológica

Ningún soldado que no se encuentre en perfecta condición física y buen estado de


salud puede hacer frente a los rigores del combate. El Comandante es responsable
de velar por la buena condición física de sus tropas, para lo cual deberá
Página 6 de 360
someterlas a un programa arduo y realista de entrenamiento, dotarlas de uniforme
y equipo adecuados, y procurar su descanso regular.

Página 7 de 360
2.4.3 La perspectiva sicológica

A menudo los rigores del combate tienen mayor efecto en la mente que en el
cuerpo del soldado; debido a que la mente está más directamente vinculada con la
voluntad de lucha del mismo, es preciso acondicionarla para que acepte las
tensiones de la guerra.
La amenaza de las armas nucleares, químicas y biológicas complica el problema
sicológico. El aislamiento y el temor agudizan los efectos del fragor del combate.
Es posible enseñarle al soldado a sobreponerse a ellos recurriendo al buen
entrenamiento, promoviendo la cohesión e inculcando la necesidad de que todo
soldado esté dispuesto a obrar con iniciativa y encargarse de la situación cuando
la circunstancias así lo exijan; la confianza mutua, el autorrespeto y el sentido de
compañerismo son importantes ingredientes de la cohesión en cualquier unidad.
El Comandante es el factor clave y es su deber desarrollar programas de
entrenamiento arduos y realistas destinados a promover la confianza individual y
las capacidades de la unidad.
Al mismo tiempo debe inspirar en sus soldados la certeza de que hará todo
cuanto esté de su parte para protegerlos. Los jefes deben conocer las condiciones
que tienden a provocar fatiga de combate en el soldado y tratar de neutralizarlas
oportuna y efectivamente. Un soldado disciplinado, bien dirigido y mentalmente
aguerrido puede tolerar condiciones en extremo arduas e inciertas.

2.4.4 La perspectiva ética

Pese a los rigores del ambiente en que el Ejército opera, los soldados deben
preservar las leyes de la guerra, proteger a la población civil y no combatientes,
mantener los daños colaterales o secundarios a nivel mínimo, respetar la
propiedad privada y tratar a los prisioneros de guerra dignamente. Dentro del
marco de estos rigores del combate, es imperativo respetar la integridad del
soldado desde el más alto hasta el más bajo nivel.
El Comandante tiene responsabilidades especiales para con el subordinado.
Nunca debe arriesgar la vida de sus soldados innecesariamente. Los Jefes deben
tratar a sus subordinados respetuosamente, y jamás deben buscar provecho
personal a expensas de sus subordinados; debe imbuir en sus subalternos sentido
del honor, compartir sus sufrimientos y privaciones y reconocer sus méritos.
El Jefe sienta el ejemplo con su comportamiento ético y con su dedicación al
deber.
El soldado es el que libra y gana la guerra, no las máquinas. La dimensión
humana de la guerra será factor decisivo en el futuro, tal como en el pasado.
El soldado es el alma y corazón del Ejército. Los jefes lo moldean, le inculcan
disciplina, lo surten de los recursos que necesita y le dan dirección. Pero en
definitiva es el soldado el llamado a cumplir la misión. Su actuación significa la
diferencia entre la victoria y la derrota.
Página 8 de 360
2.4.5 La dimensión física

Los cuatro principales elementos del ambiente operacional son las condiciones
meteorológicas, terreno, geografía y la infraestructura. Son los factores de la
dimensión física que más estrechamente afectan las operaciones militares del
Ejército y son componente valioso de una importante herramienta de la
planificación; la Apreciación de Situación.
Las formas en que pueden combinarse los efectos de la dimensión física del
combate son infinitas. Se debe evaluar el terreno, comprender los efectos de las
condiciones meteorológicas y saber sacarle ventaja a los rigores del ambiente.
También debe saber ejecutar una buena preparación de inteligencia en combate y
ayudarse así a comprender mejor las condiciones ambientales de la dimensión
física de las operaciones militares.
El ambiente físico puede incluir el efecto de las armas químicas, biológicas y
nucleares, tanto como la oscuridad y la mala visibilidad. Estas condiciones deben
ser tomadas en cuenta en la planificación operacional.

2.4.6 Efectos de las Condiciones Meteorológicas.

Las condiciones meteorológicas y la visibilidad crean ventajas y desventajas para


las fuerzas combatientes.
Para combatir eficazmente los Comandantes deben obtener información completa
acerca de las condiciones meteorológicas prevalecientes en su área de
operaciones.
También deben comprender los patrones estacionales de las condiciones
meteorológicas que influyen en la campaña en general.
Las condiciones meteorológicas afectan a los soldados, el equipo, las operaciones
y el terreno.
La masa de nubes, el viento, la lluvia, la niebla, el polvo, la iluminación y las
temperaturas extremas se combinan en diversas maneras que afectan seriamente
la eficiencia humana y limitan el uso de las armas y el equipo y el control de las
operaciones.
Generalmente las condiciones meteorológicas inclementes favorecen al atacante,
al ocultar su movimientos y reducir la eficacia del apoyo aéreo enemigo, aunque
también reducen su movilidad. Las tropas de defensa tienden a estar menos
alertas en condiciones meteorológicas inclementes. Afectan también el equipo y
los sistemas de armas. La concentración de nubes reduce el apoyo aéreo, degrada
los sensores aerotransportados, limita las operaciones y afecta las armas guiadas.
Las lluvias torrenciales restringen el movimiento a campo traviesa. La dificultad
del movimiento aumenta el consumo de combustible, reduce el alcance, aumenta
los requerimientos de mantenimiento, e impide el movimiento logístico y táctico.

Página 9 de 360
La visibilidad limitada también afecta las operaciones. La noche, la niebla y el
humo reducen los alcances útiles de la mayoría de las armas. A pesar de los
avances técnicos en el equipo para la visión nocturna, estas condiciones
usualmente implican cambios de tácticas. Generalmente, la visibilidad limitada
favorece al atacante. Esta reduce la observación del defensor así como la
efectividad de sus armas emplazadas y del apoyo aéreo.
Las operaciones en condiciones adversas o durante períodos de visibilidad
limitada requieren una planificación detallada, planes ensayados y maniobras
sencillas.

2.4.7 Efectos del terreno

El terreno constituye la estructura natural del campo de batalla. El análisis del


terreno, la preparación de inteligencia del campo de batalla y las operaciones
de ingenieros son claves para el uso operacional del terreno.

2.4.7.1 Análisis del terreno.

El conocimiento de las limitaciones y oportunidades del terreno es una pericia


militar básica.
El análisis del terreno varía de acuerdo con los niveles de mando. Los Jefes de
unidades básicas se concentran en los bosques y arroyos. Los Comandantes de
G.U.T.O. y G.U.T.E. analizan redes de caminos, avenidas de aproximación
aéreas, patrones de irrigación y sistemas de alturas.
A nivel estratégico, los planificadores de la campaña consideran el terreno
desde una perspectiva aún más amplia. Los puertos, sistemas geográficos
principales y características regionales son importantes en la planificación y la
dirección de las campañas.
Los Comandantes analizan el terreno de acuerdo con las misiones de sus
unidades. Evalúan el terreno en cuanto al impacto en su movilidad y la del
enemigo, así como su uso para observación y el efecto de fuego directo. El
Comandante idóneo reconoce la estructura natural del campo de batalla y trata
de mejorarla para poder así cumplir la misión. Tal análisis debe incluir el área
de responsabilidad asignada a la unidad, el terreno circundante que puede
afectar las operaciones, tanto en el área inmediata como en profundidad y el
espacio aéreo inmediato sobre ellas. Los planes de fuego, maniobra y
obstáculos se preparan en términos generales para ajustarse al terreno de la
operación.
Los elementos claves del análisis del terreno se resumen con la sigla
"OCOPA", que representan: observación y campos de tiro, cubiertos y abrigos,
obstáculos, puntos críticos y avenidas de aproximación.
El análisis detallado de estos elementos es realizado en el RC 4-3 "Inteligencia
de Combate".
Página 10 de 360
Página 11 de 360
2.4.7.2 Organización del Terreno.

El uso apropiado de obstáculos naturales y la organización del terreno deben


formar parte integral del plan del Comandante. Los fuegos de artillería, las
áreas de empleo de las armas de fuego directo y los obstáculos deben incluirse
en el plan táctico. A nivel operacional, se deben construir o mejorar las rutas y
se deben planificar los obstáculos y la interdicción en profundidad, para apoyar
la campaña o la operación principal.

Página 12 de 360
Aunque el atacante determina la hora y el lugar del ataque, el defensor posee
una clara ventaja en la preparación del campo de batalla. Debe aprovechar toda
oportunidad para estudiar, organizar y mejorar el terreno. El atacante debe
tener en mente esta ventaja del defensor y debe evitar que tenga tiempo para
preparar el terreno, obstruir rutas, preparar avenidas de contraataque y
establecer comunicaciones seguras. Una vez que la defensa haya ocupado una
buena posición y que la haya mejorado, se dificultan los siguientes ataques.
Generalmente el Comandante debe concentrar su esfuerzo de ingeniería en dos
direcciones. En una dirección debe desarrollar un sistema de obstáculos en
profundidad que mejore sus fuegos y afecte la movilidad del enemigo. En la
otra dirección, debe preparar posiciones y rutas cubiertas que faciliten la
ejecución de su propio plan de maniobra.
La organización del terreno es una operación en la que participan los
ingenieros y otras unidades. Los ingenieros construyen zanjas anti tanques,
campos minados, obstáculos de troncos, cráteres y demoliciones para canalizar
el movimiento del enemigo, inmovilizar al enemigo en áreas que pueda ser
destruido mediante fuego y proteger los flancos de la fuerza de maniobra.
Las unidades de artillería y la fuerza aérea táctica, siembran minas esparcibles
y baten blancos de oportunidad para contrarrestar la maniobrabilidad del
enemigo. La seguridad de defensa siembra campos minados alrededor de sus
propias posiciones y generalmente construyen sus propias posiciones de
combate. Los ingenieros que operan con los elementos avanzados de maniobra
despejan obstáculos, construyen puentes y balsas y apoyan las operaciones
contraminas.
La introducción de minas esparcibles de lanzamiento remoto, hace que todas
las unidades en el campo de batalla sean vulnerables a la obstrucción mediante
minas. Por lo tanto, todas las unidades deben contar con la capacidad para
llevar a cabo operaciones de limpieza de minas.

2.4.7.3 Inteligencia del terreno.

El Comandante debe familiarizarse personalmente con el terreno tanto como


sea posible antes del combate. Debido a que a veces los mapas o cartas son
inexactos o están incompletos, para las necesidades de Inteligencia, los
Comandantes deben llevar a cabo reconocimientos detallados personalmente y
distribuir las órdenes desde puntos ventajosos sobre el terreno siempre que sea
posible. El Oficial de Inteligencia del Estado Mayor es responsable de
recopilar toda la información disponible acerca del terreno y de preparar una
apreciación de sus efectos en las operaciones.
Las fuentes de inteligencia del terreno incluyen: mapas militares, civiles y de
ingenieros; estudios topográficos; civiles residentes en el área, prisioneros de
guerra; unidades aéreas y terrestres de reconocimiento.

Página 13 de 360
2.4.7.4 Terreno Urbanizado

Los Comandantes siempre han reconocido la importancia de los centros


urbanos como objetivos estratégicos, pero la conducción de operaciones en
ciudades y pueblos defendidos ha sido siempre difícil. Desde el punto de vista
operacional, los Comandantes deben evitar el empeño de fuerzas para el
ataque en áreas urbanas a menos que la misión lo requiera. Al contrario, el
terreno urbanizado puede ofrecer grandes ventajas al defensor, siempre y
cuando el atacante no pueda evitar o pasar por alto el área urbana.
Los Comandantes de G.U.E. y G.U.T.O. pueden ser responsables de las
principales áreas urbanas en sus operaciones. Los Comandantes de brigada y
batallón generalmente serán responsables de las ciudades más pequeñas,
pueblos, villas, y áreas reducidas en sus zonas o sectores. Los Comandantes y
el Estado Mayor en tales niveles analizan el terreno desde el punto de vista de
combatir dentro o entre las áreas urbanas.
En terreno urbanizado, el combate es más encerrado y el detalle del terreno es
más variado.
Las áreas urbanas entorpecen las operaciones de las fuerzas mecanizadas y
blindadas al restringir su movilidad y maniobrabilidad, así como la eficacia de
sus armas de largo alcance.

2.4.8 Efectos de la geografía.

El Comandante puede verse obligado a operar en distintos tipos de terreno, en


una sola área geográfica. Cada área comprende una
combinación única de características físicas y precisa de instrucciones
operacionales y tácticas específicas. Las características geográficas deben ser
consideradas desde el punto de vista de la geografía económica, física y
política, la división y organización administrativa, los accidentes del terreno,
facilidades portuarias y de aeródromos, tipos de vegetación, hidrografía,
regiones críticas, recursos disponibles, red vial, etc.
Hay un factor humano vinculado directamente al aspecto geográfico, la
población del área del conflicto puede tener un efecto directo en las
operaciones militares.
La voluntad de los habitantes, el producto de sus actividades de urbanización e
industrialización, su estructura agrícola, sus preferencias culturales y sociales,
sus convicciones políticas y desde el punto de vista táctico, su desplazamiento
físico durante el conflicto, pueden ser factores importantes.

2.4.9 Infraestructura

La infraestructura está formada por las instalaciones, el equipo y las


estructuras que el funcionamiento de un sistema, ciudad o región requiere. Se
Página 14 de 360
considera no sólo la estructura física sino también las costumbres culturales y
religiosas.
Al considerar la infraestructura, se debe analizar los efectos que tiene en las
operaciones y en el enemigo, la forma en que facilitarán u obstaculizarán las
actividades que deben seguir al concluir el conflicto y el grado de apoyo que
recibe de la población del área de operaciones.
A nivel estratégico, el Comandante evalúa la disponibilidad de puertos
marítimos, campos de aviación, fuentes de energía eléctrica, redes carreteras y
ferroviarias, redes de comunicaciones y reservas naturales de combustible. La
disponibilidad de depósitos, agua y víveres es factor básico en la elaboración
de planes. A nivel operacional, la presencia o ausencia de infraestructuras
apropiadas, inciden en el ritmo operacional.
Las redes de transportes, por ejemplo, pueden
contribuir en gran medida al movimiento de tropas,
las maniobras y la logística. Si la línea de
aprovisionamiento de la fuerza de combate es extensa
y la infraestructura local no da abasto para
satisfacer las necesidades de las tropas, resulta
difícil desarrollar gran potencia de combate.
También se dificulta la regeneración de fuerzas
cuando la infraestructura es limitada.
Lo mismo ocurre a nivel táctico.
Si bien el ambiente físico del combate a menudo resulta riguroso para las tropas, está
comprobado que éstas no sólo pueden sobreponerse sino también imponerse a
dicho ambiente y al mismo enemigo.

2.4.10 Elementos que afectan el Ambiente Operacional.

Los principales elementos que afectan el ambiente operacional son:

2.4.10.1 Normas impuestas para las operaciones.

Son un conjunto de propósitos, exigencias y condiciones, que surgen de la


política al más alto nivel y que las fuerzas no deberán perder de vista durante
el desarrollo de las operaciones militares. Dichas normas influyen
preponderantemente sobre la organización, efectivo, composición, objetivo y
actitud de las fuerzas e imprimen ciertas características y limitaciones a sus
operaciones.

El efecto de la observancia de las mencionadas normas, se traduce


generalmente en una mayor o menor libertad de acción para operar en las
relaciones con otras fuerzas (que pueden actuar en el marco conjunto o
combinado) y con la población; en la selección de objetivos que coadyuven al
Página 15 de 360
logro del objetivo de la guerra; y en última instancia en el empleo y/o
restricciones, para ciertos tipos de armas o procedimientos.

2.4.10.2 Características de las Operaciones

Influyen profundamente en la organización, efectivo, composición y aptitud


de las fuerzas, en las condiciones y duración de sus operaciones y en la
manera en que serán conducidas.

Las características de las operaciones son determinadas por las fuerzas


enfrentadas y se influencia mutuamente con los aspectos del ambiente
operacional, fundamentalmente las características geográficas.

Sección 2

FUNDAMENTOS PARA LA CONDUCCION DE LAS OPERACIONES

2.5 ALCANCE DE LAS OPERACIONES MILITARES

En la consecución de los objetivos estratégicos determinados por el Gobierno, este


hace uso de todos los Factores del Potencial Nacional. El Ejército Nacional puede
desarrollar sus actividades en tres diferentes "ambientes": Paz; Conflicto y Guerra.
Paz, conflicto y guerra pueden existir simultáneamente dentro del ambiente
estratégico del Comandante del T.O., él puede responder al conflicto mediante una
amplia variedad de operaciones militares. Durante la guerra pueden ejecutarse
operaciones no bélicas, así como otras operaciones militares aparte de la guerra
pueden hacer necesario el combate. Este espectro de operaciones militares reconoce
la existencia de tres ambientes estratégicos: durante el tiempo de paz la Nación
persigue una política de enfrentamiento pacífico de intereses que engloba aquellas
actividades que rutinariamente se realizan entre diferentes naciones y en nuestro
territorio; el segundo ambiente caracterizado por la confrontación de acciones no
bélicas y la necesidad de ejecutar operaciones de mayor envergadura se clasifica
como conflicto. El ambiente más violento y de más alto riesgo de supervivencia es
aquel que se desarrolla en el estado de guerra.

Página 16 de 360
¡Error! PROPOSI EMPLEO OPERACIONES MI- EJEMPLOS
Marcador TO DE LA LITARES
no FUERZA
definido.
AMBIEN
TE
GUERR Imponer la Coerción Guerra * Operacio-
A voluntad Total nes de Com-
bate en gran
escala.
* Ataque
* Defensa
C
O
M N
B O
CON- Disuasión Disuasión y Otras ope- A * Defensa in-
FLICTO de actitu- Persuasión raciones terna.
des hostiles militares
y reso- * Antiterro-
lución del rismo
conflicto.
T C
E O
M
B
PAZ Mantener y Influencia y Otras ope- * Auxilio en
Fomentar disuasión raciones A casos de ca-
la Paz. militares T tástrofe y
E emergen-
cias.
* Manteni-
miento de la
Paz.
* Apoyo al
desarrollo.

Página 17 de 360
LINEAMIENTOS DOCTRINARIOS PARA LA CONDUCCION DE
LAS OPERACIONES.

Los lineamientos doctrinarios para la conducción de las operaciones son las


establecidas en la actualización de la doctrina de Ejército Set./95

2.7 PRINCIPIOS PARA LA CONDUCCION DE LAS OPERACIONES

La tarea principal del Ejército es prepararse para librar y ganar guerras, de


acuerdo a las misiones establecidas en la Constitución y las leyes.
La guerra es una mezcla de arte y ciencia; derivada de la creatividad e ingenio de
sus conductores y de la posibilidad de establecer una metodología general para
resolverla. Los principios que la rigen son verdaderos axiomas surgidos del
estudio de las experiencias, los pensamientos y las decisiones de los grandes
estrategas de la historia.
El carácter de ciencia militar y la diversidad de formas de actuación, más allá de
la guerra, que se le presentan actualmente al Ejército permiten, por su permanente
aplicación, generalizar los principios de la guerra como principios para la
conducción de las operaciones. Su adecuada aplicación es esencial para el
ejercicio del Comando y para alcanzar el éxito en las diferentes Operaciones
Militares encaradas.
Los principios a ser considerados son:

2.7.1 Objetivo

Toda Operación Militar debe estar dirigida a lograr un objetivo; el cual


contribuirá a la obtención de los objetivos finales.
Los objetivos elegidos deberán:
- Estar claramente definidos.
- Ser decisivos para el éxito de la misión.
- Ser accesibles para el tiempo, el espacio y los medios disponibles.

2.7.2 Ofensiva

La actitud ofensiva es aquella que le permitirá al Comandante adelantarse a los


hechos, manteniendo la iniciativa y la libertad de acción; facilitando la obtención
de los objetivos finales.
Sólo las acciones ofensivas permitirán alcanzar resultados decisivos y el éxito en
las operaciones.

Página 18 de 360
Un Comandante solamente adoptará una posición defensiva cuando sea forzado
por el enemigo, como economía de fuerza o temporariamente, mientras se
generan las condiciones para retomar la acción ofensiva.

2.7.3 Unidad de Comando

Es la delegación en un Comandante de toda la autoridad necesaria para asegurar


el empleo sincronizado de todos los medios disponibles durante el desarrollo de
las operaciones.

2.7.4 Simplicidad

Aún el plan más simple es difícil de ejecutar en la realidad. La simplicidad se


debe aplicar a la organización, a los procedimientos y al empleo de los medios
para asegurar la sincronización en el cumplimiento de la misión.
Los planes y órdenes simples y claros permiten su ejecución en forma eficaz y
eficiente.

2.7.5 Maniobra

Es el conjunto de actividades que debe realizar el Comandante para ubicar sus


tropas en una posición más ventajosa buscando mejorar su potencia relativa
mediante la masa y la economía de fuerzas para el cumplimiento de la misión.

2.7.6 Masa

Es la aplicación de la mayor cantidad de medios disponibles en el punto o


momento crítico para alcanzar el éxito en las operaciones. La masa se puede
incrementar por el empleo de tácticas, tecnologías y moral superiores; mas allá de
la cantidad numérica de medios empeñados.

2.7.7 Economía de Fuerzas

Es la aplicación de los medios necesarios, en cantidad y calidad, en el punto y


momento críticos; no empeñándolos en áreas donde no se espera obtener
resultados decisivos.
La asignación de los medios debe realizarse en forma cuidadosa para no
dificultar: la sincronización en su empleo en los puntos o momentos críticos o el
mantenimiento de las áreas secundarias.
Los principios de maniobra, masa y economía de fuerzas estarán siempre
dependiendo el uno del otro, en busca de obtener el o los objetivos establecidos.

2.7.8 Sorpresa
Página 19 de 360
Se obtiene por la aplicación de los medios en un lugar, momento y forma
inesperados o que permitan un escaso tiempo de reacción para impedir sus
efectos.
La obtención de la sorpresa, mediante el empleo de operaciones de seguridad y
engaño y de procedimientos no estereotipados, afecta favorablemente la potencia
relativa de las fuerzas.

2.7.9 Seguridad

Resulta de la adopción de un conjunto de medidas destinadas a prevenir la


sorpresa, preservar la libertad de acción y negar al enemigo información sobre las
propias fuerzas.
Todo conflicto se resuelve en una confrontación de voluntades y toda acción
requiere un propósito firme.
Una brillante planificación o la disponibilidad de medios modernos no aseguran
por si solo el éxito, resulta imprescindible contar además con una permanente
disposición en todos los niveles al sacrificio para el cumplimiento de la misión.

2.8 PRINCIPIOS PARA LA EJECUCION DE LAS OPERACIONES DEL


EJERCITO

Siempre que las fuerzas del Ejército sean llamadas a actuar lo harán para triunfar.
Durante el combate procurarán imponer su voluntad al enemigo, en otras
operaciones militares buscarán crear las condiciones que permitan el logro de los
OO.NN. (Objetivos Nacionales). La victoria es el objetivo, cualquiera sea la
misión del Ejército, y el éxito dependerá de su capacidad para actuar según cinco
principios básicos: iniciativa, velocidad, profundidad, sincronización y
versatilidad.
Toda la doctrina referente al entrenamiento y liderazgo, al combate, apoyo al
combate y apoyo administrativo, deriva directamente de estos principios
fundamentales y deberá estar de acuerdo con ellos. El Ejército considera que
éstos por sí mismos no garantizan la victoria, pero su ausencia hará que la misma
sea muy difícil de obtener.

2.8.1 Iniciativa.

Requiere que los líderes se anticipen a los acontecimientos de modo de poder


actuar y reaccionar antes que los hechos sucedan. La iniciativa aplicada a los
soldados y a los líderes individualmente requiere disposición y capacidad para
actuar independientemente (en ausencia de órdenes específicas) dentro del marco
del propósito superior del Comandante.

Página 20 de 360
Durante las Operaciones, la iniciativa requiere la descentralización de la
autoridad con poder de decisión a los niveles inferiores de comando. Al mismo
tiempo, la descentralización implica correr el riesgo de perder cierta dosis de
sincronización. Los Comandantes constantemente evalúan estos riesgos y
reconocen que la pérdida inmediata del control es preferible a la inacción. La
descentralización necesita subordinados bien entrenados y superiores dispuestos a
correr riesgos.

2.8.2 Velocidad.

Velocidad es la capacidad de reaccionar más rápidamente que los hechos y es un


requisito previo para obtener y mantener la iniciativa. Es una cualidad tanto
mental como física. Una mayor velocidad permite la rápida concentración de los
medios en los puntos más favorables.
Las interferencias generadas por acumulación de errores, dificultades inesperadas
y confusión de las operaciones afectan la velocidad. Nunca podrán eliminarse por
completo, pero sí de no tenerse en cuenta, podrán incidir gravemente sobre la
velocidad. Para reducirlas los Comandantes deberán analizar en forma continua
la situación, tomar una decisión y actuar.

2.8.3 Profundidad.

Profundidad es la extensión de las operaciones en el tiempo, espacio, recursos y


propósito. Estos factores varían según las órdenes que se imparten a los
diferentes escalones.
Lo más importante, sin embargo, es el hecho de que en cada operación, el
Ejército, debe tener la habilidad de obtener información y tener influencia sobre
las operaciones en toda la extensión del campo de batalla. Esta habilidad pone en
claro la naturaleza conjunta de las operaciones.
La profundidad permite a los Comandantes mantener el ímpetu y obtener
ventajas de todos los recursos disponibles para actuar presionando sobre los
elementos y capacidades que se oponen al cumplimiento de la Misión.
La extensión en profundidad de las Operaciones favorecerán la obtención y
mantenimiento de la iniciativa por parte de los Comandantes.
Atendiendo a que las situaciones que se resuelven a corto plazo son la excepción,
los comandantes tomarán previsiones para desarrollar actividades simultaneas y
marcar etapas que conduzcan a obtener resultados a largo plazo.

2.8.4 Sincronización.

Es la coordinación de actividades en tiempo y espacio para obtener masa en el


punto decisivo.

Página 21 de 360
La sincronización requiere de permanente coordinación entre todas las Unidades
y actividades previstas para una operación.
Los efectivos deberán comprender el propósito de su Comandante puesto que en
ellos se basa gran parte del éxito en la sincronización del plan. La sincronización
entonces, tiene primero lugar en la mente del Comandante y luego en la realidad,
en la planificación y coordinación de todas las actividades. Los ensayos son
básicos para la ejecución exitosa de las operaciones sincronizadas.
En resumen, el producto de una sincronización efectiva es el máximo uso de cada
recurso, de manera de hacer la mayor contribución posible al éxito. Esto es válido
para todas las operaciones. La sincronización requiere buen juicio para elegir
entre actividades simultáneas y sucesivas.

El nivel de Unidades graficados en los ilustraciones es meramente representativo y no indica que tal operación
necesariamente sea exclusividad de ese nivel.

2.8.5 Versatilidad.

Página 22 de 360
Es la habilidad de las Unidades de responder a los diversos requerimientos que le
impone el cumplimiento de la Misión. Los Comandantes deben ser capaces de
cambiar el enfoque, organización y misión en forma rápida y eficiente. La
versatilidad es la capacidad de ser multifuncional para abarcar todo el espectro de
las operaciones dentro de los niveles táctico o estratégico.
La versatilidad es el resultado de fuerzas bien comandadas, entrenadas y
equipadas, con normas de comportamiento elevadas a través de una planificación
detallada.
Ella asegura que las unidades puedan enfrentar las distintas misiones en forma
sucesiva o simultánea con las mismas posibilidades de éxito.

2.9. POTENCIA DE COMBATE

¡Error! = Maniobra + Potencia de + Protección + Liderazgo


Marcador Fuego
no
definido.Pot
encia de
Combate

La Potencia de Combate se obtiene por la sumatoria de la: Maniobra, Potencia


de Fuego, Protección y Liderazgo. La Potencia de Combate es la capacidad de
disponer de la fuerza suficiente para alcanzar el éxito.
Los Comandantes procurarán disponer de la máxima Potencia de Combate
para obtener el éxito con un mínimo costo, convirtiendo el potencial de las
fuerzas, recursos y oportunidades en capacidades reales para aplicarlas en el
lugar y momento decisivo, a través de una acción agresiva y coordinada.
Los Comandantes deberán multiplicar el efecto de su Potencia de Combate
mediante la integración de sus medios en forma Conjunta o Combinada.
En la obtención de la máxima Potencia de Combate se tendrán en cuenta
factores como: calidad del equipo y entrenamiento, doctrina, valor y moral de
las Tropas. La obtención del éxito depende de un adecuado entendimiento,
por parte de los Comandantes, de la dinámica de la Potencia de Combate.

2.9.1 La dinámica de la potencia de combate

Está dada por la combinación de los cuatro elementos que la integran:


Maniobra, Potencia de Fuego, Protección y Liderazgo. Su efectiva aplicación
incidirá en el resultado de las operaciones.

2.9.1.1 Maniobra

Página 23 de 360
Es la capacidad de una fuerza de ubicarse en una posición favorable con
respecto a los elementos que se opongan al cumplimiento de la misión,
buscando ubicar los medios en puntos decisivos que permitan obtener:
sorpresa, masa y superioridad moral.
Su éxito dependerá del continuo análisis de la situación y de decisiones
oportunas en la conducción.

2.9.1.2 Potencia de fuego

Es el volumen de fuego que puede ser desencadenado para apoyar el


cumplimiento de la misión. Integra la decisión del Comandante como parte
fundamental de la maniobra. Los efectos de la Potencia de Fuego se dan a
nivel táctico y estratégico, de donde deben sincronizarse con todos los sistemas
disponibles en las otras fuerzas. Para lograr su máxima potencia, deberán
integrarse todos los sistemas y procedimientos de la Fuerza para determinar
prioridades, localizar, identificar y ubicar los blancos, evaluándose sus
resultados.

2.9.1.3 Protección

Es el conjunto de medidas dispuestas por el Comandante para preservar su


Potencial de Combate para poder aplicarlo en el lugar y momento decisivo.
Está integrada por cuatro componentes principales:
- Operaciones de Seguridad y de Engaño, destinadas a evitar que los medios
propios sean localizados por el Enemigo. Dentro de las medidas
disponibles para lograrlo se encuentran la Seguridad del Comando, Control
y Comunicaciones, el reconocimiento, contra-reconocimiento, dispersión,
camuflaje, OT, etc.
- Preservación de la salud y moral de las tropas; incluyen medidas
destinadas a proteger el estado de salud, bienestar y espíritu de las mismas,
para consolidar la cohesión en las Unidades; incluye también protección de
equipos y abastecimientos.
- Seguridad en los procedimientos de planificación y ejecución de las
operaciones, las que se deben complementar con la firmeza del mando,
disciplina e instrucción de las tropas.
- Medidas para evitar las bajas producidas por acciones propias. Los
mecanismos esenciales que limitan este tipo de situaciones son: Comando
firme, disciplina en las operaciones, profundo conocimiento de la situación
y previsión ante condiciones que favorezcan la ocurrencia de las mismas.

2.9.1.4 Liderazgo

Página 24 de 360
Los líderes trasmiten a las tropas la voluntad de vencer; su competencia y
confiabilidad serán un elemento dinamizador de la Potencia de Combate. La
formación de los líderes comienza en tiempo de paz, profundizando sus
conocimientos profesionales, técnicos, tácticos y estratégicas, ahondando en la
comprensión de la naturaleza humana; todo lo cual le permitirá comprender los
efectos de las operaciones sobre las tropas.
Una vez en operaciones la superioridad de la Potencia de Combate, se basará;
en el valor y competencia de las tropas, excelencia de su instrucción, la
capacidad de sus equipos, la solidez de su doctrina y por sobre todo, la calidad
de sus líderes.

2.10 FUNCIONES DE COMBATE

Diversas funciones deberán desarrollarse durante las operaciones, las cuales


permitirán al Comandante, confirmar y mantener su Potencia de Combate. El
integrará y coordinará estas funciones para sincronizar en el tiempo, espacio y
propósito el efecto en las operaciones. Para su planificación y ejecución serán
consideradas como funciones de Combate.
- Comando, Control y Comunicaciones
- Inteligencia
- Maniobra
- Apoyo de Fuegos
- Defensa Antiaérea
- Movilidad y Supervivencia
- Logística
- Apoyo Aerotáctico
- Apoyo Naval

2.10.1 Comando, Control y Comunicaciones

Las actividades de Comando, Control y Comunicaciones asociadas,


constituyen una de las funciones básicas más importantes en la conducción de
las operaciones por cuanto ellas permitirán materializar la voluntad del
Comandante.
El Comando optimizará el empleo de la fuerza, confiriéndole, flexibilidad,
versatilidad y continuidad a las operaciones, aún en condiciones adversas.
El Control permitirá al Comandante verificar y evaluar el desarrollo de las
operaciones, así como la adecuación de la planificación y ejecución de ellas,
de acuerdo a la situación imperante.
Las Comunicaciones serán el medio a disposición del Comandante para
ejecutar y conducir las operaciones.
La confiabilidad de las medios utilizados será factor vital para la seguridad del
Comando y Control.
Página 25 de 360
2.10.2 Inteligencia

Son las actividades destinadas a obtener la información necesaria para el


Comandante sobre el enemigo, terreno y condiciones meteorológicas.
El ciclo de producción de inteligencia es una tarea permanente que se realiza
desde tiempo de paz, continúa durante las operaciones y aún después de su
finalización. La ejecución de estas actividades requerirá:
- Dirección centralizada
- Acciones simultáneas en todos los niveles de Comando.
- Oportuna diseminación
- Estricto control de las normas del secreto.

La obtención apropiada y oportuna permitirá tomar decisiones en tiempo y


forma.

2.10.3 Maniobra

La maniobra además de ser una función de combate es un principio de la


conducción y conforma la potencia de combate.
Como función de combate busca crear las condiciones adecuadas para alcanzar
el éxito a nivel táctico, obteniendo la capacidad para destruir al Enemigo u
obstaculizar su movilidad a través de la aplicación directa o indirecta del
poder, debiendo equilibrarla con los restantes elementos que conforma la
Potencia de Combate. Las maniobras tácticas buscan obtener resultados
estratégicos.

2.10.4 Apoyo de fuego

Entre otras formas, el Comandante puede influir directamente en el desarrollo


de las operaciones, mediante la aplicación sistemática de su Potencia de
Fuego.
El apoyo de fuego asiste a las operaciones sincronizando todos los fuegos:
directos, indirectos, aéreos, terrestres o navales disponibles, para, mediante sus
efectos, destruir o neutralizar los elementos de maniobra enemigos, sus medios
de Comando, Control y Comunicaciones, sus apoyos al combate y sus
servicios de apoyo en procura de obtener objetivos tácticos o estratégicos.

2.10.5 Defensa antiaérea

El éxito de las operaciones depende, en forma significativa, del efecto que las
acciones aéreas produzcan sobre las fuerzas terrestres y su libertad de acción.

Página 26 de 360
La defensa Antiaérea, operación de naturaleza conjunta, cuya finalidad es la
obtención y mantenimiento de la superioridad aérea, reduciendo o
neutralizando el efecto de las amenazas aéreas, en vuelo o en tierra, desde las
mayores distancias posibles.

2.10.5.1. Supremacía aérea

Capacidad general que se le asigna a una de las partes beligerantes en base a la


cantidad de medios aéreos, de detección y facilidades disponibles en
combinación con la tecnología aplicada a los mismos.

2.10.5.2 Superioridad aérea

Capacidad local y temporal asignada a una de las partes beligerantes, en base a


la cantidad de los medios empleados en una zona y momento determinado,
independientemente de que posea o no supremacía aérea.

2.10.6 Movilidad y supervivencia

Las operaciones de movilidad y contra-movilidad facilitan la obtención y


mantenimiento de la libertad de acción propia; obstaculizan la del enemigo y
generan las condiciones para su destrucción mediante el fuego y la maniobra.
Las operaciones de protección buscan resguardar a las tropas de los efectos del
fuego, de la maniobra y del reconocimiento enemigo, incrementando sus
posibilidades de supervivencia y efectividad.

2.10.7 Logística

La Logística es la rama de la administración militar que procura satisfacer las


necesidades físicas de las tropas, mediante recursos que obtiene, administra,
distribuye y mantiene. El sistema logístico estará íntimamente apoyado en las
realidades económicas, productivas y territoriales, de forma de obtener el
máximo provecho de los recursos propios.
Como el apoyo se realizará por una combinación de recursos propios del
Ejército y de los provenientes, mayoritariamente, del factor económico
nacional, el sistema logístico deberá ser lo más sencillo, rápido y flexible
posible; debiéndose determinar, de acuerdo a las restricciones existentes, las
prioridades de asignación, las formas de distribución y los procedimientos de
control de los recursos disponibles.
El apoyo logístico no ha ganado ninguna guerra; pero ha perdido muchas.

Página 27 de 360
2.10.8 Apoyo Aerotáctico

El apoyo Aerotáctico es una operación de naturaleza conjunta; estando


integrada por el personal, el equipo y los procedimientos incluidos en el
Sistema Aeroterrestre del Ejército y el Sistema de Control Aerotáctico de la
Fuerza Aérea.
Es el apoyo en potencia de fuego, reconocimiento y transporte que
proporcionan las aeronaves propias, de la Fuerza Aérea o Armada a las
FF.TT., a pedido. Colabora en la obtención y mantenimiento de la superioridad
aérea.
Su utilización está prevista dentro del apoyo de fuego, la inteligencia y la
maniobra.

2.10.9 Apoyo naval

Las operaciones en medios marítimos y en litorales facilitan el logro y


mantenimiento de la libertad de acción del comandante.
El control marítimo permite el movimiento de fuerzas y abastecimientos por
este medio; protege las líneas marítimas de comunicaciones y permite ejecutar
operaciones terrestres y áreas desde el mar.
Las operaciones marítimas que contribuyen al éxito de las operaciones
terrestres son las de control marítimo y proyección de fuerza.
Control marítimo: tiene por finalidad dominar en determinado punto el espacio
aéreo, superficial o subsuperficial, en resumen lograr y mantener supremacía
marítima.
Proyección de fuerza: en estas operaciones las fuerzas navales realizan
bombardeos (apoyo fuego), acciones anfibias, minado y desminado.

Página 28 de 360
Sección 3

LOS MEDIOS

2.11 GENERALIDADES SOBRE LA ORGANIZACION DE LAS FUER-


ZAS TERRESTRES

La misión a cumplir, los medios disponibles, las características del ambiente


geográfico y del adversario a enfrentar, harán conveniente mantener criterios de
organización que apunten, desde tiempo de paz, a satisfacer las probables
exigencias que impongan el empleo de los medios del Ejército en operaciones,
considerando que los mismos no siempre serán suficientes para abordar el
cumplimiento de la Misión en las condiciones deseadas.
Esta circunstancia, determinará que tales medios sean organizados, equipados,
instruidos y posteriormente empleados según estrictos y claros conceptos, a fin
que puedan cumplir las funciones, que por sus características esenciales les
corresponde desarrollar.
Las fuerzas terrestres designadas para un Teatro de Operaciones incluyen los
órganos adecuados de Comando y los elementos necesarios de las diversas
Armas y Servicios. Estos elementos comprenden medios de combate, de apoyo
al combate y de apoyo administrativo.

2.11.1 Elementos de Comando.

Desde el punto de vista orgánico, se entiende por Comando, a la estructura


formada por el Comandante, su Estado Mayor, y todo otro elemento necesario
para facilitar el ejercicio de sus funciones en la conducción de las Fuerzas
puestas a su disposición.
Cobrará particular importancia contar con un sistema de comando, control,
comunicaciones e inteligencia (C3+I), como medio más idóneo para permitir al
Comandante, el comando y control de las operaciones en los tiempos y espacios
que la guerra moderna y la realidad geográfica imponen.

2.11.2 Los Medios de Combate.

Constituyen el elemento básico disponible al Comandante para la conformación


de la potencia de combate y la participación en las operaciones.
Son aquellos que se distinguen por su capacidad para entablar combate con el
enemigo, empleando el fuego y la maniobra. Estos medios se componen con las
Armas de Infantería y Caballería.

2.11.3 Los Medios de Apoyo al Combate.

Página 29 de 360
Son los que permitirán al Comandante acrecentar el poder integral de su fuerza.
Se componen con el Arma de Apoyo de Fuego: Artillería; y con las Armas de
Apoyo al Combate: Ingenieros y Comunicaciones.

Página 30 de 360
2.11.4 Los Medios de Apoyo Administrativo.

Son los que proporcionarán distintos servicios a fin de mantener la aptitud de


combate de las tropas. Acorde a la naturaleza de su vínculo con las
operaciones, se dividen en Servicios de Apoyo Logístico y Servicios de
Apoyo de Personal.

2.12 COMPOSICION DE LOS MEDIOS DEL EJERCITO.

Las Fuerzas del Ejército son estructuradas de acuerdo con las necesidades
impuestas por la Misión y la naturaleza de las Operaciones. Integrando
Grandes Unidades Estratégicas (G.U.E.), Grandes Unidades Tácticas
Operativas (G.U.T.O.) y Grandes Unidades Tácticas Elementales (G.U.T.E.).
Las Grandes Unidades Estratégicas, ejecutan la Maniobra Estratégica por
acciones tácticas; se componen de Grandes Unidades Tácticas Operativas y
Elementales. Es en este nivel, donde se pasa de la Estrategia a la Táctica.

2.12.1 Ejército en Campaña.

El Ejército en Campaña será la Gran Unidad Estratégica (G.U.E.)


responsable por la ejecución de las acciones estratégicas del escalón superior
y la planificación de las operaciones tácticas para la batalla, de sus elementos
subordinados. Cuando constituya el más alto escalón de Comando del
Componente Terrestre del Teatro de Operaciones (Cdo. FF.TT.T.O.),
también será responsable por la concepción y planificación de sus propias
acciones estratégicas previas a la batalla.
El E.Camp., descompondrá la maniobra estratégica para alcanzar el objetivo
estratégico impuesto por el Superior, en acciones tácticas, cuya ejecución le
compete a sus piezas de maniobra.

2.12.1.1 Estará capacitado para:

- Ejecutar las acciones estratégicas (Concentración Estratégica,


Desplazamiento Estratégico, Maniobra Estratégica), asignadas por el
Escalón Superior.
- Planificar y ejecutar sus acciones estratégicas antes de la batalla, cuando
sea el componente principal y con responsabilidades por todas las Fuerzas
Terrestres del T.O. (FF.TT.T.O.)
- Planificar las operaciones tácticas para la batalla.
- Eventualmente, combinar Direcciones Estratégicas (Nivel Estratégico).
- Combinar direcciones Tácticas de Actuación (Nivel Táctico).
- Combinar actitudes en el tiempo y en el espacio.

Página 31 de 360
- Seleccionar objetivos que se determinarán con relación a las fuerzas
enemigas, regiones geográficas significativas, centros de abastecimientos y
elementos vitales de su sistema de Comunicaciones.
- Coordinar las acciones de sus elementos subordinados.
- Coordinar las operaciones de elementos de otras fuerzas que actúen en su
apoyo (FF. Aéreas y FF.NN.)
- Asegurar el apoyo administrativo a los medios que lo integran.

Será de organización variable y de estructura abierta, debiendo su


constitución responder a su responsabilidad operacional, administrativa, y
territorial.
El Comandante de las FF.TT. podrá integrarlo con los siguientes elementos
básicos:
- Comando, Estado Mayor y Tropas Orgánicas.
- Medios de Apoyo al Combate.
- Medios de Apoyo Administrativo.
- Un número y tipo variable de GUTO.
- Un número y tipo variable de GUTE, asignadas a las GUTO o
comandadas directamente.
- Otros medios.

2.12.2 División de Ejército.

2.12.2.1 La División de Ejército será la Gran Unidad Táctica Operativa, (GUTO) con
capacidad para:

- Ejecutar las acciones tácticas en el marco de la Maniobra Estratégica o


Táctica concebida por el Comando Superior.
- Planificar y ejecutar su Maniobra Táctica.
- Combinar esfuerzos y Direcciones Tácticas de Actuación (D.T.A.).
- Excepcionalmente, combinar actitudes.
- Desarrollar la batalla.
- Coordinar las acciones de sus piezas de maniobra durante el desarrollo del
combate.

2.12.2.2 La División de Ejército constituirá escalón táctico y administrativo, cuando


no dependa directamente del comando de la GUE.

2.12.2.3 El comando de FF.TT. o el comando de la GUE integrará la División de


Ejército con:
- Medios de comando y tropas orgánicas.
- Medios de combate.
Página 32 de 360
- Medios de apoyo al combate.
- Medios de apoyo administrativo.
Los medios de comando y tropas orgánicas tendrán organización fija. Los de
Combate y Apoyo al Combate se establecerán de acuerdo con el número y
tipo de GUTE, que a su vez, dependerán de la misión que deba cumplir la
División de Ejército.
Los Medios de Apoyo Administrativo serán también variables, según que la
GUTO constituya o no escalón administrativo.

2.12.3 Brigada

La Brigada constituirá una Gran Unidad Táctica Elemental, combinando


Armas y Servicios (UU. de Combate, UU. de Apoyo al Combate y UU. de
Apoyo Administrativo), con predominio de un Arma para llevar a cabo el
combate.

2.12.3.1 Tendrá capacidad para:

- Ejecutar las acciones tácticas en el marco de la Maniobra Táctica


concebida por el Comando Superior.
- Planificar y ejecutar su Maniobra Táctica.

- Combinar esfuerzos, actuando en una sola Dirección Táctica de Actuación.


- Desarrollar el Combate en todas sus fases.
- Mantener una relativa autonomía en el tiempo y en el espacio.
- Coordinar las acciones de sus elementos constitutivos.
- Asegurar el Apoyo Administrativo de los medios que la integran.

2.12.3.2 La Brigada constituirá un escalón táctico y administrativo que el comando


FF.TT. organizará con:

- Medios de comando.
- Medios de combate.
- Medios de apoyo al combate.
- Medios de apoyo administrativo.

2.12.3.3 Los Medios de Combate estarán constituidos por Unidades Básicas (de base
ternaria) de las Armas de Combate. Además, contará con Sub-Unidades cuyo
tipo dependerá de la Brigada que se organiza. El tipo de Unidades Básicas, o
el número de ellas que prevalezca en caso de combinarse varios tipos,
determinará la denominación de la GUTE a saber:

- B.I.Mot.: Brigada de Infantería Motorizada.


Página 33 de 360
- B.I.Mec.: Brigada de Infantería Mecanizada.
- B.C.Mec.: Brigada de Caballería Mecanizada.
- B.I.Blda.: Brigada de Infantería Blindada.
- B.C.Blda.: Brigada de Caballería Blindada.

2.12.3.4 Los Medios de Apoyo al Combate y Apoyo Administrativo dependerán del


tipo de Unidades Básicas de Combate, considerando además, que la GUTE,
constituye escalón táctico y administrativo.

2.12.3.5 El Comando FF.TT, asignará las BB. a la GUE o GUTO para el


cumplimiento de una Misión determinada. Los escalones superiores
indicados (GUE o GUTO) podrán realizar ajustes en la organización de sus
GUTE, disminuyendo o aumentando en el número de sus Unidades Básicas
(entre 2 y 5 de ellas) y/o de alguno de sus restantes Medios de Combate, de
Apoyo al Combate o de Apoyo Administrativo.
La organización que el Cte. de Brigada realice internamente en sus medios,
se denominará Organización para el Combate, lo que podrá concretarse en
Fuerzas de Tarea (FT).

2.12.4 Comando de Apoyo Administrativo de las FF.TT. (C.A.A.FF.TT.)

Su Misión será la de proporcionar Apoyo Administrativo a las FF.TT. así


como a los Componentes Navales y Aéreos conjuntados en el T.O., y a otras
Fuerzas cuando se determine expresamente.
El C.A.A.FF.TT. instalará y operará para el cumplimiento de su misión,
Bases de Operaciones, a las que les asignará responsabilidad territorial.
Será de Organización variable, pudiendo incluir, según su misión y la
magnitud de las operaciones de apoyo previstas:
- Comando Logístico.
- Comando de Personal.
- Comando de Asuntos Civiles.

2.12.5 Agrupamiento de Fuerzas Especiales. (Agrp.FF.ES.)

Las Fuerzas Especiales son aquellas con adiestramiento especial;


organizadas, equipadas e instruidas para satisfacer los requerimientos que
demanden los niveles estratégico y táctico, incluyendo la proyección del
Poder Militar, antes y durante las operaciones militares, o cuando el empleo
de fuerzas convencionales de consideración, sea prematuro, inapropiado y/o
poco factible.
Estas fuerzas comprenden elementos Paracaidistas y de Comandos, los que
cumplirán sus funciones, participando en operaciones convencionales dentro
del escenario de la batalla, así como en operaciones no convencionales.
Página 34 de 360
2.12.5.1 Algunas de sus funciones en apoyo de los niveles estratégicos, podrán incluir
la ejecución de operaciones de alta complejidad, tales como las que se
mencionan a continuación:
- Obtener información específica, en apoyo de los planes estratégicos.
- Conducir operaciones de rescate y evacuación.
- Conducir operaciones de engaño.
- Proporcionar apoyo clandestino a otras operaciones.
- Recuperar efectos de valor estratégico.
- Conducir y ejecutar operaciones no convencionales.
- Ejecutar reconocimiento estratégico y táctico.
- Ejecutar operaciones sicológicas.
- Ejecutar operaciones de comando.

2.12.5.2 Los aspectos básicos a tener en cuenta para el empleo de las FF.ES. serán:
- Disponibilidad de una oportuna y precisa inteligencia.
- Seguridad de Comunicaciones y posibilidad de enlace.
- Apoyo administrativo adecuado.

2.12.6 Agrupamiento

Será una Organización Militar, táctica y/o administrativa de constitución


variable, que reúne Organos de Comando y elementos de una misma Arma
de Apoyo al Combate de valor Unidad, Sub-Unidad y eventualmente
fracciones menores.

2.12.7 Fuerza de Tarea

Es el agrupamiento de carácter temporario de elementos bajo un Comando


único, constituido para la ejecución de una operación o el cumplimiento de
una Misión específica.
Su aplicación se hará efectiva cuando se deban organizar para el combate,
elementos menores al nivel Gran Unidad Táctica Elemental.
Se constituirá sobre la base de una Unidad Básica de Infantería o Caballería
completa o disminuida, a la que se agregarán elementos de combate de
distinto tipo, de los cuales por lo menos uno, deberá ser de nivel sub unidad.
Además podrán agregársele elementos de Apoyo de Fuego, Apoyo de
Combate y/o Administrativo.

2.12.8 Unidad Básica

Página 35 de 360
La Unidad Básica es el mayor agrupamiento orgánico de tropas
pertenecientes a un Arma o Servicio, bajo un comando único.
Tendrá un cuadro de organización fijo que, además de establecer su
estructura, determinará sus capacidades básicas, sus limitaciones y su
autonomía.

2.12.8.1 Las Unidades básicas son:

- El Batallón de Infantería, Ingenieros y Comunicaciones. (Bn.I, Bn. Ing.,


Bn. Com.)
- El Regimiento de Caballería (Reg. C.)
- El Grupo de Artillería (Grp. A.)

2.12.9 Equipo de Combate

Es el agrupamiento de carácter temporario constituido con elementos bajo un


comando único, y concebido para la ejecución de una operación o el
cumplimiento de una misión específica.
Su aplicación se hará efectiva cuando se deban organizar para el combate,
elementos menores a la Unidad Básica.
Se constituirá sobre la base de una sub-unidad de Infantería o Caballería
completa, o sobre aquella que conserva por lo menos una sección de combate
orgánica, a la que se le agregarán una o más secciones de elementos de
combate.

2.12.10 Sub-unidades (Compañía, Escuadrón y Batería)

Es el menor agrupamiento orgánico de tropas pertenecientes a un Arma o


Servicio, que tiene un cuadro de organización fijo bajo un comando único.
Estará compuesta por secciones y conformará la base de los Batallones,
Regimientos y Grupos).
2.13 LAS ARMAS DE COMBATE.

Son aquellas organizadas, equipadas e instruidas para combatir en contacto


directo con el enemigo. Poseen especial aptitud para producir el choque
llevando la acción al momento de la decisión. Sus capacidades esenciales
serán destruir o capturar al enemigo, conquistar, controlar o negar terreno,
proteger a una fuerza y obtener información.
Tales elementos afrontarán los mayores riesgos, requiriendo, para su
adecuado rendimiento, además de una apropiada acción de mando, el más
alto grado de disciplina, resistencia, tenacidad, arrojo y espíritu de cuerpo.
Las Armas de combate están representadas por las organizaciones de
Infantería y Caballería.
Página 36 de 360
2.13.1 INFANTERIA

2.13.1.1 Definición

Arma de combate, organizada, equipada e instruida para conformar la masa


principal de la Fuerza terrestre en todas las operaciones tácticas,
constituyendo elemento vital de la potencia de combate en la lucha a corta
distancia.

2.13.1.2 Misión

Procurar imponer la voluntad propia sobre la del enemigo tomando contacto


(cerrando) con este para destruirlo o capturarlo, conquistar y mantener el
terreno.

2.13.1.3 Organización

Puede incluir organizaciones de:

- Infantería Motorizada
- Infantería Mecanizada
- Infantería Blindada
- Infantería Aerolanzada (paracaidistas)
- Infantería Aeromóvil
cada una con su diseño orgánico e instrucción particular.

2.13.1.4 Características generales

1. Capacidad de Maniobra
Dada por su aptitud para movilizarse y combatir con una variedad de
medios propios y por su potencia de fuego orgánica.

2. Capacidad de Combate Cercano


Dada por su tenacidad, resistencia y decisión, su capacidad de maniobra y
su acción de choque, lo que la hace adaptable a todo tipo de operación.

2.13.1.5 Posibilidades

- Participar en la batalla integrando las GG.UU. con sus organizaciones y


especialidades mediante la ejecución de operaciones tácticas con gran
capacidad de maniobra.
- Mantener o romper el contacto con el enemigo.
Página 37 de 360
- Entrar en combate para conquistar el terreno o para destruir o capturar al
enemigo mediante la maniobra y la acción de choque.
- Organizar y mantener el terreno.
- Rechazar, destruir o desgastar el ataque enemigo por medio del fuego, el
combate cuerpo a cuerpo y el contraataque.
- Operar sin mayores limitaciones en condiciones meteorológicas adversas y
en terreno intransitable para otras Armas.
- Recibir y encuadrar apoyos o refuerzos de cualquier Arma.

2.13.1.6 Limitaciones

- En sus diferentes organizaciones tiene las propias del material que utiliza
para las operaciones.
- Para operaciones mayores debe recibir el refuerzo de las otras Armas o
integrar Grandes Unidades con ellas.
- Es sensible a los efectos adversos de los períodos prolongados de combate.

2.13.1.7 Principios de empleo

- Las características de la Infantería la hacen especialmente apta para su


empleo en operaciones ofensivas y defensivas, desarrollando la maniobra
principal en dispositivos compactos.
Obtienen máximo resultado de sus características cuando es utilizada en el
combate aproximado explotando su capacidad de maniobra y acción de
choque, lo que le confiere especial potencia de combate.

2.13.2 CABALLERIA

2.13.2.1 Definición

Caballería es un arma de combate, organizada, equipada e instruida, para


desempeñar misiones que exijan un alto grado de capacidad de maniobra y
potencia de combate, siendo particularmente apta para actuar en forma
independiente y a considerable distancia de los gruesos.

2.13.2.2 Misión

Procura la imposición de la voluntad propia sobre la del enemigo,


informando, proporcionando seguridad y combatiendo, en beneficio o
integrando la masa principal.

Página 38 de 360
2.13.2.3 Organización

El Arma de Caballería incluirá organizaciones de:

- Caballería Mecanizada
- Caballería Blindada
- Caballería Aeromóvil
cada una con un diseño orgánico e instrucción particular.

2.13.2.4 Características generales

El Arma de Caballería se caracteriza por la capacidad de maniobra y


capacidad de combate.

1. La capacidad de maniobra esta dada por su velocidad táctica, gran radio de


acción y máxima utilización de profusos medios de comunicaciones.
La velocidad táctica es la resultante de su movilidad, flexibilidad y
fluidez.
2. La capacidad de combate surge de la potencia de fuegos y de la aptitud
para el choque.

La aptitud para el choque resulta de la combinación de la movilidad,


protección del blindaje y su potencia de fuegos.

2.13.2.5 Posibilidades

- Establecer, mantener y/o romper el contacto con el enemigo, entrando en


combate con éste, acorde a los requerimientos de la misión.
- Participar en la batalla con sus organizaciones y especialidades mediante la
ejecución de operaciones ofensivas móviles y rápidas, actuando
particularmente en los flancos y retaguardia del enemigo, así como en
operaciones defensivas de corta duración y/o retrógradas, para destruir al
enemigo o desarticular su maniobra.
- Contribuir en la obtención y mantenimiento de la libertad de acción para el
conjunto de la fuerza, mediante la ejecución de operaciones que permitan:

- Obtener información oportuna sobre el enemigo y el terreno.


- Ganar tiempo y espacio para posibilitar el despliegue con seguridad y la
ejecución de la operación principal.
- Proteger la propia fuerza contra las acciones del enemigo.
- Cerrar brechas entre núcleos significativos de fuerzas propias,
impidiendo su utilización por parte del enemigo.

Página 39 de 360
2.13.2.6 Limitaciones

- Por su rápido desgaste, debe reservarse su empleo para ser utilizada en sus
misiones específicas.
- No es apta para realizar acciones defensivas prolongadas en el tiempo.
- Desarrolla con facilidad sus misiones cuando posee un grado de movilidad
superior, o como mínimo igual, a las fuerzas enemigas presentes en el
campo de batalla.
- Vulnerable a las acciones de detección aérea.

2.13.2.7 Principio de empleo

1. Dada su velocidad táctica (movilidad, flexibilidad y fluidez) debe dársela


tiempo y espacio suficiente para poder utilizarla al máximo.
2. Debe buscar siempre la obtención de la sorpresa para lograr sus mejores
resultados.
3. En la ofensiva, maniobra sobre un extenso frente, para aplicar su máximo
poder de combate en el lugar seleccionado para obtener la decisión.
4. En la defensiva, deberá emplear su gran aptitud para la maniobra, que le
permite utilizar al máximo toda la profundidad del terreno disponible, a
fin de oponer resistencias renovadas sobre distintas líneas y entre ellas,
sustrayéndose a la acción decisiva y combinando acciones ofensivas
sobre los flancos y retaguardia enemiga.

2.14 LAS ARMAS DE APOYO AL COMBATE


2.14.1 ARTILLERIA

La Artillería comprende la Artillería de Campaña y la de Defensa


antiaérea.

2.14.1.1 Artillería de Campaña.

2.14.1.1.1 Misión

- Apoyar por el Fuego. a las fuerzas de combate, neutralizando o


destruyendo los blancos más peligrosos para el cumplimiento de la
misión de estas fuerzas.
- Dar profundidad al Combate, obteniendo y manteniendo la supremacía
sobre la artillería enemiga y actuando en la zona de retaguardia,
Página 40 de 360
restringiendo movimientos, desarticulando reservas, órganos de
comando e instalaciones de servicios enemigos.
- Auxiliar al mando, integrando todos los apoyos de fuego con la maniobra
que se ejecute.

2.14.1.1.2 Características.

- La A. de campaña es el arma de los fuegos potentes y lejanos, se


caracteriza por su movilidad, flexibilidad, profundidad, volumen y
precisión de sus fuegos.

2.14.1.1.3 Posibilidades.

- Proporcionar al comandante de maniobra un medio potente para influir


rápidamente en el desarrollo del combate, sin tener que mover unidades
de maniobra hasta el área de contacto con el enemigo.
- Actuar en forma inmediata y continua durante todo el combate, con
fuegos precisos, aún bajo condiciones meteorológicas y del terreno
adversas.
- Actuar en una extensa zona de acción, mediante el alcance de sus
materiales, y por la facilidad para maniobrar con los mismos en breve
tiempo sobre cualquier objetivo, sin necesidad de desplazarse o cambiar
de posición.
- Hacer fuego desde posiciones ocultas a la observación terrestre enemiga
y batir objetivos ocultos a la observación propia.
- Desplazarse rápidamente a nuevas posiciones, con una técnica similar a
la de las fuerzas apoyadas.
- Realizar diferentes tipos de tiros y fuegos convencionales, por las
múltiples combinaciones de medios de lanzamiento, proyectiles,
espoletas y cargas de proyección.
- Lanzar fuegos nucleares y químicos.
- Constituir con los medios del sistema de localización de blancos, una de
las principales agencias de colección de información para la
inteligencia táctica.
- Proporcionar información meteorológica a la fuerza.
- Proporcionar iluminación del campo de batalla.

2.14.1.1.4 Limitaciones

- La eficiencia en el cumplimiento de su misión se reduce cuando deba


empeñarse en el combate cercano.
- Necesidad de ocupar posiciones para tirar.

Página 41 de 360
- Necesidad de tiempo para organizar su tiro, con la finalidad de brindar
un apoyo más eficiente, limitación que se acrecienta cuando se
emplean materiales de largo alcance o proyectiles nucleares.
- Las condiciones del terreno pueden dificultar su despliegue.
- Necesidad de gran disponibilidad de medios de transporte para el
reabastecimiento de clase V, debido a su peso y volumen.
- Dificultoso remplazo de su personal, debido a su alta especialización.
- Escasa capacidad de auto defensa contra ataques terrestres y aéreos,
fundamentalmente durante los desplazamientos.
- Necesidad de un considerable gasto de munición para destruir blancos
puntuales.
- Vulnerabilidad a la detección por parte de los recursos de adquisición de
blancos del enemigo.

2.14.1.1.5 Empleo Táctico.

- Artillería cumple con su misión realizando


fuegos, cuya maniobra es un poderoso medio a
disposición del comandante de una fuerza para
influir en el desarrollo del combate, por ello
generalmente (salvo en casos excepcionales) no
es dejada en reserva. La artillería de las
unidades en reserva, si el tiempo y la
situación lo permiten, normalmente se emplean
en beneficio de sus grandes unidades como un
todo, mientras las correspondientes reservas no
sean empleadas en el combate.
- Artillería no constituye un arma base, pero tiene procedimientos propios
de combate o principios fundamentales de empleo, los cuales se basan
en los principios de la guerra, adquiriendo especial vigencia los
siguientes:
- Unidad de comando.
- Masa
- Economía de fuerzas
- Sorpresa
- Maniobra
- La aplicación de todos estos principios, por su propia naturaleza, se
reduce a dos fundamentos íntimamente ligados entre si:
- Acción de masa y centralización
- Si bien todos los principios tienden a preconizar el empleo en masa
de la A., la centralización constituye la única manera de lograrlo.
No se concibe una acción en masa de la A., sin un empleo
centralizado de todos sus órganos de comando y tiro.
Página 42 de 360
- Emplear la A. equivale a maniobrar con sus fuegos, pero esto no
constituye un tercer principio fundamental de empleo, sino una
regla a observar en todos los casos, por quien tenga la
responsabilidad del empleo del Arma. Así como la infantería tira
para moverse, artillería
solo se mueve para tirar, ya que su única forma de intervención en el
combate es mediante sus fuegos.
- El control de la artillería de campaña, debe ser mantenido centralizado
en el más alto nivel, de acuerdo con sus posibilidades, las misiones
previstas y la situación. Cuando el control es así centralizado, un
adecuado apoyo de fuego puede ser provisto a cada elemento
subordinado. La artillería retenida en los más altos escalones, es usada
para profundizar y reforzar los fuegos de las unidades subordinadas. El
control es descentralizado en el grado necesario, cuando a causa de
amplios frentes, dificultades del terreno, o el carácter de las
operaciones, el mismo no puede ser mantenido centralizado.
- Estos principios regulan el empleo del arma en todas las fases del
combate y deben servir de orientación para la solución de cada caso
concreto en que la A.deba emplearse. No obstante, ello no constituye
más que una guía y no pueden tomarse con rigidez absoluta, ya que
habrá casos en que será más conveniente contemplar otros factores de
la situación en beneficio de la operación, lo que puede llegar a limitar
la observancia de algunos de éstos principios y a veces hasta anularlos.

2.14.1.2 Artillería Antiaérea

2.14.1.2.1 Misión

- Apoyar a las fuerzas de combate, de apoyo al combate y servicios de


apoyo administrativo, destruyendo las naves y proyectiles aéreos
enemigos, en vuelo, desde las mayores hasta las menores distancias, o
en su defecto reducir o neutralizar la efectividad de su ataque;
colaborando en los esfuerzos por obtener y mantener la superioridad
aérea.
- Proporcionar, cuando sea posible y en casos excepcionales, apoyo de
fuego aéreo terrestre a las fuerzas de combate.

2.14.1.2.2 Características.

- La Artillería antiaérea, excepto unidades de proyectiles guiados, se


caracteriza por su capacidad para ejecutar un gran volumen de fuego
preciso de trayectoria tendida, alta velocidad de fuego contra objetivos

Página 43 de 360
estacionarios y moviéndose a alta velocidad en el aire, en tierra o en el
agua.
- Las unidades de proyectiles guiados se caracterizan por la gran
precisión de sus fuegos contra cualquier tipo de objetivos, por el alto
costo de su material y las exigencias de mantenimiento.

2.14.1.2.3 Posibilidades.

- Proporcionar protección antiaérea de área y


local a las fuerzas terrestres de los ataques
aéreos enemigos.
- Proporcionar información y alerta temprana al Comandante acerca de
las actividades aérea enemigas.
- Emplear efectivamente sus armas de tubos, en casos excepcionales,
contra objetivos terrestres, ubicados a distancia de tiro directo.

2.14.1.2.4 Limitaciones.

- Su efectividad depende de su capacidad de adquirir los blancos desde


las mayores distancias posibles.
- Información oportuna en forma permanente.
- Vulnerabilidad de munición necesario por la alta cadencia de sus
armas de tubo.

2.14.1.2.5 Empleo Táctico

La Artillería Antiaérea debe ser empleada contemplando los principios de


masa, mezcla, movilidad e integración y asignada de acuerdo a las
prioridades establecidas por el Comandante luego de considerar la
Importancia crítica, la Vulnerabilidad y la recuperabilidad de los medios
a defender en contraposición a las Posibilidades del Enemigo Aéreo.
- La Artillería Antiaérea nunca es mantenida en reserva.
- En casos excepcionales, el Comandante podrá emplear todos o parte de
los medios de Artillería Antiaérea para batir blancos terrestres, si los
considera una amenaza mayor, que la probabilidad de un ataque aéreo,
para el cumplimiento de su misión.
- El dispositivo dispuesto para las armas, debe permitir dentro de lo
posible la adquisición de blancos que le permitan cumplir con su
misión secundaria.

2.14.2 INGENIEROS.

Página 44 de 360
2.14.2.1 Definición:

Arma de apoyo, organizada, equipada e instruida, para desarrollar


acciones que se traducen en ejecutar tareas que faciliten la movilidad
propia, dificulten la del enemigo y contribuyan al abrigo del personal y
medios. Surgen así los conceptos de movilidad, contramovilidad, abrigo
y trabajos generales de Ingenieros.

2.14.2.2 Misión:

Aumentar el poder combativo de las Fuerzas en Campaña, mediante la


realización de trabajos técnicos y trabajos logísticos que faciliten el esfuerzo
ofensivo, amplíen la capacidad defensiva y mejoren las condiciones de
bienestar de las tropas.

2.14.2.3 Organización

Puede incluirse organizaciones de:


- Ingenieros de Combate
- Ingenieros de Combate Blindados
- Ingenieros de Construcciones
- Ingenieros de Servicios
- Unidades de Ingenieros de Puentes
- Unidades de Ingenieros Especiales

2.14.2.4 Características de empleo:

La variedad de las misiones, su permanencia en el tiempo y en el espacio, y


su naturaleza técnica, confieren a Ingenieros una fisonomía particular y
determinan, en gran medida, las características de su accionar el cual está
ligado por excelencia al terreno.
Ellas son:
- Realización de trabajos durables y progresivos.
- Desdoblamiento en frente y profundidad (amplitud).
- Apoyo ejercido en profundidad.
- Uso del canal técnico de Ingenieros.
- En el desempeño de sus misiones logísticas es el principal consumidor de
los servicios que presta.
- Intima vinculación con las operaciones, en todos los aspectos
relacionados con el aprovechamiento del terreno.

2.14.2.5 Principios de Empleo:


Página 45 de 360
- Empleo como Arma Técnica.
- Empleo Centralizado.
- Permanencia en los trabajos.
- Utilización inmediata de los trabajos.
- Mantenimiento de los vínculos tácticos.
- Ingenieros no debe mantenerse en Reserva.
- Prioridad en los trabajos.
- Empleo por elementos constituidos.

2.14.2.6 Posibilidades:

- Apoyar las operaciones tácticas y administrativas mediante trabajos


técnicos especializados.
- Brindar asesoramiento técnico a las demás Armas y Servicios.
- Cumplir con las actividades logísticas propias de Ingenieros.
- Obtener, administrar y disponer de los bienes inmuebles.
- Construir, mantener, rehabilitar y reparar estructuras semipermanentes y
permanentes (campamentos, acantonamientos, depósitos, hospitales,
aeródromos, puertos, sistemas de tuberías y oleoductos, etc.).

- Construir, mantener y reparar caminos, cursos de agua navegables y vías


férreas.
- Realizar levantamientos topográficos y preparar estudios del terreno.
- Combatir en la defensa de sus lugares de trabajo y en casos excepcionales
como Infantería.
- Cooperar eventualmente con otras Fuerzas, particularmente mediante
trabajos técnicos especializados.

2.14.2.7 Limitaciones:

- La complejidad de planeamiento y ejecución de los trabajos, así como el


acopio de materiales necesarios, imponen plazos para el inicio y
terminación de sus tareas que deban preverse al disponer su empleo.
- La complejidad y amplitud de los conocimientos necesarios referentes a
técnicas y medios de todas las ramas de Ingenieros, y el masivo empleo
de los recursos de todo tipo exigen una permanente, sólida y variada
formación técnica de su personal.
- En determinadas situaciones necesitan la protección y apoyo de las otras
Armas.

2.14.3 COMUNICACIONES
Página 46 de 360
2.14.3.1 Definición:

Las comunicaciones militares comprenden al conjunto de medios que


posibilita al ejército la capacidad de establecer los enlaces necesarios para
ejercer el comando, el control, coordinación y supervisión de las
operaciones y dificultar, hasta impedir las del enemigo.
Se la denomina "Arma del Comando", A través de sus medios, se hace
posible transformar los planes en ejecución y los informes llegan a los
planificadores oportunamente, para posibilitar, luego de su análisis, nuevos
estudios, planes y decisiones.

2.14.3.2 Misión:

La misión del Arma de Comunicaciones es proporcionar medios de


comunicaciones, abastecimientos y servicios que permitan la operación del
Sistema de Comunicaciones afectado a las operaciones, incluyendo Guerra
Electrónica.

2.14.3.3 Características:

- El Apoyo de Combate por parte del Arma de Comunicaciones se


materializa por el establecimiento de Sistema de Comunicaciones de
Area y Sistemas de Comunicaciones de Comando.

- Ese Apoyo, parte de órdenes, instrucciones, procedimientos y normas de


explotación de sus medios, que posibilitan la coordinación para el uso
correcto del espectro electromagnético por los Sistemas de Comunica-
ciones y de Armas, operaciones de guerra electrónica y toda otra forma
de enlace.

- Los Sistemas de Comunicaciones de Apoyo al Combate de las Fuerzas


Terrestres, deben ser integrables a los de las otras Fuerzas que
participen en el esfuerzo.

2.14.3.4 Posibilidades:

Las posibilidades de Apoyo al Combate se materializan por:


- Supervisión técnica del Sistema de Comunicaciones de Apoyo a las
Fuerzas en Campaña.
- Abastecimientos de Medios de Comunicaciones a otras Armas y
Comandos.
- Creación, modificación y mantenimiento de medios de comunicaciones.
Página 47 de 360
- Determinación de necesidades, obtención, almacenamiento y
distribución de abastecimientos y equipamientos de comunicaciones.
- Realizar inteligencia técnica de comunicaciones.
- Proporcionar información técnica de comunicaciones.
- Instalar, explotar y mantener el Sistema de Comunicaciones de las
Fuerzas Terrestres, a partir del nivel G.U.T.E. inclusive.
- Formación, capacitación y perfeccionamiento del personal especialista
en comunicaciones.

2.14.3.5 Limitaciones:

- La eficacia de un Sistema de Comunicaciones y por lo tanto la


eficiencia de su explotación están supeditadas permanentemente a las
condiciones de propagación imperantes.
- La Instrucción de comunicaciones resulta larga, cara y compleja. De ahí
que, sea un Arma sumamente sensible a la capacidad de reclutamiento,
selección y movilidad de su personal.
- La evolución científico-tecnológica y el alto costo de inversión e
investigación en el ramo, condicionan la capacidad de actualización
del Arma, hecho en parte superable, en base a la obtención de un alto
grado de Instrucción de un personal adecuadamente seleccionado.

2.14.3.6 Principios de empleo de las comunicaciones.

La duración, amplitud y naturaleza técnica de su misión, confieren a las


comunicaciones una particular fisonomía y determinan las características
de su acción:

2.14.3.6.1 Tiempo integral

El Sistema de Comunicaciones opera veinticuatro horas por día. De no


ser así, el apoyo se vuelve insuficiente y falla.
Esto influye directamente en la dotación de personal y material de
comunicaciones para cualquier escalón.

2.14.3.6.2 Amplitud de despliegue

Sus medios proporcionan enlace desde la línea de contacto hasta las áreas
más retrasadas del T.O., comprendiendo todas las zonas de combate y
del interior, en frente y profundidad. La dispersión de medios que este
principio ocasiona, provoca al Arma problemas de seguridad,
mantenimiento y abastecimiento, que demandan una detallada
planificación para su previsión y solución.
Página 48 de 360
2.14.3.6.3 Integración

Un sistema de comunicaciones de determinado escalón no está aislado.


No es un compartimento estanco.
Siempre es parte del sistema de comunicaciones del escalón superior y
siempre abarca a los sistemas de los escalones subordinados.

2.14.3.6.4 Flexibilidad

Dada por la diversidad de enlaces que establecen los sistemas de


comunicaciones de cualquier escalón que posibilitan una rápida
adaptación a los cambios impuestos a las operaciones tácticas y el curso
del tráfico por múltiples medios.

2.14.3.6.5 Apoyo en profundidad

El apoyo de comunicaciones se ejerce en profundidad. El escalón


superior apoya a los escalones subordinados con personal y material
necesarios.
Normalmente, se ocupará de los enlaces laterales y hacia retaguardia de
esa organización, de forma de liberarle las comunicaciones propias para
el apoyo hacia el contacto.

2.14.3.6.6 Continuidad

Los enlaces, se mantienen a cualquier costo.


Aunque el escalón considerado no sea responsable por el mantenimiento
de determinado enlace, debe usar todos los recursos a su alcance para
restablecerlo cuando sea interrumpido.

2.14.3.6.7 Confiabilidad

Estará proporcionada y asegurada por la operación de medios alternativos


de comunicaciones que aseguren la transmisión de un mensaje bajo
cualquier situación de combate.

2.14.3.6.8 Empleo centralizado

La organización de los medios en centros de comunicaciones y la


planificación de sus desplazamientos por ejes de comunicaciones,
asegura una capacidad de explotación mayor que la suma de la utilización
de cada medio independientemente.
Página 49 de 360
2.14.3.6.9 Apoyo cerrado

A menor distancia de enlace, mayor eficiencia del sistema.

Página 50 de 360
2.14.3.6.10 Seguridad

Principio concurrente a todas las operaciones militares. Incluye las


medidas de protección de los sistemas para impedir o dificultar la
obtención de información por parte del enemigo, de forma de preservar la
libertad de acción y lograr la sorpresa. Comprende, la seguridad física o
material, técnica o de explotación y criptográfica.

2.14.3.6.11 Prioridad

La instalación de un sistema se hace en forma progresiva. Se inicia por


proporcionar capacidad de enlace para el tráfico necesario de más alta
prioridad: ejercicio del comando y conducción de las operaciones. Luego,
se incrementa de acuerdo con la disponibilidad de tiempo y medios,
considerando la evolución de la situación.

2.14.3.6.12 Además de los citados, el Arma de Comunicaciones, atiende a las


siguientes principios comunes a cualquier planificación:
- Economía de medios
- Simplicidad
- Previsión
- Adecuación de medios

2.15 SERVICIOS DE APOYO ADMINISTRATIVO


2.15.1 SERVICIOS TECNICOS

2.15.1.1 SERVICIOS DE INTENDENCIA

2.15.1.1.1 Misión

Proveer abastecimientos y apoyo de Servicio.

2.15.1.1.2 Características

El Servicio de Intendencia por ser un Servicio técnico se caracteriza por


su estrecha vinculación con las operaciones, especialmente a través de su
apoyo al personal en abastecimientos y servicios de intendencia que
procuran su bienestar en campaña.

2.15.1.1.3 Posibilidades.

Página 51 de 360
a. Realizar la determinación de necesidades, obtención, almacenamiento
y distribución de abastecimientos y equipos de Intendencia.
b. Cumplir funciones de servicio en apoyo de las fuerzas.
c. Proporcionar información técnica del abastecimiento y equipo de
Intendencia enemigo.
d. Realizar investigación, desarrollo y mejoramiento de materiales del
Servicio.
e. Combatir en defensa de sus instalaciones.

2.15.1.1.4 Limitaciones.

a. Necesita de apoyo en transportes para su función de abastecimientos.


b. Sus instalaciones son sensibles a la acción aérea por lo que necesita
dispersarlas.
c. Puede necesitar del apoyo de otras fuerzas para la protección de sus
instalaciones.

2.15.1.1.5 Empleo táctico.

Por las características del apoyo brindado, el Servicio de Intendencia es


empleado aplicando los principios de Flexibilidad y Continuidad.

2.15.1.2 SERVICIO DE MATERIAL Y ARMAMENTO.

2.15.1.2.1 Misión

Proveer abastecimientos y apoyo de Servicio.

2.15.1.2.2 Características.

Por ser un Servicio Técnico el Servicio de Material y Armamento se


caracteriza por su estrecha vinculación con las operaciones en los
aspectos relativos al apoyo de servicio al fuego y al movimiento.

2.15.1.2.3 Posibilidades

a. Realizar la determinación de necesidades, obtención, almacenamiento


y distribución de munición, armas, vehículos y otros abastecimientos
del Servicio.
b. Cumplir funciones de servicio, particularmente en apoyo de las
fuerzas.

Página 52 de 360
c. Proporcionar información técnica sobre material y armamento
enemigo.
d. Realizar investigación, desarrollo y mejoramiento de materiales del
Servicio.
e. Combatir en defensa de sus instalaciones.

2.15.1.2.4 Limitaciones

a. Sus instalaciones son sensibles a la acción aérea.


b. Puede precisar del apoyo de otras fuerzas para la protección de sus
instalaciones.
c. El volumen de los materiales que maneja quita flexibilidad a sus
operaciones.
d. La instrucción técnica y especializada de la mayoría de su personal,
motiva dificultades en los reemplazos.

2.15.1.2.5 Empleo Táctico

Por las características del apoyo brindado, el Servicio de Material y


Armamento es empleado aplicando los principios de Flexibilidad y
Continuidad.

2.15.1.3 SERVICIO DE TRANSPORTE

2.15.1.3.1 Misión

Cooperar en el desplazamiento de personal y material.

2.15.1.3.2 Características.

El Servicio de Transporte se caracteriza por su estrecha vinculación con


las operaciones y por su movilidad.

2.15.1.3.3 Posibilidades.

a. Realizar investigación, desarrollo y mejoramiento de medios y


sistemas de transporte.
b. Realizar la determinación de necesidades, obtención, almacenamiento
y distribución de equipo y abastecimientos de transporte.
c. Cumplir funciones de servicio en apoyo de las fuerzas.
d. Combatir en defensa de sus instalaciones.

Página 53 de 360
2.15.1.3.4 Limitaciones

Precisa de un continuo apoyo de mantenimiento y abastecimiento para


mantener su operatividad. Puede necesitar del apoyo de otros elementos
para su seguridad.

2.15.1.3.5 Empleo Táctico.

El sistema de transporte debe ser organizado para dirigir y coordinar los


medios disponibles y permitir la integración de los sistemas de
transportes civiles.
Debe tener un alto grado de flexibilidad para poder atender las múltiples
exigencias de las operaciones.
La integración y flexibilidad del sistema de transportes son conseguidos a
través de la centralización de la dirección y de control, y la
descentralización en la ejecución.

2.15.1.4 SERVICIO SANITARIO

2.15.1.4.1 Misión

Mantener la salud de las tropas asegurando su efectividad de combate


mediante actividades médicas preventivas y curativas.

2.15.1.4.2 Características

El Servicio de Sanidad se caracteriza por el estrecho apoyo de servicio


para el mantenimiento de la salud física y mental de las tropas.

2.15.1.4.3 Posibilidades

Evacuar y tratar pacientes. Realizar la determinación de necesidades,


obtención, almacenamiento y distribución de abastecimientos y equipos
médicos y dentales.

2.15.1.4.4 Limitaciones

a. La preparación altamente técnica del personal presenta dificultades


para su reemplazo.
b. Las características de las instalaciones con mayor capacidad de
tratamientos exigen que se encuentren alejadas del primer escalón, lo
que afecta la rapidez de la atención.

Página 54 de 360
2.15.1.4.5 Empleo Táctico

El Servicio de Sanidad es organizado en profundidad en el T.O. para


atender los diferentes escalones de la Zona de Combate y a las fuerzas
situadas en las diferentes áreas en la Zona de Comunicaciones. Ajustará
su actuación a las políticas de evacuación y tratamiento establecidas para
el T.O.

2.15.2 SERVICIOS ADMINISTRATIVOS

2.15.2.1 FINANZAS

2.15.2.1.1 Misión

Realizar la administración financiera de recursos, cobranzas y pagos de


fondos, así como la fiscalización de los elementos subordinados. Proveer
además, servicios especiales de finanzas.

2.15.2.2 SERVICIOS ESPECIALES

2.15.2.2.1 Misión

Desarrollar una política de contralor y supervisión de asuntos


relacionados con la recreación y el bienestar de tropa, como contribución
al mantenimiento y elevación de la moral individual y colectiva.

2.15.2.3 POLICIA MILITAR

2.15.2.3.1 Misión

Mantener el orden y la disciplina y hacer cumplir las leyes, órdenes y


reglamentaciones.

2.15.2.4 SERVICIO GEOGRAFICO

2.15.2.4.1 Misión

Confeccionar de cartas y fotografías aéreas, brindar información de


carácter topográfico o geodésico a las Unidades.

2.15.2.5 SERVICIO DE CORREOS

Página 55 de 360
2.15.2.5.1 Misión

Proveer servicio postal a las FF.TT., incluyendo recepción, expedición y


distribución de la correspondencia, así como tomar a su cargo o cooperar
en las actividades de censura.

2.15.2.6 SERVICIO DE REEMPLAZOS

2.15.2.6.1 Misión

Planificar y ejecutar el procesamiento, orientación, instrucción y


equipamiento de los reemplazos.

2.15.2.7 SERVICIO DE BANDAS

2.15.2.7.1 Misión

a. Proporcionar música adecuada a formaciones militares, conciertos,


entretenimientos y funciones sociales, particularmente en áreas de
descanso y recreación.
b. Desempeñar funciones administrativas de combate compatibles con su
organización en caso necesario.

2.15.2.8 SERVICIO VETERINARIO Y DE REMONTA

2.15.2.8.1 Misión

a. Realizar el control de los alimentos de origen animal y de


enfermedades zoonóticas.
b. Colaborar en el mantenimiento de la salud de los animales.
c. Proveer remonta para casos especiales.
d. Coordinar y supervisar la evacuación masiva del ganado de las zonas
donde se prevé el desarrollo de operaciones militares con el fin de
salvaguardar la propiedad privada o pública.

Página 56 de 360
Sección 4

PLANIFICACION DE LAS OPERACIONES

2.16 ESTRUCTURA DE LA GUERRA MODERNA

La guerra es un esfuerzo a nivel nacional que requiere una estrecha


coordinación desde los más elevados niveles donde se formula la política, hasta
los niveles básicos de ejecución de dicha política. La estrategia militar y la
táctica son las divisiones generales de las actividades que intervienen en la
preparación y la conducción de la guerra. Una estrategia eficiente es aquella que
logra los objetivos políticos nacionales con una pérdida mínima de vidas y
recursos.
Las tácticas bien planificadas ganan las batallas, lo que resulta en el éxito de las
operaciones y campañas. Aunque los principios de conducción de las
operaciones se emplean tanto en la estrategia como la táctica, los mismos tienen
una aplicación diferente en cada nivel de guerra.

2.16.1 Estrategia

La estrategia militar es el arte y la ciencia de preparar y conducir los recursos


del Poder Militar para lograr los objetivos impuestos al Sector Militar. La
estrategia militar establece las condiciones fundamentales de las operaciones
para la guerra o para evitar la guerra. Establecer las metas para los Teatros de
Guerra y de Operaciones. Asigna las fuerzas, provee los recursos e impone
condiciones al uso de la fuerza. Quien realiza la estrategia militar es un mando
conjunto de la FF.AA., responsable de planificar, coordinar, dirigir y conducir
la ejecución del Plan de Guerra y de Conflicto, con la finalidad de cumplir con
la misión, impuesta al Sector Militar en el Plan de Defensa Nacional.
Estrategia Militar de FF.TT. es el arte y la ciencia de preparar y conducir los
recursos del Poder Militar Terrestre para lograr los objetivos impuestos.
Se denomina campaña a la acción de guerra realizada con medios importantes
de las Fuerzas Armadas en una región del Teatro de Guerra, mediante la
coordinación de maniobras estratégicas sucesivas o simultáneas que se
desarrollan en forma completa hasta la consecución del objetivo estratégico que
la originó. Es posible que varias campañas se efectúen simultáneamente cuando
el teatro de guerra tiene más de un teatro de operaciones. Se realizan campañas
consecutivas dentro de un solo teatro cuando una fuerza de gran tamaño cambia
o alcanza su meta original o cuando cambian las condiciones del conflicto. Una
campaña ofensiva puede seguir a una campaña defensiva victoriosa. También
podría ser necesario realizar una nueva campaña ofensiva si cambian las metas
estratégicas o si no se logran durante la campaña inicial. Una operación

Página 57 de 360
principal comprende las acciones coordinadas de una fuerza de gran tamaño en
una fase de una campaña o batalla crítica.
Las operaciones principales deciden el curso que tomarán las campañas.

2.16.2 Táctica

La táctica es el arte mediante el cual los Comandantes convierten la potencia


de combate en batallas y combates exitosos.
La batalla es una acción estratégica consistente en el choque violento de
fuerzas adversarias de gran magnitud, mediante el cual una o ambas buscan
modificar sustancialmente la situación estratégica operacional; integra una
maniobra estratégica en cuanto a su concepción y se materializa por
operaciones tácticas.
Las batallas constan de una serie de combates relacionados y con frecuencia
producen condiciones que a la larga afectan el rumbo que tomará la campaña.
Las batallas ocurren cuando fuerzas de gran tamaño - ejércitos y divisiones -
se empeñan en combates para lograr metas de gran importancia.
Los combates son pequeños enfrentamientos entre fuerzas de maniobra
contrarias.

2.17 CONSIDERACIONES SOBRE LA PLANIFICACION

La planificación de las operaciones es un proceso continuo que se detalla en


el RC 15-1; suele desarrollarse simultáneamente con el combate y debe ser
tan completa como las circunstancias y el tiempo lo permitan.

2.17.1 Factores básicos de la decisión

En cualquier nivel de Comando, cinco son los factores básicos considerados


para la toma de decisiones: La Misión, el Terreno y las condiciones
meteorológicas, el Enemigo, los Medios y el
Tiempo disponible.

2.17.2 El ejercicio del comando

Comandante es el Militar al cual le es atribuida, acorde a lo que determinan


las Leyes y los Reglamentos, la autoridad necesaria para dirigir y controlar
una fuerza, en todos los aspectos.
Dicha autoridad conlleva intrínsecamente la correspondiente responsabilidad,
la que no puede ser delegada. Unica y exclusivamente el Comandante, será
responsable por el éxito y el fracaso de su Comando, cualquiera fueran las
circunstancias en que deba desarrollarlo.

Página 58 de 360
2.17.2.1 Autoridad

Imbuido de su responsabilidad, el Comandante ejerce su autoridad para


dirigir las acciones y para establecer las pautas de sus decisiones y, la
correcta aplicación de los principios y técnicas del mando determinarán la
eficiencia de su gestión.

2.17.2.2 Canal de Comando

Es la sucesión jerárquicamente ordenada de los escalones de comando. A


través de este canal el superior ejerce su autoridad y los subalternos formulan
planteamientos, asesoramiento o brindan información. La observancia
estricta del canal de comando preserva la autoridad de los Comandantes
intermedios y es un elemento trascendente en la eficiencia de las operaciones.
No obstante, en situaciones atípicas dadas, por ejemplo, por la urgencia de las
operaciones o las dificultades de las comunicaciones, puede alterarse el canal
siempre que el daño que se ocasionara por su mantenimiento a ultranza fuera
mayor que el que causa su ruptura. Cuando esto ocurra y apenas la situación
lo permita, los escalones salteados deben ser informados de lo ocurrido.
Las pérdidas de enlace o las cambiantes circunstancias del combate pueden
impedir la recepción de órdenes o tornar inadecuadas las recibidas; en estos
casos los Comandantes subordinados deben actuar por propia iniciativa. La
ausencia de órdenes apropiadas no justifica la inacción y el conocimiento de
los Comandantes subordinados de la doctrina y del "concepto de su
Comandante" asegura el empleo de la iniciativa en un sentido coherente con
los objetivos buscados.
El ejercicio del comando implica decisiones permanentes y para que éstas
sean acertadas es imprescindible que el Comandante cuente con información
oportuna y veraz. En este sentido la conducción desde el frente permite al
Comandante un doble propósito: influir en la moral de su tropa con su sola
presencia y acortar el ciclo de la información que el necesita para decidir
mediante la observación directa del combate.

2.17.3 Concepto de la Misión

Cada nivel de Comando debe conocer además de su misión específica, el


concepto general del Comandante sobre la operación y la misión de la U.
superior dentro de la maniobra general.
Si bien los planes son la base fundamental para asegurar el orden y la
eficiencia de las operaciones cada Comandante subordinado tendrá la
suficiente flexibilidad para actuar ante las cambiantes realidades del combate.
Esta flexibilidad se favorece con la aplicación de técnicas de operaciones y
procedimientos tales como:
Página 59 de 360
- Obtener elevado grado de entrenamiento en operaciones y actividades de
Estado Mayor, que aseguren un entrenamiento y coordinación excelente
entre las Unidades.
- Optimizar el empleo del tiempo, mediante el uso rutinario de órdenes
preparatorias, informes de situación, planificación anticipada y ubicación
oportuna de las Fuerzas.
- Presencia de los Comandantes Tácticos donde la situación lo requiera, sin
que se interrumpa o se interfiera el adecuado y eficaz funcionamiento del
sistema de Comando y Control.
- Conocimiento acabado de los Comandantes del concepto operacional del
Comandante Superior, y de las responsabilidades de las Unidades a sus
flancos y en apoyo a sus operaciones.

2.17.4 Ejecución

Los siguientes parágrafos contienen los lineamientos que orientan la conducta


personal del Comandante en el combate.

2.17.4.1 Antes de la operación

Después de asegurar la distribución de las órdenes, el Comandante verifica


que sus órdenes sean comprendidas, y que esté en marcha una preparación
adecuada para la acción.

2.17.4.2 Durante la operación

El Comandante se debe ubicar donde pueda influir mejor en las fases


iniciales. Una vez que la operación ha comenzado, el Comandante influye en
su desarrollo por su acción de mando personal, por el empleo de los fuegos
de apoyo, y particularmente por el empleo de su reserva.
Aunque el P.C. es el centro nervioso del Comando, los medios de
comunicaciones disponibles permiten al Comandante el ejercicio del control
desde lugares elegidos por él mismo.
Así puede obtener información personal de la operación y establecer mayor
control en el lugar decisivo. Es particularmente importante que la presencia
del Comandante sea sentida en el lugar decisivo del combate.
Sin embargo él no debe verse envuelto en acciones locales como para perder
de vista la conducción de la operación completa. El Comandante en el
combate moderno, debe constantemente estar alerta y preparado para
reaccionar prontamente a los cambios de las tácticas enemigas, métodos y
medios que puedan materialmente alertar el curso de la acción. Debe estar
Página 60 de 360
igualmente alerta para evitar acciones que permitan al Enemigo predecir la
conducta de sus fuerzas. Como una medida para la conservación del personal
y para mejorar la eficiencia de combate, el Comandante debe realizar relevos
temporarios de Unidades y de personal durante combates sostenidos.

2.17.4.3 Después la operación

La tarea principal del Comandante después de la operación es la evaluación


de la acción desarrollada, con vistas a la incorporación a su Comando de
lecciones aprendidas y poderlas aplicar en acciones futuras.
Pone en ejecución las medidas planificadas para reemplazos de personal,
equipo y recompletamiento de los abastecimientos. Toma las medidas
apropiadas para asegurar la rehabilitación física y sicológica de las Unidades
y el mantenimiento de su equipo. Asegura que el personal de reemplazo sea
instruido y que sea cumplido el reentrenamiento, para que la Unidad vuelva a
ser un equipo de combate efectivo.

2.18 PLANIFICACION DE LAS OPERACIONES TACTICAS

Las operaciones tácticas son las tareas y acciones que se desarrollan en un


T.G., primordialmente a través de enfrentamientos violentos de FF.AA.
opuestas y buscan desarrollar las acciones concebidas por la estrategia.
Estas operaciones las llevan a cabo las Divisiones de Ejército y unidades más
pequeñas, y son apoyadas por el escalón de mando superior que fija los
términos de la batalla y proporciona el apoyo necesario.
Las Brigadas y las unidades más pequeñas pueden librar los combates, que
son acciones independientes más pequeñas, ya sea como parte de una batalla
o como acciones independientes. El éxito táctico se mide por el éxito o
fracaso en el logro de los objetivos.
Las batallas son sucesión de combates que involucran a Ejércitos y
Divisiones. Pueden ser locales, cortas e intensas o bien pueden implicar
numerosos combates sobre áreas extensas y tomar un período considerable
para resolverse. De todos modos, sus efectos se sienten sobre una zona
extensa, y las acciones que ocurren fuera del área específica del combate
sostenido pueden influir en gran medida en su resultado.
Para llevar a cabo las batallas y los combates, los Comandantes deben actuar
vigorosamente y con arrojo. Ellos tienen que seguir el curso del combate a lo
largo del área disputada a fin de aprovechar las oportunidades para una
acción decisiva. Tienen que estar también dispuestos a tomar riesgos para
infligir pérdidas importantes al enemigo y para retener la iniciativa. Todas las
operaciones tácticas requieren unidad de esfuerzo a lo largo de la batalla,
usando todo elemento disponible de potencia de combate.

Página 61 de 360
Las operaciones tácticas tienen que considerar los efectos de la potencia aérea
del enemigo, de sus armas químicas y nucleares, y de sus operaciones de
guerra electrónica. Pero aún más importante, las operaciones tácticas son
influidas por los siguientes elementos incuantificables de la potencia:
soldados valientes y bien adiestrados, y jefes eficientes y hábiles.
Para asegurar el éxito, se deben concentrar los esfuerzos en:
- Adelantarse a la acción del enemigo
- El engaño y una efectiva protección de las operaciones.
- La velocidad y la violencia.
- La flexibilidad y el mantenimiento de iniciativa de los jefes subalternos.
- Tomar decisiones con rapidez.
- Definir claramente los objetivos y los conceptos de las operaciones.
- Designar claramente el esfuerzo principal.
- Accionar a través de toda la profundidad de la Z.A.
- Las operaciones conjunta.

2.18.1 La planificación táctica.

La planificación táctica se enfoca en la preparación para las batallas y los


combates y todo su proceso se describe en el RC 15-1. En la planificación
táctica el plan de operaciones es la expresión central de concepto del
comandante para las operaciones. El plan de operaciones:
- Señala los movimientos de la fuerza.
- Identifica los objetivos o las áreas que serán retenidas.
- Asigna responsabilidades por las zonas, los sectores o las áreas y establece
los límites de tiempo para ello.
- Señala las formaciones o los dispositivos cuando sea necesario.
- Identifica las opciones de maniobra que pueden desarrollarse durante una
operación.

Dicho plan generalmente determina la asignación subsiguiente de fuerzas y


sirve de base para los planes. Los fuegos, las barreras, las prioridades de
defensa antiaérea, la guerra electrónica, los esfuerzos de engaño, el apoyo de
combate y el apoyo de servicio de combate se basan en el plan de maniobra y
se coordinan con éste.
Siempre que sea posible, los Comandantes formulan sus planes tácticos para
evitar los puntos fuertes del enemigo y atacar sus debilidades. Las unidades
de maniobra pueden ocasionar el mayor daño al enemigo evitando los
encuentros frontales con sus fuerzas desplegadas.
En cambio, deben operar sobre sus flancos y retaguardia, donde el fuego
directo es más eficaz, el impacto sicológico es más grande y el enemigo está
menos preparado para combatir. La maniobra en los contraataques defensivos
es particularmente importante, y se tiene que planear en forma detallada.
Página 62 de 360
Al lanzar ataques coordinados profundos contra las unidades enemigas
avanzadas, el Comandante:
- Conserva o toma la iniciativa.
- Interfiere la planificación y coordinación Enemiga.

Destruye las fuerzas que mantienen su equilibrio táctico, las reservas, la


artillería, el comando y control y el apoyo logístico.
El plan táctico debe lograr la sorpresa. Debe usar aproximaciones indirectas y
posiciones en el flanco que no atraigan la atención inmediata del enemigo.
Los Comandantes subalternos deben tener la mayor libertad posible para
maniobrar.
El plan táctico debe incluir medidas complementarias de control tales como
rutas, ejes, objetivos y posiciones de combate que serán puestos en práctica al
darse la orden. Tales medidas proporcionan la flexibilidad necesaria para
responder a cambios en la situación. Su uso le da al Comandante una ventaja
considerable al permitirle poner rápidamente en práctica los cambios que
sean necesarios.
El plan debe asignar también ejes de avance y rutas para el empeño o el
movimiento de reservas o para el pasaje hacia el frente o la retaguardia de
una unidad a través del área de otra. Debe identificar también ejes de avance
aéreos para la maniobra de helicópteros de ataque o para el movimiento en
helicópteros de unidades de asalto aéreo y otras fuerzas.
El movimiento de las unidades de apoyo es también crítico para el éxito del
plan táctico. Los Comandantes tienen que asegurar el apoyo ininterrumpido
de las unidades de artillería de campaña, de defensa antiaérea, de apoyo
aéreo, de ingenieros, y logísticas.
Para ello, tiene que planear rutas múltiples a lo largo del área de operaciones
y controlar estrechamente su uso. La policía militar debe estar preparada para
facilitar estos movimientos, evitar el congestionamiento, y responder a
cambios en el plan de maniobra.
En la planificación de las operaciones, los Comandantes deben tomar en
cuenta los efectos de las armas químicas y nucleares. También deben evitar
presentar al enemigo objetivos ventajosos al efectuar su maniobra.
Este dilema es de carácter dinámico. El grado de riesgo varía a medida que
cambia la distancia que separa a ambas fuerzas contrarias. Al comienzo, las
fuerzas de maniobra se dispersarán para evitar presentar objetivos lucrativos.
Al disminuir la distancia al enemigo, las unidades de maniobra se
concentrarán sobre rutas múltiples en el momento y lugares decisivos,
dispersándose nuevamente después de derrotar al enemigo.
El plan táctico también debe tomar en cuenta el espacio aéreo sobre el área de
responsabilidad de la unidad. Los movimientos terrestres y aéreos en apoyo
al plan de maniobra del Comandante se deben coordinar con la Fuerza Aérea,

Página 63 de 360
con las unidades de defensa antiaérea y con las unidades de maniobra
terrestre.
La planificación táctica eficaz es la mejor manera de asegurar la
sincronización. Por lo regular, mientras más eficaz sea el plan, menor será el
esfuerzo de un mando y control activo para asegurar la sincronización, una
vez que se inicien las operaciones.
Una vez empeñados en combate, sin embargo, los Comandantes tienen que
estar preparados para modificar sus acciones, a fin de ajustarlas a la situación.
Esto requiere equilibrio y buen juicio. El Comandante no debe abandonar su
plan demasiado pronto, ya que perdería la coordinación que éste representa.
Bajo las presiones del combate, incertidumbre, acontecimientos inesperados
y gran violencia, el Comandante tiene que ceñirse a su apreciación inicial y
resistir la tentación de cambiar su plan ante la primera dificultad que se
presente.
Al mismo tiempo, aún el plan más completo se tendrá que ajustar en algún
punto para adaptarlo a los cambios.
El Comandante debe poder reconocer ese punto crítico. También debe estar
bien informado acerca de la situación para tomar esta determinación, y tener
los medios necesarios para reaccionar ante las oportunidades o las amenazas
sin perder la sincronización.

2.19 SECUENCIA DE LAS OPERACIONES

Página 64 de 360
En el Ejército, el Comandante es el llamado a determinar cual es el orden que
más conviene a sus operaciones mayores para lograr el ritmo que mejor
permita conquistar el objetivo. El Comandante considera un sin numero de
factores, inclusive geografía, transporte estratégico, estructura de mando,
logística, refuerzos enemigos, y opinión pública. Sin embargo, las decisiones
relativas al orden de las operaciones en una proyección de fuerzas terrestres se
complican cuando las condiciones del enemigo sufren continuas modificacio-
nes. El orden decidido al final por el Comandante, no debe, por lo tanto, ser
rígido sino lo bastante flexible para absorber cambios.

2.19.1 Fases

El orden de las operaciones mayores (o sea el orden de las batallas dentro de


una operación mayor) guarda relación directa con la decisión del Comandante;
respecto al establecimiento de fases. Una fase representa un lapso durante el
cual grandes fuerzas participan en actividades similares (un desplazamiento,
por ejemplo). El cambio de una fase a otra como por ejemplo, el paso del
desplazamiento a las operaciones ofensivas - significa un nuevo énfasis. Por
ejemplo, la Fase I, la defensa, podría llevarnos a la Fase II, la contraofensiva,
seguida de una tercera fase destinada a la consolidación y las actividades de
pos-conflicto.
Durante la planificación, los Comandantes establecen las condiciones para el
paso de una fase a la siguiente. Se fijan las fases de modo que permitan
aprovechar cualquier oportunidad que el enemigo ofrezca, o reaccionar ante un
revés inesperado. Las acciones del enemigo también influyen en las
condiciones que rigen las fases.
El paso de una fase a otra, en cualquier escalón, puede ir seguido de un período
de vulnerabilidad para las tropas propias.
La logística es factor crucial en la determinación de las fases. Los elaboradores
de los planes operacionales deben considerar la posibilidad de establecer bases
logísticas, abrir y mantener líneas de comunicación, establecer bases logísticas
intermedias para apoyar cada nueva fase, y definir las prioridades de los
servicios y el apoyo.
La logística es, entonces un elemento clave en el ordenamiento de las
operaciones mayores de una campana.

Página 65 de 360
Capítulo III

LAS OPERACIONES

Sección 1

CONSIDERACIONES GENERALES SOBRE LAS OPERACIONES

3.1. OPERACIONES

Una operación es una acción militar para la ejecución de una misión de naturaleza
estratégica, táctica, administrativa o de instrucción.
Como resultado de la Apreciación de Situación Estratégica Militar se fijarán los
objetivos que deberá alcanzar la maniobra estratégica del sector Militar en el
Teatro de Guerra.
La maniobra estratégica será la acción estratégica destinada a crear una situación
favorable que permita alcanzar un determinado objetivo estratégico. Esta maniobra
estratégica comprenderá dos etapas: Operaciones Iniciales y Operaciones
Posteriores.
Las Operaciones Iniciales comprenden:
- Preparación de las Fuerzas Armadas.
- Movilización Militar.
- Cobertura inicial del Teatro de Guerra.
- Concentración de los medios.
- Defensa Militar de la Zona del Interior.
- Equipamiento del Teatro de Guerra.

Las Operaciones Posteriores que incluyen específicamente las Operaciones


Tácticas comprenden:
- Maniobras para el desencadenamiento y desarrollo de las Operaciones de la
primera fase de la guerra.
- Previsiones para las fases subsiguientes.

Las fases se definen por los objetivos a alcanzar y su finalidad.


A fin de alcanzar esos objetivos y sus finalidades las FF.TT. realizan la Batalla.
La Batalla es una acción estratégica de consistente en el choque violento de
fuerzas adversarias de gran magnitud, mediante el cual una o ambas buscan
modificar sustancialmente la situación estratégica operacional. La Batalla está
compuesta por una combinación de operaciones tácticas con la finalidad última de
alcanzar los objetivos y finalidades establecidas para la maniobra estratégica.

Página 66 de 360
3.2 OPERACION TACTICA

Son las tareas y acciones que se desarrollan en un T.G., primordialmente a través


de enfrentamientos violentos de FF.AA. opuestas, y que buscan desarrollar las
acciones concebidas por la estrategia.
Procura la conquista o mantenimiento de un objetivo táctico y puede requerir o no,
el recurrir al combate para alcanzar el éxito.
Toda operación táctica, encierra una idea o concepción con perfiles característicos,
una técnica propia de ejecución y una finalidad que la tipifica y distingue. En
particular, en operaciones como las de combate (así denominadas porque de hecho
presuponen la acción violenta entre dos fuerzas militares) tal idea o concepción se
verá materializada en una maniobra táctica que procederá al combate propiamente
dicho y que por sus formas y rasgos distintivos, normalmente permitirá definir
claramente el tipo y carácter de la operación táctica que la comprende.

3.3 LA MANIOBRA TACTICA

Se entiende por maniobra táctica al conjunto de actividades (fuego y movimiento)


que se ejecutan en el campo táctico para colocar a las propias fuerzas en una
posición ventajosa para realizar el combate.
La maniobra táctica, concebida en función de las posibilidades que brindan
esencialmente los medios, el terreno y la consideración de otros factores de la
situación, buscará el momento, el lugar y la relación de poder de combate más
favorable para alcanzar la finalidad perseguida con la operación táctica que
comprende.

Página 67 de 360
La maniobra se sustenta, esencialmente, en la habilidad para moverse y ubicarse,
siguiendo una dirección y un criterio juiciosamente planeados. en función de la
operación táctica prevista, la maniobra estará precedida por una adecuada
repartición de fuerzas y asignación de apoyos que deberán conformar un todo
flexible, capaz de satisfacer las distintas exigencias que presenten, favoreciendo la
influencia del Comandante.
En general, la maniobra concebida, por un nivel de conducción será ejecutada por
los niveles que dependen de el, produciéndose en el campo táctico una serie de
maniobras, movimientos, acciones violentas, descansos y pausas.
Según sea la finalidad de la operación táctica a la cual respondan, las maniobras
podrán concebirse en diversas formas. Al respecto y en general podrán agruparse
en: maniobras tácticas ofensivas y maniobras tácticas defensivas.

3.4 CLASIFICACION DE LAS OPERACIONES TACTICAS

El cumplimiento de las diversas misiones que pueden ser impuestas a las distintas
organizaciones de las fuerzas terrestres, cuando se las emplea ante la existencia
de un enemigo real, implica para la conducción táctica la necesidad de resolver
un sin número de problemas de variada naturaleza en un marco de situación
también variado y en constante cambio.
En este nivel de conducción, la posible solución de los citados problemas exige la
realización de una serie de actividades con técnicas propias de ejecución, que en
su conjunto conforman una "operación táctica", la cual a su vez encierra una
concepción y busca una finalidad definida. Tal finalidad obrará en última
instancia como guía rectora de dichas actividades.
Las diversidad de técnicas de ejecución, y fundamentalmente de concepciones y
finalidades, permiten distinguir un gran número de operaciones tácticas. Ello
hace conveniente efectuar una clasificación que abarque la mayor parte de las
operaciones que podrán desarrollar los elementos de las FF.TT., agrupándolas en
forma coherente y ordenada según determinados parámetros.
Tal clasificación, si bien es independiente de la consideración de un determinado
nivel de conducción táctica, atiende fundamentalmente a las GG.UU. en la
medida que difícilmente los niveles inferiores estarán en capacidad de planificar
y ejecutar en forma independiente, la totalidad de las operaciones consideradas.
Al respecto deberá tenerse en cuenta que en los menores niveles de conducción y
en función de la mayor incidencia que en ellos tendrán las "técnicas de ejecución"
(las que a su vez se van modificando según la evolución tecnológica) podrán
existir procedimientos propios de tales niveles, los cuales serán tratados en las
publicaciones correspondientes.

3.4.1 Operaciones Convencionales

Página 68 de 360
Son aquellas operaciones tácticas que se ejecutan por FF.AA. organizadas
operando en forma abierta, tanto en territorio propio como en territorio enemigo,
con la finalidad de imponer nuestra voluntad. Se clasifican en Operaciones
Ofensivas, defensivas, con Características Especiales y Complementarias.

3.4.2 Operaciones No Convencionales.

Son aquellas operaciones tácticas que se ejecutan tanto en territorio propio como
en territorio enemigo, que se desarrollan conjuntamente con las operaciones
convencionales o una vez que estas no puedan ser ejecutadas, con la finalidad de
desorganizar, desgastar y destruir la voluntad de combatir del enemigo.
Comprende reconocimiento, golpe de mano, sabotaje, emboscada y ataque
objetivo limitado.

3.4.3 Operaciones de Defensa Interna.

Son aquellas constituidas por el conjunto de operaciones militares dirigidas a


neutralizar y destruir un movimiento subversivo.
Materializan la Defensa Nacional en el ámbito interno.

Dependiendo del nivel que alcance el enemigo, podrán evolucionar hacia formas
de Operaciones Convencionales. Se clasifican en Operaciones Ofensivas,
Defensiva, de Interdicción o Aislamiento y Complementaria.

3.5 OTRAS OPERACIONES MILITARES

Son operaciones que no necesariamente recurran al uso de la fuerza y que


normalmente se realizan en tiempo de paz con la finalidad de auxiliar a la
población, apoyar al desarrollo del país y particular como instrumento de la
política exterior del Estado.

3.6 OPERACIONES TACTICAS CERCANAS, PROFUNDAS Y EN LA


PROPIA RETAGUARDIA

Los Comandantes tácticos, aún cuando normalmente deberán conducir sus


operaciones en una zona de acción (sector de responsabilidad) asignado, deberán
también poseer un oportuno detallado conocimiento de todas aquellas actividades
del enemigo que, no obstante encontrarse fuera de esta zona de acción, puedan
afectar sus propias operaciones (actuales o futuras).
El desarrollo tecnológico actual, incide significativamente en este aspecto por
cuanto, por una parte, se han incrementado las posibilidades de intervención en
distintos sectores desde zonas más alejadas con mayor rapidez, precisión y

Página 69 de 360
alcance, y por otros se han ampliado sensiblemente las capacidades de vigilancia
y adquisición, tanto en tiempo como en espacio.
Tal circunstancia obligará y permitirá a todo comando, establecer una zona de
interés más amplia, que se extienda hacia el frente, flanco y retaguardia y que le
asegure:
- Poder extender su visión del campo de batalla.
- Incrementar la flexibilidad de las acciones.
- Aumentar sus posibilidades para el ejercicio de la iniciativa.

El Comandante, deberá considerar con particular atención, no sólo las


operaciones que ejecuten las tropas contra las fuerzas enemigas directamente
empeñadas, sino también:
- Todas las acciones tendientes a asegurar las actividades e instalaciones en la
pro
pia
zon
a de
reta
gua
rdia
.

Página 70 de 360
Lo expresado, permite establecer tres sectores donde deberá considerarse la
ejecución de operaciones militares. La determinación de dichos sectores,
contribuirá a la formación de planes que aseguren la debida integración de las
operaciones que en ellas se ejecuten y que requerirán una especial sincronización.
Tales operaciones se agruparán genéricamente en:
- Operaciones cercanas
- Operaciones profundas
- Operaciones en la propia retaguardia

La ejecución de las operaciones profundas y en la retaguardia que excedan la


zona de responsabilidad del elemento considerado, deberán ser solicitadas al
comando superior y coordinadas con el resto de los elementos involucrados.

3.6.1 Operaciones cercanas

Las operaciones cercanas en cualquier escalón, comprenden las actividades


habituales de los elementos empeñados en combate y sus reservas.
Tendrá como finalidad, la obtención de la decisión mediante la conquista o
mantenimiento del objetivo fijado para la batalla (combate) en desarrollo.
En cualquier escalón, las operaciones cercanas incluyen las operaciones cercanas,
profundas y de retaguardia de los elementos subordinados. Por ejemplo: las
operaciones cercanas de las División de Ejército, incluyen las operaciones
cercanas, profundas y en la retaguardia de sus Brigadas empeñadas.
La responsabilidad sobre el éxito o el fracaso normalmente recae en las
operaciones cercanas.
Las operaciones en la profundidad y en la retaguardia, incidirán favorable o
desfavorablemente sobre las cercanas.

3.6.2 Operaciones profundas

Las operaciones profundas, en cualquier nivel, comprenden las actividades


dirigidas contra las fuerzas enemigas que no estén en contacto, y están diseñadas
fundamentalmente para influir en las condiciones en que las futuras operaciones
cercanas se llevarán a cabo.
La característica principal de esta forma de operaciones es la gran cantidad y tipo
de medios necesarios para su ejecución, en cualquiera de los niveles en que se
lleven a cabo.
Los objetivos principales de las operaciones profundas son:
- Limitar la libertad de acción del enemigo.
- Alterar el ritmo y la coherencia de sus operaciones.
- Aislar las fuerzas enemigas involucradas en las operaciones cercanas.

Página 71 de 360
Debido a la relativa escasez de recursos para la ejecución de estas actividades, las
operaciones profundas deben concentrarse sobre los elementos del enemigo que
amenacen las propias operaciones cercanas proyectadas.

3.6.3 Operaciones en la propia retaguardia

Las operaciones en la retaguardia en cualquier nivel, comprenden las actividades


que se realizan en la retaguardia de los elementos que están en contacto.
Tendrán como finalidad:
- Preservar la libertad de acción del Comandante.
- Asegurar el apoyo ininterrumpido a las operaciones.

Estas, constituyen la defensa contra las operaciones profundas del enemigo.


Estas operaciones, si bien pueden tener un limitado efecto inmediato sobre las
operaciones en desarrollo, resultarán críticas para la ejecución de operaciones
futuras.
A nivel táctico inferior, establecen el ritmo de combate proporcionándole al
Comandante, la agilidad necesaria para explotar las ventajas que se puedan
presentar.
CAPITULO IV¡Error! Marcador no definido.

OPERACIONES CONVENCIONALES

OPERACIONES OFENSIVAS

4.1 GENERALIDADES

La ofensiva es la actitud decisiva de la guerra. Es el


instrumento mediante el cual el Comandante impone su
voluntad sobre el enemigo. Aún cuando ciertas
consideraciones estratégicas o tácticas podrían hacer
necesaria la defensa, tarde o temprano la derrota del
enemigo a cualquier nivel, requerirá la acción ofensiva.
Aún en la misma defensa, tomar y retener la iniciativa,
requerirá de operaciones ofensivas. Este principio tiene
mayor aplicación cuanto más fluida e inestable es la
batalla. En virtud de lo expuesto, debe hacerse hincapié
en buscar toda oportunidad posible para desarrollar
acciones ofensivas. Una relación de fuerzas
desfavorables, no es argumento decisivo para desistir de
las acciones ofensivas; un acendrado espíritu y
capacidad de combate, sustentados en una elevada moral y
Página 72 de 360
una excelente capacitación y preparación profesional,
suelen ser elementos desequilibrantes si los aplicamos
con inteligencia y audacia. Los Jefes deben estar
preocupados en encontrar o crear situaciones que les
permitan obtener o mantener la libertad de acción.
Planes criteriosos, aplicados con oportunidad, arrojo y
violencia, el desarrollo de las acciones a un ritmo
vertiginoso que supere la capacidad de accionar o
reaccionar del enemigo, son elementos que le permitirán
al mando transformar, situaciones lógicamente
defensivas, en oportunidades para pasar a la ofensiva.

4.2 FINALIDAD

El objetivo militar capital de la guerra es la imposición de nuestra voluntad sobre


la del enemigo. Ello se logra, mediante la desorganización o destrucción de las
FF.AA. Enemigas, el dominio de áreas estratégicas vitales o la anulación de su
voluntad de luchar. En consecuencia, por medio de la acción ofensiva, se procurará
una o más de las siguientes finalidades:

- Derrotar fuerzas enemigas.


- Conquistar terreno decisivo.
- Privar al enemigo de sus recursos.
- Mantener la iniciativa.
- Obtener información.
- Engañar y desviar al enemigo de sus objetivos.
- Inmovilizar al enemigo.
- Dificultar un ataque enemigo.

Una fuerza que desarrolla una operación ofensiva,


inevitablemente debe alcanzar superioridad en la
potencia relativa de combate, en el punto de incidencia
del ataque. Esto, unido a la necesidad de
disponer de suficiente fuerza para explotar la victoria, implica la aceptación de
algunos riesgos en otros puntos. Para lograr la victoria el atacante debe, por lo
tanto, mantener al enemigo bajo constante presión para evitar que se recobre del
golpe inicial, recupere su equilibrio, reconstituya su defensa y lance, a su vez, un
contraataque.
La destrucción del enemigo con frecuencia no es más que un producto accidental
de la ofensiva. Las grandes victorias son fruto de la destrucción de la coherencia
defensiva, la fragmentación y el aislamiento de las Unidades del Enemigo en

Página 73 de 360
nuestra zona de ataque y de la maniobra penetrante que permite llegar hasta los
objetivos decisivos, en lo profundo del territorio enemigo.
Históricamente, las operaciones victoriosas han producido mayor cantidad de
prisioneros enemigos que muertos o heridos en las filas del mismo, demostrando el
impacto sicológico debilitante que tiene el choque ofensivo, en la voluntad de
lucha del enemigo.
Tales resultados casi siempre se logran con ataques que eludan el choque directo
con el grueso de la fuerza enemiga, la obliguen a abandonar sus posiciones
defensivas, la separen de sus fuentes de apoyo y la conminen a combatir en una
dirección imprevista, sobre terreno que no ha sido debidamente preparado. En
suma, se trata de inducir al enemigo a combatir en direcciones, lugares y
momentos desfavorables.
El uso del ataque nocturno y operaciones aerolanzadas y de infiltración debe
desarrollarse intensamente.
Si bien la mayoría de los ataques tienen como fin la victoria directa sobre el
enemigo, algunas operaciones ofensivas pueden ser de carácter complementario.
Es posible lanzar un ataque con el fin de ocupar terreno clave que facilite la
defensa, permita un ataque subsiguiente o ayude a tomar o proteger líneas vitales
de comunicación o también, puede buscar la conquista de recursos críticos para los
abastecimientos que requiere un país para la guerra.
Puede a veces, lanzarse un ataque simplemente para forzar al enemigo a revelar
sus efectivos, su disposición o sus intenciones.
Tal reconocimiento ofensivo puede convertirse en un ataque mayor si en el curso
de la operación se pone de manifiesto una debilidad explotable en las defensas del
enemigo. El ataque también puede tener por finalidad engañar o distraer al
enemigo. Por otra parte, un ataque puede estar diseñado para inmovilizar al
enemigo impidiéndole estorbar la maniobra de una fuerza amiga en otro punto.
Los ataques simulados y las demostraciones, son formas especiales del ataque de
diversión.
Finalmente, es posible lanzar ataques desde una posición defensiva para
neutralizar un posible ataque enemigo, entorpeciendo los preparativos, ganando
tiempo e información.
Estas operaciones también pueden convertirse en una operación ofensiva mayor, si
se identifica una debilidad explotable. Por su parte, las incursiones son una forma
especial de ataque de desarticulación, destinada a destruir instalaciones críticas
para las operaciones enemigas.
Pueden programarse para que ocurran antes o al mismo tiempo que otras
operaciones ofensivas, como medio de confundir o distraer al enemigo.

4.3 FUNDAMENTOS DE LAS OPERACIONES OFENSIVAS

4.3.1 La superioridad de fuego es uno de los mas importantes requisitos en el combate


ofensivo. Debe ser obtenida lo antes posible y mantenida a través del ataque de
Página 74 de 360
manera de permitir la libertad de maniobra sin bajas prohibitivas. Pero el fuego
solo, rara vez puede lograr una decisión favorable. El efecto del fuego debe ser
explotado por la maniobra.

4.3.2 Un enemigo bien instruido y conducido tiene que ser destruido por el combate
aproximado o desalojado de su posición por la amenaza de destrucción.
Por la maniobra el atacante busca crear oportunidades para aumentar el efecto de
sus fuegos, evitar el terreno organizado por el enemigo para la defensa; y de este
modo obligar al enemigo a defenderse en terreno descubierto elegido por el
atacante.
Finalmente, el atacante maniobra hasta tomar contacto con el enemigo y
destruirlo.
En la acción Ofensiva hay tareas principales a ser ejecutadas: localizar y
mantener al enemigo en posición; maniobrar contra él para ponerse en ventaja y
en el momento decisivo lanzar un potente ataque que lo destruya. Esta tareas son
normalmente cumplidas por tres elementos: el ataque principal, el o los ataques
secundarios y la reserva. Además, el Comandante retiene algunos medios de
fuego de apoyo bajo su control directo con el objeto de permitir el máximo de
flexibilidad en la conducción del combate; esto determina la distribución de
fuerzas, la cual se tratara posteriormente.

4.3.3 Las características del terreno ejercen una influencia decisiva en la conducción de
las operaciones ofensivas. Los planes del Comandante se orientan hacia la pronta
captura y retención de aquellos aspectos críticos del terreno que le proporcionan
una señalada ventaja para una observación dominante, cubiertos y abrigos y
mejores campos de tiro facilitando la maniobra y el apoyo permitiendo el control
de las vías de comunicaciones esenciales para nuestras Operaciones o las del
enemigo y dando seguridad adicional. La posesión de aspectos críticos del
terreno sólo es importante cuando las ventajas obtenidas con ello son explotadas
para destruir las fuerzas enemigas.

4.3.4 La obtención de la sorpresa facilita la acción ofensiva. El Comandante logra la


sorpresa, atacando al enemigo en determinada forma y en el momento y en el
lugar en que éste menos lo espere. La sorpresa posterga la reacción enemiga,
recarga y confunde su sistema de mando y control, reduce la efectividad de sus
armas y sobre todo, produce un serio efecto sicológico en la tropa y sus jefes. La
sorpresa permite al atacante el empleo de menos fuerza de la que normalmente
sería necesaria.
Nunca ha sido fácil lograr la sorpresa y menos ahora que existen sistemas tan
modernos de vigilancia y alerta. Es aún posible, sin embargo, si actuamos de
manera contraria a lo que el enemigo espera. Por ejemplo, utilizando para el
ataque una avenida de aproximación sobre terreno difícil o atacando cuando las

Página 75 de 360
condiciones meteorológicas son adversas para el desarrollo de operaciones
ofensivas.
También puede ser producto de una alteración radical en la estructura o el ritmo
de la batalla. Un ataque terrestre a lo profundo de la retaguardia enemiga, puede
también producir gran sorpresa, debido sencillamente a su rapidez y a que
presenta para los elementos de retaguardia una amenaza completamente
inesperada.
Finalmente, se puede alcanzar la sorpresa, desorientando al enemigo mediante el
engaño, las fintas y demostraciones.
Aún cuando la sorpresa puede afectar el poder de combate de una fuerza, su
efecto generalmente es momentáneo. Para aprovechar las ventajas que confiere,
el Comandante de la fuerza atacante debe explotar el choque inicial y negarle al
enemigo el tiempo necesario para recuperar su equilibrio.
Raramente dura mucho. Por lo tanto, el Comandante no solo debe buscarla para
no perderla, sino además hacer planes para su agresiva explotación, una vez que
la ha obtenido.

4.3.5 La acción ofensiva requiere la concentración de una potencia de combate superior


en el momento y lugar decisivo. Esta potencia de combate consiste
principalmente en combinar la potencia de fuego con el movimiento. Para ser
efectiva debe mantener continuamente el impulso de combate asegurando un
adecuado apoyo de fuego y abastecimientos. La sorpresa muy frecuentemente
contribuye al éxito ofensivo, pero la concentración del esfuerzo siempre
desempeña un papel esencial en el logro y en la explotación de dicha sorpresa.
Virtualmente todas las operaciones ofensivas modernas se han caracterizado por
la repentina concentración del esfuerzo, seguida de rápidas y profundas
maniobras de explotación.
La tecnología moderna ha hecho el proceso de concentración de fuerzas más
difícil y peligroso.
Aún cuando los avances en la movilidad terrestre y aérea le permiten al atacante
concentrarse más rápidamente, también le permiten al defensor reaccionar con
mayor prontitud. La letalidad del armamento moderno, especialmente de las
armas nucleares, incrementan drásticamente el peligro contra cualquier
concentración de fuerzas.
Para vencer estas dificultades, el Comandante debe prever maniobrar:
- primero, dispersándose para extender las defensas enemigas y evitar convertirse
en blanco lucrativo de su Artillería y armas nucleares y después, concentrándose
rápidamente sobre ejes convergentes, abrumar a las fuerzas enemigas en el punto
de ataque, y dispersándose nuevamente para explotar el éxito inicial y destruir las
defensas en profundidad.
Para establecer este patrón de concentración y dispersión veloz, se requiere
flexibilidad de mando, agilidad en la maniobra y una detallada coordinación de
las actividades de combate, apoyo de combate y apoyo administrativo. Los
Página 76 de 360
Comandantes en todos los niveles deben designar el esfuerzo principal, destinar
recursos para apoyarlo y prepararse para hacer cambios sin perder la
sincronización una vez que el ataque esté en curso.
En todos los niveles, pero especialmente a nivel de Brigada o superior, debe
recalcarse la necesidad de ocultar cualquier concentración hasta el último
instante, a fin de impedir que el enemigo disponga de tiempo suficiente para
reaccionar efectivamente. Es preciso estar pendiente de las concentraciones
logísticas, las actividades de patrullaje y de comunicaciones y los fuegos
indirectos, a fin de evitar cualquier patrón delator en las operaciones del atacante.
La rapidez, la seguridad y el engaño, son condiciones esenciales para realizar con
éxito cualquier concentración de fuerzas antes del ataque.

4.3.6 Al luchar las fuerzas de ambos bandos, las operaciones militares alternan entre la
acción y la pausa. A veces, las unidades, aminoran el ritmo en determinado
momento con la idea de acelerarlo luego. El Comandante busca aplicar un ritmo
que le permite mantener al enemigo bajo constante acecho, impidiéndole que se
reponga del choque sicológico y demás efectos del ataque. Un ritmo veloz
requiere de la habilidad para tomar decisiones tácticas con rapidez para negarle al
enemigo oportunidad para descansar y explotar cualquier circunstancia para
conformar la situación según la intención de su Comandante. Uno de los
elementos esenciales de la victoria es un ritmo de ataque que mantenga al
defensor bajo presión constante. Ello promueve la sorpresa, mantiene al enemigo
en estado de desequilibrio, contribuye a la seguridad de las tropas atacantes y
despoja al defensor de toda libertad de acción. Si se sabe aprovechar, el ritmo
puede causar confusión en filas enemigas y dar al ataque una fuerza incontenible.
El ritmo puede ser rápido o lento. Si bien la velocidad a menudo resulta
conveniente, el Comandante debe regular el ritmo para facilitar la sincronización.
En ocasiones, es recomendable disminuir la velocidad y cerciorarse de que las
condiciones sean propicias antes de adoptar un ritmo más intenso. Una vez
iniciado el ataque, las tropas atacantes marchan velozmente detrás de las
unidades de reconocimiento y pasan a través de cualquier brecha abierta en las
líneas del adversario, sin dar a éste oportunidad de recobrar su equilibrio. El
atacante redistribuye sus fuerzas con prontitud para ampliar cualquier
penetración, desplazar flancos enemigos expuestos o explotar el éxito. El atacante
trata de llevar el combate hasta lo profundo de la retaguardia enemiga y
desbaratar las defensas antes que el adversario pueda reaccionar al asalto inicial o
identificar el esfuerzo principal.
Es preciso, sobre todo, negarle la oportunidad de concentrar sus fuerzas o los
efectos de sus armas sobre el esfuerzo principal. Las acciones de aquellos
Comandantes que extienden excesivamente sus unidades o que actúan
precipitadamente bien pueden significar una ventaja para el enemigo. Para lograr
resultados óptimos, el Comandante debe saber controlar el ritmo del ataque y
combinar esto con la aplicación táctica.
Página 77 de 360
Al preparar sus planes, el Comandante debe tener el cuidado de imprimir a sus
operaciones el ritmo adecuado. Debe identificar las mejores avenidas de
aproximación para el ataque, hacer preparativos para el combate en profundidad,
facilitar la transición a otras fases de la ofensiva, y concentrar y combinar sus
fuerzas con eficacia.

4.3.7 Todo ataque agresivo proporciona inherente seguridad. En la ofensiva deben


tomarse medidas adicionales de seguridad contra operaciones de engaño,
contraataques u otras acciones enemigas.

4.3.8 Todo plan para una acción ofensiva debe asegurar la captura de los objetivo finales
y hacer previsiones para la explotación de las ventajas obtenidas.
El Comandante debe mantener una reserva disponible para la fase de la
explotación.
Las acciones para ponerse en condiciones de pasar a la explotación pueden
resultar en una guerra de desgaste en la cual el atacante sufre inevitablemente
pesadas bajas.
Cuando se presenta la oportunidad para una acción decisiva el Comandante
empeña sin vacilar su última reserva en la explotación y exige el máximo
esfuerzo a sus Unidades.

4.3.9 Las operaciones ofensivas deben ser ejecutadas en forma flexible. El Comandante
debe prever los acontecimientos lo antes posible. Sin embargo, también debe
estar listo para lo inesperado y preparado para explotar cualquier oportunidad.
Los elementos subordinados deben entender las intenciones del Comandante
inmediato superior, lo necesariamente bien como para saber aprovechar
oportunidades que se puedan presentar en el campo de batalla aún cuando no
pueden recibir instrucciones debido a una interrupción en las comunicaciones.

4.3.10 La conservación de la sincronización en una batalla, requiere de una planificación


inicial muy detallada. El plan debe usar itinerarios que permitan la máxima
oportunidad para maniobrar alrededor de los puntos de resistencia enemigos.
Una operación ofensiva mayor, debe comprender:
- Bifurcaciones al otro extremo de la principal avenida de aproximación.
- Planes para el pasaje a la defensa o para la explotación.
- Medidas de control que faciliten cambios en la dirección y el punto del
esfuerzo principal.
- Disposiciones para el combate nocturno o con visibilidad limitada.
Aún cuando no haya armas nucleares ni químicas en apoyo del ataque, los
Comandantes deben hacer los preparativos necesarios para proteger sus fuerzas,
contra el uso por parte del enemigo de dichas armas.

Página 78 de 360
4.3.11 La audacia, ha sido siempre uno de los principales fundamentos de la buena
ejecución de operaciones ofensivas. Muchas operaciones de este tipo han
fracasado por falta de audacia más que por cualquier otra razón. El Comandante
que realiza una acción ofensiva debe considerar pero no ser dominado por la
prudencia. Ha de hacer sentir al enemigo más temor que el natural que tengan
sus propias tropas. Esencialmente, ha de tener en cuenta que la superioridad
numérica, aunque útil, no es vital para el éxito de una operación ofensiva. El
hecho de que se actúe ofensivamente hace que el defensor piense que se es más
fuerte que él. En resumen, los preceptos de la doctrina aeroterrestre -iniciativa,
agilidad, profundidad y sincronización- también se aplican en la ofensiva.

4.4 EL MARCO OFENSIVO

Un concepto operacional sencillo completo es la base de todas las acciones


ofensivas tácticas.

El concepto debe permitir la rápida transición entre una y otra fase ofensiva.
Las Grandes Unidades hacen uso de cinco elementos complementarios al llevar a
cabo sus operaciones ofensivas:
- Ataque principal, acompañado de los ataques secundarios necesarios.
- Acciones de la reserva.
- Operaciones de reconocimiento y seguridad al frente, los flancos y la
retaguardia del ataque principal y de los ataques de apoyo.
- Operación continua y profunda en las áreas vitales de la zona de ataque.

- Las acciones en el área de retaguardia, necesarias para mantener el ímpetu de la


ofensiva.

Las Unidades subordinadas normalmente no llevan a cabo operaciones


independientes profundas o de retaguardia. Dichos escalones sin embargo, deben
mantenerse atentos a la presencia de fuerzas enemigas no empeñadas, capaces de
obstaculizar el cumplimiento de la misión. También, prestan seguridad general,
incluyendo protección a los trenes logísticos en la retaguardia.
En las operaciones de combate cercano, las fuerzas de reconocimiento y seguridad,
localizan al enemigo y buscan brechas en sus defensas, realizan operaciones para
proteger al grueso contra la sorpresa procuran agresivamente el máximo de
información y dan al Comandante el tiempo y el espacio necesarios para
reaccionar a las acciones enemigas. El ataque principal y los ataques secundarios
maniobran y evaden o atraviesan las defensas enemigas, para ocupar los objetivos
que permitirán la derrota de la fuerza defensora.
Se colocan las reservas de manera que faciliten el esfuerzo principal. Ellas
explotan el éxito, generan o mantienen el ímpetu, se encargan de enfrentar y
Página 79 de 360
rechazar cualquier contraataque enemigo, brindan seguridad, completan la
destrucción de las fuerzas enemigas, aseguran los objetivos profundos o inician la
siguiente fase de una campaña u operación mayor, capturando objetivos adelante
de la línea alcanzada.
Las operaciones profundas aíslan al defensor, desorganizan sus reservas,
interrumpen su apoyo y complican la reconstitución de su defensa durante el
repliegue.
Las operaciones de retaguardia aseguran la libertad de acción de las fuerzas
empeñadas y no empeñadas y protegen las actividades de apoyo de combate y de
apoyo de servicio de combate.
Las Divisiones de Ejército y las Brigadas pueden ejecutar cualquier tipo de
operación táctica ofensiva. La División, la Brigada y las Unidades Básicas, pueden
también ser empleadas como fuerzas de seguridad, como elementos del ataque
principal o secundario, como reserva o en algunos casos, como elementos de una
operación profunda o de retaguardia.
Las Unidades Básicas y Sub-Unidades de maniobra atacan, defienden, retardan o
se despliegan como parte de las operaciones de la Gran Unidad a que pertenecen.
Forman sus propios elementos de seguridad y de reserva si es necesario.
Todas las Unidades de combate que toman parte en las operaciones ofensivas,
deben estar preparadas para mantener el objetivo conquistado mediante la
adopción del dispositivo más conveniente una vez terminado el ataque.

Página 80 de 360
4.5 CONDUCClON DE OPERACIONES OFENSIVAS

4.5.1 Generalidades

Las operaciones ofensivas se caracterizan por la gran iniciativa de los


Comandantes subordinados, la rapidez con que el esfuerzo principal debe
pasar de un punto a otro, para aprovechar nuevas oportunidades, por su ímpetu
y por la velocidad con que se busca la destrucción de las defensas en lo
profundo de las líneas enemigas.
El ataque ideal debe avanzar rápidamente siguiendo a las unidades de
reconocimiento que descubren brechas en las defensas enemigas y tener la
capacidad de trasladar efectivos, ensanchar penetraciones, aprovechar
operaciones exitosas y llevar así la batalla a lo profundo de la retaguardia
enemigo. Toda fuerza o lugar de importancia crítica a la defensa enemiga debe
ser destruido o dominado rápidamente antes que el adversario pueda
reaccionar.

4.5.2 La Ofensiva Táctica

4.5.2.1 Fases

Como parte de las operaciones ofensivas del Ejército en campaña, se


encomiendan misiones a las Divisiones de Ejército y otras Grandes Unidades o
Unidades Tácticas menores, que requerirán de diferentes acciones que
podemos encuadrar dentro de las siguientes fases:
- acciones preliminares de las operaciones ofensivas (movimiento hacia el
contacto).
- ataque.
- explotación del éxito.
- persecución

Las cuatro fases citadas, en el orden que se enumeran, tienden a manifestarse


como etapas sucesivas de las operaciones ofensivas, aún cuando la duración e
índole de cada etapa varía de una situación a otra. Esas etapas no siempre están
presentes en todas las operaciones ofensivas.

4.5.3 Acciones Preliminares de las Operaciones Ofensivas

4.5.3.1 Generalidades

Página 81 de 360
En esta, se insertan la concentración de las fuerzas atacantes con su
correspondientes apoyos y el movimiento de éstas para hacer contacto con el
enemigo.
Puede también comprender acciones preliminares de diversión y fuegos
preparatorios. La duración y la naturaleza de esta etapa, depende de si estamos
o no en contacto con las fuerzas enemigas y del actual dispositivo del mismo.

4.5.3.2 El movimiento hacia el contacto

Un elemento esencial de las acciones preliminares es el movimiento hacia el


contacto (para establecer o restablecer el contacto con el enemigo) se
caracteriza por su movimiento veloz a lo largo de ejes múltiples, control
descentralizado y rápida adopción, partiendo de la marcha, de formaciones de
ataque o defensa.
En una situación inestable en la que los dos oponentes tienen libertad de
maniobra, el movimiento hacia el contacto producirá un combate de encuentro,
en el que ambos bandos tratarán de adueñarse de la iniciativa y obligar al
contrincante a tomar la defensiva.
En todo caso, los elementos críticos de la marcha hacia el contacto son, la
protección hacia el frente y los flancos, un rápido y fácil despliegue hacia el
ataque al hacer contacto con el enemigo y el apoyo de fuego, tanto aéreo como
de Artillería, que han de facilitar la rápida concentración de la fuerza y que se
alcance superioridad de fuego, en el punto de contacto. Por su parte, la
conquista de la iniciativa es el primordial imperativo táctico y requiere la
acción agresiva de los Jefes en todos los niveles.
El propósito de esta acción es hacer contacto con el enemigo y desarrollar la
situación. Los movimientos hacia el contacto deben realizarse de tal manera,
que le permitan al Comandante conservar la libertad de acción una vez hecho
el contacto. Esto es esencial para mantener la iniciativa y se basa en los
siguientes principios:
El Comandante debe encabezar la marcha con una fuerza de cobertura muy
móvil y autónoma con la cuál trata de localizar y fijar al enemigo. Al mismo
tiempo, debe mantener al grueso de su fuerza lo bastante a retaguardia como
para poder maniobrar y evitar caer inadvertidamente en un combate decisivo.

Página 82 de 360
Siempre que
sea posible,
se sobrepasa
cualquier
resistencia
ligera con la
unidades de
vanguardia
para
mantener el
ímpetu de la
operación.

El
Comandante
debe
organizar su Unidad como fuerza de Armas combinadas, teniéndola siempre
lista para desplegarse y atacar rápidamente en cualquier dirección, con el
apoyo de las Unidades de Artillería y los medios de la Fuerza Aérea Táctica
disponibles.
La formación debe facilitar la seguridad propia, hacia los flancos, la
retaguardia y la vanguardia, así como la defensa antiaérea. La fuerza debe
moverse en forma agresiva y rápida.
El Comandante debe delegar la ejecución de la marcha, en los Jefes de los
elementos que actúan en vanguardia. Sin embargo, debe ejercer suficiente
control para asegurarse de que los fuegos sean efectivos y que las fuerzas
que progresan en la retaguardia puedan ser empleadas rápidamente, cuando
la Unidad hace contacto y esto sea necesario.

4.5.3.2.1 Organización y Planificación

En el movimiento hacia el contacto, de las Divisiones de Ejército y de las


Brigadas, generalmente se organiza una Fuerza de Cobertura, una
Vanguardia y el grueso, el que normalmente proporciona las fuerzas de
protección de flanco y retaguardia.
La composición, el tamaño y la operación de la Fuerza de Cobertura pueden
afectar todo el curso de la Batalla. Esta fuerza debe incluir las Unidades de
Artillería y otras Unidades de apoyo de combate y de apoyo de Servicio,
necesarias para asegurar la mayor continuidad de la marcha.

Página 83 de 360
La fuerza de Cobertura debe ser altamente móvil y bien balanceada y debe
emplearse tan adelante del grueso como sea necesario, para darle al
Comandante espacio y tiempo para reaccionar al producirse el contacto. Las
misiones a la fuerza de Cobertura, incluyen reconocer la zona situada al
frente, aclarar la situación enemiga y proporcionar seguridad, para que el
grueso pueda desplegarse y combatir en las mejores condiciones posibles.
Las operaciones incluyen ataques para neutralizar la resistencia enemiga,
conquistar y controlar terreno crítico y contener a las fuerzas enemigas. Una
fuerza móvil fuerte en Blindados y Artillería apoyada efectivamente por
Aviación Táctica, es la más efectiva para desempeñar esta misión.
La Vanguardia, es una fuerza de seguridad proporcionada por el grueso.
Opera al frente de este último, para facilitarle el avance continuo y
protegerlo contra ataques sorpresivos; protege su despliegue cuando éste
entra en acción y facilita su avance eliminando obstáculos, reparando
caminos y puentes o localizando itinerarios alternos.
Avanza tan rápidamente como le sea posible, pero, a diferencia de la Fuerza
de Cobertura. se mantiene siempre lo bastante cerca del grueso para recibir
rápidamente su apoyo. Realiza un reconocimiento continuo hacia el frente y
los flancos y quita del paso o destruye cualquier agrupación pequeña que
pueda obstaculizar el avance del grueso de la fuerza. Cuando encuentra
Unidades enemigas o áreas defendidas, toma acción rápida y decidida,
informa inmediatamente la posición, los efectivos, dispositivos y
composición del enemigo y trata de determinar sus flancos y descubrir
brechas. El grueso puede entonces entrar en acción. La Vanguardia debe
estar lo bastante al frente del grueso, como para darle suficiente libertad de
acción, pero no tan adelantada, que un ataque enemigo pueda destruirla
antes de recibir ayuda.
La Vanguardia avanzada en columna hasta que hace contacto con el
enemigo. Deben llevar elementos de Ingenieros consigo, pero cualquier otro
apoyo por lo general lo puede proporcionar el grueso de la fuerza.
El grueso de la fuerza debe estar preparado para entrar en acción al
momento de producirse el contacto. Las operaciones de reconocimiento
aéreo, apoyo aéreo cercano, interdicción aérea del campo de batalla y
defensa aérea, son esenciales al igual que la superioridad o al menos la
paridad aérea local.
Los elementos de apoyo de servicio deben operar descentralizadamente. El
movimiento hacia el contacto, puede también requerir de una operación de
reabastecimiento aéreo.
La Brigada y las Divisiones de Ejército, se mueven sobre rutas paralelas
múltiples, con caminos secundarios laterales a su dispositivo a fin de
brindarle flexibilidad y reducir el tiempo necesario para iniciar la maniobra.
Unidades pertenecientes al grueso, normalmente dan seguridad como
fuerzas de protección empleadas a los flancos y retaguardia.
Página 84 de 360
A fin de que el Comandante de la fuerza que realiza el movimiento hacia el
contacto pueda recibir el alerta oportuno sobre cualquier movimiento
enemigo en su área de interés, es necesario que cuente con el apoyo de
medios de observación de largo alcance.
En terreno abierto existe espacio para maniobrar a ambos lados de la
avenida de aproximación empleada para la marcha, facilitando el
movimiento a gran velocidad y con adecuada dispersión. El grueso nunca
debe ser empleado en terreno que canalice el avance, hasta que los
elementos avanzados se hayan adelantado lo suficiente para darle seguridad
de que no va a quedar atrapado.
Los movimientos deben ser tan rápidos como lo permita el terreno, la
movilidad de la fuerza y la situación del enemigo. En una situación
altamente peligrosa, generalmente conviene más aumentar la distancia
entre los elementos avanzados y el grueso, que retardar la velocidad del
avance.
La fuerza debe tratar de cruzar los obstáculos sin aminorar la marcha. La
Fuerza de Cobertura y/o Vanguardia pasa por alto el obstáculo o lo supera
lo más rápido posible. Si los elementos de Vanguardia se ven
imposibilitados de salvar el obstáculo, los elementos del siguiente escalón
pueden desviar rápidamente y convertirse en la vanguardia. Los escalones
siguientes eliminan cualquier obstáculo que amenace con interrumpir el
flujo de apoyo logístico.

4.5.3.3 Combate de Encuentro

4.5.3.3.1 Generalidades

El Combate de Encuentro (ataque desde el movimiento) es diferente del


ataque coordinado, es una modalidad operativa en la cual se aprovecha una
ventaja de situación o de potencia relativa de combate. Su característica
principal es la rapidez en todas las disposiciones, lo cual, no significa que
este tipo de operación ofensiva sea precipitada, falta de planificación, o que
se renunciará al apoyo de fuegos necesario en toda operación ofensiva.
Por lo general se adopta en los siguientes casos:

- Cuando el enemigo no ha completado su preparación para el combate.


- Cuando el enemigo puede ser sorprendido.
- Cuando la potencia de combate del enemigo es notoriamente inferior.

Debe entenderse que se trata de operaciones que solamente pueden


realizarse con Unidades de gran movilidad táctica y requieren de un alto
grado de aptitud e iniciativa para realizar en un tiempo relativamente corto,

Página 85 de 360
los preparativos esenciales de la maniobra y el apoyo de fuego (órdenes,
enlaces, coordinaciones, etc.)
El éxito de un combate de encuentro dependerá en gran parte de la sorpresa
que produzca en el enemigo, del grado de entrenamiento para el combate de
la tropa que lo ejecuta y del proceder resuelto y agresivo del conjunto de la
Unidad.
Interesa, en principio, desplazar hacia adelante lo más pronto posible, al
mayor número de unidades de maniobra, a menudo sin mayor preocupación
del escalonamiento en profundidad, ni de la organización de la reserva, que
serán responsabilidad de las Unidades más atrasadas.
El apoyo de fuegos se ejecutará inicialmente con un mínimo de
coordinación entre las Unidades de Artillería disponible.
En la mayoría de los casos habrá que impartir órdenes fragmentarias, pero
éstas deben contener los aspectos esenciales para su coordinación y
ejecución: debe precisarse con claridad la misión y el concepto de la
operación.

4.5.3.3.2 Consideraciones tácticas a tomarse en cuenta en los combates de


encuentro.

La marcha hacia el contacto con frecuencia produce un combate fortuito o


de encuentro. Los encuentros de este tipo a menudo ocurren
inesperadamente. Pero también puede ocurrir cuando ambos oponentes
están al tanto de la presencia del otro y sin embargo, deciden atacar sin
demora. Un combate de encuentro puede también ocurrir cuando un
oponente trata de ocupar improvisadamente posiciones defensivas, en tanto
que el otro busca impedírselo.
En todos los niveles de mando, el éxito en un combate de encuentro
depende de la efectividad de las acciones tomadas al hacer contacto. El
Comandante en consecuencia debe:
- Adueñarse de la iniciativa desde el principio.
- Desarrollar la situación e iniciar la maniobra rápidamente.
- Atacar violenta y resueltamente.
- Mantener el ímpetu mediante la sincronización de las acciones de los
elementos de combate, apoyo de combate y apoyo de servicio.

Un Comandante debe determinar rápidamente si puede eludir o pasar por


alto al enemigo o si debe atacarlo. Es necesario dar parte de cualquier
Unidad enemiga pasada por alto, al escalón inmediato superior. No debe
permitirse que pequeñas Unidades enemigas retarden el movimiento de la
fuerza.

Página 86 de 360
4.5.4 ATAQUE

4.5.4.1 Generalidades

El ataque es un tipo de operación ofensiva que implica un avance a través de


una resistencia.
La oportunidad para atacar puede surgir en el curso del combate o puede ser
producto de la adecuada conducción táctica. El ataque puede lanzarse desde
la retaguardia de la defensa propia realizada por otra fuerza amiga o durante
el desarrollo de una operación de explotación o persecución. Puede ser parte
de una defensa en mayor escala, como en el caso de un contraataque o un
ataque de desorganización. Cualquiera sea su naturaleza o propósito, el
ataque debe ser rápido, violento, sagaz y sincronizado.
Los ataques son de dos tipos básicos: improvisados y coordinados. Se
diferencian primordialmente por el grado de preparación.

4.5.4.2 El ataque improvisado

Es el que se ejecuta rápidamente a partir de un movimiento para hacer


contacto o de una situación estática (defensa por ejemplo) para explotar una
debilidad enemiga o el beneficio de la sorpresa. Este tipo de ataque no se
planifica en detalle: se llevará a cabo tras una brevísima planificación en
que el Cte., considerará aquellos aspectos esenciales de la situación que le
permitan arribar a una conclusión sobre la mejor forma de realizar la
operación. Para ello, utilizará el procedimiento de apreciación abreviada, en
la que se considerarán, fundamentalmente, la misión, enemigo, terreno,
tiempo y medios disponibles.
En las oportunidades en que los elementos deban ejecutar un ataque rápido,
generalmente recibirán una misión con el efecto deseado, encuadrado en
tiempo y espacio, la que se materializará en objetivos físicos a conquistar o
fuerzas a destruir.
Los aspectos esenciales a considerar serán la rapidez y la sincronización, los
que se verán favorecidos por el empleo de Procedimientos Permanentes de
Operaciones, complementados con breves rectificaciones. La rapidez puede
contrarrestar la falta de preparativos detallados, pero es necesario asignar al
ataque todos los elementos de apoyo de combate disponibles, con la mayor
rapidez posible. Se inicia el ataque improvisado mediante órdenes parciales.
Estas comprenden un objetivo, el Concepto del Comandante, la
determinación del ataque principal y las tareas para los elementos
subordinados.

Página 87 de 360
4.5.4.3 Ataque coordinado

El ataque coordinado es el que se ejecuta a partir de


una zona de reunión, la que se ocupó después de
finalizada otra operación, con la expresa
intención de realizar los preparativos para el
ataque, previéndose contar con tiempo
suficiente para hacer una planificación y una
preparación con cierto detalle. Lo expresado
indica que el ataque coordinado será precedido
por una detención entre la actividad anterior y
el ataque en sí.

Se planifica minuciosamente y se caracteriza por:


- Gran volumen de fuego.
- Inteligencia actualizada y oportuna.
- Preparativos extensos.
- Uso de planes de engaño debidamente preparados.
- Explotación y empleo de medios de guerra.
- Empleo de medios de guerra no convencional.
- Operaciones sicológicas.
Página 88 de 360
El atacante debe estar organizado en profundidad para darle flexibilidad al
ataque.
Las reservas deben ocupar posiciones abrigadas o encubiertas y estar
preparadas para remplazar a la Unidad de primer escalón y explotar
cualquier éxito; deben identificar avenidas de aproximación que les
permitan trasladarse rápidamente a cualquier punto en la zona de ataque. De
ser posibles, estos ataques, deben ensayarse.
Las operaciones profundas son de gran importancia en el ataque coordinado.
Las Divisiones de Ejército y las Brigadas, atacan, bloquean las reservas,
destruye los puestos de comando, neutraliza la Artillería y cierran las rutas
de repliegue.
Normalmente, la misión recibida del escalón superior señala la conquista o
neutralización de una zona del terreno o la destrucción de una fuerza
enemiga. Cuando sea necesario para la coordinación de la maniobra se
asignarán objetivos intermedios.
El ataque coordinado normalmente implica la ejecución de un
reconocimiento tan completo como lo permita la situación y un estudio tan
sistemático como sea posible de todos los factores que afectan la situación.
Por ello, requiere el mayor grado de preparación y coordinación posible y la
disposición del tiempo necesario para las actividades señaladas, en cada
escalón.
Todos los medios de obtención de información serán utilizados al máximo,
tanto respecto a las características del área de operaciones, como a la
situación del enemigo.
Estos aspectos son fundamentales para determinar el tipo de maniobra y la
organización para el combate.
La situación propia y el tipo de Unidades de que se dispone, serán evaluadas
cuidadosamente.
Las tropas disponibles deben distribuirse mediante una apropiada
organización para el combate, concentrando la máxima potencia de combate
posible, en la parte del dispositivo donde es más probable obtener resultados
decisivos.
A fin de contribuir al secreto de la operación, se debe mantener la actividad
normal de los órganos de apoyo de fuego, antes de ejecutar los tiros de
preparación.
Normalmente, el apoyo logístico es centralizado. Durante las operaciones
con alto grado de movilidad, se puede emplear el material capturado o
abandonado por el enemigo.

Página 89 de 360
4.5.4.4 Formas de maniobra

Las formas de maniobra ofensiva de acuerdo a la dirección de realización de


los esfuerzos ofensivos sobre el enemigo son: el Envolvimiento Doble
Envolvimiento, el Movimiento Envolvente, la Penetración y el Ataque
frontal.

4.5.4.5 Selección de la forma de Maniobra

Las directivas del escalón Superior, las características de la zona de


operaciones, la situación de las fuerzas enemigas y amigas y la
disponibilidad de los medios, determinarán la forma de maniobra.
Aunque el escalón superior rara vez especifica la forma de maniobra, la
misión involucra implícitamente tareas, pudiendo imponer limitaciones tales
como, momento, seguridad y direcciones de ataque que dejan al
Comandante pequeñas alternativas respecto a la forma de maniobra a
adoptar.
Normalmente, los factores de la decisión constituyen las determinantes
principales en la elección de la maniobra para el cumplimiento de la misión.

4.5.4.5.1 Envolvimiento
Página 90 de 360
En el envolvimiento el esfuerzo principal es dirigido hacia la conquista de
un objetivo en la retaguardia del enemigo que corte sus rutas de repliegue y
lo someta a la destrucción en su posición.
El envolvimiento tiene por finalidad obligar al enemigo a combatir en dos o
más direcciones simultáneamente para oponerse a los esfuerzos
convergentes del ataque. Esto es realizado atacando un flanco accesible del
enemigo y evitando el grueso de su dispositivo en el camino hacia el
objetivo.
El esfuerzo secundario inmoviliza al enemigo para evitar su repliegue y
reducir su capacidad de reacción contra el esfuerzo principal. Se realiza
manteniendo el apoyo mutuo entre ambos esfuerzos.
El envolvimiento exitoso depende en gran parte del grado de sorpresa
logrado y de la capacidad del ataque secundario para cumplir su misión. La
sorpresa se logra maniobrando con rapidez y en una dirección inesperada,
evitando la observación y ejecutando medidas de engaño. Una mayor
movilidad y la superioridad aérea aumentan las posibilidades de éxito.
Un envolvimiento se basa en que, en el dispositivo inicial enemigo de
defensa los flancos normalmente no pueden ser tan fuertes como su frente
salvo que éste se extienda excesivamente. El enemigo fortalece un flanco no
apoyado mediante la preparación de posiciones en profundidad y reteniendo
fuerza móviles en reserva. Cuando es amenazado con un envolvimiento, él
puede contar con sus reservas para oponerse a la fuerza envolvente.
Página 91 de 360
Por lo tanto es esencial el rápido movimiento alrededor de su flanco para
evitar la ocupación de posiciones preparadas. Los vigorosos ataques
secundarios evitan que el Enemigo reconstituya reservas con tropas de su
frente.
El enemigo puede intentar envolver las Fuerzas atacantes o extender su
flanco más allá del ataque. Un intento por parte del atacante de desbordar tal
extensión de frente enemigo puede conducir a una amplitud excesiva o a
una separación peligrosa entre las fuerzas envolventes y las fuerza del
ataque secundario. Generalmente es preferible aprovechar la extensión y
consiguiente debilidad del enemigo penetrando su frente débilmente
mantenido en lugar de extenderse excesivamente en un esfuerzo por
desbordar completamente la posición.
El enemigo puede intentar un ataque frontal. En este caso la fuerza amiga
que ejecuta el ataque secundario mantiene sus posiciones o se empeña en
una acción de Retardo mientras que la fuerza envolvente continúa el
envolvimiento o es desplazada hacia el interior para un contraataque.

4.5.4.5.2 Doble Envolvimiento

El doble envolvimiento es una variación del anterior que es ejecutado por


dos fuerzas de ataque envolventes y una fuerza de ataque secundario.
Implica un envolvimiento simultáneo de ambos flancos. Aunque es una
maniobra decisiva, generalmente requiere una gran superioridad en la
potencia relativa de combate y normalmente es difícil de controlar.
El uso de armas de destrucción masiva en un doble envolvimiento puede
reducir la gran superioridad de fuerza requerida, como también economizar
considerable tiempo en su ejecución.
La unidad que busca ejecutar el doble envolvimiento debe ser capaz de
desplegar en un amplio frente contra un enemigo que ocupe un frente más
estrecho o con pequeña capacidad de maniobra. La maniobra es ejecutada
haciendo un ataque secundario frontal en el centro mientras se acciona con
ataques principales sobre ambos flancos enemigos.
Cuando se dispone de fuerzas móviles en reserva, estas pueden completar el
envolvimiento con un ataque hacia la retaguardia. Después del
envolvimiento inicial de un flanco, pueden surgir condiciones favorables
para pasar a un doble envolvimiento por medio del empleo de las reservas
cuando el éxito ha colocado al enemigo en una situación desventajosa.

Página 92 de 360
4.5.4.5.3 Movimiento Envolvente

Cuando el enemigo ocupa una fuerte posición defensiva, el Comandante de


la Fuerza atacante puede buscar desalojar al enemigo de su posición,
obligándole a retirarse y combatir sobre terreno más favorable para el
atacante.
Mientras que, el envolvimiento busca destruir al enemigo en posición, el
movimiento envolvente captura un área vital profunda en la retaguardia
enemiga para una o más de las siguientes finalidades:
- evitar el refuerzo a la Fuerza envuelta
- forzar al enemigo a abandonar su posición
- obligarlo a desviar Fuerzas importantes para hacer frente a la amenaza.

Si bien la fuerza envolvente es frecuentemente el ataque principal, esto no


es siempre necesario. Por ejemplo, una fuerza que realiza una operación en
dimensión vertical para la conquista de un pasaje vital que favorezca al
ataque principal, es una fuerza envolvente.
Página 93 de 360
El movimiento envolvente se emplea en situaciones en las cuales existe la
oportunidad de conquistar áreas vitales en la retaguardia enemiga antes que
su fuerza principal pueda replegarse o ser reforzada. El engaño, el secreto y
la movilidad son esenciales para la ejecución satisfactoria de un movimiento
envolvente.
La fuerza envolvente frecuentemente opera más allá de la distancia de
apoyo mutuo con las otras fuerzas terrestres de ataque. Por lo tanto, cada
núcleo debe ser lo suficientemente fuerte para evitar ser batido
separadamente.
Cuando las condiciones lo favorecen, los principales elementos de la unidad
pueden ser empleados en la fuerza envolvente, dejando el mínimo de
fuerzas enfrentando al dispositivo enemigo.
Por esta razón, el ataque secundario no es imprescindible como ocurre en el
envolvimiento.
Las fuerzas altamente móviles, tales como blindados, aero transportados,
aero lanzados, mecanizados, motorizados y anfibios, son particularmente
aptas para realizar este tipo de operación.

Página 94 de 360
4.5.4.5.4 Penetración

La penetración se realiza cuando los flancos enemigos no son vulnerables o


cuando no existe tiempo para el envolvimiento. La penetración se ve
favorecida cuando el enemigo está excesivamente extendido, cuando se
detectan puntos débiles en su posición o cuando el terreno y la observación
son favorables para un empleo más efectivo de armas combinadas.
La Penetración de una posición bien organizada, requiere superioridad en
potencia relativa de combate y la continuidad del impulso del ataque, dado
que si éste es retardado o detenido, el enemigo tendrá oportunidad de
reaccionar.
Los planes para la penetración de una posición defensiva prevén el
aislamiento y la destrucción por el fuego del área enemiga seleccionada para
la penetración.
Los movimientos de reservas enemigas hacia el área penetrada son
impedidos por fuegos lejanos suplementados por la acción aérea.

- Fases de la Penetración.

La penetración de una posición enemiga impone el cumplimiento de tres


tareas principales: la ruptura del LAADA, el ensanchamiento de la brecha
por la conquista de objetivos dentro de la posición y la conquista de
objetivos que destruyen su continuidad. Estas tres fases son seguidas
inmediatamente por la explotación para capturar áreas vitales profundas en
la retaguardia enemiga.
Después de la ruptura inicial del LAADA, la secuencia de las dos fases
restantes es determinada por la situación. Puede ser factible, si existen
debilidades en la posición enemiga, capturar el objetivo final de la
penetración simultáneamente con el ensanchamiento de la brecha inicial. En
otras situaciones la conquista del objetivo final debe ser postergada hasta
que la brecha sea lo suficientemente amplia para permitir el empleo de
reservas para la fase final

- Ruptura del límite anterior del Area de Defensa Avanzada

El ataque principal es lanzado sobre un frente relativamente estrecho.


A las tropas del escalón de ataque se le asignan objetivos cercanos de
manera de utilizar inicialmente la máxima potencia de combate. Las
reservas locales son mantenidas prontas para intervenir cuando éste ha sido
retardado o detenido. El o los ataques secundarios sobre el resto del frente
tienen el propósito de contener el enemigo e impedir su desenganche.
Página 95 de 360
El ancho de la penetración está determinado por la profundidad de la
posición enemiga y la potencia relativa de combate de los escalones de
ataque. Es especialmente importante tener en cuenta el grado de apoyo de
fuego, y aéreo disponibles para la fuerza atacante.
Cuanto más ancho sea el frente de la penetración mayor será la dificultad
que tendrá el enemigo para cerrar la brecha, a la vez, una penetración sobre
un frente ancho requiere mayores recursos. Cuanto más profunda es la
penetración, más efectiva será la acción de arrollar los flancos enemigos
creados por la ruptura y este se encontrará cada ves en mayor desventaja
para restablecer su frente defensivo.

- Ensanchamiento de la brecha

El ensanchamiento de la brecha inicial de la


penetración puede ser asignado a los ataques
secundarios o a las reservas. Se hacen planes
para enfrentar a contraataques enemigos por la
acción de los fuegos o de las reservas.

- Conquista del Objetivo y Sub-siguiente explotación

Al ataque principal se le asigna normalmente la misión de conquistar el


objetivo que destruya la continuidad de la posición enemiga. Pero es posible
que ésta tenga una profundidad tal, que impida la captura del objetivo de la
penetración por la fuerza que inicialmente constituyó el ataque principal.
Es por ello que deben existir planes para pasar rápidamente la reserva
através del escalón de ataque y tomar a su cargo la conquista del objetivo.
La explotación que frecuentemente sigue al éxito de la penetración podrá
ser realizada por la misma fuerza que ejecutó ésta o tomarla a su cargo el
escalón superior.
Los blindados y las fuerzas mecanizadas o motorizadas son especialmente
aptos para conquistar el objetivo y realizar la subsiguiente explotación. Esta
explotación puede incluir el envolvimiento y destrucción de las fuerzas
enemigas o la conquista de puntos claves y profundos en su retaguardia.

- Penetraciones Múltiples

Las Grandes Unidades pueden iniciar un ataque lanzando simultáneamente


dos o más penetraciones convergentes contra puntos débiles del frente
enemigo. El aislamiento de defensas enemigas extremadamente fuertes a
menudo es facilitado por este método de ataque. Las tropas que mantienen
las regiones fuertemente defendidas son fijadas inicialmente por los ataques
secundarios.
Página 96 de 360
Cuando los ataques múltiples han avanzado suficiente, las fuerzas enemigas
sobrepasadas son reducidas y los ataques de penetración se unen en un
único ataque principal. Los principios aplicables a una sola penetración
rigen la organización y conducción de la penetración múltiple.

4.5.4.5.5 Ataque frontal

Frecuentemente es necesario atacar al Enemigo enfrentando sus defensas


preparadas. Mientras que la penetración tiene por finalidad romper la
posición del enemigo, el ataque frontal se emplea para mantener una presión
continua a lo largo de todo el frente o para pasar sobre una fuerza enemiga
más débil.
Puesto que raramente es posible ejercer una presión suficiente sobre un gran
frente como para arrollar al enemigo por los medios convencionales, los
ataques frontales generalmente se reducen a ataques secundarios con el
objetivos principal de mantener la presión y evitar así el desenganche del
enemigo. Los ataques frontales a menos que cuente con una potencia
relativa de combate muy favorable, rara vez son decisivos; por consiguiente

Página 97 de 360
pocas veces se justifica su adopción como ataque principal, en lugar de otras
formas de maniobra más decisivas y menos costosas.

4.5.4.6 Planificación, preparación y ejecución del ataque.

Al recibir la Unidad una misión, su Comandante expide una orden


preparatoria a sus subordinados prepara una apreciación de situación,
identifica las tareas requeridas para cumplir la misión que le ha sido asig-
nada y en la mayoría de los casos, traduce esta misión en objetivos
específicos cuya conquista puede permitirle controlar una determinada
área o derrotar al enemigo.

4.5.4.7 Principales elementos a tener en cuenta para la planificación del


ataque.

Página 98 de 360
4.5.4.7.1 Misión

Es el factor primordial en la realización de las Apreciaciones y


consecuentemente del Plan de la operación.
Los elementos integrantes de ambos deben ser continuamente
relacionados con la misión para constatar si contribuyen a su
cumplimiento.
La misión, en cualquier operación ofensiva, puede imponer conquistar
una zona, capturar una fuerza enemiga o destruirla. A efectos de facilitar
el planeamiento, la coordinación y el control, la misión normalmente es
materializada en determinados objetivos del terreno (excepcionalmente
tropas), cuya conquista permiten el control de la zona o facilitan la
destrucción de la fuerza enemiga.

4.5.4.7.2 Enemigo

Normalmente, el defensor intentará cubrir su posición principal y engañar


al atacante con respecto a su dispositivo por el empleo de fuerzas de
cobertura. Es de importancia primordial un reconocimiento cuidadoso y
agresivo de la posición enemiga y del terreno al frente por fuerzas de
seguridad adelantada.
Este reconocimiento busca obtener indicios de la posición del enemigo.
Un sistema bien organizado de fuegos defensivos, campos minados
extensos, fortificaciones, barreras y alambradas son indicios seguros de
que la posición principal enemiga ha sido alcanzada.
Si las agencias de reconocimiento aéreo y terrestre fracasan en establecer
definitivamente estos indicios, se hace un reconocimiento en fuerza para
comprobar la fortaleza de la posición enemiga, para empujar las fuerzas
de cobertura enemiga y conquistar el terreno que permita el conveniente
despliegue de la unidad y proporcione adecuada observación de la
posición de resistencia enemiga.
Las tropas de vanguardia se establecen sobre puntos ventajosos del
terreno y cubren la preparación para el ataque.
Deben haber planes para proteger a los elementos adelantados contra
posibles contraataques. Estos planes incluyen medidas para el apoyo de
fuego y otras acciones de los elementos del grueso, los que deben estar
ubicados a distancia de apoyo.
La mayor parte posible de la Unidad se mantiene pronta, fuera del
alcance de los fuegos de apoyo enemigos.
El esfuerzo de información es dirigido a obtener la más completa
información como base para el plan de ataque.

Página 99 de 360
Los reconocimientos terrestres y el patrullaje son intensificados para
localizar los flancos de la posición enemiga, determinar sus puntos
débiles e identificar Unidades.
La búsqueda de informes incluye las avenidas de aproximación más
favorables hacia y dentro de la posición enemiga; naturaleza y valor de
los obstáculos; la ubicación, extensión y tipo de campos minados; la
ubicaciones y características de las fortificaciones, áreas contaminadas,
posiciones de Artillería y morteros enemigos y la ubicación de instalacio-
nes de Comando.
Deben buscarse sin descanso las peculiaridades y debilidades del
enemigo a fin de determinar donde un atacante podrá lograr el éxito. Se
deben buscar avenidas de aproximación cubiertas y protegidas que
conduzcan al punto vulnerable del enemigo.
La ubicación de concentraciones de tropas y de puntos débiles en la
posición enemiga es de vital importancia. El conocimiento del dispositivo
enemigo influye entre otros factores en la selección de la forma de
maniobra ofensiva a ejecutar y en la organización para el combate a
adoptar. El conocimiento además de los procedimientos, posibilidades y
vulnerabilidades del Enemigo permitirá a un Comandante determinar con
más exactitud las ventajas y desventajas de cada línea de acción.

4.5.4.7.3 Terreno

El terreno debe siempre ser considerado teniendo en cuenta la misión y el


escalón considerado.
Las necesidades particulares de cada escalón de Comando determinarán
los más importantes aspectos del terreno. La necesidad de un apoyo
administrativo continuo puede destacar la importancia de los centros de
comunicaciones redes de caminos y ferroviarias, y frecuentemente vías
fluviales. La presencia de barreras principales tales como ríos y lagos,
montañas o grandes montes y pantanos pueden influenciar en la
conducción de una campaña entera, aspectos críticos del terreno para una
Unidad, pueden no ser tenidos en cuenta por una Gran Unidad.
En el ataque, el aprovechamiento correcto del terreno incrementa el
efecto de los fuegos y disminuye las bajas. Las alturas dominantes
constituyen el esqueleto del sistema de observación.
Los corredores y sistemas de alturas y valles que conducen al interior de
la posición enemiga, forman avenidas naturales de aproximación por las
cuales los ataques son conducidos más fácilmente. Las tropas que usan
valles como avenidas de aproximación hacia la posición enemiga deben
ser protegidas con un control simultáneo de las crestas adyacentes. Por
otro lado, los compartimentos transversales, los sistemas de alturas y

Página 100 de 360


valles paralelos al frente, constituyen obstáculos para la progresión del
ataque y son líneas naturales de resistencia para la defensa.

- Frente y Profundidad.

Frente es la dimensión del terreno que enfrenta al enemigo, asignada o


deducida para el accionar de una Unidad. la profundidad es el espacio
desde el frente a la Retaguardia.
Las Unidades se disponen en el sentido del frente y de la profundidad
para dar flexibilidad y continuidad al ataque, proporcionar seguridad y
engañar al enemigo.
El frente asignado a una unidad en la planificación esta basado en la
misión, sus efectivos de infantería o blindados, su movilidad, la
disponibilidad de fuego de apoyo, el terreno, la resistencia calculada del
enemigo y el grado de protección de sus flancos. Por una parte, el frente
debe permitir suficiente espacio de maniobra para los elementos
subordinado por otro lado, no debe ser tan extenso como para requerir
distracción de fuerzas considerables para mantener partes del frente,
mientras se está atacando en otros puntos.
Las fuerzas raramente se distribuyen con uniformidad a lo largo del
frente.
Las unidades generalmente combaten sobre diferentes ejes o direcciones
determinados principalmente, por la ventaja ofrecida por el terreno, y con
intervalos entre ellos.
La profundidad es lograda por la formación en columna o en escalón.
Tales formaciones facilitan la maniobra por unidades tácticas completa,
permiten reacciones rápidas para despliegues en la zona de acción y son
particularmente apropiadas en situaciones inciertas.

4.5.4.7.4 Medios disponibles

El número y tipo de fuerzas de que se dispone, su movilidad relativa, su


capacidad para preservar la potencia de combate para aplicarla en el lugar
y en el momento decisivos, y su potencia de fuego, son factores que
necesitan ser tomados en cuenta.
Deben aprovecharse las características tácticas de las armas combinadas.
La Infantería puede abrir avenidas de aproximación o ejes de progresión
para las fuerzas blindadas y mecanizadas, al atacar con mal tiempo o
penetrar las defensas antiblindajes. Las Unidades aerotransportadas y
aeromóviles pueden conquistar objetivos en profundidad, para bloquear a
las reservas enemigas y dominar puntos de concentración impuestos por
el terreno.
Página 101 de 360
Las Unidades mecanizadas y blindadas pueden usar brechas para
moverse rápidamente y desorganizar la defensa en profundidad. La
Artillería de campaña y antiaérea y las Unidades de Ingenieros,
desempeñan un papel crítico y deben ser usadas en apoyo de todos los
elementos de la fuerza atacante. Los medios de la Fuerza Aérea Táctica
en apoyo directo, deben atacar el mayor número posible de blancos
terrestres.

4.5.4.8 Medidas de Coordinación y Control.

El Comandante es responsable de la coordinación de la acción de todos


los elementos bajo su comando. Es directamente responsable de la
coordinación de los fuegos de apoyo y de los movimientos de la unidad,
asegurando así, la unidad de esfuerzo.
La orden de ataque es expedida basada en la decisión y plan del
Comandante.
Esta orden incluye las medidas necesarias para la coordinación y control
del ataque. La coordinación se mantiene por visitas de Comando y Estado
Mayor a las unidades subordinadas para verificar si las órdenes han sido
entendidas y se están llevando a cabo de acuerdo a las precisiones del
Comandante.
La dirección centralizada facilita las operaciones promoviendo la unidad
de esfuerzo y una mejor coordinación. Por lo tanto, los Comandantes se
esfuerzan por retener el control centralizado de los principales elementos
subordinados. La retención de medios para influir en el combate debe ser
llevada cabo sin sacrificar las reacciones instantáneas e inteligentes de los
subordinados.
Cuando un comando no puede ejercer una influencia directa y oportuna
sobre una operación, sin vacilar, debe descentralizar el control de sus
elementos principales y depender de la iniciativa y juicio de sus
comandos subordinados.
Esto requiere un mayor grado de coordinación, debiendo el Comandante
recobrar el control de sus principales elementos subordinados lo antes
posible.
En el ataque, las órdenes prescriben medidas que permiten al
Comandante ejercer el control y efectuar las coordinaciones necesarias.
Las principales medidas son: objetivos, zona de acción, línea de partida,
hora de ataque, direcciones de Ataque, zonas de reunión y los
procedimiento para el control de los fuegos. Todas las unidades en
algunas ocasiones y las Unidades blindadas normalmente a causa de sus
características, emplean medidas de control complementarias, tales como
los ejes de avance, rutas de avance, líneas de coordinación, puntos de
control y posiciones de ataque.
Página 102 de 360
4.5.4.8.1 Objetivo

Un objetivo puede ser un aspecto característico del terreno, una localidad


o una fuerza enemiga. En la ofensiva, un objetivo es por lo general un
accidente crítico del terreno.
Dependiendo del escalón, pueden serlo: alturas dominantes, centros
industriales, centros de comunicaciones, desfiladeros tales como pasos o
puentes, o cualquier otra área en la retaguardia enemiga por cuya
posesión se obtenga una señalada ventaja. Las fuerzas enemigas
normalmente no son consideradas como objetivos, pero pueden serio en
la explotación o persecución donde tales fuerzas, moviéndose, dificultan
el seleccionar objetivos de terreno en relación a ellas.
Aún en estos casos el Comando Superior integra los esfuerzos de una
Unidad de captura con otras Fuerzas para asegurar que la conquista de
objetivos sean explotadas al máximo a fin de destruir la mayor parte de
las Fuerzas del Enemigo.
La conquista de los puntos críticos del terreno constituye raramente la
única misión; normalmente hay tareas implícitas o inherentes cuya
realización es facilitada por la captura del terreno. Puede haber
excepciones para los altos escalones donde las misiones asignadas tienen
normalmente como único propósito la conquista de áreas estratégicas.
Los objetivos seleccionados constituirán la base para la determinación del
esquema de maniobra. Son considerados en relación a las características
de la zona de operaciones, a la situación del enemigo y las fuerzas
amigas, a la potencia relativa de combate y a las posibilidades del
enemigo.
Estos factores una vez analizados en su interrelación indican las
probables líneas de acción.
En cierto sentido los objetivos físicos son medidas para el control del
movimiento.

Ellos son seleccionados de manera que su posesión, completa una faz


intermedia significativa en la destrucción de la fuerza enemiga. Solo se
asignan objetivos intermedios cuando ello contribuya al cumplimiento de
la misión, facilite la ocupación del objetivo final o asegure el control de
la fuerza de maniobra. La asignación innecesaria de objetivos intermedios
solo contribuye a retardar la progresión del ataque lo cual se traduce en
alto costo, tanto en personal como en material.

Objetivo

Los objetivos, deben tener las siguientes características:


Página 103 de 360
- Su captura debe ser posible dentro de los límites de tiempo y espacio
impuestos para la misión.
- Deben ser fáciles de identificar.
- Su conquista debe facilitar operaciones futuras.
- Los objetivos asignados a los elementos subordinados de la Fuerza
atacante deben permitir obtener el máximo de unidad de esfuerzo.
- Su conquista debe obligar al enemigo a evacuar su posición o arriesgar
su destrucción en ella.

4.5.4.8.2 Zona de Acción

El Comandante coordina el ataque de las unidades subordinadas


asignándoles zonas de acción que limitan su movimiento lateral. Estas
zonas, puede ser alteradas para hacer frente a una situación táctica
cambiante. A la unidad que opera en un flanco expuesto, normalmente no
se le asigna límite en ese flanco.

Características de la Zona de Acción

Una zona de acción debe:


- Incluir un frente de acuerdo con la idea de maniobra del Comandante y
con las posibilidades de la Unidad a la cual ha sido asignada.
- Extenderse como mínimo desde antes de la línea de partida, hasta más
allá del objetivo (hasta la profundidad necesaria para coordinación de
los fuegos de apoyo requeridos para la conquista y consolidación de
ese objetivo).
- Siempre que sea posible, incluir en forma completa los puntos críticos
importantes del terreno y las avenidas de aproximación hacia ellos.

Límites de una Zona de Acción

En grandes unidades, las zonas de acción normalmente son definidas


designándolas por sus limites laterales. Estos límites deben ser fácilmente
identificables en el terreno.
Cuando grandes agrupamientos tácticos estén separados inicialmente por
amplios intervalos, la designación de un límite entre ellos debe ser
postergada hasta una fase más avanzada de la acción. En tales situaciones
el control lateral puede ser efectuado por asignación de ejes de avance.
Los límites no constituyen barreras. Para aprovechar los itinerarios
favorables de aproximación, las Unidades pueden ser autorizadas a
moverse temporalmente en zonas adyacentes previa coordinación con los
Comandantes interesados.

Página 104 de 360


Tales movimientos, no deben interferir con la acción de las Unidades
adyacentes ni producir una peligrosa aglomeración de tropas. Las zonas
de acción normalmente se aplican a los escalones de ataque y no deben
restringir el emplazamiento y movimiento de la artillería y otras armas de
Apoyo con tal que la coordinación se haya efectuado previamente.
Si se desea que una unidad adyacente preste apoyo a otra en el Ataque,
éste, debe ser claramente establecido.

4.5.4.8.3 Línea de Partida

La línea de Partida es la línea desde la cual las tropas parten al ataque


cruzándola a la hora establecida. El propósito de la línea de Partida es la
progresión coordinada del escalón de ataque a fin de que sus elementos
tomen contacto con el enemigo en el orden y momento deseados, lo que
facilita la coordinación de los fuegos.
Esta línea debe ser fácilmente reconocible en el terreno y generalmente
perpendicular a la dirección de ataque. Basado en la idea de maniobra,
puede ser necesario o deseable, asignar líneas de partida separadas y
horas de ataque diferentes a las distintas unidades de ataque. La línea de
partida debe estar controlada por fuerzas amigas y tan cerca de las
posiciones enemigas como sea posible.

4.5.4.8.4 Dirección de Ataque

Cuando el Comandante desea que una Unidad subordinada conduzca su


ataque principal en una dirección específica dentro de su zona de acción,
así lo indica asignando una dirección de ataque. A causa de su naturaleza
restrictiva, el Comandante, designa una dirección de ataque únicamente
cuando las circunstancias lo impongan.

4.5.4.8.5 Hora de Ataque.

La hora de ataque es la hora en la cual la línea de partida debe ser cruzada


por los primeros elementos del escalón de ataque.
Es determinada después de haber considerado el tiempo requerido por lo
comandos para hacer los reconocimientos necesarios, preparar planes y
emitir órdenes, el tiempo para que las unidades coordinen sus planes y el
necesario para que el escalón de ataque organice su ataque y se mueva
hacia la línea de partida.
El evitar marcar horas de ataque estereotipadas contribuye a la sorpresa y
a impedir la ejecución de la contra preparación del enemigo. Los ataques
de los elementos subordinados pueden estar escalonados en cuanto al

Página 105 de 360


tiempo para despistar al enemigo y a la vez permitir el traslado de los
fuegos de apoyo a escalones de ataque sucesivos.
Los ataques simultáneos proporcionan un máximo de potencia en la fase
inicial del ataque e impiden la concentración de fuegos enemigos que
puedan ser dirigidos contra ataques sucesivos.
Los ataques diurnos, normalmente se basan en superioridad aérea, de
artillería y blindados.
Los ataques en períodos de visibilidad reducida aumentan el efecto
psicológico del ataque y limitan las ventajas de la observación enemiga,
pero son más difíciles de controlar, por los que se conducen contra
objetivos limitados.

4.5.4.8.6 Ubicación de zonas de Reunión

La ubicación adecuada de las zonas de reunión es una importante medida


de control. Las situaciones claras favorecen la elección de las zonas de
reunión bien adelantadas. La oscuridad permite cubrirse del fuego
enemigo y del ataque aéreo. Aunque las Unidades blindadas, motorizadas
y mecanizadas pueden completar su despliegue y preparativos para el
combate a distancias mayores del frente enemigo que las unidades menos
móviles, sus zonas de reunión deben estar tan próximas al enemigo como
el terreno y la actividad del mismo lo permita y cerca de buenas avenidas
de aproximación hacia sus posiciones de ataque.
Las zonas de reunión y/o posiciones de ataque de las unidades atacantes
están separadas por un intervalo suficiente para impedir interferencias. Se
debe evitar la congestión en las zonas de reunión y ellas deben ser
ocupadas el mínimo de tiempo.

4.5.4.9 Distribución de Fuerzas

4.5.4.9.1 Ataque principal

El Ataque principal conquista el objetivo principal o destruye la fuerza


enemiga. Los ataques principales se caracterizan por potentes
concentraciones de fuego acompañados por rápidos y decididos avances.
El ímpetu del ataque se mantiene hasta que el objetivo final sea
conquistado. Tales acciones requieren un fuerte apoyo y un
escalonamiento de reservas comparativamente profundo siendo más
viables sobre frentes relativamente estrechos. Cuando el terreno, las
condiciones meteorológicas y la situación lo permitan, los blindados
empleados en masa son apropiados para este rol.
Se requiere un cuidadoso análisis para determinar la misión del ataque
principal.
Página 106 de 360
Este ataque, puede simultáneamente conquistar el objetivo principal y
destruir la fuerza principal enemiga, aunque lo más frecuente es que estas
dos tareas deban efectuarse consecutivamente. Una vez que se ha
decidido la misión del ataque principal se determina la distribución de las
fuerzas.
Normalmente, el ataque principal debe conquistar lo antes posible terreno
dominante, se le asigna la avenida de aproximación que ofrece mas
garantías para el cumplimiento de la misión seleccionada de modo que el
éxito del ataque principal no dependa solamente del éxito de los ataques
secundarios.
La mayor parte del apoyo de combate y de Servicio es dispuesto en favor
del ataque principal a fin de emplear y mantener la máxima potencia de
combate en el punto decisivo. Se toman providencias para un rápido
refuerzo en el caso de sucesos imprevistos, resistencias enemigas
inesperadas o debilitamiento de la fuerza de ataque principal.
Los escalones de ataque una vez lanzados a la acción pierden su
inmediata disponibilidad para la ejecución de otras misiones. Por lo tanto,
cuando es imposible determinar inicialmente cuándo o dónde se ha de
efectuar el ataque principal el Comandante retiene la libertad de acción
mediante la distribución de sus fuerzas en profundidad, mantenimiento de
reservas potentes y el control centralizado de sus armas de apoyo.
Sin embargo, una vez lanzado, debe ser dirigido sin demora hacia su
objetivo. Las acciones del enemigo, los pequeños cambios en la situación
o los reveses de otros elementos no deben distraer sus fuerzas.

4.5.4.9.2 Ataque secundario

Por razones de economía el máximo de potencia de Combate, no puede


ser empleado simultáneamente en todo el frente. Así generalmente a los
ataques secundarios se les asigna zonas de acción más amplias que al
ataque principal, con la consiguiente reducción de apoyos, fuerzas y
profundidad de reservas, sin por ello dejar de representar similar amenaza
que aquel.
Para compensar esta falta de medios es esencial un fuerte fuego de apoyo
inicial. La flexibilidad de los fuegos de apoyo les permite frecuentemente
apoyar un Ataque secundario contra un objetivo limitado sin
interferencias con el subsiguiente apoyo al ataque principal.
Los ataques secundarios existen únicamente para auxiliar al ataque
principal. La misión de la fuerza de ataque secundario debe establecer
claramente como prestar esta ayuda.
Muy frecuentemente los ataques a objetivos limitados, ejecutados
decididamente, auxiliarán mejor al ataque principal conquistando el
terreno crítico, impidiendo el desenganche del enemigo, engañándolo
Página 107 de 360
sobre la localización del ataque principal, forzándolo a emplear
prematuramente sus reservas en un lugar no decisivo y evitando que
refuerce el frente sobre el ataque principal. Las demostraciones, los
ardides y el uso efectivo de barreras pueden servir para realizar alguno de
los propósitos citados. Cuando las fuerzas de que se dispone son
insuficientes para lanzar ataques secundarios potentes, las unidades
mecanizadas y blindadas son apropiadas para estas últimas tareas por su
potencia de fuego y alto grado de movilidad.

4.5.4.9.3 Reserva

Una vez que se lanza el ataque, la reserva es uno de los principales


medios del Comandante para influir en la acción y obtener una decisión
favorable.
Es empleada para explotar el éxito del ataque, reforzar el ataque principal
y proporcionar seguridad adicional.
Con frecuencia, la mayor dificultad y decisión más importante del
Comandante concierne al momento, lugar y circunstancia de empleo de
la reserva.
En el momento decisivo toda unidad debe participar en el combate, y la
reserva es empleada sin vacilación. Una vez que la reserva es empleada,
se debe hacer todo el esfuerzo posible para constituir otra con tropas que
en el curso de la acción hayan quedado disponibles.
Normalmente la reserva debe contar con la mayor cantidad de las
siguientes características: movilidad, rapidez, potencia de fuego y
blindaje, lo que facilitará su empleo.
El efectivo y composición de la reserva variará con la misión, las fuerza
disponibles, el tipo de maniobra, el terreno, la posible reacción del
enemigo y la claridad de la situación.
La reserva debe ser lo suficientemente grande como para explotar hasta el
objetivo final, pero no se constituirá debilitando al ataque principal.
Cuando la situación es relativamente clara y las posibilidades del
enemigo son limitadas, la reserva puede estar integrada por una pequeña
fracción de la unidad.
Cuando la situación es indeterminada la reserva puede componerse
inicialmente del grueso de la Unidad, preparada para emplearse en
cualquier punto.
Las unidades blindadas son retenidas inicialmente en reserva,
especialmente cuando las defensas antitanques son fuertes, el enemigo
tiene una gran fuerza blindada disponible o cuando se prevé una
explotación profunda.
La retención habitual de todos los blindados en reserva es raramente
justificada.
Página 108 de 360
En grandes unidades las reservas deben ser móviles asignándoles los
medios de transporte necesarios:
Las reservas se ubican:
- Para favorecer el esfuerzo principal.
- Para proporcionar seguridad a la Unidad.
- En regiones provistas de protección máxima contra observación y
fuego enemigo.
- Sobre o cerca de redes de caminos que faciliten el rápido movimiento
hacia los puntos de probable empleo.

Frecuentemente, es necesario usar las reservas para proteger los flancos


del ataque principal de los contraataques enemigos. Si la acción puede ser
prevista, las reservas son ubicadas para moverse rápidamente a las áreas
amenazadas mientras el ataque principal prosigue directamente al
objetivo.

4.5.4.9.4 Apoyo de fuego

Junto con la reserva, el apoyo de fuego se convierte en uno de los medios


esenciales a disposición del Comandante para influir en la acción. Los
Comandantes deben asegurarse que los subordinados dispongan de una
potencia de fuego suficiente para apoyar adecuadamente sus elementos de
maniobra. Por el mantenimiento de la mayoría de su fuego de apoyo bajo
control centralizado, el Comandante asegura su empleo en masa y su
coordinación con las fuerzas de maniobra.
No obstante, el exceso de centralización del control de fuegos de apoyo
puede ocasionar demoras en el desencadenamiento, reduciendo su
efectividad.
El fuego de apoyo depende de un adecuado abastecimiento de munición.
Cuando sea necesario establecer prioridades, la munición es distribuida
en beneficio del ataque principal.

4.5.4.9.5 La defensa antiaérea en la Ofensiva

Normalmente en toda operación ofensiva, se hace necesario contar con


superioridad aérea local como mínimo. La misma se logra no sólo con las
Operaciones que ejecuta la Fuerza Aérea, sino también con una activa y
preponderante acción de la ADA.
Toda Operación Ofensiva lleva implícita por sus características y la
finalidad perseguida, el concepto de movimiento de las Fuerzas que la
ejecutan circunstancia esta, que puede dificultar la adopción de ciertas
medidas de DAA pasiva, fundamentalmente el camuflaje.

Página 109 de 360


En el empleo de los medios de ADA, además de la protección que
normalmente prestan a los puestos de comando, posiciones de artillería,
unidades blindadas, reservas e instalaciones logísticas, es necesario tener
en cuenta el apoyo a brindar previo a la iniciación del ataque, ya que la
reunión de los efectivos que participarán, es un momento crítico, por la
vulnerabilidad que presenta para un ataque aéreo enemigo. Asimismo,
debe preverse el empleo de los medios de ADA que deben acompañar a
las Fuerzas durante la ejecución del Ataque.

4.5.4.9.6 Uso de Medios Aéreos

Las misiones de reconocimiento armado para localizar


y atacar objetivos terrestres son particularmente
efectivas, al menos para el retardo inicial de
grandes fuerzas enemigas. Las misiones de
reconocimiento aéreo constituyen también una
importante medida de seguridad.

4.5.4.9.7 Seguridad

El éxito de la ofensiva depende en gran parte de la acción adoptada para


proteger a la unidad contra una reacción por parte del enemigo.
Los flancos expuestos son sumamente vulnerables. La mejor protección
es mantener al enemigo tan empeñado que no le quede tiempo ni medios
para poner en peligro el éxito del ataque. La seguridad en la ofensiva se
logra por la oportuna y agresiva búsqueda de informes, una apropiada
diseminación de la información resultante, el uso de fuerzas de seguridad
de gran movilidad y potencia de combate, el uso efectivo de barreras, la
adopción de formaciones flexibles v la ubicación central, en cuanto a
tiempo y lugar de reservas móviles. Las operaciones en frentes muy
extendidos no sólo dificultan el apoyo mutuo sino también la seguridad
entre los distintos elementos.
En las operaciones ofensivas, la mayoría de los medios disponibles,
antiaéreos y antitanques, se disponen en beneficio del ataque principal.
Las medidas activas de defensa contra ataques aéreos se complementan
con medidas pasivas incluyendo cubiertos y abrigos, dispersión y
movimientos nocturnos.
Los medios activos de defensa antitanque se complementan con
obstáculos naturales y artificiales, incluyendo minas, para proteger los
flancos y retaguardia de la unidad.
Las armas antitanques de cada escalón se disponen para proteger las vías
de aproximación más favorables para las unidades blindadas enemigas.

Página 110 de 360


4.5.4.9.8 Tiempo Disponible.

El atacante debe tomarse el tiempo necesario para cerciorarse que su


operación este debidamente sincronizada y que pueda concentrar en el
ataque todo el poder de combate de su Unidad. Es preciso hacer una
importante distinción entre prisa y rapidez. Se actúa apresuradamente
cuando se empeñan las tropas sin haber hecho el reconocimiento de rigor
ni los arreglos para el fuego de apoyo, particularmente cuando se actúa
antes de que todas las fuerzas disponibles hayan sido movilizadas.
Se adquiere rapidez haciendo el reconocimiento necesario, disponiendo
oportunamente del apoyo de Artillería y Fuerza Aérea Táctica y
colocando a todo el personal en el lugar adecuado antes de lanzar el
ataque, con un plan predeterminado que reduzca a un mínimo el tiempo
en que las tropas se encuentran en zonas posibles de recibir fuego
enemigo.
Aún después de empezado el ataque, el tiempo continúa siendo crítico. El
ataque puede tener éxito solamente, si el atacante alcanza su objetivo
antes de que el defensor recobre su serenidad, identifique la amenaza y
concentre sobre ella la fuerza de sus efectivos y armas. El tiempo, pues,
es vital para el atacante, quien debe prolongar la sorpresa, confusión y
desorganización del enemigo tanto como sea posible.

4.5.4.10 Planificación del ataque

Los Comandantes en lo posible utilizarán órdenes tipo


misión para describir claramente su intención, la
misión general de la fuerza, su concepto sobre la
operación y la misión de sus subordinados. Las
restricciones impuestas a los Comandantes
subordinados deben mantenerse a un mínimo.
Para no tener que realizar una pausa en la progresión ni perder ímpetu, el
Comandante debe siempre estar listo para la explotación; preparado para
luchar hasta eliminar toda resistencia enemiga y explotar cualquier éxito.
El plan debe facilitar la rápida dispersión de las Unidades que se
encuentran concentradas y la introducción de fuerzas descansadas para
explotar el éxito.
Después de seleccionar los objetivos, el Comandante desarrolla el
esquema de maniobra, asigna las fuerzas disponibles y hace los planes de
apoyo de fuego, apoyo de combate y apoyo de servicio de combate.
El esquema de maniobra, busca situar a las fuerzas atacantes en
posiciones que aventajen a las del enemigo y posibiliten tomar contacto
rápidamente con el mismo, para desorganizarlo o destruirlo. El ataque

Página 111 de 360


puede estar dirigido contra el frente, el flanco o la retaguardia del
enemigo y puede ser por tierra, por aire o por tierra y aire.
El esquema de maniobra estipula donde se va a hacer el esfuerzo
principal. Todos los recursos disponibles de la fuerza deben entrar en
juego en una forma sincronizada, para asegurar su éxito, aunque debe
evitarse dedicarle inicialmente tantos recursos y atención, que
imposibiliten aprovechar otras oportunidades. Se deben abandonar
ataques fallidos y explotar cualquier éxito inesperado o errores del
enemigo. En algunos casos, la situación puede ser tan incierta que no se
designe inicialmente ningún ataque principal.
Puede facilitarse el ataque principal mediante la ubicación de las reservas
la asignación de menores frentes, la asignación de mayor medios,
prioridades de fuego o mediante una combinación de medidas. El ataque
principal recibe prioridad en la asignación de apoyos. El plan de
operaciones profundas y operaciones de retaguardia también buscan
propiciar el éxito del ataque principal.
El Comandante influye en la batalla trasladando sus reservas, Artillería,
Ingenieros y medios de guerra electrónica y el apoyo de la Fuerza Aérea
Táctica durante el ataque. La reserva, sin embargo, es el principal
instrumento de que dispone el Comandante para encauzar la batalla.
La reserva acentúa o aprovecha el éxito en el ataque o mantiene el
ímpetu. Se prepara para un número de contingencias específicas, que
pueden ocurrir durante el ataque. Se coloca cerca del área en que se
espera va a emplearse y cambia de posición si ello contribuye a acelerar
su reacción.
Sus efectivos y composición varían según la misión, las fuerzas
disponibles, el tipo de operación ofensiva, la forma de maniobra, el
terreno, la posible reacción enemiga y la situación.
Cuando la situación es relativamente clara y las posibilidades enemigas
limitadas, la reserva puede ser pequeña. Cuando la situación parece
incierta, el atacante debe llevar en el primer escalón de su dispositivo
fuerzas de reconocimiento y conservar su libertad de maniobra hasta
descubrir una brecha, un blanco o una debilidad enemiga. Cuando la
situación es tan incierta que se hace necesario aclararla antes de que el
Comandante decida cual va a ser su esfuerzo principal, se mantendrán los
mejores en reserva.
Los Comandantes preparan un plan de apoyo de fuego que facilite y
complemente el plan de maniobra. El plan de apoyo de fuego dispone el
apoyo a la organización.
Las operaciones profundas deben estar sincronizadas con el esquema de
maniobra. Estas operaciones apoyan las acciones ofensivas tácticas
negándoles a los refuerzos del enemigo acceso al campo de batalla,

Página 112 de 360


contraatacando sus reservas, entorpeciendo el mando y control de sus
Armas combinadas o destruyendo y debilitando su logística.
Las reservas enemigas, sus elementos de apoyo de fuego puestos de
comando y otros recursos de alto valor, son blancos sumamente lucrati-
vos para el ataque.
Estas operaciones profundas buscan:
- retardar la reacción del enemigo.
- impedir sus refuerzos.
- proteger del contraataque.
- desorganizar el apoyo de fuego, la defensa antiaérea y el apoyo
logístico.

Las Unidades aerotransportadas y aeromóviles pueden desviar al


enemigo, confundirlo o tomar terreno clave, en lo profundo de su
retaguardia.
Las operaciones de retaguardia deben proporcionar fuerzas y otros
recursos para mantener la libertad de acción y la continuidad de las
operaciones durante y después de un ataque.

4.5.4.11 Preparativos del ataque.

El Comandante no debe dedicarle a la planificación y la expedición de


órdenes, más de la tercera parte del tiempo disponible para los
preparativos. A los subordinados, se les debe dar suficiente tiempo para
llevar a cabo el reconocimiento y la coordinación de rigor y para cumplir
con los procedimientos de conducción de tropas en todos los niveles. Las
órdenes preparatorias son vitales en la preparación del ataque.
Las órdenes de ataque incluyen medidas para la coordinación y control de
las operaciones; las que deben describir e ilustrar el concepto de las
operaciones. Como mínimo, deben incluir líneas de coordinación, puntos
de coordinación, puntos de control, puntos de enlace y líneas de
coordinación de apoyo de fuegos.
Siempre que pueda, el Comandante debe expedir sus órdenes
personalmente. Los Comandantes subordinados deben saber lo que se
espera de la totalidad de la fuerza, lo que se espera de ellos y lo que se
espera de los Comandantes de las Unidades adyacentes y de apoyo. Los
Estados Mayores y los Comandantes subordinados deben disponer de la
información pertinente y con tanto tiempo de anticipación como sea
posible para preparar sus planes.
La coordinación empieza al recibirse la misión y continúa durante toda la
operación.
El Comandante debe integrar los planes de apoyo, con los planes tácticos
en la etapa preparatoria.
Página 113 de 360
En la ofensiva, las instalaciones de apoyo de servicio deben estar lo mas
cerca posible de las Unidades de maniobra que apoyan. Sólo los
elementos de apoyo de servicios que proporcionan apoyo esencial
(municiones y combustible, por ejemplo), deben movilizarse hacia
adelante antes del ataque. Si es posible, este movimiento debe ocurrir de
noche.
Justo antes del ataque, las Unidades ocupan rápidamente sus respectivas
posiciones de ataque.
La concentración de la fuerza debe relizarse rápidamente y haciendo
máximo uso de: cubiertos y abrigos, seguridad de las comunicaciones,
medidas de engaño y distracción, en procura de la sorpresa.
Todos los preparativos, se completan antes que las Unidades de primer
escalón ocupen sus zonas de reunión adelantadas o posiciones de ataque.
Aquellas acciones que puedan alertar al enemigo sobre la inminencia del
ataque, se realizan tan tarde como sea posible y con el máximo de secreto.
La preparación del ataque incluye el establecimiento de un apropiado
sistema de comunicaciones, la organización para el combate y la
distribución de los abastecimientos necesarios, particularmente
municiones y raciones. También, comprende las previsiones para la
prosecución de las operaciones, relevo de Unidades y evacuación de
PP.GG. , heridos, etc.
Deberán ajustarse al máximo las coordinaciones entre los participantes de
la maniobra ofensiva: UU. apoyadas y de apoyo; Artillería y Morteros
Pesados, Fuerza Aérea Táctica, etc.
Durante la preparación del ataque, las armas de apoyo actúan de la
siguiente manera:
- La Fuerza Aérea Táctica se emplea para ganar y mantener la
superioridad aérea y dificultar el movimiento de reservas y
abastecimientos del enemigo (aislar el campo de batalla).
- La Artillería tiene la misión de contribuir a la protección de la ZZ.RR
y a los desplazamientos hacia ellas. Se dará especial importancia a las
medidas que permitan obtener la sorpresa y la superioridad sobre la
Artillería enemiga. Los fuegos antes del ataque, deben estar de acuerdo
con las normas de fuegos establecidas por el Comandante del arma base.
El Comandante de las fuerzas involucradas en la operación deberá decidir
si se realizarán los fuegos de preparación. Para esto, debe considerar, la
localización oportuna de suficientes objetivos remunerativos, el tiempo
disponible, la pérdida de la sorpresa y la disponibilidad de municiones.

Página 114 de 360


4.5.4.12 Ejecución del ataque

4.5.4.12.1 Acciones preliminares

Movimiento hacia las zonas de reunión

Aún en una situación de movimiento un Ataque se organiza y coordina


mejor desde zonas de reunión. El grueso se mueve hacia las zonas de
reunión durante las operaciones preliminares.
Sucesivamente son asignadas a las Unidades componentes del escalón de
ataque zonas de reunión más avanzadas.
La posición de Ataque, es la posición oculta más avanzada disponible a
retaguardia de la línea de partida.
Deben tomarse precauciones para reducir al mínimo la
posibilidad de presentar un blanco
remunerativo. Estas precauciones incluyen,
ocultamiento, camuflaje, dispersión y
coordinación en el tiempo para mantener las
tropas y el material el mínimo de tiempo en la
posición de ataque.
Las unidades subordinadas son informadas de los itinerarios o zonas de
avance hacia las zonas de reunión, y las medidas especiales de seguridad a
ser tomadas. Se les da instrucciones para posteriores reconocimientos.
Durante el movimiento hacia las posiciones de ataque y la ocupación de las
mismas por unidades subordinadas, el comandante da los últimos detalles
para la ejecución del ataque. Los comandos del escalón de ataque y de las
Unidades de apoyo realizan la coordinación final.
Pueden autorizarse campos minados de protección si el tiempo lo permite
para aumentar la seguridad local de la zona de reunión, pero éstos, deben ser
levantados antes del ataque.
Los preparativos finales para el ataque se completan tan pronto como sea
posible antes que el escalón de ataque se mueva hacia sus posiciones. Estos
preparativos incluyen el reconocimiento, la planificación, informaciones
finales a la tropa y el movimiento hacia el frente del apoyo administrativo
necesario; el descanso, el reequipamiento y el abastecimiento de las
Unidades.
Para mantener el secreto, el movimiento hacia las posiciones de ataque es
realizado siempre que sea posible, bajo el cubierto de la oscuridad, humo u
otras condiciones que reduzcan la visibilidad. Puede emplearse fuegos para
cubrir el ruido del movimiento.
Cuando las Unidades blindadas están implicadas, sus característicos sonidos
son difíciles de ocultar; por consiguiente su movimiento hacia la posiciones
de ataque debe ser retardado hasta el último momento.
Página 115 de 360
Los movimientos de engaño realizados por blindados, anteriores al ataque,
molestarán al enemigo y lo engañarán respecto a la hora y lugar del Ataque.

Despliegue descentralizado

Cuando el Comandante decide la rapidez de la acción es esencial para


retener la ventaja táctica. En el caso del combate de encuentro, puede
prescindir de las zonas de reunión y descentralizar las operaciones para las
unidades subordinadas.
La planificación detallada y la adecuada utilización de las comunicaciones
reducen la necesidad de tal control descentralizado a situaciones muy
especiales.

4.5.4.12.2 Conducción

El ataque se caracteriza por el fuego, movimiento y acciona de choque


combinados y controlados para lograr una preponderancia en la potencia de
combate, culminando en la etapa final en un asalto poderoso y violento en el
punto decisivo.
Una vez que el ataque sea lanzado, la flexibilidad y la velocidad en el
empleo del poder de combate será de suma importancia. Si el avance se
retrasara en cualquier parte de la zona de acción, el centro de gravedad del
ataque, el esfuerzo, será desplazado rápidamente a otro lugar que ofrezca
mayores posibilidades de éxito. Durante la progresión del ataque, el
Comandante debe mantenerse continuamente informado de la evolución de
las acciones para estar en condiciones de intervenir en el combate según las
previsiones realizadas durante la planificación.
El ataque mantiene un impulso continuo y no se demora para mantener la
alineación de las unidades o para aferrarse estrictamente al plan de ataque
establecido. Una presión aplicada en forma constante (de día y de noche)
contra un enemigo debilitado, le niega posibilidades de recuperación, de
resarcir las pérdidas o la oportunidad de retomar la iniciativa.
El impulso del ataque será mantenido:
- mediante una adecuada y constante acción de comando
- un oportuno empleo de la reserva
- con la asignación de una nueva dirección de ataque a las fuerzas desde un
objetivo intermedio, cuando ello fuera necesario.
- eludiendo resistencias que no pueden ser fácilmente arrolladas o sean tan
fuertes que puedan interferir en el cumplimiento de la misión.
- por el desplazamiento oportuno de los elementos de apoyo de fuego

La continuidad del ataque se asegura por la planificación adelantada y la


oportuna ejecución de las siguientes acciones:
Página 116 de 360
- desarrollo del sistema de comunicaciones
- reabastecimiento de las Unidades atacantes
- relevo y reorganización de las Unidades en los objetivos intermedios
- control de civiles y evacuación de prisioneros de guerra, enfermos,
heridos y muertos.
- la dosificación adecuada de Ingenieros y otros servicios de apoyo.
Las armas de apoyo proporcionan continuidad al ataque desplazándose
hacia adelante por escalones. Los planes de fuego incluyen previsiones que
aseguren la defensa de los objetivos sucesivos para facilitar la pronta
reorganización y la continuación del ataque.
Cuando los fuegos de apoyo se levantan para permitir al escalón de ataque
tomar contacto con el enemigo, la falta de este apoyo debe ser compensada
por el aumento de fuegos de las armas orgánicas de tiro directo y el rápido
movimiento hacia el objetivo.
Los escalones de ataque avanzan hasta la distancia de asalto de la posición
enemiga bajo la protección de sus propios fuegos y de los fuegos de apoyo.
Cada unidad del escalón de ataque utiliza los fuegos de apoyo inmediato,
para facilitar el asalto a la posición enemiga y presionar sobre los objetivos.
Se alterna el fuego y el movimiento de manera que las unidades del escalón
de ataque progresan apoyadas por el fuego combinado de las unidades
adyacentes y de apoyo y que a la vez apoyen con su fuego el avance de las
adyacentes.
Los medios de apoyo de combate avanzan utilizando al máximo los
cubiertos y abrigos disponibles. Los elementos que integran el escalón de
ataque utilizan los fuegos de apoyo inmediato para facilitar el asalto a la
posiciones enemiga y presionar sobre los objetivos sucesivos. Se alterna el
fuego y el movimiento de manera que las unidades del escalón de ataque,
progresen apoyadas por el fuego combinado de las unidades adyacentes y de
apoyo y que a la vez apoyen con sus fuegos el avance de las adyacentes.

- El Asalto

Normalmente es necesario el asalto a una posición enemiga a fin de destruir


o desalojar al enemigo. Es ejecutado por pequeñas Unidades y bajo control
descentralizado. Durante el ataque el control puede ser progresivamente
descentralizado en los Comandantes subordinados a fin de permitirles
reaccionar más rápidamente a los cambios en la situación. Contra fuertes
resistencias y una defensa bien organizada, el Comandante prepara el asalto
concentrando los fuegos de apoyo para neutralizar el enemigo y desgastar
resistencia antes del lanzamiento del asalto.
Con la protección de los fuegos de apoyo, las unidades de asalto avanzan
tomando contacto con sus objetivos. Cuando los fuegos de apoyo se

Página 117 de 360


levantan, las unidades de asalto, ayudadas por la potencia de fuego y acción
de choque de los tanques, irrumpen sobre la posición enemiga.
Cualquier retardo en el lanzamiento del asalto después que los fuegos de
apoyo se levantan, facilita la reacción del enemigo.
En algunas situaciones, pueden aún emplearse los tanques operando bajo el
fuego de artillería para apoyar el avance de los otros medios de combate. Si
se dispone de tropas transportadas en vehículos blindados, las mismas
podrán desplazarse conjuntamente con los tanques, ya que los transportes
proporcionan relativa protección contra el fuego de artillería.
Cuando el viento es favorable, puede colocarse humo sobre la posición
enemiga para proteger el asalto y engañar al enemigo.
Cuando el asalto sigue rápidamente al levantamiento de los fuegos, el humo
normalmente permanecerá durante el breve período necesario para que las
tropas de combate aborden la posición enemiga.

- Continuación del Ataque

Después del asalto a una posición organizada, el ataque se transforma en


una serie de combates en toda la profundidad de la posición enemiga.
Estos combates son conducidos por los comandos subordinados dentro de
sus respectivas zonas de acción, apoyados por todos los medios a
disposición. La primera tarea es conquistar los objetivos asignados.
Las áreas de resistencia son reducidas por el fuego, asaltadas o desbordadas.
Aún contra resistencias débiles puede producirse confusión y pérdida de
control. En esta situación la Unidad es vulnerable al contraataque enemigo y
es fácil que se pierda la oportunidad de explotar un éxito inicial.

4.5.4.13 Medidas para la Defensa contra las Acciones de Contraataque.

Durante el progreso del ataque, los objetivos intermedios son rápidamente


organizados para su defensa. Los planes previstos para la reorganización y
reabastecimientos son puestos inmediatamente en ejecución. La Artillería
realiza concentraciones de fuego sobre las zonas de reunión y tropas
enemigas organizándose para el contraataque. La Reserva debe estar pronta
para proteger los flancos de las Unidades atacantes, para organizar el terreno
ocupado por ellas o para rechazar contraataques. Los campos minados de
protección pueden usarse para cubrir las avenidas de aproximación más
favorables al enemigo; si la detención es de cierta duración, los campos
minados deben ser más extensos.

4.5.4.14 Medidas para la continuación del Ataque

Página 118 de 360


El Comandante debe emplear su reserva en el momento y lugar decisivo
para mantener la presión sobre el enemigo y evitar así la estabilización de
la situación.
La Artillería concentra sus fuegos sobre las posiciones de retaguardia
donde el enemigo trata de reconstituir su defensa. Se desplaza hacia el
frente cuando sea necesario y cuando lo permitan las condiciones de las
vías de Comunicación, las posibilidades de mantener el abastecimiento de
munición y las relaciones del enemigo. Los cambios de posición deben
hacerse en el mínimo de tiempo porque reducen la disponibilidad de
fuegos de apoyo.
Puede ser ventajoso reagrupar las fuerzas de ataque durante el avance a
una nueva posición, y lanzar el ataque principal sobre otra parte del frente.
Se hace el mayor esfuerzo posible para explotar un debilitamiento de la
posición enemiga realizando un rápido y poderoso ataque antes que el
enemigo pueda reconstituir su defensa. Puede ser decisivo el uso de armas
de destrucción masiva de disponerse, combinado al mismo tiempo con una
acción de poderosas formaciones blindadas y apoyo aéreo.

4.5.4.14.1 Mantenimiento de la presión sobre el Enemigo

Normalmente, el enemigo tratará de mantener la posición hasta la noche y


efectuar su repliegue a favor de la oscuridad. Las tropas atacantes
mantienen la presión sobre el Enemigo, continuando el Ataque por la
noche.
Por estos ataques, se mantiene el contacto y el Enemigo es desequilibrado,
lo que hace su desenganche extremadamente dificultoso.
Si el enemigo tiene éxito en el desenganche y realiza acción retardatríz, el
Comandante intensifica los reconocimientos a fin de obtener los informes
necesarios para decidir que línea de acción le conviene adoptar.
El Ataque se continúa, concentrando el esfuerzo en una dirección decisiva,
en la que una conducción enérgica amenace aislar las principales fuerzas
enemigas y fuerce una anticipada evacuación de su posición. Esto podrá
impedir que el Enemigo reconstituya su defensa en una posición a
retaguardia, pero si no lo logra y este ocupa nuevas posiciones durante la
noche puede ser necesario demorar la reiniciación del ataque hasta que
amanezca.

4.5.4.14.2 Ruptura de la posición enemiga.

En caso de una ruptura las unidades blindadas y mecanizada o motorizada


penetran profundamente en la posición enemiga y atacan las reservas, la
Artillería y los centros de comando y comunicaciones del enemigo. La
brecha se ensancha, atacando sus flancos. Otras fuerzas móviles se
Página 119 de 360
orientan por la brecha para explotar la ventaja obtenida y para atacar al
enemigo a retaguardia e impedir que escape. En este momento, el máximo
esfuerzo Aéreo deber ser concentrado en apoyo de las fuerzas terrestres
que explotan la ruptura.

4.5.4.15 Varios

Cuando un ataque improvisado falla y el Comandante decide recurrir a un


ataque coordinado, debe ver que la fuerza no se desorganice ni sea
vulnerable al contraataque y al ataque nuclear o químico durante el período
preparatorio. Parte de la fuerza debe tomar posiciones defensivas
improvisadas; otra parte se traslada a distintas áreas de reunión. Es esencial
que la dispersión se haga con rapidez, pero en forma ordenada para
permitir que el ataque continúe después de un breve período de
reorganización, consolidación, planificación y coordinación.
El ataque y mayormente la explotación con frecuencia empiezan con un
pasaje de línea.
Esta operación debe estar bien planificada y coordinada para mantener al
mínimo la concentración de medios y la confusión.
Cuando sea posible, debe hacerse a través de elementos que no estén en
contacto con el enemigo.
Los detalles específicos del pasaje de línea son motivo de coordinación
entre los Comandantes de las correspondientes Unidades subordinadas.
Normalmente, el comando superior asigna los límites de las áreas a través
de las cuales los elementos subordinados han de pasar. Tales límites
generalmente corresponden a los de la fuerza que ha de ser sobrepasada.
Esta Unidad se encarga de los puntos de contacto y de pasaje, suministra
guías y proporciona información sobre el enemigo, campos de minas y
obstáculos.
La unidad que ha de ser sobrepasada, puede proporcionar el apoyo
logístico inicial. La fuerza que sobrepasa debe asumir el control del
combate, tan pronto sus elementos de primer escalón han rebasado a la
fuerza que es sobrepasada. La Artillería que apoyó esta ultima fuerza y los
medios de fuego inmediato de la misma, deben integrar el plan de apoyo
de fuego de la Unidad que pasa a primer escalón.

4.5.5 Explotación y persecución

La explotación y la persecución son consecuencias directas del ataque. La


explotación es una prolongación audaz del ataque y surge después de un
éxito inicial, sobre fuerzas enemigas que han perdido la capacidad de
resistir.

Página 120 de 360


4.5.5.1 Explotación

4.5.5.1.1 Generalidades

Consiste en aprovechar las ventajas obtenidas en el combate y acrecentar


el éxito inicial.
Esta operación realiza el pleno aprovechamiento de una situación
favorable, consecuencia de un combate exitoso (en el que se busca
convertir un éxito local en un éxito con mayores proyecciones), o de la
localización de la debilidad explotable en el dispositivo enemigo.
Los ataques que logran aniquilar a una fuerza defensiva son muy raros. En
la mayoría de los casos, el enemigo tratará de romper el contacto, retirar lo
que pueda y restablecer una nueva posición defensiva. En las operaciones
en gran escala, el enemigo podría tratar de traer Unidades desde puntos de
menor actividad o adelantar las reservas aún no empleadas por su mando
superior. Siempre que sea posible todo ataque debe ir seguido
inmediatamente de una explotación. La explotación, busca aprovechar las
ventajas obtenidas en el combate o las derivadas de debilidades en el
dispositivo enemigo. Una condición necesaria para su éxito, es que el
enemigo no disponga de reservas u otras fuerzas que puedan desplazarse
para enfrentar la explotación. La explotación es parte integral de todo
ataque y es especialmente importante en el ataque coordinado. Las
operaciones ofensivas de la División Ejército y la Brigada, deben pasar lo
antes posible del ataque a la explotación. Las fuerzas de explotación
maniobran rápidamente para alcanzar objetivos profundos, capturar
puestos de mando, cortar rutas de escape y presentar batalla a las Unidades
de reserva, Artillería y Unidades de apoyo de combate y para impedir que
el enemigo reorganice efectivamente su defensa. Las fuerzas de
explotación deben contar con medios de apoyo, cuya movilidad le
permitan desarrollar al máximo su velocidad de progresión y que incluyan
abastecimientos aéreos, para atender pedidos de emergencia de clase III y
clase V.

Página 121 de 360


4.5.5.1.2 Planificación

La Planificación debe buscar siempre la continuidad en la ejecución. Para


ello adquiere primordial importancia la continuidad en el apoyo de fuegos,
de Ingenieros y logístico. El Comandante tentativamente identifica las
fuerzas, los objetivos y las zonas de explotación, antes del ataque. Los
elementos de maniobra subordinados, tratan de discernir cualquier indicio
de un repliegue o reducción en la resistencia enemiga. Cuando ello ocurre,
los Comandantes rápidamente dan las órdenes, reagrupan sus fuerzas,
asignan objetivos profundos y continúan la acción ofensiva.
Se reorganiza el apoyo de servicio de combate y se adoptan las medidas
para que este en condiciones de seguir a la fuerza de explotación
rápidamente.

4.5.5.1.3 Ejecución

La explotación se inicia normalmente cuando se reconoce que la Fuerza


Enemiga tiene dificultades para mantener su posición o cuando se detecta

Página 122 de 360


una vulnerabilidad. Estas situaciones se manifiestan normalmente por los
siguientes indicios: éxitos decisivos de tropas propias, debilitamiento de la
resistencia enemiga, (especialmente en sus Fuegos de Apoyo) incremento
en el número de prisioneros capturados y en equipos abandonados, o la
presencia de una brecha que el enemigo no está en condiciones de cerrar
oportunamente.
Una vez comenzada, la explotación es ejecutada implacablemente para
negar al enemigo cualquier pausa, por medio de una presión ofensiva
continua en el avance hacia el objetivo final. En ningún momento se deja
de ejercer sobre el enemigo dicha presión.
Las fuerzas de explotación avanzan normalmente en el mayor frente
compatible con su movilidad, red de caminos y otras características del
terreno. Únicamente serán retenidas aquellas reservas que son necesarias
para asegurar flexibilidad a la operación, impulso en el avance y mínima
seguridad. fuerzas aeromóviles son utilizadas para conquistar objetivos
críticos en el avance para cortar líneas de retirada enemiga. Rápidas
incursiones y envolvimientos a cargo de fuerzas terrestres o aeromóviles
retardan o impiden la reorganización enemiga. Las acciones se
caracterizan por la audacia, el pronto empleo de la potencia de fuegos
disponibles y el empleo rápido y sin vacilaciones de las Unidades no
empeñadas. La fuerza de explotación es empeñada en la dirección
decisiva.
Las fuerzas que encabezan la explotación normalmente se constituyen
teniendo como núcleo Unidades de tanques, de infantería o caballería
mecanizada.
Las fuerzas aeromóviles facilitan un avance rápido, conquistando puntos o
terrenos claves por donde deben pasar las fuerzas terrestres de explotación
(puentes, lugares de franqueo, etc.) antes de que sean ocupados por el
enemigo. En estos casos se debe tener en cuenta el enlace entre la fuerza
terrestre y la aeromóvil. Se debe tener permanentemente en cuenta la
seguridad del abastecimiento terrestre puesto que los elementos más
adelantados pueden estar operando detrás de fuerzas enemigas
sobrepasadas o en territorio enemigo con población hostil.
En ciertos casos será necesario recurrir al abastecimiento aéreo. La
ejecución descentralizada es una característica de la explotación, no
obstante el Comandante mantendrá el control necesario para evitar que sus
fuerzas se disgreguen excesivamente. Las medidas de control se emplean
en la menor cantidad posible.
Las fuerzas de explotación eluden o aferran (empleando el mínimo de
fuerzas necesarias) aquellas resistencias enemigas que por su insuficiente
poder de combate no comprometen el cumplimiento de la misión,
informando al comando superior las que sean eludidas.

Página 123 de 360


Los elementos de los escalones siguientes se emplean para: operar contra
las fuerzas enemigas eludidas, reforzar a los elementos de cabeza o
ejecutar un ataque coordinado con los mismos, o bien para una
combinación de estas misiones de acuerdo a las exigencias de la situación.
A medida que avanza la fuerza de explotación, las fuerzas que la siguen y
apoyan aseguran sus líneas de comunicaciones y efectúan operaciones de
limpieza, destruyen los núcleos de resistencia eludidos, amplían la zona de
explotación desde el eje de avance de las fuerzas de explotación y
bloquean el movimiento de refuerzos enemigos hacia esa zona.
La explotación continúa tanto de día como de noche, haciendo caso omiso
a las condiciones meteorológicas existentes y al desgaste que ella imponga,
exigiendo que los comandos de todo nivel ejerzan una acción constante
sobre sus tropas para disminuir los efectos perjudiciales de la Operación en
la moral de las tropas.

4.5.5.2 Persecución

Si se hace evidente que la resistencia del enemigo ha cesado por completo,


el ataque o la explotación se convertirán en una persecución.
El objetivo de la persecución es el aniquilamiento del enemigo. La
persecución toma la forma de una serie de envolvimientos sucesivos, cuya
finalidad es la intercepción y la captura o destrucción de las Unidades
enemigas en retirada.
La persecución en gran escala es rara en la guerra moderna, pero sí puede
eventualmente darse en razón de lo cual, todo Comandante debe adoptar
las previsiones necesarias. Al igual que la explotación, la persecución
normalmente se caracteriza por su gran descentralización velocidad y
audacia. A diferencia de la explotación, la persecución rara vez puede ser
pre-planeada y no hay normalmente fuerzas de reserva destinadas a este
tipo de operación ofensiva.

4.5.5.2.1 Ejecución

El éxito en la persecución requiere de asedio constante para impedir la


reorganización y evasión de la fuerza enemiga. Se puede designar un
objetivo terrestre, pero la fuerza enemiga es el objetivo primordial.
Ocasionalmente, el atacante puede estar en condiciones de lanzarse a la
persecución directamente después del asalto inicial, si este último causa
destrucción masiva en el enemigo.
Los Comandantes se ubican bien al frente. Debido al estado de desintegración
del enemigo, en la persecución se pueden correr mayores riesgos que en otros
tipos de operación ofensiva. Las tropas y el equipo operan día y noche, a un
nivel máximo de intensidad y desgaste.
Página 124 de 360
Se mantiene bajo asedio constante al enemigo en retirada, en tanto que una
fuerza envolvente le corta la vía de escape. La fuerza de persecución hace
máximo empleo de las fuerzas aerotransportadas y aeromóviles para el
envolvimiento.
Las operaciones de persecución requieren de:
- Una fuerza de presión directa.
- Una fuerza envolvente.

- Fuerza de presión directa.

La fuerza de presión directa ataca continuamente para evitar la pérdida del


contacto con el enemigo y la subsecuente reconstitución de la defensa,
infligiéndole el máximo de bajas.
Se pone el mayor énfasis en la obstrucción de las vías de retirada del enemigo
por fuegos de apoyo de gran alcance y en que los ingenieros limpien
rápidamente la zona de obstáculos creados por el enemigo. Se requiere fuerza
suficiente para mantener día y noche el impulso de la persecución.

- Mantenimiento de la presión.

No se da ninguna oportunidad al enemigo, para reorganizar sus fuerzas y


reconstruir su defensa. Bajo ninguna circunstancia se le debe permitir romper
el contacto. Los elementos más adelantados activan el rápido movimiento de
las columnas a lo largo de todos los caminos disponibles.
Ellos contienen y de pasan los pequeños núcleos de resistencia.
La presión directa (Fuerza Principal) los sigue inmediatamente para hacer
limpieza de unidades cercadas y se prepara para reforzar a los elementos
adelantados, cuando elementos enemigos fuertes, intenten detenerse y
combatir. Durante la noche las unidades continúan su marcha o realizan
ataques a objetivos limitados, lo cual sirve para mantener al enemigo en
desequilibrio. La fuerza de presión directa intenta también, por movimientos
envolventes, cortar la retirada de fracciones enemigas.

- Apoyo de fuegos para la fuerza de presión directa.

Siempre que el enemigo pueda ser batido con fuegos observados y


planificados, se mantiene una parte de la artillería en posición de tiro sobre los
objetivos más lejanos. El fuego de apoyo para columnas móviles adelantadas
puede ser previsto por la Aviación en contacto radio, asegurando protección,
reconocimiento y/o atacando objetivos aéreos o terrestres que amenazan la
columna. Otros elementos de la Fuerza Aérea son empleados para concentrar
sus fuegos sobre puntos críticos, probables líneas de repliegue enemigas,
columnas en retirada y sobre reservas que tratan de reconstituir la defensa.
Página 125 de 360
- Fuerza envolvente.

La misión de la fuerza envolvente es alcanzar la fuerza enemiga que se retira y


anteponerse a la misma bloqueando su retirada de modo que pueda ser
destruida entre la fuerza de presión directa y la envolvente.

- Composición.

La fuerza envolvente debe ser por lo menos tan móvil como el enemigo. Debe
estar organizada para realizar operaciones semi-independientes. Las FF.TT.
altamente móviles y particularmente las fuerzas aerotransportadas y
aeromóviles son ideales para este papel.
La Fuerza Aérea Táctica es coordinada con la maniobra de esta fuerza. Se da
nuevamente importancia al empleo de las Unidades de Ingenieros, los cuales
deben limpiar rápidamente los obstáculos.
La Artillería más pesada es dejada usualmente con la fuerza de presión
Directa. Las tropas aeromóviles pueden ser usadas para ocupar desfiladeros y
otros objetivos críticos profundos en la retaguardia Enemiga.

- Conducción.

Siempre que sea posible, elementos móviles de la fuerza envolvente avanzan


por caminos paralelos a la línea de retirada enemiga, buscando alcanzar los
desfiladeros, puentes y otros puntos críticos, antes que el grueso de la fuerza
enemiga. Cuando la fuerza envolvente no puede adelantarse al enemigo, ella
acciona sobre sus flancos.
Si no puede dejar atrás al enemigo, ataca sus principales elementos en uno o
ambos flancos. Si falla el intento de cortarle al enemigo la ruta de escape, se
despacha inmediatamente una nueva fuerza envolvente.

- Destrucción del Enemigo Cercado.

El cerco que produce la persecución puede facilitar la destrucción completa de


una fuerza enemiga. Cuando la maniobra envolvente tiene éxito, las fuerzas de
persecución deben neutralizar cualquier intento por romper el cerco. Si no hay
suficientes tropas disponibles, se puede bloquear temporalmente cualquier
brecha con fuego y obstáculos. Es necesario coordinar la maniobra y los
fuegos de todas las fuerzas que participan en el envolvimiento. Si el enemigo
logra establecer una defensa en todas direcciones esta debe achicarse, segmen-
tándola en elementos cada vez más pequeños, hasta que la fuerza cercada
quede destruida o capitule. Si el tiempo no es factor crítico, el Comandante
Página 126 de 360
puede optar por mantener el cerco intacto, repeler todo intento de escape y
buscar el debilitamiento del enemigo tan solo con fuego.
Aceptando que en principio la acción ofensiva lo que busca es reducir al
enemigo a la impotencia, quebrar su voluntad de luchar o cortar su libertad de
acción, el cerco por sí sólo alcanzaría para lograr esta finalidad. Pero frecuen-
temente es necesario acelerar el proceso, sea para lograr la conquista del
terreno en poder del Enemigo más rápidamente, sea para eliminar la amenaza
representada por la fuerza cercada, sea para liberar más rápidamente a las
Unidades empeñadas en el mantenimiento del cerco.
En estos casos, la destrucción del enemigo deberá ser completa, a través de la
utilización de uno de los procesos siguientes o de una combinación de ellos:
- Estrechamiento del cerco, mediante el cual se reduce el espacio de maniobra
dejado inicialmente al enemigo.
- Aislamiento, por la determinación de objetivos en el interior del bolsón
posibilitando la división del enemigo y su posterior destrucción por partes.
- Asignación de zonas de acción, a los comandos subordinados, en el espacio
operacional en que el enemigo se halla cercado a fin de proceder a realizar
un ataque dentro del bolsón.
- Designar a las tropas enemigas cercadas como objetivo de un ataque
realizado dentro del bolsón.
La fuerza de presión directa, lanza ataques improvisados para mantener el
contacto y el ímpetu hasta lograr la destrucción completa del enemigo. Le
impide al enemigo romper el contacto o reorganizar la defensa y le ocasiona la
mayor cantidad posible de bajas. Debe estar compuesta, preferiblemente, con
fuerzas mecanizadas y blindadas. Sus elementos de primer escalón se mueven
rápidamente a lo largo de todas las avenidas de aproximación disponibles y
cercan o pasan por alto cualquier foco pequeño de resistencia, de cuya
destrucción las Unidades de seguimiento y de apoyo deberán encargarse.
Siempre que se presente la oportunidad, la fuerza de presión directa cerca,
intercepta, destruye o captura tropas enemigas, toda vez que tales acciones no
interfieran con su misión primordial.

4.5.5.3 Conclusiones

La explotación y la persecución ponen a prueba la audacia y la resistencia


tanto de las tropas como de los comandos. Por lo general, el ataque
desorganiza al atacante casi tanto como al defensor. La fuerza que ataca estará
cansada, sus unidades han sufrido perdidas de hombres y material y en el curso
de la explotación o persecución, las líneas de comunicaciones se hacen cada
vez más tenues. Se requieren esfuerzos extraordinarios para mantener el
ímpetu del avance y para convertir el éxito táctico en victorias o éxitos
operacionales y estratégicos.

Página 127 de 360


Si bien en la historia figuran operaciones ofensivas en las que estos tipos de
acción ocurrieron en el orden descrito, la mayoría de las operaciones ofensivas
no siguen este patrón por una razón u otra. El ataque especialmente el
contraataque puede lanzarse con muy poca preparación o a raíz de un
encuentro fortuito en un punto y en un momento que ninguno de los dos
adversarios habían previsto. El ataque fructífero puede convertirse en
persecución sin pasar por la explotación. En la guerra convencional, la
persecución es rara y por lo general termina antes de aniquilar al enemigo, ya
sea por pérdida del apoyo o por una restricción estratégica intencional.
Finalmente, todas estas operaciones ofensivas pueden ir unidas y no presentar
diferencia clara entre una y otra.
Esto ocurre especialmente en la explotación y en la persecución.
En todo caso, estas fases constituyen problemas distintos e importantes y cada
una de ellas debe conciderarse por separado en la planificación y la ejecución.

4.6 EL APOYO DE FUEGOS.

4.6.1 Generalidades

El éxito de un ataque depende en gran parte de la efectiva utilización de los


fuegos de apoyo. Esto involucra un planeamiento eficiente y una dirección
efectiva durante el ataque. Es esencial la planificación, ejecución y
coordinación entre los escalones de ataque y los fuegos de apoyo, así como
entre las agencias correspondientes. El comandante de la fuerza es responsable
de la coordinación de todos los fuegos de apoyo disponibles entre sí y con las
operaciones de su unidad.

4.6.2 MEDIOS DE APOYO DE FUEGO

4.6.2.1 El principal medio de apoyo de fuego directamente disponible al comandante


de una gran unidad es la artillería. Es suplementado por apoyo aéreo y en
algunos casos con fuego naval. Las armas orgánicas de infantería y caballería
deben ser empleadas en forma coordinada con todos los fuegos de apoyo
disponibles.

4.6.2.2 El apoyo aéreo

El Ejército, debe sacar la máxima ventaja de la flexibilidad y potencia de las


unidades de la fuerza aérea táctica que lo apoyan. Para lograr la más efectiva
integración posible de los planes del Ejército y Fuerza Aérea se requiere una
estrecha coordinación en todos los escalones, particularmente en los más altos.
La obtención y mantenimiento de la superioridad aérea facilita el

Página 128 de 360


cumplimiento de las operaciones reduciendo las pérdidas, debido a la acción
aérea enemiga.
Las siguientes consideraciones constituyen la base de la planificación y
coordinación del apoyo de fuego para las operaciones ofensivas.

4.6.3 Descentralizar el control del apoyo de fuego

El atacante tiene la iniciativa y puede concentrar elementos de maniobra y


potencia de fuego en el momento y lugar que él escoja. Como la situación
ofensiva no es tan vaga como la defensiva, el comandante descentraliza el
control del apoyo de fuego, para asegurarse la disponibilidad de fuegos que
reaccionen inmediatamente a las necesidades de las unidades de maniobra.
El comandante materializa esta descentralización mediante:
- asignación de misiones de refuerzo de fuegos.
- retención de menos unidades de A. en A/C.
- distribución de las salidas de Apoyo Aéreo Directo entre los elementos de
primer escalón.

4.6.4 Favorecer el ataque principal

En la ofensiva el comandante concentra su potencia de combate en los puntos


donde el enemigo es más débil.
El Coordinador Apoyo de Fuego ayuda al comandante a concentrar la potencia
de fuego en el momento y el lugar necesario, proporcionándole un máximo
efecto de choque y destrucción al esfuerzo principal.
La ejecución de este fundamento se logra:
- Asignando mayor potencia de fuego al ataque principal y ubicando a las
unidades de modo que lo apoyen.
- Asignando misiones de Ref.Fos. y A/C y Ref.Fos. a las UU. disponibles.
- Asignando más munición y salidas de Apoyo Aéreo Directo para favorecer
el ataque principal.

4.6.5 Adquirir y atacar blancos profundos

La descentralización de los medios de apoyo de fuego, facilita la disposición


de fuegos que reaccionen inmediatamente a los requerimientos de los
elementos de maniobras empeñados (apoyo inmediato); pero los blancos que
están más allá de la capacidad de adquisición de la fuerza atacante también
pueden presentar una importante amenaza al éxito del esfuerzo ofensivo.
Contra tales amenazas, es necesario concentrar dispositivos de adquisición de
blancos de largo alcance, además de los esfuerzos de inteligencia. El
comandante y su Coordinador de Apoyo de Fuego establecen las prioridades

Página 129 de 360


para el ataque de estos y otros blancos, asegurando de esta forma la
disponibilidad de recursos de A. en A/C que puedan cumplir con esta misión.

4.6.6 Apoyo de fuego adecuado al tipo de operación ofensiva.

El coordinador de apoyo de fuego abordará la planificación de la maniobra


ofensiva como si se tratara de una acción continua, no obstante lo cual, cada
tipo de operación (movimiento hacia el contacto, ataque, explotación,
persecución) requerirá una serie de consideraciones especiales en la asignación
de los apoyos.

4.6.7 Tareas de apoyo de fuego en la ofensiva

4.6.7.1 Las tareas que el comandante de la fuerza debe esperar que el sistema de
apoyo de fuego le proporcione pueden resumirse en:
- Apoyar el movimiento hacia el contacto.
- Neutralizar las defensas enemigas antes del ataque, disponiendo
preparaciones cortas y violentas.
- Suspender los fuegos de preparación para permitir el desarrollo de la
maniobra de las UU. básicas, manteniendo los fuegos de neutralización y
ataque a blancos de oportunidad, con unidades de fuego disponibles a tal
efecto.
- Proporcionar apoyo durante el ataque.
- Planificar contrafuegos durante toda la operación ofensiva para suprimir,
neutralizar o destruir las armas de fuego indirecto enemigas.

4.6.8 El apoyo de fuegos en el combate ofensivo

4.6.8.1 El movimiento hacia el contacto.


La misión general del apoyo de fuego en el movimiento hacia el contacto será
la siguiente:
- Proporcionar apoyo de fuego oportuno a las unidades que forman la
vanguardia.
- Ejecutar fuegos contra la Artillería enemiga, preferentemente, si está en
posición.
- El fuego aéreo se ejecutará fundamentalmente contra aquellos objetivos
que, situados en profundidad, puedan poner en peligro a la vanguardia.
- En el caso excepcional de que se efectúe una aproximación en las cercanías
de la costa, los buques pueden contribuir con su fuego en misión de A/D a
algún elemento de la vanguardia.

Página 130 de 360


4.6.8.2 La toma de contacto.

Durante la toma de contacto se desplegarán todos los medios disponibles


desencadenando los fuegos a pedido, mientras se adopta el dispositivo final.
El fuego aéreo se reserva para batir objetivos en profundidad que puedan
influir de forma decisiva en el ataque posterior.
El fuego naval refuerza el fuego de la artillería, especialmente en acciones
contra objetivos protegidos por fortificaciones.

4.6.8.3 El ataque.

El ataque concentra fuerzas y fuegos para abrir una brecha en las defensas
enemigas e impulsar fuerzas rápidamente a través de la misma, para luego
conquistar objetivos en la profundidad del área de retaguardia del enemigo.
Los fuegos bien sincronizados y coordinados tienen que coincidir con la
maniobra para reducir la eficacia de las armas enemigas, aislar el área de la
penetración y fijar las fuerzas enemigas en posición. El comandante
establecerá prioridades para batir los objetivos existentes.
El CAF debe asegurar la disponibilidad de fuegos indirectos y de Apoyo
Aéreo Directo para reaccionar en tiempo oportuno ante las necesidades de la
maniobra.
Una vez lograda la penetración, se planifican
concentraciones a ambos lados de la brecha para
ayudar a la fuerza que penetra a capturar los
objetivos profundos.

- La preparación.

Es un intenso volumen de fuego planificado, cuya finalidad es ablandar las


defensas enemigas antes de un ataque. Una preparación se puede desencadenar
a pedido o se puede ejecutar a una hora determinada. El comandante de la
fuerza es quien determina si una preparación se justifica, basándose en la
recomendación de su C.A.F.
En caso de no ejecutarse se realizará una intensificación de fuegos.
Los factores que influyen en la decisión del comandante son los siguientes:
- Pérdida de la sorpresa.
- Cantidad de blancos remunerativos.
- Medios de apoyo de fuego disponibles.
- Recuperación del enemigo antes de recibir los fuegos.
- Munición disponible.
Una preparación normalmente se ejecuta en fases
para permitir el ataque sucesivo a cierto tipo de
blanco. La primera fase ataca los medios de apoyo de
Página 131 de 360
fuego enemigo y sus sistemas de observación. La
segunda, puestos de comando, centros de
comunicaciones, zonas de reunión y reservas. La fase
final ablanda y destruye a las posiciones
defensivas del primer escalón y a otras amenazas
inmediatas. Durante la preparación se hará uso de
todos los recursos de apoyo de fuego disponibles.
Comienza antes de que los elementos atacantes crucen
la L.C. y puede continuar después de que la hayan
cruzado.
La función del C.A.F. en la preparación es asegurar el ataque coordinado a
todos los blancos que el comandante de la maniobra considera críticos para su
nivel.
Logrará esto, al recomendar que tipos de blancos se deben atacar, con que
medio de apoyo de fuego y en que fase de la preparación se atacarán.

4.6.8.4 La explotación

El C.A.F. de la fuerza que explota, es el comandante de A. del escalón


considerado.
Debido a la complejidad de la operación y la rapidez que exige, la actuación
del C.A.F. deberá contemplar:
- Efectiva coordinación del pasaje de línea.
- Un rápido cambio, de una organización relativamente centralizada durante
el pasaje, a otra descentralizada durante la ejecución de la explotación, ya
que esta se realizará en la mayoría de los casos velozmente y por más de un
itinerario.
- Identificación constante de los elementos enemigos eludidos, para asignar
misiones a los medios de apoyo de fuego disponibles.
- Anticipar las situaciones que requieren una rápida transición a un apoyo
más centralizado, para aquellos elementos de maniobra que se concentran
para ejecutar ataques improvisados o coordinados.
- Asegurar que la munición, abastecimientos y el mantenimiento requeridos
se envíen hacia el frente, con los medios de apoyo de fuego de la
explotación.
Una vez que los elementos de maniobra comiencen la explotación, se
disminuye la necesidad de un control centralizado y de concentraciones de
fuegos planificados anticipadamente.
Sin embargo, existe un aumento en la necesidad de un apoyo de fuegos
altamente móvil y flexible, que pueda responder adecuadamente a las
necesidades de los elementos de maniobra.
Las tareas de apoyo de fuego para una explotación incluyen:
- Concentraciones en los bolsones de resistencia eludidos.
Página 132 de 360
- Apoyo a las unidades de maniobra que quedan atrás, fijando a las fuerzas
enemigas en algún bolsón de resistencia.
- Apoyo a los ataques improvisados que sean necesarios para vencer aquellas
resistencias que no se puedan eludir.
- Fuegos para neutralizar o destruir los contra-ataques enemigos.
Tanto la A. como el A.A.D. deben estar en condiciones de cumplir todas estas
tareas durante la explotación. La fuerza que explota debe recibir el máximo de
salidas de A.A.D. que el escalón superior le pueda asignar.
El A.A.D. es sumamente adecuado para esta operación, ya que sus
características le permiten:

- Operar eficazmente en una situación en que la estructura defensiva enemiga


se está deteriorando.
- Lanzar cantidades masivas de munición rápidamente en todo el campo de
batalla.
- Buscar, seguir y destruir al enemigo que se repliega.
Al contrario de la A. que forma parte de la fuerza que explota, el
reabastecimientos de combustible y de munición para los aviones de A.A.D.,
no le impone una carga logística a dicha fuerza.
El A.A.D. se puede planificar eficazmente para las primeras etapas de la
explotación, y para la conquista final del objetivo de la explotación, sin
embargo, será difícil elaborar planes de antemano entre estos dos puntos.
Las salidas de A.A.D. se usarán primordialmente contra blancos de
oportunidad grandes y fugaces.

4.6.8.5 La persecución

El apoyo de fuego en la persecución es similar, en muchos aspectos, al de la


explotación. Las principales diferencias se explican mediante el propósito de la
persecución: la destrucción de la fuerza enemiga.
El sistema de apoyo de fuego tiene que ser lo suficientemente flexible, para
permitir el apoyo independiente de las fuerzas de presión directa y envolven-
tes, durante la operación e incluye las siguientes tareas:

Apoyo a la fuerza de presión directa mediante:


- Fuegos sobre las UU. enemigas que se repliegan con la finalidad, de
enlentecer su progresión, desgastarlas, desmoralizarlas y destruirlas.
- Fuegos sobre las UU. de retaguardia enemiga y de sus puntos de resistencia,
para poder eludirlos y mantener el contacto con el grueso de la fuerza.
- Concentración de todos los medios de apoyo de fuego sobre las fuerzas
enemigas, concentrados en puntos críticos para su repliegue (desfiladeros,
puentes, etc.).

Página 133 de 360


Apoyo a la fuerza envolvente mediante:
- Neutralización de las posiciones enemigas con munición fumígena y
explosiva para que la fuerza envolvente las pueda eludir con rapidez.
- Fuegos para apoyar el ataque de flanco de la fuerza envolvente, si ésta no
puede rebasar al grueso de la fuerza enemiga.
Apoyo a la convergencia de ambas fuerzas mediante:
El lanzamiento de fuegos con todos los medios de apoyo de fuego disponibles
para aniquilar al enemigo.

4.6.9 Plan de apoyo de fuegos

El Plan de Apoyo de Fuegos es un plan coordinado e integrado para el empleo


de todos los medios de apoyo de fuego de apoyo disponibles al comandante.
Es el medio fundamental de control de fuegos establecido por el comandante
con anterioridad a la iniciación del ataque. Este, se basa en:
- La decisión del comandante para el empleo de los fuegos de apoyo.
- La coordinación detallada de los planes de todas las agencias de fuego
disponibles. Cuando corresponda, se incluyen como apéndices al Plan de
Apoyo de Fuegos:
- Plan de Fuego de Artillería (incluyendo proyectiles guiados)
- Plan de fuego naval.
- Plan de Apoyo Aéreo.
- Plan de Fuego de las armas orgánicas (para los escalones más bajos).

4.7 OPERACIONES OFENSIVAS CON PROPOSITO ESPECIAL

4.7.1 Generalidades

Aún cuando las consideraciones anteriores son aplicables a todas las


operaciones ofensivas, algunas, debido a su excepcional propósito o
circunstancia, requieren planificación especial.
Entre ellas, figuran el reconocimiento en fuerza, el ataque desde posiciones
defensivas, las actividades de diversión las operaciones de relevos y las
infiltraciones e incursiones.

4.7.2 Reconocimiento en Fuerza

El reconocimiento en fuerza es una operación ofensiva, un ataque a un


objetivo limitado, realizada por fuerzas de adecuado tamaño, con el fin de
obtener información, localizar y sondear las posiciones enemigas y evaluar su
fuerza y reacciones. Aún cuando su propósito sea básicamente la recopilación
de información, el Comandante debe estar alerta y aprovechar cualquier
oportunidad para explotar el éxito táctico.
Página 134 de 360
Si el requisito es desarrollar la situación enemiga sobre un frente extenso, el
reconocimiento ofensivo puede consistir en fuertes acciones de tanteo
encaminadas a determinar la situación enemiga en puntos específicos. Las
reacciones del enemigo podrían revelar debilidades en su sistema defensivo.
Debido a que es una operación destinada principalmente a obtener
información, el Comandante debe evaluar con mucho cuidado los riesgos que
presenta. Debe tomar medidas por adelantado para el desenganche de su
fuerza o para la explotación del éxito, según el caso.

4.7.3 Los ataques desde posiciones defensivas

Los ataques desde posiciones defensivas incluyen ataques de desorganización


y contraataques. Los primeros buscan desorganizar al enemigo antes de que
pueda lanzar su propio ataque. Trata de asestarle un golpe en el momento en
que resulta más vulnerable, o sea, cuando hace los preparativos para el ataque
y se halla en áreas de reunión y posiciones de ataque, o marcha hacia la línea
de partida. En varios sentidos, es similar a cualquier otro ataque y se puede
improvisar, cuando el tiempo es corto y organizar cuando se dispone de
suficiente tiempo.

4.7.4 Las Operaciones de Diversión.

Las operaciones de diversión incluyen las fintas y las demostraciones. Una


finta tiene por objeto desviar la atención del enemigo del esfuerzo principal.
Su ejecución se asigna a una brigada o a otra unidad menor. Por lo general,
las fintas son ataques de poca profundidad que persiguen objetivos limitados
y tienen lugar antes o durante el ataque principal.
Una demostración es una exhibición de fuerza en áreas en que no se busca
una acción decisiva.
En la demostración hay amago pero no se llega al contacto. Las fintas y
demostraciones tratan de inmovilizar al enemigo, lo distraen y facilitan la
ejecución de acciones decisivas en otros puntos.
A la finta sigue un ataque improvisado u organizado si ella pone de
manifiesto una debilidad enemiga.

4.7.5 Incursión

La incursión es un ataque con objetivos limitados que se hace en territorio


enemigo con una finalidad específica que excluye la toma y retención de
terreno. El Comandante realiza incursiones con el fin de destruir instalaciones
claves del adversario, tomar o liberar prisioneros y entorpecer las funciones
enemigas de comando, control o apoyo. Las fuerzas incursoras abandonan el

Página 135 de 360


área de sus objetivos al cumplir la misión y, a menos que sea una unidad de
retaguardia, retorna a las líneas amigas.

4.7.6 Infiltración

La infiltración es a la vez un tipo de maniobra ofensiva y una modalidad de


combate, que consiste en colocar fuerzas en la retaguardia enemiga, con
diversas misiones a cumplir con la finalidad de crear y mantener un efecto
paralizador en el sistema de combate del enemigo.
Busca destruir instalaciones enemigas, sus sistemas de comando, logísticos y
de comunicaciones, llegando a la retaguardia del enemigo sin desatar la batalla
contra defensas preparadas, mediante el movimiento oculto de una fuerza
atacante (o parte de ella) a través de las líneas enemigas. Su éxito depende del
sigilo necesario para evitar la detección y el combate.
Existe una considerable diferencia entre la táctica de infiltración y las técnicas
de infiltración.
Si bien las técnicas de infiltración son comunes a todos los tipos de
operaciones militares, la táctica de infiltración exige una guerra móvil por
formaciones altamente adiestradas y bajo condiciones tácticas y estratégicas
apropiadas. El efecto acumulativo de esta táctica es destruir la voluntad del
enemigo para combatir.
De esto se desprende, que la diferencia entre una maniobra
ofensiva normal y la táctica de infiltración estriba
en el efecto que ésta tiene en el adversario. La
infiltración tiene como fin paralizar al adversario,
y no ocupar terreno crítico. La parálisis puede
lograrse más fácilmente si la fuerza de infiltración
puede romper la cohesión entre varios escalones
enemigos. La parálisis creada por el empleo de la
táctica de la infiltración tiene que ser
suficientemente gravosa para que sea efectiva.

4.7.7 Otras actividades tácticas

4.7.7.1 Seguridad de los flancos

El Comandante de la fuerza atacante no debe desatender la amenaza que se


cierne sobre sus flancos y que se intensifica a medida que el ataque progresa.
Debe responsabilizar a determinadas unidades atacantes por la seguridad de
flancos o establecer una fuerza para tal fin, la que normalmente integrará con
medios mecanizados. Para mantener el ímpetu, a veces es necesario prescindir
temporalmente de esta protección. La velocidad del ataque mismo, ofrece

Página 136 de 360


cierto grado de seguridad, porque le resta efectividad a las reacciones
defensivas enemigas.

4.7.7.2 Protección contra ataques aéreos

Las fuerzas atacantes tendrán que hacer buen uso del encubrimiento. La
existencia de nubosidad o mala visibilidad, juntamente con una bien
planificada defensa aérea, serán de gran utilidad para el atacante.
En un ataque ejecutado a adecuada velocidad de progresión, la F.A.T. deberá
establecer fundamentalmente el control sobre aquella parte del espacio aéreo
que mayor peligro representa. En tanto que las Unidades de defensa aérea de
corto alcance, ofrecen protección a las instalaciones de comando y control,
instalaciones logísticas, reserva, artillería, etc.; y las Unidades de defensa anti-
aérea de largo y mediano alcance protegerán a las fuerzas como un todo
tratando de destruir las aeronaves y misiles enemigos más lejanos.

4.7.7.3 Cruce de obstáculos

Cuando se enfrenta a una defensa organizada, el atacante debe estar preparado


para salvar obstáculos. Los obstáculos naturales deben ser eludidos,
flanqueados o cruzados, con ayuda de las Unidades de Ingenieros en apoyo del
ataque.
El ataque debe siempre tratar de eludir cualquier obstáculo. Si no puede
eludirlo rápidamente, debe iniciar operaciones de franqueo de inmediato. Dado
que los obstáculos generalmente están cubiertos con fuego, es importante
actuar rápidamente.
Las operaciones de franqueo de obstáculos por lo general ocurren bajo fuego,
limitando las oportunidades para el reconocimiento. De ser posible, los
Ingenieros de combate, efectúan el franqueo, en tanto que los restantes medios
de maniobra vigilan. Sin embargo, se debe adiestrar organizar y equipar a
todas las Unidades para efectuar operaciones improvisadas de franqueo.
En el asalto, se emplean veloces dispositivos, que despejan rutas de ancho
mínimo para el avance de las tropas asaltantes.
El Comandante debe cruzar rápidamente los ríos o cursos de agua situados en
su camino. El cruce de este tipo de obstáculo requiere de planificación y apoyo
especiales. El atacante debe hacer el cruce sin perder ímpetu, sólo como último
recurso debe la fuerza atacante detenerse para concentrar fuerzas y equipos.

4.7.7.4 Uso del humo

Durante las operaciones ofensivas, puede usarse humo para obstruir la


observación enemiga. El humo ciega a artilleros y observadores. Una cortina

Página 137 de 360


de humo, encubre la maniobra propia, sin embargo, hay que tener cuidado de
que no obstruya la efectividad de la propia fuerza.
El humo también puede servir para engañar al enemigo, atrayendo su atención
hacia una parte mientras atacamos por otra.

4.7.7.5 Ataques en condiciones de visibilidad limitada

La oscuridad y otras obstrucciones a la visibilidad son sumamente ventajosas


para el atacante. Las puede aprovechar para:
- Lograr la sorpresa.
- Explotar el éxito.
- Mantener el ímpetu.
- Penetrar una defensa enemiga fuertemente organizada.

Los dispositivos modernos de visión nocturna hacen el combate nocturno, más


factible y eficaz que nunca.
Debido a que ilumina el campo de combate para ambos bandos, no conviene
usar iluminación artificial, excepto cuando no se disponga de suficientes
dispositivos de visión nocturna o cuando los niveles de luz ambiental sean
muy bajos.
Cuando los niveles de luz ambiental son altos, los dispositivos pasivos de
visión nocturna neutralizan muchos de los efectos de la oscuridad.
Sin embargo, la visibilidad limitada aún reduce la capacidad de detección, las
distancias del combate y de saltos y la facilidad de avance por rutas provistas
de cobertura y encubrimiento.
La lluvia, la niebla y el humo presentan problemas especiales para la
orientación, la adquisición e identificación de blancos. El adiestramiento
especial, el uso de sensores y la planificación cuidadosa pueden vencer estas
dificultades.
Cuando el defensor ocupa posiciones con buenos campos para el tiro de largo
alcance, el atacante puede optar por esperar que oscurezca o llegue el mal
tiempo o la niebla.
El ataque nocturno contra posiciones fuertemente defendidas debe requerir
marchas relativamente cortas. Los Jefes en todos los niveles, deben tener la
oportunidad de reconocer el área del ataque lo más adelante posible en
condiciones de buena visibilidad. El sistema alámbrico será el medio principal
de comunicaciones hasta empezar el asalto o perderse la sorpresa. Las ayudas
visuales de reconocimiento pueden ayudar en el control de las fuerzas. Los
objetivos generalmente serán menores que de ordinario, pero deben ser lo
bastante prominentes para facilitar su localización.

Capítulo V
OPERACIONES CONVENCIONALES
Página 138 de 360
OPERACIONES DEFENSIVAS
Sección 1
LA DEFENSA

5.1 GENERALIDADES
La defensa es el empleo de todos los medios y métodos
disponibles para disuadir, resistir o destruir un ataque
enemigo. La defensiva es la situación de una Tropa que se
mantiene pronta para protegerse y proteger la posición que
ocupa contra el ataque enemigo.
La conducción de operaciones defensivas es una difícil
prueba para un Comandante de tropas; debe aceptar grandes
riesgos y tratar de conservar sus medios a fin de
emplearlos en forma decisiva y sin vacilaciones en el
momento oportuno y al mismo tiempo debe resolver el serio
problema de conducir tropas que no perciban el éxito
evidente del combate ofensivo.
La preparación psicológica de las tropas y el mando
enérgico en la conducción de la defensa son esenciales
para mantener una moral alta, una preparación continua y
una actitud agresiva.
Las tropas deben comprender que una defensa bien
ejecutada puede constituir un medio para destruir al
enemigo.

5.2 FINALIDAD
Las operaciones defensivas tienen por finalidad:
- Ganar tiempo esperando condiciones más favorables
para la acción ofensiva.
- Economizar fuerzas en una parte del frente, a fin
de permitir la concentración de mayores medios en provecho
de una acción decisiva en otra parte del mismo o en otro
frente.
- Destruir o canalizar una fuerza enemiga.
- Disminuir la capacidad combativa del enemigo para
el lanzamiento de un ataque.
- Negar el acceso por parte del enemigo a un área
vital.
- Mantener una determinada región ante la
imposibilidad o inconveniencia de continuar la ofensiva.
La defensa no es un fin, sino un medio al que en la
guerra se recurre deliberada u obligadamente, como
consecuencia de la situación o por necesidades operativas.

Página 139 de 360


El fin último de la defensa es crear la oportunidad para
la ofensiva.

5.3 DOCTRINA DEFENSIVA.


La doctrina defensiva preconiza la elección y
organización de una posición en la cual se hará fracasar
el ataque enemigo. Adelante en el área de seguridad,
actúan fuerzas destinadas a desorganizar, retardar la
progresión del enemigo y engañarlo sobre la verdadera
ubicación del área defensiva avanzada. Asimismo, se debe
considerar la posibilidad de disponer de fuertes reservas
para dar profundidad a la posición y/o contraatacar al
enemigo.
En una operación defensiva y según el escalón
considerado, es posible que algunos elementos puedan estar
realizando una defensa de área o en posición y otros
retardando, atacando o ejecutando fintas, como parte del
plan de operaciones.
El objetivo del defensor, es explotar al máximo las
características del terreno y los medios disponibles, de
manera de obtener las mayores ventajas, imponiendo a su
vez las mayores desventajas al enemigo.
En la defensa se aprovecha cualquier oportunidad para
tomar la iniciativa y destruir al enemigo. El defensor
puede materializar en iniciativa mediante las siguientes
acciones:
- Por la elección de la posición a defender.
- Obligando al enemigo a reaccionar de acuerdo con
el plan de defensa propio.
- Explotando las vulnerabilidad y errores del
atacante, mediante operaciones ofensivas propias.
- Contraatacando a las fuerzas enemigas que hayan
penetrado en la posición.
En la defensa es necesario ejecutar acciones
ofensivas, con el fin de aprovechar toda oportunidad para
destruir al enemigo. Una buena preparación sicóloga de las
tropas y un enérgico don de mando, son esenciales para
mantener una actitud agresiva y una moral elevada. Las
tropas deben comprender que una defensa agresiva ofrece
mayores oportunidades para destruir al enemigo.

5.4 ORGANIZACION DE LA ZONA DE ACCION ASIGNADA.


La zona de acción asignada para la defensa incluye el

Página 140 de 360


terreno que queda entre los límites laterales de la
unidad; hacia adelante, se extiende hasta la distancia
donde el Comandante tiene la responsabilidad de
proporcionar seguridad y hacia atrás hasta el límite de
retaguardia establecido. El sector a defender en el
sentido de la profundidad, comprende: el área de
seguridad, el área de defensa avanzada y el área de
retaguardia.
5.4.1 Area de Seguridad.
El área de seguridad comienza en el límite anterior
del área de defensa avanzada y se extiende hacia el frente
y los flancos, hasta la distancia que está bajo la
responsabilidad de seguridad del Comandante.
En esta zona, actúan las fuerzas de seguridad; en su
acepción más amplia, se incluye como parte del área de
seguridad a las fuerzas de cualquier nivel de Comando, que
actúen en ella, incluyendo a las de los comandos
subordinados.
Las fuerzas empleadas en el área de seguridad
suministran información sobre el enemigo, retardan su
avance, lo engañan y lo desorganizan tanto como sea
posible, constituyendo además, una cortina de contra-
reconocimiento.
5.4.2 Area de Defensa Avanzada.
El área de defensa avanzada se extiende desde el
límite anterior de las unidades en primer escalón hasta el
límite de retaguardia de las mismas, incluyendo las
posiciones preparadas por el escalón correspondiente.
Los efectivos y composición de las fuerzas del área de
defensa avanzada, guardan relación con la organización
necesaria para que la misma, asegure la continuidad de la
posición defensiva.
5.4.3 Area de retaguardia.
Se extiende desde el límite posterior del área de defensa
avanzada, hasta el límite de retaguardia de la unidad
considerada. En esta zona se emplazarán normalmente las
reservas, puestos de comando e instalaciones
administrativas.

5.5 FUNDAMENTOS DE LA DEFENSA La planificación,


organización y conducción de la defensa se basa en los
siguientes fundamentos:
5.5.1 Utilización apropiada del terreno

Página 141 de 360


El terreno es el factor principal en la elección de la
posición defensiva y tiene influencia directa en la
ubicación y distribución de las fuerzas, tanto en el
frente como en profundidad. El defensor debe sacar la
máxima ventaja de los aspectos militares del terreno
(observación y campos de tiro, cubiertos y abrigos,
obstáculos, puntos críticos y avenidas de aproximación) en
la preparación y conducción de la defensa.

El defensor
mantiene el control de
aquellas zonas del terreno que
son esenciales para organizar
la defensa y la maniobra de
la reserva, negándole al
enemigo el terreno que
podría poner en peligro el
éxito de la defensa. Para
reforzar el valor natural
del terreno se le organiza
empleando barreras,
obstáculos y trabajos de
fortificación.
La evaluación del
terreno constituye la
base para la distribución de
las fuerzas, el empleo de los medios de vigilancia, la
planificación de los fuegos y la misión de las fuerzas de
seguridad.
5.5.2 Apoyo mutuo
Es conveniente que las unidades y armas situadas en un
sector defensivo cualquiera, se ubiquen y empleen de
manera que puedan apoyarse unas a otras a fin de aumentar
la solidez de la posición defensiva y disminuir la
posibilidad de infiltración del enemigo. Esto se aplica
tanto entre las unidades de primer escalón como en
aquellas escalonadas en profundidad; las unidades de cada
escalón defensivo deben ser capaces de batir con fuegos de
flanco parte del frente de las unidades vecinas; y las
unidades dispuestas en profundidad deben poder batir los
intervalos del escalón defensivo que los antecede. El
espacio sin cubrir que pueda existir constituye un
problema particular en cuanto al apoyo mutuo y dichos

Página 142 de 360


espacios deben ser controlados mediante la observación, la
colocación de obstáculos, el desencadenamiento de fuegos
planificados con anticipación, los patrullajes y la
ocupación física de las brechas por fuerzas. Deberán
establecerse las coordinaciones necesarias para obtener el
apoyo mutuo en todos los escalones.
5.5.3 Organización de la defensa en profundidad
La defensa en profundidad es esencial, a fin de
detener o destruir las penetraciones enemigas e impedir
que puedan ser explotadas, negando al enemigo libertad de
maniobra en áreas de retaguardia importantes. La
profundidad en la defensa se obtiene mediante el
dispositivo apropiado y la maniobra de las fuerzas, el
empleo de posiciones de bloqueo, de fortificaciones y de
barreras el empleo de los fuegos y de las reservas. Las
defensas poco profundas tienen la vulnerabilidad
intrínseca, ya que el enemigo puede penetrarlas antes de
que pueda ser detenido o se puedan adoptar medidas
eficaces.
5.5.4 Defensa en todas direcciones
Una posición defensiva se organiza de manera que
permita defenderse en todas las direcciones peligrosas.
Aún cuando el enemigo se presente en el frente atacando en
la dirección de la avenida de aproximación que se
considere como la más importante, existe siempre la
posibilidad de que pueda atacar, por una dirección
diferente, es decir por una avenida de aproximación de
menor valor o por el flanco, la retaguardia o dentro de la
posición defensiva, con fuerzas de infiltración,
aeroterrestres o de guerrillas. Teniendo presente las
condiciones de terreno y las posibilidades de las fuerzas
propias, una forma económica de proporcionar la defensa en
todas direcciones, es:
- la ubicación apropiada de las fuerzas,
- la organización de posiciones preparadas que
pueden ser ocupadas desde el comienzo o en el momento
oportuno, para hacer frente a una amenaza en una dirección
determinada
- transportando los fuegos asegurándose que todas
las unidades subordinadas se encuentren preparadas para la
defensa en todas las direcciones. La FAT y los medios
aeromóviles se emplea para oponerse a las amenazas de
envolvimiento vertical y al reconocimiento aéreo enemigo.

Página 143 de 360


5.5.5 Seguridad
Es particularmente importante en esta operación,
asegurar a la defensa contra el peligro de las sorpresas
tácticas, teniendo presente que el enemigo posee libertad
de acción para elegir la hora, lugar, dirección de ataque
y la fuerza que empleará. Las medidas de seguridad, en
este caso, están destinadas a proporcionar al defensor
cierta libertad de acción, restringiendo la del enemigo.
Las medidas de seguridad son adoptadas en todos los
niveles de comando a fin de obtener oportunamente
informaciones sobre el enemigo y para negarle a éste
información sobre el plan de defensa. Las medidas de
seguridad, escalonadas en profundidad, desde el enemigo
hacia la posición, constituyen un verdadero sistema, que
toma al enemigo lo más lejos posible, con el objeto de
obtener un alerta temprana y un conocimiento lo más exacto
posible sobre la fuerza enemiga que se aproxima. La
movilidad y rapidez que disminuyen los plazos de
intervención, obliga a que las fuerzas de seguridad tomen
al enemigo a mayores distancias. La seguridad comprende
algo más que el empleo de fuerzas al frente de la
posición; también comprende las medidas que se toman para
negar información al enemigo, tales como camuflaje, la
contrainteligencia, el control de fuegos, etc.
5.5.6 Flexibilidad
La defensa debe planificarse con el máximo de
flexibilidad, a fin de que permita hacer frente a las
contingencias del ataque enemigo, Esta flexibilidad se
obtiene por:
- El conocimiento de la situación del enemigo.
- El eficiente empleo de los medios de
comunicación.
- Las previsiones para realizar el más rápido
reajuste del dispositivo.
- La disponibilidad y empleo oportuno de reservas
adecuadas; y
- El transporte y concentración oportuna de los
fuegos.
La rapidez y maniobrabilidad de la defensa, deben
corresponder a la rapidez y maniobrabilidad del ataque
enemigo. El defensor debe mantener la capacidad necesaria
para reaccionar e influir en la conducción de la defensa,
tanto para contrarrestar el ataque enemigo, como para

Página 144 de 360


tomar la iniciativa en caso de que éste cometa un error
táctico o presente una vulnerabilidad. Como el enemigo
mantiene la libertad de acción, el defensor deberá prever
todas las acciones que le permitan hacer frente a una
amplia gama de contingencias.
5.5.7 Empleo máximo de acciones ofensivas
El defensor debe planificar y ejecutar al máximo
acciones ofensivas con la reserva con el fin de impedir,
dificultar y expulsar el ataque enemigo si ha logrado
penetrar en la posición.
Estas acciones permiten limitar la iniciativa del
atacante. Los patrullajes agresivos, las incursiones, los
ataques de desorganización y los contraataques, son
algunos de los medios o recursos que constituyen la acción
ofensiva. La defensa estática pasiva, no conduce al éxito.
El defensor debe estar alerta en todo momento para
tomar la iniciativa y aprovechar la movilidad y acción de
choque de las unidades blindadas orgánicas o asignadas. En
la defensa móvil este fundamento se emplea en su máxima
extensión.
5.5.8 Coordinación de los planes de fuego
Deben coordinarse e integrarse los planes de fuego de
las armas de combate de artillería, de apoyo de fuego
aéreo y naval.
El plan de apoyo de fuegos resultante, debe batir al
enemigo tan lejos como sea posible, sometiéndolo a la
acción de un volumen de fuegos que se va haciendo más
potente y masivo, a medida que se acerca a la posición
defensiva. Asimismo, se deben planificar fuegos dentro de
la posición, en apoyo de los contraataques. Dicho plan,
debe coordinarse estrechamente con el plan de barreras.
5.5.9 Coordinación del plan de barreras
Los accidentes naturales del terreno se completan y
refuerzan mediante el empleo de un sistema de barreras, el
que debe coordinarse con el plan de apoyo de fuegos para
hacer más sólida la defensa.
El plan de barreras contempla el empleo de los
obstáculos naturales y artificiales con el fin de:
Retardar la progresión enemiga hacia el frente y en
los flancos,
Detener o canalizar penetraciones enemigas, hacia
áreas determinadas, donde puedan ser batidas por fuego,
derrotadas y/o destruidas.

Página 145 de 360


Se debe considerar el número suficiente de lugares de
pasaje en el sistema de barreras, para permitir el
movimiento de fuerzas amigas, el patrullaje y los
contraataques.

5.6 TIPOS DE DEFENSA


Existen dos tipos de defensa: en Posición o de Area y
Móvil, pudiendo llegar a implementarse una combinación de
las mismas.
La diferencia entre estos dos tipos de defensa,
estriba en el procedimiento general empleado para mantener
la posición. Así, mientras en la defensa en área la acción
se basa en el mantenimiento de un terreno especifico,
teniendo su aspecto dinámico en el contraataque, en la
defensa móvil, si bien puede ser necesario mantener
algunos puntos del terreno, el énfasis está en la maniobra
ofensiva de la reserva, destinada a la destrucción del
enemigo.
En la defensa de área, el grueso de las fuerzas se
dispone en posiciones de resistencia, organizadas con el
fin de mantener la posición y controlar el terreno
existente entre ellas. La reserva, se emplea para dar
profundidad a la posición, bloquear penetraciones o
realizar contraataques.
En la defensa móvil, el grueso de las fuerzas se
mantiene como reserva mientras que el resto se organiza en
posiciones de resistencia. La reserva se emplea,
normalmente, en contraataques para destruir al enemigo en
las regiones y en el, o en los momentos más favorables.
5.6.1 Elección del Tipo de Defensa.
Los factores a tener en cuenta en la elección del tipo
de defensa son: la misión, el enemigo, el terreno, las
propias tropas y el tiempo disponible para organizar la
defensa.
Cuando la misión permita elegir el tipo de defensa se
deberán evaluar estos factores individualmente y luego
integrar las conclusiones, ya que normalmente ninguno de
ellos puede calificarse como prioritario; sin embargo, en
algunas situaciones uno o más de estos factores pueden ser
determinantes.
5.6.1.1 La Misión
La misión recibida del escalón superior puede
prescribir el tipo de defensa o dejar esta elección al

Página 146 de 360


comando subordinado. En este último caso, del análisis de
la misión pueden surgir conceptos que orienten hacia el
tipo de defensa a adoptar. Por otra parte, la misión puede
incluir restricciones que no permitan la adopción de un
determinado tipo de defensa.
Si la misión asigna un frente que excede las
posibilidades de la unidad, para organizar y ocupar una
posición a lo largo de aquel, esta situación lleva a
adoptar la defensa móvil; en cambio, un frente
relativamente estrecho favorece la defensa en posición.
5.6.1.2 El Enemigo
Si el enemigo cuenta con una movilidad táctica
superior, es preferible adoptar la defensa en posición; la
situación contraria lleva a la defensa móvil.
Por otra parte, cuanto mayor es la superioridad en
potencia de combate del enemigo, tanto más conveniente es
la defensa móvil.
5.6.1.3 El Terreno
Cuando se cuenta con zonas del terreno de gran valor
defensivo, entendiéndose por tal aquel terreno dominante,
con buena observación y buenos campos de tiro sobre las
avenidas de aproximación del enemigo es preferible adoptar
la defensa en posición; de otro modo, cuando el terreno
tiene buena transitabilidad, no presenta obstáculos, ni
zonas de destacado valor defensivo es más conveniente la
adopción de la defensa móvil.
5.6.1.4 Las tropas disponibles
La evaluación de las tropas disponibles en relación
con las del enemigo, proporciona elementos de juicio sobre
el tipo de defensa a adoptar. Igualmente, cuando se cuenta
con adecuada cantidad de tanques, es más conveniente la
defensa móvil; en caso contrario es preferible la defensa
en posición.
5.6.1.5 El tiempo disponible
Normalmente la defensa en posición requiere mayor
tiempo para la organización del área de defensa avanzada
por lo tanto cuando el tiempo es corto la defensa móvil se
ve favorecida.
5.6.2 Guía para la elección del tipo de defensa.
5.6.2.1 La defensa de área se adopta generalmente cuando:
- La profundidad para la maniobra en la zona de
resistencia es limitada.
- La misión exige el mantenimiento de una zona del

Página 147 de 360


terreno.
- El enemigo posee superior movilidad táctica.
- El terreno limita la libertad de movimiento de la
reserva del defensor.
- El tiempo disponible es suficiente para organizar
la posición.
- El frente es relativamente estrecho.
- El enemigo posee superioridad aérea.
5.6.2.2 La defensa móvil se adopta cuando
- La misión prescribe destruir al enemigo.
- La misión y el terreno permiten conducir la
defensa en mayor profundidad que en la defensa de área.
- El terreno, particularmente la transitabilidad,
facilita la maniobra del defensor.
- La movilidad del defensor es igual o superior a
la del enemigo.
- La situación aérea permite relativa libertad de
movimiento al defensor.
- No se dispone de tiempo suficiente para organizar
la posición.
- El frente asignado excede las posibilidades de
las fuerzas defensoras, para organizar en forma efectiva
el área de defensa avanzada en una defensa de área.
- La potencia combativa del atacante es muy
superior.

5.7 ELECCION DE LA POSICION


Muy pocas serán las situaciones en las cuales se
encuentre una zona del terreno que reúna todas las
condiciones ideales para conducir una defensa; por lo que
en algunos casos, se tendrá que elegir un terreno con
algunas limitaciones para su defensa.
Al elegir una posición defensiva, debe tenerse en
cuenta principalmente, que ella permita cumplir la misión
y que facilite las operaciones futuras.
El Frente y la profundidad de la posición deben
guardar relación con el tipo de defensa a adoptar, con los
efectivos disponibles, el terreno y el enemigo.
Dentro de las limitaciones que impone la misión, la
posición elegida debe permitir al defensor explotar al
máximo las posibilidades de sus fuerzas y reducir a su vez
las del enemigo. De esta manera un comando que disponga de
mayor cantidad de elementos blindados para su defensa,

Página 148 de 360


deberá buscar un terreno en el cual pueda obtener el mayor
provecho en el empleo de sus tanques; si no se dispone de
esa superioridad, se buscará una zona en la cual, la
efectividad de los blindados enemigos se vea reducida.
La posición elegida debe responder a la finalidad
particular de la defensa, permitiendo al mismo tiempo la
maniobra futura, sin comprometer el éxito de la acción
defensiva. Su orientación general debe ser tal que obligue
al enemigo a efectuar una maniobra que requiera gran
pérdida de tiempo.
Una posición que pueda eludirse fácilmente carece de
valor defensivo. Una posición sobre el flanco de la
posible dirección de progresión del enemigo, sólo tiene
valor cuando ella es capaz de obligar al enemigo a cambiar
de dirección para atacarla de frente.
Asimismo la posición elegida debe proporcionar buena
observación y buenos campos de tiro en todo su frente y
profundidad, a fin de mantener al enemigo bajo un fuego
continuo y así lograr la máxima desorganización de su
ataque.
En el interior de ella debe disponerse de buenos
cubiertos, abrigos, vías de comunicación y emplazamientos
adecuados para la reserva.
También debe facilitar la organización de la defensa
en profundidad y en lo posible contar con obstáculos
naturales que dificulten la progresión del enemigo,
disminuyan el ímpetu de su ataque y lo canalicen hacia las
zonas elegidas para su destrucción.

5.8 PLANES
La misión y la situación, serán las que impongan la
región general donde tenga que conducirse la defensa. En
su interior, el Comandante, luego del estudio sobre la
carta, eligirá el lugar específico que reúna las mejores
condiciones para la defensa. Esta elección, sobre la
carta, debe ser complementada por reconocimientos
personales del terreno seleccionado.
Elegida la zona del terreno donde se va a cumplir la
misión defensiva, se establece en líneas generales, el
plan de defensa que considere el probable empleo de los
medios disponibles y que permita determinar las medidas
más urgentes a adoptar para ejecutar el mismo. Estas
medidas pueden ser: refuerzo de la cobertura,

Página 149 de 360


adelantamiento de medios para establecer Puestos Avanzados
Generales, etc.; que permitan al grueso, el tiempo
suficiente para ocupar y organizar la posición.
Para desarrollar un adecuado Plan de Defensa, será
necesario tener en cuenta:
- La misión.
- La naturaleza del terreno elegido y el tiempo que
deberá ser mantenido.
- La profundidad de la zona de acción.
- La potencia relativa de combate de las propias
tropas con relación a las del enemigo.
- La situación aérea existente.
- La movilidad relativa de ambos adversarios.
Los planes deben contemplar la coordinación de las
fuerzas desplegadas en la defensa en posición, los fuegos
de apoyo y el empleo de las reservas, a fin de obtener una
combinación apropiada de los medios disponibles que
permita cumplir la misión defensiva.
Una vez culminada la confección del Plan de Defensa,
el mismo debe contener fundamentalmente lo siguiente:
- Concepto de la operación del comandante.
- Ubicación de las fuerzas de seguridad (fuerza de
cobertura, puestos avanzados generales y/o puestos
avanzados de combate).
- Ubicación del límite anterior del área de defensa
avanzada (L.A.A.D.A).
- Límites y puntos de coordinación.
- La organización para el combate.
- Misiones que se asignan a las unidades
subordinadas.
- El apoyo de fuegos.
- Las barreras.
- Planes de contraataque.
Los misiones de la reserva, incluyendo la ejecución de
los planes de contraataque, de seguridad del área de
retaguardia, de preparación de posiciones de bloqueo, etc.
deben ser señaladas claramente y se deben establecer
prioridades para garantizar una completa comprensión.
Cuando la decisión de pasar a la defensiva se determina
estando en contacto con el enemigo, no será posible
ejecutar reconocimientos detallados y la planificación
será muy sumaria; apoyándose en la inteligencia
disponible, se indicará, valiéndose de la carta, la

Página 150 de 360


ubicación del área de defensa avanzada y posteriormente
durante la ocupación de dicha zona, se efectuarán las
actividades necesarias.
La situación determinará el mayor o menor tiempo
disponible para organizar y ocupar la posición. Cuando una
Unidad que debe ocupar una posición los
defensiva está desplazándose, no debe detenerse; los
Comandantes y Estados Mayores se adelantan a efectuar los
reconocimientos, permitiendo con ello que cuando las
tropas lleguen a las inmediaciones de la posición
defensiva se dirijan directamente a sus emplazamientos.
En toda circunstancia, el Comandante que conduce una
defensa deberá estar en condiciones de hacer frente a
cualquier ataque por sorpresa del enemigo, aún durante la
organización de la posición.

5.9 PLAN DE APOYO DE FUEGOS


5.9.1 Generalidades.
Normalmente los fuegos orgánicos de cualquier escalón,
no son suficientes para cubrir las necesidades; en
consecuencia, el escalón inmediato superior deberá
proporcionar los fuegos adicionales necesarios de acuerdo
a las prioridades y directivas establecidas por el escalón
superior. Este procedimiento se emplea desde el nivel Sub-
Unidad hasta el más alto escalón (Ejército en Operaciones)
y permite la mejor utilización de todos los fuegos
disponibles de las tropas de combate, artillería,
aviación, naval. Los planes de apoyo de fuegos se preparan
simultáneamente con el plan de maniobra.
5.9.2 Coordinación.
El Plan de Apoyo de Fuegos debe coordinarse con el
plan de barreras y los planes de contraataque.
El Plan de Apoyo de Fuegos es un documento que
contiene los detalles que se requieren para la
coordinación inicial y el empleo de todo el apoyo de
fuegos que la Unidad tenga disponible. Normalmente, se
expide como un anexo a la Orden de Operaciones y lleva
como Apéndices los planes correspondientes al empleo del
apoyo de fuegos que haya disponible.
- Apoyo aéreo defensivo.
En la defensa, la Fuerza Aérea amiga, actuará
principalmente contra la aviación enemiga, debido a que el
atacante dispondrá normalmente de un fuerte apoyo aéreo.

Página 151 de 360


El apoyo aéreo debe permitir el libre movimiento de
las fuerzas de la defensa, especialmente de las reservas.
Se debe planificar también, misiones de apoyo aéreo
ofensivo, para desorganizar las formaciones de ataque
enemigo.

5.10 PLAN DE BARRERAS


Para que el empleo de obstáculos sea adecuado, se
requiere una planificación coordinada y centralizada en
los más altos escalones de Comando, con la finalidad de
lograr economía y un alto rendimiento, en provecho de las
operaciones defensivas.
Es necesario sacar la máxima ventaja de los obstáculos
naturales y mejorarlos.
Se hará todo el esfuerzo para cubrir los obstáculos
con el fuego y la observación. Se requieren brechas y
pasajes en las barreras para permitir el movimiento
necesario de las reservas y otras fuerzas dentro del área
de defensa avanzada. El Plan de Barrera establece la
ubicación de las barreras, la responsabilidad de su
construcción y la prioridad en su ejecución.
El Plan de Barreras se prepara concurrentemente con el
Plan de Fuegos y debe ser coordinado cuidadosamente con
los Planes de Contraataque.
En la defensa, las barreras podrán ser empleadas
ventajosamente para:
- Retardar el avance del enemigo al frente o
flancos del área de defensa avanzada.
- Retardar o limitar el movimiento de una fuerza de
penetración o envolvimiento.
- Canalizar las penetraciones enemigas según los
ejes que más convengan a la defensa.
- Separar los blindados enemigos de su infantería.
- Permitir retirar unidades de una zona para
emplearlas en otro lugar.
Los factores limitativos en el empleo de las barreras
en una acción defensiva son: el tiempo, los medios
disponibles, las posibilidades del enemigo y los planes
futuros del Comando; cualquiera fuere el valor negativo de
estos factores, el sistema de barreras debe ser
convenientemente coordinado, a fin de sacar todo el
provecho posible.

Página 152 de 360


5.11 EMPLEO DE LA RESERVA
5.11.1 Ataques de desorganización
Los planes de empleo de la reserva deben incluir
ataques de desorganización para imposibilitar o retardar
los ataques del enemigo. El ataque de desorganización es
lanzado normalmente contra las fuerzas del enemigo que se
están organizando o reuniendo para ejecutar un ataque.
Los planes para el ataque de desorganización son
realizados y coordinados con el mismo grado de detalle que
un ataque normal.
La planificación se inicia en base a suposiciones
sobre la ubicación de áreas del terreno que pueden ser
empleadas como zonas de reunión adelantadas o posiciones
de ataque. La planificación incluye todas las previsiones
necesarias, a fin de evitar fracasos, ya que estos
pondrían en peligro la defensa.
La decisión de empeñar una fuerza en un ataque de
desorganización debe ser estudiada cuidadosamente de
acuerdo con las otras consideraciones de la misión en
general, ya que la fuerza que ejecute al ataque puede ser
destruida por fracciones. Por esta razón la decisión de
ejecutar estos ataques estará a cargo del más alto escalón
que conduce la defensa y deben realizarse con fuerzas muy
móviles y potentes, en particular blindadas, apoyadas por
fuegos masivos de artillería y, si se dispone, de apoyo
aéreo directo.
Los planes para un ataque de desorganización,
normalmente, se establecen a partir del nivel G.U.T.O.
5.11.2 Contraataques
El contraataque es un componente básico y esencial de
la defensa y su planificación se efectúa simultáneamente
con las otras fases de planificación.
Los planes de contraataque se distribuyen con
suficiente anticipación a todos los escalones
subordinados, a fin de que sus Comandos puedan preparar
planes detallados. Estos planes deberán ser, aprobados por
el Comando Superior y preparados y ensayados según lo
permita el tiempo disponible.
Debido a que representan acciones futuras que han de
llevarse a cabo en una situación que todavía no se ha
desarrollado, estos, se basan en hipótesis.
Para cada probable dirección de actuación del enemigo
se formula como mínimo un plan de contraataque. El frente

Página 153 de 360


y profundidad de la penetración supuesta se basa en el
terreno, nuestras propias posibilidades y las del enemigo.
Los planes se deben preparar asignando prioridades a
las amenazas al cumplimiento de la misión de la unidad que
conduce la defensa. Estas prioridades, puede establecerse
en el concepto de la operación del comandante.
El objetivo que se prescribe a la fuerza que realiza
el contraataque, es restablecer la integridad del área de
defensa avanzada.
La dirección del ataque se establece al planificar el
contraataque. Aquella debe conducir al objetivo,
normalmente hacia la base de la penetración supuesta, y
debe proporcionar suficiente terreno y espacio de
maniobra, sin entorpecer a las fuerzas que rechazan la
penetración y sin exponer el flanco de las fuerzas
contraatacantes al fuego enemigo.
Las hipótesis para los planes de contraataque se basan
en los siguientes elementos de juicio:
- Efectivos y composición de la fuerza enemiga.
- La capacidad de las fuerzas amigas para rechazar
o limitar la penetración.
- Los efectivos y capacidad de reacción de las
fuerzas para ejecutar el contraataque.
- La máxima penetración enemiga que se podría
permitir antes de ejecutar el contraataque.
El frente de la penetración supuesta se determina
principalmente en base a la magnitud de la fuerza
considerada en la dirección de progresión del enemigo y
los procedimientos empleados por éste en el desplazamiento
de sus fuerzas para el ataque. Este frente, se basa
también en el terreno que se defiende y en la capacidad de
las fuerzas amigas para mantener ese terreno en las
inmediaciones de la penetración.
La profundidad de la penetración supuesta, se
determina teniendo en consideración que dicha penetración
permita mantener aún la capacidad de lanzar un
contraataque. Debido a que es preferible que el
contraataque se lance cuando el ataque enemigo haya sido
retardado o detenido; la profundidad que puede ser
aceptada en la penetración, tiene relación directa con las
características del terreno que faciliten el bloqueo de
las fuerzas enemigas, una vez que éstas hayan penetrado en
la posición.

Página 154 de 360


El comando que está planificando el contraataque,
también debe tener en cuenta la ubicación y la capacidad
de las fuerzas de reserva a fin de formular dicho plan.
Si se determina que la profundidad de la penetración
enemiga, requerirá que una parte de la reserva bloquee al
enemigo para crear las condiciones adecuadas para un
contraataque, entonces el resto de la reserva es la fuerza
que queda disponible como fuerza de contraataque.
Si se determina que la profundidad de la penetración
enemiga será de tal magnitud que lógicamente podrá ser
controlada por las fuerzas del área de defensa avanzada,
entonces toda la reserva estará disponible como fuerza de
contraataque.
Normalmente se contempla el empleo de toda la reserva
para ejecutar el contraataque.
Esto no significa que el comandante no pueda tener su
propia reserva para influir en la ejecución de la defensa.
En la planificación del contraataque se toman en
cuenta las siguientes consideraciones tácticas:
- La misión.
- La naturaleza del terreno: ubicación de los puntos
críticos, profundidad a la que se encuentran y las
ventajas que proporcionan al defensor; avenidas de
aproximación favorables a la progresión enemiga y avenidas
de aproximación para las fuerzas amigas.
- La movilidad relativa: capacidad de las fuerzas
amigas para moverse y reunirse en relación con las mismas
capacidades del enemigo.
- La profundidad del área defensiva. Profundidad
hasta la que podrá aceptarse una penetración enemiga,
teniendo en cuenta el terreno, avenidas de aproximación y
otros aspectos militares, considerando que lo más
importante es la retención de la capacidad de poder lanzar
el contraataque.
- La probable potencia de combate del enemigo en la
penetración.
Tener en cuenta la capacidad de aumentar la potencia
de combate que tendrá el enemigo para determinar las
probabilidades de éxito del contraataque.
- El Apoyo de Fuego disponible.
- La situación aérea. Concentración y movimiento de
las reservas ante la posibilidad enemiga de emplear su
F.A.T..

Página 155 de 360


- Las disponibilidades de reservas por los
escalones superiores.
Capacidad que tiene el escalón superior para influir
en la conducción de la defensa y en el cumplimiento de la
misión, en el caso de no lograr sus propósitos el
contraataque.
Los planes de contraataque deben contener, de acuerdo
a la situación, lo siguiente:
- El objetivo
- La línea de partida.
- La dirección del ataque.
- La posición de ataque e itinerarios.
- Los cambios en los límites existentes, de ser
pertinentes.
- Las posiciones de bloqueo que serán ocupadas, si
se estima necesario.
- La organización para el combate (composición de
la fuerza de contraataque).
- Las misiones a las unidades subordinadas.
- El apoyo de fuegos.
- Medidas de Comunicaciones a establecerse.
- Reserva temporal.
5.11.3 Bloqueo de la penetración.
La planificación de una operación de bloqueo se realiza en
base a la hipótesis de una posible penetración enemiga,
sobre el eje de una avenida de aproximación que conduzca a
un punto crítico y se organiza como una posición de
resistencia dentro del A.D.A. incluyendo los planes de
apoyo, apoyo mutuo, etc.

5.12 RECONOCIMIENTOS.
Formulados los planes preliminares en base al estudio
de la carta y elegida la zona de defensa, el Comandante
ejecuta un reconocimiento personal tan completo y
detallado como el tiempo y la situación lo permitan,
teniendo presente en todo momento que las recomendaciones
no deben demorar la ocupación de la posición , ya que lo
más importante es la organización del terreno.
Cuando el contacto con el enemigo no se ha
materializado, existe libertad de acción para ejecutar los
reconocimientos. En cambio, si la defensa se adopta a
partir del contacto, los reconocimientos y la ocupación de
la posición se realizan simultáneamente.

Página 156 de 360


Los principales aspectos que deben verificarse en los
reconocimientos son:
- Direcciones de aproximación del enemigo,
particularmente para blindados.
- Puntos críticos que deben ser ocupados para la
defensa o en los que se detendrá al enemigo.
- Obstáculos naturales delante o en el sector
defensivo que pueden ser empleados para aumentar el poder
defensivo del mismo.
- El terreno que ocuparán las fuerzas de
protección.
- Naturaleza y prioridad de los trabajos a
realizar.
- Ubicación del límite anterior del A.D.A. (LAADA).
- Zonas de Barreras.
- Límites y puntos límites.
- Zonas para la ubicación y despliegue de la
reserva.
- Posiciones preparadas y/o de bloqueo.
- Direcciones e itinerarios para los contraataques.
- Ubicación de los puestos de comando.
- Ubicación de las instalaciones logísticas.
Un estudio del terreno delante de la posición
proporciona valiosas indicaciones sobre las posibles zonas
de reunión del enemigo, posible ubicación de su
artillería, terreno favorable para el empleo de sus
blindados y la zona que ofrece mayores ventajas para su
acción principal.
El Comandante, basando su acción en la misión
recibida, en su apreciación, en los planes establecidos,
en su reconocimiento personal y en los partes de
reconocimiento de sus subordinados, ratifica, modifica y/o
precisa los siguientes aspectos de su plan de Defensa:
medidas de seguridad, ubicación del límite anterior del
área de defensa avanzada (L.A.A.D.A.), dispositivo de sus
fuerzas, ZZ.AA., empleo de la artillería, defensa
antitanque, efectivo y ubicación de la reserva, etc.
El Comandante, luego del reconocimiento, efectúa las
modificaciones con lo cual da carácter definitivo a su
plan e imparte la orden para la defensa.

5.13 ORGANIZACION DEL TERRENO.


Los factores tiempo y medios disponibles, son los que

Página 157 de 360


hay que tener en cuenta para la organización del terreno
en el área de defensa avanzada. De acuerdo al tiempo y a
los medios disponibles, una posición defensiva se
considera como organizada o sumariamente organizada.
Las medidas destinadas a aumentar los efectos del
fuego y proporcionar un adecuado sistema de
comunicaciones, tienen prioridad sobre los trabajos de
fortificación de campaña (organización del terreno).
La organización del terreno empieza tan pronto como
las tropas llegan a la posición y se continúa, a menos que
sea interrumpida por la acción enemiga, durante todo el
tiempo que ésta se ocupe. La secuencia de trabajo se
indica en las órdenes en forma de prioridades; sin
embargo, la asignación de prioridades, no impide la
ejecución simultánea de varios trabajos.
En la organización del terreno es necesario prever
vías de abastecimiento y evacuación hasta el nivel Unidad.
Estas rutas se estudian y deben concordar con el Plan de
Defensa, de forma tal que ellas no interfieran los
movimientos de las reservas. Las vías de abastecimientos
deben ser señalizadas y para facilitar el tránsito y
evitar interferencias, se establecerán rutas alternas.
Otro aspecto muy importante en la organización del
terreno, es el de aumentar el poder defensivo de los
obstáculos existentes, lo que se logra principalmente por
el sembrado de minas. Estos trabajos son de
responsabilidad de las Unidades de Ingenieros, las que
deben estar convenientemente equipadas.

5.14 MEDIDAS DE COORDINACION Y CONTROL EN LA DEFENSA.


El límite anterior del área de defensa avanzada
(L.A.A.D.A.), es una línea que orienta y proporciona
referencias a todos los escalones de comando para la
planificación y conducción de la defensa. El LAADA se
materializa en la carta graficándose por una línea que une
puntos límites; ellos señalan al comando subordinado las
zonas de acción en la posición que les corresponde
defender, con los detalles suficientes como para
proporcionar continuidad y coordinación en toda la
posición defensiva.
Los límites laterales permiten determinar las zonas de
responsabilidad de las Unidades subordinadas; ellos deben
prolongarse mas allá del alcance de los fuegos de apoyo

Página 158 de 360


directo o los límite de la observación terrestre; los
límites laterales se extenderán hasta el límites de
retaguardia del escalón considerado.
Los puntos límites se fijarán en el LAADA donde cruzan
los límites laterales, como puntos específicos para
coordinar los fuegos y la maniobra entre las fuerzas
adyacentes.
Las medidas de coordinación y control que corresponden
a los medios de apoyo de fuego se encuentran en el Manual
de Coordinación de Apoyo de Fuegos.

5.15 DEFENSA EN POSICION O DE AREA


5.15.1 Generalidades.
La defensa en posición es un tipo de defensa en la
cuál el grueso se organiza en una posición de resistencia,
que constituye el área de defensa avanzada, la que debe
mantenerse y negarse al enemigo. La reserva se emplea para
dar profundidad a la posición defensiva, bloquear una
penetración o ejecutar contraataques.
La defensa en posición se organiza sobre una serie de
puntos importantes del terreno, que se seleccionan
teniendo en cuenta su valor táctico y cuya posesión
garantice la integridad del área de defensa avanzada
constituida por posiciones defensivas, dispuestas en el
sentido del frente y profundidad, organizadas con
trincheras, fosos, obstáculos y espaldones, para la
defensa en todas direcciones.

Página 159 de 360


_5.15.2 Trazado del límite anterior del área de Defensa
avanzada (L.A.A.D.A.). El L.A.A.D.A. es una línea
que orienta y proporciona referencias a todos los
escalones de comando para la planificación y conducción de
la defensa. El trazado general del L.A.A.D.A. se
materializa en la carta mediante una línea que une los
puntos límite; los que señalan al comando subordinado el
frente de dicha posición que le corresponde defender con
los detalles suficientes que permitan la continuidad y
coordinación en toda la posición defensiva.
El L.A.A.D.A. se determina con mayor precisión en los
niveles sucesivos de comando; es decir, que el escalón
superior determina el L.A.A.D.A. a las Unidades
subordinadas que emplee en el área de defensa avanzada
(A.D.A.), los Comandantes de éstas a su vez les señalan el
L.A.A.D.A. a sus respectivos elementos subordinados.
Para definir aún más el L.A.A.D.A., un Comandante
puede señalar el trazado de ésta a un comando subordinado
mediante el establecimiento de puntos del terreno
fácilmente identificables y la unión de éstos por medio de
una línea. Este procedimiento se emplea normalmente cuando
Página 160 de 360
el escalón superior ha tenido la oportunidad de realizar
un reconocimiento detallado del terreno.
Finalmente, se llega a la determinación exacta del
L.A.A.D.A., cuando los elementos que actuarán en el A.D.A.
ocupan el terreno. El trazado del L.A.A.D.A. debe
facilitar el apoyo mutuo y la defensa en profundidad. Se
deben aprovechar los obstáculos existentes siempre que
éstos no impidan al defensor el empleo apropiado del
terreno en otros aspectos militares.
En los casos de defensa en terrenos donde existen
alturas que forman compartimentos transversales y le
permiten a los comandos subordinados el espacio
suficiente, el L.A.A.D.A. puede trazarse a lo largo de una
cresta militar, cresta topográfica, en una contrapendiente
o detrás de un obstáculo importante tal como un río,
bañado, etc.
5.15.3 Frente y Profundidad
El frente y la profundidad del sector defensivo
asignado a una Unidad por el escalón superior determina el
área de seguridad, el área de defensa avanzada y el área
de retaguardia de dicha Unidad.
El frente del sector defensivo asignado a una Unidad
se determina, en función de la misión, del frente asignado
a la unidad superior, la capacidad de combate de la
unidad, la disponibilidad de medios, la cantidad y tipo
del apoyo disponible (artillería, aviación), el valor
defensivo natural del terreno, condiciones meteorológicas
y posibilidades del enemigo. Las limitaciones en los
campos de tiro y en la visibilidad del defensor,
proporcionan al enemigo importantes ventajas y por
consiguiente reducirán las posibilidades del defensor para
desarrollar su máxima potencia combativa, lo que obligará
a reducir el frente de la zona que pueda ser defendido por
una determinada Unidad.
Cuando no sea posible ni conveniente ocupar
uniformemente toda la zona asignada a la Unidad, se
organizarán aquellas partes del terreno que por sus
características proporcionen el máximo de ventajas al
defensor, pudiendo quedar intervalos entre las partes de
la posición organizada, los que deberán ser cubiertos por
el mayor número de armas compatibles con la importancia y
dimensiones del terreno considerado en el intervalo. Sin
embargo, el perímetro de una posición de resistencia no

Página 161 de 360


debe presentar intervalos en lo posible.
La profundidad que se le asigne a una unidad dependerá
de los siguiente factores:
- La ubicación del L.A.A.D.A.
- El terreno que debe ser defendido en profundidad.
- El espacio que requiere dicha Unidad para ubicar
sus reservas, los elementos de comando y control, apoyo al
combate y de servicios.
De manera general y teniendo en cuenta de que será muy
difícil actuar sobre un terreno ideal, no es posible fijar
de antemano dimensiones exactas para los sectores
defensivos. Sin embargo, los manuales tácticos de los
diferentes escalones, fijarán referencias al respecto.
5.15.3.1 Profundidad y escalonamiento
Las distancias e intervalos entre las áreas defensivas
de la posición deben permitir el apoyo mutuo entre dichas
áreas, evitando al mismo tiempo que dos de ellas estén
situadas dentro de la zona de dispersión del mismo tiro de
artillería.
Este escalonamiento en profundidad disminuye los
efectos del fuego enemigo, asegura la continuidad de los
fuegos defensivos y permite contraatacar al enemigo,
cuando hubiera logrado penetrar en el área de defensa
avanzada.
El valor defensivo natural de la posición tiene una
influencia directa en el dispositivo adoptado, tanto en el
sentido del frente como en el de la profundidad. La
defensa en todas direcciones de las áreas de resistencia,
mutuamente apoyadas, es de suma importancia. Las partes
del frente, en las que el terreno favorece la defensa, son
mantenidas con menores efectivos, en su defecto las
Unidades que en ellas se encuentren reciben sectores más
amplios.
Algunas partes del frente pueden no ser ocupadas,
defendiéndolas en forma efectiva mediante una combinación
de fuegos y obstáculos.
Los terrenos cubiertos exigen mayor densidad de
tropas.
5.15.3.2 Frente
El frente de los sectores asignados a las Unidades
varía de acuerdo con los siguientes factores:
- Valor defensivo de las diferentes partes de
la posición.

Página 162 de 360


- Importancia relativa de los sectores.
- Grado de control requerido.
- Efectivo, fuerza y potencia de fuegos de las
unidades disponibles.
5.15.3.3 Posibilidades del enemigo
La extensión de los intervalos no ocupados entre las
diferentes áreas de resistencia depende de las necesidades
de control y de las características de los campos de
tiro. Es conveniente responsabilizar por la defensa de un
punto crítico a una sola Unidad.
La economía de fuerzas se obtiene, asignando a las
Unidades frentes en proporción directa al valor defensivo
(artificial o natural) del terreno. Esto permite al
comandante mantener un a reserva adecuada Las zonas de
acción, se indican en las órdenes, estableciendo límites
entre Unidades, de tal forma que no quede duda, sobre a
quién corresponda la responsabilidad de defender el
terreno que domina una determinada dirección de
aproximación.
5.15.4 Distribución de las fuerzas
La Posición defensiva solo cumple con su objetivo, si el
enemigo no tiene otro alternativa que atacarla.
A fin de que el enemigo llegue disminuido delante de la
posición defensiva, se le debe ocasionar el máximo
desgaste, desde de los más lejos posible y si logra
penetrar a pesar de la resistencia que se le ofrece, se le
destruirá con la reserva. Teniendo en consideración que en
este tipo de operación se con templa el mantenimiento de
un terreno especifico, la distribución de las fuerzas debe
realizarse de tal manera que los medios disponibles tengan
la potencia combativa suficiente en el área de defensa
avanzada, como para impedir el acceso del enemigo. Por
esta razón en la defensa en posición A.D.A. recibe la
mayor proporción de las fuerzas disponibles.
La maniobra defensiva requiere, que las fuerzas sean
distribuidas en el sentido de la profundidad, entre las
tres zonas del sector defensivo.
Estas fuerzas se conocen como: Fuerzas de seguridad,
Fuerzas del Area de Defensa Avanzad y Fuerzas de Reserva.
5.15.4.1. Fuerzas de Seguridad
Son las Fuerzas empleadas en el Area de Seguridad y
comprende a las designadas por el escalón superior y a las
establecidas por los comandos subordinados.

Página 163 de 360


En la defensa en posición, las fuerzas de seguridad
cumplen en general la siguiente misión:
-Informar oportunamente sobre la aproximación de
las fuerzas enemigas.
-Retardar al enemigo a fin de proporcionar el
grueso el tiempo necesario para organizar y
ocupar la posición.
-Obligar al enemigo a desplegarse prematuramente.
-Engañar al enemigo sobre la verdadera ubicación
del Area de Defensa Avanzada.
-Cubrir el repliegue de tropas adelantadas.
Las Fuerzas se seguridad en la defensa en
posición están constituidas por:
-Fuerza de cobertura (F.Cob.)
-Puestos avanzados generales (P.A.G.)
-Puestos avanzadas de combate (P.A.C.)
-Elementos de seguridad local.
5.15.4.1.1 Puestos avanzados generales
-Los Puestos Avanzados Generales, cuando son
establecidos, normalmente son dispuestos por el
escalón División Superior.
-Su composición y ubicación dependen de la
misión, del terreno y de las posibilidades;
normalmente, están organizados con fuerzas que
disponen de adecuada movilidad, con suficiente
apoyo de fuegos y de Ingenieros, actuando en
frentes extensos y que contemple la presencia de
los calibres existentes en el A.D.A. empleando al
máximo los obstáculos.
-Su misión principal es retardar al enemigo
durante un periodo de tiempo específico.
Sus otras misiones incluyen, informar
oportunamente sobre la aproximación del enemigo,
desorganizarlo y producirle el máximo desgaste,
engañarlo sobre la verdadera ubicación de la
posición defensiva y cubrir el repliegue de la
Fuerza de Cobertura.
El emplazamiento de los Puestos Avanzados
Generales, es fijado normalmente por el comando
superior que coordina la defensa. Este
emplazamiento, debe negar al adversario,
observación directa sobre la posición o
facilidades que le permitan establecer zonas de

Página 164 de 360


reunión o posiciones de ataque.
Normalmente se ubican entre los 8 y 16
kilómetros, al frente del L.A.A.D.A., dependiendo
de la movilidad del enemigo, del terreno y el
tiempo de retardo necesario.
Esta distancia puede ser menor para Unidades de
inferior movilidad táctica.
-Los Puestos Avanzados Generales cumplen su
misión de acuerdo a los procedimientos de la
acción retardatriz. A menos que lo fije su
misión, no deben engancharse seriamente en un
combate estrecho.
-Los puestos Avanzados Generales provienen de las
Fuerzas de Reserva.
5.15.4.1.2 Puestos Avanzados de Combate (P.A.C.)
Constituyen los elementos de protección de las GG.UU. de
combate, son organizado y controlados por estas GG.UU. Su
composición, la distancia a la cual se ubican y su
conducta, se determinan en función de la misión y del
terreno. Cuando existen Puestos Avanzados Generales, su
fuerza será menor; por otra parte, la distancia a la que
se encuentren no deberá sobrepasar el alcance eficaz de la
Artillería del A.D.A.
El terreno elegido para instalar los Puestos Avanzados
Generales, su fuerza será menor; por otra parte, la
distancia a la que se encuentren no deberá sobrepasar el
alcance eficaz de la Artillería del A.D.A.
El terreno elegido para instalar los Puestos Avanzados de
Combate deberá tener las siguientes características:
-Permitir el control de las avenidas de
aproximación enemigas hacia la zona de resistencia.
-Facilitar la observación lejana.
-Disponer de obstáculos al frente y a los
flancos.
-Disponer, en lo posible, de rutas de repliegue
adecuadas.
-Negar al enemigo la observación directa sobre
A.D.A.
-Encontrarse a la distancia de apoyo de los
fuegos de la Artillería del Area de Defensa
Avanzada.
Las misiones de los Puestos Avanzados de Combate incluyen:
-Informar sobre la aproximación del enemigo,

Página 165 de 360


particularmente sobre las direcciones de
progresión.
-Engañar al enemigo sobre la verdadera ubicación
del A.D.A.
-Protejer el repliegue de los P.A.G.
-Los P.A.G. se ubican sobre los terrenos mas
apropiados existente delante del L.A.A.D.A. Los
P.A.C. podrán ser de vigilancia o de resistencia.
Cumplen su Misión de vigilancia por medio de la
observación, del fuego y de la alerta oportuno a
las Fuerzas del A.D.A. y su misión de resistencia,
manteniendo determinados puntos críticos del
terreno, durante períodos limitados de tiempo.
5.15.4.1.3 Elementos de seguridad local.
Son fuerzas que se sitúan en la zona de terreno
comprendida entre los P.A.C. y el L.A.A.D.A.;
básicamente comprenden Puestos de Observación (Puestos de
Escucha durante la noche) complementándose con patrullas
que mantienen el contacto con los P.A.C. e incrementan la
protección inmediata de la posición.
-Los puestos de observación (PP.OO) tiene como misión
alertar oportunamente sobre la aproximación del enemigo,
conducir el tiro de Artillería y contribuir a la obtención
de información.
Durante los periodos de escasa visibilidad, se convierten
en Puestos de Escucha (PP.EE.). En lo posible deben estar
equipados con elementos electrónicos de observación,
escucha y alarma.
-Las patrullas constituyen el elemento dinámico de la
vigilancia; se desplazan entre los PP.OO y PP.EE., para
prevenir o descubrir las infiltraciones enemigas, dando
agresividad al sistema de vigilancia. Son preferiblemente
motorizadas y durante la noche se les puede emplear para
mantener el enlace con las Unidades vecinas y capturar
prisioneros de guerra (PP.GG.) para obtener información.
5.15.4.1.4 Fuerzas del A.D.A
Son las fuerzas que el comando emplea para la ejecución de
la defensa y que están ubicadas en el A.D.A.. En la
defensa de área estas fuerzas cumplen su misión de
defender la zona de acción asignada , ejecutando
operaciones para detener, rechazar o expulsar al enemigo.
En la ejecución de estas tareas, la destrucción del
enemigo se encuentra implícita

Página 166 de 360


- Detención del enemigo:
- Esta tarea se cumple habiendo fuego contra el enemigo,
cuando este se acerque al A.D.A. para lo cual se
pueden emplear dos procedimientos: se abre fuego sobre el
enemigo tan pronto se encuentre dentro del alcance eficaz
de cada una de las armas del A.D.A. o se suspenden los
fuegos de parte de todas las armas de tiro directo
ubicadas en y detrás del L.A.A.D.A., hasta que el enemigo
llegue dentro del alcance eficaz de las armas se fuegos
individuales. La elección del procedimiento a emplear,
dependerá del conocimiento que posee el enemigo de la
ubicación del A.D.A. y de los resultados que se prevean
lograr, con el volumen de fuegos sobre el enemigo, en
cualquiera de los dos procedimientos.
-Cuando es probable que el enemigo emplee blindados, el
defensor podrá emplazar parte de las armas antitanques
delante del L.A.A.D.A., en las direcciones de probable
empleo de estas fuerzas.
-El defensor empleará los obstáculos existentes, los
batirá por el fuego y cuando sea posible los reforzara u
organizara obstáculos adicionales a fin de aumentar las
posibilidades de detener al enemigo.
Las fuerzas de reserva pueden ayudar a la detención del
ataque enemigo delante del L.A.A.D.A., mediante el fuego y
la ejecución de un ataque de desorganización.
Esta reserva también podrá ser empleada en una posición de
bloqueo, a fin de detener al enemigo en caso de que este
llegue a penetrar la posición.
-Rechazo del ataque enemigo:
-Esta tarea se lleva a cabo mediante la combinación de los
fuegos y el combate cercano.
-Las fuerzas y los fuegos son dispuestos de manera de
obtener el máximo beneficio de los obstáculos existentes.
Estos obstáculos son reforzados y se deben construir
obstáculos adicionales para aumentar las posibilidades de
rechazo del ataque enemigo. Se debe realizar el máximo
empleo de las armas de tiro a lo largo del frente y en los
intervalos de las fuerzas de la posición.
-La reserva de las Unidades del A.D.A. aumentan la
profundidad de la posición y contribuye al apoyo mutuo.
-Esta reserva también ayuda a rechazar el ataque enemigo
mediante el fuego y cuando es ubicada en una posición de
bloqueo, rechaza el ataque enemigo con el fuego y el

Página 167 de 360


combate cercano.
-Expulsión del enemigo:
-Esta tarea se cumple mediante la combinación del fuego y
la maniobra.
-Las fuerzas del A.D.A. la ejecutan de acuerdo a sus
posibilidades. La reserva puede ser empleada para expulsar
al enemigo del A.D.A.. La acción ofensiva utilizada para
llevar a cabo esta tarea es el contraataque.
5.15.4.1.5 Fuerzas de reserva
Son las fuerzas que el Comando emplea para la ejecución de
la defensa y que están ubicadas en el Area de retaguardia.
En la distribución de las fuerzas se debe contemplar una
reserva con efectivos tales, que permita al Comandante
influir decisivamente en la conducción de la defensa,
constituyen el elemento dinámico de la defensa y la
decisión de se empleo será fundamental para obtener el
éxito. Normalmente se mantienen en reserva aquellas
unidades de mayor movilidad y fuerza de choque.
El dispositivo de la reserva, debe permitir la ejecución
de los planes en las mejores condiciones.
Podrá encontrarse en una o varias zonas de reunión y/o
zonas de profundización y cambiar de ubicación,
dependiendo esto, de la magnitud de fuerza, la amplitud de
la zona de acción, posibilidades de interferencia del
enemigo y de la forma como se planifique su empleo. La
consideración fundamental será su empleo oportuno y en
masa, donde sea necesario. La reserva tendrá una ubicación
inicial, no obstante según las diversas situaciones del
combate y es posible empleo, se podrá desplazar de un
lugar a otro.
Cuando la naturaleza del terreno lo requiera, cada Unidad
o fracción integrante de la reserva deben encontrarse en
las proximidades de un itinerario, en lo posible un buen
camino que conduzca hacia los lugares de posible, empleo.
La magnitud de las fuerzas que deben quedar como reserva
será determinada después de un análisis de los siguientes
factores:
-Misión
-Tiempo disponible para organizar la posición.
-Frente de la acción asignada
-Tipo de unidad que realiza la defensa.
-Naturaleza del terreno.
-Posibilidades del enemigo, destacándose la consideración

Página 168 de 360


de la naturaleza de las fuerzas a enfrentar.
La reserva materializa la libertad de acción del
Comandante, por ello en ningún momento deberá faltar esta
fuerza; si durante la conducción de la defensa ha sido
empleada, inmediatamente se constituirá una nueva reserva,
con aquellas unidades que no se encuentren empeñadas.
Las fuerzas de reserva se organizarán para cumplir las
siguientes misiones:
-Ataque de desorganización.
-Contraataques.
-Bloqueo de penetraciones.
-Relevo de Unidades del A.D.A..
-Reforzar el A.D.A. con fuegos, personal o ambos.
-Garantizar la protección del Area de retaguardia contra
tropas aerotransportadas.
-Protección al Area de Retaguardia. contra acciones de
guerrillas.
-Constituír los P.A.G..
La defensa aprovecha cualquier circunstancia para hacer
sentir al enemigo su agresividad. Para la conducción de la
defensa se podrá prever el empleo de la reserva o parte de
ésta, en la ejecución de ataques de desorganización; se
lanzan cuando el enemigo esta preparando su acción
ofensiva, sea en sus posiciones de ataque o durante el
desplazamiento hacia ellas; se planifica como un ataque a
objetivo limitado o incursión, con alguna de las
siguientes finalidades:
-Destruir una parte de la fuerza amiga.
-Causar confusión o desequilibrio en el enemigo.
-Arrebatar al enemigo, una parte del terreno vital para
ataque y como
consecuencia, útil para nuestra defensa.
-Contraataque. Ver parágrafo correspondiente de este
capítulo.
-Bloqueo de penetraciones.
Una penetración se bloquea organizando una o más
posiciones elegidas para cerrar una avenida de
aproximación o limitar lateralmente un ensanchamiento de
la brecha producida por la penetración.
5.15.5 Defensa contra blindados

Contra un enemigo que posee una capacidad blindada


considerable, es necesario organizar la defensa antitanque

Página 169 de 360


en toda la zona de acción. Las defensas antitanques se
emplean para cerrar las avenidas de aproximación más
peligrosas
La vulnerabilidad de los blindados en las ZZ.RR., exige
detectarlos en tales zonas, para lo cual se organizan
sistemas de alarma, que aseguren el empleo de todas las
armas antitanques contra los blindados enemigos que aún no
han adoptado su dispositivo de ataque.
En la defensa deberán emplearse al máximo, los obstáculos
naturales y las minas antitanques, lo que facilitará la
canalización de los blindados enemigos hacia los campos de
tiro de las armas antitanques y su subsiguiente
destrucción.
Los fuegos de Artillería, incluyendo granadas químicas,
deben ser empleados contra los tanques, para separar o
destruir a la Infantería que acompaña a los blindados
enemigos, y de esa manera destruirlos en el interior de la
posición, mediante el empleo de las reservas, las que
deberán ser fuertes en blindados.

5.15.6 Peculiaridades de la Defensa en Posición en frentes


extensos.

Cuando el frente asignado a una Unidad es extenso, no será


posible organizar el A.D.A. en base a posiciones de
resistencia que den continuidad al frente, existiendo
mayor intervalo entre dar tanta importancia a la ocupación
y organización de los puntos críticos en el frente como en
la profundidad de la posición, guarneciéndolos con
Unidades convenientemente balanceadas y capaces de
sostenerse por tiempo apreciable.
Las unidades adoptarán un dispositivo que les permita
colocar una adecuada potencia de fuegos en las áreas
defensivas de primer escalón y además contar con reservas
móviles para bloquear y contraatacar las penetraciones
enemigas. Toda Unidad que deba realizar una defensa en un
frente extenso, adopta o modifica, según el caso, los
fundamentos que rigen el combate defensivo. Cuando se
adopta una defensa en un frente extenso, se requerirá:
- Mayor flujo de información, en virtud del fundamental
requerimiento de
reacciones oportunas.
- Mayor descentralización del comando.

Página 170 de 360


- Un sistema de comunicaciones, capaz de satisfacer las
exigencias creadas por
la mayor amplitud de los frentes.
- Reservas relativamente más importantes y más móviles.
- Máximo aprovechamiento de las características del
terreno, de la fortificación
y del armamento.
- Uso de obstáculos naturales y artificiales.
En la defensa en posición en un frente extenso, debe darse
particular importancia a las siguientes consideraciones
tácticas:
- La defensa en profundidad será esencial. En la defensa
en frente extenso, la profundidad se obtiene repartiendo
las fuerzas en varios escalones y manteniendo reservas
disponibles adecuadas. Los comandos superiores dan
profundidad a la posición de resistencia, asignando
posiciones previamente preparadas a retaguardia de un
sector amenazado, por lo cual utilizan sus reservas o
Unidades que no se requieren en otras partes de la
posición de resistencia.
- La organización de los puntos críticos adquiere máxima
preponderancia. En una defensa en un frente extenso, los
sectores asignados a las Unidades del L.A.A.D.A. son tan
amplios que no permiten la organización de posiciones que
se apoyen mutuamente a lo largo de todo el frente. Se
impone, la ocupación y organización de los puntos críticos
del terreno por fuerzas importantes, tanto en el sentido
del frente como de la profundidad, en toda la zona de
resistencia.
Cada uno de dichos puntos se organiza para la defensa
en todas direcciones, los intervalos se cubren con
patrullas y puestos de observación y se preparan
posiciones suplementarias para ser ocupadas de acuerdo con
la situación.
- La protección de la Artillería y de las
instalaciones de retaguardia, constituye un problema
delicado. Unas veces se les protege colocándolas en el
interior de las áreas organizadas de la defensa, otras
organizando defensivamente las posiciones de Artillería y
las instalaciones logísticas; por último, a veces, su
protección descansa en su proximidad a las áreas de
reunión de las reservas.
- En todas las Unidades se mantiene el mayor número

Página 171 de 360


posible de tropas como reserva móvil.
Ellas son empleadas para detener las penetraciones
enemigas, para contraatacar o para realizar ambas acciones
con el fin de limitar las penetraciones del enemigo y
expulsarlo fuera del A.D.A.. La ubicación de las reservas
locales de los diferentes escalones adquiere particular
importancia.
Por lo general es necesario constituir dos o más
núcleos de reserva con el fin de cubrir todo el frente en
forma adecuada y poder acudir oportunamente, a detener
cualquier penetración enemiga. En tales circunstancias es
necesario disponer de planes detallados que permitan la
concentración rápida de toda la reserva, en el punto
adecuado.
El empleo máximo de obstáculos y destrucciones
canaliza la acción enemiga, facilitando la labor de las
reservas.
- El problema de la defensa contra blindados
enemigos se agudiza porque el defensor debe realizar la
protección contra los tanques enemigos en un frente mucho
más amplio, disponiendo de los mismo medios.
El enemigo puede atravesar con rapidez la zona de
resistencia, que será extensa y poco profunda.
En consecuencia, para garantizar una adecuada
protección AT es necesario disponer de informaciones
oportunas sobre el enemigo y prever un adecuado
dispositivo de alerta.
5.15.7 Conducción.
La defensa se conduce normalmente bajo los mismos
principios, ya sea que se trate de una posición organizada
o sumariamente organizada.
El defensor no podrá ser igualmente fuerte en todos
los sectores de la posición. El dispositivo de las fuerzas
y la conducción del combate no deben estar sujetos a un
plan rígido, sino tan flexible como sea posible.
Las consideraciones que se deben tener en cuenta para
conducir una defensa en forma flexible son:
- Poseer Información oportuna sobre la aproximación
del enemigo, particularmente en cuanto a su dispositivo.
- Mantener en secreto el plan de defensa.
- Mantener reservas fuertes y altamente móviles.
Durante la conducción de la defensa, es muy importante
que las fuerzas de seguridad, retarden en forma continua y

Página 172 de 360


con tenacidad, la progresión del enemigo por las
principales avenidas de aproximación a fin de desgastarlo.
Con este objeto, se aprovecharán todos los obstáculos
naturales tales como: cursos de agua, líneas de alturas,
desfiladeros y terreno de difícil transitabilidad.
El combate en el área de seguridad se verá facilitado
si al aproximarse el enemigo a la posición se emplea al
máximo la Artillería y los elementos mecanizados y
blindados de la Fuerza de Cobertura.
Las aeronaves y la fuerza de cobertura, proporcionan
las primeras informaciones sobre la progresión del enemigo
y se encargan de retardarlo al máximo, dando así el mayor
tiempo posible al grueso para que pueda reajustar y
mejorar la posición.
La Fuerza de Cobertura realiza el retardo de acuerdo a
los procedimientos de la acción retardatriz, sin dejarse
enganchar decisivamente, hasta ser apoyada por los P.A.G.
para su repliegue.
Los P.A.G., constituidos por Unidades de gran
movilidad, organizan el terreno para conducir una acción
retardatriz durante el repliegue a la posición. Como los
sectores asignados a las Unidades son por lo general muy
amplios, se utilizan al máximo las destrucciones,
obstáculos, minas y fuerte apoyo de Artillería.
A menos que lo fije la misión, los P.A.G. no deben
dejarse enganchar por el enemigo. Al término del
cumplimiento de su misión son apoyados por los puestos
avanzados de combate para su repliegue.
Los P.A.C. conducen sus acciones en forma móvil,
pudiendo ser empleados en la defensa de una zona del
terreno, por un período de tiempo limitado,
particularmente si las condiciones permiten proporcionar
un eficiente apoyo de fuegos. Los P.A.C. deben ser
replegados oportunamente a fin de evitar que sean
disminuidos en su poder combativo o impidan el apoyo de
fuegos desde la posición, bajo riesgo de ser destruidos
por sus propias fuerzas.
Los elementos de seguridad local, cumplen su misión en
forma permanente, desde la instalación de las fuerzas en
la posición, adquiriendo mayor importancia a medida que el
enemigo se aproxima a la posición y en los períodos de
visibilidad limitada o durante la noche. Entre otros
elementos, se consideran a las patrullas que actúan en los

Página 173 de 360


intervalos entre las áreas de resistencia.
A medida que el atacante se aproxima al A.D.A., será
batido por el fuego cada vez más intenso de todas las
armas disponibles, excepto en el caso de que se requiera
obtener la máxima sorpresa y una acción de choque a corta
distancia.
El combate en el A.D.A. deberá ser conducido de tal
forma que el ataque enemigo sea detenido o destruido,
principalmente delante de la posición o en el intervalo de
las áreas de resistencia. En ningún caso debe permitirse
una penetración, sin haber desgastado al máximo al enemigo
delante y entre las áreas de resistencia, ya sea mediante
los fuegos o los contraataques locales.
Si el enemigo logra penetrar entre las áreas de
resistencia, será fundamental y vital impedirle que se
aferre al terreno o que continúe su progresión, mediante
el empleo de todas las armas y medios existentes para la
defensa; si las áreas de resistencia se mantienen
íntegramente en poder de nuestras tropas, se reunirán
todas las fuerzas que sean indispensables para su defensa,
a fin de aniquilar o desalojar al enemigo que ha penetrado
en los intervalos. Si el enemigo ha penetrado en una parte
de un área de resistencia se lanza de inmediato un
contraataque local con todas las fuerzas para aniquilarlo;
en tales circunstancias, se pueden tomar tropas del sector
del área de resistencia que no ha sido atacada, con el
objeto de incrementar las fuerzas que serán empleadas en
el contraataque local.
5.15.7.1 El contraataque local.
Los contraataques locales, son ejecutados por las UU.
del A.D.A.. Tiene por finalidad recuperar las partes del
L.A.A.D.A. que estén en poder del enemigo o destruir a las
fuerzas enemigas que hayan logrado penetrar en el A.D.A..
Al encontrar el enemigo, áreas de resistencia fuertemente
defendidas, se divide en múltiples direcciones,
constituyéndose así fuerzas debilitadas, contra las cuales
se lanzan contraataques locales. La eliminación de estas
penetraciones, de acuerdo al grado de importancia que
presenten, será normalmente el mejor procedimiento
defensivo empleado por el comando correspondiente. El
contraataque local debe ser lanzado en el momento más
favorable, el que puede ser:
- cuando la penetración ha sido detenida por fuegos

Página 174 de 360


provenientes sea de la Artillería, de las áreas de
resistencia vecinas o de las fuerzas de las propias áreas
de resistencia involucradas.
- cuando ha disminuido su ritmo de avance por las
fuertes pérdidas sufridas y antes de que logre ser
reforzado.
- cuando ha logrado conquistar un accidente
importante del terreno y antes de que se reorganice.
Un contraataque local no debe ser lanzado contra una
penetración enemiga cuya potencia de combate es superior a
la potencia de la fuerza de contraataque.
En este caso, la reserva local bloquea la penetración,
en espera de que sea lanzado un contraataque por el
escalón superior. El Comandante del escalón respectivo
será el que decida si las reservas van a ser empleadas en
su contraataque local o es preferible bloquear las
penetraciones.
Previamente a efectuar un contraataque local o a
emplear la reserva para bloquear una penetración, el
Comandante respectivo está en la obligación de informar al
escalón superior sobre la acción a tomar y los resultados
esperados.
5.15.7.2 Empleo de la reserva.
5.15.7.2.1 Contraataque.
Un enemigo que no ha podido ser detenido por el fuego
ni destruido por los contraataques locales de las Unidades
del A.D.A., debe ser destruido o desalojado mediante el
contraataque con las reservas del escalón superior. El
contraataque será la misión más importante que cumpla la
reserva y es el procedimiento defensivo más efectivo, ya
que su finalidad no sólo es rechazar a la fuerza enemiga,
sino destruirla. El contraataque debe ejecutarse con
rapidez y violencia, no sólo para asegurar la destrucción
del enemigo sino para reducir los riesgos de fracaso de la
defensa.
Teniendo en cuenta que el desplazamiento desde las
ZZ.RR. a las posiciones de ataque toma un tiempo
determinado, es conveniente emplear, todos los itinerarios
que conducen hacia las posiciones de ataque, a fin de que
las tropas puedan alcanzarlas rápidamente. Será necesario
así el reconocimiento previo de los itinerarios existentes
en la zona, ejecutar determinados arreglos y
señalizaciones, particularmente si se prevé que el

Página 175 de 360


contraataque sea nocturno.
El contraataque ejecutado por las fuerzas de reserva
se lanza en los siguientes casos:
- Antes que el enemigo haya penetrado al A.D.A., en
cuyo caso se conduce como un ataque de desorganización.
- Cuando el enemigo haya penetrado al A.D.A..
En este caso la fuerza de contraataque será apoyada
por los fuegos de las áreas de resistencia y por las
reservas locales que bloqueen las penetraciones, haciendo
posible el empleo de la reserva como una sola fuerza,
preferentemente, sobre el flanco enemigo.
- Al lanzarse el contraataque, todas las armas del
A.D.A. disponibles, deben desencadenar sus fuegos sobre el
enemigo que ha penetrado, cooperando en esta forma con las
fuerzas de contraataque. Se requerirá, tiros con
proyectiles fumígenos, a fin de negar la observación
enemiga y la aplicación de los fuegos de Artillería sobre
la base y retaguardia de la penetración (por donde pasaba
el L.A..A.D.A.) con el objeto de aislarla e impedir la
llegada de nuevos refuerzos.
Todas las demás armas del A.D.A. apoyan el
contraataque, desencadenando sus fuegos, sobre las tropas
que han penetrado y los extenderán hacia la retaguardia de
la penetración, cuando las fuerzas de contraataque crucen
la línea de partida.
En algunos casos es conveniente poner bajo las ordenes
de la fuerza que contraataca a las fuerzas que se
encuentran en el sector, a fin de que se las pueda emplear
en misiones de protección de un flanco de la fuerza de
contraataque, destrucción de las fuerzas enemigas que han
sido sobrepasadas y/o apoyo a la fuerza de contraataque.
Destruido o rechazado el enemigo, las tropas de la
fuerza de contraataque ocuparán las posiciones
recuperadas, relevando a la fuerza anterior y tomando a su
cargo la defensa del sector.
El Comandante de la defensa reconstituye su reserva
integrando las fuerzas que fueron relevadas durante el
contraataque y las fuerzas que permanecieron en la
reserva.
- Bloqueo de una penetración.
Una penetración se bloquea ocupando una posición
previamente organizada, para cerrar una avenida de
aproximación, a fin de desgastar y detener al enemigo,

Página 176 de 360


permitiendo el contraataque de la reserva del escalón
inmediato superior.
Una reserva local puede ser empleada para bloquear una
penetración con la totalidad de sus fuerzas,
particularmente cuando el valor de la penetración así lo
requiera. En este caso, el contraataque contra las fuerzas
que han penetrado, podrá ser efectuado por las reservas
locales de las Unidades vecinas o por la reserva del
escalón superior.
En el caso de que la penetración no requiera emplear
toda la reserva local para bloquear, la reserva restante
será la encargada de lanzar el contraataque.
5.15.8 Defensa Perimétrica
5.15.8.1 Generalidades.
La defensa perimétrica es una modalidad de la defensa
en posición o de área en la cual se adopta un dispositivo
defensivo que distribuye las fuerzas para hacer frente a
un ataque enemigo desde una o más direcciones.
Normalmente, las Unidades que podrán adoptarla serán la
G.U.T.O. y escalones menores.
5.15.8.2 Situaciones en que se podrá adoptar una Defensa
Perimétrica.
Durante el desarrollo de las operaciones militares,
frecuentemente se presenta la necesidad de que las
Unidades lleven a cabo operaciones defensivas,
particularmente cuando están separadas de otras Unidades
amigas. Esto puede ocurrir en las siguientes situaciones:
- cuando actúa cumpliendo una misión independiente.
- cuando quede separado de otras fuerzas amigas,
debido a las acciones enemigas.
- cuando actúa en terreno que impone restricciones,
tales como el montañoso, el boscoso, el selvático, el
desértico, los cuales impiden el apoyo mutuo.
- cuando el terreno no permite otro tipo de
defensa.
- Islas de Resistencia en la Defensa Móvil.
En estas situaciones la Unidad aislada debe rechazar
al enemigo ante un ataque desde cualquier dirección. Por
lo general las Unidades de apoyo de fuegos, de apoyo de
combate y de apoyo de servicios se ubican dentro del
perímetro.
5.15.8.3 Particularidades de la Defensa Perimétrica.
Durante la planificación de la defensa perimétrica se

Página 177 de 360


toman en consideración procedimientos similares a los de
otros tipos de defensa. Los comandos deben tratar que
ocupara durante las horas del día, a fin de poderla
organizar antes de que llegue la oscuridad. El Comandante
tendrá en consideración durante la planificación, los
siguientes factores:
5.15.8.4 Elección de la Posición.
Las consideraciones que se toman en cuenta para la
elección de la posición en la defensa perimétrica, son
similares a las de una defensa en posición, debiendo poner
énfasis en los siguientes aspectos: terreno que favorezca
este tipo de defensa, necesidad de disponer de suficiente
espacio para la maniobra, necesidad del perímetro que
favorezca el apoyo mutuo y la posibilidad del apoyo de
fuegos en los 360°.
5.15.8.5 Organización de la Defensa Perimétrica.
En la defensa perimétrica, el área defensiva se
organiza en forma similar a una defensa en posición.
- El Area de Seguridad.
El Area de Seguridad se organiza en forma similar a
una defensa en posición.
Las Unidades que se encuentran ubicadas a lo largo del
perímetro proporcionan la seguridad inmediata y el
Comandante de la fuerza que ejecuta la defensa perimétrica
deberá establecer P.A.C., los que tienen la misión de dar
el alerta oportuno e impedir al enemigo observar las
posiciones amigas. Estas fuerzas se ubican delante del
perímetro, en un terreno que permita buena observación
impida al enemigo realizar fuego directo sobre el
perímetro y dentro del alcance de las armas de apoyo.
Estas fuerzas son colocadas cubriendo las avenidas de
aproximación que conducen hacia el perímetro.
Para alertar oportunamente sobre las actividades del
enemigo, se emplean elementos de vigilancia, los que
deberán ser ubicados alrededor del L.A.A.D.A. y orientados
hacia las principales avenidas de aproximación.
- El Area de Defensa Avanzada
En la defensa perimétrica las fuerzas del A.D.A.
tienen la misión de organizar y defender un sector. El
frente que se asigne a una Unidad depende de la misión, la
situación, posibilidades del enemigo, el terreno y las
tropas disponibles. Se deben evitar las brechas
particularmente en un terreno cubierto, lo cual lleva a

Página 178 de 360


deducir que el frente que se asigne a las Unidades, así
como la profundidad del área defensiva, serán bastantes
reducidos. Los Comandantes de las Unidades del A.D.A.,
deben ubicar el mayor número de fuerzas y armas de pequeño
calibre a lo largo del perímetro.
Estos procedimientos pueden variar de acuerdo con la
probable dirección del ataque enemigo, el terreno y los
planes existentes para las operaciones futuras.
- El Area de Retaguardia
Las reservas, los elementos de comando y control, las
Unidades de apoyo de fuegos, de apoyo de combate y de
apoyo de servicios son ubicadas en esta área. La fuerza
que se mantenga como reserva podrán ser una Unidad
específicamente destinada como reserva o un elemento
designado de las Unidades subordinadas.
Es necesario que la reserva sea una fuerza móvil, a
fin de que pueda acudir rápidamente en cualquier
dirección.
5.15.8.6 Medios Blindados y de apoyo de fuegos.
En la defensa perimétrica, los tanques serán
mantenidos en posiciones que faciliten su movilidad cuando
sean empleados como parte de la fuerza de reserva o podrán
ser ubicados en las principales posiciones de tiro del
L.A.A.D.A. Si se mantienen los tanques en reserva, los
itinerarios, deberán ser preparados con anticipación.
Las armas de apoyo de fuego de Artillería y morteros
de 120 mm, son empleadas para batir al enemigo tan lejos
del L.A.A.D.A. como sea posible, utilizando su capacidad
de fuego en los 360º.
5.15.8.7 Apoyo logístico
En la defensa perimétrica el reabastecimiento se
efectúa normalmente por medio de entregas aéreas. La
selección de zonas de aterrizaje o la capacidad de
construir o mejorar instalaciones en corto tiempo, son
factores condicionantes en la organización de la posición
defensiva. Teniendo en cuenta las dificultades en cuanto a
tiempo, condiciones meteorológicas y el fuego enemigo, que
se presentan durante el abastecimiento aéreo, es necesario
recalcar la importancia de la economía en los
abastecimientos y organizar la posición de tal manera, que
se reduzcan las posibilidades de que dichos
abastecimientos sean destruidos particularmente por el
fuego enemigo.

Página 179 de 360


5.15.8.8 Conducción de la Defensa Perimetrica
La conducción de una defensa perimétrica es
esencialmente igual a la conducción de la defensa de área.
Las consideraciones especiales son:
5.15.8.8.1 El Area de Seguridad
Se debe establecer un mayor número de medios ocupando
puestos de vigilancia. Los intervalos se cubren con
patrullaje agresivo.
5.15.8.8.2 El A.D.A.
Se deberá tratar de lograr un alto grado de apoyo
mutuo en esta área.
Se deberá respetar la disciplina de fuego al máximo, a
fin de evitar que el enemigo logre determinar la ubicación
exacta del L.A.A.D.A.
Cualquier penetración en el L.A.A.D.A. será peligrosa
debido a la situación aislada de la Unidad que conduce la
defensa y a la dificultad de lanzar un contraataque.
5.15.8.8.3 El contraataque
En caso de producirse una penetración enemiga en el
L.A.A.D.A., la reserva podrá ser empleada para bloquear la
penetración o lanzar un contraataque, a fin de reducir la
penetración y se reconstituirá una reserva provisoria a
fin de permitir al Comandante hacer frente a otras
amenazas. Es posible que se presente la necesidad de
emplear a una Unidad que no esté empeñada en otro sector,
debiendo conservar en dicho sector los elementos mínimos
para bloquear o impedir el avance de la fuerza atacante.
Sin embargo, no siempre mantienen su posición inicial y
podrán realizar una acción retardatriz cuando sea
necesario. Asimismo un Comandante podrá reforzar los
puntos fuertes si la situación lo justifica.
5.15.8.8.4 La fuerza de contraataque.
El resto de las fuerzas no absolutamente necesarias
para guarnecer las posiciones defensivas avanzadas son
organizadas en una fuerza móvil de ataque cuya misión es
destruir a la fuerza enemiga en el lugar y momento elegido
por el defensor.
La fuerza de contraataque puede ubicarse en una o
varias ZZ.RR., dependiendo de la amplitud del frente,
terreno, posibilidades enemigas y de su forma prevista de
empleo. Debe ser fuerte en blindados.
5.15.8.9 Comando y control
El Comandante logra la flexibilidad de la defensa

Página 180 de 360


mediante la preparación de varios planes detallados. La
conducción descentralizada permite que la Unidad reaccione
rápidamente contra las amenazas que se presenten
simultáneamente.
En todo momento, es necesario mantener una actitud
agresiva por lo que las reservas se mantendrán a órdenes
del Comando.

5.16 DEFENSA MOVIL


Se organiza en áreas defensivas avanzadas y fuerzas de
contraataque, contando además con fuerzas de seguridad al
frente de la posición.
Las áreas defensivas avanzadas se organizan sobre la
base de las siguientes combinaciones.

_5.16.1 Islas de Resistencia


Es un área organizada para la defensa en todas
direcciones para mantener aquel terreno que es vital para
Página 181 de 360
el esquema de maniobra de la fuerza de contraataque.
Pueden mantener terreno sobre un flanco de una
penetración enemiga impidiendo la expansión de la misma,
defender la observación dominante para el control de los
fuegos de apoyo a la fuerza de contraataque o impedir el
avance enemigo hacia regiones donde aquella accionaría en
desventaja. Las Islas de Resistencia son guarnecidas por
una Brigada de Infantería o Unidad de volumen similar como
mínimo. Las Unidades menores no pueden controlar dentro de
un perímetro un área suficiente como para permitir el
lanzamiento de abastecimientos o el aterrizaje de aviones
o helicópteros de evacuación. Además no se pueden incluir
dentro del perímetro de estas Unidades la cantidad
suficiente de armas de apoyo.
5.16.2 Puntos Fuertes
Normalmente la Unidad de Infantería más pequeña a la
que se le asigna la misión de organizar y mantener un
punto fuerte en una defensa móvil es al Batallón
reforzado.
Ocupan posiciones en el área defensiva avanzada que
puedan o no apoyarse mutuamente y donde las avenidas de
aproximación enemiga incidan en la posición. Su misión es
engañar al enemigo, alertando sobre la amenaza de un
ataque, canalizándolo hacia el terreno más favorable al
defensor y bloquearlo. En el ámbito que una fuerza mayor,
los elementos subordinados serán empleados en operaciones
tanto netamente defensivas como retardatrices, mientras
otros actuarán en misiones fundamentalmente ofensivas.
Una G.U. para alcanzar la finalidad de una defensa
móvil empleará en el A.D.A., parte de sus medios operando
como en la defensa en posición, teniendo como misión
principal el mantenimiento del terreno, otra parte de sus
medios dando continuidad al LAADA con lo mínimo necesario
y a su vez como fuerza de fijación con la misión de
retardar al enemigo, para conducirlo a una situación y
lugar de la Z.A., donde otra parte de los medios realizará
la acción ofensiva, o sea el contraataque de destrucción
de las fuerzas enemigas.
La defensa móvil requiere máxima coordinación entre
los diferentes medios que a su vez cumplirán diferentes
misiones, para permitir y asegurar que cada uno actúe en
beneficio del otro y así alcanzar el cumplimiento de la
misión.

Página 182 de 360


Por tanto los medios que mantienen terreno, tendrán
además que apoyar la acción retardatriz de los demás
medios del A.D.A., mediante ocupación de posiciones de
profundización que tengan también como misión canalizar al
enemigo. La fuerza de fijación, a su vez podrá ceder el
terreno que permita el ingreso de medios enemigos de un
valor tal que estén dentro de las posibilidades del
contraataque a efectuarse, debiendo además en el final de
su movimiento a retaguardia ocupar posiciones que apoyen
dicho contraataque.
Acorde a lo expresado, la fuerza de contraataque que
se organiza en base a los medios blindados disponibles,
contando además con el apoyo para su acción, de medios que
ocupan posiciones que bloquean la progresión enemiga.
También podrán lanzarse acciones ofensivas durante la
aproximación del enemigo al área defensiva o durante la
concentración de las fuerzas enemigas en las posiciones de
ataque.

Página 183 de 360


5.16.3 Conducción

Las Fuerzas de Cobertura reconocen agresivamente para


obtener y mantener el contacto con el enemigo. Una vez
establecido el contacto proporcionan una corriente
continúa de informaciones de acuerdo con el desarrollo de
la situación.
De acuerdo con la presión enemiga las fuerzas de
seguridad conducen la acción de retardo, máximo de bajas y
desorganizando el ataque enemigo, evitando engancharse con
el mismo, pero manteniendo el contacto hasta su repliegue
Página 184 de 360
detrás de las fuerzas de fijación. Luego se emplazan en la
posición elegida, en condiciones de cumplir las misiones
que se les determinen.
Cuando las fuerzas enemigas se acercan al L.A.A.D.A.,
son batidas por el fuego, con la finalidad de
obstaculizar, retardar o impedir su avance. Esta acción se
ejecuta aún cuando la misión de la fuerza que ocupa esa
parte del A.D.A. sea de defensa o retardo. Esta tarea
contribuye a impedir que el enemigo pueda obtener
informaciones acerca del plan de maniobra del defensor,
facilitando la obtención de una información precisa sobre
el enemigo y proporcionándole tiempo al defensor.
Las fuerzas de fijación de acuerdo con la misión
específica que se les asigne, una vez que han sido
alertadas por los PP.OO., se preparan para detener o
disminuir el ímpetu del ataque enemigo.
Cuando sea necesario que una parte de la fuerza de
fijación mantenga un terreno específico, ésta debe estar
en condiciones de realizar una defensa perímétrica.
Puede ser necesario que parte de las fuerzas de
fijación al comienzo ejecuten un retardo desde las
posiciones ubicadas en el A.D.A.. Posteriormente estas
fuerzas se repliegan ya sea al recibir órdenes del
Comandante que ejecuta la defensa móvil o a iniciativa del
Comandante de las fuerzas que realizarán el retardo,
acorde a lo que prescribe el plan del escalón superior.
Dichas fuerzas evitan empeñarse en un combate decisivo,
ejecutan acciones retardatrices para demorar el avance
enemigo y causarle bajas. Estas acciones tienen por
finalidad hacerle creer al enemigo que su acción ofensiva
es exitosa y al mismo tiempo que se canaliza al enemigo
hacia un terreno que facilite el contraataque. Al penetrar
en la zona donde se proyecta realizar un contraataque, los
elementos que realizan el retardo e integran las fuerzas
del A.D.A., ocupan posiciones de bloqueo impidiendo que
siga avanzando. En esta forma, se conducirá al enemigo a
una de las zonas escogidas de antemano para destruirlo, y
se obligará a sus fuerzas a concentrarse para hacer
frente a las fuerzas de bloqueo.
Las fuerzas del A.D.A. apoyan el contraataque,
particularmente por el fuego.
Las fuerzas de contraataque se emplean de acuerdo con
los planes previamente preparados, los cuales pueden ser

Página 185 de 360


modificados para hacer frente a las situaciones
específicas que se presenten. Si es posible, el
contraataque debe ser lanzado antes que el ataque enemigo
tenga oportunidad de adquirir impulso.
El contraataque puede lanzarse durante la aproximación
del enemigo a la posición defensiva, mientras permanece en
sus posiciones de ataque o ZZ.RR. y cuando haya sido
canalizado hacia las zonas mas favorables para su
destrucción. El contraataque se lanza en el momento en que
la potencia de combate ha alcanzado su punto más favorable
para el defensor. En esta decisión debe tenerse en cuenta,
el grado en que las fuerzas del A.D.A. hayan logrado
disminuir la potencia combativa del enemigo y su capacidad
para continuar haciéndolo.
Cuando la acción del enemigo ha sobrepasado la
capacidad de una Unidad de la fuerza de fijación, puede
ser necesario reforzar a esta Unidad con una parte de la
fuerza de contraataque, para evitar que el enemigo penetre
tan profundamente que dificulte o imposibilite el
contraataque.
En caso de que el enemigo logre efectuar múltiples
penetraciones hacia el interior del A.D.A., puede ser
necesario hacer frente a estas penetraciones
simultáneamente. En tales casos, debe determinarse la
amenaza principal y emplear a la fuerza de contraataque
para destruirla; al mismo tiempo es necesario emplear
fuerzas que se encuentren en el A.D.A. para ayudar a
contener las amenazas secundarias.

5.17 EL APOYO DE FUEGO EN LA DEFENSA


5.17.1 Generalidades
Un apoyo de fuego adecuado en este tipo de operación
surgirá de la observancia de los principios que a
continuación se exponen, los cuales constituyen la base
para la planificación y coordinación.
5.17.1.1 Centralizar el control del apoyo de fuego.
La incertidumbre de la situación inicial en la defensa
impone que el Comandante mantenga el control de los medios
de apoyo de fuego, para reaccionar rápidamente cuando se
detecta el ataque principal enemigo. Los fuegos de AAD
probablemente se retendrán en reserva táctica a nivel
División, para su utilización en las áreas críticas. A las
UU. de A. se le asignaran misiones tácticas que retengan

Página 186 de 360


la autoridad de planificación y prioridad de fuegos y de
selección de posiciones en los niveles superiores, para
hacer máximo uso de su capacidad de masa y maniobra. No
obstante, será necesario proporcionar apoyo de fuego
inmediato y continuo las fuerzas de maniobra empeñadas.
Las Brigadas empeñadas necesitarán contar con el apoyo de
un Grupo de Artillería en apoyo directo como mínimo.
5.17.1.2 Empleo de movilidad para concentrar el apoyo de
fuego cuando sea necesario.
Cuando las limitaciones de alcance de la A. impiden el
agrupamiento efectivo de los fuegos indirectos, tienen que
moverse para reforzar las áreas críticas con potencia de
fuego adecuada. Los movimientos deben ser planificados y
coordinados para que el máximo número de Unidades de fuego
estén disponibles en cualquier momento.
5.17.1.3 Atacar los blancos según las prioridades del
Comandante.
Algunas veces, el ataque enemigo presentará más
blancos de los que se pueden atacar efectivamente. Como
nuestras reservas serán escasas, los CAF deberán tomar
especiales cuidados para asegurar que se ataquen en primer
lugar los blancos más peligrosos, acorde a las prioridades
establecidas por el Comandante.
5.17.1.4 Combatir al enemigo lo más adelante posible.
El enemigo debe ser atacado lo más lejos posible, para
comenzar a desgastarlo lo antes posible. Mientras avanza,
el enemigo se encuentra con un volumen de potencia de
fuego continuo y creciente. A menos que el plan de
operaciones no disponga lo contrario (para lograr la
sorpresa o aumentar la previsión de los apuntadores de
tiro directo), los blancos deben atacarse una vez que se
localicen. Las UU de A. deben estar ubicadas lo
suficientemente adelante para permitir atacar lo antes
posible los blancos localizados y escalonados en
profundidad, y de esa manera poder mantener el fuego
continuo.
5.17.2 Tareas de Apoyo de Fuegos.
En la defensa el CAF debe organizar los medios
disponibles debiendo contemplar durante la planificación:
- Desorganizar, demorar y debilitar al enemigo
antes que este lance su ataque.
- Atacar al enemigo durante su propio ataque,
visando suprimir su sistema de defensa antiaérea y su

Página 187 de 360


capacidad de reconocimiento.

- Concentrar los fuegos para canalizar, demorar y


destruir a los elementos que actúan sobre la zona crítica
de nuestra defensa.
- Actuar con los fuegos en la retaguardia del
enemigo, para aislar las fuerzas de primer escalón y para
detener y debilitar las fuerzas del segundo escalón.
- Realizar contrafuegos durante toda la operación
sobre toda el área, para suprimir, neutralizar o destruir
el apoyo de fuego indirecto enemigo.
5.17.3 El apoyo de fuego en el combate defensivo.
Para que los fuegos de apoyo sean eficaces será
esencial un planeamiento detallado que comprenda:
- Fuegos anteriores al despliegue enemigo.
- Fuegos cuando el enemigo ha desplegado.
- Fuegos durante el ataque enemigo.
- Fuegos de apoyo a los contraataques y a los
ataques de desorganización.
5.17.3.1 Fuegos anteriores al despliegue enemigo.
El plan de fuegos comprende fuegos de hostigamiento e
interdicción, para dificultar sus movimientos, y fuegos de
detención que obliguen a un despliegue prematuro y
faciliten el repliegue de las fuerzas que operan en el
Area de Seguridad.
5.17.3.2 Fuegos cuando el enemigo ha desplegado.
5.17.3.2.1 Contrapreparación
Se planifica siempre, aunque la decisión por su
ejecución así como el momento de desencadenamiento recae
sobre el Cte. de la G.U.. En la contra-preparación
intervienen la totalidad de los medios disponibles con
excepción de aquellos que el Comandante tenga especial
interés en ocultar o que reserva para el cumplimiento de
una misión específica durante el ataque enemigo o aún
durante la ejecución de la contra-preparación.
5.17.3.3 Fuegos durante el ataque enemigo.
5.17.3.3.1 Fuegos de detención.
Previstos delante del LAADA, con objeto de infligir al
enemigo el mayor número posible de bajas, retrasar su
avance y desarticular sus Unidades.
5.17.3.3.2 Fuegos de interdicción, hostigamiento,
contrabatería, supresión de defensa anti-aérea enemiga.
Normalmente planificados en la retaguardia enemiga

Página 188 de 360


para limitar el apoyo a las fuerzas de primer escalón y
frenar el ímpetu de su ataque. También deben ejecutarse
aquellos fuegos de apoyo a los ataques de desorganización.
5.17.3.4 Fuegos de apoyo a los contra ataques.
Serán planificados y coordinados estrechamente con los
elementos de maniobra que ejecutan el contraataque y serán
desencadenados a pedido, para impedir la afluencia de
nuevos medios al área penetrada y destruir a las fuerzas
localizadas en él.
5.17.4 El AAD será escaso y se aplicara para
complementar el fuego terrestre batiendo reservas
blindadas o mecanizadas en la profundidad del dispositivo
enemigo, dificultando que el mismo refuerce su ataque.
Si la posición defensiva tiene un flanco apoyado en la
costa, la actuación del FNA será importante para el apoyo
de la Defensa.

Sección 2

5.18 MOVIMIENTOS RETROGRADOS


5.18.1 Generalidades
Los Movimientos Retrógrados son operaciones tácticas
que tienen como finalidad alejarse del enemigo y que se
realizan fundamentalmente en base a una estrecha
coordinación de fuego y maniobra. Podrán ser impuestos por
la acción del enemigo o ejecutarse voluntariamente.
Una fuerza ejecuta un movimiento retrógrado
voluntariamente sólo cuando ello le permite obtener una
señalada ventaja. En cualquier caso debe ser aprobado por
el escalón superior.
Para tener éxito deben ser ejecutados de acuerdo a
planes bien detallados y coordinados.
Un movimiento retrógrado desorganizado, frente a
fuerzas enemigas organizadas conducirá al desastre.
5.18.2 Finalidad
Los movimientos retrógrados son ejecutados para
cumplir una o más de la siguientes finalidades:
- Romper el contacto.
- Evitar el combate bajo condiciones desventajosas.
- Conducir al enemigo a una situación desfavorable
para él.
- Ganar tiempo, evitando empeñarse decisivamente.

Página 189 de 360


- Llevar a una determinada fuerza a una posición
más favorable en relación a otras fuerzas amigas.
- Permitir el empleo de una fracción de la fuerza
en otra parte.
Cada una de estas operaciones es en principio una
acción defensiva; cada una implica movimientos hacia
retaguardia; cada una busca ganar tiempo o condiciones más
favorables para el combate; y cada una implica un
sacrificio de terreno.
5.18.3 Tipos
5.18.3.1 El Repliegue
Es una operación por la cual toda o una parte de una
fuerza desplegada, desengancha del enemigo con el fin de
ponerse en condiciones de iniciar otra acción.
5.18.3.2 La Acción Retardatriz
Es una operación en la que el espacio es cambiado por
tiempo y en la que se inflige el máximo de desgaste al
enemigo, evitando quedar decisivamente comprometido o
enganchado con el mismo.
5.18.3.3 La Retirada
Es una operación en la cual una fuerza evita el
enganche bajo la situación existente moviéndose en una
dirección que la aleja del enemigo, sin la existencia de
presión directa por parte de éste.
5.18.4 Aspectos comunes de la planificación
5.18.4.1 Terreno y Meteorológicas
El terreno tiene una influencia decisiva en todos los
movimientos retrógrados. Buena observación y campos de
tiro son deseables para permitir tomar bajo fuego al
enemigo a largas distancias. En los planes se preverá la
máxima utilización de los obstáculos naturales y
artificiales, que serán explotados para reforzar la
defensa, proteger flancos expuestos e impedir el avance
enemigo.
Los cubiertos y abrigos serán necesarios para ZZ.RR. y
ejes de movimiento. La red de caminos será explotada al
máximo por las fuerzas amigas, especialmente por fuerzas
blindadas, mecanizadas y motorizadas para acelerar los
movimientos y facilitar el control de las operaciones. Por
las mismas razones, deberá ser negada al enemigo el
efectivo empleo de la misma.
Las condiciones meteorológicas tienen una influencia
significativa en la conducción de los movimientos

Página 190 de 360


retrógrados; afectan la observación, la transitabilidad,
el control, el rendimiento del personal y el
funcionamiento del material.
5.18.4.2 Control y Coordinación
El éxito de los Movimientos Retrógados requiere un
control y coordinación efectivos.
La planificación de las operaciones debe ser
centralizada y su ejecución descentralizada.
La fluidez de las operaciones requerirá planes
detallados y completos y el máximo de efectivos de las
Unidades para atender operaciones que se ejecutarán
normalmente sobre amplios frentes.
Las Unidades adyacentes deberán tener en cuenta que
sus dispositivos y movimientos aseguren una estrecha
coordinación de las operaciones en sus flancos. Debe
asegurarse una clara delimitación de la Z.A. y otras
responsabilidades inherentes a la operación.
Se requerirá la designación de los límites de
retaguardia sucesivos de las Divisiones y Unidades menores
para asegurar la responsabilidad, los abastecimientos y
las instalaciones, incluyendo su evacuación o destrucción.
Será esencial para asegurar un enlace continuo entre
todos los elementos de la Unidad la utilización de un
sistema de comunicaciones seguro, empleando todos los
medios compatibles con las restricciones que imponga la
seguridad de las comunicaciones.
También será esencial un control efectivo de los
movimientos civiles y militares, para reducir el
congestionamiento, acelerar los movimientos tácticos,
reducir al mínimo las interferencias y asegurar el máximo
uso de la red de caminos existente.
5.18.4.3 Medidas de Seguridad
En todo momento se deberá asegurar la protección aérea
y terrestre al frente, flancos y retaguardia de las
fuerzas, ya sea cuando se esté ocupando la posición o
durante los movimientos. Serán necesarias medidas
especiales de seguridad que el Comandante habitualmente
prescribirá en sus órdenes. Se prestará particular
atención al control de la población civil y a la actividad
de guerrillas.
5.18.4.4 La Defensa Antiaérea en los Movimientos
Retrógrados.
Las operaciones retrógradas imponen grandes exigencias

Página 191 de 360


a la DAA.
Las actividades que desarrollan las tropas en este
tipo de operaciones tienen algunas características que son
comunes a las operaciones defensivas y a los movimientos,
no gozando de ninguna manera de las ventajas que para la
DAA, proporcionan las mismas. Por el contrario, se
acrecientan las dificultades para la eficaz ejecución de
la DAA.
En la retirada, el casi permanente movimiento de las
tropas hacia retaguardia, no permitirá a éstas, adoptar
las más eficientes medidas de DAA pasiva, fundamentalmente
el camuflaje.
En la acción retardatriz, la ejecución del movimiento
hacia retaguardia, se ve agravada por el hecho de
mantenerse el contacto con el enemigo terrestre. A ello
cabe agregar la ocupación de posiciones de retardo por
períodos relativamente cortos, lo que no permite la
ejecución de obras que posibiliten la más aceptable
protección contra los ataques aéreos. Además, tanto el
momento de inicio del repliegue a una nueva posición de
retardo, como durante la ocupación de la misma,
constituyen momentos críticos para proporcionar la
necesaria DAA.
Es así, como las normales medidas de DAA pasiva,
camuflaje, dispersión, organización del terreno, no pueden
ser desarrolladas en la amplitud deseada.
Por todo ello, resulta necesario planificar
cuidadosamente el empleo de todos los medios de DAA y de
la Fuerza Aérea, a fin de compensar en el mayor grado
posible, las deficiencias enunciadas. La Fuerza Aérea debe
proporcionar fundamentalmente cobertura a las columnas
durante los movimientos hacia retaguardia, mientras que
los elementos de DAA son afectados principalmente a la
protección de puestos de comandos, reservas, posiciones de
Artillería y de aquellos lugares o zonas que posibiliten
y/o faciliten los movimientos de las tropas: puentes,
nudos de caminos, carreteras, zonas de reunión, etc.

5.19 REPLIEGUE
Podrá ser impuesto por la acción enemiga y en ese caso
realizado bajo presión enemiga o realizado
voluntariamente, siendo ejecutado entonces sin presión
enemiga. Normalmente los repliegues bajo presión se

Página 192 de 360


ejecutan de día o cuando en períodos de escasa visibilidad
u oscuridad, sea descubierto o interferido un repliegue
planificado como sin presión. Las fuerzas que lo realicen,
bajo el fuego directo enemigo, o bajo su observación,
carecen de la necesaria libertad de acción y pueden sufrir
gran número de bajas.
Los ejecutados sin presión del enemigo, en lo posible
deben de desarrollarse durante la noche o en períodos de
escasa visibilidad, su adopción debe ser decidida con
suficiente antelación para permitir su planificación y
coordinación.
5.19.1 Planificación
La orden de repliegue debe indicar la posición de
retaguardia, la zona o rutas de repliegue, el efectivo y
conducta de la fuerza de seguridad y otras medidas de
seguridad, momento y prioridad de repliegue de las
Unidades, movimientos anticipados de instalaciones
administrativas hacia retaguardia, evacuación de los
enfermos y heridos, traslado o destrustrucción de
abastecimientos y materiales y mantenimiento del control
de tránsito.
La zona de acción y la hora de repliegue son fijados
para los medios de combate que están en contacto con el
enemigo. A las Unidades que no están en contacto se les
asigna rutas, prioridades y hora del repliegue. Las líneas
de coordinación se utilizan para coordinar y controlar los
movimientos. Se ubican puntos de control sobre las rutas
principales o en puntos críticos.
Normalmente, es necesario escalonar el repliegue
manteniendo una fuerza de seguridad para proteger el
movimiento del grueso. No obstante, cuando la seguridad de
las fuerzas y las rutas disponibles lo permiten, todas las
Unidades subordinadas pueden replegarse simultáneamente.
La secuencia de repliegue normalmente comienza con el
movimiento anticipado de los elementos encargados de
preparar la nueva posición a retaguardia, y con la
evacuación temprana de bajas; luego es evacuado el equipo
de combate recuperable, los abastecimientos e
instalaciones de apoyo logístico; se retiran
posteriormente las instalaciones de comando, excepto las
esenciales, previéndose obstáculos detrás del grueso para
dificultar la persecución (destrucciones); luego se
replegará el grueso comenzando normalmente por retaguardia

Página 193 de 360


y por último se replegará la fuerza de seguridad
completándose inmediatamente las destrucciones previstas.
5.19.2 Ejecución.
5.19.2.1 Repliegue bajo presión.
El éxito de un repliegue bajo presión depende de la
velocidad de ejecución, de las medidas de control y del
empleo efectivo de los fuegos y de la fuerza de seguridad.
El repliegue bajo presión se ve facilitado en terreno
cubierto que limite la observación enemiga sobre las
posiciones propias y permita la utilización de cubiertos y
abrigos para la reunión y movimiento de las tropas. Por
otro lado, de día, el terreno descubierto, aunque favorece
la acción de los blindados para cubrir el repliegue ofrece
la desventaja de la exposición de las tropas amigas a la
observación y fuego enemigo y limita el mantenimiento del
secreto. Las condiciones meteorológicas, cuando limitan la
observación terrestre y aérea al enemigo, así como el
empleo del humo, proporcionan una señalada ventaja a las
fuerzas que se repliegan.
5.19.2.1.1 Seguridad.
Las Fuerzas de Seguridad necesarias para cubrir los
ejes de repliegue y las zonas de reunión del grueso desde
una o más posiciones, son normalmente proporcionadas por
la reserva que será desplegada en posiciones más
adelantadas. Cuando la situación lo exija, será necesaria
la ocupación de una posición de flanco para facilitar el
repliegue del resto de las fuerzas y forzar al enemigo a
ejecutar una maniobra que le haga perder tiempo. Estas
Fuerzas podrán contraatacar cuando fuere necesario para
liberar Unidades fuertemente presionadas en estrecho
contacto con el enemigo. El Comandante tomará previsiones
especiales para la defensa antitanque, mantenimiento de
nudos de comunicaciones y otras vías de aproximación para
blindados, que controlen las vías de comunicación hacia
retaguardia y los accidentes críticos del terreno que
proporcionen observación sobre el área considerada.
5.19.2.1.2 Conducción.
A la hora indicada por el Comandante, las Unidades en
contacto se mueven en formación desplegada hasta
desenganchar y alcanzar zonas de reunión local.
Las Unidades desenganchadas se mueven entonces a las
nuevas posiciones de retaguardia o a la zona de reunión,
haciéndolo motorizadas si la situación lo permite. La

Página 194 de 360


Fuerza de Seguridad se retira hacia la posición de
retaguardia conduciendo una acción retardatriz, hasta ser
recogida por los elementos de seguridad correspondientes.
Las grandes formaciones blindadas normalmente se mueven
directamente a las posiciones de retaguardia o a las zonas
de reunión. Cuando no es practicable el repliegue
simultáneo, el Comandante debe determinar el orden en que
se ejecutará. El replegar en primer lugar los elementos
más fuertemente presionados por el enemigo puede
comprometer el total de la Unidad, a menos que estuviere
asegurado un contraataque efectivo. El repliegue en primer
lugar de las Unidades más empeñadas podrá resultar en la
pérdida de todas o la mayor parte de las Unidades más
presionadas. La decisión deberá basarse en la
determinación del plan que mejor preserve la integridad de
la fuerza y contribuya al cumplimiento de la misión. Las
unidades blindadas orgánicas o en apoyo de otros medios de
combate, que no se encuentren en la reserva, son empleadas
para proteger los flancos y auxiliar a desenganchar a
Unidades locales en estrecho contacto con el enemigo.
La Artillería apoya el desenganche de las Unidades del
primer escalón, batiendo con intenso fuego las formaciones
enemigas adelantadas. Las Unidades de Artillería se
escalonan en profundidad, manteniendo la continuidad del
apoyo de fuegos. En las últimas etapas, el apoyo de
Artillería a las fuerzas que se repliegan puede ser
proporcionado por la Artillería de los P.A.G. de la
posición a retaguardia.
Cuando las condiciones del tiempo lo permitan, se
utilizará humo para cubrir movimientos y la reunión de las
Unidades expuestas a la observación enemiga. Deberá
considerarse que el humo no provea también una pantalla
para el avance enemigo.
5.19.2.2 Repliegue sin presión.
El éxito de los repliegues sin presión depende
principalmente de las medidas de engaño, de secreto y de
control. Son realizados voluntariamente y se utilizarán
normalmente para su ejecución las horas de la noche.
Podrán ser realizados de día utilizando terreno
cubierto y siempre que se tenga superioridad aérea. Los
planes deben incluir previsiones para la eventualidad de
la toma de conocimiento por el enemigo de la realización
de la operación y por su interferencia en el desarrollo de

Página 195 de 360


la misma, ya sea con acciones terrestres o aeromóviles. Se
deberán explotar las limitaciones que impone la oscuridad
sobre las operaciones aéreas y terrestres enemigas. Se
deberán mantener las actividades normales, incluyendo
patrullaje agresivo.
Los repliegues sin presión se verán facilitados por el
uso de terreno descubierto, cuando las condiciones de luz
limitan la observación terrestre y aérea del enemigo sobre
los movimientos de tropas. No obstante, se deberán dar
órdenes preparatorias disponiendo los reconocimientos
diurnos necesarios.
La dificultad del contacto visual en la oscuridad, la
necesidad de seguridad de las comunicaciones para impedir
al enemigo la detección del repliegue y el aumento de los
movimientos sobre caminos, imponen un efectivo control de
los movimientos. Esto se obtiene por órdenes detalladas,
diseminadas en tiempo, para realizar los reconocimientos
necesarios, la planificación y su ejecución por las
Unidades subordinadas.
Se deberán especificar claramente las horas, rutas,
líneas de coordinación, zonas de reunión y posiciones de
retaguardia.
5.19.2.2.1 Engaño y Seguridad.
Las Unidades de primer escalón dejan destacamentos en
contacto para dar seguridad a la reunión y desplazamiento
del grueso. Este escalón de contacto (pequeños grupos de
cada compañía en contacto) intentará engañar al enemigo
dando la impresión de que la posición continúa ocupada.
Parte de la Artillería permanecerá en apoyo del escalón de
contacto. Esta Artillería tomará a su cargo las misiones y
ejecutará los fuegos de manera de impedir que se descubra
la operación a realizar; debiendo estar representados
todos los calibres que estaban apoyando por el fuego
indirecto la P.D.
En escalones superiores, el amplio frente en el que se
emplea el escalón de contacto, normalmente impide un
comando único para el mantenimiento de un control
efectivo. Por ello, el control es descentralizado a los
comandantes de sectores (División). Deberá proporcionarse
un efectivo sistema de comunicaciones, acorde con el
mantenimiento del secreto, para asegurar el control de los
elementos del escalón de contacto. Siempre que sea posible
deberán proporcionarse medios de transporte al escalón de

Página 196 de 360


contacto, a fin de acelerar su movimiento hacia
retaguardia. Antes del comienzo del repliegue, se
adoptarán medidas adicionales de seguridad que estarán a
cargo de destacamentos de seguridad de los medios de
combate en reserva de cada escalón, con la misión de
proteger el repliegue de los elementos subordinados,
ocupando posiciones en proximidades de las ZZ.RR., a lo
largo de los caminos de repliegue y en los flancos.
Siempre que sea posible, ellos ocuparán posiciones antes
del oscurecer y cubrirán toda probable avenida de
aproximación enemiga, particularmente aquellas que pueden
ser usadas por blindados. Estos destacamentos adicionales
son controlados por el escalón que los instala y se
reintegran al mismo cuando su misión de seguridad haya
sido cumplida.
La seguridad de la posición a retaguardia es
proporcionada normalmente por una posición de P.A.G.
instalada por la Unidad superior. La misión de esta fuerza
será proteger la ocupación de la posición de retaguardia o
zona de reunión y cubrir el repliegue del escalón de
contacto.
5.19.2.2.2 Conducción.
Será de particular importancia, que a la iniciación
del repliegue sin presión, el escalón de contacto se
encuentre preparado para ejecutar sus misiones; que los
destacamentos de seguridad adicionales se encuentren en
posición; y que la fuerza de P.A.G., ubicada a retaguardia
se encuentre en posición.
Las Unidades del grueso se moverán hacia retaguardia
en la misma forma que en el repliegue con presión, con las
siguientes excepciones: todas las Unidades se repliegan
simultáneamente en un amplio frente, las formaciones son
más cerradas y los movimientos se conducen dando mayor
importancia al secreto y a la seguridad.
El escalón de contacto se repliega a una hora
determinada o mediante orden. El movimiento hacia
retaguardia de la Artillería en apoyo del escalón de
contacto, comienza antes que el de éste.

5.20 ACCION RETARDATRIZ.


La acción retardatriz es una operación en que se
intercambia el mínimo de espacio por el mayor tiempo
posible. Será una operación de economía de fuerza.

Página 197 de 360


La fuerza que ejecuta la operación deberá evitar verse
decisivamente comprometida o aferrada, entendiéndose por
esto, el perder su libertad de acción y su capacidad
maniobra.
La acción retardatriz es el tipo de operación
habitualmente empleada por las fuerzas de cobertura y
otros destacamentos de seguridad. Se ejecutará más
efectivamente por tropas altamente móviles, usadas en
conjunción con la aviación táctica. El uso de
destrucciones con campos minados antitanques y
antipersonales y otros obstáculos batidos por el fuego,
reforzarán la capacidad de retardo. Las fuerzas
retardatrices deberán obligar al enemigo a desplegar y
maniobrar.
5.20.1 Formas de acción retardatriz.
- Retardo en posiciones sucesivas.
- Retardo en posiciones alternas.
- Retardo en una posición.
- Retardo por acción ofensiva.
La elección de la forma en que se planificará el
retardo dependerá del período de retardo requerido, del
terreno que se podrá ceder, de la amplitud del frente a
atender, de las fuerzas disponibles y de la amenaza
enemiga.
5.20.1.1 Planificación.
La planificación y control de las operaciones será
centralizada, pero su ejecución será descentralizada.
Un plan para la ejecución de una acción retardatriz
deberá contener detalles referentes a:
- Ubicación de la Posición Inicial de Retardo
(P.I.R.). Si al iniciarse la operación la fuerza estuviera
en contacto, ésa, será la Posición Inicial.
- Zona en que se efectuará la Acción Retardatriz.
Mediante el establecimiento de límites laterales que se
extienden hasta incluir las posiciones de retaguardia.
- Tiempo a ganar.
- Ubicación de la posición del escalón superior,
cuando se deba prever un repliegue a través de ella.
- Líneas de Coordinación o posiciones sucesivas, en
caso de requerirlo la forma de acción retardatriz
adoptada; las posiciones de retardo que se seleccionen
deberán tener características tales como poseer líneas de
alturas perpendiculares a la dirección de progresión del

Página 198 de 360


enemigo, obstáculos naturales y caminos aptos para el
repliegue.
- Organización de las posiciones:las posiciones de
retardo son organizadas como una posición defensiva con
fuerzas de seguridad, fuerzas de la posición de
resistencia y fuerzas de la reserva. El dispositivo, la
profundidad, y el empleo de los medios, resultarán de la
forma de acción retardatriz seleccionada.
5.20.1.2 Ejecución.
En la ejecución de la acción retardatriz las fuerzas
toman contacto con el enemigo lo más alejado posible para
causarle bajas, desgastarlo y forzarlo a ejecutar un
despliegue prematuro. En determinadas circunstancias los
fuegos de gran alcance podrán ser deliberadamente
retenidos con la finalidad de engañar al enemigo.
Aún cuando la acción retardatriz es una operación de
características defensivas, el Comandante que recibe tal
misión o decide ejecutarla no debe suponer que su fuerza
estará siempre a la defensiva o replegándose.
El enemigo, por lo general, se retardará más cuando
sufra más bajas, de modo que la fuerza que ejecutará la
acción retardatriz procurará por cualquier medio (acciones
ofensivas, emboscadas, incursiones,etc.) ocasionarle bajas
al enemigo.
El blindado será particularmente adecuado para las
acciones de retardo, debido a su movilidad, su capacidad
de tomar al enemigo con fuegos de largo alcance y de
trayectoria tendida y por sus sistemas de Comunicaciones
que permiten el control sobre zonas mas amplias que las
Unidades similares de otros medios de combate.
Las posiciones de retaguardia de blindados no son
organizadas en profundidad, sino más bien como una línea
fuerte de fuegos, con la mayor parte de la fuerza
concentrada en las probables avenidas de aproximación. La
reserva, que se compondrá predominantemente de elementos
de tanques, se utilizará para contraataques y seguridad.
Las Unidades blindadas se repliegan por la acción del
fuego y el movimiento. Los elementos en repliegue siempre
son cubiertos por un elemento de apoyo de fuegos o base de
fuegos. El fuego enemigo será neutralizado por las armas
de la base de fuegos, mientras que los tanques que se
replieguen, usando caminamientos cubiertos , se moverán a
la próxima posición. En los repliegues diurnos los tanques

Página 199 de 360


son normalmente los últimos elementos que rompen el
contacto con el enemigo.
5.20.2 Retardo en posiciones sucesivas.
El retardo en posiciones sucesivas consiste en una
resistencia limitada sobre una posición inicial y una
reiteración de la resistencia en posiciones sucesivas.
Se emplea cuando se disponga de espacio, cuando el
enemigo deberá ser retardado por un tiempo prolongado y el
terreno ofrezca varias posiciones a retaguardia
ventajosas. La misión, el terreno, el tiempo disponible
para organizar cada posición, el volumen relativo y la
composición de las fuerzas involucradas determinarán el
valor del retardo a realizar en cada posición. El retardo
se verá facilitado por la elección de posiciones en
terreno dominante, a distancias tales entre ellas que
posibiliten que el repliegue pueda ser completado durante
una sola noche y lo suficientemente alejadas para que el
enemigo deba reorganizar sus fuerzas antes de atacar la
próxima posición.
La defensa en cada posición debe obligar a un
despliegue prematuro del enemigo. Los Blindados, la
artillería y las armas colectivas se ubican bien
adelantados, de modo de poder infligir el máximo retardo
al enemigo al tomarlo a largos alcances. El contacto se
obtiene por algunos elementos de la fuerza de retardo, tan
adelante como sea posible a la vez que se mantiene una
continua resistencia.
La pérdida de una localidad defensiva no implica un
prematuro repliegue en todo el frente.
Las unidades adyacentes y la reserva se emplean para
mantener la integridad de la posición, si de esta acción
no resultara que la totalidad de la fuerza se viera
demasiado comprometida.
La situación puede exigir una fuerte resistencia en
todas las posiciones, aún contraataques, a fin de cumplir
la misión de retardo.
La reserva puede ser empleada para: proporcionar
fuerzas de seguridad delante de la posición de retardo,
efectuar un contraataque, protege un flanco amenazado,
asegurar regiones vitales en la retaguardia, efectuar
ataques de desorganización para facilitar el desenganche o
proteger el repliegue de los elementos de primer escalón.
La preparación de la siguiente posición a retaguardia

Página 200 de 360


es de importancia fundamental.
Cuando sea necesario, tropas de las fuerzas de retardo
se emplean con este propósito. Poco antes de retirarse de
la posición, algunos elementos de la fuerza de retardo
pasan a la posición de retaguardia una posición
intermedia, para cubrir en este último caso, la ocupación
de la primera por el grueso de la fuerza.

En caso de que la posición se vea amenazada de ser


fuertemente enganchada, se realiza el repliegue, en lo
posible de noche. Pueden ser usados en forma efectiva los
explosivos
QBN
persistent
es para
crear
barreras,
reforzar
obstáculos
naturales
y
destruccio
nes y para
negar
determinad
as áreas
al
enemigo.

5.20.3 Retardo en Posiciones Alternas. Al emplear este


procedimiento la fuerza se organiza en dos elementos. Un
elemento ocupa la posición de retardo inicial y se empeña
contra el enemigo mientras que el otro ocupa y organiza la
segunda posición de retardo.
Aquellas fuerzas que ocupan la posición inicial
combaten con el enemigo ejecutando una acción retardatriz
continua desde la posición inicial y entre ésta y la
segunda posición de retardo. Una vez que hayan pasado a
retaguardia de la segunda posición de retardo, las tropas
que ocupan la misma asumen la misión de retardar al
enemigo.
Este procedimiento se repite, manteniéndose

Página 201 de 360


alternativamente cada elemento en contacto con el enemigo.

Esta forma de acción retardatriz tiene la ventaja de


proporcionar más tiempo para mejorar las posiciones de
retardo, para efectuar el mantenimiento del material y
para dar un descanso a las tropas.
Solamente puede realizarse cuando la fuerza está en
condiciones de cumplir con la misión ocupando dos
posiciones simultáneamente.
Normalmente se emplea cuando el frente asignado es
relativamente angosto.

5.20.4 Retardo en una posición. El retardo en una sola


posición es ejecutado mediante la ocupación de una
posición por el período de tiempo que sea necesario.
Se adopta cuando: el espacio disponible para el
retardo es limitado; el tiempo en que el enemigo debe ser
retardado es corto y el terreno no proporciona más de una
posición de retardo satisfactorio para utilizar. La
organización de la posición, es semejante a la de una
defensa en posición o de una defensa móvil, dependiendo
del frente, del retardo impuesto por la misión, del
terreno, y de las fuerzas disponibles. En el retardo en
una sola posición se utilizan los mismos procedimientos
Página 202 de 360
que para la defensa. El desenganche y el movimiento hacia
retaguardia se ejecutan en la misma forma que en él
retardo en posiciones sucesivas.
5.20.5 Retardo por acciones ofensivas.
En los escalones superiores, el retardo puede ser
cumplido mediante una acción ofensiva, combinada con otras
formas de acciones de retardo. Estas acciones ofensivas,
toman normalmente la forma de ataques a objetivos
limitados cuyo propósito es desorganizar la progresión
enemiga. Las unidades blindadas son particularmente
apropiadas para estas misiones.

5.21 RETIRADA
La retirada es en esencia una marcha, por ello reúne
todas las características y se ajusta para su realización
a los fundamentos estudiados en el presente reglamento,
con las variaciones resultantes de su finalidad y de la
existencia o no de tropas amigas entre el enemigo y la
fuerza en retirada.
La retirada puede ser hecha para aumentar la distancia
de apoyo de otras fuerzas amigas, para asegurar terreno
mas favorable, para adaptarse al dispositivo del escalón
superior, o para emplear una fuerza en otra área. Cuando
el Repliegue precede a la retirada, ésta comienza cuando
ha sido completada la organización de las columnas de
marcha.
El objetivo de marcha o la posición de retaguardia son
elegidos para favorecer el futuro empleo de la Unidad. Si
el propósito es escapar a una situación desesperada, la
posición de retaguardia debe ser tal, que interponga
distancia y obstáculos entre nuestras tropas y el enemigo.
5.21.1 Control y Coordinación.
La formación y número de las columnas empleadas en la
retirada dependen principalmente, del número de caminos
disponibles y del valor de la interferencia del Enemigo.
Es deseable mover simultáneamente los elementos
principales de nuestras tropas hacia retaguardia, sin
embargo, una red de caminos restringida o amenazas
enemigas sobre los flancos pueden imponer el
escalonamiento del movimiento.
Durante la fase inicial se asignan rutas específicas
para las tropas administrativas o de apoyo, con
instrucciones concernientes a su liberación para la

Página 203 de 360


utilización por las tropas de combate. Se asignan zonas de
acción a los elementos de combate para la iniciación de
las acciones de retirada. La operación inicialmente es
descentralizada, a medida que la retirada se desarrolla,
el Comandante de las Fuerzas, normalmente, retoma el
control de sus medios.
Adquiere importancia la misión de la Retaguardia,
fundamentalmente cuando no existen tropas amigas
interpuestas que brinden seguridad al movimiento como
puede ocurrir luego de un repliegue.
El grueso se organiza en una formación inversa a la de
los movimientos hacia el contacto.
5.21.2 Ejecución.
Las Unidades administrativas y trenes son los primeros
en moverse hacia la retaguardia a un área de vivac.
Durante su retirada ellos establecen depósitos
provisionales de municiones, combustibles y raciones para
asegurar las necesidades del grueso.
A la hora fijada, se inician los repliegues y las
tropas se mueven hacia zonas de reunión y se organizan las
formaciones de marcha, momento éste en el cual la Fuerza
estará pronta para iniciar la retirada.
Para la fase inicial, las fuerzas se retiran en
múltiples columnas pequeñas. A medida que la distancia que
las separa del enemigo aumenta, las columnas pequeñas se
consolidan en columnas mayores. La red de caminos y la
interferencia enemiga incluyen en el momento y forma de
realizar esta consolidación.

5.22 EL APOYO DE FUEGOS EN LOS MOVIMIENTOS


RETROGRADOS.
5.22.1 Características Generales.
Normalmente, los frentes asignados en este tipo de
operación defensiva son extensos y requieren por lo tanto
Artillería adicional para proporcionar un adecuado apoyo
del fuego en toda el área. Las fuerzas de maniobra
normalmente son altamente móviles exigiendo por lo tanto
que la Artillería posea por lo menos la misma movilidad
que dichos elementos.
El AAD es especialmente útil en esta operación y
deberá cumplir con las siguientes tareas:
- Apoyar al Plan de Engaño.
- Realizar hostigamiento e interdicción aérea.

Página 204 de 360


- Ejecutar operaciones de interdicción de rutas.
- Realizar el AAD en beneficio de las UU en contacto.
- Planificar los fuegos para facilitar el desenganche
con el enemigo si fuera necesario.
5.22.2 El Apoyo de Fuego en la Acción Retardatriz.
El apoyo de fuego se debe realizar de tal forma que
permita proporcionar un apoyo adecuado a los elementos de
maniobra y retener a la vez capacidad de fuego en
beneficio de la Gran Unidad que dirige la operación. Se
debe mantener la continuidad de apoyo mientras las fuerzas
se desplazan hacia retaguardia. Las UU. de A. se escalonan
en profundidad y se desplazan por escalones. La
planificación y coordinación del apoyo de fuego son
similares a las operaciones de retardo llevados a cabo
durante la defensa. Los medios de apoyo de fuego deben
cumplir en este tipo de operaciones con las siguientes
tareas:
- Planificar fuegos sobre las avenidas de
aproximación.
- Atacar a las fuerzas que avanzan, tan
profundamente y lo antes que sea posible con la finalidad
de forzar su despliegue.
- Demorar y quitar efectividad al empleo de
tanques.
- Cubrir con su fuego los obstáculos, las barreras
y los flancos.
- Suprimir la observación y apuntadores de tiro
directo enemigos.
- Facilitar el desenganche.
- Apoyar los contraataques.
- Ejecutar contrafuegos.
- Suprimir los sistemas de defensa aérea enemiga.
- Iluminar el campo de batalla.
5.22.3 El Apoyo de Fuego en el Repliegue sin Presión.
La A. debe mantener parte de sus medios en posición
para cubrir el repliegue. La actividad normal de sus
fuegos debe mantenerse para aumentar el engaño y para
cubrir el ruido de los vehículos que se están desplazando
hacia retaguardia. Se preparan planes de fuego detallados
para engañar al enemigo y para frustrar los intentos de
interferir con el repliegue. Se requieren una estrecha
coordinación entre los elementos de fuego que permanecen
con los elementos en contacto y los que se replegarán.

Página 205 de 360


Las actividades que deben realizar los medios de apoyo son
las siguientes:
- Atacar las concentraciones de tropa atacantes en
zona de reunión.
- Apoyar la ruptura del contacto.
- Ejecutar contrafuego.
- Suprimir los sistemas de defensa aérea enemigos.
5.22.4 El Apoyo de Fuego en el Repliegue bajo Presión.
El apoyo de fuego se dedica principalmente a apoyar la
ruptura del contacto y desalentar una posible persecución
enemiga. Cuando se logra el desenganche, la A. en A/C se
desplaza antes del repliegue de las UU de maniobra.
La A. en A/D permanece en posición hasta el último
momento posible. Las actividades de apoyo de fuego a
ejecutar son las siguientes:
- Apoyar con fuegos masivos el desenganche.
- Apoyar los contra ataques o los ataques de
desorganización.
- Ejecutar fuegos de supresión sobre armas de tiro
directo enemigas.
- Realizar fuegos sobre obstáculos y barreras.
- Ejecutar contra fuegos y supresión de defensas
aéreas del enemigo.
5.22.5 El apoyo de fuegos en la retirada.
Se debe proporcionar un apoyo de fuego adecuado a los
elementos en contacto, de los flancos y a aquellos con
misión de SAR.
La A. puede incrementar su apoyo mediante el refuerzo
o la integración de UU. de A. a los elementos componentes
de la fuerza de seguridad, o mediante la asignación de
misiones tácticas adecuadas a los medios de apoyo de fuego
disponibles.
Para apoyar las operaciones de la retirada los fuegos
se planifican:
- Al frente y detrás de las fuerza que se retira.
- Por encima y a los flancos de la fuerza.
- En las posiciones de retaguardia, a través de las
cuales se está replegando el grueso de la fuerza.

5.23 CAMBIOS DE ACTITUD


Fundamentalmente son el paso de la defensa al ataque y
del ataque a la defensa, sin embargo también puede
asumirse en otras operaciones tácticas.

Página 206 de 360


La resolución de adoptarlos, exige una cuidadosa
evaluación del momento táctico que se vive y de la
trascendencia que tendrá. Se adoptará en lapsos breves,
mediante órdenes aisladas a los Comandantes subordinados y
exige la reestructuración del total o gran parte del
dispositivo primitivo. Sin embargo, si el riesgo se ha
calculado al detalle y la situación lo aconseja no deberá
vacilarse en los cambios de actitud ya que permitirán la
conquista de objetivos de importancia mediante la sorpresa
o impedirán la destrucción de una unidad.
5.23.1 Pasos de la defensa al ataque.
Conocidas las razones para defenderse, todo Comandante
tiene en mente, cambiar de actitud en cuanto la situación
varíe favorablemente. Esto puede suceder al quebrantar el
ataque adversario y producir el equilibrio de fuerzas, al
recibir refuerzos propios o porque el adversario se
retira.
Dadas estas condiciones, conjuntamente a otras
consideraciones como ser la duración de la misión, el
terreno, la capacidad combativa o logística y
especialmente evitando la posibilidad de un engaño por
parte del adversario, el Comandante resolverá pasar al
ataque, saliendo de los límites del terreno favorable
elegido para su defensa y buscando la decisión fuera de
él.
El plan de ataque que se formulará, contendrá
básicamente los objetivos finales a conquistar por los
elementos de maniobra subordinados, objetivos que no
estarán muy lejanos, pero que permitirán la destrucción de
las fuerzas enemigas.
El dispositivo debe ser adecuado a la nueva actitud, lo
que requiere tiempo; una forma de acortarlo, es la
disposición de las reservas, reunidas y preparadas para
ejecutar un ataque.
Toda la unidad debe ser capaz de ejecutar este cambio
de actitud con la mayor rapidez.
El plan de fuegos utilizados en la Defensa, continuará
ejecutándose con mayor volumen de manera que impida una
reorganización adversaria pero posibilite la propia.
Deberá ser reestructurado para apoyar al ataque y la
conquista de objetivos.
El plan de enlace y comunicaciones servirá sólo
inicialmente y también requiere reajuste.

Página 207 de 360


Sin embargo ninguno de ellos pasará por la etapa de
reconocimientos para su comprobación, por cuanto ya se
hicieron para la defensa; esto incluye todo lo relacionado
con el terreno y con el enemigo, a través de la
información aportada por los reconocimientos y el combate.
Por ello serán de ejecución inmediata y completarán
las Ordenes fragmentarias que se emitan.
Es necesario señalar que el éxito obtenido en un
Contraataque de la posición en ningún caso es un índice
para un cambio de actitud, si no se presenta más
desorganización de las fuerzas enemigas en profundidad,
debilitamiento de las mismas en su ataque en otras partes
del frente, disminución del volumen de fuego de apoyo al
ataque y, si es posible de determinar, carencia de reserva
adecuada, ya sea porque fue empleada, está muy lejana o
sencillamente no existe.
5.23.2 Paso del Ataque a la Defensa.
Es un cambio de actitud que debe realizarse
obligadamente bajo el fuego adversario y que se produce
como consecuencia de fracasos sufridos por las unidades de
primera línea u otros imponderables en la situación o
también, cuando habiendo tenido un éxito inicial existen
posibilidades de un refuerzo del adversario dentro del
plazo de ejecución de la misión o de disminución de las
propias fuerzas por tener que ser empleadas en otra parte.
Este cambio de actitud puede ejecutarse manteniendo lo
ya conquistado o retrocediendo para adoptar un dispositivo
defensivo más a retaguardia.
En el primero de los casos, ordenes fragmentarias,
complementadas con Planes de fuego, empleo de ingenieros,
enlaces y comunicaciones y contraataque serán emitidas
rápidamente y las unidades ocupando terrenos críticos
conquistados se desplegarán para la defensa, tratando de
aumentar su capacidad defensiva en los plazos más breves.
En el segundo caso será necesario dar una orden de
repliegue previa para su ejecución.
La consolidación de objetivos, que se efectúa durante
o al finalizar el ataque es básicamente un cambio de
actitud que, ejecutado por los elementos de maniobra y sus
unidades constitutivas hasta las más pequeñas, permite
contrarrestar las reacciones ofensivas del adversario y
asegurar el objetivo final. La diferencia estriba en que
la consolidación se realiza por las unidades dependientes

Página 208 de 360


en forma aislada y a veces incluso espontánea, mientras la
unidad continúa el ataque o actividades de limpieza de
núcleos enemigos. Este cambio de actitud toda la unidad lo
adopta, existiendo un cambio de dispositivo y de planes de
apoyo para la nueva maniobra.

CAPITULO VI¡Error! Marcador no definido.

OPERACIONES CON CARACTERISTICAS ESPECIALES


Sección 1

OPERACIONES CON CARACTERISTICAS ESPECIALES

6.1 COMBATE NOCTURNO

El Combate Nocturno, que logra sorpresa y que aprovecha otras ventajas propias de
la oscuridad, puede ofrecer oportunidades excepcionales para obtener el éxito,
cuando las acciones diurnas sean menos apropiadas- Ante el progreso de los medios
de visión nocturna, cada vez más el combate en la noche o en condiciones de
oscuridad es utilizado por las fuerzas en campaña. Las características del
instrumental moderno permiten a las Tropas combatir y maniobrar en circunstancias
similares a las diurnas, por lo que cada día adquiere mayor relevancia el empleo de
este tipo de operación.
El combate nocturno se caracteriza también por: una relativa disminución en la
efectividad del fuego observado; por el aumento de la importancia del combate
cuerpo a cuerpo y del fuego de armas referidas sobre blancos o áreas definidas
durante el día; por la dificultad en los movimientos, el control de las Tropas, y el
mantenimiento de la dirección y cohesión; y por una mayor sensibilidad moral de
las Tropas a los factores físicos y psicológicos.
El tiempo requerido para ejecutar la maniobra y para conducir y emplazar equipos y
armas, es generalmente mayor durante la noche.
La disminución en la efectividad del fuego de las armas de tiro directo permite el
uso de formaciones más cerradas sin exponerse a bajas excesivas; la dificultad en el
mantenimiento del control y dirección obligan a seleccionar objetivos limitados
fáciles de reconocer y a los que se puede llegar por itinerarios bien definidos; el
estado moral especial de las tropas aumenta los efectos de la sorpresa obtenida por
la acción. Los fracasos en las acciones nocturnas, afectan generalmente más a las
Tropas que los de las operaciones diurnas. El Combate Nocturno es aplicable a todo
tipo de operaciones. Puede ser utilizado para completar o explotar un éxito, para
ganar terreno importante para futuras operaciones, para evitar grandes pérdidas para
mantener presión sobre el Enemigo, para lograr la sorpresa y su perioridad

Página 209 de 360


psicológica, para utilizar el encubrimiento proporcionado por las condiciones de
oscuridad y para compensar una inferioridad en apoyo aéreo y de blindados.
El Combate Nocturno impone la necesidad de una planificación detallada, de
reconocimientos diurnos completos, de un control efectivo y de una cuidadosa
instrucción.
Se toman las previsiones necesarias para la adecuada iluminación del campo de
batalla, para el empleo de aparatos de puntería nocturna y equipos de alarma.
6.1.1 Ataque Nocturno

Los fundamentos básicos referentes al Ataque Nocturno son los mismos que
para cualquier otro ataque. Las principales diferencias se derivan de la
importancia en la simplicidad del plan; de la cuidadosa preparación que
incluye instrucción, secreto, sorpresa y reconocimientos diurnos; la
designación de objetivos bien definidos y fácilmente identificables; planes
de fuego y maniobras cuidadosamente preparados; control efectivo,
cohesión en la ejecución y un adecuado sistema de comunicaciones.

6.1.1.1 Planificación

Los planes y órdenes para los ataques nocturnos son formulados con
mayores detalles que lo habitual.
Es de destacar que las dificultades de los ataques nocturnos aumentan con el
volúmen de la fuerza. Ellos pueden ser realizados exitosamente por una
Unidad de cualquier volumen, pero deben ser ejecutados a objetivos
limitados.
Pueden alcanzarse objetivos más profundos por una sucesión de ataques a
objetivos limitados y de acuerdo al grado de detalle de planes hechos con
una adecuada antelación. Se pueden lograr iguales efectos de acuerdo al
grado en que la iluminación del campo de batalla elimine las dificultades de
control y movimiento.

6.1.1.2 Hora de Ataque

El ataque se desencadena en las primeras horas de la noche y busca


conquistar y mantener el objetivo sacando ventajas del mayor período de
oscuridad disponible. Además tiene la ventaja de que puede anticiparse a
posibles operaciones nocturnas de parte del Enemigo.
El ataque que se desencadena en las últimas horas de la noche, puede ser
ventajoso como una acción previa a un ataque general a lanzarse al
amanecer, debido a que deja al defensor muy poco tiempo para reaccionar.
Este ataque debe dar suficiente tiempo al atacante para reorganizarse
durante la oscuridad sobre el objetivo conquistado, para rechazar
contraataques y prepararse para la prosecución de las operaciones.
Página 210 de 360
Dadas las características de los medios modernos, el ataque nocturno puede
ser encarado también como una operación principal, tendiente a mantener la
continuidad de la presión sobre las fuerzas enemigas.

6.1.1.3 Ejecución

6.1.1.3.1 Reconocimiento

Para decidir la realización de un ataque nocturno debe tenerse en cuenta que


exista suficiente luz diurna para ejecutar los reconocimientos y preparativos
preliminares. El reconocimiento debe incluir la observación del terreno,
tanto de noche como de día, con la finalidad de que los aspectos diurnos y
nocturnos puedan ser estudiados.

6.1.1.3.2 Iluminación del campo de batalla

Para proporcionar iluminación en el campo de batalla pueden emplearse


proyectores, señales terrestres, bombas de iluminación, granadas de
iluminación, bengalas de disparo, bengalas aéreas y procedimientos de
campaña.
Se requiere suficiente tiempo para preparar los planes de iluminación y
para integrarlos con los planes de maniobra y de apoyo de fuego.
Durante el ataque, el Comandante que conduce la operación, debe tener el
control sobre los medios de iluminación.
Dadas las posibilidades de accionar en la oscuridad, el Comandante debe
evaluar las ventajas de iluminar el campo de combate con respecto a las
desventajas que ofrece el operar en la oscuridad y viceversa.

6.1.1.3.3 Conducción

En la conducción de los ataques nocturnos se emplean las formaciones


más simples. Las pequeñas Unidades avanzan en columnas a lo largo de
ejes bien definidos hasta llegar a la proximidad de sus objetivos, entonces
despliegan y se inicia el asalto a la posición enemiga.
A cada columna se le marca una dirección y un objetivo definido.
Se mantiene el contacto entre las columnas y se adoptan precauciones para
impedir el choque entre ellas. Las columnas son seguidas inmediatamente
por los elementos de apoyo y las correspondientes reservas locales.
Las reservas se ubican en regiones desde donde pueden moverse
rápidamente hacia el objetivo, explotar el éxito del ataque o cubrir un
repliegue. Los Jefes marchan bien adelante para conducir y controlar la
progresión del ataque.

Página 211 de 360


Una vez conquistados sus objetivos, las Unidades se reorganizan y se
preparan rápidamente para resistir contraataques enemigos y para continuar
su avance.

6.1.2 Defensa nocturna

Los fundamentos básicos relativos a una defensa nocturna son los mismos
que para una defensa diurna. En la defensa nocturna se da particular
importancia: a las medidas que permitan evitar la sorpresa, el uso de
obstáculos, y el empleo de fuegos planeados o preparados para desorganizar
el asalto enemigo.

6.1.2.1 Planificación

Los planes para la defensa deben contemplar previsiones: contra la


infiltración, acción de guerrilleros y ataques aeromóviles; para la defensa de
las instalaciones y para fuegos defensivos organizados que cubran las
avenidas de aproximación enemiga hacia y dentro de la posición defensiva.
Se pueden formular planes que contemplen un cambio del dispositivo
diurno de las tropas, con el fin de obtener sorpresa.

s6.1.2.2 Seguridad

Para proporcionar alerta oportuno y dar seguridad contra todo ataque enemigo,
se utilizan artificios electrónicos, campos de minas, barreras, obstáculos,
puestos de vigilancia, patrullaje activo y una adecuada iluminación.
Las regiones del terreno que no pueden ser efectivamente cubiertas por el
fuego de las Unidades adyacentes, son ocupadas durante la noche por
elementos de reserva. El terreno y los objetos pueden ser contaminados por
agentes tóxicos, preferentemente con aquellos que producen efecto
rápidamente.

6.1.2.3 Ejecución

La mejor defensa contra un ataque nocturno está dada por el control y la


disciplina del fuego. El pánico y el fuego prematuro constituyen aspectos
vulnerables fundamentales en una defensa nocturna.
Para una defensa nocturna exitosa, son esenciales un contínuo patrullaje
agresivo, contraataques nocturnos preparados, y medidas planificadas para
organizarse rápidamente y moverse para rechazar el ataque.
Durante la noche, los puestos avanzados de combate son normalmente
reforzados y se aumenta la actividad de patrullas.

Página 212 de 360


Cuando parece inminente un ataque nocturno debe dosificarse con mas tropas
de Infantería la posición de resistencia.
La iluminación del campo de combate facilita el control de las avenidas de
aproximación del Enemigo.
Los contraataques deben realizarse en el período de oscuridad, para aprovechar
las ventajas que sobre el conocimiento del terreno posee el defensor.
Si los contraataques fracasan, las penetraciones enemigas deben ser
bloqueadas.
Los obstáculos y el fuego de las armas emplazadas, son los principales medios
utilizados para oponerse al asalto. Los fuegos de Artillería sobre zonas fijadas
de antemano, complementan esos medios. Todas las Unidades de la posición
de resistencia se preparan para empeñarse con el enemigo desde el momento
en que los puestos avanzados de combate son obligados a iniciar su repliegue.
Con el fin de impedir la prematura revelación de sus posiciones las armas
automáticas no hacen fuego hasta que se localicen blancos remunerativos.

6.1.2.4 Movimientos retrógrados nocturnos

Para los movimientos retrógrados nocturnos rigen los fundamentos expresados


en el Capítulo 5.
Como regla general, la acción retardatriz nocturna puede ser ejecutada
solamente por pequeñas Unidades o destacamentos que operan y se repliegan a
lo largo de rutas bien definidas. Los movimientos retrógrados son
cuidadosamente regulados para evitar pérdidas por el fuego procedente de
tropas amigas ubicadas a retaguardia.
La desorganización y el retardo de las columnas enemigas que avanzan,
pueden llevarse a cabo por ataques nocturnos de pequeños grupos contra las
columnas de marcha, vivacs, o parques de vehículos.

6.2 COMBATE EN LOCALIDADES

Por localidad se entiende cualquier grupo de edificios construidos con


propósitos habitacionales, comerciales, etc., distribuidos en manzanas o en
otros agrupamientos de diversos tipos que, según su magnitud, podrán tener la
denominación de villas, pueblos y ciudades.
La magnitud de las localidades mencionadas, está en función de la:
- Superficie edificada y densidad de construcciones en bloque, separadas,
semiseparadas o aisladas con que cuenta cada una de ellas.
- Cantidad de estructuras sólidas y altas.
- Densidad de población.
- Existencia de espacios libres (plazas, jardines, baldíos,etc.).

Página 213 de 360


Las localidades, que constituyen objetivos u obstáculos en el desarrollo de las
operaciones, condicionan los métodos y medios a emplear para su conquista o
defensa.
Esto es normalmente provocado por los definidos aspectos militares del
terreno que ellas presentan: observación y campos de tiro sumamente
restringidos; gran cantidad de excelentes cubiertos aprovechables por las
tropas que se enfrentan, aunque con mayores ventajas para el defensor;
creación o existencia de numerosos obstáculos que dificultan o canalizan los
movimientos; facilidades para obtener terrenos llaves que permitan el control
de importantes zonas o lugares claves para el desarrollo de las operaciones;
avenidas de aproximación conformadas por calles y callejones entre edificios,
bocas de desagues y sistemas subterráneos.
La importancia de las localidades en las operaciones depende de su ubicación,
disposición, tipo de construcciones y extensión.
Asimismo se pueden considerar otros factores relevantes como ser:
- Organización y fortaleza obtenida por medio de trabajos de fortificación e
instalación de obstáculos.
- Importancia como fuente de recursos críticos o de algún valor particular.
- Gravitación política en el desarrollo de las operaciones.
En las operaciones en localidades, cobran especial importancia las medidas a
tomar con respecto a la población que las habita, en lo que atañe a su control o
evacuación anticipada.

6.2.1 Ataque a Localidades

Siempre que sea posible, una localidad es aislada y eludida. Si debe ser
tomada, se trata de que las fuerzas que llevan a cabo el ataque principal pasen
por los constados de la misma y otros efectivos menores o menos importantes,
la aíslen y efectúen su conquista.
La finalidad principal del ataque es la de conquistar y ejecutar la limpieza de la
localidad.
6.2.1.1 Planificación

La planificación a desarrollar, se basará en el estudio minucioso de la localidad


y en el dispositivo adoptado por el Enemigo dentro y fuera de la misma.
En todos los casos el ataque es planeado en tres fases:
- Cerco y aislamiento
- Conquista del linde o borde de la ciudad
- Conquista y limpieza de la localidad
En la planificación de esta operación, y debido a las características particulares
de las localidades que restringen notoriamente la observación y el enlace, se
debe enfatizar el establecimiento de adecuadas medidas de control que
faciliten la ejecución del ataque.
Página 214 de 360
La planificación de la fase de conquista y limpieza de la localidad (donde el
ataque asume las características especiales que lo distinguen) es realizado en
forma sumamente detallada, por cuanto, normalmente, la acción es
desarrollada por pequeñas fracciones que operan semi-independientemente.

6.2.1.2 Ejecución

Se inicia con el aislamiento de la localidad y la captura de puntos críticos que


dominen los accesos a la misma y permitan apoyar la continuación del ataque.
Será conveniente disponer de fuerzas sumamente móviles para esta operación
(incluídos elementos aeromóviles si fuese posible).
La fuerza atacante, en una segunda fase, se posesionará del linde de la
localidad. Lo empleará como posición de partida para la prosecución del
ataque que encarará por tramos sucesivos, la conquista y limpieza de la
misma.
El combate en el interior de la localidad, normalmente podrá ejecutarse por el
procedimiento de reducción sistemática, de casa por casa y manzana por
manzana, cuando la localidad sea excesivamente grande y esté fuertemente
organizada, o bien, cuando la misión así lo imponga. En cambio cuando la
localidad sea pequeña o este defendida en forma ligera se podrá utilizar la
máxima celeridad para atravesar la misma y apoderarse de aquellos terrenos,
edificios llaves y/o avenidas de aproximación que permitan su control.
Los Ingenieros pueden apoyar la acción de las tropas del escalón de ataque
mediante la apertura de brechas en barreras y la remosión de otros obstáculos,
despeje de escombros, ejecución de demoliciones para abrir boquetes en
paredes, etc.
Las características del apoyo de fuego están dadas por la necesidad de la
máxima centralización de todos los elementos de fuego disponibles, para estar
en condiciones de ejecutar extensos y potentes fuegos a fin de neutralizar la
artillería enemiga, posibilitar la ruptura de la posición, aislar los puntos de
apoyo y realizar interdicción de las reacciones ofensivas de la defensa.
En lo referente al apoyo de fuego de la artillería de campaña, su mayor
efectividad se logra durante la ejecución de las dos primeras fases de la
operación. No obstante en la conquista y limpieza de la localidad, puede ser
empleada (normalmente en forma descentralizada) contra posiciones enemigas
situadas en los pisos superiores de los edificios y realizando interdicción de las
avenidas de aproximación que el enemigo podría utilizar para enviar fuerzas o
romper el cerco.
Como principio general, los blindados eludirán las zonas edificadas dejando su
conquista a otras tropas.

6.2.2 Defensa de Localidades

Página 215 de 360


La defensa de una localidad es organizada en profundidad y sobre accidentes
topográficos claves cuya retención preserva la integración de la defensa y
permite disponer de cierto espacio para desplazar las reservas. Normalmente se
la subdivide en sectores organizados para combatir en todas direcciones, pero
vinculados entre si para evitar quedar cercados y dificultar la penetración.
La capacidad defensiva de la localidad es aumentada mediante la organización
y construcción de obstáculos protegidos por fuegos, y por la preparación de
edificios, sótanos, etc., para su utilización como posiciones.
Los edificios, cercos, jardines, etc., del perímetro exterior, que forman
salientes, se aprovechan para batir con fuegos cruzados el frente y los flancos
de la localidad. En el interior de ésta, deben batirse eficazmente las calles y
espacios vacíos por los que pueda avanzar el Enemigo.
Una localidad disminuye o pierde su valor defensivo cuando puede ser aislada,
rodeada o evitada por el atacante.
Dado que las localidades constituirán obstáculos, tanto para el enemigo como
para las fuerzas de contraataque propias, se debe considerar la posibilidad de
efectuar la defensa en el borde de la zona urbanizada.

6.2.2.1 Planificación

La planificación de la defensa de una localidad, en general se realiza en forma


similar a lo de una defensa en posición. Las diferencias estriban en los
procedimientos a emplear y en la aplicación de algunos principios de este tipo
de combate.
En esta planificación se da especial importancia a:
- la preparación de la defensa en los 360º
- el reforzamiento de los edificios a utilizar como posiciones defensivas y a la
adecuada instalación de obstáculos.
- la determinación y aprovechamiento de avenidas de aproximación, no
convencionales, como callejones, sistemas subterráneos, redes cloacales,
etc.
- la defensa antiaérea, antitanque, contra incendios y agresivos químicos.
- una amplia y minuciosa preparación de contraataques, especialmente
nocturnos.
- un plan de fuegos flexible que permita cubrir todas las direcciones y lugares
desde los cuales pueda avanzar el enemigo, con fuegos contínuos de todas
las armas, cada vez más denso a medida que se gane el interior de la
localidad y ejecutados desde el máximo de posiciones alternas y suplemen-
tarias. En dicho plan se incluyen fuegos de iluminación para las horas de
oscuridad.

6.2.2.2 Ejecución

Página 216 de 360


La ejecución de la defensa de una localidad generalmente está dirigida a
facilitar una operación conducida por el escalón superior; para lograrlo la
localidad debe estar ubicada en forma tal que obligue al Enemigo a atacarla
directamente o a realizar una maniobra que le signifique una apreciable
pérdida de tiempo. Esa finalidad no se logrará si es evitada o rodeada y aislada
del conjunto por el atacante.
Las fuerzas de seguridad, actúan en forma similar a las de una defensa en
posición; buscan engañar y retardar al enemigo y reducir, en lo posible, su
poder de combate.
A fin de impedir que el adversario avance por el costado de la localidad y
logre su envolvimiento; se realizan contra sus flancos acciones ofensivas.
Los edificios que puedan proporcionar mejores campos de observación y de
fuego, buenas defensas en sus costados y protección contra los fuegos del
enemigo, son seleccionados, organizados, ocupados y defendidos, para que,
entre dos o más, de las mismas características defensivas, se obtenga un apoyo
recíproco permanente.
Las reservas normalmente se emplean para rechazar al enemigo antes que éste
pueda conquistar un punto de apoyo y consolide y amplíe la penetración. Los
contraataques se efectúan con mayor asiduidad en el combate de los escalones
inferiores mediante el empleo de sus reservas locales.
Cuando los defensores se ven en la necesidad de replegarse, lo hacen por
salidas previamente preparadas y preferentemente por los pisos superiores.
Se tratan de aprovechar todas las facilidades que puedan proporcionar las
comunicaciones existentes en la localidad.
Durante la planificación y organización de la localidad, los elementos del arma
de Ingenieros cubren una variada gama de actividades entre las cuales se
encuentran:
- el asesoramiento respecto al aprovechamiento de edificios e instalaciones.
- la preparación de barreras y obstáculos callejeros de todo tipo.
- el mejoramiento y construcción de posiciones y fortificaciones especiales,
incluyendo rutas de evacuación.
El apoyo de fuego se ajustará en general a lo expresado en la defensa en
posición.
Cuando los elementos blindados forman parte de otras Tropas que ejecutan la
defensa de una localidad, normalmente son empleados en la realización de
contraataques y ataques de desorganización.
En el caso de que fuerzas blindadas reciban la misión de defender una
localidad, ejecutan la operación de acuerdo con los procedimientos de la
defensa móvil.
Parte de los tanques, siempre protegidos por fusileros, son empleados a lo
largo de las calles, mientras el resto se mantiene en un emplazamiento central,
para accionar ofensivamente sobre los flancos y retaguardia del Enemigo que
haya penetrado en la localidad.
Página 217 de 360
6.3 RUPTURA DEL CERCO

Dadas las características del posible T.O. en que deberán operar las tropas del
Ejército, y los amplios frentes que en determinadas situaciones deberán ser
cubiertos con fuerzas relativamente escasas, es posible que en el desarrollo de las
operaciones, fuerzas de volumen significativo que guarnecían determinada región
puedan quedar cercadas. El cerco puede resultar de un movimiento envolvente
exitoso realizado por el enemigo, y hará necesaria la ejecución de una penetración,
para posibilitar que las fuerzas rodeadas recuperen la libertad de acción para operar.
La misma podrá llevarse a cabo por medio de la fuerza cercada o por el apoyo de
otra fuerza o por ambas. Una fuerza está cercada cuando el Enemigo ha logrado
cortar, en los 360º, todas las avenidas de evasión y refuerzo. Estas circunstancias
pueden presentarse en toda clase de operaciones, especialmente cuando las fuerzas
actúan dispersas.
La ruptura de cerco es una de las situaciones más críticas que una fuerza debe
enfrentar, razón por la cuál, todo comando debe adoptar esa decisión lo más
temprano posible, antes que el enemigo esté en aptitud de reforzar el mismo.
La necesidad de una rápida decisión no debe de ninguna manera llevar a la
ejecución de una ruptura sin planes adecuados.
La planificación de la operación impone una cuidadosa elección de la zona más
débil del dispositivo enemigo, y la fijación de objetivos que aseguren la ruptura y
posterior mantenimiento de la brecha. La hora de ataque es seleccionada según la
circunstancias, aprovechando las horas de oscuridad o menor visibilidad como más
convenientes, lo que de ninguna manera significa que las horas de luz dejen de ser
adecuadas para ello.
El secreto y el engaño son fundamentales para asegurar el éxito de la operación ya
que posibilitan la sorpresa. Ello se busca mediante alguno de los siguientes
procedimientos:
- la ejecución de un ataque simulado que busca engañar al enemigo de que se trata
del ataque principal.
- tráfico de comunicaciones simulado y con datos erróneos.
- el ocultamiento de las vinculaciones con una eventual fuerza de apoyo.
- el desplazamiento y concentración de los elementos que deben ejecutar el ataque
principal, lo más tarde y próximo posible a la hora de su ejecución.
En el ataque principal debe emplearse como combatiente, el máximo de personal,
incluso los que desempeñan funciones de apoyo logístico. Toda arma o vehículo
que no pueda ser sustraído del cerco debe ser destruído.
Un aspecto importante que puede afectar la moral del personal lo constituye la
evacuación de bajas. En consecuencia, todos los comandos deben adoptar todas las
previsiones posibles para trasladar sus heridos conjuntamente con las tropas que
atacan. Esto constituye no sólo la obligación moral, sino también un arbitrio de la
conducción de operaciones sicológicas, para lograr la mayor eficiencia de combate.
Página 218 de 360
En algunos casos, y siempre que la situación y el
terreno lo permitan, deberán infiltrarse algunos
elementos fuera del cerco para operar dentro del
dispositivo enemigo o en su retaguardia, a fin de
posibilitar un mayor éxito de la operación principal de
ruptura. Esto se presentará con mayor frecuencia en
zonas cubiertas.
La ejecución de la infiltración como único procedimiento de ruptura de cerco será de
aplicación para efectivos reducidos que se encuentren cercados.

6.4 OPERACIONES DE PASAJE DE CURSO DE AGUA

6.4.1 GENERALIDADES

Las operaciones de pasaje de cursos de agua, normalmente, son necesarios en


cualquier ambiente operacional que permita la maniobra terrestre y donde sean
empleadas tácticas y armas convencionales o nucleares.
Los ríos invadeables y anchos ejercen una considerable influencia sobre las
operaciones militares, porque imponen al atacante restricciones al movimiento y
a la maniobra, y para el defensor, se constituyen en líneas naturales de
resistencia.
Durante la Ofensiva, la travesía de un río invadeable, que no dispone de puentes
o vados utilizables y cuya orilla opuesta se halla defendida por el enemigo, se
constituye en una operación especial que significa normalmente la conquista de
una cabecera de puente como acción preliminar para proseguir con la acción
ofensiva.
Durante una operación defensiva, el repliegue de las fuerzas que realizan un
movimiento retrógrado a través de un curso de agua invadeable bajo la acción del
enemigo, requiere también una planificación detallada y un control centralizado,
constituyéndose, en consecuencia, en una operación de pasaje de curso de agua,
pero con sus propias características.
El valor como obstáculo de un curso de agua es sumamente variable. Además de
las condiciones naturales del mismo su valor como obstáculo puede aumentar o
disminuir por la modificación de sus orillas, la realización de otros obstáculos en
el mismo curso, antes o después de la transposición, etc., así como también el
mejoramiento de lugares para el cruce, o el uso de puentes flotantes de rápido
armado, o medios anfibios u otros medios especiales que empleen las tropas que
realizan el pasaje. Normalmente sus características físicas son las que
condicionan el tipo de material de pasaje a emplear, pudiendo variar en botes de
asalto, vehículos anfibios, balsas, pasarelas, puentes flotantes, puentes livianos,
aeronaves, etc.

Página 219 de 360


La importancia para las operaciones, que ejerce un curso de agua invadeable,
puede justificar que para la conquista de la cabecera de puente se emplee tropas
aerotransportadas o aeromóviles.
6.4.2 Transposición de cursos de agua en operaciones ofensivas

La Operación de pasaje de curso de agua es una forma especial de Combate


ofensivo que se diferencia de otros tipos de ataques porque implica:
- Necesidad de una gran cantidad de equipo y de personal especialmente
instruido y entrenado.
- El Comando y el Control de las Unidades debe ser altamente centralizado
debido a las restricciones de espacio, tránsito y comunicaciones.
- La cantidad de líneas de acción tácticas es, generalmente muy limitada.

6.4.2.1 Tipos de pasaje

Existen dos tipos de pasaje de curso de agua, organizado e improvisado.


- Un pasaje organizado tiene lugar cuando el enemigo ocupa la margen
opuesta del río con fuerzas capaces de colocar eficaces fuegos de artillería y
de armas portátiles sobre las áreas de cruce y de organizar contra-ataques a
las tropas que atraviesan el río. Para realizar un pasaje organizado, la tropa
atacante debe detenerse para la concentración de sus fuerzas y reunión de
los medios necesarios.Se efectúan planes detallados y preparativos para el
asalto coordinado a la orilla enemiga.
Las Brigadas, con los medios que disponen, no tienen las condiciones para
realizar un pasaje organizado, siendo las Divisiones de Ejército o Superior
las adecuadas para la planificación y ejecución de este tipo de operación.
- Un pasaje improvisado es una operación planificada y ejecutada con un
mínimo de pérdida de impulso por las fuerzas de asalto.
El apoyo de fuego y los medios para la travesía deben estar disponibles para
el Comandante de las tropas atacantes,el llegar al río.
Las Divisiones de Ejército tienen posibilidades para realizar esta operación,
la cual debe ser intentada siempre que las condiciones lo permitan.
Un pasaje improvisado puede realizarse:
- Cuando la resistencia enemiga es tan débil que puede ser dominada por
una fuerza dotada con medios de travesía reducidos.
- Cuando el enemigo no dispone de artillería o de armas pesadas y es
posible entonces neutralizarlo por el fuego mientras las tropas atacantes
atraviesan el río.
- Cuando el enemigo está desorganizado,mal preparado o no se encuentra
alerta, asimismo, en una retirada,cuando es posible forzar el pasaje antes
de su organización.
Se deduce que si bien pueden establecerse principios de aplicación general
para el pasaje organizado,no sucede lo mismo con el pasaje improvisado.Este
Página 220 de 360
último se rige por los principios del primero, excepto en las circunstancias en
que la situación y el criterio del Comandante lo indiquen como necesario.
Si no hay enemigo presente,el pasaje no será táctico, pues se reducirá a
solucionar,problemas técnicos como ser construcción de medios de
travesía,control de tránsito,etc.
6.4.2.2 Aspectos generales de la operación de pasaje de curso de agua orga-
nizado.

Una operación de pasaje de curso de agua organizado se considera bajo los


siguientes aspectos:
- Información y Reconocimientos.
- Planificación y Reconocimientos.
- Ejecución.
Estos aspectos no constituyen distintas fases de la operación, sino que, para
facilitar su entendimiento es conveniente considerarlos por separado.

6.4.2.2.1 Información y reconocimientos

Incluyen:
- Información estratégica producida por el Ministerio de Defensa Nacional y
órganos del Teatro de Operaciones.
- Información de Combate provista al Comandante de la Operación por
todos los órganos disponibles.
- Reconocimientos terrestres y aéreos.

6.4.2.2.1 a. Informaciones

Las necesidades de información para una operación de pasaje de un curso


de agua son fundamentalmente de naturaleza técnica. Es conveniente
disponer, desde el inicio de la planificación, de datos sobre el ancho,
profundidad, velocidad de la corriente y régimen del curso de agua, así
como una previsión de las condiciones meteorológicas a largo plazo.
Algunos de esos datos son el resultado de años de estudios y observación.
Por esto, debe ser reunida el máximo de informaciones e informes
producidos por los órganos estratégicos, antes y durante la progresión en
dirección al río.
Se debe dar particular importancia a las informaciones necesarias a
Ingenieros, por ser los responsables de los aspectos técnicos de la operación.
La búsqueda de informes e informaciones debe atender,particularmente lo
siguiente:
- Capacidad del enemigo para oponerse a la travesía.
- Características del curso de agua.
- Obstáculos naturales y artificiales.
Página 221 de 360
- Características tácticas del terreno.
- Red vial y accesos al río.
- Lugares de travesía.
- Recursos locales en el área en estudio.

6.4.2.2.1 b. Reconocimientos

Son esenciales a la operación y se deben iniciar lo antes posible. Hay dos


tipos de reconocimientos:

TACTICO: realizado por el E.M. y Comandos de las Armas visando:


- La selección de los lugares de travesía entre los indicados por los
Ingenieros.
- Elección de las Zonas de Reunión.
- Identificación de los objetivos enemigos, etc.

TECNICO: realizado por los Ingenieros que apoyan la operación, visando:


- Selección de los mejores lugares de travesía.
- Indicación de los mejores lugares para el empleo de pasaderas, balsas y
puentes.
- Elección de los accesos a los lugares de travesía.
- Conocer en detalle las características del Curso de agua.
Dichos reconocimientos deben ser completados por acciones de patrullas de
Infatería integradas por elementos de Ingenieros que atravesando el río
exploren la margen enemiga, localizando campos de minas y otros
obstáculos, haciendo prisioneros, etc.

6.4.2.2.2 Planificación y reconocimiento.

Generalmente es dividida en las siguientes fases:

- Fase preliminar, anterior al recibo de las directivas del escalón superior.


- Fase inicial de la planificación, posterior al recibo de las directivas del
escalón superior y basada en la concepción de la maniobra del
Comandante del escalón considerado.
- Fase de planificación general, que se inicia con la decisión del
Comandante e incluye:
- preparación del Plan inicial de la operación y de sus anexos.
- publicación del Plan final, ya aprobado y distribución de las órdenes
necesarias.
- asistencia a los escalones subordinados en la organización y ejecución de
sus planes.

Página 222 de 360


- realización de ensayos cuando el tiempo disponible y la situación táctica lo
permitan.

6.4.2.2.2 a. Consideraciones Generales.

Al organizarse un T.0., las informaciones sobre cursos de agua y


planificaciones disponibles son transferidas al Comandante del T.0. que
pasa a ser el responsable de su desarrollo y actualización.
Cualquier escalón podrá evidentemente, realizar estudios preliminares para
la planificación del pasaje de cursos de agua con los que podrán enfrentarse
en su probable dirección de actuación.
Esta planificación preocupa a todos los escalones, por lo cual se dan
directivas con la anticipación necesaria para permitir a los escalones
subordinados la iniciación de sus planificaciones con datos tácticos y
logísticos concretos.
Es así que en el T.0. se prepara con anticipación el material especial
necesario para las operaciones previstas.
En el escalón Ejército en Campaña, la planificación debe preceder a las
operaciones semanas o meses, de modo que haya tiempo suficiente para
ajustes del dispositivo y distribución de las tropas y del material especial
que las apoyará.
En el escalón División de Ejército la planificación es iniciada enseguida que
la operación es previsible. Normalmente es más detallada que la del
Ejército, especificando necesidades para el apoyo en tropas y material de
Ingenieros a las Brigadas que realizarán la travesía.
En el escalón Brigada, normalmente, la planificación es detallada y
completa. Comienza al recibirse la orden preparatoria expedida por la
División de Ejército, o inmediatamente después de que haya indicios de que
la Unidad tendrá que atravesar un curso de agua que exigirá medios
especiales. Las informaciones recibidas de la División de Ejército son
completadas por otras resultantes de los reconocimientos terrestres
realizados al llegar al río.

6.4.2.2.2 b. Sucesión de Planificación.

La planificación final para una operación de curso de agua es el resultado de


una planificación inicial continuada y actualizada de acuerdo a la evolución
de las condiciones tácticas y logísticas.
Dicha planificación se realiza mejor adoptando el siguiente orden:
- Selección de una cabecera de puente.
- Estimación de la tropa necesaria para mantener la cabecera de puente
seleccionada.

Página 223 de 360


- Determinación del tiempo necesario para la conquista de la cabecera de
puente.
- Consideración de la conquista de objetivos intermedios en un orden
inverso.
- Estimación del valor y distribución de las tropas de asalto.
- Estimación de la cantidad y tipo de apoyo de fuego necesario.
- Determinación de la cantidad y clase de equipo para la travesía, de la
necesidad de tropas de Ingenieros y de otras Armas y estimación de los
tiempos de construcción de balsas y puentes.
- Determinación de las necesidades de entrenamiento especial.
- Determinación de las necesidades logísticas para cada fase.
- Confección de Planes.
El ordenamiento considerado, como se puede apreciar, incluye aspectos
tácticos y técnicos.

6.4.2.2.2 c. Planificación Táctica.

La planificación táctica no se diferencia, esencialmente, de la realizada en


otros tipos de operaciones, sin embargo se deben hacer las siguientes
consideraciones:
La coordinación general y la integración de esfuerzos de las Armas y
Servicios es un problema básico del atacante, en virtud de la reunión en un
espacio limitado, de varias Unidades diferentes que intervienen en la
operación. El problema es más difícil, particularmente por:

- Las restricciones al tránsito y a las comunicaciones.


- La necesidad de gran volúmen de equipo para la travesía.
- La gran cantidad de tropas especiales.
- El plazo disponible.

Se realiza esta operación con el propósito de establecer en la margen


opuesta, con adecuado apoyo logístico, una posición desde la cual se esté en
condiciones de continuar las acciones de acuerdo al plan de maniobra. Esa
área en la margen enemiga es llamada cabecera de puente. Las principales
consideraciones para la determinación de la extensión de la cabecera puente
son:
- disponer de espacio suficiente para acomodar, sin congestionamiento,
tropas, equipos e instalaciones necesarias a las fuerzas atacantes.
- permitir el uso sin interrupciones de todos los medios del cruce.
- constituir un área de fácil defensa contra posibles acciones del enemigo.

Página 224 de 360


Una fuerza que realiza una travesía, rara vez puede conquistar la totalidad
de la cabecera de puente, en un único y sostenido ataque debido al alto
grado de descentralización inicial de los medios tácticos y logísticos.
Por lo tanto la conquista de la cabecera de puente, normalmente se
desarrolla en las tres fases siguientes:

la Fase: El atacante conquista los objetivos que impedirán al enemigo


realizar fuego efectivo de pequeñas armas de tiro directo sobre las áreas de
pasaje seleccionadas. El trazado de los límites avanzados de esta parte de la
cabecera de puente, que es jalonada por estos objetivos, se indica en un
calco con una línea denominada "L.0-1".
La conquista de estos objetivos por las tropas de las olas de asalto iniciales,
permite normalmente comenzar los trabajos de construcción de pasaderas y
balsas, cuyo uso facilitará el pasaje de tropas y equipos suplementarios.

2a. fase: El atacante debe conquistar los objetivos que permitirán al


Comandante reorganizar sus fuerzas para continuar el ataque y alcanzar la
parte de la cabecera de puente que impida al enemigo realizar fuegos
observados de Artillería sobre las áreas de pasaje. El trazado de los límites
avanzados de esta parte de la cabecera de puente, que es jalonada por estos
objetivos, se indica en un mapa o calco con una línea denominada "L.0-2".
La conquista de estos objetivos proporcionará al comandante de la fuerza de
asalto el espacio suficiente, en la orilla enemiga, para ubicar, sin congestio-
namiento reservas y armas de apoyo. Estos objetivos aseguran al
comandante la ocupación de una buena posición defensiva, puesto que
puede estar obligado a detenerse temporariamente mientras cruzan fuerzas y
medios adicionales necesarios para continuar el ataque. La naturaleza de los
objetivos de la "L.0-2" y su distancia del río, deben ser tales, que su
ocupación permita la iniciación de la construcción de puentes.

3a. fase: Finalmente, se continúa el ataque para conquistar los objetivos que
le asegurarán el suficiente espacio, del lado enemigo, para disponer sin
congestionamiento, tropas, equipos y las instalaciones esenciales al
cumplimiento de la misión, evitando que el enemigo realice tiros de
Artillería continuados y eficaces sobre los lugares de pasaje.
La línea avanzada jalonada por esos objetivos se indica en un mapa o calco
marcándola "L.0-3" (Cabecera de puente).
La conquista de estos objetivos, con la debida superioridad aérea, permite el
uso sin interrupciones de todos los medios de pasaje y proporciona espacio
para la maniobra del total de la fuerza.
El trazado de las líneas "0-1", "0-2" y "0-3" (Cabecera de puente) debe ser
de tal forma que por el dominio de las mismas se protejan las actividades
próximas al río y se asegure la observación sobre las áreas más alejadas.
Página 225 de 360
Deben ser rápidamente identificables, fácilmente defendibles y estar lo sufi-
cientemente separadas de modo que la conquista de cada una de ellas
constituya una etapa definitiva para el establecimiento de la cabecera de
puente. Esas líneas deben apoyar sus extremos en el río o en límites que
proporcionan la máxima protección a los flancos.

6.4.2.2.2 d. Elección de los lugares de pasaje.

Se procede normalmente de la siguiente forma:

- Basándose en las informaciones existentes, la División de Ejército


selecciona el frente de pasaje.
- Determinados los frentes de pasaje, la División de Ejército atribuye
ZZ.AA. de las Brigadas.
- Los Ingenieros de las Brigadas, en conocimiento de los frentes de pasajes
determinados por la División, seleccionan los lugares de travesía
basándose, inicialmente, en las informaciones disponibles y
posteriormente, en el resultado de los reconocimientos.

6.4.2.2.2 e. Determinación del dispositivo de pasaje.

Se debe considerar que:

- La travesía en un frente estrecho permite la concentración de nuestros


medios y los del enemigo (Artillería y contraataques) sobre la región
seleccionada.
- La travesía en un frente ancho disminuye la vulnerabilidad de nuestras
tropas y permiten que se exploten los puntos débiles del enemigo, pero
aumentan las dificultades de control y de apoyo de fuego a la operación.
- Una saliente en la margen enemiga favorece nuestro ataque convergente y
el envolvimiento de la tropa enemiga que lo defiende. Además ofrece
protección a nuestros flancos. Pero puede ser fuertemente defendido en
su base.
- La cantidad de lugares de cruce, unido a las posibilidades de los medios
disponibles, indicará cuantos Batallones de asalto podrán atravesar
simultáneamente.
- Las fintas y otras estratagemas que desvíen la atención del enemigo de la
región principal de pasaje, deben emplearse siempre que sea posible.

6.4.2.2.2 f. Hora H y línea de partida.

Página 226 de 360


En el pasaje organizado la orilla de la margen amiga es, normalmente, la LP
y la hora H es el momento en que las tropas de asalto cruzan esa línea. En la
travesía improvisada la LP puede estar a una distancia considerable del río.
La hora H es determinada por el escalón más alto que interviene en la
operación de pasaje.
La travesía de noche ofrece más seguridad, secreto y sorpresa pero requiere
mejor adiestramiento de las tropas y exige más tiempo para que éstas se
organicen en la margen enemiga antes del amanecer.
El sistema de luz de luna artificial puede ser usada por nuestras fuerzas y
por el enemigo.
Es conveniente que nuestras tropas permanezcan el mínimo de tiempo en
las posiciones de ataque.

6.4.2.2.3 Ejecución.

La ejecución incluye a la operación en su totalidad englobando:

- el avance hacia el río.


- la reunión y preparación para la travesía.
- el asalto.
- el avance en la margen opuesta y establecimiento de la cabecera de puente.
- protección de la cabecera de puente frente a los contra-ataques.

6.4.2.2.3 a. Particularidades de la Ejecución.

Durante el avance hacia el río el Comandante despliega sus fuerzas visando


el pasaje. Debe alcanzar el río en un frente ancho, a pesar de que la red vial
sea limitada y de que las condiciones del terreno dificulten el despliegue de
las tropas atacantes. Los puntos fuertes del enemigo en la primera margen,
que fueren desbordados en las ocasiones iniciales del avance, deben ser
neutralizados antes de intentarse la travesía.
Durante el avance hacia el río, se abren brechas y se demarcan los campos
de minas y otros obstáculos dejados por el enemigo.
Se debe restringir al mínimo el uso de la red de caminos cercanos a la orilla
del río a fin de mantener una adecuada seguridad.
Mientras las fuerzas atacantes avanzan hacia el río, la velocidad es muy
importante. Si el enemigo se está retirando, el avance rápido de las tropas
atacantes debe tener la finalidad de alcanzarlos mientras cruza el río,
oportunidad en que podrá ser destruido más facilmente.

6.4.2.2.3 b. Reunión y preparación para la travesía.

Página 227 de 360


Esta parte de la ejecución corresponde a la reunión de los medios, su
transporte desde las zonas de reunión hasta las posiciones de ataque y el
traslado de las posiciones de ataque hasta los lugares de travesía.

6.4.2.2.3 c. Asalto.

El asalto comienza cuando la primera ola es lanzada al agua (Hora H) y


termina cuando se alcanza la línea de alturas que impiden al enemigo
realizar fuego efectivo de pequeñas armas de tiro directo sobre el río.

6.4.2.2.3 d. El avance en la margen opuesta y establecimiento de la cabecera de


puente.
Se consolida con la conquista "L.0-3".
Las tropas de asalto, prosiguiendo en la margen opuesta quedan muy
expuestas a los contraataques enemigos, inclusive de blindados. Por eso
necesitan con rapidez, de sus armas de apoyo y de sus blindados por lo que
es necesario que se construyan y operen las balsas o puentes flotantes a fin
de transportar esos medios a la margen opuesta. Una vez conquistada la
"L.0-3" se construyen puentes para el pasaje de los restantes medios.

6.4.2.2.3 e. Protección de la cabecera de puente.

Una vez conquistada la " L.0-3" se organiza el terreno para proteger a las
tropas de posibles contraataques enemigos.

6.4.2.2.4 Influencia de los nuevos medios.

La utilización de nuevos medios y nuevas técnicas de la guerra moderna han


influido en mayor o menor grado en las operaciones terrestres. Las
operaciones aerotransportadas y aeromóviles y el empleo de vehículos
blindados anfibios intervienen en las operaciones de pasaje de curso de agua
dando mayor dinamismo a las mismas. Los medios flotantes de gran
capacidad de soporte y fácil desplazamiento en tierra firme y en el agua y
que exigen tiempos reducidos para la construcción de balsas y puentes
influyen marcadamente en las operaciones dándole mayor rapidez.

6.4.2.3 Particularidades de un pasaje de curso de agua improvisado

Normalmente la transposición improvisada de un curso de agua es ejecutada


por una División de Ejército. La planificación sigue la misma secuencia de
la transposición organizada. Se deben preparar planes alternativos, visando
una eficiente utilización de puentes conquistados intactos o para la
evolución a una transposición organizada.El empleo de armas y medios
Página 228 de 360
especiales y disponibles, principalmente los aerotransportados o aeromóvi-
les deben ser previstos en la planificación a los efectos de capturar puentes
en condiciones de uso.

6.4.3 Trasposición de cursos de agua en operaciones defensivas.

La misión de recoger una fuerza de seguridad (Fuerza de Cobertura, Puestos


Avanzados Generales), cuando el Límite Anterior del Area de Defensa
Avanzada (LAADA), se apoya en un río con características de obstáculo en
una operación defensiva (Movimiento retrógrados) acarrea serios problemas
para el escalón que deba cumplir con dicha misión, particularmente a los
Ingenieros que lo integran. Por sus características propias es una operación
muy delicada de realizar y muy difícil de ser conducida.
A fin de no perjudicar los plazos estimados para ganar durante el
desempeño de la operación, se debe procurar una perfecta coordinación
entre las posibilidades técnicas de los medios de transposición y las
necesidades tácticas de las tropas en combate y las características del curso
de agua a ser transpuesto.
Una transposición en situaciones defensivas es efectuada con pérdidas
elevadas. Todo debe ser realizado para minimizar esas pérdidas, de lo
contrario, una operación posterior puede transformarse en inalcanzable,
debido a la falta de medios, principalmente los de Ingenieros.
La planificación de la operación de la transposición de curso de agua en una
operación defensiva es similar a la de la transposición ofensiva. Son
definidos los frentes de pasaje y los lugares de travesía y los medios que
deben ser empleados. La planificación debe ser suficientemente flexible
para permitir adaptaciones que la evolución de los acontecimientos exijan.
El Comando de la operación es inicialmente centralizado en el escalón
Ejército en Campaña, con la finalidad de facilitar la coordinación de sus
Divisiones de Ejército y de aliviarlas momentáneamente de la
responsabilidad de la conducción de la operación de transposición.
El Comando es descentralizado posteriormente a nivel División de Ejército,
en la medida que se produce el repliegue de las fuerzas a favor del
obstáculo.
El Comando de la operación debe combinar estrechamente los planes de
operación de transposición con los planes de barrera, procurando mantener
las tropas enemigas a una distancia de seguridad del río, durante el mayor
tiempo posible. Se debe prever otra línea de obstáculos adelante del río, con
la finalidad de favorecer el recogimiento de los últimos elementos de la
fuerza que se repliega. La operación se realiza normalmente en tres etapas:
En la primera etapa, tan pronto como sea posible, todos los medios
(material y personal) que no están directamente enganchados en el combate,
transponen el curso de agua de vuelta. Esta etapa de la operación es
Página 229 de 360
normalmente centralizada por el Ejército en campaña. Los puentes tácticos
en el caso que sean lanzados, los puentes civiles, las balsas y las pasarelas
son aprovechadas al máximo.
En la segunda etapa, las tropas enganchadas,situadas al frente del río,
realizan la transposición bajo la presión del enemigo, bajo la protección de
la cobertura proporcionada por la Artilleria, por elementos del Arma base,
apoyados por vehículos blindados y por elementos de Ingenieros. La veloci-
dad de la transposición del curso de agua es condicionada al ritmo del
combate. En principio, esta operación es centralizada en el escalón División
de Ejército. Al final de esta etapa los puentes son recogidos para evitar su
destrucción por el enemigo.
En la tercera etapa, que corresponde al rebatimiento y recogimiento de los
elementos que todavía se encuentran en la margen opuesta se lanzan
obstáculos en el río y en sus márgenes, inmediatamente después, que los
últimos vehiculos y los vehiculos blindados transponen el río, utilizando las
balsas en funcionamiento.La cobertura es proporcionada por tropas a pie
apoyadas por fuegos intensos y potentes de Artillería y de morteros, los que
procuran ganar los plazos en el río. Los últimos combatientes transponen el
río en botes aislados, en medios improvisados o helicópteros.

6.5 OPERACIONES ANFIBIAS

Una operación anfibia es esencialmente un ataque lanzado desde el mar por


fuerzas navales y terrestres embarcadas en barcos o lanchas, buscando un
desembarco en una costa enemiga. Una operación tal, requiere normalmente,
extensa participación aérea y desembarco de tropas aerolanzadas.
La característica saliente de la operación es la de la acción conjunta de
importantes elementos del Ejército y Armada.

6.5.1 Propósito

El propósito del ataque es capturar y ocupar un objetivo en la costa enemiga


con la finalidad de:
- Obtener espacio necesario, desde el cual lanzar futuras operaciones de
combate en tierra.
- Obtener una zona de base naval o aérea.
- Negar al enemigo el uso de la posición capturada.

6.5.2 Tipos de operaciones anfibias.

Las operaciones anfibias son clasificadas como de barco a costa, de costa a


costa, o combinación de ambas.

Página 230 de 360


- Una operación de barco a costa, es una operación anfibia que requiere la
transferencia de tropas, abastecimientos y equipos, de los transportes u
otros barcos oceánicos, a lanchas de desembarco más
pequeñas,helicópteros u otro tipo de aeronaves para el movimiento hacia
las playas.
- Una operación costa a costa, es una operación anfibia que implica el
movimiento de los elementos de la fuerza de desembarco directamente de
un área de embarque a las playas de desembarco, sin transferencia en el
mar.
- Las operaciones anfibias a menudo pueden implicar ambos tipos de
movimientos.
- Operación combinada, las operaciones costeras o entre islas, son ejemplos
en las que ambos tipos de movimientos pueden ser utilizados.
Las técnicas de las operaciones anfibias costa a costa, son similares a las que
se estudian en el Pasaje de un Curso de Agua con o sin apoyo naval.
Las grandes operaciones anfibias son normalmente conjuntas en naturaleza.
Toda gran operación anfibia en la que participan fuerzas de desembarco del
Ejército, será una operación conjunta.

6.5.3 Fases de una operación anfibia.

6.5.3.1 Fase I

Planificación y Preparación. Esta fase comienza con la orden que crea la


fuerza conjunta y designa su Comandante. Incluye la planificación de la
operación en todos los escalones; el montaje, instrucción y equipamiento de
las fuerzas; el reconocimiento y preparación del objetivo. En esta fase se
cumple la coordinación y planificación precisa y detallada de la operación.

6.5.3.2 Fase II

Embarque, movimiento y asalto. Esta fase comienza con el embarque de


las tropas. Incluye: la carga de equipos y abastecimientos; el ensayo
necesario para afirmar el trabajo del equipo conjunto y confirmar los
planes;el movimiento hacia el área del objetivo; las acciones previas al asalto;
asalto y captura del objetivo de la fuerza de tarea anfibia y las operaciones
iniciales de consolidación. Esta fase termina con el pasaje del comando de las
operaciones en tierra, del Comandante de la fuerza de tarea anfibia, al
Comandante de la fuerza de desembarco, una vez establecido en tierra.

6.5.3.3 Fase III

Página 231 de 360


Consolidación y desarrollo. Este es un período de transición entre el pasaje
del Comando a tierra y la disolución de la fuerza de tarea conjunta, en virtud
de que la operación se convierte en una operación terrestre normal. Incluye la
expansión de la cabecera de playa, organización táctica y consolidación del
objetivo final de la fuerza de tarea, la que comprende el establecimiento de
instalaciones y desarrollo del área con el propósito de apoyar operaciones
futuras.
Durante esta fase, la fuerza de desembarco continuará requiriendo el apoyo
naval para la protección del área de transporte y para la protección ante
operaciones contra anfibias. Puede también requerir el fuego de artillería
naval, el apoyo aéreo con base en portaaviones y el empleo de barcazas de la
Armada.

6.5.4 Comando

La autoridad que dispone una operación anfibia conjunta, designa un


Comandante para la fuerza de tarea conjunta perteneciente a la rama de las
Fuerzas Armadas que tiene interés predominante en la totalidad de la
operación. Para la realización de la fase II de la operación anfibia conjunta, el
Comandante de la fuerza de tarea conjunta organiza una Fuerza de Tarea
Anfibia que normalmente es comandada por un Oficial de la Armada. Esta
Fuerza de Tarea Anfibia se disuelve al final de la fase II y el Comandante de
la Fuerza de Desembarco que para el transporte dependía del Comandante de
la Fuerza de Tarea Anfibia, vuelve a la dependencia directa del Comandante
de la Fuerza de Tarea Conjunta.

6.5.5 Planificación.

La planificación de las operaciones anfibias, debido a la complejidad de este


tipo de operaciones, se caracteriza por ser extensa en el tiempo; se pone el
mayor énfasis en una planificación concurrente y continua. Constituye una
ventaja el hecho que el ataque pueda ser cuidadosamente planificado y
ensayado con anterioridad a su ejecución.
El establecimiento de la "Cabecera de Playa" guarda grandes similitudes con
el de la "Cabecera de puente" estudiada en el ataque a través de un curso de
agua.

6.5.6 Ejecución

Se puede considerar que la ejecución de la operación anfibia comienza en la


fase II.

6.5.6.1 Embarque
Página 232 de 360
Una operación anfibia depende grandemente de la exitosa ejecución del
desembarco y del continuo apoyo a la fuerza de desembarco una vez en
tierra. El éxito de la operación puede, en consecuencia, ser seriamente
comprometido por una carga inapropiada de los transportes. Desde el nivel de
un simple barco a aquél de la fuerza de tarea anfibia, el embarque de
tropas,abastecimientos y equipo debe cumplirse mediante un método de
acuerdo con los requerimientos del plan táctico para el desembarque en el
objetivo.

6.5.6.2 Movimiento barco a costa

El movimiento del barco a costa es aquella parte de la operación anfibia


relacionada al oportuno despliegue de las tropas y su equipo para el asalto de
los botes a las playas asignadas. El movimiento de barco a costa se extiende
desde la llegada de las embarcaciones de asalto al área de transporte hasta el
término de la descarga de las embarcaciones de asalto en la playa. El
movimiento barco a costa puede dividirse en dos fases:

- Fase de asalto, que es de característica principalmente táctica, debe basarse


en los requerimientos de la fuerza de desembarco en tierra.
- La fase de descarga general, que pone énfasis sobre la velocidad, volumen
y exactitud de las operaciones de descarga.

6.5.6.3 El asalto.

El éxito inicial depende de la capacidad de los botes y equipos similares para


una acción independiente y agresiva.
Inicialmente la acción se conduce por estos equipos para capturar objetivos
críticos que eliminen el fuego directo sobre las playas y atracaderos de botes.
Por esta razón las instalaciones enemigas ubicadas sobre, o cerca de la playa,
no son eludidas sino que deben destruirse.
Los comandantes de sección, compañía o batallón, asumen el control en
forma progresiva, lo más rápido posible, después del desembarco para
coordinar el ataque y ensanchar la cabecera de playa.
Los fuegos de la Artillería naval, fusiles sin retroceso, cohetes y armas
automáticas montadas sobre lanchas de desembarco y tanques anfibios,
durante este período, deben ser coordinados para asegurar un contínuo y gran
volúmen de fuego sobre la playa.
Las lanchas de desembarco armadas acompañan la ola de asalto de cabeza,
proveyendo apoyo de fuego directo después que la artillería naval ha levantado el
tiro, -cuando sea posible- los tanques cruzan las playas y se mueven una distancia
corta, tierra adentro, para cubrir con fuego directo la descarga de las tropas de
Página 233 de 360
asalto. Ellos apoyan el ataque desde posiciones desenfiladas de casco debido a su
limitada protección blindada.-
Cuando las olas de asalto alcanzan la playa, hacen brechas en los obstáculos,
reducen las fortificaciones enemigas, aplastan y destruyen las posiciones
enemigas y ocupan los objetivos iniciales. El seguir inmediatamente a los
bombardeos preliminares navales y aéreos a menudo hace posible que los
equipos de botes capturen los objetivos con un mínimo de oposición del enemigo.
El impulso del asalto debe ser mantenido en las primeras etapas por una acción
rápida y agresiva. Deben ser limitadas al mínimo absoluto las demoras para
reorganización o reunión de las armas de apoyo.

6.5.7 Defensa contra operaciones anfibias

En la preparación, para y en la ejecución de la defensa contra ataques anfibios,


las consideraciones básicas de la fuerza defensora son: la derrota y destrucción de
la fuerza anfibia antes de que toque tierra, durante el desembarco o intento de
ganar una cabecera de playa, y la derrota o contención de aquellas fuerzas que
hubieran desembarcado.
Los principios fundamentales aplicables a la defensiva y ofensiva se aplican a la
defensa contra operaciones anfibias.
La defensa adoptada dependerá de las características de la línea de costa, la
extensión de esta línea a defender, el tipo de la masa de tierra, el terreno
adyacente a la línea de costa, la red de Comunicaciones y el transporte, las
fuerzas disponibles para la defensa, y de las posibilidades del enemigo. Excepto
para áreas de pequeñas islas, donde el terreno restringe el uso de reservas
móviles, la defensa a conducir será normalmente del tipo móvil.
Las fuerzas disponibles de la Fuerza Aérea y Armada deberán utilizarse para
obtener información de la ubicación del enemigo, su fuerza y hora de ataque y
para atacar al enemigo en el mar e impedir el refuerzo, si su desembarco fuera
exitoso.
Además de las organizaciones del terreno normales para la defensa, se crean
obstáculos y minas submarinas para obstruir y negar probables playas de
desembarco, se minan las salidas de las playas, se contaminan con agentes QBN,
y se construyen casamatas y fortificaciones de campaña para el uso de los
elementos de seguridad de las posiciones defensivas avanzadas. Fuerzas de
Seguridad, apoyadas por artillería se utilizan para descubrir el lugar del ataque,
determinar la fuerza de ataque,así como para diferenciar demostraciones e
incursiones de una operación anfibia a gran escala, atacar elementos del
desembarco, ejecutar acciones dilatorias y para contraatacar pequeñas incursiones
y fintas de desembarco. Fuerzas apoyadas por artillería, se emplean para
mantener aquellas zonas que el enemigo debe poseer para asegurar su refuerzo.
Los probables lugares de desembarco son cubiertos por las fuerzas disponibles en
la medida que les sea posible.
Página 234 de 360
Es importante que una fuerza de choque móvil esté disponible para desalojar al
enemigo desembarcado antes que éste haya completado su consolidación, puesto
que es más vulnerable cuando sus apoyos de combate y apoyo de servicio están
aún embarcados y sus fuerzas de asalto están en tierra.
Siempre que se pueda, la fuerza de choque móvil deberá consistir en blindados
e infantería motorizada, apoyados por artillería. El contraataque de la fuerza de
choque móvil es apoyado posteriormente por todas las fuerzas aéreas y navales
disponibles. En vista de la probable superioridad aérea y naval enemiga por lo
menos en la zona de operaciones, se precisarán ensayos nocturnos de
desplazamientos y conducción de contraataques.

6.6 OPERACIONES AEROTERRESTRES

Una operación aeroterrestre abarca el movimiento hacia una zona objetivo de


Unidades instruidas, equipadas y organizadas al efecto, el lanzamiento desde el
aire o desembarco aéreo de las mismas y sus apoyos logísticos para la
ejecución de una misión táctica o estratégica.
Estas operaciones conjugan la velocidad y flexibilidad del Arma aérea, con la
capacidad para conquistar y ocupar el terreno, propia de las Fuerzas Terrestres,
introduciendo la dimensión vertical en las operaciones.
Las operaciones aeroterrestres incluyen dos tipos principales: Aerolanzadas y
Aeromóviles.

6.6.1 Operaciones aerolanzadas

Consisten en el lanzamiento en paracaidas sobre áreas especialmente


designadas al efecto, de una unidad, incluyendo su personal, material y
abastecimientos.
Estas operaciones permiten al Comandante:
- Aumentar la rapidez y flexibilidad de las operaciones.
- Constituir una amenaza para el enemigo.
- Extender la zona sobre la cual podrá ejercer su influencia.
- Concentrar sus fuerzas rápida y eficazmente.
Las operaciones aerolanzadas difieren básicamente de las operaciones
terrestres en que:
- Se llevan a cabo en zonas sin ocupar o debilmente defendidas por el enemigo.
- Se puede ubicar la fuerza directamente sobre el objetivo o en sus
adyacencias.

Son vulnerables a la acción de blindados enemigos debido a su limitada


movilidad terrestre y potencia de fuego.
Son sensibles a la influencia de las condiciones meteorológicas.

Página 235 de 360


6.6.1.1 Concepto de empleo

El empleo de las fuerzas aerolanzadas visa la utilización de aeronaves para


salvar distancias, barreras geográficas o para eludir defensas enemigas.
Las fuerzas aerolanzadas mantenidas en reserva, constituyen una amenaza
estratégica que puede ejercer una gran influencia y obligar al enemigo a
dispersar sus defensas para proteger instalaciones vitales tanto en la
retaguardia profunda como en la zona de combate.
Las operaciones con tropas aerolanzadas exigen un alto grado de coordinación
entre las tropas participantes, así como entre las fuerzas que están actuando en
la zona de operaciones.
Las operaciones estarán bajo el control del comando del teatro para la
planificación y supervisión total.
En grandes operaciones aerolanzadas, es necesario poseer suficiente capacidad
aérea para proteger a las tropas durante la reunión, el movimiento por aire y el
establecimiento de la cabecera del Puente Aéreo. Las Unidades Aerolanzadas
ejecutan normalmente el asalto inicial, el que puede ser seguido por otros
lanzamientos o por el desembarco de fuerzas aerotransportadas.
Para obtener el máximo de efectividad en el asalto inicial, son conducidas en
masa, por sorpresa y completadas en el menor tiempo posible.
El asalto se lanza generalmente en áreas donde hay pocas defensas organizadas
y donde es dificil que el enemigo tenga fuerzas blindadas disponibles para
contraatacar.

6.6.1.2 Misiones

A las fuerzas aerolanzadas se le pueden asignar misiones de carácter


estratégico o táctico.
Sus misiones generales son:
- Atacar, conquistar y mantener objetivos importantes.
- Ocupar áreas o reforzar Unidades más allá del alcance inmediato de otras
fuerzas de superficie .
- Cumplir misiones especiales.

6.6.2 Tipos generales de operación

6.6.2.1 Independientes

Esta operación comprende la conquista en territorio enemigo de una Cabecera


de Puente Aéreo desde donde lanzar posteriores operaciones o para conquistar
una base avanzada para extender las actividades u operaciones logísticas de las
fuerzas. Las fuerzas participantes deberán actuar por un cierto período sin
Página 236 de 360
apoyo de fuerzas o servicios por tierra. Son utilizadas para salvar obstáculos
geográficos importantes cuando por razones técnicas y en virtud de la distancia
de los objetivos finales, las operaciones deben ser ejecutadas en varias etapas.

6.6.2.2 De rápido enlace

Esta operación consiste en el lanzamiento de Unidades aerolanzadas en la


retaguardia o en los flancos de posiciones enemigas. Se realiza en
combinación con otras fuerzas terrestres que concurren posteriormente a
relevar a la fuerza aerolanzada.
Por esta razón estas operaciones recibirán en la zona objetivo solamente los
apoyos esenciales.
Este tipo de operación podrá ser realizada en los siguientes casos:
- Aliviar o anular la presión enemiga contra fuerzas amigas parcial o
totalmente cercadas.
- Conquistar un objetivo importante.
- Impedir el repliegue o refuerzo de fuerzas enemigas

6.6.2.3 Incursión

Estas operaciones consisten en el lanzamiento de unidades aerolanzadas en


territorio enemigo para la neutralización o destrucción de: órganos de
comando, centro de comunicaciones, abastecimientos, etc. Son de muy corta
duración ya que no pretenden conquistar ni mantener terreno.
La planificación de la recuperación de las tropas después de la acción es
realizado antes de su iniciación, pudiendo ser llevada a cabo por aire, mar o
tierra.

6.6.2.4 Especiales

Este tipo de operaciones deben ser analizadas a nivel Comando de Teatro y


son generalmente planificadas para alcanzar objetivos de gran valor táctico o
estratégico. Son concebidas en el marco de una doctrina de guerra irregular
dentro del territorio enemigo y deben ser dotadas de capacidad adecuada para
asestar golpes audaces y profundos en la retaguardia o en objetivos de valor
estratégico del enemigo.
El objetivo estratégico de estas operaciones no implica mantener terreno o
efectuar enlace con otras fuerzas terrestres, sino que, si bien pueden servir
eventualmente como preparación o apoyo de otras operaciones
aerotransportadas de mayor envergadura, deben ser concebidos
primordialmente como una forma de conducir una escalada de acciones
irregulares que implique una seria amenaza de destrucción de objetivos
estratégicos en territorio enemigo y los efectos sobre su economía y su moral.
Página 237 de 360
Por lo tanto serán producto de una cuidadosa planificación, basada en
adecuados análisis de inteligencia estratégica.
Generalmente comienzan con la operación de infiltración aerolanzada a gran
altura, en horas nocturnas o a baja altura; también pueden efectuarse
infiltraciones terrestres, anfibias o una combinación de éstas con aquellas. En
todos los casos serán ejecutados por Unidades aerolanzadas entrenadas en
Operaciones de Comandos.
Dependiendo de la situación y los medios disponibles serán empleados en
misiones tales como:
- Inteligencia de combate.
- Preparación y guía de Operaciones Aerolanzadas.
- Neutralización y captura de líderes o comandantes enemigos.
- Destrucción y desarticulación de Puestos de Comando e instalaciones
logísticas.
- Sabotaje o destrucción de objetivos estratégicos.
- Conducción y apoyo u operaciones de guerrillas.
- Rescate y exfiltración de prisioneros o rehenes en poder del enemigo.
La ejecución de estas operaciones requiere un alto grado de preparación de las
tropas como así también una planificación detallada de la exfiltración de las
mismas una vez cumplida la misión.

6.6.2.5 Posibilidades

Las fuerzas aerolanzadas permiten al Comandante emplear un medio para


ejercer una influencia decisiva en las operaciones.
Un Comandante puede concentrar rápidamente fuerzas aerolanzadas en áreas
críticas para obtener ventajas tácticas decisivas. La sorpresa estratégica se
puede obtener por rápidos traslados de fuerzas aerolanzadas sobre grandes
distancias.
Las fuerzas aerolanzadas son particularmente adecuadas para la ejecución de
envolvimientos verticales, para el empleo de operaciones con unidades
blindadas y para Operaciones Conjuntas con Fuerzas Especiales.

6.6.2.6 Limitaciones

La superioridad aérea es una necesidad en las operaciones aerolanzadas de tipo


independiente (o de penetración profunda). Las misiones de rápido enlace (a
objetivo limitado) pueden ser ejecutadas cuando el enemigo tiene una
superioridad aérea general, por medio de la concentración de la protección de
caza amiga, por operación nocturna o por sorpresa. Las aeronaves disponibles,
condicionan el transporte por aire de tanques y equipo pesado hacia el área del
objetívo.

Página 238 de 360


Esta limitación es compensada en parte por el empleo de armas antitanques
livianas pero potentes y por el mantenimiento de fuerte apoyo aéreo. La
movilidad de las unidades aerolanzadas, una vez en tierra, se puede ver
limitada por la reducida disponibilidad de transportes terrestres.
El efecto restrictivo del mal tiempo es importante. Las condiciones
metereológicas desfavorables y una fuerte e inesperada reacción aérea enemiga
pueden impedir el refuerzo adecuado y el abastecimiento por aire.

6.6.3 Fases

En las operaciones aerolanzadas se distinguen las etapas de:

6.6.3.1 Planificación

Esta tiene caracter previo y esencialmente técnico.


El plan de operaciones para una acción aerolanzada es el resultado de la
continua planificación realizada por los Estados Mayores de Teatro y las
fuerzas aerolanzadas.
Esta planificación se basa en la misión del Teatro, la disponibilidad de
aviación y las condiciones tácticas y logísticas existentes dentro del Teatro.
La planificación del Teatro considera todas las posibles operaciones
aerolanzadas que facilitarán el cumplimiento de la misión del mismo.
De entre ellas, surgen ciertas operaciones probables que son desarrolladas en
mayor detalle por el Estado Mayor del Teatro y por la Unidad aerolanzada del
Teatro.
La planificación sigue los mismos principios que en operaciones terrestres
normales pero incluye la consideración de los problemas técnicos relacionados
con la operación aerolanzada.
La planificación detallada para una operación aerolanzada se desarrolla mejor
trabajando en un orden inverso o regresivo, desde el área del objetivo, en la
siguiente secuencia: plan táctico terrestre, plan de movimiento por aire y plan
de reunión, y otros planes técnicos varios (planificación inversa).

6.6.3.2 Ejecución

Materializa la operación y dentro de ella vez se pueden diferenciarse tres fases:


Fase de asalto, ejecutada normalmente por paracaidistas cuya misión es
capturar la cabecera de puente aéreo inicial.
Fase de consolidación, es la reorganización en el área de objetivo, durante la
cual la Cabeza de Puente Aéreo inicial es defendida hasta el enlace con las
fuerzas amigas o, hasta que fuerzas suficientes hayan sido ubicadas dentro del
área del objetivo para iniciar la fase ofensiva. Esta, es normalmente realizada
por refuerzos desembarcados por aire. El refuerzo de tropas, abastecimientos y
Página 239 de 360
equipos requeridos para la ofensiva normalmente se inicia tan rápidamente
como sea posible.

6.6.4 Comando y control

El Comandante del Teatro determina las fuerzas y medios necesarios para


apoyar y ejecutar las operaciones aerolanzadas requeridas.
Las Unidades aerolanzadas son mantenidas normalmente en reserva cuando no
son empleadas como unidades de infantería.
Las operaciones aerolanzadas estarán bajo el control del Teatro para la
planificación y supervisión total.

6.6.5 Plan táctico terrestre

El plan táctico terrestre constituye la base para el desarrollo de los otros planes.
La misión recibida es transformada en objetivos cuya conquista, ocupación,
detrucción o neutralización son necesarios para concretar el cumplimiento de
aquella.
Debe incluirse el apoyo a recibir de la población local y de las fuerzas amigas
que actúen en la retaguardia enemiga.
Es preparado lo más pronto posible después de recibidas las directivas de
planificación y es la base Para todos los demás planes. La misión asignada se
expresa en términos de una cabecera de Puente Aéreo que debe ser lo
suficientemente amplia para cumplir la misión. Los factores principales que
determinan la ubicación, extensión y forma de una cabecera de Puente Aéreo
son: la misión de la fuerza, las posibilidades del enemigo, las características
del terreno, las posibilidades de la fuerza involucrada, las zonas de
lanzamiento disponibles, y el tiempo en que se espera la reunión rápida o el
refuerzo.
La cabecera de puente aéreo debe contener el espacio necesario para permitir
la profundización de la defensa, para la maniobra y para asegurar el
desembarco previsto de tropas, abastecimiento y equipo, así como la
protección de las instalaciones críticas.
El esquema de maniobra se basa en las consideraciones normales para la
conducción de las operaciones terrestres, modificado, en función de las
condiciones impuestas por los aterrizajes dispersos y la falta inicial de un
control centralizado.
El esquema de maniobra para la captura y defensa de una Cabeza de Puente
Aéreo se basa en la determinación de una línea de reconocimiento y seguridad
de límites, por la determinación de la organización de fuerzas de tarea y por el
mantenimiento de una reserva. La fuerza se organiza para cumplir la misión
asignada y puede incluir cualquier combinación necesaria de unidades
aerotransportadas y aerolanzadas.
Página 240 de 360
En la elaboración del plan táctico terrestre influyen una gran cantidad de
factores siendo los más importantes los siguientes:
- Posibilidad de empeñarse en combate inmediatamente después de realizado
al desembarco aéreo.
- Posible ausencia de un inmediato apoyo de fuego de artillería.
- Falta de apoyo de blindados.
- Limitada movilidad tarrestre.

Se deben preparar planes de alternativa para el caso que:


- una parte de la fuerza fracase en el cumplimiento de su misión particular.
- las comunicaciones se interrumpan.
- las condiciones metereológicas o la acción del enemigo impidan el empleo de
las rutas de vuelo o de las zonas de desembarque designadas.
- sea necesario o conveniente retirarse de la zona de objetivo.
- sea conveniente reforzar a las fuerzas en la zona objetivo.

Asimismo deben ser realizados planes para la consolidación y refuerzos y para


proseguir la acción ofensiva en los casos de operaciones independientes.

6.6.6 Plan de movimiento aéreo

Es preparado conjuntamente por elementos del Ejército y de la Fuerza Aérea;


indica el movimiento por fases de la fuerza aerolanzada hacia el área del
objetivo, prescribiendo el uso y adjudicación de los medios de transporte de
tropas y otras facilidades.

6.6.7 Plan de reunión

La reunión es el proceso por el cual las unidades aerolanzadas completan sus


preparativos finales para el combate, se mueven hacia los aeródromos de
partida, y cargan para la partida.
El plan se basa en el plan de movimiento aéreo y cubre los movimientos de las
unidades de la fuerza, hacia los aeródromos de partida, establece la
responsabilidad por la provisión de determinadas facilidades y servicios,
mientras las Unidades se están reuniendo, fija el plan para la carga de los
aviones y proporciona informaciones a las tropas sobre la operación a realizar.

6.6.8 Ejecución

El combate terrrestre de las operaciones aerolanzadas se basa en los mismos


principios que rigen el combate en las operaciones terrestres normales.

Página 241 de 360


Necesita una planificación centralizada y una descentralización inicial de la
operación debido al carácter fluido del combate y a la necesidad de rapidez de
decisión y de acción agresiva.

6.6.8.1 Aterrizaje y reorganización de las uniades aerolanzadas.

Se realizan con el máximo de velocidad y precisión. Las tropas aerolanzadas


normalmente son lanzadas sobre, o muy próximas a sus objetivos. Sin
embargo, pueden ser lanzadas a alguna distancia, dependiendo de la disponibi-
lidad de zonas de lanzamiento y de las posibilidades enemigas, y pueden atacar
a sus objetivos por medios de ataques terrestres convencionales. La sorpresa es
acrecentada si se desembarca sobre el objetivo, o haciendo que el movimiento
hacia el objetivo, sea lo más reducido posible. Las zonas de reunión deben
estar ubicadas próximas a las zonas de lanzamiento y deben proporcionar
abrigo y cubierto. La consolidación de la cabecera de Puente Aéreo se
completa cuando todas las unidades han conquistado sus objetivos, cuando se
han reorganizado y cuando las comunicaciones han sido establecidas.

6.6.8.2 Asalto

El asalto inicial es ejecutado normalmente bajo control descentralizado


requiriendo la acción coordinada de las pequeñas Unidades para la conquista
rápida de los objetivos iniciales, utilizando todo el apoyo de fuego disponible.
Las unidades de reconocimiento destinadas a conquistar la línea de
reconocimiento y seguridad, aterrizan antes y se mueven rápidamente hacia los
lugares señalados.
Tan pronto como los objetivos iniciales han sido conquistados, las unidades
ocupan y organizan aquellos otros objetivos que faciliten el restablecimiento
de una defensa coordinada. Se mejoran las posiciones defensivas, las
comunicaciones son incrementadas y se reconstituyen las reservas adicionales
que sean necesarias; se toman la medidas del caso para concentrarse en
condiciones de rechazar los contraataques enemigos o para continuar la acción
ofensiva.

6.6.8.3 Establecimiento de puestos de comando y comunicaciones

El inmediato establecimiento de las comunicaciones es esencial para retomar


el comando y control después del asalto inicial. Para facilitarlo se mantienen
los enlaces entre las unidades de la fuerza aerolanzada con las tropas de apoyo
aéreo y naval, con las fuerzas aéreas de transporte de tropas con las agencias
de las zonas de comunicaciones a las que concierne el refuerzo, el
Página 242 de 360
abastecimiento y la evacuación por aire y con otras fuerzas aerotransportadas o
terrestres que tengan misiones comunes o coordinadas.
Se debe mantener el equilibrio entre las unidades de combate y de servicio.
Las unidades aerotransportadas se mueven a las zonas de reunión asignadas
transportando con ellas todo el equipo necesario para la misión. Se aseguran
los enlaces tácticos después de alcanzadas las zonas de reunión.

6.6.8.4 Desarrollo de la cabecera de puente aéreo

Después que se han completado los lanzamientos del asalto inicial, y se han
cumplido las misiones terrestres inicial, la consideración principal es la
organización de la línea de la cabecera de Puente Aéreo. Cuando las unidades
no aterrizan sobre o cerca de sus objetivos, el avance hacia ellos, y la conquista
de objetivos se cumple con la mayor rapidez posible. Con el propósito de
coordinar la progresión, el Comandante puede designar objetivos sucesivos o
líneas de coordinación.
El grado hasta el cual se ocupa y organiza la Cabeza de Puente Aéreo depende
principalmente de la misión, las posibilidades del enemigo y las características
defensivas del terreno.

6.6.9 Operaciones aerotransportadas

Consiste en el desembarque desde aeronaves de una unidad. Dicho


desembarco se realizará en pistas de aterrizaje preexistentes y preparadas al
efecto.
Presenta en general las mismas características estudiadas con respecto a las
operaciones aerolanzadas, con las salvedades que se detallan.

6.6.9.1 Organizacion de la fuera aerotransportada.

Una fuerza aerotransportada puede organizarse en los siguientes escalones:


- Escalón de asalto: formado por aquellas fuerzas que tienen por finalidad
empeñarse en forma inmediata en combate.
- Escalón de consolidación: elementos de combate y de apoyo necesarios para
mantener o incrementar el poder de combate del escalón de asalto hasta que
se produzca la reunión o la retirada.
- Escalón de retaguardia: formado por el resto de la fuerza aerotransportada.

6.6.9.2 Ejecución

Las zonas de desembarque normalmente están sobre los objetivos o tan


próximos a los mismos como sea posible.

Página 243 de 360


Las armas de apoyo deben ser desembarcadas lo más cerca posible de las
posiciones de fuego seleccionadas .
Cuando las fracciones hayan desembarcado sobre los objetivos o en zonas
adyacentes, las fuerzas se dirigirán inmediatamente hacia la conquista u
ocupación de sus objetivos con el mínimo de preparación o sin esta.
Cuando la situación imponga establecer zonas de reunión, las mismas serán
ubicadas dentro de la zona de desembarco o próximas a ellas.
Normalmente una fuerza aerotransportada desembarca en zonas poco
defendidas, siendo de prever que el enemigo reaccionara rápidamente,
llevando a cabo inicialmente contraataques de pequeña envergadura y poco
coordinados, empleando la fuerza disponible próxima a la zona objetivo.
Si el enemigo dispusiera de blindados tratará de emplearlos en forma
inmediata. Por lo tanto será fundamental la pronta organización de la defensa
contra blindados. La defensa inicial contra los blindados enemigos durante la
fase de asalto será ejecutada por la fuerza aérea táctica.
El reducido apoyo de fuego de artillería en la zona de objetivo, podrá ser
parcialmente compensado empleando los fuegos de la propia artillería de largo
alcance y los fuegos de las aeronaves artilladas, e incrementados por el apoyo
de fuego de la fuerza aérea táctica.
Conquistado u ocupado el o los objetivos iniciales, la tarea principal será la de
organizar la operación.
Esto se logrará mediante la conquista u ocupación de puntos críticos dentro y
próximos al objetivo.
El refuerzo de la Cabecera de Puente Aéreo se realiza simultaneamente con la
ocupación y organización de la línea de la Cabeza de Puente. A medida que las
tropas de combate adicionales llegan, ellas son utilizadas para reforzar las
posiciones del frente, preparar posiciones defensivas en profundidad, constituir
reservas y para prepararse para aquellas otras operaciones que la misión pueda
requerir.

6.6.9.3 Defensa de la Cabecera de Puente Aéreo.

Los planes defensivos cubren el período de tiempo durante el cual las


Unidades aerotransportadas defenderán los objetivos conquistados y finaliza
cuando se establece el enlace terrestre, cuando la fuerza es replegada, o cuando
han desembarcado suficientes refuerzos y medios para poner a las tropas en
condiciones de asumir la ofensiva.

6.7 OPERACIONES AEROMOVILES

Página 244 de 360


Son las operaciones en las cuales las fuerzas de combate con su equipamiento
se desplazan en aeronaves (helicópteros), que no necesitan pistas de aterrizaje
en las proximidades del área de operaciones para entrar en combate.

6.7.1 Concepto de empleo

Las operaciones aeromóviles pueden ser empleadas para la conquista de


objetivos críticos, debilmente mantenidos o no ocupados, para explotar los
efectos de armas nucleares, para flanquear posiciones enemigas, para efectuar
misiones de reconocimiento, vigilancia de combate y seguridad y para ejecutar
incursiones, desarticular sistemas de comando y logísticos.
En las operaciones ofensivas, las tropas y sus apoyos de fuego pueden ser
rápidamente desplazados para obtener una ventaja táctica o para hacer frente a
un ataque enemigo.
En la defensa, las fuerzas necesarias en las áreas de defensa avanzada pueden
ser reducidas por la organización de fuertes reservas aeromóviles, en áreas
dispersas.

6.7.2 Control de las unidades de la fuerza aérea

Las aeronaves para las operaciones aeroterrestres ejecutadas por las Divisiones y
Brigadas son, normalmente proporcionadas por los escalones superiores bajo la
forma de control operacional o apoyo.
El control operacional de las unidades de la Fuerza Aérea, inclusive el control del
movimiento aéreo, es normalmente atribuído al escalón responsable por el
conjunto de la operación.

6.7.3 Planificación y ejecución

Las normas de planificación para las operaciones aeromóviles son semejantes a


las operaciones aeroterrestres.
Sin embargo, las operaciones aeromóviles exigen menor tiempo y menos detalles
para la planificación, debido a su volúmen, a su estructura simplificada de
comando y a su finalidad.
Las operaciones que se realizan en áreas con características de terreno o
climáticas especiales, exigen planificaciones que se diferencian para adaptarse al
ambiente operacional específico.

6.8 OPERACIONES EN AMBIENTES NUCLEARES, QUIMICOS O


BIOLOGICOS

6.8.1 Operaciones en ambiente nuclear

Página 245 de 360


La conducción y ejecución de las operaciones en ambiente nuclear estarán
signadas por características que las diferenciarán en mayor grado de aquellas que
se desarrollan en un ambiente no nuclear, tal como se las ha tratado en el presente
manual.
Las diferencias se evidencia primordialmente: en el poder de combate, que se
verá aumentado por la provisión de armas nucleares, y en el incremento de la
vulnerabilidad y riesgo a que se verán sometidas las fuerzas que actúan en un
ambiente nuclear.
En general, deberá tenerse en cuenta, entre otros, los siguientes aspectos en las
operaciones en este ambiente:
- Dispersión: requerimiento básico para evitar la formación de blancos
remunerables
Esta no debe perjudicar la eficiencia de las tropas por lo que será necesario
acrecentar su movilidad y sistemas de control.
- Zona de responsabilidad: necesariamente aumentada al ser mayor la
dispersión.
- Movilidad y protección: ambas adquieren importancia fundamental.
- Fuego y maniobra: a medida que aumente el nivel de empleo de las armas
nucleares es decir cuando la frecuencia de empleo y las potencias sean
mayores, los efectos de estas armas comenzarán a saturar el campo de
combate.
Consecuentemente, las fuerzas encontrarán crecientes dificultades para
maniobrar sin pérdidas prohibitivas.

- Ritmo de las operaciones: la combinación de la potencia de fuego, con una


mayor movilidad, acelerará significativamente el ritmo de la operaciones.
- Organización para el combate:los factores enunciados de dispersión, movilidad
y ritmo de las operaciones, afectarán en gran medida la organización para el
combate de una fuerza.
- Bajas: en operaciones en ambientes nucleares deberán preverse pérdidas de
personal repentinas y severas en períodos de tiempo relativamente cortos .
Estas pérdidas podrán ser de tal magnitud como para anular la capacidad de
combate de una fuerza. Es por ello que las fuerzas terrestres deberán ser
instruídas para contar con capacidad de reorganizarse rápidamente.

6.8.2 Operaciones ofensivas

Las operaciones ofensivas en ambiente nuclear impondrán la necesidad de contar


con fuerzas altamente móviles, suficientemente protegidas, relativamente
pequeñas y con un gran ímpetu de avance. Dichas caracteristicas permitirán
reducir su vulnerabilidad ante un ataque nuclear enemigo, como así también
obtener el más rápido y eficaz aprovechamiento de las circunstancias favorables
resultantes del empleo de armas nucleares propias.
Página 246 de 360
El plan de ataque deberá ser concebido, ya sea para dividir la fuerza enemiga y
derrotarla en detalle, o para obligarla a concentrarse en un espacio reducido, a fin
de crear un blanco rentable para el empleo de armas nucleares. Deberá evitarse al
máximo la concentración de fuerzas propias y cuando ello sea necesario llevarla a
cabo por tiempos reducidos y lo más próximo posible al enemigo.
Normalmente, será conveniente no crear con las explosiones nucleares obstáculos
significativos a los movimientos de las propias tropas. Sin embargo, podrán
presentarse blancos remunerativos cuya neutralización por medio de fuegos
nucleares justifique que la maniobra de la fuerza sea condicionada a los mismos.

6.8.3 Operaciones defensivas

La defensa móvil al permitir una mayor libertad de acción y movilidad y la


defensa en amplio frente, por su gran dispersión, serán las dos formas de defensa
que mejor se adaptarán al ambiente nuclear. Además, en la defensa en amplio
frente, la debilidad que suele presentarse en el apoyo mutuo, podrá ser
disminuida por el empleo de armas nucleares.
En cambio, en una defensa en posición, las tropas estarán más expuestas a un
ataque nuclear, dadas sus posiciones relativamente fijas y concentración de los
efectivos. Cuando sea necesario recurrir a ella en el ambiente nuclear, será
preciso intensificar la organización del terreno, a fin de reducir su vulnerabilidad.
Relacionados con su dinámica, la defensa deberá estar en condiciones de ejecutar
operaciones ofensivas para explorar los resultados de una explosión nuclear;
como así también, ejecutar acciones de retardo que posibiliten a las tropas ganar
espacio, para sustraerlas al riesgo emergente del empleo de las armas nucleares
propias.
Las fuerzas de seguridad, tendrán además de las misiones normales una
importante misión adicional: la localización y formación de blancos nucleares.
El empleo de minas nucleares de demolición, permitirá la formación de barreras
y campos minados y otros obstáculos de mucho mayor valor que los constituídos
con medios no nucleares.
La disponibilidad de fuegos nucleares en reserva aumentará considerablemente la
capacidad de reacción, al permitir concentrar rápidamente un poder de combate
importante en distintas zonas.
De ello resutará una mayor libertad de acción para el defensor y una
disminución en la cantidad de tropas necesarias para constituir la reserva.

6.8.4 Movimientos retrógrados

El objetivo perseguido en una operación retrógrada, mover las tropas hacia


retaguardia o alejarlas del enemigo, se verá facilitado si se cuenta con armas
nucleares.

Página 247 de 360


La disposición de dichas armas, de baja potencia, podrá facilitar el
desenganche y permitir a las tropas un contacto más estrecho que de otra
manera no sería factible. Asimismo el empleo de fuegos potentes como los
nucleares, a larga distancia, obligará al enemigo a desplegar prematuramente y
en consecuencia disminuir notablemente su ritmo de avance.
Los obstáculos que ofrezca el terreno, podrán ser notablemente incrementados
con la instalación de obstáculos artificiales empleando minas, demoliciones y
fuegos nucleares.
Explosiones nucleares subterráneas o de superficie, permitirán crear: cráteres,
lluvia radioactiva y zonas contaminadas, para demorar, dificultar o impedir el
avance del enemigo y dar la necesaria libertad de movimiento a las fuerzas
propias.
La presencia de dichos obstáculos naturales y artificiales (campos minados,
barreras) convenientemente cubiertos por el fuego, obligará al enemigo a
modificar su dispositivo y concentrarse para salvarlos, lo que podrá llevarlo a
constituirse en un blanco nuclear remunerativo.
Asimismo, si durante la operación retrógrada, se presenta una oportunidad
favorable para una acción ofensiva, la misma deberá ser violentamente
ejecutada. La disponibilidad de armas nucleares permitirá que dicha reacción
alcance un máximo de potencia y en consecuencia, sus resultados podrán
llegar a ser decisivos.
El empleo de armas nucleares facilitará la neutralización o destrucción de
áreas fortificadas y localidades y disminuirá consecuentemente el valor
defensivo de las mismas.
Las cubiertas que las estructuras edilicias y fortificaciones ofrecen contra un
ataque no nuclear se verán considerablemente reducidos y la contaminación
resultante será dificil de controlar y neutralizar.

6.8.5 Operaciones en ambientes Químicos o Biológicos.

Las operaciones en estos tipos de ambientes podrán ser coincidentes o no con


la existencia de un ambiente nuclear.
Aquel Comandante que disponga de agresivos químicos y agentes biológicos y
la correspondiente autorización para su empleo, podrá influir notablemente en
las operaciones a desarrollar por sus fuerzas, a la vez que se verá seriamente
influenciado si es el enemigo el que dispone de los mismos.
Los agresivos químicos serán empleados especialmente en la siguiente forma:

6.8.5.1 En las operaciones Ofensivas

- Sobre posiciones enemigas.


- Sobre reservas enemigas.

Página 248 de 360


- Para realizar interdicción de los movimientos en la profundidad del
dispositivo enemigo. Para proteger zonas expuestas del dispositivo de
ataque propio.
- Para ocultar los preparativos de la operación.

6.8.5.2 En las Operaciones Defensivas

- Para apoyar a las fuerzas de seguridad, en el retardo y engaño.


- Sobre las zonas de reunión del enemigo para perturbar los preparativos del
ataque.
- Para contener una penetración enemiga.
- Para apoyar los contraataques.
- Para restringir o perturbar el empleo de avenidas de aproximación favorables.
- Para canalizar y retardar al enemigo, causar bajas demoradas, restringir el
empleo de materiales e instalaciones y en general limitar sus movimientos.
- Para apoyar los flancos libres.
Los agentes Biológicos serán empleados especialmente en la siguiente forma:

6.8.5.3 En el nivel estratégico, contra:

- Zonas urbanas
- Centros y complejos industriales.
- Zonas de descanso o de instrucción de tropas.
- Centros de investigación.
- Centros ferroviarios.
- Campos petrolíferos y destilerías.
- Posiciones de lanzamiento de armas QBN.

6.8.5.4 En el nivel Táctico:

En las operaciones ofensivas, contra:


- Unidad de reserva.
- Unidades logísticas.
- Centros de transporte.
- Líneas de comunicaciones.
- Depósitos de abastecimientos.

En las operaciones defensivas contra:


- Todo blanco apropiado delante del L.A.A.D.A., para
reducir el poder de combate del enemigo, a una
distancia tal que no pueda llegar a afectar
directa o indirectamente la tropa propia.

Página 249 de 360


CAPITULO VII¡Error! Marcador no definido.

Sección 1

OPERACIONES COMPLEMENTARIAS

7.1 CONCEPTOS GENERALES

Son aquellas operaciones tácticas que complementan o perfeccionan las


operaciones básicas, o buscan satisfacer finalidades particulares dentro del
desarrollo de otras operaciones, a través de actividades de naturaleza específica.
Podrán ser conducidas y ejecutadas por distintos niveles de conducción, en
función de sus capacidades y de la finalidad perseguida.

7.2 MOVIMIENTOS DE TROPA

7.2.1 Generalidades

Movimientos de tropa es el desplazamiento de un lugar a otro utilizando


cualquier medio de transporte.
Se clasifican en tácticos y administrativos y pueden ser clasificados además de
acuerdo a los medios de transporte empleados. Un movimiento táctico es llevado
a cabo manteniendo el grueso de las tropas en un dispositivo que facilite su
rápido pasaje para la formación de combate adecuada.
Se basa en la probabilidad no remota, de un posible contacto terrestre con el
enemigo, ya sea durante la marcha o poco después de la llegada a destino.
Puede ser ejecutado para tomar contacto con el enemigo (movimiento hacia el
contacto) para alejarse de éste sin estar en contacto (retirada) o cuando sea
requerido por el plan de operaciones.
Bajo estas condiciones el uso más eficiente de medios de transporte es
frecuentemente sacrificado por las consideraciones tácticas.
Un movimiento administrativo es el que se conduce cuando no hay posibilidades
de contacto con el enemigo terrestre dando particular importancia al más
eficiente uso de los medios de transporte disponibles y a la comodidad del
personal.
No obstante lo anterior, se deberá tratar de mantener la integridad de los
elementos orgánicos durante la ejecución de los movimientos administrativos.
Este Capítulo tratará los movimientos tácticos de tropas, así como aquellas
medidas de orden administrativo que deben ser contemplados en todo tipo de
movimientos de tropas (tácticos o administrativos).

Página 250 de 360


Para el estudio de los movimientos administrativos referirse al RC 101-10 (Datos
Técnicos y Logísticos) y RC 100-10 (Administración).

7.2.2 Métodos

Los movimientos de tropas son realizados por aire, tierra, agua, o por
combinaciones de ellos.
Los movimientos por tierra incluyen aquellos hechos a pie o utilizando medios
hipo, rodoviarios o ferroviarios.
Los movimientos por aire pueden ser por aviones, planeadores o helicópteros,
que puedan cargar y descargar tropas en tierra o lanzarlas por paracaídas
dentro del área del objetivo.
El transporte de superficie es el método comúnmente usado en movimientos
por agua.
Los submarinos, transporte de tropas, tienen particular posibilidad para ciertas
operaciones especiales.

7.2.3 Aspectos doctrinarios comunes a todos los movimientos.

7.2.3.1 Fundamentos

La principal consideración en los movimientos es asegurar que las tropas


lleguen al lugar indicado, en tiempo oportuno, en condiciones de efectividad y
en el mejor dispositivo para cumplir la misión asignada. La guerra moderna
paga dividendos al Comando que mueve y concentra o desconcentra medios
rapidamente en los puntos críticos.Una posibilidad atómica enemiga,aumenta
las necesidades de un movimiento de tropas eficiente.

7.2.3.2 Planes

Son necesarios planes cuidadosamente preparados y detallados para realizar


movimientos de tropas eficientes. Para realizar la planificación deben ser
considerados los siguientes factores:
- la situación terrestre y aérea
- la actividad a desarrollar después de completado el movimiento
- las tropas que deben ejecutar el movimiento (magnitud,tipo,etc.)
- la distancia a recorrer y los medios disponibles
- los apoyos administrativos durante el movimiento y en el lugar de destino
- influencia del clima,estaciones,estado del tiempo y adecuación de la red de
transporte.
A las unidades se les debe dar ordenes oportunas de movimientos inminentes,
que les permita una preparación apropiada. Los planes deben incluir entre
otros, los siguientes elementos:
Página 251 de 360
- Organización de tropas y equipos para satisfacer las necesidades de la
situación táctica utilizando los mejores transportes disponibles.
- Reunión de tropas y transportes.
- Embalaje y marcación de equipo, carga de personal y equipo.
- Medidas para control y administración incluyendo apoyo administrativo
durante la marcha y en el punto de destino.
- Reunión del personal y equipo en la formación deseada en el punto de
destino.
- Proporcionar adecuada seguridad en la marcha y en el punto de destino.

7.2.3.3 Control

Los movimientos se realizan mediante control centralizado de operaciones


descentralizadas. El control requiere organización adecuada de la fuerza,
establecimiento de niveles de Comando para planificar y supervisar el
movimiento, indicación de medidas de control tales como itinerarios y líneas
de coordinación y comunicaciones para proveer los informes necesarios y
comandar el movimiento. Una organización adecuada para el movimiento
requiere que la fuerza sea subdividida en escalones manejables y que la
integridad de la Unidad sea mantenida al máximo grado posible. Cuando haya
grupos de movimientos compuestos de tropas de más de una Unidad, un único
Comandante debe ser designado, pero los sub-grupos deben componerse de
Unidades mandadas por sus propios Comandantes.

7.2.3.4 Utilización de medios

Dentro de los límites prescritos por las necesidades militares, los movimientos
deben hacer amplio uso de los medios de transporte. Este principio que es
fundamental en los movimientos administrativos, debe ser siempre tenido en
cuenta en los movimientos tácticos.

7.2.3.5 Seguridad.

La Seguridad y su planificación es esencial para todo tipo de movimiento.


En general consiste en todas aquellas medidas tomadas por un Comando para
protegerse del espionaje, observación, sabotaje, interferencia o ataques por
sorpresa por parte del Enemigo.
Su propósito es preservar el secreto, ganar o mantener la libertad de acción.
Las medidas de seguridad son tanto de naturaleza activa como pasiva, la
combinación de ellas, produce un grado óptimo de seguridad.
Las medidas de seguridad,aplicables tanto a los movimientos como a toda
operación táctica son:
- Reconocimiento y contra reconocimiento continuo
Página 252 de 360
- Alarma adecuada
- Comunicaciones efectivas
- Reacción oportuna
Adquieren particular importancia en los movimientos de tropas en el T.O. la
defensa contra la acción terrestre y la acción aérea enemiga.
Dentro de las medidas de seguridad contra la acción terrestre, particularmente
ataques, debe destacarse la proporcionada por la articulación de un dispositivo
en profundidad que comprende Fuerza Aérea Táctica, Fuerzas de Cobertura,
Vanguardia, Flanguardia, Retaguardia y Fuerzas de Seguridad local, acorde al
grado de amenaza prevista.
Los movimientos de tropas presentan una apreciable vulnerabilidad a los
ataques aéreos.
Dicha vulnerabilidad está en relación con los medios utilizados para realizar el
movimiento, la magnitud de los efectivos que se desplazan, los medios
disponibles de D.A.A. y la situación aérea.
A fin de reducir los efectos de un ataque aéreo es preciso adoptar medidas de
D.A.A. pasiva,tales como: adecuado escalonamiento de las tropas, ejecución
de movimientos nocturnos y conveniente dispersión al inicio y fin de los
movimientos.
Por su parte, la D.A.A. activa está basada fundamentalmente en las acciones
que desarrolla la Fuerza Aérea (cobertura de columnas) y en el apoyo de la
A.D.A. Relacionados con el enemigo aéreo, en los movimientos de tropas se
presentan momentos o lugares críticos, especialmente en la iniciación del
movimiento, en zonas que dificulten la dispersión de las tropas, y a la llegada
al lugar de destino.
Debe preverse el emplazamiento de elementos de A.D.A. en dichos lugares o
circunstancias, no sólo para la protección de las tropas sino también de las
obras de arte e instalaciones necesarias para el movimiento (puentes,puertos,
pistas de aterrizaje, etc.).

7.2.4 Instrucción y Procedimientos Permanentes de Operaciones (PPO)

Para asegurar un movimiento rápido y eficiente es necesario la realización de


instrucción individual y colectiva. Los PPO de la Unidad deben incluir
aquellos métodos y técnicas de operación normales para cada tipo de
transporte que puede preverse que la Unidad emplee.

7.2.4.1 Marchas

Llamase marchas a los movimientos de tropas realizados a pie, con medios


hipo, rodoviarios o combinación de éstos. Las marchas pueden ser tácticas o
administrativas, diurnas o nocturnas. Cuando la situación lo requiere, pueden

Página 253 de 360


emplearse marchas forzadas para apresurar el arribo de las tropas al punto
deseado. Aquí se trata algunos principios esenciales a todo tipo de marcha.

7.2.4.2 Planes y órdenes

El éxito de la marcha depende de la existencia de planes cuidadosos. El


Comandante de una Unidad que debe realizar una marcha debe preparar planes
completos, precisos y realistas. Dichos planes deben traducirse en órdenes
oportunas para lograr el control y la seguridad de la marcha, reducir las bajas y
asegurar la marcha ininterrumpida de la Unidad. El Comandante debe basar
sus planes de marcha en factores de orden técnico y de orden táctico como son:
la misión, la información que tenga sobre el enemigo, la conformación del
terreno, las condiciones meteorológicas y las posibilidades de su Unidad entre
otros, de manera tal que su Unidad, incluyendo el equipo necesario, llegue a
destino en el mejor orden posible y en condiciones apropiadas para ser
empleada.

7.2.4.3 Control y coordinación

El Comandante debe establecer el control inicial de la marcha mediante la


designación en su orden de marcha de:
- punto inicial y otros puntos críticos,
- de la hora en la cual las cabezas o las colas de las columnas deben pasar por
ellos,
- de la velocidad de marcha, del intervalo de tiempo entre UU.,
- del orden de la marcha, del itinerario, de las zonas de reunión y, líneas de
coordinación y objetivos de marcha (cuando sea necesario)
El Comandante también debe indicar ubicación de su puesto de Comando y los
medios de comunicaciones que deben usarse para el control de la marcha
Para facilitar el control, el Comandante debe disponer destacamentos
precursores, comisiones instaladoras, guías, señalización de las rutas y control
del tránsito.
Para lo último, las Unidades de Ingenieros y de Policía Militar son
particularmente apropiadas

7.2.4.4 Organización.

La Unidad que ejecuta una marcha se organiza basicamente en Unidades de


marcha, en series de marcha o en columnas de marcha según sea necesario
para su debido control.

7.2.4.5 La Unidad de marcha.

Página 254 de 360


Es una Unidad de tal volumen (ordinariamente el equivalente de una
compañía, escuadrón, o batería) que puede moverse o hacer alto a la orden de
su propio Comandante; siempre que sea posible todos los elementos de una
Unidad de marcha deben poseer las mismas características.
Generalmente una U.M. está compuesta por 10 a 25 vehículos.

7.2.4.6 La serie de marcha.

Se compone de dos o más Unidades de marcha, organizadas bajo el control del


Oficial de más graduación y a las cuales se les ha dado una designación
específica para facilitar el control. las Unidades de marcha de la serie, pueden
no poseer las mismas características de marcha.

7.2.4.7 La columna de marcha

Se compone de elementos de una Unidad moviéndose sobre el mismo


itinerario.
Puede estar constituida con una o más series de marcha. Para facilitar el
control debe nombrarse un Comandante de columna.

7.2.4.8 Altos.

Durante un día de marcha deben hacerse altos a intervalos regulares para


hacer descansar al personal, mantener los vehículos y ajustar el equipo, los
normales son el alto técnico, el alto periódico y el gran alto.
Los altos están regulados por los procedimientos normales de operación y por
la orden de marcha.
Los Comandantes de Unidad deben ser notificados de la hora y duración
aproximada de los altos que no hayan sido programados con anterioridad. Las
marchas diurnas es preferible que terminen antes del C.N.V. a fin de dar
tiempo a la tropa para prepararse para las actividades del día siguiente y para
descansar. El calor del mediodía o la actividad enemiga pueden forzar a la
adopción de marchas prolongadas hasta el anochecer o marchas nocturnas. En
los altos prolongados la tropa debe trasladarse a lugares previamente
seleccionados cercanos al itinerario de marcha.

7.2.4.9 Tipos de marcha

Las marchas tácticas y administrativas tienen, respectivamente, las mismas


características que los movimientos tácticos y administrativos descritos en el
párrafo correspondiente. Aquí se
trata de aspectos comunes a las marchas administrativas y tácticas.

Página 255 de 360


7.2.4.10 Marchas diurnas

Ante la ausencia de actividad enemiga, son preferibles las marchas diurnas


pues permiten movimientos mas libres y menos fatigosos para la tropa.
Dichas marchas se caracterizan por vulnerabilidad a la observación y ataque
aéreo enemigo, por formaciones dispersas, y por la facilidad de control y de
los reconocimientos.

7.2.4.11 Marchas nocturnas

Las marchas nocturnas se caracterizan por: formaciones cerradas, estricto


control, dificultad para los reconocimientos, menor promedio de marcha y
mas posibilidades de ocultamiento a la observación y ataque aéreo del
enemigo, aunque de fácil blanco debido a la pequeña dispersión.
Las marchas nocturnas pueden hacerse a fin de evitar el calor excesivo o
explotar la oscuridad para lograr la sorpresa.
Los requerimientos de control determinan la necesidad de una planificación
detallada, medidas de control estrictas, instrucción cuidadosa, disciplina de
marcha, luces y comunicaciones.
Si se busca el secreto, los movimientos anteriores deben restringirse al
anochecer a pequeños destacamentos y la marcha debe terminarse al alba. En
esas condiciones debe considerarse la supresión de ruidos si el enemigo está
cercano. Para engañar a los observadores enemigos conviene enviar a
algunos elementos, antes de la oscuridad, en una dirección distinta a la
planificada para la marcha.

7.2.4.12 Marcha forzada

Las marchas forzadas deben llevarse a cabo solamente en caso de necesidad


pues disminuyen la eficiencia de las Unidades.
El transporte motorizado disponible debe usarse al máximo necesario para
cubrir las necesidades. Las marchas forzadas se cumplen aumentando las
horas de marcha por día o disminuyendo los descansos durante el
movimiento más que aumentando la velocidad.
Una larga marcha forzada se convierte en una sucesión de marchas diarias de
mayor promedio de duración. Para asegurar el esfuerzo máximo, es casi
siempre conveniente informar a las tropas de la razón que determinó la
marcha forzada. Debe recordarse que la exigencia de esfuerzo excesivos
debilita no solo el físico, sino también la moral de la tropa.

7.2.4.13 Marchas motorizadas

Página 256 de 360


Las marchas motorizadas se caracterizan por su flexibilidad de empleo,
capacidad para transportar en poco tiempo grandes cantidades de tropas a
largas distancias, mayores requerimientos logístico (combustibles, vehículos
y conservación de caminos) y vulnerabilidad a la acción enemiga.

7.2.4.14 Organización

Las Unidades que tengan elementos de transporte orgánico, en refuerzo o


apoyo para trasportar el personal y el equipo a la vez, deben ejecutar la
marcha motorizada en agrupaciones tácticas completas, en un solo
movimiento.Las Unidades que no posean elementos de transporte suficientes
para ello, deben realizar la marcha motorizada por escalones o agrupando los
medios para transportar sucesivamente a los elementos subordinados.

7.2.4.15 Marcha a pie.

Las marcha a pie se caracterizan por la prontitud


para entrar en combate, facilidad de control,
adaptabilidad al terreno, independencia de la red
carretera, velocidad de marcha lenta y mayor cansancio
del personal. Deben hacerse cuando la distancia a
recorrer es corta, escasea el combustible o los medios
de transporte, o cuando la situación o la conformación
del terreno prohíben el uso de vehículos.

7.2.4.16 Movimiento hacia el contacto.

Se han analizado anteriormente, todos aquellos aspectos doctrinarios


comunes a todo movimiento de tropas y que en consecuencia deben ser
contemplados en los movimientos tácticos de tropa.
En lo que específicamente atañe a los movimientos tácticos de tropas como
operación táctica pueden comprender movimientos hacia el contacto,
movimientos para alejarse del enemigo u otros movimientos ejecutados de
acuerdo con los planes operativos.
Movimiento hacia el contacto es aquel tipo de movimiento táctico conducido
para establecer contacto con el enemigo o para restablecerlo una vez perdido.
Este tipo de movimientos es conocido también como marcha hacia al
combate.
El objetivo de las fuerzas amigas durante el movimiento hacia el contacto es
obtener ventajas que faciliten las futuras operaciones.
El movimiento hacia el contacto es ejecutado agresivamente para conquistar
el objetivo antes que el enemigo pueda reaccionar. Todos los esfuerzos
Página 257 de 360
estarán dirigidos a desorientar al enemigo, no darle oportunidad para que
actúe con libertad de acción e impedir que elementos del mismo puedan
organizarse para oponerse a la acción de nuestras fuerzas. Todos los órganos
de informaciones y seguridad son empleados, de modo que la fuerza principal
pueda empeñarse bajo las condiciones más favorables. Las Unidades de
reconocimiento aéreo son eficientemente empleadas como órganos de
información y seguridad en estos movimientos.

7.2.5 Grados de probabilidad de contacto terrestre con el enemigo.

Contacto remoto: cuando la probabilidad de contacto con las fuerzas


enemigas sea remoto deben tomarse disposiciones de marcha para dar
libertad de movimiento.
Las columnas que tienen velocidades distintas deben asignarse a rutas
separadas o escalonadas en el tiempo. Se utilizan columnas de camino y su
organización dependerá del método de transporte, de las condiciones de los
caminos, de la efectividad de las armas de largo alcance y de la aviación
enemiga.
Contacto inminente: Cuando la probabilidad de contacto con las fuerzas
enemigas sea inminente imperarán las condiciones de orden táctico y el
movimiento se hará en formación de "Marcha de aproximación".

7.2.5.1.1 Transición.

La transición desde una situación en la cual el contacto es remoto a una en


la cual el contacto es inminente, pasando por grados crecientes de
probabilidad de contacto, se caracteriza por el progresivo despliegue de la
Unidad a través de las etapas de Columna de caminos, Columna táctica y
Marcha de aproximación, hasta el despliegue final para el combate.

7.2.5.2 Ejecución del Movimiento.

La formación en columna facilita el control y proporciona máxima


flexibilidad. Sin embargo retarda el despliegue en la dirección del
movimiento. Es la formación más fácil de controlar, permite al Comandante
ejercer la máxima influencia en la coordinación de la acción de las Fuerzas
inicialmente empeñadas y asegura la disponibilidad de Unidades para la
maniobra, adaptándose particularmente para situaciones inciertas.
La formación en línea asegura la rapidez del despliegue en la misma
dirección del movimiento. La maniobrabilidad disminuye, especialmente
después de establecido el contacto y los cambios de dirección son difíciles.
Esta formación es la indicada cuando la situación es clara y hay poco
espacio de maniobra.
Página 258 de 360
Una formación en escalón facilita la maniobra y el despliegue hacia los
flancos y retiene, en diversos grados, las ventajas y desventajas de las otras
formaciones en cuanto a frente y profundidad.
Normalmente el movimiento es realizado en columnas múltiples.

7.2.5.3 Seguridad durante el movimiento

Los principios fundamentales son los mismos tratados en el Capítulo sobre


seguridad. La Unidad que se mueve para establecer contacto con el enemigo
puede usar fuerza de cobertura, vanguardia, retaguardia, seguridad de flanco
y puesto avanzados de marcha para asegurarse contraataques terrestres.

7.2.5.3.1 Fuerza de cobertura

- Generalidades

Cuando no se ha tomado contacto, las grandes Unidades deben ser


precedidas por tropas de cobertura que operan directamente bajo el mando
del Comandante de las Fuerzas. El propósito de su empleo es tomar
conocimiento oportuno de la situación, proporcionar seguridad a la unidad y
evitar retardos innecesarios al grueso de fuerza. Sus misiones son amplias y
pueden incluir: ataques para destruir la resistencia enemiga, la conquista y
mantenimiento de puntos críticos del terreno, o la contención de Grandes
Unidades enemigas.

7.2.5.3.2 Composición y volumen.

Los informes sobre los efectos y dispositivos enemigos, son generalmente


limitados en la guerra de movimientos. Por esto, la composición y volumen
de una Fuerza de cobertura es algo de extrema importancia porque su
empeño inicial puede determinar el curso entero del combate. El atacante
mantiene la iniciativa cuando toma conocimientos rápido de la situación
enemiga y cuando cuenta con medios adecuados: una Fuerza que sea
solamente capaz de asegurar el informe es insuficiente, una Fuerza móvil,
fuerte en Blindados y Artillería y apoyada efectivamente por Aviación
táctica, es la Fuerza de cobertura más efectivamente para tomar rápido y
oportuno conocimiento de la situación enemiga, para eliminar resistencias y
para mantener al enemigo en desequilibrio.

7.2.5.3.3 Ubicación

Las Fuerzas de Cobertura normalmente actúan fuera de la distancia de


apoyo del grueso al cual proporcionan seguridad, a su frente, flancos o
Página 259 de 360
retaguardia. Se requiere una Fuerza de cobertura altamente móvil para el
rápido cumplimiento de sus tareas y para evitar su derrota antes que el
grueso pueda intervenir.
Para Grandes Unidades, la Fuerza de cobertura se integra con componentes
de todas las armas y servicios necesarios. Los medios de ingenieros se
mantienen tan próximos al primer escalón como sea posible. La artillería de
campaña debe estar preparada para un pronto apoyo, desplazándose por
saltos de una posición a otra cuando el contacto es inminente. Deben ser
previstas comunicaciones rápidas y seguras entre las Fuerzas de cobertura y
el grueso. La responsabilidad para asegurar las comunicaciones recae
normalmente en el Comandante de las Fuerzas. La Aviación de Ejército
puede ser usada para suplementar los medios de comunicaciones. Las
Unidades Aerotransportadas o Aerolanzadas pueden ser empleadas en
conjunción con Fuerzas de cobertura para apoderarse de puntos críticos del
terreno o hacer contacto inicial con el enemigo y restringir su maniobra.

7.2.5.3.4 Condiciones del terreno.

Las Fuerzas Blindadas y Mecanizadas son muy efectivas para esta misión,
cuando el terreno y la situación lo permiten. las condiciones ideales del
terreno son: terreno ondulado, buena trasitabilidad, excelente red de
caminos, particularmente caminos laterales y sin obstáculos de importancia.
Las Fuerzas de Infantería son adecuadas para Fuerza de cobertura cuando el
terreno es montañoso, quebrando y con bosques espesos, con red de
caminos pobres o cuando existen muchos obstáculos. Sin embargo, cuando
están extendidas sobre un amplio frente, tienen dificultades de control para
la ruptura del combate, para reagruparse y para la ejecución de movimientos
rápidos.

7.2.5.3.5 Reconocimiento, seguridad, frente, control y acciones.

La Fuerza de cobertura establece sus propios elementos de reconocimiento


y Fuerzas de seguridad, las cuales operan en su frente y flanco. La aviación
de reconocimiento opera en íntima coordinación con la Fuerza de
Cobertura.
La Fuerza de cobertura actúa en amplio frente, normalmente cubriendo toda
la zona de acción del grueso. Avanza en múltiples columnas de armas
combinadas a lo largo de las principales avenidas de aproximación, y el
contacto entre las columnas es mantenido por patrullas y por la aviación.
Se usan objetivos sucesivos de marcha o líneas de coordinación para el
control de la marcha.

Página 260 de 360


Se mantiene una reserva para influir en las acciones locales. Las acciones de
la Fuerza de cobertura se caracterizan por la velocidad, agresividad y
mantenimiento de pequeñas reservas.
En ausencia de instrucciones específicas, el Comandante toma las medidas
necesarias para cooperar en el cumplimiento de la misión de la Unidad
como un todo. Se utilizan los fuegos de largo alcance para obligar a la
Fuerza enemiga a realizar despliegues prematuros.

7.2.5.3.6 Vanguardia

Detrás de la Fuerza de cobertura el grueso progresa en amplio frente. Cada


columna es precedida por su propia Vanguardia.
La Vanguardia protege el grueso contra la observación terrestre y la
sorpresa desde el frente; proporciona el tiempo y espacio necesario para que
éste pueda desplegar para el combate y evita los retardos innecesarios del
mismo, aplazando su despliegue tanto como sea posible.
Por la acción agresiva de la Vanguardia se eliminan las resistencias menores
sobrepasadas por la Fuerza de cobertura.
La Vanguardia adelanta elementos móviles de reconocimiento hacia el
frente y los flancos; estos elementos de reconocimientos mantienen el
contacto con la Fuerza de cobertura.
Cuando el grueso no es precedido por Fuerzas de cobertura, las Vanguardias
serán más fuertes, especialmente en blindados, para permitir un
reconocimiento más extenso y una acción más agresiva. En este caso, las
acciones de la Vanguardia son similares a aquellas de la Fuerza de cobertu-
ra. El dispositivo adoptado por la Vanguardia debe proporcionarle su propia
seguridad y el suficiente frente y profundidad para su maniobra. La
distancia entre la Vanguardia y el grueso es la suficiente para proporcionar
al Comandante libertad de acción para el empleo del grueso, pero nunca tan
grande, que exponga a la Vanguardia a ser batida sin poder concurrir en su
apoyo. Las distancias se reducen en la noche, en terreno cubierto, y bajo
condiciones de poca visibilidad y observación restringida. Las conside-
raciones arriba citadas, también se aplican a fuerzas de seguridad más
móviles, tales como elementos blindados o una fuerza de tarea móvil.
Las principales modificaciones a introducir son el resultado de la mayor
movilidad de estas Unidades. El área de reconocimiento es más extensa,
para asegurar el tiempo necesario para el despliegue de dichas fuerzas. El
movimiento normalmente se realiza por saltos. Es esencial una estrecha
cooperación con la aviación de reconocimiento.

7.2.5.3.7 Seguridad a los Flancos y Retaguardia

Página 261 de 360


Cuando los flancos de una fuerza no están protegidos es necesario
proporcionar protección por el uso de una parte de la Fuerza como
Flanguardia.
Su misión es proteger la columna de marcha de la observación y sorpresa
terrestre y en la eventualidad de un ataque en fuerza, darle el tiempo y
espacio necesarios para el despliegue.
La Aviación es efectiva, como un suplemento de las Flanguardias.
La Fuerza que brinda seguridad a los flancos actúa mediante la supresión de
las fuerzas enemigas que por su valor puedan significar una amenaza para el
grueso y por la ocupación y mantenimiento de puntos críticos que bloquean
las avenidas de aproximación disponibles al enemigo para actuar en el
flanco del grueso. Cuando el grueso ejecuta una marcha de Flanco o con un
flanco expuesto en proximidad del enemigo, la protección de dicho flanco
asume gran importancia y se destaca una fuerte Flanguardia. La Vanguardia
puede convertirse en una Flanguardia para dar la protección requerida por
un cambio en la dirección de marcha.
En este caso, se organiza una nueva Vanguardia.
La Retaguardia consiste en una parte de la Unidad que sigue al grueso en su
zona de marcha, generalmente por saltos, para protegerlo de ataques,
observación e interferencias de fuerzas enemigas.

7.2.5.3.8 Seguridad en los altos

Cuando una columna hace alto por un breve período, su Vanguardia,


Flanguardia y Retaguardia deben establecer puestos avanzados de marcha.
Si se requiere que la fuerza haga alto por un largo período, es necesario
establecer seguridad interna y un sistema de puestos avanzados para cubrir
su frente, flancos y retaguardia.
Cada columna puede organizar su propio sistema de puestos avanzados de
marcha.
En cada caso el sistema está organizado desde atrás hacia adelante en
reserva, apoyo y vigilancia. Cuando es necesario asegurar puntos
importantes fuera del sistema de puestos avanzados, se establecerán puestos
destacados.
El grueso se dispondrá de tal forma como para contrarrestar las amenazas
enemigas y facilitar la adopción del sistema de defensa previsto.

7.2.5.3.9 Grueso

El grueso de las fuerzas precedido por su Vanguardia sigue tan de cerca


como sea posible a la Fuerza de cobertura. La Fuerza de Cobertura
sobrepasa, contiene o fija los pequeños núcleos de resistencia enemigas y
contínua su progresión.
Página 262 de 360
El grueso se encuentra disponible para atacar la fuerza principal enemiga y
conquistar el objetivo final.
Los elementos de seguridad del grueso pueden ser utilizados para eliminar
los pequeños núcleos de resistencia sobrepasados por la Fuerza de
cobertura. Sin embargo el grueso no debe ser desintegrado para realizar
acciones fragmentarias.

- Organización de la columna de marcha.

El orden de marcha depende de la misión, del terreno, del probable orden


de entrada de las Unidades en acción y de su movilidad relativa.
La mayor parte de los Blindados y de la Infantería se mueven con el
grueso.
Ellos, están intercalados a través de toda la columna para facilitar la rápida
entrada en combate. El blindado proporciona la protección antitanque
inmediata a toda la columna.
La Artillería de campaña debe ser colocada adelantada, con la Infantería y
Blindados, para asegurar su rápida disponibilidad para apoyar la Fuerza de
seguridad y la acción inicial del grueso.
La Artillería Antiaérea puede disponerse a lo largo de la columna para
proveer defensa Antiaérea, o puede ser desplegada por saltos para proteger
los puntos o pasajes críticos.
Las Unidades de Ingenieros deben colocarse bien adelante en la columna
de marcha a fin de realizar tareas que faciliten la progresión del grueso.
Los elementos de apoyo administrativo se ubicarán en la columna, de
forma de asegurar su disponibilidad en caso necesario pero sin que
interfieran con el proyectado avance de la columna.

7.2.5.3.10 El control durante el movimiento hacia el contacto.

Para los fines de control, a una Gran Unidad se le asignan objetivos


(incluyendo objetivos intermedios) y líneas de coordinación, o una misión
y una zona de acción, eje de avance o rutas de movimiento. El
Comandante debe fijar también el tiempo y lugar de la partida de sus
columnas, de modo tal de lograr la formación deseada.
Los Comandantes de columna deben informar cuando se alcancen los
objetivos o líneas de coordinación, o en cualquier otra situación que se les
haya ordenado. El grado de control establecido depende del terreno y de la
inminencia de contacto con fuerzas enemigas.
Los Comandantes deben ir bien adelante para poder controlar la operación.
El puesto de Comando debe moverse a lo largo del eje de Comuni-
caciones, en un puesto en la columna, o por saltos, lo cual no significa que

Página 263 de 360


el Comandante no pueda desplazarse con parte de su E.M. en la ubicación
que mejor aconseja la evolución de la situación táctica.
Una vez iniciada la marcha las variaciones en el dispositivo se cumplen
mediante la detención de columnas, el cambio de rutas, la modificación o
establecimiento de nuevas medidas de control.
Las comunicaciones durante las marchas tácticas se rigen por los
procedimientos de operaciones normales, suplementados, si es necesario,
por instrucciones especiales. Los principales medios empleados son el
mensajero y la radio.
Medios aéreos pueden ser usados para mantener contacto entre las
columnas o informar su llegada a los objetivos de marcha.

7.2.5.3.11 Conducción

La información obtenida a través de las acciones de la Fuerza de cobertura


y Unidades aéreas, aclara gradualmente la situación del Comandante,
cuando la probabilidad de contacto va aumentando, permitiéndole tomar
las decisiones necesarias.

7.2.5.3.12 Acción de la Fuerza de cobertura y de las Vanguardias.

El Comandante de la Fuerza de cobertura recibe informes de la aviación y


de sus propios elementos de seguridad. Las Vanguardias son informadas
permanentemente de la situación.
Los planes del Comandante del grueso son puestos en conocimiento de los
elementos interesados a medida que se conozca la situación enemiga.
Cuando el contacto se vuelve inminente la Vanguardia avanzada en un
frente progresivamente más amplio. Basado en las acciones de la Fuerza
de cobertura, las Vanguardias se empeñan de acuerdo al plan del
Comandante para complementar la acción de la Fuerza de cobertura, o
para ocupar terreno esencial para el despliegue del grueso. Cuando la
Vanguardia no es precedida por una fuerte cobertura, debe alcanzar terreno
que proporcione observación esencial.

7.2.5.3.13 Pasaje a la marcha de aproximación

Cuando la columna está próxima a establecer contacto con el enemigo se


hace necesario abandonar los caminos y transformar la columna de camino
en una formación más extendida y dispersa. Esta transición a la marcha de
aproximación se cumple transformando la columna de marcha en varias
columnas más o menos paralelas. La formación adoptada dependerá de la
misión del método de movimiento, del volumen de las Fuerzas, del

Página 264 de 360


terreno, y del conocimiento que tenga el Comandante de la situación del
Enemigo.
A medida que el fuego Enemigo se haga más intenso, cada una de estas
columnas podrá transformarse en otras menores. El área donde dicho
despliegue comienza depende normalmente, de la efectividad del fuego
Enemigo de largo alcance. Generalmente se puede ahorrar tiempo y bajas
desbordando o eludiendo un despliegue prematuro. Generalmente se
ahorra tiempo en la ejecución del despliegue asignando las rutas más
largas a las Unidades que van a la cabeza de la columna.
A medida que la Unidad se va aproximando al Enemigo las Fuerzas en
contacto buscan agresivamente revelar la posición enemiga. Las zonas de
reunión e itinerarios correspondientes son reconocidos y marcados y la
Artillería ocupa posiciones para proteger el movimiento. El dispositivo
resultante dependerá de los planes de empleo de la Unidad.
Cuando lo anteriormente señalado ocurre durante la noche es necesario
aplicar medidas para el movimiento y combate nocturno.

7.2.5.3.14 Zonas de reunión

Cuando sea practicable, las zonas de reunión deben estar ocultas a la


observación terrestre y aérea del enemigo. Cuando esto no es posible,
deben colocarse más allá del alcance efectivo de la Artillería del enemigo.
Es preferible el terreno que presente defensas normales contra el ataque de
blindados enemigos, así como lugar apropiado para los vehículos y puestos
de observación.
Es deseable que presente fáciles rutas de acceso hacia la posición de
ataque. Las zonas de reunión deben ser de amplitud tal como para no
ofrecer blancos concentrados a la aviación, Artillería o armas de
destrucción masiva enemiga. Deben ser protegidas por armas antitanques o
antiaéreas y destacamentos de seguridad local.

7.2.5.3.15 Terminación del movimiento hacia el contacto

Esta operación termina con la ocupación de zonas de reunión en las cuales


se realizarán los preparativos para el despliegue coordinado de la Fuerza
para el ataque, o según la información disponible sobre el Enemigo, la
misión recibida y las características de los medios, se pasará directamente
al ataque, realizando un ataque fragmentario.

7.2.5.3.16 Movimientos hacia Retaguardia

Página 265 de 360


Como ya fue mencionado anteriormente los Movimientos de Tropas como
operación táctica, comprenderán particularmente movimientos hacia el
contacto y movimientos para alejarse del Enemigo.
De estos últimos, el más típico y comunmente utilizado es la retirada.

7.3 RECONOCIMIENTO

Se denomina Reconocimiento al esfuerzo realizado en campaña para


obtener información respecto al enemigo y la zona de operaciones.
Todo Comandante requiere contar con información para una eficiente
planificación y conducción de las operaciones, por lo que debe
instrumentar un esfuerzo especial y contínuo, para obtener la información
que le permitan un claro y preciso conocimiento del enemigo y de la zona
de operaciones. El reconocimiento, es en todos los casos, para el
Comandante y la Unidad, la mejor medida de seguridad, para evitar la
sorpresa por parte del enemigo.
Las Unidades del Ejército, además de los órganos propios de reconoci-
miento, podrán contar con el apoyo del reconocimiento aéreo y naval,
acorde con la situación.
Los órganos de reconocimiento, en todos los casos, deberán estar
equipados con los medios que requiera el cumplimiento de su misión.

7.3.1 Articulación de los Reconocimientos

7.3.1.2 Reconocimiento lejano (Estratégico)

Es el realizado a nivel T.O. y sirve a su Comandante para la concepción y


planificación de las Operaciones de las GG.UU. Estratégicas.
Es normalmente ejecutado por la Fuerza Aérea, complementado por GG.UU.
de Caballería (Fuerzas de Cobertura), elementos de reconocimiento electrónico
y servicios de inteligencia.
Sus límites son los del T.O. y sus objetivos podrán ser: concentraciones
enemigas, construcción de fortificaciones de campaña, desplazamientos y
ubicación de sus instalaciones, así como el despliegue de sus fuerzas navales y
aéreas.

7.3.1.3 Reconocimiento cercano (Táctico)

Es el realizado para satisfacer las necesidades de inteligencia de las GG.UU.


Tácticas, para la concepción, planificación y conducción de sus operaciones.
Es ejecutado por elementos de reconocimiento de la Fuerza Aérea, por Unida-
des de Caballería, Baterías de Observación de Artillería, Unidades especiales
Página 266 de 360
de Comunicaciones y excepcionalmente unidades de las otras Armas, en cum-
plimiento de órdenes especiales.
Sus límites son los de la G.U. que lo dispone y sus objetivos podrán ser: la
obtención de información detallada sobre concentraciones de tropas del
enemigo, sus desplazamientos, valor, composición y dispositivo, instalaciones
logísticas, trabajos de organización del terreno, situación aérea, medios y
dispositivos de defensa aérea, etc.

7.3.1.4 Reconocimiento de Combate (Inmediato)

Es el realizado para obtener información que proporcione elementos de juicio,


para la conducción de operaciones en escalones inferiores a G.U.
Es ejecutado dentro de cada Unidad por sus medios orgánicos de
reconocimiento; reconocimientos de Ingenieros, PP.OO. de Artillería y
Morteros, patrullas, etc.
Sus objetivos se refieren al contacto inmediato con el enemigo, localización de
tropas, transitabilidad de la red de caminos, etc.
Todas las tropas de las Armas presentes en la zona de combate y
particularmente las que se encuentran en contacto con el enemigo efectuarán
reconocimiento de combate, aún sin órdenes específicas para ello. Todo el
personal debe ser instruído y entrenado para observar por propia iniciativa y en
todo momento el campo de batalla.

7.3.1.5 Fundamentos de las operaciones de reconocimiento.

Las fuerzas terrestres que cumplen misiones de reconocimiento, deben


conducir sus operaciones de acuerdo a ciertas normas que constituyen los
fundamentos de este tipo de operaciones. Dichos fundamentos son:
- Orientarse según el objetivo del informe.
Contrariamente a lo realizado en una misión de seguridad, los elementos
que realizan un reconocimiento deben maniobrar de acuerdo con la
localización y/o el movimiento de los objetivos de los informes requeridos.
Estos objetivos pueden ser tropas enemigas, accidentes del terreno o
localidades.

- Comunicar con rapidez y precisión, todos los informes obtenidos.


Todos los informes, positivos o negativos, deben ser trasmitidos.
Deben ser comunicados tal como fueron obtenidos, no debiendo contener
opiniones y sí hechos.

- Evitar empeñarse decisivamente.


La fuerza de reconocimiento debe tratar de mantener siempre su libertad de
maniobra. Se empeñará en combate solamente cuando ello fuera necesario
Página 267 de 360
para la obtención de los informes deseados o para evitar su destrucción o
captura.

- Mantener el contacto con el enemigo.


El contacto con el enemigo deberá obtenerse lo más adelante y rapidamente
que sea posible pudiendo romperse solamente por orden del escalón
superior.

- Determinar claramente la situación.


Cuando el contacto con el enemigo es establecido o es encontrado un
obstáculo, la situación debe ser clarificada rápidamente. La localización, el
valor, la composición y el dispositivo del enemigo son determinados,
orientando asimismo el esfuerzo en la determinación de los flancos de la
posición enemiga. Acorde a la misión que le ha sido asignada el Coman-
dante deberá decidir rápidamente si debe atacar o desbordar la resistencia
enemiga.

7.3.2 Características del reconocimiento

Las operaciones de reconocimiento presentan las siguientes características:


- Planificación centralizada y ejecución descentralizada.
- Ejecución rápida y agresiva, evitando, en lo posible, la interrupción del
movimiento.
- Máximo de seguridad compatible con la misión, durante el movimiento.
- Enfatizar la utilización de la red de caminos más adecuada.
- Máxima iniciativa de los Comandos subordinados.
- Máximo accionamiento de los órganos de información, debido a la poca
información previa sobre el enemigo.
- Rápida trasmisión al escalón superior de los informes obtenidos.

7.3.3 Determinación del tipo de reconocimiento

El tipo de reconocimiento a ser realizado, es determinado por el Comandante


de una fuerza, después de considerar los siguientes aspectos:
- Naturaleza de los informes deseados; cuando y donde obtenerlos.
- Situación enemiga.
- Características del terreno y condiciones meteorológicas existentes.
- Composición y valor de la fuerza de reconocimiento.
- Tiempo considerado necesario para la obtención de los informes deseados.

7.3.3.1 Clasificación

Página 268 de 360


Los reconocimientos se clasifican en terrestres y aéreos y los terrestres
asimismo se clasifican de acuerdo a las necesidades de inteligencia y a los
procedimientos utilizados en su ejecución.

7.3.3.2 Reconocimiento Terrestre.

7.3.3.2.1 De acuerdo a las necesidades de inteligencia:

- Reconocimiento de Eje.
Es el realizado sobre un eje o ruta, acerca del que se desea información
referente a sus condiciones de transitabilidad y presencia del enemigo.
Comprende, además el terreno adyacente a la Ruta.
- Reconocimiento de Zona.
Es el realizado sobre una zona determinada por límites laterales,
claramente identificables en el terreno y que contiene uno o más caminos
y diferentes accidentes del terreno, sobre los cuales se desea información
detallada, así como sobre la presencia de fuerzas enemigas.
- Reconocimiento de Area.
Es el realizado sobre una región, localidad o área general del terreno,
ubicada al frente, flanco o retaguardia, sobre la que se desea información
detallada de las características del terreno, recursos y fuerzas enemigas
presumiblemente existentes en ella.

7.3.3.2.2 De acuerdo a los procedimientos utilizados en su ejecución.

- Reconocimiento por la observación.


Consiste en desplazarse hasta el objetivo y mediante la observación
directa, obtener el máximo de información sobre él, para lo cual será
necesario abordarlo desde diferentes frentes, incluyendo la penetración en
su interior.
- Reconocimiento en fuerza.
El reconocimiento en fuerza es una operación ofensiva, a un objetivo
limitado, ejecutado por una fuerza importante, a fin de descubrir y
determinar el dispositivo y el valor del enemigo y obtener otras informa-
ciones.
- Reconocimiento por el fuego.
Consiste en efectuar fuego a las probables posiciones enemigas con la
intención de que el mismo revele su presencia por el movimiento o
respondiendo el fuego.
- Reconocimiento electrónico.
Constituye un procedimiento para obtener información sobre el Enemigo
mediante la escucha, análisis del tráfico y radiolocalización de sus
emisiones electrónicas.
Página 269 de 360
7.3.3.3 Reconocimiento Aéreo.

El reconocimiento aéreo consiste en la obtención de informes militares por


medio operativos, eléctricos y fotográficos desde aeronaves. Es conducido
principalmente por las unidades de reconocimiento de la Fuerza Aérea Táctica.
Los elementos navales de reconocimiento aéreo cuando están disponibles
funcionan de manera similar a las unidades de reconocimiento de las FAT. El
Cte. solicita reconocimiento aéreo para asistirlo en el cumplimiento de su
misión y hace el máximo uso de los que tiene disponibles. Asegura que todos
los informes obtenidos por aeronaves, prescindiendo de su misión principal, le
sean comunicados prontamente y a todas las agencias interesadas.
El se asegura que los procedimientos para pedidos, obtención, trasmisión y
proceso de informes sean sistemáticos y rápidos. De los varios tipos de
reconocimiento aéreo, aquellos de principal interés para el Ejército son los
reconocimientos visuales (incluyendo ajuste de artillería) y los reconoci-
mientos fotográficos. Los medios aéreos orgánicos del Ejército complementan
el reconocimiento fotográfico de las Unidades de la Fuerza Aérea.
El reconocimiento aéreo cubre áreas distantes o cercanas que no pueden ser
alcanzadas rápidamente por el reconocimiento terrestre. El reconocimiento
aéreo suplementa y extiende lo ejecutado por las agencias terrestres. Las ope-
raciones de reconocimiento fotográfico o electrónico pueden ser ejecutadas de
día o de noche cuando las condiciones del tiempo lo permiten o en cualquier
otro momento cuando adecuadas ayudas de navegación electrónica están
disponibles. El reconocimiento visual es más efectivo durante el día; es
limitado por la oscuridad, estado del tiempo y la alta velocidad de las
modernas aeronaves.
Todos los tipos de reconocimiento aéreo pueden ser limitados por acciones
enemigas.
Los Cdos. de las fuerzas del Ejército están encargados de realizar la
planificación para satisfacer los pedidos del Ejército de reconocimiento aero-
táctico e indicar la prioridad de las misiones. Sus planes aseguran continua
observación de áreas críticas y cuidadosa integración de los medios de
reconocimiento terrestre y aéreo.
El reconocimiento aéreo visual es empleado sobre objetivos transitorios o
aquellos que requieran rápida información. Los reconocimientos fotográficos
son empleados para obtener informes detallados de objetivos específicos.

Página 270 de 360


7.4. SEGURIDAD

7.4.1 Conceptos generales

La seguridad comprende todas las medidas tomadas por un Comando para


evitar la sorpresa, el espionaje, la observación, el sabotaje, o cualquier forma
de interferencia enemiga, en sus actividades.
Su propósito es preservar el secreto de las operaciones y asegurar la libertad de
acción.
Todas las Unidades son respondables de su propia seguridad, aún aquellas
que se benefician de la seguridad proporcionada por otras fuerzas.
Las medidas de seguridad que sea necesario adoptar, no deben llevar a un
Comando a empeñar, para atenderlas, una cantidad excesiva de medios,
perjudicado así el poder de combate a ser aplicado en la acción principal.

7.4.2 Finalidad

La finalidad de las operaciones de seguridad será cumplir con uno o más de


los siguientes propósitos:
- Prevenir sorpresas.
- Negar información al enemigo.
- Preservar las fuerzas, medios e instalaciones de la acción del enemigo.
- Mantener la propia libertad de acción

7.4.3 Fundamentos

La seguridad es lograda por la efectiva aplicación de los siguientes


fundamentos:

7.4.3.1 Deben hacerse previsiones para la detección de una amenaza con suficiente
tiempo para reaccionar adecuadamente por la anulación, neutralización o
destrucción de la amenaza.

7.4.3.2 Cada Unidad es responsable de su propia seguridad.

7.4.3.3 La seguridad es una parte integral de las operaciones.

7.4.3.4 La inteligencia efectiva contribuye a la seguridad evitando la sorpresa.

7.4.3.5 La contrainteligencia efectiva contribuye a la seguridad asegurando el


secreto.

Página 271 de 360


7.4.3.6 El contra reconocimiento efectivo contribuye a la seguridad impidiendo la
observación.

7.4.3.7 La seguridad es favorecida por la instrucción individual y colectiva, la


conciencia de seguridad particularmente en la diseminación de informes
sobre la base de la necesidad y oportunidad y la contínua disciplina de
seguridad.

7.4.3.8 La actitud favorable hacia nuestras fuerzas por parte de la población civil
facilita la seguridad.

7.4.3.9 Para proporcionar tiempo suficiente para reaccionar, el volumen,


composición y ubicación de las fuerzas de seguridad deben ser
proporcionales a la amenaza.

7.4.3.10 Las medidas de seguridad no deben distraer innecesariamente fuerzas o


esfuerzos para el cumplimiento de la misión.
7.4.4 Seguridad táctica

Es la destinada a resguardar a las tropas, instalaciones y medios involucrados


en cualquier operación táctica, de la acción del enemigo.
Será proporcionada por elementos especialmente designados para el
cumplimiento de misiones específicas, así como por todas las tropas en
campaña.
Es la que se ejecuta durante el desarrollo de cualquiera de las operaciones
tácticas, y las fuerzas de seguridad conformadas a tal fin, podrán ser:
En las operaciones ofensivas: Fuerzas de cobertura, de protección, de
vigilancia y enlace de combate.
En las operaciones defensivas: Fuerzas de cobertura, de seguridad de una
posición defensiva (P.A.G., P.A.C., etc.), de economía de medios y de
vigilancia.
En operaciones retrógradas: Fuerzas de cobertura, de protección y de
vigilancia.
En todas las operaciones de combate, deberán tenerse en cuenta,
especialmente, los aspectos relativos a la seguridad en la zona de retaguardia.

7.4.5 Seguridad en el movimiento

Es la que se ejecuta en el desarrollo de las actividades de descanso, en


cualquiera de sus variantes y estará dada, fundamentalmente, por:
- Sistema de seguridad local.
- Fuerzas de cobertura, protección y vigilancia.
- Defensa Aérea.
Página 272 de 360
7.4.6 Aspectos básicos

Las actividades de las fuerzas de seguridad deben orientarse hacia la


concresión práctica de los siguientes aspectos básicos mediante el empleo
efectivo de todos los recursos disponibles:

7.4.6.1 Proporcionar una alarma oportuna y precisa.


El Comandante de la fuerza asegurada debe contar con una alarma oportuna
sobre la ubicación y los movimientos de las fuerzas enemigas que constituyen
una amenaza para su misión. Mediante esa alarma oportuna y una información
exacta, el Comandante de la fuerza asegurada podrá elegir los medios, el
momento y el lugar para empeñarse contra el Enemigo y desplazar sus fuerzas
para obtener la sorpresa táctica y otras ventajas.

7.4.6.2 Proporcionar espacio y tiempo suficientes a la fuerza asegurada.


Las fuerzas de seguridad operan suficientemente alejadas de la fuerza
asegurada para tener la certeza de que ésta dispondrá de suficiente tiempo y
espacio como para hacer frente o evitar la amenaza enemiga. La distancia entre
una fuerza de seguridad y la fuerza asegurada varía de acuerdo con la misión,
el enemigo, el terreno, las condiciones meteorológicas y fuerzas disponibles.
7.4.6.3 Regularse por la ubicación de la fuerza asegurada.
Una fuerza de seguridad opera de acuerdo con la ubicación y movimiento
de la fuerza asegurada, y se emplaza entre la fuerza amiga y la amenaza que
se conozca o aprecie.

7.4.6.4.1 Ejecutar un reconocimiento continuo.


Todas las fuerzas de seguridad deben ejecutar un reconocimiento contínuo y
agresivo.
Este, proporciona al jefe de la fuerza de seguridad información sobre las
fuerzas enemigas en su zona de responsabilidad y le permite emplazar a su
fuerza en relación con la fuerza asegurada y el enemigo. El reconocimiento
proporciona seguridad contra la sorpresa, manteniendo al Comandante de la
fuerza asegurada informado sobre el Enemigo.

7.4.6.5 Mantener el contacto con el Enemigo.


Una vez que se haya establecido contacto con el enemigo, se lo mantiene
hasta que éste deje de constituir una amenaza para la fuerza asegurada o
hasta que se retire de la zona de responsabilidad asignada.
El contacto no se rompe voluntariamente, a menos que lo ordene el
Comando Superior.
No se debe permitir a las fuerzas enemigas penetrar o infiltrar las fuerzas de
seguridad y sorprender a la fuerza asegurada. Si el Enemigo se desplazara
Página 273 de 360
fuera de la zona de responsabilidad, la Unidad adyacente será informada y
auxiliada en el establecimiento del contacto con el Enemigo.

7.4.7 Planificación y ejecución

7.4.7.1 Planificación

La planificación de las operaciones de seguridad deberá contemplar una


adecuada dosificación de fuerzas, y un dispositivo integrado y flexible que
reaccione eficazmente ante las probables amenazas.
Ante la imposibilidad de cubrir todos los sectores del terreno con fuerzas,
éstas se emplearán sobre las avenidas de aproximación y las zonas llave más
probables de ser utilizadas por el enemigo.
Se preverá cubrir los espacios libres con otros sistemas que aseguren una
alarma oportuna, y proporcionen información inmediata y precisa, (Puestos
de observación, reconocimientos terrestres y aéreos, radares de vigilancia,
sensores remotos, etc.).
En todos los casos, será necesario prever la constitución de una reserva para
reaccionar ante amenazas de pequeñas magnitud que hubieran penetrado el
dispositivo, a fin de restablecer el control de la situación, sin afectar a la
masa de las propias fuerzas.

7.4.7.2 Ejecución
7.4.7.2.1 Medidas de seguridad

Son tanto de naturaleza activa como pasiva, siendo algunas específicas para
determinado tipo de amenaza y otras aplicables para más de un tipo.
Las medidas comunes a más de un tipo de amenaza son:
- reconocimiento y contra-reconocimiento contínuos;
- comunicaciones efectivas para asegurar control adecuado y determinación
de la alarma;
- reacción oportuna y adecuada a la amenaza;
- medidas adicionales (de engaño, camuflaje, dispersión, fortificaciones,
obstáculos, minas, etc.)

7.4.7.2.2 Medidas contra acción terrestre

Lo esencial en la seguridad contra la acción terrestre es un uso adecuado del


terreno.
La seguridad contra el reconocimiento es mantenida por el contra-
reconocimiento, ocultamiento, camuflaje, negación y movimientos.

Página 274 de 360


7.5 PROTECCION DEL AREA DE RETAGUARDIA

El área de retaguardia es el espacio geográfico dentro del área de


responsabilidad de una Unidad o Gran Unidad, comprendido entre su límite
de retaguardia y el límite de retaguardia de sus Unidades subordinadas.
La Protección del Area de Retaguardia (P.A.R.) presenta problemas
diferentes de los existentes en el área avanzada. La misión principal
ejecutada en esta área es el apoyo administrativo.
La finalidad de la protección del área de retaguardia (P.A.R.) es evitar o
minimizar la interferencia del Enemigo o de un fenómeno de la naturaleza
en el apoyo administrativo, con la consiguiente reducción en la eficiencia de
combate de la fuerza.
La protección del área de retaguardia es dividida, funcionalmente, en
Seguridad del Area de Retaguardia (S.A.R.) y Control de Daños (CO.DA).

7.5.1 Seguridad del Area de Retaguardia (SAR)

La Seguridad del Area de Retaguardia es un conjunto de medidas y acciones


ejecutadas en los diversos escalones de la fuerza terrestre, para asegurar el
normal desempeño de las actividades de los elementos de combate, de
apoyo al combate y de apoyo administrativo localizados en las respectivas
áreas de retaguardia.
Se exceptúan de estas medidas las de defensa anti-aérea activa y las
encaradas ante acciones enemigas de tal magnitud que comprometan al
conjunto de la fuerza. Estas serán consideradas como parte de la operación
principal.
La posibilidad de realización por el Enemigo de operaciones aeromóviles,
de guerrilla o de infiltración representan una amenaza permanente para el
Comandante del área de retaguardia.
Las fuerzas que se utilizan para la ejecución de las medidas de SAR normalmente
son:
- Los elementos de apoyo al combate del área de retaguardia.
- Los elementos de combate o de apoyo al combate específicamente designados
para tal fin.

7.5.2 Control de daños (CODA)

Es una actividad que comprende todas las previsiones tomadas antes, durante y
después de ocurrido un ataque enemigo o un fenómeno de la naturaleza, a fin de
restablecer el control, salvar vidas, aislar área peligrosas e iniciar operaciones de
salvamento para evitar pérdidas posteriores.

Página 275 de 360


Las medidas incluyen el empleo de grupos, equipados y entrenados para
establecer el control en el lugar del suceso, evaluar los daños, proporcionar
tratamiento médico y evacuación de emergencia, proveer agua y alimentos de
emergencia, extinguir el fuego, descontaminar el material y realizar el control de
tránsito.

7.6 RELEVO

Cuando las operaciones tácticas se prolongan por períodos extensos, la


conservación de la capacidad de combate, el mantenimiento de la eficacia y las
imposiciones de los planes pueden exigir el relevo de la Unidad. Tales relevos
pueden materializarse en el lugar y en ese caso se denominan relevo en plaza, o
en movimiento, pudiendo ser en ese caso un pasaje de línea o un recogimiento.
Todo relevo representa una mayor cantidad de tropas en el mismo espacio, la que
releva y la relevada. Ello implica aumento de la vulnerabilidad y exige medidas
de seguridad para defenderse de los ataques enemigos.
Durante el relevo se presta especial atención a la defensa A.A. y A.T. del área de
relevo.
Ambas medidas pueden restringirse y aún anularse si fuera necesario cuando la
operación se desarrolle durante la noche o bajo condiciones climáticas y de
terreno que disminuyan e impidan el empleo del arma aérea o de blindados.

7.6.1 Consideraciones básicas

El desarrollo armónico de un relevo se apoya en la estrecha coordinación y


cooperación entre ambas Unidades, desde la preparación de los planes hasta el
término de la operación.
Todo relevo requiere necesariamente coordinar la transferencia del Comando,
entre los comandantes de ambas unidades.
En la planificación y ejecución de todos los tipos de relevo, son comunes las
siguientes consideraciones básicas:
- Proporcionar suficiente tiempo para la planificación y reconocimiento.
- Emitir con tiempo órdenes preparatorias.
- Desarrollar en forma conjunta, planes detallados, sencillos y coordinados entre
todos los niveles de las fuerzas de relevo y relevadas.
- Ejecutar los relevos durante períodos de visibilidad reducida.
- Asegurar el secreto y la sorpresa mediante planes de contrarreconocimiento y
engaño.
- Reducir la vulnerabilidad al ataque enemigo, durante el lapso en que se está
llevando a cabo el relevo, mediante una ejecución eficiente en el más corto
tiempo posible y tomando todas las precauciones.

Página 276 de 360


- Establecer con precisión las medidas de control, en especial el control del
movimiento y los plazos para cada actividad.
- La Unidad relevada debe proporcionar a la de relevo toda la información que
posea con respecto al enemigo y a su zona de responsabilidad.
- La Unidad que releva en todos sus escalones, debe estar familiarizada con los
planes existentes (de fuego, barreras, contraataques, etc.).

7.6.2 Relevo en plaza

Es un procedimiento de relevo mediante el cual una fuerza o parte de ella es


remplazada en la misma zona donde opera, por otra fuerza. Se utiliza en la
defensa y a veces en el ataque.
La responsabilidad sobre la zona donde se esté operando y la misión de la fuerza
saliente es asumida por la fuerza entrante.
La transferencia de la responsabilidad de comando debe estar claramente
establecida; normalmente se ajusta a lo siguiente:
- Hasta que se transfiera la responsabilidad de comando, el Comandante de la
fuerza saliente retiene la responsabilidad sobre todos los elementos
dependientes de la fuerza entrante que hayan completado su parte en el relevo.
- Durante este período, las fuerzas entrantes deben aceptar y ajustarse a los
planes de la fuerza saliente.
- El Comandante entrante asume la responsabilidad de comando cuando sus
fuerzas han relevado a las Unidades que se encontraban en el primer escalón, y
se han establecido adecuados medios de comunicaciones.
- Al recibir la responsabilidad de comando, el Comandante entrante asume el
control operacional sobre todos los elementos de la fuerza saliente que no
hayan sido relevados.
- A fin de contar durante la ejecución del relevo en plaza con el mayor poder
defensivo el mismo se lleva a cabo normalmente por etapas, ya sea desde
retaguardia hacia vanguardia o viceversa. No obstante, el Comandante que
ordena el relevo puede especificar cualquier otro que convenga a la situación
que se está viviendo.

Página 277 de 360


7.6.3 Pasaje de línea

Las operaciones previas al combate ofensivo pueden incluir el relevo de


Unidades en contacto por la ejecución de un relevo en plaza o un pasaje de línea.
Una u otra de estas operaciones puede ser conveniente a fin de mantener el
ímpetu del ataque con tropas frescas, para cambiar la dirección del ataque,
explotar una debilidad en la posición enemiga o iniciar una ofensiva en un frente
que está estabilizado. El pasaje de línea es mas frecuentemente asociado con
operaciones ofensivas que el relevo en plaza.
La tarea principal comprendida en un pasaje de línea es la preparación para
continuar el ataque. Cuando las Unidades involucradas son de infantería, el
nuevo Comandante normalmente asumirá la responsabilidad para la zona de
acción con el comienzo de la operación de ataque. Normalmente, el intervalo de
tiempo entre el comienzo del pasaje de línea y la iniciación del ataque es breve.
Existe poco tiempo disponible antes del ataque para el reajuste de tropas por el
Comandante de la Unidad sobrepasada.
Las órdenes preparatorias incluyen la hora aproximada que el pasaje de línea
comienza, instrucciones relativas para el traslado de responsabilidad por la zona
Página 278 de 360
de acción, las zonas en las cuales han de operar las Unidades que relevan, instruc-
ciones relativas al refuerzo de medios a la Unidad que pasa por la Unidad
sobrepasada y las restricciones impuestas sobre el efectivo de los destacamentos
de reconocimientos, rutas y horas de operación.
Se emiten órdenes fragmentarias para diseminación de informes adicionales
disponibles.

7.6.4 Planificación

En este tipo de acción, así como en el recogimiento, se destaca aún más la


necesidad de medidas de coordinación lo más detalladas posibles.
Es importante que el Comandante y Estado Mayor de la Unidad que pasa
ejecuten un reconocimiento personal y celebren una conferencia con el
Comandante y Estado Mayor de la Unidad sobrepasada. Se formula un plan
común y se emiten órdenes separadas que cubran el movimiento de ambas
Unidades.
En la preparación del plan han de considerarse el terreno, las posibilidades del
Enemigo, las restricciones impuestas por el escalón superior y la prioridad para la
Unidad que pasa, acorde con un mínimo de requerimientos para la Unidad
sobrepasada. El plan tiene que ser flexible respecto a las horas e itinerarios de
Página 279 de 360
movimiento. El volumen de la Unidad considerada y la velocidad con que haya
de conducirse el pasaje influirán en el grado de detalle del plan.
A la Unidad que pasa le deben ser dados todos los registros de los campos
minados y los Comandantes de ambas Unidades deben asegurar intercambio
personal de informes detallados sobre sendas, brechas, registro y tipo de minas
comprendidos.
De acuerdo con las órdenes del Comando Superior, los Comandantes y Estados
Mayores de ambas Unidades se ponen de acuerdo respecto a los detalles sobre
cambio de comando, guías, uso de caminos, al apoyo de fuego que ha de
suministrar la Unidad sobrepasada, medidas de seguridad, transferencia del
sistema de comunicaciones existente y asuntos administrativos. Las Unidades a
ser sobrepasadas suministran los guías siempre que sea posible, a Unidades
menores hasta el nivel Sección inclusive.

7.6.5 Ejecución

Para la ejecución del pasaje de línea, la Unidad que releva escoge las posiciones
mantenidas ligeramente y los claros en la línea del frente de la Unidad relevada
para su máxima utilización en su esquema de maniobra.
La línea de partida elegida dependerá del momento de ejecución del pasaje. En
un pasaje nocturno será la línea mantenida por los elemento más adelantados de
la Unidad relevada.
De día si el terreno lo permite, puede ser preferible una línea de partida ubicada
entre los elementos avanzados a ser sobrepasados y una posición cubierta a
retaguardia de los mismos.
Es fundamental la adopción de medidas tendientes a preservar el secreto de la
operación, ya que la revelación de que el pasaje se esta realizando, con certeza
provocará la reacción enemiga en un momento en que las fuerzas son sumamente
vulnerables por la densidad de elementos en el área.
Ayuda a evitar una concentración excesiva, el desplazamiento hacia retaguardia,
momentos antes de que se inicie el pasaje, de la reserva de la fuerza a ser
relevada. La orden para ello, será impartida normalmente por el Comando que
ordena el relevo.
Durante el pasaje de línea, la Artillería de Campaña mantiene sus fuegos
normales, pero está preparada para ejecutar contrabatería y fuegos de protección
a lo largo del frente en caso de ataque por el Enemigo. Las Unidades en contacto
y la Artillería de la Unidad a ser sobrepasada permanecen en posición y propor-
cionan todos los fuegos posibles para apoyar a la Unidad que pasa.
Cuando el ataque ha progresado suficientemente lejos como para impedir bajas
indebidas a las tropas sobrepasadas, ellas son reunidas y organizadas para su
empleo posterior.

7.6.6 Pasaje de blindados a través de Infantería


Página 280 de 360
El pasaje de una Gran Unidad Blindada a través de un elemento de Infantería
ocurrirá frecuentemente después de la ruptura de una posición organizada por la
Infantería.
En cualquier caso, el pasaje de línea de blindados a través de Infantería, involucra
ciertas diferencias inherentes a las características del blindado. Normalmente el
traslado de la responsabilidad de comando en la zona involucrada es innecesario
en vista de las diferentes misiones de las Unidades. Es esencial una estrecha
coordinación entre los Comandantes respectivos. Deben intercambiarse oficiales
de enlace entre las Unidades de Infantería y de Blindados.
En vista de la extensión de las columnas blindadas, deben tomarse todas las
medidas para facilitar su pasaje. Debe realizarse una coordinación detallada entre
las Unidades participantes incluyendo la coordinación de fuegos. La prioridad de
rutas es normalmente para los blindados, sin entorpecer el tránsito esencial para
el apoyo de otras Unidades. Las Unidades de Infantería en la zona pueden tener
que reajustar sus dispositivos para facilitar el pasaje. Generalmente a causa de la
dificultad para operar blindados de noche, la operación se ejecuta a la luz del día
sobre frentes relativamente estrechos.

7.6.7 Recogimiento

Se ejecuta mediante un repliegue a través de una posición de retaguardia. Una


fuerza que se repliega sobrepasa a otra que la recibe y que, además asume su
responsabilidad de combate.
Normalmente, este procedimiento es utilizado en las operaciones defensivas o
retrógradas.
La fuerza que se repliega puede ejecutar el relevo por recogimiento, estando o no
bajo la presión del Enemigo.
Los procedimientos de planificación son similares a los determinados para un
relevo en plaza.
Durante la ejecución, las fuerzas que realizan el repliegue no utiliza zonas de
reunión delante o en la zona defensiva de primera línea de la posición que la
recoge, ya que con ello pueden ocasionar una inaceptable densidad de tropas. A
su vez, la fuerza que ejecuta el recogimiento designa a la que se repliega: Guías,
zonas de pasaje, caminos y prioridades para su utilización y la protege con sus
fuegos cuando entra bajo sus alcances.
El control del tránsito está a cargo de la fuerza que se repliega, hasta que entre
dentro de la zona de responsabilidad de la fuerza que realiza el recogimiento.
En lo que respecta a transferencia de la responsabilidad de comando, el
Comandante de la fuerza que se encuentra emplazada para recibir a otra fuerza
que se repliega a través de su posición, puede asumir la responsabilidad para el
control del sector en un determinado momento en el tiempo o durante una fase de
la operación, como ser por ejemplo el cruce de una determinada línea de
Página 281 de 360
coordinación por la fuerza que repliega hacia retaguardia. Esta transferencia de
responsabilidad requiere que el Comandante que la asume ejerza el control
operacional sobre aquellos elementos de la otra fuerza que permanezcan en
contacto con el Enemigo, en el momento en que la transferencia se produzca.

Página 282 de 360


7.7 ENLACE

7.7.1 Generalidades

Enlace es una operación complementaria consistente en el encuentro de dos


unidades amigas durante la ejecución de operaciones y en la cual existe un grado
de urgencia debido a la situación en que se encuentra una de ellas. Se puede
producir en las siguientes operaciones: aerolanzadas, aerotransportadas, anfibias,
de relevo, de refuerzo de una unidad aislada o rodeada y de convergencia de
fuerzas separadas.
Las unidades que se desplazan para realizar esta operación lo hacen siguiendo los
procedimientos normales de un movimiento hacia el contacto, intensificando las
medidas de seguridad, coordinación y control, a medida que el contacto se hace
inminente para evitar combates entre fuerzas amigas. Normalmente una de las
fuerzas que participan en esta operación está estacionaria.

7.7.2 Planificación

Las operaciones de enlace deben ser planificadas con la debida anticipación para
permitir a las unidades que la realizan, intercambiar la información disponible y
poder integrar sus planes oportunamente.
En la planificación deben considerarse los siguientes aspectos:
- Relaciones y responsabilidades de comando: considerando que normalmente
estas operaciones se realizan fuera del enlace del comando y control del
Comandante común que las ordena, es indispensable que éste establezca las
relaciones de comando y que nombre un Comando único para después de la
reunión.
- Enlaces: son necesarios entre los comandos y sus Estados Mayores.
- Coordinación de los planes: estos deben establecer adecuadas medidas de
control, seleccionándose los puntos de enlace en los cuales se establecerá el
contacto físico entre las dos fuerzas.
Las fuerzas que ocupan los puntos de enlace así como las tropas de la unidad en
movimiento, deben conocer perfectamente los procedimientos para identificación
mutua.
Las tropas que ocupan los puntos de enlace proporcionan facilidades para el
desplazamiento de las fuerzas en movimiento.
Medidas de coordinación de fuegos: fundamentales a fin de permitir el enlace sin
inconvenientes provenientes de la coincidencia de zonas de acción.
Acciones que seguirán al enlace: de acuerdo a lo dispuesto por el comando
común de ambas fuerzas, estacionaría y en movimiento, el comandante que
asume el comando total después del enlace podrá:
- continuar con la defensa del área.
Página 283 de 360
- continuar el ataque hacia objetivos más lejanos.
Por su parte la fuerza en movimiento podrá:
- pasar a través o alrededor de la fuerza estacionaria.
- continuar el ataque en coordinación con la fuerza estacionaria.

7.7.3 Ejecución

La ejecución del enlace es similar a un movimiento hacia el contacto y un


recogimiento, respectivamente para la fuerza en movimiento y la fuerza
estacionaria.
El momento crítico de la ejecución es el del enlace y reunión, en que como
consecuencia de ello se produce una concentración de tropas y equipo que
incrementan la vulnerabilidad. Para reducir este riesgo es conveniente que la
fuerza en movimiento pase alrededor y no a través de la fuerza estacionaría, y
que los objetivos que debe conquistar se encuentren más allá del área ocupada
por esta fuerza.

7.8 INFILTRACION

La infiltración es una operación complementaria mediante la cual se busca ubicar


en la retaguardia enemiga, un elemento que eluda sus medidas de seguridad, para
la ejecución de una operación o tareas específicas.
Una infiltración puede ejecutarse para una o más de las siguientes finalidades:
- hostigar al enemigo.
- obtener información.
- efectuar adquisición de blancos y detección del fuego.
- conquistar objetivos en la retaguardia enemiga que restringan el movimiento
de reservas importantes o aíslen o destruyan los medios de apoyo de fuego,
comandos y comunicaciones o instalaciones logísticas críticas.
- contribuír a la obtención de la sorpresa.

Página 284 de 360


7.8.1 Planificación y Ejecución

La infiltración es de especial aplicación, frente a una fuerza enemiga muy


dispersa o con extensos claros en el dispositivo.
Estas circunstancias se presentarán frecuentemente en nuestros probables teatros
de operaciones, dada la amplitud y características particulares de los mismos, así
como los efectivos de las fuerzas que actuarán en ellos. Ello posibilitará infiltrar
tanto unidades a pie, como mecanizadas, aeromóviles o anfibias.
Los objetivos que se asignen a la fuerza de infiltración, sea cual fuera el tipo de
operación que apoya o la circunstancia en que se realiza, deberán contribuir al
cumplimiento de la misión del escalón superior y evitarán conducir a un debili-
tamiento peligroso de sus efectivos.
Frente a un enemigo previsor, que disponga de equipos y medios especiales de
detección de movimientos, será necesario el empleo de cuidadosas medidas de

Página 285 de 360


engaño como también la utilización de medidas de guerra electrónica y
seguridad.
Favorecerá la infiltración, la utilización de terrenos que limiten la observación y
la vigilancia enemiga, la no utilización por el enemigo de equipos y medios
especiales de detección, como así también las horas de oscuridad, la poca
visibilidad y el empleo como vías de infiltración de aquellas avenidas de
aproximación que contrasten con las tradicionales de toda operación.
La fuerza de infiltración, que podrá estar constituida desde individuos aislados,
hasta unidades completas, avanzará hasta alcanzar zonas de reunión previamente
determinadas en la retaguardia enemiga.
Este movimiento, lento por naturaleza, tratará de evitar ser descubierto
recurriendo para ello a toda clase de procedimientos y medidas para mantener el
secreto. Asimismo evitará todo combate innecesario que ponga en peligro el
éxito de la operación.
El empleo de elementos aeromóviles podrá aumentar considerablemente la
rapidez del movimiento.
Cuando se ejecute una infiltración en apoyo a una operación ofensiva, será
necesario una detallada planificación y una coordinada y minuciosa ejecución a
fin de lograr las mayores seguridades y posibilidades de éxito.
Lo expuesto precedentemente, no será la norma en todas las circunstancias y tipo
de operaciones tácticas, debido a que no siempre se dispondrá del tiempo
necesario para ello. Además, su ejecución no en todos los casos podrá estar
coordinada con la operación principal.
En este tipo de operación, una fuerza propia sobrepasada por el enemigo y que
haya quedado en su retaguardia debido a lo extendido de los espacios donde se
opera, o porque existe una planificación previa podrá actuar como una fuerza
infiltrada.
Ello podrá producirse por la excesiva amplitud del ambiente donde se opera o
bien aprovechado un error en la conducción del enemigo, que no controló a la
fuerza sobrepasada.

7.9 INTERDICCION

La interdicción, es una operación complementaria que tiene por finalidad negar o


impedir al enemigo, el uso de áreas o rutas, restringiendo sus desplazamientos e
interfiriendo su acción de comando y control, hacia adentro, afuera o dentro de la
zona o ruta interferida. La interdicción es lograda mediante fuegos, tropas,
guerrillas, operaciones aéreas, barreras, operaciones de negación y sabotaje. Los
agentes químicos, biológicos y nucleares, son medios eficaces para lograr
interdicción. La interdicción estará centralizada en un plan, pero sus medidas
ejecutivas deberán estar incluídas en los planes descentralizados corres-
pondientes.
Página 286 de 360
La interdicción requiere una planificación completa, una información oportuna
y precisa y una ejecución coordinada. La continua vigilancia de la zona de
interdicción deberá ser mantenida para lograr la efectividad necesaria y para
descubrir nuevos blancos. Se deberá esperar que el enemigo se mantenga alerta
y adopte medidas tendientes a impedir la interdicción.
La disponibilidad de recursos y la capacidad de los sistemas de armas,
raramente permitirán una completa interdicción, fundamentalmente en zonas
muy extensas.
La utilización de los recursos para este fin será enfrentada con todos los
requerimientos de la misión a efectos de determinar el grado de interdicción que
se estará en condiciones de lograr.
Los planes de interdicción serán preparados para asegurar una contribución
oportuna al cumplimiento de la misión y para concretar la actividad de
interdicción sobre los blancos que puedan influir significativamente.

Página 287 de 360


Cada escalón, en forma sucesiva, deberá efectuar coordinada y
concurrentemente, la interdicción dentro de sus respectivos alcances

7.10 INCURSION

7.10.1 Conceptos Generales

La incursión es una operación complementaria de carácter ofensivo que ejecuta


una fuerza, para cumplir un propósito específico dentro de la posición enemiga,
sin intención de retener terreno.
Podrá llevarse a cabo, contando o no con el apoyo de la fuerza a la cual
pertenece el elemento que la ejecute.
Pora lograr efectos significativos, una incursión debera ejecutarse sobre
objetivos enemigos (personal, infraestructura, medios, etc.) cuya pérdida o
destrucción afecte decisivamente sus capacidades.
El éxito en este tipo de operaciones estará estrechamente relacionado con:
- La elección del objetivo.
- La planificación detallada y flexible de la operación.
- La disponibilidad de los apoyos necesarios.
La incursión se llevará a cabo poniendo en práctica una serie de operaciones y
procedimientos de combate que permitan colocar a la fuerza en proximidades de
su objetivo, con el menor desgaste y en la situación más ventajosa posible.
La acción en el objetivo se concretará mediante la ejecución de un ataque, un
golpe de mano, una emboscada u otros procedimientos ofensivos.
Las incursiones podrán ejecutarse a pie o empleando distintos medios, tales
como vehículos motorizados, mecanizados, blindados, aeronaves o
embarcaciones pertenecientes a la Fuerza Armada, o empleando cualquier
combinación de tales medios.
Los elementos incursores serán particularmente vulnerables cuando fueren
descubiertos prematuramente o cuando se enfrenten con fuerzas dotadas de
mayor movilidad, rapidez, y tecnológicamente superiores.

Página 288 de 360


La incursión, si bien podrá ser conducida y ejecutada en cualquier nivel de con-
ducción, cuando se realice en la profundidad del territorio enemigo tendrá
caracteristicas particulares y podrá ser de carácter conjunto o específico.

7.10.2 Finalidad

La finalidad de una incursión será cumplir uno o más de los siguientes


propósitos:
- Destruir medios de comando, de combate o logísticos del enemigo.
- Destruir instalaciones o materiales específicos del enemigo.
- Capturar personal, material o documentación.
- Recuperar personal capturado por el enemigo.
Página 289 de 360
- Engañar y hostigar al enemigo.
- Apoyar operaciones no convencionales.
- Obtener información.
- Complementar la destrucción causada por fuegos masivos.

Adicionalmente, a través de los propósitos enunciados, la ejecución de una


incursión contribuirá a crear inseguridad en la zona de retaguardia y a marcar
una superioridad sicológica sobre los órganos de comando y las tropas
enemigas, afectando su moral y espíritu de lucha.

7.10.3 Clasificación

En función de la distancia al objetivo, las incursiones se clasifican en:

7.10.3.1 Incursiones de largo alcance:

Son las ejecutadas sobre objetivos ubicados en la profundidad del territorio


controlado por el enemigo, más alla de las distancias de apoyo de las propias
fuerzas terrestres.
Podrán contar únicamente con apoyo aéreo (aviones y/o helicópteros). naval
y/o de fuerzas irregulares que actúen en la profundidad.

7.10.3.2 Incursiones de corto alcance:

Son las ejecutadas sobre objetivos que se encuentran dentro de la distancia de


apoyo de las propias fuerzas terrestres.

7.10.4 Planificación y Ejecución

7.10.4.1 Planificación

Las incursiones podrán ser ordenadas por cualquier nivel de comando, en


función de la finalidad a lograr y del alcance de la operación.
Deberán planificarse a partir de la concepción de la acción en el objetivo
(parte esencial de la operación que materializa el cumplimiento de la misión).

Página 290 de 360


Una vez concretada tal parte del plan, ello permitirá concebir el resto de la
operación (aproximación al objetivo y posterior repliegue y/o recuperación de
la fuerza).
Por tratarse de una operación que se desarrolla en territorio controlado por el
enemigo, en el que la fuerza incursora actúa en gran medida aislada de otras
fuerzas propias y en relativa inferioridad, el conocimiento del enemigo (aún
en sus menores detalles) será esencial, adquiriendo mayor importancia la
zona objetivo, cuya situación deberá ser conocida en forma precisa y
actualizada.
Todos lo apoyos deberán preverse para estar en aptitud de proporcionar el
adecuado poder de combate a la fuerza incursora, ya sea para que se desplace
desde el inicio con los medios necesarios, o bien para recibir tales medios en
forma total o parcial en el lugar, oportunidad y forma requeridos.
Deberán planificarse fuegos de apoyo y fuegos de interdicción para el apoyo
de la fuerza incursora durante toda la operación. Dicho apoyo de fuego podrá

Página 291 de 360


ser proporcionado por la Artillería de las propias fuerzas en contacto, por
aviones y/o helicópteros con misiones de apoyo de fuego cercano.
Los fuegos de interdicción aislarán el objetivo, impedirán, o limitarán los
contraataques y mantendrán abierto o despejado el camino de repliegue.
Cuando se busque lograr la sorpresa, los fuegos serán planificados pero se
ejecutarán solo a requerimiento de la fuerza incursora.
Con frecuencia, las fuerzas amigas que realicen operaciones no
convencionales en territorio enemigo podrán colaborar en las incursiones
profundas, preparando zonas de aterrizaje y proporcionando seguridad
durante su ejecución, proveyendo guías, realizando operaciones de engaño y
aislando la zona en la cual se ha de realizar la incursión.
Cuando sea posible la fuerza incursora practicará la operación en un terreno
parecido al que actuará, y en condiciones similares a las que se espera tener
durante la ejecución de la incursión.

7.10.4.2 Ejecución

La acción será conducida y ejecutada en forma sorpresiva, rápida y


contundente, lo que potenciará el poder de combate del incursor,
disminuyendo sensiblemente la capacidad de reacción del enemigo.
Normalmente, la operación se iniciará con una infiltración hasta la
profundidad del dispositivo o del territorio bajo control del enemigo.
Los medios aéreos otorgarán a la fuerza incursora mayor rapidez y alcance en
sus desplazamientos, evitarán el desgaste y el prolongado tiempo de
exposición a la acción del enemigo proporcionando, a su vez, un alto grado
de flexibilidad de empleo (particularmente con helicópteros). La utilización
de tales medios se verá restringida solo en condiciones meteorológicas
adversas, o cuando el enemigo disponga de superioridad aérea.
El desplazamiento hacia y desde el objetivo podrá ejecutarse en vehículos de
todo tipo, adecuados al terreno y a la fuerza que los emplea, o bien con
embarcaciones de superficie y subacuáticas en áreas fluviales lacustres y
marítimas. Los medios submarinos brindarán uno de los medios más
apropiados para el desplazamiento en cubierto de pequeñas fracciones a gran
distancia.
La fuerza incursora que se desprenda de sus medios no orgánicos de
desplazamiento para la acción en el objetivo y deba reunirse con ellos u otros
medios de transporte, ejecutará una conexión de características muy
particulares, que deberá preverse con suficiente detalle y con alternativas que
aseguren su concreción.

7.11 NEGACION

Página 292 de 360


Las operaciones de negación constituyen una operación complementaria que
tiene por propósito fundamental, prevenir u obstaculizar la ocupación
enemiga, o la utilización por éste de áreas y medios de valor táctico o
estratégico, mediante uso de remociones, destrucciones, contaminaciones o
construcción de obstáculos.
Pueden ser empleadas en apoyo tanto a operaciones ofensivas como
defensivas.
Dependiendo de la política aplicable, una operación de negación puede variar
en alcance, desde "Tierra arrasada" a una "Limitación temporal" del
aprovechamiento por el enemigo de un área o medios determinados.
Los procedimientos y medios a utilizar para concretar la negación pueden ser
entre otros, los siguientes: inundaciones, medios mecánicos, fuego,
demoliciones y eventualmente la instalación de cierto tipo de obstáculos. El
planeamiento y ejecución de una operación de negación es responsabilidad
del Comandante del TO.

7.11.1 Planificación

La planificación de una operación de negación se basa generalmente en las


políticas y planes generales previstos y confeccionados durante época de paz.
Estos, tendrán como objetivo seleccionar las zonas, sistemas logísticos,
industriales y de comunicaciones que puedan resultar vitales para el accionar
del adversario, y determinar la forma, grado de destrucción y medios a
emplear.
Se deben tener en cuenta, entre otros, los siguientes factores:

7.11.1.1 características del T.O. y las ventajas y desventajas que supone ejecutar una
operación de negación a la luz del probable tiempo de duración de las
operaciones.

7.11.1.2 Efectos sobre la población civil.

7.11.1.3 Oportunidad de ejecución teniendo en cuenta las necesidades de las propias


tropas.

7.11.1.4 Disponibilidad de tiempo, mano de obra, materiales y equipo.


La responsabilidad de la preparación y ejecución de partes específicos de un
plan de negación, normalmente puede ser delegada, a través del canal de
comando, al nivel que la posibilidad de la fuerza lo permita.
El plan de negación normalmente constituye un anexo del plan de
operaciones de las fuerzas terrestres del T.O.

7.11.2 Ejecución
Página 293 de 360
De acuerdo al tipo e importancia de los objetivos de negación el Comandante
de las fuerzas terrestres del T.O. podrá determinar los que quedarán bajo su
control y los que serán responsabilidad de las Grandes Unidades.
La orden para la destrucción de los objetivos de negación será impartida a
través de la cadena de comando, reteniendo el Comando que lo previó, la
autoridad para obtener su ejecución.
Esta autoridad podrá ser delegada teniendo en cuenta la implicancia que
puede tener sobre la misión del ejecutor y su capacidad para realizarla.
La ejecución de la negación podrá desarrollarse mediante los métodos
básicos de evacuación, destrucción y contaminación.
Evacuación - Normalmente impondrá el retiro del total de elementos
seleccionados y de sus repuestos existentes en la zona, para negárselos a un
enemigo que no cuenta con ellos o que tenga serias dificultades para su
reposición; será difícil la realización de una evacuación masiva o total de
elementos.
Destrucción - Podrá realizarse mediante el empleo del fuego, agua, medios
mecánicos y explosivos. De todos ellos, el último será el método más común
por su alta efectividad y rapidez.
Contaminación - Normalmente, este método servirá para aumentar los
efectos de una operación de negación.
En general podrán ser objetivos de una operación de negación: zonas del
terreno, facilidades críticas para el enemigo, materiales y personal
(evacuación).

7.12 ENGAÑO

El combate de engaño es una operación complementaria que procura,


mediante la ejecución de actividades de distorsión y falsificación de indicios,
hacer incurrir al enemigo en conclusiones erróneas.
La finalidad de esta operación será lograr engañar al enemigo sobre los
verdaderos dispositivos, posibilidades e intenciones de la propia fuerza y
obligarlo a reaccionar de manera ventajosa para las tropas propias.

7.12.1 Planificación

Cada plan de combate de engaño, debe ser aprobado por el escalón superior
el que efectuará la necesaria coordinación para asegurar que el plan no
comprometa otros planes de engaño o planes de operaciones del Comando
superior o unidades adyacentes. Los Comandantes coordinarán y son
responsables de las operaciones de combate de engaño de sus unidades.

Página 294 de 360


Los principios que guían la formulación de un plan de combate de engaño,
están estrechamente unidos a los principios de todo el plan táctico. Los
siguientes elementos deben ser considerados:

El plan de combate de engaño debe estar basado y debe apoyar el plan táctico
principal; ambos deben ser desarrollados en forma conjunta. El empleo de las
fuerzas de engaño, debe ser coordinado con el de la fuerza real de la
operación, de manera que las operaciones de las dos produzcan el efecto de
engaño deseado.
El plan de combate de engaño, en caso de ser exitoso, debe facilitar el plan
real y en caso de fracaso no debe exponerlo.
Cualquier plan de engaño contiene un grado de riesgo calculado éste, debe
ser evaluado con respecto al plan real y aceptado cuando el plan de engaño es
adoptado. Un plan real alternativo es a menudo un buen plan de engaño. El
planificador debe contar con suficiente flexibilidad para explotar éxitos
inesperados logrados como resultado de un plan de engaño.
Todas las operaciones de engaño deben ser apoyadas y coordinadas con
medidas de contra información para ocultar nuestras actividades al enemigo.
La información enemiga debe dar oportunidad y tiempo al desarrollo del
cuadro de engaño, tal como ha sido planteado. Se debe asegurar el tiempo
necesario para permitir que el enemigo traslade sus tropas o su reservas en la
dirección deseada.
El método o medios debe ser constantemente variados, el empleo repetido de
un método particular, o de determinados medios, puede anular su utilidad.
Un plan de engaño debe ser ejecutado de una manera realista y natural y se
debe ajustar lógicamente dentro de la situación. Los métodos imperfectos son
rápidamente expuestos. Un buen engaño a menudo cuesta. El gasto de los
medios, debe ser proporcional al fin deseado. A causa de su naturaleza, el
conocimiento de los planes y operaciones deben ser limitados a aquellos
cuyas funciones lo requieran.
El engaño es tan bueno como su seguridad, sin una estricta seguridad, todos
los proyectos, aún los más pequeños, están condenados al fracaso desde su
puesta en marcha. Debe evitarse su mención en las órdenes de operaciones.
Las siguientes definiciones son aplicables:
- Historia del engaño: una concisa mención de lo que el Comandante desea
que el enemigo crea.
- Objetivo del engaño: la deseada reacción enemiga al plan de engaño.
- Plan de engaño: el plan empleado para apoyar por engaño a las operaciones.

7.12.2 Ejecución

Las medidas activas requerirán el concurso de elementos de las armas para su


concreción.
Página 295 de 360
El arma de Ingenieros, especialmente, dispone de los medios idóneos para
encarar actividades de importancia que faciliten el desarrollo de una
operación de engaño (construcción de obras simuladas, movimientos y
trabajos a cargo de máquinas de gran rendimiento que simulen la
adaptabilidad de una zona y su red caminera al movimiento y accionar futuro
de grandes efectivos, etc.).
Las unidades de ingenieros de combate y de construcciones, serán las más
aptas para la realización de las citadas tareas. La utilización de equipos y
artificios simulados desconcertarán al enemigo sobre la magnitud, el tipo y
las intenciones de la propia fuerza.
El arma de comunicaciones participará permanentemente en las operaciones
de engaño que se realicen.
Dado que ciertas emisiones radioeléctricas de comunicaciones son de fácil
captación y radiolocalización por parte del enemigo, su empleo limitará la
ocultación de las operaciones que realice la propia tropa. Esto llevará en
ciertas oportunidades, a ordenar "silencio de radio"; pero de la misma
manera, por medio de la realización de tráfico simulado o transgresiones a las
normas de seguridad con información u órdenes falsas se ocultan las
operaciones.
Asimismo se podrán realizar como parte del plan de engaño, operaciones
electrónicas ofensivas, mediante las cuales se participará en las redes
radioeléctricas del enemigo, simulando pertenecer a sus efectivos y tratando
de inducirlo a error por medio de noticias y órdenes falsas.
La artillería de campaña, podrá participar activamente en el desarrollo del
engaño por medio del desplazamiento de sus elementos y ejecución de sus
fuegos desde distintas posiciones, cambio de volumen y cadencia de los
mismos, intervención en la formación de obstáculos químicos (humo, etc.).
La artillería antiaérea podrá contribuir, en determinadas ocasiones,
incrementando los fuegos de la artillería de campaña, desplazando sus
elementos a posiciones simuladas, etc.
El camuflaje cubrirá la existencia y emplazamiento de las fuerzas,
organización del terreno, armas, instalaciones, etc., y permitirá atraer los
fuegos del enemigo sobre las ubicaciones y construcciones simuladas,
preparadas para tal fin.
Los elementos motorizados, mecanizados y blindados serán particularmente
aptos para intervenir en el desarrollo del plan de engaño. Podrán hacerlo
mediante falsos desplazamientos, movimientos de cargas, transporte de
personal, etc., que llevan al enemigo a ejecutar erróneas apreciaciones sobre
el futuro proceder de la fuerza.
Una operación de engaño podrá desarrollarse con la cooperación de la
ejecución de incursiones, tretas, demostraciones, operaciones simuladas y
ataques de fijación que desorienten al enemigo sobre la real intención del
comando a cargo de la operación.
Página 296 de 360
Deberá entenderse por:

7.12.2.1 Incursión

Operación de carácter ofensivo, ejecutada para cumplir un propósito


específico dentro del dispositivo enemigo, sin intenciones de retener el
terreno ocupado.

7.12.2.2 Treta (o ardid)

Medidas para lograr el engaño. Se emplea en todos los niveles de comando.

Página 297 de 360


7.12.2.3 Demostración

Acción proyectada para engañar al enemigo por medio de una exhibición


de fuerzas en una zona donde no se está buscando la decisión. Difiere de
otras operaciones en que no se opera efectivamente contra el enemigo.
Será ideal integrar este tipo de acción con otras medidas de engaño por
cuanto por sí sola, no será un medio muy adecuado para obligar al
enemigo a reaccionar según la conveniencia de quien la ejecuta.
Este arbitrio será particularmente eficaz cuando un obstáculo (un curso de
agua, por ejemplo) se interponga entre ambas fuerzas adversarias. Las
tropas y medios de ingenieros tendrán destacada participación en la
ejecución de las demostraciones.
Para concretar su intervención, el Comandante deberá balancear dos
importantes factores que normalmente afectan a dicha ejecución.

7.12.2.3.1 La gravitación de los beneficios que se pueden lograr con los trabajos de
demostración con respecto al total de la operación a desarrollar.

7.12.2.3.2 La normal escasez de tropas y medios del arma de ingenieros a


disposición.

7.12.2.4 Operación Simulada

Cualquier tipo de operación que sea planificada y ejecutada para engañar


al enemigo sobre su verdadera finalidad, tipo de la misma o verdadero
esfuerzo principal y buscar que reaccione de una manera predeterminada
por la propia fuerza.
Como ejemplos podemos citar un ataque simulado, (o finta), o un pasaje
de curso de agua simulado; en ambos se opera con objetivos limitados que
tratan de engañar al enemigo sobre la verdadera ubicación del ataque
principal y a su vez brindar facilidades a éste.

7.12.2.5 Ataque de fijación

Acción ofensiva realizada bajo la forma de ataque frontal y que tiene


como objetivo el mantener la presión y así evitar el desenganche del
enemigo.

7.13 OPERACIONES DE GUERRA ELECTRONICA

Se denominan así, a las operaciones complementarias realizadas a través


de medios electrónicos con la finalidad de: obtener información sobre el
enemigo; interferir sus sistemas electrónicos; inducirlo a adquirir
Página 298 de 360
información errónea; y negar a su vez efectividad a las operaciones de
guerra electrónica que realice el enemigo sobre los sistemas propios.
Pueden reducir la capacidad de control del Comandante enemigo por el
debilitamiento o total silencio de sus medios de comunicación en
momentos críticos.
Las operaciones de guerra electrónica deben ser controladas por un escalón
capaz de evaluar los beneficios derivados de ellas y su interferencia en los
sistemas amigos.
Los beneficios a largo plazo derivados de los informes obtenidos por los
medios electrónicos amigos, pueden superar las ventajas tácticas
inmediatas resultantes de la interferencia en las comunicaciones del
enemigo.
Estas operaciones pueden ser ofensivas, y en ese caso, las medidas
electrónicas adoptadas son la escucha (pasiva), la interferencia y el engaño
o defensivas y en ese caso se adoptan contramedidas electrónicas
tendientes a facilitar el empleo de los sistemas electrónicos amigos y
reducir su vulnerabilidad a la interferencia enemiga.
Como respuesta a las contramedidas electrónicas se realizan las acciones
contrarias a las contramedidas electrónicas, conocidas como contra contra
medidas electrónicas, tendientes a neutralizar la acción electrónica
defensiva enemiga.

7.13.1 Planificación y ejecución

Estas operaciones requieren una detallada planificación y una ejecución


precisa y eficaz para obtener resultados satisfactorios. Esto es sumamente
importante en las contramedidas electrónicas, pues deben ser realizadas
por todos los operadores de equipos electrónicos sin distinción de nivel o
jerarquía y exigen conocimientos profundos de los materiales a operar, un
elevado grado de instrucción y un control sobre todos los medios muy
difícil de realizar teniendo en cuenta la variedad y distribución de los
mismos.
La ejecución no está reducida a la oportunidad del combate, sino que se
realiza en todo momento, antes, durante y después del mismo.
El arma de comunicaciones tendrá la responsabilidad de la ejecución de las
medidas electrónicas, para lo cual contará con elementos orgánicos;
equipados, instruídos y entrenados con esa finalidad.

7.14 OPERACIONES SICOLOGICAS

Las operaciones sicológicas constituyen una operación complementaria


que incluye un conjunto de actividades de carácter predominante sicológi-
co, realizadas en todos los campos del Poder y conducidas para influir en
Página 299 de 360
las emociones, actitudes, opiniones y otras motivaciones de un grupo
social, de modo de obtener comportamientos predominantes.
Pueden ser desarrolladas en tiempo de paz o de guerra y en el ámbito de la
población amiga, neutral o enemiga.
El Comandante realiza las operaciones sicológicas como parte integrante
de su acción, buscando un comportamiento de los grupos humanos que
apoye a su poder de combate y facilite el cumplimiento de su misión. La
operación sicológica debe ser coordinada con las acciones producidas en
los otros campos de la actividad militar y con otras actividades
complementarias, incluyendo el engaño, la contra-información, la
seguridad de las comunicaciones, la censura, la educación moral, las
relaciones públicas y los asuntos civiles.

7.14.1 Planificación

Las actividades de operaciones sicológicas, son una acción compleja y


peligrosa, tanto en la preparación como en la ejecución, considerando que
son capaces de provocar, cuando son mal conducidas, resultados contrarios
a los pretendidos.
Las operaciones sicológicas exigen:
- Informaciones numerosas y constantes sobre los objetivos a alcanzar, los
antagonismos y presiones que amenazan la nación; opiniones;
aspiraciones y necesidades no satisfechas de la población; reacciones de
ésta frente a los acontecimientos, los puntos débiles del enemigo y las
posibilidades de explotar los éxitos obtenidos en todos los sectores de la
vida nacional.
- sólidos conocimientos de antropología cultural, sicología social, sicología
sociología y comunicación social.
- confianza de parte del público blanco, en especial si éste es amigo o
neutral,lo que vuelve particularmente importante que las operaciones
sicológicas no sean marcadas por contradicciones.
- constante evaluación de los resultados obtenidos y permanente
adaptación a esos resultados de las medidas a llevar a cabo.

Las operaciones sicológicas comprenden:


- Acción sicológica: dirigida a los elementos amigos y/o neutrales con el
objetivo, nítidamente constructivo, de fortalecer la moral social y los
padrones culturales del país, y conquistar y mantener el apoyo de la
población.
- Guerra sicológica: con la finalidad claramente destructiva de actuar
contra cualquier grupo enemigo y parte de la población que lo apoya

Página 300 de 360


buscando conquistarlos o separarlos del resto de la población o aún,
desmoralizarlos o desacreditarlos.
7.14.1.1 Objetivos de la acción sicológica

- Fortalecer la Institución Militar.


- Fortalecer la moral de los integrantes de la Fuerza.
- Lograr el apoyo de la población.

7.14.1.2 Objetivos de la Guerra Sicológica

- Disminuir la capacidad combativa del enemigo.


- Impedir o desalentar acciones contrarias a los intereses nacionales.
- Producir efectos depresivos sobre la moral del enemigo.
- Conducir al enemigo a defeccionar o desertar.
- Crear dudas sobre la finalidad y objetivos del enemigo.

7.14.2 Apoyo a las Fuerzas Terrestres

Las operaciones sicológicas en apoyo a las fuerzas terrestres son


destinadas, principalmente, a reducir la eficiencia de combate del enemigo.
Estas operaciones deben ser centralizadas en la planificación y
descentralización en la ejecución y capaces de dar apoyo directo a las
unidades tácticas.
Las oportunidades sicológicas, determinadas a través de la permanente
evaluación de los informes, deberán ser inmediatamente explotadas. Son
necesarias cooperación y coordinación estrecha entre los Oficiales de
Estado Mayor de las secciones de Operaciones, Informaciones, Asuntos
Civiles y los encargados de las operaciones sicológicas a fin de asegurar el
máximo de eficiencia.

7.15 DESCANSO

7.15.1 Conceptos generales

Las operaciones tácticas de descanso constituyen un conjunto de


actividades que ejecutan las tropas en campana con la finalidad de asegurar
al personal la necesaria recuperación, facilitando, al mismo tiempo, la
ejecución de tareas de apoyo logístico.
Todo Comandante deberá asegurar el oportuno y adecuado descanso de su
personal, teniendo en cuenta que esta actividad incidirá en gran medida, en
el mantenimiento de la aptitud combativa de la fuerza. El descanso podrá
realizarse en estacionamientos, durante los movimientos o durante el
combate.
Página 301 de 360
7.15.2 Descanso en estacionamientos

El estacionamiento es la forma de descanso mediante la cual se busca,


principalmente, la recuperación integral de las tropas con la mayor
comodidad posible. en relación con la situación táctica que se viva y los
recursos disponibles.
Normalmente, el estacionamiento se llevará a cabo fuera de la acción
directa del enemigo terrestres, y presupondrá cierto tiempo de permanencia
en él. Cuanto mayor sea el tiempo en que una tropa se estacionará en un
determinado lugar, tanto mayores serán las medidas de comodidad a
adoptarse.

7.15.3 Formas de estacionamiento

Las formas básicas de estacionamiento son: vivac, acantonamiento y


vivac-acantonamiento.

7.15.4 Vivac

Se entiende por vivac al constituido por las tropas que pasan al descanso,
utilizando los medios orgánicos.
El vivac es la forma normal de estacionamiento de las tropas en campaña,
siendo la que permite pasar más rápidamente al descanso manteniendo un
mayor grado de alistamiento para el combate.
Se ocupará un vivac. cuando no exista posibilidad inmediata de establecer
el contacto con el enemigo. El dispositivo de las fuerzas dentro de la zona
de vivac estará influido por la necesidad de lograr una dispersión adecuada
que reduzca los efectos de los ataques aéreos del enemigo, y aumente la
protección contra las operaciones especiales.
Una zona de vivac apropiada, deberá responder, en la medida de lo
posible, a las siguientes características:
- Disponibilidad de agua potable.
- Poseer buenos cubiertos.
- Contar con terreno firme y seco.
- Estar situada (en lo posible) en inmediaciones de un curso de agua.
- Poseer protección contra las inclemencias del tiempo.
- Cercano a vías de comunicación.

7.15.5 Acantonamiento

Página 302 de 360


El acantonamiento es una forma de estacionamiento en las que las tropas
pasan al descanso utilizando las construcciones existentes. Eventualmente,
los acantonamientos podrán constituirse en zonas preseleccionadas.
El acantonamiento se empleara normalmente, cuando la posibilidad de
contacto con el enemigo es remota. Posee las siguientes ventajas:
- Ofrece mayores comodidades al personal.
- Protege contra las inclemencias del tiempo.

Esta forma de estacionamiento facilitará la recuperación del personal y la


conservación de los materiales y equipos, pero disminuirá el alistamiento
para el combate y la marcha.
Cuando las construcciones se encuentren habitadas, la preparación de los
planes deberá ser efectuada en estrecha coordinación con las autoridades
civiles.
La rápida distribución y ocupación de las construcciones impondrá
asignación de sectores a cada uno de los elementos, privilegiando el
concepto de seguridad.

7.15.6 Vivac - Acantonamiento

Es una forma combinada de estacionamiento que permite compatibilizar


las ventajas del vivac con las del acantonamiento, al brindar una mayor
comodidad relativa a las tropas, a la vez de facilitar e incrementar el
alistamiento para la marcha y el combate.
Las fracciones no acantonadas, instalarán el vivac en zonas adyacentes a
los locales del acantonamiento.

7.15.7 Descanso durante los movimientos

El descanso durante los movimientos buscará reponer la energía de las


tropas en el transcurso de un desplazamiento así como realizar las
actividades logísticas necesarias que aseguren la continuidad del
movimiento. Las actividades a ejecutar durante el descanso. estarán,
normalmente, condicionadas por el tipo de movimiento que se este
realizando.

7.15.8 Descanso durante la marcha

Para la determinación de los descansos durante la marcha se deberá tener


en cuenta:
- La situación.
- La proximidad del enemigo.
- La actividad aérea.
Página 303 de 360
- Las condiciones meteorológicas.
- El estado físico de las tropas.
- El estado de los medios de transporte disponibles.
En marchas largas, aún en casos de premura, se deberán intercalar descansos
adecuados que contribuyan a mantener la aptitud combativa de las tropas.
Es por ello, que todo Comandante deberá prever oportunos y suficientes
descansos. Su omisión implicará una gran responsabilidad, aunque se podrá
prescindir de ellos, cuando la situación así lo imponga.
En lo posible, los descansos se dispondrán en forma regular, debiendo
seleccionarse zonas adecuadas a lo largo de los caminos, que permitan la
dispersión de las fuerzas.

7.15.9 Descanso durante el combate

Aunque normalmente el combate no se detendrá, habrá circunstancias en las


que la situación permitirá o impondrá conceder descanso a las tropas. En estos
casos, el proceder se adecuará a la situación particular, pero teniendo en
cuenta, que las fuerzas deberán mantener el mayor grado posible de
alistamiento y aptitud combativas compatibles con la necesidad de proseguir
las operaciones en cualquier momento.

7.15.10 Descanso durante las operaciones ofensivas

Cuando las tropas pasen al descanso, normalmente lo harán en los lugares


alcanzados adoptando una actitud defensiva transitoria, debiéndose organizar
el terreno e implementar las medidas de seguridad más convenientes al frente,
flancos y retaguardia.

7.15.11 Descanso durante las operaciones defensivas

El grado de organización del terreno, logrado durante la organización de la


posición, facilitará el descanso de las tropas que ocupen una posición
defensiva. Ante una pausa del ataque enemigo, las fuerzas continuarán
manteniendo un adecuado grado de alistamiento que les permita enfrentar, de
inmediato, la continuación de dicho ataque.
La posición de defensa durante el descanso deberá establecer la seguridad
perimétrica, a fin de estar en aptitud de proporcionar una adecuada alarma y el
tiempo necesario para el alistamiento de la posición.

7.15.12 Descanso durante las operaciones retrogradas

Durante la ejecución de una operación retrograda, normalmente las tropas


tendrán pocas oportunidades para descansar. En caso de ser factible, este
Página 304 de 360
descanso se practicara aprovechando aquellos momentos en que la situación lo
permita, y siempre y cuando ello no haga peligrar la operación en desarrollo.

CAPITULO VIII¡Error! Marcador no definido.

OPERACIONES TACTICAS NO CONVENCIONALES

Sección 1

8.1. GENERALIDADES

Las operaciones tácticas no convencionales son aquellas operaciones de combate


realizadas en situaciones de conflicto o guerra, tanto en territorio propio como
enemigo y que requieren para su ejecución, el empleo de fuerzas, tácticas y
técnicas especiales.
Se diferencian con las operaciones convencionales fundamentalmente en los
siguientes aspectos:
- Características, tipo y organización de los medios que se empeñan.
- Tácticas y técnicas empleadas en su desarrollo o para contrarrestar su acción.
- Objetivos e intenciones perseguidas en los distintos casos.
- Areas o actitudes tácticas en las cuales se puede manifestar la acción.

8.2. OBJETIVOS

Estas operaciones se conducirán mediante una forma de aproximación indirecta


buscando alcanzar los siguientes objetivos:
- Desgastar al En.
- Impedirle el libre uso de nuestro territorio por él ocupado.
- Ganar tiempo a la espera de apoyo exterior o intervención de organismos
internacionales.
- Mantener e incrementar el espíritu de resistencia e identidad nacional entre la
población.
- Posibilitar el funcionamiento de un Gobierno Nacional, incluso radicado en el
exterior pero con representantes en nuestro territorio, que mediante una
adecuada acción propagandística mantenga la moral en el frente interno y
procure obtener apoyo internacional.

El sistema de mando debe ser mas flexible que en operaciones convencionales.


Para esto se hará un amplio uso de los planes estratégicos y operacionales que
deberán estar en conocimiento de los comandos subordinados desde tiempo de
paz.

Página 305 de 360


Producida la situación bélica y habiéndose llegado a las operaciones no
convencionales los Jefes de Guarnición o sus representantes conducirán las
mismas con total libertad de acción visando alcanzar los objetivos fijados desde
tiempo de paz en el marco de las intenciones del Comando dado las obvias
dificultades que se presentarán para mantener un adecuado sistema de comando,
control y comunicaciones.
La progresiva conquista de los objetivos antes enunciados posibilitará evolucionar
nuevamente hacia nuestra organización militar regular que en el menor tiempo
posible logre la derrota del En. y la reconquista del territorio ocupado.
8.3. TACTICA NO CONVENCIONAL TERRESTRE.

Desde el punto de vista táctico se conducirán las operaciones visando:


- Salvaguardar de su destrucción los recursos no afectados por la acción enemiga,
los cuales mediante procedimientos de dispersión y ocultamiento deberán ser
sustraídos de su alcance.
- Activar comandos de guarnición respetando la distribución territorial del
Ejército de tiempo de paz los cuales, en función de los recursos humanos y
materiales disponibles y de la inteligencia colectada con anterioridad,
organizarán fracciones con capacidad de cumplir operaciones no
convencionales en todos los ámbitos.
- Conducir las operaciones mediante golpes de mano principalmente contra:
- Centros de comando, control y comunicaciones del enemigo.
- Líneas de comunicaciones enemigas.
- Sistema de Apoyo Logístico enemigo (S.A.L.)
- Principales cuadros de mando enemigos.

- Para alcanzar el éxito en las operaciones previstas, será de vital importancia un


constante esfuerzo de inteligencia desde tiempo de paz centralizado en los
comandos de guarnición, quienes a partir del momento de su despliegue
operacional conducirán las operaciones en sus zona de acción.
- Asimismo, será preocupación de todos los Comandos conducir, también desde
tiempo de paz, la instrucción del personal a todos los niveles orientada a
desarrollar:
- Alto espíritu de iniciativa y responsabilidad.
- Liderazgo en todos los escalones del mando.
- Profundo conocimiento del terreno en la zona de operaciones de la
guarnición.

8.4. LOGISTA

Se debe tener presente que desde el punto de vista logístico resulta indispensable
que el personal, se encuentre capacitado particularmente en aspectos tales como:
- primeros auxilios;
Página 306 de 360
- mantenimiento de equipo y armamento; (incluido munición)
- obtención de alimentos y transporte.
- supervivencia.

Definido el concepto del momento en que se pasará a actuar en un ambiente de


guerra no convencional, se deberán establecer los lugares para depósitos de
abastecimientos.
Cuando se determine que la situación planteada resulta inminente. se
aprovisionarán los mismos acorde a lo planificado, con alimentos, armas y
municiones adecuadamente embalados para su conservación.
Se planificarán depósitos secundarios, en las áreas urbanas donde se prevea que se
deberá actuar.

8.5. INSTRUCCION

Se debe instruir al personal militar seleccionado en cada Unidad Básica.


El ambiente donde se operará requiere una instrucción diversificada
fundamentalmente en:
Operaciones en el medio rural.
Operaciones en el medios urbano tanto en el interior como en la capital del país.
Operaciones fuera del país, en territorio enemigo o donde éste, tenga intereses
vitales.
Relevamiento completo en tiempo de paz de todos los puntos críticos del territorio.

8.6. MOVILIZACION

Al determinar las bases para la Movilización deberán adoptarse medidas tendientes


a satisfacer las necesidades en lo que respecta al potencial humano y a los recursos
materiales.
Se deberá lograr una sólida moral Nacional mediante una oportuna y eficaz acción
sicológica.
Respecto a las necesidades de inteligencia y contra inteligencia será imperativo
asegurar una continua y eficaz corriente de informacion así como mantener en
secreto los detalles de planificación.
En caso que las Fuerzas Terrestres sean sobrepasadas por el enemigo, se deberá
prolongar la lucha por tiempo indefinido, por todos los medios y mediante la
utilización de operaciones especiales, para lo que respecto a la movilización se
atenderá en una primera fase la creación de centros movilizadores departamentales
que reunirán remanentes militares y civiles voluntarios en sus respectivas ZZ.AA.

Capítulo IX¡Error! Marcador no definido.

Página 307 de 360


OPERACIONES DE DEFENSA INTERNA

Sección 1
9.1 GENERALIDADES

Las operaciones de Defensa Interna requieren que las operaciones militares estén
coordinadas en una Estrategia Nacional y fundidas en el nivel operacional en un
esfuerzo coherente que normalmente incluirá acciones sicológicas y de apoyo al
desarrollo así como actividades militares.
La lucha contrasubversiva se desarrolla generalmente en 3 fases:

1. Período de prevención.
2. Período de intervención.
3. Período de consolidación.

Estas fases son solamente una ayuda para el estudio y pueden darse en forma
simultánea en el espacio aunque normalmente son progresivas.
El período de prevención corresponde al período preparatorio de la subversión y
es fundamentalmente defensivo.
El período de intervención corresponde en general al período de acciones
armadas abiertas.
El período de consolidación es de pacificación o regreso a la normalidad y en él,
se sientan las bases para impedir el retorno de la subversión.
En estas actividades los frentes no son lineales, el mapa del país revela
generalmente 3 tipos de zonas:
La "Roja" que es aquella donde el movimiento subversivo controla efectivamente
la población y desarrolla operaciones armadas generalizadas.
La "Rosada" donde se hacen esfuerzos por ganar la población, se realizan
acciones terroristas y guerrilleras existiendo un poder paralelo.
La "Blanca" donde se mantiene la tranquilidad pero se sabe amenazada y sujeta a
acción subversiva.

9.2 FUNDAMENTOS

9.2.1 Generalidades

Los principios de la guerra son guías generales para la conducción de guerras de


cualquier tipo y en todos los niveles.
Los principios tácticos describen las características de las operaciones exitosas.
Las pautas operacionales proveen una guía más detallada y prescriben requisitos
operacionales críticos.
Nuestra doctrina se basa en obtener y mantener la iniciativa y emplear
agresivamente los medios para cumplir la misión.
Página 308 de 360
La finalidad de toda operación será la imposición de nuestra voluntad al enemigo.

9.2.2 Principios tácticos

El éxito depende de la capacidad para actuar de acuerdo a 4 principios tácticos:


iniciativa, agilidad, profundidad y coordinación.

9.2.2.1 Iniciativa.

En este tipo de operaciones la iniciativa se extiende más allá del campo de


batalla. Comprende la aplicación coherente de esfuerzos en los campos
político, económico y sicosocial, sumados a los esfuerzos operacionales y
tácticos puramente militares.
Tomar y mantener la iniciativa requiere un esfuerzo concentrado de
inteligencia para identificar las causas del conflicto, así como para identificar
al enemigo, su estructura orgánica y sus intenciones.
La identificación del centro de gravedad de las operaciones del En. es una
condición previa para asumir y mantener la iniciativa. Para mantener la
iniciativa, los mandos subordinados deben actuar con alto grado de
independencia en el contexto de la estrategia establecida.
El precepto Básico será la acción y la iniciativa. Nunca esperar para reaccionar
después de la acción del enemigo.
Innovación, agresividad y decisiones rápidas, moderadas con inteligencia y
prudencia son fundamentales para tomar la iniciativa temprano.

9.2.2.2 Agilidad

Es la capacidad física y mental de actuar más rápido que el En., constituye el


primer requisito para tomar y mantener la iniciativa.
El En. actúa simultaneamente en lugares alejados para obligarnos a dispersar
nuestros medios y así lograr superioridad local. La necesidad de proteger
extensos territorios con pocos medios impone disponer de unidades ágiles,
capaces de concentrarse y dispersarse rápidamente en respuesta a situaciones
cambiantes.
Los líderes deben tomar decisiones rápidas sin vacilar y asumir riesgos aún
con información incompleta cuando reconozcan que esperar frustrará la
posibilidad de actuar.

9.2.2.3 Profundidad

Es la prolongación de las operaciones en el espacio, y en el tiempo.

Página 309 de 360


Profundidad en el espacio se refiere a la capacidad para actuar,
simultaneamente en zonas muy alejadas de las bases de apoyo y de los frentes
previstos.
Profundidad en el tiempo se refiere a la serie de acciones sucesivas
coordinadas tomadas para destruir el centro de gravedad En.
Los recursos deberán poseer la variedad necesaria para actuar en todos los
tipos de operaciones, complementando las actividades políticas, económicas y
sociales.
Las reservas se deben mantener equilibradas para permitir el mejor uso de los
medios, manteniendo la capacidad de desengancharse y reaccionar ante
situaciones inesperadas.
El esfuerzo en profundidad busca destruir las fuerzas enemigas no
comprometidas, sus bases y líneas de comunicaciones y el apoyo popular.

9.2.2.4 Coordinación

Acompasa la aplicación de poder disponible, sea de combate o no, en el


momento y lugar necesario para destruir el centro de gravedad En.
Incluye, pero no está limitada, a la concentración de fuerzas en el lugar
decisivo. Algunas de las actividades que deben de ser coordinadas en una
operación (por ejemplo ataque y operaciones psicológicas), deben hacerse
antes del momento decisivo y pueden tener lugar en localidades alejadas una
de otra.
Estas actividades separadas en el tiempo y en el espacio están bien
sincronizadas si sus efectos combinados se hacen sentir en el momento y lugar
decisivo.
La sincronización no depende exclusivamente de coordinaciones explícitas,
sino de que todos los efectivos involucrados en una operación entiendan
completamente la intención del Cte. y haya planes de contingencia bien
desarrollados.
El producto de la coordinación efectiva es máxima economía de fuerza usando
cada recurso cuando y donde hará la mayor contribución al éxito.

9.2.3 Pautas Operacionales

9.2.3.1 Asegurar unidad de esfuerzo.

La variedad de campos de actuación así como actuar junto con otras fuerzas,
servicios y autoridades civiles dificulta seriamente lograr la unidad de esfuerzo
y aumenta las fricciones.
Los Ctes. deben dar el ejemplo, comunicar claramente su concepto, promover
valores, actuar con decisión, aceptar riesgos y responsabilidades para asegurar
la unidad de esfuerzo aún cuando deban delegar autoridad.
Página 310 de 360
9.2.3.2 Maximizar el esfuerzo de inteligencia.

El Cte. debe procurar anticipar las acciones y reacciones del En. y prever como
se van a desarrollar las acciones para actuar en consecuencia.

9.2.3.3 Concentrar poder de combate en las debilidades del En.

El Cte. debe estudiar al En., para encontrar sus vulnerabilidades y como


crearlas, de forma de que puedan ser explotadas con efecto decisivo, aplicando
y concentrando sus medios en ellos.

9.2.3.4 Flexibilidad

En operaciones caracterizadas por la irregularidad y rapidez es imperativo que


el Cte. designe claramente el esfuerzo y lo mantenga o cambie cuando sea
necesario. Ello permite actuar con simultaneidad en forma coordinada y
asegurar la necesaria libertad de acción.
9.2.3.5 Presionar al En.

El Cte. debe presionar tenaz y agresivamente al Enemigo. Una vez que se


toma contacto no debe perderse hasta lograr la decisión.

9.2.3.6 Moverse rápido y golpear fuerte en acciones de corta duración.


La rapidez es una constante fundamental, para lograr la decisión en corto
tiempo; el poder de combate debe ser empleado con potencia y decisión.

9.2.3.7 Engañar al En.

Un engaño efectivo aumenta el poder de combate y facilita la sorpresa; como


mínimo confunde al En. y reduce sus previsiones sobre las acciones amigas
dificultando su reacción.

9.2.3.8 Conservar fuerzas para acciones decisivas.

Se debe reducir al mínimo el empleo de fuerzas en tareas no esenciales y


mantener una reserva para empeñarla cuando exista posibilidad de decidir el
combate y obtener un éxito significativo.

9.2.3.9 Combinar fuerzas, armas y servicios.

Página 311 de 360


Normalmente en toda Z.A. existen fuerzas Navales, Aéreas y Policiales;
combinándolas se obtienen mejores resultados y se multiplica el poder de
combate.

9.2.3.10 Atender el efecto de la batalla en los soldados y comandantes.

Este tipo de guerra impone un gran desgaste físico y sicológico en los


hombres, el Cte. debe mantener elevada la moral de su tropa, actuando
particularmente con su presencia.
La actuación descentralizada impone que en bajos niveles de comando se
deban tomar decisiones difíciles. La instrucción, el desarrollo de UU. con alto
espíritu de cuerpo y la comprensión de la finalidad a alcanzar con este tipo de
lucha son esenciales para el éxito.

9.2.4 Tipos de operaciones

Las fuerzas militares llevan a cabo operaciones de Defensa Interna de 4 tipos


fundamentales:
- Ofensiva
- Defensiva
- De Aislamiento o Interdicción
- Complementarias
Estas operaciones normalmente se llevan a cabo en coordinación con otras
fuerzas, en apoyo de estrategias que combinan acciones de desarrollo,
operaciones sicológicas y de defensa interna.
Es normal que UU. y GG.UU. realicen los 4 tipos de operaciones en forma
simultánea.
9.2.5 Operaciones Ofensivas

Son las acciones más violentas, su objetivo es destruir o neutralizar las fuerzas
tácticas insurrectas y sus bases para establecer un ambiente seguro dentro del cual
se puedan neutralizar el aparato político administrativo En. y su apoyo en la
población.
El Cte. debe pensar en todo momento sobre las repercusiones que tienen sus
acciones en población y en otras áreas estratégicas.
Las operaciones ofensivas en la 2a. fase se caracterizan por su movilidad con el
fin de localizar, capturar o destruir las guerrillas y terroristas. Generalmente
comprenden operaciones de reconocimiento, incursiones, hostigamiento y
ataques.
Para hacer frente a una subversión en la 3a. fase es necesario aumentar las
reservas, concentrar los fuegos y organizar destacamentos de seguridad más
grandes. La utilización del terreno, la maniobra y los fuegos se usan para tomar y
mantener la iniciativa y no el terreno.
Página 312 de 360
Los Ctes. no deben esperar que el envolvimiento, la penetración o la maniobra
envolvente produzcan los mismos efectos sobre las fuerzas En. que producirían si
el terreno fuese la Consideración principal. Las unidades tácticas rebeldes pueden
separar y distribuir sus escondites, bases y apoyo de la población para no
depender de una sola base logística crítica y así podrán maniobrar en cualquier
dirección como reacción a cualquier maniobra ofensiva.
Se debe mantener una presión constante sobre las fuerzas rebeldes absteniéndose
de deducir que han sido eliminadas, simplemente porque no hay oposición.
Cuando se pierde el contacto se debe hacer todo lo posible para retomarlo,
realizar una persecución agresiva y destruir la fuerza.
Los períodos de inactividad permiten a las fuerzas En. reorganizar sus efectivos
(lo que hacen muy rápido) y explotar a su favor las consecuencias sicológicas
negativas de la violencia, propia de las acciones, en la población.

9.2.6 Operaciones Defensivas

Las operaciones defensivas se realizan generalmente dentro de una estrategia


mayor que coordina varias ramas de la actividad nacional.
El propósito es:
- Proteger a la población y Servicios esenciales.
- Disminuir las posibilidades de las fuerzas rebeldes para emprender una acción
ofensiva.
- Negar la ocupación de un área crítica.
- Atrapar las fuerzas insurgentes.
La defensiva no es más que una actitud transitoria pues no permite lograr una
decisión favorable.
Generalmente es impuesta por consideraciones políticas, para economizar fuerzas
en un área a fin de aplicarlas en otra parte o a la espera de condiciones más
favorables.

9.2.7 Operaciones de interdicción o aislamiento.

Rigen los mismos principios que para guerra


convencional, revistiendo mayor importancia porque la
relación con la población o bases de apoyo exteriores es
vital para las fuerzas rebeldes al punto de que
aislarlos equivale a neutralizarlos.
Requiere que las unidades reciban adiestramiento especial y su refuerzo con
UU. policiales siempre que sea posible.
Sus objetivos generalmente son negar el uso de áreas al Enemigo para:
- Procurar un ambiente de seguridad física en un área.
- Cortar las relaciones entre la población y las fuerzas En.

Página 313 de 360


Cortar las relaciones entre una fuerza En. y sus bases fuera o dentro de
fronteras.

9.2.8 Operaciones Complementarias

9.2.8.1 Operaciones sicológicas

Básicamente, se rigen por los mismos principios enunciados para guerra


convencional, pero como Operaciones de defensa interna revisten un carácter
crítico. Sus acciones deben desarrollarse en forma total, permanente y
universal. Deben movilizar la opinión pública en apoyo al Estado, evitar la
transferencia sicológica que propicia el enemigo y mantener el prestigio
nacional en el extranjero.
Las operaciones sicológicas tienen el propósito de lograr el apoyo de la
población para la conquista de los objetivos nacionales y se dirigen hacia
grupos específicos, amigos o enemigos, que han sido tomados como objetivos.
Se debe elaborar un plan de Operaciones Sicológicas a nivel nacional que debe
ser interpretado en los distintos niveles militares según las necesidades locales.

9.2.8.2 Operaciones de Apoyo al Desarrollo

Están encaminadas a reducir o eliminar los problemas políticos, económicos o


sociales que la subversión presenta como causas.
Todas las unidades militares pueden desarrollar algún grado de ese tipo de
operación.
La elaboración de planes para Apoyo al Desarrollo es
tan importante como las Operaciones Tácticas;
éstos deben basarse en el plan de Desarrollo
Nacional y deben considerar los aspectos
políticos, económicos, sicosociales y
militares.
El énfasis que se da a las Operaciones de Apoyo al Desarrollo varia con el
grado de desarrollo que ha alcanzado la subversión.
En el período preventivo durante la Fase I se debe concentrar en mejorar el
ambiente socioeconómico, se puede dedicar una buena parte de los recursos
militares a proyectos de desarrollo que darán resultados a corto y mediano
plazo.
En las Fases II y III la acción se reducirá notablemente y se dirigirá a objetivos
a corto plazo cuyos resultados se perciban inmediatamente .En el período de
consolidación deberá centrarse el esfuerzo en estas tareas buscando erradicar
los problemas de desarrollo, que la subversión esgrime como causas, para
dificultar su regreso.

Página 314 de 360


9.2.9 Empleo de GG.UU. y Sub-Unidades

Los Ctes. de G.U.T.O. deben desplegar las fuerzas de manera de lograr


concentrar el poder de combate en el momento y lugar decisivos. Deben
establecer claramente la cadena de mando dado que en todas las zonas existen
tropas de distintas fuerzas que deben ser coordinadas y complejas relaciones
con la administración Civil. Asimismo el apoyo logístico varía y debe ser
regulado.
Las UU. subordinadas combaten cuando se les ordena, las Divisiones son las
encargadas de lograr concentrar las fuerzas para que éstas combatan en las
mejores condiciones.
Una vez que los Ctes. de División han logrado la necesaria concentración de
poder, coordinado el apoyo entre fuerzas y armas, establecido el apoyo
logístico y sicológico, deben dejar mayor libertad de acción operativa a los
Ctes. de BB. y UU. pudiendo llegar a asumir estos la conducción de la batalla.

9.2.10 El empleo de BB. y Batallones

Los Ctes. de GUTE y UU. deben instalar las unidades en el terreno y


maniobrar contra el En. para aislarlo o destruirlo.
El equipo de armas combinadas es ideal para una batalla rápida y con frentes
fluidos, requiere para su Cdo. y control Procedimientos Permanente de
Operaciones (P.P.0.) altamente desarrollados y practicados.
Se facilita así diseminar órdenes, realizar los reconocimientos necesarios, el
movimiento de tropas temprano para el más rápido y efectivo cumplimiento de
la misión. Permite que los Ctes. y tropas de varios escalones trabajen
simultaneamente y dispongan del máximo tiempo para preparar planes
detallados o hacer preparativos.
Normalmente serán responsables de un área geográfica o grupo
funcional en el cual deberán coordinar acciones con otras fuerzas o
armas.
Reorganizarán sus unidades, refuerzos y apoyos para adaptarlos a
las características de la amenaza en su área.

9.2.11 Empleo de las Sub. Unidades.

La Sub. Unidad es la pieza clave, la que está directamente en


contacto con el En.
Generalmente los Ctes. de Sub.U. y Secc. deberán tomar decisiones
importantes bajo presión, sin tiempo para consultar al Escalón
Superior y basándose en planes generales.
El Cap. debe entender completamente las capacidades y
limitaciones de sus armas y las del En. y como interactúan con el
Página 315 de 360
terreno y la población. Sobre todo debe liderara sus hombres y
comprender las consecuencias de sus acciones.

9.2.12 Areas funcionales mayores.

Todas las operaciones deben combinar armas para mayor


efectividad.
Si bien los medios disponibles varían con los niveles, generalmente
los Cdos. tácticos deben coordinar las siguientes funciones:

9.2.12.1 Maniobra.

La Maniobra nos coloca en mejores condiciones para destruir al En., con


menores pérdidas y evitan daños innecesarios a la población.
Las unidades de maniobra pueden reorganizar sus subunidades en equipo de
combate que le permitan adecuarse mejor a una amenaza que actúa con
pequeños grupos en forma simultánea y descentralizada.

9.2.12.2 Apoyo de fuegos.

El fuego es la forma más eficaz de destruir al En., pero en este tipo de


operaciones (en el área urbana) tiene un grado de actuación menor que en las
operaciones convencionales, siendo particularmente aplicable en la II Fase
(Intervención) fundamentalmente en operaciones de cerco y bloqueo de áreas
ó puntos críticos, donde produce gran efecto desmoralizador sobre el En. A
veces estas son las únicas justificaciones para su utilización.
Cuando se emplea una U. de A., se le asigna misiones de A/D dado que este
tipo de asignación es la más apropiada para apoyar a las UU. de maniobra
involucradas. Su actuación se verá favorecida si dispone de helicópteros para
su transporte, así como para los reconocimientos y/u observación.
Debe usarse con prudencia para evitar daños innecesarios a la población y
propiedad.
La U. apoyada proporcionará medios para la defensa inmediata de las
posiciones de A.

9.2.12.3 Inteligencia.

Son los esfuerzos organizados del Cte. para conseguir informes del terreno,
población y En. Es el factor esencial para el éxito en Operaciones de Defensa
Interna.
En las primeras fases de la subversión, la Inteligencia se constituye en la
misión principal de las UU.

Página 316 de 360


El éxito en las operaciones depende especialmente de información oportuna,
veraz y específica. La naturaleza de las Operaciones hace imprescindible el
acceso inmediato a información política, económica, social, geográfica y
policial.
El proceso de información es agresivo, contínuo y adecuado a las
amenazas existentes y previstas.

9.2.12.4 Apoyo de Ingenieros.

Además de sus misiones clásicas el apoyo de Ing. es muy impor- tante en la


realización de operaciones de Apoyo al Desarrollo.
En operaciones ofensivas donde la movilidad es fundamental se hace
necesario descentralizar el apoyo de Ing. hasta los menores niveles.
En operaciones defensivas sirve para proteger blancos que
puedan ser objeto de ataques terroristas.

9.2.12.5 Comunicaciones.

Comunicaciones confiables son el corazón del Cdo. y Control de


Operaciones muy móviles en las cuales todos los niveles deben
tomar decisiones con repercusiones de distinta naturaleza, exigen
sistemas de comunicaciones especialmente aptos, desarrollados y
seguros.

9.2.12.6 Las Operaciones de Asuntos Civiles.

Las Operaciones de Asuntos Civiles buscan influenciar la


relación entre militares y civiles, incluyen actividades de apoyo al
gobierno y para controlar la población en un área específica.
Este tipo de operaciones tiene por objetivo la población y
generalmente se desarrolla en su seno. La importancia de las
Operaciones de Asuntos Civiles es mucho mayor que en
operaciones convencionales. Las imágenes que presentan los
medios de comunicación masiva influencian significativamente la
opinión pública y condicionan el apoyo popular.
Los elementos subversivos procurarán manipular los medios de
Prensa para alterar la opinión pública doméstica e internacional.

9.2.12.7 Logística.

La complejidad de la guerra no convencional hace que las


dificultades aumenten por la gran descentralización y dispersión

Página 317 de 360


de UU. y la variedad de items especiales y no padronizados con
que deben ser apoyadas las UU.
Para desarrollar totalmente el poder de combate de una Unidad, el
Cte. debe apoyar las operaciones con fuerzas de servicios tenaces,
resistentes y autosuficientes.
Ellas deben proteger el sistema de apoyo de atentados y sabotajes
operándolo con eficiencia antes, durante y después de las
operaciones.
El apoyo logístico afecta el poder de Cbte. de la Unidad. La
salud, moral y bienestar de la tropa está condicionada por un
Apoyo Logístico económico y eficiente.

Capítulo X¡Error! Marcador no definido.

LAS FUERZAS TERRESTRES EN LAS OPERACIONES


CONJUNTAS Y COMBINADAS

Sección 1

10.1 OPERACIONES CONJUNTAS

10.1.1 Generalidades.

En el marco de la participación de las Fuerzas Terrestres en el Teatro de


Operaciones, se establece en el RC-10 -"Planeamiento y Conducción
Estratégica Terrestre de la Guerra"- que el Ejército, tanto en un Teatro de
Operaciones Terrestre como en un Teatro de Operaciones Conjunto, deberá
actuar en estrecha coordinación con las otras fuerzas.
Esta participación exige una estructura de comando, coordinación y control
conjunta con las otras fuerzas, que se extiende desde el nivel teatro de
operaciones, hasta los menores escalones de las fuerzas.
A esos efectos, debe establecerse entre las fuerzas, un sistema de comando
para operaciones conjuntas que implica fundamentalmente para el Ejército,
integrar dos sistemas:

- El Sistema de Operaciones Aeroterrestres (SOAT) (Fig.l).


- El Sistema de Operaciones Terrestres-Navales (SOTENA) (Fig.l).

La integración de los sistemas, se produce generalmente, bajo la coordinación


de un organismo denominado Centro de Operaciones Conjuntas (COC), que
es el máximo órgano coordinador de las operaciones, que impliquen
Página 318 de 360
cooperación entre dos o más fuerzas. No obstante esto, puede suceder, que
sin llegarse a constituir el COC, las necesidades impuestas por el combate
moderno, requieran igualmente la colaboración entre las fuerzas,
fundamentalmente en lo que se refiere al apoyo de fuego y al reconocimiento,
por lo que la estructuración de los sistemas, tiene la flexibilidad necesaria,
como para poder funcionar sin la participación del máximo órgano
coordinador.
Es evidente que por las características del combate terrestre, y
particularmente por el ambiente operacional, el primero de los sistemas
tendrá una mayor densidad y un mayor numero de funciones; el segundo, si
bien mantiene relaciones permanentes entre el Ejército y la Armada, será
activado fundamentalmente, durante la realización de Operaciones anfibias,
en las que las fuerzas de desembarco estén constituídas por medios del
Ejército, como componente terrestre de la fuerza de tarea.

10.1.2 El Sistema de Operaciones Aeroterrestres (SOAT).

10.1.2.1 Generalidades

La responsabilidad en la conducción de la batalla aeroterrestre, la comparten


por partes iguales los comandantes de la Fuerza Aérea y del Ejército.
El Ejército y la Fuerza Aérea, tienen sistemas paralelos de comunicaciones
para la coordinación del apoyo aéreo con las operaciones terrestres.
El sistema de operaciones aeroterrestres (SOAT) incluye al personal, al
equipo, los procedimientos, y las técnicas que comprenden al Sistema
Aeroterrestre del Ejército (SATE) y al Sistema de Control Aerotáctico de la
Fuera Aérea (SCAT).
El sistema de operaciones aeroterrestres, proporciona los medios para iniciar,
recibir, procesar y ejecutar pedidos de apoyo aéreo, para diseminar la
información de combate y la inteligencia que proporciona la Fuerza Aérea.
Aunque los componentes y las agencias del SOAT pertenecen a distintas
ramas de las FF.AA., funcionan en conjunto para la planificación la
cordinación y la integración del apoyo aéreo con las operaciones terrestres.

10.1.2.2 El Sistema Aeroterrestre del Ejército (SATE).

Es un conjunto de personal de la fuerza terrestre, especialmente organizado e


instruido, así como el equipo necesario, para participar en las operaciones
aeroterrestres, en todos los escalones de comando de las fuerzas terrestres y
en las bases de las unidades aerotácticas.
El sistema aeroterrestre del Ejército, le proporciona al comandante de la
fuerza terrestre los medios y la organización para procesar, evaluar y
coordinar pedidos de apoyo aéreo y de reconocimiento aerotáctico, y para el
Página 319 de 360
contínuo intercambio de informacion de combate y de inteligencia, con el
comandante de la fuerza aérea. El sistema aeroterrestre del Ejército se
proyecta por todos los escalones, hasta nivel de unidad de maniobra.
Mediante este sistema, el comandante de la fuerza, terrestre integra los fuegos
de las aeronaves de apoyo, y coordina los esfuerzos de reconocimiento con
los elementos de apoyo pertenecientes a la Fuerza Aérea.
El sistema lo opera personal de Estado Mayor que haya recibido
adiestramiento en cuanto a operaciones aeroterrestres.
El S-3 es responsable de la supervisión de Estado Mayor de todas las
operaciones aeroterrestres, excepto el transporte aéreo administrativo que es
responsabilidad del S-4, y el reconocimiento aéreo que es responsabilidad del
S-2.

10.1.2.3 El Sistema de Control Aerotáctico (SCAT).

El sistema de control aerotáctico de la fuerza aérea, comienza a nivel de


comando del componente Fuerza Aérea, con el centro de control aerotáctico
(CCAT) y se extiende a través de todos los escalones operacionales.
Es un sistema compuesto del personal, las facilidades,
los sensores, y las comunicaciones, mediante las cuales,
el comandante del componente Fuerza Aérea planifica,
coordina, y dirige los recursos que tiene disponibles
para la conducción de las operaciones aéreas del T.O..
El sistema de control aerotáctico, esta organizado de acuerdo a los principios
del control centralizado, movilidad, y esfuerzo integrado. El control
centralizado de los recursos aéreos, le proporciona al Cte. la capacidad de
explotar totalmente la flexibilidad de los recursos aéreos disponibles. Sin
embargo, mediante el empleo del Centro de Apoyo Aéreo Directo (CAAD),
el Cte. puede ejecutar misiones aéreas de diversas maneras, para garantizar la
eficacia y realzar la actividad. Las actividades del sistema de control
aerotáctico, quedan bajo el control del centro de control aerotáctico (CCAT),
que es el elemento de operaciones aéreas de mayor jerarquía dentro del
sistema.

10.1.3 El Sistema de Operaciones Terrestres-Navales (SOTENA).

10.1.3.1 Generalidades.

El sistema se desarrolla particularmente durante las operaciones anfibias,


tanto por la integración de una fuerza de tarea (medios navales y terrestres),
como por las fases de la operación, que exigen división de responsabilidades
crecientes o decrecientes según los casos, para los comandantes, tanto de la

Página 320 de 360


fuerza de tarea conjunta, como para el de la fuerza de tarea anfibia y de
desembarco.
Esencialmente, toda operación anfibia exige tres tipos de coordinación básica
entre las fuerzas:
- Armada y Fuerza Aérea, a través de un sistema de operaciones aeronavales
de similares características al sistema de operaciones aeroterrestres, de
menor densidad, y que comprende la Fase I (Planeamiento y Preparación)
y la Fase II (Embarque, Movimiento y Asalto).
- Fuerzas de desembarco (terrestre y armada), que abarca la Fase I y II
anteriores, particularmente el final de la Fase II (con el pasaje del
comando de las operaciones en tierra, del comandante de la fuerza de
tarea anfibia, al comandante de la fuerza de desembarco) y la Fase III
(Consolidación y Desarrollo), que es un período de transición en el cuál,

la operación anfibia se convierte en una


operación terrestre normal. Durante esta Fase, la
- fuerza de desembarco requerirá normalmente apoyo naval, particularmente
para la protección del área de transporte y para protección contra
operaciones Contra-Anfibias.
- Ejército y Fuerza Aérea, a partir de que la operación anfibia se convierte en
una operación terrestre normal, lo que es contemplado a través del sistema
de operaciones aeroterrestres ya detallado.

10.1.3.2 Actuación del sistema.

La misión del sistema de operaciones terrestre-naval es asegurar la acción


conjunta de ambas fuerzas, particularmente en operaciones anfibias
proporcionando las facilidades, (en especial apoyo de fuego) requeridos por
la fuerza de desembarco, antes, durante y después del mismo.
El fuego naval de apoyo, con su gran variedad de armas y calibres,puede
jugar un rol vital en la reducción de la capacidad del enemigo para la acción,
Página 321 de 360
así como destruir las instalaciones enemigas antes del día del desembarco,
proteger y cubrir el asalto en ese día, y apoyar la acción ofensiva de las tropas
durante el combate en tierra después del mismo.
Tal como en el caso del apoyo aéreo, el empleo efectivo del apoyo naval,
requiere una planificación coordinada y conjunta.

Sección 2

10.2 OPERACIONES COMBINADAS

10.2.1 Generalidades

Las operaciones combinadas son aquellas en que las fuerzas militares de dos o
más naciones se unen en la búsqueda de un objetivo común. Si la relación
perdura y se formaliza mediante convenios políticos, diplomáticos y militares,
la unión, se considera una alianza. Si es de corta duración, de carácter transitorio
e informal, se le llama coalición.

10.2.2 Metas y objetivos

Invariablemente, cada nación que se integra a una alianza o coalición tiene


motivos que, además de ser muy propios, pueden variar con el transcurso del
tiempo. Es posible armonizar las metas nacionales con una estrategia común
convenida, pero a menudo la terminología utilizada para expresar las metas y
objetivos buscados omiten intencionalmente estas diferencias.
Aún en el mejor de los casos, cada nación actúa según los dictados de sus
propios intereses.
De modo que resulta necesario que los miembros de la coalición adopten
objetivos claramente definidos y colectivamente factibles.

10.2.3 Doctrina militar y adiestramiento

Todas las naciones tienen intereses y capacidades militares distintas, y es esta la


razón por la cual cada una tiene sus propias metas estratégicas y su doctrina
militar.

10.2.4 Equipo

El comandante debe tomar en cuenta la capacidad del equipo al utilizar


unidades aliadas. Existen marcadas diferencias en el tipo y grado de
modernización del equipo utilizado por las distintas naciones, así como en las
normas de mantenimiento, movilidad y nivel de interoperabilidad. El
Página 322 de 360
comandante de fuerzas combinadas podría encarar grandes disparidades
tecnológicas entre una y otra unidad, con la consiguiente mezcla de equipo y
armas.
En estos casos es posible aprovechar la interoperabilidad del equipo colocando
las unidades similarmente equipadas una a la par de la otra o una en apoyo de la
otra. No obstante esto, por lo general deberán superar cierto nivel de
incompatibilidad. Los encargados de formular planes deben estar preparados
para confrontar dificultades como las que causa la incompatibilidad del equipo
de comunicaciones y la diferente capacidad de los vehículos para movilizarse a
campo traviesa. El comandante debe conocer las capacidades de las fuerzas que
componen la alianza o coalición y tenerlas particularmente en cuenta para
cumplir las misiones específicas.

10.2.5 Diferencias culturales

Cada uno de los participantes en operaciones combinadas posee características


culturales únicas que se manifiestan a través de su lenguaje, valores, religión y
perspectiva, económica y social.
Las naciones que comparten culturas similares tienden a tener aspiraciones
similares, y a sus fuerzas armadas seguramente resultara más fácil lograr un
nivel satisfactorio de interoperabilidad en las operaciones combinadas. Las
naciones con una perspectiva cultural divergente, sin embargo, deben confrontar
obstáculos mas serios en su adaptación como elemento de una coalición o
alianza.
Los ejércitos son reflejo de las corrientes culturales que determinan la forma que
cada nación operará militarmente, las diferencias en la actitud hacia el trabajo,
el nivel de vida, la religión y la disciplina afectan la forma en que una nación
encara la guerra. El comandante no puede hacer caso omiso a estas diferencias
ya que ello podría acarrearle serias dificultades.
Aún diferencias que aparentemente son de poca monta, inclusive restricciones
dietéticas o la relación entre soldados y oficiales, pueden ser de gran impacto.

10.2.6 Confianza y trabajo colectivo

Cualquier alianza o coalición se fundamenta en la existencia de fuertes vínculos


de confianza y comprensión que conserven la unidad entre los elementos de las
fuerzas combinadas. El trabajo colectivo y los vínculos de confianza son
esenciales en este sentido. Otras circunstancias que contribuyen a fortalecer los
nexos de confianza e inculcar en las tropas conciencia de que cumplen una
misión común son las siguientes: el conocimiento de que todas las fuerzas
comparten las mismas dificultades y penalidades, la asignación de misiones
acordes con las capacidades de cada fuerza; acceso parejo a las reservas y los
refuerzos, inclusive apoyo aéreo cercano e interdicción aérea; y reuniones
Página 323 de 360
frecuentes y directas entre los soldados y entre los comandante de las distintas
naciones.
El buen trabajo colectivo requiere no sólo de metas claramente definidas y
compartidas por todos los miembros de la coalición o alianza, sino también, de
habilidad por parte de los jefes para inspirar, motivar y dirigir fuerzas
multinacionales en la conducción de operaciones militares. La fuerza de la
personalidad con frecuencia es un factor decisivo en el logro de la cooperación
y el eficaz desempeño de las tropas de una alianza o coalición.
Siempre que todas las naciones participantes comprendan claramente los
objetivos y tengan fé y confianza en sus jefes, la labor de las fuerzas
combinadas debe ser exitosa. La preparación de una fuerza capaz de elaborar en
concierto y dispuesta a confiar en la capacidad de sus jefes antes, durante y
después de la batalla es factor vital en la victoria.

10.2.7 Comando

El éxito de las operaciones combinadas depende de la unificación de la acción


colectiva. Cada una de las naciones que intervienen debe acceder a conferirle al
comandante de la alianza o coalición, suficiente autoridad para lograr este fin. A
su vez el comandante y su estado mayor se valen de esta autoridad para unificar
la labor de la fuerza combinada en el logro de objetivos comunes. Esta
autoridad, sin embargo, rara vez, es absoluta, por lo que el comandante busca
fomentar la unidad de criterio.
Los contingentes Nacionales normalmente retienen el mando de sus fuerzas,
cediendo unicamente su mando o control operacional a la jefatura de la alianza
o coalición, aún cuando los estados mayores si podrían combinarse. Los
comandante combaten bajo la dirección del comandante de la alianza o
coalición, reteniendo para si toda la autoridad o responsabilidad inherentes en la
relación de mando establecida (control operacional, control táctico, refuerzo,
apoyo directo) de las fuerzas que se les ha entregado. Las misiones deben ser
consideradas no sólo adecuadas y factibles por las unidades que las asumen,
sino también equitativas desde el punto de vista de la carga y el riesgo que
implican.
Los factores mencionados anteriormente inciden en la estructuración del mando
y control de una fuerza combinada. Si las naciones poseen grandes similitudes
culturales y doctrinarias, si su adiestramiento y equipo son semejantes y si han
adquirido suficiente experiencia en operaciones de este tipo, es posible que un
comando común de resultado. Este método directo requiere que cada una de las
fuerzas pueda recibir, comprender, planear y ejecutar misiones al mismo nivel
que las demás. Sin embargo, al planear operaciones combinadas, el comandante
debe tomar en cuenta las diferencias que existen en la capacidad de
planeamiento.

Página 324 de 360


10.2.8 Maniobras

La mejor forma de facilitar el logro de las metas estratégicas y operacionales


consiste en preparar planes que tomen en cuenta las capacidades especiales de
cada contingente nacional. Entre los factores claves que se consideran a este
nivel están la movilidad, los medios de colección de inteligencia, el tamaño de
las formaciones y la facilidad con que se puede apoyar, las defensas antiaéreas,
las armas de gran alcance, la disponibilidad de fuerzas de operaciones
especiales, el adiestramiento operacional en ambiente especiales y el grado de
preparación para la guerra nuclear y química.
Como medio de contrarrestar las diferencias que puedan existir tanto en la
doctrina como en el entrenamiento y el equipo, pueden asignarse ciertas
funciones selectas a las fuerzas de un grupo pequeño de países miembros de la
alianza o coalición.
La cooperación táctica requiere mayor precisión, ya que tiene que ver con las
acciones inmediatas de combate. Algunas de las disparidades que deben
reconciliarse entre las unidades adyacentes y entre las unidades que prestan
apoyo y las que lo reciben, comprenden diferencias en: organización y
capacidades, medidas de control táctico, métodos tácticos y procedimientos
operacionales, y forma de utilizar las capacidades de otros servicios inclusive el
apoyo aéreo cercano.
El mantenimiento del enlace, los intercambios de equipo y el adiestramiento
pueden ayudar a superar algunos de estos problemas. Otra alternativa consiste
en combinar los estados o planas mayores en lugar de limitarse a intercambiar
personal de enlace. Al planear y ejecutar operaciones militares, el comandante
de fuerzas combinadas busca la mejor manera de aprovechar los puntos fuertes
que el buen complemento de capacidad ha creado y, a la vez,
reducir las dificultades de coordinación a su más mínima expresión.
Cuando el comandante de las fuerzas combinadas asigna el contingente de una
nación a las tropas de otra nación por períodos prolongados, es preciso crear
"relaciones habituales" entre las unidades de un país y del otro, con el fin de
proporcionar cohesión y comprensión. En el caso de fuerzas que por primera
vez actúan juntas, es necesario que los planes sean minuciosos y recalquen la
necesidad de realizar ensayos y analizar las operaciones paso a paso, antes de
emprender acciones reales.
En los planes tácticos deben tomarse muy en cuenta las medidas para facilitar
el reconocimiento de las unidades, el personal y el equipo, así como la
familiaridad con las medidas de control del apoyo aéreo, las comunicaciones,
las transmisiones, el enlace y el control del movimiento. La intención y el
concepto de la operación del Comandante también deben recibir atención
especial para evitar la confusión que las diferencias de doctrina y terminología
podrían producir.

Página 325 de 360


10.2.9 Fuegos

El punto focal del apoyo de fuego a nivel táctico es la sincronización del fuego
de todas las armas de las fuerzas amigas. La integración de las contramedidas
electrónicas y del fuego de artillería, aviación, marina, y elementos de apoyo
aéreo cercano e interdicción, precisa de la preparación, adopción, comprensión
y cumplimiento rígido de una serie de medidas de control.
Los comandantes deben dar constante énfasis a este asunto desde un principio,
tanto para garantizar la eficacia y oportunidad de los fuegos como para reducir
las posibilidades de causar bajas en las tropas amigas.

10.2.10 Inteligencia

La colección, evaluación, análisis y diseminación de información presenta un


importante reto. Las naciones que componen una alianza o coalición
normalmente poseen sus propios sistemas de inteligencia que operan en apoyo
de sus respectivas políticas y fuerzas militares. Estos sistemas nacionales
podrían diferir marcadamente unos de otros por su nivel de refinamiento
técnico y su ángulo de enfoque.
No obstante esto, toda nación puede aportar inteligencia recolectada por
medios humanos (inteligencia humana). Todo Comandante de unidades
combinadas deben establecer prontamente un sistema que aproveche la
contribución de cada nación y comunique a todas las unidades un panorama
completo de la situación de inteligencia.
Para fines tácticos, el Comandante debe disponer lo necesario para la pronta
divulgación de la información de inteligencia y el acceso de todos los estados
miembros a los recursos de inteligencia. Este método hace necesaria la
formación de una sección combinada de inteligencia en el Estado Mayor del
Teatro de Operaciones, y precisa, además, del establecimiento de una red de
inteligencia que vincule a los distintos comandos y cuente con los oficiales de
comunicaciones y enlace que sean necesarios.

10.2.11 Logística

La logística combinada constituye un reto de primera magnitud.


Los problemas que presenta incluyen no sólo limitaciones de recursos por
parte de algunas naciones, sino también diferencias en doctrina logística, nivel
de existencia, movilidad, interoperabilidad e infraestructura. Pese a esto, los
comandantes de la alianza o coalición están obligados a coordinar lo referente
al uso de carreteras, vías férreas, y campos de aviación, en forma tal que
asegure el cumplimiento de la misión.
La idea de que la logística sea principalmente una responsabilidad nacional no
obvia la necesidad de preparar planes detallados en todo el Teatro de
Página 326 de 360
Operaciones. Por esa razón, los Comandantes de las fuerzas combinadas deben
formar cuanto antes una sección de logística combinada en el Estado Mayor.
El control del movimiento, la operación de puertos y campos de aviación, las
comunicaciones logísticas en el teatro de operaciones y algunas funciones
logísticas específicas son actividades importantes que a menudo se coordinan a
niveles superiores al de contingente nacional. Con el fin de garantizar la
coordinación e impedir la duplicación, el Comandante de las fuerzas
combinadas establece responsabilidades claramente delineadas a este respecto.
Los Comandantes y los oficiales de estado o plana mayor en escalones
subordinados que operen en el Teatro de Operaciones son responsables de
resolver los problemas relativos a enlace, lenguaje y compatibilidad de equipo,
propio de estas operaciones logísticas multinacionales.
Cuando los miembros de la alianza o coalición usan equipo similar, se hacen
planes para proveer servicios de suministro, de mantenimiento y de cualquier
otro tipo a todos los contingentes por igual. De ser posible, esto se realiza
como cuestión de rutina; en casos de urgencia táctica, sin embargo, esto debe
necesariamente realizarse. Todos los miembros de la alianza o coalición tienen
derecho a usar productos comunes como el combustible, los lubricantes, los
suministros de sanidad, minas, e inclusive algunas herramientas y vehículos.
El Comandante de las fuerzas combinadas, cuando es posible, permiten que
todas las fuerzas obtengan y distribuyan los artículos de este tipo, a través de
un organismo de suministro combinado, ya que con ello simplifica las
operaciones.

10.2.12 Enlace y Estados Mayores combinados

Cuando se estime conveniente, el Comandante de una coalición puede optar


por combinar los Estados Mayores de dos o más naciones con el fin de mejorar
la coordinación de las capacidades complementarias. Esto ayuda a comprender
mejor las misiones y las tácticas, facilita la transmisión de información vital y
robustece la confianza y amistad.
Las fuerzas combinadas que empleen unidades o equipo que les sean
desconocidos, deben intercambiar personal de enlace, inclusive oficiales de
aviación asignados a un Estado Mayor, oficiales de apoyo de fuego, ingenieros
y especialistas de inteligencia.
Siempre que sea posible, este personal debe estar familiarizado con los
procedimiento de Estado Mayor, la organización, doctrina y métodos de la
fuerza con la cual trabajan, y están obligados a conocer el idioma de dicha
fuerza o hacerse acompañar de un interprete. Además los oficiales de Asuntos
Civiles asignados al Estado Mayor pueden ayudar al Comandante a controlar
las operaciones que precisen de la cooperación de los funcionarios del país
anfitrión.

Página 327 de 360


Capítulo XI¡Error! Marcador no definido.

APOYO LOGISTICO

Sección 1

11.1 CONCEPTOS GENERALES

El apoyo logístico es el conjunto de actividades desarrolladas para satisfacer las


necesidades físicas de las tropas mediante la obtención, administración y provisión
de recursos.
Al aumentar el volumen y complejidad de la guerra, también aumenta la
importancia de la logística en el desenlace de la batalla. La capacidad de un
Ejército para almacenar, transportar y distribuir grandes cantidades de
abastecimientos y mantener los equipos, materiales y efectivos de las GG.UU. en
un nivel óptimo, pueden ser factores decisivos en conflictos y guerra. En tiempos
de paz, las actividades logísticas tienen un carácter distinto, pero también esencial.
En la actualidad, la capacidad del Ejército para apoyar logísticamente sus
operaciones, implica el uso de medios mas complejos que los de antaño. Para
combatir eficazmente en los distintos tipos de operaciones y con distintas
combinaciones de medios, aquél, debe disponer de un buen sistema de apoyo
logístico (SAL) entendiéndose por tal el conjunto de unidades e instalaciones
creados en todos los niveles, así como los procedimientos necesarios, para el
cumplimiento de las distintas funciones y actividades logísticas.
El apoyo logístico, es entonces esencial para alcanzar el éxito en todos los niveles
de la conducción de la guerra, al extremo que, a menudo, las operaciones se verán
condicionadas en su concepción y ejecución de acuerdo al volumen del apoyo
logístico disponible. Comúnmente, el centro de gravedad de las fuerzas
contendientes estará dado por su estructura de apoyo logístico, lo que llevará a
que, en tales ocasiones, deban ejecutarse operaciones en gran escala e incluso
campañas para destruir o defender dicho apoyo.
La maniobra estratégica y la explotación de los éxitos tácticos, a menudo
dependerán, en gran escala, de la eficacia y eficiencia del apoyo logístico.
En el nivel táctico, la flexibilidad de una unidad, su capacidad para maniobrar,
concentrar sus fuegos y encarar operaciones prolongadas y profundas, dependerán
también de un adecuado sistema logístico. Las diferencias locales en potencia de
fuego y capacidad de maniobra, que a menudo deciden el curso de una batalla, son
producto tanto de los medios de apoyo al combate, como de aquellos de apoyo
logístico.
Para que el Comandante pueda aprovechar al máximo las posibilidades de su
unidad, dichos medios deben ser autosuficientes, flexibles y entrenados, capaces
Página 328 de 360
de proteger sus sistemas de apoyo (medios, instalaciones, etc.) y evitar las
interdicciones e interrupciones a dicho apoyo en los puntos críticos. Asimismo, los
Comandantes, deberán entrenar sus unidades de apoyo logístico bajo las mismas
normas de exigencia que al resto de sus tropas, y operar su SAL antes, durante y
después de la batalla.
La única medida real de la eficacia y eficiencia de un SAL, estará dada por su
capacidad de generar la potencia de combate adecuada en el momento y lugar
decisivo. Como lo intrincado del combate moderno exige unidades altamente
entrenadas y con armamento cada vez más complejo, sus consumos de
abastecimientos para el combate contra fuerzas militares modernas serán
elevados. Por lo expuesto, las operaciones de combate se caracterizarán por:
- Alto índice de consumo de abastecimientos.
- Gran variedad de equipamiento.
- Aumento del tamaño del campo de batalla gracias al armamento mas
moderno.
- Complejidad de los sistemas de comunicaciones.
- Amplio uso de sensores en el campo de batalla.
- Extensión de la línea de comunicaciones.

Todo esto, lleva a un campo de batalla en el cual el apoyo logístico se


constituirá en un enorme desafío.

11.2 PRINCIPIOS DEL APOYO LOGISTICO

Para hacer frente a las dificultades reseñadas, de los ocho principios de apoyo
logístico reseñados en el RC-13-1, los siguientes deberán ser cumplidos
imperativamente por los Comandantes de los medios de combate.

11.2.1 Objetivo logístico

Ningún plan estratégico o táctico será exitoso sin un SAL totalmente integrado.
El Comandante, estratégico o táctico, deberá asegurarse de que su operación, en
general, será apoyable en cada etapa de su ejecución. Por su parte los
Comandantes logísticos, deberán planificar sus operaciones de forma tal de dar
al Comandante táctico la mayor libertad de acción a lo largo de toda la campaña
o batalla. Para ello deberán ser imaginativos y contribuir a la sorpresa, de forma
de permitir a la fuerza apoyada, hacer más de lo que el enemigo lógicamente
espera. Por lo tanto, las operaciones logísticas deberán ser parte de cualquier
plan de engaño.
Esto significa, que el SAL que se organice, deberá satisfacer de la mejor forma
posible el cumplimiento de la misión asignada, proporcionando el mejor apoyo
logístico al mayor número de tropas, mediante una estructura que proporcione el

Página 329 de 360


apoyo principal a la fuerza que realiza el esfuerzo, sin descuidar el apoyo
indispensable a las fuerzas con responsabilidad menos prioritaria.

11.2.2 Oportunidad

La movilidad de una fuerza y su capacidad para hacerse de la iniciativa y


mantenerla, así como de sincronizar sus actividades en profundidad, dependen
en gran medida de la habilidad de quienes planifican las operaciones de apoyo
logístico para prever las necesidades de las tropas, y así satisfacerlas en el lugar
adecuado y en el momento oportuno, cualquiera sea la situación estratégica o
táctica que se viva. Considerando que toda operación logística requiere plazos
mínimos para su ejecución, la planificación anticipada, el mantenimiento de
enlace permanente y el control constante de las operaciones logísticas, darán el
tiempo necesario para la observación del transporte necesario y la distribución
de los abastecimientos requeridos.
Para los planificadores logísticos, planificación anticipada significará:
- Mantener o acumular los abastecimientos necesarios para apoyar al
Comandante en el lugar y momento decisivo.
- Brindar el apoyo logístico con flexibilidad tal, que permita adaptarse a
cualquier contingencia estratégica o táctica.

A nivel táctico, esto puede traducirse en un rápido reajuste de los distintos


niveles de abastecimiento, así como de los índices de consumo, con el fin de
impedir que se produzca escasez de combustible, munición o repuestos que
puedan afectar el rendimiento de las fuerzas en combate.
A nivel estratégico, la planificación anticipada requiere que los responsables por
la planificación logística, visualicen el desarrollo futuro de una campaña u
operación en tanto planifican la que está en curso.
Asimismo, será responsabilidad de aquellos, asegurarse que la ubicación de las
instalaciones, las prioridades de apoyo, las líneas de comunicaciones y los
movimientos de tropas contribuyan a apoyar los principales aspectos de la
operación y que al mismo tiempo permita adaptarse rápidamente a cualquier
variación que pueda surgir en la situación futura. También deberán prever los
cambios en la demanda originados en la naturaleza cambiante de las
operaciones, que lleva a que, por ejemplo, el alto consumo de munición
realizados en el ataque, se transforme en elevado consumo de combustible al
lanzarse la explotación.
Para poder planificar anticipadamente, es necesario contar con flexibilidad,
continuidad y movilidad en la organización y funcionamiento del sistema
logístico. A continuación se analizará cada una de estas características.

- Flexibilidad: En los momentos críticos, o cuando surgen oportunidades


irrepetibles, el SAL deberá ser lo suficientemente flexible como para
Página 330 de 360
reaccionar rápidamente. Tal capacidad de reacción ante un aumento
inesperado de la demanda, sólo es posible si las unidades de apoyo logístico
están entrenadas para reaccionar con prontitud, elevando su rendimiento al
máximo por un corto lapso. Estos esfuerzos, si bien pueden trastornar
momentáneamente el SAL, a menudo son imprescindibles para alcanzar la
victoria.
A nivel estratégico, el SAL deberá ser capaz de satisfacer dichos picos de
demanda en una escala mucho mayor aún. Así, por ejemplo, las medidas
necesarias para restablecer una línea defensiva en la cual se han producido
penetraciones enemigas, o para lanzar una explotación del éxito, pueden
incluir la reubicación de áreas de servicio, el cambio de R.P.A., la reasigna-
ción de medios de transporte o aún la rápida redistribución de unidades
dentro del T.O. Alcanzar la flexibilidad necesaria para enfrentarse a tales
requerimientos exigirá:
- Descentralización de las operaciones y el control en la medida necesaria de
acuerdo con la situación.
- Escalonar las instalaciones en frente y profundidad y a lo largo de vías de
comunicaciones adecuadas.
- Organizar las unidades de apoyo logístico en forma tal que puedan
desdoblarse sin perder sus característica.
- Planificando oportunamente el desplazamiento de las instalaciones de
acuerdo con la situación táctica.

- Continuidad: El apoyo logístico no puede ser interrumpido por mucho tiempo


sin afectar seriamente la potencia de combate de una fuerza. Durante las
operaciones, los medios de combate, de apoyo al combate y de apoyo
administrativo, deben recibir continuamente el apoyo logístico necesario para
alimentar su poder de combate.
Si el Comandante estima que sus unidades puedan quedar aisladas por la
acción del enemigo o como consecuencia de su propia planificación, deberá
tomar las medidas necesarias para disponer del apoyo logístico necesario
durante toda la operación, ya sea reforzando los medios de apoyo logístico o
realizando operaciones de reabastecimiento especialmente planificadas.
En toda campaña o batalla, las operaciones pueden cambiar de intensidad.
Incluso, las operaciones, ya sean estratégicas o tácticas, pueden entrar en
períodos de inactividad, pero las operaciones de apoyo logístico no lo pueden
hacer, sin correr el riesgo de un descalabro total. De hecho, los períodos de
inactividad, normalmente coinciden con las pausas que los contrincantes
hacen en las operaciones para recompletar sus unidades y reestructurar su
SAL. Cuando el ritmo del combate disminuye, los medios de apoyo logístico
concentran sus esfuerzos en el reabastecimiento, a la vez que continúan
apoyando a las unidades de combate. Como esta actividad requiere de
esfuerzo constante, los Comandantes deberán tomar las medidas necesarias
Página 331 de 360
para el descanso, re-entrenamiento y re-equipamiento de las unidades de
apoyo logístico.
Por último, la continuidad requiere que el apoyo logístico no se limite a una
única dirección y método. La pérdida temporal o permanente de puntos llave,
cabezas de puente aéreo o centros de comunicaciones de abastecimiento
avanzadas e instalaciones de alternativa. Como tales soluciones harán
necesaria la reducción del consumo actual, el Comandante deberá evaluar
constantemente el costo que esto implica analizándolo comparativamente con
los riesgos de la interrupción del apoyo logístico y las consecuencias que ello
traería.
Como conclusión puede afirmarse que para alcanzar la continuidad se
deberán:
- Planificar en forma constante, para así poder satisfacer las necesidades
futuras.
- Realizar continuas previsiones para el empleo de todas las vías de
comunicaciones y los distintos medios de transporte disponibles.
- Acumular reservas de abastecimiento en cantidad suficiente y
convenientemente distribuidas.

- Movilidad: En el campo de batalla moderno y en nuestro caso en particular,


resulta imprescindible contar con gran capacidad de maniobra ya que
normalmente deberemos actuar en clara inferioridad de condiciones en
cuanto a materiales blindado, apoyo de fuegos, medios de guerra electrónica
e incluso con escaso apoyo aéreo.

En lo estratégico, teniendo en cuenta el poco territorio que podremos ceder en el


transcurso de las operaciones, nuestras fuerzas deberán poseer gran movilidad y
capacidad para el combate continuo.
En lo táctico, teniendo en cuenta las condiciones estratégicas anteriores, nuestra
conducción deberá ser agresiva, audaz e imaginativa en todos los niveles, para
lo cual la movilidad táctica resultará imprescindible. La misma, será el resultado
de una organización flexible, con relativa potencia de choque, relativa potencia
de fuego y por sobre todo gran movilidad.
El Comandante, para alcanzar dicha movilidad en lo estratégico y en lo táctico,
deberá contar con un SAL que le permita imprimir a sus operaciones el ritmo
adecuado, en función, primordialmente, de un apoyo logístico que represente un
catalizador para dicha movilidad y no un peso muerto que dificulte sus
operaciones.
La movilidad requerida, podrá ser lograda:
- Dotando a los medios de apoyo logístico con los transportes necesarios para
poder seguir el desplazamiento de los medios de combate y de apoyo al
combate.

Página 332 de 360


- Manteniendo cargados en todo momento, de ser posible, a los vehículos de
abastecimiento.
- Mantenimiento en las instalaciones de abastecimiento sólo de los volumenes
de abastecimiento estrictamente necesarios para servir a la operación
evitando la acumulación excesiva que pueda inmovilizar o retardar los
desplazamientos.

11.2.3 Economía de medios

En todas las operaciones, los Comandantes deberán cuidar que sus actividades,
procedimientos y aún la estructura de su SAL, demanden el esfuerzo económico
estrictamente indispensable para la satisfacción de sus necesidades. El logro de
ese equilibrio entre el empleo de sus medios y sus necesidades será su respon-
sabilidad permanente.
Para alcanzar una adecuada economía de medios, el Comandante deberá
fomentar en todos los escalones de su unidad la estricta observación de los
siguientes aspectos:
- Máxima explotación de los recursos locales, lo que le permitirá ahorrar
tiempo y transportes.
- Máximo empleo del material capturado y recuperado.
- Estricto control de los abastecimientos regulados:
- Máximo empleo de la mano de obra civil y los prisioneros de guerra, dentro de lo que
permitan:
- Los distintos convenios y tratados suscritos por nuestro país,
- La economía de la zona, y
- La seguridad de las operaciones.

- Entrega de los abastecimientos en forma tal que pasen por las instalaciones
imprescindibles.
- Máxima explotación de las posibilidades de uso de cada artículo.
- Entrega de los abastecimientos en función de las disponibilidades y
necesidades.
- Efectivo control de la disciplina de abastecimiento.

11.2.4 Seguridad

Tomando en cuenta la desventaja en material blindado, de apoyo de fuego y


guerra electrónica con que deberá actuar, así como el escaso apoyo aéreo con
que contará, todo Comandante deberá dar máxima importancia en sus
operaciones logísticas a la seguridad.
La seguridad en este tipo de operaciones deberá ser considerada desde dos
ópticas diferentes pero complementarias:
Página 333 de 360
- Seguridad de las instalaciones y del flujo de apoyo.
- Seguridad de los materiales

Seguridad de las instalaciones y del flujo de apoyo: Teniendo en cuenta que las
unidades de apoyo logístico no están organizadas ni equipadas para dar
completa protección a sus instalaciones, los Comandantes buscarán en todo
momento tenerlas lo más dispersas que permita la situación sin sacrificar su
capacidad de apoyo. Asimismo, la ubicación de dichas instalaciones deberán
realizarse aprovechando al máximo el despliegue táctico de la unidad y las
posibilidades que brinde el terreno. Toda unidad de combate próxima a la zona
de despliegue de las unidades de apoyo logístico deberá cooperar en la defensa
de sus instalaciones, ya que en ello le va la posibilidad de mantener su propia
aptitud para el combate. Si la permanencia de las unidades de apoyo logístico en
las proximidades de una unidad táctica se prolonga en el tiempo, esta última
deberá considerarla en sus planes de defensa o tomarlas a su cargo.
En ciertas circunstancias, será necesario asignar medios de combate para
garantizar la seguridad de las instalaciones logísticas, pero todo esto no reduce
la responsabilidad de los Comandantes de las unidades logísticas por la
seguridad inmediata de sus instalaciones.
Seguridad de los materiales: La seguridad de los materiales, o sea de los
abastecimientos, si bien por referirse a su protección y conservación, en
particular de la acción los agentes meteorológicos, es de carácter eminentemente
técnico, no deja de ser responsabilidad de los Comandantes tácticos. Estos
deberán supervisar el adecuado almacenamiento de sus abastecimientos y la
emisión de las directivas técnicas, por parte de los órganos responsables, para
alcanzar la seguridad de los mismos.

11.2.5 Simplicidad

El tamaño de nuestro Ejército y de nuestro territorio, así como la necesidad de


movilidad, ya expresada, para nuestras operaciones, hará costoso, pesado y en
definitiva inútil a cualquier despliegue logístico que no se base en un SAL
simple, o sea que comprenda el menor número de escalones necesarios para el
cumplimiento de su misión. De esta forma se evitarán escalones intermedios y
la manipulación innecesaria de los abastecimientos, disminuyendo así las
actividades de control de existencias que tan costosas en recursos humanos y
materiales resultan. Asimismo, esto significa que, en campaña y durante la
conducción de las operaciones el Comandante deberá velar por que el apoyo
logístico se limite a mantener la capacidad operativa de las tropas, permitiendo
la ejecución de las operaciones, sin que aquel se transforme en un fin en si
mismo.

11.2.6 Impulso logístico desde retaguardia


Página 334 de 360
En el SAL del Ejército, será responsabilidad de todos los Comandantes de la
cadena de apoyo logístico llevar los abastecimientos lo mas cerca posible de la
unidad apoyada, para que estas puedan proyectar toda su potencia de combate
hacia el frente. No obstante, esto se hará muy dificultoso si cada escalón no hace
conocer a quien lo apoya, sus necesidades con la antelación suficiente para que
aquel pueda proporcionarle los suministros necesarios, en el lugar adecuado y el
momento mas oportuno.
Esto implica que la estructura del SAL debe responder a la necesidad de que
cada Comandante, desde el del T.O. hasta el de una Sección de Fusileros se
responsabilice por desplegar sus elementos de apoyo logístico de forma de
satisfacer las necesidades de sus elementos mas avanzados en la mejor forma
posible.
Procediendo de esta forma se liberará a las unidades de una responsabilidad
logística mayor a la que le corresponde de acuerdo a su escalón, y se les
posibilita, tal como ya se indicó, concentrar su atención y su esfuerzo en la
conducción de las operaciones tácticas.
Mas allá de que los Comandantes y los responsables por la planificación traten
de prever todos los acontecimiento no dejando nada librado al azar, y apliquen
estrictamente los principios de la guerra y los de apoyo logístico, en el momento
de ejecutar los planes surgirán contingencias inesperadas, que impedirán la
ejecución de los planes tal como fueron concebidos. La acción del enemigo, la
interrupción del transporte estratégico, o aún los efectos de desastres naturales
trastocarán los planes poniendo a prueba la capacidad de improvisación de los
ejecutantes.
En situaciones tales como las descritas, los procedimientos normales deben
suspenderse, haciéndose necesario recurrir a fuentes excepcionales de
abastecimiento y transporte, aceptando riesgos poco comunes. Los vehículos
tácticos quizás deban ser usados para transportar abastecimientos, el equipo de
unidades no empeñadas podrá usarse para canibalizar repuestos y la instalación
de puntos de abastecimiento de emergencia puede llegar a ser necesario.
Emergencias menos graves, tales como fallas inesperadas en ciertos equipos, el
aumento imprevisto en el volumen de trabajos o la pérdida de equipo de apoyo,
requerirán también de soluciones improvisadas. Tales emergencias, solo podrán
ser reparadas con la capacidad de improvisación que, desde siempre, caracteriza
a nuestro personal y debe ser considerada como recurso invaluable en
situaciones de emergencia en las que todas las previsiones fallan. Por supuesto
que esta capacidad de improvisación no debe considerarse un sustituto válido de
la planificación y la previsión, sino tan solo su complemento.

11.3 PRIORIDADES DEL APOYO LOGISTICO

Página 335 de 360


Tal como se expresara al tratar el principio logístico de economía de medios, en
todas las operaciones los Comandantes deberán economizar al máximo sus
recursos de apoyo logístico, estableciendo prioridades de apoyo. Las prioridades
mas altas corresponderán, obviamente, a aquellas unidades esenciales para el
cumplimiento de la misión.
Una vez establecidas, las prioridades de apoyo deberán ser comunicadas a todos
los interesados tan pronto como sea posible. A partir de ese momento, pasará a ser
responsabilidad de los encargados de la planificación y el apoyo logístico, desa-
rrollar y ejecutar el plan de apoyo, el que debe permitir al Comandante la
movilidad y flexibilidad necesaria para cambiar las prioridades y aprovechar
cualquier oportunidad que pueda surgir.
Las prioridades pueden cambiar, cualquier cambio en ellas puede requerir el
traslado de ciertas unidades de apoyo logístico para asegurar un apoyo completo,
mientras dure su movimiento, la capacidad operativa de aquellas se verá
temporalmente reducida. Asimismo, el transporte y otros medios logísticos
deberán interrumpir su apoyo a los medios de combate en tanto se traslada el área
de servicio.
Pueden asimismo alterarse las prioridades para explotar una situación operacional,
reconstituir unidades, prepararse para batallas futuras o continuar las operaciones
actuales. Cuando el Comandante cambia una prioridad de apoyo, es importante
que los responsables por la planificación y quienes ejecutan el apoyo logístico
determinen las afectaciones de dicho cambio sobre las acciones de apoyo.

11.4 OPERACIONES DE APOYO LOGISTICO

Las operaciones de apoyo logístico incluyen todas las actividades de apoyo


logístico necesarias para apoyar un combate, así como aquellas actividades que lo
anteceden o siguen. Las unidades tácticas de todos los niveles, reciben el apoyo
logístico de sus unidades orgánicas o de otras en apoyo que le brindan los medios
necesarios para satisfacer sus necesidades rutinarias y las operativas, si han sido
debidamente reforzadas.
Los Comandantes tácticos solo podrán hacer un máximo aprovechamiento de la
potencia de combate de sus unidades y coordinar sus operaciones adecuadamente,
si hacen uso efectivo de su sistema de apoyo logístico. Deben asegurar que sus
planes tácticos sean un fiel reflejo de las posibilidades y limitaciones de su SAL.
Debe ser preocupación constante de los Comandantes alcanzar el equilibrio entre
las operaciones tácticas y las de apoyo logístico. Si bien deben tomar las
previsiones necesarias para garantizar el adecuado apoyo a su fuerza sin que falte
lo necesario para el combate, simultáneamente deberán conservar la mayor
cantidad de recursos posibles para sus operaciones futuras.
Como todas las operaciones de apoyo, las logísticas deben ser capaces de
adaptarse rapidamente a los cambios que puedan sobrevenir en la situación táctica.
Para ello, y como mínimo, deben ser capaces de responder adecuadamente a las
Página 336 de 360
principales contingencias tácticas previstas por el Comandante. Asimismo deberán
dar adecuada respuesta a contingencias logísticas que puedan afectar el desarrollo
de una operación.
Los responsables por la planificación logística asesorarán al Comandante y a los
responsables por la planificación táctica sobre el estado, posibilidades y
limitaciones del SAL de la fuerza. Ayudan a montar las líneas de acción para cada
operación y una vez que el Comandante ha emitido su Decisión, adecuan las
operaciones de apoyo logístico al concepto de la operación.
Los Comandantes de los medios de apoyo logístico y los integrantes de sus
Estados Mayores colaborarán en la preparación de las fuerzas para las
operaciones, apoyándolas durante el combate e interviniendo en su
recompletamiento una vez terminado el mismo. Entre los aspectos críticos en la
planificación del apoyo logístico a las operaciones tácticas, se cuentan los
siguientes:
- Número y tipo de unidades de apoyo logístico y volumen de recursos
disponibles.
- Prioridades del Comandante para el apoyo
- Factores de consumo para el tipo de operación planificada.
- Sistemas de armas críticos, cuya operación continua es crucial para alcanzar
el éxito en la operación.
- Amenazas a las operaciones de apoyo, a los servicios en retaguardia y a las
áreas avanzadas.
- Principales contingencias tácticas que pueden requerir apoyo logístico.
- Ubicación de las instalaciones de apoyo y las apoyadas.
- Efectos del terreno y las condiciones meteorológicas sobre las actividades de
apoyo logístico.
- Las operaciones futuras.

En la planificación de estos aspectos, los Comandantes y sus Estados Mayores


deben guiarse por los siguientes principios:
- El apoyo debe ser continuo y adecuado.
- Las actividades de apoyo logístico deben realizarse tan adelante como sea
posible.
- Los transportes deben explotarse al máximo y permanecer bajo el estricto
control del Centro de Control de Movimientos a los efectos de evitar
congestionamientos y la interdicción por parte del enemigo.
- Los elementos de apoyo logístico deben ubicarse de forma tal de poder, al
mismo tiempo, apoyar la operación, apoyar al esfuerzo y asegurar su
supervivencia en el campo de batalla.
- La seguridad de los elementos de apoyo logístico debe planificarse en detalle,
haciendo especial énfasis en la coordinación de las medidas de auto
protección y protección pasiva.

Página 337 de 360


- Las unidades empeñadas deben ser apoyadas con abastecimientos de envío
automático y no contra pedido.

11.5 EL APOYO LOGISTICO EN LAS OPERACIONES DE ENGAÑO

Los elementos de apoyo logístico, deben ser integrados a los planes tácticos de
engaño, debiéndose tomar en cuenta los recursos necesarios para consumar el
engaño y los riesgos que ello implica. Los medios de apoyo logístico pueden
contribuir a las operaciones de engaño de las siguientes formas:
- Estableciendo instalaciones de apoyo logístico nuevas o simuladas con
abastecimientos de cuyo uso es posible prescindir por el momento, a los
efectos de dar credibilidad al plan de engaño.
- Estableciendo puntos de abastecimiento simulados.
- Cerrando, o dando la impresión de haber cerrado, instalaciones actuales.
- Almacenando abastecimientos en puntos que pueden parecer extraños al
enemigo, y simulando allí actividades de entrega de artículos.
- Alterando los patrones habituales de las actividades logísticas.
- Modificando la ubicación de unidades para engañar al enemigo.
- Simulando tráfico radio en la red radio administrativa.

Capítulo XII¡Error! Marcador no definido.

OTRAS OPERACIONES MILITARES

Sección 1

12.1 LUCHA CONTRA ACTIVIDADES TERRORISTAS

La guerra contra el terrorismo consta de dos componentes básicos:


antiterrorismo y contraterrorismo. En tiempo de paz el Ejército combate el
terrorismo principalmente mediante el antiterrorismo, que consiste en aquellas
medidas pasivas que se toman para minimizar nuestra vulnerabilidad al
terrorismo. El antiterrorismo complementa el contraterrorismo, que consta de
todas las medidas ofensivas que puedan tomarse para impedir, disuadir o
responder al terrorismo. Ciertos elementos del Ejército, colaboran en esta labor
mediante la aplicación de ciertas capacidades destinadas a evitar, prevenir y
resolver atentados. El contraterrorismo es una actividad que tiene lugar en
cualquier conflicto o guerra; el antiterrorismo abarca la totalidad del espectro
operacional militar.

12.1.1 Terrorismo
Página 338 de 360
Es la amenaza o el uso de la violencia ilegal contra personas o propiedades, en
forma discriminada o indiscriminada, para coaccionar o intimidar a gobiernos o
sociedades generalmente para alcanzar objetivos políticos, religiosos o
ideológicos.
También puede conceptuase como una forma corriente de la presión sicológica
que ejerce un movimiento revolucionario u organización delictiva terrorista
sobre una sociedad. A veces puede obedecer a causas totalmente extrañas al
acontecer nacional, y afectar únicamente al país porque el acto terrorista tiene
lugar en su territorio, provocado por movimientos, grupos u organizaciones no
autóctonas. Su finalidad es crear en la población, sin enfrentarse a ella, un clima
de tensión y miedo, de temor colectivo, fomentando falsos sentimientos de
desánimo, desmoralización e impotencia, lo que a su vez tendrá como
consecuencias:

- Obligar a la población a prestar su apoyo al bando revolucionario movimiento


subversivo u organización delictiva, logrando la sumisión y maleabilidad de
las masas.
- Evitar que preste su auxilio a las autoridades, paralizando la acción de ésta.
- Extender el deseo de un cambio político drástico, revolucionario y revanchista,
que permita restablecer la "normalidad".
- Sacudir a los indiferentes, arrebatando la iniciativa a quienes no actúan por
estos medios.
- Facilitar la incorporación de las masas a la lucha revolucionaria mediante el
"equilibrio de terror" en relación con las presiones o coacciones ejercidas por
las Autoridades.
- Provocar medidas represivas extremas por parte de las Fuerzas del orden o
reacciones equivalentes de grupos contrarios.
- Promover en su favor actitudes administrativas y colaboraciones individuales.

- Eliminar adversarios irreductibles que por sus funciones y actitudes más


perjudiquen a la "Causa", demostrando a la vez que las organizaciones
delictivas tienen fuerza y capacidad para actuar contra cualquier persona por
muy protegida que esté.
- Impedir o dificultar la aplicación de medidas pacíficas de reforma y provocar
otras de control, punitivas, etc, que muevan al descontento y a la protesta
generalizada.
- Dar cumplimiento a sentencias "ejemplares" contra individuos odiados por las
masas o traidores a la propia organización.
- Fatigar y desmoralizar a las Fuerzas del Orden causándoles bajas, obligándolas
al despliegue masivo de su efectivos y a adoptar medidas molestas para la
población, intensificado su control y provocando la pérdida de serenidad de

Página 339 de 360


aquéllas. Buscar el ciclo violencia - represión ciega, amplia, rigurosa e
irreparable
- Demostrar la incapacidad del régimen político para restablecer la normalidad,
lo que evidencia la pérdida de iniciativa de las autoridades.
- Atraer la atención internacional, para obtener ayudas económicas, de material
y de formación de la opinión pública
- Atacar, fuera de las propias fronteras, objetivos relacionados con el poder
político o ideología que combaten.

12.1.2 Características

- La sorpresa, el secreto en la selección de sus agentes, así como en su


instrucción, la preparación minuciosa de planes, la clandestinidad en que
viven los miembros de la organización terrorista, la rapidez de actuación, la
violencia de la misma, y, por último, la oportunidad y simultaneidad de sus
acciones
- La vinculación del terrorismo con la acción psicológica es estrecha e íntima,
ya que se le puede considerar como arma productora del miedo.
- La acción terrorista, dada su naturaleza y resultados, precisa poco personal,
presenta mínimas exigencias y sus agentes no necesitan vivir fuera de los
núcleos urbanos.

Por lo que se refiere a las clases de terrorismo, atendiendo al blanco que elige,
se clasifica en selectivo y sistemático.
En el sistemático no tiene en cuenta ni edad ni sexo, profesión ni ideología de
sus víctimas. No tiene objetivos singulares ni personalizados; se extiende por
todos los estamentos, sin discriminar.
El terrorismo selectivo escoge como blancos a políticos, autoridades, personas
destacadas o distinguidos agentes de la autoridad. A veces escoge figuras muy
conocidas, para obtener gran eco y publicidad de los hechos terroristas; o con
este mismo propósito obtener recursos, de industriales, empresarios, financieros
o incluso de determinadas personas que han negado su cooperación.
El terrorismo puede desarrollarse en cualquier ambiente y en cualquier tipo de
sociedad, en cualquier marco geográfico; tiene su terreno más abonado en las
grandes aglomeraciones urbanas, donde la masa tiene mayor entidad, donde la
diversificación social es más fuerte y las tensiones de una estratificación social
cuyas capas no están delineadas, con una movilidad social acusada, son
evidentes.
12.1.3 Antiterrorismo

El antiterrorismo y manejo de situaciones críticas se deben ejecutar de


acuerdo a los siguientes pasos:

Página 340 de 360


12.1.3.1 Información militar
(estratégica y táctica)

- Al analizar cualquier amenaza de terrorismo, se observa que la obtención


de información es una tarea de fundamental importancia.
- Considerando la información coleccionada dentro del contexto social y
económico y teniendo en cuenta el clima político imperante en el área,
se puede proyectar el nivel de la amenaza terrorista.

12.1.3.2 Análisis de la amenaza

- Analizando las vulnerabilidades de los posibles objetivos frente a la


amenaza terrorista, se podrá descubrir y aislar debilidades en el sistema
de seguridad.
- Hecho el análisis de la amenaza, se debe dirigir el esfuerzo a contrarrestar
las debilidades descubiertas.

12.1.3.2.1 Seguridad física

- Si el análisis de la amenaza revela deficiencias en la seguridad física de


los probables objetivos, se deben dirigir esfuerzos a mejorar este
aspecto. Una buena seguridad física ayuda a evitar el terrorismo. Las
áreas reforzadas constituyen el mejor obstáculo contra la penetración
terrorista.

12.1.3.2.2 Seguridad personal

- El análisis de la amenaza puede revelar que personas podrían ser


vulnerables a ataques terroristas. La medida más importantes a adoptar
es la educación de las personas vulnerables al ataque para que
comprendan la magnitud de la amenaza y se comporten como es debido.

12.1.3.2.3 Seguridad operacional

- El análisis de la amenaza también puede revelar deficiencias en el


funcionamiento de las operaciones rutinarias. Se debe prestar particular
atención a la seguridad de los sistemas de comunicaciones, actividades
de colección de información y fallas de elemento humano y las medidas
de contra-inteligencia adoptadas.

12.1.3.3 Autoridad y Jurisdicción

Página 341 de 360


- La autoridad y jurisdicción de cada uno de los elementos intervinientes
en una crisis deben ser delimitadas y comprendidas a fondo. Las bases
legales de las acciones planificadas deben ser determinadas, y
consideradas minuciosamente y con la debida anticipación.
La autoridad y jurisdicción le señalan al grupo de manejo de crisis los
aspectos de la acción que deben ser enfatizados.

12.1.3.4 Previsiones para el manejo de situaciones críticas.

- El grupo de manejo de crisis debe estar en condiciones de comenzar su


actividad cuando ocurra un incidente terrorista.
Sus planes deben incluir la organización, el entrenamiento y las funciones
de este equipo. La planificación realizada debe prever el pasar rapidamente
a la acción frente a cualquier incidente considerado como acto terrorista.

12.1.3.5 Operaciones contra terroristas.

Una de las características de los actos de terror es que dichos actos se


ejecutan contra personas inocentes.
Esto significa que la Fuerza de rescate debe evitar lesionar o matar a dichas
personas.
Esta restricción impuesta a las operaciones antiterroristas, obliga a formular
una táctica que disminuya significativamente las posibilidades de lesionar a
los rehenes u otras personas inocentes.
Estas operaciones deben ser ejecutadas por Unidades especialmente
entrenadas y conducidas a través de un grupo de manejo de crisis.

12.1.3.6 Pasos para ejecutar una operación contraterrorista:

Paso Nº 1 - Aislamiento de la zona de objetivo.


Paso Nº 2 - Inicio de negociaciones.
Paso Nº 3 - Conducción de operaciones de información militar.
Paso Nº 4 - Determinar el lugar y la hora de ataque.
Paso Nº 5 - Reunión de la Unidad de Ataque en las cercanías del objetivo.
Paso Nº 6 - Efectuar maniobra de diversión.
Paso Nº 7 - El ataque.
Sección 2

12.2 INTEGRACION DE FUERZAS MULTINACIONALES

12.2.1 Generalidades

Página 342 de 360


Al solo efecto de un mayor entendimiento del conjunto de las Operaciones de
Paz, las mismas se clasifican en:

12.2.1.1 Operaciones para hacer la paz: que es toda acción para llevar a las distintas
partes en conflicto a un acuerdo esencialmente a través de los medios
pacíficos de solución que se encuentran en el capítulo VI de la Carta de las
Naciones Unidas.

12.2.1.2 Operaciones para la construcción de la Paz: que son todas las acciones
para identificar y apoyar las estructuras que tenderán a fortificar y solidificar
la paz en orden de evitar un nuevo conflicto.

12.2.1.3 Operaciones de Mantenimiento de la Paz: suponen el despliegue de


personal militar en el extranjero, con consentimiento previo de las partes en
conflicto para que en función de sus conocimientos técnicos y habilidades
profesionales prevengan, contengan, moderen y pongan fin o cooperen en
controlar las partes en conflicto, actuando como una tercera parte neutral para
restablecer y mantener la Paz.
El postulado fundamental para el desarrollo de este tipo de operaciones se
denomina "Principio de Consentimiento o Requerimiento" de la Operación
de Paz. Este principio, consiste en el derecho soberano que tienen los países
de permitir o solicitar una operacion de paz en su territorio.
Normalmente, las Operaciones de Paz son integradas por un componente
Militar y uno Civil aportados por diferentes países, brindando así, legitimidad
al mandato. Se procura fortalecer la confianza de las partes en conflicto.
También se encontrarán en el área de misión otras organizaciones no
gubernamentales de asistencia y ayuda, que normalmente no se encontrarán
englobadas en los términos del acuerdo o mandato, pero se deberá establecer
y mantener un mínimo de enlace y coordinación con ellas.
Demuestra el apoyo de toda la comunidad internacional a la búsqueda de una
solución Pacífica al conflicto existente.

12.2.2 Condicionantes

La utilización de efectivos del Ejército Nacional en Operaciones de Paz


dependerá de la existencia de las siguientes condiciones:

12.2.2.1 Que en el proceso de Paz en la región o país en el cual se desplegarán los


integrantes del Ejército, exista un acuerdo en marcha entre las partes en
disputa.

12.2.2.2 Que la participación de efectivos militares extranjeros sea aprobada por los
contendientes.
Página 343 de 360
12.2.2.3 Que el mandato de la Operación no implique el uso de la Fuerza, excepto en
los casos de legítima defensa y que el mismo mandato sea lo suficientemente
claro como para facilitar el éxito de la operación, indicando el objetivo a
alcanzar y el tiempo en que se efectuará.

12.2.2.4 Que no existan variantes en las condiciones anteriores en el mandato que dio
lugar a la misión y si lo hubiere, que fuera concordante con lo precedente.

12.2.2.5 Deberá existir un acuerdo de sede entre el o las partes en conflicto con el
organismo internacional correspondiente, y entre este y nuestro gobierno que
explícite el status legal del componente militar con sus derechos y
obligaciones.

12.2.3 Principios

12.2.3.1 Consentimiento

Mencionado como condición básica para ejecutar este tipo de operaciones,


una vez obtenido, se deberá por todos los medios mantenerlo, pues las partes
receptoras pueden retirar el mismo. La promoción y apoyo de la operación de
paz deberá buscarse a todo nivel, particularmente luego de su despliegue,
esperando obtenerlo en forma progresiva, en ciertas áreas o por ciertos
períodos.
Este principio es el diferencial entre las Operaciones de Mantenimiento de
Paz y las Operaciones de Imposición de la Paz.
Todo militar deberá considerarse invitado en el país, y respetar las leyes y
costumbres del mismo, teniendo en cuenta que no se está actuando bajo
ningún concepto, como una fuerza de ocupación.

12.2.3.2 Neutralidad

Este principio es el mayor determinante en la conducción de las operaciones,


resultando esencial para retener la confianza y el consentimiento de las
partes, además de sostener la legitimidad de la Fuerza para actuar como
tercera parte.
Sin ella, no se obtendrá ni mantendrá la confianza y cooperación necesaria
para cumplir la misión.
Es importante recordar que esto es más una percepción que una práctica pues
no es suficiente actuar imparcialmente, sino que es imprescindible ser visto
como tal por las partes y la población civil.
Si se es percibido como favoreciendo a una parte, la otra dejará de creer,
haciendo en extremo difícil la implementación del acuerdo, pudiendo
Página 344 de 360
amenazar la totalidad del éxito de la operación, e incluso la seguridad de sus
integrantes.

12.2.3.3 Confiabilidad

Solo cuando los involucrados confían en la capacidad de la operación para


cumplir su misión, fundada en la percepción de imparcialidad, facilitarán el
cumplimiento exitoso del mandato.
Así, recursos adecuados deben ser imperativamente empleados en la correcta
ejecución del concepto o misión asignada.
A todos los niveles la Operación debe reforzar la percepción de confiabilidad,
a través de una consistente y disciplinada ejecución de sus actividades.

12.2.3.4 Uso de la fuerza

El Ejército Nacional no intervendrá en operaciones cuyos mandatos


impliquen el uso de la Fuerza, reservándose para los casos excepcionales de
legítima defensa.
Aún así la misma se mantendrá en un nivel mínimo, lo que cooperará en
mantener la imparcialidad necesaria.

12.2.3.5 Claridad de propósito

Se hace necesario que las partes comprendan cabalmente cuales son los
objetivos y alcances de la operación, que es lo que se intenta obtener y por
qué.
Para ello, un estudio conscienzudo del mandato con el que se opera será
necesario, debiendo ser comprendidos y perseguidos en todos los niveles.

12.2.3.6 Firmeza

La exhibición de firmeza en los procederes a todos los niveles, colaborara en


la imagen de confiabilidad que es necesaria. La misma deberá ponerse de
manifiesto tanto en la faz operacional como en lo personal.

12.2.3.7 Integración

Como elemento característico, este tipo de operaciones raramente la ejecuta


un único contingente, sino que se organiza un componente militar con fuerzas
de diferentes naciones
Así, los integrantes de los diferentes países deben interelacionarse
compartiendo funciones en todos los órganos posibles, teniendo en cuenta las

Página 345 de 360


diferentes nacionalidades de forma que las responsabilidades, no afecten la
autoestima de un contingente en particular.
Los Comandantes buscarán evitar los prejuicios nacionales, pues la falta de
sensibilidad al respecto causará un profundo daño a largo plazo en el éxito de
la operación.

12.2.4 Clasificación

Las Operaciones de Paz mencionadas se llevan a cabo mediante:


- Misiones de Observación.
- Fuerzas de Mantenimiento de la Paz.
- Combinación Observación/Fuerza.

12.2.4.1 Misiones de observación

Consiste en la organización de Oficiales desarmados que emplearán, en pos


del cumplimiento del mandato, sus conocimientos militares a través de
diferentes técnicas, siendo ideales para tareas como el control de un cese de
fuego, la supervisión de un repliegue o control de un acuerdo, sin ser las
mismas exhaustivas.
Sus principales funciones serán las de observar, registrar, informar, negociar
o mediar e investigar.

12.2.4.2 Fuerzas de mantenimiento de la paz


Consisten en tropas armadas organizadas en forma militar convencional,
generalmente enviadas para implementar acuerdos en zonas o situaciones en
que sean requeridas.
El despliegue de una Fuerza incluye diferentes etapas operativas y políticas.
Varían desde la separación de los beligerantes hasta evacuación o
reasentamiento de civiles.
En cada etapa, las consideraciones politicas dictan la forma e intensidad de
las acciones militares, y ésta estará integrada a las políticas actuales para
alcanzar el éxito de la operación, en un marco de neutralidad e imparcialidad.

12.2.4.3 Combinación - Observación / fuerza.

La optimización de resultados se obtiene con el empleo simultáneo de


observadores y fuerzas, actuando coordinadamente, manteniendo ambos sus
cadenas de comando y control.
Se integrarán a través del Comandante de la Fuerza pero ambas llevarán a
cabo sus tareas específicas.

12.2.5 Tipos de Fuerzas de Paz


Página 346 de 360
Básicamente, en la ejecución de las operaciones para el Mantenimiento de la
Paz, se podrá organizar Fuerzas de Interposición y de Supervisión, que
variarán en su función, misión y actividades acorde al mandato específico
para esa misión:

12.2.5.1 Fuerzas de Interposición. Cuando su ubicación se encuentra entre dos partes


beligerantes con responsabilidad territorial, tomando a su cargo la creación o
el mantenimiento de areas de separación,
zonas de amortiguación o zonas desmilitarizadas valiéndose de diferentes
técnicas para el cumplimiento de las tareas.

12.2.5.2 Fuerzas de supervisión. Integradas cuando para el cumplimiento de un


acuerdo o mandato la fuerza ocupe áreas en un país con el objetivo de
pacificación interna y ejecución, de actividades tales como: reagrupamiento,
acuartelamiento, desarme y desmobilización, provisión de seguridad, escolta,
siempre dentro de lo estipulado por el mandato.

12.2.6 Técnicas Operativas

Las actividades que se dan a continuación constituyen las más corrientes


aunque el numero y variedad de estas dependerá del mandato de la misión,
por lo que podrán ejecutarse en la práctica otras variedades:

12.2.6.1 Observación - Registro - Informe.

Elemento fundamental para obtener información y controlar o verificar el


cumplimiento de los acuerdos.

12.2.6.2 Negociación - mediación - buenos oficios.

Se cumple a todos los niveles, alentando al diálogo directo entre partes de


forma de instrumentar los acuerdos del escalón superior de todas las Partes.

12.2.6.3 Patrullas

Es una actividad que necesita una adecuada planificación y diligente


ejecucion, contribuyendo a la obtención de información o confirmación de la
obtenida.
Provee seguridad adicional o escolta, además de ejecutar otras tareas tales
como controles móviles de rutas, investigación de denuncias, supervisión.
Además, mantiene la presencia de la Operación promoviendo su credibilidad
y prestigio.
Página 347 de 360
12.2.6.4 Supervisión

Supervisar, verificar e informar el estado o marcha de los acuerdos en


general, como los acuerdos de cese del fuego, separación o repliegue de
fuerzas.

12.2.6.5 Control

Instalación y operación de puestos de control, punto de ingreso o egreso a


aeropuertos o puertos, o fronteras y pasos de fronteras.
Control de los reagrupamientos, acuartelamientos y desarme o del proceso de
desmovilización.
Control de ubicación, disposición de Fuerzas beligerantes y armamentos en
las zonas previstas en el mandato o acuerdo.

12.2.6.6 Asistencia

Asistir en la localización y confiscación de armas.


Asistir el cumplimiento del derecho aplicable a los casos de conflictos
armados y a toda actuación prevista en la Convención de Ginebra y
protocolos similares.

12.2.6.7 Interposición

Establecimiento en zonas delimitadas y aceptadas por las partes para


supervisar el cese al fuego y el respeto a las líneas demarcadas.

12.2.7 Comando y Control

El Comandante de la Fuerza de Paz o el Jefe de


Observadores Militares normalmente opera bajo la
Dirección de un funcionario nombrado por el Organismo
Internacional u órgano encargado de la implementación
del mandato o acuerdo, reteniendo la completa autoridad
con respecto a las asignaciones de los miembros y de su
Estado Mayor y, a través de la cadena de comando de
todos los miembros de la operación, incluyendo
despliegue y movimientos de los Contingentes asignados.

Los comandantes de contingente tienen responsabilidad por el buen orden y la


disciplina de la operación, incluyendo acciones disciplinarias a su contingente,
acorde a las disposiciones nacionales.
Página 348 de 360
12.2.8 Administración

El personal que concurre es el más valioso elemento con que cuenta el


comandante y su preservación será motivo de preocupación constante.
El aspecto moral merece una mención por sus consecuencias en el desarrollo de
las operaciones. De esta forma el correo, las comunicaciones y actividades de
recreación configurarán áreas a no descuidar.
Básicamente y el personal designado deberá ser extraído de los voluntarios.
No obstante, una cuidadosa selección deberá efectuarse considerando las
especiales características de este tipo de operaciones, debiendo cumplir con los
requisitos exigidos en el CIOPE previo a su Partida.
Será necesario contar con los medios de transporte (aéreo, marítimo) adecuados
para desplegar los elementos requeridos en el tiempo y espacios establecidos.
En los casos de envío de Fuerzas de Paz, esta deberá disponer de los medios
adecuados para apoyar y sostener la misma, durante el período fijado para
cumplir la misión.
Este tipo de misión requerirá contar, normalmente. con fuerzas ligeras,
armamento liviano y apoyo de vehículos a rueda y a oruga, según las
necesidades.

12.2.9 Entrenamiento

Además del entrenamiento profesional normal, se deberá dotar al personal y/o


contingente de un período de entrenamiento previo que lo capacite para actuar
satisfactoriamente en este tipo de Operaciones.
Se destaca la necesidad de que reaccionen ante circunstancias difíciles de
preveer, sin perder la calma ni la firmeza, siempre dentro de un marco jurídico y
conceptual que regulan este tipo de Operaciones.
Para ello se deberá:
- Recalcar la neutralidad en el trato y los procedimientos.
- Comprender la naturaleza del conflicto y sus implicancias, incluyendo la
historia del conflicto y los hábitos y costumbres del país anfitrión.
- Recibir entrenamiento acorde a la misión y tareas que se cumplirán,
organización de la Operación, y el terreno en que se va a operar.
- Recibir entrenamiento específico de relaciones públicas, asuntos civiles y
negociación.
- Conocer los aspectos legales nacionales e internacionales que regulan estas
Operaciones.
- Cumplir con los requisitos fijados en conocimiento y habilidades técnicas
convencionales, físicos y sicológicos durante el período de entrenamiento.

Página 349 de 360


9.2.10 Centro Coordinador de Operaciones del Mantenimiento de la Paz.

El Comando General del Ejército tiene un Centro Coordinador de Operaciones


que asesora, coordina, planifica y supervisa en todo lo concerniente a este tipo
de operaciones (CECOMAPA).
Dependiendo del mismo se encuentra el Centro de Instruccion de Operaciones
de Paz del Ejército. (CIOPE), quien ejecuta los programas de entrenamiento
previstos.
Los mencionados anteriormente integran el Sistema Nacional de Apoyo a las
Operaciones del Mantenimiento de la Paz (SINOMAPA), quien coordina a los
organismos estatales e internacionales que participen, en las operaciones de
mantenimiento de la paz, planificando y asesorando al Poder Ejecutivo, además
de proponer los programas de enseñanza.
El sistema es integrado también por un Oficial de Enlace en la Delegación
permanente de la República ante las Naciones Unidas quien asesorará al Jefe de
misión y participará en negociaciones u otro tipo de reuniones que involucren
temas militares, actuando como nexo entre la Delegación y el Ministerio de
Defensa Nacional.
Actuando como nexo entre la dirección del SINOMAPA y el Ministerio de
Relaciones Exteriores habrá un Oficial de Enlace que permanecerá en éste
organismo del Estado trabajando en conjunto con los funcionarios de ese
Ministerio.
Sección 3

12.3 DEFENSA CIVIL

12.3.1 Generalidades

El poder de destrucción de las armas modernas, asociada a la capacidad del


hombre de aplicarlo en cualquier parte del globo, han alcanzado un punto tal
que ninguna nación puede juzgarse totalmente segura.
Las posibilidades actuales de los aviones tripulados o no, los submarinos
nucleares y las armas atómicas, dan a cualquier nación una inseguridad racional
latente ya que, independiente de su posición geográfica, de su actitud política o
su cercanía o alejamiento de zonas de conflicto y centros de poder su territorio
puede sufrir las consecuencias de un ataque inesperado voluntaria o
accidentalmente.
El empleo de los medios referidos en la retaguardia profunda, redimensionan la
necesidad de protección de los centros poblados y áreas vitales del territorio
necesarias para la prosecución de las operaciones.
La Seguridad Nacional exige por este motivo, que sean adoptadas medidas y
previsiones que den a su población la posibilidad de sobrevivir a un ataque y
lograr su recuperación.
Página 350 de 360
Una organización de Defensa Civil bien estructurada desde tiempo de paz,
puede ser de vital importancia para que el socorro y las previsiones sean
efectivizadas de inmediato y coordinadas con eficiencia.
De ésta forma, los disturbios causados por el temor a nuevas catástrofes, por la
falta de alimentos, de vestimenta o desordenes y robos llevadas a cabo por
elementos marginales se verán minimizados.
Una protección debidamente estructurada reducirá el pánico en la población al
dotar a la misma con los elementos morales y materiales adecuados para
enfrentar estos hechos.

12.3.2 Misión

De acuerdo con lo especificado en la Ley Orgánica del Ejército, la Defensa


Civil tiene por misión:
"adiestrar a los ciudadanos individualmente y dentro de la comunidad en los
principios, normas y procedimientos que deben regular su conducta para la
prevención y atención de las tragedias o desastres, consecuencias de fenómenos
naturales o provocados por el hombre, así como afrontar una situación de
guerra".
En lo que refiere a las tragedias o desastres como consecuencia de fenómenos
naturales, los mismos, serán tratados con mayor detalle en la sección 5 de éste
capítulo.

12.3.3 Etapas

La Defensa Civil debe ser considerada como un componente de la Seguridad de


la Nación que se organiza en tiempo de paz para atender las situaciones de
emergencia que pueden plantearse.
Su organización debe comprender medidas de protección individual y colectiva,
así como también los servicios de socorro y reparación visando:
- el mantenimiento de la moral
- limitación de pérdidas y daños
- reparación y restauración de las instalaciones y servicios esenciales para la
vida de la población civil.
Estas medidas pueden ser desarrolladas en tres etapas:
- Preparatoria:
Comprende la organización, planeamiento, instrucción y adiestramiento
del personal, obtención del material, construcción de las instalaciones,
organización y ampliación de los servicios.
- Ejecución:
Comprende la prestación de determinados servicios, evacuación de la
población, control del tráfico, de la iluminación, las comunicaciones y el
transporte.
Página 351 de 360
- Posterior a la ejecución:
Comprende las actividades de combate ante emergencias (incendios,
derrumbes, etc.) salvamento, identificación de muertos y heridos,
reparación de servicios esenciales, evacuación de población desabrigada,
etc.).

12.3.4 Medidas

Las medidas de Defensa Civil pueden ser agrupadas genericamente en dos


grupos:
- preventivas
- de apoyo y socorro
Todas visan en forma general:
- Reducir al mínimo los daños materiales y pérdidas de vidas.
- Restituir a la comunidad las condiciones de vida más próximas posibles a
la normalidad.
- Preservar la moral de la población.

12.3.4.1 Preventivas

Estas son ejecutadas preponderantemente antes del evento adverso y aún de


la alarma.
Entre las mismas podemos destacar:
- Evitar el pánico (instrucción)
- Controlar el tráfico.(planeamiento)
- Colaborar en el mantenimiento del orden mediante la indicación de las
medidas necesarias.
- Adquisición y distribución de los medios materiales necesarios para la
ejecución de las medidas planeadas.
- Profilaxis preventiva de hombre y áreas.
- Instalación y operación de un sistema de alarma y difusión de información
esencial, que permita en tiempo oportuno, tomar las previsiones
adecuadas.
- Determinar, ejecutar y fiscalizar las medidas restrictivas de seguridad,
comunicaciones, luz, agua, etc.

12.3.4.2 De apoyo y socorro

Estas son ejecutadas preponderantemente durante o después de ocurrido el


evento adverso.
Entre las mismas podemos destacar:
- Combate de incendios para proteger a propiedades y vidas.
- Mantener en funcionamiento las comunicaciones y transportes.
Página 352 de 360
- Colaborar en el mantenimiento de los demás servicios públicos esenciales.
(luz, gas, saneamiento básico, abastecimientos, etc.).
- Colaborar en la remoción e identificación de cadáveres, y su sepultura.
- Búsqueda, detección, señalamiento, remoción y neutralización de
explosivos y contaminantes.
- Auxiliar a heridos, gaseados, contaminados o perturbados.
- Proteger a la población de las operaciones militares, procurando
mantenerla alejada de la acción del enemigo.
- Evacuación de la población cuando sea necesario.
Dada la gran gama de actividades que involucra a la Defensa Civil, podemos
sintetizar que la misma, debe mantener en funcionamiento una comunidad en
las mejores condiciones posibles ante su sometimiento a una situación
adversa excepcional.

12.3.5 Principios

La organización y establecimiento de la Defensa o Protección Civil, como ha


dado en llamarse por algunas naciones buscando un significado más amplio
del vocablo, exige al país grandes esfuerzos y gastos por parte del gobierno y
sus habitantes. En compensación, son inconmensurables los beneficios que
proporciona a la comunidad, cuando se dan las situaciones de desastre para la
que fue creada.
Algunos principios que resulta conveniente observar en su estructuración
son:
- Creación de un órgano nacional del más alto nivel político, responsable del
planeamiento y organización.
- Máximo aprovechamiento de la estructura Político - Administrativa
existente en el País.
- Disposición de todas las organizaciones gubernamentales y de sus medios
humanos y materiales que puedan, directa o indirectamente, colaborar con
la Defensa Civil. Debiendo resaltar la importancia de la coordinación entre
los diferentes actores.
- Ampliación de los servicios existentes o creación de otros, que atiendan las
condiciones particulares de la guerra moderna, como por ejemplo el
control de la radioactividad.
- Organización de un Cuerpo de Defensa Civil, convenientemente instruido
para constituirse en la gran reserva nacional a ser empleada en casos de
desastre.
- Establecimiento de un planeamiento detallado y preciso, que haga posible
la utilización de la organización en tiempo de paz y su rápida adaptación a
las particulares exigencias de un conflicto bélico.

Página 353 de 360


Sección 4

12.4 AUXILIO EN CASOS DE CATASTROFES Y EMERGENCIAS

En las operaciones de auxilio en casos de catástrofe y emergencia se utiliza


personal y equipo del Ejército con la finalidad de impedir la pérdida de vidas
y propiedades, aliviar el sufrimiento y promover el bienestar humano en
aquellos casos en que se produzca algun tipo de calamidad pública.

12.4.1 Definiciones y conceptos básicos

Las catástrofes son producidas por inundaciones, vientos, sequías, terremotos


y otros fenómenos de la naturaleza o por la acción deliberada o no del hom-
bre. Cuando estos fenómenos ocacionan grandes sufrimientos y pérdidas
humanas y materiales, el gobierno tiene la obligación de llevar a cabo las
acciones necesarias para mitigar sus consecuencias. Los efectos de las
catástrofes se reducirán realizando una adecuada planificación, adoptando
las previsiones correspondientes e incluyendo una estrecha coordinación
entre los diferentes órganos del gobierno.

12.4.2 Clasificación de calamidades públicas (catástrofes)

12.4.2.1 Desastres naturales

- Inundaciones.
- Sequías.
- Otros climatológicos.

12.4.2.2 Incendios

- Forestales.
- De grandes estructuras.

12.4.2.3 Emergencias sanitarias

- Epidemias y pandemias
- Plagas.

12.4.2.4 Accidentes

- Terrestres.
Página 354 de 360
- Aéreos.
- Marítimos.
- Contaminación ambiental.

12.4.2.5 Derrumbes

12.4.2.6 Atentados terroristas

12.4.3 Acciones generales a desarrollar por el Ejército

Ante la posible materialización de una o varias de las calamidades públicas


enunciadas, será necesario el desarrollo de acciones tendientes a:
- Reducir al mínimo las pérdidas humanas y materiales.
- Asegurar el mantenimiento del orden.
- Proteger la integridad física de personas y bienes.
- Restaurar las condiciones de vida normales en los plazos más breves
posibles.
- Utilizar los medios disponibles en la forma más rápida, eficiente y
económica posible.

12.4.4 Acciones específicas a desarrollar por el Ejército

A continuación se detallan algunas formas de participación del ejército en


apoyo a la población civil. Las mismas podrán ser desarrolladas direc-
tamente por el Ejército, o mediante su colaboración en las tareas indicadas
con el órgano gubernamental designado.

12.4.4.1 Desastres naturales

12.4.4.1.1 Inundaciones y climatológicos

- Reducir al mínimo posible las pérdidas humanas y materiales.


- Proteger integridad física de Personal y bienes.
- Restaurar condiciones de vida normal en los más breves plazos.
- Atención prioritaria a centros poblados y obras de arte amenazadas.
- Mantener equipos altamente móviles y capaces de operar
descentralizadamente en tarea de búsqueda y rescate.
- Asegurar adecuada fluidez en el abastecimiento de suministros vitales.
- Utilización de equipos de purificación y análisis de agua.
- Utilización del sistema de comunicaciones del Ejército.

12.4.5 Sequía

Página 355 de 360


- Transporte de agua.
- Colaboración en la limpieza de cauces, pozos, bombeo de agua y
realización de canales.
- Seguridad de puntos y áreas críticas.
- Utilización del Sistema de comunicaciones del Ejército.
- Utilización de equipos de purificación y análisis de agua.

12.4.5.1 Incendios de grandes proporciones

(De carácter grave, Forestal o Instalaciones)


- Apoyar los requerimientos solicitados con:
- Personal.
- Transporte de evacuados.
- Alojamiento de civiles desplazados.
- Seguridad del área siniestrada, asegurando la afluencia de los
abastecimientos esenciales.

12.4.5.2 Emergencias sanitarias

Desastre natural producido por el hombre o por una epidemia que obligue
a exigir al máximo al sistema sanitario.

- Evacuación de heridos y muertos.


- Creación de un área de evacuación y clasificación de heridos y muertos.
- Tomar medidas de profilaxis epidemiológica.
- Aislar la zona de desastre o epidémica.
- Establecer puestos de socorro.

12.4.5.3 ACCIDENTES

12.4.5.4 Terrestres, Aéreos y Marítimos.

- Aislar la zona.
- Seguridad en el área.
- Rescate de accidentados.
- Establecer puestos de socorro.
- Prever medios asistenciales móviles y fijos para evacuación de heridos y
muertos.

12.4.5.5 Contaminación ambiental

- Aislar la zona.
- Seguridad en el área.
Página 356 de 360
- Rescate de accidentados.
- Planificación y ejecución de la construcción de refugios.
- Coordinación y ejecución de control de vehículos desde zonas
contaminadas.
- Trabajos de limpieza de radiación, con personal y maquinarias
adecuadas.

12.4.5.6 DERRUMBES

En caso de ser necesario emplear personal, medios de transporte,


evacuación y maquinaria de Ingenieros.

12.4.5.7 ATENTADOS TERRORISTAS

- Aislar la zona.
- Seguridad en el área.
- Corte de suministro de energía.
- Rescate y traslado de heridos y/o muertos.
- Organización de los equipos de rescate y reconstrucción de daños.
- Trabajos de limpieza del área.

Sección 5

12.5 APOYO AL DESARROLLO NACIONAL

Comprende el empleo de medios humanos y materiales del Ejército en


proyectos de utilidad para la población en todos sus niveles, con la doble
finalidad de apoyar su crecimiento socio-económico y realzar y/o consolidar la
imagen institucional.-

12.5.1 Bases de planificación

El empleo de medios del Ejército en estas actividades, debe decidirse luego de


un estudio de factibilidad, en el cual bsicamente, se analicen los siguientes
aspectos:

- Posibilidades de éxito.-
- Rentabilidad.-
- Conveniencia para la imagen de la Fuerza a través del impacto positivo que
tenga la actividad sobre el factor sico-social.-
- Conveniencia para la Fuerza desde el punto de vista material.-

Página 357 de 360


La conveniencia no se analizará exclusivamente desde el punto de vista material
sino también desde la óptica de las Relaciones Públicas y la Propaganda. A
estos efectos, las actividades de Apoyo al Desarrollo serán siempre planificadas
y desarrolladas en estrecha coordinación con estas últimas, como forma de
obtener el mayor rédito posible para la Institución.-
Es importante por lo tanto definir el alcance exacto de los términos Relaciones
Públicas y Propaganda:
Relaciones públicas: Conjunto de actividades que visan la creación y
mantenimiento de una imagen positiva de la Institución, para lograr la
integración de intereses y colaboración de los públicos (interno y externo) a los
efectos de alcanzar los objetivos perseguidos.-
Propaganda: Divulgación planificada de publicidad, informes, ideas, doctrinas,
o apelaciones especiales con la finalidad de influir en las opiniones, emociones,
actitudes o conductas de individuos o grupos, para beneficiar directa o
indirectamente a la Institución.-
Las actividades de Apoyo al Desarrollo se desarrollarán en el marco de una
planificación centralizada al mas alto nivel.-
La identificación de los espacios posibles de actuación, será responsabilidad y
objeto de la constante preocupación de los Comandos a todos los niveles dentro
de su zona de acción. Dicha búsqueda se realizará en todas las áreas, desde
convenios con instituciones públicas hasta actividades directas en beneficio de
la población, teniendo en cuenta que las actividades asumidas por propia
iniciativa son altamente preferibles a las impuestas, lo que hace necesaria una
actitud agresiva en la identificación de los espacios por parte de los Comandos.-
La planificación, coordinación, ejecución y evaluación de las actividades y
áreas factibles de encarar, se realizará en el marco de un sistema adecuado,
armónico y eficaz, correspondiendo al C.G.E. su implementación y conducción.
Las actividades de Apoyo al Desarrollo a ejecutar por parte del Ejército
Nacional se agrupan en dos grandes rubros:
- Las tendientes a solucionar problemas urgentes en áreas de menores recursos.-
- Ejecución de planes zonales o nacionales de relevancia e importancia.-

El primer grupo de actividades (las tendientes a solucionar problemas urgentes


en áreas de menores recursos) serán transitorias en su ejecución, retirándose el
Ejército cuando los organismos nacionales específicos responsables se
encuentren en condiciones de tomar a su cargo la tarea. Estas actividades podrán
ser realizadas por unidades de todas las Armas y Servicios, salvo aquellas que,
por ser muy técnicas requieran el empleo de mano de obra y niveles de
conducción especializada.-
El segundo grupo de actividades (ejecución de planes zonales o nacionales de
relevancia e importancia) se caracteriza por permitir aplicar la capacidad del
Ejército para planificar, coordinar y ejecutar actividades de importancia estatal o

Página 358 de 360


regional. Por su trascendencia y por ser las que arrojan mayores réditos a el
Ejército y al País, son estas últimas las que deben encararse prioritariamente.-
Las actividades de Apoyo al desarrollo, al fomentar la presencia militar en el
medio social, resultan de gran importancia en las fases de prevención y
consolidación de las operaciones complementarias de defensa interna,
constituyéndose en eficaz herramienta para detectar fuentes para atender
requerimientos necesarios para atender las hipótesis de Defensa Interna.-

12.5.2 Principios de empleo

Las actividades de Apoyo al Desarrollo, en su ejecución se ajustarán a los


siguientes principios de empleo:

- Las tareas, actividades y obras encaradas no deberán menoscabar la dignidad


de la Institución ni de sus integrantes.-
- Se evitará, en lo posible, la competencia en áreas en las que la actividad
privada ejerce su acción.-
- Cuando se actúe en el marco de acuerdos o convenios con Instituciones y
Organismos del Estado, la actuación del Ejército será al mismo nivel que la
del Organismo o Institución con el que se realizó el acuerdo u convenio.-
- Los Comandos, a todos los niveles, inculcarán a sus comandos subordinados la
importancia de esta actividad y los beneficios que reporta a la Fuerza,
incentivando su búsqueda de espacios de actuación que resulten redituables.-
- Las actividades de Apoyo al Desarrollo serán de planificación centralizada y
ejecución descentralizada buscando el óptimo ordenamiento, racionalización
y evaluación de las tareas.-
- En las selección de actividades, se elegirán tareas que aseguren alcanzar los
objetivos fijados y no generen incertidumbre en cuanto a su factibilidad.-
- El mayor esfuerzo se aplicará donde las carencias sean mayores.-
- Cualquiera sea la tarea que se encare, siempre se buscará contemplar las
aspiraciones y necesidades del público destinatario o de la región.-
- En todo momento y circunstancia se promoverá la participación de la
población y los organismos públicos de la zona de acción, pero manteniendo
la coordinación del programa.-
- Debido a la importancia de la imagen y conducta del personal y equipo a
emplear para el éxito de la misión y la imagen de la Institución, los mismos
serán adecuadamente seleccionados.-
- Se mantendrán mecanismos efectivos y permanentes de supervisión y
evaluación de las tareas en ejecución.-

Página 359 de 360


12.5.3 Areas probables de actuación

Los Comandos buscarán sus espacios de actuación fundamentalmente en las


siguientes áreas:
- Defensa civil.
- Salud.
- Educación.
- Alimentación.
- Información y Recreación.
- Colonias Agropecuarias.
- Parques Nacionales.
- Preservación del Medio Ambiente.
- Fauna y Flora autóctona.
- Obras Públicas.
- Desastres producidos por la acción del hombre o de la naturaleza.

Página 360 de 360

También podría gustarte