Está en la página 1de 21

Pags 025-040:maq revista 23 x 28 22/07/2007 18:53 Página 25

La mujer indígena ante Liliana Suárez Navaz


Universidad Autónoma. Madrid

la migración: estudio
Susana Castañón Romero
Eva Anadón Moreno

de caso de una
comunidad andina

Resumen como si fuéramos unas encomenderas 1. El nombre de Jatun Pamba responde al original en
más3. Pero lo que nos encargó nos sor- quechua del pueblo en donde realizamos el traba-
A pesar de que Ecuador es un país con prendió mucho porque nada de lo que jo de campo, situado en Calderón, casi en los arra-
una profunda y arraigada tradición migra- en esa maleta mandaba iba a Jatun bales de la ciudad de Quito. Mantendremos esta
toria, se dan discursos negativos y en Pamba, sino a Cotopaxi, el pueblo natal
denominación con la intención de preservar la
ocasiones desgarradores en torno a la de su esposa, Doña Chava.
referencia abierta a esta comunidad, y así mismo
fase migratoria que desde finales de los Meses más tarde, al volver de nuevo a
años 90 afronta el país. España y pasar varias veladas con la fami- usaremos pseudónimos para referirnos a cual-
A través de estos masivos procesos lia Rumiñahui, vimos que este envío quiera de sus miembros residentes en España o
migratorios se están produciendo cambios había sido significativo, y no sólo por lo Ecuador. Queremos agradecer la generosidad y
en las prácticas tradicionales de organiza- que pudimos disfrutar al realizar el viaje hospitalidad de todos los Jatun Pambenses de la
ción familiar y de relaciones de género. para llevar el encargo a Cotopaxi, con la diáspora que han sido siempre los primeros en
Dichas variaciones no obstante, no se compañía de sus hospitalarias familias. El
animarnos a conocer mejor su comunidad trans-
reflejan a nivel discursivo y/o ideológico envío expresaba la estructuración de
nacional; de manera especial queremos recono-
en la representación de los roles produc- género de los vínculos transnacionales
tivo y reproductivo de género, mantenien- que hombres y mujeres establecían con cer la labor de Betty Pilataxi Pulupa (quien nos
do, a través de la migración, los patrones su lugar de origen y el reparto de tareas ayudó en la comuna a recontactar con las familias
clásicos que responsabilizan a la mujer y responsabilidades de cada uno en el entrevistadas en 2003), Mariana (quien nos alojó
del mantenimiento de los vínculos fami- mantenimiento esos vínculos en el espa- junto a su familia durante unos días) y E. Pulupa y
liares en el espacio transnacional. cio migratorio transnacional4. La centrali- su familia en España, que nos apoyaron para
dad de la mujer se hizo manifiesta en seguir adelante con esta investigación.
Jatun Pamba también, donde llegaron al
Agradecemos también el apoyo de FLACSO
Introducción poco tiempo las hermanas de nuestro
amigo Miguel, quienes llegaron por como nuestra institución receptora y en especial
Nuestra llegada el verano pasado a Jatun supuesto encargadas de traer todo lo que Gioconda Herrera, Alicia Torres y Fernando García.
Pamba1 venía precedida de trabajo y la familia extensa residente en la comuna 2. Este artículo está basado en la investigación
observación participante con inmigrantes necesitara o apeteciera. "Redes Migratorias Transnacionales, Globalización
en España y con sus familias en Ecuador. En este artículo reflexionamos sobre el y Ciudadanía" financiado por el Ministerio de
Hacía tres años que habíamos iniciado impacto de la migración en las familias Ciencia y Tecnología BSO2002-03331, dirigido por
nuestro trabajo de campo también en transnacionales ecuatorianas, centrándo-
Liliana Suárez Navaz desde 2002, profesora del
Ecuador; Habíamos entrevistado familias nos en el discurso producido por los
departamento de antropología de la Universidad
de emigrantes, y preparábamos nuestra miembros que residen en Jatun Pamba y
segunda etapa de trabajo de campo orga- más en general en Ecuador sobre la Autónoma de Madrid (liliana.suarez@uam.es). Eva
nizando las tablas genealógicas y releyen- migración internacional. Describiremos Anadón y Susana Castañón se integran al trabajo
do las transcripciones sobre las experien- los sentimientos abiertamente negativos, de campo en Ecuador junto con Liliana Suárez en
cias de cada familia con la migración que dibujan un impacto desgarrador de el verano de 2005, y Eva Anadón es miembro acti-
internacional2. Justo antes de marchar de la migración en la comuna y en el vo desde entonces del Grupo de Investigación
España el pasado verano, preguntamos a Ecuador. Nuestra estrategia aborda estos
adscrito al departamento de antropología de la
nuestro amigo Miguel Rumiñahui si dese- discursos aplicando un análisis de género
Universidad Autónoma de Madrid.
aba mandar algo al Ecuador. Pensábamos que diseccione las representaciones dife-
que, dado que conocía las personas con renciadas de mujer y hombre emigrante y 3. Las encomenderas son mujeres (más a menudo
las que íbamos a volver a hablar, él man- los contrastaremos con las prácticas de que hombres) que reciben paquetes de paisanos
daría a través nuestra algo para ellos, los migrantes en relación a sus familias. inmigrantes en España y realizan un servicio de

25
Pags 025-040:maq revista 23 x 28 22/07/2007 18:53 Página 26

entrega personalizado a cambio de alrededor de Nuestra hipótesis es que, más allá de un base a sólidos circuitos de personas, infor-
6€ el kilo. discurso estigmatizante del migrante en mación, y mercancías entre los dos países,
4. Los espacios migratorios transnacionales son general, las nuevas formas de maternidad así como nuevos acuerdos interestatales,
campos de acción social de migrantes y no
y paternidad en la distancia, los procesos negocios e iniciativas económicas, o pro-
de conflictividad intrafamiliar transnacio- yectos de la sociedad civil transnacional.
migrantes que transcienden las fronteras del
nal, y estrategias de los y las migrantes y La migración ecuatoriana a España tiene
estado-nación, cuya dinámica está condicionada
sus familias para redefinir su identidad unas profundas raíces en el proceso de
por actores institucionales como los estados de colectiva tras el impacto migratorio vuel- modernización de un país petrolero peri-
origen y destino o agencias internacionales, así ven a cargar sobre las espaldas de las férico como Ecuador, y como ya veremos,
como por la tensa e inestable conjunción de mujeres gran parte de la responsabilidad la intensa migración interna se vincula con
estructuras y dinámicas de poder nacional y trans- del éxito o el fracaso de este proceso. la equiparable emigración internacional
nacional, como clase, género, edad, y etnicidad, Estas reflexiones, necesariamente breves, que se produce de manera gradual a par-
servirán para apuntar a la importancia de tir de los años noventa. Las crisis políticas
entre otras. Aunque no es un fenómeno nuevo, si
la mujer como agente de desarrollo y financieras son parte de los efectos de
lo es la perspectiva analítica en la que se gesta el
comunitario transnacional, y el tipo de las políticas de corte neoliberal propuestas
concepto, que da prioridad a la visibilización y aná- implicaciones que esto adquiere en una ya desde comienzos de esa década por el
lisis de las prácticas e instituciones que van más visión crítica de las estructuras de género. Fondo Monetario Internacional y el Banco
allá de un único territorio nacional, sean las prác- La estructura del artículo será como Mundial. Estas medidas de macroestabili-
ticas políticas transnacionales de los migrantes o sigue. La primera sección contextualiza zación y ajuste estructural exigen discipli-
la familia transnacional, que aquí exploramos. brevemente fenómenos macroeconómi- na fiscal, liberalización comercial, apertura
cos claves para la comprensión de la ante la inversión extranjera, privatización
actual emigración ecuatoriana, facilitando de empresas públicas, y por supuesto,
también algunos datos sociodemográficos recortes en políticas sociales, sanitarias,
sobre su dimensión e inserción laboral en educativas. A la par de estas medidas, la
España. En realidad, hablar de los ecuato- deuda externa crece, mientras que la caída
rianos es hablar de la más numerosa internacional del precio del petróleo en
comunidad de migrantes latinoamerica- 1998, hace descender muy visiblemente la
nos en España, y Jatun Pamba es una de entrada de divisas en el país, uno de los
las comunidades pioneras y más signifi- países petroleros con menos control de
cadas en los círculos asociativos en sus recursos naturales.
Madrid. La descripción del proceso emi- Según UNICEF (En A. Acosta, 2004) en
gratorio en esta comunidad constituirá el 1999 decae el PIB un ritmo mayor que en
motivo de la siguiente sección, para a la época de la gran depresión de 1933,.
continuación profundizar sobre las nue- Ecuador sufrió entonces el empobreci-
vas formas de organización doméstica, la miento más rápido de toda la historia de
redefinición de los roles de maternidad y América Latina, sintiéndose en todos los
paternidad y los conflictos intrafamiliares estratos sociales salvo en una pequeña
a través de las cuales podremos observar élite que mejoró su posición dentro del
pautas diferenciadas de género que se país, radicalizando todavía más la polari-
reproducen a nivel transnacional. zación de clases.
La brusca recesión económica tiene
dramáticos efectos en la vida cotidiana de
La crisis en Ecuador las clases medias y populares. Si hasta
ahora muchos habían sufrido escasez y
Es difícil enfatizar el grave carácter de las dificultad para conseguir empleos esta-
crisis ecuatorianas que llevan a cientos de bles, poco a poco la crisis se extiende a
miles ciudadanos y ciudadanas del país las clases medias y en todo el país. La dis-
andino a emigrar. Desde España muy rápi- minución acelerada de programas socia-
damente se empezó a identificar estos les se acentúa con el objetivo de mante-
nuevos inmigrantes, pero apenas se cono- ner el pago de la deuda externa, y según
cía nada del país ni de los malos momen- las cosas van de mal en peor el gobierno
tos por los que estaban pasando sus habi- llega incluso a suspender el pago de sala-
tantes. En poco más de cuatro años, rios a funcionarios como militares, policí-
Ecuador pasó de ser una colonia inmi- as, maestros, enfermeros y médicos.
grante casi inexistente a ocupar junto con Estas medidas sólo empeoraron la
Marruecos el primer lugar entre los extran- situación, y a la postre resultaron inútiles.
jeros en el país (OPI). Como una ráfaga se En marzo-abril de 1999 se materializa el
fueron estableciendo en el país y hoy en congelamiento de los depósitos banca-
día son la base de uno de los más conso- rios, por el que se pretendía evitar que la
lidados colectivos de inmigrantes en desconfianza de la población concluyese
España. Los vínculos entre Ecuador y en el retiro de los fondos depositados en
España se han renovado y revitalizado en los bancos, y por tanto su quiebra.

26
Pags 025-040:maq revista 23 x 28 22/07/2007 18:53 Página 27

Finalmente la situación se tornó incon- Tras la crisis económica que acabamos


tenible, y el gobierno se declara insolven- de describir, cientos de miles de personas
te. Los sentimientos de pánico, la descon- en el paro, con miedo, frustración, enor-
fianza en los políticos y en el sistema mes pérdidas, y quiebras vitales y finan-
financiero se hacen notar cada vez más. cieras, encuentran la fortaleza para bus-
Así pues, el gobierno se cobró la crisis en car nuevas estrategias de supervivencia.
los pequeños ahorradores, que de un día Y sin duda, dada la situación del país,
al otro vieron que el decreto les impedía una posible escapatoria es la migración.
retirar cantidades superiores a 550 dólares. Apoyados en varios cientos de pioneros
Pequeñas y medianas empresas que se que ya habían emigrado a España antes
vieron imposibilitadas para solventar las de la crisis final, los ecuatorianos vuelven
deudas que tenían y por supuesto incapa- la mirada a su anterior poder colonial y a
ces de mantener los puestos de trabajo. través de él, a toda Europa. Estados
Y este fue el paso previo para el anun- Unidos, tradicional destino de la migra-
cio de la completa dolarización de la eco- ción ecuatoriana, había puesto demasia-
nomía siendo el segundo país en toda do difícil la entrada, mientras que España
América Latina (después de Panamá) que por el contrario no les pedía ni visado y
oficialmente renuncia a su moneda nacio- presentaba una demanda laboral estable
nal (el Sucre) para adoptar otra extranjera. y de similar calidad a la norteamericana.
La dolarización es vivida por las fami- Estos dos flujos migratorios son domi-
lias ecuatorianas como un encarecimien- nantes en dos etapas históricas muy dife-
to masivo de todos los productos, espe- rentes, pero hoy en día coexisten. Las
cialmente los de primera necesidad, de migraciones hacia Estados Unidos
manera que su poder adquisitivo se redu- comienzan, curiosamente, con el recluta-
ce considerablemente, o como ellos mis- miento activo de soldados costeños que
mos expresan: “desde que llegó el Dólar, puedan resistir las condiciones climáticas
el dinero no alcanza para nada”. Los en Vietnam. Estos hombres se quedan en
siguientes datos son sólo una fría, aunque el país, consiguen su green card y a ellos
escalofriante, muestra de los efectos de la les siguen otros migrantes de la costa y la
crisis en la población: sierra que poco a poco van formando

Evolución de la pobreza (en porcentajes)

Años Pobreza Pobreza Extrema Niños viviendo


en
hogares pobres

1995 34% 12% 37%

2000 71% 31% 75%

Fuente: Banco Central del Ecuador, Información


Estadística Mensual, Nº 1793.
En Alberto Acosta, “Breve historia económica
del Ecuador”. Corporación Editora Nacional,
Quito, 2004.

27
Pags 025-040:maq revista 23 x 28 22/07/2007 18:53 Página 28

comunidades de paisanaje en varios La casi permanente crisis en Ecuador,


asentamientos norteamericanos. Poco a apenas maquillada por los recursos
poco, estudios de caso antropológicos petroleros, iba a sentar las bases de una
van ayudando a comprender el porqué y migración internacional contenida hasta
el cómo de estas migraciones en Nueva entonces en provincias como Azuay y
York y su área colindante, así como en Cañar. No obstante, no hay que olvidar
menor medida en Los Ángeles, o Florida los importantes flujos de migración inter-
(Kyle, 2003; Miles, 2004). En estos estu- na del país, entre los que contamos con
dios vemos características similares a las excelentes datos y materiales cualitativos
que más adelante describiremos para (Carrasco y Lentz, 1985). Esa “cultura
nuestro estudio de caso. Sin embargo, migratoria” estaba ya en el país, sobre
una de las mayores diferencias entre todo en las capas más humildes y en las
ambas es el ritmo de asentamiento: más altas. Aún así, en este momento las
ganas de emigrar se extienden por todo
el país y afectan a mujeres y hombres por
igual.
Aunque como describimos en otro
lugar no son pocos los intelectuales de la
élite que enfatizan la ignorancia con la

Características cuantitativas de ambas etapas migratorias

Primera etapa migratoria Segunda etapa migratoria

Número aproximado
de emigrantes 700.000 700.00

Inicio del flujo 1951 1998

Final del flujo 1995 2003

Años de duración 44 5

Velocidad por año 15.909 140.000

Fuente: “Cartillas para la migración”, Nº 10, Ed.


Plan Migración, Comunicación y Desarrollo,
Quito, diciembre de 2004.

28
Pags 025-040:maq revista 23 x 28 22/07/2007 18:53 Página 29

Migración de los ecuatorianos en la nueva ola migratoria

AÑOS EMIGRACIÓN DESDE EL ECUADOR

1998 40.735

1999 91.108

2000 175.922

2001 138.330

2002 100.738

2003 87.413

TOTAL 634.246

Fuente: “Cartillas para la migración” Nº10, Ed.


Plan Migración, Comunicación y Desarrollo,
Quito diciembre de 2004.

Destino de los emigrantes ecuatorianos en porcentajes

EE.UU. ESPAÑA ITALIA OTROS PAÍSES

HASTA 1995 65% 15% 4% 16%

1995-2000 30% 53% 10% 7%

Fuente: INEC. En “Cartillas para la migración” Nº


3, Ed. Plan Migración, Comunicación y
Desarrollo, enero de 2003.

29
Pags 025-040:maq revista 23 x 28 22/07/2007 18:53 Página 30

representante es el Cabildo, agrupa a 17


barrios distintos y de acuerdo al último
censo realizado en Ecuador (2001), del
Instituto Nacional de Estadística y Censos
viven algo más de 15.000 personas. (L.
Altamirano, Tesina del máster en Género
y Desarrollo, 2004)
Siempre en el área de influencia quite-
ña, la comuna ha sido hasta hace poco
una zona eminentemente rural, con
pequeñas casas diseminadas a lo largo de
una gran superficie y rodeadas de zonas
de cultivos. Su población se ha dedicado
al cultivo agrícola, especialmente del
maíz, y a la crianza de animales como el
pollo o el chancho (cerdo) durante
muchos años. Este trabajo tradicional,
que alimentaba los rituales y la organiza-
ción comunitaria y familiar, era comple-
mentado a menudo por trabajos asalaria-
dos en el sector servicios de la cercana
urbe. El impacto de la sequía vivida en
los últimos años hace casi ruinosos los
esfuerzos por mantener algunas parcelas
cultivadas. El camino hacia la urbaniza-
ción de la comunidad ha venido acompa-
ñado del impacto medioambiental de los
desechos de la gran metrópoli, destrozan-
do su entorno y contaminando el agua de
sus ríos.
“Verá, tenemos la quebrada, que era el
río nuestro donde... de ese agua comía-
mos, con ese agua nos bañábamos, con
ese agua lavábamos la ropa y todo... ¿qué
es lo que sucedió? Vino toda la parte de
la ciudad, me refiero de acá de los barrios
que los emigrantes inician su proyecto de Quito, de todas esas aguas servidas
migratorio (Arizaga, 2005), nuestro traba- (residuales) y nosotros hemos caminado,
jo y el de otros, no sólo desmiente esta hemos visto cómo lo han hecho... simple-
opinión, sino que la desvela como parte mente con cañerías clandestinas, dejar
de un discurso patriotero interesado que las tuberías y que caiga el agua y listo.
actúa sólo a posteriori. Veremos a conti- (…) No hubo gente a la que realmente le
nuación a través del ejemplo de Jatun importara este río y dejó que bajaran
Pamba cómo no hay que minusvalorar las todas las aguas servidas de la ciudad de
consideraciones racionales sobre este Quito, entonces nosotros como usted ve,
destino migratorio. Si bien a pesar de sus estamos rodeados de agua servida”.
claroscuros el éxito de los proyectos Sin embargo, el proceso de moderniza-
5. Las Haciendas son extensas parcelas de tierra
migratorios es indudable, la opinión ción de la comunidad ha venido siendo
dominante a partir de entonces será constante en los últimos cincuenta años,
pertenecientes a la élite ecuatoriana (blanca y
negativa, estigmatizante, y culpabilizado- acelerándose a partir de las leyes de
mestiza) que producía para el mercado aunque no
ra de los males del país. Reforma Agraria que acaban por disolver
mediante relaciones de producción capitalista el sistema de las grandes Haciendas y
sino a través de relaciones de trabajo precapitalis- liberan no sólo tierra sino mano de obra
tas como el huasipungo y yanapa, que establecía La emigración en la comuna de que tradicionalmente se mantenía arrai-
un conjunto de derechos y deberes entre el Jatun Pamba gada al territorio5. En nuestras primeras
dueño de la tierra y los trabajadores campesinos entrevistas, las abuelas y abuelos de la
Jatun Pamba es el nombre en Queichua comunidad nos contaron el inicio de las
indígenas (Guerrero, 1984). En el área en que tra-
de una comuna tradicionalmente habita- migraciones en Jatun Pamba. El impacto
bajamos, los campesinos acceden desde finales
da por indígenas que está situada al nor- de los procesos de urbanización signifi-
de los años 50 a parcelas de tierra mediante oeste de Quito, a unos 2600 metros de caron una reorganización del trabajo pro-
acuerdos privados que hoy en día aún causan pro- altitud. Pertenece administrativamente a ductivo entre los miembros de la familia,
blemas legales a los campesinos. la parroquia de Calderón, su mayor siendo la mujer la que pasa a ser respon-

30
Pags 025-040:maq revista 23 x 28 22/07/2007 18:53 Página 31

sable de la siembra y cuidado de las par- res es invitada por sus patrones a viajar a
celas agrícolas que no dan lo suficiente Rusia y de ahí a España. Ella será una de
para mantener una familia. En el caso de las personas más importantes en la crea-
las familias son mayoritariamente los ción de una sólida cadena migratoria. Su
varones los que comienzan a salir fuera hermano, por el contrario, inicia los via-
de la comuna, en nuestro caso hacia jes internacionales a través de una beca
Quito, en busca de trabajos asalariados que le lleva a estudiar a Cuba. A su vuel-
que completaran los ingresos de la uni- ta involucra a su familia y conocidos en
dad doméstica, siendo esta una situación la creación de una cooperativa de artesa-
general para la sierra Ecuatoriana. nías. Mientras que la madre rescata el
El proceso de integración de la comu- conocimiento artesano, su hijo pone a
na en el mercado laboral urbano impulsa prueba sus dotes comerciales y con la
un proceso de cambio cultural que pro- ayuda de su hermana en España instala
gresivamente va difuminando las raíces un exitoso negocio comercial que va más
indígenas de la comuna. Las historias de allá de una aventura empresarial personal
vida nos relatan este proceso, con su e involucrará a todo un colectivo de la
impacto diferenciado en el hombre y la comuna. El primer grupo es de mujeres
mujer: mientras el hombre en Quito se ve que se aventuran en la emigración inter-
impulsado a abandonar su vestimenta, nacional a través del comercio, no sin el
sus costumbres gastronómicas, y su len- reparo de sus maridos y comuneros.
gua por la presión de la cultura mestiza Esta primera “aventura” migratoria está
dominante, la mujer recibe esta presión en la mente de muchos miembros de la
en su misma casa, por su marido que la comuna cuando llegamos a realizar nues-
insta a acompañarle en su proceso de tro trabajo de campo, y algunas de las
“modernización”6. A menudo nuestros cadenas migratorias con las que hemos 6. Un análisis del impacto de este proceso de moder-
informantes insisten en la influencia de trabajado surgen a partir de las ramifica- nización en la comuna en la identidad étnica fue
los maestros en los colegios de la zona, ciones de estas familias pioneras. Sin escrito por L. Rodríguez en su trabajo doctoral pre-
que disuaden a los niños de hablar embargo, con el tiempo las condiciones sentado al Tribunal de Estudios Avanzados en el
Quechua. Así, poco a poco, los marcado- de la migración se hacen más difíciles.
año 2003-04 bajo la dirección de Liliana Suárez.
res externos de la herencia indígena van Inicialmente, mujeres y hombres viajan
desapareciendo. con la ayuda de otros paisanos, muchas Desde aquí queremos agradecer y reconocer su
La comunidad se proletariza progresi- veces familias directas, que les ayudan en labor etnográfica durante su intenso mes de traba-
vamente, adquiriendo como el resto de los primeros tiempos en España y en las jo de campo en 2003.
los campesinos ecuatorianos, nuevas necesidades básicas: vivienda, trabajo,
modalidades de consumo y nuevas compañía. La demanda del mercado
expectativas sobre sí mismos y sus hijos. laboral español es sostenida y tarda en
En el caso de comunidades como la de saturarse durante los primeros años, y
Jatun Pamba, y al contrario de la progre- poco a poco habitantes de la comuna se
siva profesionalización del reclutamiento van estableciendo principalmente en
de trabajadores en los ingenios costeros, Madrid, pero también en Murcia o
la presencia de las redes clientelares Almería. Igual que en Quito, muchos
sigue siendo crucial en un mercado emigrantes de Jatun Pamba se insertan en
incierto y en cierta medida caótico servicio doméstico o el servicio de lim-
(Carrasco & Lenz, 1985: 118). Como rati- pieza. Otros, los menos, se dirigen hacia
fican nuestras historias de vida, el con- los enclaves agrícolas en la costa
tracto con mestizos profesionales, diplo- Murciana o Almeriense. Muy pocos conti-
máticos, abogados, funcionarios, parece núan con el oficio de comerciar con arte-
ser clave en la inserción urbana de los sanías en las ferias españolas, incluso los
campesinos migrantes en los años seten- pioneros en este oficio buscan trabajo
ta. En estos procesos migratorios inter- complementario en el sector de servicio
nos, las redes comunitarias y los lazos de de transporte y mensajería.
parentesco están presentes de una forma Las condiciones de vida son duras,
determinantes, igual que en las migracio- pero esto no es nuevo para los habitantes
nes internacionales en las se embarcan de Jatun Pamba. Su “cultura migratoria”
los primeros comuneros. como campesinos andinos los ha hecho
De hecho en la comuna la emigración adaptarse a diversos entornos e imple-
es temprana. Los primeros emigrantes mentar diversas estrategias de supervi-
que conocemos se insertan en el sector vencia de manera creativa. Pronto pasan
servicios, concretamente en la empresa las primeras etapas de alquiler de un
de limpieza municipal y en el sector cuarto compartido, de pago de la “deuda”
doméstico de las grandes embajadas y y de adaptación al nuevo entorno laboral
consulados de Quito. Una de estas muje- y sociocultural, y su enorme capacidad

31
Pags 025-040:maq revista 23 x 28 22/07/2007 18:53 Página 32

de ahorro encuentra sus frutos. Aunque que hacen de un fenómeno reiterado la


todos han pasado por la experiencia de regla, los apoyos prometidos suelen fun-
ser considerados “ilegales” en territorio cionar y ser capaces de integrar en nichos
español, poco a poco van sacando sus laborales a los recién llegados, encon-
papeles en un proceso de negociación trarles un hueco en una vivienda, orien-
con los patronos y aprovechando las tarles en la nueva sociedad, incluso inte-
diversas posibilidades de regularización grarles en redes de socialización neta-
que hubo hasta el año 2000, y ya más mente ecuatoriana, a veces incluso casi
recientemente en la última “normaliza- netamente comunera, en destino8.
ción” de inmigrantes donde un elevadísi- Es natural que el proceso de reconstitu-
mo número de ecuatorianos adquiere un ción de la “comunidad” en la diáspora no
estatus administrativo regular. La condi- haya sido un proceso fácil. Aún hoy la
ción de irregularidad no ha significado en comunidad se siente herida, desorienta-
el caso de los ecuatorianos en general da, vaciada. El discurso es tan tremendis-
(como para el resto de los inmigrantes) el ta que nos sorprende que ellos mismos
paro y la desocupación, sino el uso más sean parte de esta migración. En nuestras
intenso de los recursos personales y conversaciones con los familiares de los y
comunitarios para la inserción en los las emigrantes en Jatun Pamba nos dimos
7. Es interesante encontrar cómo en la historia de mercados laborales españoles7. Sus tra- cuenta que en general la comunidad es
los campesinos indígenas el uso de los documen- yectorias laborales, más bien inestables y consciente de que muchos de los que se
tos de familiares o vecinos era una prácticas insti- cambiantes en los primeros momentos, han ido no volverán, al menos en mucho
tienden a estabilizarse en un punto con- tiempo. Al comenzarse a superar la visión
tucionalizada en el ingenio azucarero de la costa
creto del proyecto migratorio en el que se nostálgica de la migración temporal, sur-
ecuatoriana, como muestran las historias de vida
embarcan en el proceso de reunificación gen procesos contradictorios que eviden-
recolectadas por Carrasco y Lentz (1985). En el familiar, ya sea a través de los cauces cian una profunda tensión entre la acep-
momento en que las prácticas de contratación establecidos legalmente, o la más de las tación de ciertos cambios profundos que
abandonas los eslabones clientelares, las redes veces, como una reagrupación que se ha afectan las estructuras mismas de poder
familiares y comunitarias se colocan como recur- dado en llamar “de facto”. en las unidades domésticas y en la comu-
sos privilegiados para los campesinos. Lo cierto es que en el lapso de diez na, y la resistencia a que estos cambios
8. Esto no quiere decir que debamos romantizar
años Jatun Pamba se había convertido no sean permanentes. En la siguiente sec-
ya simplemente en un cuasi-suburbio de ción describiremos algunos de los fenó-
estos apoyos. De hecho, y aunque no podamos
la capital quiteña sino en gran medida en menos, identificando la preocupación
extendernos en esto aquí, las redes migratorias un suburbio de Madrid. Sus habitantes latente por reconstruir un nuevo imagina-
que hacen posible la realización de los proyectos conocían bien en nuestras entrevistas la rio comunitario, si bien las nuevas condi-
migratorios se caracterizan por un altísimo nivel geografía española, las costumbres, los ciones transnacionales y de profunda
de mercantilización, incluidas las relaciones fami- modismos castellanos para aludir al ayun- transformación de las estructuras de
liares transnacionales. tamiento (municipio) o al cerdo (chan- género, exigen de los comuneros no solo
cho), entre otros. Casi todas las familias esperanza sino estrategias adecuadas que
tienen a alguien en Madrid y han experi- puedan revertir los efectos desarticulado-
mentado la emigración directa o indirec- res de la globalización en la comuna.
tamente. En nuestras entrevistas la razón
que se argüía era la falta de posibilidades
de trabajo en la comuna, incluso en Migración y género
Quito. La inestabilidad de los trabajos, los
bajos salarios, las peores condiciones, En Jatun Pamba la emigración internacio-
hacían optar por la emigración interna- nal ha sido de forma mayoritaria un resul-
cional a estos comuneros que ya no eran tado de las estrategias familiares de
propiamente ni campesinos ni indígenas supervivencia ante las crisis reiteradas de
y que buscaban a través de nuevas vías las que el país parecía no recuperarse.
formas de superar la posición marginal y Estas estrategias familiares unidas a la
subalterna en que parecían estar aboca- demanda de trabajadoras del tercer
dos. mundo como domésticas en los países
Es por eso que nos sorprende que la desarrollados o en vías de desarrollo
emigración de los compatriotas sea tantas (Sassen, 1998 y Parreñas, 2001) motivaron
veces juzgada como irracional, no medi- en su momento la decisión consensuada
tada, o desinformada. En general los emi- de que fuera la mujer la que iniciara la
grantes de Jatun Pamba que hemos cono- cadena migratoria.
cido en España no hacen referencia a En el caso de Jatun Pamba vemos tam-
grandes desilusiones en su proyecto bién muchos hombres que se sirven de
migratorio, como sí lo hemos encontrado sus redes comunitarias y lazos familiares
en otros colectivos como el Rumano (ver para emigrar. Encontramos que en un
Suárez Navaz, n.d.). Con las excepciones número superior de las familias entrevis-

32
Pags 025-040:maq revista 23 x 28 22/07/2007 18:53 Página 33

tadas, es el varón quien inicia la cadena incluso los profesionales más cercanos a
migratoria, y no es tan predominante el estas problemáticas, como maestros y tra-
uso de cadenas de inserción laboral bajadores sociales, destacan visiones
exclusivamente femeninas, como en el negativas sobre el impacto de la migra-
caso de las mujeres dominicanas. Sin ción en la familia. ¿Por qué esta reacción
embargo, es completamente generalizada sucede ahora cuando las migraciones
la transformación de los roles tradiciona- internas o incluso las migraciones inter-
les en los que el varón era el principal nacionales hacia Estados Unidos también
proveedor doméstico y la mujer realizaba habían separado temporalmente a las
su trabajo, las más de las veces informal familias? Pensamos que algo tienen que
y no asalariado, en el ámbito doméstico. ver el hecho de que esta vez las estructu-
Nuestra hipótesis es que se invisibiliza ras materiales de género que sostenían la
sistemáticamente el rol fundamental de ideología patriarcal están realmente en
las mujeres en el mantenimiento de los peligro. Por ello quizás el país ecuatoria-
lazos familiares transnacionales tanto no y la comunidad han encendido la alar-
como el rol pasivo o elusivo que los varo- ma roja sobre los efectos de la migración.
nes están teniendo respecto al manteni- También presente, no cabe duda, está el
miento de la familia. En el campo trans- hecho de que en una situación de crisis
nacional, se viene a naturalizar la tenden- cuasi-crónica, las remesas de los migran-
cia hacia el cuidado por parte de las tes son absolutamente necesarias, y uno
mujeres tanto como la tendencia a legiti- de los instrumentos para llamar la aten-
mar la generalizada despreocupación de ción de manera eficaz es victimizar a los
los varones sobre las tareas domésticas, niños para así alimentar un sentimiento
reproductivas y en general cualesquiera de culpabilidad que consiga mantener los
que puedan poner en peligro su masculi- vínculos comunitarios vivos. De esta
nidad. forma de patologización y sus efectos en
Es desde nuestro punto de vista muy las transformaciones de género en las
significativo que la ideología de género familias nos ocuparemos más adelante.
patriarcal tradicional se mantenga a pesar
de la trasformación material de las bases
de la subordinación femenina señalada Mujeres de la comunidad trans-
por los feminismos tradicionales, bien sea nacional Jatun Pamba
la dependencia económica de la mujer y
la restricción de sus roles en el espacio Una de las impresiones personales más
doméstico y reproductivo, bien la jerar- evidentes al estar haciendo nuestro traba-
quización entre los espacios dominados jo de campo en Ecuador era el dolor con
por uno y otro sexo, el público por los el que los comuneros afrontaban la
varones y el privado por las mujeres. Los migración y sus efectos en Jatun Pamba.
procesos migratorios y el impacto del Este sentimiento está presente de una
capitalismo postfordista han producido manera muy especial en las familias de
de hecho tanto la incorporación de la los emigrantes y de forma aún más aguda
mujer al ámbito productivo como su pre- en las mujeres. El aspecto emocional de
sencia en el ámbito público. Aunque hay los fenómenos sociales apenas se ha teni-
factores que limitan esta transformación do en cuenta en los relatos etnográficos,
(como los nichos de empleo en el servi- por ser considerado una dimensión per-
cio doméstico o el trabajo sexual), lo cier- sonal, pero desde el trabajo de Renato
to es que deberíamos encontrar conse- Rosaldo en Cultura y Verdad la dimen-
cuentemente un cambio en la ideología sión emocional ha entrado a ser parte del
de género acorde con la nueva situación. análisis antropológico como una cons-
Como mostramos a continuación a tra- trucción cultural paradigmática. El análi-
vés de los testimonios de las mujeres en sis feminista, más aún, ha identificado
Jatun Pamba, las migraciones transnacio- esta construcción como parte del sistema
nales han formado nuevos modelos de ideológico de género, naturalizando
familia que sin embargo no son asumidos como rasgo propio de la mujer las emo-
como tales por la comunidad. Familias ciones, la sensibilidad, y las habilidades
dispersas a través de varios territorios relacionadas con el cuidado propio del
nacionales (madre y/o padre migrante e trabajo reproductivo.
hijos en origen) se perciben de manera En su análisis de la migración transna-
generalizada como patológicas, “disfun- cional de trabajadoras Filipinas, Parreñas
cionales”, o destrozadas (ver Herrera, sugiere que es esta ideología la que, por
2005; Meñaca, 2005; Parreñas 2005). Los una parte coadyuva a la segregación
medios de comunicación, los políticos, e laboral de las mujeres en trabajos “de

33
Pags 025-040:maq revista 23 x 28 22/07/2007 18:53 Página 34

mujeres” (peor pagados y considerados teniendo que sacar a los hijos y el hogar
socialmente), y por otra impone sobre la adelante. La mayoría no trabajaba fuera
mujer expectativas desproporcionadas en de casa, lo que supone tener que encon-
relación al hombre sobre la atención trar estrategias de supervivencia en cuan-
emocional en el trabajo reproductivo pro- to a mantener un hogar con unos hijos
pio del ámbito doméstico (2001). En otras pequeños y encontrar un empleo que les
palabras, la emoción a través de la cual ayude a salir adelante. Los trabajos asala-
las mujeres son socializadas y que las dis- riados que necesitan están en muchas
pone a una actitud de cuidado y atención ocasiones fuera de la comuna, y suelen
por los intereses de los demás tanto en el ser en el sector de la agricultura, en algu-
trabajo como en casa no es un talante na empresa de la zona metropolitana de
“natural” sino derivado de la socialización Quito, en el servicio doméstico o en el
de género. Estas expectativas del com- sector servicios.
portamiento naturalizado de las mujeres Cuando la familia decide optar e inver-
tienen un importante efecto en los proce- tir en el proceso migratorio, esta decisión
sos migratorios tanto en los casos en los puede ser consensuada, impuesta a uno
que los esposos migran como en aquellos de los miembros de la familia (como el
en los que las mujeres no sólo se incor- caso de los hijos mayores en el área
poran al sistema productivo sino que Africana, ver Suárez Navaz, 2004) o adop-
incluso pasan a ser las principales prove- tada por uno de los miembros de la fami-
edoras económicas. lia sin el apoyo de los demás. En este últi-
En la mayoría de los casos el emigran- mo caso, la emigración puede ser una
te necesita un tiempo para asentarse en el escapatoria de una situación de convi-
9. Normalmente los migrantes se ven obligados a país de destino, pagar su “deuda”9, y esta- vencia difícil o incluso violenta, como
pedir un préstamo para realizar el viaje, y cubrir los bilizarse para mandar las primeras reme- hemos visto en los testimonios de algu-
gastos de los primeros días en el país de origen. sas. Tanto en el caso de las mujeres como nas mujeres migrantes. En los casos en
Esta cantidad es cedida en ocasiones por familia-
en el de los varones migrantes, la marcha los es el esposo el que decide migrar sin
significa dejar organizada en Jatum el apoyo de la mujer, se desencadenan
res y en muchos casos por prestamistas especia-
Pamba la logística doméstica. Al ser la sentimientos de miedo y culpabilidad,
lizados en esto, denominados chulqueros. inversión inicial fuerte, muchas familias como en el caso de Rosa: “…fue bastan-
no tienen recursos para mantenerse hasta te doloroso (…) tal vez si yo hubiese
la llegada de las remesas y, especialmen- actuado de otra forma, él no se hubiese
te en el caso de las mujeres, la emigra- ido, mis hijas estarían bien, con su fami-
ción del cónyuge puede significar el lia completa, o tal vez nos hubiésemos ido
comienzo de la vida laboral en origen. los dos…” . La culpabilidad está siempre
Entre 27 de nuestras entrevistas, hemos relacionada con el miedo de perder al
encontrado la situación de 19 mujeres marido, puesto que se les supone infieles
cuyos esposos han emigrado y se han por naturaleza e incapaces de vivir solos,
visto de pronto solas, sin recursos, como en el caso de Laura, que estuvo

34
Pags 025-040:maq revista 23 x 28 22/07/2007 18:53 Página 35

casi un año sin saber nada de su marido por parte de la familia de él, entonces en
desde que se marchó y que nos manifes- el momento en el que él me dejó a mí sola
taba su angustia y preocupación más por (…) la familia de él tendió a darme la
si había formado otra familia que por si le espalda, hasta tal punto que ya ni me
había ocurrido algo: “…ya sí me siento saludaban (…) Yo al comienzo lo tomé
más tranquila, porque al principio casi como pasajero, pero poco a poco eso sí fue
no había comunicación y no sabía dónde repercutiendo en el resto de las personas
estaba, ni con quién estaba, si vivía con de la comunidad (…) era duro, era difí-
otra familia…” cil y encima no tenía trabajo”
La duda sobre si el marido tiene nueva Como vemos, las críticas pesan bastan-
pareja, si tiene otros hijos y otra familia te sobre las mujeres que se quedan solas.
en el país de emigración está siempre En estos casos, la falta de autoestima per-
presente. Aunque intenten razonar por sí sonal se contrarresta con sus responsabi-
mismas que la culpa de ser abandonadas lidades como madres. Las ganas de salir
no es de ellas, afloran sentimientos de adelante por sus hijos les hacen tomar
culpabilidad y de falta de autoestima. Esta actitudes de responsabilidad y valentía,
situación tiene que ver con la soledad pasando por encima de las críticas. Rosa
real a la que estas mujeres se enfrentan nos lo verbalizaba de la siguiente mane-
con la marcha del esposo. En algunos ra:
casos, las mujeres vuelven a vivir con sus “¿Cómo lo conseguí?...poniendo mucha
madres para encontrar el apoyo necesa- fuerza de carácter, fueron momentos
rio en sus tareas cotidianas, poder salir a muy duros que… bueno, ahora los
buscar trabajo y contar con alguien que recuerdo con más tranquilidad, porque
cuide a sus hijos. En ocasiones es la única ya no duelen tanto, pero en su momento
persona en quién confiar ya que la fami- sí fueron bastante difíciles, el verme aquí
lia del esposo con la que normalmente ha sola sin el respaldo de él como marido, la
convivido, puede ser bastante crítica si la comunidad… donde nos desenvolvemos
reacción de la mujer no es la que espe- aquí marcan y critican mucho a las
ran. mujeres que se quedan solas”
El control social de la familia del espo- “…si yo me dejaba caer, mis hijas iban
so hacia la mujer que se queda sola hace a caer, y yo no veía la forma de darle la
que se le exija continuar en el rol asigna- comida, las cosas básicas que necesita-
do de “esposa de”, sometida en general a ban el la casa, el cariño y todo… ¿qué iba
la autoridad de la suegra y dependiendo a ser de mis hijas?, si les pasaba algo ¿qué
de las decisiones y expectativas de la iba a ser de mí?, y entonces yo me propu-
familia política. En varios casos en los se ese objetivo, que mis hijas y mi madre
que pasado el tiempo se evidencia un estén bien entonces busqué ayuda en per-
abandono por los esposos, encontramos sonas completamente ajena a la familia,
una percepción muy extendida de que y la familia por eso también me critica-
esta situación es consecuencia de los ban, porque querían que yo fuese lloran-
actos de la mujer, un escarmiento mereci- do o suplicando o pidiendo ayuda. Al ver
do por algo que ha hecho o dejado de esa actitud me rechazaron y yo preferí
hacer. Al ser en principio los argumentos cerrar todo tipo de relación con ellos (…)
inculpatorios hacia la mujer y su compor- y no me ha ido tan mal, la verdad”
tamiento, la actitud esperable es siempre A pesar de que es bastante frecuente
de arrepentimiento y dependencia. que la mujer en Jatún Pamba salga al
Rosa tuvo una situación difícil cuando extranjero, en la mayoría de los casos que
su marido emigró, y aunque los proble- hemos entrevistado durante el trabajo de
mas conyugales eran anteriores a la emi- campo, observamos como mayoritaria la
gración por parte de la familia de él, situación de que sea el marido quien ini-
siempre se le consideró la culpable de la cia el proceso migratorio, y la mujer
ruptura: quien queda en origen con las responsa-
“…tuvimos bastantes problemas fami- bilidades familiares y las dificultades que
liares (…) busqué ayuda con mis padri- anteriormente se han descrito. No obstan-
nos pero como eran más familia de él te cabe resaltar que también es mayorita-
entonces todo lo malo lo vieron en mí (…) ria la reagrupación familiar transcurridos
no resultó una mediación imparcial unos años.
como se podría decir, sino una inclina- Si las esposas que se quedan en origen
ción hacia él” asumen todas responsabilidades del tra-
“tienden a juzgar demasiado, seña- bajo reproductivo y doméstico, ¿qué
lan… al menos a mí, yo sufrí con esto sucede con aquellas familias en las que
porque la mayoría de mis amistades eran es la mujer la que ha migrado en prime-

35
Pags 025-040:maq revista 23 x 28 22/07/2007 18:53 Página 36

ra instancia? Son las familias, y en gene- capacidad de gestión del dinero, sino
ral las familias de la mujer, las que se más allá de esto: una oportunidad de rea-
quedan a cargo de los niños e incluso en firmar su autoridad frente al esposo, su
ocasiones del esposo, si éste no ha emi- familia e incluso la comunidad. No cabe
grado. Cuando el esposo queda al cargo duda que esta nueva situación permite a
del hogar, muy difícilmente se hará res- las mujeres aumentar su estatus social y
ponsable de algo más que recibir y distri- de alguna manera negociar frente a su
buir las remesas. En general esto es familia su ausencia, su integración en el
inconcebible en la mentalidad patriarcal ámbito laboral en el extranjero, fuera del
de la comuna, donde fácilmente se natu- control directo de los que antes de su
raliza la ineptitud del varón de hacer partida controlan mayormente sus movi-
frente a estas labores “afectivas”. Son más mientos e incluso sus decisiones.
bien las redes familiares de las mujeres No obstante, los trabajos a los que
migrantes las que son responsables de los están optando en su mayoría las ecuato-
niños que quedan atrás. Abuelas, tías, rianas son en el servicio doméstico y en
hermanas, todas ellas doblan o triplican el cuidado de personas enfermas y ancia-
su labor. En la inmensa mayoría de los nos. Por una parte, estos sectores labora-
casos, estas mujeres ya tienen además les se encuentran en la base de la estrati-
mucho peso sobres sus espaldas, puesto ficación sociolaboral en España, no están
que mantienen a su propia familia, y muy bien pagados ni tienen condiciones labo-
a menudo también trabajan. Esto lleva a rales ventajosas al estar este sector alta-
una gran sobrecarga de trabajo de la mente desregularizado. La falta de docu-
mujer, que ve como las tareas asignadas a mentos que autorizaran este trabajo (los
su rol reproductivo crecen día a día y se famosos “papeles” de los inmigrantes),
engrosan con la migración de sus familia- supone además una gran precarización
res. El impacto de género es enorme, en las condiciones laborales teniendo
incluso entre las propias hijas de las que tolerar salarios muy por debajo de lo
migrantes, algunas de las cuales incluso aceptado en España además de la impo-
sin llegar a la mayoría de edad pasan a sición de larguísimas jornadas laborales.
tener enormes responsabilidades en el Esto, sumado a la responsabilidad que se
cuidado de los hermanos pequeños. El tiene respecto a las cargas familiares en
caso de las abuelas es claro: España y Ecuador, supone que en
“(...) y ellos (sus nietos) ya son más muchas ocasiones las mujeres se encuen-
mayorcitos, ya les entrego a sus papás... tran sometidas a unas durísimas condicio-
sintiendo mucho, porque yo ya no estoy nes de trabajo. En las primeras etapas
para mis nietos, tantos años ayudando... esta suele ser una razón fundamental ale-
estoy operada de vesícula, y me siento gada por la emigrante para retrasar la rea-
mal, así un dolor de cuello, por todo... a grupación familiar.
veces tengo mucho sufrimiento me ataca En las entrevistas realizadas en el con-
a la cabeza... llevo sufriendo esto, quince texto de la investigación en Madrid es
días ya... relevante el fenómeno de la “maternidad
El doctor me habló, me dijo: «no, señora a distancia”, como una modalidad nueva
usted tiene que tranquilizarse” “porque de atención y cuidado de los hijos desde
yo tuve muchas iras esta mañana” le dije, el entorno migratorio (ver Parreñas, 2001
y me dijo: « usted está grave, no más, ya y Hondagneu Sotelo, 1997). La materni-
mucho han abusado sus hijos...” ya, sin- dad a distancia implica para las mujeres
tiendo mucho, cuando vengan, usted les que hemos conocido dolor, frustración y
devuelve los guaguas” y eso vamos a culpabilidad. Es un proceso que raramen-
hacer, porque tengo ya cerca de 60 años, te es experimentado por los migrantes
llevo ocho años cuidando de mis nietos y varones, cuyo rol de proveedor satisface
La ideología que asigna el cuidado a las mujeres
10.
ya no tengo ni fuerzas...” más que el en caso de las mujeres, su
asigna la emoción como un rasgo "natural" feme- identidad y propósitos vitales. La emo-
nino que sin duda se espera de las cuidadoras y La mujer que emigra sola a España trata ción envuelta en prodigar amor transna-
domésticas. En nuestras entrevistas con emplea- de buscar trabajo enseguida, pagar la cionalmente crece a medida que en su
doras de mujeres rumanas o ecuatorianas, en deuda que ha contraído para el viaje, y ámbito laboral la actitud ante el cuidado
muchas ocasiones nos han comentado que prefe- enviar remesas a su familia en Ecuador. en el servicio doméstico se profesionali-
La incorporación de la mujer en el mer- za10. La respuesta de las mujeres es acen-
rían latinoamericanas en general, porque era "más
cado laboral, supone un aporte significa- tuar su rol maternal en relación a su pro-
cariñosas" y "dulces". Emma Martín describe el
tivo de recursos económicos en la fami- pia familia, lo que Hays ha llamado
modo en que en Sevilla han sido testigos de la lia. Esto refuerza la posición femenina en “maternidad intensiva” (1996) o lo que
progresiva sustitución de marroquíes por ecuato- la familia y en la comunidad otorgando a Parreñas denomina “caricaturización de la
rianas (Martín Diaz s.f.) la mujer no sólo una mayor autonomía y maternidad” (2005)

36
Pags 025-040:maq revista 23 x 28 22/07/2007 18:53 Página 37

A primera vista, podría además parecer los migrantes. Es un fenómeno que tiene
que en otro país la mujer escapa más bases reales, como son la dificultad de los
fácilmente del estricto control social al padres de ejercer su derecho a la reagru-
que se ve sujeta en su comuna. Sin duda, pación familiar por las restricciones
como se ha señalado en la literatura impuestas en Europa al respecto, además
sobre transnacionalismo en general y de una serie de consideraciones pragmá-
sobre el análisis de género en particular, ticas de los padres y madres migrantes
las mejoras en las telecomunicaciones, la basadas en sus condiciones de vida y de
comunidad transnacional ejercen una efi- trabajo. Lo cierto es que muchos prefie-
caz labor de control sobre el comporta- ren dejar a los niños con la familia en ori-
miento de las mujeres, y en especial con gen, sobrecargando, como hemos visto
las mujeres solas, ejerciendo sobre ellas en la anterior sección, de responsabilida-
una fuerte presión, bien sea en España o des a los miembros femeninos de la fami-
en Ecuador. lia en el polo de origen de la familia
Sin embargo, la mujer que emigra des- transnacional11. 11. Otra estrategia usada por algunas familias es
arrolla una actitud frente a si misma de De hecho, como hemos visto en la traer a las abuelas para que se encarguen del cui-
valoración que se ve empoderada con anterior sección, los miembros femeninos dado de los niños pequeños (ver Suarez Navaz,
herramientas sociales, psicológicas y de la familia de los y las migrantes son s.f.).
legales accesibles en el contexto de des- los encargados culturalmente de ejercer
tino, y que le supone un abanico de nue- los roles de la crianza cotidiana de los
vas posibilidades para enfrentarse a las menores. Aunque en muchísimas ocasio-
situaciones de la vida cotidiana. En el nes nos han hablado de “abandono” de
proceso de reconstrucción de la subjetivi- éstos hijos que se quedan solos en
dad femenina, hay valores y connotacio- Ecuador, lo cierto es que hemos encon-
nes morales interiorizados de tal manera trado una mayoría de familias trasnacio-
que supone una enorme violencia rom- nales que han mantenido una fuerte
per con ellos. Además, el rechazo general comunicación entre los dos polos del
de los migrantes en España, el descono- espacio migratorio transnacional, a pesar
cimiento de sus peculiaridades etnocultu- de las tensiones y problemáticas como la
rales, y la tendencia a buscar apoyo en separación conyugal y de los hijos, la
los compatriotas para superar la soledad precariedad laboral, la añoranza de la tie-
hace que muchas mujeres sigan inmersas rra, etc. En estos casos, padres, hijos y
en las mismas estructuras de socialización abuelos mantienen estrecha comunica-
en destino. Ante situaciones de confron- ción, especialmente a través de las llama-
tación entre sus valores tradicionalmente das telefónicas que son muy frecuentes.
adquiridos y los nuevos que está experi- Los casos de necesidad extrema como las
mentando en España, suelen mantener enfermedades o las crisis personales o
como referente identitario principal a sus familiares llevan a estrategias de movili-
sociedades de origen pero en ciertos dades a diferentes miembros de la fami-
aspectos claves vemos a estas mujeres lia, como los hijos que se turnan para ir a
buscar en el contexto español nuevos cuidar a abuelos que están solos, abuelas
referentes identitarios de género que sir- que se trasladan para apoyar en las nece-
van para afrontar las contradicciones sidades del trabajo del cuidado de los
entre la ideología patriarcal ecuatoriana y nietos en los países de origen, o padres
su nueva situación como trabajadoras y que ejercen su paternidad en la distancia,
proveedoras económicas. La actitud de en general manteniendo los roles adjudi-
control y estigmatización de lo que se cados por la ideología de género en la
supone es la conducta de mujeres y emi- distancia.
grantes en destino sólo hace que reforzar No queremos en modo alguno minimi-
esta tendencia: “allí en España vale todo, zar el dolor con que las familias viven la
pero nosotros eso no... no lo aceptamos, separación y el impacto en sus vidas coti-
nosotros no, nosotros somos diferentes”. dianas. De hecho la migración por una
parte evidencia desajustes previos que
pudieran existir en algunas familias (vio-
Los guaguas “solitarios” lencia doméstica, falta de comunicación),
y por otra parte puede también generar
Como hemos visto a lo largo del artículo, crisis y transformaciones profundas. En
hay un discurso dominante en el contex- ambos casos la familia originaria se pre-
to de origen que es enormemente crítico senta disgregada, poco compacta, y se
con la emigración y los emigrantes. Uno alza el riesgo de que no cubra las necesi-
de los iconos de este discurso es la ima- dades básicas de sus miembros, ni man-
gen de niños y niñas abandonados por tenga principios de reciprocidad y ayuda

37
Pags 025-040:maq revista 23 x 28 22/07/2007 18:54 Página 38

mutua que ayudan a cohesionar esta uni- “…se durmió sin saber que su mamá se
dad social en tiempos de crisis. iba y siempre estuvo enferma, siempre le
Aunque hemos encontrado estos casos, daba gripe o fiebre por las noches, enton-
en los que los niños parecen más desam- ces nosotros la cuidábamos hasta que un
parados, y cuya comunicación es mínima médico amigo le hizo llamar a mi herma-
con las y los migrantes, pero en general no y le dijo que no podía seguir en esa
hemos visto que en las prácticas cotidia- situación porque lo que tenía no era
nas los niños están a gusto con sus cuida- nada físico sino emocional”
dores y mantienen unas relaciones fluidas Algunas de las mujeres que se habían
con sus padres. Es evidente que estos quedado solas con los niños, y especial-
modelos familiares no responden a la mente el los casos en los que el padre se
unidad nuclear tradicionalmente proyec- desinteresa por la familia o ha formado
tada como “normal” en la ideología de la otra en destino, nos cuentan la reacción
familia occidental. Sin embargo la crianza de sus hijos. Son procesos en los que los
de los menores a manos de miembros de conflictos familiares y la falta de comuni-
la familia extensa, abuelas y abuelos, her- cación entre los padres, más que la
manas, o hijas mayores, ha estado pre- migración en sí misma, generan un terri-
sente siempre en las estrategias de las ble dolor en los hijos. Sentimientos de
familias migrantes, tanto en la migración rechazo de la madre, especialmente en
interna como en la internacional. Hay los casos en que ha emigrado el padre,
datos empíricos suficientes para mostrar esconden una culpabilización de la
que esta separación temporal entre madre de esta situación. Esto nos lo rela-
padres e hijos no es necesariamente trau- tó con detalle otra informante, que, en
mática (Erel, 2002) sus dos hijas, tuvo por un lado la reac-
Sin embargo, una condición básica ción de la hija mayor que la culpaba a
para que las familias funcionen es la ella de la marcha del padre y por tanto la
comunicación entre padres e hijos y la rechazaba y por otro lado, el apego inse-
capacidad de afrontar los conflictos y las guro de su hija pequeña, que tenía un
decisiones que tienen que realizarse en el miedo enorme a ser abandonada:
proceso migratorio. La falta de informa-
ción genera en los niños traumas difíciles “yo le decía que hacía sol afuera y ella
de abordar verbalmente. Marta Cristina me decía que no, que llovía yo le decía
nos hablaba de su sobrina cuya madre que sí y ella que no, entonces cuando yo
emigró a España y ella se hizo cargo del acudí a pedir ayuda donde una orienta-
cuidado de la pequeña junto a su herma- dora familiar me dijo (…) que si ella
no: tenía otra relación de más fuerza con

38
Pags 025-040:maq revista 23 x 28 22/07/2007 18:54 Página 39

otra persona de la casa y yo le dije que ga un empoderamiento que va más allá


con mi madre, entonces me dijo que yo del ámbito doméstico y una autoconfian-
permitiera que esa relación avanzara za generalizada que les ayudará a enfren-
para que ella se empiece a desahogar y a tarse a otros problemas. Una estrategia
decir lo que ella piensa (…) porque era muy utilizada por estas mujeres ante la
evidente que ella me echaba toda la culpa falta de recursos en la que se encuentran
a mi, eso en el caso de mi hija mayor, pero es la creación de cajas comunales y ban-
la pequeña se pegó demasiado a mí y dice cos de ahorro en los cuales mediante la
que tiene miedo de que yo también me aportación periódica de una pequeña
vaya y la deje sola” cuota estas mujeres y sus familias pueden
“…yo tenía que lidiar con los dos casos, contar con préstamos a un bajo o nulo
una no quería saber nada de mí, y la otra interés que utilizan para cubrir sus nece-
era demasiado pegada a mí y los dos sidades y deudas e incluso, en algunos
extremos….son malos” casos para invertir en semillas, animales
“… mi hija mayor se recubría como con de granja y otros proyectos productivos
un escudo, que si yo me voy no le va a comunales.
importar, no le va a doler” Otra causa por la que justifican la des-
Mientras, la pequeña, que apenas estructuración de la familia es por la
conoció a su padre, lo invisibilizó y situación de los menores que se quedan
hablaba de él en tercera persona cuando en Ecuador, victimizándolos y argumen-
hablaba con su hermana tal y como nos tando que se quedan desamparados,
decía nuestra informante: dejan los estudios, se relacionan con
“…Pídele a tu papá, dile a tu papá o malas compañías, etc... Pero esto en oca-
haz con tu papá, o convence a tu papá, siones no es más que un discurso alar-
pero nunca dice mi papá” mista que trata de crear una situación de
dependencia de los emigrados hacia la
Comuna, para que envíen remesas y con-
Conclusión tinúe el contacto entre las familias.
Las mujeres se afianzan como una
En este artículo hemos enfatizado el pieza clave para el desarrollo cuyo senti-
importante papel de la mujer en el man- miento de responsabilidad familiar y
tenimiento de la familia y la comuna, si capacidad de acción repercute en los
bien su responsabilidad es naturalizada y demás miembros del grupo doméstico.
así minusvalorada e incluso invisibilizada. Creemos que es la herramienta clave para
Si bien los discursos de los que se que- el codesarrollo en la Comuna porque
dan nos hablan de familias destrozadas como mantenedoras y articuladoras de
por la emigración, hemos encontrado los vínculos familiares a nivel local tanto
l
que los conflictos y rupturas conyugales, como en el ámbito transnacional, son
así como las dificultades en las relaciones imprescindibles para establecer redes de
intergeneracionales son causadas menos cooperación entre los emigrados y sus
por la separación y la distancia que por comunidades de origen. Y que de eésta
un sistema patriarcal en crisis. manera los beneficios de la migración
La ayuda mutua entre ellas, ya sean de recaigan en la comunidad no solo a nivel
la misma familia o de la Comuna les otor- familiar sino a nivel comunitario.

39
Pags 025-040:maq revista 23 x 28 22/07/2007 18:54 Página 40

Bibliografía

ACOSTA, A. (2004): Breve historia económica del HERRERA, G. (2005): “Mujeres Ecuatorianas en las
Ecuador. Segunda edición actualizada. Quito: Cadenas Globales del Cuidado”. En Herrera, G.
Corporación Editora Nacional. Carrillo. M. C. y Torres, A.: La Migración ecuatoria-
na.Transnacionalismo, redes , e identidades. Quito:
ARIZAGA L. (2005): “La política del estado ecuatoria- Flacso-Plan Migración Comunicación y Desarrollo.
no hacia los emigrantes nacionales”. En J. Ponce
Leiva: Emigración y Política Exterior en Ecuador. HONDAGNEU SOTELO, P. (1997): «I am here but I am
Quito: Flacso &Abya-Yala. there: The Meaning of Latina Transnational
Motherhood.» Gender and Society 11(5). Pp. 548-571.
BENERÍA, L. (1999): «Mercados Globales , Género, y
el Hombre de Davos.» La Ventana 10. Pp. 7-48. MARTIN DIAZ, E. y SABUCO, A.(manuscrito): Las
Mujeres en la Globalización: El nuevo tráfico de
BESSERER, F. (2000): “Sentimientos (in)apropiados alianzas y mercancías. Sevilla.
de las mujeres migrantes: hacia una nueva ciudada-
nía”. En D. Barrera Bassols, y C. Oehmichen Bazán: MEÑACA, A. (2005): “Ecuatorianas que «viajaron». Las
Migración y Relaciones de género en México. México mujeres migrantes en la familia tradicional”. En G.
DF: UNAM.IIA/GIMTRAP. Herrera, M.C. Carrillo y A. Torres: La Migración
ecuatoriana.Transnacionalismo, redes , e identida-
CARRASCO, H. y LENTZ, C. (1985): Migrantes. des. Quito: Flacso-Plan Migración Comunicación y
Campesinos de Licto y Flores. Quito: Abya-Yala. Desarrollo.

EREL, U. (2002): “Reconceptualizing Motherhood: MILES, A. (2004): From Cuenca to Quenns. An


Experiences of Migrant Women from Turkey Living Anthropological Story of Transnational Migration.
in Germany”. En D. Bryceson y U. Vourela: The Austin: University of Texas Press.
Transnational Family. New European Frontiers and
Global Networks.. London & New York: Berg. PARREÑAS, R. S. (2001): «Mothering from a Distance:
Emotions, Gender, and Intergenerational Relations in
ESCRIBÁ, A. (2000): “The Position and Status of Filipino Transnational Families.» Feminist Studies
Migrant Women in Spain”. En F. Anthias y G. 27(2).
Lazaridis: Gender and Migration in Southern
Europe. Women in the move. Oxford: Berg. PARREÑAS, R. S. (2005): Children of Global
Migration. Transnational Families and Gendered
KYLE, D. (2003): Transnational Peasants: Migration, Woes. Stanford: Stanford University Press.
Networks and Ethnicity in Andean Ecuador. Johns
Hopkins University Press. RENS, M. (2003): Mitad del Mundo. Mujeres, identi-
dad y simbolismo en Ecuador. Quito: Ediciones
GEORGE, S. M. (2005): When Women Come First. Abya-Yala/Fundación Marjan Rens.
Gender and Class in Transnational Migration.
Berkeley: University of California Press. SASSEN, S. (1998): The Mobility and Flow of Labor
and Capital. Cambridge: Cambridge University Press.
HERNÁNDEZ CASTILLO, R. A. (2001): “Entre el etno-
centrismo feminista y el esencialismo étnico. Las SUÁREZ NAVAZ, L. (n.d.): La migración Rumana a
mujeres indígenas y sus demandas de género”. España, una panorámica. Número monográfico,
Debate Feminista, 24. coeditado con Rosa Aparicio en Migraciones, en
prensa (primavera 2007).

40
Anales del
Museo
Nacional de
Antropología
Nº XII / 2006

DIRECCIÓN GENERAL
DE BELLAS ARTES
Y BIENES CULTURALES
P LV V LT R
MINISTERIO
DE CULTURA SUBDIRECCIÓN GENERAL
DE MUSEOS ESTATALES
Anales del Museo Nacional de Antropología www.mcu.es
Nº XII / 2006

Consejo de redacción
Mª Dolores Adellac Moreno
Montserrat Cruz Mateos
Javier Rodrigo del Blanco
Pilar Romero de Tejada
Francisco de Santos Moro

Correspondencia
Alfonso XII, 68
28014, Madrid
Tel. : 915 395 995 / 915 306 418
Fax: 914 677 098

E-mail: montserrat. cruz@mna.mcu.es

Coordinación
Montesrrat Cruz Mateos

Detalle de portada
Matera o recipiente para tomar mate.
Chile. Área Surandina.

Detalle en 4.ª de portada


Tanga femenino. Cubeo.
Brasil y Colombia. Área amazónica.

MINISTERIO DE CULTURA
Edita:
© SECRETARÍA GENERAL TÉCNICA
Subdirección General
de Publicaciones, Información y Documentación

© Del texto y las fotografías los autores

NIPO: 551-07-025-9
I.S.S.N.: 1135-1853
Depósito legal: M. 36.821-2007

Imprime: IMPRESA
MINISTERIO
DE CULTURA

César Antonio Molina


Ministro de Cultura

María Dolores Carrión Martín


Subsecretaria de Cultura

José Jiménez Jiménez


Director General de Bellas Artes y Bienes Culturales
Índice

Artículos

I. Historia reciente y situación actual de los awá-guajá (Maranhao, Brasil) 9


Almudena Hernando Gonzalo, Elizabeth María Beserra Coelho, Gustavo Politis,
Eliane Cantarino O´Dwyer, Alfredo González Rubial

II. La mujer indígena ante la migración: estudio de caso de una comunidad andina 25
Liliana Suárez Navaz, Susana Castañón Romero y Eva Anadón Moreno

III. Güiro, Agbe o Chekeré: ceremonia y rito en un instrumento de música 41


Victoria Eli Rodríguez

IV. Los orejones o gente-piraña. Percepción de la diferencia cultural en la Amazonia noroccidental 51


Jean-Pierre Chaumiel

V. Sobre el nacimiento de la cultura del simulacro: derechos indígenas y guerra americana 63


Antonio Pérez.

Museo

VI. Exposición temporal Orígenes de la colección americana 93


Javier Rodrigo del Blanco

VII. Estudios de público en el Museo Nacional de Antropología 105


Javier Rodrigo del Blanco

VIII. La renovación de la exposición permanente de las colecciones americanas del Museo


Nacional de Antropología 121
Javier Rodrigo del Blanco

IX. Propuesta de renovación de la exposición permanente de la sala de América del Museo


Nacional de Antropología 131
Diana Mateos Morante

Normas de publicación 143

También podría gustarte