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Mercat de Santa Caterina. Barcelona.

Comercio urbano en espacios


metropolitanos
Mercados, vidas y barrios
JUAN IGNACIO ROBLES
Profesor Departamento Antropología Social. Universidad Autónoma de Madrid. Dir. Antropología Media Audiovisual

l presente artículo es un apéndi- las décadas de los años 50 y 60, los an- económica: reciprocidad, redistribución e

E ce del proyecto de investigación


audiovisual “Mercados, vidas y
barrios: mercados municipales
en espacios metropolitanos (Valencia,
Madrid y Barcelona)”. El proyecto de in-
tropólogos cobraron especial protagonis-
mo aportando un importante caudal em-
pírico utilizado por los economistas sus-
tantivistas en su debate frente a la pers-
pectiva formalista de la economía (Gó-
intercambio mercantil. A cada uno de los
cuales le correspondía una forma de inte-
gración o disposición social basada en la
simetría (reciprocidad), la centralidad (re-
distribución) o el mercado (intercambio
vestigación fue concebido íntegramente mez Crespo, 1993; p.6). mercantil), (Polany; 1979).
en el marco de la Antropología Urbana y El enfoque económico sustantivista
Audiovisual, por tanto, y aprovechando analizaba el comportamiento de los agen-
las innovaciones tecnológicas que permi- tes socioeconómicos en su contexto his- LA RECIPROCIDAD.
ten los formatos de revistas electrónicas, tórico, político y cultural. Por su parte, el
vamos a realizar un tipo de ensayo mixto enfoque formalista explicaba todo com- Los antropólogos (Malinowski, 1973)
que integra el lenguaje escrito y el audio- portamiento económico en función de describieron sociedades en las que los
visual a través del enlace al documental. dos principios, universales y ahistóricos: intercambios económicos de algunos bie-
la maximización individual de los benefi- nes se realizaban en el marco de toda
cios y un entorno natural de escasez. una tupida red de compromisos sociales
LOS MERCADOS En este escenario de debate, los antro- basados en la reciprocidad de bienes en-
DESDE LA ANTROPOLOGÍA pólogos aportaron toda una serie de tra- tendidos culturalmente como regalos, co-
bajos empíricos o etnografías que mos- mo dones y no como mercancías. La reci-
El mercado como lugar y como institución traban básicamente tres tipos ideales -en procidad exigía una forma de integración
es un tema clásico de la Antropología. En sentido weberiano- de interdependencia social basada en la simetría entre los

Distribución y Consumo 19 Septiembre-Octubre 2008


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ga historia de venta y compra entre clien-


tes y comerciantes, a veces, transmitida
de generación en generación (de pa-
dres/madres a hijos/hijas), conforma
unas fuertes relaciones de reciprocidad
entre comerciantes y clientes basadas en
el conocimiento y en la confianza mutuos.
Estas relaciones permiten, por ejemplo,
la aparición del fenómeno del “fiado” o el
surgimiento del “cliente de toda la vida”,
ambos basados en la fidelidad y la leal-
tad. A cambio de confianza del pequeño
comerciante hacia su cliente, éste devuel-
ve fidelidad a su establecimiento. El bien
intangible de la confianza es elemento so-
cial y económico clave en este tipo de in-
teracción comercial. Este tipo de fideliza-
ción de la clientela a través del “fiado” ba-
sado en la confianza mutua es propio y
exclusivo del pequeño comerciante. Otros
tipos de fidelización a través de regalos a
cambio de acumulación de puntos por
Mercado de Antón Martín. Madrid. compras, ofertas, etc… no tienen esta di-
mensión de articulación e interdependen-
agentes del intercambio. Yo intercambio prescindible para dotar de estabilidad a cia social que adquiere el fiado.
con alguien algo, y ese alguien tiene la ca- largo plazo el abastecimiento mutuo. Evidentemente el impacto estrictamen-
pacidad de devolverme ese algo en un pe- De vuelta a Cailloma, los pastores pa- te económico del fiado en el intercambio
ríodo de tiempo más o menos largo. Aun- san por ciertos mercados de Cuzco, cuyo comercial global es pequeño, sin embar-
que la reciprocidad estaba basada en la nicho ecológico está situado a una altitud go el mecanismo de confianza social so-
simetría y la confianza, sin embargo, no intermedia entre la costa y Caillona, y bre el que se desarrolla es vital en el re-
estaba desprovista de cierto interés. donde en los mismos términos de reci- fuerzo de un tipo de confianza entre clien-
Por ejemplo, los pastores de llamas de procidad intercambian su carne, tejidos y tes y comerciantes que va a ser crucial
Cailloma (Casaverde, 1981) que viven en parte del maíz, ají e higos intercambiados para el abastecimiento de algunos secto-
el altiplano de Perú en un entorno entre en el mercado de Sihuas, a cambio de las res extensos de la población: nos referi-
los 2.700-5.000 metros de altitud, produ- papas y el chuño (2) producido por los mos al papel redistribuidor del pequeño
cen carne y tejidos pero no tienen produc- agricultores de Cuzco. comerciante, segundo de los ejemplos
tos agrarios de subsistencia, lo que les ¿Qué tiene que ver esto con nuestros que queremos resaltar.
obliga a abastecerse de ellos fuera de su mercados minoristas? Aunque nos pa-
ayllu (1). Para ello viajan hasta el merca- rezcan lejanos estos intercambios socio-
do de Sihuas situado en la costa, donde económicos basados en la reciprocidad, LA REDISTRIBUCIÓN
intercambian su carne y tejidos por pro- actualmente en nuestros mercados mu-
ductos agrarios como maíz, ají e higos. El nicipales se desarrollan mecanismos de Otro tipo de intercambio socioeconómico
intercambio es un trueque basado en tér- intercambio basados en la reciprocidad, analizado por los antropólogos es el de la
minos de reciprocidad y realizado no con como son el fiado o el regalo, y que re- redistribución.
cualquiera, sino con agricultores con los fuerzan el papel social y comercial del pe- Normalmente se habla de redistribu-
que los pastores caillona están vincula- queño comercio de nuestros espacios ción administrativa, desarrollada por acto-
dos desde hace generaciones. Estas rela- sociales. res políticos institucionalizados en for-
ciones de trueque están basadas en la El mercado es un espacio de encuentro mas más o menos desarrolladas de Esta-
confianza mutua. Los bienes intercambia- entre vecinos, que intercambian informa- do.
dos tienen un interés económico pero ción, favores y bienes, reforzando las rela- El Estado, a través de un sistema impo-
también social, reforzando la vinculación ciones sociales mutuas. Los mercados sitivo, centraliza la extracción de recursos
y la confianza entre ambos colectivos, im- son ámbitos de sociabilidad donde la lar- del sistema económico –sean éstos en

Distribución y Consumo 20 Septiembre-Octubre 2008


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forma de bienes de consumo o moneta-


rios– para redistribuirlos posteriormente
en forma de bienes sociales (gasto e in-
versión social) al resto de la ciudadanía o
de los súbditos.
Por ejemplo, en determinadas forma-
ciones políticas como el imperio azteca
del siglo XIV-XV, con capital en Tenochti-
tlan en el valle central de México, la cen-
tralidad de la instancia político-adminis-
trativa encargada de recaudar impuestos
y redistribuirlos, estaba fuertemente liga-
da a su carácter religioso ritual legitiman-
do el acto de extracción de recursos eco-
nómicos entre los súbditos del reino.
Otro tipo de intercambio redistributivo
es el descrito como potlatch (Mauss;
1925)
El potlatch es un reparto ceremonial en
el que una persona que ocupa un cargo
de prestigio ofrece determinados bienes
a sus huéspedes, que quedaban en deu-
da con él. El potlatch fue practicado por
Mercado del Ensanche. Bilbao.
algunos pueblos indígenas americanos
de la región cultural de la costa norocci- y que, estando en perfectas condiciones tercambio casi familiar que se desarrolla
dental del Pacífico en Estados Unidos, co- higiénico-sanitarias, sin embargo, las nor- de forma digna para el cliente. Queremos
mo los kwakiutl y los nootka. mativas no permitirían volver a poner a la resaltar la dimensión digna de la opera-
La ceremonia del potlatch se celebraba venta al día siguiente. ción, que contrasta con las escenas deni-
con ocasión de las bodas y las defuncio- La importancia socioeconómica de es- grantes vistas en multitud de reportajes
nes acaecidas en la familia del anfitrión. ta práctica sí es relevante para amplios de personas mayores rebuscando en los
El ritual se iniciaba con el baile, el ban- segmentos de población de nuestras ciu- contenedores de desechos de los merca-
quete y las alocuciones. El anfitrión repar- dades, como por ejemplo mujeres mayo- dos, súper e hipermercados de las ciuda-
tía entonces los obsequios, por lo general res viudas que perciben pensiones no des. Por ello, al valor estrictamente eco-
en forma de mantas de pieles o corteza contributivas que no llegan a los 500 eu- nómico de este tipo de interdependencia
de cedro batida y tejida, y después proce- ros y que están atrapadas en barrios his- redistributiva, hay que añadirle el valor
día a demostrar ante sus huéspedes su tóricos en proceso de rehabilitación for- simbólico de una transacción que salva-
superioridad económica y social. zosa y gentrificación social. Estas muje- guarda la dignidad social –basada en la
Centralidad y legitimidad son los dos res encuentran en esta forma de inter- confianza mutua– de un segmento de po-
elementos fundamentales en ambos ti- cambio redistributivo la única forma de blación que fue clase media trabajadora
pos de intercambio socioeconómico ba- abastecerse dignamente de productos en las décadas del 60 al 90.
sado en la redistribución. de primera necesidad, sobre todo frutas Esta dimensión comercial redistributiva
El tipo de intercambio redistributivo que y verduras. es propia, exclusiva y distintiva de los pe-
nos interesa en relación a nuestros mer- El elemento esencial de este tipo de in- queños comerciantes, sobre todo de pro-
cados minoristas es el que practican mu- terdependencia económica no mercantil ductos perecederos. Es impensable este
chos pequeños comerciantes en relación basada en la redistribución es sin duda tipo de prácticas en formatos de distribu-
a personas que viven situaciones econó- alguna la confianza. Esta confianza del ción alimentaria súper e hipermercado.
micas precarias, a los que regalan, donan pequeño comerciante con el cliente-veci- Evidentemente esta circunstancia añade
o venden a precios por debajo de su valor no en situación económica precaria se ha un valor fundamental a la labor desarrolla-
de mercado algunos productos de prime- ido construyendo a lo largo de años de fi- da por el pequeño comerciante a la hora
ra necesidad. En otros casos los bienes delidad y conocimiento mutuo. Por ello, de vertebrar e integrar el espacio social
regalados son productos que los peque- esta donación o venta a precios por deba- de la zona de influencia donde desarrolla
ños comerciantes no han logrado vender jo del estipulado por el mercado es un in- su labor.

Distribución y Consumo 21 Septiembre-Octubre 2008


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LOS PEQUEÑOS COMERCIANTES


COMO MEDIADORES SOCIALES

La centralidad es uno de los dos elemen-


tos sobre los que se asienta la redistribu-
ción. El otro elemento es la legitimidad. El
tipo de prácticas redistributivas que desa-
rrolla el pequeño comerciante le dotan de
la necesaria legitimidad para convertirse
en una especie de “mediador social” co-
locado en el centro neurálgico de nues-
tros barrios y municipios.
Mediador social y redistribuidor en el
aspecto económico y comercial, media-
dor social y redistribuidor cultural a nivel
intergeneracional e interétnico. En efecto,
una dimensión poco estudiada pero cre-
cientemente desarrollada por el pequeño
comerciante es su papel de “redistribui-
dor de la cultura gastronómica”, conec-
tando e integrando a clientes de distintas
generaciones y de origen étnico o nacio-
nal diverso.
Mercado de A Pobra do Caramiñal. Pontevedra.
Cada día es más evidente que los pe-
queños comerciantes son portadores de turno, es como permanecer en la antesa- cado, descubrimos un universo de perso-
la cultura gastronómica autóctona, sien- la de un espacio particular que facilita el nas de distintas edades, generaciones y
do responsables en el ejercicio de su tra- intercambio y la comunicación. Es éste origen étnico y nacional, que están trans-
bajo diario de transmitir este conocimien- un aspecto simbólico de su centralidad. mitiendo y compartiendo de forma natural
to cultural a otros grupos étnicos y a otras Comparemos, por ejemplo, el valor del en el acto cotidiano de hacer la compra
generaciones de jóvenes a través de los tiempo que pasamos haciendo la compra del día o de la semana una parte de su
consejos, las recetas, etc. Al mismo tiem- en un supermercado con el tiempo que cultura y experiencia. Eso es un valor so-
po, la llegada de comunidades inmigran- pasamos delante del mostrador de un co- cial que solamente sucede al otro lado
tes que se integran como clientes de sus merciante esperando a ser atendidos. El del mostrador de un pequeño comercian-
puestos, les ha obligado a ponerse al día tiempo de espera en la cola del híper o te. En cambio, el acto de comprar en un
en gastronomías no autóctonas, convir- del supermercado es un tiempo perdido, híper o supermercado es un acto privado
tiéndose en cadena de transmisión de es- tiene un valor social ínfimo; en cambio, el y escasamente compartido.
ta diversidad gastronómica y cultural. valor del tiempo de espera en el puesto A diferencia de las relaciones anóni-
De hecho, los puestos y las plazas inte- de un pequeño comerciante es un tiempo mas e impersonales que se dan en otros
riores de los mercados se han convertido con un enorme valor social, ya que nos espacios comerciales híper y supermer-
en espacios de encuentro e intercambio permite relacionarnos con personas que cados –no lugares donde predomina el
social entre vecinos. Mientras se espera en un alto porcentaje viven en nuestro ba- tránsito–, el mercado se convierte en un
el turno, los niños juegan en la plaza y los rrio, con los que compartimos problemas lugar de encuentro elevado a categoría de
adultos entablan conversación. y expectativas. espacio ciudadano donde las personas
El papel de los comerciantes en la crea- El simple gesto de pedir un producto paran, conversan y cristalizan relaciones
ción de este espacio de convivencia es determinado, ante la presencia de los de- e intercambios de reciprocidad y redistri-
fundamental, ya que son ellos los que más clientes, es un acto de transmisión bución comercial y cultural.
transforman un espacio público en un es- de información y conocimiento cultural, “Si un lugar puede definirse como lugar
pacio propio y familiar. Aunque la relación que se pone a disposición del resto de la de identidad, relacional e histórico, un
se establece en términos comerciales, clientela de forma pública y familiar al espacio que no puede definirse como
sin embargo, está connotada por estos mismo tiempo. Cuando analizamos la espacio de identidad ni como relacional
aspectos simbólicos. Por ello, estar en la clientela que se reúne un sábado por la ni como histórico definirá un no lugar. La
plaza contigua al puesto, esperando el mañana en cualquier puesto de un mer- hipótesis aquí defendida es que la so-

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PRIMAFLOR,
CULTIVANDO LA INNOVACIÓN
El grupo Primaflor diversifica sus actividades en mercado, y los microondables que próximamente
tres aspectos: I Gama, IV Gama y Ajo Pelado. Toda se encontrarán en las grandes superficies, estos
la producción que se procesa en las fábricas de Pri- serán una selección de hortalizas que tras 8 minu-
maflor es de producción propia, teniendo para este tos en el microondas estarán perfectamente coci-
fin más de 4.000 hectáreas dedicadas a cultivar das y listas para consumir. Con este espíritu de
diferentes tipos de lechugas (iceberg, escarolas, ra- innovar, el equipo de investigación y desarrollo de
dicchio, lollos, romanas …), productos de hoja Primaflor se congracia de no haber retirado del
(berro, acelga, espinaca, rúcula, …) y otras varie- mercado ninguno de los productos que ha sacado
dades (tomate cherry, rabanito, ajo, …) conocidas y sigue esforzándose para poder colocar en los li-
a nivel europeo por su excelente calidad que se de una de las fábricas más vanguardistas que exis- neales una gama de productos que satisfaga com-
mantiene a lo largo de todo el año. Esto ha conver- ten en la actualidad, esto hace que a lo largo del día pletamente al cliente.
tido a Primaflor en uno de los mayores exportado- se procesen más de 20 referencias diferentes sin Hay que destacar que se ha rediseñado todo el
res españoles de lechugas en I Gama y contar con la variedad de formatos que disponen packaging y el logotipo tanto en primera como en
semitransformadas para industrias de IV Gama. para poder dar el mayor servicio a cualquier cliente. cuarta gama, dándole un aspecto más dinámico y
Los productos estrella en fresco son la lechuga ice- Pero la innovación de esta empresa no se queda actual, en el que el producto gana protagonismo
berg, los cogollos y corazones de cogollo, aunque en la hoja lavada, cortada y envasada, en las que viéndose casi en su totalidad y diferencias de color
disponen de un amplio abanico de productos para ahora se está lanzando una Serie Oro que incluye según la familia de productos a la que pertenezca.
satisfacer a los paladares europeos más exigentes. proteínas, para complementar las ensaladas con Se ha utilizado la última tecnología en la realización
La evolución de la IV Gama ha sido espectacular los mejores ingredientes (pavo, pollo y queso de e impresión del plástico para darle a las bolsas
desde que hace 5 años se empezara a procesar en cabra), sino que ha añadido una nueva serie de pre- más calidad y mayor grosor para ser un aspecto
las instalaciones de Pulpí y desde hace tres ya goza cocinados en la que destacan los sofritos, ya en el más de diferenciación con la competencia.
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Mercado de la Barceloneta. Barcelona.

bremodernidad es productora de no lu- un tipo de comercio específico del modo restía previo a la cosecha en el mes de
gares, es decir, de espacios que no son de producción capitalista que fue exten- agosto del año siguiente. Las leyes vigen-
en sí lugares antropológicos y que, con- diéndose progresivamente a partir de fi- tes velaban por el establecimiento del
trariamente a la modernidad baudele- nales del siglo XVIII, y que implica, ahora precio justo en los mercados locales, im-
riana, no integran los lugares antiguos.» sí, la maximización individual de los bene- pidiendo el acaparamiento especulativo
(Augé, 1993). ficios en la acción de intercambio comer- que a veces intentaban los grandes agri-
cial, a costa de la contraparte. cultores, comerciantes profesionales y
Este tipo de comercio surgió en un mo- molineros en los períodos de precios ba-
EL INTERCAMBIO MERCANTIL mento histórico concreto y necesitó refor- jos y abundancia de cereal. Cuanto esto
mas legislativas y transformaciones polí- sucedía, se producían levantamientos de
En este pequeño repaso de las distintas ticas, tecnológicas e ideológicas que lo la población contra estas prácticas
formas de intercambio socioeconómico, validara socialmente. (1740, 1756, 1766, 1795, 1800), con
que en cierta forma tiene como objetivo Por ejemplo, pensemos que el comer- objeto de exigir la intervención de la auto-
enriquecer la perspectiva que habitual- cio de cereales en Inglaterra estuvo regla- ridad pública para evitar estas prácticas
mente tenemos del comercio, llegamos a do hasta 1772 cuando se revocaron las especulativas y hacer cumplir la ley esta-
la forma de intercambio hegemónica –pe- leyes contra el acaparamiento. Toda la ca- bleciendo el precio justo del cereal.
ro no única– de nuestro tiempo: el inter- dena productiva del cereal estaba regula- Sin embargo, a lo largo del siglo XVIII,
cambio mercantil. da por las leyes contra el acaparamiento según Inglaterra iba industrializándose y
El intercambio mercantil y el comercio que impedían la especulación y el mono- se iba profundizando la división nacional
que se practica habitualmente en nues- polio. La autoridad pública velaba por e internacional del trabajo, los grandes te-
tros mercados sería un intercambio direc- mantener la relación directa entre produc- rratenientes y comerciantes fueron ga-
to en el que, a cambio de la cosa recibida tores, comerciantes y compradores, en nando terreno haciéndose indispensa-
se entrega otra cosa equivalente en el los lugares de mercado, protegiendo así bles para abastecer a la creciente pobla-
mismo momento y puede aplicarse a las la igualdad de oportunidades en el acce- ción industrial que se concentraba en las
transacciones que estipulan una retribu- so a los mercados locales y establecien- grandes urbes, donde se iba consolidan-
ción de valor o utilidad conmensurados do el precio justo entre oferta y demanda do la pujante producción fabril. Finalmen-
dentro de un período finito y no muy largo sin las distorsiones de la especulación. te en 1772 la corona inglesa abolió las le-
(Sahlins, 1977, pp. 212 y 213). (Thompson, 1995, cap. 5). El problema yes antimonopolio contra el acaparamien-
El comercio mercantil es el que ajusta era que en años normales los precios to del cereal, creando el marco institucio-
los precios de los bienes en función de la iban subiendo progresivamente desde el nal y legislativo necesario para el naci-
ley de la oferta y la demanda. momento de abundancia de la cosecha miento de un mercado nacional e interna-
El comercio capitalista, a su vez, sería en septiembre hasta el momento de ca- cional de cereal controlado por los gran-

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des comerciantes capaces de comerciar e ideológicas importantes para el desa-


en este mercado. El precio del cereal fue rrollo y evolución de la sociedad.
subiendo exponencialmente desde ese
momento, originando los grandes levanta-
mientos populares de 1795 y 1800. EL ENTORNO COMERCIAL
Si mencionamos este ejemplo del ce- DE NUESTROS MERCADOS MINORISTAS
real en la Inglaterra del siglo XVIII es para
mostrar cómo los temas que están pre- ¿Cómo se están insertando los merca-
sentes en el debate actual sobre el mar- dos minoristas en el espacio comercial
co regulador del comercio del siglo XXI, español, europeo, global, como institucio-
están en discusión desde el mismo mo- nes de distribución crecientemente espe-
mento del nacimiento de nuestro modelo cializadas en productos frescos de consu-
de desarrollo: regulación en clave libertad mo perecedero?
de mercado frente a regulación en clave Evidentemente, cada mercado minoris-
equilibrio y justicia social, control de pre- ta tiene sus propias características y su Mercado de la Bretxa. San Sebastián.
cios, espacios de mercado, etc. Porque el evolución, fruto de la transformación de-
comercio y los lugares de mercados, en mográfica, socioeconómica, urbanística relación con la Administración pública co-
este caso los mercados minoristas, son del barrio donde estén ubicados, de la ca- rrespondiente, de la que depende crear
lugares simbólicos, representan mucho pacidad de innovación de sus comercian- un contexto comercial particular en apli-
más que un ámbito donde se compran y tes, de la presencia o no de un movimien- cación de una política comercial determi-
se venden bienes de consumo, las rela- to asociativo entre los comerciantes ca- nada. Teniendo en cuenta todos estos
ciones comerciales están enmarcadas en paces de desarrollar una gestión innova- factores particulares de cada mercado
un marco de relaciones sociales, políticas dora, comprometida y, claro está, de su minorista, sin embargo, todos ellos han
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Mercado de Abastos de Logroño.

compartido una serie de retos y proble- países que demandan nuevos pro- que respecta a alimentación seca o enva-
máticas, derivadas de procesos económi- ductos. Los inmigrantes, en función sada. Sin embargo, en lo que respecta a
cos y políticos estructurales. Lo que varía de cómo se adapten los comercian- productos frescos sigue siendo un forma-
es la forma en que los mercados han po- tes a los mismos, pueden ser un fac- to líder solamente amenazado por el su-
dido/sabido/querido adaptarse a estos tor de éxito o de fracaso. permercado de barrio.
procesos. Pasemos a enumerar algunos – Competencia de formatos súper e hi- La razón fundamental de esta circuns-
de estos retos rápidamente: permercados en cuanto a horario, di- tancia es que la compra de los productos
– Cambios en los hábitos de consumo versidad de productos y precios de de alimentación frescos no está determi-
y alimentación de la población a la los mismos. Esta competencia, a ve- nada exclusivamente por el precio, sino
que abastecen. ces, se ha convertido en comple- que entran en juego factores relaciona-
– Envejecimiento de su clientela tradi- mentariedad al instalarse un super- dos con el conocimiento del producto, la
cional, que supone la reducción de mercado dentro del mercado, con un profesionalidad, la atención personal, la
su capacidad de consumo. acuerdo previo para vender solamen- calidad y la capacidad de asesoramiento
– Cambio en el tamaño de la familia: te productos de alimentación no pe- personal al cliente. Son éstos justamente
reducción de miembros, nuevas fa- recederos (leche, latas de conserva, los elementos que actualmente caracteri-
milias monoparentales, unipersona- azúcar, harina…). zan a los comercios y comerciantes de
les, que exigen formas de comprar Todos estos factores están en la base pequeñas tiendas especializadas de ali-
distintas, cantidades diferentes y de la pérdida de cuota de mercado de los mentación y de los mercados y galerías
empaquetamientos de los productos mercados minoristas y el pequeño comer- minoristas.
específicos. cio en relación con los formatos autoser- Calidad en los productos perecederos,
– Incorporación de las mujeres al mer- vicio –súper e hipermercados– desde la profesionalidad, especialización y trato
cado laboral, con su importancia so- década de los años 80 del siglo pasado personal para orientar la compra hacia
bre los hábitos alimentarios y la dis- hasta la actualidad. El único segmento los productos específicos que necesita
ponibilidad de tiempo para ir al mer- que ha mantenido un porcentaje significa- su clientela, una clientela a la que conoce
cado de las familias y necesidad de tivo es el de los productos perecederos o y para la cual orienta su compra en los
cambios en el horario de los mis- frescos, que si bien han ido perdiendo pe- mercados mayoristas.
mos. Los horarios de venta de los so, mantienen sin embargo una cuota de Por ejemplo, qué tipo de pescado com-
mercados coinciden con las jorna- mercado próxima al 40% frente a súper e prar para un niño de tres años, qué pieza
das laborales de la mayoría de los hipermercados. de fruta es la más adecuada para una
trabajadores. El pequeño comercio tradicional ha de- persona mayor a la que conoce desde ha-
– Llegada de inmigrantes de diversos jado de ser el formato de referencia en lo ce décadas y que tiene acidez; además,

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Si sus productos
no se diferencian
de la competencia...
...póngalos en manos
de un especialista
en comunicación
gráfica

TIPOS
Mercado de La Boquería. Barcelona. LOGO FOLLETOS N
. IÓ
ETAS LIZAC
ETIQU ÍA . SEÑA nta
esta persona mayor requiere cantidades pequeñas para el día a ELER de ve
CART el punto OS
día. en LO G
CATÁ
En definitiva, la gran ventaja comparativa de los mercados es
su enorme capacidad de especialización, flexibilidad y adapta-
ción a la demanda particular de la clientela de su zona de in-
fluencia. Siempre desde la calidad, la frescura y el conocimiento
en profundidad del producto.
En la sociedad de la información, el pequeño comerciante re-
presenta el conocimiento en profundidad respecto al producto
fresco. Si abrimos el frigorífico de una familia de nivel socioeco-
nómico medio, medio-alto y alto nivel de formación, encontrare-
mos un yogur enriquecido con vitamina C, fibras, leche Omega 3
con triglicéridos, etc., y al lado, seguro, un tomate de mercado,
natural y quizá ecológico. Es la traducción en el ámbito de la ali-
mentación de la conexión entre lo local y lo global, lo cibernético
S omos un equipo
de profesionales con
y lo natural.
Ese es sin duda alguna el nicho de mercado, el espacio que
experiencia en el mundo
pueden y deben ocupar los mercados y galerías minoristas y el de la comunicación gráfica
pequeño comercio en su conjunto como garantes de la calidad y y publicitaria, con voluntad de ofrecer
el conocimiento del producto perecedero: carnes, frutas y verdu- respuestas modernas y eficaces “a medida”
ras, pescado.
Sin embargo, el espacio comercial actual es tan competido y
de las necesidades que demanda el mercado
abierto que ningún pequeño comerciante tiene asegurado su fu- hortofrutícola en el campo de la comunicación
turo. Porque la clave de la supervivencia del pequeño comercio y comercial gráfica y publicitaria.
de los mercados minoristas como espacios de pequeño comer-
cio agrupado es reconquistar a las generaciones de clientes en-

JOSÉ FLORES
tre los 25-45 años de edad y que representan actualmente el
grueso de la población laboral.
Nosotros pensamos que parte de estos clientes, jóvenes de diseñadorgráfico
entre 25-40 años, están redescubriendo poco a poco los valores
que representan los mercados y galerías minoristas, no sola-
627 562 660
julioflores71@telefonica.net
Getafe / Madrid
Distribución y Consumo 27 Septiembre-Octubre 2008
Comercio urbano en espacios metropolitanos

cesario analizar con mayor precisión no


solamente cada mercado y barrio en con-
creto, sino también la cultura gastronómi-
ca, valores y hábitos de cada comunidad
particular (Gómez Crespo, 2006).

CONCLUSIÓN

La antropología ha servido para matizar el


mito que identifica comercio y mercado;
hay tipos de comercio que no están basa-
dos en las relaciones de mercado y me-
nos aún con mercados constituidos alre-
dedor de la maximización individual de los
beneficios.
Los distintos tipos de comercio nunca
se presentan como formas de integración
en estado puro: la reciprocidad, la redistri-
bución y el mercado en todos los casos
se entremezclan, predominando, eso sí,
un principio sobre los otros.
Mercado de Santiago de Compostela. Los antropólogos han descrito distin-
tos tipos de intercambio económico –al-
mente respecto a la calidad de los pro- dos logran captar con suma eficacia es el gunos de ellos muy complejos– pero que
ductos frescos, la profesionalidad y trato de las comunidades inmigrantes. La ra- no necesariamente estaban basados en
personal del pequeño comerciante, sino zón fundamental la encontramos en la ca- la maximización individual de los benefi-
también el valor social y de interrelación pacidad de los pequeños comerciantes cios y menos aún se desarrollaban en
vecinal que promueven los mercados mi- de ofertar productos específicos de cada un entorno natural de escasez, lo cual
noristas. una de estas comunidades. Esta capaci- daba argumentos a las teóricos sustan-
Es un proceso de reculturización, en un dad de adaptación e innovación del pe- tivistas.
cierto grado, de los hábitos alimenticios y queño comerciante está relacionada con El mercado minorista, comercio agrupa-
sociales tradicionales. Eso sí, que nadie su relación cotidiana con la evolución de- do por excelencia, tal y como hoy lo cono-
se engañe, el mercado redescubierto es mográfica de su zona de influencia. El pe- cemos, cumple, por tanto, una función de
un mercado modernizado y adaptado a queño comerciante percibe antes que na- estructuración de las relaciones sociales
las demandas de esta franja de población die los cambios y transformaciones de la dentro del espacio urbano, relacionándo-
respecto a las calidades, horarios, for- microsociedad en la que está inserto y a se también con una forma específica de
mas de pago (tarjetas de crédito), distri- la cual pertenece como agente activo. “uso del espacio”, de “forma de vida” y, fi-
bución (servicio a domicilio, internet, Muchos pequeños comerciantes adaptan nalmente, definiendo un modelo distinti-
etc.), limpieza e higiene, estética y como- con rapidez su oferta a su clientela, fal- vo de ciudad y de barrio vertebrado alre-
didad del mercado (iluminación, accesos, sando en cierta forma el estereotipo que dedor de las relaciones vecinales en un
climatización, etc.). los identifica con individuos reticentes al espacio social equilibrado y sostenible.
Podemos decir que en lo social el mer- cambio y la innovación. Evidentemente la Cuando se reivindica la regulación del
cado permanece, sin embargo, en lo co- necesidad obliga. espacio comercial por parte de las Admi-
mercial el mercado se ha ido modernizan- Paralelamente, los clientes que perte- nistraciones públicas –respecto a hora-
do sin perder sus virtudes tradicionales. necen a comunidades inmigrantes más rios comerciales, concesión de licencias,
Los que se han ido adaptando a estas numerosas: latinoamericanos, magrebíes aperturas dominicales– para garantizar la
exigencias, tienen posibilidades de per- y rumanos, traen consigo de sus países igualdad de oportunidades entre distintos
manecer, los que no lo han hecho a lo lar- de origen “una cultura de mercado” se- formatos comerciales, nosotros como an-
go de los últimos quince años ya han de- mejante a la que encuentran en España tropólogos introducimos en el debate los
saparecido o están a punto de hacerlo. en los mercados y galerías minoristas. argumentos de corte social y cultural que
Otro nicho de mercado que los merca- Es evidente que en este caso sí es ne- hemos expuesto. ■

Distribución y Consumo 28 Septiembre-Octubre 2008


Comercio urbano en espacios metropolitanos

▼ Experiencias particulares y metodología audiovisual: Valencia, Madrid y Barcelona

os mercados que hemos analiza-

L do en este proyecto de investiga-


ción han sido el Mercado Central
y el Mercado de Cabañal en Valen-
cia, el Mercado de Antón Martín y Cha-
martín en Madrid y el de Sant-Antoni en
Barcelona.
El eje argumental en el análisis de to-
dos ellos ha sido la vinculación entre su
evolución social y comercial y la transfor-
mación del espacio urbano donde están
ubicados.
Cada uno de los mercados es una uni-
dad de análisis en sí mismo, al mismo
tiempo cada uno de ellos subraya un ele-
mento estructural que permite verlos co-
mo partes de un todo desde una visión de
conjunto del documental.
La unidad de sentido de la investiga-
ción surge del documento audiovisual que
presentamos a continuación: como diji- Mercado Central de Valencia.
mos en el párrafo inicial, el presente artí-
culo no es sino el apunte escrito que reco- ron fundamentales en la toma de concien- relato, construida exclusivamente sobre
ge el marco teórico y algunas de las refle- cia de los propios protagonistas del rol secuencias extraídas de la vida cotidiana
xiones que se desprenden del documento que desempeñaban como mediadores e de comerciantes y clientes.
audiovisual. integradores sociales.
Este rol del pequeño comerciante se
vio potenciado por la voluntad del equipo EL AUDIOVISUAL COMO MEDIO DE
EL AUDIOVISUAL de investigación de abrir un espacio de DIFUSIÓN Y LENGUAJE DIFERENCIADO
COMO HERRAMIENTA DE INVESTIGACIÓN debate con los actores políticos respon-
sables de las políticas comerciales y que Todo el proceso de filmación y montaje se
La investigación audiovisual se ha estruc- sirvió de espejo a los pequeños comer- orienta en función del espectador que ve-
turado a partir del marco teórico que he- ciantes para tomar conciencia con absolu- rá la obra final, esto es, el contexto de ex-
mos descrito; sin embargo, la estructura ta nitidez del rol social que estaban de- hibición. Nuestros trabajos audiovisuales
argumental del audiovisual fue concretán- sempeñando. A veces sucede que el pro- van dirigidos a tres tipos de públicos, la
dose a medida que la cámara exploraba, pio devenir de nuestra actividad cotidiana Administración pública, los antropólogos
interactuaba y registraba el discurso y la nos impide tomar conciencia de los distin- especialistas y nuestros estudiantes de
acción de los protagonistas. tos roles que jugamos. Los visionados di- antropología en las aulas y el gremio de
El trabajo de campo previo nos fue acer- feridos que permite el registro audiovisual comerciantes. Esta diversidad de contex-
cando a la realidad cotidiana de nuestros actúan como un espejo que permite a los tos nos ha obligado en ocasiones a reali-
informantes, permitiéndonos centrar los protagonistas verse a sí mismos con la zar montajes o trabajos de posproducción
argumentos y eligiendo los informantes suficiente distancia para analizar crítica- diferentes, adaptando el lenguaje audiovi-
representativos que iban a convertirse en mente sus comportamientos y actitudes. sual a las expectativas y exigencias de ca-
protagonistas del documental. Paralelamente, la participación del pe- da contexto o público.
Una herramienta fundamental propia queño comerciante y sus representantes Este es un esfuerzo necesario cuando
del audiovisual es el registro de las se- en el diseño argumental refuerza su impli- se concibe el medio audiovisual como me-
cuencias que permiten posteriormente un cación en el proyecto, hecho esencial y dio de difusión de un trabajo de investiga-
visionado diferido. Estos visionados com- determinante para desarrollar la estructu- ción. En nuestro caso no rehuimos el de-
partidos con comerciantes y clientes fue- ra narrativa observacional que articula el safío ni desaprovechamos el espacio, da-

Distribución y Consumo 30 Septiembre-Octubre 2008


Comercio urbano en espacios metropolitanos

do que en parte el medio audiovisual nos


permite difundir un tipo de concepción y
perspectiva etnográfica que difícilmente
llegaría de otra forma a públicos externos
a la propia Antropología.
Y, sin embargo, intentamos adaptar la
estructura narrativa y dramática a una
concepción particular de narración etno-
gráfica diferente del relato periodístico en
cuanto a metodología y lenguaje audiovi-
sual.
Como podréis ver a continuación, la es-
tructura argumental y el marco teórico
subyacen a los actos, palabras y gestos
de los protagonistas. Los argumentos no
se imponen desde instancia alguna exter-
na al propio desarrollo de la acción (voces
en off, rótulos explicativos, etc.).
Y, sin embargo, los argumentos están
Mercado de Antón Martín. Madrid.
presentes, acompañando sutilmente el
devenir de la narración. Esta forma de re-
latar requiere por parte del espectador un
visionado activo, atento a las inflexiones BIBLIOGRAFÍA
de los argumentos. Pensemos que en cin-
cuenta minutos de documental se con- ■ AUGÉ, M (1993). Los no-lugares. Espacios del anonimato. Una antropología de la sobre modernidad. Ed. Ge-
disa.
centran dos años de filmación que repre-
■ GARCÍA CANCLINI, N. (1997). “Cultures urbaines de la fin du siècle: la perspectiva anthropologique” en “Revue
sentarían una monografía escrita de de-
Internacional des Sciences Sociales”, nº153.
cenas de páginas que tardaríamos horas
■ Cuadernos del ICE. Boletín Económico. Nº 2912. Junio 2006. MITYC.
en leer con atención. Evidentemente,
■ CASAVERDE, J. (1981). “El trueque en la economía pastoril”. En Llovera, J. Antropología Económica. Ed. Ana-
frente a la capacidad de abstracción y grama.
concreción argumental que permite el len- ■ GÓMEZ CRESPO, P (2006). Inmigrantes y Comercio en Madrid: Empresarios, Consumidores, Trabajadores y
guaje escrito, el lenguaje audiovisual Vecinos. En Colección de Monografías nº1: Estudios Antropológicos. Ed. Observatorio de las Migraciones y de
aporta una capacidad expresiva y una la Convivencia Intercultural. Ayto. de Madrid.
apariencia de realidad que dejamos a la ■ GÓMEZ CRESPO, P (1993). Comprar y Vender. Ed. Eudema.
mirada e intuición del telespectador deco- ■ MALINOWSKI, B (1973). Los argonautas del Pacífico Occidental un estudio sobre comercio y aventura entre
dificar argumentalmente. los indígenas de los archipiélagos de la Nueva Guinea melanésica. Ed. Península. Original en inglés (1920).
Este estilo de filmación está íntima- ■ MAUSS, M (1925). The gift the form and reason for exchange in archaic societies.

mente relacionado con la forma en que la ■ POLANY, K (1979). El enfoque sustantivista: El sistema económico como proceso institucionalizado. En Gode-
lier, M. “Antropología y Economía”.
Antropología como ciencia social y huma-
■ ROBLES, J.I. (2002). El dilema de la Axarquía. Subasta y subdesarrollo agrario. Consejería Agricultura y Pesca.
na describe y analiza los espacios cultu-
Junta de Andalucía.
rales concretos:
■ SAHLINS, M (1977). Economía de la Edad de Piedra. Akal.
“Mientras el sociólogo habla de la ciu-
■ THOMPSON, E. P. (1995) “La economía moral de la multitud en la Inglaterra del siglo XVIII”. en Costumbres en
dad, el antropólogo deja que la ciudad común, Barcelona, Ed. Crítica. Capítulo 4.
hable: sus minuciosas observaciones y
sus entrevistas en profundidad, su for-
ma de estar con la gente, tienden a es-
cuchar la voz de la ciudad” (Canclini, NOTAS
1997; 389). ■
(1) Linaje, unidad política basada en los vínculos de parentesco.
Nota. El documental audiovisual “Mercados, vi- (2) Patata deshidratada siguiendo el método de congelación-secado tradicional de los pueblos aymara y quecha
de Perú, Bolivia y norte de Chile. Este método de deshidratación permite conservar la patata durante meses y
das y barrios” puede visionarse y descargarse años.
en la web de Mercasa, www.mercasa.es.

Distribución y Consumo 31 Septiembre-Octubre 2008

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