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EXPEDIENTE Nº 12386-2019

ESP.
SUMILLA: RECURSO DE APELACIÓN

AL JUZGADO DE TURNO PERMANENTE.

PERCY AXEL GODOY SIERRA, con documento


nacional de identidad N° 70605325, en los autos
sobre presunto delito de promoción y
favorecimiento al tráfico ilícito de drogas,
señalando domicilio procesal en con domicilio
procesal en Pasaje Nueva Rosita 179 Of. 201 –
Cercado de Lima y con Casilla Electrónica N°
12944, en el presente proceso seguido en mi
contra, a Usted digo:

I. PETITORIO:

Que, amparado por el derecho Constitucional de defensa y doble instancia,


recurro a su Despacho con la finalidad de INTERPONER RECURSO DE
APELACION CONTRA LA RESOLUCION DE PRISION PREVENTIVA DE
FECHA 01 DE ENERO DEL 2020, QUE DECLARA FUNDADO EL
REQUERIMIENTO DE PRISION PREVENTIVA SOLICITADA POR EL
REPRESENTANTE DEL MINISTERIO PÚBLICO EN CONTRA DE MI
PERSONA, con la finalidad que el Superior en grado, REVOQUE dicha resolución
y REFORMANDOLA declare INFUNDADO dicho requerimiento fiscal, ordenando
en consecuencia dejar sin efecto las ordenes de captura emitidas en su contra y
la inmediata libertad.

II. FUNDAMENTACIÓN DEL AGRAVIO:


Con la expedición de la Resolución Sobre Prisión Preventiva de fecha 01 de
Enero del 2020, que declara fundado el requerimiento de prisión preventiva
solicitada por la Representante del Ministerio Público SE HA AFECTADO EL
PRINCIPIO DE LEGALIDAD, DERECHO DE LIBERTAD PROCESAL,
DERECHO A UN DEBIDO PROCESO, DEFENSA Y EL PRINCIPIO DE
PRESUNCION DE INOCENCIA amparados en los inciso 3), 11) y 14) del artículo
139º de la Constitución Política concordantes con los Artículos II, VI, VII.3, IX y X
del Título Preliminar del Código Procesal Penal, en razón de que se ha declarado
fundado dicho requerimiento fiscal SIN QUE SE CUMPLAN
“CONCURRENTEMENTE” CON LOS PRESUPUESTOS EXIGIDOS PARA LA
IMPOSICIÓN DE LA MEDIDA DE PRISIÓN PREVENTIVA POR EL ARTÍCULO
268º DEL CÓDIGO PROCESAL PENAL, así como, SIN QUE HAYA
JUSTIFICADO LA NECESARIEDAD “PROCESAL”, DE IMPONERLE LA
MEDIDA DE PRISION PREVENTIVA, NI MUCHO MENOS CON SEÑALAR QUE
EL PLAZO DE 9 MESES IMPUESTO ES PROPORCIONAL A LOS FINES
PROCESALES BUSCADOS CON SU IMPOSICION, conforme lo exigen el
artículo VI del Título Preliminar del Código Procesal Penal y los artículos 202º,
203º y 253º del Código Procesal Penal, teniendo en consideración que la Corte
Interamericana de Derechos Humanos ha señalado que la aplicación de la prisión
preventiva "debe tener carácter excepcional, limitado por los principios de
legalidad, presunción de inocencia, necesidad y proporcionalidad, de acuerdo con
lo que es estrictamente necesario en una sociedad democrática" (Corte IDH. Caso
Tibi v. Ecuador, Sentencia de 7 de septiembre de 2004, párr. 106; Caso Acosta
Calderón v. Ecuador, Sentencia de 24 de junio de 2005, párr. 74; Caso García
Asto y Ramírez Rojas v. Perú, Sentencia de 25 de noviembre de 2005, párr. 106;
Caso López Álvarez v. Honduras, Sentencia de 1 de febrero de 2006, párr. 67;
Caso Servellón García y otros v. Honduras, Sentencia de 21 de septiembre de
2006, párr. 88; Caso Yvon Neptune v. Haití, Sentencia de 6 de mayo de 2008,
párr. 107; Caso Bayarri v. Argentina, Sentencia de 30 de octubre de 2008, párr.
69; Caso Barreto Leiva v. Venezuela, Sentencia de 17 de noviembre de 2009,
párr. 121). En la misma inteligencia, las Reglas Mínimas para el Tratamiento de
Reclusos establecen que "[e]n el procedimiento penal sólo se recurrirá a la prisión
preventiva como último recurso" (Regla 6.1).

de acuerdo a los siguientes fundamentos:

III. FUNDAMENTACIÓN FÁCTICA:

III.1. El Juzgador en la resolución apelada, ha considerado que en el presente caso se


ha cumplido con los presupuestos, no teniendo en cuenta lo que la doctrina y la
jurisprudencia en estos casos a determinado los presupuestos del artículo 268º
del Código Procesal Penal establece que: "El juez, a solicitud del Ministerio
Público, podrá dictar mandato de prisión preventiva, si atendiendo a los primeros
recaudos sea posible determinar la concurrencia de los siguientes presupuestos:

a) Que existen fundados y graves elementos de convicción para estimar


razonablemente la comisión de un delito que vincule al imputado como autor o
partícipe del mismo.

b) Que la sanción a imponerse sea superior a cuatro años de pena privativa de


libertad; y

c) Que el imputado, en razón a sus antecedentes y otras circunstancias del caso


particular, permita colegir razonablemente que tratará de eludir la acción de
la justicia (peligro de fuga) u obstaculizar la averiguación de la verdad (peligro
de obstaculización)."

He aquí el carácter excepcional de esta medida, en cuanto, para restringir la


libertad del imputado deben cumplirse estos presupuestos, y sobre todo que,
estos presupuestos materiales que se detallan, deben ser concurrentes, así como
también deben ser debidamente sustentados, pues en el caso de que no concurra
uno de ellos no habría mérito para imponer la medida de prisión preventiva al
imputado. Pues, así lo ha mencionado también la Sala de Apelaciones de
Arequipa en el expediente N° 011774-2010, emitido el 23 de Junio del 2010,
Considerando Primero, "en que la concurrencia de todos estos en un
caso concreto posibilitará la aplicación de la prisión preventiva, de modo que no
cabe privar de la libertad ante la presencia aislada de alguno de estos"
presupuestos.

Por otro lado, es menester indicar también que, esta medida de coerción que
restringe la libertad del imputado es una medida provisional que sólo se aplica por
un tiempo determinado.

a) Existencia de fundados y graves elementos de convicción que corroboren


la imputación:

El fumus comissi delicti o también conocido como el fumus boni iurs, elemento
que exige una probable existencia del hecho punible materia de investigación y
de la responsabilidad penal del autor o partícipe, son estos mismos elementos
sobre los cuales debe existir una estrecha vinculación, y que este nexo sea
corroborado no por cualquier elemento de convicción, sino por GRAVES y
FUNDADOS elementos de convicción; vale decir que, la existencia o EL
GRADO DE PROBABILIDAD QUE SE REQUIERE DEBE SER ALTA, y si bien
es cierto, la normal procesal precitada, no establece cuál es ese grado,
porcentaje o nivel cuantificado de probabilidad, pero al exigir el análisis de
graves y fundados elementos de convicción, se refiere a que elementos sean
plenamente suficientes.

También cabe resaltar que, en cuanto al nexo causal, es decir, la estrecha


vinculación que debe existir entre estos elementos de convicción (hecho
punible y el imputado en calidad de autor o partícipe) debe estar debidamente
corroborada, caso contrario, tampoco se podría considerar como grave y
fundado elemento de convicción, si por ejemplo, los elementos de convicción
que se han recabado, sólo acreditarían la comisión del hecho punible, pero no
el grado de participación del imputado, o de la identificación del imputado
mismo. Asimismo, podría presentarse la situación en viceversa, o sea que,
pueden existir elementos que acrediten la existencia de un sujeto en calidad de
autor o partícipe, como presunto responsable de un supuesto hecho ilícito, sin
embargo, no existe imputación suficiente, o como lo doctrina jurisprudencial lo
denomina el principio de imputación necesaria, que más adelante va ser
tratado en párrafos posteriores por ser importante también como sustento
principal para la imposición de una medida de prisión preventiva.

Sobre el hecho punible del cual se hace mención del primer requisito material
(apariencia de comisión delictiva), debe existir una clara manifestación del
cumplimiento de los elementos que componen la teoría del delito, pues el
hecho punible debe contener los elementos constitutivos de un delito, mas no
de una apariencia de ella. En su defecto, en cuanto a la calidad del imputado,
ésta debe encontrarse también debidamente sustentado en cuanto su grado de
participación o autoría, el cual es deber de la parte requirente (representante
del Ministerio Público) realizar un sustento idóneo y suficiente sobre el
supuesto autor o partícipe.

Pero lo más importante, y es aquí donde todo operador del derecho debe hacer
un mayor análisis, (como punto de partida) es sobre la existencia de una
imputación necesaria o suficiente, verificándose que la atribución de los hechos
que configuran un delito hacia el imputado, sea concreto, preciso, y claro, y que
en este caso, no es que se exija todo un detalle sobre hechos y circunstancias
precedentes, concomitantes y posteriores, que implique dar lectura a toda
una historia narrada a través de innumerables párrafos que en el peor de los
casos pueda generar confusión o aburrimiento, sino que el relato de los hechos
imputados sea concreto, los mismos que aparecen en la disposición de
formalización del cual se supone que éste requisito ya se ha cumplido. Toda
vez del cual nace formalmente una investigación y respecto del cual también
será el sustento del requerimiento de prisión preventiva, y del cual también (por
el corte adversarial de nuestro sistema), permitirá al imputado, ejercer
válidamente su derecho de defensa, cuestionando cada aspecto o extremo de
la imputación y en calidad de qué situación. Siendo esto un deber que debe
cumplir el ente responsable de ejercitar la acción penal pública y del cual en su
debida oportunidad, tener la carga de la prueba, sobre la base de una
imputación precisa y clara. Pues sin imputación no se podría hablar de un
proceso penal instaurado.
Cabe resaltar también, que el principio de imputación necesaria es exigido
también como sustento de la prisión preventiva, pues así lo ha establecido la
Corte Suprema, resaltando en el considerando vigésimo noveno de la Casación
N° 626-2013-Moquegua.

b) Prognosis de pena:

Conforme con lo estipulado por el artículo 268 literal “b” del CPP, el segundo
requisito material que se exige para la prisión preventiva es la pena probable,
tal y como lo refiere la norma antes indicada en el inciso b), que la sanción a
imponerse sea superior a cuatro años de pena privativa de libertad, es decir
que el A quo al momento de evaluar la pena que corresponda para el delito que
se está imputando, sea superior a una pena de cuatro años, caso contrario si la
pena probable no supere dicha cuantía, no es posible dictar mandato de prisión
preventiva.

En este supuesto, el juzgador toma un rol o criterio diferente a la del primer


presupuesto, dado a que en el primer caso, sólo evaluará la existencia
aparente de la comisión de un delito, sin embargo, en el segundo caso, el juez
se proyecta a futuro, en dicho escenario EL JUEZ PRONOSTICA LA PENA
QUE SE PODRÍA IMPONER AL IMPUTADO EN CASO DE QUE LLEGASE A
LA ETAPA DE JUZGAMIENTO, Y A TRAVÉS DE UNA ACTIVIDAD
PROBATORIA SUFICIENTE SE LLEGASE A DEMOSTRAR
SU CULPABILIDAD, analizará –en todo caso- cuál sería la pena a imponer.

Es decir, que si bien el juez de garantías, tiene un rol diferente a la de un juez


de juzgamiento, el cual éste último tiene como potestad de realizar una
determinación judicial de la pena si es que el caso amerita condenar al
acusado, éste mismo rol podría no asumirla necesariamente el Juez de
Investigación Preparatoria, pero en todo caso, podría proyectarse a futuro
adoptando ese rol de juez de juzgamiento, y determinar judicialmente la pena a
imponer, y ello, implicaría evaluar las circunstancias atenuantes, agravantes o
eximentes de ser el caso, asimismo, evaluar según el caso, si se presenta
también alguna causa de justificación, o causa de atipicidad, o un caso
de inimputabilidad, o responsabilidad restringida por la edad, por ejemplo.

No obstante, el análisis que hará el juez, o su razonamiento o determinación


judicial de pena, debe ser sustentado con los elementos de convicción tanto de
cargo como de descargo, y sobre ello se determinará si se cumple o no este
presupuesto, es preciso recalcar siempre, que el análisis o razonamiento del
juez será por medio de un enfoque global, integral, valorando todas las
circunstancias y posibilidades que se presenten respecto del imputado, sea en
calidad de autor o partícipe, de lo contrario, "será desproporcional dictar una
medida de prisión preventiva a quien sería sancionado con una pena privativa
de libertad suspendida" (considerando trigésimo segundo de la Casación 626-
2013).

En efecto, tal como se ha dicho líneas arriba, el análisis global e integral


versará sobre los principios de lesividad, proporcionalidad y
razonabilidad.

c) Peligro Procesal:

Este presupuesto previsto en el literal c) del artículo 268 del CPP, más
conocido como el periculum in mora o peligro en la demora, se materializa en
dos supuestos: el peligro de fuga y el peligro de obstaculización.

Como bien lo ha manifestado la Corte Suprema, en la Casación 626-2013, que


ya es materia de análisis, específicamente en su considerando trigésimo
tercero, "el peligro procesal es el elemento más importante de esta medida y la
razón por la que se dicta".

En cuanto al peligro de fuga, existen criterios que la ley ha establecido para


valorar qué circunstancias ameritan determinar o presumir la posibilidad de que
el imputado va a fugarse o sustraerse al proceso penal, así encontramos estos
criterios detallados y enumerados en el artículo 269° del CPP, el mismo que a
la letra dice "para calificar el peligro de fuga, el Juez tendrá en cuenta:
1. El arraigo en el país del imputado, determinado por el domicilio, residencia
habitual, asiento de familia, y de sus negocios o trabajo y las facilidades para
abandonar definitivamente el país o permanecer oculto.

2. La gravedad de la pena que se espera como resultado del procedimiento;

3. La magnitud del daño causado y la ausencia de una actitud voluntaria del


imputado para repararlo;

4. El comportamiento del imputado durante el procedimiento o en otro


procedimiento anterior, en la medida que indique su voluntad de someterse a
la persecución penal; y

5. La pertenencia del imputado a una organización criminal o su reintegración a


las mismas."

En cuanto al peligro de obstaculización, el artículo 270 del CPP, requiere u


análisis de criterios que debe evaluar el Juez, sobre la base de un "riesgo
razonable de que el imputado:

1. Destruirá, modificará, ocultará, suprimirá o falsificará elementos de prueba.

2. Influirá para que los coimputados, testigos o peritos informen falsamente o


se comporten de manera desleal o reticente.

3. Inducirá a otros a realizar tales comportamientos".

Bajo estos dos presupuestos o criterios que determinarían el peligro procesal,


existen otras posturas o criterios que según la práctica se maneja en cuanto a
la valoración de reiteración delictiva, o respecto a la alarma social, o
sobre actitudes y valores morales, el orden público y las buenas costumbres,
historial del imputado, lo cual, compartimos la misma idea del profesor Oré
Guardia en cuanto a que estos criterios, "no justifican la aplicación de la prisión
preventiva, pues contradice directamente los principios de presunción de
inocencia y el principio del juicio previo, pues trastocaría su propia naturaleza
cautelar transformando a la medida en un verdadero supuesto de pena".
Lo que merece evaluar este presupuesto es con absoluta objetividad,
analizando a cada caso concreto, las circunstancias personales, o conductas
procesales, entre otros criterios que permitan tener la convicción o referencia
de que el imputado no va a eludir a la justicia, pues en caso de cumplirse este
presupuesto material, no es posible imponer una medida de esta naturaleza
sino una medida menos gravosa.

III.2. Que, del análisis del caso de la Resolución Apelada, en el literal “A”, sobre la
existencia suficientes y graves elementos de convicción, pretende fundamentar
sus argumentos con los siguientes documentos que denomina elementos de
convicción:

1. Atestado N° 222-19-DIRINCRI PNP/DIVCRI/DEINCRI BREÑA-P.L: que


describe y se basa en un atestado que viola el procedimiento desde una
incorrecta e ilegal intervención, que conforme fluye dentro de los actuados se
habría procedido en base a un supuesto robo de una moto, que fue una falsa
acción, dado que no existe ninguna denuncia de robo, y que en la misma
intervención se señala que se habría siniestrado únicamente una moto en una
cochera privada, lo que no se hizo con otro vehículo que se encontraba en
dicha cochera, es decir señor no existiendo una orden de intervención han
siniestrado una moto, se procedió a intervenir una moto, creando una falsa
denuncia de robo, y que tanto el Fiscal y el Juez no habrían observado y
validado este incorrecto accionar, que conforme se acredita con la declaración
el efectivo policial Castro lo venia extorsionando a mi persona para que de un
nombre y cuando no lo hice, ha procedido a perjudicarme, creando un falso
robo y dirigiendo su accionar contra una moto que ese de mis padres, y de ahí
al parecer sembrar marihuana, tan es así que cuando se señala habría mas de
un kilo de marihuana, no encontrándome a mi persona ni un solo gramo de
marihuana, pero sin embargo a mi se me procesa, sin la existencia de prueba
alguna de que pueda dar como probanza el elemento de sospecha grave, pero
ese medio probatorio no existe.

2. Acta de Intervención Policial: Que, dentro del Acta se puede apreciar que los
efectivos policiales ingresaron a un cuarto de material rustico, donde se
encontraban 7 personas, que supuestamente estaban fumando cigarrillos al
PARECER CANIBIS SATIVA (MARIHUANA), y que según el efectivo lo han
destruido, la pregunta hasta ahí señor no se habría cometido ningún delito,
pero si lo que se habría constituido un acto abusivo e ilegal, esto en razón de
conformidad a los documentos obrantes en el expediente se puede ver que a
mi persona, conforme el registro personal, nunca se me encontró en posesión
de ningún cigarrillo o droga u otro, que mi persona es consumidor nunca lo he
negado y que personas del mismo interés estemos reunidos no es un delito,
por lo que señor en base a ESTE ELEMENTO PROBATORIO SE ESTARÍA
ACREDITANDO QUE MI PERSONA NO TENIA EN NINGÚN MOMENTO
NINGUNA POSESIÓN DE ALGUNA DROGA.

3. Manifestación policial de Karina Elizabeth Sierra Campos: Quien señala


que es propietaria de la moto de placa de rodaje N° 1271-1F, y quien se me ha
entregado, para trabajar repartiendo Pizzas, lo cual no era incorrecto y es
cierto, mi persona conforme se acredito ha trabajando repartiendo pizzas, pero
la observación es que si vamos a la mentira de la policía que hubo una llamada
de robo, entonces como se me puede culpar a mi persona si esa moto ha sido
robada, mas aun si en ese momento mi persona no tenia dominio de la moto,
sin embargo a mi persona no se encontró nada a mi persona, si basado en lo
que dice la policía CON ESTE ELEMENTO QUEDA PROBADO QUE MI
PERSONA NO TENIA DOMINIO DE LA MOTO MAS SI H SIDO ROBADA,
conforme lo señalan los efectivos policiales.

4. Manifestación policial de Tuswani Brigitt Purizaca Villar: Que, la


declaración señala que mi persona trabaja en la Pizzería y que conforme lo he
descrito que soy consumidor, pero que eso no es un delito, asimismo es testigo
de que sin ninguna orden judicial siniestran una moto con un palo, y como
señala al parecer encontró algo, según el efectivo policial Castro encontró
marihuana, pero como lo he señalado mi persona desconoce de ello, pero si el
efectivo policial va siniestrar un vehículo aduciendo que existe un olor de
marihuana, primero debo decir que tiene un olfato que solo lo tienen los perros
policías, pero que con lo descrito por el policía lo señalado es falso, dado que
la intención era única perjudicarme dado que no cedi a su extorsión, dado que
mi persona no le ha dado el nombre de la persona que me vende para mi
consumo y que todo la simulación del robo no es mas que un abuso de
autoridad, CON LO QUE SEÑOR QUEDA CLARO QUE MI PERSONA TIENE
UN TRABAJO Y QUE EN NINGUN MOMENTO MI PERSONA TENIA
POSESION O DOMINIO DE NINGUNA DROGA.

5. Manifestación policial de Elizabeth Doris Olivos Gutiérrez: Quien señala


que la intervención se realizo por efectivos policiales, quienes cerraron la
cochera y quienes le señalaron que la intervención era porque en una moto
contenía droga, para luego con un palo siniestrar la moto de manera ilegal y
vuelvo a decir señor donde esta el supuesto robo de la moto, quedando
demostrado que todo fue una actuación de la policía para perjudicarme, que
todo este acto de sembrarme droga viene a razón de que no le di el nombre de
la persona quien me vende la marihuana que consumo. QUE CON ESTE
ELEMENTO DE CONVICCION SEÑALA QUE MI PERSONA ES VICTIMA DE
LA AUTORIDAD AL CREARME UNA FALSA DENUNCIA.

6. Manifestación policial de Oracio Alberto Bustamante Ruiz: Quien señala


que ingresaron efectivos policiales y se puede deducir que lo único que hace es
señalar la intención de los policías era siniestrar la moto, para ello han buscado
de un palo para ello, quedando acreditado que en ningún momento hubo
intención de encontrar una moto robada, sino que la intención era ya sea
sembrar bolsas en la moto y luego inculparme de ello a mi persona, NO
SIENDO ESTE UN ELEMENTO DE CONVICCION COMO LO QUIERE
HACER VER LA RESOLUCION APELADA.

7. Manifestación policial de Hugo Román Cáceres Álvarez: Quien claramente


señala que si bien le dijeron que había una moto robada, un efectivo policial de
nombre Castro señalo que en la moto negra había droga, y para ello
siniestraron la moto y sacaron un paquete cerrado (como pudo saber que hay
droga en un sobre cerrado?), y que ahora se sabe que nunca se abrió ese
paquete, quedando demostrado que la intención era imputarme el cargo que
ahora se me hace, esto en represalia del efectivo policial Castro, quien me
comenzó a extorsionar y al no ceder a ello ahora esta haciendo todo esto para
perjudicarme, NO SIENDO ESTO UN ELEMENTO DE CONVICCION DE MI
RESPONSABILIDAD, SINO POR EL CONTRARIO ES UN ELEMENTO QUE
HACE VER QUE LA INTENCION ERA SINISTRAR UNA MOTO DE MANERA
ILEGAL Y RESPOSABILIZARME DE UN HECHO QUE MI PERSONA NO ES
REPONSABLE.

8. Manifestación policial de Andy Porfirio de la Cruz Guizzabalo: Quien


manifiesta que mi persona es un consumidor de marihuana, y asimismo como
los casos anteriores, señalan que la intención del los policías era siniestrar la
moto, no fue nada de un robo, y con fierro siniestran la moto y conforme se
señalo nunca enseñaron que era, solo dijeron que es marihuana, y se lo
llevaron, con lo que queda acreditado el mal accionar de los efectivos
policiales, no levantando válidamente las actas, dado que no mostraron lo que
sacaban de esa moto, solo dijeron que era droga, pudiendo ser otras cosas.
NO SIENDO ESTE SEÑOR UN ELEMENTO DE CONVICCION PARA
DETERMINAR MI RESPONSABILIDAD Y SOSPECHA GRAVE COMO LO
QUIERE SUSTENTAR LA APELADA.

9. Manifestación policial de Percy Alex Godoy Sierra: Que señor del análisis
sin pericia, tal como debe de darse señala que decir que soy consumidor es
tratar de atenuar mi responsabilidad, es decir señor están señalando que no
soy consumidor, lo que es una observación falsa, dado que soy consumidor, tal
como es conocido por el efectivo policial castro, quien intervino, y ha sido
descrita por los demás intervenidos; asimismo se me quiere señalar que al
firmar el registro Personal, queda acreditada mi responsabilidad, debo señalar
que no es nada mas falso, esto en razón de que mi registro personal esta
anotado que es NEGATIVO a posesión de droga, como puede acreditar mi
responsabilidad si es Negativo, ahora sobre el Registro Vehicular de la moto ha
sido firmada por todo los intervenidos, debiendo señalar que los demás
intervenidos se les ha liberado y no formulando acusación alguna en contra de
ellos, ES DECIR SEÑOR SI ESE FUERA EL CASO MI PERSONA DEBIÓ SER
DECLARADA NO HA LUGAR LA ACUSACION O EN SU DEFECTO SE
DEBIÓ DISPONER UNA MEDIDA MENOS GRAVOSA QUE UNA PRISIÓN
PREVENTIVA, dado que no existe elementos consistentes que señalen alguna
responsabilidad de mi persona, mas teniendo en cuanta que existe una
intervención ilegal, con falsas denuncias y que nunca se me enseño que era
marihuana en la cochera, sino un paquete cerrado y que decían que era droga.

10. Manifestación policial de Humberto Martin Castillo Gentille: Quien


señala que ingresaron a la cochera efectivos policiales para señalar de quien
es la moto, si supuestamente era robada, no debieron decir que están
ingresando por una moto robada, lo que si se puede sacar es que todos
señalan que siniestraron la moto, sin ninguna orden, y se dijo a todos los
intervenidos que el paquete que sacaban era droga, pero nunca lo abrieron,
solo se lo llevaron así, eso es una correcta intervención, no es así, NO SIENDO
TAMPOCO UN ELEMENTO DE CONVICCION QUE DEMUESTRE MI
RESPONSABILIDAD.

QUE, NO ES COMO SEÑALA LA APELADA QUE EXISTE ELEMENTOS DE


SOSPECHA GRAVE O SOSPECHA FUERTE, DADO QUE LOS ELEMENTOS
QUE HA DESCRITO LA RESOLUCION, NO ENERVAN O DEMUESTRAN MI
RESPONSABILIDAD, DONDE SE HA FABRICADO UNA FALSA DENUNCIA DE
ROBO, Y EL UNICO ELEMENTO QUE SE PRETENDE DECIR ME
RESPONSABILIDAD ES QUE MI PERSONA NO PUDO HABER INVITADO DE
MI CONSUMO AL GUARDIAN DE LA COCHERA, NO SIENDO UN ELEMENTO
DE PROBANZA FUERTE, SINO QUIZA PODRIA ESTAR DENTRO DE UNA
SOSPECHA REVELADORA, PERO NO DE SOSPECHA FUERTE O GRAVE,
POR LO QUE NO SE DA EL PRIMER PRESUPUESTO PARA QUE SE DICTE
UNA PRISION PREVENTIVA EN MI CONTRA.

III.3. Que, del análisis del caso de la Resolución Apelada, en el literal “C”, respecto al
tercer presupuesto material: consistente en “que el imputado en razón a sus
antecedentes y otras circunstancias del caso particular, permita colegir
razonablemente que tratará de eludir la justicia (peligro de fuga) u
obstaculizar la averiguación de la verdad (peligro de obstaculización) ”,
debo señalar lo siguiente:
“con respecto al tercer requisito del peligro procesal y respecto también al
peligro de obstaculización, debo señalar que el Art. 269 del CPP señala que
para considerar el peligro de fuga, la pena aplicar es uno de los
argumentos para considerar como un requisito o argumento para la prisión
preventiva, argumento que ha sido esbozado por el Ministerio Público y que
también este despacho comparte, en sentido de que siendo el caso en este
delito de promoción o favorecimiento al tráfico ilícito de drogas la pena
conforme el segundo párrafo es de 6 a 12 años la sola gravedad de la pena
constituye desde ya un elemento fundamental para determinar el
cumplimiento de los demás requisitos formales, si bien es cierto el Ministerio
Público ha cuestionado el arraigo laboral o familiar, a pesar que ha sido
sustentado por la defensa con los documentos que ha presentado
válidamente”

El artículo 269º del Código Procesal Penal establece que para calificar el PELIGRO DE
FUGA, el Juez deberá tener en cuenta:

De modo genérico en el artículo 268 y particularizado en el artículo 269 contempla el


Código Procesal Penal peruano como motivo legitimador de la prisión provisional, es evitar
el riesgo de fuga del imputado.

La norma no determina, ni establece criterios tasados cuya concurrencia haya de conducir


a presumir el referido riesgo de evasión del imputado, sino que se limita a señalar una
serie de criterios que el Juez podrá valorar, individual o conjuntamente para a partir de
ellos determinar la existencia o no de riesgo de fuga en el caso concreto. No cabe, pues,
una interpretación automática de ninguno de los elementos de referencia establecidos en
la Ley, ni siquiera la gravedad de la pena por muy elevada que esta sea. Muy al contrario,
el Juez debe ponderar todos ellos y su incidencia real y practica en el caso, debiendo
adicionalmente bajo pena de nulidad de la resolución, motivar su decisión en la forma
prescrita por los artículos 254 y 271 inc. 3 del Código Procesal Penal.

A) El arraigo en el país del imputado, determinado por el domicilio, residencia


habitual, asiento de la familia y de sus negocios o trabajo y las facilidades
para abandonar definitivamente el país o permanecer oculto;
Gonzalo del Rio Labarthe, en su obra “LA PRISION PREVENTIVA EN EL NUEVO CÓDIGO
PROCESAL PENAL, Primera Edición – ARA Editores EIRL 2008, refiere que:

“El arraigo debe ser entendido como el establecimiento de una persona en un lugar por
su vinculación con otras personas o cosas. Entre las circunstancias que pueden acreditar
el arraigo se encuentra la posesión de un domicilio conocido o de bienes situados
dentro del ámbito de alcance de la justicia.

De otro lado, el arraigo laboral o profesional viene constituido porque el medio


fundamental o único de subsistencia del imputado provenga de un trabajo que desarrolla
en el país, es decir, es un criterio a tener en cuenta el hecho que necesite permanecer en
el país para desempeñar su actividad laboral.

Está claro que tanto el arraigo en el país, como el familiar y laboral, son criterios
que verificados en el caso concreto, antes de justificar la prisión preventiva
demuestran lo contrario. El arraigo viene constituido por supuestos que desincentivan
la fuga del imputado y su ausencia naturalmente permite valorar, con otros factores, el
riesgo de huida”

De lo expuesto, y advirtiendo que en el presente caso, obra en autos la declaración


Jurada con la cual se acredita que tengo domicilio real en la Jiron Yaravi N°
344, distrito de Breña, asimismo la policía no ha cumplido su función de
comprobación domiciliaria, por lo que señalar que no tengo arraigo domiciliario
es incorrecto y sobre el Hotel “Victoria” ubicado en Jirón Arica, es un Hotel donde
estuve con mi pareja, no donde vivía.

De ello, entonces, el señor Juez de Investigación debió valorar debidamente los citados
documentos, que demuestra “objetivamente” el arraigo domiciliario y familiar de mi
persona, y no consignar por el contrario, que el Ministerio Público no ha
cuestionado el arraigo laboral o familiar por lo cual ha sido sustentado por la
defensa con los documentos que ha presentado no debe ser objeto de
manifestación por cuanto eso no está en cuestionamiento.

De otro lado, debo referir que con los documentos anexos en autos respecto a mi
persona, se acredita que con la Constancia de trabajo, en una empresa formal como Pizza
Brava, para lo cual incluso se señaló la dirección, siendo elementos suficientes para que
se demuestre el arraigo laboral, para la apelada es insuficiente la documentación, pero la
norma y la jurisprudencia existente señala que es suficiente lo que he presentado para
demostrar. En ese sentido, se encuentra acreditado que el investigado también cuenta
con arraigo laboral

Que, respecto del Arraigo Familiar, conforme se señala la apelada, se presentó un


documento de mi señora madre Karina Elizabeth Sierra Campos, donde realiza una
Declaración Jurada, pero nuevamente se señala que es insuficiente para acreditar que es
mi arraigo familiar, señor Juez si es presentado por mi señora madre entonces la apelada
quien espera que la presente, no siendo un análisis correcto debió ser considerado un
elemento suficiente.

B) La gravedad de la pena que se espera como resultado del procedimiento;

Al respecto, en diversas sentencias y acuerdos plenarios: “El riesgo de fuga no se


puede apreciar únicamente sobre la base de la gravedad de la pena; se debe
analizar en función de un conjunto de factores suplementarios que pueda
confirmar la existencia de un peligro de desaparición o bien induzca a pensar
que este peligro es remoto, y por tanto, no puede justificar la prisión
preventiva”.

Por su parte, el Tribunal Constitucional ha establecido con acierto que “Si ese fuera el
sentido…, esto es, que la detención judicial preventiva se ha de ver legitimada
solo en atención a la naturaleza reprochable y las consecuencias socialmente
negativas del delito de Promoción y Favorecimiento al Trafico de Drogas, esta
sería violatoria del Principio de Presunción de Inocencia, pues como lo ha
expresado la comisión interamericana de derechos humanos, la justificación
de la detención de una persona en base a la peligrosidad o a la naturaleza del
delito, podrá incluso considerarse (como) que se le impone un castigo
anticipado, sin que el juez competente se haya pronunciado aun sobre su
culpabilidad. Asimismo, esta situación puede dar origen a la aplicación
arbitraria y desviada de la prisión preventiva con fines distintos a los previstos
en la propia ley”. Informe Nº 02/97, párrafo 51 (Sentencia recaída en el Expediente Nº
010-2002-AI/TC.F.J.Nº 126).

Bajo ese contexto y no existiendo en el presente caso otros elementos que hagan
presumir una tentación de fuga por parte de mi persona, la posible imposición de una
pena probable superior a los 4 años no puede generar de manera aislada la sospecha de
fuga que se requiere para que el Juzgado haya considerado su concurrencia.

C) La magnitud del daño causado y la ausencia de una actitud voluntaria del


imputado para repararlo;

Respecto de este extremo la apelada señala que seriamos varios encausado e incluso
que la droga provendría de otra ciudad, debo precisar señor Juez que en la presente
causa solo mi persona es procesado y que no existe ningún documento que acredite que
la marihuana tenga un origen geográfico, por lo que queda demostrado la arbitrariedad
de la medida que se impuso, que mi expediente no fue bien estudiado y que hubo
falencias desde la intervención, en razón de que a mi persona nunca se le encontró con
ninguna droga, conforme mi acta de registro personal, además debo señalar que los
testigos presentes ahí observaron que solo saco un paquete y nunca se mostró en la
intervención que contenía dicho paquete, conforme obra en los actuados, en la que el
resarcimiento del daño se encontraría supeditado a la Promoción y venta, situación que
no se da en el presente caso; por cuanto el Ministerio Publico no ha presentado ningún
elemento grave de convicción que acredite que mi persona haga algún tipo de comercio
con la marihuana.

D) El comportamiento del imputado durante el procedimiento o en otro


procedimiento anterior, en la medida que indique su voluntad de someterse a
la persecución penal.

El Juzgador al momento de valorar hace una valoración inexacta, no sé si por falta de


experiencia o de falta de pericia, esto en razón de que se señala que mi persona no se
habría sometido a la persecución penal ya que no se ha observado el respeto ha valores
establecidos por el orden jurídico, dado que no brinde información y de no haberme
entregado por propia voluntad, nuevamente señor Juez quizá este razonamiento
provenga de otro expediente que justifique la medida de prisión preventiva, pero en ente
caso es diferente, esto en razón de que mi persona fue intervenida en el interior de un
inmueble sin una orden judicial, es decir señor se me ha detenido antes de algún hallazgo
o incautación conjuntamente con otras personas y que no se nos ha encontrado ninguna
droga, tal como lo expresa el registro personal, que habíamos fumado marihuana, no es
un delito, pero pese a ello, se produjo una detención; posterior a ello ya detenidos
siniestraron la moto, con una barra, tampoco sin una orden judicial, a lo que debo decir
señor como voy a entregarme si ya me encontraba intervenido y detenido, y esto sin
antes haber cometido un delito, mi persona no se resistió en ningún momento, observo
como todos el abuso que se cometía, tan es así que las personas que fueron detenidas
conmigo ahora están con el no ha lugar acusación, y todo eso porque el efectivo policial
Castro, quiso extorsionarme para darle a la persona que me vende la marihuana para mi
consumo.

Por lo expuesto, no habiéndose cumplido de manera concurrente los 03 presupuestos


materiales establecidos en el artículo 268º, el Juez no debió declarar fundado el
requerimiento fiscal de prisión preventiva solicitada por la representante del Ministerio
Público.

III.4. El artículo 270º del Código Procesal Penal establece que para calificar el PELIGRO DE
OBSTACULIZACION, el Juez deberá tener en cuenta el riesgo razonable de que el
imputado:

1. Destruirá, modificará, ocultará, suprimirá o falsificará elementos de prueba.

2. Influirá para que coimputados, testigos o peritos informen falsamente o se


comporten de manera desleal o reticente.

3. Inducirá a otros a realizar tales comportamientos

Sobre el particular, debo precisar que el Juez de Investigación Preparatoria no pudo


considerar la existencia de algún tipo de riesgo razonable referida a que mi persona
pueda destruir o alterar medios de pruebas, o que influirá o inducirá a otros sujetos
procesales a prestar información falsas, esto segundo porque los testigos existentes han
coincido que mi persona es consumidor de marihuana tanto como ellos y que mi persona
no se dedica a ninguna venta o comercio del mismo, puesto que en lo actuado no existe
algún elemento que nos haya presumir dicho comportamiento, por lo que al no tener en
este punto la apelada quiere introducir el peligro de fuga que ya fue visto en líneas arriba
y tampoco existe ello.

III.5. Advirtiendo de lo expuesto, que en el presente caso no se ha acreditado la concurrencia


del presupuesto de peligro procesal exigido por el artículo 268º del Código Procesal Penal
para la imposición de la medida de prisión preventiva, mas aun cuando se ha acreditado
documentalmente que cuenta con un domicilio conocido donde puede ser citado durante
la prosecución del proceso, así como, que no se han justificado los fines procesales que
se buscan lograr con la restricción de la libertad de mi patrocinado (naturaleza jurídica de
la prisión preventiva – medida cautelar que garantiza fines procesales); solicito a usted,
señores del colegiado, se sirvan REVOCAR LA RESOLUCION APELADA, EN EL
EXTREMO QUE DECLARO FUNDADO EL REQUERIMIENTO FISCAL DE PRISION
PREVENTIVA EN CONTRA DE MI PATROCINADO PASCUAL GUZMAN ALFARO, y
reformándola, lo declare INFUNDADO, ordenando DEJAR SIN EFECTO LAS
ORDENES DE CAPTURA EMANADAS EN SU CONTRA.

IV. FUNDAMENTACIÓN JURÍDICA:

IV.1. Constitución Política del Estado;


Inciso 3), 11) y 14) del artículo 139º de la Constitución Política

IV.2. Código Procesal Penal;


Artículos II, VI, VII.3, IX y X del Título Preliminar del Código Procesal Penal
Artículos 202º, 203º, 253º y 268º , 278° inc. 1del Código Procesal Penal

PRIMER OTROSI DIGO: Me reservo el derecho de extender los fundamentos de mi petición en


la audiencia respectiva.

SEGUNDO OTROSI DIGO:

POR LO EXPUESTO:

Sírvase, señor Juez, proveer con arreglo a ley.

Lima, 06 de enero del 2019.

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