Mostrar detalles Enlaces de texto completo Citar Resumen Los niños con obstrucción de la vía aérea superior son únicos y variables en su presentación y manejo, lo que a menudo representa un desafío para el pediatra. Varias peculiaridades anatómicas y fisiológicas hacen que un niño sea vulnerable a desarrollar una obstrucción de las vías respiratorias superiores. El hallazgo característico en la obstrucción de la vía aérea superior es estridor-inspiratorio, bifásico o espiratorio. Las etiologías varían ampliamente a lo largo de los grupos de edad y de acuerdo con el modo de presentación. El enfoque comienza con la sospecha, exige una evaluación clínica cuidadosa del grado de obstrucción y muchas veces las medidas de emergencia preceden cualquier investigación o incluso un diagnóstico preciso. Mantener una vía aérea abierta y estable es de suma importancia, ya que a menudo requiere un enfoque de equipo de médico de emergencia, pediatra, Otorrinolaringólogo y neumólogo pediátrico. La condición más común que se presenta con obstrucción de la vía aérea superior en la población pediátrica es el crup viral. El crup es un diagnóstico clínico en un niño febril, con tos de ladridos y estridor precedido por infección respiratoria superior. Se trata con esteroides sistémicos o inhalados y epinefrina nebulizada. La epiglotitis y la traqueítis bacteriana son infecciones bacterianas agudas de las vías respiratorias superiores, que se presentan como verdaderas emergencias de las vías respiratorias. Aunque el pilar de la terapia son los antibióticos por vía intravenosa, la principal preocupación es el mantenimiento de las vías respiratorias, que con frecuencia requiere intubación endotraqueal. La broncoscopia rígida es el procedimiento de elección para cuerpos extraños en las vías respiratorias, una causa común de obstrucción de las vías respiratorias superiores en niños menores de 3 años de edad.