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uu tnBoRA PREVENCION Y VIGILANCIA MEDICA DE LOS SOLDADORES La soldadura es una actividad comun en nu- merosos sectores industriales: construccién, obras publicas, industria metalica, ete. La prevencién en las actividades de soldadu- ra implica la consideracion de numerosos riesgos profesionales: intoxicaciones relacionadas con los humos desprendidos; afecciones respiratorias agudas o crénicas, cancer; lesiones oculares, le- siones auditivas; trastornos musculoesqueléticos debidos a la adopcién de posturas restrictivas, los movimientos repetitivos y la manipulacién de pie- zas pesadas; alergias; exposicién a radiaciones ionizantes, electrocucién, quemaduras cuténeas, ete. Desde hace varios afios, algunos riesgos, como los relacionados con las radiaciones épti- TRAVAIL & SECURITE - Francia ‘cas han sido bien tenidos en cuenta dentro y fue- ra de las empresas. Por el contrario los riesgos que tienen un efec- to diferido sobre la salud, como los relacionados con la inhalacién de humos de soldadura, nece- sitan ain acciones de sensibilizacién y de infor- macién. EI Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cancer (CIRC) clasificé en 1990 los humos de soldadura en la categoria 2B (agen- tes que pueden ser cancerigenos para el hom- bre). Una proporcién significativa de los contami nantes emitidos por los procesos de soldadura presentan riesgos para la salud y algunos son incluso potencialmente cancerigenos. Muchos de los compuestos presentes en los humos de soldadura tienen propiedades irritantes, t6xicas 0 alergénicas y pueden producir dafios broncopul- monares. Los riesgos varian en funcién del proce- dimiento de soldadura utilizado, de los ma- teriales y de los gases empleados: soldadura eléctrica normal, en atmésfera gaseosa (MAG, MIG, TIG), soldadura con soplete, por puntos, etc. Una buena politica de prevenci6n de los ries- gos de la soldadura no puede limitarse al respe- to de algunas consignas y al uso de equipos de proteccién individual, por muy eficaces que sean. Las reglas generales de prevencién del riesgo quimico, basadas en reducir al mi mo el riesgo de exposicién a los agentes qui- micos peligrosos, deben también aplicarse cuando se efectuan trabajos de soldadura. La sustitucién de ciertos procedimientos por otros menos peligrosos, principalmente la utiliza- cién de técnicas de soldadura menos emisivas, constituye una importante via preventiva. Los sistemas de ventilacién general no son suficientes para la proteccién de la salud de los trabajadores y de su entorno. En primer lugar, entrafia una dispersion de los contaminantes en el ambiente del taller, con riesgo de acumulacién en las zonas mal ventiladas. Ademas requiere el movimiento de caudales de aire importante. we 421 -octuane EI) = Conviene por lo tanto instalar dispositi- vos de aspiracién localizada, como ya han hecho numerosas empresas, a menudo con el apoyo de las CRAM (Caisses Régionales d’Assurance Maladies). En este sentido no faltan soluciones técnicas adaptadas a cada puesto de trabajo y compati- bles con una excelente calidad de la soldadura: sopletes con aspiracién de humos incorporada, brazos captadores orientables, captadores lami- nares, mesas de trabajo aspirantes, cabinas de soldadura, campanas aspirantes, aspiradores méviles, captacién sobre las lineas de robots sol- dadores, etc. Durante la implantacién de medidas preven- tivas u organizativas puede aparecer cierta re- sistencia al cambio por parte de los soldadores, momento en el que puede resultar muy util una adecuada informacién y formacién de éstos. En este sentido queda atin por hacer un largo trabajo de sensibilizacién, Pero sin perjuicio de la adopcién de las ade- cuadas medidas preventivas técnicas y organiza- tivas, es preciso atender al estado de salud de los trabajadores. Cuando se tiene a cargo Ia vigilancia de ta ‘salud de casi dos mil empleados, muchos de los cuales realizan, regular u ocasionalmente, activi- dades de soldadura, es necesario establecer un método simple, eficaz y fiable para identificar los peligros, evaluar los riesgos y jerarquizarios, a fin de establecer una vigilancia médica pertinente y realista. EI Servicio de Sanidad Militar, con base en Brest, decidié hacer frente al riesgo quimico inte- reséndose en primer lugar por los procedimientos utilizados por los soldadores. Un enfoque al que Nlaman “metalirgico” se ha mostrado capaz de responder a estos criterios. En efecto, hay casi tres mil tipos de acero normalizados, y entre doce y veinte metales a controlar, segin e! procedi- Imiento de soldadura de que se trate. EI conocimiento de la composicién de los productos utilizados (metales de aporte, me- tales de base, flujos, gases) en cada puesto de trabajo y el conocimiento de las tempera- turas de trabajo, las temperaturas de fusi6n y de ebullicién de los metales, permite estimar las probabilidades de liberacién de humos y orientar las metrologias de confirmacién. ‘tuo LABORA sau aBonat R. IE) pnevencion express La consideracion de sus posibles efectos sobre Ja salud permite entonces determinar las preguntas a realizar a los soldadores durante las entrevistas médicas. Para conocer las propiedades téxicas, cance- rigenas, imitantes o alergizantes de ios compo- nentes de los humos de soldadura, se basaron en una amplia revision de la literatura médica y técnica. En la soldadura al arco, aparece claramen- te que el cromo y el niquel, y en menor medida 1 hierro, el manganeso @ incluso 6! cobalto, son Jos metales més preocupantes en términos de im- acto potencial para la salud, El conocimiento preciso de cada elemento del conjunto procedimiento/metal de base/metal de aporte/lujo, permite evaluar la probabilidad de la exposicién a cada componente y decidir realizar no examenes especificos. En el caso de soldadura con soplete, cuyos riesgos para la funcién pulmonar son bien co- nocidos y que estén ligados a los compuestos metilicos y a la colofonia, el Servicio de Sa- nidad Militar realiza una prueba respiratoria fun- cional a los soldadores cada dos afios o incluso cada afio a los que ademas son fumadores. La realizacién de radiografias toracicas siste- maticas resulta poco util antes de una quincena de aos de antigiiedad en ese tipo de trabajo, salvo que el sujeto tenga antecedentes de enfer- ‘medad pulmonar. La realizacién de escdneres tordcicos transcurridos 20 afios desde el comienzo de Ja exposicién, con una periodicidad de 5 a 10 afios seguin la intensidad de ésta, parece mas apropias Con la ayuda de las bases de datos existen- tes se puede igualmente, después de la entrevis- ta con el trabajador, decidir aplicar pruebas de control biolégico. Para la deteccién de la cad- miuria (cadmio en orina) por ejemplo, en los sol- dadores de plata-cadmio, o del cromo y el niquel en los soldadores de acero inoxidable, las prue- bas de control biolégico son las mas adecuadas. También resultan muy utiles en el seguimiento de la exposicién a los agentes cancerigenos, muté- genos y/o t6xicos para la reproduccion. El citado Servicio de Sanidad vigila igualmen- te la piel y los ojos, cuya especial sensibilidad a los rayos ultravioleta esté demostrada, El rifién, érgano diana para un cierto ni- mero de metales pesados es igualmente ob- Jeto de atencién del médico, particularmente en caso de exposicién al plomo, al cadmio 0 al torio. Del mismo modo, 1a funcién reproductiva de! varén parece sensible a la radiacién térmica ge- nnerada por la soldadura, y este efecto nocivo se ve reforzado por fa utilizacion de determinados metales t6xicos para la reproduccién como el boro, el cadmio, etc. Finalmente, el sistema nervioso central (alte- racién de la capacidad de atencién y del suefio) debe ser vigilado especialmente en los trabaja- dores expuestos al manganeso o a los disolven- tes orgénicos. Para el seguimiento de la salud de os soldadores han adoptado “la estrategia mé- dica” siguiente: Durante la visita inicial, ade- mas de analizar las caracteristicas necesarias para determinar la aptitud de! operario para el puesto de trabajo en cuestién, se le realiza una valoracién oftalmolégica completa, una prueba de la funcién respiratoria (espirome- tria) y una radiogratia pulmonar. La evaluacién renal se puede completar con una evaluacién hepatica, en caso de exposicion a disolventes clorados. Durante las visitas periddicas, ademas de la investigacién de trastornos de la fecundidad, el interrogatorio y los examenes alertan sobre even- tuales sintomas respiratorios y dermatolégicos, oculares y renales. La vigilancia médica se completa con visitas regulares a los puestos de trabajo.

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