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Introducción

Históricamente, se conoce que un gran porcentaje de mujeres que lograban tener un parto de
manera independiente, tan solo se alejaban de sus aldeas cuando presentían que iba a llegar el
momento del nacimiento, conforme pasaron los años se comenzó a proporcionar compañía a
las mujeres experimentadas de su familia o comunidad. Esta costumbre, a cargo de las
llamadas parteras tradicionales o comadronas, sigue siendo habitual en muchas poblaciones
indígenas de América Latina y de otras partes del mundo. Sin embargo, existían altas tasas de
mortalidad materna y neonatal. En realidad, suelen ser consecuencia de la exclusión
económica, social, ausencia de condiciones de higiene adecuadas y personal médico cercano o
acceso a servicios de emergencia que puedan prevenir o aminorar posibles complicaciones.
Actualmente, la atención a las mujeres durante el embarazo, parto y puerperio requiere
de un enfoque humanizado, intercultural y seguro, libre de violencia y sin medicalización
innecesaria, que reconozca y valore la autonomía de las mujeres, su protagonismo durante el
parto, garantice sus derechos y respete los aspectos socioculturales de las mujeres y su
familia, ya que el nacimiento, es un proceso natural con un profundo significado cultural y
social, por lo que es fundamental que el personal de salud encargado de su cuidado otorgue
atención médica integral con calidad, calidez y seguridad, que contribuya a reducir la morbi-
mortalidad materna con la aplicación de un nuevo modelo de atención que limite el uso de
prácticas clínicas innecesarias y permita que la madre pueda reincorporarse a su vida familiar,
social y laboral, así como también que el recién nacido pueda continuar con normalidad su
crecimiento, desarrollo e integración en el entorno familiar y social.
Por lo mencionando anteriormente se consideran experiencias vitales para la vida de
las mujeres, por lo que la atención sanitaria ofrecida en estos momentos debe incluir una
visión global más humanista, dando a los protagonistas del evento la importancia que
requieren. Por otro lado, la importancia de promover un parto humanizado, es porque se
estima que las cesáreas afectan a gran cantidad de gestantes de bajo riesgo obstétrico cuyo
objetivo es experimentar un parto natural en el que los cuidados recibidos estén basados en la
humanización, con el fin de hacer más personal el momento del nacimiento.
Desarrollo
El parto es el proceso fisiológico con el que la mujer finaliza su gestación y en el que están
implicados factores psicológicos y socioculturales. Con relación a la Organización Mundial
de la Salud (OMS), es la expulsión de uno a más fetos y sus anexos desde interior de la
cavidad uterina al exterior.
De acuerdo a la OMS el parto humanizado hace referencia a que el parto sea una experiencia
positiva para la madre, independientemente del lugar en el que se desarrolle el nacimiento,
aumentando el poder de decisión que la mujer tiene sobre este proceso, respetando sus
valores, creencias y sentimientos, y reduciendo la excesiva medicalización y el número de
intervenciones sistematizadas hoy en día desarrolladas, promoviendo la utilización de
prácticas sanitarias individualizadas en función de las necesidades de cada mujer y basadas en
la evidencia científica para garantizar el bienestar y la seguridad de la madre y el neonato.
Objetivos
 Reconocer a la madre, el padre y su hija/o como los verdaderos protagonistas.
 No interferir rutinariamente este proceso natural; solo se debe intervenir ante una
situación de riesgo evidente.
 Reconocer el derecho para la mujer y su pareja, a la educación para el embarazo y
parto.
 Reconocer y respetar las necesidades individuales de cada mujer/pareja y el modo en
que se desarrolle esta experiencia.
 Respetar la intimidad del entorno durante el parto y el posparto.
 Brindar atención personalizada y continua en el embarazo, parto y puerperio.
 Favorecer la libertad de movimiento y posición de la mujer durante todo el trabajo de
parto (en cuclillas, hincada, sentada, en el agua, o como desee).
 Promover la relación armónica y personalizada entre la pareja y el equipo de salud.
 Respetar la decisión de la mujer sobre quién desea que la acompañe en el parto
(familia, amistades).
 Privilegiar el vínculo inmediato de la madre con su hija/o, evitando someterla a
exámenes o a cualquier maniobra de resucitación, que sean innecesarios.
En 1996, la OMS publicó un informe sobre los cuidados en el parto normal, con el fin de
reducir la utilización de prácticas innecesarias o perjudiciales en la asistencia obstétrica,
Algunas de ellas son:
 Uso del enema de forma rutinaria (utilizarlo cuando la mujer lo elija).
 Uso rutinario del rasurado púbico.
 Evitar el sondaje vesical y favorecer la micción espontánea.
 Insertar una vía periférica intravenosa de forma rutinaria en mujeres que decidan tener
un parto no intervenido y no existan riesgos evidentes posparto.
 Realización rutinaria de tactos vaginales frecuentes.
 Fomentar los pujos dirigidos o en una misma posición.
 Masajear el periné durante la segunda fase del parto.
 Monitorización fetal continua en aquellos casos que no sea estrictamente necesaria y
pueda practicarse una monitorización intermitente cada 15 minutos.
 Realización de amniotomía de rutina (realizarse únicamente en caso de que la
dilatación no progrese o en situaciones que requieran acceso al feto).
 Administración de oxitocina si el progreso del parto es el adecuado.
 Restringir la ingesta de líquidos.
 Trasladar a la gestante a diferentes zonas durante el proceso de parto.
 Limitar la movilidad de la mujer en las diferentes etapas del parto.
 Mantener la misma posición supina durante la etapa de dilatación.
 Restringir la posición de la mujer en la posición rutinaria de litotomía.
 Practicar frecuentemente la maniobra de Kristeller.
 Realización de episiotomía rutinaria.
 Realización de maniobras extractoras de la placenta si no es requerido por el tiempo
transcurrido.
 Lavado rutinario del útero tras el alumbramiento.
 Revisión rutinaria manual del útero después del alumbramiento.
Según las últimas recomendaciones elaboradas por la SEGO en referencia a la asistencia al
parto, en concordancia con varios artículos científicos consultados, las prácticas sanitarias que
es necesario promover son:
a) Permitir el acompañamiento de la mujer durante todo el proceso de parto: El apoyo
continuo y personalizado durante el trabajo de parto garantiza cierto grado de alivio de dolor y
acaba siendo una de las formas más eficaces para mejorar el estrés y ansiedad maternas,
haciendo que las mujeres califiquen el parto como una experiencia positiva.
b) Uso de terapias no farmacológicas para el alivio del dolor: El dolor de parto es
definido como un dolor agudo, severo, limitado en el tiempo y de intensidad variable, que
aumenta en el periodo expulsivo como consecuencia del descenso de la cabeza fetal y el
estiramiento de los tejidos perineales. Proporcionar técnicas de relajación o recomendar al
acompañante que realice masajes a la gestante durante el periodo de dilatación, lo cual
favorece la relajación de la mujer y la atención sobre el propio dolor de parto, reduciendo su
percepción
c) Movilidad y libertad en la elección de la postura durante las etapas de dilatación y
expulsivo
 Posiciones verticales:
De pie: La mujer se encuentra de pie, con las piernas separadas, apoyándose con las manos en
la pared, sobre su pareja o colgándose de las cuerdas, realizando movimientos oscilatorios.
Mediante esta postura se consiguen mayores diámetros pélvicos y contracciones de mayor
intensidad.
Cuclillas: Es la posición vertical más recomendada, siendo necesaria la rotación interna de
caderas para ser beneficiosa. La mujer debe intentar evitar juntar los pies y separar los muslos,
alineando las rodillas con los pies. Se considera de elección en procesos de parto prolongados.
Sentada: La gestante permanece sentada sobre las pelotas específicas de parto (dilatación) o
en el taburete obstétrico (dilatación y expulsivo). Permite beneficios del efecto de la gravedad,
faltando evidencia científica hasta la fecha de su verdadero efecto positivo, pero facilita el
trauma peritoneal, al aumentar la presión soportada por el sacro.
 Posición cuadrúpeda
Es importante colocar las piernas y los pies más separados de la línea media en referencia a
las rodillas, para provocar una rotación interna de la cadera que permita una mayor apertura
de la pelvis.
Manos-rodillas: Se caracteriza porque la mujer se apoya sobre sus rodillas y su tórax
(apoyado sobre una pelota de fit-ball), brazos o manos, según su propia comodidad,
manteniendo siempre la espalda recta. Esta posición materna favorece la rotación fetal en
aquellos partos en los que la posición del feto se encuentra en occipitoposterior (OP), si se
mantiene durante un tiempo aproximado de 30 minutos durante la primera etapa del parto, en
mujeres que eligen tener un parto sin analgesia. Permite la realización de masaje lumbar por
parte del acompañante, lo cual beneficia también sobre la comodidad materna y el alivio del
dolor consecuencia de las contracciones uterinas, así como ayuda a prevenir el trauma
perineal.
 Decúbito lateral
Se considera la posición de elección en los casos de analgesia epidural, ya que es compatible
con ésta y permite mucha movilidad de la pelvis, favoreciendo igualmente la progresión del
parto.
Condiciones generales.
Se permitirá que la mujer visite, semanas antes de dar a luz, las instalaciones en las que va a
tener lugar el parto, para conocer al personal que la atenderá y aclararlas dudas que pueda
tener.
 Plan de nacimiento: Puede facilitarse en la visita de control prenatal, aproximadamente
durante la semana 23 de gestación.
 Consentimiento informado firmado.
 Acompañamiento durante el parto: Permitir que la mujer esté acompañada durante todo
el proceso, siempre que ella lo desee, por la persona que ella libremente elija con el fin
de garantizar un apoyo continuo desde las etapas más tempranas
 Condiciones de las instalaciones del área de partos: Será necesario adecuar los espacios
del área obstétrica para ofrecer un espacio único de dilatación y parto, fomentándose la
intimidad de la pareja.
 Profesionales sanitarios: Debe respetarse la decisión de la mujer (Plan de parto) y
hacerla partícipe de todo el proceso, ofreciéndole la información necesaria sobre las
prácticas que se van realizando para implicarla en la toma de decisiones.
Atención sobre el trabajo de parto y el nacimiento.
o Se recomienda la atención respetuosa y organizada
o Proporcionar privacidad y confidencialidad, asegure la integridad física y el trato
adecuado y permita tomar una decisión informada y recibir apoyo continuo durante el
trabajo de parto y el parto.
o Promover la comunicación efectiva entre los prestadores de atención y las mujeres en
trabajo de parto mediante el uso de métodos simples y culturalmente aceptables.
o Acompañamiento de la mujer durante el trabajo de parto.
o Se recomienda para la práctica el uso de las siguientes definiciones de las fases latente y
activa del período de dilatación.
Periodo de dilatación
La fase latente del período de dilatación se caracteriza por contracciones uterinas dolorosas y
cambios variables del cuello uterino, incluso con un cierto grado de borramiento y progresión
más lenta de la dilatación hasta 5 cm para los primeros trabajos de parto y los subsecuentes.
El período de dilatación activa es un período que se caracteriza por contracciones uterinas
dolorosas y regulares con un grado importante de borramiento y dilatación más rápida del
cuello uterino a partir de los 5 cm hasta la dilatación total para los primeros trabajos de parto
y los subsecuentes.
 Es posible que el trabajo de parto no se acelere naturalmente hasta alcanzar un umbral
de dilatación del cuello uterino de 5 cm. Por consiguiente, no se recomienda el uso de
intervenciones médicas para acelerar el trabajo de parto y el nacimiento (como la
estimulación con oxitocina o la cesárea) antes de este umbral, siempre y cuando se
aseguren las buenas condiciones del feto y de la madre.
 No se recomienda la pelvimetría clínica de rutina en el ingreso para el parto en
embarazadas sanas.
 No se recomienda la cardiotocografía de rutina para la evaluación del bienestar del feto
en el ingreso para el parto en embarazadas sanas que presentan trabajo de parto
espontáneo.
 Se recomienda la auscultación mediante un dispositivo de ecografía Doppler o
estetoscopio de Pinard para evaluar el bienestar del feto en el ingreso para el parto.
 No se recomienda el rasurado púbico o perineal de rutina antes del parto vaginal.
 No se recomienda realizar enemas para reducir el uso de la conducción del trabajo de
parto.
 Se recomienda realizar un tacto vaginal a intervalos de cuatro horas para valoración de
rutina e identificación de la prolongación del trabajo de parto activo.
 No se recomienda la cardiotocografía continua para evaluar el bienestar del feto en
embarazadas sanas con trabajo de parto espontáneo.
 Se recomienda la auscultación intermitente de la frecuencia cardíaca fetal ya sea
mediante un dispositivo de ecografía Doppler o un estetoscopio de Pinard para
embarazadas sanas en trabajo de parto.
 Se recomienda la anestesia peridural para embarazadas sanas que solicitan alivio del
dolor durante el trabajo de parto, dependiendo de las preferencias de la mujer. Los
opioides de administración parenteral, como fenatilo, diamorfina y petidina, son
opciones recomendadas para embarazadas sanas que solicitan alivio del dolor durante el
trabajo de parto, dependiendo de las preferencias de la mujer.
 Se recomiendan técnicas manuales, como masajes o aplicación de compresas tibias,
para embarazadas sanas que solicitan alivio del dolor durante el trabajo de parto,
dependiendo de las preferencias de la mujer.
 No se recomienda el alivio del dolor para evitar y reducir el uso de conducción en el
trabajo de parto.
Periodo expulsivo
Es comprendido entre la dilatación total del cuello uterino y el nacimiento del bebé durante el
cual la mujer tiene un deseo involuntario de pujar como resultado de las contracciones
uterinas expulsivas
 Se debe informar a las mujeres que la duración del período expulsivo varía de una mujer a
otra.
 En los primeros partos, el nacimiento se completa normalmente en 3 horas, en tanto en los
partos subsecuentes, el nacimiento se completa por lo general en 2 horas.
 Para las mujeres sin anestesia peridural, se recomienda alentar la adopción de una posición
para dar a luz que sea de su elección, inclusive las posiciones erguidas.
 Para las mujeres con anestesia peridural, se recomienda alentar la adopción de una posición
para dar a luz que sea de su elección, inclusive las posiciones erguidas.
Métodos para disminución de dolor
1. La aromaterapia aprovecha el poder curativo de las plantas con el uso de aceites esenciales
para mejorar el bienestar físico y mental. Los aceites se pueden administrar a través de
masajes en la piel o pueden ser inhalados mediante una infusión de vapor o un mechero.
2. Pelota
Basculación de pelvis. Sin lugar a dudas, uno de los ejercicios más recomendados es este
que ahora te vamos a explicar. Consiste básicamente en que la parturienta se siente sobre el
citado balón y con las piernas abiertas. Deberá mantener recta su espalda y luego bascular,
mover, lo que es la pelvis hacia delante y hacia atrás, con la espalda apoyada en la pelota de
dilatación: La mujer se siente en el suelo con las piernas dobladas en plan “indio” y con la
espalda apoyada en el balón.
Cuclillas: Como el propio nombre de ese indica, consiste en que la parturienta se coloque
de cuclillas. Al hacerlo tendrá las manos apoyadas en la pelota de dilatación.
Rodillas: Consiste en que la futura mamá se siente de rodillas en el suelo separando sus
muslos. De la misma manera, tendrá que proceder a colocar los brazos sobre la pelota y el
tronco apoyarlo en esa.
3. Técnica de respiración correcta durante el parto.
La respiración profunda a un ritmo constante no sólo alivia el dolor de la mujer; el bebé
también recibe más oxígeno. Cuando se sufran las contracciones que la paciente trate de
inspirar tranquila a un ritmo constante por la nariz. El aire se expulsará enseguida por la boca
ligeramente abierta. Fase de expulsión: que la paciente inspire y espire de forma constante
esto ayudará a aliviar al dolor y cuando pase la contracción que espire profundamente para
recuperarse del esfuerzo.
4. Música
Se utiliza durante la fase latente y activa del trabajo de parto ya que posee virtudes estéticas
auditivas y sus características técnicas musicales proporcionan relajación y bienestar, por otro
lado, la eliminación de ruidos en las salas de parto contribuye a la disminución de los
mediadores químicos del estrés materno. Ambos acontecimientos, facilitan la armonía del eje
hipotálamo-hipofisiario adrenal materno, traduciéndose en mayor bienestar; y por extensión,
mejor apego entre madre e hijo al nacer.
5. Cuidados del periné
 Aplicación de compresas calientes. Se encontró que el uso de compresas calientes; en el
periné se asocia con una reducción de la ocurrencia de traumatismo, reducción de los
desgarres de tercer y cuarto grados
 Protección manual del periné con maniobra de ritgen. Reporta una disminución en la
frecuencia de episiotomía
 Masaje perineal durante el segundo periodo de trabajo de parto. Está comprobado que
disminuye los desgarres de tercer y cuarto grado, así como el uso frecuente de
episiotomía.

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