MIGRACION

INTERNA
Virgilio Partida Bush

INSTITUTO NACIONAL DE ESTADISTICA

GEOGRRFIR E INFORMRTICR liS - UNAM
 MI(~· ACIO
1 TER
Virgilio Partida Bush

INSTITUTO NACIONAL DE ESTADISTICA

GEOGRAFIR E INFORMRTICR liS- UNAM
DR © 1994, Instituto Nacional de Estadística,
Geografía e Informática
Edificio Sede
Av. Héroe de Nacozari Núm. 2301 Sur
Fracc Jardines del Parque. CP 20270
Aguascalientes. Ags.

Migración Interna

Impreso en México
ISBN 970-13-0434-9
 Presentación

Un objetivo del XI Censo General de Población y Vivienda de 1990. fue

la cuantificación de las viviendas y de los hogares existentes en el país,
así como de la poblaciónresidenteenélall2demarzodeeseaño. Además,
el Censo tenía como propósito caracterizar la población y las viviendas
en el entend{cto de que es solamente a través de esta valiosa fuente de
información. como puede adquirirse un conocimiento integral de una gran
variedad de fenómenos sociodemográficos haciendo referencia a todo el
universo bajo estudio y pudiendo asociarlo a los diversos niveles del espacio
geográfico en el que tienen lugar.

Dada la relevancia del Censo de Población como la fuente primaria de

información demográfica del país, resulta útil recordar, brevemente. algunos
de sus principales aspectos metodológicos:

PLANEACION Y ESTRATEGlA DEL CENSO DE 1990

Por la importancia, trascendencia y complejidad del Censo, su planeación

se inició en 1984, con el estudio de las experiencias acumuladas a lo largo
de la rica tradición censal del país.

Mediante valiosas aportaciones de usuarios y especialistas. se determinó

que. paraalcanzarlosobjetivos de máxima cobertura geográfica y calidad
de la información, la estrategia general a seguir debía incorporar
diversas innovaciones de probada utilidad, como la simplificación del
cuestionario y del contenido temático. la ampliación del período de
levantamiento. la actualización cartográfica a través de imágenes de
satélite y fotografía aérea, la instrumentación de una amplia campaiia
de comunicación social, la organización descentralizada tanto del operativo
de campo como de las etapas del procesamiento.

SIMPLIFICACION DELCUESTlONARJO Y CONTENIDO TEMA TICO

Por lo que respecta al cuestionario, se realizaron numerosos seminarios, en

los que fueron analizadas múltiples opciones del mismo, con el propósito
de lograr el equilibrio entre las demandas de información y aquella que es
posible captar mediante un programa censal. Las diversas alternativas se
probaron en campo. llegando finalmente a un cuestionario comprensible
y de fácil manejo.

Este incluyó preguntas sobre aspectos demográficos. culturales,

educativos y económicos de las personas, así como características de las
viviendas que habitan.
INEGI. Migración interna. 1994
AMPLIACION DEL PERIODO DEL LEY ANTAMIENTO

Debido a la magnitud de nuestra población, a la extensión del territorio del

país, y a sus características orográficas, el período tradicional de
levantamiento se amplió de uno a cinco días. El mayor tíempo disponible
para las entrevistas pennitió operar con una estructura más reducida, lo
que redundó en personal mejor capacitado y facilitó un mayor control de
todas las actividades. Esto también coadyuvó a lograr la cobertura total del
territorio y a mejorar la calidad de la información_

ACTUALIZACION CARTOGRAFICA

Una operación de campo como la del Censo. exige abundante material

cartográfico, detallado y actualizado. Por ello, fueron elaborados 1.7
millones de cartas, planos y croquis, utilizando tecnología avanzada, como
imágenes de satélite y fotografías aéreas. lo que permitió su obtención
oportuna y su incorporación en sistemas de cómputo.

Esta Cartografía acrualizada, que muestra los espacios ocupados por

los asentamientos humanos en todas las localidades del país, se convirtió
en una herramienta de trabajo de utilidad excepcional, y. a la vez, da una
nueva dimensión a Jos resultados censales, al poder referirlos a su espacio
geográfico específico, incluso a nivel de grupos de manzanas.

CAMPAÑA DE COMUNICACION CENSAL

Para promover la participación informada de la población, se realizó una

amplía campaña de comunicación social. a través de la prensa. la radio
y la televisión. También se utilizaron medios complementarios para hacer
llegar mensajes a una población distribuida en más de 150 nullocalidades.

La magnitud de esta campaña. que contó con aportaciones de todos los

sectores, se ilustra al notar que se emitieron cerca de 2.5 millones de
impactos por radio y televisión. y que se imprimieron 1,200 millones de
envases de productos de consumo con mensajes alusivos al Censo.

EL TRABAJO DE CAMPO

Es importante destacar que. a efecto de asegurar la calidad de los trabajos,

se realizaron tres conteos independientes y en diferentes períodos. El
primero, llevado a cabo entre febrero y abril de 1989. consistió en una
cuantificación de las viviendas de las cabeceras mumcipales y localidades
de más de 2.500 habitantes.

Con posterioridad. de agosto a octubre del mismo año. se efectuó una

segunda cuantificación. tamo de la población como de las viviendas en la
totalidad de las localidades del país.

Con el beneficio de estos dos conteos previos. fue que se acudió

nuevamente. del 12 al 16 de marzo de 1990, a todas las viviendas a
entrevistar a la población. Finalmente. y acorde a lo planeado, del 17 al31
de ese mes. se aplicaron procedimientos de supervisión. que aseguraron la
INEGI. Migración interna. 1994
 cobertura y calidad de las labores. También dicha supervisión se complementó
con encuestas posteriores que pennitieron evaluar la cobertura.

Las estrategias adoptadas. junto con la consistencia de los resultados

proporcionados por los tres conteos independientes, que forman pane
de un esquema integral, sustentaron la calidad de las cifras del Censo, que
se publicaron con gran oportunidad, incluso si se comparan éstas con los
estándares internacionales en este tipo de proyectos.

Es importante señalar que dentro del Programa de Difusión de la

Información. y por primera vez en la historia de los censos mexicanos, se
incorporó como parte del proceso censal un amplio proyecto de investigación
que se propuso analizar a fondo la información obtenida. de manera que con
ello se cumpliera el propósito múltiple de contribuir a la evaluación del
propio Censo. contribuir a la planeación del que tendrá lugar en el año 2000
y aportar elementos para el conocimiento de nuestra compleja realidad
social. Este proyecto se denominó "Monografías Censales de México,
1990" (MOCEMEX'90) y sus resultados se presentan en la serie de
publicaciones que conforman esta valiosa colección.

Para llevar a cabo este Proyecto. el INEGI hizo uso, una vez más, de la
amplia colaboración que había obtenido del medio académko a lo largo del
proceso censal y contando con el apoyo del Instituto de Investigaciones
Sociales, de la Universidad Nacional Autónoma de Mé:<ico (IISUNAM),
invitó a participar dentro del mismo al propio Instituto y al Centro Regional
de Investigaciones Multidisciplinarias, ambos de la UNAM, a El Colegio
de Mé;üco, al Instituto NacíonJ.I de Antropología e Historia (INAH) y a la
Secretaría de Salud_ En las tareas de coordinación general del proyecto
agradecemos, de manera especial, la muy entusiastapanicipación del Profesor
Raúl Benítez Zenteno y la colaboraci6n del AcL Javier Gutiérrez Guzmán.

Distinguidos investigadores de estas instituciones y otros en lo particular,

aportaron lo mejor de su conocimiento y experiencia para la realización de
11 trabajos monográficos. Así. Rosa María Rubalcava y Fernando Cortés
elaboraron el estudio sobre "El Ingreso de los Hogares"; Humberto Muñoz
y Herlinda Suárez hicieron lo propio con "Perfil Educativo de la Población
Mexicana"; Carlos Welti es el autor de "La Fecundidad en México";
Gustavo Garza y Salvador Rivera redactaron el documento sobre la
"Dinámica Macroeconómica de las Ciudades en México", y Clara Jusidman
y Marcela Eternod el titulado " La Panicipaci6n de la Población en la
Actividad Económica en Mhico"_

La monografía sobre "Vivienda y Familia en México; Un Enfoque

Socio-espacial" fue elaborada por Manha Schteingart y Marlene Salís; la
que toca el tema de la "Migración Interna" por Virgilio Panída; la que hace
referencia a "La Población Indígena Mexicana" es obra de Leonardo
Manriqtle; María de la Paz López y Haydea lzazolarealizaron conjuntamente
el estudio sobre "El Perfil Censal de los Hogares y las Familias en México";
Julio Boltvinik el relativo al tema de "Pobreza y Estratificación Social
en México" y finalmente, Raúl Benítez es el autor del trabajo sobre la
"Estructura de la Población en México"_
INEGI. Migración interna. 1994
 Para la elaboración de estos estudios. el !NEGI generó una amplia base
informativa la cual se integró tanto de los tabulados básicos como de una
muestra del 1% de toda la información censaL As f. con este acervo
estadístico. se elaboraron. a solicitud de los investigadores, tabulados
especiales los cuales sinlieron de base para profundizar en cada uno de los
temas. Adicionalmente, se organizaron tres seminarios: En el primero, se
expusieron los lineamientos generales que normarían los trabajos y se
plantearon los requerimientos de información; en el segundo, se comentaron
los avances por parte de todos los investigadores. y en el tercero se
discutieron las versiones finales. con la participación de comentaristas
invitados. Estos eventos sinlieron para enriquecer los trabajos de análisis
y descripción de los distintos fenómenos sociodemográflcos, prevaleciendo
en todo momento el cnrerio de los investigadores.

Con la publicación de esta serie monográfica. el INEG! cumple con los

propósitos que se impuso originalmente. ya que al acompañar a la información
estadística. de una serie de documentos que la evalúan y que además
proporcionan diversas reflexiones sobre la dinámica demográfica de México.
así como de las relaciones con factores sociales y económicos. se está
contribuyendo a ampliar la cultura en el uso de la información y al mismo
tiempo a conformar una sociedad más informada. La actividad estadística. corno
la del Censo de 1990. puede ser interesante desde una perspectiva
metodológica. estimulante en sus aspectos técnicos. y fascinante en su
dimensión cienúfica, pero más allá de estos aspectos. su verdadero valor
estriba en la contribución que éstapuedehacerparaapoyarel progreso del país,

CARLOS M, JARQUE
Presidente del !NEG!

INEGI. Migración interna. 1994

 IN DICE

CAPITULO 1
INTRODUCCION

CAPITULO 2
NIVELES Y TENDENCIAS DE LA MIGRACION INTERNA,
1960-1990 5
2.1 Lugar de nacimiento 6
2.1.1 Proporciones de población no nativa 6
2.1.2 Impacto de la migración absoluta en
la estructura y distribución de la población 12
2.2 Lugar de residencia anterior 17
2.2.1 Los flujos migratorios 1985-1990 17
2.2.2 Tasas brutas de migración 1965-1990 21
2.2.3 La migración por edad 1985-1990 31

CAPITULO 3
ASPECTOS SOCIODEMOGRAFICOS DE LA MIGRACION
INTERNA 43
3.1 Migración y estado civil 43
3.2 Migración y educación 52
3.3 Migración y fecundidad 56
3.4 Migración y mortalidad 74

CAPITUL04
MIGRACION INTERNA Y PARTICIPACION EN LA ACTIVIDAD
ECONOMICA 79
4.1 Migración y condición de actividad RO
4.2 Migración y nivel de salarios 100
4.3 Migración y ocupación principal 102
4.4 Migración y sector económico 114
4.5 Migración, situación en la ocupación y horas
trabajactas ll5

CAPITULO S
CONCLUSIONES 123

BIBLIOGRAFIA 125

ANEXO METODOLOGICO 129

A.1 Asignación de la no respuesta 129

INEGI. Migración interna. 1994

A.2 Cálculo de las tasas de migración 1985-1990 129

A.3 Cálculo de los años brutos de vida activa 130

CAPITULO l.
INTRODUCCION
La migración se ha convertido en una importante área de
investigación en las ciencias soc ialcs: en la antropología como
una estrategia de sobrevivencia de los individuos; en la
sociología como cambios en la conducta y el comportamiento
de las personas; en la economía como agente descquilibrante
de los mercados de trabajo; en la demografía como determi-
nante f undarnental de la distribución territorial de la población
de un país. Una de las más claras expresiones de la migración
se tiene en el acelerado proceso de urbanización de los países:
en México, se ha podido estimar que el 35 por ciento del
crecimiento total urbano se debió al éxodo rural ocurrido
durante el periodo 1960- 1990'.
Desde el punto de vista de la demografía, la migración se
define como el cambio de residencia habitual de las personas
de una comunidad hacia otra. Bajo este criterio, a la migración
a veces se le llama «definitiva» para diferenciarla de la
migración «temporal», es decir, aquella en que el individuo
mueve su residencia sólo por un breve periodo de tiempo. Para
opcrativizar esa definición de migración, el concepto de
comunidad se reduce a un territorio determinado, general-
mente debido al tipo de datos de que se dispone, y entonces se
asume implícitamente que entre todos los habitantes de ese
territorio hay cierto grado de homogeneidad social, cx:onómi-
ca, política y cultural, y por ende que la probabilidad de migrar
es igual para todos los habitantes de esa región geográfica'.
En una migración mtervienen dos áreas geogr..íficas,
aquella donde se inicia el desplazamiento que se le denomina
«región de origen» y aquella donde finaliza que se le llama
«región de destino». Desde la óptica de la región de origen, un
«cm igrante» es aquella persona que se retira, y desde el ángulo
de la región de destino, un «inmigrante>> es aquel individuo
que llega. A la contribución neta de la migración al crecimien-
to demográfico se le denomina «saldo neto migratorio» o
«migración neta», y se calcula restando los emigrantes de los
inmigrantes. Algebráicamentc, un saldo neto positivo indica
ganancia por migración y uno negativo pérdida. Cuando la
migración ocurre entre dos regiones de un mismo país se le
denomina «interna»; si en el cambio de residencia se cruzan
las fronteras nacionales, a la migración se le llama «ex tema»
o «internacional».
La «residencia habitual» es la característica fundamental
que distingue a los censos de población de jure o «de derecho»
Se toma como urbana a la pohlac;ión que vive en localldadcs con IS,OCü
o más habllanLc~. La descomposición del crecimiento dcmográrico se
obtuvo CO<l el proced>m>cnlo sugerido en Panida ( 1990a),
Entre los trabajos de corte anlropológLco, donde se C(mscrvan comuni·
dadcs. verdaderamente homogéneas, podemos. mencionar el de Anzpc
( 197R) y el de Lumnilz (1976).
de los censos defacto o <<de hecho», pues en estos últimos se
enumera a todas las personas presentes en la vivienda que al
momento del censo residan ahí o no. En el pasado, a la
residencia habitual se le equiparaba con un cierto periodo
ininterrumpido mínimo de tiempo; no obstante, esta concep-
ción no encuentra sustento teórico o empírico alguno que
permita fijar la longitud del intervalo. En las encuestas de
hogares recientes -incluido el Censo de 1990--, la residencia
habitual se obtiene preguntando simplemente por las personas
que «viven normalmente» en la vivienda, y se sobrentiende
que los individuos incluidos por el declarante son aquellos que
«residen habitualmente» en la vivienda.
El objetivo central de esta Monografía es describir,con base
en los datos censales, los niveles y tendencias de los flujos
migratorios ocurridos en México en el pasado reciente, así como
las características sociocconómicas de los migrantes internos
del país. A partir de los datos censales recabados en México, no
es posible formar comunidades para el estudio de la migración;
así nos circunscribiremos solamente a la contabilidad de los
movimientos entre dos entidades federativa~ a lo largo de esta
Monografía, ya que es la entidad federativa el mínimo nivel de
desagregación geográfica que se ha considerado para captar la
migración en los censos de población del país.
En cuanto a la medición de la migración en México, desde
los trabajos pioneros de Whctten y Bumight (1958) y de
Bumight (1961), los procedimientos que predominan en la
bibliografía corresponden a métodos indirectos derivados del
principio de la ecuación demográfica compensadora. Se les
llama «indirectos» porque en la estimación no interviene
contabilidad alguna de m igrantes. La ecuación compensadora
establece que el incremento total de la población, en un
territorio y periodo de tiempo determinados, es igual a !asuma
del «crecimiento natural» (nacimientos menos defunciones) y
del saldo neto migratorio; de donde, la migración neta se
obtiene sustrayendo el crecimiento natural del incremento
total. Para operativizar este sencillo procedimiento, el creci-
miento total demográfico se calcula como la diferencia en el
volumen de habitantes entre dos censos sucesivos, y el creci-
miento natural se obtiene directamente de los nacimientos y
los decesos recabados por el registro civil. Este principio se ha
podido extender al caso de la edad, remplazando los nací·
m ientos y la~ dcf unciones porprobabil idades intercensales de
sobrcvivencia por edad'.
INEGI. Migración interna. 1994
Allectorintc:.rcsadocn los diferentes métodos indlrectos para estimar la
m¡graclón neta s.e le remite al ya clásico Manual de Naciones Unidas
(1972), Elllre las aplicaciones al caso de M6xico se pueden menciooar
las de Cabrera (1967 y 1975), Corona (1987), Nolasco (l979),0rdorica
el al (1976), y Pan¡da (1986).
 En los países en vías de desarrollo y México en panicular,
aún persisten deficiencias en la información como la falta de
cobertura y la mala declaración de la edad en los censos y en
las estadísticas vitales, errores cuya magnitud difiere entre
ambas fuentes de datos (Gómez de León y Pan ida, 1993); con
lo cual, en la cifra obtenida de la estimación residual mediante
la ecuación compensadora, además del saldo neto migratorio,
se tendrá una pane---quízás mayoritaria--que corresponde al
sesgo debido a la diferente calidad entre Jos dos censos, y de
éstos con las estadísticas vitales. A manera de ilustración del
grado de error en que se puede incurrir al estimar residual mente
la migración neta, en la gráfica \. 1, se contraswla estimación
para las mujeres del estado de Puebla entre 1980 y 1990 con
los montos derivados de la pregunta sobre lugar de residencia
anterior del Censo de 1990. Si se aceptan estas últimas cifras
como correcta~. las marcadas irregularidades en el patrón por
edad de la estimación residual muestran claramente la magni-
tud del sesgo atribuible a las deficiencias entre los datos
utilizados con el método indirecto•.
La migración se puede medir de manera dirccw a través
de los datos captados por el Censo de Población de 1990, si
existe algún atribulO de las personas que permita fijar un lugar
de residencia previo, diferente a aquel donde vivía el indiVI-
duo al momento del recuento, y de ser posible que ambos
1{amilton ( 1966) dlscute ampiJamcnte los problemas onglnadus rxlr la
diferente caJ idad de los dalas.
1ugares se puedan ub1car dentro de un periodo de tiempo. En
una rápida inspección del cuestionario censal o del índice de
las tabulaciones del Resumen General, podemos ver que hay
dos conceptos que nos pcnniten cuantificar las migraciones:
Lugar de Nacimiento y Lugar de Residencia Anterior. Las
preguntas del cuestionario censal de 1990, la base de la mayor
parte del análisis que se hace a lo largo de esta Monografía, se
reproducen en la figum 1 1. De acuerdo con el lugar de
nacimiento, una persona es m igrantc si nació en otro país o en
una entldad federativa diferente a aquella donde residía al
momento del censo; en camb1o, desde la óptica del lugar de
res1dencia anterior, un migrante es qu1en en 1985 vivía en otro
país o en otra entidad fwcrativa.
El Lugar de Nacirrucnto se ha incluido en los cuestionarios
de los once censos modernos de población de Méx1co ( 1895 a
1990), y los datos recabados han s1do presumiblemente de buena
calidad (Parucla, 1993) En todos se ha capwdo la entidad
rwcraliva o el país de nac llmcmo, excepto en 1940, cuando sólo
se preguntó SI los no nauvos eran mexicanos o cxlrJlljcros, c.s
decir, no se preguntó cspcdflcamcntc por la enudad fcdemuva
o el país de nacimiento. En las tabulaciones publicadas, ha sido
costumbre separar la inl·om1auón por sexo, pero en ninguno de
los cuadros se han dcs:.~grcgado los daws por edad s; es hasw el
Para el Censo Jc lY.!ríO CXI:-..Lcn do~ lahulanuncs cspcc~alcs mr:dlt.ctS
donde sólo se- s.cp•u~ p:.n l!n.JP.H de edad a la pohiJc1(m nacJd.a en el
exlrJ.rlJCro

-~----~---·---·---··

GRAFlCA 1.1
MIGRACION NETA ANUAl ENTRE lAS MUJERES DEl ESTADO DE PUEBLA SE<;liN
··-¡
DOS METODOS DE ESTIMACION Y GRUPOS QLIINQllENALES DE EDAD E~ IIJ90.
1
Miles de personas

~:=========--=----¡_f'-.,----t- .___,.1,. ·_¡¡--LJ. =¡=1~J=- 1

0.0
~ Re~idcrcJa en 19 5 LL
-05 +---L-/-+-/ -+--'\---'<f-------+-----F----1,/'~_+---------tf/ ~. ~ _¡_-
-~-+ 1
--+------+-----+------+-1\__,___v>"'+Lv_ __ =--l- ____._ _ r- J___
-1- 1·-1-1
1.0

~~~1v
cu -+-------+-----+---------+------f-----+---+---:. étndu rCSI u al mi ere ·n'_•l ~-
-2.0
+-----+-----+-----+----..-- - V 1 --t - t- - - ----l t-
+----+-------+-----+------+-'>--''"'-./-----Y---¡-------f-·-r----¡- ---r- ·t- -¡-· T l
"'-\, / 1 1 1 1
-2.5

30 +-f------+--+----+----t-_J_J__--t- --+ - +- -i - ~ -- ~- ----:

() 10 15 20 311 35 411 511 70
INEGI. Migración interna. 1994

L__...--~--~------~------------- ----
El método rcs1dual indirecto corresponde al pcnodn inLcrccn ~al 19H.O - 1990; l..t rn.idcncla en 1{)S) J. 1~ 1' d_;j,Lu--.
~Ola :
resocctivos del Censo de 1990.
FCENTE: Estímactones propJas e 1:\EGI, Xl Ccn>;.o Cicnr.:rai de Pohlt~Cit)ll y \/¡vivnJa, J•NO. i{c,uml'll (ic.nt·rJI ¡·,JhuLJd\).; ~-,)mrknH..'TJt~rl\1", .cu~dro .. 2\

2
 FIGURA 1.1
MEXICO: PREGUNTAS SOBRE LUGAR DE NACIMIENTO Y SOBRE LUGAR
DE RESIDENCIA ANTERIOR CONTENIDAS EN EL CUESTIONARIO
DEL CENSO DE 1990.
4. LUGAR DE NACIMIENTO
LEn qi.M Htado de le RepúbHce
Mexicana nació eata persona 7
~con··x··
AQUI, EN ESTE ESTADO ....•..• 0 1
EN OTRO ESTACO:
EN OTRO PA(S;
FUENTE: I"'EGI, XI Censo General de Población y Vivienda, 1990.
Censo de 1990 que se ofrece ese tabulado en los cuadros
complementarios del Resumen General (cuadro 2), recientemente
publicados por el INEGI. No obstante la ausencia de la clasifi-
cación por edad en los censos previos, los datos sobre la mi-
gración absoluta se usaron en varios estudios en el pasado (por
ejemplo. Cabrera 1967 y 1981), sobre todo cuando no se
disponía de otro tipo de información censal que posibilitara la
medición de las migraciones. El término «absoluta» se debe a
que se comparan dos momentos extremos en la vida de la
persona: el de su nacimiento y el de su residencia al momento
de la enwneracíón censal.
El potencial analítico de la migración absoluta es hasta
cierto punto restringido, pues aunque sepamos que la persona
es un migran te, porque el lugar de nacimiento es diferente al
de residencia al momento censal, no sabemos cuando migró,
ni podemos afrrrnar que el movimiento haya sido el único en
su vida; es más, el hecho que al momento del censo una
persona viva en el estado donde nació, no implica necesaria-
mente que nunca haya migrado, pues pudiendo haberlo hecho
al menos en dos ocasiones-<:uando dejó el lugar natal por
primera vez y cuando regresó-, el registro final en su
«historia migratoria» es que cuando la censaron residía en la
entidad federativa donde nació.
Estas limitantes de la migración absoluta aminoran si se
recaban datos sobre una migración particular-generalmente
la última-y el momento en que se dio; o bien, si se recoge la
información sobre los movimientos ocurridos en un periodo
5. LUGAR DE RESIDENCIA ANTERIOR
Hace cinco al'los. en 1986. Len qué
estado de la Repóbllca vlvla?
AQUI, EN ESTE ESTADO .......... Q 1
EN OTRO ESTADO:
Eo<:rlt» .! -m del ~
EN OTRO PAIS:
de tiempo. La primera de esas m~lidades se acogió en los
censos de 1960 a 1980, y el concepto es equivalen te entre los
tres salvo por pequeñas diferencias necesarias para su
operativización. La segunda modalidad fue la que se incluyó
en el Censo de 1990, y los datos se refieren al quinquenio
inmediato anterior. El cambio conceptual en 1990 obedece a
ciertas deficiencias en la información recolectada en los tres
censos anteriores, incluso la incongruencia con el lugar de
nacimiento, en el sentido de que algunos no nativosdec !araron
nunca haber vi vi do fu era de la entidad en que fu eron censados
(Partida y Zenteno, 1986; Partida, 1993); este problema en Jos
datos se discute con alguna profundidad en la primera parte
del capítulo 2.
Dentro de las investigaciones de corte socioeconómico
enfocadas al estudio de la migración, destacan aquellas que se
basan en los datos recabados en encuestas específicas por
muestreo hacia las ciudades de Monterrey (Balán, Browning
y Jelín, 1977), México (Muñoz, Oliveira y Stem, 1977), del
estado de Jalisco (Arroyo, Winnie y Velázqucz, 1986) y hacia
dieciséis áreas metropolitanas y urbanas del país (CONAPO,
s.f.), así como los datos recolectados sobre los desplazamien-
tos espaciales internos en la Encuesta Nacional de Emigración
hacia la Frontera Norte del País y los Estados Unidos
[ENEFNEU] (Corona y Ruiz, 1982).
INEGI. Migración interna. 1994
Los diferentes estudios que se han desprendido de la
información captada en esas cinco grandes encuestas, así
como otras investigaciones basadas en datos extraídos de
3
 encuestas menores, constituyen el acervo fundamental del
conocimiento acumulado sobre los movimientos territoriales
en México. No obstante, para un conocimiento integral del
fenómeno a lo largo del país, apenas las encuestas de Monte-
rrey de 1965, porque en 1967 se levantó una adicional en el
municipio de El Cedral, San Luis Potosi~una de las princi-
pales procedencias de los inmigrantes hacía Monterrey en esa
época~, y la ENEFNEU ofrecen información y posibí lídades
analítica~ de los movimientos desde la perspectiva de la
emigración; las demás se restringen exclusivamente a la
óptica de la inmigración.
Seria ingenuo pensar que a partir del Censo de 1990. que si
cubre integra a la República Mex1cana, se pueden extraer
determinantes próximos o factoresexplicativosdc las migracio-
nes internas, aunque nos restrinjamos exclusivamente al lustro
previo al levantamiento. Ingenuo porque las variables
socíocconómicas (estado civil, nivel educativo, fecundidad y
mortalidad y losa<;pcctos relacionados con la participación en la
actividad) están referida<; a) momento del Censo, es decir, al final
del período cuando ocurren la' migraciones; de tal suerte que no
podemos conocer con precisión la situación del individuo al
momento del desplaz.am iento territorial, acontecido éste durante
el quinquenio !985-1990. Suponer que las condiciones
socioeconómicas de la~ persona'> no cambiaron a lo largo del
lustro, o al menos desde poco antes de emigrar ha'lta el momento
del Censo, puede ser incorrecto, pues equivaldría a negar la
conocida y bien documentada movilidad socíoeconómica de la
población en determinadas época'> de su vida.
No obstante, los datos censales nos ofrecen buenas posi-
bilidades para aproximarnos a esos determ ínantes próximos,
al menos mediante el contraste entre los emigrantes y los no
INEGI. Migración interna. 1994
4
migrantes en el lugar de origen, y entre los inmigrantes y
quienes no se desplazan en el lugar de destino. Es más,
podemos atacar una temática hasta ahora inexplorada para
México: los patrones migratorios por edad y sexo según las
distintas variables socioeconómicas. Desde luego que esto no
es posible en todos los casos con los datos censales, ya que el
latente cambio de estado sociocconómico en el lustro previo
nos lo impide; sin embargo, en ciertos intervalos de la vida es
posible aproximamos con buena precisión, como por ejem-
plo, de acuerdo al nivel educativo después de los 30ó 35 años
de edad, pues a partir de esas edades las personas difícilmente
modifican su nivel educativo; o bien para los varones econó-
micamente activos en el mismo rango de edades, pues durante
ese intervalo de la vida casi ninguno ingresa a la actividad.
La Monografía se compone de otros cuatro capítulos. El
segundo se dedica a los niveles y tendencias de la migración
interna; el tercero, a la relación entre los movimientos territo-
riales y las variables sociodemográficas (estado civil, nivel
educativo, fecundidad y mortalidad de la progenie); y el
cuarto, a la asociación entre migración y partipacion en la
actividad económica. Finalmente, en el quinto se extraen las
conclusiones más relevantes de los cuatro capítulos previos.
Antes de pasar al análisis de la migración interna a partir
del Censo de Población y Vivienda de 1990, deseamos sugerir
al lector más interesado en el tema sobre México tres valiosos
documentos: la reseña bibliográficacomentadadelaCGSNEGI
(1980), la bibliografía de CONAPO y SEDUE (1991), y la
compilación de estadísticas realizada por el INEGI (1985),
que al agregarle a éste último las tabulaciones respectivas de
los censos de 1980 y 1990, se convierte en un invaluable
acervo de cifras sobre migración para el país.
CAPITULO 2.
NIVELES Y TENDENCIAS DE LA MIGRACION INTERNA, 1960-1990
En este capítulo se presenLan algunos aspectos cuantiLativos
de la migración interna bajo la óptica exclusiva de la movili"
dad territorial, es decir, sin hacer referencia a características
socioeconómicas de los migrantes.
En la primera sección, se comcnl.a la evolución de la
migración bajo el enfoque del lugar de nacimiento de 1960 a
1990, primero a nivel global en los cuatro censos y después el
patrón por edad en el recuento de 1990. La pcrspccti va de
análisis es hasta cierto punto limitada, pues en tanto migración
acumulada carece del dinamismo de los movimientos terri-
toriales por periodos específicos de tiempo; no obstante, la
tendencia secular en las proporciones de no nativos desde el
ángulo de la entidad federativa destino, y en las proporciones
de emigración desde la óptica de la región de origen, permiten
esbozar algunos cambios importantes, que después se ven
reforzados, en la segunda sección, mediante el análisis de la
información sobre lugar de residencia anterior.
Como se mencionó en la Introducción, ciertas ddicien-
cias en los datos del lugar de residencia anterior en los tres
censos previos propiciaron la decisión de cambiar la pregunta
en el cuestionario de 1990. La disponibilidad de tabulaciones
especiales inéditas para el recuento de 1980 nos ha permitido,
por un lado, corregir esas deficiencias en las cifras censales de
1970 y 1980, y por otro, difundir los datos inéditos acerca de
los migran tes poreda,d_.sexo, lugar de origen y lugar dg_gestLflo
para el quinquenio 1975-1980 (Partida, 1993). La corrección
es inevitable, pues el error en el Censo de 1980 es realmente
importante: 4,754,826 personas declararon no habcrnacido ni
haber vivido fuera de la entidad federativa en que residían al
momento del recuento, combinación de respuestas que es
incongruente a todas luces. Se tiene la certeza que esos
individuos son migrant.cs, pues para todos se conoce el lugar
de nacimiento(4,655,5 10 nacionales y99,316extranjeros). El
montoagregadorepresentae134.6 por ciento dcltoLal real que
debió captar el Censo (13,734,718 en lugar de 8,979,892
enumerados); por lo tanto, fue necesario diseñar un procedi-
miento que permitiera asignar un periodo y un lugar de
residencia a cada uno de esos migrantcs. Esa asignación
repercutió en una corrección implícita a los niveles de la
migración captada en el Censo de 1970 (Partida, 1993).
La información necesaria para el cálculo de las tasas de
migración interna por edad no se encuentra tabulada en las
publicaciones censales. Para cada entidad federativa de resi-
dencia (región de destino) al momento del Censo de 1980 y
para cada sexo por separado, podemos imaginar el arreglo
trivariado edad-periodo de llegada-lugar de procedencia. En
la versión ampliada del Re.n1men General del Censo de 1980
sólo se publicaron los tres marginales bivariados edad-pe-
riodo (cuadro 37), periodo-procedencw (cuadro 39) y edad-
procedencia (cuadro40); en el de 1970 sólo se difundieron las
tasas periodo-procedencia (cuadro 14) y edad-procedencia
(cuadro 1S); y para el Censo de 1960 ningún dato se publicó
sobre la residencia anterior.
No obstante, de cierta información disponible inMiLa se
puede subsanar esa falLa de datos. En la segunda tabulación
especial inédita sobre migración del Censo de \980, se prc-
scnla el arreglo trivanado para el quinquemo previo al Censo
(menos de un año y uno a cuatro años de residencia). A partir
de una mue!->tra del 10 por ciento del Censo de 1970 hemos
podido Lambién estimar la estructura por edad de los migmntcs
para el quinquenio 1965-1970. Desafortunadamente, para el
Censo de 1960sóloscdisponedc unamucstradc poco más del
uno por ciento, y en ella prevalece la incongruencia de
personas no nativas que declararon no haber vivido fuera de
la entidad en que fueron censadas: 73,760 individuos son no
nativos y sólo 65,791 declararon haber vivido en otra enü-
dad, de donde fácilmente se concluye que cuando menos
7,969 se encuentran en el caso contradictorio, o bien, 554,382
al hacer la expansión a la población total censada. Dada esta
situación con los datos de 1960, preferimos omitirlos de
nuestro análisis'.
En la segunda sección de este capítulo, se prescnLan y
comentan las tasas de migración interna para los lustros
previos a los tres últimos censos de población, donde utilizamos
las cifras censales de 1990 y las correcciones a los datos de
1970 y 1980. Buscando evitar contlictos interprelativos por
los ajustes hechos a las cifras censales de 1980, para los
quinquenios 1965-1970 y 1975-1980 restringimos el análisis
sólo a términos de lasas, y para el periodo 1985-1990, mos-
tramos además los volúmenes de migrantes captados por el
Censo de 1990. Al fmal de la sección se analizan los patrones
por edad para el Censo de 1990. Salvo algunas excepciones,
a lo largo del capítulo el análisis se hace de manera global para
cada entidad federativa y sexo, es decir, no se especifican las
entidades federativas de procedencia de los inmigrantes ni las
de destino de los emigrantes.
INEGI. Migración interna. 1994
Esa muestra es la base del trabajo pionero de Tabalh y Cosio (1970) en
la medición d"cc\.a de la migración con los datos censalessobreetlugar
de: rcsidC'llcla anterior.
5
 2.1 Lugar de nacimiento cuadro2.l,ladisminución ocurre sólo en el sexo femenino(de
17.94 a 17.74) y el aumento en los hombres es realmente
2.1.1 Proporcíones de población no nativa despreciable (de 16.96 a 17 .02).

De las casi 81 millones de personas nacidas en México que
enumeró el Censo de Población y Vivienda de 1990, poco más
de 14 millones vivían en una entidad federativa distinta a
aquella donde nacieron, es decir, el 17.4 por ciento, o una de
cada seis. No obstante que esa proporción es alta, se encuentra
escasamente por debajo de la registrada en el Censo previo de
1980 (17.5 por ciento). De acuerdo con la primera parte de la
gráfica 2.1, aunque en la evolución se aprecia un paulatino
decremento en el ritmo ascendente a partir de 1960,1a repen~
tina falta de aumento al cabo del último periodo intercensal,
que rompe bruscamente con la tendencia secular, amerita una
explicación al menos especulativa. Como se puede ver en el
Una primera posibilidades que una deficiente capacilaeión
delentrevistador,unamaladeclaraciónporcuentadeldeclarante,
o la conjunción de ambas situaciones haya propiciado que una
buena parte de la población no nativa se haya declarado como
nacida en la entidad federativa. Aunque no se cuenta con una
encuesta posiCensal que permita medir la calidad de las variables
recolectadas y probar la hipótesis, ésta parece poco factible, toda
vez que la pregunta del cuestionario de 1990 fue indudablemen-
te más sencilla que en los censos anteriores, y por ende cabe
esperar una mejor calidad en las respuestas de 1990. Pensamos
es más probable que el drástico freno en el ascenso se haya
debido a un particular comportamiento del proceso migratorio

MEXICO: PORCENTAJE QUE LA POBLACION NACIDA EN OTRA ENTIDAD

(INMIGRANTES ABSOLUTOS) REPRESENTA DE LAS PERSONAS NACIDAS
EN EL PAIS RESIDENTES EN LA ENTIDAD FEDERATIVA, SEGUN SEXO,
1960-1990. CUADR02.1
Hombres Mujeres

Entidad federativa 1960 1970 1980 1990 1960 1970 1980 1990

República Mexicana 1448 16.11 16.96 17.02 15.48 16.64 17.94 17.74
Aguasealientcs 16.97 17.30 !6.30 18.43 18.80 18.44 18.17 20.20
Baja California 60.88 49.25 44.00 46.51 61.29 50.14 45.73 47.08
Baja California Sur 15.28 20.21 29.33 31.95 13.10 17.21 26.95 30.10
Campeche 13.15 17.38 19.12 22.73 12.35 16.34 17.90 21.59
Coahuila 17.06 14.68 1489 14.18 17.58 15.19 15.80 14.92
Colima 27.57 26.81 24.58 27.29 27.ül 26.99 23.97 27.08
Chiapas 4.36 3.01 4.11 3.49 3.93 2.46 3.69 3.27
Chihuahua 16.98 12.78 12.11 14.65 17.26 12.95 12.75 14.51
Distrito Federal 38.66 32.29 27.14 22.35 42.91 35.32 30.95 26.32
Durango 10.25 9.75 9.46 10.85 10.41 9.28 9.84 11.06
Guanajuato 6.04 8.10 7.46 7.50 6.36 7.70 7.88 7.83
Guerrero 3.74 5.23 5.08 4.99 3.48 4.70 4.93 4.92
Hidalgo 6.28 6.03 7.36 9.17 6.55 6.59 8.37 10.52
Jalisco 7.67 13.19 13.04 13.42 8.11 12.72 13.52 13.65
Estad o de México 13.46 31.55 3853 39.45 1349 31.90 39.30 40.23
Michoacán 4.18 5.91 6.!5 7.69 4.17 5.20 621 7.71
More1os 25.76 26.67 26.56 27.50 27.11 28.43 28.37 29.59
Nayarit 16.57 15.44 13.05 15.10 15.61 14.80 12.97 14.99
Nuevo León 23.46 25.46 24.62 22.67 2418 25.80 25.31 23.42
Oaxac.a 3.26 3.85 4.52 5.56 310 3.59 4.56 5.61
Puebla 5.65 6.76 7.44 7.96 622 7.30 8.47 9.08
Querélaro 546 8.73 12.07 16.87 6.15 9.01 12.51 17.50
Quintana Roo 43.14 46.58 55.57 58.25 37.86 42.40 53.73 56.32
San Luis Potosí 6.81 800 7.96 8.96 7.20 8.13 8.62 9.74
Sinaloa 9.44 12.51 1241 12.39 8.76 11.46 11.99 12.02
Sonora 18.76 16.44 16 80 16.89 17.85 15.34 16.29 16.10
Tabasco 4.16 6.59 9.18 9.83 3.90 6.48 8.35 9.29
Tamaulipas 28.37 24.41 2323 22.78 29.49 25.23 24.79 24.38
llaJ<cala 5.92 6.93 8.52 11.33 6.51 7.90 10.13 13.30
Veracruz 9.95
INEGI. Migración interna. 1994

10.37 9.59 9.32 9.98 959 9.62 9.52

Yucatán 2.05 4.10 4.08 5.36 2.20 4.05 4.44 563
Zacatccas 4.91 6.01 6.11 7.81 4.69 5.50 6.32 8.02
Nota: Porcentajes de 1970correg•dos por omiSión censal (Partida, 1993).
FUENTE: Censos Generales de Población. 1960-1990.

6
 GR.o\FICA 2.1
MEXICO: PORCENTAJE QUE LA POBLACION NO NA TI VA DE LA ENTIDAD, RESIDENTE
EN MEXICO Y EN ESTADOS UNIDOS, REPRESENTA DE LA POBLACION TOTAL NACIDA
EN MEXICO, 1985-1990.

Porcentaje
18,-------,-------,--------.------~-------.-------.-------,-------,------~P-~~~

igrantes intem >S

_1.. ---.¿:--r------·
---~--
Ambos sexos JI<
16 r-
Hombres
Mujeres
14 r--
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12+-----~----~----+---~------~.-~
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6~--~-~-~~--~r_·__~~----t-----+-----+---~----+---~----4---~

4~---T---~-----t----+----+---~----+---,_ ___,___~
1890 1900 1910 1920 1930 1940 1950 1960 1970 1980 1990
Año

Porcentoje
2o,-----------r-----------.----------.-----------.-----------r-----------r--------~

Ambos sews Migrantes inler os e internacionales

- - -- - -- Hombres
18 1-
Mujeres . 0::¿3?
16~-----------t-----------r----------f-----------+--------~?F~---------r----------1 --~
........ ----~
_____ ... -~~....-·
14~-----------t-----------~---------+~~---~---~-~~~-~----~--t-----------~--------~~--------~
/;:.;:--
..

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12~-----~~~r-~~~~~~~-------+-----------+----------~----------~--------~

....-:::;:.
4·--- ~~
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.. ··

10~,----------~----------~----------+-----------~----------~--------~~--------~

1920 1930 1940 1950 1960 1910 1980 1990

INEGI. Migración interna. 1994

Año

FUENTES: Censos de Población de MéXIco y de Estados Unidos y Partida (1990h: 37).

7
 durante la última década: una combinación en las direcciones
de los movimientos territoriales distinta a los escenarios
observados en el pasado.
Dentro de esta perspectiva, la alternativa más simple
aunque menos realista es que la población no nativa haya
aumentado al mismo ritmo que la población total, de tal modo
que el porcentaje de no nativos se mantuvo constante al cabo
del periodo intercensal. Otra variante más realista es que los
no nativos hayan crecido más rápido, pero por cada persona
adicional que dejó su entidad natal, otro individuo debe haber
regresado a la entidad de origen (migrante de retomo). Una
última posibilidad, sin duda la más plausible, es que además
de emigrar hacia otra entidad federativa, muchos emigrantes
se hayan dirigido hacia el extranjero.
Dentro de la información disponible para algunos países,
la mayor concentración de mexicanos se tiene en Estados
Unidos con el99 por ciento (Partida, 1990: 21 ). En la segunda
parte de la gráfica 2.1, semuestrael porcentaje de la población
nacida en México que reside en una entidad federativa distinta
a aquella donde nació, o que vive en el vecino país del none.
La clara tendencia ascendente desde 1940 de alguna manera
prueba la buena calidad de la respuesta al lugar de nacimiento
en el Censo de 1990 2 .
En el cuadro 2.1 y en la gráfica 2.2, se presentan los
porcentajes que los inmigrantes absolutos representan de la
población nacida en México que reside en cada entidad, o
proporción de inmigrantes internos absolutos. En general,
estos porcentajes guardan una tendencia relativamente esta-
ble en el tiempo, salvo algunas excepciones, como los
rápidos aumentos en Baja California Sur de 1960 a 1980, con
menor intensidad en Querétaro hasta 1990, o la acelerada
reducción en el Distrito Federal al cabo de los 30 anos. Esta
constancia se debe en gran parte a que la inmigración es
acumulada hasta el momento censal, y la proporción ob-
servada en I960,queconsiste de los movimientos territoriales
ocurridos desde casi un siglo atrás, determina en buena parte
el nivel alcanzado en los tres siguientes censos; aunque
tampoco se debe soslayar el efecto que tienen las migraciones
entre 1960 y 1990, como en Baja California, cuya proporción
experimentó un fuerte descenso durante los anos sesenta y
con menor velocidad en el siguiente decenio, y un nuevo
auge en los años ochenta como respuesta al establecimiento
de industrias maquiladoras transnacionales (Zenteno, 1990).
La disminución en 1970 y 1980, reflejo de la pérdida de
atracción de Baja California sobre los habitantes del resto del
país en parte de los años sesenta y setenta, fue resultado de
la emigración conjunta de antiguos inmigrantes absolutos y
de nativos de la enlidad, dentro de estos últimos algunos
hijos de inmigrantes previos.

No obstante la existencia de algunos cambios significati-

Las cifras de mexicanos residentes en Estados Unidos provienen de una
reoonstrucción para el periodo 1921-1980 (Panida, 1990b: 37)a partir
de la• estimaciones de Warren y Paosel (1987) para 1980, y de las
publicaciones del Censo de Estados Unidos de 1990.
vos, las entidades federativas se pueden clasificar en tt:es
grupos-iguales para los dos sexos-de acuerdo a la proporción
de inmigrantes en los cuatro momentos:

SIGLAS UTILIZADAS PARA LAS ENTIDADES FEDERATIVAS. FIGURA2.1

Siglas Entidad fedentiva Sigla• Entidad federativa

AGS AG Aguascalientes MOR MO Moreloo

BC BC B~ja California NAY NA Nayarit
BCS BS Baja California Sur NL NL Nuevo León
CAMP CA Campeche OAX OA Oaxaca
COAH co Coahuila PUE PU Puebla
COL CL Colima QRO QT Querétaro
CHIS es Chiapas QR QR Quintana Roo
CHIH CH Chihuahua SLP SL San Lui• Potosí
DF DF Distrito Federal SIN SI Sinaloa
DGO DG Durango SON so Sonora
GTO GT Guanajuato TAB TA Tabasco
GRO GR Guerrero TAMPS TM Tamaulipao
HGO HG Hidalgo TI.AX TX Tiaucala
INEGI. Migración interna. 1994

JAL JA Jalisco VER VE Veracruz

ME Estado de México YUC YU Yucatán
IMEX
MICH MI Michoacán ZAC ZA Zacateca!

8
 GRAFICA2.2
MEXICO: PORCENTAJE QUE LOS INMIGRANTES ABSOLUTOS REPRESENTAN DE LA
POBLACION TOTAL RESIDENTE EN LAENTIDAD FEDERATIVA NACIDA EN EL PAIS,
SEGUN SEXO, 1960-1990.

Poreentaje
HOMBRES
70

w~~--~------------------------------~----------------------------__,

50~--~------------------------------------------------------------ ____,

~~~~--~----------------------------------------------------------~

30~~~~~--------~.-----------------------------------------------~

20~~Hru~~~~*R~~.---~------------------------------------------~

o~~~pw~~~~~~~~~~pw~~~~~up~~~~~~~~~~~~~~
~y· ~·Q's·.$..... $" v~.t:· ~Y~-,"?· -#~.pq; ·f"f~.;; &"$. ...,":i' ~$·e!."¡-.::..~~·,.,.;·~~·~· q;f. ~~·t.!~~ c.~· c~· .:#.<f.
Entidad federativa de residencia

~1960 0197o ~1980 -1990

Porcentaje
m,-----------------------------~M~U~~~~~---------------------------------,

w~--------------------------------------------------------------------~

50~~--~----------------------------------------------------------------~

40

30

20

10

o~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~U4~~~pw~~~~~~~uq~

~y· ~· Q's·.$-.: $" v?t~,#· ~y~y'?. J:"f <o~v~ ~,;> r~· ...,":i' ~.$'e/.<!. .:#~~~y-·~~· ej. q;f. ~;¡· r.~:, cf" <f. ,:#'<f.
Entidad federativa de residencia
INEGI. Migración interna. 1994

f:SSjt960 CJI970 ~1980 -1990

FUENTE: Cuadro 2.1.

9
 Intensidad a/w (con 20 por ciento o más en tres o los
cuatro censos): Baja California, Baja California Sur,
Colima, Distrito Federal, Estado de México, Morelos,
Nuevo León, Quintana Roo y Tamaulipas, donde destaean
Baja California y Quintana Roo con más del 40 por ciento.
La fracción de nativos de la entidad que al momento del
censovivíanenotroestado,oprop>rcióndeemigrantesintemos
absolutos, se muestra en el cuadro 2.2 y en la gráfica 2.3 •. Si
adoptamos la misma clasificación que para la inmigración, los
nuevos grupos bajo la óptica de la emigración son:

Intensidadmedia(entrc 10 y20porcientoal menos en un Intensidad alta (con 20 por ciento o más en tres o los
censo): Aguascalientes, Campeche, Coahuila, Chihuahua. cuatro censos): Aguascalíentes, Coahuila, Durango,
Durango, Jalisco, Nayarit, Querétaro, Sinaloa, Sonora, Guanajuato, Hidalgo, Michoacán, Querétaro, San Luis
Tiax.cala y Veracruz. Potosí, Tlaxcala y Zacatecas.

Intensidad baja (menos de 10 por ciento en los cuatro

censos): Chiapas, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, Mi-
choacán, Oax.aca, Puebla, San Luis Potosí, Tabasco,
Yucalán y Zacatecas 3 .
Aunque en las mujeres de Hidalgo en 1990 se supera ligeramente ellO
por ciento, esta excepción no rompe la estructura del grupo.
No ea posible agregar la emigración hacia Estadoo Unidos en ealOI
porcentajes de emigrantes, debido a que en el a:nso de ese pW: no 1e
captó el estado de la República Mexicana donde nació la penata.
Realmente caai en ningún país ""pregunta en los censos de población
por di visiones geopolíticas menores para los extranjeros o para quienes
proceden del exterior.

MEXICO: PORCENTAJE QUE LOS EMIGRANTES INTERNOS ABSOLUTOS

REPRESENTAN DE LA POBLACION NACIDA EN LA ENTIDAD FEDERATIVA,
SEGUN SEXO 1960-1990. CUADR02.2
Hombres Mujeres

Entidad federativa 1960 1970 1980 1990 1960 1970 1980 1990

República Mexicana 14.48 16.11 16.96 17.02 15.48 16.64 17.94 17.74
Aguascalienles 30.87 26.79 20.09 15.78 30.72 25.34 20.22 16.15
Baja California 14.79 11.04 12.01 9.87 15.47 10.57 12.16 10.50
Baja California Sur 29.05 13.73 11.74 9.91 29.57 14.14 12.80 11.00
Campeche 17.82 14.80 13.18 13.86 18.30 14.40 13.30 14.26
Coahuila 20.31 2!.70 19.39 17.86 20.91 21.86 20.23 18.46
Colima 21.12 18.27 16.95 16.02 22.41 19.30 18.26 17.58
Chiapas 5.40 5.82 7.43 6.75 7.24 6.33 8.41 7.22
Chihuahua 7.25 8.65 9.55 8.17 7.58 8.52 9.94 8.74
Distrito Federal 6.81 13.55 23.04 34.18 6.46 12.87 22.46 33.62
DllfJJlgo 23.71 24.08 23.18 24.31 25.73 25.38 25.52 25.89
Guanajuato 21.39 22.49 20.48 15.97 21.80 22.46 21.04 16.35
Guerrero 8.86 13.62 16.73 16.87 989 14.43 18.04 17.89
Hidalgo 19.33 22.59 23.22 22.07 23.43 26.15 27.18 24.90
Jalisco 1671 17.35 14.66 12.74 17.09 17.12 15.35 13.41
Estado de México 19.68 14.32. 11.89 8.39 23.13 16.79 13.71 9.48
Michoacán 17.79 23.23 21.69 20.32 18.98 24.03 23.17 21.81
More los 11.84 13.26 21.43 12.20 13.89 14.92 24.28 13.32
Nayarit 13.16 15.82 16.60 18.15 14.96 17.45 1869 20.17
Nuevo LeOO 13.73 10.49 9.00 8.04 13.94 10.40 9.36 8.50
Oauca 11.45 16.24 19.68 19.45 11.85 16.50 20.79 20.02
Puebla 12.39 15.68 17.12 16.21 13.43 16.38 17.95 16.56
Querélaro 25.54 22.98 18.22 14.92 27.77 24.81 20.73 16.!!7
Quintana Roo 23.34 14.61 9.16 772 26.00 14.08 9.90 8.13
San Luis Potosí 18.81 23.58 23.66 22.33 19.34 24.52 25.35 23.74
Sinaloa 13.23 12.16 11.93 14.00 15.11 13.86 13.62 15.25
Srnoca 9.23 9.44 10.40 9.76 9.78 9.62 11.04 10.55
Tabasco 10.64 9.35 10.81 10.52 11.48 10.08 11.62 ll.J4
Tamaulipas 11.78 13.76 16.36 15.76 12.25 13.50 16.69 16.27
TI u cala 19.74 23.08 23.46 19.37 2L53 24.47 24.54 19.95
INEGI. Migración interna. 1994

Veracruz 8.47 9.49 11.42 13.22 9.21 10.17 1226 13.74

Yucaán 10.46 12.63 13.45 14.46 9.85 11.58 1289 13.64
Zacatecas 25.12 33.02 31.67 30.56 26.m 32.54 32.76 31.79

Nota: Porcmta¡es de 1970 corregidos ¡xn omisión censal (Partida. 1993).

FUENTE: Censos GenenLies de Población, 196(). 1990.

10
 GRAFICA 2.3
MEXICO: PORCENTAJE QUE LOS EMIGRANTES INTERNOS ABSOLUTOS REPRESENTAN
DE LA POBLACION NACIDA EN LA ENTIDAD l'lmERATIVA,SEGUN SEXO, 1960-1990.

Porcentaje IIOMHRES
35

30

25

20 - r--

15 r- r-- r-

JO r-

o
11/..¡· .#. . _. ::· ..,..Jo~"" cf~~ 0~- üo~- 'V~- ve;- d""' -l'~-0'? . .:!. $" . .~-c.:•~q; $"',.zyif d' ~- c.,$" 4'. ~"' .:s-" 4'- ~...,- '-t el'&~-
Entidad federativa de nacimíemo

ESSJ1960 01970 t:2ZJ1980 -1990

Porcentaje
MUJERES
35

30

2S

20 .-

15 r- - - f--

10

o
¡J'" .¡· ,#. -#"..,V,:!""' ¿·~ ff" .!"" Q~ v~- .¡· ~~(,;'?. qf'" $" . .~~¡: $""'~~<'f· (l. ~- ¿,$"" 4'" ~y· .:~-" ~- ~y· ..f'(/' ¿¡·
Entidad federativa de nacimiento
INEGI. Migración interna. 1994

~ 1960 01970 ~ 1980 -1990

FUENTE: Cuadro 2.2.

11
 Intensidad media (entre 10 y 20 por ciento al menos en un
censo): Baja California, Baja California Sw-, Campeche,
Colima, Distrito Federal, Guerrero, Jalisco, Estado de
México, Morelos, Nayarit, Nuevo León, Oaxaca, Puebla,
Quintana Roo, Sinaloa, Tabasco, Tamaulipas, Veracruz y
Yucalán.
Intensidad baja (menos de 10 por ciento en los cuatro
censos): Chiapas, Chihuahua y Sooora
Si se acepta que debe existir tma relación inversa entre los
niveles de la inmigración y de la emigración, en el sentido que
a las entidades más aJractivas con mayores propensiones a
inmigrardebencorrespondermenorespropensionesaemigrary
viceversa, de acuerdo con nuestra categorización, sólo cinco
entidades-Guanajuato, Hidalgo, Michoacán, San Luis Potosí y
Zacatecas-satisfacen esa relación y todas ellas como entidades
pocoatractivas,es decir,de baja inmigración y alta emigración.
En apoyo a la hipótesis planteada. otros cinco estados muestran
intensidades medias en su inmigración y en su emigración:
Campeche, Jalisco, Nayarit, Sinaloa y Veracruz. Veintiún enti-
dades satisfacen parcialmente la proposición, diez con mayor
emigración o menos atractivas: Aguascalicntes, Coahuila,
Durango,Querétaroy Tlax.calade inmigración media y emigra-
ción alta, y Guerrero, Oaxaca, Puebla, Tabasco y Yucal.án con
baja inmigración y emigración media; y las restantes once con
mayor inmigración o más atrartivas: Baja California, BaJa
California Sw-, Colima, Distrito Federal, Estado de México,
Morelos, Nuevo León, Quintana Roo y Tamaulipas con inmi·
gración alta y emigración media, y Chihuahua y Sonora con
media y baja, respectivamente.
Mención apane merece Chiapas, el estado con menor
desarrollo socioeconómico del país y por ende poco atractivo
para el restodelanación,que si biendelladoesperadomuestra
la más baja intensidad en su inmigración de 1960 a 1990 (sólo
porencimade Yucatán en ambos sexos en 1960 y en hombres
en 1980), del lado sorprendente está el hecho que es al mismo
tiempo lo suficientemente atractiva para retener a sus nativos,
pues también presenta la más baja intensidad de emigración
en los cuatro momentos (excepto la femenina del Distrito
Federal en 1960).
En muchas entidades federativas, la evolución en las
proporciones de inmigrantes y de emigrantes absolutos no
exhibe una pauta ascendente tan suave como la nacional. Una
rápida inspección de las gráficas 2.2 y 2.3 nos permite dislin·
guir una amplia gama de tendencias seculares, e incluso
dentro de algunas entidades marcadas diferencias entre los
sexos. Dado que se dispone de cuatro observaciones en el
tiempo, las pautas de las tendencias estatales se pueden
clasificar en cinco categorías o tipos:
INEGI. Migración interna. 1994
Monótono ascendente (tipo"/"), como la inmigración en
Quintana Roo.
12
Monótono descendente (tipo"\"), como la emigración de
Colima.
Con mínimo intermedio (tipo "u"), como la inmigración
en Baja California.
Con máximo intermedio (tipo "n"), como la emigración
de San Luis Potosí.
Con mínimos y máximos alternados (tipo"-"), como la
inmigración en Coahuila.
En el cuadro 2.3, se muestra el número de patrones dentro
de cada categoría.
Estrictamente hablando, el parrón nacional femenino en
la primera pane de la gráfica 2.1 es de máximo intermedio en
1980, y desde el ángulo de la inmigración absoluta,ensólotres
estados se repite esa pauta, pero hasta en la mitad de las
entidades federativas (16) es monótona ascendente. En los
hombres, en cambio, la evolución nacional es mónotona
ascendente y se reproduce en la tercera parte de las entidades
( 11) y en otras siete es con mínimo intermedio. Desde la óptica
de la emigración, por el contrario, es entre las mujeres donde
más se repite el patrón nacional (en 14 entidades); en los
hombres apenas se reproduce en cinco estados, y casi en la
mitad la pauta es de máximo intermedio.
En la gráfica 2.4, se muestran los patrones por edad del
porcentaje de migración interna absoluta a nivel nacional. La
diferencia es prácticamente despreciable entre los sexos, excep-
to después de los 55 años donde la pauta masculina se ubica por
debajo. La clara forma ojival (tipo <<S») de ambas curvas se debe
a que las proporciones representan la migración acumulada a lo
largo de la vida. Con mayor o menor intensidad («altura») el
patrón ojival se repite en las proporciones de inmigración y de
emigración en las 32 entidades federativas. Su representación
gráfica se omite debido a la gran extensión de la figura que se
requiere para ilustrar esos perfiles.
2. 1.2 Impacto de la migración absoluta en la estructura y
distribución de la población
La diferente intensidad de los flujos migratorios internos entre
las entidades federativas y su panicular incidencia por edad
llegan a tener un claro impacto en la estructura y la distribu-
ción territorial de la población; pero también lo tiene, y a veces
de manera más determinante, el llamado crecimiento social
indireciO, es decir, la descendencia que procrean los inmi·
gran tes en el lugar de destino. En el cuadro 2.4, a través de la
edadmedia,el índice de masculinidad (hombresporcadacien
mujeres) y la distribución porcentual por entidad federativa,
se muestra el efecto global acumulado de la migración abso-
luta hasta 1990.
MEXICO: CLASIFICACION DE LOS PATRONES DE TENDENCIA SECULAR DE
LA PROPORCION DE MIGRANTES INTERNOS ABSOLUTOS, SEGUN SEXO, 1960-1990. CUADR02.3
Ambos
Patnln Tipo Hombres Mujeres sexos 1 TotaP

Inmigraci6n

Mmótono ascendeme 11 16 11 27
Mm61ono descendente \ 3 2 2 S
Mínimo intermedio r. 7 6 S 13
Máximo intermedio V 3 3 2 6
Mínimos y máximos alternados 8 S 3 13
Total 32 32 23 64

Emigración

Mooótono ascendcnle 5 4 4 9
Mon61ono descendente \ 7 7 7 14
Mínimo intermedio n 2 3 2 S
Máximo intermedio V 15 14 13 29
Mínimos y máximos alternados 3 4 2 7
Total 32 32 23 64
1
Enúdades en las que ambos sexos exhiben el mismo tipo de patrón.
' Suma de los patrones masculinos y femeninos.
FUEI'ITES: Deducido da los cuadros 2.1 y 2.2.

~-------·---- -----· ----------------------------------,

GRAFICA2.4
MEXICO: PORCENTAJES DE POBLACION NO NATIVA POR EDAD Y SEXO, 1990.
Porcentaje
30

.L-...-..,...--t---f".:::C""""::._···_·..-.J···· ··-······-····- ........

Hombres

25 - -
.····:/~.,... -~----

20

15

10

5
INEGI. Migración interna. 1994

o 5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65
Edad

FUE"TE: INEGI, XI Censo General de Población y Vivienda. 1990. Migraci6n. Tabulados temáúcos. Cuadro 2.

13
 MEXJCO: EDAD MEDIA, INDICE DE MASCULINIDAD Y DISTRIBUCION TERRITORIAL DE
LA POBLACION NACIDA EN EL PAIS RESIDENTE EN LA ENTIDAD FEDERATIVA Y
DE LA POBLACION NATIVA RESIDENTE EN El PAIS, 1990. CUADR02.4

Edad media lndice de Distnbuciórl

Hombres Muí=• masculino dad tcnit.orial

Entidad federativa Residente Nativa Residente Nativa Residt!ntc ~·allva ReSJdc:nte Nauva

República Mexicana 24.0 24.0 24.8 24.8 986 98.6 100.00 100.00
Aguascalientcs 23.1 23.4 24.0 24.1 97.2 99.1 0.89 0.85
Baja California 24.4 17.5 24 9 17.6 99.5 99 4 2.01 1.19
Baja California Sur 24.3 22.9 24.2 23.7 10'3 o 98.9 039 0.30
Campeche 23.9 23.3 23.6 23.5 101.3 99 4 0.65 0.59
Coahuila 24.6 25.0 25.1 25.6 991 99.2 2.43 253
Colima 24.4 22.4 24.7 23.3 99.8 97.8 0.53 0.46
Chiapas 22.2 22.6 22.1 22.6 100.2 99.5 3.93 4.08
Chihuahua 24.8 24.4 25.4 25.0 99.9 '19.3 2.99 2.79
Distrito Federal 25.9 219 27.8 22.8 94.0 99.7 10.11 1156
Durango 23.9 26.4 243 27.1 99.5 97 2 1.66 1.98
Guanajuato 23.0 25 3 23.9 26.1 99.1 98.5 4.91 5.41
Guerrero 22.9 24.2 23 7 25.1 99.~ 9K.O 3.24 3.72
Hidalgo 23.7 26.6 24.4 27.6 98.3 96.0 233 2.75
Jalisco 24.1 24.7 25.1 25.8 98.9 98.4 6.52 6.48
Estado de México 23.3 21.4 24.0 22.2 98.0 n.1 1211 800
Michoacán 23.6 26.2 24.3 27.1 99 5 96.8 4.37 5 11
More los 24.5 21.9 253 22.6 96.6 98.5 147 121
Nayarit 24.6 24.8 24.7 25 3 100.0 97.4 1.02 1.07
Nuevo León 25.1 22.8 25.8 23.4 99.1 99.5 3.81 3.20
Ouaca 23.8 25.8 24.6 26.5 99.7 98.4 3 73 4.39
Puebla 23.5 24.9 24.6 25.7 98.4 989 5.09 5.57
Quelitaro 22.7 23.9 23.3 24.9 98.7 97.2 130 1.28
Quintana Roo 22.3 15.2 214 15.2 106.0 99 7 0.60 0.28
San Luis Potosí 24.0 26.4 24.5 26.9 98.9 97.7 247 2.91
Sina1oa 24.2 24.2 24.4 24.8 llXJ.4 98.5 2.72 280
Sonora 25.1 23.7 25 2 242 HXJ.9 99.1 2.24 2.08
Tabasco 22.8 23.0 22.6 23.1 llXJ5 99.2 1.86 1.88
Tamaulipas 25.2 23.3 25.8 23.9 97.9 99.3 2.75 2.50
Tiaxcala 23.7 263 24.4 26.7 97.7 99.1 0.94 103
Veracruz 24.3 24.5 25.0 25.2 99.6 99 1 7.69 805
Yucaún 25.5 263 25.8 26.4 99.6 100.7 1.68 1.85
Zacatccu 23.8 28.5 24.3 28.9 99.4 96.9 1.57 2.10

F1JENTE: INEGI, XI Censo General de Poblaciórl y Vtvicnda, 1990. Migración. Tahulados tcmáuws. Cuadro 2.

Las mayores diferencias favombles para las edades me-
dias de la población residente, con respecto a los promedios de
la población nativa, se tienen en Baja Cali fomia y en Químana
Roo (7 y 6. 7 años, respectivamente) ,las entidades con mayo-
res porcentajes de inmigración absoluta (cuadro 2.1); labre-
cha más amplia en favor de la edad media de los nativos se
tiene enZacatecas y Durango (4.6 y 3.1 <illos,rcspcctivamcnte),
las entidades con mayor proporción de emigración absoluta
después del Distrito Federal (cuadro2.2). Esta situación opuesta
evidencia el efecto que llega a tener el crecimienlo social indi-
recto en la estructura por edad de un grupo poblacional: en las
dos primeras entidades, el peso de los padres inmigrantes en la
distribución etárea propicia que la edad media de la población
residente aumente y se sitúe muy próxima al promedio nacional,
INEGI. Migración interna. 1994
Podemos entoncc.~ conjetur.u que la ganancia por migm-
ción absoluta produce un rejuvenecimiento en las pc,rsonas
naúvas con respcc1o a las residentes, y la pérdida, un envejecí·
miento relativo. En la gráfica 2.5, se mue:;IIa 1·~ relación que
existe enlre el porcentaje de migración neta absoluta (propor-
ción de inmigmción menos proporción de emigmción) y la
diferencia entre la edad media de los residentes menos la de los
naúvos. Es baslante claro que, salvo el Distrito Federal, la
conjetura se cumple saúsfactoriamentc.
OtrJ consecuencia demogr.:ifíca directa de la mibrración
absoluta es el cambio que produce en el balance cntn: los sexos:
mientra~cnlos nacidos residentes en el ¡Dis, JX!f"J líXia.~ lasroúdadcs
fcdcrdl.iva~ hay más mujeres que hombres, excepto en Yuca.lán;

desde La óptica de La población residente, hay ha.'illl ocho c.~iado.<;

y el de sus hijos que la edad media de los naúvosdisminuya; en
donde el número de vamnes excede al de mujcrc.~. y ninguno es
las dos úlúmas, por el conuario, la ausencia de adultos inmigran-
Y ucatán. Sin embargo, a diferencia del caso de las edades medias,
tes provoca que la edad media de los residentes disminuya,
aquí no es lall clara La relación cntiT.I.a variacKín de los indicc.s de
aunque la de los nativos experimente poca variación.
maculinidad y La prop.1n.:ión de rn Íb'I'"JCÍ(ln neta absoluta.

14
 GRAFICA2.5
MEXICO: RELACION ENTRE LA DIFERENCIA DE LAS EDADES
MEDIAS DE LAS POBLACIONES RESIDENTE Y NATIVA Y LA
PROPORCION DE MIGRACION NETA ABSOLUTA, 1990.
7.5
2.5
·2.5
.s
-.2 ·.1 o .]
Proporción ne1a ( inmi¡¡ncién menos emisración )
FUENTE: INEGI, XI Censo General de Población y Vivienda, 1990. Mi¡¡nción. Tabulados tcm'ticos. Coadro 2.
En la gráfica 2.6, se ilustra el efecto de la migración
acumulada en el comportamiento por edad del índice de
masculinidad para los dos casos extremos: el Distrito Federal
y Quintana Roo. La progresiva separación entre las dos pautas
etáreas conforme aumenta la edad, opuesta en ambas emida-
des tiene, sin embargo, una diferente explicación: mientras en
la capital del país el proceso de la emigración mayormente
masculina ha sido continuo hasta a1canzar la mayor propor-
ción en 1990(cuadro2.2),enQuintanaRooelrápidoaumento
de su inmigración también predominanlemente masculina se
concentra tan solo en las dos últimas décadas (cuadro 2.1).
Dentro del impacto que tiene la migración absoluta en la
distribución espacial de la población, destacan Quintana Roo,
cuya población residente es más del doble que sus nativos que
viven en todo el país, Baja California y el Estado de México
con 69 y 51 por ciento más, respectivamente, y de manera
especial el último porque por motivo de la movilidad territo-
rial congrega un 4 por ciento más de la población nacional
(12.1 de residentes frente a 8 de nativos). En el lado opuesto
.2 .3 .4 .5
se encuentran Zacatecas, Durango e Hidalgo, cuya población
nativa que vive a lo largo de la nación supera por 34, 19 y 18
por ciento respectivamente, a la población residente en esas
entidades.
Si bien la distribución de los habitantes del país de
acuerdo con la entidad de nacimiento pareciera ser la corres-
pondiente a la ausencia de migraciones, realmente no lo es.
por el efecto del crecimiento social indirecto. Este último
efecto se puede ver en el caso del Distrito Federal donde, no
obstante la pérdida por emigración absoluta, no habría nacido
ahí elll.6 por ciento de la población nacional en ausencia de
movimientos territoriales: en 1990 la proporción de la pobla-
ción nacional nacida en la Capital del país seguramente seria
inferior a1 3.9 por ciento registrado en el Censo de 1930,
incluso menor al 7.4 por ciento de los habitantes de la
República Mexicana que vivían en laentidadesemismoai\o,
considerando que el Distrito Federal ha sido la entidad que ha
experimentado las tasas más bajas de fecundidad y de creci-
miento natural de la nación durante esos sesenta aftos.
INEGI. Migración interna. 1994
15
 GRAFICA2.6
IN DICES DE MASCULINIDAD DE LAS POBLACIONES RESIDENTE Y NATIVA
DEL DISTRITO FEDERAL Y DE QUINTANA ROO, 1990.

Distrito Federal
Hombres/mujeres {por cien)
105
··········::::
t-:::::--
.

-- ---
100
........... ............ Nacidos en la entid~
95 '···~ ~
·······~.... ""'-...
············· ...
90
········----~--~

····....... _~. ....-...... ·············-·

1'---
~ ......._
···~~-

Mexic nos resid ntes en la ¡ntidad ····-.·~-..... ..

85
............
...........
80 ...

75
····........
'· ""',,~
70

65
o 5 JO 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65
"' 7

Edad

Quintana Roo
Hombres/mujeres {por ciet~)
135

130 -
125
1
1
Mexican s residente en la enti ad/
120 r-
...........
115
/ N
llO
_,-/
/ ······\.
lOS
....................... ·········< f-"""
/ ..... ·-······-··· \
'
í-··- ---
_...,:;; ................
v/ \ /
lOO
-. ······-.......... /
\\
9S
·--···-~· ..··· ....................
....•../
,. '
/
Na idos cm Ll entidad
90
o S 10 15 20 25 30 35 40 45 so SS 60 65 7(
INEGI. Migración interna. 1994

Edad

FUENTE: INEGI, XI Censo General de Población y Vivienda. 1990. Mign~ci6n. Tabu1odos tcm,tiOOi. Cuadro 2.

16
2.2 Lugar de residencia anterior
2.2. l Los t1ujos migratorios 1985-1990
Origen y destino de los migrantes
Un total de casi 4.2 millones de personas enumerada~ en el
Censo de 1990 declararon haber migrado dentro del país
durante el quinquenio previo. Estos migrantcs comprenden a
los mayores de cinco anos de edad que en 1985 vivían en oua
entidad federativa, así como a los menores de cinco anos que
nacieron en oua entidad. Ese volumen de personas representa
el5.14 porcientode la población total censada, 5.16porciento
de los hombres y 5.13 de las mujeres; es decir, una de cada cien
personas migró, en promedio, durante cada ano del periodo
1985-1990.
En el cuadro 2.5, se muestra la contabilidad de migrantes
internos para el quinquenio previo al Censo. En ambos sexos
sobresale el volumen de inmigrantes hacia cinco entidades
federativas: Estado de México, Distrito Federal, Baja California y
Jali:;co con más de cien mil y VerdCnv. a¡x:nas por debajo de esa
marca, cuyo monto agregado (996,820 hombres y 1,056272 mu-
jerc.~)rcprcsentaca~ilamitadde lamibrración interna total del país
(48.5 por ciento de la ma-;culina y 49.8 de la femenina). En
especial dcslaea el Estado de México, porque sus inrnigr.mle's
abarcan la cuarta parte de LOda la migr<~eión interna de la República
Mexicana (25.4 por ciento en hombres y 25.6 en mujeres).
Desde el ángulo d.: la emigración, tan sólo tres cmidades
federativas en conjun¡(}-Distrito Federal, Estado de México
y Yeracruz (943,827 hombres y 969.202 mujeres)- -->::onl:cn-
uan una proporción similar a las de los cinco estados con
mayor inmigración: 45.9 por ciento de los hombres y 45.7 d.:
las mujeres. La emigración del Distrito Federal destaca aún
más que la inmigración del Estado de México, pues abarca
casi la tercera parte de todo el movimiento ímcreswtal de la
nación (32.3 por ciento (;n homhres y 31.8 en muJeres).
En cuanto a la migrJcíón neta, nuevamente saltan a la
vista el Estado de México con gananc1as de 37S,4S3 hombre.s
y de 382,628 mujeres, BaJ:J Cal1forn1a con 104,02 l y 98,650,
respccti vamcnte, y en menor grJdo Qumtan:J Roo (46,01 S y
40,326) y Ch1huahu:J (4S,039 y 40,462). En el lado opuesto,
destacan por su pénl1 d:.~ d(; pohlaCilín e 1 Distrno Federal
(S 17,332 hombres y 486,600 mujeres), y con mu~ho menor
intens1dad Guerrero 09,28) y 40,777). Yeracru1. (3S,892 y
36,548) y Oaxaca (31 ,260 y 37 ,393).

MEXICO: MIGRACION INTERNA POR ENTIDAD FEDERATIVA Y SEXO, 1985-1990. CUADR02.S

Hombres Mujeres
Inm1- EmL- !vf¡grantc~ In mi- Em1· M•grames
Entidad federativa grantes gran tes netos. gnmtcs grantes ne<os
República Mexicana 2,057,163 2,057,163 2,122,332 2,122,332
Aguascalien\es 23,664 12,473 1 ¡,191 25.254 12,707 12,547
Baja California 129,348 25)27 l<l4,021 122,607 23.957 98,650
Baja California Sur 17,&41 6,844 10,997 16,077 6,653 9,424
Campeche 20,580 14,307 6,273 19,6¡5 13,920 5,695
Coahuila 39,729 50,191 -10,462 39,800 48.529 -8,729
Colima 18,383 11,568 6,815 17,542 11,734 5,808
Chiapas 25,970 39,421 -13,451 25,654 38,213 -12,559
Chihuahua 69,081 24,042 45,039 64,178 23,716 40,462
Distrito Federal 146,499 663,831 -517,332 188,369 674,969 -486,600
Durango 27,319 47,172 ·19,853 27,502 47,684 ·20,182
Guanajuato 57,753 53,579 4,174 6D.707 56,395 4,312
Guerrero 28,154 67,437 -39,283 28,486 69,263 -40,777
Hidalgo 38,882 45,969 7,087 43,189 53,915 ·10,726
Jalisco 1ü2.072 81,062 21,010 104.327 85,362 18,965
Est.ado de México 522,204 146,751 375,453 541,430 158,802 382,628
Michoacán 61,482 67,976 -6,494 62,846 74,689 -11,&43
Morelos 50,067 22,596 27,471 53,683 24 ,2JJ2 29,481
Nayarit 23,250 21,659 1,591 2LI85 23.2.69 -2,084
Nuevo León 63,797 39,487 24,310 63,863 38,857 25,006
Oaxaca 44,108 75,368 31,260 44,281 81,674 ·37,393
Puebla 68,960 77,972 -9,012 75,271 84.635 -9.364
Quen':tam 36,856 17,954 18,902 39,850 19,386 20,464
Quintana Roo 57,356 11,341 46,015 51,0:l3 10,707 40,326
San Lws Potosí 36,154 43,013 .{),859 38.718 48,070 -9,352
Sinaloa 50,119 61,153 -11,034 46,594 60,511 -13,9t7
Sonora 44,099 32,383 11,716 38,924 31,048 7,876
Tabasco 27,273 32,570 -5,297 27,545 30,982 -3,437
Tamaulipas 63,841 47,791 16,050 66.764 47,273 19,491
INEGI. Migración interna. 1994

1laxca1a 20,617 14,948 5,669 22,071 16,171 5,900

Veracruz 96,f/H 133,245 -36,548 99,539 135,431 -35,892
Yucatán 20,819 29,695 -8,876 21,280 28,441 -7,16t
Zacatecu 24,189 38,038 -13,849 24,148 41,167 ·17,019
., ..
FUENTE: INEGL XI Censo General de Pohlact6n y Vtvtenda, 1990. Mtgracton. Tabulados temattcos. Cuadros 2 y 3 .

17
 Un aspecto interesante es la estrecha relación que existe
entre los volúmenes de ambos sexos para cada entidad fcde-
rati va, como se puede ver en los altos coeficientes de correla-
ción lineal (p): 0.997 para los inmigrantes, 0.999 para los
emigrantes y 0.999 para la migración neta. Otro aspecto que
también llama la atención, en cambio, es la escasa relación
entre el monto de la migración neta y los volúmenes de
inmigrantes o de emigrantes, como se aprecia en los bajos
coeficientes de correlación lineal entre las migraciones netas
y sus componentes: 0.421 con respecto a la inmigración y
0.704 con respecto ala emigración en hombres y 0.389 y0.668
en mujeres, respectivamente.
La inspección de las cifras censales, así como estos
últimos coeficientes de correlación, muestran claramente que
el enfoque de la migración neta llega a ocultar marcadas
diferencias en los volúmenes de inmigrantes y emigrantes que
la determinan. Las políticas encaminadas a la reordenación de
la población sobre el territorio mexicano, que se basen en el
saldo neto migratorio, pueden llevar a sugerir metas
inalcanzables o inadecuadas, toda vez que se desconoce el
verdadero monto de los flujos poblacionales que interactúan.
Por ejemplo, pareciera más difícil modificar la mayor migra-
ción neta de Quintana Roo (86,341) que la de Jalisco (39,975);
pero en las cifras del cuadro 2.5 se puede ver que la situación
es al revés: mientras en la primera «participan» 130,437 indi-
viduos (108,389 inmigrantes y 22,048emigrnntes),en la segunda
lo hacen 372,823 (206,399 y 166,424), esto es, casi el triple.
En el cuadro 2.6, se muestran las entidades de origen y de
destino a las que corresponde el mayor volumen de inmigran-
tes y de emigrantes en cada entidad federativa. Salta inmedia-
tamente a la vista la predominancia del Distrito Federal como
entidad de expulsión y de Baja California y el Estado de
México como estados de atracción: la primera es el origen del
mayor flujo inmigratorio en casi la mitad de lasentidades(IS),
las dos últimas son el destino de las corrientes emigratorias
masculinas más cuantiosas de seis entidades, y entre las
femeninas la segunda de cuatro y la tercera de cinco.
Llama la atención que el flujo inmigratorio que sale del
Distrito Federal llega a ser el mayor en algunas entidades
geográficamente alejadas de la Capital del país como Aguas-
calientes, Chiapas, Guanajuato, Jalisco, San Luis Potosí y
Yucatán; en cambio, para las restantes diecisiete entidades,
donde no predomina la corriente originada en el Distrito

MEXICO: PRINCIPALES ENTIDADES DE ORIGEN DE LOS INMIGRANTES Y

DE DESTINO DE LOS EMIGRANTES, 1985-1990. CUADR02.6
Inmigrantes Emigran u"
Hombres Mujeres Hombres Mujere•
Entidad federativa E.F Monto E. F. Monto E. F. Monto E. F. Monto

Aguasca!ientes DF 8,038 DF 8,109 JAL 3,212 JAL 3,236

Baja Cllifomia SIN 22,921 SIN 22,695 SON 4,600 SON 4.247
Baja Cllifomia Sur SIN 2,783 SIN 2,792 Be 1,812 BC 1,767
Campeche TAB 5,280 TAB 5,36t QR 3,765 QR 3,531
Coahuila NL 7,645 DGO 8,018 CHIH 14,420 CfUH 13,164
Colima JAL 6,366 JAL 6,843 JAL 4,335 JAL 4,473
Chiapas DF 5,716 DF 5,939 TAB 5,532 TAB 5,991
Chihuahua DGO 18,392 DGO 17,888 SON 3,718 SON 3,436
Distrito Federal MEX 39,622 MEX 50,167 MEX 389,253 MEX 397,966
Durango COA!! 9,678 COAH 9,837 CIIIH 18,392 CHIH 17,888
Guanajuato DF 19,754 DF 20,537 BC 7,003 MEX 7,835
Guerrero DF 9,515 DF 9,421 MOR 11,569 MOR 13,084
Hidalgo DF 16,588 DF 18,310 MEX 16,867 MEX 18,700
Jalisco DF 20,810 DF 20,409 Be 14,809 Be 14,747
Estado de México DF 389,253 DF 397,966 DF 39,622 DF 50,167
Michoacán DF 19,894 DF 20,277 JAL 12,414 JAL 13,484
Morelos DF 18,130 DF 19,055 MEX 5,042 MEX 5.296
Nayarit JAL 8,005 JAL 8,110 Be 6,432 JAL 7,535
Nuevo León TAMPS 13,851 TAMPS 13,455 TAMPS 10,756 TA.MPS 10,736
Oaxaca VER 11,879 VER 12,044 MEX 14,315 DF 16,729
Puebla DF 21,155 DF 22,591 MEX 19,350 DF 20,854
Querétaro DF 15,137 DF 15,893 OTO 3,518 OTO 3,634
Quintana Roo YUC 22,204 YCC 20,970 YUC 4,306 YUC 4,180
San Luis Potosí DF 8,707 DF 9,207 TAMPS \\,270 TAMPS 13,405
Sinaloa OAX 8,437 OAX 6,968 Be 22,92\ BC 22,695
Sooora SIN 13,701 SIN 13,139 BC 12.895 BC 12,227
Tabasco vr-R 8,888 VER 9,144 VER 6,558 VER 6,749
Tamaulipas VER 16,608 VER 17,811 NL 13,851 NL 13,455
TI u cala DF 6,738 DF 7,204 PUE 3,651 PUE 4,264
INEGI. Migración interna. 1994

Vera.cruz DF 19,624 DF 20,061 MEX 18,706 MEX 18,532

Yucatán DF 5,186 DF 5,467 QR 22,204 QR 20,970
Zacatecas JAL 4,648 JAL 4,912 JAL 7,006 JAL 7,961

Nota: El significado de las siglas se encuentra en la figura 2.1.

FUEJ\'TE: INEGJ. XI Censo General de Población y Vivienda, 1990. Migración. Tabulados temáticos. Cuadros 2 y 3.

18
Federal, los inmigrantes proceden de estados colindantes,
exceplO en Baja California y Baja California Sur donde la
corriente más cuantiosa partió de S inaloa. Así, desde la óptica
de la inmigración, se satisface parcialmente el postulado
gravitacionai en el sentido de la relación inversa que debe
existir entre el monto de las migraciones y la distancia que
separa a las regiones de origen y de destino. Bajo el enfoque
de la emigración, el postulado se cumple casi cabalmente,
siendo las excepciones Guanajuato, Jalisco, Nayarit (sólo en
hombres), Puebia (sólo en mujeres), Oaxaca, Sinaloa y
Veracruz, donde el fluJO emigratorio más cuantioso no se
dirige a un estado colindante.
Si dividimos a la República Mexicana en tres macro-
regiones: Norte formada por los seis estados fronterizos (Baja
California, Coahuila, Chihuahua, Nuevo León, Sonora y
Tamaulipas), Sw por las catorce entidades más australes
(Campeche, Chiapas, Distrito Federal, Guerrero, Hidalgo,
México, Morclos, Oaxaca, Puebla, Querétaro, Quintana Roo,
Tabasco, Tlaxcalay Yucatán), y Centro por el resto de la nación,
un hecho interesante, que no se hace explícito en las cifras del
cuadro2.6,eslaaltaproJXllCión(38.2porcieniD)delainmigración
hacia la región Norte que proviene de la Sur (231,638 del total
de 604,931 ), lo cual muestra que la distancia geográfica pasa a
segundo término cuando existe un buen atractivo en el potencial
lugar de destino (empleo en las industrias maquiladoras a lo
largo de la frontera con Estados Unidos), sin importar que
medien mil kilómetros o más por carretera o ferrocarril para
realizar el desplazamiento de la residencia.
El predominio del Distrito Federal es un indicio que la
Zona Metropolitana de la Ciudad de México (ZMCM) se ha
convenido en una región de expulsión de población en el
pasado reciente, y refleja de alguna manera que los programas
de descentrali7.ación de las industrias y de los servicios han
comenzado a surtir efecto; pero también del lado coyuntural
se debe lomar en cuenta el temor que los sismos de 1985
pudieron infundir en los habitantes de la metrópoli para tomar
la decisión de emigrar. No debe perderse de vista que la
ocurrencia de los movimientos telúricos se sitúa justo seis
meses después de la fecha (el 12 de marzo de 1985) a que se
refiere la pregunta sobre la residencia anterior, aunque de las
cifras censales no es posible clasificar los flujos emigratorios
según la razón principal para emigrar.
En apoyo a la hipótesis del giro radical en la migración de
la ZMCM se tiene que, de la inmigración total hacia las
restantes treinta entidades, el 27.6 por ciento (767,345 de
2,780,993) partió de la región formada por el Distrito Federal
y el Estado de México, que en conjunto en lo sucesivo
llamaremos «Valle de México». El hecho que esta fr.Jcción es
apenas superior al 25.4 por ciento correspondiente al
quinquenio 1975-1980 (673,5 14 de 2,655,680) parece echar
por tierra nuestra proposición; no obstante, mlentra~ en el
lustro previo al Censo de 1980, el Valle de México experimen-
tó une ganancia neta de 216,178 individuos, en el previo al
Censo de 1990 el intercambio con el resto de la nación arrojó
una pérdida de 245,85 l. Es más, entre 1985 y 1990, la
emigración del Val le de México representó la mayor pane de
la inmigración a Hidalgo (66.4 por ciento), Qumtaro (54.6) y
Morelos (51.8), y una alta proporción en otros seis estados:
Guerrero(49.2), Tlaxcala(48.8), Guanajuato(48.4), Michoacán
(46.8), Puebla (44.2), Aguascalientes (41.5) y Oaxaca (39.7).
Movilidad intraurbana
Dentro de los altos montos de emigrantes del Distrito Federal y
de inmigrantes al Estado de México, una proporción considera-
ble corresponde al intercambio entre ambas entidades,demane-
ramásnotableelflujoquesedirigedelprimerohaciaelsegundo:
74.5 por ciento (389,253) de la inmigración total masculina y
73.5 (397 ,966) de la femenina hacia el Estado de México; o bien,
el 58.6 y 59 por ciento, respectivamente, de la emigración global
del Distrito Federal. Este monto de casi 800 mil personas
representa incluso el18.8 por ciento de la migración interestatal
de todo el país ocurrida durante el lustro.
Del total de emigrantes del Distrito Federal hacia el
Estado de México con cinco ai'\os o más de edad en 1990, el
92 por ciento se asentó en alguno de Jos 27 municipios
conurbados del Estado de México'. Los datos sobre lugar de
nacimienlO a nivel municipal, en los volúmenes estatales del
Censo de 1990, no se desglosan por edad, de tal manera que
no se puede saber cuántos niños que nacieron durante el
quinquenio 1985-1990 en el Distrito Federal vivían en los
municipios metropolitanos al momento del Censo, y no pode-
mos agregarlos a los mayores de cinco años para determinar
el flujo Lotal. Si suponemos entonces que la proporción para
mayores de cinco años es igual que para los menores, el monto
de la ttansferencia de la Capital del país hacia esos 27
municipios asciende a 725,182 personas que, concebida la
Zona Metropolitana de la Ciudad de México como una sola
comunidad, más que migraciones corresponden realmente a
cambios de residencia intraurbana, como quien traslada su
domicilio dentro de cualquiera de esos muncipios, o bien
dentro de las delegaciones del Distrito Federal.
En la dirección opuesta, también parte de las migraciones
del Estado de México hacia el Distrito Federal corresponden
a cambios intraurbanos de vivienda; sin embargo, como el
lugar de residencia anterior se captó exclusivamente al nivel
de entidad federativa, con la información recolectada en el
Censo no es posible determinar el flujo que se originó en los
27 municipios metropolitanos; no obstante, con los datos de la
Encuesta Nacional de Migración lwcia las Areas Urbanas
(ENMAU)de I986,podemosestimaresacorrientemigratoria.
En la Encuesta se reporta que, del total de inmigrantes hacia
la ZMCM, el 13.4 por ciento proviene de la parle no metropo-
litana del Estado de México (CONAPO, sf: 215). Si supone-
Estos municipios >on; Acolman, Ateneo, Atizapán de Zaragoza.
INEGI. Migración interna. 1994
Coacalco, CuauLitlán, CuauLiLián bcalli, Olalco. Oli.aui.la, Chicoloap<Ul,
Chiconcuac, Olimalhuacán, Ecatepec. Huixquilucan, hupaluca,
Melchor Ocampo, Naucalpan, Nc?Ahualcóyoll, Nicolás Romero, La
Paz, Tecamac, Teoloyucan. TepotzoLlán. Tcxcoco, Tez.oyuca,
Tialnepantla. Tultepec y Tultitlán.
19
 mos que esa proporción se conserva a lo largo de la ZMCM,
aplicada a los daLOs censales del DistriLO Federal, tenemos que
de los 89,789 emigrantes del Estado de México que se asen-
taron en el DistriLO Federal, S1,867 procedieron de los 27
municipios metropolitanos. Al restar esa cifra del volumen
total de inmigrantes hacia el DistrilO Federal, el monlO dismi-
nuye a 283,001 personas y se sitúa ligeramente por encima del
volwnen del Estado de México (276,41 S) cuando se omite toda
la comente procedente de aquél (787 ;219). Pero también se
ubica por debajo del total de 338,452 inmigrantes hacia el
Estado de México, cuando sólo se elimina la emigración de la
Capital de la nación hacia los 27 municipios metropolitanos.
En suma, estimamos que 777,049 personas del intercambio
migraLOrio de 877,008 enlre ambas entidades, o sea el88.6 por
cienlO, corresponde a cambios de domicilio dentro de la
comunidtul de la ZMCM, es decir, el 18.6 por cienlO de la
migración interestatal del país durante el lustro previo al
Censo de 1990.
En los daros censales que se utilizan en los siguientes
capítulos, no es posible desglosar la emigración del DistriLO
Federal a nivel municipal, ni se cuenta con dalOs de la ENMAU
que pennitan separar la comente que procede de la parte «ÍlO
metropolitana» del Estado de México. Ante esa carencia en la
informacióndisponible,yconsiderandoquelaproporcióndelas
migraciones entre las dos entidades atribuible al movimienLO
inlraurbano es bastante alta, en lo sucesivo descontaremos
completo el intercambio migratorio entre el Distrito Federal y el
EstadodeMéxicocuandoquezamosverel efectoquetieneen los
flujos hacia y desde ambas entidades. Al omitir íntegra esa
transacción, los totales de inmigrantes del Distrito Federal se
reducen a 106,877 hombres y 138,202 mujeres, los del Estado
de México a 132,9S 1 y 143,464, respectivamente; y los totales
de emigrantes a 274,578 y 277,003 en la primera de esas
entidades y a 106,760 y 108,246 en la segunda. Es interesante
que, aún después de efectuado el descuento,la emigración LO tal
del Distrito Federal mantiene la primacía entre las 32 entidades
federativas, al igual que la inmigración al Estado de México.
Existen otras tres zonas metropolitanas en la República
Mexicana cuyo territorio se extiende sobre dos entidades
federativas: Puebla (Puebla y Tlaxcala), Torreón (Coahuila y
Durango) y Tampico (Tamaulipas y Veracruz). Si para nues-
tro análisis mantenemos intactos los intercambios poblacio-
nales entre los dos estados de cada una de esas tres metrópolis,
al igual que en la Ciudad de México podemos estar incluyendo
desplazamienLOs intraurbanosde vivienda como migraciones.
Si bien los resultados de la ENMAU de 1986 nos per-
miten estimar la parte de los flujos intraestatales que se dirigen
hacia las tres metrópolis, no es posible hacer la misma estima-
ción que para la Ciudad de México, pues en los tres casos
ninguna de las entidades se incorpora completa a la zona
metropolitana como en el caso del Distrito Federal en la
INEGI. Migración interna. 1994
ZMCM. Además, en la muestra de la Encuesta para Puebla no
se incluyeron los cinco municipios de llaxcala (Mazatecocho,
Papalotla, Tenancingo, Xocotzingo y Zacatelco), ni el único
de Veracruz (Pueblo Viejo) para Tampico.
20
Tomemos el caso de la Zona Metropolitana de Torreón,
donde en la muestra de la ENMAU sí se incluyeron los
municipios correspondientes de Coahuila y Durango. De
acuerdo con el Censo de 1990, 8,905 personas mayores de
cincoai'losdeedadresidentesenlosmunicipiosdeMatamoros
y Torreón, Coahuila, vivían cinco anos antes en Durango,
mientras que 9,382 habitanles de los municipios de Gómez
Palacio y Lerdo, Durango, residían en Coahuila De los datos
de la ENMAU se tiene que, del total de inmigrantes internos
hacia la zona metropolitana en su conjunto, 18.8 por ciento
provenían del resto de Coahuila y 31 por ciento del resto de
Durango (CONAPO, sf: 220), pero no se conoce el desglose
de esas fracciones para el territorio metropolitano de cada una
de las dos entidades.
Ütrd fonna de expresar de manera conjunta esas dos
fracciones(49 .8 porcientodel total) es que, porcada inmigrante
procedentedelasrestantestreintaentidadesfederativas,0.992
partieron de la parte no metropolitana de la región Coahuila-
Durango. Si se aplica esta última proporción aiLOtalde22,975
inmigrantes del resto de la nación que llegó a la ciudad de
Torreón, se tiene que 22,780 adicionales procedieron del resro
de Coahuila y de Durango. Este último volwnen excede el
total de 18;287 migrantes entre ambas entidades enumerados
por el Censo que se asentaron en la «Comarca Lagunera», y
entonces no se puede llevar a cabo la misma resta que para el
Distrito Federal en el caso de la ZMCM, pues nos encontra-
mos en el contradicLOrio caso de -4,493 movimientos
intraurbanos. En realidad esa sustracción carece de sentido
pues las cifras no son comparables: dentro de los 22,780
migran tes estimados, una parte se dirige del resto de Durango
hacia Gómez Palacio y Lerdo, y otra del resto de Coahuila a
Matamoros y Torreón, y ambos flujos intraestatales, que no
capta el Censo, no fonnan parte del monLO de 18,287.
Una eslrategia alternativa es separar los municipios metro-
politanos por estado y suponcr, como para la ZMCM, que las
fracciones de migran tes procedentes del resto de cada entidad
son iguales en ambos lados del río Nazas (límite geográfico de
ambas entidades en la «Comarca Lagunera»). Al llevar a cabo
este procedimiento, para Gómez Palacio y Lerdo en conjunto
tenemos que 2,626 inmigrantes habrían salido de la parte no
metropolitana de Coahuila y por ende 6,756 (9,382-2,626)
partieron de Matamoros y Torreón, esto es, 72 por cienLO de la
inmigración total de Cóahuila hacia ambos municipios, y 54 por
cien lO de la emigración global de Coahuila hacia Durango. Para
Matamoros y Torreón, en cambio, el volumen estimado que
procede de la parte no metropolitana de Durango ascendería a
9,84 7 inmigrantes, más que toda la emigración que proviene del
estado de Durango (8,90S). Si aceptamos esta estimación,
concluimos que ningún residenle en Gómez Palacio-Lerdo se
mudó a Matamoros-Torreón durante el quinquenio previo al
Censo, deducción que indudablemente está fuera de toda lógica
Las cifras censales, sin embargo, nos penniten acotar el
problema de manera más sencilla. Si suponemos que toda la
migración de Durango hacia Matamoros-Torreón proviene
exclusivamente de Gómez Palacio-Lerdo, y de la misma
manera para la migración de Coahuila hacia los dos munici-
pios melropolitanosde Durango, tenemos que a lo más un 69.6
por ciento del flujo de Durango hacia Coahuila corresponde a
movimientos intraurbanos, y 75 por ciento de la corriente en
dirección opuesta. De la inmigración total de cinco años o más
de edad hacia cada una de esas entidades, el cambio de
vivienda dentro de la Zona Metropolitana de Torreón repre-
sentaría cuando muchoell2.8 por ciento de Coahuila (69,510)
y el 22 de Durango (41,454 ); y de la emigración, ell1.5 por
ciento en Coahuila y el 10.7 en Durango. Todas estas frac-
ciones son bastante menores al 54.3 por cienLo que el inter-
cambio dentro de la ZMCM representa de la emigración total
del Distrito Federal, o bien, al 68.3 por ciento de la inmigra-
ción global hacia el Estado de México.
Un análisis similar con las cifras censales para las dos
zonas metropolitanas restantes nos permite concluir que:
Los movimientos intraurbanos en la Zona Metropolitana
de Puebla representarían a lo más el 5.2 por ciento del
total de inmigraciones hacia el estado de Puebla ( 126,670)
y el 25.5 hacia Tiaxcala (36,028); y el 6.5 y 26.5 del
monto global de las emigraciones (140, 178 y 25,182),
respecti vamente 6 •
Los movimienLos intraurbanos en la Zona Melropolitana de
Tampicocorrcsponderían cuando mucho al14.2 por ciento
del total de inmigrantes hacia Tamaulipas (126,670) y ell.3
de Veracruz (164,760); y el 2.8 y 6.9 del volumen de sus
emigraciones (76,113 y 238,316), respectivamente7 •
No debe perderse de vista que estas proporciones deben ser
inferiores para las tres zonas metropolitanas, pues seguramente
una buena parte de los migrantes asentados en esos municipios
metropolitanos proceden de las <<regiones no metropolitanas»
de las entidades. Considerando que los movimientos intraurbanos
representan fracciones relativamente bajas de la migración
total de esas seis entidades federativas, en la parte restante de
esta Monografía sólo omitiremos el intercambio completo
entre el Distrito Federal y el Estado de México para algunos
análisis especiales.
2.2.2 Tasas brutas de migración 1965-1990
La inspección de la migración a través de los flujos de
inmigrantes y de emigrantes tiene la restricción que la magni-
tud de esos montos depende en buena parte del volumen de
habitantes en cada entidad federativa. Otro enfoque altemati-
6,595 mayores de cinco años de edad residentes en los mwücipios
metropolitanos de Puebla (Amozoc, Coronango, Cuaulinchán,
Cuautlancingo, Huejotz.ingo, Juan C. Bonilla, Ocoyucan, Puebla, San
Andrés Cholula, San Martín Texmelucan, San Miguel Xoxt!a y San
Pedro Cho!ula) provenían de Tlaxcala: 9. 171 de qlliene.< fuef<Xl
enumerados en los municipios metropolitanos de Tlaxcala salieron del
estado de Puebla.
16. 452 mayores de cinco años de edad residentes en los municipios
melropolilllnos de Tamaulipas (Ailllmira, Ciudad Madero y Tampico)
provenían de Veracruz: 2,105 de quienes fueron enumerados en Pueblo
Viejo, Veracruz, salieron de Tamaulipas.
vo y en ocasiones más útil es el de cantidades relativas. La
medida sintética más sencilla que mide la intensidad de un
flujo migratorio es la tasa bruta de migración. Calculada como
el cociente que resulta de dividir el promedio anual de las
migraciones totales ocurridas en un periodo de tiempo (el
quinquenio previo al Censo) entre la población media del
mismo intervalo, la tasa bruta presenta la desventaja que, en
tanto media de las tasas específicas por edad, ponderadas por
la distribución etárea de la población expuesta al riesgo,
diferentes estructuras por edad de la población pueden sesgar
la comparación entre los diversos niveles del fenómeno.
Este sesgo introducido por la distribución etárca se puede
evitar mediante dos alternativas, que revisten un mayor grado
de complejidad en su cálculo, pues se basan directarnence en
las tasas de migración específicas por edad. La primera
consiste en adoptar una estructura por edad esuíndar (algún tipo
de promedio de las composiciones etáreas de las poblaciones
bajo estudio), de tal forma que se compara puro el nivel del
fenómeno, pues el efecto de la estructura por edad es el mismo
en todos los patrones de migración. A este procedimiento se le
conoce como estandarización directa (Leguina, 1976: 41-45).
La segunda alternativa consiste en sumar, sobre todo el
rango de edades, el producto de la longitud de cada incervalo
etáreo por la tasa específica correspondiente. Esta medida
representa el número de migraciones que una persona espera
efectuar a lo largo de su vida, en ausencia de la mortalidad, y
que por analogía a la tasa bruta de reproducción (TBR) en
fecundidad, Rogers y Castro (198la: 2) la llamaron «tasa
bruta de migraproducción» (TBMG). Esta medida equivale a
la tasa bruta esrandarizada con una estructura por edad cons-
tante, es decir, proporcional a la longitud de cada intervalo
etáreo.
La segunda opción presenta la ventaja, sobre la primera,
que no requiere la selección arbitraria de una estructura tipo,
pero presenta la desventaja, desde el punto de vista
interpretativo, que por la forma como se construye sólo puede
expresar el número de eventos para la población realmente
expuesta al riesgo, es decir, solamente se puede aplicar a la
emigración y entonces representa el promedio de emigracio-
nes que un recién nacido espera realizar al cabo de su vida.
Aun dentro del caso de la emigración, dada la forma como se
determ ina,la TBMG no representa estrictamente el promedio
vitalicio de salidas de una región, pues la ocurrencia de las
cm igrac iones en cada intervalo sucesivo de edades
decrementa progresivamente el efectivo de la cohorte sinté-
tica, y el supuesto básico en el cálculo de la TBR en
fecundidad es que la generación de las madres permanece
constante conforme envejece. La diferencia estriba en que,
mientras en la fecundidad el nacimiento de un hijo-una
segunda persona-no excluye a la madre del campo de obser-
vación, en la movilidad territorial la emigración per se retira
INEGI. Migración interna. 1994
al individuo del lugar de residencia. La solución al problema
se encuentra en la «tabla de vida multiregional» (Rogers,
1975: 57-88; Ledent, 1980; Namboodiri y Suchindran, 1987:
137-161), un modelo cuyo grado de complejidad tanto en su
21
 construcción como en su aplicación excede el objetivo
trazado para esta Monografía, motivo por el cual se omite
aquí ese tipo de tablas de eventualidad.
Vista como una tasa bruta estandarizada con una estructura
por edad unifonne, la TBMG es menos atractiva que aquellas
donde la composición esrándar corresponde a alguna de las
poblaciones expuestas al riesgo, pues esla última se apega más
a la realidad. Por esta razón fue la que elegimos. En el cuadro 2. 7
y en la gráfica 2.7, se muestran las tasas brutas de inmigración
estandarizadas para el quinquenio previo a cada uno de los tres
últimos censos, y en el cuadro 2.8 y en la gráfica 2.8 las tasas de
emigración, habiendo utili1..ado la distribución de la población
nacional censada en 1990, para cada sexo por separado, como
estructura tipo en todos los casos". Este procedimiento garantiza
El algoritmo seguido para el cálculo de las lasas por edad y de las tasas
estandarizadas se presen\a en el A11e.u> Metadol6gíco al final de la
Monografía.
que en las comparaciones que se hagan sobre el tiempo y el
espacio, no interviene el efecto perturbador de la variación
temporal de la estructura por edad de la población residente en
cada entidad federativa, ni de las diferentes composiciones
etárcas entre los estados.
Un primer rasgo que llama la atención es el descenso en
la intensidad de la migración interna al nivel nacional en el
último quinquenio. En la no la de ambos cuadros, se menciona
que las tasas para los dos primeros corresponden a estimacio-
nes corregidas por cierto grado de omisión dentro del Censo
respectivo (personas que siendo migrantes no se declararon
como tales). En realidad, esa corrección es la que propicia que
el patrón sea de máximo intermedio (rl) en las tasas brutas
nacionales de ambos sexos, en lugar de la pauta de mínimo
intermedio (u) que resulla de las cifras publicadas para Jos
Censos de 1970 y 1980, cuyas tasas para los lustros previos
son 11.56 y 10.68 en hombres y 12.14 y 10.50 en mujeres,
respectivamente.

MEXICO: TASAS DE INMIGRACION MEDIA ANUAL POR ENTIDAD FEDERA TI VA

Y SEXO, 1965-1990.
(Tasas por cada mil personas) CUADR02.7

Hombres Mujen:s

1965 1975 1985 1965 1975 1985

Entidad federativa 1970 1980 1990 1970 1980 1990

República Mexicana 13.50 15.58 12.48 13.62 15.11 12.3t

Aguascalientes 12.68 16.93 14.9t 12.71 15.89 14.93
Baja California 33.55 24.96 37.02 36.28 24.27 35.27
Baja California Sur 22.78 32.70 25.25 20.07 30.49 23.41
Campeche 17.02 17.83 17.19 15.98 16.62 16.35
Coalluila 9.13 14.32 8.96 8.85 13.93 8.82
Colima 20.11 20.74 19.53 19.62 18.39 18.20
Chiapas 2.61 6.06 3.61 2.16 5.56 3.53
Chihuahua 6.50 10.99 12.82 6.55 10.30 lt.S5
Distrito Federal 18.64 lt.05 7.19 20.58 12.20 8.62
Durango 6.73 13.96 9.97 6.04 13.03 9.52
Guanajuato 6.67 10.10 6.91 5.94 8.99 6.71
Gue!rrero 4.33 7.38 4.97 3.84 6.66 4.75
Hidalgo 5.22 11.14 9.68 5.41 lt.35 10.19
Jalisco 13.25 13.32 9.07 12.31 12.15 8.58
Estado de México 4269 34.84 28.71 43.20 34.99 28.41
Michoacán 4.80 10.61 8.13 3.99 9.48 7.70
More los 20.30 19.46 1951 21.22 19.19 19.85
Nayarit 11.23 11.72 13.43 10.34 IQ.63 t2.00
Nuevo León 18.36 15.94 9.15 18.15 15.25 9.09
Ouaca 3.57 800 6.80 3.25 7.35 6.47
PuebLa 5.86 9.12 7.64 5.97 9.07 7.84
Querétaro 8.51 15.12 15.93 8.28 14.48 16.46
Quintana Roo 51.39 57.28 53.78 49.05 58.06 50.96
San Luis Potosí 5.51 10.52 8.23 5.41 10.09 8.41
Sinaloa 10.59 12.40 10.07 9.80 !1.63 9.33
Sonora 9.69 14.79 10.80 9.17 13.61 9.64
Taba sao 7.00 12.03 7.88 7.!1 9.75 7.90
Tamaulipas 12.64 17.18 12.78 13.21 16.80 13.04
Tiaxcala 6.24 13.21 12.70 6.71 13.12 12.97
Veracruz 7.16 9.85 7.17 6.88 9.52 7.15
Yucatán 4.61 8.18 6.64 3.95 7.69 6.59
INEGI. Migración interna. 1994

Zacateca• 4.63 11.14 9.39 4.15 10.00 8.82

Nota: Las lasas para 1965-1970 y 1975-1980 esl.án corregidas por omisión censal (Pattida, 1993).
FUENTES: Censos Generales de Población, 1970-1990.

22
MEXICO: TASAS DE EMIGRACION MEDIA ANUAL POR ENTIDAD FEDERATIVA
Y SEXO, 1965-1990.
(rasas por cada mil personas) CUADR02.8
Hombres Mujeres
Entidad federativa 1965 1975 1985 1965 1975 1985
1970 1980 1990 1970 1980 1990

República Mexicana 13.50 15.58 12.48 13.62 15.11 12.31

A¡uucalieme1 21.91 13.54 9.49 19.61 12.92 9.06
Baja California 10.79 23.65 8.59 9.28 21.03 8.05
Baja California Sur 8.07 21.06 10.57 8.01 17.84 10.52
Campeche 13.05 14.93 12.64 12.01 13.28 12.24
Coahuib 15.18 14.77 12.47 14.90 13.86 11.84
Colim.a 17.08 20.90 14.30 !7.10 18.34 13.91
Oli.apu 5.62 7.35 5.46 6.14 7.37 5.23
Clúhuahua 7.69 9.61 4.89 7.18 9.22 4.73
l)ú¡trito Federal !8.45 28.16 41.16 17.36 26.62 39.45
Durango 19.00 17.43 16.42 19.25 17.67 15.91
Guanajuato 15.84 12.21 6.47 15.26 11.70 6.27
Guenero 13.78 16.37 11.99 14.03 15.96 11.60
Hidalgo 15.67 15.37 11.84 18.92 17.55 13.12
Jalisco 11.43 11.65 7.66 10.92 10.80 7.46
Estado de M6xico 9.41 12.89 7.50 11.40 13.02 7.78
MichoacG! 21.17 15.24 9.48 21.45 14.89 9.53
Mcn.Joa 12.43 17.94 9.73 13.71 18.30 9.88
Nayarit 13.99 17.37 12.88 15.01 16.69 13.28
Nuevo León 6.50 9.95 6.22 6.28 9.26 6.07
Oaxaca 14.37 16.29 11.87 14.97 17.08 12.13
Puebla 12.71 12.77 9.16 13.41 13.23 9.32
Qu~ 15.41 13.17 8.78 16.72 13.64 9.01
Quintana Roo 10.72 25.77 12.51 11.19 21.46 12.36
San Lui1 Potosí 18.39 15.70 10.33 19.27 16.43 11.01
SinaiOII 9.87 15.07 12.93 10.58 13.66 12.63
Smora 8.83 13.93 8.51 8.41 12.21 8.17
Tabuco 8.79 12.83 9.90 9.15 11.64 9.34
Tamaulipu 12.23 17.54 11.03 11.40 16.28 10.65
Tiaxcala 17.65 14.31 10.01 18.90 14.67 10.33
Veracruz 8.35 11.77 9.83 8.60 11.44 9.76
Yucatin 11.81 11.81 10.72 10.93 11.60 10.01
Zacatecas 31.52 21.13 14.34 30.04 20.40 14.36
Nota: Las taw para 1965-1970 y 1975-1980 estm corregidas por omisión censal (Partida, 1993}.
FUENTE: Censos Generales de Población, 1970-1990.

Aun y cuando los montos de inmigrantes y de emigrantes
dependen en buena medida del volumen de la población
residente, en algunas entidades federativas la primacía en los
flujos se conserva en las tasas para el periodo 1985-1990,
como en Baja California y el Estado de México, cuyos flujos
inmigratorios se ubican en segundo y cuarto lugares en hom-
bres y en segundo y tercero en mujeres, respectivamente. Del
lado de la emigración, el Distrito Federal muesrra el máximo
flujo y la mayor tasa, y es tan intenso el éxodo de la Capital del
país, que sus tasas de emigración para el quinquenio previo al
Censo de 1990 casi triplican a las de Durango, que les siguen
en magnitud. No obstante, si se retira el intercambio poblacio-
nal entre el Distrito Federal y el Estado de México, mientras
las tasas brutas de emigración del primero ( 16.0 para hombres
y 15.2 para mujeres) dexiendenpordebajode IasdeDurango,
las de inmigración del segundo (6.9 y 7.1) disminuyen
A diferencia de la migración absoluta, que por ser acu-
mulada, su intensidad generalmente presenta cierta «estabili-
dad» en el tiempo, en la migración por periodos el patrón
temporal llega a exhibir marcados cambios, debido a que en
muchasocasionessucomportamientodependemásdehechos
coyunturales que de «tradicionales» corrientes migratorias
con direcciones fijas. Una clasificación de las entidades
federativas-de manera global para los tres quinquenios-en
intensidades alta, media y baja, como se hizo en el lugar de
nacimiento, es difícil de interpretar aquí, pues dicha
categorización en muchos casos esconde notables contrastes
entre un lustro y los dos restantes, como en la tendencia
secular de la inmigración y la emigración de Baja California.
No obstante, cabe mencionar las altas tasas de inmigración
hacia Quintana Roo, que equivalen a haber agregado anual-
mente y de manera continua un 5 por ciento de habitantes en
INEGI. Migración interna. 1994

drásticamente casi al mínimo, pues se ubican apenas por promedio durante el pasado cuarto de siglo. También de
encima de las de Chiapas, Guerrero y el Distrito Federal (5.9 magnitud importante son las tasas de Baja California y Baja
la masculina y 7.1 la femenina), Yucatán y Oaxaca en ambos California Sur, con una marcada variación en el lustro inter-
sexos y de Guanajuato además en mujeres. medio, y las del Estado de México, con una franca disminu-

23
 GRAFICA2.7
MEXICO: TASAS DE INMIGRACION MEDIA ANUAL POR
ENTIDAD FEDERATIVA Y SEXO, 1965 -1990.

Tasa (por mil) HOMBRES

60

50

40

30

20

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10 e-

o
] 1 ~J ~ J ~ J u~ ~~ru lli ~
e;~·.$..,. ~Y~c,;'?. $" c_.~q; ~· ~Y~e><!{. r:f" Q~.. ~,;-; ...~e,"'~ ~.,.·'-'"'"f' ¿f" .<:/. if ~f ~·e,..¡.· ,.¡· .:s-" ~· cf".:/' .:.t· d".,.. cf. e/.
Entidad federativa de destino

- 1965-1970 ~ 1975·1980 D 1985-1990

Tasa (por mil) MUJERES

60

50

40

30

20

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10

o ~ ~
~ $ .... ~""'~"''?" $" '-'{3-J"': '{"'~· ~y~e><!{" ¿· Q'$· ~,;-; ..,!&-· 4' ~\:r o,~· Q~· &:S::;· ,.¡·e,..¡.· 4" ~. . q;f" o-9".:1' .:,f" d"""' o.e· d'
Entidad federativa de destino

~ 1975-1980 D
INEGI. Migración interna. 1994

- 1965-1970 1985·1990

FUENTE: Cuadro 2.7.

24
 GRAFICA 2.8
MEXICO: TASAS DE INMIGRACION MEDIA ANUAL POR
ENTIDAD FEDERATIVA Y SEXO, 1965-1990

HOMBRES
45
~

- 40
·-
E 35

~
30

o
25
o.
~ 20

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f- 5

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<J";.· ,,f"<J~· 0~ -s·~~-~§"·....,...,..~· ~~o~· "r"!iJ·A!...- 0~· éf·~& <q ~1$'-!i~.¡« 0
¿·<¡;¡&· ¿,.S',¿· 0~· ~''.$.,.. ~· ,._,§' .....~:J.'" ~v¿· ef.
Entidad federativa de origen
-1965·1970 f2.2Llt975·1980 c=J1985·1990

MUIERES
40
~

- 35
·-
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....,~
¿· Gs· ~"'..:!!«:" "",_,. ~§"" ""',.. ..:¡."' ~·v c;
-~

Entidad federaliva de origen

~1975-1980
INEGI. Migración interna. 1994

-1965-1970 01985-1990

FUENTE: Cuadro 2 8.

25
 ción con el paso del tiempo. Si se descuenta el intercambio de
esta última entidad con el Distrito Federal, sus tasas descien-
den progresivamente de una intensidad alta a una baja (18.2,
15.6 y 6.9 para hombres y 18.6, 15.9 y 7.1 para mujeres).
En cuanto a las tasas brutas de migración neta (inmigra-
ción menos emigración), en el cuadro 2.9 y en la gráfica 2.9,
se puede apreciar una mayor discrepancia en los niveles y en
las tendencias seculares, pero con cierta convergencia hacia la
reducción en la brecha existente entre las magnitudes de las
tasas. Este angostamiento se aprecia de manera más clara en
varios estados que han sido tradicionalmente expulsores de
población, como Guanajuato, Hidalgo, Michoacán, Oaxaca,
Puebla, San Luis Potosí y Zacatecas. Casos particularmente
interesantes son los de Aguascalientes, Querétaro y Tlaxcala
a una importante ganancia veinte ai\os más tarde en los dos
primeros y en menor grado en el tercero, y con incrementos
absolutos similares entre los quinquenios extremos de 14.7,
14.1 y 14.1 puntos al millar, respectivamente, en hombres y de
12.8, 15.9 y 14.8 en mujeres.
En el lado opuesto destaca el Distrito Federal, cuya
ganancia en 1965-1970 se transformó en notables déficits en
los dos lustros posteriores, con decrementos absolutos de 37.8
puntos al millar en hombres y de 27.6 en mujeres al cabo de
los tres quinquenios. La pérdida relativa en la Capital de la
nación en el último lustro fue tan intensa que llegó a ser la
mayor durante el cuarto de siglo considerado en ambos sexos.
Si bien con ganancia ~n los tres quinquenios, el Estado de
México también exhibe una continua disminución que se
tradujo en una reducción del primero al tercer lustros de 12 y
11 puntos al millar en hombres y mujeres, respectivamente.
Si se descuenta el intercambio entre el Distrito Federal y
el Estado de México, las reducciones absolutas en la tasa bruta
de migración neta son algo menores pero aún importantes: de
poco más de 23 puntos al millar en ambos sexos en la Capital
del país (de 12.86 a -10.10 en hombres y de 14.61 a -8.15 en
mujeres) y de 12 puntos en su vecino estado (de 13.57 a 1.35
en hombres y de 14.01 a 1.70en mujeres). La evolución de las
tasas de migración neta del Distrito Federal y el Estado de

MEXICO: TASAS DE MIGRACION NETA MEDIA ANUAL POR ENTIDAD FEDERATIVA

Y SEXO, 1965-1990.
(Tasas por cada mil personas) CUADR02.9

Hombn:s Mujau

Entidad federati~ 1965 1975 1985 1965 1975 1985

1970 1980 1990 1970 1980 1~

Aguucalientes -9.23 3.39 5.42 -6.90 2.97 5.87

Baja California 22.76 1.31 28.43 26.99 3.25 v:a.
Baja California Sur 14.72 11.64 14.68 12.06 12.65 12.89
Campeche 3.98 2.90 4.54 3.97 3.34 4.11
Coabuila -6.05 -0.44 -3.52 -6.05 OJJI -3.02
Colima 3.03 -0.17 5.23 2.52 o.os 4.29
Otiapas -3.01 -1.29 -1.85 -3.98 -1.80 -1.70
Chihuahua -1.19 1.38 7.92 -0.63 1.08 7.13
DisuiiD Federal 0.19 -17.11 -33.97 3.22 -14.42 -30.83
Durango -12.21 -3.47 -6.45 -13.20 -4.64 -6.39
Guanajuato -9.16 ·2.17 0.44 -9.32 ·2.71 0.44
Guerrero -9.45 -8.99 -7.m ·10.19 -9.30 -6.85
Hidalgo -10.44 -4.23 -2.16 -13.51 -6.20 -2.93
JaliiK!O 1.82 1.67 1.41 1.39 1.34 1.12
Estado de México 33.28 21.95 21.20 31.80 21.98 20.62
Michoacán -16.38 -4.63 -1.35 -17.46 -5.42 -1.82
More los 7.87 1.52 9.77 7.50 0.89 9.97
Nayarit -2.76 -5.66 0.55 -4.67 -6.05 -1.28
Nuevo León 11.87 6.00 2.93 11.87 5.99 3.01
Oax~~ea -10.79 -8.28 -5.01 -11.72 -9.73 -5.66
Puebla -6.85 -3.65 -1.52 -7.44 -4.16 -1.49
Querétaro -6.90 2.05 7.15 -8.44 0.84 7.45
QuínWUoRoo 40.67 3LSI 41.27 37.86 36.60 38.60
San Luis Porosf -12.88 -5.19 -2.10 -13.86 -6.34 -2.60
Sinal011 0.72 -2.67 -2.85 -0.78 -2.02 -3.31
Sonora 0.86 0.86 2.29 0.76 1.40 1.47
Tabasco -1.79 -0.80 -2.02 -2.04 -1.89 -1.43
TIUilaulipas 0.41 -0.36 1.15 1.81 0.52 2.39
Tiaxcala -!.SS
INEGI. Migración interna. 1994

-11.41 -1.10 2.69 ·12.19 2.64

Ve!llcruz ·1.19 -1.92 -2.66 -1.72 -1.92 -2.61
Yuca!án -7.20 -3.63 -4.08 -6.98 -3.91 -3.42
Zacatecas -26.89 -9.99 -4.95 -25.89 -10.40 -S.SS

FUENTE: Deducido de lo• cuadros 2. 7 y 2.8.

26
 GRAFICA2.9
MEXICO: TASAS DE MIGRACION NETA MEDIA ANUAL
POR ENTIDAD FEDERATIVA Y SEXO, 1965 • 1990.
Tasa (por mil) HOMBRES

30

20
10

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Entidad federativa

- 1965-1970 ~ 1975-1980 O 1985-1990

Tasa (por mil) MUJERES

40~~-----~---------------------------------------------------------------------------------------------------------------,

30

20

-20~-------------------------------------------------------------------------------------------~.-~

-30~-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------~

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~·.¡-·<\!c,~c,'?·~..¡ .j'cf ~-e,?>· ..,~ .f/ ¿·.ji. t.1. ,;,~ ::J; d''e,F ~.;;.e!·~·~·#~-.,.)~".j' e/' el",. q~
Entidad federativa

- 1965-1970 fLZd 1975-1980 D 1985-1990

INEGI. Migración interna. 1994

FUENTE: Cuadro 2.9.

27
 México en conjunto refleja claramente la progresiva pérdida
de atracción que el «Valle de México» ha tenido sobre la
población de las restantes treinta entidades. La Ciudad de
México, otrora la meca para los habitantes del resto de la
República Mexicana, ha venido experimentando un continuo
decremento en su balance migrawrio: la ganancia agregada
por migración del «Valle de México» se redujo de 13.16 por
mil en hombres y 14.4 7 en mujeres en 1965-1970, a 1.99 y
3.19 diez ailos después y a una pérdida de 3.76 y 2.76,
respectivamente, en el lustro previo al Censo de 1990.
Un caso notable es el de Baja California, cuyo patrón de
mínimo intermedio en ambos sexos (tipo «U» en la gráfica
2.9) es el más significativo dentro de ese tipo de pautas, pues
sus altas y similares tasas de ganancia en los quinquenios
extremos bordean una fuerte disminución en el lustro inter-
medio, cuya tasa masculina es apenas perceptible. En la
gráfica 2.1 O, se reproducen las tasas brutas de migración neta
de Baja California, estandarizadas con la estructura por edad
nacional censada en 1990, con respecto a las 31 entidades
federativas restantes. Destaca la recuperación en el tercer
lustro de los niveles de ganancia del primero en Durango,
Guanajuato, Michoacán, Nayarit y Sinaloa, pero sobre todo
en Jalisco y Sonora, donde el descenso en el quinquenio in-
termedio fue hasta del lado negatívo, al igual que en Baja
California Sur, aunque en este último las ganancias en los
lustros extremos son minúsculas en ambos sexos.
La gráfica 2.1 O prueba claramente que, profundos cam-
bios en la vida social y económica de una región, además de
migrawrias, como la elevada ganancia en el intercambio con
el Distrito Federal en 1985- 1990, que junto con la correspon-
diente al Estado de México, reflejan una fuerte expulsión
generalizada de la ZMCM hacia Baja California. Incluso
estados geográficamenle tan alejados como Guerrero, Oaxaca
y Puebla aportaron en conjunto el 9 por ciento del flujo
inmigratorio hacia Ba;a California en el quinquenio previo a
1990, así como el JO por ciento de la ganancia total 9 , cuando
veinte ailos antes ambas fracciones representaban apenas el2
por ciento.
En el mapa 2.1, se ilustran en el plano territorial las tasas
brutas de migración neta para el quinquenio 1985-1990,
agrupadas en intervalos de mayor a menor en términos
algebráicos 10 • Llama la atención, en primera instancia, la
alta coincidencia en la distribución geográfica entre los
sexos, ya que sólo en tres estados las tasas de ambos géneros
no caen dentro del mismo intervalo: Coahuila y Yucatán con
expulsión fuerte en hombres y expulsión moderada en
mujeres, y Nayarit con equilibrio masculino y expulsión
moderada femenina.
INEGI. Migración interna. 1994
La dívisión es directa en las tasas brutas de migración neLa pues la única
pérdida de Baja California fue en las mujeres Cün Yucatán y de sólo 3
personas.
10
Los conglomerados s.e fonnaron con el procedimiemo s.ugerido por
Delenius y Hodges (1959).
28
Destaca de manera notable también la contigüidad l.errito-
rial en los ni veles extremos del crecimiento social: por un lado,
una vasta franja de entidades federativas de expulsión fuerte o
moderada (Sinaloa, Durango, Zacatccas, San Luis Potosí,
Hidalgo, Veracruz, Puebla, Guerrero, Oaxaca, Tabasco y
Chiapa~);yporotro,pcqueñasregionesdeestadosconatracción
fuerte o moderada (Baja California, Baja California Sur,Sonora
y Chihuaha; Querétaro, Estado de México y Morelos; Campe-
che y Quintana Roo)". Entre las pocas entidades de equilibrio
la continuidad apenas se percibe en el noreste (Nuevo León y
Tamaulipas) y en el occidente (Jalisco y Guanajuato).
En general, se acepta que la distribución inequitativa del
desarro!!o social y económico entre las diferentes regiones es
la causa principal que origina las migraciones. Numerosos
contingentes poblacionales fluyen de lugares con peores con-
diciones de vida hacia aquellos lugares que ofrecen mejores
perspectivas para la sobrevivencia. Anle varias opciones de
destino, se acepta que el individuo elige aquella que se
encuentra territorialmente más próxima al lugar de origen;
aunque como hemos visto en la migración recienle en México,
la distancia parece haber pasado a segundo término en la
actualidad.
Si nos restringimos exclusivamente al enfoque del des-
equilibrio sociocconómico y compactamos la movilidad te-
rritorial en el saldo neto migratorio, la lógica indica que debe
existir una sensible relación directa entre el valor algebráico
de la migración neta y el nivel de bienestar de la región. El
Consejo Nacional de Población ha construido un índice de
desarro!!o para las 32 entidades federativas con base en !os
datos del Censo de 1990 (CONAPO, 1993) 12 • Si aceptarnos
este índice como un fiel indicador del nivel de bienestar de
los habitantes de los estados, uno esperaría una relación
directa con el saldo neto migratorio.
Si omitimos la migración entre el Distrito Federal y el
Estado de México, que difícilmente responde a la diferencia
en el nivel de desarro!!o entre ambas entidades, como se
aprecia en la gráfica 2.1 1, desde el punto de vista estricta-
mente numérico, la relación entre migración y nivel de
bienestar no se satisface cabalmente. No obstante, podemos
relajar la rigidez matemática de la asociación propuesta, si
dicotomizamos a las entidades en atracción (migración neta
positiva) y rechazo (saldo neto negativo), y en más desarro-
lladas (índice de bienestar positivo) y menos desarrolladas
(índice de bienestar negativo). Así, todos los estados que, por
un lado, sean al mismo tiempo de rechazo y menos desarro-
ll
Incluimos a Sonora, de equilibrio, con el fm de ligar la Península de Baja
Cali fomia con Chihuahua,y porque sus tasas positiva• -2.3 en hombres
y L5 en muJeres- se encuentran más cerca de la cota máxima del
intervalo de equiltbrio que de la mínima.
ll
El CON APO realmente calculó los índices de marginación; aquí hemos
estimado el índice de desarrollo cambiando el Signo al índice de
marginacJón.
 GRAFICA 2.10
BAJA CALIFORNIA: TASAS DE MIGRACION NETA MEDIA ANUAL
CON RESPECTO A LAS RESTANn:s ENTIDADES FEDERATIVAS,
POR SEXO, 1965·1990.

Hombres

Tasa (por mil)

1-

u ~"1

Entidad federativa

Mujeres
Tasa (por miO

5-

4-

. . ..

2 .....

o
jll. J11~ -~~(n .011
- .~~"~~~~~~~+H~ID ,fi 1

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L. . . . . - _¿ . . - .c. .. ~ . ~u) . . . . . ci. -en:

~ ~~ct~&~~~e~~~~~~~~&~¿e~gtoc~~qo
INEGI. Migración interna. 1994

W~~O~Z~ONOO~~~O>O~<~I~OOF~~OOZWW
Entidad federativa

FUENTE: Censos Generales de Población, 1970-1990.

29
 MAPA2.1.
MEXICO: TASAS DE MIGRACION NETA MEDIA ANUAL POR
ENTIDAD FEDERATIVA Y SEXO, 1985·1990.

Hombra

Atracción fuerte (más de 10)

~ Atracción moderada (3.5 a 10)

mm Equilibrio (-1 a 3.5)

!::::::::::~ Expulsión moderada {-3.5 a 1)

Mujeres

Atracción fuene (más de 10)

~ Atracción moderada (3.5 a lO)

Equilibrio (-1 a 3.5)

Expulsión moderada (-3.5 a 1)

INEGI. Migración interna. 1994

FUENTE: Cuadro 2.9.

30
 GRAFICA 2_JJ
RELACION ENTRE LAS TASAS BRUTAS DE MIGRACION NETA 1985·1990 Y EL INDICE DE
MARGINACION SOCIECONOMICA EN 1990.
1 1
40 -
20 - r-
o es r'SL
He~'
ZA YU
OA GR
-20 - t-
1 1
-2 -1
lndict de desarrollo
FUENTE: INEGI, XI Censo General de Población y Vivienda, 1990. Migración. Tabulados temáticos.Cuadro 3.
liados (cuadrante inferior izquierdo en la gráfica 2.11 ), y por
otro, de atracción y más desarrollados (cuadrante superior
derecho), satisfacen la relación esperada.
Bajo este nuevo criterio de asociación, en la gráfica 2.11,
se puede ver que apenas seis entidades no satisfacen la
relación propuesta, tres en el cuadrante superior izquierdo
(Campeche [CA]. Guanajuato [GT] y Querétaro [Qn) y tres
en el inferior derecho (Coahuila [COJ, Distrito Federal [DF]
y Sinaloa [SI}), aunque realmente sólo el Dislrito Federal se
aleja de manera notable de los límites de los cuadrantes. Así,
podemos concluir que entre la migración interestatal del
periodo 1985-1990 y el nivel de bienestar en las enúdades
federativas sí existe una apropiada asociación directa.
2.2_3 La migración por edad 1985-1990
Al igual que otros fenómenos demográficos y sociales, la
migración tiene una incidencia distinta por edad. Una parte
importante de la migración se concentra en la adolescencia y
en las edades adultas jóvenes, pues dentro del ciclo de vida es
la etapa cuando la persona se encuentra en proceso de alcanzar
su estabilidad laboral y familiar. Muchos de esos migrantes
jóvenes ya han formado un hogar, con lo cual,enel cambio de
su residencia hacia otra región involucran también a sus hijos.
Así, no debe sorprender la alta migración interna en los
primeros años de vida, la cual se encuentra suficientemente
documentada para varios países (IIASA, 1979-1982), incluso
en México como veremos adelante en este apartado.
_l _l
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r-
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CA CL AG
TM NL
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1 1
o 2
La migración de los niños no siempre se ubica dentro de
un traslado familiar, pues no es raro el caso de empleadas
domésticas que, ante la imposibilidad de mantener a su hijo
en el lugar de trabajo, deciden enviarloallugarderesidencia
de los abuelos u otros familiares del infante para su educa-
ción. Así, es posible encontrar migraciones que no son
familiares en todas las edades, aunque en ciertas etapas
de la vida familar predomina el movimiento de hogares
completos.
La estructura por edad de los migran tes esbozada arriba
se puede ver claramente en la gráfica 2.12 para el monto
nacional 1985-1990. Llama la atención en primera instancia
la gran similitud entre las pirámides de edades cuando se
incorpora u omite el intercambio entre el Distrito Federal y
el Estado de México. La diferencia en los volúmenes por
sexo es particularmente interesante: el exceso masculino en
los primeros diez años de vida se debe a que, ante similares
tasas de migración para ambos sexos, nacen más varones que
mujeres; en cambio, la primacía femenina entre los 10 y 30
años y masculina de los 30 a los 55 años (hasta los 60 cuando
se descuenta el intercambio dentro del «Valle de México»)
refleja una pauta de mujeres más joven, patrón observado
también en otros países e incluso en México en el periodo
INEGI. Migración interna. 1994
1970-1980 (Partida, 1993: cuadro B.4). Dentro del contexto
de la migración familiar, ese rejuvenecimiento femenino
seguramente manifiesta la diferencia de edades al matrimo-
nio, aproximadamente dos años mayor entre los hombres.
31
 GRAFICA 2.12
MEXICO: ESTRUCTURA POR EDAD DEL TOTAL DE
MIGRANTES INTERNOS, 1985-1990.

Edad Tot.al nacionlll

65 o más l -- 1
6().64 Hombres ~ EJ Mujeres

SS· 59 l -r- l
50·54 ->--
1 J
45.49 l -f- J
40-44 l -r- 1
35-39 -r-
L 1
30.34 1 -f- 1
25-29 -- l
1
20-24 I -- 1
!S· 19 --
1 1
10·14 1 -- 1
5-9 l -, 1
0·4 -- 1
1 1 1 1

300 200 100 o JO() 200 300

Miles de personas

Edad Sin intercambio Distrito Federal · Estado de México

6Somás 1 1
60-64 Hombres
e= :J Mujeres

SS -S9
50-54
e: :::J
1 1
45 ·49 1 - 1
40-44 1 - 1
35.39
1 -- J
30-34 1 + 1
25-29 -¡-
1 1
20·24 -
1 1
!S -19
l f- ¡
10" 14
L f-
1
S-9 f-
t 1
0-4
1
f-
J
INEGI. Migración interna. 1994

1
300 zbo 100 o ux1 2¡.,0 31Xl
Miles de personas

FUENTE: INEGI, XI Censo General de Población y Vivienda, 1990 Vligración. Tabulados lcmálicos. Cuadros 2 y 3

32
 El efecto que el patrón por edad de la migración tiene en
la estructura etárea de la población residente se puede ver en
la gráfica 2.13, donde hemos escogido los dos casos extremos:
el Distrito Federal con la mayor tasa de pérdida por migración
y Quintana Roo con la mayor ganancia relativa. El patrón
nacional se ve claramente reflejado en la contracción de la
primeradeesasentidades de 1985 a 1990y en la expansión de
la segunda, siendo más marcado el efecto en la infancia y en
las edades adultas jóvenes. Un aspecto interesante es que,
mientras la migración aumenta la edad media---en 1990-dc las
personas que en 1985 vivían en el Distrito Federal, de 25.4
anos en hombres y 26 en mujeres a 27.2 y 27.9, respectiva-
mente, en 1990, en Quintana Roo las mantiene constantes en
22.3 para los varones y en 21.5 para las mujeres.
El patrón por edad de las tasas de migración interna a
nivel nacional se muestra en el gráfica 2.14, donde claramente
se aprecia el impacto de la pauta etárea de los migrantes. En
el perfil de la migración mexicana para los quinquenios
previos a los tres úllimos censos de población se reproduce el
patrón que se puede considerar ya típico de la migración
interna a nivel mundial (Rogers y Castro, 198la).
Amén de la menor intensidad global en 1985-1990, ya
mencionada en el apartado anterior (cuadros 2.7 y 2.8), un
rasgo distintivo en el perfil de los tres lustros es el paulatino
envejecimiento de la edad modal del «pico laboral>> (en edades
de trabajar): de 22 anos en 1965-1970 a 23 y 24 diez y veinte
anos después en hombres, y de 18 a 21 y 22, respectivamente,
en mujeres; podemos concluir entonces que hay una tendencia
a la homogeneidad en los patrones etáreos de la migración
interna a nivel nacional entre los sexos_ No obstante, dado que
las pautas nacionales se forman de la conjugación de los 992
flujos migratorios interestatales para cada sexo (31 destinos
posibles para cada una de las 32 entidades federativas de
origen), la proximidad en los patrones entre los géneros no se
puede generalizar a todos los movimientos entre cada par de
entidades federativas ni a los flujos globales de inmigración o
de emigración de cada estado, pues incluso se tiene la posibi-
lidad de una tendencia divergente. Las pautas etáreas de la
emigración global de Colima son las más discrepan tes: la edad
modal en los hombres (30) excede por siete anos a la de
mujeres (23), como se ilustra en la gráfica 2. 1S.
Mostrar gráficamente los patrones por edad de las 992
corrientes interestatales, o al menos de los flujos inmigrato-
rios y emigratorios globales de cada entidad federativa, exce-
de las dimensiones previstas para esta Monografía, por la gran
extensión que se requiere para una figura de tal magnitud. Una
alternativa para poder visualizar los contrastes-algunos real-
mente marcados-entre las pautas etáreas de las tasas de
migración, es a través de su aglutinamiento en conjuntos de
patrones con perfiles similares. Para esa agrupación utilizare-
mos sólo las pautas de inmigración y emigración interna total
de cada entidad federativa, es decir, sin precisar el origen de
los inmigrantes ni eldcstinodelos emigrantes. Este acotamiento
obedece a que en no pocos flujos interestatales la presencia de
varias tasas nulas- por la ausencia de migrantes--{;omplica y
hasta llega a sesgar la clasificación13 •
La formación de los grupos de patrones se hizo con la
variante «ordenamiento del centroide más cercano>>
(Anderberg, 1973), dentro de los métodos estadísticos de
formación de conglomerados (cluster analysis). Estos méto-
dos se basan en una medida de distancia, por lo que es
necesario primero pararnetrizar los patrones por edad, para lo
cual elegimos el modelo sugerido por Rogers y Castro ( 1981 a):
(2_1)
donde M, es la tasa de migración para la edad x. Como se
puede apreciar en la igualdad anterior y en la gráfica 2.16, el
modelo consiste de la suma de tres funciones: una exponencial
negativa que reproduce principalmente el comportamiento
infantil, una doble exponencial que dibuja el «pico laboral»,
y una constante C igual para todas las edades. En la gráfica
2.16, sólo se incluyen los cuatro parámettos distintivos del
modelo ( "" 1 , "" 2 , A.2 y C ) y sus dos edades características: las
asociadas al «punto bajo» (XJ y al «punto alto» (X,); donde
esta última es además la edad modal del «pico del trabajo».
Los parámetros a 1 y <~¡: se omiten en la gráfica, porque al ser
propios del nivel de las componentes infantil y laboral, es
difícil interpretar e ilustrar su valor de manera gráfica junto a
la pauta modelo. El parámetro Jl restante no se incluye porque
se encuentra estrechamente ligado a la edad del «punto alto»:
).!, =x,+ (lt'A) ln(oo::A}
Dada la proximidad entre x, y ll.· t• preferimos incluir x,
en la gráfica, ya que es más sencilla su interpretación.
Los conglomerados se crearon mediante la distancia
euclidiana entre dos patrones particulares1' , donde se excluyó
al parámetro C, ya que estamos interesados únicamente en el
perfil y no en el nivel. El primer ensayo consistió en formar
cinco conglomerados con los 128 patrones de tasas de migra-
ción por edad 16 ; los perfiles correspondientes a los centros
(promedio aritmético de los parámetros dentro de cada con-
glomerado) se muestran en el panel «A» de la gráfica 2.17\7.
1l
De los 1,984flujosinterestatalcs, en 57 (25 masculinosy32femeninos)
no hay migranles en cuatro grupos de edad, y en Olros 35 (13 mascu-
linos y 22 femeninos) en cinco o más intervalos etáreos.
Para el patrón de la gráfica 2.16 Xa ~30 y ~-~:.~31, cm lo cual se con-
funden las dos edades si se inlenta ilustrarlas •imuháneamente.
15
La distancia euclidiana entre dos patrones. se calcula como la raíz
cuadrada de la suma de los cuadrados de las diferencias enlre sus
respectivos parámetros.
16
Uno de inmigración y uno de emigración global para cada se:\o y
INEGI. Migración interna. 1994
entidad federativa por separado.
17
Debido a que estamos interesados sólo en la fonna de las curvu y no
en su nivel, todas se reescalan de tal modo que la superficie por debajo
de cualquiera de ellas sea unitaria, o igual a cien para fmcs de los
páneles A, B, y D de la gráfica 2.17.
33
 GRAFICA 2.13
ESTRUCTURA POR EDAD EN 1990 DE LA POBLACION RESIDENTE
EN 1985 Y EN 1990 EN EL DISTRITO FEDERAL Y EN QUINTANA ROO.

Edad Distrit.o Federal

65 o más 1 1
60~ 1 1
55-59 1 1
50-54 Hombres
• • Mujeres

---
45-49 1 1
40-44
• •
~
35-39
30-34
25-29

• •
¡; --
20-24
15-19 1
10-14
5-9
0-4
1 1 1 1
600 400 200 o 200 400 600

Miles de personas

-1985 c=::Jt990

Edad Quinlana Roo

65 o más 1 11

60~ 1-1
55-59 Hombres 1 IJ Mujeres
50-54 1 1
45-49
40-44
D 1
1 1

35-39 1 1

30-34 1 1

25-29 1 1
20-24 1 1

15-19 1 1
10-14 1 1

5-9 1 1

0-4 1 1
1 1 1 1 1 1 1
40 30 20 10 o 10 20 30 40

Miles de persooas

-1985 c=::Jt990
INEGI. Migración interna. 1994

FUENTE: INEGI, Xl Censo General de Población y Vivienda, 1990. Migración. Tabulados temálicos. Cuadros 2 y 3.

34
 GRAFICA 2.14
MEXICO: TASAS DE MIGRACION INTERNA NACIONAL POR EDAD Y SEXO, 1965-1990.

Tasa ( por mil) J!omh~<'s

40

1965-70 ----- 1975-80 19~5-90 1

o ~--;----r--;----r---r---r---+---+---+---+~~--~--~~--~--~--~--+---~

o 5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 (,() 115 70 75 80 85 90
Edad

Tasa(pormil) Mujeres
40

35 --+---+-----1 •••·••n•••••••••••••• 1965-70 ------ 1975•80 - - - - - - - 1985-90 lf----+--~~---t----t---------1

r---.---.---~--~--.----.---.---r---.---,--~

30 '
~-r.--r---+--~---+---+---+-----t--~f-~f---t-~----+---+---+---4---4---~---4

o-r---r---+---+--~---+---+-----t----t---t---+---t---+---+---+---~--;---~---4

o S 10 15 20 25 30 35 40 45 so 55 60 65 70 75 80 85 90
INEGI. Migración interna. 1994

Edad

FUENTES: Derivada de Partida (1993: cuadro B:4) e INEGI, XI Cenro General de Población y Vivienda, 1990. Migración.
Tabulados temáticos. Cuadros 2 y 3.

35
 GRAFICA 2.15
COLIMA: TASAS DE EMIGRACION GLOBAL INTERNA POR EDAD Y SEXO, 1985 - 1990.

Tal&l { por mil )

3S
\
30 1
i
\
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20
~

lS \ Mujcres ......._..
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_,__,
....,

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Hoo pros

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-........ 1---r--
S
········- ••+a••••••••• ~·

o
o S 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70 75 80 SS 90
Edad

FUENTE: INEGI, XI Censo General de Población y Vivienda, 1990. Migración. Tabuladas lcmáticos. Cuadras 2 y 3.

GRAFICA 2.16
PARAMETROS DISTINTIVOS DEL PADRON MODELO PROPUESTO POR ROGERS Y
CASTRO PARA LA MIGRACION INTERNA

Tasa { por mil )

16

14

12

0<1
10 / ........... ·-..,~~ /0<2
8 /./' ·····,·........,
6 ... '\· •..
··...................
4
...~......

. . _____\"::: e:/- -· -· - -- -·-·· -··-·-·-··- ·-·-·- ··-··· ----=~::·::::::.e_,_"""''":::.::::::::::_:-~·--

2
e
o
INEGI. Migración interna. 1994

X X
b a Edad

FUENTE: Rogers y Castro ( 1981a ): 6.

36
 GRAFICA 2.17
MEXICO: CENTROS DE LOS CONGLOMERADOS PARA FORMAR LOS
PATRONES TIPO POR DE EDAD DE LA MIGRACION INTERNA, 1985al990.

A. C.ntroa de loa conglomerados

con patrones completos B. C.nlroa de loa conglomerado•
con componente del trabajo
PorctHtts;.
3~.----------------------------,,------,
,_,.
-GAp~ 1 -Gvpo 1
4
3.0 • (inpJ2 • Chpa2
-GAp~ 3 -G'tpoll
2.8
.. Grupo 4 3 *Chpa4
2.0 -Grupos -·Gtpo5

1.8 z

1.0

o 1 10 11 20 21 :MI 31 40 4& 50 H eo • 70 n eo 111 110 o 11 10 111 20 211 :MI 311 40 411 liO lili 110 • 70 '1'11 10 • 110
E- E-

•11•
atado·-
C. Grado de Himetría con reapeclo

4-.------------------------------------,
D. CW!tros de loa conglometlldo• deflniUvoa
,_,.
6-0-r--------------------------r-----,

• 4.6 :.~:
:-ifNfi(l
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0.0 +-i--;--t-..;---r--r--;...--.;..--.;..-;.-;.--;.--;.--;---;---;r----ir----J
0~-----,------,------.------~----~
D 6 10 15 20 26 30 36 40 46 60 lili 60 flll 70 7& 80 85 110
10 16 20 30 35
(¡,-
INEGI. Migración interna. 1994

FUE~TF.: Estimaciones propias.

37
 Claramente se observa que la ubicación del «pico laboral» es
rasgo distintivo entre las cinco pautas promedio, y no tanto el
riuno de descenso de la componente infantil'". Dada esta
particularidad de la migración interna en México, redujimos
el número de parámetros a los tres que caracterizan la compo-
nente del trabajo (<>< 2 , A.2 y ~ ).
Nuevamente ensayamos con cinco conglomerados y,
como se puede ver en el panel «B;, de la gráfica 2.17, de
acuerdo con la ubicación de la edad modal, parece razonable
colapsar cuatro de ellos en sólo dos (el 1 con el4 y el2 con el
3). Antes de formar esos tres grupos ya identificados, debemos
atacar el problema con una visión más amplia, pues estamos
restringiendo el análisis sólo a la posición de la función doble
exponencial y dejando fuera su otro rasgo característico que es
el grado de asimetría de la «Campana». Como medida del nivel
de asimetría tomamos el cociente A/<>< 2 , y el comportamiento
que guarda con respecto al parámetro de posición ~ se re-
produce en el panel «C>> de la gráfica 2.17.
La alta correlación entre los parámetros de ubicación y de
asimetría nos permite formar los conglomerados tan sólo bajo
la óptica de la ubicación de la función doble exponencial. Los
perfiles promedio resultantes para los tres conglomerados se
ilustran en el panel «D» de la gráfica 2.17, y debido a que se
usó el criterio de la colocación de la «edad alta» Xa (20, 23 y
28 años, respectivamente), a esos patrones «tipo» los llama-
mos joven. medio y viejol 9. En los mapas 2.2 y 2.3, se muestra
la distribución territorial de los perfiles de acuerdo a esa
clasificación, para los inmigrantes y emigrantes, respectiva-
mente. En el cuadro 2.10, de manera sucinta, se indica el
número de patrones que pertenecen a cada categoría.
El agrupamiento en sólo tres conglomerados parece ade-
cuado, como se puede ver en la distribución relativamente
equitativa de la última columna del cuadro 2.1 O. No obstante,
destaca un agudo contraste entre las pautas de llegada y de
salida, pues mientras en las primeras la distribución se orienta
hacia el perfil <<viejo», de manera más pronunciada entre los
hombres, en la emigración resalta la discrepancia entre los
géneros: una alta concentración ma~culina hacia el <<medio»
versus la polarización femenina hacia el patrón «joven». Se
podrá pensar que, la distribución diametralmente opuesta entre
los perfiles inmigratorios y los emigratorios, es reflejo de una
inadecuada formación de los conglomerados. Esto, sin embar-
go, no es necesariamente cierto, pues la estructura por edad de
los inmigrantes hacia una entidad federativa. se forma de la
particular combinación de los flujos que provienen de las 31
entidades federativas restantes, y no es obligatorio que todas
las corrientes emigratoria~ interestatales de una determinada
entidad caigan dentro del mismo grupo de perfil tipo.
INEGI. Migración interna. 1994
JI
Los valores del parámetro 1 fueron 0.2804, 0.3014, 0.3013, 0.3367 y
0.3237 para los cinro conglomerados, respectivamente.
Las edades del "pwllo bajo" son 8, 8 y 11 años respectivamente.
38
Como ejemplo de lo anterior tenemos el caso de la inmigra-
ción masculina hacia Veracruz, cuyo patrón global se ubica
dentro de la pauta «Vieja». Desde el ángulo de la emigración
originada en cada una de las 31 entidades federativas restan-
tes, sólo en una (Nuevo León) el patrón es «joven», en 14 es
«medio» y en 16 «viejo»; más aún, apenasel1.3 por ciento de
la inmigración masculina global de Veracruz (96,697) corres-
ponde a un perfil «joven», pero hasta 54.3 a uno «medio» y el
44.4 por ciento restante a uno <<viejo». Si dividimos al país en
sólo dos regiones -Veracruz y el resto de la nación-, la pauta
emigratoria global de esa segunda hacia la primera pertenece
al conglomerado <<viejo»:w, al igual que la inmigratoria hacia
Veracruz. A continuación se muestra la clasificación de las 31
entidades federativas según su patrón emigratorio global y el
que se dirige hacia Veracruz:
Emigración hacia Emigración global de la entidad
Veracruz Joven Medio Viejo Total
Joven o o
Medio 7 7 o 14
Viejo 2 10 4 16
Total 9 17 5 31
Se podrá observar que sólo en once estados el perfil tipo
de la emigración global coincide con el del flujo hacia Vera-
cruz21, y en dos (Guerrero y Sinaloa) brinca de «joven» hasta
«viejo>>. Este singular comportanliento de la inmigración en
Vera cruz ejemplifica claramente cómo la repartición entre los
tres conglomerados no necesariamente debe ser la misma en
los perfiles inmigratorios que en los emigratorios.
En los mapas 2.2 y 2.3, se puede ver que únicamente en
nueve estados los perfiles inmigratorios y los emigratorios
caen dentro de la misma categoría en cada sexo (Campeche,
Chihuahua, Estado de México, Puebla, Tabasco y Tamaulipas
en ambos; Baja California Sur, Coahuila y Jalisco sólo en
hombres; Colima, Oaxaca y Querétaro sólo en mujeres). No
obstante el escaso monto de pauta.~ «jóvenes» en las tasas de
inmigración en el mapa 2.2, llama la atención la marcada
contigüidad geográfica en los perfiles <<medio» y «viejo>> en
ambos sexos, sobre todo la gran extensión territorial del
segundo en hombres, que abarca a todos los estados de ese
conglomerado excepto Yucatán.
Aunque las distancias euclidianas hacia los centros "joven" y "viejo" se
encuentran muy pró>.imas: 1.555 y 1.175, respectivamente.
21
Campeche, Coahuila, Chihuahua, Durango, Morelos, PueblayTamau-
lipas con "medio"; Baja California, Colima, Distrito Federa! y Estado
de México con "viejo".
 Bajo la óptica de la emigración el panorama es distinto,
como se puede ver en el mapa 2.3: mientras el excesivo
número de patrones jóvenes femeninos apenas deja lugar a
incipientes contigüidades geográficas para la pauta <<media»,
entre los varones nuevamente se aprecian dos amplias exten-
siones territoriales continuas de patrones_ jóvenes y medios.
En los dos siguientes capítulos haremos referencia a
aquellos perfiles, según ciertas características sociode-
mográficas y económicas de los migrantes, que se encuen-
tren estrechamente relacionados con las pautas globales
migratorias detectadas aquí.

MEXICO: CLASIFICACION DE LOS PATRONES DE LAS TASAS DE MIGRACION

POR EDAD SEGUN ENTIDAD FEDERATIVA Y SEXO, 1985-1990. CUADR02.IO
Inmigración Emigración
Pa1rón Hcmbres Mujeres Subtotal Hombres Mujeres Subtotal Total
Joven 3 8 11 10 20 30 41
Medio 12 11 23 17 11 28 51
Viejo 17 13 30 5 1 6 36
Total 32 32 64 32 32 64 128
FUENTE: Esumac1ones propias.

INEGI. Migración interna. 1994

39
 MAPA2.2.
MEXICO: CLASIFICACION DE LOS PATRONES DE LAS TASAS DE INMIGRACION POR
EDAD SEGUN ENTIDAD FEDERATIVA Y SEXO, 1985 • 1990.

Hombres

CJ Patrónjoven

¡:;:;:;:;:;j Patrón medio

~ Patrón viejo

Mujeres

CJ Patrón joven

f;:;:;:;:;:j Potrón medio

~ Potrón viejo
INEGI. Migración interna. 1994

FUENTE: Estimaciones propiu.

40
 MAPA2.3.
MEXICO: CLASIFICACION DE LOS PATRONES DE LAS TASAS DE EMIGRACION POR
EDAD SEGUN ENTIDAD FEDERATIVA Y SEXO, 1985- 1990.

Hombres

CJ Palrón joven

1:::::::::::1 Patrón medio

~ l'atrón viejo

Mujeres

CJ Patrón joven

1:::::::::::1 Patrón medio

~ Patrón viejo
INEGI. Migración interna. 1994

FUENTE: Esti!Mciones propias.

41
 CAPITULO J.
ASPECTOS SOCIODEMOGRAFICOS DE LA MIGRACION INTERNA
Los determinantes próximos de la movilidad territorial han
motivado numerosas investigaciones desde hace ya más de un
siglo, cuando Ravenstein ( 1885) postuló sus famosas leyes de
la migración. Al analizar las principales razones para cambiar
el domicilio en la República Checa de 1967 a 19731, Rogers
y Caslro (1981 b: 127) encontraron que la importancia relativa
de los determinantes varía de acuerdo a la distancia física del
desplazamiento: rnienlras el mejoramiento de la vivienda
diminuye su importancia conforme aumenta el recorrido
-aunque manúene su primacía en todos los casos-, el cambio
de empleo aumenta y el matrimonio, que también disminuye,
supera a la movilidad laboral cuando el desplazamiento es a
cona distancia. Otras causas para migrar mencionadas fueron:
acercarse al lugar de trabajo, mejora en la salud. divorcio y
educación, con aproximadamente 8, 5, 3 y menos de uno por
ciento, respectivamente.
En México, no existe una encuesta que permita conocer
las razones para migrar y que abarque íntegro al territorio
nacional, y sería ingenuo pensar que se puedieran ex !raer del
Censo de Población y Vivienda de 1990. No obstante, aunque
el Censo no permite conocer los motivos para migrar, sí
posibilita la exploración de las relaciones que se pueden dar
entre la movilidad territorial y las demás variables personales
recabadas en el cuesúonario. El cambio de empleo, quizás la
razón de mayor peso para migrar, como expresión de una
búsqueda de mayores ingresos monetarios para la
sobrevivencia, es el objetivo del siguiente capítulo de esta
Monografía en éste, nos avocamos al análisis de la relación
que guarda la migración con el estado civil, el nivel de
instrucción, la cuantía de la progenie y su mortalidad acumu-
lada hasta el momento del Censo.
Arriba mencionamos que el malrimonio es un motivo
importante para la movilidad territorial en la República Checa.
No obstante, no podemos concluir si también en México loes,
pues tan sólo sabemos que la persona estaba unida en 1990 y
que migró interestatalmente durante el quinquenio previo al
Censo; pero desconocemos si se econtraba unida o desunida
cuando efectuó el desplazamiento. Tampoco sabemos si el
individuo migró en búsquedadelaeducación formal que en su
lugar de origen no puede obtener, pues no disponemos de una
tabulación especial de migración y asistencia escolar; y aun-
que la tuviéramos, no podríamos afirmar que el migrame que
asiste a la escuela al momento del Censo se desplazó por
motivos educativos, pues pudiendo haber sido otra la causa
INEGI. Migración interna. 1994
del movimiento, encontró posteriormente la forma de enrolarse
en el sistema educativo.
ChecoslovaGuia se fonna de las Repúblicas Checa y Slovaca
Si bien no podemos exuaer determinantes próximos de la
movilidad territorial a partir de la informacíón censal, sí
podemos aproximarnos a los niveles de la migración según el
estado civil, el nivel de instrucción, el tamaño de la descen-
dencia y la intensidad en la mortalidad de la progenie. Sin
embargo, estamos conscientes -esperamos que también lo
esté el eventual lector-, que todas las tasas de migración
mostradas a lo largo de este capítulo se refieren exclusivamen-
te a la situación defacto de la persona al momento del Censo,
al final del lustro donde ocurrió la migración2, y que no ne-
cesariamente era su situación cuando efectúo el movimiento
territorial.
Cabe recordar que los cambios de estado civil no son tan
frecuentes como para invalidar totalmente nuestras tasas; de
la misma manera que después de los 25 ó 30 años de edad,
difícilmente una persona se enrola en el sistema educativo e
incrementa su nivel de instrucción. En el caso de la fecundidad
y la mortalidad los cambios son más frecuentes y no es
despreciable la posibilidad que sus niveles hayan aumentado
después de haber migrado. Debido a este peculiar compona-
miento de la reproducción humana y del mayor riesgo de
fallecer que tienen los hijos más pequeños, es que apenas
explorarnos la intensidad de la migración asociada a ambas
variables demográficas en las dos últimas secciones, y nos
restringimos al análisis de los diferenciales entre migran tes y
no migrantes.
3.1 Migración y estado civil
De acuerdo a la pregunta utilizada en el cuestionario censal,
las personas se pueden clasificar en ocho caJ.r,gorías según su
estado civil: cuatro para las unidas (en unión libre y casadas
sólo por el civil, sólo religiosamente y por el civil y
religiosamente), y las restantes cuatro para las no unidas
(solteras, separadas, divorciadas y viudas 3). Cabe preguntarse
si es conveniente mantener intacta esa clasificación, o bien,
juntar algunos de esos grupos para reducir el número de
categorías y de esa manera si mplificarel análisis de la relación
entre el estado civil y la migración. Nuestra propuesta consiste
en condensar, por un lado, la unión libre y los tres tipos de
matrimonio en un solo grupo de unidos; y por airo, los
O de un periodo igual a la de laedaddelamujerbajoelcriteriodell~tgar
de nLJcimienlo, cuando se analiza la fecundidad y la mortalidad de los
hijos en las dos últimas secciones:.
El rubro no especificado se asignó de manera proporcional, aplicando
la distribución de quienes si declararon su etado civil (véase el Anexo
Metodológico),
43
separados, divorciados y viudos en 11110 de desunidos. La
confiabilidad de esta reclasificación, en términos de la exis-
tencia de cierta homogeneidad en la conducta migratoria
..
1 f• .f 1

D=IOO x-··-
intragrupal, lo probaremos a través de la propensión a migrar. 12
--=----
!
-

En la gráfica 3.1, se presentan las tasas de migración f'.

interna por edad para todo el país durante el periodo 1985· x:o:l2

1990,segúnelúpodeuniónen 1990.Enambossexossepuede
observar claramente que, salvo los casados sólo religiosamente,
las tasas para los tres restantes tipos de unión consensual están Las desviaciones porcentuales son:
relativamente cercanas. Entre los desunidos el distanciamiento
Esllido civil Hombreo Mujcreo
es mayor, como se puede ver en la gráfica 3.2; las tasas para
el total se aproximan más a las de separados. Casados oólo civil 7.47 8.38
Casados sólo religiosamente 22.06 9.51
Nivelemos los patrones por edad, es decir, proporcione· Casados civil y religiosamente 5.72 7.81
mos las tasas de tal manera que sumen la unidad, para evitar Unión libre 14.08 14.83
las diferencias en la intensidad de la migración, y tomemos Separados 8.08 6.24
como «medida de la homogeneidad» la desviación media Divorciado• 7.85 10.01
absoluta proporcional de cada una de las categorías originales Viudos 16.02 9.87
(i) con respecto al patrón global (g):

MEXICO: NO MIGRANTES DE 12 AÑOS O MAS DE EDAD SEGUN GRANDES GRUPOS

DE ESTADO CIVIL EN 1990 Y ENTIDAD FEDERATIVA DE RESIDENCIA EN 1985 Y 1990. CUADR03.1

l!ombres Muj=•

Enudod federativa Total Solteros Unidos Desunidos Total Solteru Unidas Desunida•

Repúbüca Me~ícana 25611703 11201552 13745732 662419 27303983 10423731 14525948 2354304
Aguascalientes 212972 96789 111905 4278 233603 100285 117560 15758
Baja California 481111 208721 259043 13347 493198 182049 266731 44418
Baja Califomia Sur 99386 44440 52550 2396 97035 36168 53732 7135
Campeche 164577 66328 93300 4949 164599 55680 96699 12220
Coahuila 657393 281390 356883 19120 679758 253271 370035 56452
Colima 131949 59948 68340 3661 138001 54652 71747 11602
Chiapas 989526 406355 557314 25857 1003921 337618 584025 82278
Chihuahua 793886 335342 434650 23894 825084 299551 450469 75064
Distrito Federal 2797887 1252674 1458103 87110 3137739 1250073 1516953 370713
Durango 425199 189313 223519 12367 451197 172731 239372 39094
Guanajuato 1201333 535038 641890 24405 1340658 561547 699215 79896
Guerrero 794980 333037 441328 20615 860221 297139 482676 80406
Hidalgo 585546 253534 315624 16388 616476 219216 338495 58765
Jali<eo 1631103 740235 851624 39244 1823001 771804 912419 138778
Estado de Mé>uco 2995814 1323IT79 1512135 60600 3148413 1217665 1684506 246242
Michoacán 1067927 466133 578449 23345 1190381 478258 631939 80184
.\lorelos 365717 158844 197109 9764 39'i37! 146036 211260 38075
Nayarit 2'i9950 !15985 136395 7570 268616 101362 144099 23155
;o..;uevo León 1062181 472406 564639 25136 1089730 423733 584310 81687
Oaxaca 921208 381856 513176 26!76 996313 346652 5553!5 94346
Puebla 1266402 547819 686187 32396 !379738 517803 734463 127472
Querétaro 308440 139451 162744 6245 326982 134012 170363 22h07
Quintana Roo 125276 49496 72897 2883 117715 38359 72286 7070
San Lu1s Polosí 624038 274412 332667 16959 657888 252704 354967 50217
Sinaloa 723441 332549 372816 18076 736301 280293 394685 61323
Sooora 612013 277385 317122 17506 617399 235188 330117 52094
Tabasco 471521 202251 258188 11082 477400 170272 270519 36609
Tamaulipas 7378IT7 321426 395237 21144 770919 287980 411420 71519
Tiaxcala 236427 102919 127842 5666 248639 94886 133778 19975
X79868 2123148 1151252 206525
INEGI. Migración interna. 1994

Vcracru:r. 2028074 1091537 56669 765371

Yucatán 448079 !80432 253401 14246 467631 166066 265922 35643
7...acalecas 390540 174097 207118 9325 426908 1753({7 224619 26982

FUENTE: 11'\óEGI. XI Censo General de PoblacJón y Vivienda. 1990. Migración. Tabulados lemáticm. Cuadro inédito.

44
 GRAFICA 3.1
MEXICO: TASAS DE MIGRACION INTI:<:RNA POR EDAD Y SEXO SEGUN EL
TIPO DE UNION CONSENSUAL,1985·1990.

Hombres

Tasa (por miQ

-Civil
- - RelifJiOSo
15
• Am(Jos ·
• :Unión libre
10
-:Unidos·
:' .....
'·,,
. '
... ~ . . .
: .....
. ·.· ... : ..
:........ --:. .;..·...:_ ·.·. .. .. .. : ...... .
5
"":' ... -
~ -
- -:- - - - - -

10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70 75 80 85 90
Edad

Mujeres

Tasa (por miQ

25,-------------------------------~--------~

-Civil
20 .~-~ !?eliéoso
• Ambos •
• :Unión libre
15
-Unidas

10

5 . . . . . . 11 • .: ........ .

-----:----
0-r~----~--T--r--r-,~--T--.--T--r~r-"~~
1 o 15 20 25 30 35 40 45 so 55 60 65 70 75 80 85 90
INEGI. Migración interna. 1994

Edad

FUENTE: Estimaciones propias.

45
 GRAFICA 3.2
MEXICO: TASAS DE MIGRACION INTERNA POR EDAD
Y SEXO SEGUN EL TIPO DE DESUNION, 1985-1990.

Tasa (por milj Hombres

18-r------------------------------------~------------~

--.:.... - Separados
...
16 . , ..... - ..........
~·.e Dív6Í:tiád6f;"
•/ ' ' · · · · · · · · ·
1
1'
' '·,,
14 l ..
'- '\_ . ...
~ " . . . . .. . . . .. • Viudos
- Desunidos
12
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1 o 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70 75 80 85 90
Edad
Tasa (por milj MuJeres

16 ... ·:-. ")' :--- --- ............ - ..... . ... : ... .. ~Separadas
/ ',
i( '~ ·- - Divorciadas
,. .'
-'" ·......
14
' ,., '
~ ... .
·. ·•· Wudiis · · · · · ·
. ' '

12 .. : . . \. ' - Desunidas
'\
. '
'
10 ..... '· ~-.

6
~-
INEGI. Migración interna. 1994

1 o 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70 75 80 85 90
Edad
FUENTE: Estimaciones propias.

46
 Se puede ver que estos porcentajes son relativamente
bajos, salvo en los hombres casados sólo religiosamente y en
los viudos, y en menor grado en la unión libre en ambos sexos.
Al respecto podemos anotar que los hombres casados sólo
religiosamente representan apenas el 2.2 por ciento de los
mayores de 12 años, o bien, el 4.1 del total de unidos; los
viudos, en cambio, mientras son sóloell.S por cientodelLotal,
abarcan hasta el 60.5 de los desunidos. Creemos razonable-
mente correcto suponer que hay un alto grado de homogenidad
ante la migración dentro de los unidos y de los desunidos, y
entonces podemos concluir que esta reclasificación no debe
sesgar nuestras apreciaciones de la relación que existe entre el
estado civil y Jos desplazamientos territoriales. En la gráfica
3.4, se aprecia una clara heterogeneidad entre estos dos grupos
y de ambos con respecto a los solteros.
En el cuadro 3.1, se muestra el número de personas que
vivían en la misma entidad federativa en 1985 y en 1990,
según su estado e ivi1 al final del quinquenio; y en los cuadros
3.2 y 3.3 los inmigrantes y los emigrantes internos, respecti-
vamente. A simple vista se pueden ver algunas discrepancias
en la distribución por estado civil: los unidos, que son
mayoría tanto en los no migran tes como en los migrantes en
casi todas las entidades federativas, pasan a segundo término
detrás de los solteros en los inmigrantes de ambos sexos hacia
el Distrito Federal y hacia Nuevo León, en los emigrantes de
ambos sexos de Hidalgo y Oa.x.aca y en los egresos sólo
masculinos de Chiapas y Veracruz. Llama incluso la atención
que el21 por ciento del ex. ceso de unidos sobre solteros en las
mujeres no migrantes del Distrito Federal y el 20 en los
hombres de Nuevo León, se invierte y aumenta a casi 30 por
ciento en sus inmigrantes.
El hecho que los unidos sean una mayoría entre los
migrantes no necesariamente implica que su propensión a
migrar sea mayor que para las dos restantes categorías del
estado civil que estamos considerando, pues también entre la
población ex. puesta al riesgo la mayoría se encuentran unidos.

MEXICO: INMIGRANTES DE I2 AÑOS O MAS DE EDAD SEGUN GRANDES GRUPOS

DE ESTADO CIVIL EN 1990 Y ENTIDAD FEDERATIVA DE RESIDENCIA EN 1990,
RESIDENTES EN EL PAIS EN 1985. CUADR03.2
Hombres Mujeres

Entidad federativa Tola! Solteros Unidos DesWlidos Tola! Solteras Unidas Desunidu

República Mexicana 1382544 594477 759168 28899 1463426 544086 818145 101195
Agu.ascalientes 16967 6985 9651 331 18615 7149 10321 1145
Baja California 94542 45967 46982 !593 88619 32058 50836 5725
Baja California Sur 12874 5783 6823 268 11380 3830 6886 664
Campeche 14039 5366 8328 345 13217 3967 8482 768
Coahuib 28281 11691 15893 697 28589 9945 16700 1944
Colima 12825 5287 7260 278 12165 3971 14ff1 7'ál
Cbiapas 16857 6370 10103 3S4 16608 5217 10190 1201
Cbihuahua 51251 24151 26174 926 46641 17471 26299 2871
Distrito Federal 111385 56977 51468 2940 152948 79947 61738 11263
Durango 15985 6092 9524 369 16470 5151 10211 1108
Guanajuato 37383 14540 22041 802 40731 14615 23646 2470
Guerrero 18010 6655 10980 375 18721 5907 ttS64 1250
Hidalgo 24002 9014 14462 526 2S492 8917 17563 2012
Jalisco 72240 33183 37626 1431 75206 31054 39149 5003
Estado de México 306540 117835 182522 6183 332297 109764 196858 25675
Michoacán 40823 16744 23293 786 42705 15329 24892 2484
More los 35010 13321 20835 854 38681 12757 22629 3295
Nayarit 14976 5923 8694 359 13223 3975 8415 833
Nuevo León 48876 27051 20915 910 49475 23462 23035 2978
Oauca 28638 11076 16940 622 29243 9595 11634 2014
Puebla 47852 21738 25138 976 54478 21187 29625 3666
Qucrélaro 26329 11022 14859 448 29483 11562 15951 1970
QuínWta Roo 42258 19200 22322 736 36156 11730 22339 2087
San Luis Potosí 24484 9S45 14088 551 27223 998.5 15407 1831
Sinaloa 34416 15595 18150 671 31120 10241 18991 1888
Sonora 32274 14873 16752 649 27518 9482 16349 1687
Tabasco 19598 7706 11516 376 19974 6910 tl789 1275
Tamaulipas 46775 21421 24349 1005 50087 20556 26386 314.5
INEGI. Migración interna. 1994

Tiaxcala 13327 4967 8!Y76 2S4 14967 4755 9301 911

Veracruz 64288 25643 37084 1561 67980 22437 40435 5108
Yucatán 15414 6474 8569 371 16081 6004 8731 1346
Zacatecas 14025 5982 7751 292 14333 5156 8386 791

FUENTE: INEGI. XI Censo Gc:neral de Población y Vivienda, 1990. Migración. Tabulados temáticos. Cuadro inédito.

47
MEXICO: EMIGRANTES DE 12 AÑOS O MAS DE EDAD SEGUN GRANDES GRlii'OS
DE ESTADO CIVIL EN 1990 Y ENTIDAD FI-:DERATIVA DE RESIDENCIA EN l9K5. CUADRO 3.3

Hombres .\rfUJCfl:S

Entidad federativa Total Solteros U rudos Dcsun,dos Total S oh eras U rudas Dcsunu.ias

República Mexicana 1382544 594477 759168 28S\l\l 146J42ó 544081) 818145 101195
Aguascalientes 6801 2908 3762 131 733) 2480 4389 462
Baja California 16604 6979 9036 589 156:11 5440 8997 11'14
Baja California Sur 4838 2106 2ó(J<l 123 4.~W 1707 2590 283
Campeche 10254 4502 5515 237 n\l4 1472 5776 h46
Coahuila 33800 15057 18041 702 33042 111>29 19451 l%2
Colima 7122 2932 4(144 146 74ü8 251X 4452 4]8
Chiapas 29703 14670 14465 568 28727 11376 !5665 16Sb
Chihuahua 16637 7180 8980 477 16387 5328 9842 1217
Distrilo Federal 403369 145911 248934 8524 422730 135264 252984 34482
Durango 33837 15993 17140 704 34523 13073 19252 2198
Guanajualo 37815 18317 18762 736 40\180 15674 22n2 2324
Guerrero 48679 23137 :!4625 917 5fJ651 1\1568 27792 3291
Hidalgo 33475 16847 15945 683 41370 20753 lli066 2551
Jalisco 53020 22353 29395 1272 -~gl18 19757 34324 4037
Estado de México !fl2529 40764 59606 2159 115224 4444() 62448 8336
Mkhoacán 46487 210\l6 24394 997 53630 zmo> 30105 3522
Morelos 15479 7125 7972 382 172X3 6563 9435 1285
Nayarit 15352 7498 7578 27ó 1712"1 7037 9147 ~43
Nuevo León 27474 10847 159Xü M7 26977 X\l~4 16382 1671
Oaxaca 55773 28763 26011 999 62172 29125 28993 4054
Puebla 55416 25841 28505 1070 62385 27368 30932 4085
Querélaro 11304 4726 6274 304 12773 5036 6921 816
Quintana Roo 7817 3103 4504 210 nJI 2447 4292 492
San Luis Po10sí 30519 14836 15023 660 35493 15818 17591 2084
Sinaloa 44276 20722 22787 767 43753 16491 24689 2573
Sonora 22652 10263 11874 515 21591 7464 12832 1295
Tabasoo 22905 10092 12322 491 21505 7237 12950 1318
Tamaulipas 31528 14536 16264 728 31631 12224 17320 2087
llaxcala 9886 4458 5241 187 112.~ 1 4661 5864 726
Veracruz 99606 49266 48558 1782 102072 42549 53066 6457
Yuca1án 20708 9226 11 ](16 J7ó 19709 6627 12026 1056
Zacatecas 26879 12423 13916 540 30247 12033 16590 1624

FUENTE: INEGL XI Censo General de Población y Vivienda, 1990. MJgraCJón. Tabulados tcmálJCUs. Cuadro inédito.

A manera de ilustración de esta asevernción tomemos el
caso de los hombres solteros de Campeche. Si a los 66,328
individuos que no migraron durnnte el lustro (cuadro 3.1), le
agregamos los 4,502 que emigraron (cuadro 3.3), el tolal de
solteros en Campeche en 1985 asciende a 70,830'. La "pro-
babilidad" de emigrar de un soltero en Campeche fue entonces
de 4502/70830=0.0636 ó 6.36 por ciento. Las probabilidades
reslantes fueron 5.58 por ciento para los unidos, 4.57 para los
desunidos y 5.87 para el total. Se puede ver claramente que,
aunque Jos unidos (5,515) son la mayoría entre los emigrantes
masculinos de Campeche, la intensidad de su emigración se
sitúa por debajo de los solteros.
En el cuadro 3.4, se muestran los migrantes netos según
el estado civil. Uno de los rasgos más sobresalientes es que en
ca~i todas las entidades federativas la ganancia o la pérdida
por motivo de la movilidad espacial prevalece en las tres
categorías de estado civil; las contadas excepciones son
Guanajuatoen ambos sexos, Nayariten hombres y Yucatánen
mujeres. Particularmente interesan les son los casos de ambos
sexos en Guanajuato y de hombres en Nayarit, donde la fuerte
pérdida en los solteros no sólo contra restó la ganancia de las
otras dos categorías, sino que hasla propició un déficit global.
En la gráfica 3.3, contrastamos la distribución según el
estado civil de los no migrantes (barras a la izquierda) y los
migrantcs (barras a la derecha) por edad y sexo a nivel
nacional. Es interesante que la brecha en la proprorción de
dcsunido(a)s se ensancha conforme aumenla la edad, y que
entre las mujeres mayores de 65 años representa más de la
mitad, debido fundamentalmente a las viudas, que represen-
tan el 91 por ciento de las migrantcs desunidas y el49.7 por
INEGI. Migración interna. 1994

ciento del total de migran tes en ese intervalo etáreo. En el caso

Realmente la cifra debióhabersidomayor,pues por un lado, algunos se
unieron consensualmente duranle el quinquenio, y por otro, algunos de los soltero(a)s, la brecha en favor de los no migrantes se
e.rniglllrort al exterior. reduce hasta in venirse a partir de los 55 años en hombres y de

48
 MEXICO: MIGRANTES NETOS DE 12 AÑOS O MAS DE EDAD SEGUN GRANDES GRUPOS
DE ESTADO CIVIL EN 1990 Y ENTIDAD FEDERATIVA DE 1985-1990. CUADR03.4

Hombres Mujeres

Entidad fedCilltiva Tolal Solteros Unidos Desunidos To1al Solteras Unidas Deswlidas

Aguascalíentes 10166 4(J)7 5889 200 11284 4669 5932 683

Baja California 77938 38988 37946 1004 72988 26618 41839 4531
Baja California Sur 8036 3677 4214 145 6800 2123 4296 381
Campeche 3785 864 2813 108 3323 495 2706 122
Coahuila -5519 -3366 -2148 -5 -4453 -1684 -2751 -18
Colima 5703 2355 3216 132 4757 1453 2955 349
Chiapas -12846 -8300 -4362 -184 -12119 -6159 -5475 -485
Chihuahua 34614 16971 17194 449 30254 12143 16457 1654
Di:itrito Federal -291984 -88934 -197466 -5584 -2697S2 -55317 -191246 -23219
Durango -17852 -9901 -7616 -335 -18053 -7922 -9041 -1090
Guanajuato -432 -3777 3279 66 -249 -1059 664 146
Guerrero -30669 -16482 -13645 -542 -31930 -13661 -16228 -2041
Hidalgo -9473 -7833 -1483 -157 -12878 -11836 -503 -539
Jalisco 19220 10830 8231 159 17088 11297 4825 966
Estado de México 204011 77071 122916 4024 217073 65324 134410 17339
Michoacán -5664 -4352 -1101 -211 -10925 -4674 -5213 -1038
More! os 19531 6196 12863 472 21398 6194 13194 2010
Nayarit -376 -1575 1116 83 -3904 -3062 -732 -110
Nuevo León 21402 16204 4935 263 22498 14538 6653 1307
Oaxaca -27135 -17687 -9(J) 1 -377 -32929 -19530 -11359 -2040
Puebla -7564 -4103 -3367 -94 -7907 -6181 -1307 -419
Querétaro 15025 6296 8585 144 16710 6526 9030 1154
Quintana Roo 34441 16097 17818 526 28925 9283 18047 1595
San Luís Potosí -6035 -4991 -935 -109 -8270 -5833 -2184 -253
Sinaloa -9860 -5127 -4637 -96 -12633 -6250 -5698 -685
Sonora 9622 4610 4878 134 5927 2018 3517 392
Tabasco -3307 -2386 -806 -115 -1531 -327 -1161 -43
Tamaulipas 15247 6885 8085 277 18456 8332 9066 1058
Tiaxcala 3441 509 2835 97 3716 94 3437 185
Vcracruz -35318 -23623 -11474 -221 -34092 -20112 -12631 -1349
Yucatán -5294 -2752 -2537 -5 -3628 -623 -3295 290
Zacatecas -12854 -6441 -6165 -248 -15914 -6877 -8204 -833

FUENTE: Deducido de los cuadros 3.2 y 3.3.

los 45 en las mujeres. 0Jro rasgo que vale la pena resaltar es
el marcado distanciamiento entre los sexos en la proporción
de los no unidos, donde a partir de los 35 años de edad las
fracciones femeninas(l5.7, 19.0, 23.9, 30.6, 37.1,46.8 y 64.2
en los grupos quinquenales del 35-39 al 60-64 y el abierto 65
o más. respectivamente) casi o más que duplican a las corres-
pondientes fracciones masculinas (8.8, 8.2, 9.1, 11.2, 13.1,
16.4, 28.0; respectivamente), e incluso casi la~ triplican entre
los SO y 65 años.
Esta sobrefeminidad en la proporción de no unidos entre
los migrantes se refleja claramente en las tasas de migración
por edad que, a nivel nacional, se presentan en la gráfica 3.4.
Mientras la intensidad en los solteros es prácticamente la
misma en ambos sexos a partir de los 35 años, en las desunidas
se aleja sensiblemente a partir de los 60 años, e incluso las
tasas a partir de los 85 años exctxlen en más de la tercera parte
a las masculinas.
INEGI. Migración interna. 1994
se aprecia un claro envejecimiento en la edad modal (de 20 a
25 a 31 años), acorde con la sucesión temporal de los estados
soltero, unido y desunido en el ciclo de vida, en lasmujcresesa
tendencia no ocurre en progresión estricta, pues la edad modal
de las unidas (16 años) antecede a la de las solteras (18),
aunque la de desunidas (26) sí se ubica notoriamente por
encima de ambas_ Segundo, se observa una gran proximidad
en el patrón de unidos con la pauta total en los varones (edad
modal de 24 años), mientras entre las mujeres ninguno de los
tres perfiles por estado civil se acerca al palrón global feme-
nino (edad modal de 22 años), aunquereescalemos el nivel del
fenómeno'.
La proximidad en hombres se puede ver también en la alla similitud en
dos parámetros característicos de la "canponente del trabajo" en a
ecuación(2.1 }: 0.0686 en el tolaly 0.722enlosunidosparaoooz;y0.1179
y 0.1085 respectivamente para ).,.En cambio en las mujeres, si bien el

patrón de viudas (gráfica 3.2) tiene la misma edad modal de 22años que
el perfil global, los dos parámetros considerados son tan divergentes
Dos aspectos llaman la atención al comparar los palroncs corno 0.1001 en e1tota1 y0.0853en las viudaspanooo 1;y0.1313 y0.1593
por sexo en la gráfica 3.4. Primero, mienlras en los hombres para"-:,. respectivamente.

49
 GRAFICA3.3
MEXICO: DISTRIBUCION PORCENTUAL POR EDAD Y SEXO DE LOS NO MIGRANTES Y
LOS MIGRANTES INTERNOS SEGUN GRANDES GRUPOS DE ESTADO CIVIL, 1985-1990.

Hombres
120-r-------------------------------------------------,-

12-U 1:;..'151 20-24 2$·29 31i-J4 35..:19 40-'14 45-49 Ml-M 55-$9 00-Sol li5 oH

Edad
Jma SoJtetl)s D Unidos • Desunidos

Mujeres

1:'--1~ 15·-19 2••··24 2~~-:~s. :m~~'4 ;l~i~:P;; ·10-44 4f~-49 ~0-~4 ~5··~9 6tl·6•1 1}~, .. "'
INEGI. Migración interna. 1994

Edad
L.__ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ ---~~llera~ _Q_LJnidas_~~~nida_s_ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _____.
Noca: l.at bams de la iz.quienb Q!Jn'espondm a los no mi¡nnles.
FUENTE: Estimacimes propias.

so
 GRAFICA3.4
MEXICO: TASAS DE MIGRACION INTERNA POR EDAD Y SEXO
SEGUN GRANDES GRUPOS DE ESTADO CIVIL, 1985-1990.
Tasa (por milj Hombres
16.-------------------------------------.-----------.

14
.·....··.: _,
'
.
...... ·'..... .' ... . ·.... : ...
: - SolteroS.
:-···unidos:·
12
..
;-,;.,
' ,.
:. ~ .-. P~s.4nidos
' :-Total
10

' ': . .
8 ...
.':'--.LO •'• O 0 O 0 0 0 O O O O O

' '
' ·'
6 .: . . . ·. . . . . '. . . . ~

1 o 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70 75 80 85 90
Edad

Tasa (por milj Mujeres

18
..
' .. -:.••. :..
•: :
·- :Sottf3ras · ·
...... ~.Unidas_:_ ...
16
. .
...• ·:· .. ·:···.: ..

- - Desuniqas
14 . ·..... : .........
. ~ ... .'. - . . . .. . .. '

-Total
12

10
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8 '

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'

·•.:....
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' .

----
6 -.
-:•... .....:......:.
...
.
._ :
'
. :
':"""-~~"""1 - - - - - - -

:
4 - . -:- ... :· ... ~ .·!"~11!1 ............._.......:••••
INEGI. Migración interna. 1994

1 O 15 20 25 30 35 40 4S 50 55 60 65 70 75 80 85 90
Edad
!o"UEN1'E: Estimaciones propias.

51
 Ambos rasgos de las pautas de migración interna permi-
ten aventurar la hipótesis del cambio de estado civil como un
der.erminante de la movilidad espacial de la población. Como
dijimos en la introducción a este capítulo, Rogers y Castro
( 1981 b) encontraron en Checoslovaquia que el matrimonio es
una razón para migrar, cuya importancia aumenta conforme
disminuye la distancia física que separa a las regiones de
origen y de destino. En el caso del quinquenio previo al Censo
de 1990 en México, la alta incidencia de la migración en los
primeros años de vida (gráfica 2.14) apunta má~ bien a un
mayor número de dezplazamientos territoriales de familias
con progenie que a personas cuya causa del movim ienlü es la
unión consensual. No obstante, en el caso de los desunidos, la
proximidad entre los perfiles por edad de sus tasas de migra-
ción y de la disolución de matrimonios en 1990, en la gráfica
3.5, nos permite insinuar que la ruptura de una unión consen-
sual puede llegar a ser un imporumte determinante de la
migración•.
En los cuadros 3.5 a 3. 7, se muestran las Lasas
estandarizadas de inmigración, emigración y migración neta
según el estado civil de la población al momento del Censo'.
Se puede apreciar, a nivel nacional, la escasa diferencia en la
intensidad de la movilidad territorial entre los solteros y los
unidos, sobre todo en hombres. Sin embargo, ese patrón
cambia a veces sustantivamente en cada entidad federativa y
por úpo de movimiento migratorio, como en las llegadas
masculinas hacia Aguascalientes, donde la mayor proximidad
se úene entre los unidos y desunidos, o entre las solteras y
desunidas inmigrantes en Querétaro, o bien, la notable discre-
pancia en ambos sexos en la emigración de unidos del Distrito
Federal,querepresentóen los dos géneros poco másdell4 por
ciento -uno de cada siete- de los unidos que residían en la
capital del país en 1985.
JuniO a esa última corriente migratoria aparece una ma-
yor tasa de inmigración entre los unidos del Estado de México
que, con base en los resultados mostrados en el capíLUlo
anterior, nos lleva a presumir una alta predominancia de
unidos en el flujo del Distrito Federal hacia su estado vecino.
En efecto, mientras esa corriente represemó poco más de la
mitad (54 por ciento) de los emigrantes unidos de la Capital
del país, alcanzó casi tres cuartas partes (74 por ciento en
hombres y 70 en mujeres) de los inmigrantes unidos hacia el
Estado de México.
Es interesante también que, dentro de la alta intensidad de
la inmigración hacia Quintana Roo, destaca aún más el nivel
Quizás nuestra extrapolación al COOJUnlo de desuniones sea aventurada,
pues sólo estamos comparando las tasas de divorcialidad en 1990 con
las de migración de todo el conjunto de desunidos. La única fuente de
datos en México que no• permitiría completar el esquema a las separa-
ciones de uniones legalizadas y libres a nivel nacional, soo las histonas
de uniones de las mujeres recogidas en la Encuesta Mexicana de
Fecundidad de 1976-77; sin embargo, el escaso número de rupturas en
el pasado inmediato captadas en la Encuesta puede arrojar pautas poco
coofiables de las tasas de desunión por edad.
Como estructura por edad estándar uúlú-amos la nacional para cada
sexo por separado.
52
entre los solteros, e incluso más sobresaliente en la ganancia
neta masculina donde casi dobla a la tasa de los desunidos.
Este peculiar patrón inmigratorio de Quintana Roo es un claro
reflejo de las características exigidas por el oferente de em-
pleos en el verúginoso crecimiento de los servicios turísticos
en la entidad.
Dentro del des balance en las tasas de migración neta entre
dos grupos de estado civil, destacan también el doble de la
pérdida relativa de los unidos respecto los desunidos, y en
menor propoción aunque también relevante la discrepancia
con los solteros en ambos sexos en el Distrito Federal, pero
sobre todo las poco más de dos y media veces por las que
supera la tasa de solteros a la de desunidos en Baja California
(31.69 frente a 12.48). No obstante que esa tasa es realmente
alta, es dentro de los unidos donde Baja California se aproxi-
ma más a Quintana Roo tanto en términos absolutos (ll.l
puntos al millar) como relativos (69 por cieniO de la tasa de la
entidad fedemtiva sureña); este acercamiento es aún mayor en
las mujeres (lO puntos al millar 6 72.5 por ciento).
3.2 Migración y educación
De la misma manera que en el estado civil, para el nivel de
instrucción también es necesario reducir el número de catego-
rías, pues para el análisis de la relación entre migración y nivel
educativo resultan excesivos los nueve grupos originalmente
considerados en el Censo de 199()8.
Una primera opción es el agrupamiento adoptado por el
INEGI en los resultados a nivel de localidad: sin instrucción,
con primaria incompleta, con primaria completa y con ins-
trucción posprimaria. Esta clasificación no necesariamente es
la que discrimina mejor los diferenciales de la migración por
nivel de instrucción. La guía para la selección del agrupamiento
la haremos de manera empírica bajo el criterio de las tasas de
migmción interna nacional por edad, tal y como lo hicimos
para el estado civil en la sección anterior.
En las gráficas 3.6a3.8 se muestran los patrones por edad
de la movilidad lerritorial para los tres grandes grupos de nivel
educativo que nos proponemos utilizar para el análisis. En la
gráfica 3.6, llama notablemente la atención la gran proximi-
dad entre las personas sin instrucción y con algún grado pero
sin terminar la primaria, sobre todo en los hombres. La
primaria completa es un buen corte discriminatorio para el
nivel de instrucción.
Quienes han completado la primaria se pueden separar en
dos grupos, aunque el corte no es tan sencillo de interpretar pues
Las ouevecaLegorías soo: s.in instrucción primaria, con primaria inoom~
pleta. coo primana completa, con algún grado aprobado m e"udios
INEGI. Migración interna. 1994
técnicos o comerc1ales con primaria tenninada~ oon serundaria incom-
pleta, con secundaria completa, con algún grado aprobado en estudios
técnicos o comerciales coo secundaria tenninada~ cm algún grado
aprobado en preparatoria o nonnal básica, con algún gno.do ~~probado m
el nivel superior.
 GRAFICA 3.5
MEXICO: TASAS DE MIGRACION INTERNA POR EDAD Y SEXO PARA
DESUNIDOS Y TASAS DE DIVORCIALIDAD, 1985-1990.

Migración Hombres Oivorcia/idad

-.Migración desunidos

-:Divorcialid'.Jd
6
12
5

10
4

3
8

2
6
1

4 o
1o 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70 75 80 85 90
Edad
Migración Mujeres Oivorcialidad
14>r--------------------~-----------.--------------
. ~ Migrab!ón. d!lsf!nidos. .
6
·-. Divorr;:ialldad

12 5

10
3

2
8
1

10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70 75 80 85 90
INEGI. Migración interna. 1994

Edad

FUENTE: Estimaciones propias.

53
MEXICO: TASAS ESTANDARIZADAS DE INMIGRACION DE 12 AÑOS O MAS DE EDAD
SEGUN GRANDES GRUPOS DE ESTADO CIVIL Y ENTIDAD FEDERATIVA 1985-1990. CUADR03.5
Hombres Muj~

Eatidad federativa Tou.l Sol1eroo Unido. Desunidos Tou.l Sol!eru Unidu Ommidu
10.54 9.66 11.27 10.46 10.47 9.35 12.11 IO.S9
14.91 13.S9 14.60 17.36 14.82 12.46 16.68 15.99
34.02 31.95 39.60 32.74 31.67 26.158 3B.S6 39.01
22.86 19.80 28.85 24.41 20.76 18.54 27.20 21.82
15.44 14.87 16.64 16.20 14.45 12.25 17.38 IS.38
7.98 7.48 8.59 6.41 7.84 7.21 8.85 11.48
17.71 15.29 21.09 16.S9 16.03 12.55 21.99 1S.81
3.27 3.80 3.20 2.81 3.1S 3.89 3.37 2.82
12.21 11.05 13.45 12.45 10.77 9.25 12.60 10.64
6.79 6.72 8.08 7.52 8.75 8.60 9.94 10.13
7.03 5.88 7.36 7.83 6.74 5.91 8.29 6.04
6.04 S.13 6.00 1.95 S.84 5.14 6.40 7.13
4.33 4.70 4.02 4.45 4.12 4.71 4.50 3.44
7.67 6.45 8.33 6.95 8.55 8.42 10.51 7.89
8.51 8.04 9.56 9.11 7.88 6.89 9.43 9.43
18.50 16-ll 19.69 20.74 19.10 17.13 21.98 2D.22
7.37 6.98 7.36 8.63 6.83 5.15 7.61 7.88
17.61 15.09 19.71 18.52 17.96 16.54 22.(17 17.94
10.94 11.13 12.74 11.72 9.19 7.28 12.33 10.:16
8.64 8.60 7.94 8.67 8.64 8.46 1.93 9.17
5.97 6.S9 6.08 S.93 5.62 5.66 6.23 5.61
7.20 7.21 6.6S 7.17 1.51 7.35 8.31 6.73
IS.77 14.38 1S.I7 14.74 16.55 16.75 16.19 16.06
53. 0S 59.17 54.67 S5.92 48.90 53.10 52.69 52.60
1.50 6.62 7.34 7.05 7.80 7.43 8.S6 1.31
8.71 7.78 1214 8.88 7.76 5.94 11.91 7.47
9.87 8.99 11.31 8.57 8.38 6.99 u.:n 7.53
7.66 7.69 7.88 6.59 7.68 8.73 8.63 6.63
11.71 11.01 13.71 10.42 12.14 10.81 14.72 12.75
10.66 8.79 11.71 14.38 11.24 9.51 15.72 9.48
5.95 538 6.05 5.37 6.03 5.22 6.92 6.05
6.60 6.16 6.21 6.91 6.59 6.71 6.10 1.46
6.90 7.02 7.05 10.30 6.30 6.08 7.21 7.67

FUENTE: E~ propias.

se requiere haber completado la secWtdaria. En la gráfa 3.7, se
puede apreciar claramente la proximidad entre las tasas de
migración de personas con y sin la secundaria concluida. El
únicocasoenqueelpedil se aleja sensiblemente del resoodelos
grupos originales de nivel educativo es el de las personas con
algún grado aprobado de estudios técnicos o comerciales, cuyo
peñt.l se parece más al general del tercer grupo (gráfica 3.8).
PreferimosdejaraeseconjWIIOdepersooasdentrodelasegunda
categoría, pues parece improcedente juntar a quienes han cursa-
do algún grado más allá de la secundaria con quienes nunca
aprobaron alguno en el segundo nivel de educación formal.
En la gráfica 3.8, se presentan las tasas para el tercer grupo:
aquellas personas que habiendo terminado la secundaria han
aprobado algún grado de educación formal (superior medio o
superior) o de estudios técnicos o comerciales. A los tres grupos
de nivel de instrucción para el análisis de la migración los hemos
llamado en10nces "sin primaria", "hasta secundaria" -con pri-
maria completa- y "más que secundaria". En la gráfica 3.9, se
presentan las tasas de migración por edad para esos tres grandes
J*lir de los 6 anos de edad en 1990; no obswue. ante la
imposibilidad que un menor de 10 anos haya concluido la
primaria. preferimos trabajar sólo con las personas de 10 o anos
másen 1990. En el caso de "más que secundaria" tampooopuede
haber personas con menos de 15 anos de edad, pues es precisa-
mente entre los 14 y 15 anos cuando una persona concluye la
secundaria Este hecho en nada afecta nuestra reducción a tres
grandes grupos de nivel educativo; por el conlnlrio, en nuestta
clasifJCaCión se evitan posibles sesgos por bajos lDOiltCs de
personasenalgúngruppdeedad,comoocuniriasi alas personas
con secundaria complela las incluyeramos en nuestro grupo de
mayor nivel educativo'.
En el cuadro 3.8, se reproduce la población que mantuvo su
residencia durante el quinquenio previo al Censo. Un ¡:rimer
aspec10 que salta a la vista es que, al nivel nacional, los
Apena• 801 hombres y937mujerelarúvdnllcimaleael&rupo ID-14
años de edad hab(an oompletado la secundaria ea d Cenoo de 1990,
INEGI. Migración interna. 1994

grupos de nivel educativo.
Debido a la forma como se capta el nivel educativo en el
Censo, los datos sobre migración y educación los tenemos a
proporción despreciable considerando loe m.¡l&l de diez millona de
jovenea de ambol sexos rcaidc:nteJ en el .-f• en el mimao arupo de
edades. De eso& 1738 adolesa:ntel de 14 años de edad (pues nN.e mú
jovm habla terminado la secundaria) 81 mi¡rvon internamente denuo
de Mbiw mire 1985 y 1990 (33 hombta y 48 mujeres).

54
 MEXICO: TASAS ESTANDARIZADAS DE EMIGRACION DE 12 AÑOS O MAS DE EDAD
SEGUN GRANDES GRUPOS DE ESTADO CIVIL Y ENTIDAD FEDERATIVA 1985·1990. CUADR03.6

Hombres Mujeres

Entidad federaliva Total Solteros Unidos Desunidos Total Solteras Unidas Desunidas

República Mexicana 10.54 9.66 11.27 10.46 10.47 9.35 1211 10.59
Aguascalientes 6.30 6.16 7.44 6.81 6.16 5.18 8.98 8.24
Baja Califomia 6.72 7.13 6.69 8.87 621 6.09 7.62 7.73
Baja California Sur 9.38 8.41 12.15 13.36 9.09 8.83 9.71 1200
Campeche 12.15 12.38 11.27 11.07 11.61 10.45 13.19 1200
Coahuila 9.99 9.31 11.02 9.49 9.48 8.04 11.62 9.18
Colima 10.64 9.45 11.61 11.18 10.50 855 14.01 10.57
O>iapas 5.88 7.20 5.21 4.63 5.52 7.00 5.43 4.68
Orihuahua 4.15 4.24 3.93 5.47 3.93 3.41 4.86 4.64
Distrito Fedefll1 26.55 19.32 32.00 25JJ7 25.40 17.84 34.23 24.99
Durango 15.58 14.75 17.73 13.93 14.81 12.54 18.38 14.34
Guanajuato 6.26 6.59 6.31 7.77 6.02 5.34 7.49 7.47
Guerrero 12.16 13.48 !2.51 10.18 11.55 11.72 12.86 10.23
Hidalgo 11.42 10.96 1257 10.64 13.20 15.56 1280 10.64
Jalisco 6.50 6.32 7.18 7.51 6.34 5.03 9.03 8.61
Estado de México 6.65 6.17 7.17 8.06 7.10 7.24 7.78 7.99
Michoacán 8.80 9.25 8.67 9.83 8.92 7.87 10.57 10.93
M =los 8.39 8.49 8.51 12.31 8.65 9.25 10.11 9.26
Nayarit 11.97 11.41 12.87 9.51 12.65 12.39 14.67 9.62
Nuevo León 5.03 4.99 5.74 5.32 4.86 4.38 6.73 6.04
Oaxaca 12.26 13.08 13.00 10.42 1254 !3.51 12.34 11.40
Puebla 8.73 8.78 9.68 8.20 9.00 8.94 10.40 8.68
Queréuro 7.18 7.28 8.21 11.36 7.59 7.45 9.32 10.73
QuinWlaRoo 11.79 14.20 10.54 16.37 11.53 14.83 11.49 14.08
S1111 Luis POIDllí 9.79 9.50 10.50 9.93 10.63 9.99 11.91 1266
Sinaloa 11.99 1053 13.96 13.01 11.51 11.17 13.91 10.46
Sonora 7.27 6.65 8.43 7.41 686 5.69 9.18 9.06
Tabasoo 9.39 10.29 9.41 8.92 8.62 8.69 9.76 7.74
Tamaulipu 8.38 7.99 8.21 946 8.10 7.33 9.14 8.09
Tiaxcala 8.26 8.04 9.28 11.41 8.88 8.95 11.12 9.87
Veracruz 9.64 9.51 10.28 8.06 9.49 9.18 10.39 8.41
Yucalán 9.39 8.94 11.02 8.87 8.52 7.03 11.68 10.36
ZacaleCas 13.67 12.94 16.17 14.04 13.76 li.S5 17.86 15.66

FUENTE: Estimaciones propias.

volúmenes de personas sin primaria y hasta con secundaria
concentran prácticamente la misma proporción entre los mayo-
res dediezañosenambos sexos(40porcientoencada categoría
en hombres y 43 por ciento sin primaria y 39 hasta secundaria
en mujeres). Sin embargo, esta composición según el nivel
educativo difiere entre las entidades federativas, llegando al
extremo de liD3 concentración totalmente sesgada hacia aniba
en el Distrito Federal, donde ahora casi la misma proporción~
mayoritaria-corresponde a los dos grupos de mayor educación
(44 por ciento hasta secundaria y 37 con más que secundaria en
hombres y 44 y 33 en mujeres, respectivamente). Por el contra-
rio, en Chiapas la mayor parte de sus no migrantes en 1990 no
habían tenninado la primaria (62 por ciento de los hombres y 69
de las mujeres); Oaxaca (57 y 64) y Guerrero (53 y 57) se
encontraban en una sii.Uación similar. Los altos niveles de
personas sin instrucción primaria son un claro reflejo del rezago
en que se encuentran esas tres entidades, las más atrasadas del
INEGI. Migración interna. 1994
diferente distribución en los migran tes internos del país: casi la
mitad se concentran en el grupo de instrucción intennedio (41
por ciento en hombres y 4 3 en mujeres) y en fracciones similares
en los extremos (27 y 32 por ciento para hombres y 31 y26para
mujeres). Entre las entidades federativas nuevamenle se apre-
cian grandes contrastes: más de la mitad de los inmigrantes de
ambos sexos hacia Sinaloa no tienen primaria completa, y en
situación similar se encuentran Campeche (43.5 en hombres y
46.6 en mujeres) y Nayarit (42 y 41.7); entre quienes llegan al
Estado de México (47.7 para hombres y 47 para mujeres), a
Chihuahua (46 y49.3) y a Baja California (46.8en ambos sexos)
hay predominancia del nivel educativo intennedio; y en los
flujos inmigratorios masculinos hacia Yucatán (44.6 por cien-
to). Nuevo León (43.6) y Querétaro (43.6), la mayor parte ha
aprobado al menos un grado adicional a la secundaria 10 •

país.
10
En los cuadros 3. 9, 3.10 y 3.11, se muestran los volúmenes
de inmigrantes, emigrantes y migrantes netos internos, respec-
tivamente, según ei nivel de instrucción. Podemos ver ahora una
Existen mh entidades federativa. donde 1• proporción mayoritaria
corresponde a cualquiera de las tres categorías; no obstante, sólo en
mujeres en Yucatán la mayor ooncentración recae en "más que secun-
daria ·• (3 8. 3 5 por ciento). pero apenas por encima de "hasta secundaria"
(38.30).

55