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La Ética

La ética es una rama de la filosofía que se dedica a analizar la conducta humana y


paralelamente, estudiar la moral y encontrar una manera de juzgar a la misma. El término
ética tiene su origen en el griego, proviene del vocablo ethikos que significa carácter.

La ética es mucho mas aplicable a nuestras vidas en sociedad, debido a su contenido


práctico-técnico, derivado de nuestras propias costumbres y de cómo nos comportamos.

La ética en la vida cotidiana constituye una reflexión sobre el hecho moral, busca las
razones que justifican la utilización de un sistema moral u otro. Algunos han dado a la ética
el título de arte de vivir bien.

La ética puede ser definida como una ciencia del comportamiento moral pues, mediante un
exhaustivo análisis de la sociedad se determina como es que deberían (hipotéticamente
hablando) actuar todos los miembros pertenecientes a ella.

Cabe resaltar, que la ética no es coactiva ya que, al no imponerse sanciones legales en el


individuo (claro está, no existen las leyes éticas) se promueve una autorregulación a través
de normas colectivamente establecidas para todos.
Las normas éticas son;
1. – Absolutas; No se supedita a normas extrañas y relativas
2. –Universal; Por que todos los seres humanos deberán practicar el bien.
3. – Inviolable; Por que todas las normas morales se respetan en todo tiempo
formación ciudadana
se puede decir que esta consiste en un proceso que promueve en las personas valores
sociales para que puedan participar y cooperar en el desarrollo de la sociedad con base en
esos preceptos, orientados a fomentar el respeto, la solidaridad y la responsabilidad
necesaria, y así impulsar la armonía más adecuada en la convivencia. Con este fin, las
instituciones de todos los sectores deben colaborar aportando su papel dentro de la
colectividad.

Por esta razón, se requiere la implementación de distintos esfuerzos para que se pueda
mejorar la conducta de los ciudadanos de todas las edades, formando una base durante la
niñez, lo cual juega un papel fundamental para forjar el adecuado comportamiento de los
adultos. En este sentido, es necesario que se involucren algunos sectores, como la
comunidad educativa, padres y familias, medios de comunicación, organizaciones
religiosas, el Estado, por mencionar algunos.

Esta formación debe promover la consolidación de habilidades y competencias cívicas, con


la intención que sean asumidas como prácticas favorables para que, a su vez, sean
aplicadas en la vida diaria, así como despierte el interés del ciudadano para que cumpla un
papel más activo. Por otro lado, es importante fomentar el aprendizaje basado en principios
como la ética, la responsabilidad, el respeto, la solidaridad, la tolerancia, la igualdad para
mejorar el nivel moral de los individuos.
Impulsar la formación integral de niños, jóvenes, adultos, docentes, funcionarios públicos,
padres, responsables del sector educativo lleva a su vez al respeto de los derechos
humanos, de la dignidad de los individuos y de los requerimientos de las familias para lograr
calidad de vida. Sin duda, en el seno del hogar es donde se consolidan los principios y el
nivel al cual tienen derecho los ciudadanos, debido a la gran incidencia que este grupo
representa en la formación de esa conducta adecuada.

De esta manera, se puede promover el desarrollo de las actitudes necesarias para alcanzar
una convivencia familiar enmarcada en valores, así como el establecimiento de una
socialización basada en criterios éticos que le ayuden a formar parte de la sociedad en la
que interactúan. Esto permitirá practicar una conducta que conlleve a una coexistencia más
equilibrada, pues los individuos se hacen más conscientes de la importancia que representa
vivir en unidad con los demás.

La ética y la ciudadanía van de la mano, puesto que la ética establece las normas de
conducta que deben regir a los ciudadanos de una región y ellos son los responsables de
aplicar y cumplir con ética las distintas reglas y normas que se establezcan para una
determinada región.

La relación entre la ÉTICA y la CIUDADANÍA, consiste en que la ética estudia las


costumbres y hábitos dando ciertos principios, que van encaminados hacia la realización
del ser humano como persona. Los principios éticos apuntan hacia la solidaridad, equidad,
imparcialidad, eficiencia y responsabilidad entre la ciudadanía

Heiner L. Barbosa Porto


Grupo: 06
Clase: Ética
Profesora: Amparo Álvarez

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