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1os Auxilios PDF
1os Auxilios PDF
Resumen
Maestros y profesores, como responsables del alumnado durante el horario escolar, estamos
obligados a conocer y, por qué no, a difundir unos mínimos conocimientos acerca de los primeros
auxilios. Quemaduras, asfixias, hemorragias… son algunos de los problemas que pueden suceder a
algunos de nuestros alumnos. Saber cómo atajarlos mediante unos recursos muy simples puede salvar
la vida en más de una ocasión.
Palabras clave
Primeros auxilios, salud, asfixia, hemorragia, quemadura, insolación.
1. INTRODUCCIÓN
Los primeros auxilios son las medidas de urgencia que se aplican cuando una persona ha sufrido un
accidente o una enfermedad repentina, hasta que esta persona pueda recibir atención médica directa y
adecuada.
Como docentes, debemos estar preparados para afrontar pequeños accidentes. Serán cortes y/o
moratones sin importancia, e incluso casos más urgentes.
Lo primero es no agobiarse e intentar sanar el problema de la mejor manera posible para que el niño no
sufra. Si nosotros mantenemos la calma, el niño se sentirá más seguro.
2. LA ASFIXIA
La asfixia es la interrupción del intercambio de gases normal entre los pulmones y el aire exterior.
Las situaciones de asfixia son por tanto emergencias pues comprometen la vida del accidentado.
- Obstrucción completa: las vías respiratorias están completamente obstruidas por un cuerpo
extraño, el aire de los pulmones no podrá salir, por lo que la víctima no podrá toser, ni hablar,
ni respirar. La persona hace un gesto muy característico: se lleva las manos a la garganta,
está muy agitada… en un principio, la víctima está consciente pero si no podemos revertir la
situación en breves instantes, la víctima se desplomará inconsciente.
Una de las actuaciones más famosas es la maniobra de Heimlich; por el nombre no la reconoceremos,
pero en cuanto leemos en qué consiste, no nos queda ninguna duda del tipo de maniobra de la que se
trata:
1.- Tras realizar cinco golpes interescapulares, colocarse detrás de la víctima y rodearle la cintura
con los brazos, por debajo de las axilas.
2.- Cerrar una mano y colocar el nudillo del pulgar cuatro dedos por encima del ombligo, para
localizar la región epigástrica.
3.- Cogerse el puño con la otra mano.
4.- Realizar una fuerte presión hacia adentro y hacia arriba en dirección a los pulmones.
5.- Aflojar la presión, sin perder la posición en el epigastrio. Repetir la presión en ciclos hasta
cinco veces, alternando con golpes escapulares.
3. LAS HEMORRAGIAS
Hemorragia es la salida de sangre de los vasos sanguíneos cuando se rompe su pared.
En nuestro contexto, las hemos sufrido en multitud de ocasiones, por ejemplo, en caídas accidentales,
en violentas e inadecuadas agresiones y, la más típica, la hemorragia nasal producida, sobre todo, en
épocas de mayor temperatura.
Tipos de hemorragias:
a) Según el tipo de vaso lesionado:
• Hemorragia arterial: la sangre sale a borbotones cada vez que el corazón late y es de
color rojo vivo.
• Hemorragia venosa: la sangre sale de manera más continua y lenta y tiene un color más
oscuro.
a) Hemorragia externa:
Clásicamente, se ha hecho referencia a otras tres técnicas para el control de las hemorragias:
- Elevación de la extremidad.
- Compresión arterial a distancia.
- Torniquete.
b) Hemorragia interna:
Una de las hemorragias más comunes y a las que estamos más acostumbrados son las hemorragias
nasales (epistaxis). La sangre es muy escandalosa, por tanto, lo primero es mantener la calma ante el
niño.
El protocolo de actuación sería el siguiente: presiona directamente sobre los dos orificios nasales,
contra el tabique nasal durante cinco minutos. La cabeza se inclinará hacia delante con el fin de evitar
la posible inspiración de coágulos o de la propia sangre.
4. QUEMADURAS
Para las quemaduras térmicas, de contacto o por productos químicos, lo primero es dejar correr agua
fría sobre la lesión por un mínimo de treinta minutos. Si la quemadura es pequeña hay que mantenerla
completamente bajo agua. Si la ropa está pegada a la quemadura, no debemos intentar quitársela. Le
quitaremos la ropa que no esté pegada a la quemadura cortándola. Después, cubriremos la lesión
solamente con una tela limpia de algodón. No tallar la quemadura y no aplicar ningún jabón, ni pomada,
ni remedio casero. Tan poco le ofreceremos nada de tomar ni de comer, pero es necesario mantenerla
cubierta con una mantita para mantener la temperatura normal del cuerpo hasta que llegue la ayuda
médica.
Para las quemaduras eléctricas, el tratamiento es casi lo mismo. No tocaremos a la persona que ha
tenido contacto con electricidad, a menos que esté libre de la corriente eléctrica. Si todavía está en
contacto con la corriente eléctrica, la electricidad viajará a través del cuerpo de la víctima y nos
electrificará a nosotros también. Una vez que la víctima esté libre de la corriente, es prioritario revisar
que no haya obstrucción de aire, y que haya circulación de sangre. Una vez que la condición de la
víctima se estabilice, empezaremos a hacer correr agua fría sobre las quemaduras por un mínimo de
treinta minutos. No tenemos que mover a la víctima y no tallaremos las quemaduras. No hay que aplicar
ningún jabón, ni pomadas, ni remedio casero. Después de lavar la quemadura, aplicaremos una tela de
algodón limpia en la quemadura. Y mantendremos a la víctima abrigada hasta que llegue la ayuda
médica.
En muchas ocasiones, sobre todo, en excursiones durante los meses más cercanos al verano, hemos
visto cómo el sol ha afectado más de la cuenta al alumnado. La mayoría de las veces, éste no va
preparado para una exposición directa al sol. El uso de una gorra, de ropa de color claro y el uso de
crema con protección solar son algunos de los ejemplos que pueden prevenir este tipo de casos. Esto
puede derivar a una considerable deshidratación e insolación
5. EL SHOCK
Es el conjunto de signos y síntomas resultantes de la falta o disminución del aporte sanguíneo a los
tejidos, originada por la pérdida de volumen sanguíneo, por el aumento de la capacidad de los vasos
(pérdida de presión sanguínea) o por bombeo cardiaco deficiente.
Signos y síntomas:
- Alteración de la consciencia.
- Estado de ansiedad, nerviosismo.
- Pulso rápido, débil.
- Respiración rápida y superficial.
- Palidez de las mucosas.
- Sudor frío y pegajoso, generalmente en manos, pies, cara y pecho.
Siempre se actuará de la siguiente manera: igual que en el caso de hemorragia interna, pero
añadiendo que hay que tapar a la víctima para evitar la pérdida de calor corporal y evacuar a la
víctima urgentemente, ya que la tendencia del shock es siempre a empeorar y podría entrar en
estado de coma.
7. EL BOTIQUÍN
Es importante y necesario tener en el centro escolar un botiquín de primeros auxilios, para poder
administrar primeros auxilios efectivos. Debemos tener especial cuidado a la hora de empezar el curso
y comprobar que todos los elementos del botiquín no están caducados y que no hace falta ninguno
más. Los botiquines de primeros auxilios se pueden comprar ya en estuches comercializados, o se
puede hacerlo uno mismo incluyendo los siguientes artículos:
Vendas adhesivas o tiritas: disponibles en una gran variedad de tamaños para todo tipo de cortes.
C/ Recogidas Nº 45 - 6ºA 18005 Granada csifrevistad@gmail.com 6
ISSN 1988-6047 DEP. LEGAL: GR 2922/2007 Nº – MES DE 2008
Vendas crepe o gasa enrollada: esta permite movimiento libre y son recomendadas para asegurar el
vendaje y/o almohadillas. Esta es especialmente buena para heridas que son difíciles de vendar.
Apósitos de gasa: estas son almohadillas suaves y absorbentes que proporcionan un buen entorno para
curar heridas. Son recomendadas para sangrar y desaguar heridas, quemaduras, infecciones.
Tijeras: de puntas redondeadas.
Pinzas: sin dientes.
Cintas de primeros auxilios o esparadrapo: Diversos tipos de cintas deberían de ser incluidas en cada
botiquín. Estos incluyen adhesivo, que es resistente-al-agua y excepcionalmente fuerte para veces
cuando es necesario sujetar con fuerza; clara, que se alargan con el movimiento del cuerpo, buena para
heridas visibles; tela, recomendada para la mayoría de primeros auxilios que requieren atar, incluyendo
para atar vendajes pesados y es menos irritante que los adhesivos; y papel, que es recomendado para
la piel sensible y es utilizado para vendajes ligeras y frecuentemente cambiadas.
También pueden ser incluidos en cada botiquín: algodón, imperdibles, crema antiséptica, termómetro,
un jarabe de paracetamol, loción de calamina, y una bolsa térmica.
El botiquín debe colocarse en un lugar ni demasiado húmedo, ni demasiado seco, lejos de una fuente
directa de calor y lejos del alcance de los niños.
A la hora de utilizar el botiquín debemos tener en cuenta:
• Un fármaco mal utilizado puede ocasionar graves alteraciones en el organismo.
• Desconocemos si el enfermo tiene reacciones o es alérgico a un medicamento.
• No debemos tirar el envase original del medicamento, ya que en él figura la fecha de
caducidad.
8. VALORACIÓN
En más de una ocasión, nos hemos visto ante situaciones donde hubiera sido necesario tener
una mínima base de conocimientos sobre los primeros auxilios. Un alumno puede perder el
conocimiento en mitad de una clase, puede romperse una pierna jugando al fútbol durante el recreo,
puede quemarse haciendo unas prácticas de laboratorio. El tiempo es oro en estas circunstancias y si
actuamos con rapidez podemos evitar muchas desgracias. Por otro lado, también es importante en este
aspecto saber lo que no hay que hacer, ya que nuestra ignorancia en primeros auxilios puede darle un
revés a la situación y empeorarla.
BIBLIOGRAFÍA
Cruz Roja Española (2008). Manual de primeros auxilios de la Cruz Roja. Madrid: Santillana ediciones
generales
Álvarez, C. Chuliá, V. y Hernando, A. (1992). Manual de asistencia sanitaria en las catástrofes. Madrid:
Arán.
Autoría
Nombre y Apellidos: Francisco González Anera
Centro, localidad, provincia: IES San Juan Bosco, Lorca, Murcia
E-mail: fganera@hotmail.com