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Causas
La congestión nasal se produce por una inflamación de la mucosa que tapiza la nariz junto con
una vasodilatación de la misma mucosa, causando un incremento del flujo sanguíneo en los
sinusoides. Los sinusoides nasales son estructuras que regulan la resistencia nasal al flujo
aéreo en función de su contenido sanguíneo, de modo que la nariz está congestionada cuando
los sinusoides están llenos de sangre y descongestionada en el caso contrario. Así, la
inflamación y vasodilatación de la mucosa nasal conducen a la obstrucción del flujo de aire y a
la congestión de la nariz.
Este proceso puede tener causas diversas, y de hecho la congestión nasal es uno de los
síntomas más frecuentes en afecciones del tracto respiratorio superior. Además de los
mencionados resfriado común y la gripe, también pueden ocasionar congestión nasal la
infección sinusal, la rinitis (alérgica y no alérgica), los cambios hormonales como los que tienen
lugar durante el embarazo, o el uso excesivo de descongestivos nasales.
Para aliviar la congestión y la mucosidad nasal, en primer lugar es conveniente evitar (en la
medida de lo posible) los irritantes comunes como el humo del tabaco o los cambios bruscos
de humedad, así como también aquellos desencadenantes conocidos de alergias. Otra
recomendación a tener en cuenta es beber mucho líquido para ayudar a diluir las secreciones
nasales, de forma que la mucosidad sea más fácilmente drenada desde la nariz. Hacer
inhalaciones de vapor entre 2 y 4 veces al día, o utilizar aerosoles nasales con agua de mar
entre 3 y 4 veces al día, también pueden ayudar a eliminar el exceso de mucosidad, además de
hidratar la mucosa nasal. En el caso de los bebés o niños pequeños que aún no saben sonarse
la nariz, es aconsejable usar una pera de succión o bien un aspirador nasal para retirar las
secreciones suavemente.
Además de las medidas mencionadas, también se puede recurrir a ciertos medicamentos que
no precisan de receta médica para paliar los síntomas de congestión y secreción nasal. Entre
ellos, se encuentran:
En función del origen de la congestión será preferible un medicamento u otro, por lo que es
importante que los profesionales de la farmacia recaben la información necesaria para
recomendar la mejor opción para el paciente. En este sentido, conviene recordar que los
fármacos antihistamínicos pueden producir somnolencia, y que los descongestivos se
desaconsejan en pacientes hipertensos. En el caso de los descongestivos de acción local, es
importante advertir al paciente que no debe usarlo durante más de 3 días seguidos para evitar
la aparición de la congestión de rebote.
Referencias
1. Congestión nasal: Más que una nariz congestionada [Internet]. Mayo Clinic. [citado 12 de
febrero de 2019]. Disponible en: https://www.mayoclinic.org/es-es/symptoms/nasal-
congestion/basics/definition/sym-20050644
3. Naclerio RM, Bachert C, Baraniuk JN. Pathophysiology of nasal congestion. Int J Gen Med.
8 de abril de 2010;3:47-57.