sheers
sosarenceee ress!
SSLOEES par sn htotgpans
Serenata eee eee
Sea eonaenen ese
Tica ear
apie scuu ois
Sense
ecient
. ed
SS
NUESTRA HERENCIA ANIMAL
La importancia de la historia evolutiva
en el comportamiento
MARTA IGLESIAS Y ENRIQUE TURIEGANOéPOR QUE NOS
COMPORTAMOS COMO
NOS COMPORTAMOS?‘esde quel ser humano escapes de preguntarse co
sas, se ha planteado en qué medida lo que siente,
hace y piensa esté motivado por su blologiaycugn-
to depende de lo que ha aprendido a lo largo de su
vida, La pregunta hoy se podria formular como:
gen qué medida los genes determinan ml corportamiento? Casi
Siempre, quien se ha planteado estas preguntas ha debido con-
‘luir que una parte de su comportamiento depende de su biclo-
aia, de sus genes —porque los nlios huéefanos se parecen a sus
ppadres— yotra deo aprendido —porque un no espaol criado
‘en Rusia habla ruso—. Muy probablemente esta conclusién, en
‘ada persona que ha llegado a ella, no ha hecho més que suscitar
nuevas dudas:,Cuéntoinfluyen en el resultado final estas dos di-
rmensiones? jEn qué medida ambas se interrelacionan?Y, sobre
todo, la pregunta més interesante: por qué? ;Qué sentido tiene
queyo, como animal humano, desreolle sn eserzo algunas ha-
bilidades y otras me cueste afos desarrollarla? :Por qué algunas
‘cosas me producen aversién 0 agrado instintivo, yen otros casos
tengo que aprender qué es placentero y qué peligroso? La razén
de estas diferencias se podria resolver en parte entendiendo qué
ventajas nos eporta que un comportamientoestécodificado ge-
néticamente, es decir, por qué es una adaptacién.
ePueden los adelantos téenicos ayudamos a resolver estos
cenigmas? ;Podremos saber prontoen quémedida cada gen contri-
Dbuye al éxito reproductivo dela siguiente generacibn? Podremosaveriguas, conociendo los fenotipos asociados, en qué medida los
sasgos a los que conteibuye determinsdo gen mejoran, empeoran
‘ono afectan en absoluto a nuestro éxito reproductive? Hoy en
dia no, por dos razones: primera, que el efecto de cada una de
‘nuestras variantes genétieas no es siempre aditivo. Recordemos
{que en genética dos mas tres no siempre son cinco, a veces son
rueve ya veces sale un niimero neyativo, Los efectos episiticos
delos genes dificultan mucho la determinacién ntida de custo
‘afecta a un carécter un alelo dado (véase el recuadro «Genética
del comportamiento»). Sobre todo si lo que analizamos son ca
xacteresinfluides por muchos genes como la iteligencia. Un se-
igundo aspecto, fntimamente relacionado con el anterior, es que
la expresion dels rasgos depend dela interaccién del genotipo
conel ambiente. Es francamente improbable testar cada eventual
Interaccin de cada variedad genética con cada ambiente, aun-
{que a emplezan a exstrestudios que manejan grandes bases de
datos donde se controlan diversos ambientes.
‘De modo que, visto lo visto, necesitamos algo més que que-
ddarnos esperando para resolver la cuestién de cudnto influye la
«genética en un comportamiento particular y por qué es asf de
influyenteo poco influyente, Ambas informaciones son muy im-
pportantes, no solo desde el punto de vista de a curiosidad, sino
delamejora delas condiciones en las que vivimos. Corregir deter-
‘minados comportamientos es més fei si entendemos sus cau-
sas, tanto préximas —ingluencia de la biologia en ellos como
‘itimas —ventajas que confiere ese rasgo para que alo largo dela
evolucién se haya modelado de determinada manera
ste segundo punto en particular, por qué la seleceién natu-
raha modelado de determinada manera I parte ependiente de
Ja genética de un comportamiento, es muy interesante por dos
xazones. La primera es por una cuestién prctics: saber que un
Genética del comportamiento
‘te eno un conperariern Lard pera son eens degen
‘ea quero eqen do bide molec
anor do gure: Se plan apr ital ares ios
sinutinanenta ines gs conpaten edo ms garam (ganle eroah
‘ios HZ} ove gu compan os manos gens un Clg haan
{nats eles DZ) sez grese mod crparen gees one
‘tae Bz crpren anon tr ele gre Enno
{ecasres cutt dla vasa de os carter en spb (ar
$s) sx dees legos ant comin 9 lamb nda a ae
‘deg av api nor exuser de germ cepa (carpages Po
‘ro ancy hraros asta compar anes pow nose
a carpranen en des
mates oo
‘eran pr jp Ege sonoma elgen nea mt.
‘Asocicion con genoms completo (GNAS) Se esi cio 0a
canon nota nese eee ts ron
comportamiento lo configuré la seleceién natural para incre-
rmentar nuesteo éxito reproductive de un mado determinado nos
permitiré comprender cuindo y cémo tenderé a utilizarse, qué
cicunstancias lo promueven, qué objetivo persigue y qué lo mi-
tiga. En segundo lugar, la cuestin es interesante porque es un