Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Clase I Organización y Administración de Iglesias ALS
Clase I Organización y Administración de Iglesias ALS
Clase I
Marco general: administración de la iglesia cristiana
Preliminares
Siempre es bueno, aunque más en tiempos complejos, repensar qué es la iglesia, hacia dónde se
dirige y cómo es dirigida. Uno de los acercamientos necesarios para repensar cada aspecto de la
iglesia de hoy, es el elemento administrativo. Aunque, pensar en la administración de la iglesia,
automáticamente evoca un esquema empresarial en nuestras mentes. Esto es porque se ha
exagerado el énfasis moderno de administrar eficazmente la iglesia, dejando a un lado otras
dimensiones del trabajo pastoral y de la propia naturaleza de la iglesia.
Por un lado, la tarea pastoral en la iglesia implica administración, pero es más que
administración. El trabajo pastoral abarca desde la integridad propia del ministro hasta el
cuidado amoroso para con el pueblo del Señor. No es solo ser buen gerente, en realidad la clave
está en ser fiel. No podemos sacrificar la fidelidad en el altar del éxito gerencial. No obstante,
no podemos aferrarnos a la fidelidad, sin atrevernos a prepararnos para administrar
competentemente la iglesia como organización. Ambas cosas, aunque con distintos grados de
prioridad, son indispensables para un ministerio relevante en el mundo de hoy.
Por otro lado, acerca de la naturaleza propia de la iglesia, debemos considerar su dimensión
espiritual tanto como su dimensión humana. En un sentido, la iglesia es una comunidad del
Espíritu. Somos gente marcada por el Espíritu de Dios. Espíritu que va a donde quiere, por su
prerrogativa de soberanía (Juan 3:8). Las estructuras humanas no pueden subyugar la libertad
con la que el Espíritu de Dios gobierna y dirige a su pueblo. No podemos perder de vista la
naturaleza espiritual de la iglesia a la hora de enfocarla en ministerios organizados con
intencionalidad para el logro de metas puntuales.
El otro sentido, es el aspecto terrenal y humano de la iglesia. Somos gente “de carne y hueso” en
un mundo físico y tangible (Materia), sujetos a limitaciones temporales (Tiempo) y con una
existencia vinculada a determinada ubicación geográfico o contexto (Espacio). La presencia de
estos elementos en la realidad del día a día de la iglesia, ya nos hacen tomar conciencia de su
necesidad de organización y administración. Necesitamos comunicarle a la gente el propósito de
la iglesia, trabajar en programas para lograr sumar al reino de Dios, programas adecuados a los
recursos que tenemos y que debemos administrar con eficiencia. En este sentido, juega un papel
importante la administración como parte de las competencias que debe adquirir todo servidor
cristiano.
Es cierto que el líder cristiano debe conocer de administración para gerenciar adecuadamente la
iglesia como organización, solo que no debe olvidar la fidelidad como punto de partida para su
ministerio ni la naturaleza espiritual de la iglesia como principio de su eclesiología.
Iglesia y administración en la Biblia
En esta sección intentaremos presentar una base conceptual a la luz de la Biblia de lo que es la
iglesia y cómo se presenta la idea de que esta sea administrada en las Escrituras.
Iglesia
Etimológicamente el término compuesto por ek de “fuera de” y klesis de kaleo “llamar”, que se
ha traducido como Iglesia (Gr. Ekklesia. ἐκκλησία, G1577), se usaba entre los griegos para
referirse a un grupo de ciudadanos o miembros de una polis, que se reunían para considerar
asuntos concernientes al estado (Hech. 19:39). Por su parte, la LXX lo utiliza para referirse a la
congregación de Israel una vez convocada para tratar determinado asunto o como una reunión
representativa de toda la nación. Esta traducción toma principalmente del término hebreo qahal
(קָ הָ ל, H6951), que se le daba el uso mencionado. El segundo término relacionado con asamblea
es 'edah (עֵדָ ח, H5712), es traducido más frecuentemente como “Congregación”. Se refería a las
personas que se reunían fuera del Tabernáculo para adorar. Especialmente, 'edah representa a la
comunidad centrada en el culto o en la ley, aparece frecuentemente en el Pentateuco y es
considerada sinónimo de qahal. En el Nuevo Testamento la referencia a la iglesia tiene que ver
con tres connotaciones:
1. Todos los creyentes redimidos en todo tiempo y en todo lugar. Es lo que conocemos
como iglesia universal (Mat. 16:18; Efe. 1:22, 2:22)
2. Una congregación en determinado lugar y en determinado tiempo (Mat. 18:17). Es lo que
conocemos eclesiológicamente como “iglesia local”. Por ejemplo, los efesios, los
colosenses, los tesalonicenses, entre otras
3. Finalmente, se usa el termino en plural para referir a un conjunto de iglesias locales
ubicadas en una región (Hch. 9:31)
Millard Erickson nos sugiere una definición producto del entendimiento bíblico y de la
formulación teológica, afirma que:
Iglesia como todo el cuerpo de los que mediante la muerte de Cristo se han reconciliado
de forma redentora con Dios y han recibido una vida nueva. Incluye a todas esas
personas, ya estén en el cielo o en la tierra. Aunque es universal por naturaleza,
encuentra su expresión en las agrupaciones locales de creyentes que muestran las
mismas cualidades que el cuerpo de Cristo en su conjunto (2008, p. 1040)
Administración
Administración es la acción y el efecto de administrar. Por su parte, administrar del Lat.
Administrare tiene varia acepciones. a) Gobernar o ejercer la autoridad sobre un territorio y
sobre las personas que lo habitan. En este caso, tiene que ver con administración pública. b)
Básicamente dirigir una institución. c) La más adecuada a nuestro estudio indica el ordenar,
disponer, organizar, en especial la hacienda, o los bienes. Diríamos, que en nuestro caso, las dos
últimas nos permitirían tener nociones de lo que es la administración, en especial, desde el
enfoque ministerial que nos ocupa.
En el Nuevo Testamento encontramos el término kubernesis (Gr. κυβέρνησις, G2941), de
kubernao de donde proviene nuestra palabra “Gobernar”. Este término denota la conducción o el
pilotaje de una nave. Como metáfora, implica gobernar, y se adjudica a los conductores de una
iglesia local (1Cor. 12:28) (Ver Hch. 27:11; Apoc. 18:17).
Otro término griego relacionado con administración es oikonomos (οἰκονόμος, G3623), cuya
denotación es la de una persona que mantenía ordenada una casa. Un administrador o
mayordomo (Luc. 12:42, 16:1, 16:3, 16:8).
En este apartado, quiero destacar desde el punto de vista bíblico y legal el rol del pastor dentro de
la iglesia en relación con su función administrativa.
Por otro lado, H. Harvey (1987, Pp. 129-134) indica algunos rasgos generales del pastor como
administrador de la iglesia. Consideremos estos en detalle:
Legalmente, pastor ocupa el rol de Presidente de la respectiva asociación civil. Por lo tanto, se
constituye en el representante legal, encargado de representar a dicha asociación ante todo acto
relacionado con el Estado Venezolano y entes privados. Revisemos un acta actualizada de iglesia
bautista.
Cristo
Asamblea Pastor
Secretario Diáconos
Organizaciones
Auxiliares
Para efectos de generar un dialogo reflexivo, preguntémonos: 1. ¿Encaja este modelo dentro de
las funciones bíblicas de la iglesia? 2. ¿Qué beneficios nos otorga este modelo? 3. ¿Qué
debilidades vemos en este modelo?
1
Revisar: http://registrodeiglesias.blogspot.com/2013/08/requisitos-para-obtener-el-visto-bueno.html y
http://verdadyvida.org/ES/gobierno-presenta-modelo-unico-para-registro-de-iglesias/