La apatía, el adormecimiento de las emociones y el sentimiento de que a uno no
le importa ya nada, estos eran los síntomas que presentaban en la segunda etapa de los prisioneros, lo que ya lo hacían, insensible a los golpes diarios, gracias a esta insensibilidad, el prisionero se rodeaba enseguida de un caparazón protector muy necesario. Según Frankl los golpes se producían por cualquier provocación y algunas veces sin razón, tales golpes ya no solo eran dolor físico, sino la injusticia que sucedía por lo irracional de todo aquello. Cuando el prisionero llegaba a los campos de concentración, que en este caso era el de Auschwitz, a este le quitaban sus objetos e identificaciones , y este era marcado con un número, los trabajos a veces tenían una recompensa un cupón, el cual este se podía canjear por una docena de cigarrillos o una docena de raciones de sopa, los prisioneros lo solían utilizar para la sopa, pero, gracias a ellos se podía distinguir cuando un prisionero perdía las ganas de vivir y se fumaba sus cigarros para “disfrutar” de sus últimos días de existencia.
2. Qué significa la libertad interior.
El autor plantea el siguiente problema: está claro que nos comportamos influidos por nuestro entorno, pero, ¿hay una parte dentro de nosotros libre, independiente? El ser humano es alguien completamente influido por su entorno, pero el hombre tiene capacidad de elección, ante un conjunto de circunstancias, decidir nuestro propio camino, obviamente no podemos elegir la circunstancias, pero si el comportamiento, la libertad espiritual, que no se nos puede arrebatar, lo que hace que la vida tenga sentido y propósito Según Frankl; Y este factor es el que diferencia a los hombres con libertad interior y a los que son moldeados por los agentes de las S.S. Además esa libertad es un importante factor a la hora de dar sentido a nuestra vida. "Sólo temo una cosa: no ser digno de mis sufrimientos”
3. Qué representa el destino como un regalo.
El modo en que un hombre acepta su destino y todo el sufrimiento que este pueda traer, incluso bajo las circunstancias más difíciles, pueda conservar su valor, su dignidad, etc. Como recordamos el prisionero en un campo de concentración, la oportunidad que tenía un hombre de aprovechar o de dejar pasar las ocasiones de alcanzar méritos que una situación difícil puede pueda ocasionarle. El hombre se enfrenta a su destino y tiene siempre oportunidad de conseguir algo por vía del sufrimiento.
4. Cuál es la pregunta por el sentido de la vida.
Según el autor no debemos estar siempre preguntándonos ¿cuál el sentido de la vida?, simplemente hay que ir enfrentándonos de una buena manera a todos los problemas que esta nos dé, Como si esta nos buscara a nosotros y no nosotros a la vida, nuestra contestación tiene que estar hecha no de palabras ni tampoco de meditación, sino de una conducta y una actuación. Vivir significa asumir la responsabilidad de encontrar la respuesta correcta a los problemas y cumplir las tareas que la vida asigna continuamente a cada individuo. (Este factor también diferencia a un hombre de otro) Si el destino nos depara sufrir debemos aceptarlo sin más, y tratar de llevarlo de la mejor manera, si nos depara cometer errores, pues aprendamos de ellos y aceptemos nuestro destino tal cual y como es.
5. En qué consiste la esencia de la existencia.
"Vive como si ya estuvieras viviendo por segunda vez y como si la primera vez ya hubieras tantos errores y como ahora estás a punto de obrar."
El concepto es que el hombre piensa que el presente ya es pasado, y que este
se puede modificar, La logoterapia intenta hacer al paciente sea consciente de sus propias responsabilidades, el papel que el logo terapeuta es intentar poner ante nosotros una representación del mundo tal como él lo ve; consiste en ampliar y ensanchar el campo visual del paciente de forma que sea consciente y visible para él todo, que el verdadero sentido de la vida debe encontrarse en el mundo y no dentro del ser El autor comenta que la autorrealización debe ser una consecuencia de nuestra búsqueda del sentido y no un fin en sí misma. El sentido de la vida se puede clasificar en tres tipos: realizando una acción, teniendo algún principio o por el sufrimiento.