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MONICIÓN DE ENTRADA

Muy buenos días hermanos y hermanas sean bienvenidos a la casa del señor, en este segundo domingo del
tiempo ordinario. Nos reunimos con alegría nuevamente en la casa de Dios donde se nos envía a proclamar a
todos los que encontremos las maravillas que él ha hecho por nosotros y a llevar su amor y su paz a todos los
que viven alrededor nuestro. Nos ponemos de pie y cantamos.

PRIMERA LECTURA
En la primera lectura tomada del libro de Isaías se nos anuncia que vendrá un siervo de Dios y será luz, no
sólo de Israel sino de todas las naciones. Escuchemos atentamente.

SALMO
Al salmo 39 responderemos todos juntos “Aquí estoy, Señor, para hacer Tú voluntad”

SEGUNDA LECTURA
En la segunda lectura tomada de la primera carta a los corintios nos relata que como apóstol, San Pablo se
consideró siervo, cuya misión era proclamar a Jesucristo como el Señor de todos. Escuchemos.

EVANGELIO
Juan el Bautista da testimonio de que Jesús es el Salvador, el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo.
Preparemos nuestro corazón para escuchar atentamente el Santo Evangelio.

ANTÍFONA AL EVANGELIO
Aquel que es la Palabra se hizo hombre y habitó en nosotros. A todos los que lo recibieron les concedió poder
llegar a ser hijos de Dios.

PETICIONES
1. Por el pueblo santo de Dios; para que manifieste la fidelidad al mensaje evangélico viviendo el amor hacia
los enemigos y la solidaridad con todos. Oremos.
2. Por los pueblos de la tierra; para que la Acción del Espíritu Santo suscite aportoles como Pablo, que lleven a
toda lengua y cultura el anuncio del evangelio. Oremos
3. Por los enfermos y los que sufren, que esperan el apoyo de una mano amiga; para que encuentren en la
iglesia y sus miembros un gesto de solidaridad humana y Cristiana. Oremos.
4. Por las familias divididas; para que, siguiendo las huellas del Cordero, puedan descubrir el sentido cristiano
de la vida y nunca duden de la misericordia del padre. Oremos.
5. Por nosotros y nuestra asamblea; para que la llamada del señor resuene profundamente en nuestro espíritu
y nos disponga a una conversión sincera. Oremos.
ANTÍFONA DE COMUNIÓN
Preparas una mesa ante mí y mi copa rebosa. Hermanos con un corazón dispuesto nos acercamos a recibir el
cuerpo de cristo.

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