Está en la página 1de 1
1, Planteamiento del problema y nociones basicas Eutanasia y derecho a morir en paz a) Hay que subrayar el rechazo existente en nuestros dias ante una moral heterénoma, en la que la Persona juzga que se le imponen normas morales o legales que no brotan de la propia autonomia interior. b) Se han expresado voces que exigen que la Declaracién de los Derechos del Hombre y otros documentos internacionales reconozcan, entre los derechos de la persona, no sélo su indiscutible derecho a la vida, sino también el derecho a la muerte. ©) Un tercer elemento lo constituye el progreso médico que no solo ha aumentado de una forma espectacular la esperanza de vida de todo nifio que viene al mundo, sino que también puede prolongar, de forma no menos impresionante, la desesperanza de un largo y doloroso proceso de morir. Necesidad de una terminologia adecuada El término eutanasia ha tenido una evolucién seméntica de significado: 1) Su significado etimolégico es el de “buena muerte”, privada de dolores y angustias 2) Se suele afirmar que, a partir de Tomas Moro y Roger Bacon, el término eutanasia adquiere su significado actual, que hace una referencia fundamental al acto de poner fin a la vida de una persona enferma. El debate hoy dia no se centra en la legitimidad de disponer de la vida de una persona cualquiera, sino de la persona enferma sobre la que no existen esperanzas de vida en unas condiciones que puedan calificarse como humanas. 3) Se ha distinguido entre eutanasia activa o positiva (accién médica por la que se pone fina la vida de una persona enferma, sea que ésta lo solicite o bien que se realice al margen o en contra de la voluntad del paciente) y pasiva o negativa (consiste en la no aplicacion de una terapia médica con la que se podria prolongar la vida de una persona enferma. 4) La distincién, sin embargo, no es la mas conveniente, porque puede dar la impresién de que se admite siempre, desde le punto de vista de moral, la eutanasia negativa o pasiva. 5) Creemos més oportuno circunscribir la actual discusién en tomo a dos términos: el de dejar morir en paz y el de eutanasia. Dejar morir en paz y con dignidad © La respuesta de la moral catélica clasica desde Domingo Soto: hay obligacién de utilizar los medios terapéuticos ordinarios, pero no existe obligacién ética de recurrir a medios extraordinarios * Hay que afirmar que la prolongacién fisica de la vida del enfermo no es el inico objetivo en la relacién médico-enfermo. Si bien es implicito que el médico procuraré por todos los medios la cura del enfermo y la prolongacién de su vida, al mismo tiempo el paciente no realiza una entrega absoluta en incondicional de todos sus derechos. * El “equilibrio” se hace més complejo si sumamos a esta situacién las responsabilidades penales en las que podria incurrir un médico acusado de un inadecuado 0 insuficiente tratamiento, o la asimilacién profesional de la muerte de un paciente. * En un documento, la Sazrada Congregacién para la Doctrina de la Fe se abordé el problema utilizando los términos de medios “proporcionados y extraordinarios”. Creemos que esta terminologia es la adecuada para abordar este problema, *GAPO, J, Eutanasia y el derecho a morir en parc, en AX \\ La eutanasia y el derecho a morir con dignidad, Paulinas, Madrid, 1984, 122-130

También podría gustarte