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LA ESCUELA DE CHICAGO: EL

NACIMIENTO DE REASCACIELOS
CONTEXTO HISTÓRICO, TIPOLOGÍAS, EXPONENTES Y EJEMPLOS
Contexto y marco histórico de las Exposiciones Universales.

La arquitectura en el mundo occidental durante la primera mitad del XIX se debate entre la
reinterpretación de estilos pasados (historicismo) y las investigaciones de los ingenieros
para las nuevas necesidades constructivas.

Ingenieros y arquitectos -de formación diferente- parecen competir en la nueva ciudad,


aunque los primeros se aplican a edificios singulares como estaciones de tren y los
segundos a la “reordenación” urbanística.

En la segunda siguen sin clarificarse las cosas, pero los arquitectos incorporan ya los
nuevos materiales (hierro, cemento, vidrio, hormigón armado…); y el diseño urbanístico en
la “nueva ciudad” lo que incluye espacios y “vista” de esos espacios: la fachada y la
articulación de las fachadas hacia la vía pública; el diseño del interior para la nueva casa
burguesa. El resultado será una superación del historicismo y el desarrollo del
“modernismo”

El triunfo de la burguesía como clase y la aparición como clase dominada del proletariado
industrial. Una pequeña burguesía que pugna por un espacio propio en la ciudad. Las
tensiones sociales tienen un reflejo político continuo: revoluciones y desplazamientos
masivos de población del campo a la ciudad o a países nuevos.

El racionalismo ilustrado se combina con el sentimentalismo romántico que introduce la


subjetividad “burguesa” como valor fundamental. El inconformismo burgués conlleva
también la mirada realista y naturalista al entorno, natural y social: el realismo será una
forma de crítica incorporada a la cultura burguesa. El positivismo filosófico es una de las
corrientes derivadas del triunfo de la idea de progreso y del uso de la ciencia. El socialismo
es otra ajustada al reformismo social.

La ciudad burguesa que se crea ahora es el fenómeno arquitectónico más relevante y el


que supone una reflexión más profunda de los arquitectos. Con anterioridad, la
“planificación urbanística” se había dado con los griegos (Hipodamo de Mileto), los romanos
(sus “campamentos”; el Foro…) y nada más hasta la ciudad ideal del Renacimiento
(Filarete). El Barroco se planifica el “lugar” de la Corte en la ciudad o alrededores y las
“plazas” que articulan espacio privado señorial y público o común. El Londres del XVIII es
donde primero se ensaya la nueva ciudad. Pero hubo fuertes resistencias a la planificación
en la orilla izquierda del Támesis.
Desde los años 40 en todas las grandes ciudades
europeas se comienza a planificar teniendo en
cuenta

• La higiene
• El abastecimiento
• El desplazamiento
• La seguridad.
• Son los ensanches (Lorenzo, 2009)

En París el barón Haussmann (1809-1891), prefecto de París, lleva a cabo la reforma del
centro de la ciudad entre 1853 y 1870 y por encargo del emperador Napoleón III: Impone el
trazado en cuadrícula, racional, para facilitar el tráfico, pero tiene también otras
preocupaciones: sofocar rápidamente cualquier lucha callejera de tipo revolucionario tras la
experiencia de “julio de 1830” o facilitar los desfiles militares tan queridos al emperador.
Pretende también evitar los focos de epidemias y crear amplias zonas de paseo -los
bulevares- además de introducir el jardín al estilo inglés dentro de la ciudad (anhelo de
Napoleón) Aunque el emperador no se preocupaba de las fachadas de los edificios,
Haussmann sí lo tuvo en cuenta, lo que le permitió tener apoyos, pues muchos criticaron la
obra de Haussmann por lo que supone de destrucción de la ciudad medieval. Quienes lo
alaban es por mantener la visión barroca de las grandes perspectivas. Influyó
decisivamente en las ampliaciones de otras ciudades como Florencia, Viena, Bruselas, etc.

El Proyecto de ciudad industrial de Tony Garnier (1869-1948) que da a conocer en 1917


concibe una ciudad funcional en barrios: trabajo, residencia, zonas de recreo, vías de
transporte, etc. La zona industrial se sitúa en el exterior y el núcleo de la ciudad era donde
se situaban los edificios públicos, hospitales, bibliotecas, etc. Debería hacerse en forma
lineal para permitir su expansión. Anticipa el urbanismo racionalista del siglo XX: casas
sobre pilotes, terrazas-jardín, ordenación rectangular, etc.

Condicionantes temporales, históricas y constructivas.

En el lugar donde el rio Chicago desemboca en el lago Michigan, el ejército americano funda
en 1804 el fuerte Dearbon, destruido por los indios en 1812 y reconstruido inmediatamente
después, la ciudad se extiende poco a poco hasta alcanzar, a finales de siglo, 1900 millas
cuadradas y 1.700.000 habitantes.
En las primeras décadas, la mayor parte de la ciudad se construye con madera. Se emplea
este material, desde un principio, según una técnica particular que ha recibido el nombre
de balloon frame. (Benévolo, 2002)

El pragmatismo norteamericano está presente en la mente de los arquitectos a la hora de


acometer las necesidades de la nueva urbe. También el sentido de la “economía” por lo
que los nuevos materiales (ignífugos, además), y el enorme avance técnico de la
Revolución Industrial; el acortamiento de los tiempos en la construcción; y la construcción
en vertical para exprimir el precio del suelo, estarán presentes en el planeamiento y en la
construcción. Y como no hay una tradición artística propia, la ruptura está servida. Después
de 1900 será Nueva York el nuevo centro.
Las características de esta arquitectura son:
Uso masivo de los nuevos materiales: hormigón armado,
hierro, vidrio y cerámica vidriada en la fachada.
La estructura metálica de los edificios permite levantar pisos
de forma modular y repetitiva.
Espacio se subordina a la función y ésa se impone sobre la
forma del edificio por lo que desaparece la decoración.
La construcción en altura, a la que se incorpora el ascensor,
la electricidad y el teléfono. Las habitaciones se piensan
“polivalentes” para que puedan cumplir diversas y cambiantes
funciones.
Arquitectos e ingenieros trabajan de la mano y asociados en equipos de despacho
(estudios) sin ningún problema. En el siglo XX será trasladada al resto del mundo al
asumirla el movimiento moderno y la arquitectura funcionalista y racionalista.
(PINTAT, 2003)

Escuela de Chicago

La Escuela de Chicago es la denominación con que se bautiza a un grupo de arquitectos y


al conjunto de edificios que construyeron precisamente en la ciudad de Chicago, bajo una
nueva y radical ideología arquitectónica. Su propuesta genera el funcionalismo una visión
o ideología arquitectónica que dictará las pautas de la arquitectura en el siglo XX. Así
mismo, marcó el inicio de la construcción de rascacielos, y la utilización de nuevos
materiales e impresionantes diseños que permitieron el surgimiento de las grandes urbes
que conocemos hoy en día por todo el mundo. Junto a este estilo arquitectónico llegan las
innovaciones y nuevas tecnologías tales como estructuras metálicas (esqueletos o armazón
de hierro), eliminan los muros de carga, uso del pilar de hormigón como soporte o cimiento,
ventanas extendidas horizontalmente por toda la fachada, desarrollo del ascensor eléctrico,
atractivas fachadas de mampostería.

Chicago fue el foco del progreso arquitectónico de los Estados Unidos a partir de 1880,
pues en 1871 la ciudad fue arrasada por un incendio, lo que obligó a levantarla de nuevo,
concediéndose gran importancia a la construcción a prueba de fuego, lo que permitió un
gran impulso a los nuevos estilos que se estaban aplicando en los edificios de oficina, que
tanta demanda había ganado. Siendo Chicago una ciudad floreciente, se produjo una gran
especulación sobre los terrenos y una gran demanda de construcción. La solución que se
adoptó fue la construcción en vertical: muchos pisos elevados sobre una planta reducida,
los rascacielos. Esto se pudo lograr gracias a la disponibilidad de perfiles de acero en
grandes cantidades y a la invención del ascensor eléctrico.

Principales Protagonistas

Henry Hobson Richardson

(Saint-James, 1838 - Brookline, 1886) Arquitecto estadounidense, uno de los más


destacados del siglo XIX, precursor de tendencias que hallarían su eco en la Escuela de
Chicago y en otras líneas de la arquitectura del siglo XX. Tras licenciarse en Harvard,
estudió en la Escuela de Bellas Artes de París y trabajó en el estudio de los hermanos
Labrouste, autor del Marshall Fields Store no es un
edificio que cuente con demasiados pisos, pero ya
empieza a despuntar entre los demás.

William Le Baron Jenney

(1832-1907) Fue un arquitecto e ingeniero


estadounidense, antiguo alumno de la École Centrale
des Arts et Manufactures (École centrale Paris, en
París de los años 1853 a 1856. Participó activamente
en las tareas de la reconstrucción de Chicago después
del incendio de Chicago.
El padre de la Escuela de Chicago proyectó El Home Insurance Company Building en 1884.

Daniel Hudson Burnham

(4 de septiembre de 1846 – 1 de junio de 1912) fue un arquitecto y urbanista


estadounidense de la escuela de Chicago, que experimentó nuevas técnicas constructivas
con el hierro.

John Welborn Root

(Lumpink, 1850-Chicago, 1891) Arquitecto estadounidense. Asociado con D. Burnham, de


esta colaboración nacieron el Monadnock Building y el Masonic Temple, en Chicago.
Contribuyó decisivamente en la elaboración del lenguaje arquitectónico de la Escuela de
Chicago

Burnham & Root; Dos arquitectos muy importantes en la Escuela de Chicago.

Louis Henry Sullivan

(Boston, 1856 - Chicago, 1924) Arquitecto y teórico estadounidense. Hijo de padre irlandés
y de madre suiza, pero de origen francés, emigrados a Estados Unidos, Estudió en el
Instituto Tecnológico de Massachusetts, en Cambridge; asistió al estudio de Frank Furness
Hewitt en Filadelfia, y fue alumno en Chicago del ingeniero William Le Baron Jenney. Fue
uno de los principales representantes. Su aporte más importante fue el diseño de diferentes
tipos de rascacielos, con la estructura interior de hierro bajo una atractiva fachada de
mampostería.

(Biografías y Vidas , 2019)

Elementos de arquitectura, urbanismo y espacio interior

Características

• La división de las edificaciones en tres partes: planta baja con mezanine; cuerpo o
volumen; y azotea o ático.
• Gran altura, con relación a los edificios precedentes.
• Eliminación del empleo de madera en estructuras y recubrimientos, para evitar
posibles incendios.
• Construcción con estructuras metálicas, principalmente acero, que permitía
superponer pisos (la edificación comienza a ser vertical, creación del rascacielos).
• Eliminación del muro como elemento estructural
• Empleo de revestimientos de mampostería, usualmente de terracota, para enfatizar
la estructura de acero.
• Incorporación de grandes ventanales en las fachadas, proporcionándoles ligereza y
luminosidad.
• Uso distintivo de ventanas en tres partes, consistentes de un panel fijo central con
una ventana de guillotina a cada lado (ventana Chicago).
• Surgen las llamadas “Chicago Windows‟, ventanas de dos partes divididas por una
parte central fija.
• Uso mínimo de ornamentación.
• Implementación del ascensor, inventado en 1864.
• Divisiones interiores removibles (muros de panel)
• Zapatas de concreto reforzado
• Estructuras de acero remachadas
• Recubrimientos a prueba de fuego en todos
los miembros estructurales
• Muro cortina (revestimiento de vidrio)
• Composición interior en pisos iguales.
• Máximo espacio y luz en cada piso.
• Modulación tanto en fachada como en planta. (Madrigal, -)

La arquitectura modernista

El modernismo se desarrolla a finales del XIX e inicios del XX en Europa (en paralelo a la
Escuela de Chicago) como una reacción estética contra el historicismo, aspirando a algo
“nuevo”. Precisamente se conocerá como Art Nouveau en Francia y Bélgica. [En Alemania
Jugenstiil; Sezession en Austria; Modern Style o Liberty en el Reino Unido; Modernismo en
España…]
Es una arquitectura que busca integrar todas las artes, incluyendo las “artes menores” como
el mueble o los objetos decorativos. Aunque reacciona contra la estética “simplista” de la
industrialización, acepta plenamente los nuevos materiales y técnicas constructivas.
Aunque es un estilo europeo, tiene variantes nacionales o, más claramente: personales, de
autor.

Busca explotar todas las posibilidades del hierro forjado tanto en funciones estructurales
como en la decoración. El uso masivo de la
línea curva busca recrear en la arquitectura
el movimiento, tal y como se está viviendo
en la cambiante e inquieta ciudad: es un arte
eminente urbano. Es un arte burgués y para
la burguesía, aunque ocasionalmente
aparezca en ambientes obreros. Pero es en
los ensanches burgueses donde se va a
apreciar, en edificios de viviendas “con
personalidad” que se ocupan en alquiler.
También habrá edificios de carácter público
o para fundaciones. Las revistas ilustradas
popularizarán este arte.

Los edificios son concebidos como un ser


vivo: las superficies sinuosas, la asimetría
en la distribución de las ventanas y puertas
y hasta se busca recrear la imagen de un ser vivo, vegetal o animal. El cromatismo es otra
de las características del modernismo. La pintura y, más frecuentemente, el uso de la
cerámica vidriada pero también el color de los mismos materiales usados. El modernismo -
como la misma Escuela de Chicago- busca que los elementos estructurales queden a la
vista y sean parte de la decoración. La arquitectura del siglo XX asumirá esa característica.

Las figuras clave de este movimiento son: Los belgas


Víctor Horta (1861-1947) y H. Van der Velde (1863-
1957); el francés Héctor Guimard (1867-1947); El
escocés Charles R. Mackintosh (1868-1928) un
auténtico diseñador de mobiliario y de interiores; El
austriaco Otto Wagner (1841-1918) y el catalán
Antonio Gaudí. (López., 1991)

Conclusión

Es un periodo de cambios en todos lo sentidos, y en el ámbito arquitectónico no es la


excepción, los materiales del tiempo de la revolución industrial se siguen utilizando, y cada
vez con mayor aprovechamiento. Los edificios se van transformando, aparecen los
rascacielos y las casas burguesas toman mayor auge. El diseño de interiores se desarrolla
con más naturalidad al punto de que haya personas que ya se dedican a la ambientación
de espacios y diseño del mobiliario. Aparece el modernismo al mismo tiempo, que rompe
con la rectitud y la arquitectura de módulos repetidos, llega el movimiento a los espacios,
figuras más orgánicas cuervas dan personalidad a los espacios, así como el uso de
azulejos para darle color a los mismos, es un proceso de cambio, pero que ha dejado un
legado grande, espacios que aun se pueden conocer y disfrutar y que han sido un parte
aguas de las ciudades actuales, tanto en su distribución estratégica, las formas de los
edificios y los interiores personalizados que le dan sentido a nuestros días.
Bibliografía
Benévolo, L. (2002). Historia de la Arquitectura Moderna. Barcelona: Editorial Gustavo Gili. .

Biografías y Vidas . (8 de Febrero de 2019). Biografías y Vidas . Obtenido de La enciclopedia biográfica


en linea : https://www.biografiasyvidas.com/biografia/r/richardson_henry.htm

López., M. A. (1991). Arquitectura y Escultura. Los grandes estilos. Madrid : Ediciones Granada. .

Lorenzo, H. R. (Abril de 2009). Slideshare. Recuperado el 08 de Febrero de 2019, de


https://es.slideshare.net/Ginio/arquitectura-escuela-de-chicago-y-modernismo

Madrigal, K. E. (- de - de -). Scribd. Recuperado el 8 de FEBRERO de 2019, de


https://es.scribd.com/document/332693145/ESCUELA-DE-CHICAGO-pdf

PINTAT, A. L. (2003). ARTERAMA, HISTORIA DEL ARTE. BARCELONA: VICENS-VIVES.

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