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DE LOS HECHOS
Ciudadano juez, hacemos constar que todos y cada uno de los bienes
que cada cónyuge ha adquirido posterior a la separación de cuerpo,
son de la exclusiva propiedad de cada uno de ellos y bajo ningún
concepto podrán ser considerados como parte de la comunidad de
gananciales. Es decir, serán del respectivo cónyuge y ningún derecho
tendrá el otro sobre ellos, cualesquiera bienes muebles o inmuebles
que a partir de esa fecha, recibimos o adquirimos, cualquiera de los
cónyuges. Ninguno de nosotros podrá obligar al otro en negociación;
es decir que cada uno de los cónyuges mantendrá la propiedad
individual sobre los bienes que adquirieron y en consecuencia tendrán
los más amplios poderes de administración y disposición sobre ellos
sin que por tales actos tengan nada que reclamarse. Sin embargo,
existe un bien inmueble que si forma parte de la comunidad
ganancial, y la división del mismo luego de declarado disuelto el
vínculo matrimonial se resolverá según lo dispuesto en el
ordenamiento jurídico venezolano.
PETITORIO.