Lavado frecuente de manos, con agua y jabón o una solución
de alcohol glicerinado. Evitar saludar de mano o de beso. Evitar frotarse los ojos. PARA LAS PERSONAS CON INFECCIÓN RESPIRATORIA AGUDA Cubrirse la boca al toser o estornudar. Usar toallas de papel para contener las secreciones respiratorias y botarlas a la basura después de su uso. Emplear mascarilla o tapabocas cuando vaya a tener contacto con otras personas. SIGNOS Y SINTOMAS Aumento en la frecuencia respiratoria. Se le hunden las costillas al respirar. Presenta ruidos extraños al respirar o “le silba el pecho”. No quiere comer o beber y vomita todo. Fiebre superior a 38.5 grados centígrados. Decaimiento y somnolencia. Ataques o convulsiones. Asfixia o dificultad para respirar. Dolor en el pecho al respirar o toser. Decaimiento o cansancio excesivo. Fiebre mayor de 38,5 grados centígrados. Expectoración purulenta o con pintas de sangre. TRATAMIENTO
Incrementar ingesta de líquidos.
Mantener la alimentación habitual. No suspender la lactancia al seno materno. Control del dolor y el malestar general Dirigirse al centro de salud más cercano si identifica alguno de los siguientes signos de alarma
¿QUÉ SON LAS IRAS?
Infecciones Respiratorias Agudas (IRA) La Infección Respiratoria
Aguda (IRA) constituyen un grupo de enfermedades que se producen en el aparato respiratorio, causadas por diferentes microrganismos como virus y bacterias, que comienzan de forma repentina y duran menos de 2 semanas.