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COMANDO DE EDUCACIÓN Y DOCTRINA DEL

EJÉRCITO
“ESCUELA DE INFANTERIA”

ONOR
H

CURSO AVANZADO DE INFANTERÍA


TRABAJO DE INVESTIGACIÓN

ASIGNATURA : GEOPOLITICA

TITULO : MINERÍA INFORMAL E ILEGAL EN


EL DPTO DE AYACUCHO Y SU
IMPACTO EN EL MEDIO AMBIENTE

DOCENTE : Crl Moisés GARCÉS RAMIREZ

ALUMNO : Cap Walter Hugo BURGA URVIOLA

ENE 2020
MINERÍA INFORMAL E ILEGAL EN EL DPTO DE AYACUCHO Y SU
IMPACTO EN EL MEDIO AMBIENTE

1. Introducción

La minería como actividad de alta rentabilidad empresarial y recaudación


fiscal, constituye un rubro importante en la producción nacional, más aún
si consideramos que el Perú está considerado con un país eminentemente
de potencial y vocación minera, enfocándonos en la región de Ayacucho
presenta dos aspectos importantes:
a) Tipos de extracción. - La actividad extractiva de los minerales de la
región Ayacucho, comprende la explotación de minas y canteras,
es decir la extracción de los minerales en su estado natural
distinguiéndose la minería metálica: como el zinc, cobre, oro, plata,
plomo, hierro, molibdeno, tungesteno, cadmio y estaño. En cambio,
la minería no metálica de la región, se refiere a la extracción de
piedra, arena, arcilla, caolín, cuarcita, mármol, silicio, yeso natural,
carbón mineral, entre otros.

b) Crisis en la Minería de Ayacucho. - En el departamento de


Ayacucho la actividad minera se ha visto deteriorada en el periodo
1980-1995, prácticamente habiéndose reducido al mínimo al igual
que en Huancavelica, como consecuencia de las acciones de
violencia social que se han generado con mayor incidencia en esta
parte del País. Es así como se registra que en 1995 la minería
ayacuchana participa en el PBI departamental con 1.92%
equivalente a 8 millones y medio de dólares mientras que en 1970
participaba con 8.12% y en 1978 con 8.99% en el PBI
departamental.

Siendo estos dos aspectos fundamentales para el análisis de la minería


informal que también tiene un impacto ambiental significativo en la región.
En la minería artesanal la informalidad de la misma constituye su principal
problema, ya que limita las posibilidades reales para su desarrollo integral:
contaminación ambiental, depredación de yacimientos existentes, graves
deficiencias de seguridad, discriminación social y económica, conflictos
con las compañías mineras formales, falta de transparencia en los
manejos financieros, etc.

2. Desarrollo en el tiempo

Pese a que la actividad minera fue diezmada durante los periodos de la


década de los 80 y 90. Por la extrema pobreza, el abandono de las zonas
rurales por las poblaciones campesinas producto del terrorismo y el
conflicto social por la falta de inversión pública y privada. Se pudo apreciar
un gran aumento desde el año 2000 en adelante.

Durante el período 2000-2005, el PBI de Ayacucho (a precios constantes)


creció a una tasa promedio anual de 5,6%, superior a la nacional (4,1%).
Son los sectores de construcción y minería los que más han crecido: 18%
y 11%, respectivamente. El PBI del sector agropecuario se ha mantenido
en el nivel del año 2000.

3. La ilegalidad y conflictos sociales

La minería informal amenaza al medioambiente en Ayacucho. Se estima


que en todo el departamento existen alrededor de 12 mil mineros
informales, quienes aún están muy lejos de cumplir con los requisitos para
su formalización.

El problema de la minería ilegal y artesanal también afecta a la población


ayacuchana, quienes en los últimos años son testigos de cómo el paisaje
de su región se ha ido alterando por esta actividad que genera un alto
impacto ambiental. Se estima que en todo el departamento existen
alrededor de 12 mil mineros informales, quienes aún están muy lejos de
cumplir con los requisitos para su formalización. A esta preocupación se
suma el hecho de que más del 60 % de los conflictos sociales en Ayacucho
se originan en problemas socioambientales.

Al respecto, el representante de la asociación de servicios educativos


rurales de Ayacucho, Omar Rosel, lamentó la falta de capacidad del
Gobierno regional para tomar medidas contra estos problemas, pese a que
ya han abierto espacios de diálogo para evitar futuros conflictos.

Es por ello que alrededor de veinticinco mil (25,000) mineros informales


desarrollan actividades en la región sur andina de Ayacucho, los cuales
están concentrados principalmente en cuatro provincias, dado a conocer
por el presidente regional ayacuchano, de ese entonces, Wilfredo
Oscorima Núñez. Detallando que la mayoría de estos trabajadores opera
en las localidades de Coracora, Pausa y Puquio, capitales de las
provincias de Parinacochas, Páucar del Sara Sara y Lucanas,
respectivamente; así como en la provincia de Sucre.

La autoridad regional especificó que en las referidas localidades se extraen


diversos minerales, en especial oro. "La situación de la minería informal en
Ayacucho es un tema preocupante y complejo, pues según información
estimada de la Dirección Regional de Energía y Minas tenemos unos
25,000 mineros informales. No tenemos un censo al respecto, ocurriendo
tragedias por faltas de medidas de seguridad como es derrumbes y
desapariciones de obreros informales, ante ella las gestiones regionales
durante estos últimos años trabajan en la convocatoria y en jornadas de
sensibilización para invitarlos a laborar de manera conjunta en su
formalización.

Analizando solo un yacimiento de minería ilegal el viceministro de Minas,


durante el año 2012, Guillermo Shinno Huamaní, señaló que unas mil
personas trabajan extrayendo minerales de manera informal en el cerro
Luicho, ubicado en el distrito de Colta. "Es un gran número de personas
porque se trata de un cerro bastante grande, de muchas hectáreas (108 a
110), algunos mineros trabajan por temporadas y otros todo el tiempo; pero
son un promedio de mil los que siempre están acá con sus familias", indicó.
Shinno explicó que el cerro Luicho tiene una suerte de huecos o forados,
cada uno de los cuales forma una mina, la misma que es operada por
grupos de mineros informales. Haciendo un llamado a los mineros
informarles a trabajar en la legalidad y en condiciones de seguridad para
evitar más pérdidas humanas. Ya que ese Jueves Santo de ese año (2012)
quedaron atrapados nueve mineros en un socavón del yacimiento Cabeza
de Negro, en el distrito iqueño de Yauca del Rosario, quienes fueron
rescatados sanos y salvos seis días después.

Situaciones similares se dan en particular en el sur de Ayacucho, sin


embargo, nada de la propaganda dada por el gobierno regional para
erradicar y/o legalizar la minería ilegal ha logrado disminuir aparentemente
por desidia de algunas autoridades e instituciones.

Un caso específico es de la empresa CASCAS, cuyas concesiones


ubicadas entre Palpa y Lucanas son usufructuadas impunemente por los
mineros informales pese a una acusación del Ministerio Público,
transportando los minerales sin que sean fiscalizados por la autoridad
ambiental y tributaria

En el 2017, un grupo de mineros ilegales atacaron la Comisaría de Palpa


en Ica, para recuperar un camión que transportaba 28 toneladas de
mineral aurífero sin procesar, extraídos de la concesión de CASCAS. Los
hechos fueron corroborados por la propia Dirección de Energía y Minas de
Ayacucho que confirmó la condición de ilegalidad en la que operan,
mientras los dirigentes detenidos alegaban lo contrario.

A pesar que los hechos que ocurrieron en Palpa, la fiscalía de Puquio inició
el caso, bajo el argumento que el mineral proviene de Lucanas cuando la
competencia se establece en el lugar donde ocurrieron los hechos
delictivos. Sólo 90 días, después se formalizó la acusación.

“La Policía, el Ministerio Público y el Poder Judicial no pueden actuar ante


los hechos delictuosos de estos inescrupulosos, quienes invaden las
concesiones mineras legales y las explotan sin control alguno. Estos
mineros se agrupan entre 200 y 300 personas y utilizan la violencia,
amedrentan a todo el mundo y usufructúan con total impunidad”, señaló el
especialista en minería Miguel Santillana.
4. Opinión Geopolítica

a. La región Ayacucho tiene una posición geográfica estratégica por la


cantidad de regiones con quien limita y el gran número de carreteras
que posee. Siendo fundamental para cualquier tipo de actividad
minera que se realice en la región. Ya que al unir la vía de inserción
en la región VRAEM como es la carretera 28B Quinua – San
Francisco que une la sierra de Ayacucho con la selva del Cusco.
Genera una vía principal de acceso para el comercio y transporte,
único a diferencia de sus regiones limítrofes. Que apoyado a la vía
“Libertadores” puede tener acceso a cualquier región limítrofe con
la Carretera Panamericana, columna vertebral del Perú en
transporte terrestre.

b. La región Ayacucho también se caracteriza por tener dos tipos de


regiones naturales como son la sierra y la selva, siendo apoyado
por la inversión estatal para su desarrollo en lo que corresponde al
presupuesto asignado por la región del VRAEM.

c. Formalizando la minería con los mineros artesanales e


implementando políticas de apoyo a la inversión privada la región
Ayacucho puede convertirse en potencia de recursos no
renovables, pero con alta rentabilidad para el PBI del estado.
Generando mayor desarrollo en la región y logrando disminuir la
pobreza y analfabetismo que aun se existe y que son los
generadores de que aun haya terrorismo y narcotráfico en la región.

5. Conclusión

Dentro de los ejes que sustentan el desarrollo regional de Ayacucho, la


minería tiene un papel fundamental en la economía regional, pero es
necesario avanzar hacia una minería responsable o sostenible que tome
muy en cuenta las consideraciones ambientales y sociales. En este marco
de gestión ambiental debe conjugarse la gestión pública efectiva, la
fiscalización, el control y vigilancia ciudadana, así como desde el lado de
las empresas las políticas y acciones de Responsabilidad Social
Empresarial, también las certificaciones ambientales y sociales
correctamente aplicadas.

Sólo así la región Ayacucho podrá ser geopolíticamente estratégica para


un gran desarrollo e impulso económico, pudiendo llegar a ser la envidia
de las regiones limítrofes.

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