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¿ADIÓS A LA UNIVERSIDAD?

¿ADIÓS A LA UNIVERSIDAD?*

Adrián Acosta Resumen


Silva**
C on el auge de la nueva economía
y de la sociedad de la información y del aprendizaje, las universidades
se han visto atrapadas en una serie de tensiones y desafíos que han
minado gradualmente su capacidad para responder a un nuevo en-
torno. Hoy el conocimiento fluye por la tecnología en una sociedad
multicéntrica donde las empresas, los sitios de Internet, o individuos o
grupos organizados para ofrecer nuevos conocimientos e información,
tienden a desplazar a la universidad como centro privilegiado para la
generación, distribución y almacenamiento de conocimiento en las
sociedades modernas. La nueva generación de desafíos a la universidad
tiene su origen en las afueras y en las periferias del campus universitario.
En esta suerte de búsqueda del “orden perdido” de la universidad y
de la educación superior el papel de las políticas es crucial.

Palabras clave: conocimiento, universidades, globalización.

Abstract
* Ponencia presentada
en el Congreso “Retos
y expectativas de la
universidad”, Nuevo
W ith the boom of the new economy
and of the society of information and learning, universities have
Vallarta, Nay., 18-20 de found themselves trapped in a series of stressing circumstances
octubre de 2001.
** Profesor investigador and challenges which have gradually undermined their capacity to
del CUCEA-Universidad cope with the new environment. In modern times, knowledge flows
de Guadalajara. Miembro
del Sistema Nacional de through technology in a society where companies, websites, indivi-
Investigadores. duals or groups organized to offer knowledge and information tend
Correo e: aacosta@
cucea.udg.mx to substitute universities as sole source of generation, distribution and
Recepción: 15 de enero keeping of such knowledge. Challenges emerge outside and around
de 2002. the campus. Policies play a key role in the search for “the lost order”
Aceptación: 30 de abril
de 2002. of universities and higher education.

Key words: knowledge, universities, globalization.

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La civilización capitalista es racionalista y paces de prever y adaptarse al fenómeno. Si los


“antiheroica”; las dos cosas a la vez, por supuesto.
profesionales de la ciencia robaron en el siglo
Joseph Schumpeter, 1942
XV sus secretos a los artesanos, alquimistas y
parteras para generar los cimientos de la inge-
Un fantasma recorre desde hace tiempo el mun- niería, la química y la medicina, en el siglo XXI
do, no como alma en pena sino como el espejo lo que veremos, muy probablemente, es como
nómada y trizado de los nuevos tiempos de la tras largos siglos de institucionalización del co-
civilización capitalista: la revolución del conoci- nocimiento en las universidades y las escuelas de
miento. Es un fantasma, como todos, extraño nivel superior, los piratas de la red, las redes em-
y misterioso, que recorre los pasillos y las aulas presariales pequeñas y grandes, y organizaciones
universitarias, pero ahora también habita páginas de ciudadanos altamente escolarizados, robarán
y direcciones de Internet, despachos de consul- los secretos de elaboración de la ciencia y la
torías privadas, think tanks de todo tipo, y labo- tecnología a las universidades para competir por
ratorios de cientos de empresas en el mundo. Su recursos, prestigio y dinero en el mundo opaco y
expansión y ubicuidad ha trastornado los límites hostil del mercado. De hecho ya algunas institu-
entre lo público y lo privado, y sus efectos for- ciones, dada la velocidad y fuerza del fenómeno,
man parte de las preocupaciones de los hombres han comenzado a reaccionar para tratar de man-
del Estado y los hombres de negocios. Algunos tener una presencia legítima y reconocida en una
sociólogos y politólogos han atestiguado su sociedad donde las redes del aprendizaje ya no
presencia, aunque otros niegan rotundamente fluyen solamente por las escuelas: el prestigioso
sus apariciones. Los científicos de las ciencias Massachussets Institute of Technology (MIT),
duras experimentan en sus respectivos campos por ejemplo, el año pasado liberó trescientos
de estudio la presencia constante del fenómeno, cursos en línea en sus páginas de Internet, abier-
y muchas empresas han establecido estrategias tas al público, para cursarlos desde la soledad de
para invocarlo sistemáticamente. Es un fantasma cualquier computadora personal, para luego ser
que amenaza con sus apariciones el lugar donde acreditadas y certificadas por el propio Instituto.
se configuró y alcanzó plena legitimidad en las Este y muchos otros esfuerzos similares
sociedades modernas: la universidad. Pero con el por sintonizar la capacidad y legitimidad de la
auge de la nueva economía y de la sociedad de la universidad en un contexto de cambios acelera-
información y del aprendizaje, las universidades dos y múltiples no ha sido una efecto inducido
se han visto atrapadas en una serie de tensiones desde las universidades, como suele suceder en
y desafíos que han minado gradualmente su este tipo de organizaciones burocráticas, sino una
capacidad para responder a un entorno que ya estrategia de adaptación institucional y en algu-
no es desde hace tiempo lo que solía ser. Nunca nos casos desesperada, a los desafíos y necesida-
como hoy el conocimiento fluye por los mares des del entorno. También el descubrimiento de
embravecidos de la tecnología en una sociedad nuevos campos científicos como el de la genética
multicéntrica, y son las empresas, los sitios de y el de la biotecnología han sido posibles gracias
Internet, o individuos o grupos organizados para a ciertas “externalidades” de las universidades
ofrecer nuevos conocimientos e información, los conformadas por periferias habitadas por esfuer-
que tienden a desplazar a la universidad como zos mixtos entre investigadores de laboratorios
centro privilegiado para la generación, distribu- de empresas privadas, científicos universitarios y
ción y almacenamiento de conocimiento en las patrocinios gubernamentales. En cualquier caso,
sociedades modernas. la nueva generación de desafíos a la universidad
Las universidades y el Estado han sido inca- tiene su origen en las afueras y en las periferias
del campus universitario (Enzensberger, 2001).

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El conocimiento científico y tecnológico a lo un nuevo universo de relaciones y requerimien-


largo del siglo XX fue considerado genéricamen- tos que ya no pueden abordar con las mismas
te como un bien público, pero hacia comienzos fórmulas del pasado remoto y reciente (Thurow,
del nuevo siglo circula cada vez más como un 1999). Las empresas, bajo las reglas de la com-
bien privado. Conocer implica poder, como lo petencia y la eficiencia tienen que reinventar
señalaba desde hace doscientos años Kant, pero constantemente sus capacidades de superviven-
cuando el Estado y el mercado se disputan la cia en el mercado, y las universidades comienzan
función de producir conocimiento ese poder a ver amenazada su posición y funciones en
se expande y se contrae al rimo de las tensiones un mundo definitivamente postindustrial y en
entre los esfuerzos públicos y los beneficios pri- algún sentido ciertamente postmoderno. Hasta
vados del proceso. El ascenso del Welfare State en poco antes de la invención de la Internet y el
Europa después de la segunda guerra mundial, complejo científico-tecnológico que la soporta,
basado en la legítima intervención estatal en el prácticamente nadie en el mundo cuestionaba la
mercado para redistribuir riqueza en sociedades importancia y el monopolio que la universidad
no sólo heterogéneas y plurales sino también tenía en la producción y distribución de la ciencia
desiguales, implicó también la formulación de y la tecnología. Pero al expandirse la influencia
un paradigma educativo donde las universidades de las nuevas tecnologías los patrones rígidos,
se constituyeron como el eje de la producción tradicionales, de producción del conocimiento
y difusión del conocimiento, ya sea mediante el pronto comenzaron a desafiar la función misma
apoyo de organismos del estado como en Fran- de la universidad. En esas circunstancias, la nueva
cia o mediante la cooperación estrecha entre las economía del conocimiento emerge como un
universidades, las empresas y el estado, como en campo que ha estudiado la manera en que se
Alemania o en Gran Bretaña. El control guberna- produce la riqueza en el contexto de la sociedad
mental directo o indirecto de la universidad fue un de la información y del conocimiento, y de los
proceso legítimo y esperado, un mecanismo capaz desafíos que ello implica para instituciones tra-
para crear no solamente los nuevos profesionistas dicionales como la universidad (OCDE, 2000).
y funcionarios de una estatalidad en expansión, Pero la nueva economía y el impacto de las
sino también para establecer sistemas nacionales nuevas tecnologías son fenómenos que van es-
de ciencia y tecnología capaces de proporcionar trechamente ligados a la emergencia de diversos
a empresas privadas, públicas y agencias estatales modos de interacción social visibles en las rutinas
los recursos cognitivos y tecnológicos necesarios cotidianas de millones de personas en todo el
para mejorar la producción económica y el bien- mundo. Hoy como ayer, la sociología de la vida
estar social. cotidiana revela la alteración de las costumbres
Pero es en los años ochenta, cuando la cri- y los comportamientos que producen directa o
sis económica y el declive del Estado social se indirectamente el consumo masivo de las innova-
combinaron con la tercera revolución industrial ciones tecnológicas, médicas o de comunicación.
y la revolución del conocimiento, donde puede El descubrimiento de las vacunas, o la invención
identificarse el punto de arranque de una nueva de la luz eléctrica, el teléfono y el automóvil im-
onda de larga duración que comenzaba a trans- plicaron una revolución silenciosa de los hábitos,
formar las relaciones entre las instituciones “esos grandes desconocidos de la historia”, se-
especializadas, la producción del conocimiento y gún señalaba hace tiempo Fernand Braudel. Ni la
la innovación tecnológica. Al cambiar las fuentes revolución socialista ni la democracia capitalista
de riqueza de los recursos naturales o manufac- alcanzaron el nivel ni la profundidad que han
turados a la producción de conocimiento, las tenido en la alteración de la vida cotidiana de
universidades y las empresas comienzan a habitar las personas y de los grupos las innovaciones

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tecnológicas y científicas. El capitalismo es el la evaluación, la calidad y la “excelencia”, cuyo


contexto y motor de esa revolución de las cos- costo (generalmente invisible) descansa sobre
tumbres, “el perpetuo huracán de destrucción los escasos recursos de las propias universidades
creadora”, como decía Schumpeter, con todas (Neave, 2001), en un proceso perverso y circular
las paradojas, tensiones y conflictos que ello tiene que termina por ensanchar aún más la brecha
en términos políticos y sociológicos. Y si bien es entre el conocimiento y la capacidad institucional
cierto que, en su esencia, el capitalismo “es un de investigación y registro de “lo nuevo”. Las
orden social que organiza y gasta sus energías en excepciones (que las hay) sólo confirman la regla.
pos del capital”, como señala Robert Heilbroner La defensa de la universidad pública mexicana
en su provocador Visiones del futuro (1996), no es exaltando el cumplimiento de su “misión social”,
menos cierto que ello tiene un impacto profundo sus contribuciones a la justicia social, su función
en la vida de los individuos, de sus prácticas e para formar profesionales comprometidos, o
imaginarios cotidianos, que cada vez más trans- para la creación de una conciencia nacional,
curren paralelos con las invenciones de la ciencia entre otros, son históricamente correctos y so-
y la tecnología. cialmente pertinentes, pero en el nuevo contexto,
Hay algo de misterio y mucho de incertidum- parecen ser cada vez más llamados heroicos a la
bre en la manera en que esta nueva revolución preservación de una institución que desde hace
cambia el orden de las cosas en universidades tiempo dejó de ser lo que era. Y la civilización
como las mexicanas. Por principio de cuentas, capitalista, como dice otra vez Schumpeter, es
la velocidad de producción del conocimiento racional pero también antiheroica, es decir, es un
sobre múltiples campos de las ciencias supera orden social que tiene la tendencia a jeraquizar y
con mucho la capacidad de procesamiento y diferenciar los problemas, pero es también una
distribución de las pesadas estructuras universi- civilización cuyo mecanismo central, el mercado,
tarias, cuyas autoridades están más preocupadas funciona como un auténtico filtro darwiniano
por las cuestiones políticas, es decir, por tratar capaz de hacer desaparecer a aquellas ideas e
de evitar que “toda la gente se le ponga brava al instituciones que descansan solamente en su-
mismo tiempo” (la frase es cortesía del politó- puestos heroicos.
logo Antonio Camou), que por tratar de generar Entre la larga lista de déficits que podemos
condiciones para interpretar y “tematizar” la enumerar en la universidad mexicana contem-
revolución científico y tecnológica que recorre poránea en estos tiempos difíciles se encuentra,
el mundo. Cada nuevo proyecto que intenta creo que en primer lugar, el de su capacidad
desarrollar un investigador solitario o un grupo institucional para resolver sus desafíos internos
de investigadores se enfrenta a la siempre titánica y externos. No obstante los numerosos cambios
tarea de elaborar un state of art del conocimiento y transformaciones que a lo largo de los años
científico en cada tema, cuando el conocimiento noventa experimentaron varias universidades
sobre un tema o un tópico avanza geométrica- públicas, así como la modificación del perfil de la
mente en las sociedades modernas. Es un típico intervención estatal en el campo de la educación
problema de arritmia entre la “liebre” del conoci- superior, sería insostenible afirmar que ello ha
miento y la “tortuga” de la investigación, pero un propiciado la existencia de un sistema nacional
contexto donde el aprendizaje ya no transcurre de educación superior o la emergencia de un
por las vías tradicionales. El fenómeno tiene ya nuevo “modelo” de universidad pública. La
sus consecuencias en muchas universidades pú- persistencia de la crónica alta dependencia de
blicas de América Latina, donde a la tradicional nuestras universidades del financiamiento públi-
conflictividad política de sus instituciones se le ha co, la concentración de la matrícula estudiantil
añadido una larga lista de tareas relacionadas con en un puñado de carreras tradicionales, o la

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centralidad de la política como centro regulador por restricciones financieras y conflictos políticos,
de la vida académica y administrativa de nuestras han perdido desde hace tiempo la capacidad de
universidades, son sólo algunos de los hechos generar ideas, de producir mapas interpretativos
que desafían cualquier visión optimista del ver- que permitan comprender los nuevos fenómenos
dadero alcance de los cambios que observamos y debatir racionalmente alrededor de ellos. Esa es,
a lo largo de la década pasada. en realidad, la nueva “misión de la universidad”,
Las políticas de incentivos ciegos que fueron una misión que difícilmente puede producir el
el eje de las políticas públicas federales a lo largo mercado. Las ideas, decía Weber a finales del
del periodo intentaron sustituir a las políticas siglo XIX, tienen consecuencias políticas. Hace ya
de patrocinio benigno y negligente que ocurrie- más de dos siglos, el poeta alemán Heine advirtió
ron en los años dorados del “desarrollismo” a los franceses que no subestimaran el papel de las
universitario, es decir, aquel tipo de expansión ideas; los conceptos filosóficos criados en la quie-
de las fronteras universitarias que combinó cre- tud del cuarto de estudio de un profesor podrían
cimiento explosivo de la población estudiantil y destruir una civilización. Hoy, que la velocidad
magisterial con la burocratización anárquica y el del cambio tecnológico y científico abruma y
desequilibrio de la organización de la universi- sorprende a filósofos, economistas y sociólogos,
dad. No contamos aún con información precisa a funcionarios y ciudadanos, las ideas parecen
ni contundente que nos permita evaluar con escasas, limitadas y pobres para entender lo que
claridad los efectos de esas políticas basadas en ocurre en el nuevo mundo global y tecnológico.
incentivos instrumentadas en la última década, Esa antiguas casa del saber que son las universida-
pero sí tenemos los registros cotidianos que des, desde hace tiempo han pasado a ser parte del
hablan de su enorme dispersión y fragilidad en paisaje en una sociedad de nómadas y piratas, hijos
términos del sistema y de las instituciones de de la libertad y fanáticos de la competencia y la
educación superior. Las universidades públicas, tecnología. Recuperar esa capacidad, estimulando
en particular, se adaptaron de manera pragmá- el debate intelectual y político, es, quizá, una de
tica e incremental a los cambios en las políticas los desafíos centrales para rediseñar a la univer-
federales, creando nuevas carreras, equipando sidad no solamente en el contexto de la sociedad
con flamantes computadoras los campus uni- del conocimiento, sino para formular nuevos
versitarios, contratando nuevos académicos o arreglos institucionales con el Estado y con la
reconvirtiendo a sus jóvenes o viejos profesores sociedad orientados a conciliar, nuevamente, la
mediante el filtro purificador del posgrado a casi libertad académica con el compromiso público
cualquier precio en casi cualquier institución de la universidad.
nacional o extranjera que ofreciera maestrías o En esta suerte de búsqueda del “orden perdi-
doctorados con el costo más bajo o el tiempo do” de la universidad y de la educación superior
más corto posibles. El resultado de todo ello, el papel de las políticas es crucial. En un contexto
que sin duda ha tenido una alto costo público social marcado por la incertidumbre y el cambio,
dado el hecho que ocurrieron en tiempos sociales de transformaciones vertiginosas en el papel y
y financieramente difíciles, aún no lo sabemos el desempeño del Estado pero también por el
con claridad. proceso de individualización de la vida social,
Pero quizá la mayor de las capacidades que ha la elaboración e instrumentación de políticas
perdido la universidad y en general la escuela en públicas en el campo de la educación superior
México y en el mundo en un contexto de cambio universitaria es un proceso que requiere de la po-
vertiginoso es la de hacer inteligible el proceso y lítica, es decir, del acuerdo y la negociación entre
el sentido de esos cambios. Nuestras instituciones visiones y concepciones diferentes de los que
de educación superior, erosionadas severamente debe y puede hacerse con la educación superior.

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La política, ya lo sabemos, es la pesadilla de los universitario asegura un mejor desempeño acadé-


tecnócratas y de muchos de nuestros empresarios mico? ¿Son los mejores modos o estilos de ges-
y autoridades públicas, pero sin ella cualquier tión aquellos centrados en el ejercicio clientelar
intento de transformación significativa de la o patrimonialista para asegurar buenos niveles
educación superior que intente conciliar libertad de calidad académica? ¿Es viable la intención
académica, autonomía institucional, accountability, de crear universidades de investigación en con-
y financiamiento público o privado suficiente y textos institucionales surgidos y desarrollados
consistente en el tiempo, llevará a lo mismo que en tradiciones fuertemente profesionalizantes?.
hemos visto en el pasado reciente: la persistencia En los tiempos del “potsindicalismo”, ¿qué papel
de nuestros viejos problemas y la incertidumbre pueden o deben jugar las organizaciones gremia-
respecto del futuro de nuestras universidades. les de nuestras universidades? ¿Qué rol pueden
Hay que recordar al siempre pertinente Goure- jugar las organizaciones estudiantiles? ¿Cuál es o
vitch (1993): “La prosperidad oscurece una debería ser la función de los gobiernos locales en
verdad que los tiempos difíciles ponen en claro: relación con las universidades estatales? ¿Puede
la elección hecha entre propuestas conflictivas haber políticas federales de educación superior
surge de la política. La interpretación triunfante sin políticas estatales deliberadas y activas en el
será aquella cuyos partidarios tengan el poder nivel local y regional? Estas preguntas y segu-
suficiente para dar a su opinión la fuerza de ley”. ramente muchas otras más, están en el corazón
Pero la otra dimensión de los nuevos arre- de la nueva agenda institucional de reformas
glos institucionales que requiere la universidad que parecen indispensables para avanzar en la
pública tiene que ver con la vida interior de renovación de nuestras universidades. Definirlas
nuestras organizaciones académicas. Sería de con precisión y generar las condiciones para su
una ingenuidad enternecedora suponer que abordaje productivo, requiere no sólo de volun-
solamente con un acuerdo y cambio en las po- tad política o de buenas intenciones (aunque eso
líticas públicas federales de educación superior ayuda), sino de la capacidad institucional para
podríamos, ahora sí, iniciar la construcción de instrumentar acciones y estrategias específicas
un verdadero sistema nacional de educación de transformación de mediano y largo plazo. En
superior o comenzar a resolver exitosamente otras palabras, la nueva generación de reformas
los viejos y nuevos problemas que enfrentan universitarias es un asunto de poder, no de vo-
nuestras universidades públicas. Más realista luntarismo, una cuestión de creación de recursos,
(y arriesgado por supuesto), es asumir que son organización y capacidades institucionales que
los cambios internos de las instituciones de la permitan a los actores involucrados (comuni-
educación superior los que pueden asegurar un dades y autoridades universitarias, gobiernos
tránsito gradual hacia una educación centrada locales y federal) encontrar fórmulas políticas
en el aprendizaje, la investigación y los códigos de acuerdo para diseñar e instrumentar políticas
académicos que garanticen la legitimidad social financieras, de rendición de cuentas, de equidad o
y la capacidad institucional de nuestras universi- de calidad, orientadas hacia la creación de capa-
dades públicas. Y aunque ello es un proceso que cidades institucionales y sistémicas adecuadas a
ya ha iniciado en varias instituciones singulares, los nuevos tiempos de la vida social, económica
una agenda cargada y cruzada se impone en y política del país. Construir y renovar cíclica-
las tareas de la nueva generación de reformas mente ese poder institucional es, me parece, el
universitarias, que pasan, como toda agenda que desafío maestro de las políticas de educación
se respete, por la formulación de un conjunto superior del siglo XXI.
de preguntas para las cuales aún no contamos
con respuestas precisas: ¿qué tipo de gobierno

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Referencias

ENZENSBERGER, H.M (20001). “La nueva utopía”, Nexos, núm. 283, julio.
GOUREVITCH, Peter (1993). Políticas estratégicas en tiempos difíciles, México, Fondo
de Cultura Económica.
NEAVE, Guy (2001). Educación superior: historia y política. Estudios comparativos sobre
la universidad contemporánea, Barcelona, Gedisa.
OCDE (2000). Knowledge Management in the Learning Society: Educaction and Skills, París.
THUROW, Lester C. (1999). “Building Wealth”, The Atlantic Monthly, vol. 284, n.
6, Junio.

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