Está en la página 1de 4

25-11-2016 Facultad de Filosofía

“San Felipe de Jesús”

Nombre: Maximiliano Reyes Corona.

Maestro: Miguel Ángel Pérez Quijano.

Materia: Seminario.

Evidencia 2
Introducción

La reflexión filosófica ha acompañado al hombre a lo largo de su existencia, puesto


que es el único ser que se cuestiona sobre sí mismo y sobre el mundo que lo rodea.
La historia de la filosofía, se desarrolló en tres temas centrales: primero, la
metafísica, después la epistemología y, finalmente, la antropología. Esto se debe a
que primero se preguntó el hombre sobre el ser, luego sobre la forma en que se
obtenía el conocimiento sobre ese ser y posteriormente sobre el ser que conoce al
ser, es decir el hombre mismo.

Desarrollo

De la comprensión que se tenga de la naturaleza humana deriva el trato que debe


dársele a todo ser que posea dicha naturaleza, a lo que denominamos “dignidad”.
Vocablo que deriva del latín dignitas, que a su vez deriva de dignus, cuyo sentido
implica una posición de prestigio o decoro, “que merece” y que corresponde en su
sentido griego a axios o digno, valioso, apreciado, precioso, merecedor.

El objetivo de la ciencia es describir, explicar y predecir los fenómenos naturales y


sociales, con mayor o menor precisión según las características del estudio y la
disponibilidad de recursos teóricos-metodológicos y técnicas a fin de tener un mayor
dominio sobre ellos y poder ejercer su práctica transformadora en forma más
acertada. Debido a que la ciencia no se ocupa de producir verdades absolutas se
puede decir que su principal objetivo es producir modelos útiles de la realidad ya
que puede hacer predicciones basadas en la observación que benefician a la
sociedad y a los individuos para sacar sus conclusiones.

Conforme avanza la ciencia y el conocimiento se socializa, fundamentalmente


mediante las posibilidades de su aplicación, las sociedades van adoptando
acuerdos y consensos sobre el carácter ético de determinadas prácticas, teniendo
muy en claro que el desarrollo del conocimiento ha de tener como guía principal el
beneficio de la humanidad y el respeto a la dignidad de los individuos.
Podríamos afirmar que así como el desarrollo científico y tecnológico en estos
ámbitos enfrenta a los individuos a nuevos riesgos en relación con el respeto de su
dignidad, la que incluso es puesta en duda en determinados estadios del desarrollo,
también son ocasión para la reafirmación del respeto a la dignidad humana, e
incluso para el desarrollo de nuevos derechos humanos o desarrollos específicos
de los ya existentes.

La dignidad no puede ser relativizada, ni depender de ninguna circunstancia. Por


eso es de trascendental importancia hacer un análisis antropológico de la persona
humana y así buscar un sentido a la vida del hombre, incluso cuando se encuentra
cercada de dolor y sufrimiento. Por pertenecer a la naturaleza humana, todo
hombre, en la situación en que se encuentre, es en sí mismo digno y merecedor de
respeto.

Por tanto, a pesar del progreso de la ciencia y de la desmitificación de la naturaleza


que se ha derivado de ella, la vida continúa teniendo un carácter sagrado, y sigue
siendo un misterio trascendente para el hombre. Sin embargo, el hombre no ha
dejado de ocuparse de ella, de intentar dominarla y usarla como si fuera un juguete,
es decir, ha relativizado el valor esencial de la vida. El respeto de la dignidad de la
persona involucra varias características: cada persona es irrepetible y única, cada
hombre es irremplazable y por lo que es en sí mismo: un ser humano.

Teniendo en cuenta este panorama, es importante aclarar lo que se quiere expresar


con la palabra vida. Es, en efecto, un término que define realidades intercambiables
ya que la vida de una planta es muy diferente a la vida animal o humana. Para
Tomás y Garrido “la vida humana tiene su identidad genética, responde a una
singularidad biológica, es individual, irrepetible y paradójicamente presenta
interioridad y apertura”. La vida no solo es la esencia de la existencia del hombre en
el mundo viéndola desde lo meramente biológico, sino también “se refiere a la vida
plena, objeto del designio creador de Dios, que es la que en sentido propio, tiene
valor absoluto”. La vida además, es una interrelación de todos los hombres, unos
con los otros, en la que se debe buscar el bien común.
Conclusión

El concepto de dignidad humana tiene su origen en la antigüedad griega; sin


embargo, se ha enriquecido en su significado y alcance a lo largo del desarrollo de
la historia humana, pasando de ser un concepto vinculado a la posición social a
expresar la autonomía y capacidad moral de las personas, constituyéndose en el
fundamento indiscutible de los derechos humanos. Especial relevancia tiene la
dignidad humana, como elemento para enfrentar y desarrollar las normas relativas
a las transformaciones sociales provocadas por el desarrollo científico y tecnológico.

Bibliografía
Pinzón, I. M. (26 de Junio de 2012). Instituto Filosófico-Teológico Santa Escolástica . Obtenido de
http://ifte.blog.arautos.org/2012/01/la-dignidad-humana/

Víctor M. Martínez, B.-G. (1 de Agosto de 2012). Elsevier.es. Obtenido de


http://www.elsevier.es/es-revista-boletin-mexicano-derecho-comparado-77-articulo-
reflexiones-sobre-dignidad-humana-actualidad-S0041863313711219

También podría gustarte