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ESCENA 6

Mujer y hombre, jóvenes.

El: No tenía muy clara la idea de lo que pasaría cuando dejáramos de hablar.
Seguramente aflorarían esas verdades nunca dichas y las rabias no sanadas y todos esos
lados monstruosos que ambos escondíamos por miedo de perder al otro.

Ella: Yo creí que simplemente haríamos el amor.

El: Con suerte hubiéramos terminado enfrascados en esa estúpida discusión que dice
que no es lo mismo pichar que hacer el amor.

Ella: Yo nunca utilizo la expresión pichar.

El: Y yo nunca he pichado contigo, siempre te hecho el amor.

Ella: Alguna vez lo hicimos

El: siempre.

Ella: ¿a ti te duele?

El: la vida duele.

Ella: esa no es la pregunta. ¿un trago?

El: creí que ya no tomabas.

Ella: ¿Qué otra cosa venimos a hacer a este lugar?

El: siempre fue un juego para ti.

Ella: no juego más

El: por favor, solo una vez más.

Ella: ¿me das un beso?

El: ¿un beso?

Ella: eso hacen las personas que se aman

El: creía que nosotros ya no nos amábamos.

Ella: podríamos fingir que si… tú lo hiciste durante mucho tiempo.

Silencio
El: ¿Por qué me miras tanto?

Ella: ¿Y tú?

El: ¿yo?

Ella: si, tú, ¿Por qué no me miras tanto?

Silencio

El: ayer, cuando llegaba a casa, mis vecinos discutían… acerca de la comida creo… a veces

siento que…

Ella: dame un beso

El: que un día de estos voy a llegar a casa y habrá policías y gente merodeando el

espectáculo: mis vecinos muertos, ella asesinada por él y el por mano propia. mi novio

dice…

Ella: dame un beso

El: que mis vecinos discuten sobre cosas pueriles

Ella: ¿pueriles?

El: si, pueriles.

Ella: no acabo de comprender.

El: pueril es lo que nosotros hacemos…

Ella: ¿lo que nosotros hacemos?

El: si, tirar cosas, jugar juegos estúpidos, hablar sin sentido alguno, vernos y no decir

nada, o querer vernos y no saber para qué ni por qué.

Ella: ¿como tu relación?

Silencio

El: solo uno

Ella: ¿un qué?


El: un beso

Ella: ya no quiero

Silencio

El: Está muy bueno.

Ella: ¿Quién?

Silencio

Ella: ¿En quién estás pensando?

El: tu novio.

Ella: ¿Está bueno?

El: No está mal.

Ella: No está mal.

Silencio

Ella: Los hay más buenos

El: ¡Claro que sí! ¡Claro que sí!

Ella: Pero los hay mucho peores, ¿no?

El: Sí, sí, sí, también

Ella: Pero muchos ¿no?, muchísimos, mucho peores.

El: ¿Tú crees?

Ella: ¿No tienes ojos?, ¿no lo ves?, ¿no los miras cuando vas por la calle?

Ella: A veces.

Ella: Mentira.

El: no te entiendo.

Ella: no te soporto

El: Me voy, no puedo perder el tiempo de esta manera.


Ella: ¿puedo ir contigo?

El: No.

Ella: haremos lo que te gusta.

El: ¿los dos?

Ella: si… sabes… no hace falta darle tiempo a la vida y cuando menos lo esperas tienes

tetas y pelos en los testículos, el coño húmedo y el dolor en el pecho… eso si que es

típico en nosotros… el dolor en el pecho…

El: ¿y por qué duele el pecho?

Ella: después de qu eme dejaste y estuve solas y nadie me visitaba porque… yo… solo

quería… a veces cuando estaba en la cocina me quedaba mirando hacia ningún sitio y

parecía que le hablara al vacío y lloraba y sentía en voz baja que me dolía el pecho…

El: nadie se acostumbra a esto… nadie se acostumbra a vivir en el mundo real.

Ella: en el mundo real no quiero vivir

El: ni yo

Ella: esta bien, pero solo uno

Se besan

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