Está en la página 1de 3

Tratamiento (técnicas cognitivas y conductuales)

*Toda la información a continuación mostrada es


extraída y parafraseada de

Es importante tener en cuenta que el hecho de ser una terapia con un enfoque
cognitivo-conductual nos implica que lo que apliquemos en la conducta, se
reflejará a nivel cognitivo y que lo que apliquemos a nivel cognitivo, de la
mente, se reflejará en nuestra conducta.
Una de las técnicas que se aplican en ésta terapia es la técnica del rompimiento
del circuito de retroalimentación negativa.
Es bien sabido que, de forma automática, todos tenemos un juicio de valor,
una idea, sobre algún hecho o suceso que experimentemos en determinado
momento y que el cuerpo reacciona a estas ideas. De cierta forma, no
podemos controlar estos pensamientos automáticos pero sí podemos
redirigirlos. Personas con problemas emocionales o de autoestima, van a tener
una tendencia a que cualquier problema, por más mínimo que sea, les
produzca pensamientos que les hagan recaer nuevamente sobre aquello que
les afecta normalmente. Por ejemplo, una adolescente con problemas de
autoestima que, después de mucho esfuerzo y estudió, no logró pasar un
parcial, los pensamientos automáticos serán “Lo raspe, no sirvo, soy una inútil,
no sirvo para nada, debería morirme”. Esta técnica consiste en, en lo que se
detectan estos pensamientos, automáticamente empezar a pensar en cosas
positivas relacionadas al problema, como todo lo que pudiste haber
aprendido, las cosas que ya sabes, el conocimiento de cómo son esas
evaluaciones y proponerse a estudiar más.
Otra técnica utilizada es el autocontrol, para poder lograrla el paciente debe:
1. Ser capaz de reconocer los problemas
2. Establecer objetivos. Al principio pueden ser pequeños, para poder
empezar poco a poco, pero es importante llegar a que se controle por
completo el comportamiento problema.
3. Entrenar en las técnicas para aplicarlo
4. Aplicarlo correctamente
5. Reevaluar
La última parte, la reevaluación, es muy importante, ya que debido a ella es
que el terapeuta puede dictaminar si es necesario otro tipo de técnica o ésta
está dando resultados.
En el entrenamiento en auto-instrucciones nos sirve para pacientes con TDH o
por déficit de atención, este consiste en hacer de forma sucesiva un mismo
ejercicio de forma alta y clara, de forma tal que el paciente sepa cómo hacerlo,
los pasos para hacerlo son:
1. El paciente realiza una acción por medio de instrucciones en voz alta
2. El paciente realiza la acción por medio de “auto-instrucciones” en voz
alta
3. El paciente realiza la acción dándose “auto-instrucciones” en voz alta
4. El paciente realiza la acción dándose “auto-instrucciones” en voz baja
5. El paciente realiza la acción con “auto-instrucciones” encubiertas.
Las “auto-instrucciones” son preguntas que nos permitan:
 Definir el problema
 Entender el problema
 Limitar el problema
 Autoevaluación
De igual forma, en caso de ser necesario, se puede utilizar una
retroalimentación positiva o negativo-positiva, siendo ésta última un apoyo
de, a pesar de no haberlo hecho de la forma correcta, se puede mejorar.
Bibliografía
Rodríguez Mejías, E. (05 de 12 de 2011). Scribd. Obtenido de Enfoque congnitivo conductual:
https://www.scribd.com/doc/77045878/Enfoque-Cognitivo-Conductual

También podría gustarte