Está en la página 1de 8

ANIMALES EN PELIGRO DE EXTINCIÓN.

Hace poco más de cinco décadas que los naturalistas comenzaron a


emplear el concepto de "la extinción" y éste empezó a hacerse cada vez más
popular para designar un fenómeno que la actividad humana estaba
provocando en todo el planeta: La desaparición de especies de la flora y la
fauna silvestres.

La expansión constante del humano sobre la naturaleza, origina la


destrucción de la cadena alimenticia animal, desequilibrando el status quo de
las especies, inclusive al humano, quien subsiste gracias a la madre
naturaleza, al igual que todas las especies, con diferencia de que la nuestra,
es la única que daña al ambiente.

La extinción de los animales y el peligro de extinción de los animales es


un problema que tenemos que solucionar para lograr mantener las especies
animales para futuras generaciones

La vida silvestre es un claro ejemplo de la estrecha relación entre cada


uno de los componentes de un ecosistema, ya que la eliminación de cualquier
especie acaba provocando el desequilibrio de los ecosistemas y la destrucción
de fuentes de investigación científica. Por eso es necesario cuidar y respetar
nuestro planeta y a todos sus habitantes. A continuación presentamos un
resumen de algunas de las especies animales en muy serio retroceso
numérico.

En el mundo hay más de 500 especies que están en extinción.


Algunas de las razones son: caza por deporte, caza
comercial, destrucción de su hábitat, animales para zoológicos, etc.

Las 10 principales especies con mayor peligro de extinción del planeta

El oso polar: El primer puesto en nuestra lista lo ocupa el oso polar, que
podría desaparecer como especie dentro de 50 años si, como está previsto,
continúan reduciéndose las placas de hielo del Ártico. La capa de hielo del
océano Ártico se derrite a un promedio de un 9% cada diez años. De acuerdo
a estos cálculos, la región ártica podría perder su masa de hielo en verano a
mediados de este siglo. Los osos polares pertenecen a una especie que
depende enteramente de la existencia del mar congelado. Estos utilizan el
hielo como plataforma flotante desde la cual pueden cazar focas. En la
actualidad solo existen entre 20.000 y 25.000 ejemplares.

El tigre de Bengala: El segundo animal más amenazado es el tigre de


Bengala, que habita en manglares entre Bangladesh y la India. El tigre de
Bengala o indio (Panthera tigris tigris) es, después del tigre siberiano, la
segunda especie de tigre más grande del planeta. Debido al cambio climático
y el crecimiento del nivel del mar cerca del 70% de su hábitat podría perderse
antes de 2060. Su situación actual es alarmante y es por eso que se han
creado nuevas reservas para su preservación en la India. También son
extinguidos por cazadores furtivos, argumentando que representan un peligro
para el hombre, pero al mismo tiempo aprovechan sus pieles o sus cuerpos
enteros para ser disecados.

El coral: Existen en la actualidad 231 especies de corales en peligro de


extinción, amenazado o vulnerable. Cuando los corales mueren, le ocurre lo
mismo a un montón de plantas y animales que dependen de ellos para
conseguir alimento o protección, por lo que puede llevar al colapso de
ecosistemas enteros.

El canguro: Debido al calentamiento global, la especie más emblemática


de Australia, el canguro, podría desaparecer en pocos unos años. Se calcula
que con sólo dos grados centígrados más de temperatura podría ocasionar un
devastador efecto sobre las poblaciones de canguros en Australia. Si las
estaciones secas se hacen más caliente y se prolongan más en el tiempo, a la
par de que los niveles de precipitaciones se hacen imprevisibles, es muy
probable que se agote los pastos con los que los marsupiales se alimentan.

La ballena: La cacería comercial y para su "investigación" por parte de


Japón, el tráfico marítimo, la contaminación de los mares, el cambio climático
y fenómenos como "El Niño" o "La Niña" amenazan la vida de las ballenas en
el mundo. Las especies más comprometidas son: la jorobada, azul, franca, fin,
cachalote y sei.

El pingüino: Las cuatro principales especies de pingüinos que viven en


la Antártida están amenazadas de extinción a causa del calentamiento del
planeta. El calentamiento es cinco veces más rápido en los polos que en el
resto del planeta. Otro grave problema consiste en los derrames de petróleo,
por parte de los buques cargueros, que se extienden por todo el globo.

Las colonias más importantes de pingüinos en Nueva Zelanda, Sudáfrica,


Australia, Oceanía, Antártida y Argentina son víctimas de ellos. La presencia
humana en los confines del planeta ha causado estragos.

La tortuga de mar: La pesca comercial y la destrucción por el hombre


de las áreas de anidado en las playas, amenazan con acabar con una especie
que lleva 150 millones de años habitando la Tierra. El actual descenso del
número de tortugas marinas del Pacífico es un ejemplo de la mayor extinción
de una población de animales vista desde hace muchos años. Su desaparición
es casi tan rápida como la extinción del bisonte en América del Norte en el
siglo XIX.

El Orangután: La octava posición la ocupa el orangután. En dos islas de


Indonesia donde habita este gran simio, el cambio climático provoca un
aumento de las precipitaciones durante la temporada de lluvias y de los
incendios en la de sequía. Los orangutanes, por ser animales lentos, a menudo
perecen sorprendidos por incendios forestales. Los orangutanes son cazados
como trofeos, y los humanos estamos destruyendo su hábitat. Se podrían
llegar a extinguir dentro de los próximos 40 años.

El elefante: Aunque el cambio climático y la deforestación son culpables


de que la especie se encuentre en esta lista, el principal enemigo del elefante
siguen siendo los cazadores furtivos que buscan su marfil. Este es un elemento
muy apreciado por las personas que no tienen consideración hacia los
elefantes en especial los de cultura oriental en donde el marfil es un bien muy
preciado. Una maravilla de la evolución que por culpa de algunos hombres
está en peligro de extinción.

El albatros: 19 de las 21 especies de este animal están amenazadas en


todo el mundo, la proporción más alta de especies en peligro de extinción en
la familia de las aves. Dos especies están "en peligro crítico", el "Albatros
Ámsterdam", natural del Hemisferio Sur, y el "Albatros de las Islas Catham",
reducido a unos pocos miles de ejemplares al este de Nueva Zelanda; siete se
encuentran "en peligro" y diez pasan por una situación "vulnerable".
PLANETA EN PELIGRO DE EXTINCIÓN.

LA TIERRA EN PELIGRO

Las actividades humanas amenazan el equilibrio natural de la Tierra.


Talar árboles, contaminar el aire y el agua o dejar que los desiertos se
extiendan son las formas mediante las que el ser humano altera el medio
ambiente.

Si los daños causados al ambiente en que vivimos continúan, la Tierra


pronto estará en peligro. Podría dejar de ser un planeta vivo.

La tierra es uno de los nueve planetas del sistema solar. Se diferencia


de los otros planetas por contener vida animal y vegetal. La vida es posible en
la Tierra porque posee el aire que los seres vivos necesitan para respirar, los
nutrientes que necesitan para alimentarse y crecer, y el clima adecuado para
poder vivir; un clima que ni es muy frío ni muy caliente. La zona de la Tierra en
la que se desarrolla la vida de plantas, animales y organismos microscópicos
se llama biosfera. La biosfera está formada por tres zonas: el aire, el agua y la
tierra firme. Entre ellas existe un delicado equilibrio natural que permite una
vida cómoda para los seres que habitan nuestro planeta. Sin embargo, las
actividades humanas en los últimos cientos de años está alterando este
equilibrio a un ritmo muy rápido.

Las consecuencias de nuestra forma de vida son visibles hoy día en los
bosques, sobre todo en los bosques tropicales; también en las costas y otros
medios acuáticos.
La contaminación es uno de los mayores peligros que amenazan
al medio ambiente. Todas las partes de la biosfera (tierra, agua y aire) sufren
contaminación.

Contaminamos el aire con humos procedentes de industrias y de


nuestros coches. Contaminamos los ríos y lagos a través de los desagües de
las ciudades o con vertidos químicos tóxicos. Los mares los contaminamos
con petróleo, y los campos con fertilizantes y pesticidas.

El aire, el agua y el suelo son elementos indispensables para la vida,


por ello debemos de cuidarlos. Nos dan el oxígeno que respiramos, el agua
que bebemos y los alimentos que necesitamos para crecer y reproducirnos.

El crecimiento de la población mundial obliga a los agricultores y


ganaderos a recoger más cosechas y a tener rebaños cada vez más grandes.
Una forma de conseguirlo es crear nuevos campos de cultivo y pastos para el
ganado, produciéndose el sobrepastoreo. Para ello se talan y se queman los
bosques, originando deforestación.

Una vez obtenidos esos grandes campos, se les aplica gran cantidad
de insecticidas y fertilizantes para mejorar la producción, que con el agua de
lluvia pasan a ríos y lagos, y los contaminan.

Al final, estas praderas pierden toda la vegetación y el suelo queda


agotado. Se convierte al poco tiempo en un desierto. Es lo que se conoce
como desertización.
Entre las consecuencias más visibles de las actividades humanas sobre
el medio ambiente están la extinción de especies animales y vegetales,
los cambios climáticos y la desertización.

La Tierra En Nuestra Manos.

Cada uno de nosotros, con nuestra forma de vida, podemos ayudar a


mejorar el estado de salud del planeta en el que vivimos. No es nada fácil
impedir la contaminación, pero tenemos que ser conscientes de los problemas
que causamos para poder tomar soluciones.

Podemos ahorrar energía en nuestra casa o colegio, no dejando luces


encendidas cuando no son necesarias, apagando el ordenador o la televisión
cuando no lo estamos usando. Tampoco debemos abusar de la calefacción.
Con esto se evita la quemen grandes cantidades de combustibles para
producir energía.

El agua es un bien preciado, por ello no hay que malgastarla dejando


grifos abiertos. También tenemos que evitar contaminarla con productos de
limpieza y aseo personal que no son ecológicos.

Colaborar con la recogida selectiva de basuras trae muchos beneficios


al medio ambiente. Reciclar el papel, los plásticos, las latas y el vidrio evitaran
que nuevos bosques sean talados o que un proceso industrial contaminante
los produzca.

Por otro lado, las autoridades de todo el mundo también tienen que
colaborar en la lucha por mejora las condiciones ambientales de la Tierra,
mediante la creación de leyes y proyectos de educación.
En muchas ocasiones se realizan inspecciones a las industrias
contaminantes y se promueven las energías limpias como la solar y la eólica.

La creación de espacios protegidos y programas de educación


medioambiental son básicos para asegurar el futuro del medio ambiente.

También podría gustarte