Está en la página 1de 1

La sociedad conyugal y sus implicaciones fiscales

Por Silvia Cartujano Escobar Martes, 28 Junio 2016 05:24

El régimen de Sociedad Conyugal, a pesar de ser una figura civil, tiene implicaciones
fiscales trascendentes y con grandes posibilidades de disminuir el pago del Impuesto Sobre
la Renta dentro de un marco legal que analizaremos en este día. Iniciaremos recordando
que el código civil establece que el matrimonio podrá celebrarse bajo el Régimen de
Sociedad Conyugal, o bajo el Régimen de Separación de Bienes. El Régimen de Sociedad
Conyugal -conocido por muchos como "bienes mancomunados"- se regirá por las
capitulaciones matrimoniales que la constituyan, en las que todo lo que se adquiera durante
el matrimonio es de ambos.

Las capitulaciones matrimoniales son las cláusulas bajo las cuales se celebra el matrimonio.
En ellas se fijan situaciones tan importantes como son: ¿quién va a ser el administrador de
la sociedad conyugal?, ¿qué bienes aportan? etc.

En la ley del Impuesto Sobre la Renta ésta figura se regula dentro del Titulo IV de las
Personas Física y contempla que este contrato tiene obligaciones fiscales, por lo que
mencionaremos a continuación los ingresos que por disposición expresa nos indica que se
obtienen como sociedad conyugal, siendo los siguientes: Ingresos por arrendamiento, por la
enajenación de bienes, por la adquisición de bienes, por intereses, por dividendo y actividad
empresarial, por lo que se excluyó los ingresos por salarios y honorarios.

El artículo 92 de la ley del ISR indica que deberá designarse a uno de los cónyuges como
representante común, el cual tiene la obligación de llevar la contabilidad, expedir
comprobantes, recabar documentación fiscal, conservar los libros, pero los pagos
provisionales y la declaración anual es de ambos.

Si se analiza con cuidado la obligación de que los integrantes de la sociedad presenten sus
pagos provisionales y declaración anual de ISR cada uno por separado parecería a primera
vista una carga administrativa, pero en los casos especifico de arrendamiento y venta de
inmuebles (enajenación de bienes) esta obligación ofrece una gran ventaja, ya que al
momento de determinarse el impuesto sobre los ingresos de cada uno de los cónyuges trae
como consecuencia que el ISR será inferior al que les hubiera correspondido de haberse
determinado por la totalidad de los ingresos o ganancia obtenida, ya que recordemos que la
tarifa para Personas Físicas es progresiva. Por tanto, a mayor ingreso mayor impuesto: el
contribuyente que acumule más ingresos pagará más impuesto.

El reglamento de la ley del ISR menciona que los integrantes de la sociedad conyugal
podrán optar porque quien obtenga mayores ingresos sea el que acumule la totalidad de los
ingresos, aunque esto trae implícito un impuesto mayor, por lo que para terminar les
aconsejo hacer una comparación del impuesto que se determinará bajo los dos esquemas y
evaluar las ventajas y desventajas de ellos y tomar la decisión que mejor nos acomode.

También podría gustarte