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¿Es realmente provechoso apartar nuestras madrugadas para hablar con Dios?
La Palabra de Dios nos manda que oremos sin cesar y también nos enseña que la
oración debe hacerse en todo lugar y en todo tiempo.
Hablar con Dios, es uno de los privilegios más grandes que podemos tener; pero
¿hacerlo de madrugada realmente tiene mayor provecho? ¿Acaso no es lo mismo
orar a cualquier hora del día?
Es curioso, pero hay textos Bíblicos que demuestran que hombres como el rey
David preferían orar de madrugada; aun el Señor Jesucristo dice la Palabra, que
oraba cuando aún era muy oscuro, sin mencionar que también podía durar toda
una noche orando, toda una noche hablando con el Padre celestial.
Tan importante fue la vida de oración del Señor, que los discípulos le pidieron que
les enseñara a orar.
Leamos algunos textos Bíblicos y aprendamos de ellos Proverbios 8:17 dice: Yo amo
a los que me aman,
Y me hallan los que temprano me buscan.
Recuerda que orar es hablar con Dios y entre más hablemos con Dios, más
crecerá nuestra relación con Él.
El Salmo 63:1 dice: Dios, Dios mío eres tú;
De madrugada te buscaré;
Mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela,
En tierra seca y árida donde no hay aguas,
En esta oportunidad traigo un texto que quiero darlo a cada uno de ustedes.
Sexto: La oración de mañana permite que ganemos las batallas de rodillas, antes
de librarlas en el día a día.
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