La conversión obtenida experimentalmente fue de 0.8, mientras que
teóricamente la conversión fue de 0.8534. Es importante que no haya interferencias en la reacción para disminuir la desviación entre los datos experimentales y los teóricos. Se observa que la conversión experimental es un 6.675% mayor a la conversión teórica, indicando de esta forma la presencia de un error, ya sea en la toma de datos como en el tratamiento matemático aplicado. La discrepancia existente entre las conversiones a diferentes tiempos, así como la falta de continuidad, demuestran que la agitación en el tanque no se desarrolló de manera adecuada, siendo en la mayor parte del tiempo deficiente para mantener la homogeneidad entre datos. La deficiencia de la mala obtención de los datos se debe, al mal cálculo realizado en la obtención de hidróxido de sodio, la mala manipulación del reactor y el mal manejo de los parámetros operativos. En la práctica se demoró en regular los flujos de entrada y salida de los caudales al reactor. Finalmente, en caso de repetir la experiencia, se aconseja que para obtener datos más confiables, se realice una correcta calibración de los caudales.