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(Guntneao VANEGAS ARRAMBIDE Universidad Auténoma de Nuevo Len INTRODUCCION En este breve ensayo intentaremos realizar un recorrido hist6rico sobre los distintos elementos que contribuyeron a la constituci6n de la psicoterapia dindmica, Entendemos por psicoterapia diniimica aquella es- trategia terapéutica que intenta dar cuenta de los fenémenos psfquicos esde un basamento no orginico y al margen de las explicaciones de la ‘medicina oficial, Tal definicién, por demis ambigua, tiene como objetivo dar cabida a las distintas formas de explicaci6n que sin concretarse en teorias acabadas y reconocidas aportaron ideas y conocimientos que fue- ron el caldo de cultivo para la constituci6n de las distintas psicoterapias actuales, Pensar en una arqueologia de la psicoterapia actual implica recono- cet los diferentes avatares y los distintos caminos por los que el saber psicalégico ha deambulado. Sabemos que la construccién del conoci- miento no.es obra de una sola mente ilustrada, ni un producto que se genere de un solo golpe o enn momento concreto; mas bien concebi- ‘mos a construcci6n del saber como un proceso acumulativo y permanen- te, siempre dependiente de las condiciones historicas en que se produ- ce. Asi, en esta mirada arqueolégica intentaremos sefialar algunos puntos de inflexién que posibilitaron las condiciones que dieron lugar al suzgi- miento de la psicoterapia moderns. En esta sintesis hist6rica resefiaremos diferentes momentos en el de- venir del saber psicolégico. Iniciaremos con la llamada psicoterapia primi- “pupppouraiq, 9 ‘satapod soso tuoo sexpay opand anb ofa o> renwo9 Bre] ‘peparuaasUo By BETED fd eqsarap anb euosiad ‘Ofna J2 ‘01 ‘owoD wou opewey, 215 2 opvuty $9 ‘2189 ap s2s90d so] FHS gapend 50] OD SafEIMIeUAIE|OS SBIEPO' sefns un so pepauuiayua wap oFeHTPE anUESTED | HA frag un 20d ousapt ‘ua opronposn tx o1aigo jp arb eqesuad as SEA seeds wuruxp vjaUase Hun OU 3s UD ELE OND Seqesapisuoo sepepajos seundy ‘pepauayys Hl SP AED 4 soup & oueanxo opigo atsa &‘odsaro ns ua OPIDAT OH ‘anb o1alqo un Fei pmonoid pepamuarue eum ap osard $2 PINS anb va nuawep “ny 2s eons SA “pEpoUEsasUe o7>!G0 TP ugpoEs a LOISAAUL qedound ayuony Pn ‘opigap ‘Teno [2 “(OL6T 984 ia € DOTS) “a1t9}9SU0- cp ny soonngdesa sopor soansodsay srs ¢ ‘sapepowrayun se] 3p Seu SiGe souroaiquosap ‘onsa ap cruoruupuarua 2010. 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Aqui lo sobrenatural y la enfermedad se encuentran fundidos en una sola concepcién. ‘Otro ejemplo de este tipo de practicas primitivas es el caso de la pérdi- da del alma; segiin esta concepci6n, el alma abandona el cuerpo 0 es rap- tada por fantasmas o hechiceros, o también el alma puede abandonar su cuerpo en forma espontinea o accidental, como en el caso de quedar sepa- ada en el suefo, el devaneo o el desmayo (en este caso no se trata de un objeto concreto sino de una nocién ambigua; nosotros entenderemos que ido para esta enfermedad consistird en la biisqueda del alma que se encuentra extraviada o raptada por alin espiritu maligno, e! cual no le permite regresar al cuerpo que pertenece, Ta terapéutica varia segdn la cultura; en algunas, el alma tiene que ser buscada en el mundo de los muertos, tarea que solo puede hacer un hechicero, ya que éste, en su preparacién, debi6 tener contacto con el mundo de los muertos, y los espititus entregarian el alma al al cuerpo que pertenece, En otros casos el hechicero no necesi lejos, pues puede utilizar s6lo la realizaciGn de conjuros, danzas y otras operaciones mis. Hoy dia no se puede negar que en estas culturas estas acciones te-~ rapéuticas tenfan un resultado eficaz, pero no podemos en ningtn mo- mento atribuir a éstos un origen magico 0 sobrenatural; en todo caso debe investigarse el papel que desempefiaban elementos como la aten- cién brindada al enfermo, la sugestién, la abreacci6n y, por qué no, el hipnotismo en estos incipientes procesos terapéuticos. LA CULTURA GRIEGA Y LA ENFERMEDAD MENTAL En esta cultura se consideraba que las personas que padecfan enfes- medad mental eran posefdas por espiritus maléficos, personificados en (a cut grea yaenteedsd mental — 219 liosas Manfa y Lyssa. Por otra parte, el conocimient i sa. F 7 to médico admit rsonalidad alcanza un nivel Gptimo cuando se oe saa) au fuerzas internas o externas, El con- adas diacrasis, indicaba la presencia dk exceso de humor corporal, que tenia que extreme mediante ogee Sone el elaboro-negro” (Kaplan, 1978). ee ‘Observamos cémo los griegas entendian la enf: a fermedad mental; in lado, Ja locura provocada por los doses, y por otto, como un dene 'o de humores. Otra forma de concebir la psicoterapia para los fos era la incubacién como tratamiento, donde la mitologia griega a presente (Kaplan, 1978): i 1a incubacién constaba de varios esta postulartesafectos de diversas enfermeci mets en primer gar aun tual de toca altemplo, en coredores subtemsnecsconsiuidos en aaa ce aba ‘Mentas el paciete dorms el dios Asiepos aparccera ena suche a 10m i ic e are enfema del cst Y entances desap: ria. El paciente despertaria cu- Tado y el sueho seria descrado por in intrpresadon STA CH En el primer estadio los icas y psfquicas eran so- Este tipo de ritual puede ser considerado como “psi ia” te mitolégico, La mitologia impregnaba la mayor de los peecosee ton, éuticos de esta épaca; pero con el tempo apare cambiaria diametralmente las cosas. HipGcrates hi de la enfermedad mental, ala que llamaria man ademas segin Kolb (1978): “Sus descripciones dicaban que ya entonces se conocian la epilepsi Posparto y los sintomas cerebrales. Rechazé por de doses como caus dela enfermedad mental.” tendencia hipocritica legé a la cumbre con el médico Galey ttendencia| i nO, suien pos un especie de psicoterapia que consistia de varios pasos »mpleto la influencia Ei primer paso consistia en abstenerse de Jas for venti sbsenerse.de las formas ms crudas de mac, en ipsa de glpear, more 9 so ops caves segundo consata en encontrar un mentor, sa Senge El auc sea los defecos y proporcionam conch fren oe eons en alia un een intense po ee ‘oa as pasones. Haba tambien meodan nonce ars oe a lariamente en vor alta las maximas de la escuela pitagérica. Hasta aqui se observa cémo se desarroll: ; ssarrollan los conceptos de enfer- ‘edad mental y psicoterapia en el period helénico. En este petiodo ia 220 cop. 7.Stmentos para una aquelogi de a psaterap cnca psicoterapia y la enfermedad mental obtuvieron su primera sistematiza- ciGry hombres importantes como Galeno o Hipécrates son, al lado del hombre-medicina y el chaman, los precursores de la psicoterapia cien- tifica, pues como sabemos, sin origen no hay existencia. Nuestro interés no sdlo es hacer historia, sino también analizar emo se constituye la psicoterapia, Es claro que en la época pi 4a época griega, Ia psicoterapia se constitula por sujetos yp 50 que estaba ausente. El chamdn, el brujo y el hombre-medicina detentaban un poder so- brenatural-con el cual curaban a sus enfermos mediante ritos, conjuros y danzas, pero muy pocas veces escuci Ena cultura griega los postulados galénicos habjan hecho progresar el conocimiento sobre la enfermedad mental y la psicoterapia, pero atin estos conocimientos eran s6lo para las clase: ‘margen esclavos o ignorantes, To que puede rescatarse de estos primeros intentos psicoterapé cos son algunos mecanismos psicolégicos que se emplearon en di terapéutica. De esta manera las sociedades primitivas y la cultura griega aportarian los primeros elementos para la constitucién de la psicotera- pia dinamica. EL BARROCO Y LA LUCHA CONTRA EL DEMONIO Lo que caracteriza en especial a este periodo es el culto superlative ala religion cristiana, pues esta época no es muy distante de las cruza- y el periodo cumbre de la Santa Inquisicién. -mpos la mayorfa de enfermedacles mentales eran trata- Ke dos métodos: por tn lado los tratamientos fisicos, qu consistian en lavado, purges y sangrias; por otro, el tratamiento espiri- tual, confesién, penitencia y, cuando ast se requeria, el exorcismo. Las confesiones de san Agustin de Hipona y algunos textos, como Suma Teoldgica de santo Tomas de Aquino, marcaron una fuerte ten- dencia antes y durante el barroco. No es de extrafiar que en estos tiem- al terapéutica para los nerviosos fuese la terapia espititual, que era ejercida por alguna autoridad eclesistica Lo que caracteriza a este tipo de terapéutica es la lucha de dos fuer- 2as opositoras: por un lado el demonio o las fuerzas del mal, dispuestas @ atentar 0 encarnarse en los pobres mortales; por el oto, las fuerzas divinas, personificadas en sacerdotes, obispos, etc., dispuestos a dar la El baraco ya cha contra eldemonio. =. 227 vida en su lucha contra el mal. Esta oposicién demonio vs. Dios seria la que mas auge adquiriria desde la época medieval hasta el siglo xv. ‘Coma ya se comenté, muchos de los avances de la psicoterapia gi ran en tomo a personajes pues, un perso- naje que marcazia el inicio de lo que llamaremos la psicoterapia dina a fue Johann Joseph Gassner (1727-1775), sacerdote que adquiris fama de ser uno de los curanderos mis renombrados de su tiempo al ejercer el exorcismo como método de curacién, Segtin Ellenberger (1976): 6a de una enfermedad natural, causada por el essio (efecto de la brujera); y posessio (posesion diabética manifesta) Ia menos frecuente de todas. Su método terapéutico consistia en comunicar al enfermo que para su recuperacién era necesario tener fe en el nombre de Cristo, después conjuraba al demonio para que se hiciera presente en el cuerpo del en fermo, si asi sucedia, continuaba el exorcismo. Utilizando este método el modesto sacerdote se hizo popular en to- das las esferas sociales, lo que le valié los favores de la corte imperial y la admiracin de los campesinos y el pueblo en general. Sin embargo, como toda figura de renombre sus prdcticas tarcle que temprano fueron materia de discustén y polémica; se iniciaron las intrigas en su contra y formaron comisiones cientificas que investi- garian los grandes exorcismos del sacerdote Gassner. Las comisiones cientificas, xpuntaladas por Ia Iustracién como nue- va filosofia, analizaban el fenémeno del exorcismo en forma seria y al coneluir las investigaciones se dictaminé que Gassner no poseia pode- res contra el demonio, y aun cuando el exorcismo era una practica co- imiin de la Tglesia, el sacerdote lo deberta efectuar con discrecién y slo en casos que Jo ameritaran. Es asi como Gassner, uno de los exorcistas mis reconocicos de todos los tiempos, lego a la cumbre y de pronto cay6 de ella. Un personaje que contribuyé para el hundimiento de Gass- loctor Mesmer, hijo de la Tustracién, quien apoyandose en su i al logr6 reproducir los efectos de las pricti- ‘cas exorcistas, limitando asi esta tradicién. En pocas palabras, lo que derrot6 a Gassner no fueron las intrigas, tampoco la polémica que levantaron sus pricticas; lo que lo derroté jun- to con el exorcismo fue una filosofia naciente: la Tlustracién. Para concluir con este apartado, podemos afirmar que la psicoterapia dindmica se encontraha estancada, y si bien Gassner efectuaba con éxito sus pricticas exorcistas, esto no querfa decir que su base fuera correcta, 222 Cag.7, Hementas para una arqueologla dela pscoterapla nda ya que toda su fundamentacién era atribuida a un Dios supremo y no sistematizaba ningun concepto en forma cientifica. No obstante, de este tipo de pricticas se dechucen algunos mecanismos psicolégicos, como la terapéutica, el hipnotismo, la abreaccién y la sugestion. investigadores, que ‘mis tarde lograrfan sistematizar lo que él no pudo hacer. LA ILUSTRACION Y EL MAGNETISMO ANIMAL Ia Tlustracién, movimiento cultural que impregné las esferas sociales Jo xvmt, pone fin al movimiento barroco, que sos- lores tradicionales y de la zante, tanto ero lo que se tornaba ame- rnazante para estas estructuras de taron esta nueva filosofia, es decir, el movimiento naciente y lo hacen suyo, lo paradéjico es dejado de lado Y-se postula al interior de esta nueva filosofia el “principio de Ia toleran- cia", que se resume como la coexistencia de diferentes concepciones de conocimiento al interior de una misma estructura Pero, gen qué consiste el period de | bemos entenderla como una tendencia filosGfica cultural que comprende en si tres aspectos (Abbagnano, 1980): + La extensin de la critica a toda creencia 0 conocimiento sin ex- cepciones. * La realizacién de un conocimiento que, para abrirse a la critica, incluya y organice los instrumentos para la propia comecciéa. 350 efectivo en todos los campos del conocimiento logrado de esta manera, con la finalidad de mejorar [a vida individual y aso- Giada de los hombres. Lo que la Ilustraci6n aporta es entonces la raz6n, Asi se abre lo que serd llamado el iluminismo 0 Siglo de las Luces. Con la llegada d “ icoterapia dindmi- ca tomard un giro i Latsadén yl magetsma animal 223 Un personaje importante para la psicoterapia y el estui fermedad mental fue Franz. Anton Mesmer (1734-1815), médico titulado en la Universidad de Viena dedicado después a tratar pacientes en for- ma individual, Por los afios de 1733-174 trat6 a una paciente llamada F. Osterlin que suftia una grave sintomatologia. Mesmer habia escuchado que algunos médicos ingles altura del estémago y otros en las piernas, su pac: cosas extrafias que fluian en su cuerpo de arriba abi horas los sintomas desaparecieron. Supuso que dichos efectos no eran producidos s6lo por los imanes, y dedujo que: “Las corrientes magnéticas en el interior de su paciente eran producidas por un fluido acumulado en su propia persona, al que denominé magnetismo animal" (Ellenberger, 1976). Ademds considera- ba que los imanes solo eran medios auxiliares para reforzar el magnetis- mo animal A partir de 1774 el doctor Mesmer se dedic6 a practicar sus trata tos magnéticas y difundir su cescubrimiento en el mundo médico. En un principio el gremio médico vienés no tuvo reacci6n alguna ante los descubrimientos de Mesmer, sin embargo, poco tiempo después un am- plio sector de médicos institucionales se dedicaron a hostilizarlo, lo cual provocé que Mesmer abandonara Viena. Asi fue como un descubrimiento naciente era obstaculizado por la cien- ia institucional, los médicos y psiquiatras se oponian radicalmente al mag- netismo y el doctor Mesmer era considerado cl yal cabo de unas esta oposicién Mesmer abandons Viena y se nuevas fronteras que permitieran la en busca de és, en esta ciu= y ideas de la Uustracién alimentaban las ideas radicales y antirreligiosas, ¢l Gobiemo era inestable y la situa- ciGn econémica catastr6fica. La fama y el renombre de los investigadores extranjeros era conocida en Paris, por ello al llegar a esta ciudad Mesmer gozaba de buena reputacién y cierto prestigio, lo cual le permitié conti- Auar lo que habia interrumpido a su salida de Viena, reinicié sus trata~ smientos magnéticos y la difusién del magnetismo animal. En 1779 prescinde de los imanes y Ia electriciciad como métodos auxiliares y postula un sistema de 27 puntos que pueden resumirse en cuatro principios bésicos (Elienberger, 1976): 1. Existe un fluido fisico sutil que Llena el universo y forma un me~ dio de accién entre el hombre, la tierra y los cuerpos celestes, y también entre hombre y hombre, 224. cap 7. tementos para una arqueologta dea pstoteapadnsica 2. La enfermedad se origina por la desigual distribuci6n de este flui- do en el cuerpo de! hombre, la recuperacién se logra cuando se restaura el equilibrio. 3. Con la ayuda de ciertas técnicas este fluido puede ser canalizado, almacenado y tcasmitido a otras personas. 4, De esta manera, se puede provocar crisis en los pacientes y curar Jas enfermedades. Al sistematizar en forma ordenada los resultados de su prictica, ‘Mesmer contaba con un grupo de seguidores que més tarde se con- vertirian en sus discipulos, entre los cuales se encontraban aristécratas y burgueses. Durante algunos afos el movimiento mesmeriano se desarrollé con rapidez, pero al igual que con Gassner y repitiéndose Jo que sucedi6 en Viena, Mesmer fue atacado por los circulos intelec- tuales, lo que propicis el nombramiento de comisiones cientificas que investigarfan sus prdcticas magnéticas. Los resultados de estas investi- gaciones fueron desfavorables para los magnetizadores y el movi- miento mesmeriano entré en declive.. ‘Mesmer era derrotado, al igual que su antecesor Gassner, y la doc- trina magnética era ridiculizada en extremo y dejaria de tener la fuerza que tenfa en sus inicios. La caida de Mesmer puede considerarse como sobredeterminada y varios sucesos contribuyeron para que el magnetis- mo quedara casi en el olvido, entre ellos: + Mesmer tenfa gran aceptacién en los circulos mas elevados de la sociedad parisina, tenfa amplia clientela a la cual cobraba exorbi- tantes cantidades por el tratamiento magnético, lo que acasiona- ba la envidia de la medicina institucional, + El caricter despotico y egocentrista de Mesmer en poco contribu- ‘y6 para que sus descubrimientos fueran aceptados. ‘Aun cuando Mesmer y el magnetismo animal atravesaban por situacio- nes cificiles, Ia difusiGn de este movimiento continué, y en 1784 uno de sus discipulos, Armand Marie-Jacques de Chastenente, marqués de Puységur (1751-1825), daria un giro al descubrimiento de Mesmer. 225 EL NUEVO SONAMBULISMO: EL SONAMBULISMO ARTIFICIAL, El marqués de Puységur inici6 los tratamientos magnéticos con algu- nos campesinos que trabajaban a su servicio, tratando a un campesino enfermo, llamado Victor Race, que padecia una enfermedad respirato- ria leve. Al magnetizarlo el paciente mostré una crisis particular (Ellen- berger, 1976): No habia convulsiones ni movimientos cesordenados, como ocurria, con otros pacientes, sino que cay6 en una especie de suefio extrafio en el que parecia mas despierto y consciente que en su estado de vigilia. Habla- ba en voz alta, respondia a las preguntas y exhibia una mente mucho mas baillante que en su estado normal. Una vez pasada la crisis, Victor no recor- ddaba nad, Intrigado, Puységur volvi6 a provocarle este tipo de crisis, luego 0b6 con éxito en otros varios sujetos. En al estado eran capaces de iagnosticar sus propias enfermedades, predecir su evolucién y presceibir el watamiento. En este fragmento de su libro, Ellenberger muestra cémo el marqués, da un giro al antigue magnetismo y revoluciona ef tratamiento de los en- fermos, Este nuevo magnetismo se manifestaba en dos formas: un estado de ctisis perfecta en relaci6n electiva con el magnetizador, cuyas 6rdenes eran atendidas por el sujeto, y el aspecto de lucidez que manifestaban los pacientes; a estas estados les dio ef nombre de sonambulismo artifi- or su similituc con el sonambulismo natural ‘De esta forma el marqués de Puységur se convertia en el continuador del pensamiento mesmeriano, aportando al movimiento y a la mao que més tarde recibirfa el nombre de hipnotismo, Ot nes de Puységur fueron que el magnetismo debe utilizarse terapéuticos y “que el verdactero agente curativo era la voluntad del mag- netizador” (Ellenberger, 1976). E| magnetismo animal promovido por Mesmer y Puységur abriria el camino a una nueva tendencia psicoterapéutica, pues en esta etapa ger- mina lo que después sera la psicoterapia dindmica, A estas alturas cabria preguntarnos a qué se debia que Mesmer pro- vocara las grandes crisis con convulsiones y movimientos bruscos, y Puy- ségur sumiera a sus enfermos en un estado de sonambulismo artifical; la dria que sitvarse en un contexto histGrico-cultural. Como ya 16, la. préctica de Mesmer era efectuada con la aris Ja burguesia de la época, es decir, con las clases pudientes de Ia sociedad, En esa época tratar enfermedades con los tiltimos descubrimientos cientificos era lo més elegante; a nivel 226 —Cop.7. emenos pra una quel dela pst dda éstas podrian representar la lucha entre ¢l magnetizador y el enfermo; acemés, las grandes sumas de dinero que el propio Mesmer obtenfa bien (0 de exhibicionismo para sus pacientes. Puységur trataba personas de las capas inferiores de la sociedad, y como aristGcrata que era, al tratar al campesino Puységur se valia de sti posicién social mas elevada: los campesinos se sometian a su sedior y esto se reflejaba en el sonambulismo artificial, en el cual el enfer- mo se sometfa en todo al magnetizador. La diferencia entre el magnetismo de Mesmer y el nuevo magnetismo de Puységur era entonces una diferen- cia de tipo Social y de contexto cultural En este desarrollo dejaremos de lado lo que podriamos plantear como Jos inicios de los tratamientos grupales, s6lo seftalaremos los puntos im- portantes. Mesmer, apoyado en Ia fisica, disefi6 el baquet, aparato que suponfa concentraba ef fluido strumento que le posibilitaba tratar unas 30 0 40 personas. Por la misma fecha Puységur ide6 un pro- cedimiento similar al de Mesmer: él plante6 el drbol magico, y lo hizo apoyandose en el folklore popular prevaleciente entre el campesinado, ya que los campesinos crefan que el érbol poseia cualidades magicas curativas, Asi podemos cerrar este periodo de la evolucién psicoterapéutica, en el cual el magnetismo animal es repudiado por los circulos médicos institucionales; pero sin duda en este periodo la psicoterapia av: cia un esclarecimiento sobre una nueva concepcién del ps Podemos resumir que si bien la llustraci6n derrot6 al barroco y Mes- mer desacredité a Gassner, el magnetismo animal fue victima del mismo sistema filos6fico del cual es producto; Mesmer fue derrotado con los mismos instrumentos con los que victimé a Gassner, 0 sea, la critica de la raz6n, producto del Siglo de las Luces. EI Siglo de las Luces habia comenzado, lo cual se refleja en todos los niveles del conocimiento; las clencias avanzan y la psicoterapia no podia quedar al margen, Mesmer y Puységur con sus descubrimientos dotaron ala ciencia de la salud mental de importantes elementos para el entendi- miento de la misma, la teoria del magnetis imal y def sonambulismo que mas tarde tendria el nombre de hipnotismo. Estos autores logran ‘grandes progresos en el campo de la psicoterapia dindmica, los fendme- nos nerviosos se explican ahora de una forma ‘cientifica” aun cuando se fiscalicen los procesos mentales. De estos sistemas, se deduce que el mag- netismo constituye un medio terapéutico, Ia voluntad del médico como agente de curacién, la estrecha relacién del magnetizador y el enfermo, que ya puede calificarse como terapéutica. Ta participacién de los sujetos en estos tratamientos es un factor de maxima importancia, y aunque el discurso del enfermo ya es escuchado, ‘€5.poca ja atencién que se le presta, y en ocasiones sdlo es escuchado ‘Romande ehipnatima — 22. para el asombro del magnetizador. En estos tiempos la psicoterapia. em pieza a construirse y faltard atin mas tiempo para que las explicacione de fenémenos mentales sean satisfactorias tanto a nivel tedrico com: prictico. EL ROMANTICISMO Y EL HIPNOTISMO ‘Ya hemos explicado cémo las comtientes filoséficas y culturales de sepa ange eee ane tatoo ee ae ee eataetataeE habria que dar paso a una nueva tendencia filoséfica, el Romanticism filoséfico, que surge con un fuerte impulso al iniciar Existe una fuerte cot mo surge como tende1 consiste este sistema fil 116 en algunos puntos que fueron dejados al margen por Ia lustraci6n; filosofia romantica podemos resumirla como: i penetrar la naturaleza para descubrir Ia verdader i6n del hombre con ella. + El considerara la vida humana como una serie de cambios y me tamorfosis. 65 por sentimientos racionalista waturaleza reforzaba las tenclencias roménticas de une ida, y sus postulados centrales eran los siguientes feron de un princt iento de unidad esen: + La naturaleza y el mundo organico visibles pio espiritual comtin: el alma, habia un sent * La historia y el espiritu eran considerados los primeros creadores de todas las cosas, Ia irracionalidad se oponia a la razén, 228 con. 7.emestos pra ura arquolag dela ptcterps niin En cuanto a la salud mental, los progresos continuaban por dos vias: por un lado Ia linea institucional, y por el otro los continuadores del mag- netismo, Veamos cémo la psicoterapia dindmica se desarrolla por estos caminos opuestos. Los magnetizadores continuaban sus pricticas sin ha- cer caso de las criticas y los ataques de la mediicina institucional. Mesmer yy Puységur tuvieron uno de sus continuadores mis destacado en ln per- sona de Abbé de Faria, que mis tarde se convertiria en el precursor de la escuela de Nancy. De Faria suponfa que existian personas que brindaban més facilidad para ser magnetizadas, y su proceclimiento consistia “en sentara los pacientes en asientos cémodos y hacerlos fijarse en su.mano abierta y elevada tras lo cual ordenaba en voz alta: ;Duerme! Los sujetos cafan entonces en un suefio magnético. Mientras estaban en esta situa- ci6n, les inducia visiones, como sugerencias poshipnéticas” (Ellenber- ger, 1976). Esta descripciGn muestra el método empleado por De Faria; mis tar- de Deleuze continu6 con esta tendencia y obtuvo mayores éxites. Poco tiempo después Noizet y Bertrand, estudiosos del magnetismo, ‘objetaron la teorfa del fluido, al afirmar que Ia mente humana esté reple- ta de pensamientos y razonamientos de los cuales no somos conscientes y s6lo podemos reconocer por los efectos que producen, Ademés sostu- ‘vieron que "la comunicaci6n era el fen6meno central del ma; propia sesién (...) pronto se incluyé en el concepto de rapport la influen- cia reciproca entre el paciente y el magnetizador" (Ellenberger, 1976). Con los aportes de Noizet y Bertrand la teoria del magnetismo animal dejaba de ser para ellos una teor‘a fsicalista y se tornaba en tuna teoria de Asi se desarrolla la corriente profana de la psicoterapia, aun cuando los magnetizadores son proscritos por la medicina institucional. Jgunos vances; los oficiales, logran taron a la ciencia de la salud mental nuevas teorfas y la elaboracién de muevos conceptos. Cabe sefialar que los méclicos romfinticos en sus tratamiet péuticos enfrentaban una disyuntiva: ubicarse con respecto corrientes predomi la tendencia organicista y Ja tendencia psic icotomia algunos médicos optaron por hacer una sintesis de ambas corrientes y fue asi como los médicos romdn- ticos solucionaron el problema. Johann Cristian Reil puede ser considerado el fundador de la psico- Ror ye lucci6n de las sensaciones, el terapia ocupacional y el ejer terapia.mcional, que consistfa en l bajo sobre el tono vital, asi como de y la ternpia artistica Por otro lado, Heinroth afirmaba que la base de la enfermedad n tal era el pecado, es decir, que este sentimiento, el de ser pecador, se sentaba en todos los hombres y al sentirse culpables se present enfermedad. Planteé ademas que la salud es la libertad, mientras qu cstaclos patégenos eran la pérdida de la misma, Ademas expres6 qu conciencia no es el producto del yo ni del mundo extemo, sino de! pemnosotros. En cada nuevo intento de psicoterapia se constituia y fortalec ‘elaboraci6n de la misma, pero Ia medicina roméntica aportarfa atin 1 Ideler y Neumann abririan paso a una nueva hipétesis, que daria pa tuna nueva concepci6n que daria lugar a una gran resonancia pos Ideler describe la gran importancia de las pasiones en la etiolog’ Ja enfermedad mental; dicho en otras palabras, Ia importancia dela lidad, ya que atribufa los problemas mentales a una sexu pensaba ademés que el hombre, por su misma insat la realidad debia buscar refugio en la fant , evaluaba el valor que tenfan los | y plantes que la insatisfaccién de los in de esta manera, cuando los instintos z cia se presentaban la angustia y despu tos provocaba la angustia, nnazan con llegar a la cot enfermedad mental las condiciones las concepciones téricas en el periodo roméntico permitirian as se entremezciasen con las s tivas eirracionales; le pensar « que entonces no se hal la base ¢ ay se abrinn nuevos caminos y nuevas perspec para su desarrol Por otto lado, no pademos aceptar que con Ia llegada del Rome ento de la llustracién fuese dejado de lado; éste cont pero con una nueva direcci6n. El espiricu racionalista dle la Hust Seguiria siendo el principal instzumento de os cienficos romnticos, que los su atencién a la investigacién de campc icas son de gran im ia para la salu del magnetismo animal no pertenece al campo de a fi ‘como una teorfa de la no conciencia, teorfa estrictamente psicol de las pasiones (sexualidad), timiento de culpa) y las teorias racionalistas empiezan a plantear de manera estructurada el avance firme y seguro de la psicoterapia. 230 EL POSITIVISMO Y LA CONCEPCION ANATOMOCLINICA A mitad del siglo 20x, el Romanticismo comienza a declinar, los r0- minticos sor soluciones a la ciencia de manera satisfactoria, Los movimientos sociales y politicos se toman alarmantes para los grupos en el poder; la Revolucién Industrial ha cruzado el canal y penetra en Europa, estre Js monarquia tendrin ahora un nuevo competidor: la bur- guesia en ascenso; paralelo a esto el pensamiento socialista se reproduce con rapidez entre las clases oprimidas. En este periodo ha de surgir una nueva corriente filosdfica que ten- ri grandes repercusiones en el dmbito cientifico y cultural: Ia filosofia positiva, difundida principaimente por Augusto Comte. Esta filosofia seri como un regreso a la Hustracién, y tendria como postulado fundamen “La tomantizaci6n de la ciencia, su exaltaci6n como tinica gufa de la vida particular y asocinda de los hombres, esto €s, como el finico conoci que se expresa mediante mos" (Abbagnano, 1980), un lugar preponderante, con- naciones, como alguna vez se pens6 en Ia lustracién. la ciencia positiva concebia el conocimiento cientifico como la mera descripcién de los hecl nde datos y experimentacién cle los rmismos, partienco de lo particular a lo general, El conocimiento que no sa producto de esto se consideraba una metafisica y era desechado por los cientificos. Con base en estos postulados era de esperarse que algun cos cayeran en posiciones extremistas y mantuvieran una fe r La psiquiatria y Ia psicoterapia no fueron la excepci6n, si bien en un principio la teorfa del magnetismo fue aceptada por los tivos, pronto fue desechada y dejada en el olv cerebro, la anatomia y la fisiologia seréin las nuevas bases para explicar Ja vida mental. in desig eretomo dl bprotisra En el periodo positivo da; con el dectinar de Ia me netizadores entraria en recesin, las condiciones hist6ricas se detencria y harfan olvidar los avances obtenidos por los magnetizadores y los mi dicos roménticos. Mientras tanto, los médicos oficiales trabajarian en st laboratorios y sus investigaciones girarfan en torno a la anatomopatologi cerebral y la neuropsiquiat Griesinger (1817-1869) proclamaria la victoria de Ia corrient organicista sobre la put seguidores podemos encontrar a Westph: tarde a Eugene Bleuler, quien sintetizé las dos tendencias en la psi No podemos dejar de me: a.dos personajes que infiuyeron ¢ gran medida en este periodo positive, ya que sus aportaciones, aunqu no comresponden al campo de la psiquiatria, tuvieron incidencia en el c nocimiento general de este periodo, Carlos Darwin, quien revolucions conocimiento biol6gico al presentar su teorfa dle los origenss de las esp cies por la selecci6n natural, en la cual pl mma concepci6n de la vida a la mantenida hasta entonces, y Carlos Marx, quien estrem ceria el mundo social al postular el socialismo cientifico, que en much favoreci6 el desarrollo de las clenciss sociales. terapia dindmica caeria en un bache del cual le sera dificil sal uiatras organicistas inielaxin sus estudios cerebrales en Forma, y desc rin las fisuras, los lébulos y los centros de asociaciGn nerviosa. Per in de lado al enfermo, pues s6lo es un organismo al que se le pu con el ‘método cientifico". Bl enfermo se mantendrd recluid hasta que el buen médico descubra en qué parte de su ser se encuent su lesiGn, de esta manera neurbticos y psicéticos funcionales permanect rn a Ie espera de lo que nunca se descubrira FIN DE SIGLO Y EL RETORNO DEL HIPNOTISMO En los apartados anteriores hemos hecho nota: Ia importancia qu ‘adquieren las llamadas voces clel pasado; las Iineas de continuidad y di continuicad se presentan a lo largo de este recorrido histérico, Pero com ya sefialamos, el periodo al que atribuimos mdxima imporcancia corre ponde a as titimas clos décadas del siglo xx. Durante este lapso emergen en el ambiente psiquiatrico psicol6gic tres figuras que marcarsin la paula en la constitucién de la psicoterap 232 cap 7. Eames para ura arquecoga de scoters mica dindmica, pues hasta el momento Ia psicoterapia no ha pasado de ser ‘meros intentos. La psicoterapia se habia caracterizado por sus pricticas fisicas en el caso de los psiquiatras organicistas, 0 sus psicoterapias magicas, como en el caso de los hipnotistas y médicos profanos, pues la teorfa que susten- taria a estas pricticas estaba 2 punto de construirse. Tres personajes habrian de dar un giro a la psiquiatria de fin de siglo: Charcot en Ia Salpétridre, Bernheim en Nancy y Breuer en Viena, los cua- les progresarian en sus investigaciones basados en el método hipnstico lcgando a conclusiones similares. Fllos contribuirdn a lo que considera- mos el punto de partida para la psicoterapia dindmica cientifica. Charcot y la Salpétri@re Jean Martin Charcot (1825-1893) fuze el médlico mAs renombrado en las Ultimas décadas de! siglo 20x, s¢ le atribuye haber cambiado la imagen de la Salpétriére, que era considerada un lugar para incurables y locos, en un centro para la investiga fica, En sus inicios como médi ‘ot fue asignado como médico interno a i rarde fue nombrado médico en jefe de 1870 se le asigns una sala espe: es, con algunas enfermas epilépti ibfan aprendido a imitar este tipo de crisis. Como médico se esforz6 por diferenciar las verdaderas convulsiones de las convulsiones imitadas. Tiempo despué interes6 por el hipnotismo, el cual aplicé con cierto rigor a él se le atribuye haber otorgado al El método de Charcot, basado en Ia hipnosis, surge a partir de sus investigaciones, como lo expresa Bllenberger (1976): En 1884 se acmitié en la Salpétritre a tres hombres afectados cle mo- en un brizo después de un trauma, ‘col demosir6 en primer lugar que sus sf parilisis organicas, coincidifan exactumente con segundo paso fuc la reproducci6n experimental de pardlisis se hipnosis. Charcot sugiré a algunos sujetos hipnotizados que se les paralt- zaran los brazes, Las parallsis hipnédicas sintomas que las parilisis histéricas esponténeas y las parilisis postraumé- ticas de los tres pacientes varones. Charcot fue capaz de reproducirlas paso or paso, y sugirié también su desaparicton en el orden inverso. El paso si- _guiente fue una demostracién del efecto del trauma. Chi Ficiles de hipnotizar y les sugisi6 que en su estado ds intes mostraron exactamente los mismos Andes yetrecrrodelhpnaisne 233 ‘como se les palmoteara la espalds se verian afectados en forma insantinea del brazo de un tipo exactamente igual a la de la mono- iven en un estado de sonambulismo Seftal6 que en ciertos sujetos qi la sugestion hipnética. permanente, no era incluso necesa fermedades nerviosas. Afios més tarde, entre 1887 y 1888, en de los epilepsia’ 1 cual expresala (Sauri, 1979): t (que en cuanto aparezca la contractura histérica es me- ester intenta ia, En enfermas como esta mujer es muy facil, en general, provocar un ataque, y en ciestas circunstancis el alaque constituye luna especie de recurso terapéutico. Es frecuente que como resultado del ataque provocado se produzca un cambic tuna contractura que se presenta como irreductible y de du dehnida dessparezca balo el efecto de duracién de ese ataque. Utilizando la hipnosis Charcot logr6 esclarecer de manera parcial el mecanismo de los fendmenos histéricos, al lograr la reproduccién expe- imental de las histetias bajo hipnosis, con lo cual demostré que la his- teria no era causada por una degeneracién del sistema nervioso. ‘Como ya se expres6, fue uno de los investigadores més prominentes de su época, como lo hace notar Freud (1979) en una nota necrol6gica sobre Charcot: Empefado en el estudio de las pariliss histéricas que se generaban después de trauma: rence luego de hhaberlas diferen vali de pacieneshistrcos 2 quienes pona en esta de sonambulismo lagunas, ‘que esas parilisis eran consecuencia de representaciones que en un mo: mento de particular predisposicién habfan gobemado el cerebro del enfer- mo, Asi queda esclarecide por primera vez el mecanismo de un fenémeno histérico. Con este Sragmento se intenta mostrar, de fa manera ‘Ya enunciamos que Charcot solo explicé en parte el fenémeno his- térico, pues aunque la reproduccién experimental de los sintomas cons- tituye un gran paso en el entendimiento de las neurosis, su etiologia siem- pre la consider6 como algo puramente orginico, como lo expresa Freud (4979): “Charcot propuso para ella una férmula simple: la herencia cuen- 234 cop.7.temertos pra una aquelgl dea ptateps dca ta como Unica causa; de acuerdo con el isteria es una forma de la degeneraciGn." De esta manera Charcot reducia sus investigaciones, al igual que otros psiquiatras organicistas, a las descripciones vilidas de los sintomas, pero al reducir su etiologia a I herencia frené el progreso de sus investigaciones, Como prueba de esto, citaremos a uno de sus dis quien expresaba: |; pero esta expresi y contempordneos pura formula, y en realidad segufan considerando esta enfermedad como un sindrome andlogo al que se observa en las esiones de los centros nerviosos." 1a escuela de la Salpétriére ints en gran medida en. Gooees eeaee cere jones, Su pragmatismo lo llevaria a conclusiones que servirian como puente ara otros investigadores, pues Charcot utilizaba el método hipnético como priictica experimental y demostrativa, coms él mismo lo descri- be (Sauri, 1979): “Ignoro cudl sera el resultado de este intento, pero no me arrepiento de haberles mostrado un ataque mas 0 meno’ co.” No obstante, con su pragmatismo habria de contribuir con los primeros elementos para la constituciGn de una teoria de la histeria y ia psicoterapia dindmica, tro punto que no se traturd aqui se relaciona con el método anato- moclinico postulado por Charcot, que consideraba que en el cuerpo exis- ten zonas predestinadas a una maxima excitacién a las que llam6 zonas histerdgenas, el cual no pertenece a la psicoterspia dindmica. La Escuela de Nancy Ala par de la Escuela da Salpétriére se establece: la de Nancy. Esta escuel ‘como prictica frecuente y valorada. Su (1823-1904), médico que en sus inicios tempo después retomaria una vieja in- Fundador, Auguste A. Liébeaul ejercia In medicina insticucion quietud por el hipnotismo qui Por el afio 1882 los rumores de las curas milagrosas de Liébeault llegaron a ofdos de Hippolyte Bemheim (1840-1919), médico de cier- Fin de siglo el retoma det hipnotisma 2 to renombre que entre sus méritos tenia investigaciones exitosas sot el estudio de la tifoidea, Bernheim quedé impresionado por el mét do practicado por Liébeault y pronto asimilé sus ideas; poco despu ‘Bemheim se convertiria en el director de Ia Escuela de Nancy, aunq} Liébeault fuese considerado el padre espiritual, ‘Mientras Liébeault trataba a la mayoria de su pacientes utilizando hipnotismo, Bemheim sélo lo utilizaba cuando crefa que obrendrfa € to, como lo expresa Ellenberger (1976): "Sostuvo entonces que los efect que se podian obtener por este método, se conseguian igual median snotismo, Bernheim lleg6 a Ia conclusién de que importante en la hipnosis y las enf no histérico ~cecta~ no es mis que un fendmeno de sugestién, detem nado por la idea que el sujeto tiene de su accidente 0 por las ideas q el médico le mete eri Ia cabeza a propésito de su accidente: realiza sus accidentes tal como los concibe.” De esta forma, Bemheim plantea que la etiologia de la enfermed: nerviosa se encuentra en el concepto de sugestiGn, pero este concep podria ser utilizado también como un instrumento para la curactén, con Jo hace notar Freud (1979): “En la segunda parte pruebas de que la aplicacién de la sugestidn hipnstica brind: un potente método terapéutico que, por afadidura, parece el mas ad cuado para combatir ciertas perturbaciones nerviosas, el que mejor 1 ponderia a su mecanismo.” 1a sugestidn era para Bemheim un concepto de maxima importa cia, en él vein la causa de Ia histeria y también el instrumento terapé pacientes en un estaclo de sonambulismo provocado de manera artifi bajo el cual imponia a los sujetos sus drdenes, que al despertar ejecutab: sin saber por qué. Las 6rdenes podian ser expresacas asf: “Al despert usted olvidaré esa idea que lo atormenta y en su lugar vendrdn recuerd felices*, o “al despertar en un rato usted podird caminar" scuela de Nancy, a diferencia de do hipnético con fines terapéuticos y no s6lo como préctica experime tal. Es importante destacar que ambas escuelas influyeron en gran me para que otros investigadores con el tiempo sistematizaran sus ¢st1 y erigieran nuevas concepciones a partir de ellos. La contribucién de Charcot y Bernheim al estudio de la enferm dad mental y la psicoterapia radica en que promovis la creacién de psicoterapia dindmica, asi como de una teoria mas complets de la ¢ Fermedad mental 236 Breuer y el caso Ana O. Charcot y Bemheim, mediante sus investigaciones, habsfan logrado cierto esclarecimiento sobre las neurosis histéricas. No obstante, por esas mismas fechas en Viena, capital del Imperio Austro-htingaro, un m vienés de origen judio efectuaba practicas terapéuticas con rest similares a los obtenidos en la Salpétriére y Nancy. Debemos aclarar que las investigaciones de Breuer las ubjcamos en 1882, pero fueron publi- cadas hasta 1893. Josef Breuer (1842-1925) nacié en Viena, lugar donde residiria toda su Vida. En 1859 ingresa a Ia Facultad de Medicina, y poco tiempo des- pués estudia fisiologia en el laboratorio de! doctor Brilke; en 1868 reci- bio una mencién honorifica por la Academia de Ciencias, que le valdria la admiraci6n y el respeto del medio mé 8. En el trayecto de su carrera médica Breuer fue considerado un inves- tigador brillante y un médico de lo més confiable, su clientela la compo- nian las familias mas opulentas de la Viena imperial Por el afio 1880 llegatia a su consulta una enferma, Bertha Pap- penheim, que s ida mAs tarde con el célebre nombre de Ana O, Este caso seria considerado por muchos como el inicio de lo que mis tarde se conoceria con el nombre de psicoanilisis El célebre caso Ana O. marca el punto de partida de lo que se con- idera como la verdadera fractura entre las psicoterapias, curas magicas ¥ la psicoterapia moderna. En este caso clinico se observa c6mo confluyen en intersubjetiva el sujeto y su discurso, Por primera vez a lo largo de este recortido se observa cémo el psiquiatra renuncia al uso prepotente de su figura de supuesto saber. Como Io expresa Frida Saal (1982): “Breuer sélo alcanza a escuchar de Ana O, palabras confusas que no comprende Yacepta como punto de partida que né cia es flagrante y absoluta. Pero esta ig it paciente y el sintoma le ofrecen.” paciente, restituyéndole asf su propia palabra, Es importante seftalar dos puntos clave en los que re: lidad de este tema. Por un lado, la posicién que asume el médico frente asu paciente, posicién de no saber e jgnorancia; por el otro, la escucha de Breuer esté al acecho de esos relatos fantasmaticos, de ese lenguaje corporal por donde la paciente expresa su palabra enmascarada, Ense- guida se exponen algunos fragmentos de este caso, en donde se sefiala Por qué se considera como la base de la psicoterapia, Fndesgloyereama cl hpnousno 2 Este caso sucedi6 entre los aitos 1880 y 1882 y fue atendido por doctor Breuer, médico que habfa tenido cierto contacto con el hipr tismo. En el afio 1880 llega 2 consulta una paciente que al parecer sufifa v hhisteria severa, su nombre: Bertha Pappenheim, rebautizada en el Am to psicoanalitico como Ana O. Brever describe a Ana O. como una n chacha de 21 afios de edad (Breuer, 1979): “Tiene inteligencia sobre liente, un poder de combinacién asombrosamente agudo e intuic a figos dotes poéticos y fantasfa, controlada por un enten te y critico.” Adems, Ana posefa cierta inclinacién por actividades humanitarias y de ‘Ana O. presenta a Breuer una serie de virtudes no ficiles de enc rar en la mujer promecio de finales de siglo xin, con lo que se pod pensar que esta paciente cautiva al médico con sus grandes dotes. 1a sintomatologia que presenta es en sf cautivadora, al igual que | cultura y humanismo, podria decirse que sus sintomas s 5a los de una psicosis actual. 10 se expondiin algunos de los sintomas que forman parte : presenta contractura en el miembro superior recho y en ambas extremidades inferiores, alucinaciones angustian de viboras negras; graves perturbaciones en la visién, disfunci6n er Jenguaje y repugnancia al beber agua, entre otras. Ante tal sintomatolos Breuer no podia sino expresar su asombro y diagnosticar psicosis, rica severa, esto tiltimo por exclusiGn, ara enfrentar esta enfermedad, Breuer contaba con una teorfa y método terapéutico, que fue depurando sobre la marcha, La teoria p supuesta de los estadlos hipnoides 0 doble estado de con en lo siguiente: inteligen equiparal Aq En los individuos que padecen de histeria se puede observar una cisién en la conciencia en donde la parte escindida acta independie mente de la conciencia, Dos causes predisponen 2 adquirir I histeria: 1 sujetos que poseen una gran cantidad de energfa psiquica sin utilizar e vida cotidi ‘que favorece que esta enerpia sea canalizadla a las ac dades de Ia fantasia, 2. que en los momentos de la isrupcion de Ia en ‘medad Ia actividad mental de los sujetos esté como suspendida, cosa ‘cuente en personas al culcdo de enfermos o personas enamoridas, Este tipo de predisposiciones eran claras en el caso de Ana O.. p como lo expresa Breuer (1979): "Cultivaba sistematicamente el sonar c no, al que llamaba su teatro privado.” Ademds de esto, Ana O. estuve ‘manera abnegada al cuidado de su padre hasta momentos antes d¢ muerte. Junto a estas predisposiciones es necesario que ocutra un a dente traumdtico que se enlace a representaciones del sujeto; este tipc 238 cap 7.tementos para una arqualgt det potrapa erica representaciones quedarin excluidas de la conciencia vigil y seri Ia base juedar dichas representaciones excluidas de la la formacién del doble estado de conciencia, algo estado de sonambulismo producido por la hipnosis. En el caso Ana O, los accidentes traumiticos se produjeron en el pe- Hiodo de la incubacidn de la enfermedad, precipitindose con la muerte del padre. El doble estado de conciencia en Anz O. se presentaba de esta manera (Breuer, 1979); “Existian dos estados de conciencia enteramente separados; alternaban entre si muy a menudo y sin tcansici6n, y fueron divorcidndose cada vez mas en el curso de la enfermeda i, mediante la observacién clinica se construfa la teoria de los es- tados hipnoides; el origen de la sintomatologia era desconocido para el paciente, las representaciones traumaticas base de los sintomas eran los constitutivos de la enfermedad. El mérito de Breuer con su teoria de los estados hipnoides se basa en proponer la hipétesis de la existencia de una escisién de la conciet en la cual en un estado Ana O, era timida y temerosa, y en otro teni alucinaciones y era matcriada. En la definicién que oftece el Diccie planche y J. B. Pontalis (1980), se enuncia tratamiento: io Psicoanalitico de J. La métado utilizado en este EI método terapéutico utilizado por Breuer fue llamado método catae- tico, que consistia en: psicoterapia en la cual el efecto terapéutico buscado consiste en una "purga” (catarsis), una descarga aclecuacla de los afectos ppatdgenos. La cura permite al sujeto evocar e incluso revivir los aconteci mientos traumiticos a los que se hallan ligados dichos afectos y lograr la abreacciGn de éstos Pero veamos cémo toma forma este método en el caso de Ana O., relatado por Breuer (1979): ‘Yo acusia al anochecer, cuando ia sabia dentro de su hipnosis, y le uiteba todo el acopio de fantasmas que ella habia acumulado desde mi al dia siguiente, cada vez mis nosis era siempre ficil moverta a declaras, iabfa inventado ua conversaciéa) y el hum jimenea). Ella saba que tra energia Finde sifoyel:eiomaddlhipnatima 23 De esta forma Breuer practicaba su tomas por separado, los aislaba y la pacient ca de los mismos, al deshacerse de los afectos ligados taciones el sintoma desapareceria al ser “temovido por la via del rel (Breuer, 1979). Para amos una idea de cudl era en sf la prictica de Breuer, veam un sintoma especifico para fundamentar las explicaciones del autor. bre las alucinaciones de viboras negras Breuer (1979) las ¥Hallindose ene campo, el pad de It pacien in parque se esperal La madve se habia alejaco pe rato, y And estaba sentac del enfermo, con el brazo cho sobre el respaldo de le silla, CayS en estado de suefio despieto ccémo desde la pared una serpiente negra se acercabs al enfermo para m pantar al animal, pero estaba como paralizads; el brazo ¢ iente sobre el respaido, se 'y parético, y cuando lo observ6, los dedos se mudaron en peques serplentes rematadas en calaveras (las uitas), Probablemente hizo intent de ahuyentar a Ia serpiente con la mano derecha pa y por esa 0 anestesia y parilisis entré en asociaci6n con la alucinacién de la serpie te, Cuando ésta hubo desaparecido, quiso en su angustia rezar, pero se fe Viena que pracicarta sntonces pudo seguir pensando y onindo en ¢ locomotor: que trafa al médica esperado inrumy Esta cita es bastante extensa, pero condensa de manera bastan breve la forma de trabajar la sintomatologia de fa paciente por parte a Ana O. deshacerse de esa presentaciones de las cuales era presa. Asi, las alucinaciones de serpic la paralisis en el brazo y la dificultad para hablar en su lengua matt na tienen una explicaci6n, estin en funcidn de un hecho traumtico pa Ja paciente y los sintomas eran producto de la elaboraci6n asociativa, ‘Resumiendo: el caso Ana O. marca el inicio de la psicoterapia mod na, pues propone tanto en [a teorla como en la técnica los elementos q) seran utilizaclos por psicoterapias posteriores. En la teorfa propone la teorfa de los estados hipnoides o Ja escisic de la conciencia, y en Ia técnica la falling cure, es decir, la cura por palabra. En este historia clinico obsservamos por primera vez cOmo el sujete el discurso se entremezcian para constituir asi la psicoterapia dinamic Por diltimo, para concluir citaremos de nuevo a Frida Seal (198; 240 cop 7. ementos pra una arquectgt ea psicotempisdnica quien en su articulo ya mencionado escribe algunas lineas que merecen transcribirse aqui: “Lo que queda como monumento de este episodio s 10 que la propia Ana O, bautizara como talking cure, la cura por la palabra. Es que algo ha cambiado al expresarse verbalmente lo que hasta entonces no habia sido dicho.” BIBLIOGRAFIA Abbagnano, N., Diccionario ce Flasyfia, Fondo de Cultura Eeonémica, México, 1980. ‘Caso Anna ©.” en, Freud, Obras complotas tI, Amorrort, Buenos Aires, "Aare. tl, bras completas, Amro, Buenos Ate, 1979 Saal, “ta palate en nade rei en N. Brent Ce), gual incons- cient rein, Siglo 3X), México, 1982 Sau, Las teres, Noeva Vin, Buenos Aires, 1979.

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