DE LA CONEXIÓN A LA COMUNIÓN

Tecnologías digitales y praxis pastoral

Mariel Caldas
ÍNDICE
Introducción
I. Transmitir la buena nueva en tiempos de hiperconectividad y multitask
1. Cambios en el cambio de época
2. Infoxicación vs. espiritualidad
3. Multitask y multioferta

II. Jóvenes y tecnologías, ¿una convivencia i(¿)limitada?

1. Límites en lo ilimitado
2. Mitos actuales

III. Identidad y pertenencia en las tecnologías digitales

1. Búsquedas y tecnorealismo
2. Publico, luego existo

IV. ¿Comunidades virtuales o digitales? ¿comunidades reales?

1. No es puro grupo
2. ¿Virtual o digital? ¿Real?
3. Características de las comunidades digitales

V. Tecnología digitales y praxis pastoral

1. Repasemos las siglas
2. Diálogo con la cultura y sobre todo con la cultura juvenil
3. Nuevo lugar pastoral
4. Conexión, contacto, comunicación, comunión

VI. ¿Es posible concluir?

1. Perfilando desafíos
2. Eco-tecno-pastoral

Conclusión
 De la conexión a la comunión
Somos protagonistas y espectadores de los cambios que este cambio epocal está trayendo aparejado.
Entre ellos, evidenciamos muchas novedades: en los roles, la comunicación, el modo de enseñar y aprender, de
trabajar, de comprar, de estudiar, de pagar servicios, en el sentido de pertenencia a instituciones otrora clásicas,
en las relaciones en general, entre alumnos y docentes, entre catequistas y quienes acompañan, en los modos de
religarse, de vivenciar la fe, entre otras realidades. Están cambiando también y cada vez más, aquellos
paradigmas de transmisión de saberes de eruditos a neófitos, del que sabe y el que no, de lo vertical o piramidal,
de la consideración del alumno como un vaso vacío a llenar, y están siendo desplazados por el aprendizaje
colaborativo, ubicuo, horizontal, el trabajo de la resiliencia, las inteligencias múltiples, entre otros; aunque
también encontramos varias crisis de transmisión: de tradiciones, valores, creencias, entre otras de las que
podemos nombrar. Las tecnologías transversalizan diversas realidades: las aulas, las casas, las oficinas, las calles,
las religiones, las iglesias, entre los diferentes ámbitos que inciden, y este más-que-fenómeno, ha llegado para
quedarse. El aumento exponencial en la facilidad de conectividad y acceso a los medios masivos de
comunicación, ha tenido mucho que ver en estos cambios. Personas de todas las edades comparten su vida tanto
en el mundo físico como en el digital, siendo este último parte inseparable del primero. El sociólogo Manuel
Castells afirma en este sentido que “la virtualidad en la que vivimos, es una de las dimensiones fundamentales de
nuestra realidad. No vivimos en Internet, ni para Internet, pero con Internet.” Morduchowicz agrega a esta
afirmación que los límites entre el off-line y el on-line, no están definidos de manera clara en la actualidad. Las
personas que utilizan TD se mueven en uno y otro ámbito, mayormente sin diferenciar el pasaje, ya que son parte
del todo cotidiano, e incluso han modificado varios códigos de conducta. Por eso podemos afirmar que las TD
forman parte de una nueva cultura juvenil. En sintonía con lo que dicen estos autores desde las ciencias sociales,
Benedicto XVI afirmaba que “el ambiente digital no es un mundo paralelo o puramente virtual, sino que forma
parte de la realidad cotidiana de muchos, especialmente de los más jóvenes” (2013). Y aporta Antonio Spadaro
en este ámbito: “el espacio digital no es inauténtico, alienado, falso o aparente, sino una extensión de nuestro
espacio vital cotidiano, que reclama responsabilidad e interés por la verdad”. (SPADARO, 2014, 23)
Hasta aquí realizamos una breve introducción a las tecnologías digitales actuales, pero todo esto ¿qué
tiene que ver con la Pastoral? Quizá podamos sentir como escandaloso hablar de tecnologías actuales, cuando
hay problemáticas urgentes que resolver en el mundo como las guerras, la mortandad infantil, el analfabetismo,
las enfermedades y hambrunas, entre otras. Nada quita que esas sean cuestiones prioritarias a atender. No
obstante, en el microuniverso del que vamos a hablar, la praxis pastoral tiene mucho para aprender y mucho para
compartir, y el ritmo para hacerlo es bastante acelerado. Y si en este microuniverso tecnológico del que cada vez
más personas forman parte y, casi en su totalidad son proactivas: comparten información, fotos, videos,
comentan, aportan sus “me gusta” ( ), crean contenidos (páginas web, Facebook, blogs), entre otros. ¿Cómo no
tener esto en cuenta en la praxis pastoral? ¿Qué desafíos se nos presentan? ¿Qué consideraciones primeras
tendremos que tomar? En este texto analizaremos la relación tecnología y pastoral desde un punto medio, es
decir sin ser ni apocalípticos ni integrados parafraseando a Humberto Eco, que en su libro homónimo, distingue
en los primeros a aquellos que ven a las tecnologías de la comunicación como destructivas de las características
propias y tradicionales de cada comunidad, y los integrados nuclean a quienes son más optimistas y hasta
ingenuos respecto de estos medios. En parte es así porque, mientras los apocalípticos sobreviven precisamente
elaborando teorías sobre la decadencia, los integrados raramente teorizan, sino que prefieren actuar, producir,
emitir cotidianamente sus mensajes a todos los niveles.
Por otra parte, la teología y la praxis pastoral necesitan tanto de las demás disciplinas intrateológicas
(bíblica, dogmática, entre otras), como de las demás ciencias con las que dialoga (por ejemplo, psicología,
pedagogía, sociología, antropología, tecnología). Es por eso que en este libro entrecruzaremos las diversas
disciplinas y ciencias para orientar nuestra reflexión pastoral. Por último, este no es un libro de recetas, sino un
acercamiento desde diversas ciencias a la temática de las tecnologías digitales en relación a los jóvenes y la
praxis pastoral con ellos, que analizando este emergente epocal, puede quedar desactualizado a la brevedad.
Sin “copiar y pegar” análisis de otras ciencias y realidades, intentaremos realizar una primera observación
sobre la relación entre TD y las praxis pastorales, basándonos en las ciencias en diálogo con la teología pastoral.
Desde el recorte temático propuesto, recorreremos varios puntos relacionados con nuestro tema de
estudio: qué características propias posee la transmisión de la Buena Nueva en los tiempos actuales, cómo es la
convivencia entre los jóvenes y las TD, de qué manera se manifiesta la identidad y el sentido de pertenencia en
las tecnologías digitales, qué similitudes y diferencias encontramos entre las comunidades “cara a cara” y las
digitales, y especialmente qué relación encontramos entre todo lo profundizado y la praxis pastoral -sobre todo la
juvenil-. ¡Comencemos!