Está en la página 1de 3

CON… MOVIDA… CON EL PENSAMIENTO COMPLEJO…

I””
“El pensamiento complejo… es un pensamiento que relaciona, que vincula y complementa al contrario del
pensamiento tradicional que divide, sintetiza, aísla y desvincula el conocimiento en disciplinas”.
Edgar Morín

Con…movida…con el pensamiento complejo, bajo este juego de palabras,


relato lo que ha significado para mí, Conocer, más, no Saber, sobre el
Pensamiento Complejo de Edgar Morín. “Con” es una preposición, que en este
caso, indica el modo como se realiza una acción, dicha acción tiene que ver con el
movimiento, con la “movida” y ésto implica un cambio, un movimiento y una
transformación. El Pensamiento es la capacidad que posee el ser humano para
crear y formar ideas representando su realidad. Al enlazar esa capacidad o
facultad mental a la noción de lo Complejo como el admitir que los eventos, hitos o
sucesos afloran en conexiones que se interconectan, se imbrican, se
interrelacionan, tal como una tela de araña. El tomar conciencia de estos términos,
me hace sentir conmovida con la noción del Pensamiento Complejo.

Confieso, que la primera vez que escuché sobre la Teoría de la Complejidad y


cómo el programa Estudios Abiertos está sustentado en este paradigma
emergente, sentí un vacío en mi corazón. Mi mente, - por un segundo-, sin
pensamientos, y luego, una terrible ansiedad. A nivel afectivo, me impactó, e
inmediatamente volví atrás la mirada. Te cuestionas y cuestionas que pasó con el
otro paradigma, con el que nací, me formé y lo asimilé como algo normal, en lo
cotidiano, en mi propia existencia, en mi formación académica. ¡Es miedo!... ¡Es
ignorancia! ¡Lo sé!... Es la sensación natural cuando “Despiertas” a una nueva
realidad. Luego entonces, aflora la necesidad de conocer y profundizar aún más
sobre esta situación de vida, con la intención de no seguir pecando de ignorancia,
de profundizar aún más en este conocimiento, y ¿por qué no? de llegar a Saber.
¡Es todo un desafío!

¿Cómo Pensar Complejo… Sentir y Hacer?


Lo anteriormente relatado demuestra brevemente mi Pensar y mi Sentir, ahora
estoy obligada al Hacer. ¿Cómo lograrlo? He comenzado a leer. Intento
comprender e interpretar las dos teorías: dos paradigmas, dos estilos de vida, dos
maneras de percibir el mundo, dos puntos de vista cognitivos, esto me va a dar
inicialmente una base para buscar en ambas, puntos de encuentros y
desencuentros. En el camino, irá surgiendo la orientación específica hacia donde
me conducirá esta iniciativa intelectual, afectiva, física y hasta espiritual. Si, se
escribe fácil, pero, ¡lo intentaré!...sin complejos e intentando Pensar Complejo.
Comencé a indagar en las páginas de Multiversidad Mundo Real, en Youtube, en
libros digitales, y me atreví a realizar el curso on line sobre la Obra de Edgar
Morín| Multiversidad Real - México. Asimismo, invité y envié el enlace digital a mis
compañeras de la Comunidad de Aprendizaje para que disfrutaran y descubrieran
que este paradigma no es nada complicado, si, Complejo, porque busca que el ser
humano indague desde múltiples aristas, perspectivas, puntos de vista, y esto es
enriquecedor, porque te das cuenta que no te quedas en un sólo plano, sino que
buscas lo plural, lo múltiple, el todo en las partes y las partes en el todo, en lo
vinculante, en la interrelación, en las interconexiones. Y, como yo, soy producto y
a su vez productora del paradigma tradicional, pues, un buen comienzo sería
cambiar mi “disco duro”. Es un proceso mental, que implica una férrea voluntad,
un compromiso consigo misma para desaprender y aprender. En otras palabras,
resetear la mente y reconfigurarla con otra base de datos. Y ¿Para qué? Para ser
capaz de leer la Teoría de la Complejidad, comprenderla, interpretarla y explicarla
a mis pares, ¡Eso sí, con mis propias palabras!.¡Con conciencia! El día que logre
esta aventura, ese día, gritaré de júbilo, y, podré decir: ¡Ya lo sé!.

En el curso taller sobre la Obra de Edgar Morín, en el Módulo 1. Nociones y


Principios Fundamentales del Pensamiento Complejo, asevera que: “Lo complejo
trata más bien del reconocimiento de los vínculos, enlaces, e interrelaciones de los
fenómenos y los acontecimientos”, éste planteamiento me impactó de tal manera,
que como terapeuta en el área de la salud, lo relacioné al instante con la Teoría de
los Cinco Elementos o Reinos Mutantes en que se basa la filosofía milenaria de la
Medicina Tradicional China. Estos Cinco elementos representan los órganos
vitales del cuerpo humano y cada elemento depende del otro generando una
interconexión armónica entre los cinco elementos favoreciendo el equilibrio
energético. No obstante, si la energía de uno de los cinco elementos, es
insuficiente o está en exceso, esto, afecta al Todo y se traduce que el ser humano
enferme. De ahí que la noción de lo Complejo, lo conocemos empíricamente en la
cotidianidad terapéutica sin tener conciencia de ello. Hasta ahora, me he
planteado comprender uno de los tres principios de la Teoría de la Complejidad: el
principio Hologramático y relacionarlo con la Teoría de los Cinco Elementos.

Ejemplo a seguir:
¿Cómo abordamos al ser humano… desde el pensamiento complejo?
Cuando asistimos a una persona en tiempo de enfermar, lo abordamos desde
múltiples aspectos: Desde lo psíquico, biológico, social, cultural y hasta político, lo
abordamos desde lo integral, intentamos relacionar e interrelacionar estos datos
buscando el origen del por qué dicha persona está enferma. Esto está reflejado en
la serie de preguntas que hacemos al paciente para reconstruir su historia de vida
o historia clínica con el fin de elaborar un diagnóstico y un tratamiento terapéutico
personalizado. Todo esto es parte de mi cotidianidad. Es por ello que, en un
primer momento reflexioné sobre la pregunta que hace Edgar Morín: ¿por qué es
necesario aprender a pensar de manera compleja? me preguntaba ¿cómo Pienso
Complejo? hasta que me dije: -yo no pienso Complejo- ¡Yo soy Pensamiento
Complejo! Esta forma de pensar, es innata en el ser humano lo que ha pasado es
que nos han castrado esa capacidad de Pensar Complejo. Lo he aplicado todo el
tiempo como terapeuta de MTCH, y sin darme cuenta. La diferencia está en que
no tenía conciencia del concepto. No tenía conciencia de este proceso, de este
procedimiento, de ésta manera de pensar, hasta ahora, que el programa Estudios
Abiertos de la UPTM lo ha dado a conocer.

Me propongo llevar a cabo una serie de estrategias para leer, comprender e


interpretar la Teoría de la Complejidad:

.-Comprometerme, ser responsable y honesta conmigo misma en el Hacer que


conlleva a la búsqueda del Saber. Debo cultivar la automotivación y la
autodisciplina. Llevar una bitácora que evidencie este transitar intelectual y
afectivo. Comprender e interpretar el lenguaje propio que caracteriza a la Teoría
de la Complejidad. Utilizar ejemplos creativos y cotidianos que me faciliten la
comprensión sobre la obra de Edgar Morín.

Por consiguiente: Hago mías las palabras de Alber Lifsting, médico mexicano,
que en una conferencia sobre la Salud, declaró lo siguiente: “He sido contagiado,
(con la Teoría de la Complejidad), aunque, aún no la he desarrollado, he sido
inoculado”.

También podría gustarte