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Año 1 Núm.

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M a d r i d TI d e F e b r e r o d e 1913

ÜR TO]VIñ DE TETUftfl

l i a e h a entpe motaos y cmstianos.


F.l fotógrafo quu enviamos á Tetuáu parn. que, fiiora eutei-áiidosc, de la toma, nos envió este hcnuoso clichO. Ka la reproducción do
uu zoco por detrás de Tetuán, Mientras el Santón Ahur-Ben-Maoatre, en primer término, entona un himno Alú... luna, el kaid Moja-
mar-Mer-Kader-Romanones tarenga á los bravos montañeses Ajajá-Soriauo, Mojamed-lglesias, Ali-Oü-Azeárate, Hau-Jamalá Fran-
cos, Áljatiim-RoncalA-Muñoz y Habdul Moya, y grita, scü alando á las alturas:
•—¡Hijos mios! Ved cómo los espectros cristianos coronan las montañas. Si entran, moriremos de hambre... Santón, cállate ya
y no fastidies, so latoso... ¡Valientes: á ellos!
*.! HM!T;r

EL MENTIDERO

iCofi'mí
titin Büii^onto, t^nfiMlad». Nos habla de la situación económica, fanda, echó la última firma y desaparecii'j
que cree es insostenílile; echa pestes con- escaleras aljajo,
Estábamos enterneciénflonos con un ai- tra Romanónos por su intelíg'oncin con los Cuando partió su coelie-estufa nos [ÍVÍ^-
ticTilo de El Miiiido en que se tlcscrihc; In oonjuncioiüstas; dice quo él se opone á las guntamos:
ioUetfp. lio Roinfiiioiie.H, qup-, sc^-ún el tnfor- Mauc.oiMUiiidades porciue se trata do un — ¿A qué iiabrá venido don Eugenio?
niíidor, i'Htá 3iig-tí3tivn con un niHtiné \v/.\\\ negocio sin preeedentos en la historia d(! —Pues ya lo ven ustedes: á lo que va á
pálido ni¡entra.s le rasuran, cuando oímos España. todas partes desde liaoe un Uíos. A decir
en la cnlie como el rodar de una caldera So excita do tal manera, )|U(Í \r. ¡ifrece pestes contra Romanónos.
dol asfaltado. Ei'a Montei-o que. llegalja en nms un vaso de ag'ua.
su coche, estufa. Don Eugenio se yorg-ue airado.
.Snliió, se .sentó, lo dio tros viiettas m/iñ —¿Ag-ua?... Nunca. Dospuo.-i di> haber Figuras parlamentapias
á la bul'anda, pidió un bra.iíero, ocbó dos sufrido á Gasset y de estar viendo oónu) se
tirinas por no perder la costumbre, y se desenvuelven los neg'ocios hi<lráulicos de

m
quedó mirando á una f'otofi;Tana do don Al- Piarceloiia y do! A!to Aragón, no quiero
varo que tenomoH en la redacción para ver el agua ni para bañarme. Denme usto-
aluiyentar á los pcdi{>'iicños. iles otro líquido cualquiera: un poco de
—¡A ese! ~ g-ritó -'. ¡A esc le ha do cos- sidra, aunque se me atragante como un
tar uniy cara su conducta. ¡Ali, pero no ' discurso (le Jlelquiades.
sabes tú quo. te espera uu castig-o muy — V en la política ¿qué ve usted, don Eu-
duro! ¡Falso!... "•enioV
—Sevillano, querrá usted decir, don Eu-
g'onio. i l o h É i i ^ e n l o , n'iij^iir.
—No, aefior, ¡falso! Y déjese usted de
troqueles. (Don Eugenio llama troqueles Don Eugenio nos traza un cuadro com-
á los retruécant).s.)^;l''oro no ha visto usted pleto para el porvenir.
qué combinación? PaHantcs, pasantes y — Ahora —dice— Romanónos empie./a á
pasantes. ¡Ni un solo hijo! ¡Hijos de mi entenderse con los conservadores. Asegu-
alma! A la subsecretaría do Instrucción, ra que ea el amo y don Antonio parece de-
el pasante de Manolo, de mi yerno... cidido á darle la alternativa.
—Que, dicho entre paréntesis, y con Despachados los diez ó doce negocios
toda la seriedad de qiie dtBi)onemos en gordos que garanticen el silencio de un
esto instante, es á la par que triste como afio, ya no tendrá raüón do ser la perma-
una antolog-ía de poetas, una peraoiía do- nencia de los liberales en el gobierno.
oento y lista... Para Octubre tendrán ustedes conserva-
—Sig"o la lista, A Propiedades, Cliapa- dores, Lerroux ecliaiá a l a calle dos do-
prieta, pasante de Gasset, que ig'noro para cenas de infelices que lancen unas voces
qué diablos quiero los pasantes. A la Di- y reciban unos cuantos palos; la Conjun-
rección de Comercio, D'Ang'elo, pasante ción dará una serie de mítines cantando El simpático dipiitado D. Julián Ñon-
político de Borbolla. la libertad, y Melquíades, en un rasgo de gues ensayando un paso de tueste.ii en su
—No ha podido sor más cOrtita la com- patriotismo, llevará su programa refor- tofftadero de calo de la calle do la Mon-
binación. mista por los campos de la monarquía... tera.
—Pero dejen ustedes que pase el perio- —¿Y nada más? •, (Fot. Miró.)
do y ya ver;ln. Baile de diplomáticos... —Nada más, porque lo que venga des-
— Qu(^ por cierto no deben servir ^rnn pués yo no he do verlo, no pienso verlo.
cosa ouiuid() en estos instantes se deja sin
cuin-ir la embajada de París.
Me voy á Lourizán, donde me han supri-
mido liasta el telegrafista, desde que mí
Semblanzas políticas.
—¿Lo.s parece á ustedes fácil la provi- yerno Víncenti se hizo aquel famoso uni-
siónV Pues aspiran nada más que Navarro formo. Ya no soy nadie, no me estiman Vedle con la cabeza siempre erguida,
Reverter, Merino, Burell, Amos Salvador, en nada. an-ogaute la traza, esbelto el talle,
Conoas, J")Avila y Palomo... En las resul- Por las mejillas do don Eugenio se des- sin quo nadie su voz potente acalle,
tas entrará la log-acióu de Lisboa, á la que liza una perla. ofrendando el desprecio de su vida.
irá e! conde de Garay, que está aliórá muy Sentimos un poco de lástima y 16 pro- Es un tritón quo no obedece á brida
al tanto de todos los asuntos del otro ponemos llamar á Barroso. ni existe quien le dome y avasalle.
conde. —No; iV Barroso ¡jamás! Barroso ya no Dondequiera que esté, hable ó se calle,
—f^ '^t^" yobsrnadoí»e9, don íjugenio? és mió; ¡Barroso es un apóstata! Que- se está sn autoridad rooonocida.
— Ihi piirciáií do cesantías. Todo.s los- quede con Romanónos para toda la vida... No so aviene á vivir sin su partido,
que' iVacasen en las elecciones. Ahora es En adelante, yo no he de ocuparme más y sin que su actitud al mundo asombre,
cuando va á empezar el romanonismo, y que de mis coles y de mis cebollas. Son es en todo tan firme y decidido
crean ustedes que es peor que la colera, los iinicos seros vivos que conocen la fide- quo, cuando dice, con valor sin nombro:
¡Señor! ¿ÍJué te ImniiK hecho para .tanto lidad. «¡Ahí queda eso; me marcho!» Ya es sa-
[bido...
I l o n lüfi^eiilo su f e t í r n . que atrás hade \'olverse. ¡Como un hombre!
Ilon Kii^eni» incilito. Rip.
—íQuioredoeir, don Eugenio, que usted
Don Eugenio calla, frotándose las ma- so retira?
nos al calor del brasero. Do pronto sedes- —Sí, hijn. si... Me retiro... porque es Como BOU iiiimhus In.s peíaonus iiuf.' nos esi^ÜKüi
pidioiido BCr suseriplorus, iidvcvlimos (¡IKÍ solo st;
abrocha, con gran asombro de todos cuan- tarde y ha llegado la hora do mí caldo... liíieoii 8iiBcri|K;ioii(!8 por año, que ciiesítiin plus. tj;>
tos lo contemplamos. Ha llegado mi hora. ilül iiln, las cualuB dobüii iieoni|ijiriJti-se a! pedido un
Se desata ou interjecciones, como si du- Y el buen Montero, después de pedirnos Uhr.Tnza:» lie pvouHiL li aonüiliiimt'.iite e» [ICITOB gor-
rante su meditación hubieran desfilado unaa obleas y dos ejemplares del periódi- dos.
por su mente, todos los espectros de la po- ¡Sofiorcs: quo el jmpel non niunta iitá.'i y damos el
co para uo perder la costumbre de llevar- iuMnio du baldo!
lítica. se algo, lo dio (ttras Hois vueltas á la bu-
EL MíüNTlUmiO

Pues Iñen; eatos dos frescos han estado Mas llegado e! periodo eU'ctora],
LOS REGALOS DE MODA á punto de pasará manos de otros... aefio- Romanoues, triunCal,
res, que no son sus actuales dueños. llamó á sus enemigos
Caminero adelante. Para evitarlo, una autoridad del Minis- y se hicieron amigos.
terio, que no es el ministro, tuvo que dar ÍTfís hi^n
En tista rütiacción figura un distinguido la severisima consigna de que los frescos y no mires á quién.
puóu caminero, ag-regaclo á, la aetu-etaria fueran escrupulosamente vigilados y q\ic *
se echara el guante á quien intentara to- * *
de nuestro querido Director, tíon el mismo
carlos, aunque tuviera la autorización del A un candidato adicto • '
doreclio rjuñ íiyuran en la de Romanoues
propio ministro, que por lo visto no sabe nuevecito 6 ignoto
niuchoB l'uncionarios que cobran del pre-
lo que se pesca. á quiou las elecciones,
supuesto.
Un día empezaron á montar unas hiirrati stigún le dijo el cojo,
Este pe.óu auda de coronilla desde tjne
ante los frescos, dirigiendo la obra un no habrían de costarle
recibió una atenta circular con íeclia 11
amigo de la casa, que á juzgar por lo que más de seis reales ú ocho,
del plácido mes en que vivimos, dirigida Í'Í
le gusta el arte pictórico, debe ser admi- le han costado ya un dedo
todos los capataces de Kspaña, y en la que
rador de Amallo (de Amalio, el pintor es y la yema del otro.
ae ordena que reúnau inmediatamente al
personal y que se formen las relaciones cenógrafo). En cimunsiiancias exlranaa
que al dorso se espceiftcan. En definitiva: que se produjo mar de es licito chupar hasta (as yemas.
¿Para qué dirán ustedes? ¿Para que arre- fondo, que el amigo cayó de la burra y que *
glen y vigilen las carreteras? ¡Quiá! alli continúan los dos frescos, es decir, los Maura, el del tupé^^de nieve
Para que cada capataz y cada caminero cuatro. se discurrió el famoso veintinueve;
autorice á que le descuenten de su sueldo IJOS dos de Goya y los dos del Guada- y hoy el Conde con este artieiilito
el importe de un trimestre de suscripción rrama. trae al gran Maura frito.
al periódico El Caminero y cinco pesatas ¡Asi da gusto! TÍO. lo dicho se infiere
para iin rcAjalo al muiistro de Fomento, se- (¡lie ar¡iu;l que á hierro mata
íior Villanuevü, ij al Director de Obráis 'pú- á hierro mu&re.
blicas, con arreglo á lo que está mandado
PON.
en la circular 'de Üá de Enero i'dtimo, se-
gún se indica.
Esas cautidadea deben ser enviadas; sin E l . !IBI<:ATII»Eei<»
pérdida de,tiempo, al pa<;'ador de Obras De los conscr^'adores, ' ¡\_ t i e n e h o y 74>.4><>4b Icctoru^^. I^roiilo
pxlblicas, y las casillas del dorso diccu; decia el Conde horrores; lo l e e r á loiln Ey|iBii(i. \ e§(> 4¡iie em-
«Relación del personal de este servicio, y (dios, naturalmente, pezamuK lüiii iloi^ |iL't»cl»!!í.
que autoriza al señor Pagador de Obras hablaban iaiiil)ié.n mal del Presidente. m fnltu i | a c nos liaccn.
pxiblicas de esta provincia, para que so les
hagan los descuentos que en los mismos
se mencionan.i>
Y cu uua casilla se lee: '-Pago por tri-
mestre dul periódico El Cavúnero.:- Y cu
la do al lado: <;5,0Q pesetas para el obse-
quio.»
Nuestro peón se lia quedado dando vuel-
tas á la circular, y nosotros nos liemos
puesto á cacribir una carta felicitando al
señor Villanucva y Director dis Obras pú-
blicas por el espléndido regalo que van á
recibir.
Porque debe advertirse que doce mil y
pico de camineros, á duro, son thice rail y
pico de duroH contantes y sonantes.
Y es tanto más de agraiUxer la abnega-
ción de estos modestísimos hombres que,
ganando irrisorios jornales, apenas para
mal comer, no solo entregan esas 60.000
pesetas, sino las 15, 18 ó '2Ü.ÜÜÜ <iue cueste
en total la suscripción de El Caminero.
Bien es verdad que los regalos de grati-
tud están de nmda, según larga lista que
tenemos.
[A ver quién es el guapo que pide mejo-
ras para su'^Cuerpo!

DOS FRESCOS
iilsLos dos frescos, aunque sea hmi'ccsa-
rio decirlo, están en un Ministerio. Son
dos frescos de Goya (1).
Uno representa á Pepita Tudó, recor-
dándonos los buenos tiempos de doña Ma- Ki C'oíiííí',—Adelante,'don Antonio. Llega usted á tiempo, porqucjm doy con l'aVom.
ría Tubau, y el otro á uua reina. binación, Mezclo ácido coujuncionista con óxido radical y me da detonante; bisulfato
socialista y cloruro neutro, me da'esencia de borrajas...
( l | 3Í0 son iVowiíOH, Hiiio lieii7,i>ti LOIOI-ÍIIIOS VW utuií;
mcil;iU<nuíS', \w.\-n ni no lo tUiílúvaiiioN /'M.S ¡'.V.'H'H^,
Mífiíra.—Mezcle usted jarabe'couservador y aceite liberal, á ver qiu' le da,..
no j;odriainos !i!itor cliistus. El CüJtde,—^le da... miedo, don Antonio.
EL MENTIÜERO

País,, con el p s e u d ó n i m o d e Fermín Oroz-


GAZAPILLOS co, u n a saladísima sección titulada Diálo-
EL MUNDO DE LOS NEGOCIOS
gos.
E s t o s diálogos v i e n e n a m e n o s , c a d a vez \ ' a bien el nogoeicjo del ferrocarril de
Espaiia Nuem dice: más á menos. las A i p u j a r r a s ,
Véaae la m u e s t r a : El e x p e d i e n t e que e s t a b a en el C o n g r e -
«Los rovt^s ele Diiifiniarca, patria del
queso...» — ¿ P o r d ó n d e se llega a n t e s á Palacio? so h a sido pedido otra vez p o r el Ministe-
¿A tistodes s(í ios ha ocurrido alg'unn vez — S e g ú n do]ide v i v a s . rio de F o m e n t o á los catorce días de llegar
—Me h e m u d a d o .
pedir qutiso do Din.iinarc;t., como queso — E n t o n c e s n o estás lejos.i á la. Cáuiara.
d e renonibi-í-í'r' Si el ministro a p r u e b a lo que pide tiu
¡Ja... j a . . . j a ! • • e n j a m b r e de caballeros que en otra o c a -
Nosotros solcinoH ¡ledii-lo do H o l a n d a ,
d e S u i z a . . . d e Vülalóii. No; esperen u s t e d e s , que aliora nos roí- sión r e v o l o t e a b a en torno á las redaccio-
romos con m á s g a n a , leyendo este: n e s y á las c a s a s de los políticos, se h a r á n
P e r o , en fin; p r o b a r e m o s ese queso d e
«—¿Has leído E L M B N T I D B H O ? • •• n u a s c u a n t a s fortunitas á costa del E s t a d o
Espütia Nzieva. . .
—No t e n g o suelto.» y del c o n t r i b u y e n t e .
¡A v e r ose queso!
¿Cómo que no t i e n e n u s t e d e s sueltoy En la lista d e a g r a c i a d o s q u e poseemos
¿Pero es quo v e n d e n ustedes El País á (iguran —¡cómo no!— m u c h o s prestigios.
billete por ejemplai'? P a r e c e que el S r . I g u a l está dispuesto á
Leemos cii eJ Diario de Córdoba:
desnudarlos.
•Jínviamos el p é s a m e m á s sentido al te- I g u a l . . . que nosotros. ; '.'
n i e n t e eoronei del reg:imiento d e l a n c e r o s El Liberal titula su l'oiido A.siiii/o eno-
d e Sag'unto, D. F r a n e i s e o IJzquota Bcuil- Es decir, igual no, p o r q u e nosotros les
t e z , que a c a b a de obt<Miei- el ascenso á eo- joso. vamos á dejar en ealíioncilios n a d a más.
r o n e i , eon motivo de la m u e r t e d e su ma- Y no seguimos l e y e n d o ])or s u p o n e r que
dre, d o ñ a L e o n o r Beiiitez Muñoz, ocurrido se t r a t a del pleiío de ¡a s e ñ o r i t a d e T o t a n a ,
en Madrid.:- del q u e por cierto no se h a ^^^e!to á decir El- MKXTIDKHO es tan hidráulico como
Nosotros también aeomjwiñamos since- ni pío. cualquier Ijotíjo de los que i n s p i r a n los
r a m e n t e en su dolor al Sr. Unqueta por ia ¡Y nosotros que piíiisábamos optar al discursos do Gasset y Chincliilla, q u e por
m u e r t o de su señora m a d r e . premio de la virtud periodística! cierto nos r e s u l t a mejor en su calidad de
Pero también tenemos que acompañar Chinchilla p a r t i c u l a r q u e vestido d e uni-
e n su dolor d e c a b e z a al- e s t i m a d o compa- íbrl^e.
ñ e r o q u e r e d a c t ó la noticia. POLITIJOS POR LOS PIES A d e m á s , l^^r, MKX'TIUKHO t i e n e sim|iatías
por A r a g ó n , i n c l u y e n d o á don J u a n d e
ídem y excluyendo á D. Andrés, porque
Do otro colep,'a es este a n u n c i o : no q u e r e m o s n a d a eon el M u n i c i p i o .
<.-lUns lipjaraiiú Visü, Céspedes, ií, Cór- P e r o , v a m o s , d e la h i d r á u l i c a y el b a t u -
doba. rrísmo, á que c o n s i n t a m o s sin l á g r i m a en
A g e n t e de negocios m a t r i c u l a d o . los ojos q u e se d e r r a m e n cincneula millo-
H a b i l i t a d o d e Clases pasivas. ñas do. pesrlas m á s de lo que r e a l m e n t e va-
Representaciones de Ayuntamientos,
D e v e n t a en todas l a s farmacias.» len laa obras, hay u n a diferencia como del
cerebro de Costa al ci'áneo de don T o m á s
Se ios lift olvidado decir si v i e n e en Iras- líonmro.
cos ó en a m p o l l a s . ¿Que esos 50 millones q u e e x c e d e n del
¿Quiere usted d a r m e u n h a b i l i t a d o d e valor positivo d e las o b r a s se n e c e s i t a n
Clases pasivas en cápsuiasV pai-a evitar dos q u i e b r a s y d a r u n o s c u a n -
tos quiebros?
¿Quién es éste?
¡ P u e s ^ l e c í r l o , s e ñ o r , q u e a q u í n o se
líig-el, en el líeraldo, h a b l a de la A t l á u - asusta á nadie!
tida y ae refiero á lo que de olla dijerou P e r o eso ya es r e g a r l'uera del s u r c o .
I'latúii y Bala¿í'uer.
: ; : • • " *

Vcrdag'iiür, h o m b r o ; moséu J a c i n t o Ver-


daí^uer. P o d e m o s asegui'ar á n u e s t r o s iectoros
Kn lo d e giior lia estado u s t e d b u e n o , q u e el negocio de la G r a n \"ia a d q u i e r e
p e r o ose &[f/(í nos h a Iierido en m i t a d d e cada vez m a y o r vigor y (ii-meza.
corazón. A h o r a , que como el plazo p a r a la termi-
nación del p r i m e r trozo no e m p i e z a á con-
larae h a s t a q u e el A y u n t a m i í m t o e n t r e g u e
Copiamos textuftlriuíiití'. y s u b r a y a n i o , , la ú l t i m a casa y ésta s i g u e sin e n t r e g a r . . .
por n u e s t r a cuenta d e los diáioí^'OS d e la ;pne,H v a y a u s t e d á sab(ír!
Tribuna, titulados En hi CaTrera..J'''"~-' '•• P e r o desde luego p u e d e a s e g u r a r s e q u e
a n t e s d e l!)72 h a b r á G r a n Via, b e l l a m e n t e
«—Oh, a m i y o , bou ú mi. ¿Hay notieias'/
~¡Üen de UÚUIHUIIÍ bonnc di'. imnreile.>, rodeada d e espléndidos sidares.
¿Y éste? Los q u e r i d o s colegas siguen h a e í é u d o s o
P e r o oÍf;-a u s t e d , pollo, q u e carrera es
los locos.
e s a ? No s e r á n i n g u n a en q u e se exija td
No se h a n e n t e r a d o ni de que hace d o s
l'raneés. ¿Verdad, bou á mi?
dias e s t u v i e r o n dos ingleses e s t u d i a n d o el
negocio y S(Í volvieron á L o n d r e s asom-
* *
brados.
A- La Bpoca lo p a r e c e q u e es o b l i p i t o r i o ¡Atención! A n u n c i a m o s q u e van ;l ocu-
p a g a r el iminiesto de i n q u i l i n a t o . rrir g r a n d e s cosas, por si q u i e r e n u s t e d e s
Si no se Imbicse n n ' e n i n d o la fotogralia,
Y muy conveniente. enterarse.
n ¡ El Duvinh.: ni yo t e n d r í a m o s razón di^
Sobre todo desde el día que ol A y u n t a -
existir.- .•l//í>íí.s().
miento acordó e x c e p t u a r á los periódicos. P r u i i l o .M(> h f i r á n e n E L ¡IIIilLtiTI-
¡Le dig-o á u s t e d , jí-uardia!... 8ki;U<ft •-erorniain ife i i i t p u r l a n c i i i .
C ' o n i » n o asi)fi'Hnio.>4 i'i h a c e r u n i i e -
¿Hoi-íjué se dirá qu(í los b u q u e s , c u a n d o
• * *

se a v e r i a n , hacen ai^-ntiH?—El Minisiro de. movUi, todo lo que lüi. newTiaeKo


Un guasón iíinpi(í?,a -X publicar m l-'J- Marina. [ii-oilii/ca Ke iuvLTtirVí v n m e j o r i i r l o .
EL MlíNTlOEUO

Serna, ha publicado una nueva cosa que sultas, y la bnena señora se decidió á lia
se .titula Tapices. mar á una linajuda dama palatina. .
En la portada aparecen tres repugnan- —¿Quién llamaV .'.•-•' '••
tes pendones desnudos, que suponemos —Aquí, Fulana... ¿Es la señora marque-
seríVn lai>izadoít por el Sr. Méndez Alftuís, sa de,..?
aunque se trate del chico de un ex fiscal —Sí-, tisted dirá qué se lo ofrece.
del Supremo. —He recibido una invitación parala ca-
En la tripa del libro hay cosas estupen- pilla.
das, liliahnente desatinadas, ostrícolas sin — ¿Usted? No es posiljle.
incienso, sagitarios... —Le ascg'uro que si; pero como no estoy
Véanse trQ^ ¡iárrafos con que comienza en antecedentes, ignoro qué hace falta
un capitulo y que trancribimos: para asistir á la ceremonia...
cSubsconciencia de vivir... —Pues lo primero que hace falta es te-
Pleamar... uei- derecho á la aaiatencia.
Matemática... Y colgaron el auricular. '•
Uno receptivo, abierto como un valle...» Esas son las consecuencias...
Vea usted al médico, pollo. - ..
^ • • . , < --
LITERATOS AL NATLRAL Y que le arregle el receptivo, porque eso
lio anda bien.
Escena desarrollada ou uu ciiuí la noche
l ) o l Altano». del lunes.
El almibaraílo y elocuente cíitedriUifo CHISMORREO DEL G R J M i ü O Está obscuro y huele, como cu todos los
cines, ü e pronto ae oye una VOK de mu-
Sr, Gay, quíi ya no sabemos clónrle tUMie
chacha:
la ciUiidra, porque se p á s a l a vida á la Se Iiabla de la boda de un político que —¡Quite usted, tio viejo. Vayase usted
pULM-ta (ie Romanovit'H, tuvo una idea (;n no es monárquico, con una dama aristo- á tocar...
vista de qiic dc-rrotaron á éste en el Ate- crática de provincias. Escándalo, risas y luz.
neo: hacer imposililn la vida presidencial —Dicen (jue eso acabó y que acal)ó mal. La protestante es una chica de esas que
á todo el que ocupo t'l earg'ü. —Lo que empezó en J/Ocura ije amor'i?,- dan la hora, señalan los cuartos y marcan
Solo dijo áRoniauoni'H —asi lo lia L-ini- tiivo á punto de couclnir en FA tanto par las medias.
tatlo ei mismo Gay— y Uonianoncs lo eoii- CiClllil. El protestado, un simpatiquísimo y ga-
testó que el proyecto le pareeia de perlas. * - , • • • • . • •
lante ex ministro liberal.
Y asiaudan de cabeza los chicos de la
* ' • • * ; - . • '

A las capillas de Palacio pueden asistir Intervienen los guardias y el ex minis-


cacharrería.
todos los grandes de España, poro de las tro tiene quo identificar su alta condición,
Menos mal que doña Emilia les ha eu-
grandes —y esto es lo grande— sólo pue- jurando y perjurando qu.o no ha hecho
flulzado la existencia con sus trabajos
den ir las damas palatinaK. nada.
electorales, y su carta, en la que dice (\\ie
Hace poco, una ^'rande, que no es dama, ¡Vamos, truchilla! A nosotros nos cons-
pensar en ella para la Presidencia del Ate-
recibió una invitación, que debió sor ex- ta que hace usted el núnioro cinco en la
neo, hace honor á la cultura española.
tendida equivocadamente. lista de la Sociedad de descuideros de ca-
¡Esa e.s cultura! Y no la de Romanones.
Y aquí el apuro: «¿Cómo se asiste á Pa- deras ondulantes.
• f, l*a|H!l al |>eso. lacioV ¿En qué traje?-- Y diga usted para otra vex con anticipa-
Ti-isián {néc) líamoncito Gómez de la Sus amigas no supieron evacuar las con- ción lo de ex ministro, hombre.

_-!(; — . .. - i;j -

Brazuelo.—Sitio donde busca el Gallo la muerte B l o q u e . —Piedra grande Ibrinada con muchos po-
de los toros. líticos.
Brea.—Substancia que no receta á nadie el señor B o b o . - Un niño de los que se ponen en la esquina
Jimeno desde que es ministro de Marina. del caféSuii^o.
B r e b a j e . —Un café con media de arriba. Bobadilla.—!2as Candil ó Fray Candil, ó como se
BretaHa.—La patria de todos esos tíos que van llame.
molestando con las facturas por las casas. B o c a . — U n agujero que tenemos todcs para meter
B r e g ó n . " L a pesadilla de los empresarios del el piri, excepto los concejales, que suelen tener
Real. seis ó siete.
Breva.—¡Ni una palabra üiás! Eso no lo conocen B o c h e r i n i . — U n gobernadar que antes estaba en
más que los chicos de Navarro y los de Montero. Ki Mundo y ahora está en el Limbo.
B r e v e . — U n artículo de Moróte... cuando no titme Bocina.—Instrunieuto que llevan los automóviles
más que seis columnas. para hacer más agradable la muerte de los tran-
Bribón.—Califieativo cariñoso que se da á los pe- seúntes.
(jueños chanchulleros. B o d r i o . — E l c|ue está confeccionando Alba para
Brigada.—Puede ser de caballería ó de obreros. servirlo en las elecciones provinciales.
::=Estaa i'iltimas tienen la desventaja do que B o h e m i o . — U n m'ajadero que so deja las melenas,
como las organiza el Ayuntamiento se quedan á que es imbécil, y que resuelve el problema de
pie. vivir sableando á todo el mundo.
Brindis.—ICl postre más indigesto de todos los Bola.—Noticia que se fragua en el salón de eonto-
banquetes. rencias y que se tragan los reporters.
B r i s c a . — J u e g o favorito de las casas donde hay Bolsa.—Edilleiü destinado á la pesca y á la caza
chicas casaderas, que so,juega con las manos y de tontos.
con los pies. Es indispensable que haya ca- Bomba*—La qi^e cogió desprevenidos á Romanó-
milla, nos y á Rui/, Jiménez; pero ya ven ustedes que
B r o m a . —La que le han dado á Gasset con la no les ha pasado nada.
presidencia del Congreso. Bombilla.—Academia de agarrao. = También se
EL MENTIDEKO

EL MENTIDE
^^•rv.".a-

Como nuestras criticas lian dci ser hrti. Manrique, que habla íoiiiado tan en serio Hagamos'^historia, como diría cualquier
ves, nos liinitiinios á decir que Cuando fio- su papel ele primer actorV /intuí d(í El Cuento Jluslnido.
rczcaii toH rosales, del ext;elso y nimbfido * * * ' •• '
Portugal era un pais monárquico hasta
Marquinn, estrenado en la Princesa, nos (jue <!on la revolución vino la República y
Un literato y el maestro La Osa —la
parece una solenmetonteriainafi'iiantnble. con ella o terror doN monárquicos que hu-
mai/or, suponemos nosotros que sea tra-
Y lo mismo ie parece al púl)lÍco, gi'acias yeron España adentro.
tándose de un niú.'íico— le hicieron un
á Dios. Los pintorescos repiiblicanos lusitanos
cuplet á la Lulú.
Lástima de dinero el que se gasta Díaz A Lulú le g'ustó la música; la letra, no, no desperdician desde entonces ocasión
do Mendoza en amueblar esas cosas. y se ha negado á pag'arla. de dar pruebas de su republicanismo y de
.* ** El lilcrafo ha enviado el recibo á todos su horror á la Monarquía-, no sabemos si
los represeutanles de la Sociedad de Au- obedeeicnilo á sus intimas convicciones ó
En El Saluoje, que es muy malo, la míis á su terror á to.s carbonarios, con los que,
tores, para que se lo presenten á la Lulú
fuerte impresión de salvajismo la dan ios naturalmente, el porvenir se presenta nniy
dondequiera que debute.
artistas del Español. negro para los enemigos del nuevo ré-
Es el derecho del pequeño derecho...
Parece que está uno en plena Patag'oiua gimen.
¡Pero no hay derecho! •> • . , • •
y dan ¡janas de empozar á tiros. Asi las cosas, don Taneredo, que se en-
contraba en Madrid con su tranquilidad
*% habitual, recibió una carta del empresario
A 71 C, TAI Tribuna, España Nueva v
otros colcg'as, piden que los periódicos re- Caefíios de la plaza de toros de Lisboa, proponién-
dole una contrata.
nuucion las entradas do favor en los tea-
Se entendiei'on, y don Taneredo cerró su
tros y cobren los sueltos de contaduría.
E L MENTJUERO no aólo renuncia á las y correspondencia con el empresario, con
una carta que terminaba asi:
entradas (cosa harto fácil, porque no la.s
fConforme enlodo; puede usted anun-
tiene), sino que además se niega á ¡lu- ciarme ya, llamándome en los carteles ¿Y
blicar los bombos de pag-o. reí/ del valor.»
¿O es que la tarifa de la administración Pero á vuelta de correo vino otra carta
08 una especie de bula para eng'aiiar al del emiu'esario.
público? ¡Oh!—le decía—lo que usted pretende
l>oii 'l'iiiipredo y l;i ISeitúlilieii.
Europeizémouos... pero no tanto. es imposible. ¡Anunciarle como líet/ del
Conste, antes de empezar, que esto quo valor/ ¡Qué locura! Rescindiremos el con-
*
•r- Í: parece cuento, no es tal cuento; es uu su- trato. Es usted uu imprudente.
A Peña SG lo subastaron la Cosneilia, cedido tan i'ig'urosameute histórico, que Y tea-minaba así:
Apolo y Lara. alii está vivo y sano —aunque de milag'ro
«Si quiere usted venir á actuar en esta
Yáñez dio más y se lo lleva á la bombo- —el auténtico don Taneredo LÓIJCZ , en plaza, ha de ser á condición de que en los
nera. cuyo poder obra el documento en que carteles se le llame á usted O pnuHidente
¿Y qué van ustedes á bacRrcon el pobre consta la verdad de este relato. do valor taurino republicano.'-'

.-".'ij. v.-;:..

- Í5 —
- u " • • : , _ •... •;... ,

(.tice de ios merenderos donde la comida cuesta B o t a . —Único ajiarato de fuerza bastante para ha-
Un ojo de la cara. cer dimitir á los gobei-nadores civiles. ^ Tam-
Bombo.—Ajiarato que st', coloca sobre las mesas bién sirve para pescar la merluza.
de todas las redacciones y del cual se van extra- B o t e l l a . - C r i s t ó b a l y por mal nombre Juan de
yendo los adjetivos para espolvorearlos obre- Bei;on.
ias cuartillas. ' - ''í'"; ' B o t i c a , - A n t e s a l a del cementerio.
B o n á p o p t e . — E l general Weyler. Así se dice B o t i j o . Tren que organiza Mostré Martínez y que
cuando uno quiere dinero; i'Voy á ver á Bona- sirve para que la gente vaya á bañarse. Hay
parte^ Y le contestan: '¡A Bona...parte vas.i quien no se lavaría en todo el año si no existiera
Bonete.—Un panecillo de 40U gramos ó de 350, el botijo.
scgim sea el teniente alcalde del distrito. B o t í n . - C a s a de comidas, donde se encuentran á
Bonito.—Un pez. Así se dice de los que van ele- toda hora los mejores cerdos de Madrid.
gautes: «¡Mira qué bonito!.-- Botón.—Lo que no va á quedar del prosupuesto,
B o q u e r ó n . - U n o que estudia para, be.sugo. gracias á la unión con los republicanos.
Bordo.—Costado del buque destinado á que los Bragas.—Juan.
pasajeros se entretengan en echar comida á los B r a m a r . — L o que hacen los conservadores cuan-
peces. Hay quien lleva Su abnegación hasta el do se habla de la eontinuación dolos liberales.
punto de echarles la primera papilla., aun tra- Brafias.—Periodista y casero, l'-n IM. Tribuna AÍV-
tándose de un recuerdo de ia niñez. rán razón. ,
B o r r e g o . - U n o de IJ mayoría. B r a s e r o . — L o único que le calienta la cabeza al
B o r r i c o . — Igual que borrego, solo que más señor Montero Ríos.
grande. Bravo.—Doctor... ¡bravo! \' podia usted haber
Borrón.—El del Crédito Agrícola del Sur do Espa- (|uedado mejor ai hubiese curado á Domin-
ña. Lo malo es <pie no pueda aplicársele lo de ito- guin.
rréuy entinta niií-vo. CualquieradanadaáeuíMita. B r a z a l . Cinta.negra que, colocada en el brazo,
B o s t e z a r . - Obligación de los diputados cxiando ahorra veinte dui'os de nn luto. Y parece una.
se diseutiíu los l'resupiu-.stos. tontería.
EL MENTID ERO

í)rni 'raiRMtíiIo efiluvd á punto ito ]H'rdcr Al Ayuntamiento ha venido á costarle Está contenido eu lasiguiente nota, que
su sangrú iVía; pero sü dominó, acncflió y e.sa preparación unas -iyó pesetas nada copiamos:
auljuó. más. "Queriendo i oi'ganizar Hspaña Nneca
^.Puede. haber algo más ridiiiulo t\\m iin —(iCónio nada más? una Sección de Libros, y dar cuimta en
('iiipri'sario pnrlui;-U('íSV — Hombre, nada más por nliora. ella de cuantos se nos renutan, se advierte
á todos los editores y autores que quieran
Dos ('inpresai-ias portuguííscs. dar publicidad ásus obras, remitan tosvo-
h'inu'.nes (le las mismas á nombre de don
f Ahí se hace. ¿A que no saben ustedes cuál es el mejor Rodrigo Soi-iano, calle de Atoclia, uinui^-
trozo de pavimento de Madrid? ro iJá.»
El Ihircii'ora, o.n vista dií nuestros lioscu Se le ha olvidado añadir; aNo so admi-
¡'l'DUtos!... El que e.stá frente á la casa
briniiiíntos sobrii bulos ainericaiios, ha (Uv ten dedií'íitoria.s..'
del señor líuiz Jiménez.
cidido poner al pie dci todos loa teIe<2,Ta-
mas de toros «Como me lo contaron tp. lo
cuento.1
Estimando, Caamañito. Pídelo que quie-
¡AGUA VA! Vamos, Azorín: O escribes como Dios
manda y tú sabos^hacerlo, ó te mandamos
ras. con Catalina.
IfioiiiMla, l»ai>Jiríi>. Su excelencia abre una carta, la lee v El otro dia en A B C ha dicho usted
lioniJüta, que estuvo en el bailo dolReal, pre gunla: •- i que «hay en la obra artística algo... incon-
ha tomado proftssor que le eníieñeesodel. . —^;Está esperando el .túiil, etéreo, inefable...»
tuesten. criado? Incoiisúiil es sin confuirá. Y algo etéreo,
No; si el fimsfeil vendrá. •^' en el baile — Si, señor. inefable y sin costura, no liaymás qu(í los
ya es u.sted maestro. —¿Cuánto liny aquí (calcetines de hilo de Escocía.
En lo que no le eonoclamos era en lo de para gastos de secre- ¡A ver si vamos á tener que sentarle las
taria? costuras, maestro!
poeta.
Oído al l)rindis quepronunció en la iies- — Siete mil pesetas.
ta taurina á que asistió el nuevo empre- —Diga usted que me
traigan cuatro mil. Di:!e el Ileraldo, ocupándose de avia-
sario:
El empleado, atóni ción; «Dos señoritas vuelan».
Brindo por Bombita Nos parece muy bien; pero conste que
lo, desaparece y regre-
que el toreo resucita, no son las primeras.
¡Que salg'a el autor! \ V^BIKW ^^ ^'"^'^ '"^ cuatro mil
<i \ iS T» \ pesetas.
Su e x c e l e n c i a las
Cosas del Ayuíitainieiilo. mete en un sobre y or- e o s AS VIEJAS
dena qne se las entre-
guen al criado que aguarda.
Aquí vendría bien lo de Al Conde de. Romanónos
'• Nuestro insigne dostripa-inquilinos, se- no hay dio.s que le meta mano
ñor Ruin Jiménez, al felicitarse de quií lo.s Dichoso aquel que tiene
su casa A ílote... en materia de elecciones.
r socios de la r¡rau Via hayan entregado al
L Ayuntamiento ÍHiO.OOO y ])ico de pesetaíJ, ¡Cualquie.ra se ahoga con esos salva-
\idas! Don Rafael llegó á nado
', se ha olvidado de darle las gracias á IÍL ni Ministerio, y después...
'f_ MENTIDBRO. • ' ' pues se quedó e.Tnpanlanadf).
Í;; El gazapo estalja en su madriguera y no
En el escaparate de un acreditado alma-
'i. había quien lo levantara, ha.sta que nos- Cuando es Méndez Alanís
cén de Madrid ha sido expuesta una vaji-
otros nos atrevimos. jefe superior, teníamos
lla de plata. Expuesta y puesta á la venta.
Pero eso de las 900.000 es una bagatida. todos la vida en un tris.
Faltan todavía muchos miles más, que han Los funcionarios de un Cuerpo, que la
de ser entregados antes de Abril. han visto, juran y perjuran que os la mis-
ma vajilla que regalaron á su jt^fe hace Y el caso es que ese sefior
Esté tranquilo el Ayuntamiento, que efl el único hasta ahowi
nosotros no nos dormimos. poco como prueba de- gratitud por tral)a-
como jefe ¡superior.'
jos hechos en favor de la claíte.
¡Figúrense ustedes, si el espía que tene-
mos está empleado en la misma Compa- Claro que cl jefe tuvo la atención de ad-
I-ieetor, lector, conifire usté
ñía!... vertirles que no se. gastaran el dinero cu
diez periódicos en uno:
Lo sabemos todo, ingrato don Joaquín, grabar sus cifras en los platos y fuentes.
A ¡i C.
absolutamente todo. ¡iíombre prevenido!...
Ya lo irá usted viendo. *
A los pobres muchachos de Telégrafos
El teniente alcalde del distrito de Pala- les dan una peseta todos los días, con dos-
cio, que por cierto es do lo.s más sucihsfet cuento, por trabajar cerca de veinticuatro
distrito,-zúentiende), le suelta cada bombo horas en el reparto de telegramas.
al Ayuntamiento que tiembla El JJhproí. Y ahora han despedido á cinco ó sois
Pretende demostrarnos que vivimos en por haber entregado unos despaclios y ha-
la gloria. ber recil)ido unas propínejas.
fi.No comprende usted que i^so es hacer ¡Pero, chicos! ¡Habrá ansiosos!... ¡Con
planchas, joven letrado? el sueldo que tienen tomar propinas!...
Aunque ya sabemos que á usted no le Así se han indignado los periódicos,
asustan, porque después de aquella ile la dándole al suceso columnas enteras.
Cecilia Aznar... ¡Dnro, duro con esos Rochette3 y esos
Pequignnts... repartidortvs!
Hay que moralizar España.
En la plaza de Ramales, distrito de Pa-
lacio, se ha convertido en jardín un troKo
* **, En el miiin.~U\ escudo, señorea, e.'i la
discreción; porque esos hembrea que pa-
de plazuela que tendrá 3.000 pies. Sabíamos que don Rodrigo Soríano pro- recen cotorras... (Riínis).
Lfn ]jart¡cular Imbíera preparado el te. yectaba poner una librería, pero ignorá-
rreno con '20 pesetas, pagando espléndi- bamos el procedimiento, ingenioso como
damente. fluyó, de que iba á valerse. 9813.—Irap. San Bornnrdo, 93, leióf. 1922,

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EL MENTIDERO

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