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QUE ES EL ARTE ROMANO

El arte romano, al igual que su arquitectura e ingeniería, se extendió, como su imperio, a lo


largo y ancho del perímetro del Mar Mediterráneo, siendo uno de los principales exponentes de la
avanzada civilización romana.

El arte romano hunde sus raices en diversas influencias, especialmente del mundo etrusco
y del griego.

La fuerte organización y personalidad del Imperio Romano exige un arte y una arquitectura
que aúne el carácter funcional con el propagandístico. De esta forma nace un arte muy
centralizado y unitario que abarca todo el imperio, no sólo Roma sino, en mayor o menor medida,
a todas su provincias.

No cabe duda que el arte romano es la manifestación artística más significativa de la


historia del mundo occidental, ya que su influencia nunca se ha dejado de percibir a lo largo de los
muchos siglos desde su desaparición en toda Europa. No ha habido momento histórico (quizás el
gótico es el arte y arquitectura más alejada del canon romano) que no haya sufrido en mayor o
menor medida su influencia.

Los romanos penetraron en la Península Ibérica en el 218 a.de C. y sobre todo, a partir de
la mitad del siglo II a. de C. empezaron a crearse asentamientos estables. No tardó en generarse
una pronta e intensa romanización que duró más de cinco siglos y que he dejado en nuestro suelo
restos arqueológicos de primer orden.

CARACTERISTICAS DEL ARTE ROMANO

La principal influencia del arte romano es sin duda el arte griego. Cuando la República
conquistó Grecia, se adquirieron numerosos conocimientos de la civilización helenística tanto en el
terreno sociopolítico como en el artístico y cultural. El centro del arte griego era la belleza,
exaltaba a los dioses y buscaban la perfección en sus obras, cuanto más se acercara a la
naturaleza, más bonitas parecían, los temas solían ser en su mayoría religiosos o mitológicos.

Los romanos se desmarcaron de esta tendencia griega y exaltaron a los propios hombres. Bustos,
esculturas de gobernadores y políticos, retratos de emperadores y arcos triunfales o columnas
conmemorativas con relieves que narran las batallas. Este cambio radical en la temática de las
obras es el rasgo que distingue el arte griego del romano.

El siglo II d.C. fue el denominado Siglo de Oro del Imperio Romano, durante este periodo 5
magníficos emperadores gobernaron Roma y la hicieron crecer en todos los aspectos, incluido en
el artístico. El arte romano, fue más variado e incluso moderno que el arte griego y es por ello que
tuvo mayor influencia en el arte del Renacimiento y la Edad Media. Otro de los rasgos distintivos
del arte romano es su practicidad, las obras de arte se diseñaban y se creaban siempre para
cumplir una función.
Debido a este carácter práctico los romanos desarrollaron enormemente la arquitectura, llevaban
a cabo verdaderas obras de arte arquitectónicas que sin embargo tenían siempre una utilidad. El
arco y la bóveda siempre jugaron un papel predominante en los edificios romanos.

Además de la arquitectura, la pintura romana también tuvo gran importancia, y las esculturas,
sobre todo en forma de bustos o relieves en las columnas de la ciudad también son destacables.
Sin embargo, la cultura romana no acaba en el terreno artístico, el derecho, la sociedad y la
organización con la que se regía Roma son todavía referencias para la civilización occidental actual.

A continuación vamos a desglosar el arte romano en tres ramas principales, la arquitectura, la


pintura y la escultura.

ARQUITECTURA ROMANA

Las construcciones realizadas por los romanos cumplian una doble funcionalidad. En primer lugar,
la mejora del nivel de vida de los ciudadanos de roma, se mejoraban las condiciones de seguridad,
salud y ocio, por ello construían acueductos, puentes, coliseos, circos, teatros… La segunda de
ellas busca representar la majestuosidad y el poder del vasto Imperio Romano, se empleaban
grandes bloques de mármol para representar, por medio de grabados, las grandes grandes
hazañas en tiempos de guerra. Se trata de obras de arte que se busca que sean claramente visibles
y que perduren en el tiempo.

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