Está en la página 1de 2

La mayoría de las personas adoran el mar y cada que les sea posible van

a la playa. Sin embargo, no hay que olvidar que el agua es tan atractiva como

peligrosa.

En Genial.guru nos dio curiosidad investigar cómo hay que actuar si de pronto

resultas solo en mar abierto. Descubrimos unas reglas que son fáciles

de memorizar. Al cabo, nunca sabemos qué nos espera mañana y más vale estar

preparados. En esta situación, tarde o temprano tendrás que moverte

en el agua. Depende del estilo de natación que elijas si podrás resistir durante

mucho tiempo o no. Recuerda la siguiente regla clave:

 En calma, si el mar no presenta oleaje, es mejor nadar de espaldas. Así

podrás relajarte al máximo y respirar mejor.

 Si, al contrario, existe oleaje, es mejor nadar boca abajo. Por ejemplo,

de pecho. Inhala, sumerge la cabeza en el agua y exhala. Si no tienes que

mantener tu cabeza sobre la superficie del agua, ahorrarás tus fuerzas.

Si tu balsa tiene algún alimento, estaría bien. Si no, no significa que te vas a morir

de hambre.

 Si tienes alimento, distribúyelo en porciones diarias pequeñas. Así

la provisión te rendirá más y no tendrás problemas de digestión.


 Si no tienes alimento, puedes elaborar una caña de pescar de una agujeta y,

por ejemplo, un pedazo de lata (para el lanzuelo) e intentar pescar así.

Si no tienes estas herramientas, intenta sacar algas con las manos: ahí

podrás encontrar algunos peces pequeños.

 Intenta pescar incluso si tienes alimento. Porque el pescado contiene cierta

cantidad de líquido.

 No consumas alimentos dañados por más hambre que tengas.

También podría gustarte