Leamos v 19-20 No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín
corrompen, y donde ladrones minan y hurtan; sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan.
Viviendo en este mundo materialista, cualquier persona se siente insegura en
cuanto al problema de la economía. Para apaciguar su inseguridad, la gente trata de acumular tesoros en la tierra. Compran lotes, puestos comerciales, abren cuentas bancarias, etc. Al ver que sus tesoros van aumentando, se sienten más seguros. ´ Pero , el señor dice: “No os hagáis tesoros en la tierra donde la polilla, y el orín corrompen y donde ladrones minan y hurtan” La polilla es un insecto que carcome la ropa; y el orin oxida el fierro. En esta tierra hay muchos ladrones que minan y hurtan. Por eso, no hay nada seguro en la tierra; como dicen, el dinero viene y se va. Alguna enfermedad sorpresiva o algún accidente pueden sobrevenir sobre la gente en cualquier momento y empieza a carcomer sus tesoros paulatinamente. Sobre todo, la muerte sobreviene como un ladron de la noche y quita tofos los tesoros acumulados inmediatamente. Habia una anciana que vivía haciendo comida en la calle. Ella llevaba una vida muy humilde. Ni siquiera envio a sus hijos al colegio. Ella nunca ayudaba a nadie. Un dia murió. Pero, ¡Que sorpresa! Se descubrió que ella tenia mucho dinero guardado en sus cuentas bancarias. Ella vivía haciendo tesoros en la tierra, pero no pudo disfrutarlos, mucho menos llevárselos. Todos aquellos que han acumulado sus tesoros en la tierra seram como esta anciana; y serán cuenta de que ellos eran necios y em vano se esforzaron. Por eso salmos 39:6 dice: “Ciertamente como una sombra es el hombre. Ciertamente en vano se afana; amontona riquezas, y no sabe quien las recogerá”. Entonces, ¿Tenemos que vivir, todo el valor material de este mundo? No. El señor dijo: “Sino haceos tesoros en el cielo donde ni la polilla ni orin corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan”. Aquí, los tesoros no se refieren únicamente a las cosas materiales, sino tambien a nuestro tiempo, juventud, talentos, profesión, familia etc. Entonces, ¿Qué quiere decir hacer tesoros en los cielos? Es consagrar activamente nuestro tiempo, talento, juventud, profesión, sueños y familia a Dios. en el reino de Dios no hay polilla, orin o ladrones. El reino celestial es incorruptible, incontaminado e inmarcesible. (1P1:4). Por eso, todos nuestros tesoros acumulados en el cielono se pierden. Según NVI , la palabra “Haceos tesoros en el cielo” es lo mismo que “Acumulen para si tesoros en el cielo” Es decir, “hacerse tesoros en el cielo” no es para Dios sino para nuestro bien. Todo sacrificio, sudor y lagrimas que padecemos por el señor, se acumula en el cielo y Dios lo guarda para nosotros. Nuestra recompensa será sobremanera grande en el cielo. Nuestra vida esta tierra es un corto tiempo transitorio para construir nuestro destino eterno. En base a los tesoros que acumulamos en el cielo, Dios construye nuestra mansión. ¿ Cuantos creen que han acumulado tesoro en el cielo? Aquellos que han entregado su tiempo y corazón para servir el rebaño de Dios ya tendrán acumulados abundantes tesoros en el cielo. Ahora ¿Cómo podemos dicernir si estamos acumulando tesoros en el cielo o en la tierra? Muchos dicen: “Dios conoce mi corazón. Yo amo a Dios”. Pero, el señor tiene un parámetro para discernir nuestro corazón. Miren v21”Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón”. Nuestro tesoro tiene una relación directa y estrecha con nuestro corazón. Por medio de la forma en que maneja su dinero puede darse cuenta. Es decir, aquellos que acumulan su tesoro en el cielo no escatiman gastar su dinero para la obra de Dios. ellos no lo consideran como un gasto sino como una inversión infalible. Ellos creen que el dar trae mas bendicion que recibir. En cambio, aquellos que acumulan sus tesoros en la tierra escatiman mucho usasr su dinero en la obra de Dios. Por ejemplo, se queja mucho diciendo que el costo de la conferencia es muy caro, en cambio compra un celular caro sin escatimar el precio. Miren v22-23 Aquí, Jesús explica que cuando uno acumula sus tesoros en la tierra. Sus ojos espirituales se hacen malignos, y toda su vida se hace oscura. Ahora miren el v. 24 “Ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas”. Aquel que acumula su tesoro en la tierra, sin duda termina su vida sirviendo a las riquezas como si fuera su dueño. Judas Iscariote seguía a Jesús, pero no se arrepintió de su amor a las riquezas. Al fin, termino su vida traicionando al señor por 30 monedas de plata. Mucha gente quiere servir a Dios y al mismo tiempo acumular tesoros en la tierra. Pero, nuestro corazón es uno solo. Tenemos que acumular nuestros tesoros solo en el cielo. En este mundo materialista, la única manera de guardar nuestro corazón es acumulando activamente tesosros en el cielo. Por eso, el señor nos exhorta: “No os hagáis tesoros en la tierra… sino haceos tesoros en el cielo…” II. No os afaneis (25-32) Miren el v. 25 Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido? Aquí, nos damos cuenta de que los discipulos se afanaban por su problema económico, aun siguiendo al señor Jesús. ellos habían dejado todo para seguir a Jesús. la vida de ellos era hacer tesoros en el cielo. Pero, al ver la realidad cotidiana, les parecía que no tenían seguridad económica, pues ellos no tenían una morada fija, ni comían regularmente bien. En una ocasión ellos iban por los sembrados en el dia de reposo y tuvieron mucha hambre; y comenzaron a arrancar espigas y comer. al ver esto los fariseos le condenaron como violadores del dia de reposo. Los discipulos no podian tragar la comida, se sentirían miserables. Sobre todo, al ver a su propio maestro como vivía muy inseguro, sin tener donde acostar su cabeza, no habrian querido vivir tan humilde como Jesús. ellos querían vivir por lo menos en una buena casa con un buen sueldo fijo. Pero, hasta el momento no veian que el señor se preocupara por nada de eso. Cada vez que pensaban en su futuro no tenían certeza . podemos entender este afán de los discipulos. Nosotros fuimos llamados para seguir a Jesus. Estamos viviendo para hacer tesoros en el cielo. Por eso, nuestra vida es diferente a la de la gente que acumula tesoros en la tierra. Mientras que la gente del mundo disfruta del fin de semana, nosotros servimos el culto dominical. Algunos conviviendo en el centro de UBF. En el tiempo de examen, todo el mundo anda esforzado por sacar buena nota. En verdad, en ese entonces, el tiempo no es suficiente mas que para prepararse para dar presentar el examen. Pero, muchas veces sacrificamos nuestro tiempo para estudiar la biblia , salir a pescar en el campus y servir a las ovejas. al ver a nuestros compañeros que se esfuerzan solo para sus estudios. Toda clase de afanes nos atacan “Si yo sigo al señor tan con tanto sacrificio ¿Cómo competiré contra mis compañeros? ¿Cómo sacare buena nota?- Mi trabajo, mi matrimonio, mis hijos ”