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GI45- (5)
Instrucciones:
1. Redactar una introducción en la que se destaque la importancia de la evaluación del
liderazgo conforme a la Teoría X y Teoría Y.
2. Contestar el instrumento de las propuestas de la Teoría X y la Teoría Y.
3. Describir tu resultado y determinar si tienes mayor tendencia a administrar bajo la Teoría
X o Teoría Y.
4. Aplicar el instrumento a las personas que sean necesarias con el objetivo de identificar al
menos a una persona con tendencia a la Teoría X y una con tendencia a la Teoría Y.
Deberás colocar en el documento la evidencia de los instrumentos aplicados, así como el
análisis realizado de cada uno.
5. De acuerdo con tu ámbito laboral, determinar tres puestos de la empresa en la que
laboras que pueden ocupar las personas con tendencia a la Teoría X y tres puestos
adecuados a la Teoría Y. Redactar un apartado en el que indiques las características de cada
puesto y argumentar por qué consideras que son adecuados para la Teoría X o la Teoría Y.
En caso de no estar laborando actualmente, utilizar el caso de trabajos anteriores o de la
universidad de tus estudios profesionales.
6. En el apartado conclusión debes redactar cómo lo aprendido en este tema se aplica en el
estilo de liderazgo en la empresa en donde laboraste o laboras actualmente. De no cumplir
con ninguna de las características anteriores te pido hagas tu conclusión con base en la
institución educativa en donde realizaste tus estudios universitarios.
7. El documento no debe tener errores ortográficos ni de redacción.
8. Debe incluir hoja de presentación en la cual se indique: Nombre del alumno, nombre de
la institución, nombre de la asignatura, fecha de entrega, y nombre del docente. Se utiliza
Letra Times New Roman 12, hoja tamaño carta e interlineado 1.5
Introducción.
En 1960 Douglas McGregor publica “El lado humano de la empresa”, obra considerada un
punto de inflexión en la teoría de la administración de organizaciones existente hasta ese
momento donde postula la influencia que ejercen sobre el estilo de gestión de las empresas
los supuestos relativos a las personas, su motivación y comportamiento. Este teórico
distingue dos concepciones opuestas, basadas en distintas premisas sobre la naturaleza
humana y las relaciones organizacionales, a las que denomina “Teoría X” y “Teoría Y”. La
primera se identifica con la perspectiva clásica de dirección y control basados en la
autoridad y con un concepto mecanicista de las organizaciones. La segunda se vincula a la
integración de las metas del individuo y de la organización, partiendo de un concepto
humanista y participativo del trabajo.
Douglas McGregor describió estas dos perspectivas con relación a las personas frente al
trabajo, distinguiendo sus características diferenciales. En enfoque de McGregor desafió el
‘taylorismo’. Este se fundamentaba en la separación de la planificación y la ejecución, la
aplicación de sistemas de pago a destajo (pago por piezas producidas) y un punto de vista
mecanicista de las tareas. Trataba al trabajador como una extensión de la máquina y
concebía que el único factor de motivación a utilizar era el dinero.
Para Taylor, las personas tienen aversión al trabajo e intentan evitarlo; no asumen
responsabilidades y son poco ambiciosas, predominando la necesidad de seguridad. Por
ello, hay que dirigirlas y controlarlas, no dejando en sus manos la más mínima
planificación. Elaborando un buen sistema de pago por pieza, era posible reducir la
tendencia de los trabajadores a mantener una producción relajada.
En contraste con el planteamiento del taylorismo (aun hoy utilizado en las organizaciones)
McGregor propuso una visión alternativa: la Teoría Y. En ella, se concibe que el trabajador
promedio puede ejercer la autodirección; acepta la responsabilidad, no necesita ser
controlado y no tiene que considerar el trabajo como desagradable.
Descentralización y delegación.
Ampliación vertical y horizontal del puesto.
Participación y dirección consultiva.
Aunque su visión sobre las personas en el trabajo esté más cercana a la Teoría Y que a la X,
tenga en cuenta que no siempre hay que utilizar estilo de liderazgo participativos. Según las
características de la situación, de las tareas y de sus colaboradores, deberá aplicar estilos
más autocráticos o más participativos.
Implicaciones de la Teoría X y la Teoría Y en la Gestión de la Calidad (En mi ámbito
laboral)
Son numerosas las implicaciones que, para los enfoques basados en la Gestión de la
Calidad, tienen cada una de estas teorías..
La Teoría X:
o Asume que los empleados no tienen interés por la calidad. Por ello deben ser controlados
por la dirección, que aplicará incentivos económicos si son alcanzados los estándares. En
caso contrario, se utilizarán medidas penalizadoras.
o Para facilitar el cumplimiento de las tareas, éstas se dividen en ciclos y operaciones
fáciles de ejecutar y de aprender. Los trabajadores no tienen mayor intervención en el
proceso.
o La Calidad es cosa de los directivos y mandos. Se alcanza mediante el diseño y
planificación de los procesos. El control de éstos y del personal que los ejecuta.
o Las personas no se contemplan como recurso y fuente de información para la mejora.
o Se enfatiza la función de control, más que la de prevención y autocontrol por parte de las
personas que llevan a cabo los procesos.
La Teoría Y:
o La dirección confía en el personal. Materializa esta confianza a través de la delegación de
un buen número de responsabilidades.
o Los incentivos económicos se utilizan, pero en menor grado que el liderazgo de los
directivos. Además, tiende a poner en práctica acciones de reconocimiento público de los
logros.
o Se cree que el personal puede ejercer autocontrol sobre las actividades y procesos que
desarrolla.
o Considera que los empleados pueden mostrar interés por hacer un trabajo de calidad.
o Fomenta explícitamente la participación de los empleados en la obtención de mejoras de
la calidad.
Conclusión.
En principio, la Teoría Y es más adecuada para la implantación de la Gestión de la Calidad.
Esto no quiere decir que, necesariamente, otras organizaciones, con estilo propio de la
Teoría X, fracasen y no consigan la “aptitud de uso” de sus productos y servicios.
Pueden darse casos en que ésta se obtenga, con resultados ajustados a los estándares. Sin
embargo, en muchas ocasiones ello es debido a la presión que se ejerce sobre su personal
mediante medidas coercitivas y penalizadoras (como la posibilidad de despido) ante el no
cumplimiento de los objetivos delineados.
El camino más adecuado para motivar y poner en juego el máximo del potencial del
personal recompensar mejoras individuales y de equipo. Al mismo tiempo que reconocer lo
que está bien hecho y diseñar sistemas que promuevan la aceptación de responsabilidades.
Y potenciar la motivación intrínseca en la medida de lo posible.
Referencias bibliográficas:
1. McGregor, D: The Human Side of Enterprise. New York: McGraw-Hill, 1960.
2. Talavera Pleguezuelos, C: Calidad Total en la Administración Pública. Granada: Unión
Iberoamericana de Municipalistas, 1999. ISBN: 84-88282-42-7.
3. Hellriegel, D., & Slocum, J. W. (2009). Comportamiento Organizacional. México D.F.
Cengage Learning.
4. Contreras Torres, F. V., & Castro Ríos, G. A. (2013). Liderazgo, Poder y Movilización
Organizacional. Estudios Gerenciales, 29(126), Pp. 72-76.
5. Koontz, H., Weihrich, H., & Cannice, M. (2012). Administración, una perspectiva global
y empresarial (14a. ed.). México: McGraw-Hill/Interamericana pp. 242-245.