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Farolas

Para no dejar huellas de sal,

bajo descalza la colina donde sopla el viento.

Me enredo entre la hierba y desaparezco,

como las primeras cosas invisibles de la carretera.

Ahí encuentro el refugio seguro donde escondo mis dudas.

Aquí también, como allá, hay un faro

encendido cada noche por el sendero esmeralda

que recuerdas cuando nadie está cerca.

Envío señales al viento,

a las nubes que ensombrecen tu descanso.

Pienso en ti

para no huir del sentimiento,

para que el vacío no nos arrastre.

Puedo decir que te amo a quien no conozco,

como niego este amor con los amigos.

Es igual. El olvido jamás llegará a dañarte.

No es miedo el que sella mi boca,

tampoco presumo un amor que no tengo,

callo porque el silencio es parte de tu vida.

Hay un equilibrio entre recuerdos y sueños

y entre ambos estás presente, sin duda.

Sombras de música atenúan la tarde

y yo solamente te quiero.

Martha Gutiérrez (Manzanillo, Colima) es poeta y cuentista, entre sus publicaciones se encuentra
los libros “Bitácora del puerto” y “Manual para escapistas”, además parte de su trabajo se encuentra
en dos antologías. Es escritora de columnas culturales en periódicos locales; pertenece al Seminario
de Cultura Mexicana así como a las asociaciones civiles de “Aciman” y “escapistas”; también se
mereció el reconocimiento a la mujer manzanillense de 2018.

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