Un motor de combustión interna, motor de explosión o motor a pistón es un tipo de
máquina que obtiene energía mecánica directamente de la energía química de un combustible que arde dentro de la cámara de combustión y se puede clasificar en diferentes tipos de motores de combustión, pero con una función similar, entre ellas está el ciclo de Otto que es el ciclo ideal para las máquinas reciprocantés de encendido por chispa y se compone de cuatro procesos internamente reversibles: compresión isentrópica, adición de calor a volumen constante, expansión isentrópica y rechazo de calor a volumen constante. El ciclo Diésel es el ciclo ideal para las máquinas reciprocantes de encendido por compresión. Este ciclo es muy similar al de Otto, excepto en que el proceso de adición de calor a volumen constante se reemplaza por un proceso de adición de calor a presión constante. Este tipo de sistemas se pude ver en los automóviles y maquinarias pesada donde utilicen motores de combustión interna. Los motores de turbina de gas se usan de manera extensa para accionar aviones porque son ligeros y compactos y tienen una alta relación de potencia a peso. El ciclo de propulsión por reacción ideal se distingue del ciclo Brayton ideal simple en que los gases se expanden parcialmente en la turbina. Los gases que salen de la turbina a una presión relativamente alta se aceleran posteriormente en una tobera para proporcionar el empuje necesario para propulsar el avión.