La dimensión social de la ciencia y la tecnología

Texto Subdesarrollo e Innovación. Rodrigo Arocena y Judith Sutz

Autor Carlos Paredes

El papel de las políticas y los actores sociales involucrados en el proceso de

innovación

De acuerdo a los autores, el desarrollo de la innovación requiere del auge de

políticas públicas en el marco de factores sociales y culturales presentes en los
procesos de innovación, por tanto, dichos procesos presentan una serie de
“riesgos” a superar a través del “involucramiento público” ya que sin el mismo
la creación científica será un “eslabón débil en la cadena innovativa”

En primer lugar será necesario generar políticas científicas y tecnológicas

capaces de garantizar la innovación involucrando las tareas de investigación y
desarrollo para superar la problemática de la escaza vinculación entre
científicos e ingenieros en el ámbito productivo, tal problemática está presente
tanto en los países industrializados como subdesarrollados (pero
fundamentalmente en estos últimos)

El segundo aspecto es el riesgo referido a la producción científica,

tecnológica y de innovación que rinde frutos a largo plazo (sobre todo en el
ámbito de las ciencias humanas y sociales) por lo que si no se hace efectivo a
corto plazo se conllevaría a procesos de innovación aletargados.

Otro riesgo es con respecto la desigual distribución de las políticas públicas

de ciencia y tecnología que se manifiestan en la educación, en la orientación de
la investigación y el potencial para la innovación, por lo cual será necesario
partir de una concepción de “políticas sociales científico-tecnológicas” y de una
planificación “prospectiva sistemática” para respaldar “sectores postergados”
de desarrollo.

El papel de los actores involucrados en el desarrollo científico-tecnológico es

la misión de forjar “actores productores” de conocimiento e innovación en las
esferas públicas y privadas; es decir el esfuerzo de los centros de educación
superior, los institutos de investigación y los laboratorios de investigación y
desarrollo como promotores del “cambio técnico” el cual ha quedado relegado
al sector privado.

En conclusión, será de vital importancia desarrollar procesos de interacción

social en el ámbito de la innovación, para articular a los actores productores
(sector empresarial, sector público y universidad) con los actores receptores de
tecnología e innovación ya que la innovación en sí, es fruto de un proceso
social complejo “íntimamente ligado a la cultura”