INTRODUCCIÓN

Desde los inicios de la civilización la contaminación ha sido uno de los factores más
contribuyente de forma negativa en la aptitud del medio ambiente para la
subsistencia de las comunidades alrededor del mundo. Diversos agentes nocivos
para la salud como bacterias y virus han logrado proliferarse en distintas etapas de
la historia manifestándose desde la aparición del cólera hasta el día de hoy con
malformaciones físicas debido a la ingestión de agua contaminada. (OMS, 2019)

El agua es la sustancia fundamental para la vida en todo ecosistema funcionando

incluso como transportadora de materia y organismo, sin embargo, su manejo no
ha sido el óptimo para lograr la elevación de su contaminación y su
aprovechamiento. (Gonzalez & Carbajal, 2012)

El agua es la sustancia fundamental para la vida en todo ecosistema funcionando

incluso como transportadora de materia y organismo, sin embargo, su manejo no
ha sido el óptimo para lograr la elevación de su contaminación y su
aprovechamiento. (Gonzalez & Carbajal, 2012)

La contaminación del agua se da por causales como la utilización de los fertilizantes

en los cultivos, su uso en la minería, el uso doméstico, en las industrias, entre otros.
Ahora bien, el agua puede ser tratada por diferentes procesos para hacer posible
su reutilización según las condiciones de calidad requerida.

Las zeolitas muestran una estructura de poros y canales, semejante a un panal de

abejas. Los poros son tan pequeños que sólo un gramo del producto tiene un área
equivalente de 40 metros cuadrados. Además, por las características eléctricas de
los átomos, tiene una alta capacidad de intercambio catiónico, lo que le permite
absorber y adsorber diversos tipos de iones y moléculas, entre ellos agua, que
liberará cuando sea necesario. (ZEOCOL, 2019)
Algunas de las investigaciones que se han venido realizando con este material
serán mostradas a continuación, a manera de revisión; con el fin de llegar a
conclusiones acerca de la potencialidad y funcionalidad de este material.