Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Cuéllar era de los que creían firmemente en que, según sus palabras, «la mejor
manera de trabajar para el Gobierno era no trabajar para el Gobierno. Prosalud se veía a sí
misma como una compañía privada dedicada a cuestiones de salud pública. Uno de sus
logros fue el desarrollo de un modelo de asistencia dentro de un sistema de mercado libre».
El mismo se consideraba, en pocas palabras, como un «neoliberal izquierdista».
Este caso ha sido preparado por Patricia Mintz y William D. Savedoff (BDI), con la colaboración de Jorge
Pancorvo, Universidad de Piura, para servir de base de discusión y no para aprobar o criticar los programas o
decisiones que describe. La elaboración de este caso ha sido patrocinada por el Banco Mundial y el BDI; sin
embargo, los puntos de vista y las interpretaciones de este documento sólo son atribuibles a sus autores.
Copyright © Mayo 2000 IESE, el Banco Mundial y el BDI.
1. ¿Cuál era el impacto potencial que sobre Prosalud iba a tener el nuevo programa
del Gobierno? ¿Debía Cuéllar incorporar a Prosalud en el programa SNMN? Y,
en caso afirmativo, ¿qué debía negociar con la Secretaría de Salud?
2. ¿Cómo debía Sandoval proceder para crear un SNMN que realmente funcionase?
¿Qué podía hacer para promover la participación de las ONG y, en particular, la
de Prosalud?
3. ¿Cuáles serían las consecuencias probables para los usuarios finales de estos
servicios –madres y niños pequeños– debido a estas decisiones?
Bolivia en contexto
En 1996, Bolivia era el quinto país más pobre de Latinoamérica, con un PIB per
cápita de 939 dólares. Su economía tradicional, que históricamente venía dependiendo del
sector minero localizado en Oruro y Potosí, en el Altiplano, estaba dando paso a otra nueva
basada en la agricultura comercial. En años más recientes, han aumentado en importancia las
prospecciones de gas y petróleo. Estas nuevas actividades económicas se concentran en las
florecientes tierras bajas del este del país, en torno a la creciente ciudad de Santa Cruz.
De los ocho millones de habitantes que Bolivia tenía en 1996, casi el 40% vivían en
áreas rurales, y más del 60% eran indígenas. Las poblaciones quechua y aymará eran las más
numerosas de entre 35 grupos étnicos diferentes. Históricamente, estos grupos vivían
concentrados en el Altiplano y en los alrededores de La Paz. Sin embargo, en los años
anteriores a 1996, se habían producido importantes movimientos migratorios hacia las tierras
bajas del este y el empleo agrícola que éstas prometían.
Prosalud
Orígenes y desarrollo
En agosto de 1985, Cuéllar, quien anteriormente había sido jefe regional de sanidad
en Santa Cruz, en dependencia del Ministerio de Salud, fue requerido para asumir la
dirección de esta organización no lucrativa en ciernes. La oferta resultaba tentadora por
varias razones. Como director médico encargado de supervisar el sistema del Ministerio de
Salud, Cuéllar se había sentido frustrado por la rigidez del sistema gubernamental. «No era
ninguna sorpresa que los servicios fueran deficientes; todo el dinero se iba en salarios y no
quedaba nada para los servicios» (medicamentos, suministros, mantenimiento de edificios).
Había pocos incentivos para mejorar la productividad. Además, el Gobierno, gravemente
afectado por la hiperinflación y la recesión de principios de los ochenta, había tenido que
reducir drásticamente sus ayudas para servicios sanitarios. Como consecuencia de ello, había
que cobrar a los pacientes, que a menudo procedían de familias con muy pocos ingresos, a fin
de poder comprar suministros y equipamientos médicos. Mientras tanto, la satisfacción del
consumidor con respecto a los servicios ofrecidos seguía siendo muy baja. En su conjunto,
estas experiencias, combinadas con la reciente apertura del Gobierno a la privatización,
moldearon la determinación de Cuéllar de hallar una vía mejor.
Cuéllar empezó por dirigirse al gobierno municipal de Santa Cruz para exponerle el
potencial de una asociación pública/privada. Según este modelo, el municipio construiría o
proporcionaría la planta física de la clínica, mientras que Prosalud procuraría el personal
necesario y se encargaría de su administración. Según Cuéllar, «Santa Cruz era tierra fértil
para los cambios, y Prosalud recibió una cálida acogida por parte del municipio». El consejo
municipal aprobó el proyecto por 11 votos contra uno.
4
información comunes entre sí. Dentro de esta red de asistencia, sin embargo, la toma de
decisiones estaba descentralizada. Se consideraba que las clínicas debían desarrollar su labor
cerca de los grupos de población a los que servían, conocer íntimamente sus necesidades
culturales y ser capaces de funcionar con autonomía dentro de sus comunidades a la hora de
contratar personal y ofrecer servicios. En tercer lugar, las clínicas estaban concebidas para
cumplir finalidades múltiples. Estaban orientadas a proporcionar in situ la mayor parte de la
asistencia básica que una determinada comunidad podía necesitar – incluidas asistencia
pediátrica, ginecológica y para adultos, así como necesidades básicas farmacéuticas y de
laboratorio, y capacidad para atender partos sin complicaciones. En cuarto lugar, las clínicas
estaban abiertas las 24 horas del día para atender urgencias o casos de emergencia. En
algunos casos, si la población asignada a un centro era lo suficientemente grande, ésta
disponía de un médico a jornada completa; en otros casos, varios centros compartían un
mismo médico. Los casos clínicos más complejos eran trasladados, en el caso de Santa Cruz,
al centro de consulta interna propio de Prosalud o, en el caso de La Paz o El Alto, a
hospitales con los que se había establecido previamente un acuerdo de cooperación.
Además del sistema de subsidios cruzados entre los usuarios más pobres y los de
mayor poder adquisitivo, Prosalud también había desarrollado una amplia gama de subsidios
cruzados por los cuales los servicios curativos financiaban los costes de la asistencia
preventiva. El objetivo consistía en reducir al mínimo las barreras ante los servicios
preventivos y de promoción y, al mismo tiempo, mantener asequibles los precios de la
asistencia curativa. Según los líderes de la organización, los servicios de Prosalud se
distinguían por tres características principales. En primer lugar, eran de una calidad muy alta,
comparable o superior a la que se podía encontrar en el resto del sector privado, tanto en
términos de calidad clínica como de los servicios (calor humano). En segundo lugar, atendían
6
a un gran volumen para repartir los gastos fijos entre un mayor número de usuarios y así
reducir el coste medio unitario. Y, finalmente, los costes podían mantenerse bajos gracias a
una gestión eficaz y teniendo en cuenta la capacidad de pago de los usuarios. El Anexo 7
muestra ejemplos de precios de algunos servicios seleccionados.
En 1991, tras seis años de éxito en el área de Santa Cruz, Cuéllar y su equipo de
dirección, con el apoyo de USAID, tomaron la decisión estratégica de expandirse hacia el área,
más extensa, de La Paz. La expansión planteaba diversos retos. En primer lugar, La Paz y El
Alto, ambas próximas al Altiplano, en el que predomina la población indígena, presentaban un
perfil étnico diferente del de la región de Santa Cruz, ya fuera por el idioma, las costumbres o
las actitudes con respecto a la asistencia sanitaria. En segundo lugar, el nivel de pobreza de El
Alto creaba para Prosalud el importante reto de si podía mantener la viabilidad financiera de la
organización, tanto en general como en la región de La Paz/El Alto. A fin de compensar la
escasez de ingresos en estas zonas (debido a honorarios más bajos y usuarios con medios de
vida más limitados), se optó por instalarse en áreas más acomodadas de La Paz. En tercer lugar,
la ubicación de las clínicas la elegía el Ministerio de Salud, no Prosalud. Además, era el
Ministerio quien determinaba cuándo las clínicas estarían listas para entrar en funcionamiento.
En cuarto lugar, la competencia para esta red de clínicas resultó más intensa de lo que se había
previsto, especialmente en La Paz. Y, finalmente, al expandirse hacia la capital, Prosalud ponía
de relieve su perfil político y su proximidad al Ministerio de Salud del país.
Una evaluación a medio plazo –llevada a cabo por Fiedler y Hougen (1)– reveló que
Prosalud había prestado el 57% de sus servicios como asistencia preventiva (sin cargo). En El
Alto, Prosalud también se había convertido en el primer dispensario para planificación
familiar y sanidad reproductora. Desde el punto de vista económico, concluyeron los
analistas, era improbable que Prosalud pudiera lograr plena viabilidad financiera. Es más, con
los ingresos sólo cubría entre el 48 y el 65% de sus gastos, y afrontaba varios factores
limitantes, ya citados.
De acuerdo con un estudio realizado por Richardson et al., que comparaba las
clínicas de Prosalud con las del Ministerio de Salud en Santa Cruz, la productividad de la
primera, su eficacia y su relación coste-rendimiento en la asistencia a pacientes externos
superaban claramente los indicadores equivalentes de los centros gestionados por el
Ministerio. El Anexo 8 presenta un resumen de los resultados de esta comparación.
Según este mismo estudio de Fiedler y Hougen, Prosalud ejercía también una
influencia positiva tanto sobre los dispensarios de sanidad públicos como sobre los privados,
lo que bien podría considerarse como el impacto más importante que el programa ha tenido
en su conjunto. Al revelarse como un competidor para los centros gestionados por el
Ministerio de Salud –actuando, al mismo tiempo, dentro del marco establecido por
el Ministerio– Prosalud retaba a las clínicas del Ministerio a mejorar su rendimiento. La
(1) Fiedler, John y Lee Hougen, «Mid-term evaluation of the Self-Financing Primary Health care II Project
(PROSALUD) (511-0607)», Management Systems International for USAID/Bolivia, Washington, D.C.,
septiembre de 1995.
7
dirección de Prosalud observó que muchos elementos de su modelo de asistencia, tales como
el de la asistencia las 24 horas del día para casos urgentes o de emergencia, habían sido
adoptados por algunos centros públicos. Pero, probablemente, el impacto fue todavía mayor en
el sector privado. En las comunidades en las que Prosalud competía cara a cara con los
proveedores privados, particularmente en La Paz y en Santa Cruz, éstos redujeron precios y
mejoraron la calidad del servicio. Así, «las clínicas de Prosalud crean más competitividad y
hacen que los mercados sanitarios sean “menos imperfectos” en las áreas en las que actúan.
Estos efectos indirectos se notan en el sector público y en el privado y constituyen la
principal aportación práctica a la reforma del sector sanitario en Bolivia» (Fiedler y Hougen).
Expansión ulterior
Organización
Cambio de política
equipamiento, serían cedidas a los municipios para su gestión. De aquí que los municipios
asumieran la responsabilidad de mantener y explotar esta infraestructura, al tiempo que también
financiarían necesidades sanitarias específicamente locales o regionales.
Así pues, estas dos leyes crearon un contexto radicalmente distinto para la asistencia
sanitaria, dejando los recursos financieros y la infraestructura física en manos de los
gobiernos locales. En respuesta, la Secretaría de Salud emprendió dos iniciativas. La primera
consistió en un decreto promulgado en febrero de 1996, por el cual se creó el Sistema
sanitario público descentralizado y participativo. Esta ley creó entidades a nivel municipal
llamadas DILOS (o Directorio local de sanidad), con una representación tripartita: un
presidente nombrado por el municipio, un representante de la prefectura y un miembro
itinerante nombrado por la comunidad. Los DILOS se convirtieron en el brazo político del
recién descentralizado sistema sanitario. Cada DILOS era responsable de elaborar un plan
sanitario que reflejara las necesidades sanitarias particulares del municipio. Esto aseguraba la
flexibilidad a la hora de abordar necesidades divergentes en diferentes municipios. Por
ejemplo, en la región del Altiplano la atención se centraba en enfermedades como la
tuberculosis, mientras que en las tierras bajas del este prevalecía el control de las
enfermedades de transmisión vectorial, como la enfermedad de Chagas.
Estos cambios estructurales sentaron las bases necesarias para la segunda gran
iniciativa: una iniciativa específica de maternidad e infancia que surgió al cabo de poco y
que, según el doctor Torres, estaba siendo concebida para tratar de abordar la deplorable
situación en que se encontraba la sanidad maternal e infantil, puesta de manifiesto por
elevadas tasas de mortalidad.
La decisión de Prosalud
Anexo 1
Anexo 2
Gestión de Prosalud
Organización
Desde 1996, Prosalud es supervisada por dos juntas –una asamblea de asociados,
responsable de determinar los principios generales de actuación y organización, y una junta
directiva, que es elegida por los miembros de la Asamblea y actúa como su representante
ejecutivo (véase organigrama en Anexo 4). La Junta es responsable de formular y aprobar
medidas, de recibir y revisar los informes del director ejecutivo, de aprobar la política de
precios y de supervisar de forma general el funcionamiento de la organización.
Una oficina nacional, dirigida por el doctor Cuéllar como director ejecutivo y con
sede en Santa Cruz, se encargaba de la dirección ejecutiva general en cuestiones tales como
la planificación de operaciones, la supervisión y evaluación de servicios, el desarrollo de
proyectos, la coordinación y el apoyo a las oficinas regionales y el enlace con comunidades
internacionales y locales. Sin embargo, tenía poco que ver con el día a día de la organización.
Las operaciones diarias eran responsabilidad de las dos oficinas regionales, que
gestionaban la red de servicios sanitarios, compuesta las clínicas del área y, en el caso de
Santa Cruz, de su hospital. En este nivel, cada sistema era administrado por un director
regional en cada oficina, con el apoyo de un equipo interdisciplinar de profesionales. Uno de
los principales objetivos era reforzar la capacidad de gestión en el ámbito de las clínicas.
Cada clínica, a su vez, estaba dirigida por un director médico que también visitaba a
los pacientes. (Para más información sobre la estructura de personal, véase Anexo 5).
Anexo 2 (continuación)
Anexo 3
Visión
Misión
Lema
«Su salud ante todo» sintetiza la filosofía de Prosalud y recuerda a todos los
empleados cuál es su responsabilidad ante quienes les confían su salud.
Valores fundamentales
– Respeto: Todas las actividades deben respetar la cultura y reflejar los valores de
la comunidad en la que trabajamos.
Anexo 3 (continuación)
Todos los usuarios de nuestros servicios son clientes y tienen los siguientes
derechos:
– Dignidad
– Información
– Confidencialidad
– Calidad
Fuente: «El libro azul de Prosalud», un manual para empleados), págs. 3, 5, 6 y 17.
15
Anexo 4
Organización de Prosalud
Asamblea de
asociados
Oficina
nacional
Comité Programa de
ejecutivo marketing
nacional social
C O M U N I D A D
16
Anexo 5
Número
Puesto Base de compensación en clínica básica
* Estos médicos comparten la responsabilidad de prestar asistencia de emergencia las 24 horas del día en todas
las clínicas. En todo momento hay disponible un médico como mínimo. También hay disponibles
ambulancias y enfermeras las 24 horas del día.
Nota: La clínica básica atiende una zona de captación de aproximadamente 15.000 individuos, siendo su
volumen de trabajo en asistencia curativa de entre 13.000 y 15.000 visitas anuales en promedio.
17
Anexo 6
Clínica básica
Consultas curativas a cargo de médicos de medicina Inmunizaciones
general, pediatras y ginecólogos Servicios clínicos para recién nacidos
Asistencia dental curativa Asistencia dental preventiva
Partos Asesoramiento sobre salud reproductora
Visita prenatal inicial Asistencia prenatal de seguimiento
Planificación familiar: todos los métodos reversibles Tratamiento de la tuberculosis
Procedimientos de enfermería (por ejemplo, fluidos Tratamiento de la malaria
intravenosos) Terapia de rehidratación oral
Servicios de emergencia (24 horas) Visitas a domicilio
Farmacia Educación sanitaria
Policlínica
Además de los arriba mencionados: Inmunizaciones
Tiempo de consulta doble con pediatra y Servicios clínicos para recién nacidos
ginecólogo Asistencia dental preventiva
Otros servicios especializados: cardiología, Asesoramiento sobre salud reproductora
otorrinolaringología, oftalmología, medicina Asistencia prenatal de seguimiento
interna Tratamiento de la tuberculosis
Servicios de laboratorio especializados Tratamiento de la malaria
Sonogramas Terapia de rehidratación oral
Cirugía ambulatoria Visitas a domicilio
Anticoncepción quirúrgica voluntaria (en algunas) Educación sanitaria
Hospital
Además de los servicios prestados en las Inmunizaciones
policlínicas: Servicios clínicos para recién nacidos
Cirugía: Cesáreas y otras intervenciones Asistencia dental preventiva
quirúrgicas sencillas Asesoramiento sobre salud reproductora
Servicios a pacientes internos Asistencia posparto
Rayos X Asistencia prenatal de seguimiento
Endoscopia Tratamiento de la tuberculosis
Servicios de laboratorio especializados, incluidas Tratamiento de la malaria
pruebas de VIH Terapia de rehidratación oral
Anticoncepción quirúrgica voluntaria Visitas a domicilio
Educación sanitaria
18
Anexo 7
Honorarios
Servicio Moneda local Dólares estadounidenses
Anexo 8
Anexo 9
Maternidad
Asistencia prenatal
Preeclampsia
Eclampsia
Parto vaginal con asistencia neonatal
Parto con cesárea y asistencia neonatal
Sepsis posparto
Hemorragia posparto
Neonatal
Asfixia
Neumonía
Sepsis