Está en la página 1de 38

Donde todo comienza o donde todo termina

Escuchando la Palabra del Señor

Toda la creación acata su voz

Gén 1:3 Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz.

Gén 1:4 Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas.

Gén 1:5 Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas llamó Noche. Y fue la tarde y la mañana
un día.

Gén 1:6 Luego dijo Dios: Haya expansión en medio de las aguas, y separe las aguas de
las aguas.

Gén 1:7 E hizo Dios la expansión, y separó las aguas que estaban debajo de la expansión,
de las aguas que estaban sobre la expansión. Y fue así.

Gén 1:8 Y llamó Dios a la expansión Cielos. Y fue la tarde y la mañana el día segundo.

Gén 1:9 Dijo también Dios: Júntense las aguas que están debajo de los cielos en un
lugar, y descúbrase lo seco. Y fue así.

Gén 1:10 Y llamó Dios a lo seco Tierra, y a la reunión de las aguas llamó Mares. Y vio
Dios que era bueno.

Gén 1:11 Después dijo Dios: Produzca la tierra hierba verde, hierba que dé semilla;
árbol de fruto que dé fruto según su género, que su semilla esté en él, sobre la tierra. Y fue
así.

Gén 1:12 Produjo, pues, la tierra hierba verde, hierba que da semilla según su naturaleza, y
árbol que da fruto, cuya semilla está en él, según su género. Y vio Dios que era bueno.

Gén 1:13 Y fue la tarde y la mañana el día tercero.

Gén 1:14 Dijo luego Dios: Haya lumbreras en la expansión de los cielos para separar el
día de la noche; y sirvan de señales para las estaciones, para días y años,

Gén 1:15 y sean por lumbreras en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra.
Y fue así.

Gén 1:16 E hizo Dios las dos grandes lumbreras; la lumbrera mayor para que señorease en
el día, y la lumbrera menor para que señorease en la noche; hizo también las estrellas.

Gén 1:17 Y las puso Dios en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra,

Gén 1:18 y para señorear en el día y en la noche, y para separar la luz de las tinieblas. Y vio
Dios que era bueno.
Gén 1:19 Y fue la tarde y la mañana el día cuarto.

Gén 1:20 Dijo Dios: Produzcan las aguas seres vivientes, y aves que vuelen sobre la tierra,
en la abierta expansión de los cielos.

Gén 1:21 Y creó Dios los grandes monstruos marinos, y todo ser viviente que se mueve,
que las aguas produjeron según su género, y toda ave alada según su especie. Y vio Dios
que era bueno.

Gén 1:22 Y Dios los bendijo, diciendo: Fructificad y multiplicaos, y llenad las aguas en los
mares, y multiplíquense las aves en la tierra.

Gén 1:23 Y fue la tarde y la mañana el día quinto. Gén 1:24 Luego dijo Dios: Produzca la
tierra seres vivientes según su género, bestias y serpientes y animales de la tierra según su
especie. Y fue así.

Gén 1:25 E hizo Dios animales de la tierra según su género, y ganado según su género, y
todo animal que se arrastra sobre la tierra según su especie. Y vio Dios que era bueno.

Gén 1:26 Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a
nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias,
en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra.

Gén 1:27 Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los
creó. Gén 1:28 Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y
sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias
que se mueven sobre la tierra.

Gén 1:29 Y dijo Dios: He aquí que os he dado toda planta que da semilla, que está sobre
toda la tierra, y todo árbol en que hay fruto y que da semilla; os serán para comer.

Génesis y ruta del pecado desde el comienzo hasta nuestros días

Un elemento en común

El hombre no atiende a Su Palabra a Su Voz

¿Por qué?

Gén 1:27 Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los
creó. Gén 1:28 Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la
tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las
bestias que se mueven sobre la tierra.

Gén 1:29 Y dijo Dios: He aquí que os he dado toda planta que da semilla, que está sobre
toda la tierra, y todo árbol en que hay fruto y que da semilla; os serán para comer. 30 Y a
toda bestia de la tierra, y a todas las aves de los cielos, y a todo lo que se arrastra sobre la
tierra, en que hay vida, toda planta verde les será para comer. Y fue así.

Gén 1:31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y
fue la tarde y la mañana el día sexto. 2:15 Tomó, pues, Jehová Dios al hombre, y lo puso
en el huerto de Edén, para que lo labrara y lo guardase.

Gén 2:16 Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás
comer; 17 mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el
día que de él comieres, ciertamente morirás.

Gén 2:18 Y dijo Jehová Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea
para él.

Que partecita de lo que Dios le dijo no entendió Adán? Noto, que aquello de morir no le era
una palabra asociable, me explico, hasta ese momento Adán, me atrevería a decir, no
conocía la muerte, en verdad creo que él no tenía ni idea, de que era eso de morir, ya que
todo, absolutamente todo en el y su alrededor vivía y nada moría, por supuesto para
nosotros es muy, pero muy claro el concepto muerte. Al parecer esa parte no le impresionó,
ni siquiera como para preguntarle a Dios ¿Qué es Señor, eso de morir?

Cuando hay verdadero interés, un interés de todo nuestro ser que es el que Dios pide, el
preguntar con un genuino deseo de entender muy bien, lo que el Señor dice, porque lo que
el Señor dice es lo más importante y nada hay más importante que lo que Él dice y como lo
dice, así que no hay nada de más importancia que el escucharlo muy, pero muy
atentamente, de tal forma que si algo no es claro, pues se pregunte, se escudriñe
diligentemente, se inquiera, se medite, se estudie hasta que sea claro sin que quede duda o
vacio alguna al respecto de lo que Dios dice.

Claro hoy en día el hombre sigue desconociendo la Palabra de Dios no atendiéndola y el


pecado es muy “normal” en nuestra sociedad pero igual la paga del pecado es la muerte, si,
el hombre sigue desobedeciendo a Dios, porque es esclavo del pecado, tiene una naturaleza
pecaminosa del bien y el mal que caracteriza su ser y conducta, no puede hacer otra cosa
que pecar, huir de Dios, no atender su palabra y si la oye la desatiende, la matiza,
tergiversa o le añade haciendo componendas convenientes a su acomodo. Supuestamente
es consciente de la muerte física y eterna, pero aun así hace caso omiso de lo que Dios dice,
no le escucha atentamente, (escuchar atentamente es hacerlo con todo nuestro ser, como lo
mas y único importante) de tal manera que pudiera entender y retener lo dicho por Dios
para así creerle y ser salvo con la salvación que Dios en su amor y generosidad de gracia, le
ha brindado al hombre en Cristo Jesús, para ser librado del pecado y de la muerte.

¿Hasta qué punto Adán era consciente de que no atender cuidadosamente lo que Dios le
decía (lo que llama Dios pecado) le acarrearía la muerte a él y toda su descendencia? ¿Era
Adán consciente de las consecuencias cuando el desecho la advertencia de Dios? Para que
con tanta facilidad atendiera la palabra de Satanás? Al parecer a Sanates si le entendió
perfectamente, lo que Satanás le dijo fue comprendido sin dudas ni vacios y aun más con
suficiente motivación para obedecerlo.
Que fuerza tan poderosa surgió en el corazón de Adán y Eva para desconocer la verdad de
Dios? Le habría faltado a Dios, darle un curso mas intensivo de su Palabra dicha?, tal vez
Dios no fue lo suficientemente claro, tal ves no uso las palabras correctas, o no se tomo el
suficiente tiempo de explicarle más claramente el asunto a Adán y Eva?, en que fallo Dios?
Claro la respuesta automática es: Dios no fallo en nada, y así lo creo firmemente, pero es
que aquí no se está cuestionando a Dios, sino al hombre en su insistencia en seguir
cometiendo el mismo error. Si, sabemos que fue el hombre el que fallo, pero pienso que
algo sigue fallando en el cristianismo actual y que tiene que ver con lo que paso en Edén y
toda la historia bíblica que nos ha precedido.

Tenemos por un lado una gran mayoría de hombres y mujeres que siguieron el mismo
camino de Adán y Eva, y un pequeño número en comparación de hombres y mujeres que
de manera muy diferente si acataron lo que Dios decía por encima de todo y contra todo.
Me acuerdo de Josué y Caleb y de Rahab la ramera y claro de muchísimos más, de quienes
deberíamos aprender para seguir su ejemplo. Fue gente y la hay actualmente que
entendieron diáfanamente el mensaje y lo han seguido fielmente acosta de perderlo todo,
son muy poquitos actualmente, pero los hay y claro no son famosos, son desconocidos por
el publico cristiano, no son reconocidos más bien por los pocos que los conoce son más
bien criticados y rechazados, ya que sus vidas son una luz que avergüenza y molesta a los
fariseos actuales, aquellos que buscan justificar su tibia existencia, muy parecido a como
los fariseos reaccionaban a la vida y mensaje del Señor Jesús, obviamente guardando la
diferencia.

Creo que Adán y Eva no fueron conscientes de las consecuencias de su acto, y si lo eran en
alguna medida el engaño opaco tal conciencia y digo esto porque es una característica del
hombre tanto en el pasado como en el presente, tomar decisiones sin tener la más mínima
idea de las consecuencias, aun presumiéndolas. Un ejemplo de ello por ejemplo seguimos
“cansándonos”, aun cuando es altísimo el porcentaje de fracaso y el resto sobreviven y solo
unos cuantos logran una relación estable y satisfactoria, humanamente hablando. El
fracaso claro, no es por casarnos sino por las ideas erróneas y fuera de la realidad y verdad
de quien diseño y creo la vida de pareja, entre el hombre y la mujer: Dios mismo.

Desconocer a Dios y lo que él ha dicho en todo lo referente a nuestras vidas y relaciones, es


hacer exactamente lo que Adán y Eva hicieron, todo hombre y mujer que no acate
seriamente las instrucciones que Dios ha dado para la vida de pareja, debe saber que está
destinada a fracasar rotundamente tarde o temprano, no es casualidad que se haya vuelto
tan común las noticias macabras, de esposos que asesinan a sus esposas y viceversa,
porque? Porque la consecuencia de desconocer la Palabra de Dios es pecado y la paga del
pecado es la muerte. Dios no nos engaña, el es veras, en cambio nuestra autosuficiencia es
engañosa, proviene de un corazón engañoso podríamos decir que programado de vieja data
para creer con mucha facilidad la mentira, tal y como sucedió en el Edén.

El hombre sigue tomando decisiones inconsciente de las consecuencias, aun la ciencia la


reina de la sabiduría y avance tecnológico, no escapa de esta regla, podemos ufanarnos de
los avances de ella, pero que de las trágicas consecuencia que la gran mayoría de adelantos
ha causado irreversiblemente en nuestro planeta? Sin considerar otras malas y lesivas
consecuencias a la vida misma del hombre. Qué gran tragedia sigue sucediendo en el
hombre actual quien envanecido en sus razonamientos ( y no me refiero a los llamados
incrédulos sino a los “cristianos”) siguen creyendo con tanta facilidad la mentira, esa
verdad diluida, esa Palabra que Dios ha dado y que los hombre insisten en mutilar y añadir
con astucia pasmosa. La gran mayoría de los cristianos no quieren ser conscientes de
engaño en el que han caído, al seguir un evangelio adulterado, muy lejos del que la Biblia
nos presenta claramente, no se dan cuenta y no les importa lo que se le ha quitado y lo que
se le ha agregado, desde los días de la iglesia primitiva, narrada en Hechos de Lucas hasta
nuestros penosos días. La sal ha perdido su sabor:

Luc 14:34 Buena es la sal; mas si la sal se hiciere insípida, ¿con qué se sazonará?
Luc 14:35 Ni para la tierra ni para el muladar es útil; la arrojan fuera. El que tiene oídos
para oír, oiga.

Adán escucho pero no atentamente y no se convenció de que lo que Dios le decía era la
verdad única y no creyó, a Dios se le debe escuchar con toda la atención, entenderle y
acatar, lo que él dice que no se haga y hacer lo que él dice que se haga, sin añadirle ni
quitarle, ya que el añadirle o quitarle resulta en la misma rebelión y desobediencia.

Nota: Satanás siempre ha cuestionado en la mente y el corazón del hombre la Palabra de


Dios, la distorsiona y la replantea, siempre buscando la seducción que viene por los ojos,
por la vista, y le ha dado resultado, el propósito es que finalmente el hombre sea
poderosamente atraído al punto de codiciar lo que ve y una vez bajo el poder de la codicia
tomar una acción contraria a lo que Dios ha dicho.

Por otra parte Dios espera siempre que el hombre le crea sin dudar lo que él dice y que
entiendan que lo que él dice es verdad porque él es Dios, sin recurrir a evidencias visibles
como previa condición de la confianza del hombre. Por eso aun hoy día para los creyentes
les es mas motivador seguir aquello que más les estimule la vista, y si hablan de una fe es
de una fe que tiene como condición previa algo visible, seductor y codiciable de alcanzar,
como es el éxito, la fama y las riquezas de este mundo

Los medios llamados audiovisuales campean atrayendo y seduciendo al hombre en


general, el estimulo visual cada vez mas y mas atrayente, subyuga a las generaciones
actuales de tal manera que el escuchar a Dios atentamente resulte ser imposible, por lo
menos a la manera de Dios, una manera que demanda toda la atención y entrega, una
manera que exige ser creído (convencido profundamente) sin dudar nada.

Ya que andar estimulados por la vista es todo lo contrario al andar del justo, que ha sido
justificado por la fe en nuestro Señor Jesucristo, tanto en el antiguo testamento como en el
nuevo.

Gén 3:1 Pero la serpiente era astuta, más que todos los animales del campo que Jehová
Dios había hecho; la cual dijo a la mujer: ¿Conque Dios os ha dicho: No comáis de todo
árbol del huerto?
La astucia de Satanás es esa capacidad de manejar la verdad de Dios lo que Dios ha dicho y
astutamente torcerla de manera casi imperceptible, y adicionándole astutamente algo que
atraiga al hombre para si mismo. He aquí algunas advertencia que la misma Palabra del
Señor no hace al respecto:

1Co_3:19 Porque la sabiduría de este mundo es insensatez para con Dios; pues escrito
está: El prende a los sabios en la astucia de ellos.
2Co_4:2 Antes bien renunciamos a lo oculto y vergonzoso, no andando con astucia, ni
adulterando la palabra de Dios, sino por la manifestación de la verdad recomendándonos a
toda conciencia humana delante de Dios.
2Co_11:3 Pero temo que como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestros
sentidos sean de alguna manera extraviados de la sincera fidelidad a Cristo.
Efe_4:14 para que ya no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de
doctrina, por estratagema de hombres que para engañar emplean con astucia las
artimañas del error,
Creo que son suficientemente claro las cita bíblicas, de tal manera que no es necesario
comentario alguno, por lo menor no en el momento.

Gén 3:2 Y la mujer respondió a la serpiente: Del fruto de los árboles del huerto podemos
comer; Gén 3:3 pero del fruto del árbol que está en medio del huerto dijo Dios: No
comeréis de él, ni le tocaréis, para que no muráis.

Notamos aquí una adición en la respuesta de Eva, que no aparece en la advertencia inicial
emanada de la voz de Dios, su imprecisión denota ya un desvió peligroso como antesala a
lo que seguiría.

Gén 3:4 Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis;

Satanás si sabía que es la muerte, él la conoce muy bien y si nosotros también, por lo
menos la física y se supone que por ende deberíamos ser muy conscientes de la muerte
espiritual y eterna. La consciencia de la muerte eterna debería darnos el temor suficiente
para arrepentirnos de nuestra liviana manera de vivir y presurosos y diligentes ser muy
atentos a la Palabra de Dios.

Gén 3:5 sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos,
y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal.

Satanás es experto en mesclar la verdad con la mentira, solo nesecita colocar un poco de
levadura y ya, hace fácilmente que la verdad tome otro sentido, y en especial ocultando el
resto de la verdad, como las letras pequeñas en los contratos.

La propuesta de Satanás consistía en que no morirían, su ojos serian abiertos, algo que lo
deja pensando a uno, porque acaso eran ciegos o tenían los ojos cosidos, o pegados que no
los podían abrir?, parece que no en el sentido literal, pero si les hizo sentir que su
conocimiento era muy limitado al punto de convencerlos que si necesitaban abrir los ojos,
como el el plano humano, esa expresión tan conocida que dice “ pero abra los ojos no se da
cuenta que….(por ejemplo) lo están engañando!!!! O algo así como “mire dese cuanta o es
que esta ciego????

Por algunas cosas al presente que son vigentes, podríamos pensar que tuvieron su origen
en Eden. Lo tercero que les dice Satanás es que serán como Dios, y claro omitió el hecho de
que lo serian en un aspecto de conocimiento y sabiduría del bien y del mal, pero que los
dejaría dioses de si mismos. Y el hombre en tal empeño continua en nuestros días de mil
diferentes maneras, ser como Dios, solo consiguiéndolo en su imaginación pretenciosa,
como en el caso de los que se creen poderosos, por su poder político, económico o aun
religioso. Es el orgullo de una raza humana que desde el comienzo acepto la propuesta
satánica de ser como Dios y no desistir de ello.

Expresiones comunes como: es que Yo puedo! Es que yo quiero! Es que yo si soy!! Es que
yo seré!!! Es que yo me lo gane!! Es que yo lo conseguí!! Es que yo lo logre!!! Es que como
yo no hay nadie!!! Etc, etc. Nos dan claramente la evidencia actual de un legado adámico.

Gén 3:6 Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los
ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto, y comió; y dio
también a su marido, el cual comió así como ella.

Las palabras de Satanás produjo un efecto en la vista de la mujer, una sensación de agrado
perceptible por los ojos y vio codiciable el fruto del árbol del conocimiento de la ciencia del
bien y del mal, para alcanzar!!! Por ella misma aparte de Dios.

Gén 3:7 Entonces fueron abiertos los ojos de ambos, (si fueron abiertos sus ojos para
conocer el bien el mal, pero a partir de allí sus ojos espirituales quedaron cegados a ese
mundo espiritual que le era tan claro antes de caer) y conocieron que estaban desnudos;
entonces cosieron hojas de higuera, y se hicieron delantales.

Pienso en esta imagen de Adan y Eva como cuando un bombillo se funde y queda apagado
y ya no alumbra, como que habían perdido el vestido con que Dios los había creado, esa luz
de la gloria Divina, y así fue que se dieron cuanta y la vergüenza mutua los sorprendió. La
vergüenza de que otro nos vea desnudos, tanto él lo físico como en el alma, la vergüenza de
que otros vean nuestra vulnerabilidad, que vena lo que realmente somos, eso nos aterra, al
vestirnos y desarrollar personalidades carismáticas o retraídas, desarrollar una manera de
mostrarnos a los otros con la intención de ser aceptados y queridos como seres buenos,
fuertes, seguros, amables es de suma importancia como seres humanos. Aspecto este que
al parecer también se origino en Eden.

Gén 3:8 Y oyeron la voz de Jehová Dios que se paseaba en el huerto, al aire del día; y
el hombre y su mujer se escondieron de la presencia de Jehová Dios entre los
árboles del huerto.

Queda también establecido a partir de ese momento que el hombre se escondería de Dios,
huiría de ahí en delante de Dios de su presencia. Y no solamente huiría de la presencia de
Dios sino que quedaría marcado con un profundo miedo de la Voz de Dios, que lo alegaría
mas y mas para su propia perdición y locura.

Gén 3:9 Mas Jehová Dios llamó al hombre, y le dijo: ¿Dónde estás tú?

Gén 3:10 Y él respondió: Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo, porque estaba


desnudo; y me escondí.

Gén 3:11 Y Dios le dijo: ¿Quién te enseñó que estabas desnudo? ¿Has comido del árbol de
que yo te mandé no comieses?

Gén 3:12 Y el hombre respondió: La mujer que me diste por compañera me dio del árbol, y
yo comí.

Nota: a partir de ahí en adelante es como si hubiéramos quedados programados para solo
desobedecer a Dios, y de andar en la dirección opuesta a Él, y de escondernos de mil y un
manera, y no reconocer que le tenemos miedo a su Palabra, que es lo peor de todo, y por
ello preferimos al parecer hacer lo que hizo el pueblo de Israel en Sinaí

Israel y la voz de Dios

Éxo 19:5 Ahora, pues, si diereis oído a mi voz, y guardareis mi pacto, vosotros seréis
mi especial tesoro sobre todos los pueblos; porque mía es toda la tierra. Éxo 19:6 Y
vosotros me seréis un reino de sacerdotes, y gente santa. Estas son las palabras que dirás a
los hijos de Israel.

Éxo 20:18 Todo el pueblo observaba el estruendo y los relámpagos, y el sonido de la


bocina, y el monte que humeaba; y viéndolo el pueblo, temblaron, y se pusieron de lejos.

Éxo 20:19 Y dijeron a Moisés: Habla tú con nosotros, y nosotros oiremos; pero no hable
Dios con nosotros, para que no muramos.

Éxo 20:20 Y Moisés respondió al pueblo: No temáis; porque para probaros vino Dios, y
para que su temor esté delante de vosotros, para que no pequéis.

Desde ese entonces el asunto con Dios y el hombre ha sido: que Dios habla y el hombre
escucha, atiende, entiende, se persuade y la obediencia es el fruto de haber escuchado
atentamente a Dios, y así comprobar que el oír a Dios, atenderlo, persuadirse de Su verdad,
es Vida para el hombre, pero por el contrario el escucharlo y olvidar y no entenderlo
seguirá manteniéndolo separado de Dios en muerte presente y eterna.

Abraham alguien que si escucho y creyó


Uno de los ejemplos del antiguo testamento más relevante es el de Abraham, toda la
historia del andar con Dios, nos da un panorama muy claro de cómo se aprende a oir a
Dios y andar con él, a la manera que a Dios siempre le ha agradado. Abraham aprendió y
su vida toda fue transformada al punto de ser llamado amigo de Dios, también su andar
lleno de pruebas que lo condujeron a avanzar mas y mas en ese andar, es un desafío para
nosotros los creyente hoy.

Neh_9:7 Tú eres, oh Jehová, el Dios que escogiste a Abram, y lo sacaste de Ur de los


caldeos, y le pusiste el nombre Abraham;

Gén_12:1 Pero Jehová había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la


casa de tu padre, a la tierra que te mostraré. Gén_12:4 Y se fue Abram, como Jehová
le dijo; y Lot fue con él. Y era Abram de edad de setenta y cinco años cuando salió de
Harán.

Gén_12:7 Y apareció Jehová a Abram, y le dijo: A tu descendencia daré esta tierra. Y


edificó allí un altar a Jehová, quien le había aparecido.

Gén_15:1 Después de estas cosas vino la palabra de Jehová a Abram en visión, diciendo:
No temas, Abram; yo soy tu escudo, y tu galardón será sobremanera grande.

Seria todo un extenso estudio ver palabra por palabra todo aquello que Dios le dijo a
Abraham durante toda su vida, y poder notar que la actitud y respuesta de Abraham
siempre se característico por créele a Dios, aun en contra de las circunstancias.

En el nuevo testamento el apóstol Pablo confirma este ejemplo de Dios y dejando claro que
es la manera de Dios aun para nuestros días

Rom_4:3 Porque ¿qué dice la Escritura? Creyó Abraham a Dios, y le fue contado
por justicia.
Gál_3:6 Así Abraham creyó a Dios, y le fue contado por justicia.
Stg_2:23 Y se cumplió la Escritura que dice: Abraham creyó a Dios, y le fue contado
por justicia, y fue llamado amigo de Dios.

Aquí encontramos a un hombre que a diferencia de Adam, le creyó a Dios y reverso su


herencia en Adam, no solo para el, sino que recibió la promesa para la simiente de él
(Cristo) bendecir a todas las familias de la tierra. Como hemos visto el creerle a Dios no es
tan sencillo como parece, ya que consiste en superar toda una naturaleza heredad de
desatender la voz de Dios, lo cual demanda que a diferencia de Adán, escuche a Dios con
toda atención, ya que eso le implicaría un cambio radical en su vida que nunca volvería ser
igual, comenzaría una jornada sin retorno, además de un andar lleno de pruebas muy
difíciles, pero que terminaría con todo éxito.

Como es que Abraham le creyó a Dios aparentemente de una manera tan fácil y sencilla, y
serle contada gratuitamente por justicia, o sea declarado justo por creerle a Dios. Pues lo
cierto es que no esta ni tan sencillo ni tan fácil, pero lo que si vemos es que Dios intervino
poderosamente en Abran para que le creyera.
Rom 4:16 Por tanto, es por fe, para que sea por gracia, a fin de que la promesa sea firme
para toda su descendencia; no solamente para la que es de la ley, sino también para la que
es de la fe de Abraham, el cual es padre de todos nosotros 17 (como está escrito: Te
he puesto por padre de muchas gentes) delante de Dios, a quien creyó, el cual da vida a
los muertos, y llama las cosas que no son, como si fuesen.

Dice la palabra que es por fe, que la manera en que Abram le creyó a Dios fue por fe, lo cual
implica en realidad lo mismo que debió de hacer Adam, ya que cuando Dios nos dice algo,
el entenderlo no es la condición para creerle, sino Dios mismo. El hombre que recibe la
Palabra de Dios le debe creer a Dios, no por el sentido o entendimiento de lo que Dios dice
sino por el hecho de quien lo Dice, un Dios de Verdad, que habla Verdad y que en el no hay
nada de mentira, o sombra ni muchos menos variación.

Cuando alguien como Abram cree lo que Dios dice, así parezca loco a la razón humana
debe creérsele por el hecho de que él es Dios (suficiente razón y motivo) de Verdad que no
se equivoca y que nunca falla pues su Palabra es toda verdad absoluta porque viene de
Dios, y el acatarla hace la diferencia entre la muerte y la vida.

Rom 4:18 El creyó en esperanza contra esperanza, para llegar a ser padre de
muchas gentes, conforme a lo que se le había dicho: Así será tu descendencia. 19 Y no se
debilitó en la fe al considerar su cuerpo, que estaba ya como muerto (siendo de casi cien
años), o la esterilidad de la matriz de Sara.

Rom 4:20 Tampoco dudó, por incredulidad, de la promesa de Dios, sino que se
fortaleció en fe, dando gloria a Dios, Rom 4:21 plenamente convencido de que era
también poderoso para hacer todo lo que había prometido;

El creerle firmemente a Dios, sin tener evidencia visible para seguir adelante fue el caso de
Abraham el ejemplo a seguir e imitar en todo lo que respecta al andar con Dios, por ello
el Señor Jesucristo se refirió ha estos tiempo con una pregunta fundamental que
tenemos que hacernos y es:
Luc 18:7 ¿Y no hará Dios justicia a sus escogidos, que claman a El día y noche? ¿Se tardará
mucho en responderles?
Luc 18:8 Os digo que pronto les hará justicia. No obstante, cuando el Hijo del Hombre
venga, ¿hallará fe en la tierra?

La fe a la que se refiere las escrituras, no es la misma que se pregona, y que se conoce en


el mundo cristiano nominal de nuestro días 2012. Ya que lo que se llama hoy en día fe es
solo la respuesta a estímulos sensitivos y muy visuales, donde ciertos versículos de la biblia
son insertados mas como relleno y no como la única base y fundamento central de la fe. Se
usan textos mal interpretados, y descontextualizados añadiéndoles muchas arandelas
racionalistas convenientes, mas de interés material como incentivo primordial, para hacer
que el “creyente” obtenga, realice y alcance aquello codiciable. Claro eso codiciable se hace
viable con base a que se asume y presume que eso es lo que Dios quiere, a la manera en que
Satanás le dijo a la mujer:
Gén 3:5 sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos,
y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal.

Contrariamente, el apóstol Pablo cita muchas veces el ejemplo de Abraham, nunca


enfatiza o da a entender que esa fe de Abraham, es la que nos permitirá alcanzar éxito,
fama y fortuna, no de ninguna manera, nos es necesaria para la vida eterna, para lo
verdaderamente valioso, lo espiritual, claro lo espiritual tiene poca relevancia en nuestros
días, en un cristianismo sensorial (que se motiva por lo sentidos naturales) que prioriza en
la práctica todas las cosas más sublimes de la tierra, nuestros deseos y anhelos humanos
de tener la “vida buena” (casa, carro y etc, etc) han llegado los días en que no hay “fe en la
tierra”, a diferencia del legado de la iglesia primitiva. De ella sabemos muy bien cuan real
le eran las cosas eternas, las cosas espirítales sobre las temporales y terrenas. Algo que la
iglesia cristiana actual ha perdido completamente, y tal vez por esta aseveración puedo ser
duramente criticado, pero me temo que aun así, los hechos no cambian la evidencia.

Rom 4:22 por lo cual también su fe le fue contada por justicia. Rom 4:23 Y no
solamente con respecto a él se escribió que le fue contada,

Léase bien su fe la fue contada por justicia, justicia ,(preciado regalo inmensurable
invaluable de Dios al pecador perdido, justicia adjudicada gratuitamente al malo y
perverso pecador, razón suficiente para tener el gozo de la salvación todos los días de la
efímera existencia, así nos fuera mal en todo lo demás ) no dinero, prosperidad material o
carro 0 casa o …. etc., etc.

Rom 4:24 sino también con respecto a nosotros a quienes ha de ser contada, esto es, a
los que creemos en el que levantó de los muertos a Jesús, Señor nuestro,

Rom 4:25 el cual fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado para nuestra
justificación.

La vida modelada de Abraham por Dios, y presentada en las sagradas escrituras, es


reiterativamente referenciada por el apóstol Pablo y los demás escritores bíblicos, de una
manera muy central. En Abraham Dios estableció un precedente y punto de partida por la
promesa de salvación en la Simiente la cual es Cristo.

La historia de Israel demostrara que la constante es la misma, Dios hablando a su pueblo


de muchas maneras en todo tiempo, para que le escuchen atentamente, entiendan, se
persuadan o dejarse convencer y así creer en verdad, para que guarden su verdad, Su
Palabra y les de vida presente de reconciliación con él, y tener nuevamente una verdadera
comunión con él y por la eternidad.

La misma historia de Israel en el desierto, es otro ejemplo muy claro de cómo el hombre
fracasa en oír atentamente a Dios y persuadirse de que lo que él dice es la verdad y realidad
suprema sobre todo. Sin importar que los hombres y circunstancias aun contrarias
desafíen lo que Dios dice.
Un caso más en el que una gran mayoría sigue un enfoque en lo que ven y les parece y una
minoría que sigue básicamente por lo que Dios dice aun a pesar de lo que se ve y las
circunstancias adversas humanamente hablando. Los Josué saben muy bien que lo que
Dios ha dicho y prometido nada ni nadie lo puede impedir y que los que se lo pierden son
los desatentos en los que su rpopia perspectiva pesa mas que lo que Dios ha dicho.

Josue y Caleb son un excelente ejemplo de el hombre que escucha a Dios y le cree en
verdad, convencido, de que lo que Dios le dice es y punto, y a su vez se mueve aun en
contra de las circunstancias más adversas.

Num.13: 25 Y volvieron de reconocer la tierra al fin de cuarenta días. 26 Y anduvieron y


vinieron a Moisés y a Aarón, y a toda la congregación de los hijos de Israel, en el desierto
de Parán, en Cades, y dieron la información a ellos y a toda la congregación, y les
mostraron el fruto de la tierra. 27 Y les contaron, diciendo: Nosotros llegamos a la tierra a
la cual nos enviaste, la que ciertamente fluye leche y miel; y este es el fruto de ella. 28 Mas
el pueblo que habita aquella tierra es fuerte, y las ciudades muy grandes y fortificadas; y
también vimos allí a los hijos de Anac. 29 Amalec habita el Neguev, y el heteo, el
jebuseo y el amorreo habitan en el monte, y el cananeo habita junto al mar, y a la ribera del
Jordán.

30 Entonces Caleb hizo callar al pueblo delante de Moisés, y dijo: Subamos luego, y
tomemos posesión de ella; porque más podremos nosotros que ellos. 31 Mas los varones
que subieron con él, dijeron: No podremos subir contra aquel pueblo, porque es más fuerte
que nosotros.

Estos la gran mayoría piensa que el asunto es cuestión de quien es mas fuerte, pero para
Caleb el asunto en el que lo importante es quien respalda el asunto: Dios y eso el todo.

32 Y hablaron mal entre los hijos de Israel, de la tierra que habían reconocido, diciendo:
La tierra por donde pasamos para reconocerla, es tierra que traga a sus moradores; y todo
el pueblo que vimos en medio de ella son hombres de grande estatura. 33 También
vimos allí gigantes, hijos de Anac, raza de los gigantes, y éramos nosotros, a nuestro
parecer, como langostas; y así les parecíamos a ellos.

NÚMEROS 14

1 Entonces toda la congregación gritó, y dio voces; y el pueblo lloró aquella noche. 2 Y se
quejaron contra Moisés y contra Aarón todos los hijos de Israel; y les dijo toda la multitud:
¡Ojalá muriéramos en la tierra de Egipto; o en este desierto ojalá muriéramos! 3 ¿Y por qué
nos trae Jehová a esta tierra para caer a espada, y que nuestras mujeres y nuestros niños
sean por presa? ¿No nos sería mejor volvernos a Egipto?

Hay estamos pintados como se dice, porque el asunto empeora y empeora en el interior de
aquellos que ven las cosas externas como una condición para que Dios haga lo que el a
prometido, una actitud asi siempre termina en considerar todo tan oscuro e imposible que
solo ven al final del camino muerte y solo muerte, han perdido la luz del camino, han
perdido al certeza de lo que se espera y la convicción de lo no se ve, son a los qu Dios no es
Dios sino dios, son los que piensan que Dios se equivoca y que ciertas circunstancias le
queda grande. Tal situación no ha sido ni es exclusividad del pueblo de Israel en el
desierto, sino también de su pueblo actual, de no aprender del ejemplo que nos ha dejado
claramente anotado en las sagradas escrituras

1Co 10:5 Pero de los más de ellos no se agradó Dios; por lo cual quedaron postrados en
el desierto.
1Co 10:6 Mas estas cosas sucedieron como ejemplos para nosotros, para que no
codiciemos cosas malas, como ellos codiciaron.
1Co 10:7 Ni seáis idólatras, como algunos de ellos, según está escrito: Se sentó el pueblo a
comer y a beber, y se levantó a jugar.
1Co 10:8 Ni forniquemos, como algunos de ellos fornicaron, y cayeron en un día veintitrés
mil.
1Co 10:9 Ni tentemos al Señor, como también algunos de ellos le tentaron, y perecieron
por las serpientes.
1Co 10:10 Ni murmuréis, como algunos de ellos murmuraron, y perecieron por el
destructor.
1Co 10:11 Y estas cosas les acontecieron como ejemplo, y están escritas para
amonestarnos a nosotros, a quienes han alcanzado los fines de los siglos.

4 Y decían el uno al otro: Designemos un capitán, y volvámonos a Egipto.

Y solo piensan en retroceder,

Heb 10:37 Porque aún un poquito,


Y el que ha de venir vendrá, y no tardará.
Heb 10:38 Mas el justo vivirá por fe;
Y si retrocediere, no agradará a mi alma.
Heb 10:39 Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de
los que tienen fe para preservación del alma.

5 Entonces Moisés y Aarón se postraron sobre sus rostros delante de toda la multitud de la
congregación de los hijos de Israel. 6 Y Josué hijo de Nun y Caleb hijo de Jefone, que eran
de los que habían reconocido la tierra, rompieron sus vestidos, 7 y hablaron a toda la
congregación de los hijos de Israel, diciendo: La tierra por donde pasamos para
reconocerla, es tierra en gran manera buena. 8 Si Jehová se agradare de nosotros, él nos
llevará a esta tierra, y nos la entregará; tierra que fluye leche y miel.

Este es otro lenguaje, muy diferente, es el idioma del que entiende que el caminar con Dios
no depende de las circunstancias fáciles o difíciles, que depende totalmente de Dios, y que
las circunstancias críticas e imposibles al parecer humano, son parte de Su plan para
probar y mostrar que el cumplimiento de su Palabra solo puede ser realizado por su poder
Divino sin la ayuda del hombre y que para el no hay nada imposible!!.
9 Por tanto, no seáis rebeldes contra Jehová, ni temáis al pueblo de esta tierra; porque
nosotros los comeremos como pan; su amparo se ha apartado de ellos, y con nosotros
está Jehová; no los temáis. 10 Entonces toda la multitud habló de apedrearlos.

Esto es lo que necesitamos aprender, nosotros el pueblo de Dios, en estos días finales, en
medio de tanta decadencia espiritual, y sobre todo de nosotros los “cristianos”. Vivimos en
un mundo que ha hecho que las circunstancias sean tan criticas que se imposible seguir
creyendo en el Señor a SU manera, y que solo hay una manera de seguirle, la que el mundo
dice, esa manera condicionada, a que solo si Dios nos da salud, dinero y amor, un evengelio
que solo se cree con casa. Carro y beca y algo mas, sino entonces no y mejor regresar al
mundo con otro capitán.

Pero la gloria de Jehová se mostró en el tabernáculo de reunión a todos los hijos de Israel,
11 y Jehová dijo a Moisés: ¿Hasta cuándo me ha de irritar este pueblo? ¿Hasta cuándo no
me creerán, con todas las señales que he hecho en medio de ellos?

Josue y Caleb

Pasaron cuarenta años y Josue y Caleb vieron lo que habían esperado y recibieron lo que
esperaron, porque cuando se oye atentamente la Palabra del Señor y se guarda como tesoro
precioso y no se olvida a pesar de las circunstancias, solo puede pasar una cosa y es que se
cumpla indefectible e inevitablemente la Palabra de Dios.

Deu_34:9 Y Josué hijo de Nun fue lleno del espíritu de sabiduría, porque Moisés había
puesto sus manos sobre él; y los hijos de Israel le obedecieron, e hicieron como Jehová
mandó a Moisés.

Jos 1:4 Desde el desierto y el Líbano hasta el gran río Eufrates, toda la tierra de los heteos
hasta el gran mar donde se pone el sol, será vuestro territorio.
Jos 1:5 Nadie te podrá hacer frente en todos los días de tu vida; como estuve con Moisés,
estaré contigo; no te dejaré, ni te desampararé.
Jos 1:6 Esfuérzate y sé valiente; porque tú repartirás a este pueblo por heredad la tierra de
la cual juré a sus padres que la daría a ellos.
Jos 1:7 Solamente esfuérzate y sé muy valiente, para cuidar de hacer conforme a toda la ley
que mi siervo Moisés te mandó; no te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra,
para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas.

Jos 1:8 Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley,


sino que de día y de noche meditarás en él,
para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito;
porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.

Jos 1:9 Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente;


no temas ni desmayes,
porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.
Que impresionante palabra le da Dios a Josué, y la vida de Josué se puede resumir en la
realización exacta de la palabra dicha por el Señor a Josué, así fue su andar todo el resto de
su vida.

Así podríamos recorrer todo el antiguo testamento con miles de ejemplos que nos
muestran la diferencia que hace el oír atentamente a Dios y creer lo que él dice, como lo
dice, sin modificarlo, sin quitarle o agregarle. Los que lo escucharon con un corazón
dispuesto nos han dejado un ejemplo digno de imitar, que debería estimularnos a seguir,
no así aquellos que insistieron en modular todo aquello que Dios les decía y anunciaba,
quienes hacían caso omiso o escuchaban el mensaje de Dios, la verdad y no le creían a
Dios, nos han dejado un ejemplo que nos debería hacer recapacitar seriamente de no
seguir su mal ejemplo, dadas las terribles consecuencias que se acarrearon por tal desatino.

Un mal ejemplo: Saúl

1Sa 13:11 Entonces Samuel dijo: ¿Qué has hecho? Y Saúl respondió: Porque vi que el
pueblo se me desertaba, y que tú no venías dentro del plazo señalado, y que los filisteos
estaban reunidos en Micmas,

Una situación más en la que se presenta la Palabra de Dios vrs. o que el hombre ve y al
hombre le parece, sigue lo que ve y acomodando la Palabra dada por el Señor. Saúl ve tres
cosas que le pesan más que lo que el Señor le había dicho, ve al pueblo desertar, ve que
Samuel que no llega a tiempo y ve el enemigo encima.

Ciertamente son situaciones de prueba, y los que hemos vivido situaciones parecidas
sabemos que no es fácil, sobre todo cuando somos enclenques no firmes con lo que
sabemos que el Señor ha dicho respecto de cada situación, tememos, nos desesperamos, no
sabemos qué hacer en la angustia, y hacemos lo que primero nos viene a la mano y una vez
más fallamos.

No es fácil esperar y confiar cuando el agua le llega a uno más arriba del cuello, cuando no
se ve la ayuda del Señor y no aparece su socorro prometido, entonces flaqueamos
tristemente, y dudamos. Pero también hemos vivido las situaciones cuando nuestro
corazón experimenta la fortaleza de seguir confiando, y esperando aunque al agua nos
cubra, cuando ya no tenemos fuerzas y a pesar de ello seguimos experimentando su
fortaleza y no tomamos ninguna acción desesperada, al contrario esperamos su socorro y
cuando menos pensamos llega su ayuda, nos rescata de la situación y entonces todo es
diferente a las anteriores experiencias fracasadas, Gloria a nuestro glorioso Dios!!!, que
lidia con nosotros con tanta paciencia, por ello es de suma importancia que ahora en estos
finales días, permitamos que su Espíritu nos afirme, fortalezca y establezca en un andar
firme y fiel a Su Palabra.

1Sa 13:12 me dije: Ahora descenderán los filisteos contra mí a Gilgal, y yo no he implorado
el favor de Jehová. Me esforcé, pues, y ofrecí holocausto.

De ese tipo de esfuerzo es del que debemos guardarnos, esas maniobras muy nuestras,
para salir de situaciones de prueba que Dios ha permitido, precisamente con el propósito
de mostrarnos si confiamos, esperamos y dependemos de él y Su Palabra o, si seguimos
siendo hombres de poca fe que temen, toman sus propias iniciativas e inconstantes y de
doble animo.

1Sa 13:13 Entonces Samuel dijo a Saúl: Locamente has hecho; no guardaste el
mandamiento de Jehová tú Dios que él te había ordenado; pues ahora Jehová hubiera
confirmado tu reino sobre Israel para siempre.

La historia de los reyes demuestra que entre los buenos reyes que trajeron salvación de los
enemigos y tiempos de refrigerio fueron aquellos que escucharon atentamente a Dios y
atendieron su mensaje, ya fuera directamente como en el caso de David o a través de un
profeta verdadero y le creyeron a Dios, persuadidos de que esa era la verdad, y así conducir
al pueblo a un arrepentimiento y volverse a Dios en verdad, no así los malos reyes que
desatendía a la voz del Señor y solo seguían la corriente de los pueblos vecinos, para hacer
como ellos, motivo por el cual eran vencidos y subyugados por sus enemigos a extremos de
mucha mortandad, ruina, vergüenza y aun al punto de ser llevados cautivos por mucho
años.

1Sa 15:13 Vino, pues, Samuel a Saúl, y Saúl le dijo: Bendito seas tú de Jehová; yo he
cumplido la palabra de Jehová.

El auto engaño da paso, al pretender que algo es verdad por la sencilla razón que lo
decimos o lo creemos, pero no para con Dios, ya que a Dios no le podemos engañar,
pretendiendo que por nuestra racionalidad podemos convencer a Dios.

1Sa 15:14 Samuel entonces dijo: ¿Pues qué balido de ovejas y bramido de vacas es este que
yo oigo con mis oídos? 1Sa 15:15 Y Saúl respondió: De Amalec los han traído; porque el
pueblo perdonó lo mejor de las ovejas y de las vacas, para sacrificarlas a Jehová tu Dios,
pero lo demás lo destruimos.

Y nuevamente la estrategia de echarle la culpa a los otros, no resuelve nada solo la empeora
para con Dios, y se incrementa mas la dureza de un corazón engañoso y perverso. Lo
lamentable son las consecuencia que nos estamos acarreando por seguir este mal ejemplo.
Muchos de los que se auto denominan cristianos, han hecho su andar a su manera, y se
han convencido que lo están haciendo regio y que recibirán muchos galardones en el cielo.

Pero el Señor le dijo a Saúl algo que él no esperaba, y muy severo, algo que cambiaría su
andar, el Espíritu de Dios lo dejaría, y un espíritu inmundo vendría a reemplazarlo para
atormentarlo el resto de su vida augurándole un final fatal.

1Sa 15:16 Entonces dijo Samuel a Saúl: Déjame declararte lo que Jehová me ha dicho esta
noche. Y él le respondió: Dí. 1Sa 15:17 Y dijo Samuel: Aunque eras pequeño en tus propios
ojos, ¿no has sido hecho jefe de las tribus de Israel, y Jehová te ha ungido por rey sobre
Israel? 1Sa 15:18 Y Jehová te envió en misión y dijo: Vé, destruye a los pecadores de
Amalec, y hazles guerra hasta que los acabes.
1Sa 15:19 ¿Por qué, pues, no has oído la voz de Jehová, sino que vuelto al botín has
hecho lo malo ante los ojos de Jehová? 1Sa 15:20 Y Saúl respondió a Samuel: Antes bien
he obedecido la voz de Jehová, y fui a la misión que Jehová me envió, y he traído a
Agag rey de Amalec, y he destruido a los amalecitas.

El auto engaño no tiene límites argumentar aun mas allá de la verdad de Dios presentada
por Samuel, y es una escena que se repitió y repitió aun hasta el final como lo cita el
evangelio de Mateo Mat 7:22 Muchos me dirán en aquel día: "Señor, Señor, ¿no
profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre
hicimos muchos milagros?" 23 Y entonces les declararé: "Jamás os conocí; APARTAOS DE
MI, LOS QUE PRACTICAIS LA INIQUIDAD."

Estos como Saul son “lideres” que viven por el pueblo y para el pueblo, y las cosas de Dios
para ellos solo son un escudo o plataforma para sobresalir y engrandecersen. Poco les
importa seguir le Palabra de Dios fielmente, la matizan y astutamente la distorsionan sin
que al parecer nadie se percata del adultero hecho.

1Sa 15:21 Mas el pueblo tomó del botín ovejas y vacas, las primicias del anatema, para
ofrecer sacrificios a Jehová tu Dios en Gilgal. 1Sa 15:22 Y Samuel dijo: ¿Se complace
Jehová tanto en los holocaustos y víctimas, como en que se obedezca a las palabras de
Jehová? Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios, y el prestar
atención que la grosura de los carneros.

Léase bien, el ¡prestar atención!. Pero la Palabra de Dios es sencillamente perfecta y exacta
y sus términos nunca se pueden diluir ni en un uno por ciento, lo cual es muy común en
nuestros días, y aun en un muy alto porcentaje de mixtura humana conveniente.

1Sa 15:23 Porque como pecado de adivinación es la rebelión, y como ídolos e idolatría la
obstinación. Por cuanto tú desechaste la palabra de Jehová, él también te ha
desechado para que no seas rey.

Dios da por desechada su Palabra cuando alguien que la escucha no la sigue en sus
términos, el desconocer algo de ella o aumentarle un poquito es grave, muy grave.

1Sa 15:24 Entonces Saúl dijo a Samuel: Yo he pecado; pues he quebrantado el


mandamiento de Jehová y tus palabras, porque temí al pueblo y consentí a la voz de
ellos. Perdona, pues, ahora mi pecado, 1Sa 15:25 y vuelve conmigo para que adore a
Jehová.

Finalmente sale la verdad a relucir, frente al juicio del Señor sobre esta situación de Saúl,
pero ya tarde lastimosamente. Porque tuvo miedo y la voz del pueblo pudo más que la voz
de Dios en Saúl.

La diferencia de reyes como David, para quienes lo que decía el Señor era la máxima
autoridad y guía para todas sus decisiones, eran hombres que en verdad Dios y su Palabra
tenia peso en sus vidas, para consultarlo y escucharlo atentamente y creer en verdad aun
en las peores circunstancias.

David

Sa 30:3 Vino, pues, David con los suyos a la ciudad, y he aquí que estaba quemada, y sus
mujeres y sus hijos e hijas habían sido llevados cautivos.

1Sa 30:4 Entonces David y la gente que con él estaba alzaron su voz y lloraron, hasta que
les faltaron las fuerzas para llorar.

1Sa 30:5 Las dos mujeres de David, Ahinoam jezreelita y Abigail la que fue mujer de Nabal
el de Carmel, también eran cautivas.

1Sa 30:6 Y David se angustió mucho, porque el pueblo hablaba de apedrearlo, pues todo el
pueblo estaba en amargura de alma, cada uno por sus hijos y por sus hijas; mas David se
fortaleció en Jehová su Dios.

1Sa 30:7 Y dijo David al sacerdote Abiatar hijo de Ahimelec: Yo te ruego que me acerques
el efod. Y Abiatar acercó el efod a David.

1Sa 30:8 Y David consultó a Jehová, diciendo: ¿Perseguiré a estos merodeadores? ¿Los
podré alcanzar? Y él le dijo: Síguelos, porque ciertamente los alcanzarás, y de
cierto librarás a los cautivos.

1Sa 30:9 Partió, pues, David, él y los seiscientos hombres que con él estaban, y llegaron
hasta el torrente de Besor, donde se quedaron algunos.

1Sa 30:10 Y David siguió adelante con cuatrocientos hombres; porque se quedaron atrás
doscientos, que cansados no pudieron pasar el torrente de Besor.

1Sa 30:11 Y hallaron en el campo a un hombre egipcio, el cual trajeron a David, y le dieron
pan, y comió, y le dieron a beber agua. 1Sa 30:12 Le dieron también un pedazo de masa de
higos secos y dos racimos de pasas. Y luego que comió, volvió en él su espíritu; porque no
había comido pan ni bebido agua en tres días y tres noches. 1Sa 30:13 Y le dijo David:
¿De quién eres tú, y de dónde eres? Y respondió el joven egipcio: Yo soy siervo de un
amalecita, y me dejó mi amo hoy hace tres días, porque estaba yo enfermo;

1Sa 30:14 pues hicimos una incursión a la parte del Neguev que es de los cereteos, y de
Judá, y al Neguev de Caleb; y pusimos fuego a Siclag. 1Sa 30:15 Y le dijo David: ¿Me
llevarás tú a esa tropa? Y él dijo: Júrame por Dios que no me matarás, ni me entregarás en
mano de mi amo, y yo te llevaré a esa gente. 1Sa 30:16 Lo llevó, pues; y he aquí que
estaban desparramados sobre toda aquella tierra, comiendo y bebiendo y haciendo fiesta,
por todo aquel gran botín que habían tomado de la tierra de los filisteos y de la tierra de
Judá.

1Sa 30:17 Y los hirió David desde aquella mañana hasta la tarde del día siguiente; y no
escapó de ellos ninguno, sino cuatrocientos jóvenes que montaron sobre los camellos y
huyeron. 1Sa 30:18 Y libró David todo lo que los amalecitas habían tomado, y asimismo
libertó David a sus dos mujeres. 1Sa 30:19 Y no les faltó cosa alguna, chica ni grande, así
de hijos como de hijas, del robo, y de todas las cosas que les habían tomado; todo lo
recuperó David.

1Sa 30:20 Tomó también David todas las ovejas y el ganado mayor; y trayéndolo todo
delante, decían: Este es el botín de David.

1Sa 30:21 Y vino David a los doscientos hombres que habían quedado cansados y no
habían podido seguir a David, a los cuales habían hecho quedar en el torrente de Besor; y
ellos salieron a recibir a David y al pueblo que con él estaba. Y cuando David llegó a la
gente, les saludó con paz.

1Sa 30:22 Entonces todos los malos y perversos de entre los que habían ido con David,
respondieron y dijeron: Porque no fueron con nosotros, no les daremos del botín que
hemos quitado, sino a cada uno su mujer y sus hijos; que los tomen y se vayan.

1Sa 30:23 Y David dijo: No hagáis eso, hermanos míos, de lo que nos ha dado Jehová,
quien nos ha guardado, y ha entregado en nuestra mano a los merodeadores que
vinieron contra nosotros.

1Sa 30:24 ¿Y quién os escuchará en este caso? Porque conforme a la parte del que
desciende a la batalla, así ha de ser la parte del que queda con el bagaje; les tocará parte
igual.

1Sa 30:25 Desde aquel día en adelante fue esto por ley y ordenanza en Israel, hasta hoy.

Al finalizar sus días el rey David daba testimonio de que su vida había sido una vida
pendiente de la voz del Señor para atenderla y guardarla

2Sa 23:1 Estas son las palabras postreras de David.


Dijo David hijo de Isaí,
Dijo aquel varón que fue levantado en alto,
El ungido del Dios de Jacob,
El dulce cantor de Israel:
2Sa 23:2 El Espíritu de Jehová ha hablado por mí,
Y su palabra ha estado en mi lengua.
2Sa 23:3 El Dios de Israel ha dicho,
Me habló la Roca de Israel:
Habrá un justo que gobierne entre los hombres,
Que gobierne en el temor de Dios.
2Sa 23:4 Será como la luz de la mañana,
Como el resplandor del sol en una mañana sin nubes,
Como la lluvia que hace brotar la hierba de la tierra.
2Sa 23:5 No es así mi casa para con Dios;
Sin embargo, él ha hecho conmigo pacto perpetuo,
Ordenado en todas las cosas, y será guardado,
Aunque todavía no haga él florecer
Toda mi salvación y mi deseo.

En Salomón vemos que a pesar de su sabiduría y grandeza de las cosas que Dios le había
concedió, fallo

1Re 11:6 E hizo Salomón lo malo ante los ojos de Jehová, y no siguió
cumplidamente a Jehová como David su padre. 1Re 11:7 Entonces edificó Salomón un
lugar alto a Quemos, ídolo abominable de Moab, en el monte que está enfrente de
Jerusalén, y a Moloc, ídolo abominable de los hijos de Amón.

1Re 11:8 Así hizo para todas sus mujeres extranjeras, las cuales quemaban incienso y
ofrecían sacrificios a sus dioses. 1Re 11:9 Y se enojó Jehová contra Salomón, por cuanto su
corazón se había apartado de Jehová Dios de Israel, que se le había aparecido dos veces,

1Re 11:10 y le había mandado acerca de esto, que no siguiese a dioses ajenos; mas él no
guardó lo que le mandó Jehová. 1Re 11:11 Y dijo Jehová a Salomón: Por cuanto ha habido
esto en ti, y no has guardado mi pacto y mis estatutos que yo te mandé, romperé de ti el
reino, y lo entregaré a tu siervo.

Jeroboan el sucesor siervo de Salomon

1Re 14:7 Vé y dí a Jeroboam: Así dijo Jehová Dios de Israel: Por cuanto yo te levanté de en
medio del pueblo, y te hice príncipe sobre mi pueblo Israel,
1Re 14:8 y rompí el reino de la casa de David y te lo entregué a ti; y tú no has sido como
David mi siervo, que guardó mis mandamientos y anduvo en pos de mí con todo su
corazón, haciendo solamente lo recto delante de mis ojos,
1Re 14:9 sino que hiciste lo malo sobre todos los que han sido antes de ti, pues
fuiste y te hiciste dioses ajenos e imágenes de fundición para enojarme, y a mí me
echaste tras tus espaldas;
1Re 14:10 por tanto, he aquí que yo traigo mal sobre la casa de Jeroboam, y destruiré de
Jeroboam todo varón, así el siervo como el libre en Israel; y barreré la posteridad de la
casa de Jeroboam como se barre el estiércol, hasta que sea acabada.

Nabat

1Re 15:1 En el año dieciocho del rey Jeroboam hijo de Nabat, Abiam comenzó a reinar
sobre Judá,
1Re 15:2 y reinó tres años en Jerusalén. El nombre de su madre fue Maaca, hija de
Abisalom.
1Re 15:3 Y anduvo en todos los pecados que su padre había cometido antes de
él; y no fue su corazón perfecto con Jehová su Dios, como el corazón de David su
padre.

Asa
1Re 15:8 Y durmió Abiam con sus padres, y lo sepultaron en la ciudad de David; y reinó
Asa su hijo en su lugar.
1Re 15:9 En el año veinte de Jeroboam rey de Israel, Asa comenzó a reinar sobre Judá.
1Re 15:10 Y reinó cuarenta y un años en Jerusalén; el nombre de su madre fue Maaca, hija
de Abisalom.
1Re 15:11 Asa hizo lo recto ante los ojos de Jehová, como David su padre.

Asi encontramos en los reyes de Judá, unos siguen el consejo del Señor y otros totalmente
depravados en su rebelión contra el Señor y su palabra. Las traiciones e intrigas como
asesinatos seguían como una corriente impetuosa que iba en detrimento de la nación de
Israel y de Judá

1Re 16:8 En el año veintiséis de Asa rey de Judá comenzó a reinar Ela hijo de Baasa sobre
Israel en Tirsa; y reinó dos años.
1Re 16:9 Y conspiró contra él su siervo Zimri, comandante de la mitad de los carros. Y
estando él en Tirsa, bebiendo y embriagado en casa de Arsa su mayordomo en Tirsa,
1Re 16:10 vino Zimri y lo hirió y lo mató, en el año veintisiete de Asa rey de Judá; y reinó
en lugar suyo.
1Re 16:11 Y luego que llegó a reinar y estuvo sentado en su trono, mató a toda la casa de
Baasa, sin dejar en ella varón, ni parientes ni amigos.
1Re 16:12 Así exterminó Zimri a toda la casa de Baasa, conforme a la palabra que Jehová
había proferido contra Baasa por medio del profeta Jehú,
1Re 16:13 por todos los pecados de Baasa y los pecados de Ela su hijo, con los cuales ellos
pecaron e hicieron pecar a Israel, provocando a enojo con sus vanidades a Jehová Dios
de Israel.

1Re 16:29 Comenzó a reinar Acab hijo de Omri sobre Israel el año treinta y ocho de Asa
rey de Judá.
1Re 16:30 Y reinó Acab hijo de Omri sobre Israel en Samaria veintidós años. Y Acab hijo
de Omri hizo lo malo ante los ojos de Jehová, más que todos los que
reinaron antes de él.
1Re 16:31 Porque le fue ligera cosa andar en los pecados de Jeroboam hijo de Nabat, y
tomó por mujer a Jezabel, hija de Et-baal rey de los sidonios, y fue y sirvió a Baal, y lo
adoró.

2Re 13:1 En el año veintitrés de Joás hijo de Ocozías, rey de Judá, comenzó a reinar
Joacaz hijo de Jehú sobre Israel en Samaria; y reinó diecisiete años.
2Re 13:2 E hizo lo malo ante los ojos de Jehová, y siguió en los pecados de Jeroboam
hijo de Nabat, el que hizo pecar a Israel; y no se apartó de ellos.

El pecado era básicamente el mismo; no acatar la Palabra del Señor, y priorizar los propios
deseos por parte del rey y de hacer todo lo contrario, de vez en cuando surgía un rey que si
atendía al Señor y estaba dispuesto a declinar en su propio camino y voluntad.

2Re 18:1 En el tercer año de Oseas hijo de Ela, rey de Israel, comenzó a reinar Ezequías
hijo de Acaz rey de Judá.
2Re 18:2 Cuando comenzó a reinar era de veinticinco años, y reinó en Jerusalén
veintinueve años. El nombre de su madre fue Abi hija de Zacarías.
2Re 18:3 Hizo lo recto ante los ojos de Jehová, conforme a todas las cosas que
había hecho David su padre.
2Re 18:4 El quitó los lugares altos, y quebró las imágenes, y cortó los símbolos de Asera, e
hizo pedazos la serpiente de bronce que había hecho Moisés, porque hasta entonces le
quemaban incienso los hijos de Israel; y la llamó Nehustán.
2Re 18:5 En Jehová Dios de Israel puso su esperanza; ni después ni antes de él hubo otro
como él entre todos los reyes de Judá.
2Re 18:6 Porque siguió a Jehová, y no se apartó de él, sino que guardó los
mandamientos que Jehová prescribió a Moisés.
2Re 18:7 Y Jehová estaba con él; y adondequiera que salía, prosperaba. El se rebeló contra
el rey de Asiria, y no le sirvió.

Al final de los reinados de los reyes tanto de Israel como de Judá, Dios decreta la
dispersión del reino del norte y años más tarde el cautiverio del sur, ósea Judá, por 70
años; cuando estos fueron cumplidos Dios en Esdras halla un hombre con un corazón
verdaderamente dispuesto su palabra y el atiende y entiende lo cual trae el inicio de una
restauración, con innumerables complicaciones, pero fiel a lo que el Señor había mandado

Esd 7:6 este Esdras subió de Babilonia. Era escriba diligente en la ley de Moisés,
que Jehová Dios de Israel había dado; y le concedió el rey todo lo que pidió, porque la
mano de Jehová su Dios estaba sobre Esdras.
Esd 7:10 Porque Esdras había preparado su corazón para inquirir la ley de
Jehová y para cumplirla, y para enseñar en Israel sus estatutos y decretos.

Esd 10:1 Mientras oraba Esdras y hacía confesión, llorando y postrándose delante de la
casa de Dios, se juntó a él una muy grande multitud de Israel, hombres, mujeres y
niños; y lloraba el pueblo amargamente.
Esd 10:2 Entonces respondió Secanías hijo de Jehiel, de los hijos de Elam, y dijo a Esdras:
Nosotros hemos pecado contra nuestro Dios, pues tomamos mujeres extranjeras de los
pueblos de la tierra; mas a pesar de esto, aún hay esperanza para Israel.
Esd 10:3 Ahora, pues, hagamos pacto con nuestro Dios, que despediremos a todas las
mujeres y los nacidos de ellas, según el consejo de mi señor y de los que temen el
mandamiento de nuestro Dios; y hágase conforme a la ley.
Esd 10:4 Levántate, porque esta es tu obligación, y nosotros estaremos contigo; esfuérzate,
y pon mano a la obra.
Esd 10:5 Entonces se levantó Esdras y juramentó a los príncipes de los sacerdotes y de los
levitas, y a todo Israel, que harían conforme a esto; y ellos juraron.
Esd 10:6 Se levantó luego Esdras de delante de la casa de Dios, y se fue a la cámara de
Johanán hijo de Eliasib; e ido allá, no comió pan ni bebió agua, porque se
entristeció a causa del pecado de los del cautiverio.
Esd 10:7 E hicieron pregonar en Judá y en Jerusalén que todos los hijos del cautiverio se
reuniesen en Jerusalén;
Esd 10:8 y que el que no viniera dentro de tres días, conforme al acuerdo de los príncipes y
de los ancianos, perdiese toda su hacienda, y el tal fuese excluido de la congregación de
los del cautiverio.

Por fin un momento en el que un pueblo escucha como debe escuchar la Palabra del Señor

Neh 8:1 y se juntó todo el pueblo como un solo hombre en la plaza que está delante de la
puerta de las Aguas, y dijeron a Esdras el escriba que trajese el libro de la ley de Moisés,
la cual Jehová había dado a Israel.
Neh 8:2 Y el sacerdote Esdras trajo la ley delante de la congregación, así de hombres como
de mujeres y de todos los que podían entender, el primer día del mes séptimo.
Neh 8:3 Y leyó en el libro delante de la plaza que está delante de la puerta de las Aguas,
desde el alba hasta el mediodía, en presencia de hombres y mujeres y de todos los que
podían entender; y los oídos de todo el pueblo estaban atentos al libro de la
ley.
Neh 8:4 Y el escriba Esdras estaba sobre un púlpito de madera que habían hecho para ello,
y junto a él estaban Matatías, Sema, Anías, Urías, Hilcías y Maasías a su mano derecha;
y a su mano izquierda, Pedaías, Misael, Malquías, Hasum, Hasbadana, Zacarías y
Mesulam.
Neh 8:5 Abrió, pues, Esdras el libro a ojos de todo el pueblo, porque estaba más alto que
todo el pueblo; y cuando lo abrió, todo el pueblo estuvo atento.
Neh 8:6 Bendijo entonces Esdras a Jehová, Dios grande. Y todo el pueblo respondió:
¡Amén! ¡Amén! alzando sus manos; y se humillaron y adoraron a Jehová inclinados a
tierra.
Neh 8:7 Y los levitas Jesúa, Bani, Serebías, Jamín, Acub, Sabetai, Hodías, Maasías, Kelita,
Azarías, Jozabed, Hanán y Pelaía, hacían entender al pueblo la ley; y el pueblo estaba
atento en su lugar.
Neh 8:8 Y leían en el libro de la ley de Dios claramente, y ponían el sentido, de
modo que entendiesen la lectura.
Neh 8:9 Y Nehemías el gobernador, y el sacerdote Esdras, escriba, y los levitas que
hacían entender al pueblo, dijeron a todo el pueblo: Día santo es a Jehová nuestro
Dios; no os entristezcáis, ni lloréis; porque todo el pueblo lloraba oyendo las palabras
de la ley.
Neh 8:9 Y Nehemías el gobernador, y el sacerdote Esdras, escriba, y los levitas que
hacían entender al pueblo, dijeron a todo el pueblo: Día santo es a Jehová nuestro
Dios; no os entristezcáis, ni lloréis; porque todo el pueblo lloraba oyendo las
palabras de la ley.
Neh 8:10 Luego les dijo: Id, comed grosuras, y bebed vino dulce, y enviad porciones a los
que no tienen nada preparado; porque día santo es a nuestro Señor; no os entristezcáis,
porque el gozo de Jehová es vuestra fuerza.

Así es la restauración de un pueblo, cuando este responde al llamado, al arrepentimiento,


contritos por la Palabra del Señor, escuchan atentamente y se dejan convencer por la
verdad recibida y la entienden, y la creen en verdad entonces produce vida nueva.

La vida del ser humano se define en su posición con respecto a mensaje del Señor, si lo
escucha atentamente y lo entiendo y convencido lo retine, para no olvidarla nunca!
entonces se puede decir que ciertamente ha creído a Dios, y el fruto es la reconciliación y
restauración en todo con Dios, pero si la olvida y no la entiende sino que la pierde, el tal
quedara a manos de su propio mal y condenación eterna.

Los profetas nos dejan un legado impresionante del mismo punto, Dios hablando su
Palabra a un pueblo o un individuo, quien entiende se salva quien no atiende muere.

Esdras lo expreso en este salmo que se le atribuye a el

Sal 1:1 Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos,


Ni estuvo en camino de pecadores,
Ni en silla de escarnecedores se ha sentado;
Sal 1:2 Sino que en la ley de Jehová está su delicia,
Y en su ley medita de día y de noche.
Sal 1:3 Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas,
Que da su fruto en su tiempo,
Y su hoja no cae;
Y todo lo que hace, prosperará.

El salmo 119 igualmente atribuido a Esdras nos da un ejemplo de que debe significar la
Palabra de Dios como el todo en la vida de una nación y del individuo. Importancia que
determina la vida presente y futura, si atiende a la Palabra de Dios como la suficiente para
todo, lo que el hombre necesita en el presente y en el eterno futuro. Un entendimiento asi
solo podría terminar con el salmo 150 también atribuido a Esdras que con todo su corazón
eleva una gloriosa alabanza a Aquel que es la fuente de esa Palabra de luz y de Vida que nos
trae tanta dicha de volver a Él.

Sal 150:1
¡Aleluya! Alabad a Dios en su santuario;
Alabadle en su majestuoso firmamento.
Sal 150:2 Alabadle por sus proezas;
Alabadle conforme a la muchedumbre de su grandeza.
Sal 150:3 Alabadle a son de bocina;
Alabadle con salterio y arpa.
Sal 150:4 Alabadle con pandero y danza;
Alabadle con cuerdas y flautas.
Sal 150:5 Alabadle con címbalos resonantes;
Alabadle con címbalos de júbilo.
Sal 150:6 Todo lo que respira alabe a JAH.
Aleluya.

Gracias Dios mío por tu Palabra, la palabra viva, la vida del Verbo de vida, tu hijo amado,
la Palabra que es toda verdad, pues su voz hace que los muertos la escuchen y resuciten,
Aleluya! Que grande eres Señor no hay palabras que puedan expresar tu grandeza de amor
y verdad, que tristeza que tan poco la atendamos, por lo cual todos nuestros males nos
vienen por no escuchar y recibir tu mensaje como el tesoro escondido y la perla de gran
precio, el darlo todo, el entregarlo todo, es nada en comparación con tu luz y tu verdad.
Cuando Tu nos hablas y te escuchamos, atentamente con todo nuestro corazón para
entender y comprender tu verdad y creerla seremos verdaderamente libres del pecado y de
la muerte presente y eterna.

Salomon lo expresaría en proverbios y Eclesiastes de manera muy clara

Pro 1:1 Los proverbios de Salomón, hijo de David, rey de Israel.


Pro 1:2 Para entender sabiduría y doctrina,
Para conocer razones prudentes,
Pro 1:3 Para recibir el consejo de prudencia,
Justicia, juicio y equidad;
Pro 1:4 Para dar sagacidad a los simples,
Y a los jóvenes inteligencia y cordura.
Pro 1:5 Oirá el sabio, y aumentará el saber,
Y el entendido adquirirá consejo,
Pro 1:6 Para entender proverbio y declaración,
Palabras de sabios, y sus dichos profundos.
Pro 1:7 El principio de la sabiduría es el temor de Jehová;
Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza.
Amonestaciones de la Sabiduría

Ecl 12:13 El fin de todo el discurso oído es este: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos;
porque esto es el todo del hombre.
Ecl 12:14 Porque Dios traerá toda obra a juicio, juntamente con toda cosa encubierta, sea
buena o sea mala.

Los profetas escogidos, preparados y enviados por el Señor con el fin de que hablaran el
mensaje de Dios a su pueblo con las señales que Dios les había dado. Dios mismo los
prepara para que recibieran su Palabra y la comunicaran con fidelidad sin añadirle ni
quitar nada.

Isa 1:1 Visión de Isaías hijo de Amoz, la cual vio acerca de Judá y Jerusalén en días de
Uzías, Jotam, Acaz y Ezequías, reyes de Judá.
Isa 1:2 Oíd, cielos, y escucha tú, tierra; porque habla Jehová: Crié hijos, y los
engrandecí, y ellos se rebelaron contra mí.
Isa 1:3 El buey conoce a su dueño, y el asno el pesebre de su señor; Israel no entiende, mi
pueblo no tiene conocimiento.

Jer 1:1 Las palabras de Jeremías hijo de Hilcías, de los sacerdotes que estuvieron en
Anatot, en tierra de Benjamín.
Jer 1:2 Palabra de Jehová que le vino en los días de Josías hijo de Amón, rey de Judá,
en el año decimotercero de su reinado.
Jer 1:3 Le vino también en días de Joacim hijo de Josías, rey de Judá, hasta el fin del año
undécimo de Sedequías hijo de Josías, rey de Judá, hasta la cautividad de Jerusalén en
el mes quinto.
Jer 1:4 Vino, pues, palabra de Jehová a mí, diciendo:
Jer 1:5 Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué, te di
por profeta a las naciones.
Jer 1:6 Y yo dije: ¡Ah! ¡ah, Señor Jehová! He aquí, no sé hablar, porque soy niño.
Jer 1:7 Y me dijo Jehová: No digas: Soy un niño; porque a todo lo que te envíe irás tú, y
dirás todo lo que te mande.
Jer 1:8 No temas delante de ellos, porque contigo estoy para librarte, dice Jehová.
Jer 1:9 Y extendió Jehová su mano y tocó mi boca, y me dijo Jehová: He aquí he puesto
mis palabras en tu boca.

Eze 2:1 Me dijo: Hijo de hombre, ponte sobre tus pies, y hablaré contigo.
Eze 2:2 Y luego que me habló, entró el Espíritu en mí y me afirmó sobre mis pies, y
oí al que me hablaba.
Eze 2:3 Y me dijo: Hijo de hombre, yo te envío a los hijos de Israel, a gentes rebeldes que
se rebelaron contra mí; ellos y sus padres se han rebelado contra mí hasta este mismo
día.
Eze 2:4 Yo, pues, te envío a hijos de duro rostro y de empedernido corazón; y les dirás: Así
ha dicho Jehová el Señor.
Eze 2:5 Acaso ellos escuchen; pero si no escucharen, porque son una casa rebelde, siempre
conocerán que hubo profeta entre ellos.
Eze 2:6 Y tú, hijo de hombre, no les temas, ni tengas miedo de sus palabras, aunque te
hallas entre zarzas y espinos, y moras con escorpiones; no tengas miedo de sus
palabras, ni temas delante de ellos, porque son casa rebelde.
Eze 2:7 Les hablarás, pues, mis palabras, escuchen o dejen de escuchar; porque son
muy rebeldes.
Eze 2:8 Mas tú, hijo de hombre, oye lo que yo te hablo; no seas rebelde como la casa
rebelde; abre tu boca, y come lo que yo te doy.
Eze 2:9 Y miré, y he aquí una mano extendida hacia mí, y en ella había un rollo de libro.
Eze 2:10 Y lo extendió delante de mí, y estaba escrito por delante y por detrás; y había
escritas en él endechas y lamentaciones y ayes.

Eze 3:1 Me dijo: Hijo de hombre, come lo que hallas; come este rollo, y vé y habla a la
casa de Israel.
Eze 3:2 Y abrí mi boca, y me hizo comer aquel rollo.
Eze 3:3 Y me dijo: Hijo de hombre, alimenta tu vientre, y llena tus entrañas de este rollo
que yo te doy. Y lo comí, y fue en mi boca dulce como miel.
Eze 3:4 Luego me dijo: Hijo de hombre, vé y entra a la casa de Israel, y habla a ellos con
mis palabras. Eze 3:10 Y me dijo: Hijo de hombre, toma en tu corazón todas mis
palabras que yo te hablaré, y oye con tus oídos.

Dan 9:19 Oye, Señor; oh Señor, perdona; presta oído, Señor, y hazlo; no tardes, por amor
de ti mismo, Dios mío; porque tu nombre es invocado sobre tu ciudad y sobre tu
pueblo.
Dan 9:20 Aún estaba hablando y orando, y confesando mi pecado y el pecado de mi
pueblo Israel, y derramaba mi ruego delante de Jehová mi Dios por el monte santo de
mi Dios;
Dan 9:21 aún estaba hablando en oración, cuando el varón Gabriel, a quien había visto en
la visión al principio, volando con presteza, vino a mí como a la hora del sacrificio de la
tarde.
Dan 9:22 Y me hizo entender, y habló conmigo, diciendo: Daniel, ahora he salido para
darte sabiduría y entendimiento.
Dan 9:23 Al principio de tus ruegos fue dada la orden, y yo he venido para enseñártela,
porque tú eres muy amado. Entiende, pues, la orden, y entiende la visión.

Dan 10:1 En el año tercero de Ciro rey de Persia fue revelada palabra a Daniel, llamado
Beltsasar; y la palabra era verdadera, y el conflicto grande; pero él comprendió la
palabra, y tuvo inteligencia en la visión.

Ose 1:1 Palabra de Jehová que vino a Oseas hijo de Beeri, en días de Uzías, Jotam,
Acaz y Ezequías, reyes de Judá, y en días de Jeroboam hijo de Joás, rey de Israel.
Ose 1:2 El principio de la palabra de Jehová por medio de Oseas. Dijo Jehová a Oseas: Vé,
tómate una mujer fornicaria, e hijos de fornicación; porque la tierra fornica
apartándose de Jehová.
Ose 1:3 Fue, pues, y tomó a Gomer hija de Diblaim, la cual concibió y le dio a luz un hijo.
Ose 1:4 Y le dijo Jehová: Ponle por nombre Jezreel; porque de aquí a poco yo castigaré a la
casa de Jehú por causa de la sangre de Jezreel, y haré cesar el reino de la casa de Israel.
Ose 1:5 Y en aquel día quebraré yo el arco de Israel en el valle de Jezreel.

Joe 1:1 Palabra de Jehová que vino a Joel, hijo de Petuel.


Joe 1:2 Oíd esto, ancianos, y escuchad, todos los moradores de la tierra. ¿Ha acontecido
esto en vuestros días, o en los días de vuestros padres?
Joe 1:3 De esto contaréis a vuestros hijos, y vuestros hijos a sus hijos, y sus hijos a la otra
generación.
Joe 1:4 Lo que quedó de la oruga comió el saltón, y lo que quedó del saltón comió el
revoltón; y la langosta comió lo que del revoltón había quedado.
Joe 1:5 Despertad, borrachos, y llorad; gemid, todos los que bebéis vino, a causa del
mosto, porque os es quitado de vuestra boca.

Amó 1:1 Las palabras de Amós, que fue uno de los pastores de Tecoa, que profetizó acerca
de Israel en días de Uzías rey de Judá y en días de Jeroboam hijo de Joás, rey de Israel,
dos años antes del terremoto.
Amó 1:2 Dijo: Jehová rugirá desde Sion, y dará su voz desde Jerusalén, y los campos de los
pastores se enlutarán, y se secará la cumbre del Carmelo.
Amó 1:3 Así ha dicho Jehová: Por tres pecados de Damasco, y por el cuarto, no revocaré su
castigo; porque trillaron a Galaad con trillos de hierro.

Abd 1:1 Visión de Abdías. Jehová el Señor ha dicho así en cuanto a Edom:
Hemos oído el pregón de Jehová, y mensajero ha sido enviado a las naciones.
Levantaos, y levantémonos contra este pueblo en batalla.
Abd 1:2 He aquí, pequeño te he hecho entre las naciones; estás abatido en gran manera.
Abd 1:3 La soberbia de tu corazón te ha engañado, tú que moras en las hendiduras
de las peñas, en tu altísima morada; que dices en tu corazón: ¿Quién me derribará a
tierra?
Abd 1:4 Si te remontares como águila, y aunque entre las estrellas pusieres tu nido, de ahí
te derribaré, dice Jehová.

Jon 1:1 Vino palabra de Jehová a Jonás hijo de Amitai, diciendo:


Jon 1:2 Levántate y vé a Nínive, aquella gran ciudad, y pregona contra ella; porque ha
subido su maldad delante de mí.
Jon 1:3 Y Jonás se levantó para huir de la presencia de Jehová a Tarsis, y descendió a
Jope, y halló una nave que partía para Tarsis; y pagando su pasaje, entró en ella para
irse con ellos a Tarsis, lejos de la presencia de Jehová.

Miq 1:1 Palabra de Jehová que vino a Miqueas de Moreset en días de Jotam, Acaz y
Ezequías, reyes de Judá; lo que vio sobre Samaria y Jerusalén.
Miq 1:2 Oíd, pueblos todos; está atenta, tierra, y cuanto hay en ti; y Jehová el Señor, el
Señor desde su santo templo, sea testigo contra vosotros.
Miq 1:3 Porque he aquí, Jehová sale de su lugar, y descenderá y hollará las alturas de la
tierra.

Nah 1:1 Profecía sobre Nínive. Libro de la visión de Nahum de Elcos.


Nah 1:2 Jehová es Dios celoso y vengador; Jehová es vengador y lleno de indignación; se
venga de sus adversarios, y guarda enojo para sus enemigos.
Nah 1:3 Jehová es tardo para la ira y grande en poder, y no tendrá por inocente al
culpable. Jehová marcha en la tempestad y el torbellino, y las nubes son el polvo de sus
pies.

Hab 2:1 Sobre mi guarda estaré, y sobre la fortaleza afirmaré el pie, y velaré para ver lo
que se me dirá, y qué he de responder tocante a mi queja.
Hab 2:2 Y Jehová me respondió, y dijo: Escribe la visión, y declárala en tablas, para que
corra el que leyere en ella.
Hab 2:3 Aunque la visión tardará aún por un tiempo, mas se apresura hacia el fin, y no
mentirá; aunque tardare, espéralo, porque sin duda vendrá, no tardará.
Hab 2:4 He aquí que aquel cuya alma no es recta, se enorgullece; mas el justo por su fe
vivirá.

Sof 1:1 Palabra de Jehová que vino a Sofonías hijo de Cusi, hijo de Gedalías, hijo de
Amarías, hijo de Ezequías, en días de Josías hijo de Amón, rey de Judá.
Sof 1:2 Destruiré por completo todas las cosas de sobre la faz de la tierra, dice Jehová.
Sof 1:3 Destruiré los hombres y las bestias; destruiré las aves del cielo y los peces del mar,
y cortaré a los impíos; y raeré a los hombres de sobre la faz de la tierra, dice Jehová.

Hag 1:1 En el año segundo del rey Darío, en el mes sexto, en el primer día del mes, vino
palabra de Jehová por medio del profeta Hageo a Zorobabel hijo de Salatiel,
gobernador de Judá, y a Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote, diciendo:
Hag 1:2 Así ha hablado Jehová de los ejércitos, diciendo: Este pueblo dice: No ha llegado
aún el tiempo, el tiempo de que la casa de Jehová sea reedificada.
Hag 1:3 Entonces vino palabra de Jehová por medio del profeta Hageo, diciendo:
Hag 1:4 ¿Es para vosotros tiempo, para vosotros, de habitar en vuestras casas artesonadas,
y esta casa está desierta?
Hag 1:5 Pues así ha dicho Jehová de los ejércitos: Meditad bien sobre vuestros
caminos.

Zac 1:1 En el octavo mes del año segundo de Darío, vino palabra de Jehová al profeta
Zacarías hijo de Berequías, hijo de Iddo, diciendo:
Zac 1:2 Se enojó Jehová en gran manera contra vuestros padres.
Zac 1:3 Diles, pues: Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Volveos a mí, dice Jehová de los
ejércitos, y yo me volveré a vosotros, ha dicho Jehová de los ejércitos.
Zac 1:4 No seáis como vuestros padres, a los cuales clamaron los primeros profetas,
diciendo: Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Volveos ahora de vuestros malos
caminos y de vuestras malas obras; y no atendieron, ni me escucharon, dice Jehová.

Mal 1:1 Profecía de la palabra de Jehová contra Israel, por medio de Malaquías.
Mal 1:2 Yo os he amado, dice Jehová; y dijisteis: ¿En qué nos amaste? ¿No era Esaú
hermano de Jacob? dice Jehová. Y amé a Jacob,
Mal 1:3 y a Esaú aborrecí, y convertí sus montes en desolación, y abandoné su heredad
para los chacales del desierto.

Y así con las últimas palabras de Malaquías termina el antiguo testamento

Mal 4:1 Porque he aquí, viene el día ardiente como un horno, y todos los soberbios y
todos los que hacen maldad serán estopa; aquel día que vendrá los abrasará, ha dicho
Jehová de los ejércitos, y no les dejará ni raíz ni rama.
Mal 4:2 Mas a vosotros los que teméis mi nombre, nacerá el Sol de justicia, y en sus alas
traerá salvación; y saldréis, y saltaréis como becerros de la manada.
Mal 4:3 Hollaréis a los malos, los cuales serán ceniza bajo las plantas de vuestros pies, en
el día en que yo actúe, ha dicho Jehová de los ejércitos.
Mal 4:4 Acordaos de la ley de Moisés mi siervo, al cual encargué en Horeb
ordenanzas y leyes para todo Israel.
Mal 4:5 He aquí, yo os envío el profeta Elías, antes que venga el día de Jehová, grande y
terrible.
Mal 4:6 El hará volver el corazón de los padres hacia los hijos, y el corazón de los hijos
hacia los padres, no sea que yo venga y hiera la tierra con maldición.

El nuevo Testamento irrumpe continuando Dios hablando mas y mas pero lo hace
personalmente por el Hijo.

Heb 1:1 Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro
tiempo a los padres por los profetas,
Heb 1:2 en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó
heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo;
Heb 1:3 el cual, siendo el resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia, y
quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la
purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la
Majestad en las alturas,
Heb 1:4 hecho tanto superior a los ángeles, cuanto heredó más excelente nombre que ellos.

Hebreos enfatiza nuevamente una larga historia donde Dios habla y advierte a un pueblo
de escucharle y atenderle, con más responsabilidad que nunca

Heb 2:1 Por tanto, es necesario que con más diligencia atendamos a las cosas que
hemos oído, no sea que nos deslicemos.
Heb 2:2 Porque si la palabra dicha por medio de los ángeles fue firme, y toda
transgresión y desobediencia recibió justa retribución,
Heb 2:3 ¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual,
habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que
oyeron,
Heb 2:4 testificando Dios juntamente con ellos, con señales y prodigios y diversos
milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad.

Hebreo es clave en el nuevo testamento porque hace un puente perfecto entre el antiguo
pacto y el nuevo, anuncia que el antiguo pacto era sombra del nuevo, que en el nuevo pacto
se realiza todo aquello que se anuncio como sombra y figura del nuevo.

Heb 3:5 Y Moisés a la verdad fue fiel en toda la casa de Dios, como siervo, para testimonio
de lo que se iba a decir;
Heb 3:6 pero Cristo como hijo sobre su casa, la cual casa somos nosotros, si retenemos
firme hasta el fin la confianza y el gloriarnos en la esperanza.
Heb 3:7 Por lo cual, como dice el Espíritu Santo:
Si oyereis hoy su voz,
Heb 3:8 No endurezcáis vuestros corazones,
Como en la provocación, en el día de la tentación en el desierto,
Heb 3:9 Donde me tentaron vuestros padres; me probaron,
Y vieron mis obras cuarenta años.
Heb 3:10 A causa de lo cual me disgusté contra esa generación,
Y dije: Siempre andan vagando en su corazón,
Y no han conocido mis caminos.
Heb 3:11 Por tanto, juré en mi ira:
No entrarán en mi reposo.
Heb 3:12 Mirad, hermanos, que no haya en ninguno de vosotros corazón malo de
incredulidad para apartarse del Dios vivo;
Heb 3:13 antes exhortaos los unos a los otros cada día, entre tanto que se dice: Hoy; para
que ninguno de vosotros se endurezca por el engaño del pecado.
Heb 3:14 Porque somos hechos participantes de Cristo, con tal que retengamos firme
hasta el fin nuestra confianza del principio,
Heb 3:15 entre tanto que se dice:
Si oyereis hoy su voz,
No endurezcáis vuestros corazones, como en la provocación.
Heb 3:16 ¿Quiénes fueron los que, habiendo oído, le provocaron? ¿No fueron todos los
que salieron de Egipto por mano de Moisés?
Heb 3:17 ¿Y con quiénes estuvo él disgustado cuarenta años? ¿No fue con los que pecaron,
cuyos cuerpos cayeron en el desierto?
Heb 3:18 ¿Y a quiénes juró que no entrarían en su reposo, sino a aquellos que
desobedecieron?
Heb 3:19 Y vemos que no pudieron entrar a causa de incredulidad.

Heb 4:1 Temamos, pues, no sea que permaneciendo aún la promesa de entrar en su
reposo, alguno de vosotros parezca no haberlo alcanzado.
Heb 4:2 Porque también a nosotros se nos ha anunciado la buena nueva como
a ellos; pero no les aprovechó el oír la palabra, por no ir acompañada de fe en los
que la oyeron.

Si alguien escucha la Palabra de Dios y no responde en su corazón con una afirmación de


que lo que Dios dice es Verdad suprema y absoluta, no espere que se cumpla lo de “que
la fe es por el oír y el oír por la Palabra de Dios”, cuando Dios habla solo hay una
manera en que él se agrada de aquel que le escucha y es recibirla con la convicción y
certeza de que es Verdad de Dios, que es la verdad y que él no miente, ni en él hay
sobre de variación.

Heb 4:3 Pero los que hemos creído entramos en el reposo, de la manera que dijo:
Por tanto, juré en mi ira,
No entrarán en mi reposo;
aunque las obras suyas estaban acabadas desde la fundación del mundo.

Heb 4:11 Procuremos, pues, entrar en aquel reposo, para que ninguno caiga en semejante
ejemplo de desobediencia.
Heb 4:12 Porque la palabra de Dios es

viva y eficaz,
y más cortante que toda espada de dos filos;
y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos,
y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.

Heb 4:13 Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las
cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.

Heb 10:28 El que viola la ley de Moisés, por el testimonio de dos o de tres
testigos muere irremisiblemente.
Heb 10:29 ¿Cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el que pisoteare al Hijo de Dios, y
tuviere por inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado, e hiciere afrenta al
Espíritu de gracia?
Heb 10:30 Pues conocemos al que dijo: Mía es la venganza, yo daré el pago, dice el Señor.
Y otra vez: El Señor juzgará a su pueblo.
Heb 10:31 ¡Horrenda cosa es caer en manos del Dios vivo!

Heb 12:25 Mirad que no desechéis al que habla. Porque si no escaparon aquellos que
desecharon al que los amonestaba en la tierra, mucho menos nosotros, si
desecháremos al que amonesta desde los cielos.
Heb 12:26 La voz del cual conmovió entonces la tierra, pero ahora ha
prometido, diciendo: Aún una vez, y conmoveré no solamente la tierra,
sino también el cielo.

El Verbo

Jua 1:1 En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era
Dios.
Jua 1:2 Este era en el principio con Dios.
Jua 1:3 Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue
hecho.
Jua 1:4 En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres.
Jua 1:5 La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella.

Jua 5:24 De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me
envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida.
Jua 5:25 De cierto, de cierto os digo: Viene la hora, y ahora es, cuando los muertos oirán la
voz del Hijo de Dios; y los que la oyeren vivirán.

Jua 5:37 También el Padre que me envió ha dado testimonio de mí. Nunca habéis oído su
voz, ni habéis visto su aspecto,
Jua 5:38 ni tenéis su palabra morando en vosotros; porque a quien él envió,
vosotros no creéis.
Jua 5:39 Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas
tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí;
Jua 5:40 y no queréis venir a mí para que tengáis vida.
Jua 5:41 Gloria de los hombres no recibo.

Jua 5:45 No penséis que yo voy a acusaros delante del Padre; hay quien os acusa, Moisés,
en quien tenéis vuestra esperanza.
Jua 5:46 Porque si creyeseis a Moisés, me creeríais a mí, porque de mí escribió él.
Jua 5:47 Pero si no creéis a sus escritos, ¿cómo creeréis a mis palabras?
Jua 6:34 Le dijeron: Señor, danos siempre este pan.
Jua 6:35 Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre;
y el que en mí cree, no tendrá sed jamás.
Jua 6:36 Mas os he dicho, que aunque me habéis visto, no creéis.
Jua 6:37 Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; y al que a mí viene, no le echo fuera.
Jua 6:38 Porque he descendido del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad del
que me envió.

Jua 8:44 Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis
hacer. El ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad,
porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es
mentiroso, y padre de mentira.
Jua 8:45 Y a mí, porque digo la verdad, no me creéis.

Jua 10:27 Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen,


Jua 10:28 y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi
mano.
Jua 10:29 Mi Padre que me las dio, es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la
mano de mi Padre.
Jua 10:30 Yo y el Padre uno somos.

Jua 12:46 Yo, la luz, he venido al mundo, para que todo aquel que cree en mí no
permanezca en tinieblas.
Jua 12:47 Al que oye mis palabras, y no las guarda, yo no le juzgo; porque no he venido a
juzgar al mundo, sino a salvar al mundo.
Jua 12:48 El que me rechaza, y no recibe mis palabras, tiene quien le juzgue; la palabra
que he hablado, ella le juzgará en el día postrero.
Jua 12:49 Porque yo no he hablado por mi propia cuenta; el Padre que me envió, él me dio
mandamiento de lo que he de decir, y de lo que he de hablar.
Jua 12:50 Y sé que su mandamiento es vida eterna. Así pues, lo que yo hablo, lo hablo
como el Padre me lo ha dicho.

Ejemplos de los que si lo entendían

Mat 8:5 Entrando Jesús en Capernaum, vino a él un centurión, rogándole,


Mat 8:6 y diciendo: Señor, mi criado está postrado en casa, paralítico, gravemente
atormentado.
Mat 8:7 Y Jesús le dijo: Yo iré y le sanaré.

Mat 8:8 Respondió el centurión y dijo: Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo;
solamente dí la palabra, y mi criado sanará.
Mat 8:9 Porque también yo soy hombre bajo autoridad, y tengo bajo mis órdenes
soldados; y digo a éste: Vé, y va; y al otro: Ven, y viene; y a mi siervo: Haz esto, y lo
hace.
Mat 8:10 Al oírlo Jesús, se maravilló, y dijo a los que le seguían: De cierto os digo, que ni
aun en Israel he hallado tanta fe.
Mat 8:11 Y os digo que vendrán muchos del oriente y del occidente, y se sentarán con
Abraham e Isaac y Jacob en el reino de los cielos;
Mat 8:12 mas los hijos del reino serán echados a las tinieblas de afuera; allí será el lloro y
el crujir de dientes.
Mat 8:13 Entonces Jesús dijo al centurión: Vé, y como creíste, te sea hecho. Y su criado fue
sanado en aquella misma hora.

Mat 7:24 Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a
un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca.
Mat 7:25 Descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y golpearon contra aquella
casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la roca.
Mat 7:26 Pero cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le compararé a un
hombre insensato, que edificó su casa sobre la arena;
Mat 7:27 y descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y dieron con ímpetu contra
aquella casa; y cayó, y fue grande su ruina.
Mat 7:28 Y cuando terminó Jesús estas palabras, la gente se admiraba de su doctrina;
Mat 7:29 porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas.

La parábola del sembrador

Mat 13:1 Aquel día salió Jesús de la casa y se sentó junto al mar.
Mat 13:2 Y se le juntó mucha gente; y entrando él en la barca, se sentó, y toda la gente
estaba en la playa.
Mat 13:3 Y les habló muchas cosas por parábolas, diciendo: He aquí, el sembrador salió a
sembrar.
Mat 13:4 Y mientras sembraba, parte de la semilla cayó junto al camino; y vinieron las
aves y la comieron.
Mat 13:5 Parte cayó en pedregales, donde no había mucha tierra; y brotó pronto, porque
no tenía profundidad de tierra;
Mat 13:6 pero salido el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se secó.
Mat 13:7 Y parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron, y la ahogaron.
Mat 13:8 Pero parte cayó en buena tierra, y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a
treinta por uno.
Mat 13:9 El que tiene oídos para oír, oiga.
Mat 13:10 Entonces, acercándose los discípulos, le dijeron: ¿Por qué les hablas por
parábolas?
Mat 13:11 El respondiendo, les dijo: Porque a vosotros os es dado saber los misterios del
reino de los cielos; mas a ellos no les es dado.
Mat 13:12 Porque a cualquiera que tiene, se le dará, y tendrá más; pero al que no tiene,
aun lo que tiene le será quitado.
Mat 13:13 Por eso les hablo por parábolas: porque viendo no ven, y oyendo no oyen, ni
entienden.
Mat 13:14 De manera que se cumple en ellos la profecía de Isaías, que dijo:
De oído oiréis, y no entenderéis;
Y viendo veréis, y no percibiréis.
Mat 13:15 Porque el corazón de este pueblo se ha engrosado,
Y con los oídos oyen pesadamente,
Y han cerrado sus ojos;
Para que no vean con los ojos,
Y oigan con los oídos,
Y con el corazón entiendan,
Y se conviertan,
Y yo los sane.

Mat 13:16 Pero bienaventurados vuestros ojos, porque ven; y vuestros oídos, porque oyen.
Mat 13:17 Porque de cierto os digo, que muchos profetas y justos desearon ver lo que veis,
y no lo vieron; y oír lo que oís, y no lo oyeron.
Mat 13:18 Oíd, pues, vosotros la parábola del sembrador:
Mat 13:19 Cuando alguno oye la palabra del reino y no la entiende, viene el malo,
y arrebata lo que fue sembrado en su corazón. Este es el que fue sembrado junto al
camino.
Mat 13:20 Y el que fue sembrado en pedregales, éste es el que oye la palabra, y al
momento la recibe con gozo;
Mat 13:21 pero no tiene raíz en sí, sino que es de corta duración, pues al venir la aflicción o
la persecución por causa de la palabra, luego tropieza.
Mat 13:22 El que fue sembrado entre espinos, éste es el que oye la palabra, pero el afán de
este siglo y el engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se hace infructuosa.
Mat 13:23 Mas el que fue sembrado en buena tierra, éste es el que oye y entiende la
palabra, y da fruto; y produce a ciento, a sesenta, y a treinta por uno.

Lo verdaderamente precioso

Mat 13:43 Entonces los justos resplandecerán como el sol en el reino de su Padre. El que
tiene oídos para oír, oiga.
Mat 13:44 Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo,
el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por ello va y vende todo lo que
tiene, y compra aquel campo.
Mat 13:45 También el reino de los cielos es semejante a un mercader que busca buenas
perlas,
Mat 13:46 que habiendo hallado una perla preciosa, fue y vendió todo lo que tenía, y la
compró.

Nota: Que es la perla preciosa y el tesoro escondido que vale el venderlo todo para
adquirirlos?

El mensaje en el nuevo testamento es una persona, la Palabra revelada desde la eternidad


es una preciosa y maravillosa persona, es una Palabra Viva Jesús el Cristo. Su mensaje y
obra integran la manifestación del evangelio, las buenas nuevas de Dios para el hombre
caído y perdido.
Jua 14:6 Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino
por mí.

Rom 1:17 Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe,
como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá.
Hab 2:4 He aquí que aquel cuya alma no es recta, se enorgullece; mas el justo por su fe
vivirá.
Gál 3:11 Y que por la ley ninguno se justifica para con Dios, es evidente, porque: El justo
por la fe vivirá;

Rom 4:1 ¿Qué, pues, diremos que halló Abraham, nuestro padre según la carne?
Rom 4:2 Porque si Abraham fue justificado por las obras, tiene de qué gloriarse, pero no
para con Dios.
Rom 4:3 Porque ¿qué dice la Escritura? Creyó Abraham a Dios, y le fue
contado por justicia.
Rom 4:4 Pero al que obra, no se le cuenta el salario como gracia, sino como deuda;
Rom 4:5 mas al que no obra, sino cree en aquel que justifica al impío, su fe le es contada
por justicia.

Encontramos que en este punto se conecta históricamente aquello que comenzó con
Abraham y se cumplió en Cristo.

La revelación del misterio escondido desde tiempos eternos

Rom 16:25 Y al que puede confirmaros según mi evangelio y la predicación de Jesucristo,


según la revelación del misterio que se ha mantenido oculto desde tiempos
eternos,
Rom 16:26 pero que ha sido manifestado ahora, y que por las Escrituras de los profetas,
según el mandamiento del Dios eterno, se ha dado a conocer a todas las gentes para
que obedezcan a la fe,
Rom 16:27 al único y sabio Dios, sea gloria mediante Jesucristo para siempre. Amén.

Col 1:24 Ahora me gozo en lo que padezco por vosotros, y cumplo en mi carne lo que falta
de las aflicciones de Cristo por su cuerpo, que es la iglesia;
Col 1:25 de la cual fui hecho ministro, según la administración de Dios que me fue dada
para con vosotros, para que anuncie cumplidamente la palabra de Dios,
Col 1:26 el misterio que había estado oculto desde los siglos y edades, pero que
ahora ha sido manifestado a sus santos,
Col 1:27 a quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas de la gloria de este misterio entre
los gentiles; que es Cristo en vosotros, la esperanza de gloria,
Col 1:28 a quien anunciamos, amonestando a todo hombre, y enseñando a todo hombre en
toda sabiduría, a fin de presentar perfecto en Cristo Jesús a todo hombre;
Col 1:29 para lo cual también trabajo, luchando según la potencia de él, la cual actúa
poderosamente en mí.

Rom 10:16 Mas no todos obedecieron al evangelio; pues Isaías dice: Señor, ¿quién ha
creído a nuestro anuncio?
Rom 10:17 Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios.
Rom 10:18 Pero digo: ¿No han oído? Antes bien,
Por toda la tierra ha salido la voz de ellos,
Y hasta los fines de la tierra sus palabras.

1Co 1:4 Gracias doy a mi Dios siempre por vosotros, por la gracia de Dios que os fue dada
en Cristo Jesús;
1Co 1:5 porque en todas las cosas fuisteis enriquecidos en él, en toda palabra y en toda
ciencia;
1Co 1:6 así como el testimonio acerca de Cristo ha sido confirmado en
vosotros,
1Co 1:7 de tal manera que nada os falta en ningún don, esperando la manifestación de
nuestro Señor Jesucristo;
1Co 1:8 el cual también os confirmará hasta el fin, para que seáis irreprensibles en el día
de nuestro Señor Jesucristo.
1Co 1:9 Fiel es Dios, por el cual fuisteis llamados a la comunión con su Hijo Jesucristo
nuestro Señor.

Efe 1:13 En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de


vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la
promesa,
Efe 1:14 que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida,
para alabanza de su gloria.

Flp 2:16 asidos de la palabra de vida, para que en el día de Cristo yo pueda gloriarme
de que no he corrido en vano, ni en vano he trabajado.

1Ts 2:13 Por lo cual también nosotros sin cesar damos gracias a Dios, de que cuando
recibisteis la palabra de Dios que oísteis de nosotros, la recibisteis no como palabra de
hombres, sino según es en verdad, la palabra de Dios, la cual actúa en vosotros
los creyentes.

Stg 1:21 Por lo cual, desechando toda inmundicia y abundancia de malicia, recibid con
mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar vuestras almas.
Stg 1:22 Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos
a vosotros mismos.
Stg 1:23 Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es
semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural.
Stg 1:24 Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era.
Stg 1:25 Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y
persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será
bienaventurado en lo que hace.

1Pe 1:22 Habiendo purificado vuestras almas por la obediencia a la verdad, mediante el
Espíritu, para el amor fraternal no fingido, amaos unos a otros entrañablemente, de
corazón puro;
1Pe 1:23 siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la
palabra de Dios que vive y permanece para siempre.
1Pe 1:24 Porque:
Toda carne es como hierba,
Y toda la gloria del hombre como flor de la hierba.
La hierba se seca, y la flor se cae;
1Pe 1:25 Mas la palabra del Señor permanece para siempre.
Y esta es la palabra que por el evangelio os ha sido anunciada.

1Pe 2:1 Desechando, pues, toda malicia, todo engaño, hipocresía, envidias, y todas las
detracciones,
1Pe 2:2 desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por
ella crezcáis para salvación,
1Pe 2:3 si es que habéis gustado la benignidad del Señor.

1Pe 2:7 Para vosotros, pues, los que creéis, él es precioso; (notar con el tesoro escondido
y la perla preciosa) pero para los que no creen,
La piedra que los edificadores desecharon, Ha venido a ser la cabeza del ángulo;
1Pe 2:8 y:
Piedra de tropiezo, y roca que hace caer, porque tropiezan en la palabra, siendo
desobedientes; a lo cual fueron también destinados.

1Jn 1:1 Lo que era desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros
ojos, lo que hemos contemplado, y palparon nuestras manos tocante al Verbo
de vida
1Jn 1:2 (porque la vida fue manifestada, y la hemos visto, y testificamos, y os anunciamos
la vida eterna, la cual estaba con el Padre, y se nos manifestó);
1Jn 1:3 lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos, para que también vosotros tengáis
comunión con nosotros; y nuestra comunión verdaderamente es con el Padre, y con su
Hijo Jesucristo.
1Jn 1:4 Estas cosas os escribimos, para que vuestro gozo sea cumplido.
1Jn 1:5 Este es el mensaje que hemos oído de él, y os anunciamos: Dios es luz, y no hay
ningunas tinieblas en él.
1Jn 1:6 Si decimos que tenemos comunión con él, y andamos en tinieblas, mentimos, y no
practicamos la verdad;
1Jn 1:7 pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la
sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado.

Apo 22:6 Y me dijo: Estas palabras son fieles y verdaderas. Y el Señor, el Dios de los
espíritus de los profetas, ha enviado su ángel, para mostrar a sus siervos las cosas que
deben suceder pronto.
Apo 22:7 ¡He aquí, vengo pronto! Bienaventurado el que guarda las palabras de la
profecía de este libro.

También podría gustarte