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ca Perec uratatc rc ediciones en, Peete Pie artery Poe int nents cry preeerien forenner: Universidad de Varvovi. Ree) Eran Pict eer renee ererney Mao Parente rene eee Pratesriciee cera tc ireoriy Boguslaw Galeski SOCIOLOGIA DEL CAMPESINADO Prélogo a la edicién castellana de Eduardo Sevilla ediciones peninsula ® 1a edicién original en polaco fue publiada bajo el titulo de ‘Seejlogte wal: pojecia podstawove, for Panstwowe Wydawaieto Naukowe de Varsovie @ Panstvowe Wydawnictwo Naukowe Traduesién de 1s versién ingles, autoriznda por el autor, de Has Pleguer CCubierta de Loni Geest y Tone Hoverstad Primera ediciin: mayo de 1977 Propleded de esta ediclan (nciayendo le treduccion y el disenio ea cubiera): Ballons 62 s[ay Provensa 218, Barcziona8, Inmpreso en Rigss, Hstruc 5, Bareslona Deposito Legal B, 22330-1977, ISBN: 8429713126, Prélogo a la edicién castellana 1a ausencia de debate intelectual que ha presidido la escena universitaria espafiola durante Jos wiltimos cua renta afios ha producido unos efectos que si son percep. 1ibles en cualquier campo del saber 1o son mucho més en la parcela del mismo que analiza el campo desde ‘una perspectiva socioldgica, llimesele socfologia agra sociologia rural o sociologia del eampesinado, Obviamen’ te, esto es producto de una compleja multicausacién ‘Sin embargo, la historia reciente de este pais ha sido fen gran medida modelada por los intereses vinculados al campo, Una de Ias causas centrales de Ia Guerra Civil espe fiola (1936-1939) se encuentra en la tentativa de reforma ‘agraria que se planted durante la Segunda Repiblica ‘espafiola. La reaccién del nuevo Estado en el campo los elementos ideolégicos insertos en su férmula politica tienen, sin duda, mucho que ver en los modos social- ‘eatélicos que, arropados en un lenguaje cientificoconte- sional, han interpretado la realidad social agraria creando Ta tinica sociologia rural que ha presidido los circulos ‘académicos espafioles hasta fechas muy recientes Esta sociologia agraria para la accién guardaba ob- viamente un claro corzelato con la versiém oficial que del campo iba dando la politica del gobierno. Esta ha do encaminada a «tapar Ia peligrosa grieta por la que petiddicamente estallan las cSleras devastadoras que lle- vvan el fuego y el hierro, enloquecidos, por los campos de las naciones agrariass. La version oficial de la teoria sociolégica del campesinado sabia por eexperiencia his- tériea lo que ellos (los campesinos) por ignorancia no saben... que después de Tas céleras devastadoras de los ‘campesinos renace su daimo de paz y de tierra». En de- finitiva, se trataba de frente a Ia estampa de los desfiles de las revoluciones trdnfantes, sobre la devastacign: fren- te al uiste desile proletario arrastrando irvedimibles ca- denas de esclavitud, oponer Ta estampa del campesino pesto en pie sobre su tierra, con una casa al fondo en Suya puerta juegan sus hijs, y por encima de todos una molesta, pero divina, cruz, meta de todos los caminos del espirita, y hacia la eval nos Mevan nuestra fe y nues tea ambiei6a de espafcless! Hosta 1974 la sociologia rural espafola ha estado re- presentada en todos los congresos internacionales por Fancionarios de ta administracion publica 0 por sacerdo- tes portadores del enfoque de la Sociologia pastoral del Consejo Superior de Investigaciones Ciontificss. Sus eo- rmunicaciones y ponencias no eran sino recopilaciones tstadisticas con los resultados oficiales de los logros qe en el campo consegitan los distintos gabinetes ministe Hales. No resulta, pues, extraio el absoluto desconock miento en Espana no s6lo de los cambios de orlentaclon Clentifica de Ta sociologia rural en los limos afios, sino incluso del acervo de conocimiento de la propia dsciplina, Bl excelente prélogo a la edicién inglesa de Shanin y Worsley podria éximirnos de situar Ia obra del profesor ‘Boguslaw Galeski en el lugar que le corresponde dentro dela tradiign del pensamiento sociolglco. Sin embargo, desde 1971, fecha en que fue escrito ese prélogo, hasta hoy, se ha producide una auténtica convulsion te6rica dentro de la sociologia rural, que empieza a conocerse con el nombre de estudios campesinos (peasant studles). Por ello ereemos de gran interés, dado el desconocimiento en nuestro pals de esta orientacién teérca actual, consh dderar, aun en forma esquemitica, algunas de las apor taciones més relevantes de sus Precursores. 1. Rafact Cavistan ¥ ps ArouAGA, Una pottoa agravia (Ma dvi" 1858), pp. 54 9 95, Para in ands de las construceones ‘deosleas Ge las poiticas aerarias y el impacto des instes ‘ontalizaign sobre cl campesinado cspafol, ef B, SevILAGUE ds, +The Peasantry and the Frenco Regimen en aul PARSTON (ea), Spatr in Crts (Londres: Harvester, 1976), pp. 10LI24 256208. 6 En [os ultimos cinco afios hemos sido testigos de la apericién de una copiosa literatura cientifca que, prove- niente de muy distintas disciplinas sociales, aborda el analisis del campesinado desde muy anslogos postulados tedricos. Estos parten de la asuncion de que el campe: sinado, como segmento social con una especifica forma de vida vinculada a una propia concepcién del mundo, no ha de desaparecer ineluctablemente en el camino del Gesarrollo econémico. No est demostrado que los pro- cesos histéricos de desarrollo hayan de pasar secuencial y taxonGmicamente por las mismas etepas, y por tanto Ja tecnologia social que unas pocas sociedades indust Tes exportan como sociologia rural no es'sino una forma de scolonizacién académica» que, en lugar de resolver problemas, crea nuevas formas de dependencia. Asi, junto a esta dimensicn critica y como una de las caracteristi ‘cas centrales de este enfoque, aparece la perspectiva mul tidisciplinaria o, si se quiere, el cardcter interdiseiplina io con que se aborda el andlisis del campesinado, Eco- omistas, socidlogos, historiadores, antropélogos y otros imuchos tipos de profesionales de las ciencias sociales funen sus esfuerzos tedricos para aproximarse al andlisis de la realidad social agraria bajo un comin enfoque que, ‘como ya hemos adelantado, empieza a conocerse con el nombre de estudios campesinos (peasant studies) Desde la sociologia, posicién académica a la que per- tenece Boguslaw Galetki, el enfoque de los estudios cam- ppesinos se caracteriza en esencia por encontrarse en el Centro de una tradicién sociol6gica muy conereta: el com Mictivismo, como concepcién teérica en pugna por una iacién hegeménica ocupada en la actualidad por la construccién te6rica del estructuralismo (en sus mili ples manifestaciones, desde el funcionalismo parsoniano de la escuela americana al neoestructuralismo de Althus- ser en Europa)? El estudio pionero que puede considerarse como el 2. Salvador Gruen, Bt progresa de la conciencia sociltgiea (Barcelona: Peninela, 1978), passin ims claro antecedente soctolégico de Ia joven tradicién intelectual de estudios campesinos aparecié entre 1918 y 1920 con el titulo de The Polish Peasant y se debe a los sociélogos Thomas y Znaniecki. Ambos autores estudia- ron el impacto que, tanto al nivel de personalidad como de estructura social, produjo en la comunidad campesina ppolaca la emigracién a América. Y, al hacerlo, elaboraron luna construccién tedrica del campesinado, que en muchos aspectos atin no ha sido superada. Su definicion de la familia carpesina como una unidad EI modo de explotacién campesino se caracteriza por tun bajo nivel de capital frente a una abundancia de mano de obra que se pretende ocupar en la explotacién ‘campesina familiar, en la medida en que no sean cubier- tas sus necesidades de consumo; esto es, la racionalidad ccampesina, que ha sido y es ealificada ‘de «apatia eco- ‘némica» por una mente capitalista, radica en que no es tl ntimero de horas de trabajo, ni tampoco la remunera 5, Alexander V. Cuanov, The Theory of Peasant Economy, 1. ed, Mose, 1925 (Homewood Ls The American Economic Assoelddon, Richard D. Tp, In. 1966), p. 0. Hay una edicion ‘GGstellana con eh stalo de Li orpuicaion de la unidad econ’. nica campesina (Buenos Aires! Nueva Vision, 11, rbd, p. 2. cin a ese trabajo que determina la organizacién cam pesina de Ia productién, sino lo que, por el contrario, origina ésta es la satisfaccién de las’necesidades fami Hiares de consumo y Ia dureza y fatiga del esfuerzo fa- miliar en el trabajo. Dicho de oira forma, «la remuners cidn expresada objetivamente por unidad de trabajo sera considerada ventajosa o desventajosa por la familia cam- pesina, segtin ol estado de equilibrio basico entre la me dida de la satisfaccién de las nevesidades de consumo y la fatiga y dureza del tipo de trabajo». Resumlendo, la organizacién econémica de la casa campesina (unidad familiar campesina), venia —para Chayanov— determinada por las variaciones que se pro- dducen en el cociente, enecesidades de consumo faniliar»/ fuerza de trabajo de Ta familia campesina». Es deci, ppor un lado el crecimiento biol6gico (muertes o nacimien- 103) y el crecimiento social (bodas 0 abandonos) y por ‘otro la vigorizacién o el deterioro biolézico (paso a la actividad © envejecimiento) explican la evolucién eco- némica de las unidades 0 casas campesinas. Aun cuando Jos challazgoss de Chayanov hayan sido puestos en en- tredicho tanto en su época* como en la actualidad, su for- rmulacién tedrica de Ia economia del campesinado es una herramienta de gran fertilidad para el entendimiento de Ja orgenizacién econémica de la unidad familiar campe- sina y por tanto del modo de explotacién campesino, 1. Ibid, p. 87 4 Para’un etcelente resumen do la construceén toériea de CChayanoy, si como de las controversias que ocasond en Rusle, of Teodor Suu, The Awkward Class (Oxfords Clarendom, 197), fp. 102106, Ciraduccion castllana de prosina spaveldn on Ma tid, Allanza Eatterial) ‘9. Tuan Martines Aler dice que la fama alcanrada por Cha- yanoy es probable que se deba ms a haber sido mas Histo que Jos economistas y quo los comunistas que a su vallow trabalo fempirico sobre la demografia y estructura familar campesing ye fue cree que sus descubrmlehtes, por un lado, pueden ser for Shulacos cn fa tenia coonemiea conwenclonely, por otto, estaben ‘ya deseuiertos por Kaulak¥. Cf. Met Aula, Peasants and Enbourers: Spain Cuba and Peru, «The Journal of Peasant Stu loss, vol 1, lm. 2,178, pp. 192436, p. 1 10 desde una perspectiva global. Su explicactén de la «apatt feconsmica campesina» es un modelo y como tal si ras: plante a la realidad requiere la consideracién como una Eategoria analitica. La persistencia de la economia cam pesina en formas de dominacién politicas y econdmicas tan dispares como las del feudalism, el despotismo orien- tal, el absolutismo 0 el capitalismo sélo se explican si la organizacién social campesina es adaptable a tan diversas situaciones y resistente a tan diferentes impactos exte nos.” Por otra parte, las instituciones comunales trad cionales descritas por los estudiosos del campesinado en Espaa antes del conjunto de medidas que a lo largo del Siglo xIx expoliaron al campesinado de su rica variedad de formas comunales" parecen mostrar una clara cohe- rencia con las formas de adaptacion de la unidad familiar campesina deserita por Chayanov." Estas dos obras —Ia de Thomas y Znaniecki y Ia de CChayanov— son los més claros antecedentes de Is actual tradicion interdisciplinar de los estudios campesinos. Sin ‘embargo, junto a ellos hay que unir las teorias espect ficamente marxistas —y leninistas— sobre el campesina do, que, desprovistas de cusiquier ropaje dogmatico, foftecen elementos de andlisis de una gran fertilidad para el estudio, comprensién y resolucién de los problemas ‘campesinos. [La tradicién antropoldgica tlene una especial relevan- cia en el bagaje te6rico del enfoque actual de los estudios 10, Teador Sears, The Nature and Logic of Peasant Eeonomy, ‘the Journal of Peasant Studios, vol. 1. maim, 2, 1914, 9. 186 Bogusiaw Gaussee, Saclal Organisation and Raval Social Chase, ‘Sociologia Ruralis, vol. 8, 1968, alms. 3'y & 1. Evardo Seva Gticts, Lord and Peasant te the Making of the Spanish Rural Societies (Unisersty of Reading: Confer ‘nce of the Europcan Sockty for Rural Soclalosy, 197), p. 46. 12, Gh. Joaquin Cost, Et colectoiemo aprarta (Madea Ta prenta Ge San Francison de Sales, 1858), pp. 26927, y J. SexRANo Bint, “Sorteo periédion de tirrar de Tabor: cultivo en comun para la'haclend? munilpal, en Joaguin Costs, Derecho consue fudinario'y economia popular (Barcelona: M. Soler, 1902), Tomo 2 pp T4378 uw campesinos.” Uno de sus mas destacadas autores es Ro bert Redfcid, quien abandona el estudio de las soclede- des primitivas para centrarse en las lamadas soctedades complejas 0 actuales. Pereibe asi, por contraste, una ca- Sacteristiea esencial ‘al campesinado: su dependencia en términos econémicos, politicos y soctales de la sociedad lobal. Siguendo a Krocber, un cldsico de Ia antropol reall ve'¢ los reampesinos com rales, augue W van en relacién con el mereado de las ciudades; forman lin segmento de clase de tna poblacién mayor que nor- Inalmente contiene centros urbanos y, a veces, capitales Inetropolitanas. Constituyen part-ocleties con paré-cultar ressst'Sin embargo, esta pavtsociety que es el campest nado mantiene sina «telacin de status» con la lite que se encuentra sobre él. Esta dite puede ser el sefor en las socledades feuds, el déspota o sus visires en las socie ades hidrdulieas orlentales o el Tatfundistn en las so ‘ledades predemocréticas actuales, ero en cualquier caso trea una fuerte relacion de dependencia, Esta relacion no toma slempre las formas de «gobernador y goberoado 9 explotador y explotados, tal como ha sido ejemplari Zado més arriba, aunque elementos de este tipo estén ‘asi siempre presentess; muchas veces toma formas mds ‘complejas. Lo relevante en la aportacién de este eutor, en el andlisis del campesinado, es que éste se encuentra Genito de sistemas soctales mas amplios que generan 13, Antropologos dentro de las correntes teéricas conocidas ‘como neoevocionismo y evolusonlsmo multllinal podria, 0 flgor, stuarse como. presursares, tales son fos casos de Lesie ‘White, Corton Chie ¥ Tullan Steward, or ejemplo, como puede educisse de la reciente obra de R. Anais, Crucifixion by Power {University of Texas Prost, 1970), que recose el legado teérico {Se aguellos sulores y lo remodela on forma original y excelente. irs obra de gran yelevaucla tcériea, tambien dentro de esta ftadicidn, es la Ge Kas! A. Wirivoctl, Oriental Desporiom Yale University Pres, 1987). Hay traduccldn castellano (Madrid; Gus darrama, 1960). ThA. L- Koooeee, Anthropology (Nueva York: Harcourt, 1948), p28, etedo en Robert Resist, Peasant Society and Culture Fite University of Chicago Pres, 1986), pp. 2930 2 . La cultura de una comu- nidad campesina est en buena medida determinada por cl sistema social global del que forma parte, es decir, no fes auténoma, Y, por tanto, para conocer ef campesinado ha de conocerse también Ja otra partsociety.® Ami juicio, lo relevante de Redfield en Io que se re- fiere a Ia exploracion tedrica del campesinado radica ‘en que intuyé la persistencia de tuna constante en el cam: ppesinado respecto a las «relaciones de influencias que ‘mantiene con el resto de la sociedad, Aun cuando, histori= camente, se ha dado una extraordinaria variedad en estas relaciones de dependencia, parece existir un micleo de clementos comunes que Redfield, aun sin llegar a explit citar suficientemente, incorpora @ la definicion de cam- pesinado:” Algunos de estos elementos de carécter eco- ‘némico parecen estar muy claros y pueden ser enunciados fen términos de dependencia del mercado. Desde el sur- imiento de la ciudad en la Edad Media, ésta acta como tun agente centralizador del artesanado y la industria que pierden, paulatinamente, su cardcter campesino/La pe {quefia industria urbana supone la aparicién de ui poder fccondmico que amenaza al campesinado puesto que lo Introduce en un mercado nacional que entra en conflicto ‘con el modo de explotacién campesino.|eCuando la cin dad es visualizada de esta manera, los aspectos politico- econsmicos estin conceptualmente unidos con los pura- mente econémicos y concebidos como un todo.» El desarrollo de Jas fuerzas productivas incrementa, obviamente, la dependencia generada por este tipo de relacién.” Estos aspectos econémicos y su transforma- 15, Robert Renin, Peasont Society... op. elt, pp. O68 To Entre tos antropélogos que unce ast perspectiva folk» tan enfoque relevante 0 con elementos de enaisis ulizados por If orienacign teorica do Tos estudios campesinos estan George Foster Sol Tax, Edward Bangla y Erasmus, entre. ots Tn” Max Ween, The ety (Nueva Yorks Free Press, 1968), p72. 18 Un excel andlisie de este proceso en el que describe ta liquldaclon Ge la Industria doméstica campesina en manos tet isaroliocapitatsta y ms coneretamente del proceso de i 1B $n en térmninos de poder son el centro de esta tadicion interdscplinaria que se ceatra en el andlsis del eam- pesado Deniro de esta misma tradicién y también en la ver tionte antropoldgca se encuentra Este Wolf, quien recoge ins conceptualizaciones de Redfield y define l campesino tn bases un sistema de relaciones con el mundo exterior Un agrcultor rural es campesine cutado mantione una relacion de dependencia respocto al resto de la sociedad, ala que por supuesto pernanece integrado, en trminos SconSimicos,culturalesy poltcos. Un eatpesino produce tisieamente para su conservacién ¥ la de Tos suyos,¥ para mantencr scegureda sa produccién y consumo fi furos (fondo de reemplaco). Sin embargo, aqut no ter Inina su prodaccidn; existe también la prodwccion que destina a mantener sus rlactones sociales de parentsco, feligioas, ete. Este tipo de gastos que Wolf denomina fondo ceremonial varin de una cultara a tra, ¥ las to laciones sociales que genera ae hallan cargadas de cle tentos simbolicos que intentan justiear sus comporta: Iientos. En general, el fondo ceremonial constituye a traduccion a terminos econémicos de los comportaraen- tos institcionalizados © institeiones,® en que et cam pesing se siente cbligado a cumplirsocialmente, tales Eomo banquctes con motivo de comuniéa, boda, bavtt tos, gastos en fiestas de la comunidad, ee reel rnpsino ete po de lesan sails son Importantes ya que pone ofilmente en contacto a las familias, como untdad socal, con Ia comunidad aldeana, Los eoquemas sociale a través de los cuales cl cam pein establoce sus relaciones se basan en la familia ane {Den terminos sociales como econémicos. La. organza. Sion campesina Gescansa bisieamente en Ta composilon zaclon, puede verse en Karl Kausney, La cuestin agravia vist Ruedo Therieo), 1970, 1a ed. 1899, pp. 131. | Eimpleamos el concepta insiucion en’ el sentido de mo- os de ‘sciGn proplos, legidmos y esperados, tal como fue for- fulado por Wiliam Graham Status, Fotkways (Boston: Ginn, 16, p33 6 de Ia familia y en sus demandas de relactén social y econd- ‘mica; cuando éstas se ven satisfechas cesan sus esfuerzas de produccién. Sin embargo, el campesino se ve sometido 2 relaciones asimétricas de’ poder, en el sentido de que dha de producir més que el minimo demandado por su unidad familiar de relacién, Bsta eantidad producida al ‘margen de sus necesidades, como un imperativo de la sociedad global, es lo que Wolf llama «fondo de renta».%) La claboracion tebrica de Wolf hasta aqui esbozads es, en general, el punto de partida de los estudiosos del cam- pesinado. ¥, aun cuando su libro Peasants no sea mi que una introduccién al tema, su nivel de abstraccion y formalizacion teérica ha egado a considerarle como lun clisico de los estudias campesinos. No s6lo recoge la aportacién de otros formalizandola y sistematizdndola, sino que ademds da un paso muy importante al estable- cer los conceptos de relacién asimétrica y trasferencia de excedentes, incorporéndolos a Ja concepcién teérica del campesinado. Un papel andlogo al que tiene Eric Wolf respecto a la aportacién de la tradicién antropolé- gica a los estudios campesinos es el que desempefia Bro- guslaw Galeski en la sociologia. Existe, empero, una diferencia entre la centralidad de Js perspectiva antropolégica de Wolf y la socioléuica de Galeski respecto a los estudios campesinos, y es que mien: tras aquél recoge un rico legado tesrico, éste une a una no menos relevante aportacién teérica una dimension empirica, fruto de la existencia en Polonia de una so- Giedad campesina, parte de una sociedad global con un releyante grado de industrializacion. En efecto, la obra de Galeski presenta el resultado de los efectos tedricos de la sociologia polaca contemporé- 2,_ric R, Wot, Peasonts (Londres: Prentice all 1966), pas sim Bay traduccién. castellana (Barcelona: Labor, 1971). Tame ‘ign en castellano puede encontrarse un resumen de la construc. idm feétlea de Wolf sobre el campesinado on Bele Wout, 2 Campesinedo 9 sus problemas, en M. Gapaite (ed), Antropologia yreconomta (Barcelona: Anagrams, 1979), pp. 20315. Ene os {rabajoe reclentes sobre economia campésiua deben cltarse los eK Polany, Dalton y Raymond Fit 15 ial Ro es tes Se ca or Pi eo es ln war ayo Cpl Soc Ea See am ae a eg capt scolar J" eu an Ss et a en cemcs de i gan apes con rl et eine ak gation er aac ir een el enn inetd co cece DEM ae tc ne a Ge apc ev ul a pe street Iu re ote sin so i a Sn SF cu lg a a ass St or leafs i se al fee cea ng bee cane Unhoata & Un o SB ae ce ma ns Sok ual Sao aa cose edt rac peep mul ee eae rie aes eo Sue) ti, Bxinte on la actualidad otra rovsts con esta orientacién 16 En noviembre de 1975, el profesor Teodor Shanin or- ganizé en la Universidad de Manchester una reunion de tspecialistas internacionales sobre temas relacionados con Clcampesinado para crear un Instituto internacional de testudios campesinos con diferentes ramas regionales que permitieran una investigacién sistemitica con el enfoque feorico de los estudios campesinos. De all{ salid una co ‘mision negociadora del International Working Party for Peasant Studies compuesta por M, Kiray, A. Palerm, 1. 0. Ranger, T. Shanin y E. Wolf® que trabaja para institueionalizar la nueva orientacién teérica de la socio- ‘Girica denominada «Peasant Studies, publicada por la Univer: Sand ae‘Pitsbengh 9 que apareei) Hiilalmente con el nombre Ge aPessant Studies, Nowsleters, 22''Los miembros del grupo iniial en extudios campesinos originado en, Manchester san: Hamza Alavi (Pakistén/Gran Bre {ana)s fun Maytiner Aer (Espata); Paresh Chattopadhyay (Ie Eia/G, Bretataye George Dandler (G, Bretada); Baal Davison {Gi Bretana,, Fcameico. Delish (Per); Boguslaw Galeski (Po {onla); E. Geliter (0. Bretana), Erie Hobsbawm (G. Bretaba); Kans Jascklein, (Alemania Occidental); Mubeccel Kirsy (Tur fqus); Sidney Mintz (USA); Fetemeh Blemad Moghaden (rén}; Bneei Palen (Mico); Tony Ranger (G. Bretaha); Bryan Ro- ams. 6 Bretane), Eduardo Seva Guzindn (Espa); Teodor Shasin.(G. Bretata), Arturo Warman (éjico); EF. Winter Gestrigs Ente Wolf (USA); Boter Worsley (G. Bretaa). Recoge- fos est lista peneando en offecer al JettorInteresad una re [acldn de autores dentro de la actual orientacion tories de ‘huudios campesinos, algamos de tos cuales an configured su Sctaal bagaie tedrio, Desde entonces el mtimero de profesionales Gontlieadoe con esta reciente radiclin intelectual hia creide env forma exponeneia. Guetemos resttay que la obra de un catalén, Juan Martine: diet ha tenldo un importante papel en ta ereackin de enfoaue is extudlan campesinos. Por ot parte, la Junta de Gobierno Ge le Unrversicad de Cordoba (de 20VIIEIS76)aprobé Ia crescién As tn Testtuto de Sociologia y Estudios Campesinos en dichs Geiveridad, donde desde hace mas de un af se viene invest fando bajo esa otlentscién. Fruto de estas trabajos es ia tess oetoral realizada en le citnda wnlversigad y tea en In ETSIA GeMadeit Manvel Pease Yarra, Corflicividad campesina. » SSiuctura socal et caso de Cordoba durante la Repibtica (Gindobar BTSIA, 1976, de provima pablicacion en Allonza Ea (Soniye poncneia presentada al Cuarto Congreso Mundial de 7 Jogia rural: los estuios campesinot, en cuva configura: ibn ha tendo un papel deco et abajo de Boguslaw Gales y la obra aqul presentada ea traduction de esta obra ba sido realizada por un socilogo, Lluls Faquer, expecialsta en socloogia rural Yuya ovientacin tdci cae de Meno dentro de equela 4s los estudios campesinos. Aungue la obra fee esrita originalmente en polaco, se ha taducido @ partir de la versin ingles revisada Por indcachn cymcea del autor Em rigor no pede de Else gue esta obra sen sins, una mera traduccion de libro. Baste Concepts of Rural Sovilogy: con serlo, Esta 'se ha hecho en estrocha relaién con su autor, quien demas ha querido amplasla con un nuevo texto ine dito truto_de sus tltnse invesdgaciones en toro a la Sgriculvura colectviads, que aparece eh el captulo 9. Setioogia del exmpestando ex, portant, una necra Yr Sion, sustanciahnente revseds y ampliada por su autor, Boguslaw Galesit, dl Horo ya Considerado como clisico mmoverno de le socilogia Socjlogla weit pojecla pods: rawowe. Ant el esaso desarrollo que Ie sociologia rural ba tenido en Eopata y las vacilaionee terminoldpias que tlio comport, es conveniente hacer algunas puntata sionesroepecto a le crrespondenciss entre los trmines ingless y castellanon Yen ‘primer lugar, al no existir en castellano un vocablo aque corresponds al tego genésico de farm, so ha de digo talus por sexplotacins (expocacin cape Sins, cxplotacion familia, ete). Sin embargo, en algunas Sonladas oxasiones, para no incdiren Flterasiones eno {osas, se hanutlizado los trmlnosfincaristca, hereda, Settee, Solo se hn empleado la vor «gran cuando por leontexto se desprendia claramente que Ta explotacion En cussion tena rnanfiestos Tasgs erpresariaes era a indole especilzadn. Por ejemplo, se Ba verido al cas Sociologia Mundial, B, Sevusa Guus y Slvador Gnu, The Tesi ase Tove! mode of clase domtdon The Sponish case Poland, 197), tellano State Farm, equivalente aproximada del sovkoz soviética, por waranja estatal>. Por otra parte, se ha eptado por traducir peasant farming, concepto clave en I obra de Galeski, por emodo de explotacién campesino». Asimismo, se ha traducido farmer por sagricultor», pero hhay que entender este término genérico en sentido an plio, comprendiendo al ganadero, al horticultor, al gran- Jero especializado, etc Por otra parte, se hia tradueide occupation y occupa tional por «profesiéns y «profesional» respectivamente, pues, ademas de tener estas voces més tradicién en cas- fellano que «ocupacién» y socupacionals, son més fcles al original polaco en que zawod corresponde a la vez a las palabras inglesas occupation y profession. Por diltimo, se ha traducido willage por «aldeas y no por «pueblo», aunque este tltimo térmaino tenga una cier- ta raigambre en la literatura antropolgica internacional, por diversas razones; primero porque «pueblo» tiene un sentido mucho més amplio que village y muchos pueblos ‘espafioles serian pequefias towns inglesas, pero sabre todo porque ealdea» tiene el derivado adjetival de aldeano/a gue permite una mayor riqueza de expresién (villager: ‘aldeano; village community: comunidad aldeana; village life: vida aldeana, etc). De todos modes, en algunos casos se ha utilizado también la expresién «pueblo» cuando por el contexto se desprendian las mayores dimensiones de la localidad © para no incurrir en repeticiones. Epuanno Sevitan Guznan Universidad de Cérdoba, 1976 Prélogo Considerando que la mayoria de la poblacién mundial esté compuesta por campesinos, el subdesarrollo de la sociologia rural en Occidente es tan notable como de- primente. En las dos tltimas décadas sélo se ha publi- cado un libro de testo sociologico que ha intentado la conceptualizacion sistematica del campesinado como fe ‘némeno social (si bien la tradicién antropotégica ha sido mucho mAs rica)." Las razones no son dificiles de ave riguar. Las ciencias sociales se han desarrollado princi palmente en paises lo bastante ricos como para sostener complejas instituciones y medios educativos, intelectua- les y de investigacién. Dichos paises estin urbanizados © industrializados y de ahi que no se hayan interesado ‘mucho por la vida rural, que de forma cada vez més ere- ciente y répida esté dejando de existir como «cultura campesina» o estructura social campesina distintivas separadas. Incluso el mismo trabajo agricola actualmen- te ocurre en condiciones mas andlogas a aquellas bajo las cuales trabajan los habitantes de las ciudades, y los estilos de vida generales se han Ilegado a fundir a medida que las comunicaciones modernas y los medios de comunicacién de masa han salvado el foso existente entre la ciudad y el campo. Ademas, en esos paises el ‘campesinado ha dejado de constituie la mayoria de Ia nacién y la agricultura ha pasado a ocupar «in lugar se- ‘eandatio en la economia. Aunque a menudo subsiste el ‘campesinado, se ha vuelto, para usar los términos de 1. Erle Wour, Peasants, PrenticeHll, Nuova Jersey, 166, Ungs euantos yeaders teclenies han empezago a llenar el veto J. Dorma G. Ne Fostex y'M. M. Die (ede), Peasont society: a reader, Little Brown, Boston, Mass, IM, y 1. Sixty (ea), Fea. Jamis and peasant societies, Penguin, Hasinondsworth, ii a olf, secundario» en lugar de «primarios. Cada vermis Wale co go viene dcterminado por lo due 1 ns cludes Por consigiente Tos paises sucede fn Tas Sieenzados tambien s0 han convertigo €® weet", aynmadas, Lx moderiatn tos pale Mio feo del desarrollo de una eenolgia a seca aneanicn, mas fx epicaion de le eumsStieas de ‘dueceién raclonalizada, Tas barreras ‘ticle wadictnses etre compo 3 sind 5 bat Ue ron aa cae proce que fa misma eistencia ara al etnies ae ha convertido pals de prctada y Belgea ea un mundo 6 cron * Este proceso general puede observarse en otras partes oo nar ettao en Tos paises menos desaroados er ene nnn, sor jx 5 dea poblién oe ee rumiay 9 Cle vive en poblaiones whe tents de 2010 rns 1 lg poemos ds BET Sot del resto de Amésea Latina’ ticen i explocton de trols ychudades cons eps ennano versal en odo ge continado a ea meiazade © 2 Amsrca Latina, aunque a oeeiettiacon en los paleessubdesarrollados avance I tito andtado pare absorber = cos iiganes a te es cmpleo regular —en particular 3 peapomcoma t eltpe aue condce hata la moder empleo int Ge sonal general. Este tipo de urban 720 tials ex sitgplosvas 0 sinvolitva» a BS ha empe- zado a redescubrir al campesinado y por la que ahora se estin publicando en inglés cldsicos olvidados durante ‘mucho tiempo como los escritos de Chayanov y Preo Drazhensky. Gracias a este redescubrimiento actualmente ya no es posible categorizar al campesinado, si siendo @ Mars, como «un anacronismo complacientemente est ido... un Jerogifico indescifrable para la comprensién de los civilizados... la clase que representa el barbarismo dentro de la civilizacién» o, siguiendo a Plejénov, como sinexistente, histéricamente hablando».” ‘Tampoco es ya posible fingir una comprensidn ge neral de los problemas sustantives de la sociedad que prescinde de toda referencia a la vida de Is mayoria de 13. Ver 7. Sune, The peasantry asa political factor, Sacko logical Reviews, 186, vol. 18, um. 1, pp. 527 31 In humanidad. La vulnerabilidad de las teorins, de la ia social que parten de un modelo de hombre basado En supsestos desarrollados sobre la conducta humana fn unas pocas sociedades occidentales recientemente im- Gstralizadas ha sido puesta en evidencia desde hace Gempo por los antropélogos. El tratamiento de Galeskt Ee iz motivacion campesina revela asimismo las limite: gfones del pensamiento econdmico més ortodoxo sobre fa agricultura tradicional, y su estudio més amptio de qos valores y del control social ejereidos por la familia y'la comunidad, asi como Ia disyuncién existente entre Estos y- las instituciones educativas formales, no hace fais que fortalecer el punto de vista de los antropélogos. Fodovello, sin embargo, ne constituye més que manifes taciones parciales de las contradicciones mas generales ‘que sofala Galeski: Ie tensién generada en Ia vida Sesina en virtud del carécter doble de la explotacisn Pempesina como empresa y como unidad de economia domestica En el capitulo 1, Galeski empieza analizando estas caracteristicas basieas de la agricultara campesina, se- fuidas por un esboro de los principales tipos de explo- Gietones que hallamos en Ja Polonia contemporinea. En ercapitulo 2 examina la actividad profesional del agri Cultor campesino, mientras que el capitulo 3 estudia 1a Familia campesina ¥ el capitulo 4 In comunidad aldeana, "En el capitulo 5 se tratan las interrelaciones existentes centre explotacién, familia y aldea, asi como la cuestion fnis amplia de si el campesinado se debe conceptuar Bbino clases 0 como cestratos, mientras que los cambios Teg ‘sociedad rural, tanto en lo que, se refiere a Jas shuevas formas de especializacin agricola como al ereci Tmento del mimero de aquellos que se dedican a profe- Glones no agricolas en las zonas rurales, se estudian en EY capttulo 6. El capitulo 7 examina la aparicién de nue- Gas notitudes con respecto a la agricultura, In raclonali- Wehion de ls empresa agricola y las nuevas pautas de Jas “fuerzas sociales» en el campo en que el influjo de tas cit Gades industriales y del Estado socialista es prominente, 2 EI Ibro coneluye con un examen de Ia adecuacén de Ja tcorla maraista tradicional a la comprenstn de la sacle dad rural polaea contempordnea y con una evluacion de ios mr lcs dln diverantexeateas para Ie astitucion de la gricultura campesina por una agricul Cr — ‘i, pues, en cuanto al tratamiento del campesinado como un tipo social general, esto libro va mas alla de una codificacion Toealista de in experiencia polaca. Llena tyes ate ca neti ease sal ‘mismo empo osteata la representacién de una din soceligln uypoo Soca en Oxteneija calidad no nevesta prectsarente de nuestrs elogios "Teopor SHANIN- PETER WoRSLEY, Manchester, enero de 1971 Introduceién La sociologia rural, como disciplina cientifica inde- pendiente, tuvo sus comienzos en los Estados Unidos a ppelncipios del siglo xx. En aquel tiempo ya se habian Formulade las principales escuelas de pensamiento sobre los sistemas sociales y las tendencias det desarrollo his- t6rico, y empezaba a desarrollarse una tendencia hacia Ta especializacién y la investigacion detallada. La socio logia rural era ya un campo de estudio separado en el programa de asignaturas de Ia Universidad de Chicago, flgunos aiios antes (a partir de 1892), pero el primer libro de texto no se publico hasta 1913. En 1946, el Congreso de la Sociedad Americana de Sociologia consagro sus ebates a la investigacidn rural. El rapido desarrollo de fa investigacion socioldgica después de 1920 se vio esti- mulado por la considerable ayuda financiera proporcio- nada por el gobierno” y por otras organizaciones que estaban particularmente alarmadas ante el répido éxodo de la poblacion de las zonas rurales y la creciente dife- rencia en los niveles de vida entre el campo y Ta ciudad. En este periodo se publicaron varios manuales bsicos de sociologia rural? asi como estudios que esbozaron sus principales tendencias y conceptos Hacia los afios treinta 1. J.M, Guise, Constructive ruratsoetology, Nuova York, ws. 3, Rspecialmente gracias a tas csubvenciones Purnell da ley Purnell fue aprobada por el Congreso en 1925), 3. I, M, Gilustr, Rural Sociology, Nueva York, 192; C. ¢, ‘tania, Rural sociology in tts ecormi, Mstorical and psyche loglealaxpects, News York 9) Londees, 926. 1 Le Roy Sus, Elemente of rural sociology, Nowvs York, 1925; P. Sanaa ¥ G2 Zaman, Prineiptes of ruraarbes sociology, Nueva York, i509 ‘© 3, Gauem, Rural fife, Nueva York, 1920; J. HL Kota, 35 In sociologia rural americana estaba plenamente dese TRofgds ssc levaban cabo Investigaciones « gran es eee liearon nuevos libros de texto, as como Te Se Rscbapictons de ebrne ym aparecias se sslaben cs independiencemente tomas capectlizados den + ae po general y el andlisin estadstico oe aplicaba tro te cafe, El ato 1938 fue testigo de la creacion de BPR SEA americana de Sociologia Rural, que en el ves eee sho inicio. la publcacion de su revista «Rural ScSlogye, sm pblcncion gue sve hacendo una cio tacon # este campo de estudio. Estas (en- ae ala cltentamfenta de areas especilizadas come emcee ie penqulse independents, boia Ia formulactén Sr ee ga aplieacion de métodos estaiaticns y de emcee ran entonces fertemente acentuadss, Los aa eton postvos. aumvlados en el curso de la cancers juatncaban la expetativa de un inmipente invest A erpectiva toorica global basada en Istentos empiicos ms sides i compari co es Estados Unis, Europ em iin comettce el estudio de la socologin rural. En Fe tore uRoceniktsorologt wie (cAnales de Socio polentiets)empezaron 8 publicarse en 1936, pero slo Pee aera rmear tres nmeros ants de Ta gua Mesa ea public, el bosguejo de Grabskl (an esboz0 ES J ue mito la vn polaca » los problemas de Ia tere) aS aly em este peviodo se fundaron los pri sect et eros de Tovestigactn en este campor Bl éfass aval primary groups: a study of agricultural neighbortonds, Ree Pree BCP Youxo, The movement of farm population, Manon re iodé J. M, Wits, Our ral heritage? the soci seein ee of rural development, Nucva. York, 1935; Edo S. Beton! Village communities, Nueva York, 1922 EG Btinnen o1 Lonce, Rural ized in depression years: «survey of villagecentred agricultural conmuatties, 33019%, Scbla ook, 1957" Esta puolicacion anal Tos resultados de tes Atlas reazados en 1083 por E. Brunner y J. H. Kolb en 140 Se (wer Rural socal trends, Nueva York, 1953) Be Ate Gospodarstiva Spotecanego, Instat Soot Wsk ‘Soci, Parctwouy Insteud Kary Ws 36 saligio ne empers » nar en cos sctn dl ampo de otras clenclas sociales ya arraigadas interese- das en la sldea y Ia agriculture, Durante el mismo pe HHodo, 0 poco despucs del smo, empenaron a apatessr tr otros palses europens las primieras publicsiones con SIiitulo de Dolce dgrarts), regunda edicién, vol 1, Varoosla, 1963, p. 70 a de camblo, ae ne dae el punto de vista, de Ja be er ecards pence del aidan a es ele el eee i aden ces aon, ee ts ncn ses oe ns meek Ia ee nears de trabajo).(La organizacién del ‘trabajo tampoco se leva see pecans con el eer pie dee a pt rs cio ss cor ani a Ee ol zing tne le eer weit gen no Se 48 produetiva tle que estar relacionada con tales conside: faclones. Sin embargo, la explotacion campesina —como Fhemos mostrad antee-~ esa la ver una economia do. rnéstica en que Se producen ¥ consumen valores de Ws0 “"Geterminados por In necesidad—y una empress. Enel tegundo caso, el agricltor puede gusrse. y en gran me dida'o gu, tanto en sus declsones sobre cambio’ y prodiclon por su extimacion de a sitncin del mereado, de Ia renfbllidad, ete? Pero incluso en ol mercado el omportamiento del agriultor viene deterrinado por Ia tates Goble de a expotacién eampesen Y maches femenos notados por los economisias —por cfemplo, Invfatta de reacsion del productorngrieols ane fas five tuacionescilias—* son explieables cuando se toman en onsideracién todas lag caractersticas del modo de ex plotacion campesino. Desir que Ia explotacion familar es ala Yer ua wempresa» y una unldad de produccion Fimilar no consttuye un uso muy feliz dl lengua, puesto que tenemos a aaocar el termina empresas con [a economia eaptaista, ya que esld geueralments asola do con establecimientos de tipo caplaliss, es deci, una tnidad de produclon cuyo objetivo es el cro (cea parte de la plusvalia que proviene de a fancén productiva del capital), Erste una controveria entre lor economitae agrarios sobre sila categoria de los beneficios, como la Fenta de In terra, ae encuentra en el modo de explota: Gon campesino’ Puede ser correcta Ia concepcién de que €l objetivo de este tipo de agricultura no son los benete ‘dos de Ia empresa sino la renta falar, Pero debernos distinguir dos cuestiones distinas: el anilisis econémico del modo de explotacion campesino por una part, ¥ la 5. M, Pownunie y A. Wos, Motrwy arodutcyinyeh decyit catcpon ide tvckin te es dcsones de protect fe tat Campesinos), Varovia 156 TM. Cermuniah, Rynek potny w Police # fego regutowente (et mercado agricola en Polonte 3 su reulacén) en Ekonomita Fotnista tpl roa, et, vol 1, Veeova, 196, pp. 3189 8. ‘SH, Coots, Procent jako hategria ekonomicona gaspo arce clopstie) (El interés como categoria scondmnica on le coo. toma‘ cae pesin), Varsovla, 138 ° me 18.4 oducor, 0 las eategorias en que cone tors pm caso I cust “if odo de expltacion cay es nite apicaon 0 lla dees (eProblemas de eecromfa agrarias), 1958, nim. 2. 827 Turek distinguia tas explotaciones de 0,105 Ha como pequenas parcelas de terreno asignadas os trebajadores. Las Eitras que da son ids alta, pues se basan en el cunso’ do 1962 Ver su Medey miastem a wstar struktura spolecenatonadowe chlopow-raboinikow wv Polsce (Entre canizo J cluded: te estruc ura sotoprofesional de tos irabajadorescampestaas en Polonia), Varsovi, 198, P20 dores agricotas que viven en el campo (ast como parcelas ‘que los padres conservan para si después de ceder sus explotaciones a sus hijos). Estas se distinguen general- mente por una produceiéa superior de productos desti- hhados al mercado que las explotaciones de los grupos 4). Empresas a pequefa escala (huertos de hortatizas ¥y frutaies para vender en el mereado focal) gue suponen nos ingresos manetarios complementarias para la far nila? ‘Como las explotaciones del primer grupo, se en- ‘cuentran situadas carca de las ciudades. Es diffeil establecer cifras para esos cuatro grupos, EI IER no realiza pesquisas en las zonas suburbanas, en las que dichas fincas se encuentran con mas frecuen- tia y de un modo mas patente, y los datos recogidos por Ta Oficina Central de Estadistica (GUS) tampoco conte: rnen la informacién necesaria. En base a las investiga- Giones Hevadas a cabo por el IER sélo poseemos infor- ‘macién sobre las fincas de les grupos y «.* (Las de los {grupos restantes no tlenen las caracteristicas de la explo- facion campesina) En la mayoria de los casos no tienen aballos ni utensitios agricolas, no poseen vacas —o sélo tuna— y no 0 dos cerdos. La produccién vegetal se limita Casi exclusivamente a las necesidades de la Finca (comi- da y forraje). Los ingresos monetarios proceden de los productos animales (leche, aves de corral), El valor de Su produccién total no excede de los 25.000 zlotys." La proporeién comercializable de sus productos agricolas Puede llegar a aleanzar el 20% del valor de la produc: Gon total de la explotacién, y en el caso de las fincas {que pertenecen a trabajadores agricolas puede incluso superar el 30% 9. 6. Ista, Probieme der Entwengsplanung in Verdiche ungszonen, Sociologia Rstaliss, 1982, nbs, 12, p.®. {o.7M bisewnera, Chops robarnioy: Wyn Baden arkietonych preprowadzonyen prees TER (Trabujadorescampestnos: rela foe de ta investigaeton del TER), Vareova, 1962 1 Para os mtodos de clelo de It prucin, ver Spx tecoroekonoriicene srukture Wt 54 2. Explotactones que proporcionan ta fuente de in gresos familiares principal, pero inadecuada. Los ingre- S08 procedentes de otras fuentes no exceden del valor de la produceién neta, pero son un elemento constante fe importante que constitaye mas del 10% del total de Tos ingresos familiares. En Polonia las explotaciones de este tipo llegan a superar las 700.000 (alrededor del 20 % del total)" Este grupo incluye prineipalmente fincas con luna superficie de 2a 5 hectdreas, Las familias de esta fineas obtienen medios de subsistencia adicionales con su trabajo (normalmente manual) en Ia industria, en el transporte, en la construccién, ete,, o en la agricultura, cen granjas estatales o para sus vecinos. En estos casos generalmente no es el cabeza de familia el asalariado, sino sus hijos o hijas. Por regla general los que estén. cempleados fuera de la finca tambien colaboran en Tas Iabo- res agricolas, Aunque este tipo posee menos ganado, ape- ros, dependencias, etc., que las explotaciones de las mis mas dimensiones que constituyen la tinica fuente del sustento familiar, el valor total de su produccién no di- fiere mucho y_generalmente aleanza el nivel de 25.000 - 35.000 zlotys. Pero existe una clara diferencia en el volu ‘men de st produccién comercializable, que en este grupo ces decididamente inferior a la de las’ demas explotacio- ‘nes del mismo tamafio. No hay fincas de este grupo que rmuestren tuna clara tendencia hacia la especializacion. Esto indica que los rasgos eempresariales» son todavia comparativamente déblles y que en realidad estas explo- taciones no son sino unidades econémicas domésticas cextensas destinadas a satisfacer Jas necesidades familia- tes. Un anélisis detallado zevela dos tendencias contra- Gictorias dentro de este grupo. La primera es In reduc- ign de la importancia de Ia explotacién agricola como fuente de sustento familiar. Los ingresos en efectivo, pro- ccodentes tanto de ganancias exteriores como de la explo- tacién, se dirigen prinelpalmente a la satisfaccién de las necesidades de consumo, Las aspiraciones familiares 1, M, Coamnsewsia y A. Semwsine, op. cit, p. 9 tienden a hacer permanentes estas ganancias. La otra tendencia es que los ingresos monetarios derivados del trabajo exterior se inviertan en gran parte en la finca para su capitalizacién o para adguirir més tierras. De festa forma la familia aspira a hacer de la explotacién Ia fuente de sustento principal permanente y, en el futuro exclusiva” Por ello se puede hacer una clasificacion de- tallada de este grupo de explotaciones con Ix ayuda de findicadores precisos del grado en que estin presentes fen ellas las cnracteristicas de la empresa. En los estudios sociolégicos es especialmente siti Ia clasficacidn segin cl lugar de trabajo fuera de la finca. En las explotacio- hes que pertenecen a los trabajadores agricolas, los ras- {gos eempresariales» son generalmente més prominentes ¥ el nivel de produccion comercializable es notablemente Inayor: Eto se da partcularmente en aquellas explore Clones cuyo propictaria trabaja para los vecinos a horas. Pero generalmente se trata de gente que no esta cualifi ‘cada para obtener empleo en otras partes o que no puede Yhallar otras postbilidades en los alrededores. Ademas, suelen ser ancianos y con familias reducidas, Cuando ‘una explotacin no suministra un medio de subsistencia adecuado para la familia, y por diversas razones el tra- bajo en la industria, en la artesanta o en los servicios es dificil de obtener, estos propictarios o sus hijos se ven obligados a aceptar (abajo mal pagado para los vvecinos, lo cual se considera humillante. Por to demés, Ta retribueién en dinero es pequefia. Por tanto, la fami lia vende productos agricolas para satisfacer sus necesi- dades ms urgentes, en detrimento de sus propios nive- les de vida y del de la explotacién (allmentacién del ga- nado), Por es0 es un tipo de produccién de mercancias de chambre. Lop estudis del TER de aldens compuce tas por familias que trabajaban en fincas de este tipo gene- ralmente Tos distinguen como un grupo separado de «trax 13. M, Dawe, Siasunek ellopowrobotnikow do gospo drstwa roinega (Lat aetitudes del trabajador campesino has feaercutura), “Stadia Sosjlogicanes (Estudios. socolégeos), 1st, nt. 1 56 bajadores-campesinos». En Polonia el mimeto de estas, explotaciones es muy reducido: menos del 10% de todas Jas fincas de hasta 4 Hi, 3._Las explotaciones que son la nica fuente de sus tenio familiar y que se basan tinicamente en el trabajo familiar (posiblemente con un pequesio nimero de jor praleros contratados en el punto culminante de Ia activi dad estacional) constituyen algo més del 50 % del total de las fincas individuales de Polonia. Es en esta clase donde se expresan mis claramente las caracteristins del modo de explotacién campesino, La proporcién dela produccién de mercancias.alcamza por término medio algo mis del 50% del total; casi la mitad de la produc- cidn acabada consiste en articulos destinados al consumo, siendo el resto utilizado en la finea como medio de pro: duccién (simiente, forraje, ete). Asi pues, los raszos sempresariales» de la produccién de mercancias y las caracteristicas de 1a economia doméstica son claramen te observables. Es esencial una clasificacion mas detalla- dda, puesto que la investigacién de las tendencias dentro de'este grupo de explotaciones se basa principalmente cen el tamafio (siendo la mayoria de 5-15 o 7.20 Ha segan Ja regién), el equipo y los medios de produccién que pposeen, ef tamafio de Ia familia, el miimero de dias tra- bajados por los jornaleros (segtin Ia clasificacion adopta- da), el uso de trabajadores agricolas contratados de forma regular, el nivel de produccién y la direccién de la in- tensificacion y de la comercializacién de la produccién, ‘Sin embargo, ocuparia demasiado espacio proporcionar luna caracterizacion plena de este grupo, y en todo caso ello puede hallarse fécilmente en estudios detallados.* Otro importante indicador de la intensidad de los le- ‘mentos de en la explotacion campesina es el grado en que los agricultores estén orientados en funcin del mercado y su capacidad para estimar la rentabilidad 14. Ver Spoteceroekonomicana stutura wi. et de la produccién. Una estimactén, basada en el cuestiow nario confeceionado por ef «Osrodek Badania Opinii Pu- bliczne} (OBOP) (Centro de Sondeos de Opinién Pablica) adserito a la Radio Polaca® muestra que un 60 % de los ‘agricultores polacos se gulan por estimulos del merea- Go." Otro de los indicadores de las tendencias dominan- tes de este grupo es Ia medicion de la posibilidad de fumentar Ia produccién, por ejemplo, determinando si fa familia aspira a ampliar Ia extensidn de la finca 0 a aumentar la inversién por unidad de superficie, la me dida en que besa sa produccion en los servicios de empresas especializadas. (por ejemplo, suministradores de maquinaria agricola), cémo organiza sus contactos comerciales (sobre una base casual o permanente), et tera 4. No hay muchas explotaciones basadas en ta com: tratécién de trabajadores agricolas en ta Polonia actual. Glertamente no Mogan a 50000 (es dificil obtener da- tos precisos, por cuanto la Oficina Central de Estadistiea nno recoge la informacién*necesaria) y estin concentradas silo en cierias zonas, principalmente en las regiones cen- trales. Suelen ser fincas de més de 20 Ha, basadas en el trabajo de los miembros de la familia ayudados por tra- ‘bajadores contratados empleados permanentemente 0 a Jornal, en tna medida que corresponde a la de los traba- jadores empleados permanentemente (0 sea, unos 200 ‘dias al afio). El trabajo asalariado es un claro indicador de la actividad de empresa, y en particular de un tipo capitalista de empresa, También hay otros indicadores, Como el del elevado valor de la produccién (un promedio {de unos 130.000 zfotys) y un alto nivel de produccién co- ‘merciatizada (més del 60 %), altos niveles de equipamien- 18. B. Guteses, Reficy jek! preedsieborey (Los agricultores como’ empresaros), «Wies wspolcresna» (La ales contemparé- fete), 198, mm. 8, PD. 70 8 TSM Pome y A. Woe conceden mds peso a este factor (op. cite Pp HIS y's). 58 to productivo, de contactos con el mercado permanentes y organizados, de frecuencia de especializacién, una exten- f@ faclonlicion dal proceso preductivo istingue dos tipos de explotacion capitalista:” sng ip 2 pltalist (a) Aquellas con una superficie relativamente grande (grcnete encarta 20 suiio fnles ftt clos), pero com una escasa teenlea y wna Baja produccion de mereancis, con teabajo asfarado a Jornal 0 basado gn el pago de deudas por atte de vecinos pobres en forma de teaajo el vein pe prestadon cbals 0 maquinaria,o arvenda (letras, poga Ta deuda con su trabajo), Estas explotaciones son tpicas dela parts orien tal de Polonia en que las relaciones monelarias y de mero te han ens dnrotan, p/ Pineas explotadas intensivamente con una dussin considerable de mercancias, basadas en el Tae bajo asalarindo regular (a menudo trabajadores sin te rra gue viven en la haciends) o en el trabajo de jomale- os que Feeben salarios en efestivo El fei! constatar que estes exlotacionesrepresentan grades diferentes del tipo de desarollo cempresaral= de elacionesbatadas en el dinero y en las mereanct las sas rurles. Bajo las condiciones imporants en Polonia la explotacién eampcsioa capitalist, especial mente la del tegundo tipo, se enfrenta a una eerie. de Alfcftades en su desarrollo, tanto de naturalza econd- ‘ica alta de bracerosy el clevado coste de los jor Tes) y de natualeza social general (en el pueblo es con Geral ante Wabajerpora os vse). ts Gi cultades devivan de Ta pauta general de relaciones dela sociedad polaca. » ® 11, J. Tonen, 0 close pac nad spieceroeconomicen stra ture wii w Pace isons) trabajswobr fe ett Soe ‘Sone eno Pla Pot) ex Spt 39 5. Eeplotaciones campesinas multifamilares:* coo sesnivas te groduecin’® fines Ge 1980, Polonia, ena 1542 cooperativas de produccign que comprendian 26.000 familias Inclumos este tipo en las expotaciones «cam psinasy no solo posgue nacieron come resultado de la Epregacién de explotacones campesinas separadas, sino Sore todo porgue conservan sus Tasgos béstcos. Las coo feratives de produccidn se basta eb el abajo familar Jrana parte considerable de su produccion se distibuye Zntre las familias, ls casles, dentro de la cooperative, Caltivan pequetas parcelas lndivduales(huerto familas) EE coopratias ne abemejan a uniades econ do Téstcas etensas 0 empresas a pequefa escala organi Teas principalmente para ia efa de ganado, Pueden dis- Zngcibe dos Upos importantes de cooperatvas de pro- dccisn: 2) tas de nate claraente mares Bete tipo de cooperativas se dedica ala agicaltura especial hy Gestinada al mercado {por ejemplo, cultivo de hor- ‘alzas, crla de ganado); el tepero de fas ganancias se ice rincpalmente en dinero; regularmente se hacen Eetiaipos a los tlemibros con arveglo al trabajo reallza Gor am tipo ae remuneraclon que se parece a lade los {Rajadéres Industrials; las parcelas prvadas son ca paces de satisfacer Ia tayorla de las necesidades de con- imo de Ins familia. 1) Explotaciones cooperativas que son agregadas de pequeias granjas. Estan,destinadas ala. produccion FersGated bre todo forraje; la division de las ganaae Sas as hace on productos en expose; el producto obte- Sido a partir del cativo en comin hace posible lograr ti clevada producelon ablmal en las arcelasprivada, ert, Desviadezeniatperspkiyny roniiva, Expe- siete 3 pepe det agente), Vasoma, 191,» 18 "5 Bes datos se sehen a tay cooperativas de produclon au repartition sos bnew cn BG. fins do oo a0 abla a PASM Coopcraivas de producion con 28000 miembros (Gece seiysceny- dari extenze, 158, 0. 27 o LGrts— al trabajo realizado por las familias ‘que trabajan en explotaciones individuales son de una especie diferente. En este caso, aunque es un término ge- eral, el vocablo «agricultors no suscita reservas. Por prema pe aaa SHE Beit See eta ys de at So cob a ee fae in 9 op ene A i at a re te Definicién det término «profesion» El término «profesiéns se usa normalmente para de- nnotar tun complejo de actividades que: 1. Se diferencia de otros omplejos de actividades y se jecita regularmente. oi pres servicios otras personas de ta sociedad! 5 Gonsttaye un medio regular de subsitenca 4. Requiere una formacion apropiada que permite al inaividuo sjorcer in profeson espetesmente como fl, dace, desempetar reguarmente sus funciones en be Sefco de los dein a cambio de medis de subsistenci. 1, La defnicion de una profeslén como un «tipo de act vidal que posee valor de mercador desteca este elemento, Ver Encyclopaedia of socla”sclances, vol. 2 Nueva York, 1231, pa 18 Ninguno de esos cuatro caracteres (el tltimo de los cuales es corolario de los anteriores) es suficiente, to- mado aisladamente, para establecer un complejo de a tividades determinado. Como observa J. Szcepanski nadie conceptuaria como trabajo especializado, por ejem- plo, el trabajo de una mujer que guisa para si familia, aunque en otras circunstancias estas mismas actividades podrian describirse plausiblemente como las de un rol Ae trabajo especializado (por ejemplo, una cocinera que ‘rabajara en una fabrica de transformacién de productos alimenticios). Igualmente podemos pensar de mucha gem te que posee medios permanentes de subsistencia (por ejemplo, individuos «mantenidos por su familia» 0 que poseen Una cuenta corriente considerable), pero que no tienen un rol de trabajo definido. ‘También podemos sefialar a existencia de actividades {que requieren una formacién especial que confiete el derecho de ejercer estas actividades —eonducit un co- che, por ejemplo—, pero que no constitayen una activi dad profesional a no ser que se realicen por dinero y ‘como servicio a los demds (por ejemplo, la profesién de taxista). Por otra parte, hay muchas actividades —por ejemplo, fas realizadas por obreros que trabajan en el ‘mejoramiento de tierras— que no requuieren una forma- cién o cualifcaciones especiales y que no obstante se reconocen como actividades especializadas, Finalmente, también podemos pensar en aguellos que ejecutan wna ierta actividad desinteresadamente —lo cual muestra 4que el trabajo al servicio de los demas no es tampoco un criterio adecuado de la definicion de una profesion, aunque indudablemente es el mas importante, Asi, pues, la distincién de una profesién esté constituida por la pre sencia simultanea de clertos rasgos. Por tanto, podemos defini una profesién como un grupo de actividades re- gularmente desempefiadas al servicio de los demas a cam 2. Geynniki ksctarujace caved i strukture zawodowa (Peto res que infuyen on la especialiacion profesional 9 en fa eal fay orgenieacién. profesionates), «Studia Sosjologeanes (ES. fdios sociolglcos), 1983, nim. bilo de medios de subsisencia o —para decir de una fmanera diferte— como wn grupo’ de actividades ee Eutados regularmente y dependicntes del intercambio del trabajo del individuo. por el-de la sociedad. Esta def niclgn de xprofesine es la. que hemes adoptado en Ta presente obra Dicho sea de paso, hay que agregar que el término eprofesiony se stele usar ea Ia literatura para denotar tha colectividad de personss, por ejemplo, sla profesion snedieas la cual connota el cuerpo enero de los que eet Gan le medicin. Indiatemos este significado usando el {Gomi scategocta profesional, que. denota a total dad del cuerpo de los individos que ercen unt ro- fesions ‘X'la luz de la definicion que hemos adoptado, las usias de profesiones entmeran muchas categorias que Eerfan difelles de aceptar como ejemplos de Toles [ab0- Feles, Por ejemplo, revultaria dificil designae @ los pro- pietares (le teres, construclones o capita) como una Exegoria profesional si su sctvided se cirigirs dice fmente a kr extaccion dl benefiio y no a la explotacion 4s una empresa’ Por otra parte, debemos admitir ahora ‘ia mayoria de militantes paliios iberados como wna Eategoria profesional, pues las funciones que deserpedian fos proporcionan sus medics de sustento, Pero bajo eletas ‘Sraindtancias tenemos que aceptar que un determinado Sonjone de setvcnes a vse ee el carga de une ofeston ~y que la gente que se dedica a aquelas acti Tica po tanto de dete como pertenesen's 2 tion sole ‘categoria protesional— mientras que, en otros contertos, esas misinas actividades no son de esta ni furalesa Ello viene propésito, por elemplo, en el caso Blemensarne pofecia socjologit (Conceptos ha, Varvovi, 1983, p. 123 ctementates de sot webu ejemplo Rouren ela llamada scala de NorthHatt ver por elempla, L "Kets, Soctologea! anaisie, Nueva, York, 185, B's National Opinion Research Center, fobs and occ stele popular evetation, Opinion News, vol: 1%, 1982, im 3, pB 30 de fos ejemplos ya citados (el ama de casa, el taxista y, 1 veoes, el militante politico). En tales casos es esencial determinar si, bajo las condiciones modernas, estas acti- vidacles se estén convirtiendo en profesiones distintivas. Con referencia @ algunas de ellas, es posible dar una espucsia afirmativa; en otras palabras, estén pasando [por un proceso contempordneo de conversién en profe- siones especializadas. Los caracteres que especificamos como definitorios de tna profesién pueden servirnos aqui de criterios para incluir un cierto grupo de actividades fen un inventario de las profesiones y también de indica ores de la medida en que se ha desarrollado el proceso de especializacién profesional en un grupo particular de actividades. Aceptando los rasgos especificados como crit jos de una profesiGn, podemos determinar con mayor precision el grado en que se ha desarrollado el proceso de especializacién de un tipo determinada de trabajo y Ja medida en que puede definirse como una profesion, en base a las consideraciones siguientes: 1. La medida en que el grupo de actividades en com sideracién se diferencia de otras actividades, como de las, actividades resizadas dentro del mareo dela economia 2. La medida en que el grupo de actividades esté in- tegrado en la divisién social del trabajo sistemstica, en contraposicién a la situacién en que el productor trabaja para st y para su familia. 3. La medida en que la profesién proporciona el me- cio principal de sustento, en oposicién a las profesiones eventual. 4. La medida en que estén especificadas formalmente las eualificaciones que permiten al individuo el ejercicio de dichas actividades, y la ausencia o la presencia de instituciones especializadas en las que puedan adquivirse ‘estas cualificaciones y se puedan obtener los titulos apro- Blados, en contraposicin al trabajo que puede realizar cualquiera at Asi, pues, en vista de la tendencia contemporinea al Aebilitamiento de las funciones econémicas de 1a fami- lia, podriamos decir que actualmente el trabajo del ama de casa esta sufriendo un proceso de especializacién y dando origen a Is formacién de grupos de profesiones fondo de la formacion de ls diversas profesions re lacionadas con Ia agricultura yla necesided de examinat In dfinicion propia del agricultor dentro. del contexte del desorollo dela caltura profesional! y Ta onganizacion de tes individuos ‘que trabojan en la agrcatura Sin txibargo, otras profesiones segura lgadas con a api altura ca tanto contnten eXtiendo las eapotactones campesinas. Es difiel sugerir criterioe adecundos, pare tstimar ef grado de profesionalizacién en In agriculture, Sst como es ssimisme dif cuantfiargy Pedra medline por medio de los inputs en trabajo, por los resultados eo forma’ de preducclon, por el grado de organizacion re Gional de fa exlotalon, por teferencin ofa orenacion de mereado (jl eficiencia del agreultor como vendedor), Por la medida en que el agieultor introduce mejoras tee ees etecera, No obstante, como el simpy el interés que el agri cultor consagra a su explotacéa campesina no puoden dividrse en el interés en el agpecto de produccion por tna pare y el interes en la econoant domsiea Por ott, todas las comparaciones geneales y estadisticas de ls actividad profesional de lor agrcultoresy de los no agi Caltores son muy problemsticay® y ce itl dene Ire ‘samente los problomas que se edtudian en tal invest anclén: si ln Guetiin se lfm en hacer comp:raciones Enure dversos grupos de la poblacién rural en el nxo 15, W. Maxancrm, Ceymniki stabitsolé 1 aktywnosed aw owe} rolaikow w gospodarsiwach Indipwidualnych (Factores que inplugen ent Ta estabutad on ta actvidad profesional’ de Tos ‘pricultoras de las explorciones tndividuales),sStacin, Soc: teznes, 196, nom. 2p. 128 16. |W. F. Manono, Koneeptuatizeeia badon nad iniciatywa é aktyimoscia zawodowa i apolectna x swe! (La conceptuallzcion de ia tnvestigacion sobre fa empresa 9 le actividad profestonaes 9 socates en las conas resales), Stadia Sacjologicmo Poliiezne> (Estudios pofitizosociaess, 196, aim, 1 95 ell entre el fndividuo y ls actividades del grupo.” Pero se Sdopte el planteariento que se adopt, las. cusationes Scbre la actividad profesional del agricutor dsben tener en cucita el hecho de que estamos considerando na profesion que conjuga actividades que pertenecen ad wersas otras profesiones y tna profesign. que asimismo Consttuye la Base dela foomacion de diversas otras peo 3. Este postulado tiene que aplicarse también a Ia nocién del dlamado) cbuen agrictltors, Este concepto, 4 menudo mencionado en dacarsos publics, no tane en Sbsoluto el misino significado en todas las Areas rurale, omo desnuestra la investigacion empirica” En las zonas de cultura campesina tradicional, un buen agricltor> ts generalmente, sobre todo, aquel que posee tna buena xtension de Hiersas® Segundo, hasta en Tas Zonas en que ins aptitudes profesionales se valoran lndependientemen- te el contenido del concepto de «buen agriultos vars: puede ser um buen organizador del trabajo, un hombre Indust, un hombre con sina buena idea de To qe fs rentable product, tn racionalizador o un Sanovador de alguna expecilidad agricola, un hombre de gran expe Hencla obtenida en una escuela de petitaje agrcola © tun popularizador de la clencia aprcola. El estereotipo ceptado del sbuen agricultor» puede variar tambien de tin comunidad a otra las eacripciones proporconadas pueden constitu una bse para cracterita on cambios mnie generles que ocisren en esas comunidades. Esto CS tambien importante al trata de comprender las dif 17, D, Gnas, Aktywnose spoleceno gospodarcea ehlopow (La actividad soctosconémica de tos caripesines), Varsovia 1961 Ta, Manet, Z badar nad audorgtotem wo sawodste rola Aspects de las Investigaciones sabre la autoridad ent le profe= [ie de agrcultor). «Rosenld Soejloall Wale (eAnales de Socio. iogta rural) wo i 18 1. En los estudio lievados a cabo por el Seminario sobre Estructura ‘Soctal Rural del HER en 1960, <1 709 los que Fellenaron los cusstlonariog consideraron que un labrador que Po- fea una pequefa parcels de terra no puede califearse de ebuct ‘griultor, 96 eultades con que se tropieza al intentar convencer a los agricutores de los beneficios de tal o cual actividad. Por ejemplo, los argumentos econémicos de un ingeniero agrénomo destinados persuadir a los agrcultores de aie es irracional poseer tin caballo pueden ser falaces st én aquella comunidad el prestigio del agricul se basa en la propiedad y no en el resultado econémico de su tra. bajo® Asi, pues, tanto en la toma de decisiones précti a como en la investigacign es preciso reconocer ue hay estereotipos variables del «buen agricultors, yal pro- pagar la idea del buen agricultors es necesavio tener tna idea clara del tipo de agricultor en que se picnse, sto nos leva a otro problema en relacion con la agricultura como profesién: el delas vias dela movilidad ‘ertical dentro de la profesia Inherente a la naturaleen de la explotacion campesina esté ef hecho de que la J rarguia de posiciones de la divisiGn det trabajo esta lig. dda a la jerarquia del rango dentro de la Famili. Alcanzar Ja posicién de cabeza de femilia es equivalente a couse. guir una posiciin de independencia en la division del itabajo. La moviidad vertical en la agricultura depend del cambio de status producido dentro de Ta familia, no de ta adquisicion de mayores aptitudes, aunque, por su. puesto, el proceso de avance hacia la imadurer implica ln adguisicién de la experiencia, As, pues, el aprendiza. Je en la profesién agricola esta marcado’ por peldafios claramente definidos en la escalera de la familia campe- sina (desde cuidar de las gallinas aun trabajo cada ¥ez ris diffe que exige una mayor fuerza'y destreza). ‘4 El avance en la profesion tambien implica, como ya hemos advertdo, la movilidad de clase, el aso. de ser el propietario de una pequefia parcela de terreno a Ia posieion de propietario de tna gran explotacién, Por consiguiente, el lugar que ocupa el individuo en la fami lia y ta posicién de la familia en Ia jerarquia de clase son los factores que determinan las principales vas de vance en esta profesién. Sin duda alguna, en esta situa: 2. H. Mans, Les Poysans et la moderation de Fagr culture, Paris, 1958, p. 40. ine ae ee 97 ne 18.7 ida, el logro del dominio de cualquier rama es impor- tante, porque afecta al acceso a clertos bienes valiosos y sobre todo Ia consecucidn de estima en la comunidad local. Las investigaciones sobre Ia ambiciones profesio- nales de los agricultores nos permitirian sopesar este factor de manera més precisa, pero parece que por el momento las principales vias de promocién no se abren ‘con la mera adquisieién de aptitudes técnicas. La im- portancia comparativamente menor de lo que se apren de en la escuela y de los titulos que denoten las cualif- caciones téonicas (pues en el campo el «tftuloe supremo cs la propiedad de la tierra, y hay que esperar para alean- var una posicién independiente por més aptitudes tc ‘eas gue S° posean), conducen a una situaciéa en Ia que el nexo entre familia y trabajo es consecuencia de los rrasgos tinicos de esta profesién, situacion que, por tanto, Induce a muchos jévenes a busear su porvenir fuera del modo de explotacién campesino. Cuando el proceso de especializacion en el trabajo agricola esta bastante avanzado y aparecen grandes em ppresas agricolas con estructuras diferenciadas y especia- Tizadas se abren nuevos cauces de movilidad en este tipo de trabajo, No obstante, el ritmo de este proceso viene Aeterminado por la totalidad de cambios producidos en el campo, en Ia agriculeura y—de un modo més amplio— fen la totalldad de la sociedad, 5. En el modo de explotacién campesino, a medida ‘que crece un joven también adquiere Ia experiencia ge eral necesaria para llevar la direccién de la finca. A cada edad corzesponde una funcisa distinta, y el mucha- cho o la muchacha desempefan estas funciones dentro de los limites de la economia Familiar, pasando por todas las etapas y prepardndose para el futuro rol de agricultor ‘0 esposa del agricultor, Los conocimfentos se transmiten {niciando gradwalmente al Joven” en los secretos del cul- tivo, y el proceso supone necesariamente Ia inculeacién 21K. Demnoworses, Chlopske fultura tradgeyina (Cultura ‘campesbia radicimal), sBtnograén Poskas (+Etnogratia polacss), el 1988 98 de normas y valores morales, ereencias y hébitos es cifcos. Tanto el contenido de este conocimiento, que cons tituye la experiencia acumulada de las generactones pa sadas, como el mecanisimo de transmision conceden un gran peso a la tradicién y constituyen la base del cow Servadurismo del mictodo de trabajo del agricutor. En este sistema de transinisién del conocimiento la escuela, A principio, era un elemento extrafo impuesto desde el enierior, Restringid Ia in luencia educativa de la familia, arrebaté al nfo de un sistema armonioso de trabajo Y Vida soctal e introdujo en su mente paulas gue no eran Acordes con ese sistema: valores extras, incluso valo res que no podian realizarse posiblemente dentro de sus fronteras De abt la oposicion que esta institucion en cuentre, y atin encuentra en el campo en ln actualidad, ‘una oposicién que halla sa mds minima expresion en las diljoutades que tiene que vencer el nito aldeano para conjugar el trabajo y Ia escuela, Sin embargo, el efveulo de contactos cada vez més amplio del agricultor eon la sociedad de allende la aldea le obliga a su reconocimiew. to de la necesidad de esta institucion y sienta las bases para su adopeién en el pueblo, Pero ai bien las escuelas que imparten una educaciéa “general se. han adoptade asi por completo en la mayoria de paises, la escuela cspecializada de peritaje agricola todavia tropieza con Imicha resistencia tanto contra el reconocimiento des valor para preparar al joven para Hevar la explotacin como —y aun en mayor medida contra la aplicacion réctica de los conocimientos adquirdos en la escucla al 2. 3, Cuuasiserr, lode pokotonie chiopow (La joven gene- acid de campesinos, vol 1, Varsola, 193) 23. En un cuestionario dstribuido por «1 OBOP, cl 20% de los agricultores cousieraron quel agriultor no ie era inde: Dpensable In escuela. do peritaje agricola Ver 6. Galan Trese! Eowodowe opiniach rolnthow (E1 sentido de la profesion et Opinisn de tos agricntores, «Wies Wspalenessas, 161, nim 7, pe 24, G. GuLEsKr y A. Wrownto, Poglady chlopow ne praystlose 9 cultivo de Ta tierra." Al igual que las escuelas de educa ‘ein general basics, [a escuela de peritaje agricola se com we en un elemento indispensable de formacicn técni- ‘siendo generalmente su implantacién fruto de disposi s estatales y por tanto resultado de medidas impues- tas desde el exterior. Ademas de dichas medidas, muchos palses organizan a extension de la ciencia agronémica fen forma de propaganda educative. 6. En la mayoria de paises Ia prensa, la radio y la televisién contienen articulos y programas para los agri caltores, ast como consejos practicos para las mujeres, charlas de bricolage, etc. Ello es resultado de esos rasgos peculiares a la profesién de la agricultura, que, aunque Formalmente se reconozca como una profesién, de hecho no se trata y no puede tratar como tal. Ninguna otra {indole de trabajo esta sujeta a una actividad tan amplia, ¥ general destinada a propagar conocimientos especia: Tizados, Las cuestiones socioldgicas examinadas como parte de esta actividad son generalmente de naturaleza practica, y el fin de la iavestigacién en este campo es normalmente elaborar principios efectives que sirvan de fguia en la préctica del cultivo de la tierra. Por consiguien- fe, se estudian los cauces a través de los que la ciencia agricola penetra en el campo; la efectividad de los com sejos dados por los agrénomos o suministradores de ma- quinaria agricola y otros medios de produccién (pien- 05, maquinarla, abonos); los mecanismos reales por ‘medio de los cuales Ia nueva informacién técnica llega al agricultor: como se comunica del agrénomo o del agri- cultorinnovador a los labradores de primera linea, y de ellos a los demas; el establecimiento permanente de cler- {as tcenicas como la norma prevista por la comunidad, ceteétera.® 'No obstante, el proceso de propagar ampliamente Ia ciencia agronémiica esté conectado con un nutrido grupo de problemas soclolégicos. En primer Tugar, esta la cues- Gal (Opiriones de tos campesinos sabre et porvenir dl camp), ‘es Wapoleneaas, 1989, nam. 4p. 3D WE EM. Room, The diffusion of tunovations, elt 100 tién de la naturaleza de Ia resistencia con que tropiezan las innovaciones téenicas en la aldea. A menudo esta re- sistencia suele tener un contenido econémico: no le resul- ta facil al pequefio agricultor comprar el equipamiento rrequerido o existe un gran riesgo asociado con Ia intro- @accién de una rama particular de la produecién o la necesidad de reducir inputs de trabajo no es muy fuer ‘temente sentida debido a la ausencia de alvernativa. Sin embargo, las razones econémicas generalmente no agotan Jos motives que hacen que el agricultor sea lento en la introduccién de las mejoras. Como hemos notado, os posible que no sea persuadido por los factores econémi- 8s, puesto que st actividad esta condicionada por ottos valores, como los del prestigio basado en la propiedad y no en la productividad. Ademés, las mejoras técnica Comportan un cambio de métodos de trabajo bien esta Dlecides como norma por la educacién recibida en la familia y asi, como ya hemos observado, chocan con el conservadurismo del agricultor. Al cambiar los métodos de trabajo, las mejoras técnicas cambian también el re- parto de responsabilidades en la familia o conducen a su injusta distribucion. Finalmente, modifican el modo existente de Ia vida de familia, los habitos y las formas de actividad establecidas a lo largo de generaciones. Por Jo tanto, no es posible aislar los problemas que derivan, de la introduccién de mejoras en cl modo de explota- cidn campesino del andlisis de todo el sistema de vida aldeana basado en ese tipo de agricultura. Segundo, las innovaciones téenicas liegan al agricul tor prineipalmente a través del contacto con sus vecinos, {que a sti vez constituyen anidades dentro de la estructura de la comunidad aldeana, Las actividades externas que ignoran esta estructura la hacen cambiar en un grado o en otro o tienen grados variables de éxito, Asi, Ja introduccién, de una Innovacién a través de una familia que ocupa un lugar bajo en la jerarquia de prestigio del pueblo rara- mente tiene éxito. El respeto por un vecino y Ia aprecia- lon de Ia posicién de una persona dentro de 1a comuni dad pueden afectar vitalmente las decisiones sobre Ia 101 mente, la posicién que la persona que emprende la activi dad educativa en el campo del conocimiento técnico ocupa ‘en relacién con el agricultor es otro factor esencial: st las, posiciones del educador y del recipiente estén en pie de Jgualdad y qué vinculos los unen. Un ejemplo de la situa cin que no es Favorable de la extensién de la clencia agro- nnémica es la del agrénomo que da instrucciones al agricul tor, cabeza de familia, sobre cémo cultivar Ta tierra, en presencia de su mujer y sus hijos, Asf, pues, el problema de Ia difusion de las innovaciones agricolas rio puede con- siderarse en aislamiento de la familia rural y de la comu- nidad aldeana, 7. Ademas del Estado, las organizaciones campest nas son también activas en Ia extensién de los conoci- mientos agricolas. Las organizaciones campesinas genc- ralmente tienen rasgos especificos que las distinguen de otras organizaciones semejantes, rasgos que derivan de las caracteristicas peculiares de la profesion de agricul tor. Tienen un cardcter de clase mas o menos claro, pero ‘son organizaciones de los representantes de pequefias em- presas y de Ia agricultura doméstica. Por tanto, sus fun- ciones dependen de Ia organizacién de Ia cooperacién teatre los productores, y simulténeamente entre los ven- dedores y empresazios en los campos que les son bene- ficiosos. Por ello los problemas econdmicos pasan a pri- mer plano, Una organizaciéa campesina debe atender tam- bin a Jos asuntos de las familias que residen dentro de los limites de una cierta comunidad territorial, asf como ceneargatse de los problemas politicos locales. En conse- ‘cuencia, una organizaciéa campesina tiene que poseer algunos de los atributos de un partido politico, de una cooperativa y de una unidad territorial auténoma. Bajo Jas condiciones socialistas, en las que no existe base algu- na para la diferenciacion de clase de tipo capitalista en Ja aldea (a causa de la socializacién de los medios de pro- duecién), ni condiciones que promueven su intensifica- ‘i6n,tiende a resultar una identificacién de la organizacién ‘campesina con la organizacion cooperativa o con las auto- 102 ridades locales. La formacién de organizaciones de jorna- Jeros ciertamente crea [a base para la aparicién de orgs nizaciones del misino tipo que hallamos en otras profesio- nes, pero estas organizaciones no extienden sus actividades ppara incluir las explotaciones eampesinas, aun cuando en faguicl pais existan sélo economias campesinas maltifami- liares en forma de cooperativas de produccién. Los problemas asociados con la profesida de ta agri cultura que hemos estado tratando constituyen al menos tuna base preliminar para esclarecer la posicion del agri coultor en la estructura profesional de tna sociedad. De- Jando aparte el nexo entre estructura profesional y es- tructura de clase, que es particularmenté fuerte en este caso, debemos observar que, debido a los rasgos objeti- vos de la profesiin de agricultor, acbe contemplarse fuera de una categoria profesional especializada y den- tro de ese sector de Ja organizacién social del trabajo gue todavia no se ha visto dominado por completo por Ta pauta de la profesionalizaciéa, pero que esta sometido y ts afectado por dicho proceso. En consecuencia, la eva- luacisn relativamente alta de la profesién de la agricul- tura (en opinién de Ia poblacién urbana) no corresponde su atractlvo objetivo, es decir, atraccién medida por el flujo de nuevos adeptos de la profesién, En los estudios del ocaso de la agricultura como profesién raramente se nota esta contradiccién entre la evaluaci6a social y el estado de cosas real, y tampoco se advierte que la Situacién no puede cambiar fundamentalmente en tanto Ia agricultura permanezca el patrimonio del modelo far miliar de prodiecisn, lo cual generalmente significa que el agriculior es alguien que ha nacido en una familia feampesina y que se hace cargo de Ia explotacién por derecho de sucesién, 3. La familia campesina La familia ocupa un importante lugar en Ia literatura sociolégica. Ello resulta evidente no sélo por las nume- rosas obras consagradas a clla? sino también por la po- sicion que ocupa en la mayoria de los sistemas tedricos 6 en los libros de texto generales sobre problemas socio- Tgicos y etnogréticos. La especial importancia del tema radica én Ia significaci6n de la familia como grupo o ins- titucién primarios en relacién con todos los demés. Al igual que sucede con la sociologia industrial o la sociolo- sia de las profesiones, la mayoria de los esquemas ma- crosociologicos consideran Ia sociologia de la familia como una disciplina cientifica separada con su propio objeto, su propia terminologia y su propia metodologia. ‘Ademés, constituye una esfera que dispone de una lite ratura comparativo-descriptiva sumamente rica® (princi- palmente etnoldgica) y, en muchos campos, un cuerpo feérico y unas proposiciones generales bien desarrolla- dos y establecidos. En estas circunstancias es facil sen- tiese inclinado a remitir al lector a obras especializadas , ignorando los problemas de Ia familia en sf, concen- ‘arse en un estudio detallado de la naturaleza de la fa- milla campesina. Sin embargo, es imposible ignorar por completo los problemas de la familia en general, pues para poder relerirnos a las caracteristicas especiales de {a familia campesina es necesario primero hablar de los rasgos comumes a todas las familias o al menos de aque- Tlas entidades que se suclen subsumir bajo la denomina cidn de familias, El caso es que el anilisis de la fami- Tia campesina, a diferencia del anlisis, pongamos por 1.5, Seerepasast, Socjlogia: ronwoj probiematyki { meted (Sociologia el desarrollo desu objeto 9 métodes), Varsoul, 16 2G. P. Munpuce, Socal Siracture, Nueva, York, 190. 105 ‘caso, de los problemas de una empresa o profestén, sien- ta las bases de observaciones sobre la familia en general. Y¥ al hablar, por ejemplo, de los cambios habidos en la familia actual, In mayorfa de Jos autores de hecho to- ‘man Ia familia campesina como marco de referencia. Por festa razén, sera de suma utllidad resumir ciertos facto- res generales que los socidlogos han establecido sobre Ia famili Conceptos pretiminar definicion de tipos de familia 9 funciones de fa familia sla enti gnenns como ma Pita eat ane es ees ee see PS ay Bea eens nS tliat ea eee eee ee cree ree ae ed" eta ck ei eae 2 ome egies teeta at atts ial ce es tne re se: eater tes Foor Se ae frie aa ee cena ces Sioa eae ee ene 4, Por ejemplo, en el Dictionary of sociology, ed. H. Pratt Foirehtla, Nueva York 983, p. 11 "TPare una definicin y tn estudlo més amplio de los tipos y funciones dts familia Fes por elena, J. Seeeucon, le rnentarne pojecta socjologtt cts b S'En‘el lengusle cofdiano a veces el vocablo familias se visa principalmente com Feferencia & log parientes distanes, 105 tarse en el trabajo cientifico; se habla més bien de lazos de parentesco mas préximos © mis distantes (objetiva ‘o subjetivamente considerados), de vinculos familiares is fuerles o mas débiles o de un efrculo familiar més amplio o més reducido, ya se determinen en base a erite- rios objetivos 0 a sentimientos de proximidad. En esta ‘obra el vocablo «familias abarca s6lo a las personas uni-)/ as por Tos vinculos més préximos de consanguinidad (padres ¢ hijos), que conviven y que por rogla general comparten una economia doméstica.) = 2, No vamos a entrar aqui en el principio de clasi- ficaci6n de los tipos de familia sogiin el nimero de per- sonas que se encuentran unidas por los vinculos del ma- trimonio (matrimonio monégamo, polfgamo o poliéndri- 0) ni segin la eleccién de cényuge (endogamia y exoga ria). Los tipos de matrimonio pueden clasificarse ade- més segiin el principio de quign decide la eleccién de los eényuges (las mismas partes interesadas o sus padres) 6 segiin los motivos dominantes en Ia concertacién del matrimonio (econémicos, prestigio, amor). En este sen- tido cabe mencionar la jerarquia de prestigio y autori- dad en la familia, o sea, famillas patriarcales y matriar- cales, por una parte, y familias basadas en las relaciones {gualitarias entre los esposos, por otra. La estructura de Ja autoridad en Ia familia generalmente va ligada al sis- tema sucesorio (nombre, patrimonio, posicién social) y a las reglas que rigen Ia consanguinidad: patrilinesles 0 ‘matrilineales. Con ello también va asaclado el principio residencial adoptado en la sociedad dada: si la joven ppareja vive con los padres del marido (matrimonio pa- trilocal) 0 con Jos padres de la mujer (matrimonio ma- trilocal) ‘Ademés de los principios enumerados, es convenionte clasificar las familias segtin la finalidad del matrimonio: sies del interés de la familia (el linaje) o del interés de Jos individuos y su deseo de felicidad individual. Esta diferenciacién corresponde a la clasifcacién anterior de Jas familias segin los motivos que presiden Ia eleccién del cényuge. También es esencial distinguir a las familias 107 segiin el tipo de relaciones mantenidas con los parientes dlistantes, que yeneralmente vienen definidas por la cos- tumbre. Podiiamos citar muchos més principios de clasifea- ion de los tipos de familia. Estos dependen del propésito Comaitivo de cada cual: por ejemplo, segin la clase o la shliacién étaica, Sin embargo, los tipos citados més arri- ‘ba son Tos més iraportantes para caracterizar a la familia J los cambios que experiments, y contituyen el marco Zonceptual usado con mas frecuencia. Los elementos de dicha tipologia son, al mismo tiempo, las caractcrst- fas que distinguen las diferencias més importantes entre {a familia de In clase obrera y la familia campesina, por cjemplo, Aparte de situar a la familia dentro. del mateo de la clasificacin, an elemento importante que caracte- tira ala familia cs el de las fanciones que desempetia, 3. Bn {a literatura estas funciones estan mas 0 me nos diferenciadas. Generalmente se menciona la funcién bioldgica del matrimonio como una institucién aprobada socialente que regula el tato carnal y la reproduecin. {lo implica cicrtas Funciones econdmicas de ta familia, ‘qotablemente la de asegurar Ia exstencia de sus miem bros que no pueden obtener los medios de subsistencia por stis proplos recursos (cobre todo nifios pequefios ¥ Encianos)} Otra de sus funciones econémicas es la de dirigirfreconomla doméstica. Entre las otras funciones feconémicas 0, en un sentido mas ampli, sociales de Ia familia, cabe inclu, en parte al menos, las siguientes: 4) Seguridad (proporcionando el sustento material ¥y otros tipos de asistencia al individuo en tiempos de trance dificil y de crisis; Ia familia extensa suele desem- pefiar también esta funcién). ’) La transmisién de la herencia (tanto material como cultural). ‘e) La presiacién de facilidades para el iniclo de la vida del individuo y la determinacién preliminar de su posicion en la jerarquia de la estratificacton, basada en Ia renta, el prestigio y Ia sutoridad.y 108 Estas fanciones también son desempetadas, hasta ciero punto, por los patients ms distantes, La fia desempera sstnisto funciones edatves ou clin me didn sotallzacion Yel contol de a educaton de los tls, la prestacon d los conocmientos que necestaran Gala vias in inelencn ou elon de os valores ¥ Hor tas dominantes en la comunidad y su inicisién en Tos fmipos e instituclones socials Tas fimciones eltarates dela feilia Yan unidas a las anteriores{ La economfa domestica no eg slo et lugar donde se producen tienes —tanto materiales como cul turales sino el Tugnr donde se consume} a organiza cion del Scio, la diversion, ete, para los iicmbros de la familia dentro fucra del hogar es of de los sector de la vio de familia, Finalmente, a familia. sumist fin sustento moral y emocional sus mietmbeos fn thales, constrayendo tna defensa contr ef aistamtente social y Ta soledad, asf como satisacendo su neces Gb dicha personal de aceptaciay de comprenston y de canito, Estas fancione von paricularnentsimportaies on la actustidady siempre sn deempenadas Por laf milla en mayor o menor media, “4 ‘La dotcripcin de las funciones de la familia pro- porsiona tambien ua base para casfar sus poe, Ase Inismo os permite compart Tas caractristicas de familia de diversas colcctividade, comunidades © ca tuts y descubrie los cambios prodacidos et eset coca nidndes o en la sociedad en general Puode ser analidcements Gal hroducr, entre esos concsptos prelminares ele la diferencacon de as seraat fates clos dela vida familar: A eto e lana peau mls pen dng 0 ambi trig de I sociedad en general Asli podemcs dstagur Gl prs pevedo da nro ae det nano cos hin pareja con mis pegueto (a ee reper cave distingtr entre ol periodo ea que les nites ne pur den trabafar el petodo en que oyudan 0 desempotan Gieras taveas en la eplotacisa fama) y el peiodo en ie Tos hijos han slesnzado ya Ta Independencia) En 109 cada una de esas etapas, ocupan el primer plano dife- rentes funciones familiares, las cuales son mas amplias durante el periodo en que la unidad domeéstica esta for- mada por lor padres junto con los hijos que son aun dependientes, La especificidad social de ta familia campesina ‘Tomando en consideracién todos esos criterios que ‘usamos para distinguir los diversos tipos de familia 0 efinir sus funciones, la familia campesins es més tra- diclonal que las demds. Primero de todo, se trata de una familia mayor. En Polonia, en 1960, ef némero medio de personas por familia era de 309 en las ciudades con- tua 3,86 en las zonas rurales? En los Estados Unidos, en 195%, la familia urbana tena un promedio de 3,5 perso- nas, la familia rural no agricola de 3,82 y la familia agri. cola de 408, Asimismo, la familia campesina tradicional se compone generalmente de tres generaciones. En las partes de Polonia menos influenciadas por la industrializaclon todavia perdura una forma de familia de tres generaciones. Los abuelos controlan la economia doméstica (y/o Ia explotacién) conjuntas, junto con los hhijos ¢ hijas casados (al menos en principio), en una re- sidencia compartida con uno de Jos hijos; 0 —més es- trictamente hablando— uno de los hijos reside con los padres en la morada comin. Este ultimo fenémeno com: porta varias pautas diferentes de relacién que requieren ln tratamiento separado, En Polonis, el matrimonio pico en el campo es patrilineal, y puede ser patrilocal, atrilocal o neolocal, mientras que en la ciudad es por 6 Rocenik staystyecny (Anuario estadistcn), 1962, p. 20, table 8 4. "EM. Rocks, op. cit. 13 4. F Zoot, ‘Secjoiogiame podstawowy ekolopit tudekief (as bases soctetogieas dela ecologts humana), “Ruch Pravniczy, Etonomicany { Sosjologiemes («Ei movimento Turidieo, Beano: taico y Sociolgicon, 1938, nim. 1 110 lo general neolocal. En lag zonas rurales Ja pauta de elec ign del conyuge revela fuertes elementos de endogemia dentro del marco de la comunidad aldeana local? En la aldea polaca, los padres todavia tlenen un importante papel en la eleccién del cényuge. Las ventajas econdmicas Sel matrimonio se tomian a menudo en consideraciéa y también persiste el principio de dotar a los esposos cuan do se casan. La familia campesina, asimismo, se distingue por una tasa de natalidad mds elevada, En fa Polonia de 1961, la tasa de natalidad por 1000 era de 11,1 en las iudades contra 15,1 en el campo." La familia campesina es ms estable; el divorcio es més raro en e] campesinado qui en otros medios sociales. La jerarquia de la autori- dad y prestigio en muchas familias campesinas presenta fasgos claramente patratcales. Las interes dela fai ia y su explotacidn tienen un importante papel en los ‘objetivos del matrimonio, Los ligimenes con los parientes ‘mas distantes son mucho mds significativos y mas dura- bles, y también suelen diferir de las formas de relaciones de los ambientes urbanos, Las funciones de Ia familia campesina son més diver- sificadas y se desarrollan a una escala més amplia. La familia campesina dirige una economfa doméstiea que es al mismo tiempo una empresa, cumpliendo ast una importante funciéa de produccién, pero como las redes comerciales estin menos desarrolladas, hay otras funcio- nes econdmicas que tienen un alcance més vasto que en las ciudades. Las funciones culturales de la familia son de mayor importancia por las mismas razones, con Ia ‘matizacién que el tipo de entretenimiento cultural —en el amplio sentido del término— es peculiar a Ia aldea. Debido a la importancia de Ias funciones econémicas de Ja familia, hay menos tiempo disponible para esparci 9. M. Iasnexs, Posafabrycene srodowisko spelecane (EL ne dio social fuera de ia fabrica), «Studia Socjloglemes ( Sats Sate ea ts SEAM Sata Wine aol cms splnsnconperng toe ead oe es fo oe ao ee a ae cn, a ivi comer ea ts epee ee teams ie dag conngs tee ee re a ee ti 116 hijos. La superficie de tierra y el equipo y utensilios de labranza transmitidos a los hijos constituyen Ia base del prestigio que los demas les conceden y de su propia va- Joracin de la manera en que han desempefiado cumpli damente estos cometidos, Esta es la base de Ia identificacisn observada de la familia con la explotacién y de Ios intereses individusles con [os familiares. Por ello, los intereses de la familia y de la explotacion ayudan a determinar Jas tareas que Ja nueva familia campesina debe emprender. Esto sirve de puente entre las funciones econémicas de la familia y sus funciones de procreacion. Los hijos son a la vez herederos y trabajadores de la explotacién, Como herederos son copropietarios, pero debide a la for ‘ma patriarcal de la familia campesina esto no se expresa generalmente en términos de participacién en la jerarquia de autoridad de la familia, La explotacion debe asegurar el mantenimiento y la dotacién de los hijos, mientras que éstos deben hacerse cargo del funcionamlento de aquélla Esto entrafia la evaluacién de los hijos no sdlo desde el punto de vista de su valor como trabajadores. En la fa- mila tradicional, el acto de dar a Inz un hijo se considera tun hecho de importancia para la explotacion en lo que se refiere a su continuidad futura. En las regiones en que consuetudinariamente el primogénito hereda Ia explota- cin de su padre, se le trata de un modo diferente, Se le familiariza con todos los asuntos de la familia y tiene un papel mas importante en todas las decisiones relativas 2 Ia familia y a Is explotacion. Las costumbres que rigen la sucesién varfan de un pais a otro y de una regién a tea, pero en la familia campesina tradicional, por regla zeneral, la posicién de los hijos viene determinada con aruaglo a} iteress dela expltacig, (En relacién con lo que acabamos de decir, debernos paraF mientes en Ia cuestién de la tasa de natalidad. Asi, segtin datos estadisticos, nacen y se crian més hijos en Jas familias campesinas més ricas 0, mas estrictamente hhablando, en familias que poseen més tierras. Este fe- némeno tiene diversas explicaciones: matrimonio més 47 temprano(* mejor estado fisico de las mujeres, etc, Pero fasta ahora no se ha podido confirmar ninguna de estas Iipétesis. Parece que’ este fendmeno (aunque. Uende a deeaparecer, como cabe esperar) cambia fundamental snenfe el rier aceplado universalmente de que hay wn neno entre la tasa de natalia y ln rigueza. En la so Shoded en general, la tasa de nataidad es inferior en las Categorias sus ricas de Ta poblacién. Sin embargo, el Sampesinado consttaye una cxcepion a eat Fgla. Como sl nivel de ingresos esti estechamente correlacionado con fas dvisiones de clase abe pensar quo las diferencias de fsa de natalidad se dan mis entre clases que entre & tegorias de ingresos) ‘No obstante elas clases que son entidades cultura- tes la dependencia de la tasa de nataidad del nivel de tngresos puede variar de la sltuacion que se da en el resto de fa sociedad, y en los grupos sociales tradilo tales puede producise hasta la situacion Inversa, Inde pendigniemente de como se expliquen las diferencias de Eis de natalided,sefalan sna fnteresante rlacin entre fi samaiio de la explotacién y el tamato de Ta familia El dcbilltaniento de esta relacin esta en armonfa con Js pantas del cambio rorl contemporaine, J Como ya hemos mencionado, la familia campes conserva rasgos patiacales Ineuso aclualmente en mie has repiones de Polonia. La palit pattlareal se corres pone con sus funciones. Como el equipo de produecién etna pequotia empress, 10s miembros de la familia es thn sujetos a la gutoridad del padre. Es él quien decide tos fo cambios a festa calla clot acm mie trabaje hay que hacer y cuéndo, Sa autoridad deriva Secor no sélo ol administrador de In explotactén, sino 15, W, Sie, Wapato rocwo rode eps ff yospodarstie (El desarrollo contempordneo de ta familia came Seckea'y tet mio de explotcion eampesina), Wroclaw, 199. Te” cucstoari dt TR de sre ia moderate de te agrcutina mostraba que’ en principio et propletatiode cxplotacion decide, en lo que fespecta a fa Introduccion de me Joras en fa explotaldn, sia constftar con el resto de I fami, 118 su duefto, El padre, y después de su muerte la madre, decide sobre Ia dote de los hijos, sobre la transmisién de Is explotacidn a los mismnos y sobre todo cambio en el tamatio de Ia explotacién, tanto en lo que se refiese = superficie como a otros medios de produccién. Los requerimientos econémicos de la explotacién refuerzan la Solidaridad de Ia familia, determinan sus diferentes funciones de produccién —con las que estin asocindas diversas posiciones en la jerarqufa farnifiar— y la manera fen que dispone de sus ingresos. La disolucién de Ia far milia campesina equivale a Ia desintegracién de la explo- tacién y por tanto es un problema mucho mas difiell y complicade que en otros tipos de familia. Al considerar el nexo entre el sistema de relaciones, ¥ sobre todo la disposicién de la autoridad en la familia, asi como la naturaleza de Ia explotacion campesina como tunidad de produecién, es necesario tener en cuenta Ia relacida existente entre el tamafio de Ia explotacion y el ciclo de desarrollo de la familia.” Podemos distinguir varias fases. La primera do ellas es cl inicio del matrimo- nio; la pareja casade generalmente empieza con una pe- queia explotacién (0, en ciertos paises, con una finca arrendada). En esta etapa normalmente no goza de plenos derechos sucesorios. La juventud de la pareja y Ta relativa libertad de que goza la mujer por la ausencia de hijos ‘hacen posible una considerable inversién en trabajo y Ta superficie de Ia explotacion se extieade gradualmente ‘Se amplia mas en la segunda fase, cuando nacen los hijos. Ta necesidad de mantener a la familia impele a la pareja 2 intensificar el trabajo, en el que los hijos empiezan a participar a medida que transcurre el tiempo. La explo- tacién alcanza su punto msximo durante la tercera fase, cuando Tos hijos Tegan a la edad en que son trabajadores productivos maduros, pero atin no estén casados. En la cuarta fase, los hijos se independizan. Entonces el eave jecimiento ‘de los padres y Ia reduccién gradual de su 1, Tym Sumy, Setloy of rar te, Nem York, 15, 119 aportacign al trabajo de la familia, onto con la patida Ae fos hijs,conlleva una dismiaucidn dela supericie de ff explotacén, Aun cuando no se proceda a ninguna de wisn de a tera ence los hijos, In necsided de pagar Suotas puede cbligar sla fanilia' vender parte de ela Ta ter puede verse reduc al tana de una peqta paveeln oon que low padres se qucdan de por vida. Pero Bi conviven con un joo na hij, Ta explotacion se ve fenoralientereducid al tamato que tena cuando empe i'l familia, La coneaion entre el tamafo de fa explo- tacigny elect famliar ex evident en la relacion esta Alstcamente confrmada exe superficie de exlotacion 9 edad del cabera de familia, Ea fas familias de tes ge Jeracones (atin comunes en Tas zonas ruales de certo palsy, como Tela) el mecanisna descrito opera 2 lo Tengo de un periodo de tempo mayor y de un modo més complicado, ‘pero ello no implice ninguna, modiieacion Fimdamental de ts observaciones anteriores. “ET tipo de produccin determina Ta pouta del sis- tema educatvo. En la Laila campesina el niN0 e9 edu Si en el curso de ov trabajo. A medida que madura tl'aigo se encarga de cometidos cada vez mds difies y Ghe suponen nis responsabilidad, y cada ver més los eMiacionalmeate asigiadoe al sexo aprepiado. La asa Glan de nuevas tareas es la expresion de la posicién de Status que el nio ocupa ela failia¢ indica el estado lin Mesnzado chs adore socal. El nto adquire rica en la prodaccin y pastas de comportaniento, ast emma normad eicas;aprende lo que tiene que hacer y ad shulse une compronsign de positon en la comunidad Theat A medida que alcanaala'madurez 3 se hnce cargo de mde tarcas productves,elnlfo va oeupando un Ingar oe Ti Suebio y'adquiere un conocimfento del mundo ex ‘Shor ET proceso de educacon a saves de fa adqusicion Ee tna mayor efiacia en Ta produceiin « menudo halla Scptoakin on los rituales cortespondientes. As, en Ia fa SIRS Campesina hay tina corelactnestita entre ma Tuver blolgica y social madurez como productor. a sutfarer bldgice coustitue Ta bese, pero Tn asuncon 120 de nuevas tareas econémicas por parte del nifio, cone ccionada por su edad y fuerza, determina su posicién en Ja familia y en la comunidad aldeana." 55. La Independencia del nifio de la familia xe produce ya sea por el matrimonio y su traslado a su propia explo- tacion (en el tipo de familia de tres generaciones 0 i mediatamente, sino después de la muerte del padre), ya sea abandonando la familia y la comunidad local para trabajar en una profesién no agricola o en una gran em: ppresa agricola. ‘Semin la costumbre en vigor, 0 bien se divide la finca entre los hijos © bien un heredero se queda con ella y resaree a sus hermanos y hermanas. La costumbre deter- ‘mina, asimismo, cudl de los hijos debe permanecer en la casa paterna y cuales de ellos deben buscar otra salt da, bien casindose y montando sus propias explotaciones, bien cambiando de profesién. El mecanismo de la suce- sion, incluso en el caso de particién del patrimonio in- ‘mobiliario familiar, spira a la preservacién, o a la men disminucién posible, de Ia explotacién familiar existente. EI hijo que permanece en su hogar compensa con su ma- ‘simonio la tlerra entrogada a sus hermanos y hermanas 6 Tas pérdidas sufridas debido a las cuotas que ha tenido ‘que pagarles. Por alain tlempo a veces lleva 1a explote- ccidn juntamente con sus padres, pero generalmente, con Ja Tegada de los nietos, los abuelos se retiran a la par- cela de tierra que se les ha reservado 0 conciertan con ‘su hijo la prestacién de una renta vitalicia a cambio de entregarle las riendas de Ia explotacién. Cuando las po Sbilidades de abandonar el pueblo son escasas, surgen ‘a menudo sivalidades entre los hijos sobre In herencia, y la posicién del heredero es ambicionada. En ciertas Condiciones (cuando no puede dividirse la explotacién) Jos demas hermanos y hermanas deben encontrar tra bajo fuera de ella si no quieren verse privados de la base para fundae una familia.” 18, Cuuaststee, op, ot, p. 25 Ty WG. Hormisy Zar Dynaneit der tndustiltas Gast 12 La particién de la explotacién es siempre la peor so- lucién, ¢ incluso en las regiones en que ésta se permite, el temor de la fragmentacién y las perspectivas consi guleates de existencia en una parcela reducida es un factor que estinnla constantemente la emigracién det campo @ Ja ciudad, o de zonas de minifundio a znas de grandes explotaciones 0 a regiones bajo colonizacién, si es que existen. Bajo tales condiciones los intereses de Ja familia y de la explotacién determinan Ia direecién del porvenir del nifio—tanto si sigue la agricultura como profesién como si tiene que abandonar la familia y el pueblo, La situacién es diferente en las sociedades con cre- cientes oportunidades de trabajo fuera de la aldea y fuera de la agricultura (y en que la cludad es muy atrayente). esta situacién In rivalidad no se centra en sobre quién se va a quedar en el patrimonio familiar, sino en quién va a abandonarlo. Por regla general, aquellos aue la fami- lia considera que tienen mayores posibilidades de éxito fuera de la aldea son los que se van. No obstante, en general, Ia explotacion campesina no se queda sin suce- sor” en tanto haya hijos en la familia. En las familias ‘campesinas las obligaciones que los hifos sienten_para ‘con la explotacién y la familia son muy fuertes ¥, como ‘miestran las investigaciones, éste es el principal motivo ppara que un hijo permanezca en la heredad aun cuando ho le guste el trabajo agricola y prefiera otra profesién.* Ta situacién es diferente en las explotaciones multifa milliares (cooperativas de produccién) en que el senti- miento de responsabilidad hacia la explotacién y Ja far mnllia es incomparablemente menor, y los efectos restric- tivos de la propiedad o de la sucesién s6lo ejercen un Cafe, Wirschattcoiclonische Bemerlingen: Beige cur So- tei der indstreon Geslschaf, Dotan, 10. aM Poms Mirae ¢ waldo mas, ety’ Bp. 70 3 3 At chm, Mlod! rnc) swobm exivode Tides gar caitores ons profstn), Wes Wapolessne> (ea Aldea Con- CSmpordnea 8" nim. 12 influjo limitado.® En tales casos Ia joven generacién con- cibe el trabajo sélo en términos profesionales y, si no existen restricciones administrativas especiales, abando- hnan consecuentemente la agricultura En las familias campesinas los vinculos que unen los Jovenes 2 la explotacién son atin muy fuertes hoy dia, ‘en gran medida la familia decide el destino del nifo. Por ello, Ja regla es que Ia profesién de agricultor pase de padre a hijo. Esta pecullaridad, junto con otras, es con Secuencia de la naturaleza del modo de explotaciéa cam pesino. “Los fenémenos que hemos descrito —desde el inicio de‘una familia hasta el retiro de los padres con una anua- Bdad— difieren en muchos paises y regiones, segtin el tipo de familia, el sistema sucesorio, la intervencién del Estado, las regulaclones legales, la influencia de la socte- dad industrial sobre Ia aldea, ete. A pesar de la natura: Jeza indudablemente distintiva de las explotaciones mul- tifamiliares, es decir, las cooperativas de produccién, también en ellas el lazo familiar con Ia explotaciéa es el rasgo principal que distingue a la familia campesina de los otros tipos. Sin embargo, la especifcidad caracteri- vada aqui corresponde 2 la familia campesina tradicio- nal. Actualmente se estén produciendo considerables cambios, como ya hemos visto. Pero el esbozo de los tasgos de Ia familia tradicional era indispensable a la hora de considerar estos cambios. Cambios de tas formas de la familia campesina moderna Los socidlogos que estudian la familia estan de acuer- fen general en lo que se refiere a las pautas de cambio 22, Ep comuniceciones personales mandedas a un coneurso de In ZMW (Sindlcato Rural de Jovencs), convocado en 1983, 10s Sovenes frecuentemente se mostranan clapuestos a vivir en coo ferativas de producclén, pero slo. porgs estaban, convencidos Se que les seria mis fae ise del pueblo, dado que sus obliga ‘canes para con ln familla y la explotacion serlan asumidas por J cooperstiva 123 de Ja familia moderna.” Solo discrepan en su evaluactén de esos camblos: en si constituyen una prueba del amor- tecimiento 0 degeneracién progresiva de esta institucién {9 sélo de un cambio de sus funciones y contenido." De- Jando en manos de los especialistas la evaluacién de los Cambios, aqui sélo cabe sefialar las tendencias generales ‘de esos cambios sobre los que existe un acuerdo consi derable. ‘Hay acuerdo sobre la transicién de la familia de tres sgeneraciones a la familia reducida formada por padres e hijos, En las zonas urbanas es excepcional que Ios hijos y las bijas casados vivan con sus padres, y cuando ello ‘ocurre viene dictado por Ios intereses de 1a joven gene racion, Mas freeuentemente, tan pronto como los bijos Se casan, o incluso antes, cuando empiezan a ganarse su sustento, abandonaa la familia y fundan sa propio hogar. La escaser de viviendas, y la necesidad de las mujeres de tomar «in empleo, pueden retrasar este proceso. Pero las aspiraciones a fndar un hogar independiente son ex: traordinariamente fuertes y se materializan tan pronto como se disponen de los requerimientos materiales mi- a familia moderna es més pequedia no solo a causa de la reduecion del niimero de generaciones que conviven ‘bajo el mismo techo, sino también como consecuer del control de natalidad. Con el desarrollo de 1a higiene ¥ de los servicios sanitarios, la mortalidad infantil ha descendido considerablemente. El nifio que hoy dia viene fal mundo suele nacer como resultado de una decisién y de un acto de voluntad. El cambio del tamafo y la pata de ta familfa, y las diferentes actitudes hacia fos nifios y el mejor cidado de los mismos, estén asociados con los cambios de los fines del matrimonio, que actualmente se cifran en la fe licidad personal, Su motivo més frecuente no son los in- 23, Re Hl Melven y C. . Pics, Society, Londres, 1961, np 250 y sigwienicn Route, Materiien wur Sotiologte der Familie, Berna, 124 tereses de la. familia, sino los del individuo, su deseo de sustento moral y emocional y de seguridad contra el ais- lamiento en nuestra sociedad atomizada, Esto provoca cambios en la eleccién de pareja, que suele basarse més en el amor y en Ia atraccién muta. Actualmente la elec cla romnticas es un fendmeno universal y generalmen: te se reconoce como el valor que desear* Este aumento de la importancia del elemento romantico en el matrimo- jo est asociado con cambios en la pauta de las rela nes enlze los céayuges, La pauta universal es la fami Tia igualitaria en Ia gue ambos esposos (y cada vez més también los hijos) tienen igual derecho a la dicha personal yy su igual participacién en las decisiones que afectan a Su destino comtin. Esto es resultado tambicn de la inde- pendencia de la mujer, que en Ia sociedad actual sigue cada vez con mds frecuencia su propia carrera, Estos cambios, y en particular Ia irrupeién de la mu: jer en el meteado de trabajo, conducen a una disminu- ‘ida de las actividades de la familia como unidad econé- mica, Las obligaciones domésticas son asumidas cada vez mds por los dos miembros de la pareja, y la multiplica ‘ign de cafés y restaurantes, de servicios, y la mecaniza- ‘lén y modernizacién del hogar, limitan considerablemen- te el dmbito de las actividades domésticas. En ciertas esferas también se produce una disminucién, 0 mejor dicho un cambio, del papel educativo de la familia: en jgran medida se ve reemplazada por la escucla y otros Ccentros educativos. Pero en las esferas en que la familia todavia participa en a educacién del nifio, desempetia sus funciones atin mas plenamente que en el pasado. Su principal contribucién radiea en el complemento de la feducacién formal recibida en Ia escuela (que a menudo ftesta las cabezas de los alumnos con el contenido de los libros), proporcionando al nigo an apoyo emocional. ‘Asi prepara a los jovenes para la vida de la comunidad tal cual es. La familia ademas brinda al nifto, dentro de 25, 5, Cuuasnsser, Kultura amarykanska (Culture americana), Varsova, 1962 125 Jos limites de sus propias potenclalidades, una posiciéa social definida cuando esté listo para empezar una vida independiente. Las posiciones sociales, por supuesto, es tan conexas con la organizacién de Ia sociedad, con el sistema de estratificacién especifico al sistema socialista © capitalista. Sin embargo, la influencia de la familia para asegurar la Futura posicion del nifio es innegable en aan bos sistemas. Las funciones de «seguro» de la familia también cam- Dian. La amplia extension de Ja seguridad social propor- ciona més frecuentemente a las gentes de edad avanza da los medios de una existencia independiente. Por Io tanto, las funciones de eseguro» de la familia son en gran medida de naturaleza emotive moral. Las actividades culturales de la familia moderna cam- bian también més que disminuyen, No cabe duda que la existencia de centros culturales especializados (cines, sa las de conciertos y teatros, cafés y Ingares de diversi6n) restringen ef papel cultural de la familia, Pero la televi- sidn, altamente valarada en Ia sociedad moderna, los la- 208 de amistad y de camaraderia, asi como el contacto con parientes distantes, mantienen el papel cultural de la familia, aunque su mbito y contenido estén cam- iando, Los cambios producidos en la pauta de Ja familia mo- derna han debilitado seriamente su solidaridad. Ahora que Is felicidad personal se ha convertido en el valor principal, la familia se ve expuesta a In desintegraclén formal 0 de hecho) si uno de sus miembros considera que este valor deseado no puede encontrarse en ella. El miimero de separaciones y divorcios esté aumentando constantemente, El crecimiento de la frecuencia del di vorcio refleja el aumento de Ia importancia de los lig ‘menes emocionales que unen a las parejas casadas, y des. de este punto de vista ello forma parte inseparable de los cambios sociales generales que tienen lugar en el mun- do de hoy. sos cambios en la familia moderna apareeen en todas las sociedades. Se detectan en un grado mis © menos 126 avanzado segin el estado general de desarrollo de Ia ci- silizacion en los paises y sociedades concretos. Las ma yyores diferencias existen entre las familias eampesinas y las de otros ambientes y grupos sociales. La pauta do 1a familia moderna —igualitaria, con funciones econdmicas restringidas y un contenido cultural y educative modifi cado— es apropiada a la sociedad industrial. Histori- ccamente son las pautas urbanas las que dominan la orga: nizacion profesional de Ta sociedad. Pero la familia cam- pesina contempordnea también aspira a modelarse sogiin esta pauta* Junto con el papel dominante de la organizacién de Ja produccién profesional industrial o—de im modo més amplio— el sistema industrial de la vida social, los valores y formas generados por este sistema también se vuelven ‘ominantes. Penetran en la aldea de todas las formas po- sibles: a través de los medios de comunicacién de masa, 2 través de los contactos personales de la poblacién rural con Ja ciudad, a través de los contactos que casi todas Jas familias campesinas tienen con parientes que residen cn Ias zonas urbanas. Estas pautas empievan a aparecer cn la aldea como una de las formas en que Ia explotacin y el trabajo del agricultor se adaptan a la socledad con: tempordnea, Las direcciones del cambio en Jas familias campesinas coinciden con las de la sociedad en general. La tniea di forencia reside en el grado en que han ocurrido estos, cambios, pues la potencialidad para el cambio c: particu: Jarmenté limitada en la vida de la explotacion campesina familiar, Las direcciones del cambio pueden observarse cuando empezamos a hallar en el campo los mismos tipos de fendmenos que encontramos en las ciudades. En elec- to, tanto en Ia ciudad como en la aldea el principio de la eleccidn «roméntica» de la pareja se ha generalizado. Las {nvestigaciones hechas en pueblos polacos confirman que Ja tierra ha dejado de ser el principal eriterio para esto- 25 Comusicacones personales mandadas al concurso de ta ZN, por ejemplo, las de algunas mujeres. Nims 2931, 3069, 3571, dts y otras, war ser pareja Las aspiracones imégenes del tipo de fa- Ena que los jovenes esperan tener corresponien =x paula Contempordnes deta fala urbana.” Sin embar- canis stadstico suglere que estas aspiractones Slo ce realizan coando ol joven sbandons la explotacion familar y el pusblo. i permanece en la aldea la selec tin de pareja de hecho sigue hacigndose como ai el ta snatio de la-explotacién continuara siendo. el. princpio Tinculante Foro manque or pases hayan dejado de pro- Tecar explictameate este. principio y aunque eoneedan ai hijo completa libertad en In clei de. pareja, el Circulo de contactos sociales sigus estando determinado por la jrarquia establecida de states social en el pueblo, $tlo te tisiva cuando llega el momento as cscoge, ‘Ademés, aunque los padres, l pdirsles su opinign sobre 41 tema del matrimonio de sus hos, se declaren a favor de la completa libertad de elecelén, bajo las condiciones dst modo'de explotacion campesino Tes resulta. impo Sie entar consider el asunto bajo el prism de losin teen fanny de expo. etn comer Clones ya no obligan al hijo-a renuiclar a suv dessos personales, pero eereen todavia un influ considerable Bohee su conducts Aunt ea Polonia estos ntereses 21, 2. 7. Wurnsoteay, Zmiace w po! wieku poenie) @Zmlaes cineuenta acs despus), Wroclaw, 1863, pp. 255 ys. JARUBC- fae, Kectlrowe sie bisesracy)aoekspressyinsy funkel! vaduing iojsties (La formactin de ta funcin tteprarivo-ezpresiva ela Ferma’ aldemna), sRoczniki Socjolog Wat, vol. It, 1964, p. 8 "i. E, Snoweaad sian, O-etym marsy tnlodeee (ebm gud sets lor favenee), eWies Wepolczesnan, 1359, alm, 12, p19 {." Inveationctones lleva @ cabo por el Seminario del TER. sobre Estructura Social Reval, por ejemplo, G. Cause, Uwagt 1 spolecoiyns sroznicewantu vbarstwy ehlopstie} (Observacionss Sobre ta diferencacion social ene estrato cantpestaa), «Wes Wapotezesnay, 1989, nlm. 1, p. 32; J, Pezvenoame, Dobor teryto- Palny 1 spoleceny’ malaense wiejehioh (Elecein terstorat > Social de Sonya), Roceakt Sajologt Wet, vl, 1, 196, p. 1S. 50. “A, OranewiseLaowapway K. 2vGULs, Malzonstea ales: sme na Slostx Opotskim (Matrimonios mixtas em la Silesia opo- fea, SPruegiad Sccjologictaye (Revista Sociologia), vol. XI 198, 128 nno estén centrados en la tlerra que el yerno 0 Ja nuera aportardn, la euestién mds esencial e3 la de. procurar fuerza de’ trabajo para Ia explotacién, Las consideracio- nes econdmicas siguen teniendo un papel erucial en el mo delamiento de los planes de matrimonio del hijo y, aun que actualmente la «eleccién roméntica» constituya un valor reconocido en las aspiraciones de los jévenes, las pautas tradicionales todavia inflayen fuertemente cn el comportamiento real. Otro campo en que la decision es tomada por el hijo y no por Ia familia es la de la eleccién de profesién. Aun- ‘que este valor también se acepta hoy dia por las familias campesinas, ello no obstante, como ya hemos notado, las obligaciones para con Ia explotacién y la familia ejer ‘cen un profundo influjo sobre Ia conducta de los jéve- hes que estén a punto de independizarse. La mayoria de jévenes quisieran dejar la explotacién y adquirir un oficio ‘9 cualifcacidn™ que les garantizaran Jos mismos bene- ficios que las restantes profesiones. No obstante, perma- rnecen en Ja heredad, y pese a los temores expresados de vez en cuando en la prensa polacs, una explotacién sin hheredero es un raro fenémeno. Las funciones culturales ic la familia campesina en el pasado estuvieron incompa- rablemente menos restringidas que las de la familia urba- tna. En las cludades estas funclones han sido asumidas ‘al menos por una red relativamente densa de agencias culturales, que son menos corrientes en Ios pueblos. La difusién general de la radio, la prensa, la television y el cine han debilitado considerablemente las funciones cul turales de la familia, Pero no las han eliminado ni han lo grado reemplazarlas en la medida requerida. ‘También han ocurrido cambios fundamentales en la pauta de las xelaciones del interior de la familia campe- Sina, La familia puramente patriarcal esté en trance de desaparicion. En este caso se ha producido también la 31. A. Suso, Problemaryka zzwodu w parnltnitack mlodyet iniesskancoy sist (Problemas de elecign de. profesion en Tos ‘Baris de los jovenes aldeanas, Hoy dia las parejas ca Sadas toman con més frecuencla decisiones conjuntas y Jos hijos mayores participan también mAs a menudo en Jas decisiones que conciernen a Ia explotacion y a la familia ‘Las. funcfones edueativas de la familia campesina también han sufrido cambios bisicos. Existe una mayor preocupacién por el bienestar general de fos hijos, y Tos hifios pequefios que van a la escuela se encuentran menos ccargados con las tareas de produccida, Sin embargo, la nevesidad que Ia explotacién impone para el desempefio de esas tareas no permite al niflo verse completamente bre del trabajo agricola, aunque ese trabajo no sea del tipo que prepara al niSo para la vida de agricultor. En gran medida simplemente carga al nlllo campesino con tun trabajo que el nifio residente en las cludades no ha ‘conocido desde hace mucho tiempo. Asi como Ia autori- Gad del padre, que es el administrador de la explot- ion, no puede limitarse, las funciones de produccién de la totalidad de la familia campesina no pueden dismi- nnuirse as{ como asi, pues ello equivaldria al descuido de la explotacion, que sigue siendo la base de la existen- cla de Ia Familia, La causa decisive de la Jentitud relativa del cambio de las pautas familiares viene dada por las funciones de produceién de la familia campesina. La tendencia de In Explotacién agricola a adoptar cada vez més los rasgos ‘Ge una empresa entra en conflicto con las nuevas aspi- raciones de la farnilia, Este desarrollo de las caracteristi- as de una empresa generalmente va acompaiiado por un aumento del equipo agricola que ahorra mano de obra. 52, Ver mim, $208 del concarso organizado por la ZMW s0- bre dari llovador por Joveaes de las zonas rurales "SB. MBSE, Chopl { saved? rolika, ct 130 Pero Ia necesidad de Ja evaluacién econémica de estos ‘medios aumenta también, aun cuando la posibilidad de aplicarlos a una pequefia explotacién sea limitada. Por To demas, Ia mecanizacion no altera el peso del trabajo que carga sobre las espaldas de la familia. Sélo hace posible desplazar su esfuerzo a otros sectores de la ex- Plotacién en que el trabajo humano sigue jugando un papel decisive, En suma, el incremento de rasgos empre- satiales de la explotacién campesina est en evidente ¢on- tradiccién con la pauta general de cambio de la familia contemporsnea, En lugar de disminuir, las funciones eco- ‘émicas de la familia van en aumento y la$ aspiraciones hhacia Ia extension de las funciones culturales y educati- vas, ete,, tropiezan con dificultades crecientes. El sostén temocional proporcionado por la familia sigue siendo sub- silt Tas eonsderacions econdmicas. or ll, Is smandas econémicas de la empresa imponen una pauta familiar que deja de satisfacer las aspiraciones de sus miembros. Como resultado de ello, la pauta de la familia ‘campesina contemporanea tiene un cardcter inarménico resultante de la coexistencia de tendencias contradicto- ‘Has: el dominio general ereciente de aspiraciones models: das segin estilos de vida urbanos, por una parte, y las ‘pautas de conducta impuestas por los requerimientos de la explotacién, por otra* El desarrollo de la sociedad industrial esta intensificando este conllicto, y cabe supo- ner que Ia adaptacién de la familia campesina a la so cledad industrial avanzaré ain més a medida que las Formas industriales de produccién aparezcan dentro de Ja agriculture. 34D. Mamowses, Kierunk! preobrazen wspolcemne} rodahny wise (Putas de Cambio de fa fami pola contemporaned), yo 2 Varsovia, 186 pp. 1 * —— 13h 4, La comunidad aldeana En toda clasifeacion sistmdtica las comunidades aldeanas se engcban en las comnidades locales, Hay tmuchas denicgnes del término seomanidad locale, pero a pear de las diferencias de formulacin todas elles ie hun contenido comin. Con cl tering seomonidad Tova se daa entender la totalidad de Tos habitants de tih terstoro determinado en la medida en_que const tuyen un grapo socal esto es, sl estin Stems de liv 9 elaciones) por inerees communes poutas compartidas de normas y' valores aceptados; por Reonclencia de ser dstintos dels dems grupos, dein dos de acuerdo con el mismo principio, et: Tl hecho de que las colectieidades dstnguldas segtn uno u ory de esos etre viva fntes en tin terrtrio determinado no constitye sempre una base para la pa Fein de los que cron un prupo socal. Por fo tanto, no toda colectvided de indvidtos que viva en un tervtoro eterminado eonstvaye una comtnidad local. Sin embar- for lz zonas se distinguen generalmente con referencia S cqracerstias sovales importantes, que flenden a 3er fcumulatvanc Gam rela general, Im sede de I admins traclon local Cnstiaye la sede de muchas otras institu Cfonee: las roiones administradvas son normalmente unl Giic intogrles con ragos econémieos,culturales © is tirlsos caractersticos: De aht que in coletvidad del ead en el curso dela investgacon cinta, ast eome nia vide social, sea generalmente una comunidad local funn otra medi! Tavespresign seh tnn a otra medida» la hemos usado porgus en realidad la dlstincion entre scolecividad y ‘A. Husen, Definition of community: areas of agreement, Rural Sociolony, vol. XX, 1855 p. 119 133 comunidad» no es dicotémica, Todos los rasgos objett ‘os y subjetivos de un grupo social, en consecuenca de tina comunidad local, son wna exestion de grado. El sistema de relaciones que unen a Tos miembros de un srupo dado puede ser mds 0 menos extenso, puede tener rs o.menos peso y pede creer n todo ras 0 menos ompacto. Una colectividad que se distings por un solo rasgo (por ejemplo, las familias que habitan en el dis- trite Ide Murenow de Varsovia una urbanizaciéa—) ho constituye generalmente un grupo social. Puede con tertitse en tal si se plantea algin problema que afecte 4s colectvidad particular de individos. Por ejemplo, Si os habitantes se ven amenazados por el peligro de In escasez de aga sin duda alguna emprenderdn una accin soncziada, yen cat damp fuclonarén como SPO Por consiguiente, las comunidades locales pueden cla sifcarse con areglo al grado de la presencia de aquellos rasgos que hacen de ess un grupo socal, Esto nos per ‘ite medir estas earactersticas 9, en consecencia, deter Ininar empticamente los cambios a que extén expocsias Inn comunidades Isle 0 aur orate esponténeamen= en elas, La comunidad local al igual que todos los grupos Sociales, tiene un caricter dindmico, sus caracterisicas son el Tesutado fortaito de a interaction de los indivi duos que las componen, que mantienen relaciones rect procas ylazos cambiantes con su amblente? or supueto, las comunidades locales, pueden casi carsey dividirse en tipos de acuerdo con varios principios Ge algunos de los cuales nos ocuparemos mas adelante) orl omento vamos a considera slo Una form de clnsfcaciin de las comvnidades locales? segin st post cidn en un orden esealonado, Usando la definicion adop- tada qu, las comunidades locales pueden ser caserfos «grupos de easerios, dens 0 publos, municipios (ane omprondan sna serie de aldeat), provincia, regione ¢ 2. R.. Boek, Pratial applications of commity research som preiinary coders, sara Secon, ve. XE 134 {incluso paises; todos estos elementos componen un siste ma en ue la comunidad local de rango inferior forma parte de la comunidad local de rango superier. Evidente- mente con ello van asociados otros caracteres, y Ia comu rnidad de distrto difiere de la comunidad aldeana no soto fn virtud de su posicién en el mencionado sistema, sino on respecto a muchos otros rasgos, y a veces uno mi Siguiera esta seguro de sl es legitimo el uso del término comunidad Esta es una de las rezones por las que no hemos uusado aqui el término écomunidad rural local». Tanto el fmunieipio como la provincia son comunidades rurales locales. Pero aqué s6lo consideraremos un solo tipo de ‘comunidad rural focal: Ia ald. TEs manifiestamente patente que todas las discusiones sobre las diferencias entre ciudad y campo en la litera fura sociol6gica de hecho so reducen a una definicién de los rasgos que distinguen @ la aldea del tipo urbano de asentamiento, Intentaremos demostrar que las dife- rencias més frecuentemente aducidas son de naturaleza parcial y secundaria, y ademés que son consocuencias Qe la diferencia de la forma de vida, determinadas sobre todo por la naturaleza del modo de explotacién campe- Sino, Aunque hay muchas diferencias entre campo y cit dad (Sorokin y Zimmerman en su conocido libro de texto tspecifican ocho); ninguna de ellas brinda un criterio Sdecuado para la definicién de una poblacién particular Como aldea o ciudad. Asi, pues, se puede hablar més bien de la intensidad de los rasgos rurales o urbano: Givision en ciudad y campo no se trata de una dicotom{a, Sino que denota tipos ideales, entre los cuales existe toda tuna gama de formas intermedias- Por ello, no hay ning. Criterio generalmente aceptado para Ia definicién admi- nistrativa de las poblaciones. Por ejemplo, en los Estados Unidos se acepta como criterfo el mimero de habitantes. Una poblacion de hasta 2.500 habitantes se define como 3, P. Sonogn yC. C, Zee, Priaeptes of ruraturban sovioiogy, ett, DP, 19 & se Por ejemplo, EM Roe, op. cit, p. 136. 135 ‘un pueblo; a partir de este ntimero de habitantes se con: sidera tna ciudad. Pero este criterio no puede aplicarse ala India, ni siquiera a Hungria 0 a Eslovaquia, en que hhay pueblos que a menudo tienen un mayor mimero de habitantes. En Polonia no se aplica aingdn eriterio, y Ia estion de si una poblacién debe considerarse aldea 0 ciudad se decide de manera pragmética por las autorida- des competentes. Independientemente de si se han to ‘mado en cuenta un criterlo o muchos, las decisiones adiai trativas se basan siempre en cierto tipo de apreciacién, de las caracterfsticas de la comunidad. Los atributos bésicos de la comunidad aldeana: diferencias enire ciudad y campo {La caracteristica bisiea de Ia comunidad aldeana es que Ta mayoria de sus habitantes son miembros de fami- lias que explotan fincas risticas. El considerar el modo de explotacién campesino como base de Ia comunidad aldeana excluye ipso facto las concentraciones de trabaja- dores agricolas empleados en grandes explotacionesy ast como las urbanizaciones de obreros industriales (mifiéros, ete.) cuando éstos forman una unidad espacial separada. Este 1160 se asemeja a las distinciones que hacemos en el lenguaje cotidiano cuando distinguimos no sélo entre Ja aldea y la poblacién minera, sino que aquélla también sse distingue claramente del sefiorio, de Ia hacienda, etc. Los trabajadores agricolas empleades permanentemente ¥ que viven en una gran explotacién por regla general no se consideran habitantes de una aldea, aun cuando ‘haya una cerca tampoco se cuentan como campesinos! ni en su propia opinién ni en la de sus patronos. Por supuesto, es posible incluir agregados de trabajadores 5. Nos estamos refvendo agus de grandes empreses agico- laa, Las extensat fincas restiens arrendadas a familias compesnas ‘no forman generalmente ina comunidad local separséa, sino qe 5 inegran por expiotaciones individosce ssid, GB. Gusset y A Wibenid, Posledy ellopow na prayslose 136 ‘gricolas en las comunidades rurales locales, pero seria nevesario distinguir entre pequefias localidades no agri: colas, baciendas (0, en la Polonia contempordnea, gran jas estatales) y aldéas. Bsta es otra de las razones por la ue en este libro usamos el término «comunidad aldeana> y no el de «comunidad rural local» Si la explotacion campesina se considera la base de la comunidad aldeana, la mayoria de los rasgos que carac- (erizan a esta comunidad derivan de la definicién del modo de explotacién campesino como sistema de produc- cidn basado en la identifcacion de la empress agricola con la familia. De la misma naturaleza de la produccién agricola —o, si se quiere, del papel que Ia tierra tiene en tal produccién— se desprende que los productores no pueden formar agregados muy grandes. Esto se aplica tanto a Ia aldea como al sefiorio (hacienda). Una gran empresa agricola requiere un niimero de habitantes inclu- s0 menor que un grupo de explotaciones campesinas. El tamafio de la comunidad aldeana depende de la estructura agcaria y del tipo de producelén can que esté asociada Js zona agricola. Cuanto mayor es la fragmentacion de las explotaciones (porque no es posible la emigracion del pueblo y debido a la accion del principio de asignar parce- las de tierra a cada miembro de la familia) y cuanto mayor es el grado de cultivo intensive, mayor sera el numero de habitantes de la aldea. En Polonia los pucblos estén més fragmentados en el sur del pais y en las regio. nes de cultivo intensivo, es decir, en la proximidad de las ciudades. En las regiones centrales y occidentales, en que las explotaciones son mayores, las aldeas tienen un promedio de 80 a 150 familias. “Asi el niimero menor de habitantes y Ia densidad de poblacién inferior de las aldeas comparadas con las ciu- dades son resultado de las caracteristicas de Ia produc cin agraria, Por consiguiente, puede decirse que (con: trarlamente 4 las opiniones sostenidas por Sorokin y Zimmerman)” que esas caracteristicas estén asociadas no 7. P, Sanons y CC. ZnOMRONN, op et, BP. 28 ¥&8, aT con el urbanismoruralismo (cuanto menor es el niimero Ge habitantes de una poblacién e inferior la densidad de poblacién, més acentuados son sus rasgos rurales), sino con Ja produccién agricola, Ademis, comparadas con los poblados de los trabajadores agricolas, las aldeas sin Guda alguna estén més densamente pobladas. Por ello podemos decir que los caracteres rurales estan correla Cionados positivamente con el mimero de habitantes y con Ta densidad de poblacion de las localidades agricolas.. Otro rasgo {recuentemente destacedo de la comunidad aldeana que deriva de la naturaleza de la produccién Agricola es el estrecho contacto del hombre con la natt- Taleza, Todos sabemos que en las ciudades los hombres Esti rodeados de objetos inanimados y de productos hhumanos, mientras que en las aldeas viven en intimo rato con In naturaleza.’ Tal vez esta alienacién de Ia naturaleza tiene clerta influencia sobre la personalidad tel individ y sobre las relaciones interpersonales. Es dificil pronunciarse claramente en este sentido, pues el tmimero de factores que moldean la personalidad humana fs tan grande que privilegiar a uno de ellos resultaria Snjustificado, Cabria aladir que las observaciones sobre Ia influencia benéfica de la naturaleza sobre el hombre asimisno van acompafiadas corrientemente por nociones Sobre la superioridad moral del hombre del campo sobre €l habitante urbano! Sin embargo, este tipo de conside- racion excede el mbito de la ciencia. No cabe duda de jque el contacto intimo con la naturaleza puede tener nuchos efectos bendficos, pero como va asociado con las fuerzas productivas eseasamente desarrolladas en la agri cultura es dificil evaluar estos beneficios de modo tan entustdstico como hacen algunos autores ; en cuanto 2 eso, ‘sus apreciaciones no se corresponden con las de los agri ccultores. Tas caractetisticas menclonadas hasta ahora estan re- 8, B, Soom y CC, ZnommAN, op. cit, p. 1. 5. Var tas conparaclones hechas par P- Sonomn, C. C. ZI vusmie 9 C3, GALPIN en A systomale sowreebook of rural o- teotogy, Minneapolis, 1980 138 inciodadas con ln naturaleza de Ia produccin agricola, son apropladas tanto a los agregadas de falas agricoiss ampestass como a los potiadgs de trabajadores agioo tas do las grandes explotsclones{ aa de las princpals cx racterisica den aldea ea el debi desarrollo dela division {ecial del trabalor21 mismo hecho de que la poblacion Sea numérico pequeta hace dif Ia consecucion de won dlvidiin del trebelo mnie deenrollada, Los oe tros de servicios estin sitiados en los lugares en que Hay una ‘demanda sufeiente para dichos servieos. Eas ftoridades locales, laa iglesias y Las escucla tenn su fede ca le posbler grandes 0 ca le sds que Oaupan tine posicion central‘en la somarea,y es en ellos donde $e eucucntran las Hendas, los taller, los restaurantes, tes Pero en la mayor de tas aldats no existe estas Smentdades o faclidade, Sin embargo, no nes referimas Baul a este tipo de divistn del trabafo, aunque su escaso dsarrolio ee manifesto. El caso es que las falas que coploten fincas réstions conoentradas en ue eldea co tin unidas por una division dl taboo claramente de sarrolada, En este sentido Marx escribe: La. gran tnuts de ln mac feacoda (les carapesinos de iat eldeas] est formads por Ia simple adiciéa de magaltades hom lane Ue Ba cnpres gra oun ead de tate tipo (gus trabajadores onctiivea un equpo de pro dhccién, ¥ el trabajo de cada tno est coneciado con el traba[o de Tos demis, aungue en general en tales empresas in divsin social del trabajo no esta muy detarrollda. Te naturales de In exploreion camnpetinn, el hecho do due es una economia domestica extens, ‘signlfica que TES vinculos que dertvan de la division del trabajo gon miei dies cols aldes ue en I Comiad Erembargo, esos vinculos existen:en a aldea. Es follle que no ajo elngin arteazno en ln alden, ere Feacralmente un agricallor ce mas experte que toe de fbts, por ejemplo, en constuir cass, en eurar anlinales 10, Kany, Bt Brumario de Luis Bonaparte, eit. 139 | cenfermos 0 en reparar la maquinaria agricola. Asi, pues, Sn cuando no ‘haya representantes de Tas. profesiones Galieadas no, agricolas'y aun cuando tales actividades S'lleven a cabo dentro de los limites de Ia economia domestica existe una clerta division del trabajo asociada cor expeclales capacidades.o aptitudes, La division del atbaje también ne da en el campo de a agriculture. La fecetldad de actividad concertada, por eJemplo, en el me- Joramicato de las tieras, en la eria de eaballos o en el uso sejuneo ce la maquinaria, milita en contra del completo Silmnento. de Tas familias dedicadas a la agricultura {uc wiven en la aldea, Una interaccion semejante se da ‘Ehigo sla tradicion de trabajo cooperativo periddico en ff conatrucelon de edificios, pues generalmente hay cierto ty fo de expecialzacion en fa agricultura que forma la fare del ntercambio de productos dentro dela aldea, etc El pequeto tamafo dela comunidad aldeana y la acentubds estabilidad espacial de sus habitantes dan or gen a uno de sus rasgos més importantes, a saber, la co- Sranidad deena es un grupo primario.” Las relaciones Zutre sus habitantes se basan en los contactos personales Shr duds tales relaciones son menos frecuentes que en las reas trbanas en que la alta densidad de poblacién y una divsion del trabajo allamente desarrollada hacen nece- Serio el contacto constante con fos demés. Pero en la Sidon, @ diferencia de en la ciudad, los eontacios son de ‘itturaleea personal: no son andalmos y son méltiples an petsiatentes y-no esporadicos. En la ciudad una per- Sona’ se considera un ocupante de rol, un mdmero y unas SGhas (cl emplesdo. de corseos, un pasajero en el tren Sreefobis), pero en la aldea incluso los contactos relacio- ase Gon aa rol profesional (el eatteo, el dependiente Jena tienda) som de ana naturalera personaly perma- ete Son-eonactow con concidos,Nelnos, patents ‘igigos, La natureleza personal de Tos eontactos en la Adee Seta ‘Gn faerte Higamen soci entre sus habitantes, ats no cxlste o solo esta presente en un grado may red 11, Verbigracia, P. Sons y ©. C. Zmummas, op ct, pp. y siguientes. 140 cido en la ciudad, Asi, pues, la comunidad aldeana 5 tun grupo social con preponderancia de los lazos perso- nales. La autoridad en este grupo es de naturaleza per- sonal y no de naturaleza funcional o expecializada i pertonal, La autoridad de un individuo en una comunidad aldeana esti determinada por muchos factores, primero ¥ ante todo por el tamafio de Ia explotacién y la posicién de la familia que reside en ella, Los roles desempefiados por el individu pueden asimismo afiadir peso a su auto- Fidad, pero siempre son personales y no funcionales, como enel caso de la comunidad local urbana con su anonimato caracteristico de roles y funciones. Unida al cardecter de la comunidad aldeana como gru- po primario esté la influencia mucho mas amplia de la opiniéa de grupo sobre el comportamiento de las familias y de los individuos, Esta influencia también viene deter- minada por el hecho de que la naturaleza personal de las relaciones, Ia semejanza e incluso Ia identidad del modo de existencia de los aldeanos, el predominio de los wincu- los de parentesco y Ja interaccién mutua constante, etc., imposibilitan los habitantes de la aldea para ocultar sus vida a In mirad de sus velnos y de sus evluacones lOtra caracteristica de la comunidad aldeana es el mo- vimiento migratorio bisicamente de un solo sentido del ‘campo a la ciudad” En consecuencia, en las ciudades se encuentran un méimero comparativamente grande de gentes originarias del campo, pero nunca, 0 casi nunca, se encuentran en los pueblos individuos procedentes de adéd, Esto se aplica no s6lo a la comunidad local sino tambien a las diversas clases y estratos sociales © ‘categorias profesionales. En todas las clases sociales, con excepelén del estrato campesino, y en todos los grupos profesionales fuera de la agricuitura, uno se encuentra on personas originarias de diversos grupos y medios sociales. Pero en el estrato campesino y en Ia agricultara 12, Ch P. Semoun, C. C. ZoMERUA YC. J. GALAN, OF. city pp. 226 5, ua cs excepeionsl hilar a alguien que no provenga de una familia campesina. Ast, pues, es caracteristico de la com- nidad aldeana que las personas que viven en ella estén conectadas principalmente por sus arigenes sociales, pero tambien (erritoriales, Generalmente han nacido en el puc- blo o en una aldea vecina (en este caso, entran en la comunidad aldeana por matrimonio 0 adopeién). Pero funque no procedan del vecindario inmediato casi cierta- ‘mente provienen de familias campesinas. ‘La uniformidad de origen social, y también normal- mente territorial, se ve reforzada por fos lazos de paren tesco, que son Tauy fuertes en Ia aldea. Por To general, sélo hay unos pocos apellidos en la comunidad aldeana. Ta aldea consiste en varias grandes familias interrelacio- nnadas (o clanes). Por esta razén, a veoes la aldea se define ‘como un grupo vecinal familiar. Sin dejar de destacar Ja importancia de los lazos familiares en la comunidad aldeana, es dificil aceptar que éste es el rasgo principal © aceptar los criterios de Grabski de que la familia fue €l principio de la aldea.” La historia no nos ofrece ningin ejemplo de familias aisladas (con tal que no usemos el término para denotar un clan o una tribu). La base del ‘movimiento migratorio unidireccional —y en consecuen- cia del origen social idéntico de los habitantes del pueblo ¥ de sus fuertes contactos familiares— debe verse en la relacién existente entre la familia y la explotacién. Los lazos familiares, el parentesco, la uniformidad de origen social y territorial y una movilidad espacial y de clase mucho més débil justifican el aserto de que hay tuna mayor homogeneidad entre los habitantes de las aldeas en. todas los principales aspectos: los rasgos fisi- ‘cos, las pautas culturales y el status social. La comunidad turbana est més diferenciada en todos los aspectos, No obstante, cabe agregar que nos referimos a las viejas aldeas que han existido durante mucho tiempo. La situacion os diferente en las zonas recientemente coloni- 13, W. Gnasee, System coojologit ws (Soclotogia rural sis. temitea), sRocanlel Socjelog Wels (Asales de Sociologia Ru rab), v0! 1, 1886, p. 7 m2 zadas. Sin embargo, también en este caso la colonizacién tiene caricter de grupo; las familias de una sola aldea fo de sus alrededores inmediatos se establecen juntas; muy a menudo las familias de un pueblo determinado cestablecen una aldea en un drea recientemente poblada. Las Investigaciones realizadas en las aldeas de los Ter torlos Occidentales devueltos a Polonia después de la Se gunda Guerra Mundial revelaron una gran variedad de autas en la forma en que se construyeron las nuevas comunidades locales debido @ las diferencias de origen {e Tos colonizadores y al modelo de poblamiento indivi- dualo de grupo." [EL movimiento migratorio unidireesional del campo a fe ciudad también afecta a fa estructura demogréfica de la poblacién rural. Generalmente los que abandonan el pusblo son aquellos que se acercan a la edad en que serin econdmicamente activos como trabajadores en la explotacién,” 0 jovenes mayores que se abren camino en cl mundo a través de Ia escolarizacién. El éxodo de Ia aldea se ve reforzado a causa de Ia sucesién comparati- ‘vamente lenta de los jvenes agricultores a una posici de Independencia. Por consiguiente, In estructura de fedad dela poblacién rural muestra una sobrerrepresenta: ‘ign de los grupos més jévenes y ms viejos.(Ast, la come hnidad aldeana normalmente comprende un gaa niimero + de nléos (hay una tasa superior de crecimiento vegetativo ‘gue en las zonas urbanas), pero desproporcionadamente aos jévenes en edad productiva o menos parejas j6ve~ ‘Adems, al lado de'la tendencia principal de la emi {Tacién del ‘pueblo, se puede observar un movimiento Inverso, aungue mucho més débil. Este generalmente ste en ancianos que se fueron de la aldea mucho fantes y que ahora regresan para acabar sus dias en suv pueblo nativo al retirarse de la vida activa!" Este movi- M4. Ver A. Rows, aunose nlejscome 4 repatianc! (Pole tn ioeal'y repatiades), «Wels Wepolezesna> (ola Aldea Conte orkness), 198, nm. 6. Ts, M: Poors, Migrafe 2 wel do mist, et, pp. 71 y 6 1g, Ver Fs Lytin Suita, Soclology of rule, typ. 78 143 miento aumenta alin mis Ia desproporcién de Ia estruc- tura de edad de la poblacién agricola En relacién con las diferencias entre ciudad y cam po, debemos mencionat otra caracteristica entre los ras- 0s cofrlentemente destacados: el menor grado de dife- Tenciacin social en! segundo comparado con la primers Los extremos de gran riqueza y gran pobreza son pecua- Tiares a la ciudad capitalista. En la comunidad aldeana Jas diferencias de clase son relativamente pequefias. Evi dentemente en el campo también hay diferenciacién con respecto a la propiedad y al tamafo de los medios de produceién, También hay diferencias de ingresos, presti- lo y poder, que en las condiciones capitalistas estén conectadas con diferencias de la propiedad de los_me- dias de produccién, principalmente de la tierra. Pero los habitantes de las aldeas estan unidos por Ia pertenen- cia comin al estrato campesino, que es una formacién ‘mis antigua que el capitalismo y la sociedad industrial El cura y el maestro, representantes de las profesiones no agricolas, permanocon no sélo fuera del estrato cam pesino, sino tambign fuera o por encima de Ia comonidad aldeana.” En el pasado habia habido antagonismos de clase entre la aldea y la casa sefiorial. La formacién de la sociedad industrial contemporéinea esta eliminando dife- rencias entre el estrato campesino y los otros estratos y clases sociales. Este proceso se ha visto acelerado por Ia ‘emigracién del campo a Ia ciudad, que se ha producido a escala masiva durante los afios recientes, mientras que la aparicién de sociedades socialistas, en las que las divi- siones basadas en la propiedad diferencial de los medios de produceidn han dejado de existir, ha ereado condicio- nnes completamente ntievas que impulsan este proceso sms intensamente. Sin embargo, en la mayoria de los palses —tanto sacialistas como capitalistas— el estrato campesino todavia existe y es mantenido por la homo- fgeneidad social de las familias que constituyen la com: nidad aldesna. 17, Ver J. Cnutasnst, lade pokolenie chlopou, lt, p, 9. 144 | Esas diferencias entre la comunidad aldeana y Ia co: monidad local urbana —como hemos visto antes— son consecuencia de una serie de diferencias: a) entre produc: cidn agricola ¢ industrial; ») entre la explotacién cam- pposina y otras clases de unidad de produccién; c) entre €l trabajo def agricultor y el de las otras profesiones; 4) entre la familia campesina y los otros tipos de familia. Por esta razin, Ia definicién més breve, pero all mismo tiempo la més completa, de la comunidad aldeana es que 8 una poblacida habitada (0 principalmente habitada) por familias que trabajan en explotaciones campesinas. El tamafio de la poblacién, su densidad y el grado de la division social del trabajo, pueden diferir’ de una aldea fa otta, pero esas diferencias resultan de las caracterist- ‘eas del modo de explotacién campesino en Ia aldea de ‘que se trate. Una de las caracteristicas fundamentales de la comunidad aldeana, a saber, Ios fuertes vinculos sociales basadas en los contactos personales, reforzados por el parentesco, el origen coméin y la homogencidad social, es asimismo un rasgo caracteristico que deriva del modo de explotacién campesino. ‘Como grupo primario (familiar vecinal), Ia comunidad aldeana e& tuna entidad que desempefia funciones precisas que complementan y coronan las de las familias que la ‘componen. Por tanto tenemos necesidad de analizar Ia co- ‘munidad aldeana como un todo funcional con objeto de completar fo que ya hemos dicho sobre este tema. Las funciones de la comunidad aldeana Hemos caracterizado antes a In comuidad aldeana como un grupo social y por tanto como una colectividad de familias unidas por un sistema de relaciones. Este sis- tema, aunque menos extenso que los que existen en las cludades, justfica plenamente nuestra referencia alas fun- ciones dela comunidad aldeana En primer lugar, las funciones econémicas. Aunque 4a aldea es una «simple adicién de magnitudes homélo- 145 ue 5,10 see, ioe ees nem a ia del de pode nent rls ny cn oe Pt mo een rn ate Beg ond ae i em eo dia fing caer a ang ie Mie resid met me Gig ero vinta am Saka sept tem te Se meine ee erase ee Sei ee eee ees Same Pe fra a ain an Pa Tete sae spe in a en i pole ee pn man ie i ee ce a or tes a a ec a seis ota fam en et ci ene pt oe ae ee ogi pecaia e 146 tivas de produccién, de comercializacién 0 de ser En el caso de Polonia, hay que incluir los «Circulos Ag: colas» entre estas formas de cooperacién aldeana. Aunque no poseen la condicién jaridica de cooperativas, las orga- nizaciones que regentan las estaciones de maquinaria agri- cola y otros centros de servicios para la produccién son de este tipo; suministran equipos para el mejoramien- to de tlerras, grupos que se dedican al cultivo de eriales oa Ja artiga de tierras virgenes, ete. Al organizar estas actividades conjuntas desempetian asf funciones tipicas de Jas cooperativas. En Polonia los Circulos Agricolas cons- tituyen la forma mas desarrollada de cooperativa agrico- Ja; Junto con las cooperativas de comercializacién, de servicios, de ahorro y de crédito, ete, forman un sistema de empresas y organizaciones que s¢ encargan de satis facer los requerimientos diatios de la produccién de las familias que trabajan en las explotaciones campesinas. Entre estas formas permanentes de actividad conjunta debemos distinguir entre aquellas actividades que quedan confinadas dentro de Ios limites de la aldea 0 que entra- fian contactos econémicos entre sus habitantes, y aquellas ‘que en cierta forma estén dirigidas desde fuera de ella '¥ que canalizan los contactos de sus habitantes con el mundo exterior. Las primeras son frecuentemente de tipo tuadicional; en ellas Se observan vestigios de copropiedad (pastos comunales) 0 de la organizacion preindustrial del trabajo (pastos de ovejas en las altiplanicies). Sin embar- go, junto a ellas se encuentran formas de cooperacién aldeana asociadas con técnicas modernas (estaciones de ‘maquinaria). El segundo grupo surge a causa de la pe netracién de la sociedad industrial en la aldea y com prende una serie de modalidades segin las cuales la comu nidad aldeana se adapta a esa sociedad. [a funciéa econémica més desarrollada de la comu: nidad aldeana consiste en la organizacién cooperativa de 4a produccién. La agregacién de explotaciones campesinas individuales para formar explotaciones multifamiliares convierte a la comunidad aldeana en una compacta uni dad de produccién, En la medida en que la cooperativa ur de produceién desarolia los rasgoscaracteristion de wna upresa, al tiempo que aaume y ealende las funciones Sconces de ln comuniad, la comunidad aldeana ple de lan pecaliaridad bisicas que Ta diferenciaban de otros fipos de comunidad local. Se desarrolia de modo que Iga parecerse alas poblacioneshabltadas por jor Teves que trabajen en grandes empresas agricaas. En el Iromeato en que se establece,y durante el primer period {Zo au exiatenta, la cooperativa de produccion foralece femporalmente 6 hace reviis mochas de ls funcones de If comunidad aldeana, en particular sus funcones econd- fnisas, Pero la Cooperativaslenta la base de la extinctén fradual dela instiucton dela explotacion campesing, y Son ella lo comunidad aldeana como comunidad local de tin tipo partial. ET ssepuramlento también puede ser una de las funcio nes economicas dela comuniiad adcana. Anteriormente Ips eho teers In snstencia peta po Jn Fabltantes del pueblo » familias que so han visto afeo fadas por una catistrofe natural. Ea comunidad aldeana tradicional también cuida de ls huérfanos, Invaidos, a Sas, ete, cuando no Henen Familia que pueda hacerse cargo de ellos Emo fodas Jas comunidades locales, el pueblo es una unidad administraivn, Las autoridades Tocales (en Polo fia el softy, una especie de alcade) cumplen con una Terie de obligaciones que Tes som delegadas por Tos fun- Slonarios de loo nveles superiores de ln admintstracién Gat Estados demas de ls actividades admistrativas re {uladas por los reglamentos emanados de las autoriades e'fs adiailetracion central, fos habitantes de tn aldea dlsempenan snuchas tareas comunales. Entre ells estén STieantenimicnto dela ley y cl orden, el cuidado de las Somunisaiones con otras aldessyToealidades y Ia organ Stclun de la accldn coma. en caso de ealamidades nat Falcs incendios,inundacione, te). Estas funciones co- Trumales no ‘son diferentes de las de otras comunidades Tboales, Sin embargo, diferencia de la eludad, en que fon desempetadas rgularmente por Ia admiaistraciin 148 rmunicipal que tiene un presupucstoondinaio y an per {onal a su. dsposieldn, ea ln ada ests funciones com Iles ge bastn mds bien en la nicitivn sci, el unbajo ‘oluntario y gratuito o las contribucones Rnancieras de Tir habitants, Ante el crecimiento. de ae necesidades de Tos aldeanos y l fn del alslamiento de Tas pequetas Iocatidade, el dnbito de las actividades comnts dea ala se esté ampliando continuamente. A medida que Ta extrictura socloprofesional de la. poblacién aldean wm difeructindows iis; loeasubtoe comunales pasty beuparel primer plano y son de In incurmbencin de todos fos habitantes,independicntemente. de sus profesiones, Er umento de Ta actividad comunal hace que rerlle df €il su realizcin por los medios el «trabajo social», Cae ‘ez mis se crea instltclonesespeclalzadas para desern feb ets Fanones (pr Spl, centon snare Eooperativos), asi como orgenizciones permnentes (por ejemplo, rigadas voluntaras de extinlén de incendls} o periicases der, aquells que sbsistea hasta ques fat fralizad las tareas cmprendidas (om comite para In construcel6n de ua escuela, un comité pare Ja elect feacién del pueblo, ete). Durante los altimos aos el otado,u ottas importanies organzacions sociales, ban asunido ln responsabilidad de muchas de esas empresas o han contribu a nanciarls” El Estado, otras inst tuclones espctalleada, tamblén han Hepa asumle la funcion de ascguramitato de In comunidad aldeana at como otra serie de fmctones esondmieas cules Ten la comunidad aldeaaa tradicional ls neceidades de Toe Inbitantes eran satisechas dentro do ous cones as ceremonins aociadas con las extaiones el ato, elo oe fit de las labores agricola, Ia reallacion tovmtn de cirtas areas hochas on tert (hlado de a fine, desplimaminto de certas aves de coral, cto) y Tas versiones organzadas por las asociciones w org iraciones «sociales» dl pushlo (por elemplo, icslors de juventades rurales) proporeonaban eas a nics ocx Slones de sola y vida cultural, aparte dela paticipacton tn los servilosrellglosos Tas visitas a la feria de la 149 ee ciudad mas cereana, Bl centro de Ia vida cultural era la taberna." Asi, pues, Ia vida cultural de Ja comunidad al ean coustituia Ia base de la creatividad artistica indi gona y de las actividades recreativas. Hoy dia, en muchos paises, ef aislamiento cultural de la aldea so ha venido bajo. En cl pasado la iglesia y la escuela desempefaban tuna serie de funciones culeurales en la comunidad. Actual- mente ef cine, a radio, la television y Ja prensa introducen 2 los aldeanos en Ja corriente general de la vida cultural hacional, Lo mismo puede decirse de los nuevos tipos de instituciones aldeanas: Casas del Pueblo, salas de lec- tra, pefias, ete, A diferencia de la taberna, éstas no son sélo centros de participacién organizada en la vide cultte tal del pucblo, sino que sobre todo suponen un vinculo de unign con Ja cultura nacional general. Ta funcién basica de la comunidad aldeana es el con- trol social que ejeree sobre Ia conducta de las diversas familias e individuos. La comunidad establece normas, valores morales y reglas de conducta terminantes, Al rea: Tizar esta funeién opera como el grupo dominante en relacin con las familias que la componen, y Ia autoridad ‘Que confiere @ algunos de los aldeanos se basa en Ia acep- tacidn piblica, en el hecho de que crean esta opinion y de que stmuleAneamente la observan. El grado de control sobre la conducta de los individuos y el grado de inter- vencién en sus vidas es enorme. Los lazos de parentesco ¥ de vecindad obligan al individuo a observar Jas normas de conducta familiares y aseguran Ia efectivided de la intervencién de la familia. Este control comunitario cou plementa las Fanciones educativas de la familia, Desde el {ia que nace el individuo no sélo forma parte del efrculo familiar sino de la comunidad aldeana, Bl nido pasa st ‘iempo constantemente en compania de su grupo de igua- Jes, Juntos cutldan de los gansos; Tuego llevan a pastar al ganado; pasan por las fases de Ia adolescencia y Ta adurez formande parte de un grupo del mismo sexo. EL 18 Vee J, Braseia, Wies ¢ karcoma (La aliea y ef mest, arsovla, 195h 150 proceso de socializactin ocurre dentro de Ia familia y Gel grupo de iguales. Se les inculcan las normas y los, valores que mantienen unida a la comunidad aldeana Allo sigue el advenimiento de la edad adulta que se ‘consolida finalmento sdlo con el matrimonio y la acepta- elén social del mlembro de In comunidad eomo agri Asi, pues, en iiltima instancia la comunidad aldeana funciona como una unidad de control social}; como fuente de un sistema vinculante de normas y valores; como arupo de referencia que define la posicién del individuo de la familia, ¥ como un factor esencial en la asimila- in social de la generacién joven. En conclusién, eabe hacer la reserva de que esta des- cripetén de las caracteristicas y funcionamiento de la co- munidad aldeana es un modelo ideabtipico. En realidad, Jas comunidades aldeanas estén altamente diferenciadas y cada aldea particular sélo se ascmeja parcialmente al modelo descrito. Pero necesitamos un modelo tal, aunque tenga que ponerse al dia, si queremos esbozar las princi- pales dizecciones de cambio en la comunidad aldeana, El andlisis de los diferentes tipos de comunidad rural y de los cambios que se suceden en ellos requiere ahora que dividamos la «comunidad aldeana locals en aldeas, por tuna parte, y en otros tipos de poblamiento rural, por otra, Tipos de comunidad rural local el proceso de urbanizacién see Ei Aivsin mas antigua de comandades rurale loca let se cifra en aldeas y sefiorios. Grabski distingue entre tipos de aldeas segiin su situacién con respecto al sefio- Ho (snanor).” En Polonia y en otros paises europeos Ia divisign entre aldea y sefiorio tiene sus origenes en Ia sociedad feudal y va tinida a la persistencia de la divisién 19, W. Graneat, op. cit, pp. BI y ss 151 feudal on tierras de campesinos y sefiores. Esta divi- sign no es peculiar a la era preindustrial; aparece en Formas diferentes como la division entre aldeas y grandes hhaciendas que se dan también en pafses en que nunca existié el sistema feudal de relaciones sociales o fue abo: lido desde hace ya mucho. Podemos distinguir dos tipos de gran propiedad. EL primero se basa en el arrendamiento. En éste el propieta- rio atrienda sus ticrras a empresas agricolas movidas por Claflin de lucro que cultivan fa tierra con objetivos comer- ciales o a familias que siguen el modo de explotacién ampesino tipico y que pagan al terrateniente un arriendo © parte de su cosecha. En clertos paises este tipo de Propiedad latifundista tiene a veces el cardcter de una empresa, y los azrendatarios de hecho son jornaleros remuncrados en especie con parte del producto de Ia tie- rra* El segundo tipo de hacienda latifundista, que fue ‘comin en fos afios anteriores a la guerra en Polonia y ‘Alemania, es una empresa a gran escala que suele presen tar més o menos rasgos precisos de Ia antigua economis de corvée (servidumbre), pero que esta orientada al mer- ado y destinada a la obtencién de Iucro. En el primer caso (sf excluimos el arriendo de la tierra ‘a empresas agricolas durante largos plazos) dificilmente podemos hablar de Ia hacienda como una comunidad ocal separada, Esti unida a Ja aldea, puesto que los arrendatarios son famitias campesinas. Solo la casa sola riega del terrateniente esté sita fuera de la aldea. En ef flro caso, cuando Ia hacienda consiste en una empresa (una gran unidad de produccién), generalmente congre- gaan gran nimero de jornaleros permanentes que viven fn ella y forman una comunidad local separada, Entre ‘es0s dos tipos existe naturalmente toda una gama de tipos intermedios, asociados con diversas relaciones de depen- dencia que provienen del pasado feudal: el tamatio de la hhacienda, su localizacién, las relaciones con la aldea més préxima 0 con las aldeas vecinas, etc 20, Ver T. Lynn Sutra, op. city. 284, 152 Se pueden distinguir varios tipos de comunidad aldea- ‘na, segiin la naturaleza de las relaciones existentes entre Ta aldea y el sefiorio, siempre que naturalmente exista atin el latifundio. Sin embargo, incluso en los paises en. {que las reformas socialistas pusieron fin a la existencia, de la clase de los grandes terratenientes, todavia se man: tiene la anterior division entre aldea y hacienda, aunque ‘ahora su contenido es diferente. En Polonia esta divisign es especialmente importante; se trata de la divisién entre poblados de trabajadores de las grandes granjas del Estado que tienen las claras caracterfsticas de una empresa (en este grupo habria que incluir algunas coo- pperativas de produccién formadas a partir del reparto fe la tierra de antiguas hactendas a los braceros que trabajaban en clas) y concentraciones aldeanas de ex- plotaciones campesinas familiares, hoy ia ampliamente Aliferenciadas, pero que conservan el caricter de econo- ‘mias domésticas extensas, Las cooperativas de produc. cién creadas a partir de terras campesinas deben ex: globarse junto con las aldeas, aun cuando en Polonia, féstas forman s6lo una parte de Ia comunidad aldeana por regla general, aunque una parte que se distingue por su sistema de cultiv. En otros paise socialistas, en que se hu legado a cub minar Ta colectivizacién rural, Ia divisién se establece entre dos formas diferentes de empresa agricola a gran teseala: las granjas cooperativas y las granjas estatales Ta cooperativa conserva afin una serie de rasgos del modo de explotacion campesino, mientras que Ia granja estatal ‘mantiene las earacteristicas de la antigua hacienda (en la organizacién de Ia produccién, Ia estructura profesional fe los grupos de trabajo, el caricter de la produccién, etc), Sin embargo, estas diferencias estin disminayendo yy esté apareciendo una estructura fundamentalmente uni- Forme basada en la empresa agricola. Fl antiguo tipo de comunidad aldeana esta en franca desaparicion y Ia aldea ‘se convierte en un pablado de trabajadores agricolas. En el future —a causa del desarrollo de las redes de comun- ceaciones y st progresiva exiension— cabe esperar que 153 la aldea se vuelva una poblactén de caracteristicas urba- nas, en la que los trabajadores de la empresa agricola residen junto a los de otras empresas e instituciones, La diferenciacién de las comunidades rurales locales cen aldea y sefiorio (hacienda), y del tipo de aldea segin la naturaleza de sus relaciones con el sefiorfo, derivan del pasado histérico. Polonia representa un mosaico de tipos muy rico a ese respecto. Las aldeas que antiguamente pertenecfan a la hacienda de un solo noble (propiedad de ‘miembros de Ia nobleza sin titulo, nobles que posefan un solo pucblo); aldeas subordinadas a las haciendas de grandes magnates; aldeas reales; aldeas libres; aldeas e la baja nobleza, etc. constituyen todas ellas diferentes: ‘ipos de comunidad aldeana. Incluso hoy dia ello produce diferentes tipos de relaciones y diferentes formas de orga- hizacién, que ocasionan variacfones en las relaciones in: ferpersonales y en las normas, costumbres y valores acep- tados. Ta diferenciscién de la comunidad aldeana preindus- trial se vio intensificada por la industrializacion. Ya bajo el feudalismo, se crearon manufacturas basadas en obli- gaciones de socage; junto a los campesinos surgié un trato de siervos-trabajadores (por ejemplo, mineros y artesanos) empleados en establecmientos no agricolas.* ‘A medida que se desarroll6 la industria aumenté mumé- ricamente el estrato de los Hamados trabajadores-campe- sings, Muchas aldeas perdieron su cardcter agrario y se transformaron en poblaciones de obreros 0 artesanos (principalmente as. poblaciones suburbanas y aquellas con una estructura agraria de minufundio: grupos de explotaciones mintseulas incapaces de mantener una fa- milia). A ese respecto Ia comunidad aldesna puede defi- hirse con arreglo a su estructura profesional, siendo los fipos extremos fa comunidad aldeana tradicional —o sea, un agregado de familias que se dedica a la actividad agri- ‘cola campesina— y las poblaciones en que las profesiones 21, Ver R, Tenax, Mindsy miastem @-wsia, city. 2 1st de sus habitantes son de cardcter exclusiva o predominan: temente no agricola. “Las divislones de clase guardan relacién con las divi siones socio-profesionales. Pueden distinguirse aldeas en {que la division profesional debida a los ingresos obtenidos fuera de la aldea y fuera de la agricultura ha provocado un debilitamiento o disolucién de Ia solidaridad social fen que se basaba la comunidad aldeana o la ha transfor- mado en una poblacién de obreros 0 artesanos. Pero también hay aldeas con grados diversos de diferenciacién de clase en capitalistas y trabajadores agricolas (o cam- pesinos pobres y kulaks), con sistemas diferentes de rela ‘ones de clase entre las familias més ricas y menos ricas de la comunidad aldeana. El grado de estratficacién de clase y de division profesional influyen esencialmente en Ta comunidad aldeana y en sus funciones. La comunidad aldesna tradicional con una divisin en clases menos avan- zada, como hemos indicado, tiene un tipo correspondien: temente paternalista de relaciones interpersonales. El agricultor rico y su vecino pobre estén uniddos por lazos econdmicos encubiertos bajo la forma de relaciones de vecindad, de parentesco, etc. Las contribuciones en tra- bajo suelen adoptar Ta forma de ayuda o de intercambio ‘mito de servicios (pago a base de trabajo). Al vecino pobre o el jornalero se le trata de una manera patriareal, como si fuera de la familia. La diferenciacién de clase més avanzada generalmente se basa en relaciones de tipo capitalista: el propietario de la explotacién y el bracero estén unidos por un trato que rige el trabajo y su remu: neracién, siendo ésta al menos parcialmente en efectivo. La diferenciacién de las aldeas segiin la clase y las estructuras profesionales est asociada con las diferencias del tipo dominante de produccién. Sin duda los rasgos y las functones bésicos de Ia comunidad aldeana son dife rentes en las aldeas suburbanas, que se dedican principal: mente 2 In productién léctea y de hortalizas para los rmercados cercanos; en las aldeas subalpinas con formas tradiclonales de economia de pastoreo; en zonas gt deras y donde abundan las gramineas, o en aldeas espe 155 Gializadas en determinades cultives (lipulo, tabasco, ete). El tipo de produccién dominante lleva consigo variaclo- hos Ge las estructuras agrarias, esto es, variaciones del tamafo de la aldea, de la densidad de poblacién, de 1a ‘catructura profesional de la misma, de la existencia de {nstituciones, tradiciones y costumbres. Podemos hacer otra divisign de acuerdo con el grado de organizacion existente dentro de la aldea. Ante todo testo sighifica el grado de desarrollo de un sistema de instituciones econémicas (formas variables de coopera tidn rural) y por tanto el grado de divisién del trabajo fen la produecidn agricola y —relacionado con ello— Ia ‘medida en que la aldea se Organiza como unidad de pro- Guccién, Como sefialamos anteriormente, el tipo de com niidad aldeana econémicamente més cohesivo es la coope- yativa de produccién, que en mayor o menor grado posee Jos rasgos distintivos de una gran empresa agricola, Ta distincién mas definitiva es la existente entre aldeas situadas en el centro de un distrito y situadas en Ia peri- feria del mismo, Por regla general, las aldeas del centro del distrito son Ia sede de la parroquia y de las autorida- {des administrativas; asimismo son centros comerciales Y de servicios y para las aldeas vecinas. Estos pucblos Heneralmente se asemejan a una pequefla ciudad en lo fgue respects a su cardcter social, salvo que Ia mayoria de sus habitantes trabajan en explotaciones campesinas, {as fanciones que desempefia una aldea en relacién con fu distrto tienden naturalmente a ser méltiples. La parro- {quia generalmente radica en los pueblos grandes en que frente a la iglesia se encuentra la plaza del mexcado y donde ‘se establecen los artesanos y comerciantes. La escuela, asi como Tas autoridades administrativas y las {estantes instituctones del dmbito de competencia del dis {ito tambien tienen st sede en ellos. En Polonia, Ia frag- mentacion de la gran comunidad rural (Ia, gina) en uni- ‘Gades mas pequefias (Ias gromada) introdujo una nueva diferenciaciOn.” La aldea, antafio la sede de la gmiina pero % Gmina: la mis pequetia unided de gobierno local en Por 156 ahora sélo generalmente la sede de ln gromade, todavia dssempenia muchas otras fuuciones en relacén con el di trio. Las profesiones de sus habitants son generalmente mis divrsifadas, con una red més densa de centros Comercales y de servicios y con freeuenein tambien de tigunas lnstalacionesindstrales locales. A eoes estos pucblos se elevan al rango de caplialce de la adminis fasén proving se transforma en pow cue 0 centros sipctiores a la gromad Aunque often tin nivel bajo en in jerarquia adiminisrativa, denen a alla posicion a nivel de distrit. ‘Alunos paises carecen de cata dviién entre aldeas céntrales y perférias, Esto sucede en las zonas rurales Seipblizna apr nln ae falar de as (a yeoes fruto. de In union de pequefos grupos de casio), en el caso de poblacionr de ipo urbano, fn que hay ans que hacen lan veces de centro de se ticlos part las explotaciones. A menudo se desarrollan de este modo algunas regiones recientemente. pobladas (Gerbigracia, certs regones de los Estados Uatdos, los poldets holandeses, cc) o en donde se esta procediendo 2a reconstruccion del sistema agrario (verbigracia, eas de Tala sometidas a la reforma agrari). Esta dain {ampoco existe en aquellas zones donde, a causa del tipo de produceidn, la poblacion esta concentrada en grandes Ssentamientos de lipo urbano (aonas densamente urban zadas, cles, centros comerchles 0 de servicios, ete). En teas poblacioneso agrochidades la residencia yl uerto SeThallan a menudo a una considerable distancia de os Campos, pero el tipo de predceon no necesita de la co tante presencia del agrcultor sobre el terreno. a division entre aldeas centrales y periféricas est en fancion de la diferencicion segin Ta distancia 2 la Giudad. Las aldeassuburbanas difleren completamente de fas demés comunidades aldennas‘ son mds Tumeross, Tonia fasta 1954, Gromada: Ia mis pequefia y més baja unidad (ide BS, ae oe forme endo as gma, (Md eet 157 mms densamente pobladas, tienen una estructura profe- Slonal y de clase mds diferenciada y producen una mayor varledad de bienes. La proximidad de la ciudad quebranta la solidaridad y Ia economia interna de ta comunidad aldeana, pes muchas necesidades (por ejemplo, las cut furales) pueden satisfacerse en Ja ciudad. La comunidad faldeana que se halla distante de una ciudad generalmente onstituye un grupo més cohesivo y cerrado y, por nece- Sidad, es mas autosuficiente tanto en las esferas econd- mica ‘como normativa y ademas constituye una agencia de control sobre el comportamiento de familias © indi- viduos. ‘Los criterios anteriores de clasificacion de Jas aldeas raras veces Hegan a sintetizarse en Ia literatura. Por lo general, se da prioridad a una u otra distincién sequin {os objetivos de la Investigacién, Sin embargo, todos los libros de texto de sociologia rural usan Ia disposicién espacial de la aldea como criterio de divisién en tipos. La tipologia de la aldea desde el punto de vista de su disposicidn espacial se ha estudiado exhaustivamente en Ja literatura cientifica —y especialmente etnografiea— po- Jaca" que ha establecido una abundancia de tales tipos. Tin las diferentes regiones de Polonia se pueden hallar casi todos esos tipos espaciales bésicos de aldeas. En ‘lgunas provincias oceidentales (wojewodztwo), por ejem- plo, y dondequiera que se ha procedido a la fusion de Explotaciones, se hallan edificios dispersos, lo cual dificul- {al trazado de los Iimites entre una aldea y otra. Incluso ‘9 diffell hablar de aldea en este caso, a no ser que el ‘término se use para designar a un pueblo o pequefia Ciudad que constituye el centro comercial de varias explo- faclones desperdigadas a lo largo y a lo ancho de na docena de kilémetros. En diferentes regiones de Polonia también se pueden distinguir aldeas compactas, aldeas desmembradas en aldehuelas, villorrios y caserios 0 al- ddeas asentadas a lo largo del curso de un rio o de una 22, B, Zatonsks, O kectatack wst w Potse (Sobre tes formas lea en Poiana), Cracoa, 196, 158 carrétera, aldeas situadas en un cruce de carreteras, etc. La forma en que esté construida Ia aldea depende de ruchos factores: el relieve del terreno, las condiciones fisiogréficas, el tipo de produccién, el sistema de comunt caciones viales, las costumbres tradicionales, el grado de ‘concentracién parcelaria o Ia presencia o ausencia de las, actividades planifcadas por el Estado. En cada tipo varian Tos rogosy fnciones bsios de I commtdad dean. 1 dispersién de las explotaciones ‘no proporciona nin: ffaan base para Ia aparicion de una comnidad compacts Las grandes distancias especiales debilitan los vinculos socal. eoncentracin de a ea nde atomizar ‘comunidad campesina: Ia familia asume una may Importancia ¥ a la comunidad aldenna le resi ms dificil observar Ia. vida familiar. El control social. es ds débil; Is opinion pablica se forma con mayor dificul- tad y tiene un papel menor. En los pueblos fragmenta. dos en caserios 0 aldeas dependientes del mismo muni- cipio el grupo de veeindad desempeta las funciones basi- cas de In comunidad aldeana, En los caserfos, las normas ¢ ideas en vigor no siempre estén en armonia con Tas de otras partes del mismo término municipal del pueblo; Se accptan y reconocen autoridades distintas. Los senti- rientos de sseparatismos, ¢ incluso las expresiones de lantagonismo hacia los grupos vecinos, son muy corrien- tes, Esto se debe a la composicién social de los villorrios, aque suelen ser habitados por familias que ocupan una Posiciéa social semejante, por lo que el antagonismo entre caserios es una expresion del conflicto de clase entre Jas partes més pobres ¥ més rieas del municipio (mend gos y campesinos, Iabradores pobres y kulaks, etc.) Por supuesto, hay varios tipos de villorrio. Aparte de los que tienen un acentuado eardcter de clase (por ejem- plo, los polarizados en trabajadores agricolas y labradores ‘seomodados), podemos distinguir: a) caserios agrupados fen tomo a grandes explotaciones rodeadas de pequefias casas de campo; 6) vllortios distinguidos por su origen (Pequeta nobleza, una familia muy emparentada, etc); 2) villorrios distinguides por el tipo de profesion (arte 159 sanos, obreros, et.) En las aldeas fragmentadas la comt- hnidad es una agrupacion menos compacta y puede def hisse mejor como un agregado de grupos vecinos. ‘Sai, pues, podemos distinguir varios tips de comuni- dad aldeana segiin los criterios citados anteriormente: a) El origen y of cardcter de las xelaciones con el sefiorio o Ta hacienda, 1)” Le exructra profesional y de clase. ©) El tipo de produccién. @) Bl grado en que la aldea interviene en la produc- cién como unidad de produccion o el grado de cohesién general de la comunidad y de la instifucionalizacion de sus funciones. 2) Su distancia de la cludad y le naturaleza de las funeiones que desempena en relacion a otros pueblos. i) Su disposicién fisica ‘estos exteris pueden aiadirse otros, seutin los pr pos propéslts heultios u abjetivos dela investigacin. Ritafacp enumeramos los Upou mds feeuemtemento ind Cato. Sin embargo, con referencia fod ent mt ‘Sede tipos existe una tendenela general en los cambios Giue so preduoen en la comusidad aldeana, que ya hemos WMaictab antes, La inflencia de Ja sociedad industrial Y'su penetacicn en ln vida del pueblo provocan el debit Tumidno dela eiferencins existent entre Ia comunidad ‘Meany otzes tipos de comunidad foal Actualmente its gonad sures no nen un pepe solamente, en odlucclon agrora, ni siguera estan dnicamente habita- Jas por agrtlfores En cas todos los pueblos e pueden CHedatrat no slo agricaltores sino tambien familias que Se'mantlenon excusiamenteo eas! excusivamente tab {fn empresas no apials, at como fais que ‘Wlensn logeesos. complementaios en tale empresas. Ploy dit la adc, especialmente el pueblo suburbano, es Teg de rina de eons gue periencen a erat Leforias profesionsles ya diversas class yestratos - GERETS “erencacioa social, profesional y de clase 160 rompe Ja uniformidad de Ja situacién social en que an- taflo se basaba Ia comunidad aldeana. Sus funciones eoondmicas, en una medida cada ver mas creciente, son asumidas por instituciones y organizaciones de fuera del pueblo. Las organizaciones ¢ instituciones basadas en las cooperativas locales se estén convirtiendo en sucursales, fen centros de venta al por menor y en establecimientos de servicios, subordinadas a organizaciones centrales. En ciertos paises el desarrollo de las cooperativas de produe- cidn fortalece la comunidad aldeana durante cierto tiem- po, pero la formacién de una gran empresa agricola borra sus rasgos anteriores, y la aldea se convierte en una pobla cién habitada por los trabajadores de la empresa, Las funciones culturales ¥y educativas de Ia comunidad también son asumidas cada vez més por instituciones yy organizaciones exteriores al pueblo, Sus funciones pasa, 2 un grupo vecino y, con eb tiempo, llegan a desaparecer. La comunidad también deja de ser el grupo de referencia principal: Is opinion publica viene modelada por centros Situados fuera de la aldea. Su eficacia como agencia de control social también se debilita: la conducta de los individuos y familias se considera cada vez més un asunto privado 0, en caso de violacién de las normas imperan- tes, una causa de intervencion de las autoridades pertinen- tes, Por otra parte, tienden a aumentar las. fimeiones administrativas del pueblo. Sin embargo, suslen ser de- sempefiadas més por organizaciones especiales a cuyo cargo se halla el funcionamiento de los servicios comunes {que por la comunidad en si. La tendencia a la desintegra- ign del pucblo y Ia tendencia a la disminucion de las diferencias entre campo y ciudad es més o menos avan ada en los diferentes paises, Gran parte de Io que hemos dicho sobre esas tenden- cias puede parecer prematuro, incluso para Polonia. No obstante, Ia direccion general del cambio es la misma. Ea. ‘ninguna parte del mundo renace la vieja comunidad aldea- ‘na. Evidentemente todavia se pueden hallar sus earacte- risticas en algunos Tugares. Atin se puede usar el pueblo como base para Ia movilizacién de sus habitantes, y de 161 ste modo pueden loprase muchas cosos, Sin embargo, Hoe tatimientos no allan una expresion ongantzaiva shetttae'y no se entroncan con la nucra estructura de Ja weet Fadastril, co in mayoria de los casos estar Sotnedos at races, Lae sas de fecturay las Casas Gel ucla, lag piscinasy los campos de deportes queda- Sia Thandnadas y se mislogarin, pues no habré quien wee eodupe de clits Las tendencias apantan en la dices: Signe ua mayor din del bao, un uments de a importance las instituclones formals y 14 incor sapere amis ave fran la comunidad sien porate cteda! mas ampli basada en una estructura {scene El proceso de urbanlacion del campo, aie halla ceed envoy cambios antes Indicados, se baste la Seicgractin de Ia comunidad aldeana tredicional y en epee de muevas comunidades Tocales sin una aie ‘ala esencal con ls comunidades urbanes 102 5. La estructura social ‘Toda definicién de la estructura social depende ante todo de la diferenciacién de los grupos y categorias indi- viduales que constituyen la sociedad en consideracion. de un modo més circunspecto, esta diferenciacién es umn elemento indispensable en todo intento de definicion 4e la estructura social. Se puede tomar como criterio de iferenciacién uno de varios atributos de las unidades bajo estudio; el rasgo 0 complejo de rasgos que se adopte como base de clasificacién depende sobre todo del props sito heuristico inmediato. Por ello, la eleceién del prin- cipio apropiado debe hacerse con referencia al objetivo ‘que se persigue. ‘Aunque toda definicion de «estructura social» entrafia una especificacida de las unidades de andlisis, la expre sion n0 abarea todas Tas agrapaciones posibles de una Sociedad dada. Como salemos, no hay un acuerdo general sobre qué grupos quedan comprendidos en este tésminc. ‘Algunos hacen hincapié en el sistema de relaciones inter personales en Ia comunidad bajo estudio; asf, consideran Que el término «estructura social» debe reservarse exclu- sivamente para aquellos tipos de grupos que estén uni- dos internamente y que se distinguen de los otros grupos por la presencia de un vinculo social determinado, aunque los diferentes propugnadores de esta concepcidn definen este concepto de manera diversa. Otros se refieren al sis- tema de relaciones de la totalidad de Ia sociedad, indepen: dientemente de si sus elementos son grupos sociales (co- lectividades) 0 categorias (agregados) de individuos, Si adoptamos el primer punto de vista, las clasificaciones segin el nivel de ingresos no pueden incluirse bafo el tér- ‘ino «estructura socials, pues, por ejemplo, las personas con unos ingresos mensuales de 1.000-1.499 zlotys no estén 163 tunidos generalmente por ningiin sistema de relaciones y, por tanto, no forman un grupo social. Si adoptamos el Segundo criterio, toda clasifcacién que se refiera a relav Clones interpersonales que son importantes en cierto modo para la tolalidad de la sociedad puede reputarse ‘ital para el andlisis de la estructura social y puede incluit- Se entre las agrupaciones comprendidas por este término. "Asi para clarifcar las diferencias existentes entre las diversas concepeiones de Ja estructura social no es sui Ciente sefalar las diferencias de los objetivos del anslisi Pueden usarse vatios principios de clasficacién en grupos yy categorias, y los mélodos de anslisis varfan de acuerdo Zon el objeto del andlisis y el punto de vista te6rico adop- fado, Por consiguiente, el aserto anterior sobre el nexo entre el principio de clasificacion y el fin cognitivo pos- Tulado debe completarse senialando Ia relacion existente centre ese principio y el sistema tedrico adoptado. La pos- fura tedrica, es decit, el sistema de proposiciones més fenerales sobre Ia sociedad, determina no sélo los prin Eipios subyacentes a la elasificacion de lo que se denota on el termino «estructura social», sino también Ia orde- nnacign y la interpretacion de los datos empfricos. ‘Por lo tanto, tanto la definicién de la estructura social como todo el procedimienta de investigacién deben eva- Tuarse desde el punto de vista de la postura teérica adoptada. Si se critica una definicién de estructura social desde otra postura, ello equivale al rechazo de la postura feorica que implica. Por ejemplo, la critica de las cate- forias que Lenin usé en sus estudios de la estructura Social rural s6lo puede hacerse con respecto al fin cogni tivo, interpretado de una forma u otra, al que Leni Girigid sus pesquisas; de lo contrario, es lo mismo deci ‘que no se comparte en algunos aspectos Ia postura te6- rica de Lenin. El planteamiento de Jos problemas de la estructura social rural del presente estudio se basa gencralmente te la postura te6rica del leninismo. Ciertamente la identi- feacion con una postura determinada también implica su interpretacién. Ast, pues, seran convenientes algunas 164 obseryaciones preliminares para indicar el sentido de esta interpretacién, al menos en la medida en que se re fiere directamente a los problemas en consideracién, El concepto de estructura social Bl andlisis de Lenin de Ja estructura social rural se proponia revelar las fuerzas sociales bisicas en accién, fs decir, aquellos grupos o colectividades cuya actividad podia reconocerse como fundamental para determinar el Curso —e incluso In viabilidad— de los programas de transformacién de las relaciones de produccién y, sobre todo, del proceso y desenlace de la lucha por el poder. Dado éste como el fin del andlisis, es de importancia, primordial establecer los factores sociales que determi: ynan la accién humana, que surgen de los deseos de cambiar (o de mantener) las relaciones de produccién cexistentes y principalmente de alcanzar (0 de conserva) I poder del Estado con este objetivo. Los factores socia- Jes més importantes que determinan la accién humana, simplificando considerablemente, se pueden expresar st mariamente do Ja manera siguiente: 1. El acceso a todo valor universalmente deseado determina Ia posibilidad de acceso a otros valores del mnisino tipo.) En el sistema capitalisia de relaciones de produccidn el factor dominante es Ia propiedad de los fntedios de produccién. Si incluimos las postbilidades tota- Tes de acceso por parte de A a los valores universalmente deseados bajo el término de estatus social» de A, pode- mos decir que en el sistema capitalista de relaciones de produccién la diferenciacién del status social viene deter- rado principalmente a través de la esfera de la propie- dad de los medios de produccién. O para ponerlo de una forma menos terminante, la primera puede explicarse con 1. Excluimos squé, por supuesto, los. indviduos mare ales, puesto. due, augue’ tengan Una signiicacin indudable, eb nai de les feiomenos de masa nequlere que usemos un tipo Ge anilsis como el desarollado més adelante en este capil, 165 referencia a la segunda. Esta formulacién mas precavida se propone, entre otras cosas, hacer resaltar que lo que tenemos en mente no es la determinacién absoluta, sino cstad{stica, Esta reserva significa que, estrictamente ha- Yblando, nos referimos no a individuos (personas o fami- Tias) sino a colectividades, aunque la formulacién puede aplicarse a los individuos si se expresa en términos de probabilidad. 2. El acopio de muchos valores universalmente de- seados en la préctica esta restringido por diversas razo- nes, 0, mejor dicho, el aimero de posiciones que procuran cl acceso a eos valores es limitado en un sistema social eterminado, En consecuencia, a diferenciacién del status social puede adoptar formas antagénicas, en mayor o ‘menor medida, indicadas por la relacién: «A ocupa una posicién p cuando, y sélo cuando, B esta en una posicién ho-p.» Pattimos del sspuesto de que es precisamente este sistema el que impera bajo el capitalismo, sobre todo en. Ja esfera de la propiedad de los medios de produccién. Por consiguiente, Ia diferenciacién en esta esfera toma la forma de una escala, los valores extremos de la cual representan sitvaciones antagénicas. Como la propiedad {de los medios de produccion es el principal factor deter ‘minante de la diferenciacién social en el sistema capita Tista de relaciones de produccidn, las relaciones antagé- niicas deben considerarse un rasgo intrinseco de ese sis- 3. El crecimiento de la produccién, ocasionado por Ja subida del nivel de las fuerzas productivas, estd rela- lonado con Ia concentracién de los medios de produc ‘ién. En las condiciones capitalistas esto puede expr Sarse por la polarizacion de la propiedad empiricamente confirmada. EI crecimiento, bajo las condiciones capita: Tistas, est asociado con la polarizacién progresiva de Ia totalidad de la sociedad. Evidentemente el crecimiento de la producelén puede eliminar el acceso restringido a cier- tos bienes universalmente descados (aquellos cuya res- ttlocién esta azociada con el nivel de las fuerzas produc tivas y no con las propiedades del sistema). Sin embargo, 166 | | es tun cambio de este tipo no altera Ia eseneia de Ia pata de relaciones, pues esa restriccién del némero de posicio- ‘nes que aseguran el acceso al valor més fundamental (nds fundamental porque determina la diferenciacion del, status social) siguo siendo el principio del sistema, 4, Cuando la diferenciacién del seatus social toma la forma de tna serie con las expresiones extremas p y nop, Ia direccidn de los deseos de los individuos de mejorar su stafus social se conformaré en el agregado con el vec- tor nopp. Evidentemente puede variar la existencia del deseo de mejorar o de mantener el propio status social Estas varlaciones pueden definirse estadisticamente segiin su posiciéa en la jerarquia social, y por tanto podemos Suponer que en las situaciones extremas la tendencia do- ‘inante ser cambiar 0 mantener Ia posicién ocupada. El Gesenlace de un caso determinado vendré determinado por muchos factores, sobre todo por las propiedades del Sistema, que determinan el grado do probabilidad de éxi- to, y en el que las cualidades personales del individuo tienen un papel mayor © menor. Pero un individuo puede aspirar a mejorar no sélo su situacion social, sino también la de la categoria 0 grupo 8 los que pertenece. Hasta cierto punto pueden satista- ‘corse estas aspiraciones, sobre todo con respecto a. aque- Tlos valores euya acumulacién ba aumentado con el dese rrollo de las fuerzas productivas. Sin embargo, como el sistema postula Ia diterenciacién de status social como ‘su principio, eabe esperar el surgimiento de otras reivin- Gicaciones de més vasto alcance. La simplificacion del ‘ontinuwan a dos posiciones polares? sugiere la conclusién Ge que los individuos de la situacion no-p deseardn cam- iar (0 eliminar) las condiciones que determinan esta situacién o de las que derivan las fuerzas determinants, {que no les son ventajosas. Esta tendencia es tanto més fuerte cuzanto mayores son Tos obsticulos a la realizacién de los deseos que el sistema crea. Por otra parte, los indi- 2. La simplifenckin del continuom a dos posicones polares queda jostifenda ala uz del spartado 3, 167 viduos dela stuacton p procurarin mantener ‘ones que detrsinan su stars y mantener el mecanisi9 de determinacion que les resulta tan ventajoso. Bajo el ‘lpltalismo, la aifsrenciacion del satus octal, como el mismo mecanismo de determinacion, resutan ‘peimacta- mente del sistema de felaclones de produceion. El con Ticto entre las fuerzns antagdnicas se centrar, pus, cu tl‘mantenimlento 0 abolicién del sltema eapltalista de felaciones de produceldn y por tanto en la conguista 0 Sonservacion del poder dal Estado, el principal instr mnt pare lg efi, S. La apurcion de objetivos opuestos, que expresan los iateeset colectivos de los indviduos que so hallan fr situaciones socal conflctiva, std asociada con el bao de oan antics (esos) de grupos organizados cuyo fines suscitar y dirigir wna fcilvdad coletiva mas ampli. La emergencla dela ideo Togia significa que las eolectvidades do individuos en Situncones soclalesSdéaticas adquleren, en un grado u tro, el caricter de grupos sociales (sc transforman de Clases en sts en clasts «para si»). ¥ cuando emprenden Seciones para defender as ineress colectivos empiezan 2 funclonar como fuereas sociales. Naturaimente abe hacer una sri de reservas para smatizar estas proposiciones generates y simplifiadas. Sin Crmbargo como selo nos inferesa aqu hacer tna earac ferizcioe General del modo de interprotacion que est thos adoptando, y no presenta Ia totlidad de fa teria Inarclsta, podemos onitir estas reserves. Esio se aplica tambign‘a las reservas quo trian presses al tratar de Splcar estas proposicines a las socledades capitaisas Ghntarporinens concretas, Nuestra. sola. preocupacion Squt defn ln concepcién de estructura social st SBlcacin ala interpretacign de los hallazges dela inves igacion empirica la dejaremos para mis tarde 168 Areas de stigacién sobre la estructura social Como el propésto de considera Ia estructura social es caleular el oqilbro de ls fueraas sociale, mientras ue el punto de mira tedrco adoptado requete ol exanen des interaccion de esas faereas en un complejo sistema de factores, nuestro andisis lene que sor a fa fuerza muy ampli. Su 4mbito comprenders dese la aclcn social en Siasta Its condiclones gue determinan tal accion. Por Consiguiene, la esractns social debe sbordarse de for toa dindmnlc; la difereaciaciones de status social daben Sudanese ol pect de cambio, com teens, no Como estados, En fa investgacen empirca un enfoque dinamico puede sugerir, e incluso legar a poner, no uno sino “muchos princpios de clsiicacin social en repos y categoria. Teka dilerenciacion del status socal puede exam arse on referencia ess cantidad de yalores. que deseada uiversalmente bajo condiciones dadas. Tambien ts posble investigar las conexiones txstentes entre los fiterntestipos de division son abjto de descubnr los gue son specifies al sistema social dado. Toda. const Eracign de las conexiones existentes entre las diversas series de posiciones sofas implica compejos problemas & extratfeacio social y movilidad soa que Cenimes somo aquellos cambios’ de ls posiciones de los indivi dito ¢ grapos una excala (9 eral) de iferencacion Social especten aun sistema dado 2. ‘Otro tema que cabe considerar es el de los grupos organizados que aspiran a transformar o mantcper el Sistema social dado, y por tanto principaimente a cov auistar 0 conserva® el poder del Estado. Los fines y Todos de aceign de eros grapos deben analizase dado tsteenfogue jento.con su fasfondo soci Por allo es ‘eccsarlo analiza eltemddcamente los tipos de situacion social que determlian in aparicion de claras aspraco hes colectvns y de idologlas y grupos organist, asl Come el mecaniomo dela ceermiancion ens Este campo de"investigacion comprende Ia cuestion de las fucrmas 169 sociales en acc: la tzansformacin de clesividedes weelSpor soles y su funclonamlesto como fuerza 8o- Seer tale de Marg Bl 18 Brumaria de Lats Bona ce a cjmoloeliico de ext tipo de aris, Se SRasdarsetal signicacion para nuestro anit di i exructurn sociales Ta cxestioa de Tos cambios que eran fon Tactowea. designados ms arriba, como Tos Soa coctntes on el sistema de determinantes sociales wei aeividad humana, El analiss de low process aus de Titan estos cambios nos permite anticipar el feck aeactac Ine fucran sociales y I. dieccin de st act ma ee Samo’ comprender fos pincpales. conflitos cect as consezuncin, En ls estudio consagrados o aestrato campesino» esti ‘mal formulada. Si ignoramos los ribetes emocionsles de estos términos, y consideramos la cuestidn a la luz del argumento anterior, la cuestién deberia formularse més bien ast; sZEn qué situaciones sociales 1a comunidad rural actéa todavia como clase y en qué situaciones es nnecesario tener en cuenta sobre todo Ja diferenciacién {interna de clase existente en el campo?» Este problema reviste aiin una grave importancia pric- tica, En Ja Polonia de la preguerra la incapacidad por parte del Partido Comunista de percibir que el campe- Sinado obraba como tna clase en muchas situaciones sociales (reforma agraria, el problema del endeudamien- to, etc) le impidio desarrollar una actividad revolucio- rnaria més amplia, Los anélisis de las fuerzas sociales que Sélo veian lucha de clases en el campo dieron escasos resultados, no porque la supesicién no correspondiera a 186 las realidades del tiempo, sino porque era demasiado estrecha para la actividad préctica. En las condiciones de la posiguerra este esquema resulté ser ain menos itil, pues se trataba no solo de un planteamiento dema- siado unilateral sino también porque no acert6 a tomar en consideracién los cambios fundamentales acasionados por la industrializacién socialista del pais Las transformaciones de fa estructura social rural ent el contexto de la industrializacion socialista En el apartado anterior hemos contrastado los mode- Jos de cambio de manual de la estructura social rural con los fenémenos reales acaccidos en la Polonia de la preguerra. Nuestra interpretacién venia avalada por citas de Marx y Lenin, especialmente en forma del concepto Jeninista del campesinado como un «claseestamento>.” Es cierto que Lenin clabors este concepto con re ferencia a las condiciones de la Rusia prerrevolucions- ria, en que existian vestiglos de servidumbre, mientras que la interpretacién presentada aqut pretende ser més general, basdndose en un analisis del proceso de actmla- idn de capital que modela las fuerzas sociales. Peto ello, hasta cierto punto, no es mas que wna prolongacién de ideas que ya han sido desarrolladas antes, Despracia Gamente este planteamiento no es posible para el and lisis del cambio de Ja estructura. social rural bajo las condiciones del socialismo. El problema més importante de este émbito, el de Ia influencia de Ia industrializacion socialista sobre la estructura social rural, no se ha eslu diado mucho hasta ahora. Ciertamente la literatura eco- némica soviética comprende muchos interesantes esti dios de ta estratificacion de clase rural," pero por mu cchas razones parece que en la Unién Sovistica se frustrs Ja oportunidad de una investigacion mas detenida sobre 18 V. 1 Lesmy, The agrarian programme of Russian socal emoeracy, et 1. Por ejemplo, estudios de Krytaman, Galster, Uahanskl ts 187 la influencia de Ia. industrializacién socialista en la es: tratificacion rural. Los trabajos marxistas agrarios sobre cl tema se vieron interrunpidos durante el periodo de Ja colectivizacién, Sin embargo, estas condiciones ya no se dan en Polonia, en que el proceso de industrializacién Socialista ha ejercido un fuerte influjo en la pauta gene- al de las relaciones socio-ccondmicas del pais y coexiste ‘con el modo de explotacién campesino, basado en Ia pro- piedad privada de los medios de produccién, que domina ja produccién agraria y constituye la base del empleo y mantenimiento de una parte considerable (mas de un tercio) de la poblaciéa, Ademés, 1a clencia polaca se ha aprovechado de esta situaclén, puesto que en los afios jnmediatos de Ta postguerra se levaron a cabo extensas investigaciones sobre la estructura social rural, To cual Ihace posible confrontar Tos modelos de manual con datos empiricos. ‘Los modelos de cambio de manual de la estructura social rural durante el periodo de 1a construccién del Socialismo no coneiben ninguna modificacién bésiea del planteamiento presentado al principio del apartado ante. ior. Da por stpuesto que la estratificacién de clase det ‘campo sigue siendo la misma que en el periodo prerrevo- Iuelonario, salvo que con la eliminacion de las supervi- vencias feudales desaparecieron aquellos factores que fnantenfan al estrato campesino en su condicién doble de clase y estamento, Las dnicas correcciones admitidas consisten en notar que la actividad del régimen socialis- {a cambia hasta clerto punto la composicién de tas fuer- zas sociales de a aldea, Refuerza naméricamente el gru- po medio y lo une a la politica econdmica del Estado; Erganiza alos elementos semiproletarios de Ia aldea; les da un mayor dmbito de actividad social y limita fa in- Fluencia de los elementos capitalistas. No obstante, ello ‘es un reconocimiento de los cambios efectuados en et tquilibrio de Fuerzas, no de Tos cambios en los principios de su formacion o en la pauta general, Ademds, supone ‘que la antigua pauta de divisiones de’ clase rurales no Solo persiste sino que se renueva constantemente en 138 tanto st base —la propiedad privada de los medios de produccion— subsista. Cualquier evaluacién de las fuerzas sociales basada cen este planteamiento leva a la aceptacion de una serie de proposiciones y principios que afectan directamente a actividad préctica; Ia tesis, por ejemplo, de fa inten- sifieacién de la lucha de clases en la aldea, la nocién de la tolectivizacién como forma de liberar a los campesinos pobres de la explotacién de los kulaks, etc. Evidentemen: fe en algunas situaciones este modelo puede correspon- Ger a la situacién real, Pero la cuestién es saber In me- dida en que estas proposiciones siguen siendo validas bajo Tas condiciones en que el impacto de Ia industriali- zacion soclalista en Ia aldea es fuerte y continuo. Este problema es muy importante para Polonia (y no sélo para Polonia) y es vital para formular hipstesis gene- Tales sobre los cambios de la estructura social rural pro- ducidos por el socialismo. ‘Sin necesidad de recurrir a vastas citas de materiales disponibles en diversas publicaciones, vale la pena bos fquejar estos cambios de la estructura social rural de Polonia utilizando dates empiricos. Esto posiilita la cla- sificacién de las familias rurales con referencia a los prin- cipales criterios para la determinacién de las bases de Ja formacién de las fuerzas sociales, y especialmente de los grupos antagénicos de clase, es decir, el proletariado y el semiproletariado rurales (los pobres del pueblo), por tuna parte, y los capitalistas del pucblo, por otra En las investigaciones Ievadas a cabo por el TER, el proletariado agricola comprende las familias sin tierra (o con una propiedad inferior a media hectérea de tierra) otros medios de produccién agraria y que se mantienen sobre todo a base de trabajar como peones asalariados en. cexplotaciones privadas. Segiin el censo de 1931 esta cate foria, en aquel tiempo, constituia un 12% del mimero fotal de familias que vivian en las 2onas rurales. En 1950 dicha categoria se habia reducido a un 29%. Segin una Investigacion realizada por el IER en 1952, el proletariado ‘agricola constitaia entonces entre el 29% y 1 3%, pero 189 hacia 1987 habia descendido al 1 9 como méximo a escala nacional; solo en una regién (la centraloriental) el porcentaje superaba Ja media de 1,7 9. Los estudios he- hos en 1960, y los datos preliminares extrafdos del censo general del mismo aio, indican que el porcentaje sigue deseendiendo, Esta informacion muy general debe com- ppletarse con un examen de otros aspectos de la situacién de las familias incluidas en esta categoria. Suelen estar muy dispersas y estin formadas por soldados licenciados ppor invalidez, viudas con hijos, ete. (que deberian estar bajo el cuidado de las instituciones de prevision y bienes- tar social); su nivel euleural muy bajo permite explicar su pasividad social, Las categorias de esemiproletariado agricolas y «pe- quefios propietarios que trabajan para los vecinose distin- guidas por Lenin estan subsumidas, en las investigaciones ddel TER, bajo el titulo de «campesinos que obtienen sus ingresos fuera de la agriculturas, En general, correspon- devian a los «pobres del pucblo», si este término se usara ‘no para indicar todas las familias epobres» que viven en las zonas rurales sino las familias con tierra que se man- tienen en mayor o menor medida a base de trabajar para los vecinos. Esta categoria abarca a las familias que po- seen explotaciones de més de media hectirea de extensién ¥¥ que trabajan para los vecinos durante un minimo de 150 fas al abo. El andlisis de las relaciones de clase de Ia preguerra tendria que incluir en esta categoria a casi todas las familias con pequefias propiedades (con explotaciones de media hectirea a 3.04 hectareas de extensién, segtin la region). Los hallazgos de las encuestas del TER en 1947 yy 1952 se interpretaron de esta manera, Pero a Ja luz del ‘empleo a gran escala de las familias de pequetia pro- Piedad en empresas e instituciones socializadas, esta cate gorizacién se hizo cada vex més inexacta.” Aum cuando 1S, 3, Tencrr lamé In atencién sobre ello, por ejemplo, en Prosnitaiy we Reeseowatie) (Cambios ww pebio de Reese), ‘SEegnsnienia Ekowotiki Relne}s (cProblemns de Eeanomla Agra. 3a), 1952, nam 190 supisgramos que el nivel de vida de las familias que trabajan para los vecinos facta semejente al dela fa las emplendas en instnulones y empresas soclaladas (6 cual ne an odin eis ne. irenciafundo- ‘mental en Ta stuacion socal de estas dos categories, pues in segunda, de hecho, se sitda fuera dal sista de rela. clones de clase de la’aldea, mientras quo la stuacion de In primera categoria viene determinada por dicho sistema Ta eacuesta del TER de 1987 justice ia afirmacion de ave In categoria de singresosfacra de la aiculturam asi Gomo In del «proletarindo agriclan, se han coaverido fn muy poco signfcativas en la aldea polaca. A nivel na. Clonal esta catoorla no excede del 159 del nimero total de familias rurale; sdlo en cleras provincia centales: orietales pademos detectar una mayor frecuencia, Los ‘ave permanccen en ambas de esas categorias son prick palmente familie que no gulseron, 0-50 pudieron, pro- esti de as oportunidades ofrecidas Ge obtener un txplotacén de tamano medio en la region occidental, ras Indarse Ta cludad obtener un emplce local rune: ado (ao abstante, en clertas provincias de Ia Polonia ‘meridional o centraloriental esta ultima postbilidad no txiste). Por lo demés, es improbable que fos individuos do esta categoria sean eapaces de emprender tna seein Scclalorgunizada, Tas categorias de eproletariado agricola» y «semipro letariado rural consiltuyen conjunlamente tna agrupe clin de clase objetivamente opuesta a la categoria de Capitalists rales, Hasta aor, seg las investgaciones no nos asiste ninguna razdn pata cece que la concencia ae estas eategortns corresponda a st sitacion soca, Sa Pequeto nimero, su dispersion, su pasvidad y la sen. iad cualguersigno de conclencla de interes comes evita incluso Ta aparicién potenclal de esas eatogoriae como ferens sociales signieativas en In lea, a categoria de captelists rurales es atin inds ins nifcante numéricamente, ELIER clasiica en esta cate fora las familias que culdvan explotaciones que em plean ‘regularmeate Jornaleros ‘contatados. (limite 191 rior de los dias trabajados se fija por convencién en. 150 antales). Esto es cansiderablemente inferior de lo que resultaria de Ia clasificacién hecha por Lenin, que consi- deraba que una explotacion capitalista campesina era faquella en que el mimero de dias trabajados por los Jomaleros excedian de lor trabajados por los miembros ‘de la familia. Por ello, Ia cifra del IER correspondiente a las explotaciones capitalistas puede considerarse de- masiado alta, o en todo caso, no demasiado baja. En el ‘curso de la investigacién de 1957, aun habiendo fjado el limite tan bajo, fue posible encontrar familias que culti- vvaban explotaciones de tipo eapitalisia en sélo dos regio- nes en que el porcentaje de capitalistas rurales entre el cuerpo total de familias superaba el 1 9. Generalmente cltivaban explotaciones de unas veinte Ha., equipadas ‘adecuadamente con fuerza de tiro (246 caballos por 100 familias) y con maquinaria, lo cual supone un nivel de produccidn bastante alto. Las explotaciones capitalistas fevidentemente son mas fuertes desde el punto de vista econdmico que las explotaciones familiares, aunque las la mayoria de los individuos que trabajan (49'98) estén empleados en empresas estatales fuera de la saricultura, 2 saber, en la industria, en la construecién y nel transporte. Los trabajadores del sector cooperativa Son mucho més escasos en ntimero (8,6 %), asf como Ios aque trabajan en instituciones estatales como escuelas 0 municipios (68 9). Los artesanos que trabajan por cuen- ta propia presentan un porcentaje todavia menor (3.6%). EL'10,5 96 trabajan en empresas agricolas estatales, y el resto (20,2 8) son pensionistas y jubilados que vive en cl campo. De ello se desprende que una proporcién con- ‘iderable de las familias incluidas en esta categoria (est madas en un 60%) estén conectadas con Ia aldea sdlo por su residencia." Las familias empleadas permanentemente fuera de sus explotaciones y las de sus vesinos, pero que también fextraen parte de sus ingresos de su propia finca, estin ‘mucho més {ntimamente ligadas con Ia agricultura y la 16, Parn datos mis extensos, vor J. Praveuma, Serra polecerosninadona tudrosel becrolre} na Wat (La etyuctra 50° eloprafesiona! ae ta. poblectin rural no agycedl, «Zagadnleala Ekonomidl Rolnej 1862, aden. 6, y 193, atm. 1 19 aldea, En Jos estudios del TER estas familias estin dividi as en dos categorias: el tipo Z, que sacan la mayor parte dde sus ingresos del trabajo fuera de la explotacién (estas {ganancias superan los ingresos estimados procedentes de Ta explotacién) y el tipo RZ, para los cuales los ingresos exteriores son una fuente adicional de sustento, mientras jque a explotacién sigue siendo la principal fuente de ingresos. En la regidn que consideramos Ia primera de esas dos categorias constituye el 143 % del némero total de familias que viven en los pucblos estudiados y Ia segunda categoria el 12.3 %. En otras regiones las propor- Ciones son diferentes, pero él porcentaje que suman estas os eategorias juntas no es inferior al 25 8, mientras que en Polonia meridional alcanza el 50 %, Las categorias Z y RZ estan formadas principalmente por familias de pequefios propietarios. Segin M. Dziewio. ka (que usa una clasifcacién diferente separando las familias de los trabajadores-campesinos que estn emplea- dos permanentemente fuera de sus explotaciones y las de ‘sus vecinos), este grupo constituye el 72% del mimero total de familias de pequefios propietarios de la region. El tipo de produccién caracteristico de este dltimo grupo no differe {undamentalmente del de las otras explotacio- nes de la misma zona. El valor de los medios de produc: Gién y el nivel de produccién por explotacién son un tanto mas bajos, pero las diferencias son pequefias. Hay tina gran diferencia en ef nivel de produccién de merean- clas, lo cual indica que Ia produccion de los campesinos- trabajadores se dirige mas a Ia satisfaccién de las nece- Sidades de consumo de la familia que las necesidades del mercado, ‘Las categorias Z y RZ, y la categoria de «campesinos- trabajadores» de Ja clasificacién de Dzlewicka son muy heterogéneas: inclayen tanto obreros manuales como em pleados (147 % del total de los asslariados fuera de la Explotacién); los empleados en 1a industria (209 9), en el transporte y las comunicaciones (13,3 %), en la cons- 1. Chioptrobomicy, et 200 truecién y en aguas y rlegos (1,596), en el comercio G9), en la administracion (9,496), en la artesania (99 98), ete, E117,1 % de los empleados fuera de la explo- tacién trabajan en empresas agricolas y forestales socia- listas, En las categorias en cuestién, algunos trabajan en Ja aldea y otros fuera de ella. En los pueblos estudiados de la regién central-occidental cl 30% trabajan en el lu- gar, el 18% deben desplazarse hasta 5 Km para ir al frabajo, el 3296 de $a 20 Km y el 14% mas de 20 Km. {ios datos anteriores ilustran el efecto de la industria Jizacién socialista en la estructura social rural. La dife- renciacion existente de las familias rurales con respecto {sus vinculos con el sistema de relaciones del interior Ge la aldea y los cambios que estén experimentando justi- fican nuestra referencia al proceso de alejamiento del festrato campesino y de acercamiento a otras clases y estratos. Este fenémeno no es nuevo; ya fue confirmado por Lenin" Reflejando las condiciones de su tiempo, Lenin vio esto como una manifestacién de la accion de la ley Ge Ja acumulaciéa del capital, Ia cual desmembraba el fantiguo estamento campesino’ y empujaba a una gran proporcién de familias de pequelios propietarios a entrar fn las filas del proletariado, sobre todo, del proletariado industrial. Bajo las condiciones capitalistas este proceso guardaba relacién con la estratificacion de clase de la poblacién rural y era su prolongacién y consecuencia na- ural. El cambio fundamental de la naturaleza de este proceso en las condiciones presentes de Polonia consiste, zo en la circunstancia de que las categorfas en. cuestién hhan aumentado considerablemente desde el punto de vis- ta numérico, sino en el hecho de que es un proceso que tune el antiguo estrato campesino con Ja nueva estructura social, basada en otros cimlentos, a saber, la socializacion de los medios de produccién. Este proceso indica que ls industrializacion socialisia no ha cambiado sélo funds entalmente le estrctura soctal rural anterior, sino que 18. The developme capitation i Russia, et 201 ‘también ha ocasionado la formacién de una nueva estruc- ura y puesto en movimiento en este sector un proceso de transformacién consistente en la penetracién de la ‘estructura social general en la comunidad rural. Esta penetracion, y Ia aparicién de grupos que consti- tuyen una serie (an continuum) de formas de transicién gue unen el estrato campesino con la nueva estructura social formada sobre otras bases, erean las condiciones para la emergencia de los tipos correspondientes de con- Clencia social y para el moldeamiento de nuevas fuerzas sociales que Se desarrollan basadas en principios dife- rentes, ‘Sin embargo, esto se refiere al sector de Ia poblacién rural que ba roto o debilitado sus lazos con el modo de explotacién campesino, Sin duda este proceso también influencia la posicién y Ta conciencia de Ins familias que se ganan la vida trabajando exclusivamente en sus explo- taciones. Esta es la categoria mas numerosa de las fami- lias rurales. En la regién eltada como ejemplo, constitu tun 52% del nimero total de familias rurales, posee Ia, mayor parte de tierra y otros medios de produccién y produce la parte principal de los productos agrarios co- mercializados. A causa de su Importancia esta categoria reguiere un tratamiento aparte. Sin dar cifras —que en este caso serfan demasiado numerosas— podemos decir que éste es el grupo més activo, tanto econémica como socialmente. Las posibilidades de desarrollo de explota- clones capitalisias en Polonia son muy limitadas. Por tanto, las actividades econdmicas de los agricultores indi- duales na conducen a la formacién de un grupo de clase de eapitalistas rurales. Pero si se elimina este elemento dol conjunto de roles tipicos de la posicién social del agricultor campesino, podria sugerirse que el principal proceso que modela a diferenciaciéa social interna de festa categoria en la Polonia actual es el desarrollo de la agricultura como profesién especializada, Los cambios y iferenciaciones de dentro de este grupo pueden conce- birse como una serie tipificada en sus extremos por la explotacién campesina tradicional, 0 sea, la explotacién 202 de la finca como economia doméstica, el agecultor que se dedica a actividades econdmicas expesaliadas. Por supuesto, se trata de tpos ideale (en la explota cién campesinn prvada cl agricultor que se dediea& une proesion sélo puedo consttulr un tipo Ideal), pero el Fovimlento tends en esta direceién, Bll requlore wa Cansideracién y una confrmacion separadas, Aqul nos Cantentaremas con expresar la tendercin que se Tests ffs el proceso de desarrollo de la agricutura como profesisn cspecialisada con bases materiales y Jurdieas J con sus propios valores reconocldos, Es neccorio rel. Eionar eos proceso asimistno com la industialaacin so Gillsta,pucsto qu su fn, en esenla, es debilitar y el fina) ins diferencios sociales exlstentes entre campo y ludad. En Polonia esto significa las diferenclas entre los fectores de la economia privado y socializado, mediante In transformacion econddien y socal gradual del sector prlvados en cl campo de los cambios de la estructura focal supone reducr las diferencias entre la vieja estrus tara de la comunidad rural y Ia nueva estructura de la Sldad polaca actual En el capitulo 2 va hemos tratado In cueston de la ereacién dela agicultara como profesion. Sin embargo, podemas aftmar, sobre Ia base de los datos exatinaos ut, que hoy dis la divsin socal més claremente def rida’ lala etn divisén profesional entre agecal {ores y no agrculiores. Se nos ooure la sugestive hips tess de que bajo las condiciones dela industralzacon socialist la base de la eristalzacion de las fuerzas soci les rurales'no son lot factores que determinan la clase social sino aquellos que denen los. grupos profesons. Tes” Bs posible que fos téminos , El desarrollo del transporte ¥y de las comumicaciones de masa tarnbién acta en este Jentide, Ademés, el desarrollo de la industela 9, mas lampliamente, el desarrollo econémico general del pats, deasionan la penetracién del sistema de produccién indus ftial en campos que basta entonces no se habian visto afectados por el mismo, As se extionde fa division social Gel trabajo y, por consecuencla, se produce una intensife | tacion de la especializaciin en el modo de explotacién campesino y en la agricultura como profesién. Finalmen- te, el aumento de presiones a que se ve sometido al fgricultor, por ejemplo, un taaimo do educacién agricola, Iss prohibiciones en contra de la divisién de las explote | Gioues, ee. desempesan también un papel importante. | A ange ellos que tian La ctv profesional del agricultor, hasta ahora se ha presiado Ihuy pce sation al modo de fnsonanint de fg | ‘explotacién campesina. En gran medida funciona como) Ta economia doméstics, pero hay asimismo fuerzas que 240 {juegan en el sentido de la modernizacién. Las necesidades ‘gue bay que satisfacer, establecidas por las normas cultu: fales imperantes, comprenden obligaciones tanto indivi {uales como familiares, Como productor y como const fnidor, el agricultor no tiene que tratar con una sociedad de tipo anonimo, sino en gran medida consigo mismo, NNo tiene ningin abrigo donde cobijarse, ni existen meca- nismos sociales que lo lberen de su responsabilidad per- fonal, Pero como debe cumplir con su trabajo, cualquier cosa que lo facilite sera en ultima instancia atractivo, pese a las resistencias iniclales antes mencionadas. La {Introduccion de mejoras —maquinaria agricola, por ejem- plo— es un factor que cambia Ia explotacion campesina fradicional en el sentido de convertirse en una empresa Ta explotacion se beneficia de las mejoras que repre sentan trabajo social para la sociedad. Pero la introduc cidn de mejoras cambia las posibilidades de produccién yyla actitud del productor, En el lenguaje de la elberné tiea podemos decir que, especialmente en tiempos recien- tes, la intensificacién de los elementos empresariales en ‘el modo de explotacién eampesino se parece a un mecs- histno de feed-back. Por todo ello, la explotacién campe- fina tradicional, en la que los incentivos de actividad comercial son limitados, se transforma en una empresa cuando entran en juego otros estimulos a gran escala, en Ja medida que, por supuesto, el sistema econdmico gene: ral del pais dado permite la accién de esos estfmulos. En relacién con la motivacién del agricultor, a veces sellama la atencién sobre su xapego al patrimonio» o a la Importancia de la «propiedads, Sin querer negar la im portancia de los sentimlentos de apego a los valores here- dados de las generaciones anteriores (Ia tierra), hay que sefialar que Ia emigracién en masa del campo a la ciudad nos advierte a no sobreestimar la signifcacién de este factor. La propiedad no siempre esta asociada con Ia pre- sencia de tales sentimientos, y éstos a su vewno siempre derivan de la propiedad. Restringir las fuentes de moti ‘yacidn solamente a la explicacién de que los agricultores generalmente son propietarios de su tlerra es sin duda 2a mis. 6 elite teary cree 2 aire oats ee ee Faget eae eee ee eed sepia ied career ne te Se erie on $6 er Soy oo términos econémicos implica inevitablemente Ja conside- | ee aa @Debe una empresa racional y a gran escala zafarse de las principales caracteristicas del modo de explotacién ‘eampesino tradicional, o sea el caricter familiar del tre 202 ‘bajo? Esto ocurre cuando se convierte en una gran em- presa capitalista basada en trabajo asalariado, general {nente especializada en su produccidn y vinculada con una empresa industrial. En las empresas agricolas capitalistas a gran escala ourre una completa separacién entre fa economia doméstica y la explotacign y se produce una tacision entre los roles sociales dobles de la actividad el agricultor campesino (como propietario, y a veces administrador, y como trabajador que desempefia tareas tespecializadas). Los rasgos soclolégicos de una explota- ign de este tipo no son muy diferentes de los de las empresas no agricolas. En la literatura occidental dlti- mamente se ha hablado mucho de las grandes explotacio- ies familiares. Se citan ejemplos de las posibilidades de Jas grandes explotaciones (de 100 hectéreas, por ejemplo), ‘completamente mecanizadas y basadas sélo en el trabajo familiar. Por lo general, esias referencias son de tipo publicitario, puesto que no vemos cémo estas explotacio- nes pueden llegar a funcionar. Sin embargo, vale la pena Tamar la atencién sobre dos cuestiones. ‘Primero, las explotaciones de este tipo generalmente se componen de tun grupo de empresas més 0 menos especializadas, que normalmente emplean una gran fuerza de trabajo y que san una gran cantidad de maquinaria. A menudo Son cooperativas, con lo cual los miembros son normal mente los agricultores y no personal contratado. Estas ‘empresas llevan a cabo actividades muy variadas, ademds de cultivar Ia tierra; se dedican a tna serie de actividades como la erfa de ganado, seleccién y envasado, transporte ¥ comercializacién. Asi se encargin de una parte consi ‘erable del trabajo anteriormente realizado por la fami- lia, Evidentemente este sistema esta mas o menos desa rrollado de un pais a otro. La forma completamente de: sarrollada constituye la excepcién pero también lo son las egrandes explotaciones familiares». Sin embargo, es dificil imaginar la agricultura sin un sistema tal en mu- ‘hos paises. En este caso, parece que lo que se implica fla completa separacién de Ia economia doméstiea de la empresa y del rol profesional del agricultor campesino 243 hy | Le de los aspectos vocacionales y sociales que todavia con serva en la actualidad: los roles de propietario, de orga nizador de la produceién, de comerciante, de téenico con diversas clases de aptitudes, de tractorista, de transpor. tista, ete Pera no son sélo Jos mecanismos econémicos los que surten efecto en este sentido, La transformacion de la cexplotacién campesina en una empresa, y sti aumento en extension o en grado de especializacion y volumen de producelén, dejan poco espacio para la vida famillar, Ja familia desea realmente levar la explotacion por si misma y aun cuando se sirva hasta cierto punto de los servicios de empresas especializadas. Con la mecanizacién, Ja organizaclén racional y otros rasgos de la empresa, contemporsinea Ilegan otros valores aceptados en el me- io urbano: la especializacién profesional, el tiempo libre, las formas de recreo, el estilo de vida’urbano. Parece qu en una gran explotacién campesina familiar los inte reses de Ia empresa y los de la economia domestica entran. fen conilicto. Este choque no se resuelve por el nivel de mecanizacién actual, especialmente porque los limites, dde rentabilidad se van estrechando con el crecimiento de Tos rasgos empresariales. El anilisis socioldgico revela la existencia de estos fenémenos no sdlo en el mundo capitalists, donde son mas fécilmente visibles, sino tam- Dien en Polonia. Un material particularmente interesante viene dado por la descripcion de los casos extremos, 0 sea, de aquellas explotaciones en las que la intensificacién de jos rasgos empresariales ha ido mis lejos.” La postbilidad de la ereacién de explotaciones capita Listas, o de cooperativas con rasgos capitalistas, es pric ticamente nula en Polonia. En. los paises socialistas la forma basica de Ia gran explotacién es la explotacién campesina colectiva, Ia cooperativa de produccién. No fobstante, esta forma, al menos en la fornia que ha adop- Investigacién reallzada por D. Galaj en la aldea de Boch por ejemplo, -Kallurs | Spoleczsastwo» (Cultura ¥ Sociedad), 1960, atm. 4 24 a tudo hasta ahora, no se ha hecho muy popular en Polo nla" Por supuicsto, no se puede tratar el modelo de Tas ‘Gooperativas de produccion de tna forma estatia, y bay Ge decir que éstas estan sufriendo importantes cambios Gh todos los patses socialistas, donde se estan estudiando (fodoe de mederaizares. Las razones de su baja popular. dad entre los agricultores polacos no solo estriban en el fecho de que ln cooperate viola los principios de la exploiacion ‘campesina tradicional y su forma de vide, Sino también en el hecho de que no proporciona las venta as conectadas con Ia vida industria y urbana, que const jen la pauta aceptada de modernidad, Hasta ahora la ooperativa de produccién ha conservado' muchos de los ‘aogos de la explotacion campesina tradicional: su abito ‘ara, ou conexién con la economia domstica a través devi complinda fatituidn de Tas pogts paras males usadas como huerto, la ausencia de una espe- Platzacion profesional rgida y de ma estructura organ sailva racional y Ia ausencia de la division de respons filidades y Ta eopectalizacion de tareas que eon tpleas dd la empresa. He conserzado también muchos de los Inconvenientes del modo de explotacién campesino, por tJomplo la falta de ingresos regulares, de seguros contra {a veje, de segutidad social, ete; no introduce al sgrieul- for eampesino dentro de la Grbita dela sociedad global amo sucede en el caso de otras profesiones, Por otra parte, el agricultor campesino tampoco es ya indepen Gente del trabajo exterior. Le retenci6n de estos Tasgos tradicionales de la agri caltara eampesina por parte de las cooperatives tenia al propdsito de faclitar [a aceptacién de Tas mismas por fos agricultores. Los reglamentos de las cooperativas ha- dan hincapié cn las tareas seducativass, pero indepen dlememente de tu tipo Ta cooperativa se ha convertido fn una gran explotacioa campesiza multifamilia, que 16, Todos os sondoos de opinién rurales del OBOP y todos tos estudios de ao zonae Turales hechor por otror organismos Spuntan en Is misma dlteclén 245 en principio abarea a toda la aldea. Tal vex los cambios ue estin ccurtiendo ahora provoquen Ia aparicién de tipos de cooperativas completamente diferentes que ol agricultor pueda aceptar como «modernas>. Y en ver de pensar en términos de una sola via «edueativas, mejor seria en planear In organizacion de empresas especializa- das basadas en personal permanente y cualifcado, que asumiera los diversos tipos de actividad antes conjuzados en el modo de explotacién campesino como profesién generalizada, Ello dependeré del equilibrio de fuerzas entre tradicién y «modernidads en la aldea polaca, y en los significados que los agricultores campesinos asocien con la «modernidads, Hasta ahora estas materias apenas se han estudiado, El diseno de un modelo de empresa agricola del futuro evidentemente es tuna cuestion préctica. El andlisis socio ogico de los cambios que se producen en el modo de explotacién campesino y en la agricultura como profesisn, de las opiniones del agricultor campesino sobre sus con: diciones de trabajo y su vocacién y del funcionamiento de las cooperativas de produccién en Polonia (que hasta ‘ahora no se ha hecho) nos daria unos conocimientos mis, plenos de los cambios que suceden a medida que se de- Sarrolla la diferenciacida social entre campo y ciudad ¥y podria contribuir a sentar las bases empiricas de planes futures para el mundo rural y para la agricultura. El analisis de los cambios que ecurren en la segunda insti ‘ucion basica de la vida aldeana, la familia campesina, nos conduclrén a los mismos problemas si bien desde un 4ngulo un tanto diferente, La familia campesina: las tazos entre familia » vecinos Hemos dedicado més espacio a los cambios que ote ren en el modo de explotacién campesino porque rara- mente se analizan por los socislogos, ¥ las obras que tra tan este campo de estudio pocas veces van més allé de 246 [ I t ‘una compilacién estereotipada de datos econémieos. Lo mismo puede decirse del estudio de Ia profesién de agri- {ultor. En Polonia sélo en aflos recientes han empezado 4 aparecer exploraciones preliminares en este campo. tas cuestiones indudablemente requieren el anélisis so- tjoldgico de las cuestiones econémicas y de su relacién fon Ta conciencia social, y por tanto sugieren un plantea- fnlento que tna diversas ramas del saber, principalmente Ia sociclogia rural y Ia economfa agraria. Esta es quiz la raaéa por la que no gozan de mucho éxito, La situacién gr diferente en lo que respecta a la familia rural, o més precisamente a la familia campesina. Hay numerosos estu- dios de la familia en general en la literatura mundial y por supuesto éstos contribuyen a nuestro estudio de la familia rural. Por To demés, esas obras no s6lo han hecho spartaciones a la teoria sino que han acumulado una jnformacién substantiva considerable. En Polonia después de Ia guerra no se llevé a cabo ningin andlisis amplio ysistemético del modo de vida de Ia familia campesina adicional. Aunque disponemos de anilisis tedricos bas- {ante sofisticados de la familia tradicional, los datos empiricos * son mucho mas escasos que los datos sobre Jos cambios producides en el modo de explotacién eam- pesino. Aguf vamos a hablar, de una forma mds extensa ‘gue de costumbre, de aquelios problemas de la familia ‘ampesina que estén més claramente relacionados con las cuestiones te6ricas centrales de la sociologia rural y {que parecen ser las més cruciales en una reflexion of tativa sobre el futuro de la aldea polaca a La sociologia rural se interesa primariamente en Ias Aiferencias entre la familia rural y urbana que estén aso- tfadas con otras diferencias sociales entre ciudad y cam- po y que nos proporcionan una mejor comprensién explicacién de los rasgos distintivos de la aldea como sistema social separado con su propia dindmica, Entre 11, Por ejemplo, estudios relimdos por M. Trawinske-Kwa- slowita y ML Markowska. Ver, por ejemplo, el aruculo de la primera Zinlany sw rodotnle wiefsticl (Cambios en la fanila Fea), <\Wies Wepolezesnas, 196, am, 5. cesas diferencias, enumeradas en casi todos Tos libros de texto de sociologia rural, y perspicazmente lluminadas en la conocida obra de Thomas y Znaniecki,* cabe singula- rizar una en particular que podria resultar especialmente Ait para estudiar el cambio en la aldea, Se trata de los ligimenes de la familia con la explotacién (de los que hhemos hablado antes, en forma de la proposicién de que Ja explotacién eatnpesina tradicional es una combinacién de economfa doméstica y empresa), y el vinculo entre la familia y Ia agricultura como profesién, basado en la par tleipacién de la familia en el trabajo productive y en Ja forma en que la familia funciona como institucién. Uno de Jos rasgos tradicionales de la familia campe- sina es la identificacién de sus intereses con la explota cid, La explatacién es Ia base del sustento de a familia, su seguro para el futuro y la base de su prestigio. Es el bien comin de la familia, una herencia que se transmite de generacién en generacin. La sustitucion de los padres y la futura sucesién de sus hijos es central, ast como la ‘Sportacidn en trabajo de todos los miembros de la fami lia, Ta explotacién requiere la solidaridad de la familia si sus miembros quieren trabajarla como una herencia y explotarla para su bien comin. La familia es el equipo de produceién de la explotacién; la posicién de una per familia determina sus obligaciones hacia la explotacién, Ia asignacién de tareas y Ios privilegios aso- ciados con las diferentes normas de trabajo. El ritmo de Ja explotacidn determina el ritmo de la vida familiar. En a familia campesina tradicional los intereses combinados de la explotacién y Ia familia ejercen un influjo decisive sobre los destinos de sus miembros: las oportunidades de educacisa del nifio, sus postbilidades de tener que ir f ganarse la vida en el mundo exterior, su eleccion de pareja para el matrimonio, todo ello se mira desde el punto de vista de proteger & esos intereses. ‘Los cambios sociales contemporéneos que ocurren en este tipo de familia y su modo de vida estén produ: 8, WL, Thowas y K. Zsueteee, Phe Polish Peasant, ct ps 248 — clendo una difuminacién de los rasgos que la diferencian ie Ia familia urbana (como sefialamos més arriba al ha: blar de la explotacién campesina), El crecimiento de las caracteristieas empresariales cause a la larga un debil famiento de las funciones productivas de la familia ast como de la solidaridad de la explotacton familiar, auaque, fen nuestra opinién, durante algin tiempo también puede producir una hipertrofia de esas funciones en detrimento Ge otras. Por supuesto, esos cambios no son de sentido finico: la explotacion familiar depende también de la sociedad, y las fuentes del cambio radican principalmente foera de la vida aldeana y derivan del desarrollo general de la sociedad, en particular del desarrélio de la indus- trializacién y la urbanizactén, Estos fenémenos penetran ‘encl sistema global a través de un eauce u otro. Los cambios son de muchas indoles. Con Ia intensif cacién de los rasgos empresariales en Ia explotacién cam pesina, se desenvuelven las actitudes comerciales hacia la Sericultura.” La introduccién de mejoras vuelve pasada de moda a Ia division del trabajo existente. Los ingresos de Tos j6venes fuera de Ja explotacién aumentan su inde- pendencia y debilitan asf la solidaridad familiar. La emi- fracién en masa a Ia ciudad, aun cuando sélo equivalga la fuerza de trabajo «disponiblen® de las aldeas, les ‘rrebata no sdlo Ios que deberian marchar (desde el pun- ‘0 de vista de los intereses de Ia familia y do la explota- cién) sino también aquellos que debieran quedarse. El tnsanchamiento de los contactos de la Farnilia eampesina on el mundo exterior abre cl camino para la penetra: eign de nuevos valores y hace que las nuevas pautas de vida originarias de la ciudad sean casi abligatorias. Esto 3 de lo mas visible en las actitudes de los jévenes, que ‘asi universalmente quieren seguir profesiones cualifica- das, adquirir una formacién y aptitudes en empleos con oportunidades de promocién, el derecho a disfrutar de 19 AL Burewp, Rural Sociology, Nueva York, 1951, p. 186 Bn, Mi Pososas, Wychodssseo do mista o absear gospedarstnt 1 roviniary (Emigractin a la ced, tarnaio de ta exploacion ‘ara de ta Fania), Wes Wepolezerna, 160, mm. 9 249 vacaciones y actividades rcreatias, todos los beneiios ue hace posible Ia tecnologia moderna. El matrimonio Sttodo en‘ anor romanticoy im sspracin a una vida Drivel, posibles en la soctelad rol tambien se vel en atactivos?™ ‘Cuando nos referimos a las pautas de cambio de Ia explotacion campesina y de la familia no queromos dectt Ge las caractorsticas bisicas de Ta Familia campesina Graiclonal hayan dejado de exis en Polonia. Son toda: win bastante universes, y el respeto por la explotacién J ie familia son sin la motivacon nie frecnente ara {ue la Juventud permanezea en ef poeblo® Las trios dhe rigen la eleceign de pareja en el matrimonio cert Trento se formulan diferentemente et las. afmaciones aie le gente hace hoy en comparacion cou as que hacia Ae tic an in embargo, ot exarinaton de we caplotaciones.proceden ls Tontrimonios relents pronto be hace patente ve asta ahora no han ocurida Exmblos muy precios? Los rasgos empresariales en el tnodo de explotacién campesino y la especiaizacion cx {I trabajo dela exploacion noe desarolln lo bastante Faplamente™ como para ince sm debiltamtento muy eealuado de Ins funtones de prodocetn de la fami Serhan dado cambios mis obvi en la forma de la rel ‘diecion de niveles de vida mis altos v de mejores faclldades.oducativas: en ls extension general de los totlos de ida urbanos, en un deenso de la fund hes eductivas dela familia. Esto dosconso se debe auld tenog al crecimiento’ de la inportancia de Ta escusla Gue ala tendencia de los j6venes a trabajar en ls clude dis yan infuenia urbana en general Aunque Ta far tie Campesina tradicional tipiea adn ea coriente en Ta 21, Sein javetigaiones heches por E. Jepillotysiown, Ver, ejemplo, O exym mars) mote, el ee Aston, Mode racy 0 swoim sowie, cit BR. Estadis ilewadon a cabo por el TER. Ver, por ejemplo, i, Guussan Usugl a spotecenym Erosticowania swaresiy Mops iver ot evestionasio Rolnicy 0 swoin gospodarstis, et 250 sldes polaca, parece que anda de capa calda, pues los ‘eambios acaecidos tanto en Polonia como en el resto del undo tenden todos en la misma direccién general, ‘AL hablar de los cambios de la estructura y funcio- namiento de Ja familia campesina es imposible ignorar tuna de sus principales caracteristicas que solfa ser resa tada por los socidlogos que estudiaban la vida rural, pero {que ahora se esté extinguiendo claramente. Nos referimos 4 Ja familia campesina multigeneracional. El hecho de fque la familia campesina fuera generalmente grande de- terminaba muchos de sus otros rasgos tradicionales, pero sobre todo constituia la base para un sentido de continu Gad de la explotacién como elemento céntral de Ia he rencia cultural transmitida de generacién en generacién™ 1a familia campesina en st forma multigeneracional 49 esta convirtiendo en algo del pasado en todas las par- tes del mundo, Polonia incluida. En Polonia Ia familia campesina actual generalmente consta de padres a hijos “una familia nuclear— y su composicién no difiere mu cho de su homéloga urbana. Su tamafo medio es de uatro personas, yen la actualidad quedan muy pocas economias domésticas multifamiliares* Por regla gene: ral, hoy dia cuando los jévenes se casan abandonan la casa paterna y establecen explotaciones y hogares inde- pendientes. La decadencia de la familia maltigeneracional Aebilita sus otros rasgos tradicionales y alloja los lazos tds amplios de la familia con los vecinos. Los anilisis socioldgicos de la comunidad local rural concede una gran importancia a los lazos entre {a Fam lia y sus vecinos. A menudo las aldeas surgen a partir de una sola familia." y la aldea se considera como ma ‘gran familia o se define como un grupo familiar-vecinal:" 25, WL Thos y F. Zraoo4, o7 ft 26. Ci. investigacion de ML Latuen y MM. Pousss, Spoleceno: eonomicana siruttura wi, et 21 W, Grins, System secjologit ws, cit, 2 K, Dubauwuer, Wes Malopolske 2 emigracia emery: anska (ka alien de Maiopolska y fa emigraclon @ Ameria), Vareovi, 1958, 251 No cabe dua de que en gran medida Tos lazos de paren tesco de weindalconstiefan fa base del pueblo como trupo pina ‘que cerca un fuerte ina, sobre las Elias indvideses, La importania de la aldes como grupo tenia adn mayores consecueacias, La vida aldeana sr Gacterizabe por su homogenedad el cra y el macs tro, asf como el ncendado y sus eras, evan todos Fores teroe po formaban parte el estato campesinos porte eso a otfes estamentos y clases. Lo mismo puede de- Sse los poros roprezentantes de Tas profesiones Seclsrevfsten ene publ, Lae miembros dlp Bib Slo sepuan Tos ofcion 9 artes mamles como Heo secundar ae existencia de Ia comunidad aldeana y la CGntancia socal agoinda con ela an sentido de ail: ttento yun sentimiento de soldaridad-— difattaban inudablemente ef desarrollo de las formes capitalistas ¥ la aparici dela diferenclaciony de Tos anlagonismos de clue, aun cuando Ta solidaridad tradicional de este tipo no era suiente para lepedir que ocurleran fe nomen tates, Tt mocin de Ta aldea como wna familia carpesina exteasa, pues, unde suo rafces cn el pasado. La aldea omplciaba I familia, paticuarmente en aquellos can: por an gue 1a fara no era setonufclente, La ayuda Fria produce la ayuda mutua en caso de calamidades ‘tural eatétrofes familiares; Ip ejocuion de clrtas tetividadeseeonomicas “a tmenado Sabadas en la provi dad comunal (por ejemplo, bosques y pastos comunales) Gen operaciones comunes ue benefciban a todos (oon frelon de careers, aejoramiento de Tas terra, et) Elmantenlmiento de fa ley el orden; el desompanio de Srplias funclones cutarslesy sociale. y el efecto, @ través dela opinion publica, del contol social sobre is EEmilasy las personas indviduales, todas eatasfonciones Sldcanas, que se desarvolln parte de las fanciones familar hacen del pusblo uaa eathdad coherente y en tran medida nutonficiente en relaion con el mando EXeron A cansa de estas aetvidades por parte de a Slice como grupo primane la cooperaion en sus Aver sas formas era una necesidad. Bl modelo de cooperativa de produceién también se basa hoy dia en ess funlones, pis en gran medida sigue los prinipios en que se basa In famila carmpesina extens, Peto [a alden como grupo priario se ve también afee: tado, a su vee, por los cambios que se producen en la familia campesioa, La cobesion de la aldea se ve debt Itada por los efectos de fucrzag sociales mio ampliss, por Jn infltencla de ln claded y de la Industria por tos Cambios que ocurren en el modo de explotacion campe sino y dentro del estrato campesino. Lag relaciones 20. rdmieas entre los ricos y los pobres —-quo al principio tienen el eardeter de patronargo—> empiezan a toma Ia forma de relaclones entre patrono y empleado y de ina talaclén entre comms on vex de entie setes hunos, La futorklad personal tiende a substituiree por la autoridad funcional y especialista. El desarollo de la explotacion fomo empresa condice as artculacion con el mundo enor, on el mercado, La agriulcura raconal requlere Intconcentracién dela terra, pero data desintegra el pu. blo, tranafere sus funciones Originates los vecinos'y 8 fargo plazo individualiza In explotacion, El desarrollo dal mercado y de Ia industria tine alas familias del poo bo con su lugar ‘do trabajo o crea posbilldades' de empleo fuera dela aldea. Bl desarolio Ge las comunies: Gionesy del transporte de masa ocesioa la dfusin gene fal de las pastas calterales urbanss, Por consistent, las fuentes itternas de camblo seven relorzadas, por Ja fnfuenea de Industria y de Ta chudad, que en aos recientes ae han veto dominentes {a emigracion del pacblo a Ta ciudad, la colonizaciin de ls Terrvorios Oceientales y el aumento de los ingre tos fuer de la aldea han eferedo wn inflajo particular mente fuerte en Polonia. Ya no ve puede decir que la ales consttuya un solo estamento social Antano los 2. 8, Coammowstt, Podioge ruch chlopskiego (Bases det mo: Yimjeno caripesio)” Daclar (Obra, vol 2, Varova, 98 pe 253 fufan un grupo aparte. Hoy no sélo ha sumentado si rhmero, sino que ln mayora tabaje fuera del pueblo y de in agricaltur y pervenee a otros estratos y clases sod Tes? Lo mismo podemos decir de los campesinos que tienen pequefias propiedades, salvo que forman ta cate. fporla morginal,stuada entre dor estzatos y medios so- Sales Te alden se ha convertdo asi en Tugar de residencia ara gonte qu cece varias profesiones y qu pertencoe Etats sve ferent, a dfereniton Sinlmentc (en Polonia s6lo muy ligerameate) eo fun Bion de las necesiadesIntemas de ln comunidad rural Es mucho indo dcbida a las influencias urbanas, incluso fia penctraciin directa de la lodad en el. campo. Elle difelta actualmente delimitar las fronteras entre aldea $ cluded de una forma precisa: en cl cago de ls areas due ha estado sometidas con més fusraa alas influencias deta industralzacion y de In urbanlacion se puede Hisar hasta dela apaicion de-apregados locales do ca Hcler curbanorural Cierior rasgos peculares a Polo Pia cotin intensfeando este Droceso. Las migeaciones tn masa del campo a la cludad, que refueraan los oom faclos mutuoe, trbanizan Ta aldea pero también era Tigane la ciudad, La mejora de las comunicacfones facili tl uso de los grandes centtos urbanos como fuentes de Suministroy lugares de diversiin pare los aldeanos den tro dela Gvbita cada ver inde extenea de ls Gudades, a teens hacia a despobacon de as pounded tic en muchos aspectos empeora Tos servicios econémt Sf, cultralesy havia administraivosdisponbles. para {scien en comparacion con el gran centro urbano es un fcr adicional pecullar a Polonia que tiende @ Racer den aldca un fugar cada ver més «suburbano>. Las pequetas ciudades cambian tambien sus funclones © Entfen en docadencia y sus suburblos erecen. La aldea amb su cardeter en términos del uso del suclo: ya n9 30, 4, Prneowaen, Struttura spolecenocawodowa, ct 254 es excusvamente un zona agri sino gus converte fu un 4rea residencial recreativa para la. poblacién urbana.” pe a Podriamos seguir multiplicando estas observaciones hasta el infinite, Todas ellasevidencian la unidireccionar lided del carbo, et deblitamiento de in comunidad ales tm local tradicional y la difiminacion de las iferencias fociales fundamentaies entre ciudad y campo, ‘Al igual que los cambios dels estacturay ef funciona riento de la explotacién campesina, los cambios de la familia rural y de la aldea como grupos. basados en Jn familia y en el vecindario plantean muchos problemas tedions y pricticos. A la luz de esos cambios, el objeto tradiional de la sociologa rural centrado en’la nature Jez de las diferencias entre campo. y cludad empieza 4 parecer una cuestién de importancia decreciente, En la Paonia contemporinea es virtaalmente imposible sf un conjunto distintivo de earacterfstcas tipicas dela fe ‘lia campesina tradicioual. La familia ha sufrido cam bios en In naturaleca de los valores aceptados por sus membros oen su comportamiento, Los cambios de estrus tara y funclonamiento de Ia familia campesina formnan parte del complejo de cambios de la vida aldeana, que ontribuyen a Intensfcar y « extender, Las viejs deli tiones dela aldea tambien resultan en gran parte pasadas ddo moda" Asimismo, cabe dudar de si ln vida aldcana, Inclutdas la familia campesina y In aldea como grups Primarfo, pueden analiearee atin como un sistema soctal gue funciona segin sus propios princpios pecullares, Los fendmenos que ocurren en el pueblo ye no pieden ser cxplicados por completo basindose en supuostos de este tipo. En gran medida, pues, Ias teorfas basadas en tales sipiestos se estan volviendo intiles Ta euestién que se plantea ahora cs el origen de esos cambios? ghasta qué punto derivan de la accion de pro- 31. H. Koren, on ft 32. HL Hormonien, The relationship of rural sociology to ther fields ‘of sctolopical specialization, «Rural Socology, Vo tumen’ XV, 960, pF esos internos a Ja aldea y en gué grado pueden explicarse fen términos de la influencia de la ciudad? La raiz de la Crisis actual de la farnilia, y de otros problemas contem. porineos de Ja sociologia general, puede comprenderse fnejor si la proyectamos contra el tel6n de fondo de la crisis de Ia aldea. Un planteamiento de esta indole situaria 4 la investigacion socioldgica rural dentro de perspectivas, fedricas més amplias, Sin embargo, incluso estas descrip. clones tentativas y muy sumarias de los cambios produ tidos dentro de las dreas de la vida social abarcadas por Ta sociologia rural indican el atractivo clentifico de la investigaein sobre los problemas extraordinariamente ri. ‘cos de la familia campesina y la comunidad aldeana y sugieren también la zentabilidad de iniciar pesquisas se iin [as lineas de la influencia reeiproca que se ejerce entre ‘campo y ciudad. ‘Los problemas pricticos que exigen ser investigados debido a su significacién para el Futuro de la aldea polaca son igualmente interesantes desde un punto de vista igual mente sociolégico, El modelo actual de la cooperativa de produceién se basa en la familia campesina tradicio nnal, que constituye su elemento bésico, mientras que la vinculacién de la familia con la gran explotacién colec- tive subordina a aquélla a Ia estructura organizativa de ésta y a los métodos de explotacién determinados por las reglas de Ia cooperativa, El modelo actual de coope- rativa de produccién se basa también en la comunidad aldeana tradicional, que, gracias a la cooperacién, vuelve fa renacer como unidad cohesiva A la luz de estos str puestos cobra sentido la propuesta de que examinemos Ia colectivizacion contra el trasfondo de la aldea como grupo primatio.” En vista de estos cambios, no obstante, cabe cuestio- nar la pertinencia de un modelo basado en Ja familia tradicional y la aldea. La aldea polaca contempordnea difiere considerablemente de la aldea rusa de hace cin- LW, BuMowsnt, 2 segadalen socfotogt ¢ metodyki ws (deerea de los problemas 9 miatedos soctolagicas de te 72cons (riceion de ta aden, “kultura | Spolocenstwos, 1860, adm. 3. 256 cuenta afios. Las investigaciones nos muestran hasta qué ito se pueden encontrar alm rasgos tradicionales en Polonia. No es bastante mostrar que estan alin presentes en la conducta: Ia cuestion importante es la medida en fque son aceptados. Las cooperatives de produccion no fon muy populares, especialmente entre los jovenes. Sélo hardin populares cuando revelen cambios que represen {en la «modernidad>, es decir, cuando deparen los valores asociados actualmente con Ja vida urbana, que general Iente también son deseados en Ja aldea. ‘Asi la cuestign de los cambios en la familia campesina yen la comunidad aldeana vuelve a entrelazarse con el problema irresuelto del modelo de la grani empresa agri- ola, que no sélo tiene que ser mas racional que la explo tacién campesina desde el punto de vista econdmico, sino fambién macho mas emoderna», es decir, responder a la forma de vida a la que aspira la poblacién rural. Ello también plantea la cuestién de la naturaleza de la com nidad aldesna. El grupo familiar-vecinal tradicional ya no fonstituye €l nico modelo tedricamente posible, por Jo cual pensar en esos términos no puede conducir a tna accién eficaz si esta entidad tradicional ha dejado de existir en gran parte en Polonia. Estos problemas Suponen no s6lo la consideracion de modelos apropiados, fino también de formas en las que debieran realizarse tales modelos y de qué fuerzas sociales se precisan para ‘que su ereacidn sea posible, El estrato campesino + los cambios en el campesinado En el capitulo 5 hemos hablado con detalle de los principales problemas que suscitan los cambios en la ‘xtructara social, Pata poner esos cambios en perspectiva, nocesitamos recapitular brevemente las observaciones que all hielmos. En los andlisis de la estructura de clase de | socledad capitalista Ia delineacién del estrato campe sino siempre he engendrado muchas dificultades. Por una parte, los campesinos han sido diferenciados por carac- 2s7 teristicas sociales tan claras y distintivas que era dificil nega la existencia de un estrato campesino sepatado, Por otra, frente a las claras diferencias entre ciudad y campo Ja aplicacién de un esquema estructural uniforme estaba destinada a ser artificial. El marxismo considera ef estra. to campesino como intermedio entre las clases basfeas de Tos capitalists y los trabajadores. Se crefs que la accién de las fuerzas econdmicas dentro del capitalismo provo- ‘eaba una polarizacién progresiva que daba origen a dos clases opuestas, de modo que la aldea, al igual que Ta ciudad, experimentaria también, pues, ua division de sus ‘miembros en capitalistas y proletarios Con el desarrollo econdmico, esta polarizaciéa se pro- ujo répidamente en algunos paises, més lentamente en ‘otros, En las aldeas tomé la forma no tanto de la spark tid de una. division entre capltalistas y obreros sino de Ta emigracisn del pueblo, lo cual contribuyé al crecimien- to de la clase obsera urbana y a la concentracién de beneficios que se acumularon a partir de la agricultura en manos de los capitalistas urbanos. En los paises en ‘que Ia industrializacion se produjo tardiamente y en una forma muy concentzada, y en gue (como en la Polonia de la preguerra) existian ain grandes haciendas, estos cambios produjeron una serie de otros rasgos. ‘Sobre todo, se conservé la antigua divisién de clase entre aldea sefiorio; las haciendas se transformaron en empresas Agricolas capltalistas. y se desarrollaron las relaciones ‘apitalistas entre la aldea y el sefiorfo. Segundo, a causa cde Ja concentracién del capital principalmente fuera de las dreas rurales, Ia posiciOn de la totalidad del estrato campesino en la estructura social y en el sistema de clases cambiaron de acuerda con Ia importancia creciente de la Giudad y de la industria. Bajo esas condiciones, ademas de Is polarizacién, otros factores entraron en juego ex Polonia y ayudaron a preservar la unidad del estrato cam pesino. Por estas razoues no es posible tratar Ia aldea F Ia ciudad como comunidades en las que ha ocurride ‘un desarrollo paralelo y similar de una polarizacién de Clase, Por el contratio, es menester tratar la aldea come 258 | 5 ‘ana entidad separada en el sistema social general de cla bs y estratos. Todos esos cambios se produjeron mas [eotamente en Ia aldea, cambios tanto en la naturaleza del modo de explotacién campesino como con respecto f las relaciones entre campo y ciudad que, bajo las con diciones polacas, determinaron la posicién de la totalidad de a comunidad eampesinn No obstante, pese e508 rasgos espectficamente pols «0s, os cambios de clase fueron de una especie semejante {anto en el campo como en la ciudad. En los paises eapi- falistas en Ia actualidad la aldea se esta transformando ‘mds 0 menos rpidamente de sindnimo de estrato campe- sino en una comunidad ea la que se detecta la emergencia de las mismas pautas de diferenciacién profesional y de tlase que se encuentran plenamente desarrolladas en las tiudades, aunque a escala diferente." Bajo as condiciones presentes en Polonia la direceisn del cambio en Ia sociedad rural difiere de la de los paises capitalistas. En éstos la division entre propietarios y trabajadores (capitalistas rurales y proletariado agricola) flja la estructura de clase de la poblacién urbana; en Polonia, empero, la clase capitalista es casi inexistente ‘en las ciudades ¥, en general, la propiedad o la no pro- piedad de ios medios de producciéa ya no diferencia a los Individuos en una importante medida, ni constituye el eje de Ia desigualdad social. Pero en Ia aldca polaca la dife- renelacion con respecto a la propiedad de los medios de produccién todavia persiste, a pesar de su medida limi- fada, Esta diferenciacién forma parte de la pauta de relaciones eeonémicas entre los vecinos o, en forma mis Aesarrollada, las implicadas en la contratacién labora. Bajo la influencia de los cambios estructurales funda rentales, no obstante, se ha restringido considerablemen. te la diferenciacién segtin los medios de produccion y el grado de Ia dominacida de clase. La reforma agraria y la 34, B. Gusset Zoiony spolecono-ekonomicene) struktury wl se Poise Lasdove} (Cambios en fa estructura soclosconéirica de 1 aides en la Polonia Popular), Varsova, 161 259 . colontzactén de los Territorios Occidentales, fa migractén en masa del campo a la ciudad, las amplias posibilidades abjortas a los campesinos sin tierra de encontrar empleo fuera de la empresa privada —y especialmente fuera de Ja aldea y de la agricultura— han limitado considerable mente el nimero de los que pueden considerarse el prole tatiado rural o «los pobres del pueblo» en el sentido Teninista.® También ha habido una reduccién del nimero de propietatios de explotaciones capitalistas. En todo ello ha tenido un importante papel Ia politica de clase del Estado, aunque las fuerzas econdmicas gene- rales también aportaron lo suyo (escasez de trabajo en las aldeas) asi como factores sociales generates como la posicion social del jornelero aldeano, que acarred un sumeato del precio del jornal haciendo asi que el trabajo asalariado fuera menos rentable, més gravoso y algo que evitar en consideracién a Ja opinién pdblica. Las dificul tades de contratar jornaleros para las explotaciones cam. pesinas estimularon hasta clerto punto el resurgir de fnstituciones pecullares a la aldea tradicional (por ejem- plo, devolucién de préstamos en forma de trabajo). Pero, segtin datos recogidos en 1959, la importancia del trabajo asalariado y de la devolucién de dinero en trabajo (125 ‘dias en un grupo de explotaciones de mas de 25 hecté reas de extension, en las areas del desarrollo capitalista més avanzado) mas un descenso continuo de la contra: facién de trabajo (observaciones hechas en 1962) no si. gieren que haya ningiin desarrollo signifcativo de rele Elones de clase, pese a su evidente presencia. Por supuesto, Is explotaciones individuales siguen diferenciindose con respecto a su fuerza econémica; por ello, potencialmente, Ins diferencias de clase existen y pueden resurgir bajo lertas condiciones econémicas ¥ sociales (por ejemplo, si se restringiera el éxodo a las ciudades), mientras que los intereses en conflicto entre grandes y pequefios pro- 38. B, Gasser, Podelal tuduosct wiejskiej na hetegoria spo- lecgna (La dsision ig poblacién rural en eategorla socal), ‘les Wopoleasenae, 196, nm. 3. 260 pietarios, aunque no tan agudos en la actualidad, pueden eaparecer bajo ciertas condiciones. ‘Dejando aparte estas matizaciones, las divisiones de clase en el estrato campesino, en términos de las catego fas introducidas por Lenin,* son de importancla més bien marginal, mientras que las contradicciones de clase ‘pasadas en esta division no pueden considerarse hoy dia Ja génesis principal de los alineamientos contemporaneos en el agro. Aunque las divisiones de clase no son un mito J aunque se pueden identificar capitalistas y proletarios furales de carne y hueso, los que conciben el futuro de fn aldea en términos de una Iicha de clases centre los pobres y los kulakss, y que creen que esta lucha desem- focard en la colectivizacién, no encuentran apoyo para sus opiniones en nuestro conocimiento de las condiciones actuales. Las categorias sociales mds numerosas en la fldea polaca de hoy son: a) campesinos propietarios de ‘explotaciones familiares, y b) Ia categoria altemente di- wetsifcada de los «trabajadores-campesinos», es decir, familias que viven en la aldea y conjugan en grados va slables su trabajo en la explotacién con un empleo regular fuera del pucblo y fuera de la agricultura. Asf, pues, la renciacié a lo largo del eje aldeaciudad se ha con- yertido en la divisién dominante en el estrato campesino, ¥en Polonia esta diferenciacion no esta asociada con las {ivisiones de clase que Lenin sefialaba en sus obras sobre Ia aldea rusa prerrevolucionaria con respecto a los cam: bios de la estructura de clase urbana o con respecto al cambio rural. [Las cambios que hemos apuntado indican una serie de campos de investigacién socioldgica. ¢En qué consiste hoy fl estrato campesino, en vista de Ia existencia de un continuum pleno de cateyorias intermedias entre el agri- fultor campesino y el residente urbano? ¢Cudles son las aracteristicas sociales del estrato campesino y cuéles MV. Lowry, Draft thesos on the agrarian question, Se- lected works, vol. 3, segunda parte, Mosel, 195, 57. "Wr L Lian, The development of eapitalins ix Rusia, ct 261 son Jos tipos més importantes de familia en la sociedad rural? En consecuencia, gcudl es la direcciéa general del cambio, puesto que intervienen tantos factores, unos que mantienen e incluso refuerzan la cohesién del estrato y otros que lo debilitan? Estas cuestiones, muchas de cuyas respuestas estén a nuestra disposicidn gracias a materiales de investigacién, texistentes? son importantes para definir las «fueraas so. ciales» en el sentido de colectividades humanas que oct pan en general situaciones vitales idénticas y emprenden, pues, actividades que adoptan formas que ies son come: hes, El andlisis de las «fuerzas sociales» en este sentido sin dada puede Hevarse a cabo desde muchos aspectos diferentes ast, pues, es posible considerar a los jévenes 68 los miembros de tal o cual organizacién como una ‘fuerza social», Las resultados de las investigaciones apun. tan hacia Ia conclusién de que el anélisis més importante cel de las divisiones socio-profesionales, que unen las diferencias vocacionales y de clase (estratos). Evidente. mente ello requiere el andlisis de los grupos dentro de las ‘que se dan estas divisiones (grupos territoriales, grupos tunidos por un origen comtin, ete.) y de los grupos que cexpresan los intereses de una u otra categoria socio-pro- fesional (organizaciones politicas 0 profesionales 0 los ‘érganos de gobierno). Al examinar el sistema de fuerzas sociales de este modo, volvemos a las categorias ya men- ‘lonadas como las numerosas en la aldea contemporénea, {8 saber, los agricultores familiares y los «trabajadores: ‘Debido a la acentuada diferenciacién entre los etrabar jadores-campesinos»” es dificil analizar esta categoria como una fuerza social. Sin embargo, no puede pasarse por alto al considerar el futuro de la aldea, Parece que, fparte de los problemas que plantean sus nuevas vocacio- nes, @ los trabajadores-campesinos también les preocupa 38, Spoteceno koncmizena strukaura ws, eit. Bi. Rute termine (chloperobotniey) fae imtrodocido a fa I teratura agearia poltes pot I Teeiom, Priewlany west Reestow hy et 202 star cerca de su lugar de trabajo, liberarse de las cargas. ne les impone la agricultura (arrendando o vendiendo sus fierras, ete.) y Ta conversién de Ia aldea en una pobla- ‘Hén de tipo tesidencial. Esto puede interpretarse como {mn interés por la urbanizacién de la aldea; por su trans- ormacién en una comunidad ruralurbana. Esta es la sclitud hacia la aldea por parte de la que actualmente fgonstituye una de las categorias mas numerosas de la poblacién rural y que se esti convirtiendo répidamente Eh una fuerza social, aunque en Polonia todavia no pode- Gos decir de una forma precisa qué papel tendrén en ‘lina instancia los trabajadores-campesinos en el cambio social. ‘las orientactones bisicas de Ios campesinos que cult van explotaciones familiares son bastante obvias. Ademés de tener intereses semejantes en la urbanizacién rural, desean cligerar su trabajo y aumentar los ingresos que Scan de sus fincas agricolas, clevar el prestigio social de {ip profesién de agricultor, modelar su vida de familia segin la de las ciudades y extender asi las funciones de fa familla.a otros campos que el de Ia produccién. Para aligerar su trabajo y aumentar sus ingresos, los agricul- fores campesinos desarrollan una serie de actividades con- juntas, prineipalmente a través de las instituciones de cooperacién. Ta cooperacién rural no es nada nuevo. Aparecié en el siglo XIX, con el crecimiento de los elementos empresaria les en ef modo de explotacién campesino y el aumento resultante de la dependencia mutua y el incremento de posibilldades de utilizar esteucturas econémicas mas am- plias. Originariamente la cooperacidn rural fue un movi Iniento social; congrez6 a los agricultores en torno a una ideologia, a las que estaban subordinadas sus funciones econdmicas, Actualmente en fa literatura vernos usada la texpresion «institucionalizacién de la cooperacién rural» 40. F, AWW y J. H. W. Ligeune, Instytutionatizaja organ acl roniosjeh w Hotiendi! (La insiucionalicacton de las ore ‘Meletnes agrcolas en Holahda), “Wies Wspoleresnas, 1957, 8 mero 1 263 La cooperativa va adquitiendo rasgos caracterfsticos de Ta fimpresa, esti sujeta a Tequerimientos econdmicos expe: Glalesy estd empezando a perder sis asibstos de movi ‘miento social que slian iealtar el desempenio adecuaca de las funciones econémices por parte del movimiento coperativo. El personal. permanente, qe 8 consegra fa cooperativa mural ya's desarrollo, es el elemento inis signifcativ que opera en ella en Ta sctualidad, En {as reuniones de Ios miembros el gricultor no representa Jos intereses de Ta cooperativa sino fos de ss explotacion; sino la beneicia personalmente no est partcularmente injresado en si la empresa en In que teabaje es de carkc: ter cooperativo, privado o estatal® Su tnico interés ex the oot elcentemente rentable. Actualmente ta coopera. tiva rural, en sus diversas Formas, cn gran medida no es tin movimento socal sino una empresa Su importancia pura la futuro de la aldea no radiea tanto en cl hecho Ee"Gue ensefia al pequefo propictario a renunciar as propiedad privada'n favor del ideal cooperative como en El echo de que, al aligerar la carge del trabajo del po- ‘auch propictario,gracuelmente va tomando & Su COTE Tt fotaidad dela producein agricole. En los pases capt talltas Ia cooperacién en el momento presente solo asume las funciones ‘de. prodccién en una peqUla medida: Principalmente abarca otras ramas de In actividad del Zusicltor, Sin embargo, su partiipacién en la produc ion va en aumento, aungec Ia vision de Kreywickt dela Srganizacion de la’ fotalidad. den producciOn, agraria Scbre bases cooperativas no se a realizado ada® Tas eooperarivas. de comercializacén, de shorro y cotras semnejantes se han insttacionalizado en gran parte fn Polonia. Enisten tambien Ins organiaciones conocidas Sonel nombre de Citas Agcols, oo ose Ian resto grandes esperancas, Cuando eh 1957 se inci este po de organizacion era -y ain To es en gran medida 41, 0, Grune, Sociotogical problems of murat cooperation, ponencia preventada en el cuarto Congreso Mundial de. Sociol fi, celebrad en Stresa B'Reeweas, op. cit 264 ‘un movimiento genuinamente social, que reunia a los individeos mas inmediatamente implicados en la agricul- ‘ura, notablemente los campesinos propietarios de explo taciones de tamafio mediano En la actualidad, aunque sigue siendo un movimiento socio-profesional, la organi- zacién también desempefia otras funciones: administra nallones de zloiys procedentes del Fondo de Desarrollo de Ta Agricultura, gestiona varios asuntos oficiales, lleva a cabo una actividad educativa, estimula a los agricultores fa enongullecerse de su profesi6n, crea clerias empresas como centros de maquinaria y se encarga de su funciona- Imiento apropiado (o sea, economicamente racional). Asi, pues, tiene varias bases de actividad y opera al menos Eobre tres principios: los de tun movimiento socio-profe- sional, un organismo administrative y una empresa. En texte momento es dificil determinar cual de esos tres prin- cipios legaré a prevalecer finalmente en estas organiza clones y también es dificil prever qué papel tendrén en tl modelamiento del futuro de Ia aldea. En nuestra opinién, es muy probable que los Circulos Agricolas se conviertan en una empresa 0 grupo de em presas, basadas en un personal permanente y en técnicas odernas, que realicen una serie de servicios de produc- cidn especializados y que tomen a su cargo diversas ramas de Ia produccién agricola. Polonia ya ha tenido una expe- Hlencia muy interesante en este sentido; por ejemplo, los {ntentos de cooperativas Iecheras de organizar eria de ga nado y planes para la creacién de granjas lecheras basa: das en contratos con explotaciones especializadas en pien ‘08 y forrajes organizadas por empresas cooperativas © por el POM (Estaciones de Maquinaria del Estado). El Aanilisis sociol6gico de esas experiencias, en que se estin desarrollando nuevos tipos de relaciones entre esas em- presas y la aldea, podria aportar mucho al tema en dis- cusién. Los problemas antes tratados en relacién con el siste- 4. A Romwoy, Crlontowie holek rolniceych (Los miembros de los Cirios Apricoas), através de presiones econdmicas,acministrativesy politica. Con Unis camps poltleasagresvas, una elevadateibut tn de lor agrcultores individaaes, la confiscacion de ine cosechas, reystros en busa de productos agricolas ‘cultes, se usaron todos esos métodos simeleincamente $e detplazacon sla zonasturalesmillares de miembros Ga partido (obreros indusrales, ocales del eereito, ttoctera) con la misién de colotviear a los campesinos por el medio que fuera, Los campesinos se opiscron a Pclectvizacib, algunos dena forma activa mediante rebeliones que fueron faciimentesofecades por ele) ‘Sto, pero la mayoria de una maners pasiva sacrificando ligatndo, oculeando Tas smtentes,negindose ai taba. far 0 trabajando a un ritmo lento, Esta raltoncla cro. graves difcultades econdmicas y Ta colectivizacion se Interrumplo durante alain tiempo. Los mélodos se vel weron mids Tsclonses menos bruscos, hasla que 96 Fiala la colectivlaclsa en 198 El arel se excogis come modelo de eultivo colective abligatoro, y otras Tonmas comunes, TOZ) se transfor descos de ss membros inteprantes. La nucva forma tome SIrombre general de Kolllioe,abreviatura de lleit tof ehadiajtwo 0 economia colestiva. Ba general el folk fn una pequetasparcelasfaaliares posedas Individual mente, normalmente culvadas Intensivamente, con ual dades‘de culdvo colectivas: Lor medios de producsion tran de propiedad colectiva, con las excepeiones de Ja tra nacional y de fos tractors oon pon naquinaria pesada, qu hasta I956 estuveron en poder Glas evtationes de maquinaria (MTS) El kotkhoz estaba bli a entrgar ena cantidad estipulada de produc Gon al Estado; estos products se vena a precios mu Sho mis bajos de los que hbieran obtentdo' en el mer Sado privado, Otras porviones de prodscelsn ibaa dest fdas’ las MTS como remineracion por los sevilos 316 téenicos y mecénicos prestados. El dinero sobre toda tenia que invertirse obligatoriamente, Clertas porelones iban a unos fondos sociales especiales, recibiendo cada fondo un porcentaje de la produccién neta. Lo que restaba se distribuia entre los miembros segin la cantidad y cal dad de trabajo afectuada, medida en unidades/dia: ir dodien, un dia de trabajo. Los administradores general mente recibian dos de estas unidades por cada & horas de trabajo, los tractoristas 16 unidades por arar una superficie determinada, etc. Los planes econdmicos eran preparados por la direccién, pero todos los elementos im portantes —entrega obligatoria, pago a las MTS, etcéte ra venian determinados por organismos estatales. Todos Jos planes y las decisiones importantes, de hecho, necesi taban la aprobacién de las autoridades estatales, y el bbanco gubernamental venta pleno control sobre el aspec- to financiero de Ia actividad del olbioz, El modelo econémico y organizativo del Kolkoz esté fen proceso de cambio permanente, Los cambios se hi- cieron muy frecuentes después de 1954. Los kolkhozes recibieron el derecho de poseer maquinaria pesada, y Jas MTS son sélo actualmente estaciones de servicio. Los {incentives econémicos —precios, oferta de productos atractivos, ete. se han visto incrementados, En Ia mue- va constitucién modelo (1969) de los kolkhoves se ha introducido un sistema de salatios que cambia todo el sistema de contabilidad. Los salarios ahora forman parte de los costos de produccién, con To cual queda garanti zado un nivel de ingresos minimo, mientras que antes los salarios de esta indole no existian y todos los ingre- sos dependian enteramente de lo que quedaba después de todas las substracciones obligatorias. En algunos ex. perimentos se fundieron kolkhozes para formar mayores lunidades agricolasindustriales (agrogorod) ; en otros se Jes permitié gozar de independencia econémica. En unos ‘euantos casos se hicieron intentos en el sentido de redu: cir el papel de las parcelas individuales y de tratar de acercar los kolkhozes a las explotaciones estatales (sov- Whores). En otros casos se hizo hincapié en el papel de 37 Ta autogetin y se considers Ia pacela familiar un ele Inento muy. inportante de a explotcion colecva. En tinos cans enpetimento, ee cedievon eampos y equipe mmazinico a grupos (zveno) durante periados ms larpos Yess raps eran remunerados con a pare la Produce, despertando en ellos an interes cn los resul {ios de la'misina, Como esos grupos con frecuencia es tan organtzados. sobre ln base de Ia familia (como en Himgna) ete experientosupone Ia introduceon en el tultio eoletivo de Ta irra del principio dela expat on faa Tctualmente existe una gran variedad de formas or ganizativas de. RolRhozes en la, Uni6n Sovitica. Vartan Segin a rein, la especalizacida de a produceisn y las presiones infernas y extemas, que deren ampliamente En las aiferentee pastes cel pais. Hay hotkhotes seme Janes lay explotactones estas; Rofkhozes con ler tas tendencias a revertir on comunas, y Kolthowes que realmente pueden caifcarse de agrogados de expotaco- tes famiianes ndviduses. En este stm eas, la pro deci intent se concentra en Ie parse flares tos ingresos en dinero no son generalmente roy clove dos, porque los miembros preferen cobrar aus salaos tn espe, Loe mitmbros de est Spo de Kaltes pueden Considerarse como agricllores horas: poseen expota clones individuales,pequefias pero intensvese importa tes como fuente de ingress dinero, también trabajan fuera en una explotastoncolectiva, (Como elcultvo dela tier a horas es ahora amplismente aceptado. por el goblemo, los obreros industiles pueden adQuir pe Stohas parcclas de tierra y product alimentos para Sus inne y para el mereado) a industiaiaacion cesiente de la Unién Sovitin, y ta neveseria reorentacion de In industria hacia las 8 tesldades de consumo y agriclas,ofece nuevas oportic Sidades. de aumentar Ja importancla de Tos incentvos Econdmicos. Al propio tiempo, dichos Incentives se ¥en finltados, por cl sstema, de entregas obligatorias; sia cambios importantes ea el sistema econdmico. general 318 508 incentivos no dardn resultados satisfactorios. La su bida del nivel cultural de los campesinos sovitios, junto con la aparicién de la teenologla, moderna, aumentarén fradualmente la produccién agricola, Pero més important fe que estos aumentos sera la aparicién de los camnpes ros como tna fuarza activa que ponga en préctica los Priniios det autoeitn 9 que ea ots cambios Probablemente aparecerin dos formas de explotacion colectiva: las explotaclones especializadas, con estrwcts- as muy semefantes a las de las explotactones estatales, diigidas bajo Ia supervision directa de especilistas del fobiemo, v la agregaciin de pequetias éxplotaciones fa: Tiliares ulicadas por una exploscion colectva que pro dluzea productos agrcolas sin transforma. No cbstane, Sin una presion gubemnamental y administrativa no exis: tirlan las explotaciones colectivas. Sila politica cambia ra, la reapariign del modo de explotacin familar seria Buy probable no no debe entender plable Che coslovaquia 0 a Alemania Orlental en que ya no es sible la resurreccién del modo de explotacion familian. Sila politica sigue siendo Ta misma, el tipo de kolkhog de explotacin eststal se volver yradulnente dominan: te on Ia agricultura sovitica, En este tipo de explotaciin petsisten algunos de los elementos de Ia organizacion cooperative, en particular la paticipacén de los traba- Sadores en ia toma de decisiones y el reparto de los i gresos netos GAEC (Groupement Agricole d’Exploitation en Commun) En contraste con Ios miembros de las comunas de la URSS y con los miembros ideoldgicamente motivades de los kibbutzim, los agricultores franceses hallaron su mo- tivacién hacia el colectivismo principalmente en las ven- tajas econdmicas que oftecia la explotacién a gran escala, Pero Ta influencia politica no dejé de hacer sentir. sti peso, Los GAEC fueron creados, 0 al menos proyectados, 319 por Ia organizacién de los agricultores catélicos (Jeunesse Agricole Catholique). El aumento de la competitividad en los mercados franceses colocaba a muchas explotaciones familiares en tna situacién muy difieil. Para aumentar los ingresos, 0 para mantener al mismo nivel el nivel de vida de la familia rural, era necesario modernizar la tec: nologia, disminuir los costos de produccién y usar et capital de formas més elicientes y racionales. Estos ob- Jetivos requerian el aumento de la superficie de las uni- dades de exploracién, - Los GAEC no son muy numerosos, pero su niimero aument6 répidamente de unos 60 en 1966 a casi 2.000 fen 1970, Generalmente un GAEC no unifica a muchos agricullores. Casi el 90 % de los mismos constituyen gru- pos de dos, tres © cuatro agricultores (el 469% unifica Solo a dos’ agricultores) y sus miembros generalmente proceden de Ta misma familia (casi el 63 %). No todos fos GAEC integran plenamente dos o més explotaciones: casi el 159 unifican solamente una rama de la produc- cién, y las demés ramas siguen siendo explotadas indi vidualmente. En estas explotaciones colectivas, la parte ‘mis especializada y orlentada hacia el mercado est ge heralmente integrads, mientras que las demés partes se forientan més hacia las necesidades de subsistencia de la familia Los miembros de un GAEC sélo pueden ser agriculto- res y su ntimero no puede exceder de 10. Segdn las pres- cripciones juridicas, todos los miembros deben participar petsonalmente con’su trabajo. Los propietarios pueden fportar los medios de produecién que poseen y su tra- ajo, los arrendatarios y apareceros pueden aportar su capital y trabajo y los jomaleros sin tierra su trabajo. Las aportaciones de los miembros pueden llegar a trans- formarse en propiedad comtin (generalmente aportacio- hnes en eqitipo mecénico) 0 pueden sélo ser prestados al GAEC (verbigracia, tierras y edifcios). EL capital minimo ‘para onganizar tn GAEC es de 10.000 francos (unos 2.000 Ablares USA) ‘Los ingresos se distribuyen de acuerdo con las apor- 320 taciones en trabajo, capital y tierra. Los salarios de los imlembros que trabajan en el GABC se incluyen en los cos: tos de produccién; no pueden ser nl inferiores a los sa- larios minimos legales ni superiores a seis veces el salario sminimo, Todos Ios miembros participan en la toma de deci siones, Como el niimero de miembros esté limitado a diez, la asamblea general funciona de un modo informal y los miembros frecuentemente discuten los problemas Debe celebrarse una asamblea general al afio, segtin las, prescripciones legales, para elegir al administrador. Cada jembro tiene un numero de votos proporcional a st participacién en el GAEC en funcién de su capita, tierra y trabajo. EI GAEC generalmente manticne relaciones con otras cooperativas: servicios de maquinaria (CUMA), coopera tivas de erédito, de comercializacién y de transformacion, cteétera. A ese respecto, el GAEC esté estrechamente vin. ‘eulddo con todas las formas de integracion vertical de la agricultura. Algunas organizaciones agricolas (consul- tas con especialistas) y el gobierno generalmente le pres- tan su apoyo. Como en Francia la propiedad de Ia tierra normal- mente est separada de su uso, s6lo el 44.9 de la tlerra de los GAEC procede de sus miembros; el resto son tierras arrendadas de sus duefios. El tamafo medio de las explotaciones GABC es bastante grande —cerea de 137 habitantes en 1970— y todavia va en aumento. La pro- duccién es superior a la de las explotaciones familiares del mismo tamafo y los ingresos medios de los miembros son casi la mitad mids que los de los no miembros. Por lo general, los GAEC sélo contratan jornaleros en Ia época de la cosecha, pero al menos el 10 % de las explotaciones tienen también trabajadores agricolas permanentes, lo cual es fuertemente criticado por los idedlogos del mo. La obligacién de que todos Jos miembros de un GAEC patticipen igualmente en la produccién sucle ser muy di- Heil de cumplir porque en una explotacién de superficie, 321 a 18.21

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