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El hermano del hijo pródigo

Lucas 15:11-32

En el capítulo 15 de Lucas Jesús contó 3 parábolas sobre la alegría del encuentro. Definitivamente
cuando encontramos algo valioso, nos llenamos de alegría.
Primero vemos a la oveja pérdida que fue encontrada y el pastor llama a todos para alegrarse. En
segundo lugar la moneda perdida que fue encontrada y la mujer llaman a sus vecinos para
alegrarse. Y finalmente en tercer lugar, el hijo perdido que volvió a casa y el padre ofrece una
fiesta y se alegra.
En estas tres parábolas, la única persona que no está alegre es el hermano del hijo pródigo.
Imagínate. Todos están celebrando, bailando y de pronto hay una voz nada que ver. El hijo mayor
está furioso porque el Padre fue misericordioso. El problema es que el hijo mayor estaba afuera,
mientras el menor está en la fiesta. Existe el peligro de estar en medio de la iglesia, pero aún así
perdido. Jesús está contando esta parábola hablando a los fariseos porque se sentían santos y
despreciaban a los demás. Hoy el hermano del hijo pródigo representa a aquellos que están
dentro de la iglesia, obedeciendo, cumpliendo las leyes, deberes, lejos del pecado, fuera del
mundo, pero aún así están perdidos. Más o menos como el joven rico con Jesús. El cumplió con
todo, pero aún así su corazón no estaba al 100% con Dios, estaba perdido.
Me gustaría mencionar algunas características del hermano del hijo pródigo en las que nos
podemos parecer.
1. El nunca salió de casa, pero desconoce el amor del padre y el amor al hermano.v. 30 Él no se
refirió como su hermano, sino como “tu hijo”. Eso habla del desprecio que había en su corazón. La
Palabra dice que quien aún no ama a su hermano, aún está en tinieblas.
El ve a su hermano como un rival, como una competencia. Los dos principales mandamientos son
amar a Dios sobre todas las cosas y a nuestro próximo como a nosotros mismos. Hay personas que
están en medio de la iglesia, pero no tienen amor por Dios ni por los perdidos. En el hijo mayor no
hay amor ni compasión. Gálatas 5:19-21 la falta de amor es un pecado tan grave como un pecado
inmoral.
2. El nunca salió de la casa pero vive como un esclavo v. 29 En el original aquí se refiere a servir
como esclavo. El nunca entendió qué es ser hijo. Su religión es rígida. El obedece sólo por miedo y
para recibir elogios. Hace las cosas correctas con la motivación equivocada. Simplemente las cosas
que hace no vienen del corazón.
Para el ser creyente es un peso, una obligación, vive gimiendo como un esclavo. No tiene placer en
las cosas de Dios. El hijo mayor estaba tan lejos, como el hijo pródigo por causa de su corazón. Es
la clásica persona que está llena de actividades pero su corazón está lejos. En este sentido
necesitamos tener mucho cuidado, porque somos personas llenas de actividades que no son malas
en medio de la iglesia. Pero recordemos que Dios también ve nuestro corazón. Mateo 15:8
3. El nunca salió de la casa, pero se relaciona con el padre en base a su justicia propia. v. 29 El hijo
mayor es aquel niño que siempre fue buenito. Todos decían que eran tan educados, no hacía nada
malo y siempre quería agradar a sus padres. Él siempre se esforzaba para hacer las cosas correctas
y no entendía como su hermano menor estaba haciendo siempre cosas contrarias. Siempre fue un
buen muchacho en el colegio y no se rebeló. Los hermanos mayores en los días de Jesús eran los
fariseos. Eran los que se creían mejores y merecían un trato especial del Padre. Ellos creían que
merecían, entonces Dios les debía. Esto es terrible.
Muchos nunca salieron pero no se dieron cuenta que su corazón está desviado.
Una señal de alguien que vive en la ley es ser orgulloso de sí mismo. Muchos escuchamos de niños
que si no nos comportamos bien el papa del cielo ya no te va a querer. Después traemos eso a
nuestra relación con Dios y los problemas comienzan. Cuando hacen muchas cosas creen que Dios
está feliz, pero cuando se relajan creen que Dios está molesto o triste. Justicia propia es apoyarse
sólo en nuestro mérito y no en la bondad de Dios.
Él dijo “yo jamás fui contra una orden tuya.” Pero sabemos que eso es mentira. No hay ninguna
persona sin pecado según la palabra. Estaba lleno de justicia propia.
4. El nunca salió de casa, por eso se creía mejor que su hermano v. 29 Aquel que tiene la
mentalidad del hijo mayor, vive con la idea de cuánto está trabajando y cuán poco lo reconocen.
Acusa al Padre de ser injusto. En su religión no existe la palabra restauración y menos misericordia.
Esa es la ley del legalismo. Ellos creen que la clave para agradar a Dios es su trabajo. Los dos tenían
la mentalidad del mérito. El primero porque creía que no merecía ser llamado hijo y el otro se
creía merecedor y mejor.
5. El nunca salió de casa, pero no tiene comunión con el Padre v.31 Esta en medio de la iglesia
pero vive como solitario. Muchos están dentro de la iglesia pero no sienten el amor del Padre, el
placer de ser salvo, la dulzura del Espíritu. Están en la casa, nunca se fueron pero no tienen
comunión con Dios como cualquier persona de afuera. Es lamentable. Se olvidaron que Jesús dijo
que Él era el pan de vida. ¿El pan es para qué? Para comer mí querido hermano.
6. Nunca salió de casa, pero no se siente participante de la herencia del Padre v.31 Era rico, pero
estaba viviendo en miseria. Muchos viven un cristianismo pobre.
Juan 10:10 Juan 7:38 Efesios 3:8
Lo peor de todo el nunca disfruto de la herencia que había en la Casa.
Romanos 4:13 No te quedes afuera, ven disfruta de la fiesta que Dios preparó.

Mas: Al final el hermano menor fue acepto y el mayor se quedó fuera.

Los dos hijos estaban perdidos uno fuera y el otro adentro.

 Sus oraciones están llenas de peticiones pero poca comunión

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