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A Propósito De Los Bicentenarios Americanos: Resistencia Afro Gestora

De Independencias Y Repúblicas En América1.

http://hispanismo.cervantes.es/revista.asp?DOCN=3982

Por: Yeison Arcadio Meneses Copete


Licenciado en Lenguas Modernas
Especialista en Enseñanza del Inglés
Magister en Educación
Colectivo Ampliado de Estudios Afrodescendientes, CADEAFRO

Resumen

Ante las múltiples estrategias empleadas por los esclavócratas para garantizar
la dominación sobre los y las africanos para la explotación, emergieron
diversas formas y estrategias frontales y decididas contra la violenta
colonización para el sometimiento de la mente y el cuerpo y el establecimiento
o institucionalización de la esclavización en América. El presente articulo
pretende dar una mirada a las gestas libertarias libradas por africanos y
afroamericanos en las Américas, su participación e impacto en las diversas
batallas que permitieron las independencias y el surgimiento de nuevas
repúblicas en el continente americano, y aborda críticamente las
conmemoraciones y/o celebraciones de los bicentenarios en las Américas,
sustentando una dicotomía entre la historiografía oficial, en general la
oficialidad y las comunidades afroamericanas, dada la prevalencia de la seudo-
historeografía; lo cual imposibilito el levantamiento de nuevos pactos sociales a
favor de la eliminación del a racialización, la desigualdad de derechos, justicia
social histórica y el camino de las <<afroreparaciones>>.

1
Artículo publicado en la Revista Hispanitas de la Universidad Omar Bongó, Gabón.
A Propósito De Los Bicentenarios Americanos: Resistencia Afro Gestora
De Independencias Y Repúblicas En América.

Toda América-latina se prepara en el 2010 y 2011 para conmemorar el


bicentenario de las guerras y las batallas que dieron origen a las
independencias y con ello la formación de las nuevas repúblicas en el
hemisferio. Sin embargo, el vacío histórico en relación al aporte gestor,
creativo, constructivo y determinante de las comunidades africanas y
afroamericanas en la consolidación de las naciones americanas sigue siendo
invisibilizado o reducido. En este sentido, entonces, se hace necesaria una
reparación etnohistoria que permita la consolidación de la nación colombiana.
Una reparación afrohistórica, que de cuenta de la realidad del impacto de las
gestas palenqueras, kilombas y del papel de mujeres y hombres afros en las
gestas libertarias y que funda el surgimiento de las naciones americanas; en
especial las nuevas repúblicas. Lo que va a permitir que nuestros niños y niñas
americanos crezcan y sean formados con unos referentes reales, objetivos y
positivos de si mismos. Es hacer de la diversidad cultural nuestra mayor
fortaleza para consolidar un tejido social o un nuevo pacto entre las diferencias
para el surgimiento de una nueva América latina. Un nuevo pacto social que
repare los daños causados desde la colonización, el racismo, la discriminación
racial y los doscientos años de vida republicana en las que los y las
afroamericanos han permanecido marginados, excluidos y sometidos a formas
sistémicamente muy similares de explotación, desterritorialización, destierro y
esclavización.

La resistencia de mujeres y hombres de ascendencia africana contra el


régimen colonial y esclavista fue decidida y frontal desde el secuestro en
Alkebulan hasta la llegada y sometimiento en América. El hombre africano
debatía entre resistir para obtener la libertad en la muerte u oponerse para
lograr la emancipación en la vida. En este sentido, como lo sustenta Laviña y
Ruiz-Peinado (2006, pag. 11) <<la rebeldía, tomó las más diversas formas en
función del tiempo y los espacios de América, acabará desembocando en
rebeliones y sublevaciones que, poco a poco, socavaran el sistema esclavista y
el propio orden colonial, conduciendo a la abolición de la esclavitud>>. Por
consiguiente, hombre y mujeres africanas declararon la guerra a la lógica
dominante utilizando el apalencamiento como estrategia descolonizadora,
antiesclavista, militar, y espiritual para lograr ser ellos en su mismidad. La
nación Haitiana, modelo de la emancipación, pone a temblar a los
esclavócratas y va a ser un gestor de libertades en América. En el ejercicio de
su autonomía y en el marco de la relación forzada con aborígenes y criollos, va
a fortalecer el espíritu libertario, la lógica antiesclavista y anticolonialista de las
demás comunidades. De esta manera también se forman alianzas entre estas
comunidades donde el afro va a tener un papel decisivo-protagónico en las
guerras independentistas que lo van a convertir en <<un gestor de libertades,
independencias y repúblicas>> aunque la historeografía “oficial”, hoy, a
propósito de los bicentenarios latinoamericanos, que una vez más llamaron al
olvido y a la amnesia histórica, reduciendo, invisibilizando, trivializando el rol de
la comunidad afro como constitutiva y gestora determinante de las repúblicas, y
de fortalecer la ideiología libertaria y revolucionaria. Nuevamente, se desecha
una oportunidad para generar un nuevo pacto social y político democrático
sustantivo, equitativo, afro-reparatorio, entre las diferentes expresiones étnicas,
culturales, económicas, sociales y políticas de la raza humana que constituye
las Américas.

La resistencia de la persona Africana y su ascendencia contra la esclavización


Europea desde el inicio de la MAAFA hasta su llegada forzada al continente
Americano fue decidida. El hombre africano debatía entre resistir para obtener
la libertad en la muerte u oponerse para lograr la emancipación en la vida. En
este sentido, se hicieron presentes características fundamentales de la persona
africana: la sabiduría, la libertad, la humanidad y la espiritualidad, que van a ser
el motor antiesclavista y anticolonialista. Por consiguiente, la persona africana
en ejercicio de su ancestría libertaria declara la guerra a la lógica dominante
utilizando el cimarronaje como estrategia lógica, inteligente, rebelde,
descolonizadora, antiesclavista, militar, y espiritual para lograr ser ellos en su
mismidad. Sin embargo, la persona afro en el ejercicio de su autonomía y en el
marco de la relación forzada con aborígenes y criollos, va a fortalecer el espiritu
libertario, la lógica antiesclavista y anticolonialista de las demás comunidades.
De esta manera se forman las vitales alianzas entre estas comunidades donde
el afro va a tener un papel protagónico en las revueltas pasando del
apalencamiento al suministro de armas, a ser líder, estratega militar en otras
palabras un gestor de libertades, independencias y repúblicas aunque la
historia “oficial” lo desconozca como agente activo en la consolidación de las
nuevas repúblicas.

El presente artículo tiene como propósito visibilizar el papel vital, decisivo y


creativo de la comunidad afro en las guerras y gestas humanizantes,
independentistas, antiesclavistas y anticolonialistas en América; comenzando
por el desafío frontal Haitiano a la lógica esclavócrata hasta llegar a los
palenques y demás formas de rebelión de la comunidad afro en nuestro país
Colombia. Entonces, es sine qua non considerar el papel protagónico de la
única nación que generó en pleno un desafío frentero a la lógica esclavista
europea. Es traer a nuestra memoria la nación Haitiana, a la cual las nuevas
repúblicas latinoamericanas deberían estar haciendo un sentido homenaje en
la conmemoración del bicentenario. Es esta nación la que puso a temblar a
toda América y al sistema esclavista. Hoy esta nación afro, que desafió de
manera contundente la lógica capitalista, imperialista, esclavista y terrorista
europea, solo es victima del señalamiento de ser unas de las naciones más
empobrecidas del mundo. Haití esta pagando el costo de ser libre. Pero ni el
imperio yankee ni las nuevas repúblicas americanas (Colombia) se solidarizan
ni agradecen el rol decisivo de Haití en sus independencia. Finalmente,
entrever una verdad histórica que se le adeuda a la comunidad afro en
términos del rol protagónico jugado en las independencias de las nuevas
repúblicas. Es mostrar la importancia del apalencamiento, el cimarronismo o
kilombaje, en la organización de las revueltas triunfales por tanto las gestas de
las nuevas repúblicas en América. Los y las afros un gestor de independencias
en tanto libertades en Latino-América.
“Las primeras rebeliones de los negros sometidos al trabajo esclavo tuvieron
lugar en tierras africanas. Fue en las posesiones portuguesas de Angola donde
los esclavos africanos comenzaron a fugarse de las plantaciones controladas
por los blancos para integrarse en los reinos vecinos enfrentados con los
portugueses” (Laviña y Ruiz-Peinado, 2006, pág. 141). Esta larga tradición de
rebeldía se intensificó entre finales del siglo XVIII y mediados del siglo XIX y
llegó a suponer una seria amenaza para el sistema económico y social basado
en la esclavitud. Sus causas caben rastrearlas en el contexto del levantamiento
general de los esclavos en Haití durante la década de 1790. El triunfo
desmanteló de la rebelión desmanteló las bases productivas y económicas de
la isla provocando un auge repentino azucarero a escala internacional” (Laviña
y Ruiz-Peinado, 2006, pág. 143).

La historia de las comunidades y pueblos africanos y afroamericanos ha sido


ligada comúnmente al tema de la esclavización. Entonces, se relaciona, en la
mayoría de los casos la persona afro con la esclavitud. En el imaginario de
América y el universo, es que la historia africana inicia con la esclavización. La
historia de la persona Africana, Afroamericana y Afrocolombiana no inicia con
la esclavización y mucho menos en América. Si bien la esclavización quedó en
el imaginario del universo, dado que este abominable proceso tuvo una
reciente y larga duración, y fue un momento de la historia de la africanidad, es
también fundamental pensar la africanidad y la afroamericanidad desde la
resistencia frontal, anti-sistémica a la esclavización, explotación humana, el
imperialismo, el capitalismo, entre otros. “Aunque tales acontecimientos en
alguna medida son conocidos, no lo son en la misma forma aquellos que
documentan la resistencia africana a la trata en África misma… Entre 1568 y
1587 un movimiento que se oponía a la trata, fue conocido como la larga
marcha de los Jaga. Eran escuadras de guerreros fuertemente organizados
política, religiosa y militarmente. Operaban en amplias regiones a partir de
campamentos fortificados llamados Kilombos. Hombres y mujeres eran
combatientes, unos al lado de los otros. En sus marchas invadieron el Congo,
devastaron el país con el fin de desorganizar las estructuras portuguesas de la
trata esclavista. El objetivo dice Lara, era conquistar y destruir los reinos
aliados a los europeos en el negocio de la trata” (Friedemann, 1993, pag, 27).
Además de lo anterior, la historiografía aún no profundiza en como estos
procesos revolucionarios, socio-políticos y económicos permitieron forjar las
naciones a nivel político, social, cultural y económico. “la persistencia de la
rebeldía esclava del cimarronaje, que venía debilitando al poder desde hacia
tiempo, tuvo un papel importante en la desestabilización del sistema que
favoreció la eclosión de estos movimientos insurgentes. El estado de
inseguridad y el desorden provocado por rebeldes y quilombos acabó creando
el caldo de cultivo necesario para que los otros sectores descontentos pudieran
llevar adelante sus proyectos revolucionarios” (Laviña y Ruiz-Peinado, 2006,
pág. 148)
LLEGADA DEL AFRICANO A LAS AMÉRICAS

La esclavización no fue el único medio que permitió a la persona africana llegar


a las Américas existen algunas teorías que soportan el encuentro entre las
culturas africanas y las americanas antes del mal llamado descubrimiento de
América. El hombre Afro llegó a América por diferentes razones hay unas tesis
muy fuertes que sustentan que el hombre Africano ya había vivido muchos
años en América antes de la llegada de Colón. Existen vestigios en México,
donde hasta hoy se encuentra una gran roca de 3 metros de alto por cuatro
metros de ancho, con un rostro humano con las siguientes características:
trenzas, nariz chata, candongas en las orejas y narigueras, iguales a los
soldados nubios.

“La historiadora veracruzana Sagrario Cruz Carretero, quien montó


en Estados Unidos la exposición The African Presence in Mexico.
From Yanga to the Present, refiere que algunos autores argumentan
que la presencia africana se remonta a la época prehispánica,
basándose en el récord arqueológico de los rasgos negroides,
además de evidencias como los testimonios de viajeros, los mapas
marítimos y los vestigios botánicos”.

Algunos autores advierten la presencia africana en la era precolonial en


Ecuador y Perú. De igual manera, antes de la llegada de los Españoles al
territorio Colombiano, en el hoy Departamento del Chocó, ya existía comunidad
Afro. Cuando Balboa y sus amigos se aprestaban a “descubrir” el océano
Pacífico, se toparon con un rey africano llamado Quarecuá, quien con sus
compañeros se batía entre alianzas y guerras con los indígenas del Darién; lo
cual da muestra de la presencia de seres africanos desde antes de la colonia.
(De Angleria, 1980 citado por Pereachalá)

Entonces, desde la Colombia precolonial estamos ejerciendo nuestra


responsabilidad como personas pertenecientes a estos territorios; en términos
del desarrollo de las culturas que interactuaban en este territorio. Es decir,
“somos sujetos constitutivos” de América desde antes de la llegada e irrupción
abrupta del Genovés. Sin lugar a dudas, tenemos un sin numero de
responsabilidades y entre ellas esta la construcción de La historia colombiana;
en aras de construir esa nueva ciudadanía, consolidar la identidad nacional,
generar la convivencia pacífica y consolidar la nación colombiana.

El siguiente supuesto que damos a conocer aquí presenta a la persona


africana como acompañante en los viajes de “descubrimiento” y conquista de
América emprendidos por Colón y demás. Como sostiene Moscoso citado por
Aldarriaga (2002. p 208):

“como se conocio en la Española, desde los primeros tiempos de la


conquista en Puerto Rico se conoció la presencia de negros libres,
algunos laborando independientemente y muchos empleados de los
encomenderos”.
Es importante decir que no todos fueron traídos en condición de esclavizados.
Un numero indeterminado de personas africanas que llegaron a América en el
proceso de la trata pertenecían a clases “distinguidas y ostentaban
consideraciones nobiliarias” (Aldarriaga, 2002, pág. 208). De igual manera,
acompañaron a los españoles en la conquista, es el caso “del piloto de la
carabela de Colón, Pedro Alonso Niño; del grumete Diego, contratado por ocho
mil maravedíes anuales para el cuarto viaje del almirante, el de Pedro y Antón
Mexias” (Saldarriaga, 2002, pág. 208).

“Entre los primeros que partieron de España y que acompañaron al almirante


en sus cuatro viajes y en los siguientes, anteriores al establecimiento formal de
la trata o comercio de esclavizados, llegaron dos clases de Afros, unos que
tenían sus amos a bordo y eran esclavizados para el servicio doméstico y
oficios que fueran sometidos según la usanza… y otros que eran libertos, es
decir, que habiendo sido esclavizados habían alcanzado su condición de libres,
por medios legales de buen recibo en la península”. Desempeñaban como
grumetes oficios independientes, ayudantes, acompañantes y por lo menos dos
conquistadores en tierras Americanas.

Finalmente, llegaron a las Américas entre 25 o 14 y medio millones de


africanos trasladados forzadamente durante la MAAFA. Esa gran tragedia
humana, el genocidio más grande de la historia de la humanidad. La trata
esclavista Europea.

ESCLAVIZACIÓN VS ESCLAVITUD

La historia comúnmente relata que los Afrocolombianos o Afroamericanos


somos descendientes de negros esclavos traídos de África. Esta es la gran
mentira que se ha vendido por décadas; desde una óptica racista,
discriminativa y reduccionista del ser Afro.
En primer lugar, en África no existía ni existe el negro en América menos y
mucho menos esclavos. Los africanos fueron esclavizados. Fueron sometidos
al trabajo forzado con cadenas, grilletes, azotes, látigos, mutilaciones,… y un
sinnúmero de actos que deberían avergonzar a los Europeos y cualquier
persona que guarde en su mente pensamientos racistas. Entonces una
persona que tiene que ser sometido a este tipo de actos ignominiosos no
puede llamársele esclavo, la palabra más adecuada es esclavizado, porque fue
un sometimiento, no una decisión propia.

Las personas que fueron trasladadas de manera forzada a América eran


expertos en la agricultura, la ganadería, la minería, y muchos de ellos
ocupaban cargos distinguidos al interior de sus comunidades (reyes, reinas,
sacerdotes, guerreros). Los europeos conocían la sabiduría del ser Africano. Es
importante considerar la relación que existía entre África y Europa (desde
siglos antes de la era común hasta el siglo XV después de la era común).

A América fueron traídos varios grupos étnicos que por supuesto venían con
todo un conocimiento milenario que fue reducido de manera violenta en las
Américas. Fueron comunidades que fueron designadas de acuerdo a su origen,
lenguas y destrezas. Es importante resaltar que hasta hoy muchos de estas
castas de naciones permanecen hoy como apellidos (lucumí, chalá, etc.) los
encontramos en Colombia.

RESISTENCIA KILOMBA Y GESTAS REPÚBLICANAS.

La resistencia haitiana un desafío frontal a la lógica esclavista y va a poner a


temblar a toda América. “Cuando a media noche celebraban el vudú, su culto
africano, bailaban y cantaban su canción favorita:
<<Eh! Eh! Bomba! Heu! Heu!>>
<<Canga, bafio té!>>
<<Canga, mouné de lé!>>
<<Canga, do ki la!>>
<<Canga, li!>>
<<“Juramos destruir a los blancos y todas sus posesiones; mejor morir que
faltar a este juramento”>>

La revolución Haitiana fue la de mayor trascendencia. Esta si fue una


verdadera revolución porque acabó con la lógica dominante esclavócrata y va
jugar un rol esencial en la generación de muchas independencias y formación
de nuevas republicas en las Américas. “La revolución de Haití se da entre el
siglo 1790 y 1804, liderada por Toussaint Louverture, Gearge Christophone,
Jean Jack Dessaline y Alexander Petion, venciendo a varios ejercitos de
Napoleón, el más grande estratega militar de entonces, el más fuerte ejercito
formado por ende, que sumaba más de 43.000 hombres y de los que solo
regresaron a París 8.000. Luego vencen a los ejercitos de Inglaterra integrados
por 15.000 hombres que vienen en auxilio de los colonos franceses, de los
cuales regresaron a Londres 1.000, y finalmente vancen a los ejercitos
españoles e ingleses integrados por 25.000 veteranos de las guerras europeas,
con los cuales invaden a Haití en represalia de España por su contribución a la
liberación de los “esclavizados” de Santo Domingo y porque la revolución
haitiana, además de convertirse en fuente de inspiración de los patriotas del
resto de América, contribuyo ideologica y materialmente a la causa libertaria de
éstos, incluida la de los norteamericanos”. En palabras de Carlos Rama citado
por Palacio y Mosquera (p.168, 2003): “era el premier Estado Americano que
terminaba con la institución de esclavista y también el primero en proclamar su
independencia entre los latinoamericanos, y hasta el primero en alterar
definitivamente la estructura de la propiedad agraria. La Republica de Haití será
así mismo el primero de los Estados fundados en la época contemporánea por
exesclavizados y en particular por africanos y afroamericanos”.

Es un evento sin precedente en la historia de las revoluciones a nivel mundial.


Sin embargo, la lucha haitiana no se detiene. Existían otras naciones
dominadas por los esclavócratas que tenias que ser liberadas. Aun
permanecían hermanos africanos encadenados, por lo que había que seguir
en la tarea revolucionaria y libertaria. Fue entonces como se dieron varias
alianzas; entre ellas y bajo la promesa de erradicar la esclavización en el
Virreinato de la Nueva Granada. “Francisco de Miranda tiene en 1804 el apoyo
del emperador Dessaline y Simon Bolívar, por dos veces el de Alexander
Petión…en febrero de 1816 acordó Petión apoyo en navíos, tropas, armas y
otros recursos al tres veces derrotado Bolívar”. (Rama citado por Palacio y
Mosquera, 2007. p.168)

La gran pregunta es: ¿las promesas se cumplieron? ¿Los “heroes” que hoy
honramos si hicieron lo méritos? ¿Bolívar le cumplió a Petión?. Las alianzas se
dieron porque la persona afro pensó que a través de estas podía ganar la
libertad. Sin embargo, luego tuvo que enfrentarse a los herederos de Europa,
“los criollos”, que seguirían empeñados en mantener el régimen maquiavélico
de la esclavización, explotación y deshumanización. “Los afros fuimos los
primeros en revelarse en contra el régimen esclavista y participamos en
primera línea en las acciones decisivas de las guerras de independencia
nacional. Sin embargo, al final del proceso de independencia, cuando se
echaban las bases de la republica y entre unas cuantas familias que
constituían la clase dominante criolla que acababa de nacer, se repartían el
botín de la victoria; bajo la conspiración de esta misma clase fueron fusilados y
asesinados los patriotas líderes afrocolombianos encabezados por José
Prudencio Padilla, José María Córdoba, José Bolívar, Manuel Carlos Piar y
“Antonio José de Sucre”, por reclamar justicia social en relación con los afros,
los aborígenes y el pueblo en general, dejando de esta manera al pueblo
afrocolombiano huérfano de dirigentes, lo que los obligó a refugiarse en las
costas y zonas selváticas por mucho tiempo, despojados del producto de más
de cuatro siglos de trabajo, en lo cual radica fundamentalmente su desfase en
el desarrollo, en relación con los otros pueblos.
La Afrorevolución en la Argentina y México

“si los líderes españoles y rebeldes dudaban inicialmente de si sus esclavos


deberían servir en sus ejércitos, no tuvieron las mismas dudas frente a los
negros y mulatos libres. España había reclutado a estos grupos para la milicia
colonial. Y particularmente en Colombia, y Venezuela, y quizás también en
Argentina y México, la independencia probablemente iba a ganar o perderse en
función del bando al que las tropas de negros libres decidieran unirse”. (Reid,
2007, p. 147)

Es evidente el vital rol del afro en las guerras independentista, así este haya
menguado la población a finales del siglo XIX. Es claro que fueron expuestos
como fuente de cañón en las guerras independentistas; pero también es
importante resaltar que resistieron y libertaron nuestras repúblicas. De esta
manera se originan los pronunciamientos a favor de la “liberación de los
esclavizados” por parte de los criollos y europeos. En 1810 “el líder rebelde
Miguel Hidalgo proclama la abolición de las distinciones de castas: “a los
Mexicanos no se les nombrará en calidad de Indios, mulatos ni otras castas
sino tods generalmente Americanos” (Reid, 2007, p. 147) Luego José Maria
Morelos (un afro) asume el liderazgo revolucionario y confirma el compromiso
de la revolución con la igualdad racial, que devino una de las piedras de toque
del programa social de los rebeldes, la reforma agraria y la abolición de la
esclavización”. Reid (2007, p.148)

Morelos reclutó un grupo del campesinado afro del entonces para formarlos
militarmente al oeste de Acapulco. Entre 1812 y 1814 sus tropas se van a
enfrentar con los españoles hasta detenerlos. Sin embargo, un año más tarde
los españoles se fortalecen, arrinconan a los rebeldes en sus fortalezas,
capturan a Morelos y los condenan a la muerte.

La lucha de los cimarrones continúa. Ya estaban diezmados pero el espíritu


libertario estaba allí presente. Entonces, los soldados de Morelos siguieron
bajo una guerra de guerrillas, a cargo de Vicente Guerrero, lo que va a
desencadenar en 1821 en la abolición de las castas. Esto a cambio de
apostarle a la independencia de España.

Los afros a través de varias unidades de milicias urbanas van a jugar un papel
determinante en la defensa de Buenos Aires ante la invasión Británica en 1806
y 1807; lo que llevo a la junta revolucionaria de Buenos Aires a los soldados y
oficiales aborígenes iguales a los Blancos, y repudió el régimen de castas
(Reid, 2007. p.148).

En la época colonial y durante el siglo XIX las unidades rebeldes afros


estaban integradas en las dinámicas militares de la Argentina, en tanto no
había entre 1810 y 1860 un batallón que no contara con la presencia de afros.
(Biagini y Roig, 2004. p 103)

Bajo el argumento de la vagancia, el juego ilegal, alcoholismo, holgazanería y


de portar armas de fuego se les forzaba a prestar el servicio militar por un
periodo de cuatro años; es decir el doble de lo establecido. Y en el
reclutamiento de hombres para la guerra en número de hombres afros excedía
al de los eurodescendientes según sostiene Vicente Fidel de Lopez citado por
Biagini y Roig (2004, p. 104): “Cuando San Martín regresó de España para
servir a su patria, en 1812, su primera misión fue organizar el Regimiento de
Granaderos a Caballo. A fines de ese año, se hizo cargo del Ejército del Norte:
sus tropas se componían de 1.200 hombres, de los cuales 800 eran negros
libertos, es decir, esclavos "rescatados" por el Estado para el servicio de las
armas” (Gomes Miriam Presencia Africana en la Argentina).

Eran los afros que estaban poniéndole el pecho a la “brisa de plomo”, por tanto
esto disminuyo la demografía afro en Buenos Aires. En el cuarto batallón de las
Rosas había oficiales afros y algunos lograron llegar a los altos mandos.
Excepto el cargo de general que era prohibido para las comunidades afros.
Para dimensionar un poco más el papel desempeñado por el afro en la
independencia de Argentina ilustramos con una afirmación de Biagini y Roig
(2004, p. 104): “combatiendo, no solo sirvieron como soldados sino también en
calidad de comandantes, con un registro de logros injustamente relegados a un
lugar inferior en la historia…”

Kilombia

El palenque más famoso de la Nueva Granada, surgió en 1600, en las


cercanías de Cartagena, era comandado por Domingo Bioho, quien se hizo
llamar Benkos Bioho (Gran Señor) o Rey Benkos. Sus cimarrones derrotaron
las expediciones enviadas en su contra y mantuvieron durante muchos años
una intensa actividad devastadora sobre las zonas aledañas; eran el terror para
los hacendados y cuadrillas militares, y obligaron al gobierno colonial a llegar a
un acuerdo con ellos. San Basilio y sus palenqueros conquistaron un arreglo
con las autoridades por medio del cual podían dedicarse a vivir tranquilamente,
les reconocieron su independencia y la libertad. Estos héroes cimarrones
convirtieron a San Basilio en el primer pueblo de africanos esclavizados, que
conquistaban con su sangre el reconocimiento legal de su libertad (Mosquera,
2007. p. 159). “El palenque cumplía funciones sociales y político-militares y en
esa medida a su interior se daba la división social y técnica de las actividades,
por grupos que se denominaron cuadrillas, imitando a las instituciones
realistas, y “cuagros” o cuadros que fueron agrupaciones secretas para la
preparación y acción militar, cultivar un arte, música, danza práctica o creencia
religiosa. Se puede afirmar que los palenques fueron especies de repúblicas
independientes” (Palacio y Mosquera, 2003).

Alkebulan es la cuna de todas las normas éticas y cívicas que hoy rigen al
mundo. El africano tenía una enseñanza de rigor desde África ya internalizada
en su memoria. Uno de los principios fundamentales de la humanidad es LA
LIBERTAD. Por tanto, el africano nunca estuvo de acuerdo con la
esclavización. Esto generó que los africanos buscaran la unidad para liberarse
de la barbarie Europea. Es así como múltiples grupos humanos unifican
lenguas, cosmovisiones y dejan a tras sus luchas interétnicas de Alkebulan
para ser un solo pueblo, en contra de un enemigo común la esclavización y la
esclavitud. Así se forman los palenques: territorios Afros en donde el Africano
recrea su sabor milenario, su espiritualidad y sus normas políticas y civiles
Africanas. “los palenques fueron la forma más compleja de organización social
que asumieron los cimarrones y su nombre se debe a las fortificaciones con
madera fuerte con que era protegido el asentamiento” (Palacio y Mosquera,
2003).

Entre “1529 y 1806 se dieron alrededor de 44 palenques en el territorio


colombiano” (Córdoba Darcio citado por Palacio y Mosquera, p. 178-9, 2003).
Éstos se van a convertir en las primeras manifestaciones organizadas que
desafiaron el sistema esclavócrata; porque no solo va a generar “deseos de
libertad” a la población afro, sino que va a envalentonar a los pueblos
aborígenes y hasta los mismos criollos que también se ya iniciaban a pelearse
con los colonialistas. En el mismo momento que se daba la monopolización
política y de la administración pública y fundamentalmente económica por parte
de los europeos y sus representantes, tomaba fuerza una clase pudiente de
criollos “a través de la producción artesanal, la pequeña y la mediana
producción agropecuaria, el comercio minorista y el contrabando. De esta
manera lograron enviar sus hijos al extranjero a estudiar diferentes disciplinas”.

Los criollos solicitan a los esclavócratas mayor participación en todos los


ámbitos que regían en ese entonces y entonces “a finales del siglo XVIII se van
a generar las grandes revueltas criollas. Lo que años más adelantes va a
desencadenar en la formación de ejércitos de libertadores al mando de la clase
dominante criolla. Los famosos “precursores” por su falta de planificación
fallaron en varios intentos de sublevación. (Caso del caraqueño Francisco
Miranda, Simon Bolivar, José de San Martin y Bernardo O’higgins, qu en 1806
prepararon en New York, Haití y Trinidad la sublevación de Venezuela).
Entre las sublevaciones mas trascendentales datadas vamos a considerar la
del San Basilio de Palenque en cabeza del Héroe Benkos Biojo, por ser el
primer pueblo libre de América y Haití por ser la primera nación libertada y
fundada por africanos esclavizados y su impacto que generó en la
independización y fundación de varias republicas americanas.

San Basilio de Palenque fue fundada en el año de 1603. “ el movimiento


cimarrón en la gobernación de Cartagena aparece identificado en documentos
como palenque y el nombre de Bioho surge como líder de la Matuna, el grupo
contra el cual se abalanzan el gobernador De Suazo y sus huestes militares.

En la Matuna, Bioho y sus gentes se defendieron detrás de un fuerte de


madera y auxiliados por la ciénaga que tenía más de 40 leguas. Arremetieron
con arcabuces, espadas, arcos y lanzas. Contraatacaron robándose el ganado
e incendiando las estancias vecinas, raptaron esclavos que trabajaban en ellas
y sembraron tal ambiente de miedo que en 1633 los vecinos de Cartagena
resolvieron enviarle una comunicación al rey de España quejándose de la
situación (Arrázola, 1970: 64)” tomado del texto Domingo Bioho: Su Trayecto
Entre Hombre y Héroe. <Bioho aparece en las galeras de Cartagena de Indias
en 1599, cuando, según el historiador Arrázola, se fuga (1970: 35), iniciando
así una nueva etapa de su travesía que lo llevaría de hombre hasta héroe.
Bioho, como cualquier bijago de Guinea-Bissau, debía compartir la creencia de
que, muerto, su espíritu regresaría a su isla nativa. Arrancado de su tierra y de
sus gentes y en situación de esclavo en galeras, tenía una sola alternativa:
fugarse y vivir libremente o lograr que su espíritu retornara con los suyos al
archipiélago africano. La misma alternativa se plantearon muchos bijagos que
se suicidaron en las naves esclavistas. Los que llegaron al nuevo destino
fueron vendidos por los mercaderes con gran dificultad, pues se sabía de su
agresividad y su tendencia a escapar. Aquellos que trabajaron como esclavos
lo hicieron bajo incesante azote. Así, la reputación de los bijagos, que entre los
mismos africanos era conocida como de caníbales fieros y entre los
comerciantes era temible, no los hizo muy apetecibles para los mercados del
Caribe, dondenunca fueron promesa alguna >(Rodney, 1970: 110”).
Finalmente, los afros generamos las guerras libertarias y las revoluciones que
dieron origen a las nuevas repúblicas; pero aún no hemos sido invitados a
participar y gozar de nuestra creación; porque obtenemos la “libertad”, pero
somos dejados a nuestra suerte sin tierras y sin siquiera el reconocimiento de
nuestro papel heróico en las guerras independentistas. Hoy la comunidad afro
sigue luchando por la libertad definitiva. Aun se tienen las cadenas, grilletes, la
carimba sobre la piel, en una modalidad contemporánea. Necesidades básicas
insatisfechas que no permiten caminar libremente, niños sin grilletes pero que
no tienen zapatos para ponerse, niños creciendo en los semáforos producto
del desplazamiento, viviendas no dignas, mala salud, el problema
administrativo “creado”, la situación de la comunicación y el trasporte, y un
centro de la situación, la educación. Ubicamos la educación como centro de
todo, porque es la educación o mejor etnoeducación que permite eliminar las
barreras mentales y lograr nuestra libertad. Es la etnoeducación que erradicará
la carimba mental que llevamos producto de 500 años y más de exclusión, de
racismo, de estigmatización y de discriminación étnica.

CONCLUSIONES

El Estado colombiano le debe una reparación etnohistórica afrocolombiana a


todos los colombianos y en especial a la población afro, en aras de que la
carimba menta-colonial desaparezca. Es decir, las prácticas y conductas
heredadas de la era colonial como lo son el Racismo estructural, la
discriminación étnica, la xenofobia, la falta de identidad, el bajo autoestima, la
falta de tolerancia y la exclusión den paso a la interculturalidad y a la
consolidación de la nación colombiana. En este sentido, tenemos dos
compromisos y retos con nuestra heredad colombiana; (1) transformar la
realidad de la cultura política, económica, social y cultural de nuestro país. Y
(2) disfrutar, equilibradamente, de la transformación positiva de la sociedad
colombiana. Es necesario apalencarnos y revolucionar; para hacer de
Colombia nuestro paraíso. Esa nación donde el manifiesto de las identidades
se convierte en una fortaleza.

Los afros generamos las guerras libertarias y las revoluciones que dieron
origen a las nuevas repúblicas; pero aún no hemos sido invitados a participar y
gozar de nuestra creación; porque obtenemos la “libertad”, pero somos
dejados a nuestra suerte sin tierras y sin siquiera el reconocimiento de nuestro
papel heróico en las guerras independentistas. Hoy la comunidad afro sigue
luchando por la libertad definitiva. Aun se tienen las cadenas, grilletes, la
carimba sobre la piel, en una modalidad contemporánea. Necesidades básicas
insatisfechas que no permiten caminar libremente, niños sin grilletes pero que
no tienen zapatos para ponerse, niños creciendo en los semáforos producto
del desplazamiento, viviendas no dignas, mala salud, el problema
administrativo “creado”, la situación de la comunicación y el trasporte, y un
centro de la situación, la educación. Ubicamos la educación como centro de
todo, porque es la cátedra de estudios afrocolombianos y la etnoeducación una
propuesta o modelo pedagógico que permite eliminar las barreras mentales
que nos inhiben de la interculturalidad y lograr nuestra libertad (afros, mestizos,
aborígenes, gitanos. Etc). Es la etnoeducación que erradicará la carimba
mental-colonial que llevamos producto de 500 años y más de exclusión, de
racismo, de estigmatización y de discriminación étnica.

El cimarronismo contemporáneo es una alternativa para seguir brindando


opciones para la consolidación de la nación colombiana. Se hace totalmente
necesario revivir en todos los colombianos el espíritu revolucionario de Benkos,
Padilla, Wiwa, Agustina, Barule etc.

Recordemos que ser afro no es simplemente nacer de una familia afro o


poseer unos genes de africanía.
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