Voy a explicarte ahora un ejercicio, que además de servirte en la concentración puede ser un calentamiento de los ojos y un entrenamiento de velocidad en sí mismo. Necesitarás un texto no demasiado largo en el cual puedas escribir encima, como puede ser un diario viejo o una prueba de impresión de cualquier texto. El objetivo será tachar una determinada letra a toda velocidad en el texto. Una vez terminado, usarás otro texto y realizarás la misma tarea pero esta vez tachando dos letras en vez de una.